Serie de la santificación (23)

Pastor Sugel M.

La lectura de la palabra de Dios

Sin santidad nadie vera al señor.

La santificación es una obra de la libre gracia de Dios por medio de la cual somo completamente
reestablecidos a la imagen de Dios y puestos en capacidad de morir más y más al pecado y de vivir
piadosamente. La santificación no es una reforma aquí o allá, sino que es una transformación total.
Esta santificación opera en tres etapas distintas, primero una etapa inicial que es cuando nos
convertimos a Cristo es cunado somos libertados de la esclavitud del pecado, luego viene una etapa
progresiva esta y tiene que ver con ese proceso a través del cual vamos muriendo caves más y más
la pecado y conformándonos cada ves más y más a la imagen de Dios, y luego vine la etapa final esa
es cundo lleguemos l cielo y tengamos glorificados allí ya no tendremos más problemas con el
pecado. Romanos 6:22 es el texto que menciona estas tres etapas de la santificación juntas.

Debemos de ser fieles con los medios individuales para nuestra santificación, en esta ocasión
veremos la lectura privada de la palabra de Dios.

I. El lugar que ocupa la palabra de Dios en el proceso de santificación

Juan 17:17 Padre santifícalos en tu verdad, tu palabra es verdad, el señor esta orando por
personas que ya han sido hechos participantes de la santificación inicial, estos ya han roto con
el mundo sus placeres y sus metas. Por eso el señor dice más antes en el 15:3 ya vosotros estáis
limpios santificados por la palabra que os he hablado, y pablo dice en el capítulo 5 dice que
cristo se entregó por la iglesia para santificarla en el lavamiento por medio de la palabra. No
podemos estar inteligentemente preocupados por nutra santificación si descuidamos el
exponernos a la palabra de Dios. Hechos 20:32 la palabra que tiene poder para sobre
edificarnos. Ahora como funciona esta palabra de Dios en nuestra vida para santificarnos.

II. La forma en que la palabra opera en el proceso de santificación

2Timoteo 3:16 es clave para mostrarnos en lo tocante a nuestra santificación. Desde la niñez
has sabido de las sagradas escrituras, la palabra de Dios es el instrumento que Dios usa para
guiarnos a la salvación. El evangelio de salvación que guía al hombre a la salvación ha sido
revelado única y exclusiva en su palabra. Pero no solo es útil para nuestra salvación sino para
nutra santificación. V16 toda la escritura es inspirada útil para enseñar para redargüir para
instruir en justicia a fin de que el hombre de Dios sea perfecto maduro enteramente preparado
para toda buena obra. ¿Cómo funciona la palabra de Dios en el proceso de nuestra
santificación?

1. La palabra de Dios nos enseña, la palabra de Dios es útil para enseñarnos, es decir la
escritura nos ilumina nuestro entendimiento para que tengamos pensamiento
correctos sobre Dios, sobre nosotros mismo, sobre el pecado, sobre ala vida presente,
sobre la vida venidera, sobre todas las cosas, porque como seres caídos que somos
tenemos muchas concepciones erróneas, y estas nos llevan a actuar de forma
equivocada, es la comprensión de la verdad la que nos guía a la santidad, pero por que
 nacimos caídos en el pecado tenemos a tener conceptos erróneos, y estos nos llevan
actuar de forma equivocada. Nuestras mentes de ben ser renuevas, pero esta será
renovada solo por la palabra de Dios, predicad y leída en privado.
2. La palabra de Dios nos redarguye. Nos habla de que la palabra de Dios no solo actúa
Para iluminarnos sino para mostrarnos nutras iniquidades, y nuestras maldades. Esta
ocurre en la predicación de la palabra de Dios. pero no es suficiente, debo leer de
manera sistemática, y nuestras conciencias serán afectadas positivamente.
3. La palabra de Dios es útil para corregirnos, ella nos muestra el camino correcto a seguir.
4. La palabra de Dios es útil para instruirnos en justicia, nos enseña cómo debemos de
andar en piedad.
III. La necesidad de asimilar la palabra para que esta contribuya en el proceso de santificación

La escritura es provechosa no solo cuando es leída, sino que cunado es asimilada. Texto clave
Samo119:11 vemos que el salmista David está seriamente preocupado por su santidad personal,
aun que es correcto que pidamos santidad de Dios pero el salmista no se limita a eso sino que
dice que en sus corazón ha guardado tus dichos para no pecar contra ti, esto ni siquiera está
refiriéndose a la memorización de su palabra, uno puede leer y memorizarla y aun así no tenerla
guardada en el corazón, tal cosa no contribuirá en el proceso de santificación personal a menos
que no te expongas a la escritura en una forma reflexiva y cuidadosa meditando luego como
vas a aplicar esas cosas en tu vida práctica. Nuestra capacidad de reflexión y meditación es el
aparato digestivo del alma, nosotros la leemos y ingerimos por medio de los ojos sino
reflexionamos y meditamos en eso no estamos aprovechando realmente la palabra de Dios,
solo cuando la escritura se lee cuidadosa reflexivamente y meditando luego en estas cosas
con el compromiso de vivir conforme a ellas es que los principios y mandamiento de la palabra
hacen residencia ene le centro de nuestra existencia que el salmista llama el corazón, el
corazón es la residencia de nuestros afectos es la residencia de nuestra voluntad, y dice el
salmista que ha puesto la palabra de Dios en mi corazón la e guardado, en ese lugar del cual
mana la vida, por eso dice el proverbista dice sobre todas las cosas guardadas guarda tu corazón,
porque de él mana la vida y es ahí que el salmista dice he guardado tus dichos para que para no
pecar contra ti, a menos que la palabra de Dios no llegue al corazón la palabra de Dios no va ha
obrar en el proceso de la santificación.

Recomendaciones:

1. Debes de leerla diariamente. Para que de ese modo podamos crecer en el temor de
Dios.
2. Debes leerla reverentemente, debo considerar a que cosa es que me voy ha exponer,
no es el periódico que voy ha leer, se trata de la palabra de Dios.
3. Debes de leerla en oración. El señor debe de abrir mis ojos.
4. Debes de leerla reflexivamente, debo de aplicar mi mente a lo que estoy leyendo.
5. Debes de leerla organizadamente.
6. Debes de meditar y aplicar lo leído. Toma la palabra como si te hablara a ti.