You are on page 1of 2

¿QUÉ SON LOS DERECHOS ECONÓMICOS, SOCIALES, CULTURALES Y

AMBIENTALES (DESCA)?

Los Derechos Humanos (DDHH) son derechos inherentes a todos los seres humanos sin distinción alguna,
ya sea por motivos de nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen nacional o étnico, color, religión,
lengua, o cualquier otra condición. Su reconocimiento ha sido producto de reivindicaciones y conquistas
que las personas y grupos han ido alcanzando frente a la autoridad estatal, tanto en el pasado como la
actualidad.

Al hablar de derechos humanos conviene ubicar algunos momentos históricos de relevancia dentro del
movimiento de derechos humanos, uno de estos momentos está representado por revoluciones liberales de
los siglos XVII y XVIII como los movimientos en Inglaterra, el movimiento de independencia de las
colonias inglesas en Norteamérica o la Revolución francesa, en las que, en síntesis, se logra marcar un
límite a la autoridad estatal en su actuación.

El siglo XVIII fue testigo de la Revolución Industrial y un crecimiento de las urbes sin precedentes. La
vida, bajo el esquema del modelo liberal clásico, se tradujo para miles de personas en extenuantes jornadas
de trabajo a cambio de pagas injustas, hambre, desempleo, accidentes y enfermedades derivadas de las
pésimas condiciones de trabajo.

Es el espacio de lucha de los obreros por mejores condiciones de vida lo que daría pie a paulatinas
reivindicaciones de derechos como condiciones laborales dignas, acceso a seguridad social, a la vivienda y
a la educación, derechos que hoy identificamos como DESCA (Derechos Económicos, Sociales, Culturales
y Ambientales), de esta forma, la lucha del sector obrero por abrirse espacios para su participación política,
para votar y ser votados, tenía como finalidad ir transformando las duras condiciones de vida y la
explotación que enfrentaban, pues quedaba claro que si entre las personas subsistían estas condiciones de
palmaria desigualdad en el acceso a derechos, ¿qué ventaja representaría el sufragio para todos si una
persona carecía hasta de los medios mínimos para preservar su existencia? ¿Cómo sería posible que una
persona pudiera hacer alguna elección sensata si el acceso a la educación permanecía vedado para ella?

Podemos entonces advertir esa profunda interrelación entre los derechos: el acceso a unos facilita el acceso
a otros; sin unos no se puede alcanzar otros: una persona que no tenga acceso al agua en cantidad y calidad,
verá mermado su derecho a la salud. Un deficiente acceso a servicios de salud, mermará -por lo menos-, sus
posibilidades de recibir educación y de trabajar. Un deficiente o inexistente acceso a la educación, impacta
en la posibilidad de la persona de participar en los asuntos públicos, o de ejercer su libertad de expresión.

Así pues, los DESCA pueden fácilmente ser identificados como aquellos derechos que tienen
correspondencia con la satisfacción de necesidades básicas, lo que posibilita a las personas acceder a un
nivel de vida adecuado y en consonancia con su intrínseca dignidad: derecho a una alimentación adecuada,
derecho a la salud, al agua, al trabajo, a la seguridad social, a una vivienda adecuada, a la educación, a la
cultura y a un medio ambiente adecuado. Se trata de niveles mínimos que el Estado debe garantizar a las
personas y familias.

El 10 de diciembre de 1948 se aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, evento de


capital importancia dentro del movimiento por los derechos humanos, pues se trata del primer texto de
derechos humanos de validez y alcance universal. Años más tarde en 1966, un par de instrumentos, el Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP) y el Pacto Internacional de Derechos Económicos,
Sociales y Culturales (PIDESC) se aprobaron para otorgar mayor desarrollo a los derechos recogidos en la
Declaración.

Observatorio de Política Social y Derechos Humanos


Hilario Pérez de León No. 80, Col. Niños Héroes de Chapultepec, Benito Juárez, México D.F., 03440
Tel. 55 90 87 54 / 55 79 74 13
www.observatoriopoliticasocial.org
Precisamente es el PIDESC el principal instrumento internacional en que se recogen los DESCA. El
PIDESC establece un órgano que tiene la función de velar por el cumplimiento del tratado por los Estados
Partes. Tal órgano, formado por expertos independientes, es el Comité de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales (Comité DESC).

El Comité DESC ha dado mucha claridad y desarrollo a la interpretación de los DESCA través de sus
Observaciones Generales, documentos en los que desentraña el contenido, significado y alcance de los
derechos que el PIDESC contiene. Estos textos son herramientas fundamentales para la ciudadanía en la
medida en que nos facilitan exigir a las diversas autoridades estatales el cumplimiento de los DESCA, ya
que contienen de manera bastante clara las obligaciones a cargo de los Estados Partes para el cumplimiento
de los mismos.

En términos generales, de acuerdo al Comité DESC, las obligaciones de los Estados con respecto a los
derechos económicos, sociales, culturales y ambientales son las de respetar, proteger y cumplir.

La obligación de respetar implica la obligación de no poner en peligro o no interferir con el derecho


humano. La obligación de respetar es de cumplimiento inmediato. Podríamos ejemplificarlo tomando como
referencia el derecho a una vivienda adecuada, mismo que la autoridad estaría violando al practicar el
derribo de viviendas como medida punitiva, o con el derecho humano al agua, mediante el corte del
suministro de manera arbitraria e injustificada.

La obligación de proteger significa el deber de la autoridad estatal de velar por que sea posible el disfrute
de los derechos sin que terceros, es decir, particulares, grupos, empresas o quienes actúen en su nombre,
interfieran o causen menoscabo. Así, proteger significa que la autoridad debe desarrollar marcos jurídicos
para, por ejemplo en el caso del derecho al agua, prevenir –y en su caso, sancionar- la contaminación de
ríos, lagos y presas por parte de empresas, o para evitar y/o sancionar que los organismos operadores de
agua nieguen el suministro de líquido por razones discriminatorias.

La obligación de cumplir se materializa mediante la aplicación de medidas apropiadas por parte del Estado
que posibiliten a las personas el completo ejercicio de sus DESCA. La obligación de cumplir se divide en:

Facilitar, que significa adoptar medidas positivas destinadas a que la población tenga acceso a los DESCA;

Promover, como su nombre lo indica, implica la promoción entre la población de aspectos relacionados a
los DESCA, por ejemplo, difundir información relativa al uso higiénico del agua o la importancia de darle
un uso racional;

Garantizar, entraña hacer efectivo el acceso a los derechos cuando las personas no puedan hacerlo por sí
mismas por razones que escapan a su voluntad y con los medios que tienen a su alcance.

Los DESCA juegan un rol trascendental en la lucha contra la pobreza. Al respecto debemos resaltar que el
Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales no ha sido
ratificado todavía por el Estado Mexicano, a pesar de que dicho Protocolo es una herramienta que
permitiría a las personas presentar quejas ante el Comité DESC por violaciones a derechos humanos.

Observatorio de Política Social y Derechos Humanos


Hilario Pérez de León No. 80, Col. Niños Héroes de Chapultepec, Benito Juárez, México D.F., 03440
Tel. 55 90 87 54 / 55 79 74 13
www.observatoriopoliticasocial.org

You might also like