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PROLOGO
tuciones podían ayudar a sus militantes a
Dos han sido los motivos que han dado ori- adquirir una síntesis de criterios cristianos,
gen al presente libro. Hace algunos años, al y ello dio origen a una prolongada discu-
término de unas charlas para sacerdotes en- sión sobre el sentido de la historia. En el
tregados al ministerio parroquial, me excu- invierno siguiente (1955(56) los cursillos
saba yo por haberme apartado, en los temas, bíblicos versaron sobre el tema (das grandes
de sus preocupaciones pastorales cuando un etapas del misterio de la salvación y>. Cada
consiliario regional de la J. O. C. declaró cursillo contaba con un equipo de estudian-
que, por el contrario, el conocimiento de las tes entre los cuales deseo hoy expresar mi
grandes perspectivas bíblicas otorgaba a los gratitud a Jean-Yves Hameine y a Jean-
jóvenes obreros cristianos que convivían Marie Chupín (Teología), Yan Page (Dere-
con muchachos integrados en «místicas de cho), Ma-rie-Madeleine Humeau (Ciencias)
masa-» el convencimiento de no ser en ab- y Anne de Ferriere (Pedagogía). La insupe-
soluto inferiores a ellos, ya que poseían rable atención del auditorio, el deseo expre-
también una mística de dimensiones univer- sado por numerosos estudiantes y las pala-
sales. Esta observación me afectó profun- bras alentadoras del Rdo. P. Gerlaud y de
damente. El segundo motivo surge del M. Gelin, me han impulsado a publicar
Congreso de Instituciones Católicas cele- aquellos cursillos.
brado en Angers, en el año 1955. Como Mi libro no tiene la pretensión de ser una
suele suceder en semejantes acontecimien- novedad; utiliza el tesoro común de la exé-
tos, nos interrogábamos los profesores y los gesis y el lector se verá invitado a menudo a
alumnos sobre el modo en que dichas Insti- hojear textos de sólida vulgarización, muy
Misterio de la Salvación
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Capítulo Primero
¿CONTIENE UNA «MISTICA» LA BIBLIA?
NOCION DE MISTICA
La Biblia, mensaje de Dios a los hombres, carácter contemplativo de los escritos de
¿contiene una mística? San Juan. No obstante, con ello no podemos
Hay que precisar el sentido y el alcance de responder a la pregunta precedente, pues en
esta pregunta, antes de contestarla. En pri- nuestros días se suele emplear el substanti-
mer lugar, hemos de distinguir entre «la vo «mística» con un significado diferente.
mística» y «una mística». Generalmente, Decimos que un hombre profesa «una mís-
cuando decimos «la teología mística» o tica» cuando consagra su vida a un ideal
simplemente «la mística», designamos la que le sostiene y le hace actuar de forma
doctrina de las relaciones espirituales entre determinada en todas sus empresas. Habla-
Dios y el alma, especialmente en los grados mos, v. gr. de la mística nazi, ideología
más elevados; así, por ejemplo, puede ha- fundada en el principio del dominio de un
blarse de estados y caminos místicos, de grupo racial que, además, enseña a sus
grandes místicos como San Bernardo, San adeptos cómo deben alcanzar su objetivo;
Juan de la Cruz, Santa Teresa de Jesús... de la mística marxista, visión materialista
Basta abrir la Biblia, libro religioso por ex- del mundo y de su evolución, que exige sa-
celencia, para percatarnos de que contiene crificios reales, aunque erróneos; de la mís-
una doctrina de vida espiritual; recordemos, tica cristiana, finalmente, visión del mundo
por ejemplo, los acentos místicos de Jere- y de su destino, inspirada por la fe y llevada
mías, de los salmistas y de San Pablo, o el a la práctica. Escudriñando atentamente,
Misterio de la Salvación
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Sin duda alguna, la lectura de los textos sa- y nosotros el pueblo que Él apacienta
grados nos permite contestar afirmativa- y el rebaño que Él guía.4
mente a tal pregunta.
Advertimos, todavía, a los justos, cuya es-
ANTIGUO TESTAMENTO: MIS- peranza está asentada en la inmortalidad y
TICA FUNDADA EN PROMESAS cuya conducta es contraria a la de los im-
En el Antiguo Testamento se contienen ya píos que, culpablemente, ignoran los desig-
los elementos de una mística. Hallamos al nios secretos de Dios y el destino inmortal
patriarca Abraham partiendo hacia un país que Él ha reservado al hombre.
desconocido, fiado plenamente en la pro- Sin embargo, la mística del Antiguo Testa-
mesa divina que le asegura una bendición mento es, esencialmente, una mística fun-
que recaerá sobre todas las naciones de la dada sobre una multitud de promesas divi-
tierra.2 Encontramos a los Profetas, paladi- nas cuya realización futura se espera ardien-
nes de la causa de Dios, cuya actividad in- temente.
cansable arraiga en su ardiente fe en el Se- NUEVO TESTAMENTO: MISTICA
ñor, Dueño de la historia, que dirige los EN EL AMPLIO SENTIDO DE LA
acontecimientos hacia el término que Él PALABRA
quiere.3 Contemplamos a los israelitas que
En el Nuevo Testamento descubrimos una
tienen depositada toda su fidelidad y espe-
mística en su más amplio significado. Cris-
ranza en el Creador, porque tienen concien- to ha venido, ha cumplido las promesas, ha
cia de las promesas divinas que les han sido
fundado su Iglesia y ha anunciado su se-
anunciadas: gunda venida. Con Él se ha revelado y se ha
Porque Él es nuestro Dios, realizado el plan divino de la salvación. En
Misterio de la Salvación
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consecuencia, la Biblia ofrece a todos los acción del cristiano y le hace prodigarse y
hombres una visión del mundo y de la his- agotarse por Jesucristo; mística unida a una
toria, capaz de impulsarles a la acción, conversión inicial, productora de una fuerza
orientándoles en ella. Esta mística se revela sobrenatural para resistir todas las persecu-
en cada página del Nuevo Testamento: en la ciones y contrariedades, que exige una
proclamación de la redención del mundo en cooperación del hombre: la fe, pero una fe
Jesucristo, muerto y resucitado, que hace total, como la describe San Juan.
Pedro el día de Pentecostés, invitando al
SEGÚN SAN PABLO
pueblo judío a beneficiarse de ésta;5 en el
Tres expresiones complementarias de las
prólogo del Evangelio de San Juan, cuando
que se sirve San Pablo para designar el plan
anuncia la venida del Verbo eterno a los
eterno de la salvación, permiten captar el
hombres y la filiación divina que otorga a
carácter particular de la mística cristiana, a
todos aquellos que creen en Él; 6 en la vi- saber: el designio de Dios, la sabiduría di-
sión cósmica de la Redención en Cristo, vina y el Misterio.
expresada por San Pablo en su epístola a los
En su discurso de despedida a los ancianos
cristianos de Efeso;7 en el mensaje del de Efeso, exclama el apóstol:
Apocalipsis a los cristianos perseguidos,
asegurándoles la victoria definitiva de Dios «Por lo cual, en este día, os testifico
y ayudándoles a resistir, con la mente fija que estoy limpio de la sangre de to-
en la Jerusalén celestial y en el retorno glo- dos, pues, os he anunciado plena-
rioso de Cristo. Queda, por consiguiente, mente el consejo de Dios.»8
bien claro que esta visión del mundo y de la Estos designios no son más que el plan de
historia es una mística, porque orienta la la redención, concebido por Dios desde to-
Misterio de la Salvación
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tianismo de sus tareas acá en la tierra, ates- te el problema de los judíos y de los paga-
tigua la repercusión eterna de todas sus ac- nos; y como conclusión, nos ha parecido
ciones. La revelación y la realización del muy útil refundir algunas perspectivas so-
plan de salvación tienen por figura central a bre Dios y la actitud del hombre respecto a
Jesucristo. Por último, la historia cristiana Él, descubiertas en el curso de la lectura.
está orientada hacia su final supremo, que
MANERA DE UTILIZAR ESTE
tendrá lugar al fin de los tiempos con la
vuelta gloriosa de Cristo. LIBRO
No aconsejamos a los lectores que utilicen
LAS GRANDES ETAPAS DEL este libro como su primer guía bíblico, que
MISTERIO DE LA SALVACION lean después de cada capítulo los pasajes de
En este estudio del misterio de la salvación, la Biblia indicados oportunamente, ni tam-
hemos intentado subrayar, primero, el cua- poco aprobamos una simple lectura como
dro general del designio de Dios y de las medio de recibir verdaderamente la Palabra
grandes etapas de la historia: la creación, la de Dios; lo ortodoxo es saber orar con la
elección de Abraham, el éxodo, la alianza, Biblia, recibiendo sus enseñanzas con espí-
el exilio, 16 la Encarnación redentora, la ritu de fe en la asamblea cristiana o en la
Iglesia, el retorno del Señor. A continua- meditación personal. Para entender since-
ción, los personajes que marcan el desarro- ramente la Palabra divina, es indispensable
llo de la salvación, a saber; Abraham, Moi- vivir de acuerdo con la mística que se nos
sés, los Profetas, los sabios, los pobres de revela, y las orientaciones apuntadas al final
Dios, el Salvador Jesucristo y la Iglesia. de cada capítulo no dispensan ni sustituyen
Tratándose de la historia de la redención, ha al esfuerzo personal concreto de cada lec-
sido necesario también abordar sucintamen- tor. Con este espíritu, la lectura de la Biblia
Misterio de la Salvación
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despertará el deseo de conocer profunda- 10. Véase Le Christ dans la théologie de Saint
mente el mensaje de Dios y de responder Paul, L. Cer-faux, Paris, 1951, pàg. 196.
personalmente, en cada momento de nuestra 11. Id., pág. 206.
12. Rom., 16, 25-26; Ef., 3, 8-10.
vida, a la voluntad salvífica del Señor sobre 13. Ef. 3, 4.
el universo. 14. 1 Cor., 2, 7-9.
LECTURAS 15. Essai sur le mystère de l'histoire, Jean DA-
NIELOU, páginas 9-11.
Ef., 1, 3-19 y 3, 8-12. 16.Toda elección es, necesariamente, limitativa.
Respecto del Antiguo Testamento, se ha con-
servado lo que parecía más importante desde
1. El cristiano no es un simple militante. El Rdo.
el punto de vista de la historia del pueblo de
P. Congar advierte, con razón: «Un apóstol es
Dios y de la investigación sobre la mística bí-
un hombre de Dios que hace algo mucho más
blica, pero habría que completar todo ello con
grande que una propaganda: es un elemento
un estudio rápido del período monárquico, del
vivo del plan salvador de Dios, es como una
judaísmo y del desarrollo del mesianismo bajo
emanación del propio Dios...» (La Pentecôte.
la Antigua Alianza.
Chartres, 1956, París, 1956, pág. 122).
2. Génesis, 12, 1-4.
3. Véase S. DIÉTRICH Le dessein de Dieu, 4a ed.
Neuchâtel, 1951, pág. 92; y, más adelante, el
capítulo sobre profecías y profetas.
4. Sal., 94, 7.
5. Hech., 2, 14-40.
6. Jn., 1, 1-18.
7. Ef., 1, 9-10; id. Col., 1, 18-20.
8. Hech., 20, 26-27.
9. Ef. 3-11.
Misterio de la Salvación
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CAPÍTULO SEGUNDO
LA CREACION Y EL PECADO
SUS ORIGENES dición de la Iglesia, la historia de la salva-
ción no comienza con la elección de
El punto de partida de la formación del
Abraham, sino con la creación del mundo.
pueblo elegido comienza en el capítulo 12
del Génesis, con la historia de Abraham, Como dice el Rdo. P. Daniélou, 2 «la crea-
pero la Biblia empieza narrando el origen ción es una acción histórica, un princi-
del mundo y del hombre, lo cual se explica pio de los tiempos que ha de tenerse
por dos razones principales. Todo hombre muy en cuenta al estudiar la historia de
que reflexione sobre el problema de su des- la salvación». Los primeros capítulos del
tino se preguntará: ¿quién ha creado el Génesis son, por consiguiente, indispensa-
mundo?, ¿de dónde viene el mal?, y ¿el do- bles en una revelación integral de los desig-
lor, el pecado y la muerte? nios divinos.
Con un lenguaje sencillo y rico en imáge- CONTENIDO DE ESTOS CAPI-
nes, los primeros capítulos del Génesis con- TULOS
testan a tales preguntas y revelan «las ver-
dades que sirven de fundamento a la Un espíritu superficial y desprovisto de
sensibilidad literaria, sorprendido por el es-
economía de la salvación».1 En este as- tilo de las narraciones sobre la creación del
pecto constituyen la trama sobre la que va mundo, podría suponer que no contiene
tejiéndose la historia de la salvación y pue- ninguna enseñanza de valor. ¿Qué pensar
de comprenderse perfectamente su coloca- del tiempo brevísimo de seis días de crea-
ción al principio de la Biblia. Es más: tanto ción, cuando nadie dotado con un mínimo
para la revelación bíblica como para la Tra- de razón, ignora que transcurrió un tiempo
Misterio de la Salvación
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repartiéndose en dos grupos, según el si- lógico de los hechos y a él hemos de remi-
guiente esquema. tirnos.
Separación de los elementos En primer lugar, el Creador es el Dios úni-
Luz — tinieblas. co, distinto del mundo y anterior a él.
Aguas de lo alto — aguas debajo del firma- Comparándola con los mitos mesopotámi-
mento. cos, resalta en esta afirmación bíblica la
Tierra — mar — plantas. trascendencia y la pureza de su monoteís-
Ornamentación del universo mo. Dios no se desprende del caos, como
Sol — luna — estrellas. los dioses babilonios; hay que separarlo del
Peces — aves. universo que Él ha creado; el sol, la luna y
Animales. los dioses Sin y Samas de los asirios, son
Hombre. criaturas del único Dios; y mientras los
La actividad creadora sigue un orden ritual: pueblos semíticos rinden culto a los astros,
la semana de trabajo divino finaliza con un el autor bíblico afirma que las estrellas, tan
día de reposo, artificio literario mediante el fascinadoras en el cielo de Oriente, no son
cual se les recordaba a los israelitas que el más que seres creados.
descanso y la santificación del sábado eran Dios ha creado el mundo sabiamente, pues
voluntad de Dios. no puede concebirse una creación más or-
Basta examinar con un poco de atención es- denada y armoniosa: las plantas están dota-
te texto para comprobar que el autor no qui- das de semilla, los animales de fecundidad,
so precisar científicamente la creación de y todo está dispuesto para el hombre, que
los seres, antes bien, subrayó el sentido teo- dominará a todos los seres que pueblan la
tierra.
Misterio de la Salvación
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blica, tiene por objeto traducir a todas las bre no halle entre ellos ninguna ayuda ade-
capacidades mentales una enseñanza reli- cuada (v. 18 y 20). La dignidad de la mu-
giosa, y en ésta hemos de fijar nuestra aten- jer procede de ser semejante al hombre,
ción, no en las imágenes. Á continuación es decir, de su misma naturaleza, creada
estudiaremos los cuatro grupos de enseñan- para él. La imagen de la costilla recalca la
zas, según el orden narrativo, que tratan su- identidad de la naturaleza de ambos y su
cesivamente del hombre, del pecado, de las ordenación recíproca. El autor tiende a pro-
consecuencias de la caída y de la promesa clamar la dignidad de la mujer en un mundo
de la redención. en el cual se la solía despreciar.
LA PRIMERA PAREJA HUMANA El origen divino, la unidad y la indiso-
Para enseñarnos que Dios ha creado y ha lubilidad del matrimonio quedan puntua-
dado vida al hombre, el autor nos describe lizados en los versículos 21-24:
a Dios modelando con barro a Adán e in- «Por cuya causa dejará el hombre a
fundiéndole un soplo de vida, y observando su padre y a su madre y estará unido
luego que volverá al polvo con la muerte. a su mujer, y los dos vendrán a ser
una sola carne.»
La superioridad del hombre sobre los
La felicidad original queda patente en la
animales y su dominio sobre las criatu-
imagen, tan expresiva para los orientales,
ras quedan expuestos en los versículos 20 y del oasis y de los ríos caudalosos.
23, cuando nombra a los animales y a la
mujer, respectivamente. Por último, la ausencia de concupiscencia
carnal atestigua el estado de inocencia en
La superioridad de la mujer sobre los
animales la indica el hecho de que el hom-
Misterio de la Salvación
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que fueron creados nuestros primeros pa- pues, «una reivindicación de autonomía
dres: moral, por la cual el hombre reniega de
«Y ambos, a saber, Adán y su esposa, su estado de criatura e invierte el orden
estaban desnudos y no sentían por que Dios estableció».11 Semejante actitud
ello rubor ninguno» (v. 25). de rebelión, existente en el fondo de cada
LA CAÍDA pecado, señala la gravedad de la primera
ofensa a Dios. No podemos interpretar al
Se nos presenta al tentador en la forma de pie de la letra las imágenes del árbol, de la
una serpiente porque ésta aparecía a menu- manzana, etc., que, además de ser opuesto
do en los cultos de fecundidad tan extendi- al género literario de tal narración, podría
dos en Oriente, que tanto atraían a los israe- incluso disminuir la importancia de la culpa
litas poco fervorosos, desviándoles del cul- en el ánimo de los lectores.
to de Yavé.
CONSECUENCIAS DEL PECADO
Aparece el primer pecado como una falta
El primer efecto del pecado es la privación
grave de orgullo sintetizada en una
enorme desobediencia al Señor. El cono- de la amistad divina: «Y los echó el Se-
cimiento del bien y del mal es, en efecto, ñor Dios del paraíso de los deleites», di-
ce el autor (3, 23-24).
«la facultad de decidir por uno mismo lo
que está bien y lo que está mal, y de Entre las restantes consecuencias, sobresa-
obrar en consecuencia».10 Dentro del len:
simbolismo de esta narración, contradecir al — LA MUERTE
precepto divino y comer del árbol que pro- «Polvo eres y volverás a ser polvo»
duce semejante facultad (2, 17), significa, (3, 19).
Misterio de la Salvación
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La creación, obra de la omnipotencia divi- conseguir la salvación por sus propias fuer-
na, coloca a la totalidad del universo, y al zas.
hombre en especial, en una dependencia Para captar en sus reales dimensiones los
radical del Creador y, forzosamente, la primeros capítulos de la Biblia, es preciso,
actitud espiritual del hombre habrá de ir se- además, observar su aspecto dinámico y si-
llada por este sentido de absoluta depen- tuarlos en la historia de la salvación. Como
dencia. se ha declarado anteriormente, la creación
Se ha mencionado en las páginas preceden- es también el comienzo de los tiempos, la
tes el carácter optimista de la Revelación «puesta en marcha» del plan divino: «Es
ante la creación de Dios, que es buena, el primer acto dentro del designio de
como salida de sus manos santísimas, y an- Dios que culminará en la creación de
te el matrimonio, instituido y querido por el los nuevos cielos y de la nueva tierra».17
Creador. Nada tiene en común la revelación
bíblica con las filosofías que juzgan a la LECTURAS
materia como mala o ' aprecian el matrimo- Génesis, 1, 1-2, 4a.
nio como una concesión a la debilidad hu- Génesis, 2, 4b-3, 24.
mana; mas para no desorbitar este optimis- Salmos, 8; 19, 1-7; 104.
mo, será aconsejable meditar la narración Job, 38, 1-30.
de la caída de Adán, que dejó al hombre en
un estado de indigencia respecto a su
1. R. P. de VAUX, O. P., La genese. Paris, 1951,
salvación: todo hombre debe llegar a per- pág. 35.
catarse de la necesidad en que se encuentra 2. Jean DANIELOU, Essai sur le mystère de l'his-
de ser redimido y de la imposibilidad de toire. Paris, 1953, pàg. 34.
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3. ROBERT, Genres littéraires de l'Ancien Tes- 13. Pierre TEILHARD DE CHARDIN, Le phé-
tament en «Initiation biblique», 3." ed. Paris, nomène humain, París, 1955, pág. 206, 1.
1954, págs. 283. 14. Íd., pág. 208, n. 1.
4. R. P. de VAX, id. 15. D. DUBARLE, O. P., Evolution et évolutio-
5. Los cinco primeros libros de la Biblia, llama- nisme en «Lumière et Vie», n. 34, pág. 8. Es
dos «el Pentateuco», son el resultado de la fu- provechosísimo leer dicho artículo.
sión de numerosas tradiciones que existieron 16. Precisando bien, sin embargo, que sólo se en-
por separado: las tradiciones yahvista, elohís- carnó el Verbo (Juan, 1, 14).
ta, deuteronómica y sacerdotal, que brota de 17. Rdo. P. DANIELOU, op. cit., pág. 34.
los medios sacerdotales de Jerusalén Una am-
plia exposición de las mismas la ofrece el R.
P. de VAUX en la introducción a su libro El
Génesis.
6. Es la misma forma de proceder que la que se
halla en el «Cántico de los tres jóvenes» (Dan.,
3, 51-90) y en el salmo 8.
7. Esta intervención particular de Dios que su-
pone, entre otras cosas, la inmediata creación
del alma, no excluye, por otra parte, la posibi-
lidad de que hubiese utilizado una materia ya
existente y viviente.
8. El origen lo hallamos en los documentos en
qua está consignada tal tradición, en los que
siempre se designa a Dios como «Yavé».
9. R. P. de VAUX, op. cit., pág. 43, n. d.
10. Íd., pág. 45, n. a.
11. Ibíd.
12. id., pág. 47, n. a.
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Capítulo Tercero
ABRAHAM, PADRE DEL PUEBLO ELEGIDO
IMPORTANCIA DE ABRAHAM mendar a tal hombre una misión excepcio-
EN LA BIBLIA nal: así ocurre con Juan Bautista, 1 cuyo
La excepcional importancia de Abraham es nombre significa «gracia del Señor» y cuya
un hecho que se impone rápidamente al lec- misión es precisamente anunciar al mundo
tor de la Biblia. Una sencilla estadística la venida del Mesías; lo mismo sucede con
demuestra que este patriarca es uno de los Simón, a quien Jesús llama Pedro en razón
personajes más frecuentes y más significa- del lugar que ocupará en la Iglesia.2 En el
tivos. En su presentación dentro del Géne- Génesis, pues (17, 5), dice Dios a Abraham:
sis, observamos los detalles importantísi- «Ni de hoy más será tu nombre
mos que ponen de relieve su importancia: Abram, sino que serás llamado
Abraham tiene una genealogía. Dios le Abraham: porque te tengo destinado
cambia el nombre.
por padre de muchas naciones.»
Cuando un autor bíblico presenta un perso-
Este cambio de nombre y la genealogía del
naje célebre, indica, a menudo quiénes fue-
patriarca indican que estamos verdadera-
ron sus padres e incluso sus antepasados.
mente ante un personaje excepcional. Ade-
En el Génesis (11, 10-26) nos facilita el re-
más, Abraham aparece también con un par-
dactor la genealogía de Abraham, del mis-
ticular relieve en el Nuevo Testamento. En
mo modo que Lucas y Mateo nos darán más
la primera línea de su evangelio, comienza
tarde la de Jesucristo. Igualmente, cuando
San Mateo la genealogía de Jesucristo
Dios en la Biblia, impone o cambia un
nombrando a Abraham:
nombre, es signo seguro de que va a enco-
Misterio de la Salvación
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to tiene valor científico se consigna por es- Abraham y de los patriarcas, que eran pas-
crito y la memoria no desempeña, prácti- tores, advertiremos que coinciden con pe-
camente, ningún papel en la transmisión de ríodos de lluvias y con acontecimientos po-
la cultura, y, por este motivo el hombre del líticos del país, ocupado en aquellos tiem-
siglo XX tiende a suponer que todo lo que pos por los cananeos.9 Cuando todas estas
puede transmitirse oralmente carece de va- tradiciones fueron redactadas, el pueblo se
lor. Pero es injusto aplicar nuestro juicio había convertido en sedentario y las condi-
moderno instintiva mente a documentos de ciones políticas habían experimentado
otra época y de otra civilización. En la épo- grandes cambios.
ca patriarcal se ejercía la memoria mucho
más que hoy día, se recitaban páginas ente- De modo que el itinerario de los patriarcas
ras de tradición, fáciles de retener por aso- no fue inventado en esos momentos, sino
nancias, etimologías populares, palabras- que había ido transmitiéndose con una fiel
clave, juegos de palabras, etc. Su objeto tradición; asimismo, muchas costumbres
impulsaba al pueblo hebreo a conservar me- sociales y jurídicas de la época patriarcal,
ticulosamente tales tradiciones, y, si bien su no existían en el momento de ser escritas, y
carácter de narraciones populares no las la historia del Antiguo Oriente nos demues-
inmuniza contra pequeñas deformaciones tra que, en pueblos contemporáneos de los
imaginativas en torno a un hecho real, la patriarcas, existieron leyes y costumbres
sustancia que nos transmiten está sólida- similares a las suyas. Esta es una prueba
mente garantizada. más de que no fueron imaginadas, sino rela-
tadas por una tradición auténtica.
Hay que estar alerta también contra las in-
fundadas depreciaciones de la tradición. Si Resumiendo: las páginas que el Génesis
seguimos en un mapa los itinerarios de dedica a Abraham son narraciones popula-
Misterio de la Salvación
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Dios es el único que pasa entre las víctimas promete una descendencia innumerable, a
porque solamente Él se compromete y su pesar de no tener ni un hijo y de ser dema-
promesa no puede tener contrapartida. siado anciano para tenerlo; tiene un hijo de
ACTITUD DE DIOS Y EL HOMBRE la esclava Agar, pero no será éste el de la
Después del pecado original, la primera promesa; 25 Dios le promete que engendra-
etapa de la realización de nuestra salvación rá un hijo de Sara, su esposa, estéril: Isaac,
fue la elección de Abraham como padre del sobre el cual brillará la promesa; 26 Isaac
pueblo elegido. Esta elección nos revela la crece y he aquí que Dios pide a Abraham
forma de obrar de Dios cuando se propone que sacrifique a este único hijo, que era
salvar al hombre, y la respuesta que Él también la única esperanza de .ver realizada
desea. Desde Abraham, todos los hechos de la promesa.27
la historia bíblica nos enseñan la actitud de
El camino por el que Dios conduce a
Dios y la actitud del hombre. Dios no se
comporta según las normas de la sabiduría Abraham es totalmente desconcertante y
puramente humana. Escoge a quien quiere y sin salida, pero él mantiene siempre la acti-
con plena iniciativa suya: elige a Abraham, tud que adoptó desde que oyó la llama da
divina: la actitud de una fe total e incondi-
luego a Isaac y no a Ismael,23 después a Ja- cional y de una obediencia heroica a
cob y no a Esaú.24 La inteligencia humana cuanto Dios le pide; y ésta era la respuesta
queda estupefacta ante la forma en que Dios que el Señor esperaba de él desde que le
dirige la realización de sus promesas, y el destinó a colaborar en su plan divino.
hombre no tiene otra alternativa que confiar
en Dios: Abraham parte hacia lo desconoci-
do por seguir la llamada divina; Dios le
Misterio de la Salvación
41
para los cristianos, que constituyen el nuevo sus huellas, por la senda de la fe, de la obe-
Israel. diencia y de la seguridad sólo en Dios.
Una vez entendida la posición de Abraham LECTURAS
en el plan divino, se comienzan a entender
Génesis, 12-24 (sobre todo 12, 1-9; 15; 17;
y a saborear muchas fórmulas litúrgicas
18; 22).
aparentemente anticuadas; por qué, en el
Eclesiastés, 44, 19-23.
bautismo de adultos y en la bendición de la
San Juan, 8, 52-58.
Misa de Desposorios, invoca el sacerdote al
Gálatas 3, 6-9 y Romanos, 4, Hebreos, 11,
Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob; por
8-19.
qué, durante la Misa, pide al Señor acepte
su sacrificio como aceptó el de Abraham;
por qué reza la Misa de Difuntos: 1. Luc, 1, 13.
2. Mat., 16, 18.
«Señor haz que pasen de la muerte a 3. Mat., 1, 1-2.
la vida que en otro tiempo prometiste 4. Luc, 1, 72-73.
a Abraham y a sus descendientes.» 31 5. Luc, 1, 54-55.
6. Luc, 13, 28.
El conocimiento de Abraham no despierta 7. Palestina, ocupada en aquella época por una
únicamente interés litúrgico; el cristiano población cananea.
que comprende su inclusión espiritual en la 8. Con la particularidad de que se trata de una
posteridad de Abraham y su inserción per- familia que engendró a todo un pueblo, una
sonal en el plan de salvación que Dios familia enraizada en una historia religiosa.
inició con su llamada al patriarca, se siente 9. Sobre este punto consúltense los artículos del
Rdo. P. de VAUX, en la «Revue Biblique»: Les
solidarizado con aquél y se encamina, tras Patriarches hébreux et les découvertes moder-
Misterio de la Salvación
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Capítulo Cuarto
FECHAS Y LUGARES DE LA HISTORIA BIBLICA
La intervención de Dios para realizar su pa siria.1 El relieve es variadísimo. Entran-
plan salvador se sitúa, en el espacio y en el do por el oeste, se recorre una larguísima
tiempo, en el mismo corazón de la historia llanura costera, se asciende luego a la cade-
del mundo. El lector de la Biblia no debe na montañosa que atraviesa el país de norte
menospreciar este hecho, si quiere realmen- a sur como una columna vertebral (montes
te percibir la dimensión y las resonancias de Galilea, de Samaría y de Judea). En estas
humanas del mensaje divino. cordilleras se alzaban los antiguos santua-
EL PAIS BIBLICO rios: Silo, Bethel, Gabaon; y la capital, Je-
rusalén. Los puntos más elevados se en-
Cuando se habla de «país bíblico» se desig-
cuentran en Judea, con el monte de los Oli-
na, generalmente, el territorio en donde fue-
vos, de 816 metros de altura, y el monte de
ron desarrollándose los principales aconte-
Hebrón, de 925 metros. Se desciende en-
cimientos de la historia de Israel, la vida y
tonces rápida mente hasta el valle del Jor-
el misterio de Jesús y toda la actividad ini-
dán, que se desliza de norte a sur por un
cial de la Iglesia. A través de los siglos, los
largo cauce, atravesando el lago Hule (+ 2
límites del país han sufrido grandes varia-
m.), el de Genesaret (-207 m.) y el mar
ciones, pero, en general, podemos precisar
Muerto (-393 m.). Desde la depresión del
las delimitaciones siguientes: al norte, los
Jordán, el terreno se levanta bruscamente
extremos meridionales del Líbano y del An-
hasta la meseta de Transjorda-nia (montes
ti-Líbano; al oeste, el Mediterráneo; al sur,
de Galaad, Nebo, de 806 m., y montes de
el extremo septentrional de la península del
Moab). Completando esta vista transversal
Sinaí, y al este, la meseta de Hamad o este-
con la observación de que, a la altura de
Misterio de la Salvación
46
bíblicos. Basta con haber seguido la carrete- ciones, es utilísimo familiarizarse con el ho-
ra que va de Jerusalén a Jericó para no olvi- rizonte bíblico mediante libros profusamen-
dar nunca la expresión de la parábola: «Un te ilustrados sobre Tierra Santa.5
hombre descendía de Jerusalén a Jeri-
PALESTINA, CENTRO DEL
có»; 2 con unas horas de marcha en tiempo
«CRECIENTE» FERTIL
estival por los wadis del desierto de Judá,
para apreciar el valor de símbolos como el Esta tierra está situada en el centro del
agua viva y la hierba fresca, referidos a los «creciente fértil», constituido por el valle
beneficios divinos; 3 basta con haber obser- y delta del Nilo, la costa mediterránea y las
llanuras aluviales del Tigris y el Éufrates.
vado algunas de las torrecillas de guardia
En ella tienen lugar las peregrinaciones de
situadas en los campos, para que un relato
los patriarcas y la historia del pueblo de
como el de la viña aparezca bien claro y
Dios, hasta Jesucristo: Abraham parte de Ur
concreto:
hacia Harán, y penetra en Canaán; sus des-
«Adquirió mi amado una viña en un cendientes entran en Egipto, regresan a Ca-
collado muy fértil, la cual cercó de naán, se establecen allí, son deportados a
seto, y la despedregó, y la plantó de Babilonia y, finalmente, vuelven de nuevo a
cepas escogidas, y edificó una torre Palestina, í La situación geográfica de Israel
en medio de ella, y construyó en ella ayuda a comprender su historia: en el centro
un lugar, y esperó hasta que diese del «creciente» que convierte al país en
uvas, y las dio silvestres.» 4 tierra fértil, Palestina es el camino natural
Hoy día, a falta de una visión personal del hacia Egipto, «la fiera del cañaveral»,6 y
país, facilitada por las frecuentes peregrina- la Mesopotamia, o país situado entre dos
Misterio de la Salvación
48
ríos (Tigris y Éufrates): esto explica por qué y cultural, podría concluirse fácilmente,
el pueblo israelita vivió Siempre en medio como ocurre en ocasiones, con la negación
de los azares políticos de Egipto y siria, de algunos hechos. Otras veces, nos
viéndose obligado a luchar también contra .informa de las relaciones de Israel con los
los pequeños países limítrofes: Siria, Edom pueblos vecios: embajada de Merodac Ba-
o Moab. ladán, hijo de Baladán, key de Babilonia, a
Ezequías, rey de Judá; embajada de Eze-
quías a Egipto.7 La historia profana ayuda a
en tender la realidad concreta y la vincula-
ción del pueblo de Dios en la historia uni-
versal. La dinastía de los Hicsos, oriunda de
Palestina, se instaló hacia 1720 en el delta
del Nilo y dominó el país hasta 1570 (a
ellos pertenecen los Faraones de la 15.a y
16.a dinastías), y ello nos explica la marcha
y la instalación de Jacob y su familia en
LA BIBLIA Y LA HISTORIA GE- Egipto, donde abundaba la raza semita, y la
NERAL DEL ANTIGUO ORIENTE promoción de José, un semita, a un alto
La Biblia relata la historia del pueblo esco- cargo funcionario. Durante los siglos XII y
gido con un fin religioso. A veces omite el XI reinó la paz en el Próximo Oriente, ya
cuadro de historia general (como sucede que Egipto se hallaba agotado por las ante-
con Abraham, del que únicamente mencio- riores luchas contra los «pueblos del
na lo necesario: su vocación inspirada por mar». Asiría se había debilitado y no exis-
Dios), y de no conocer el contexto histórico tía ninguna potencia notable en Asia Menor
Misterio de la Salvación
49
desde que cayó la dinastía Hitita. También respecto de este pueblo y la transcendencia
el clima fue favorable a la creación de un de la Revelación.
Estado Israelita. Además, los intentos ex-
LAS GRANDES FECHAS DE LA
pansivos de los filisteos de la costa hacia la
montaña contribuyeron a que los israelitas, HISTORIA BIBLICA
que hasta entonces mantenían una especie En los libros de historia, no solamente se
de federación de tribus, se reunieran y se correlaciona la historia del Antiguo Testa-
organizaran al mando de un rey. Es intere- mento, sino también los oráculos de los
santísimo conocer estos datos como preám- profetas y los hechos de los sabios. De la
bulo a los libros de Samuel. Más tarde, en misma manera, las epístolas y el Apocalip-
el año 538, el edicto de Ciro autoriza a los sis completan cuanto los Evangelios y los
judíos cautivos en Babilonia a regresar a su Hechos de los Apóstoles enseñan en el
patria, ordena la, reconstrucción del templo Nuevo Testamento. Los distintos relatos bí-
a cargo del Tesoro y obliga a restituir los blicos se relacionan con una única historia,
vasos sagrados de Jerusalén. Tales medidas aunque presentándolos bajo aspectos dife-
podrán sorprender al lector del libro de Es- rentes y complementarios. Para que el lec-
dras, pero la historia profana le explicará tor de la Biblia no se desoriente al pasar de
que Ciro trató de, igual modo a otros pue- un libro a otro, debe conocer primero cuáles
blos sometidos a los caldeos.8 El conoci- son los momentos clave de la historia de la
miento del contexto histórico general y de salvación. Por ello, incluimos un cuadro en
la condición humana del pueblo de Dios, el que claramente se ve la sucesión de las
permiten una mejor comprensión dé la his- principales etapas del plan de Dios y del
toria de Israel, sí como la pedagogía divina destino de Israel. Cada etapa tiene un senti-
do particular, y su sentido religioso queda
Misterio de la Salvación
50
MOISES Y EL EXODO
LOS HEBREOS EN EGIPTO La Biblia, que relata una historia religiosa,
guarda silencio durante esa larga estancia
Después de Abraham, padre del pueblo ele-
de los hebreos en Egipto; no hay, durante
gido, aparecen Isaac y Jacob como deposi-
varios siglos, intervención alguna de Yavé
tarios de las divinas promesas. Estos pa-
en favor de los descendientes de Jacob ni
triarcas también prosiguen una existencia
revelación nueva alguna que pueda enri-
seminómada en Canaán: son pastores de
quecer su patrimonio espiritual. Inmediata-
ganado menor, que se desplazan según las
mente después de haber detallado la llegada
estaciones del año hasta el momento en que
de la familia de Jacob a Egipto, nos habla la
el hambre obliga a Jacob y a sus hijos a
Biblia de la opresión del pueblo hebreo.
marchar hacia Egipto e instalarse allí. Co-
mo hemos visto ya, la llegada de la familia «Aborrecían los egipcios a los hijos
de Jacob a Egipto se corresponde con las de Israel, y además de oprimirlos, los
migraciones de los pueblos que hacia 1720 insultaban; y les hacían pasar una
introdujeron en aquel país a unos extranje- vida muy amarga con las duras fati-
ros semitas, los hicsos. Éstos, tras haber gas de hacer barro, o argamasa, y
dominado durante largo tiempo el país, se- ladrillo, y con toda suerte de servi-
rán expulsados del trono egipcio, pero un dumbre con que los oprimían en las
pequeño grupo de hebreos y de otros ele-
labores del campo.» 1
mentos semitas permanecerán en el delta
del Nilo.
Misterio de la Salvación
53
las manos egipcias al pueblo elegido, con- preciso detenerse brevemente a ponderar su
duciéndolo luego a la Tierra Prometida: valor histórico.
«Pero ven tú, que te quiero enviar al NARRACION DE LA SALIDA DE
Faraón para que saques de Egipto al EGIPTO E HISTORIA
pueblo mío, los hijos de Israel.»7 Las páginas bíblicas de la salida de Egipto
Moisés no habrá de confiar en sí mismo a lo subrayan, evidentemente, la intervención de
largo de su obra libertadora, sino que el Se- Dios en la liberación de su pueblo Israel.
ñor estará con él como lo estuvo con Esta intervención divina, de gran valor his-
Abraham, Isaac y Jacob: tórico, que ahora estudiaremos, no se mani-
« ¿Quién soy yo, respondió Moisés a fiesta siempre con prodigios, sino que, a
menudo, a través de una serie de circuns-
Dios, para ir al Faraón y sacar de
tancias providenciales, se intuye claramente
Egipto a los hijos de Israel? Dijole
la mano de Dios. Muchas veces sucede que,
Dios: Yo estaré contigo...» 8 para recalcar más la intervención celestial,
Confiando en la palabra de Yavé, abandona la Biblia omite los medios de que se ha ser-
Moisés las tierras de Madián, en donde se vido Dios para que sus designios se cum-
había refugiado, y vuelve a Egipto.9 Su sin- pliesen; por ejemplo, cuando el Ángel de
gular tarea como enviado de Dios se verá Yavé destruye el ejército de Senaquerib, es
garantizada por dos grandes acontecimien- probable que no lo hiciese directamente,
tos, base esencial del Éxodo: la salida de sino que las hordas asirías debieron ser
Egipto y la Alianza del Sinaí. Pero, antes de diezmadas por la peste, salvándose así Jeru-
leer las narraciones correspondientes, es salén.10 Tal acontece en el Éxodo: el matiz
local de ciertas plagas (ranas, mosquitos,
Misterio de la Salvación
55
dos, «habrá que dejar los textos con to- etimología popular con el paso de Yavé17
dos sus matices e iridiscencias épicas»14 eliminando a los egipcios y respetando a los
sabiendo que Dios no hubiera permitido hebreos. A veces, la palabra «Pascua» se
que esas tradiciones se describieran con un refiere al cordero sacrificado para la fies-
carácter épico si hubiera juzgado necesario ta18 y, otras veces, al conjunto de hechos
revelar la proporción exacta de historia y de trascendentes ocurridos en la salida de
imaginación que las componían. Egipto: la celebración de la Pascua, el paso
LA SALIDA DE EGIPTO de Yavé y el paso del mar Rojo.
Junto a la creación y a la elección de El cap. 12 del Éxodo, que pertenece en su
Abraham, la salida de Egipto es uno de los mayor parte a la tradición sacerdotal, deta-
elementos fundamentales de la fe de Israel. lla todos los ritos de la celebración de la
La precede un espléndido relato de las en- Pascua. Obedeciendo órdenes de Yavé, los
trevistas entre Moisés y el Faraón y de las israelitas inmolan y se comen el cordero
plagas de Egipto, cuya verdad fundamental pascual:
es que el Dios que Moisés ha invocado es «El día diez de este mes tome cada
más poderoso que Faraón e interviene de
cual! un cordero por cada familia y
forma eficaz y decisiva para que puedan
por cada casa... El cordero ha de ser
marcharse los hijos de Israel.15 sin defecto, macho y primal, o del
La primera Pascua israelita se celebró in- año; podréis, guardando el mismo ri-
mediatamente antes de la salida de Egipto, to, tomar o sustituir por él un cabri-
y aunque el origen de la palabra16 no se co- to. Reservaréislo hasta el día catorce
noce con certeza, se relaciona según una de este mes, en el cual, por la tarde,
Misterio de la Salvación
58
le inmolará toda la multitud de los breos comen pan sin fermentar y celebran la
hijos de Israel. Y tomarán de su san- Pascua de pie y con indumentaria de viaje.
gre y rociarán con ella los dos postes El sacrificio es seguido por el paso de
y el dintel de las casas en las que Yave, quien respeta a Israel, pero hiere a
comerán. Las carnes las comerán los egipcios y, así, libera a su pueblo.
aquella noche asadas al fuego, y pa-
«Mas he aquí que a la media noche
nes ázimos o sin levadura, con le-
el Señor hirió de muerte a todos los
chugas silvestres Y le comeréis de es-
primogénitos en la tierra de Egipto,
ta manera: tendréis ceñidos vuestros
desde el primogénito del Faraón... y
lomos y puesto el calzado en los pies
fueron grandes los alaridos de Egip-
y un báculo en la mano, y comeréis
to, porque no había casa en donde no
aprisa, por ser la Fase (esto es, el
hubiese algún muerto. Y llamando el
Paso) del Señor. Porque yo pasaré
Faraón en aquella misma noche a
aquella noche por la tierra de. Egip-
Moisés y a Aaron, les dijo: "Marchad
to... La sangre os servirá como señal
y retiraos prontamente de mi pue-
en las casas donde estuviereis, pues
blo... Id y ofreced sacrificios al Señor
yo veré la sangre y pasaré de largo,
sin que os toque la plaga extermina- como decís".»20
dora cuando yo hiera con ella la tie- Nadie sabrá nunca exactamente cómo se
rra de Egipto.» 19 produjo tal exterminación; el suponer que el
Ángel Exterminador inmolase uno a uno los
Son interesantes los detalles que matizan el primogénitos egipcios sería desconocer to-
ambiente y la rapidez del momento: los he- talmente el género literario en cuestión. La
Misterio de la Salvación
59
descripción de esta plaga, junto con las an- pulturas en Egipto?... Extendiendo,
teriores, confirma más y más la realidad de pues, Moisés la mano sobre el mar,
la intervención omnipotente de Yavé en fa- abriólo el Señor por el medio, y so-
vor de su pueblo. Dios ha salvado a Israel: plando toda la noche un viento recio
«Salió en un mismo día de la tierra y abrasador, le dejó en seco, y las
de Egipto todo el ejército del Se- aguas quedaron divididas. Con lo
ñor.»21 que los hijos de Israel entraron por
medio del mar seco, teniendo las
Hasta que hayan atravesado el mar Rojo, no
aguas como por muro a derecha e iz-
estarán del todo liberados los hijos de Is-
quierda. Los egipcios, siguiendo al
rael. El paso del mar de los Cañaverales
los alejará definitivamente de la domina-
alcance, entraron en medio del mar
ción egipcia. Tras una temporal desorienta- tras ellos con toda la caballería del
ción, las tropas egipcias reaccionan y persi- Faraón, con sus carros y gente de a
guen a los hebreos, pero, en el momento caballo. Estaba ya para romper el
crítico, interviene el Señor para salvar a sus alba, y he aquí que el Señor, echando
elegidos: una mirada desde la columna de fue-
«Y así que Faraón se hubo acercado, go y de nubes sobre los escuadrones
alzando los hijos de Israel sus ojos, de los egipcios, hizo perecer su ejér-
vieron en pos de sí a los egipcios, cito, y trastornó las ruedas de los ca-
con lo que se amedrentaron sobre- rros, los cuales caían precipitados al
manera. Y aclamaron al Señor, y di- profundo del mar. Por lo que dijeron
jeron a Moisés: ¿Acaso faltaban se- los egipcios: "Huyamos de Israel,
pues el Señor pelea por él contra no-
Misterio de la Salvación
60
preeminente en la mente y en el alma reli- sús como el nuevo Éxodo: «Voz que grita
giosa de Israel: los salmistas y los sabios lo en el desierto: preparad los caminos del
aclaman en su lírica;29 los profetas lo cele- Señor; haced sus sendas...»,32 derechas y
bran como una época ideal, la de los espon- el cuarto Evangelio describe a Cristo reali-
sales entre Dios y su pueblo en el desier- zando las principales figuras del Éxodo: el
to.30 Isaías nos presenta el regreso del exi- maná, la roca de agua viva, la serpiente de
lio con la imagen de una nueva salida de bronce, signo de salvación, la morada de
Egipto: Dios, la luz que guía en las tinieblas, el cor-
«Y en aquel día... el Señor secará la dero pascual.33 También la liturgia de la
lengua del mar de Egipto y extenderá noche pascual va impregnada de este sabor
su mano sobre el río con su impetuo- del Éxodo, cuando conmemora la primera
so viento, y le herirá en sus siete bo- Pascua al tiempo de celebrar la Pascua nue-
va, principio del nuevo Éxodo, que acabará
cas, de modo que se pueda pasar sin
con el retorno glorioso de Cristo que San
descalzarse. Y quedará libre paso a
Juan evoca en el Apocalipsis, en la visión
los restos de mi pueblo que hubiesen
de los elegidos que «cantan el cántico de
dejado vivos los asirios, así como lo
Moisés, el siervo de Dios, y el cántico
tuvo Israel en aquel día en que salió
del Cordero»34
de la tierra de Egipto.» 31
Sin embargo, el Éxodo es sólo una realiza-
LECTURAS
ción inicial de los divinos designios de sal- Éxodo, 1-18.
vación y una prefiguración de la redención Salmos, 78; 105; 136.
del mundo en Jesucristo. En la obra de Je-
Misterio de la Salvación
63
Sabiduría, 10, 15-11, 20 y 26; 1-19, 22. (En 11. Moïse et l'histoire de H. LUSSEAU, publicado
este texto, que pertenece a un género litera- en el «Bulletin des Facultés Catholiques de
rio singular, el autor desarrolla libremente l'Ouet», abril, 1954, pagina 40.
12. «Si negamos la realidad histórica de estos he-
el relato del Éxodo, con el fin de edificar y chos (salida de Egipto, experiencia religiosa del
enseñar profundamente, y mezcla rasgos le- Sinaí, proclamación de la Ley y establecimiento
gendarios o poéticos expresando con una del culto) y la persona de Moisés (libertador,
serie de interpretaciones nuevas toda una guía y legislador escogido por Dios), resultan
teología de la historia.) inexplicables los siguientes sucesos de la histo-
ria de Israel, su fidelidad a Yavé y su obediencia
a la ley de Moisés.» (B. Cou ROYER, O. P.,
1. EX., l, 13-14. L'Exode, París, 1952, pág. 10). La misma re-
2. Hallamos una perfecta reproducción en la flexión hace H. CAZELLES en el libro Moi-
obra citada de GROLLENBERG, pág. 46. sés D.B.S. V. col. 1318: dicho artículo con-
3. Moisés en el Antiguo Testamento en el libro firma el buen fundamento de la observación
«Moisés, el hombre de la Alianza» de A. GE- de M. GELIN: «Un grado exiguo de ciencia
LIN, Tournal, 1955, pág. 29. histórica, nos aleja de Moisés, y un grado eleva-
4. Ex., 3, 14, 17. do nos conduce a él», pág. 30.
5. Ex., 3. 15. 13. H. LUSSEAU, art. cit., pág. 40.
6. «El que es» «El que hace ser» «El que soy» (es- 14. A GELIN, art. cit., pág. 37.
to es: el hombre no tiene por qué conocer mi 15. Ex., 7, 8-11, 10.
nombre). 16. Sobre este tema puede leerse el libro de B.
7. Ex., 3, 10. COUROYER L'.origin égyptienne du mot «Pa-
8. Éx., 3, 11-12. gue», R. B., 1955, págs. 481-496.
9. Ex., 4, 18. 17. Literalmente, «el salto de Yahvé», Ex., 12, 13 y
10. 2° Reyes, 19, 35-36. 12, 23, R. B„ 1955, pág. 493.
18. Ex., 12, 21 y 1 Cor., 5, 7: «Cristo, nuestra Pas-
cua, ha sido inmolado».
Misterio de la Salvación
64
MOISES Y LA ALIANZA
LA ALIANZA DEL SINAI Y EL ción religiosa antes del exilio;3 durante la
DESTINO DE ISRAEL cautividad de Babilonia, el pueblo hebreo
Al liberar a los descendientes de Abraham recobra la conciencia de sus valores religio-
de la opresión egipcia, Dios forma un pue- sos y morales, y, de regreso a Palestina, re-
blo bajo el mando de Moisés, y al sellar con nueva la Alianza.4 En el Sinaí, largo tiempo
él la Alianza del Sinaí, Dios forma su pue- atrás, había comenzado la preparación de la
verdadera Alianza, la Nueva Alianza que el
blo.1 Es un suceso trascendental para el fu-
Mesías, en su día, vendrá a realizar según
turo de Israel, ya que su historia no es otra
estaba prometido.
sino la de la antigua Alianza o Antiguo Tes-
tamento. La Alianza es el núcleo de toda su ANTECEDENTES SOCIOLOGI-
historia, el punto de apoyo sobre el que los COS Y RELIGIOSOS DE LA
hebreos han de fundamentarse para seguir ALIANZA
siendo fieles a su vocación. Cuando Josué
entra en la Tierra Prometida, renueva la La Alianza del Sinaí no sucedió de impro-
Alianza en Siquem para reafirmar la fe en viso. Dios tuvo en cuenta la mentalidad del
Yavé y para prevenir todo contagio de los pueblo que había elegido y que guiaba, de
modo que para los hebreos significaba un
cultos cananeos;2 en la época de los reyes, contrato de mutua pertenencia, que unía con
los profetas prosiguen con su predicación un vínculo sagrado a ambas partes, depa-
sobre el espíritu y las exigencias de la
Alianza, reiterada solemnemente por Josías rándoles derechos y deberes.5 Esta idea de
cuando intenta, por última vez, una renova- una Alianza con Dios encuadra perfecta-
Misterio de la Salvación
67
mente en el estado social y cultural de los dotado de ambiente cien por cien religioso
antiguos hebreos, en cuya vida social abun- y sagrado; además, se le añadió el carácter
daba e influía tanto el pacto entre indivi- de libertad y dádiva, pues la Alianza se rea-
duos y la alianza entre clanes.6 Por tanto, la liza a iniciativa de Yavé, quien la propone
alianza religiosa no fue nada insólito: Dios al pueblo a través de Moisés:
había sellado con un rito de alianza la pro- «Esto dirás a la casa de Jacob... Si
mesa que hiciera a Abraham, comprome- escuchareis mi voz y observareis mi
tiéndose a concederle una descendencia in- pacto, seréis para mí entre todos los
numerable y a establecerla en la tierra de
pueblos la porción escogida...» 8
Canaán.7 Y lo confirmó nuevamente en la
Alianza del Sinaí. Tal como indica el Deuteronomio, 9 no fue-
ron los méritos del pueblo de Israel lo que
LA ALIANZA DEL SINAI provocaron la iniciativa divina, sino que és-
AMBIENTE ta surge del amor gratuito de Dios, .fiel a
El título religioso entregado al pueblo de Is- sus promesas, que, por otra parte, no impo-
rael, o sea la Alianza, tuvo un marco natural ne a los hombres la Alianza, pues respeta su
grandioso: el monte Sinaí, la montaña desde libertad incluso en la realización de sus pla-
la cual Yavé llamó a Moisés, identificada nes divinos, esperando el libre consenti-
con el «Djebel Mousa». Es una cima ma- miento de las criaturas:
jestuosa que domina la llanura de Rahá, al «Bajó, pues, Moisés, y, convocados
sur de la península del Sinaí, y al encuadrar los ancianos del pueblo, les expuso
la manifestación de Dios, el sacrificio y el todo lo que el Señor había mandado
banquete de ritual, el acontecimiento estuvo decirles. Y respondió a una vez todo
Misterio de la Salvación
68
es el Dios Único y superior a todo orden Promete a Israel una protección y ayuda
creado; 14 se muestra como dueño de la singulares:
creación y de los elementos; y al exigir que «... si tú escuchares su voz y ejecuta-
su pueblo se purifique e impedirle el acceso res todas las cosas que ordeno, seré
a la montaña, se manifiesta también como enemigo de tus enemigos y persegui-
el Dios santísimo. ré a los que te persigan.» 20
OBJETO DE LA ALIANZA Entrega a su pueblo una ley que habrá de
Una frase característica del Éxodo15 y de guiarlo en su vida religiosa y moral, y le
toda la literatura bíblica16 nos resume cla- promete la posesión de un país.21
ramente el objeto de la Alianza que Dios Por su parte, Israel será fiel a la Alianza,
realizó con Israel: obedeciendo a la Ley recibida de Yavé; la
«... y seré vuestro Dios, y vosotros Alianza no es algo que se firma y se con-
cluye para siempre, sino una realidad de ca-
seréis el pueblo mío.»17 rácter moral y religioso que hay que vivir
La Alianza convierte a Yavé en el Dios de adheridos totalmente a la voluntad de Yavé,
Israel18 y a Israel en el pueblo de Dios. De que queda expresada en el Decálogo. El
parte de Dios significa una presencia, una «Código de la Alianza» 22 aplica los prin-
protección, la entrega de una tierra y de una cipios del Decálogo al terreno «civil y cri-
ley. Dios quiere estar presente de una mane- minal».23 El Decálogo prescribe los debe-
ra especial en el pueblo escogido:
res hacia Dios y hacia el prójimo:
«Y me fabricarán un Santuario y ha-
bitaré en medio de ellos.» 19
Misterio de la Salvación
70
asombrará, sin duda, ante el rito de la efu- ces Moisés la sangre, roció con ella
sión de sangre. Para nosotros, los tratos o al pueblo, diciendo: "Esta es la san-
convenios se concluyen sobre el tapete con gre de la alianza, que el Señor ha
unas cuantas firmas al pie de un documento contraído con vosotros mediante to-
escrito; pero este ceremonial habría sido ri-
do lo tratado".» 25
dículo y mezquino para un hebreo contem-
poráneo de Moisés. Intentemos penetrar su Para los semitas, la sangre es el principio
mentalidad para poder comprender el sacri- vital («el alma»), la vida del hombre o del
ficio de la Alianza. animal:
«…Levantándose de mañana, edificó «Guárdate solamente de comer san-
Moisés un altar de tierra al pie del gre; porque la sangre en los anima-
monte, y puso doce piedras o aras, les hace las veces de "alma"; y por
según el número de las doce tribus de esto no debes comer con la carne lo
Israel. Y eligió algunos jóvenes de que es la "vida" o "alma" de ella.» 26
los hijos de Israel, que ofrecieron ho- «…Porque la vida de todo animal es-
locausto e inmolaron víctimas de la tá en la sangre; por cuya razón he
sangre y echó la en tazas y derramó dicho a los hijos de Israel: No come-
sobre el altar la otra mitad. Y to- réis sangre de ningún animal, puesto
mando el libro en que estaba escrita que la vida de la carne está en la
la alianza, la leyó delante del pueblo; sangre...» 27
el cual dijo: «Haremos todas las co-
sas que ha ordenado el Señor y se- La efusión o derramamiento de la sangre
sobre el altar, que representa a Dios, y sobre
remos obedientes". Tomando enton-
el pueblo, tras la lectura y la aceptación de
Misterio de la Salvación
72
cual será derramada por muchos pa- Dios se reveló en el monte Sinaí afecta
ra remisión de los pecados.» 30 también directamente al cristiano. Es el
Dios único, que no admite idolatrías, ni an-
La Nueva Alianza, «Dios con nosotros», tiguas ni modernas. Es el Dios fiel a la
será la presencia de Dios entre los hombres,
31
Alianza, que no puede equivocarse y en
y proclamará el mandamiento que cum- quien siempre podemos apoyarnos. Es el
ple plenamente la ley.32 El término de la Dios del amor; la llamada que dirige a su
Alianza será la Jerusalén celestial descrita pueblo proviene únicamente de su bondad y
al final del Apocalipsis. tiene por objeto elevarse espiritualmente y
vivir en comunión con él; y todo lo que es
LA ALIANZA DEL SINAI Y EL válido para el pueblo de Israel, es todavía
PUEBLO CRISTIANO más real para quienes han encontrado en
El cristiano, participante de la Nueva Cristo la realidad de su vida. La religión de
Alianza, halla sin embargo, en la alianza del la Alianza que Jesús llevará a la perfección
Sinaí, una lección que debe meditar. Jesu- es, además, una lección para el cristiano. Es
cristo ha venido efectivamente a cumplir lo una religión viva que se traduce en la exis-
que la Alianza Antigua preparaba y anun- tencia cotidiana; todo el amor que exige la
ciaba. Además, todo lo positivo que aquélla ley para el pobre, para el desconocido, la
encerraba, se encuentra realizado en la viuda y el huérfano es un peldaño más que
Alianza Nueva, y reviste un valor de ense- hay. Que subir en la Ley de la Caridad.33
ñanza para el discípulo de Cristo. También Es una religión personal, que no es lo
el Dios de Moisés es el mismo que envió a mismo que individualista, porque se vive en
su Unigénito al mundo para realizar la el interior de pueblo de Dios. Salta a la
Nueva Alianza: por tanto, la forma en que
Misterio de la Salvación
74
vista que una religión enraizada en el plan 6. P. Van IMSCHOOT, id., pág. 252.
de Dios, no puede ser en absoluto una reli- 7. Éx., 19, 3-5.
gión separada de la vida ni una religión in- 8. Gen., 15.
9. Deut., 7, 7 y sig.
dividualista, que impida la pertenencia al 10. Éx., 19, 7-8, 10-12.
pueblo de Dios. 11. Ruido del vendaval durante una tormenta.
12. Éx., 19. 10-12, 16-20.
13. ÉX„ 20, 2.
LECTURAS 14. Éx., 20, 3-4.
Éxodo, 19-24, 32-34, 40. 15. Éx., 19., 5-6.
Jeremías, 31, 31-34. 16. Jer., 31, 33; 37, 23; Apoc, 21, 3.
17. Lev., 26, 12.
Mateo, 26, 26-29. 18. A título particular, porque en realidad es el
Hebreos, 8, 6-10, 18. Dios de todos los pueblos: «Mía es toda la tie-
rra», dijo a Moisés (Éxodo, 19, 5).
1. Dicha diferenciación tiene un valor general y 19. Éx., 25, 8.
sería falso acentuarla: la salida de Egipto y la 20. Éx., 23, 22.
Alianza son dos factores que contribuyen a 21. Éx., 23, 30-31.
calificar a los hebreos como el pueblo de 22. Con este nombre se designa el texto del Éxo-
Dios. Véase Le Exode, de B. COUROYER, do, 20, 22-23, 33.
pág. 10. 23. Véase iL'exoden, de B. COÜHOYER, pág.
2. Jos., 24. 100, n. a.
3. 2 Reyes, 23. 24. Éx., 20, 2-17.
4. Neh., 8-10. 25. Éx., 24, 4-8.
5. Por ejemplo, la alianza entre Israel y los Ga- 26. Deut., 12, 23.
baonitas (Jos., 9, 3-21). Sobre el concepto de 27. Lev., 17, 14.
alianza es aconsejable la «Théologie de l'An- 28. Éx., 24, 9-11.
cicn Testament,» I, París-Tournai, 1954, pág. 328.
Misterio de la Salvación
75
29. Expresión de A. GELIN «Les pauvres de Yah- 31. Jn., 1, 14; 2, 19-21.
véh», París, 1953, pág. 31. 32. Jn., 13, 34.
30. Mt, 26, 28. 33. Éx. 22, 20-26.
Capítulo Séptimo
Misterio de la Salvación
78
te original); Salomón, hijo de David, cons- de muchas maneras por los profe-
truye el Templo, morada de Yavé. Tras su tas»1
muerte (932), se derrumba la unidad políti-
ca con el cisma de Jeroboam, constituyén- Todo el Antiguo Testamento subraya la im-
dose dos reinos, el del norte o de Israel (fi- portancia esencial de las profecías en la his-
nales de laño 721) y el del sur o de Judá (fi- toria religiosa de Israel; una sección entera
nales de 587), que van evolucionando para- de la Biblia se compone de escritos de los
lelamente, al tiempo que rivalizan por la profetas; los libros históricos relatan asi-
mayor fe en Yavé. mismo la actividad de numerosos profetas
Tal es el aspecto religioso y político bajo el y, en el Pentateuco,2 mientras el libro de los
cual ve la Alianza el pueblo de Dios y bajo Números ensalza a Moisés, al cual habló el
el que desarrollan su actividad los primeros Señor «boca a boca», o sea cara a cara,
profetas. superior a los profetas a quienes Dios se re-
veló en visión o durante el sueño,3 el Deu-
LAS PROFECIAS, ELEMENTO
teronomio le reconoce como el mayor de
PRIMORDIAL EN LA VIDA RE- todos los profetas:
LIGIOSA DE ISRAEL
«Ni después se vio jamás en Israel un
San Pablo afirma, al principio de su epístola profeta como Moisés, con quien con-
a los hebreos, que Dios nos ha hablado por
versase el Señor" cara a cara.»4
medio de su Hijo:
El Señor había hablado a su pueblo por me-
«Después de haber hablado a nues-
dio de los profetas; pero el silencio divino
tros padres en diferentes ocasiones, y
—al cesar las profecías— constituyó para
los israelitas un castigo de Dios:
Misterio de la Salvación
80
«He aquí que viene el tiempo, dice el y el ángel del testamento de vosotros
Señor, en que Yo enviaré hambre so- tan deseado. Vedle ahí que viene, di-
bre la tierra; no hambre de pan ni ce el Señor de los ejércitos...»
sed de agua, sino de oír la palabra «He aquí que Yo os enviaré al profe-
del Señor. Y quedarán todos trastor- ta Elías, antes que venga el día
nados, desde un mar al otro, y desde grande y tremendo de! Señor. Y él
el Norte hasta el Oriente. Discurri- reunirá el corazón de los padres con
rán de una a otra parte deseosos de el de los hijos, y el de los hijos con el
oír la palabra del Señor, y no lo con- de los padres; a fin de que Yo en vi-
seguirán.»5 niendo no hiera la tierra con anate-
Del mismo modo, la reaparición de los pro- ma.»7
fetas era signo de favor divino, como se ob- LOS PROFETAS MENCIONADOS
serva, por ejemplo, en el interrogatorio que EN LA BIBLIA
los emisarios de los judíos hacen a San Juan
Entre los numerosos profetas que menciona
Bautista,6 cuando Israel esperaba la llegada
la Biblia, merecen una especial atención los
de un nuevo Elías al que seguiría el Mesías.
hijos de profetas: son aquellos que, sin
Lo anunció Malaquías en los siguientes pá-
haber sido llamados de forma personal, es-
rrafos de su profecía:
cogieron libremente su forma de vivir y
«He aquí que Yo envío mi ángel, el formaron una especie de cofradías religio-
cual preparará el camino delante de sas que radicaban en los santuarios (Rama,
Mí. Y luego vendrá a su templo el Bethel, Gilgal...) y datan de la época de los
dominador a quien buscáis vosotros, Jueces, probablemente. El carácter de estas
Misterio de la Salvación
81
«Si en medio de tu pueblo se presen- ción. Tal como su nombre indica, son aque-
tare un profeta, o quien diga haber llos profetas designados personalmente por
tenido alguna visión en sueños, y Dios para cumplir una misión en medio del
pronosticare alguna señal o prodigio pueblo; generalmente, cuando se habla de
y sucediendo lo que predijo, te dije- profetas, se hace referencia a los profetas de
re: "Vamos y sigamos a los dioses vocación, de los cuales trataremos en las
ajenos que no conoces, y sirvámo- páginas que siguen.
les", no escucharás las palabras de EL PROFETA
aquel profeta o forjador de sueños; Al hablar hoy en día de profetas, pensamos
porque el Señor Dios vuestro os instintitivamente en un hombre capaz de
prueba, para que se haga patente si predecir el futuro. Sin embargo, éste es so-
le amáis o no con todo vuestro cora- lamente un aspecto de su misión. El profe-
zón y con toda vuestra alma. Seguid ta es, esencialmente, el que habla en nom-
al Señor Dios vuestro, y temedle, y bre de otro, y en el caso del profeta israeli-
guardad sus mandamientos, y oíd su ta, es aquel que habla en nombre de
voz; pero aquel profeta... será casti- Yavé:
gado de muerte; porque trató de «Mira, yo pongo mis palabras en tu
apartaros del Señor Dios vuestro,
boca.» 17
que os sacó de la tierra de Egipto...»
16 Y en otro texto vuelve a decir el Señor a Je-
remías:
Todavía hallamos en la Biblia un tercer
grupo de profetas, los profetas de voca- «Tú serás como boca mía.» 18
Misterio de la Salvación
84
conducirlo a Dios; 23 y abren finalmente un con ansia que Yo vuelva: mas a todos
horizonte de restauración y de salvación. A se les pondrá un yugo perpetuo.
menudo se encuentran en una sola página ¿Qué haré Yo de ti, oh Efraím? ¿Seré
estos tres aspectos que caracterizan a todos Yo tu protector, oh Israel?... ¡Ah! mis
los libros proféticos, v. gr., el capítulo XI entrañas se conmueven dentro de Mí:
de Oseas: Yo me siento como arrepentido. No
«Al principio era la casa de Israel un dejaré obrar el furor de mi indigna-
niño: Yo le amé; y Yo llamé de Egip- ción, no me resolveré a destruir a
to a mi hijo. Mis profetas amonesta- Efraím; porque Yo soy Dios y no un
ron a los hijos de Israel pero éstos se hombre. El santo ha habitado en me-
alejaron tanto más de ellos; ofrecían dio de ti; y así no entraré en la ciu-
víctimas a Baal, y sacrificio a los dad para destruirla. Ellos seguirán
ídolos. Yo me hice como ayo de al Señor, cuando Él rugirá como
Efraím, le traje en mis brazos; y los león; rugirá el Señor, y causará
hijos de Efraím desconocieron que asombro a los hijos del mar. Y vola-
Yo soy el que cuida de su salud: Yo rán desde Egipto como un ave ligera,
lo atraje hacia Mí con vínculos pro- y como paloma a su nido vendrán de
pios de hombres, con los vínculos de tierra de Asiría: y Yo los restableceré
la caridad. La espada ha comenzado en sus moradas, dice el Señor.»24
a recorrer sus ciudades, y consumirá Para encender la imaginación y subrayar
la flor de sus habitantes, y devorará sus enseñanzas, el profeta recurre en oca-
sus caudillos. Entretanto estará mi siones a gestos simbólicos que son, a la
pueblo como en un hilo, esperando
Misterio de la Salvación
86
cunstancias concretas que exigen tal predi- más tarde... En ningún pueblo de la an-
cación; y finalmente, iluminados por Dios, tigüedad se encuentra como en Israel
profundizan el mensaje espiritual de la una serie de profetas precisos) anterio-
Alianza, anunciando la redención futura que res a los sucesos profetizados y confir-
realizará el Mesías. Son, pues, hombres del mados plenamente por los aconteci-
pasado, del presente y del futuro. Son los
precursores de la Nueva Alianza o Nuevo
mientos».28 Lo sobrenatural queda patente,
sobre todo, en la doctrina y en la personali-
Testamento y del Salvador, Jesucristo27 y, dad de los profetas. En lucha perenne «con-
en consecuencia, van formando el alma de tra la tendencia innata de su pueblo al
Israel y preparándola para recibir al Verbo
politeísmo y contra la influencia de las
Encarnado.
religiones contiguas» 29 predicaron y vi-
Diversos han sido los pueblos dotados de
vieron el más puro monoteísmo moral. Su
videntes y de adivinos; varias las religiones
personalidad moral y la pureza de su mono-
que tuvieron profetas: pero no hay compa-
teísmo no se explican ni por el ambiente ni
ración posible con los profetas de Israel. Sin
por el genio (no filosófico), sino únicamen-
menospreciar el valor religioso de esos
te por la acción directa de Dios en favor de
hombres que no pertenecieron al pueblo ju-
su pueblo.
dío, hay que convenir en reconocer el sello
sobrenatural de los profetas israelitas. ALGUNOS TIPOS DE PROFETAS
Hombres como «Amos, Oseas, Miqueas, Presentar, incluso de forma sucinta, a todos
Jeremías y Ezequiel, predijeron aconte- los profetas, exigiría un capítulo especial, lo
cimientos humanamente imprevisibles, cual no es posible en un libro de dimensio-
que se cumplieron muchísimos años nes reducidas; pero se hace indispensable
Misterio de la Salvación
88
enumerar, cuando menos, algunas grandes Dios, realzando de este modo el vínculo de
figuras proféticas de la época real. su ministerio con la Alianza y situándolo de
SIGLO IX DEL REINO DE ISRAEL: lleno en la auténtica religión de Israel. Se
ELÍAS desconocen las circunstancias de la voca-
ción de Elías, y su predicación no ha sido
Durante el reinado de Acab (874-853) y de
recopilada en textos, pero por su valerosa
su esposa Jezabel, hija del rey de Tiro, la
fidelidad al yavismo y por su lucha contra
fidelidad del pueblo a Yavé se vio amena-
el contagio de las religiones extranjeras,
zada por la introducción del culto de Baal
merece ser considerado dentro de la tradi-
en Samaría, y en ese justo momento aparece
ción bíblica como el prototipo de profeta:
el profeta Elías. Este profeta, oriundo de
basta recordar la profecía de Malaquías so-
Galaad y cuyo nombre Eli Yahu (Yavé es
bre la vuelta de Elías en la era mesiánica y
mi Dios) suena como «un grito de arenga la aparición de Elías con Moisés durante la
para la guerra santa»30, se alza para de- Transfiguración de Jesús, representando el
fender la religión de Israel y enfrenta al testimonio que la Ley y los Profetas dan del
pueblo con el dilema de servir a Yavé o a Hijo del hombre, doliente y glorioso.
Baal: SIGLO VIII DEL REINO DE ISRAEL:
«Si Yavé es Dios, seguidle; si lo es AMOS Y OSEAS
Baal, seguidle a él.» AMOS
Después de su victoria contra los profetas Hacia el año 750, y bajo el reinado de Jero-
de Baal, perseguido por Jezabel y quedando boam II, Amos, pastor de Tecue, pueblo
él solo como profeta de Yavé, Elías se re- cercano a Belén, penetra en Samaría para
monta a las fuentes del yavismo, es decir, anunciar la palabra de Yavé. Con su alma
sube al monte Horeb. Que es la montaña de
Misterio de la Salvación
89
«Yo los atraje hacia Mí con vínculos «Cuando levantareis las manos hacia
propios de hombres, con los vínculos Mí, Yo apartaré mí vista de vosotros;
de la caridad; Yo fui para ellos como y cuantas más oraciones me hicie-
quien alza una criatura hasta tocar a reis, tanto menos os escucharé: por-
sus mejillas y les presenté qué co- que vuestras manos están llenas de
mer.» 36 sangre Lavaos, pues, purificaos,
apartad de mis ojos la malignidad de
A pesar de todas las infidelidades de su
pueblo, el Señor, que castigó a Israel, por su
vuestros pensamientos, cesad de
misericordia, le perdonará, repitiendo: obrar mal, aprended a hacer bien,
buscad lo que es justo, socorred al
«Soy el Señor, y no un hombre.» oprimido, hacej justicia al huérfano,
SIGLO VIII DEL REINO DE JUDÁ: amparad a la viuda.»37
ISAÍAS y MIQUEAS
ISAÍAS, PROFETA DE DIOS, DUEÑO
Exige depositar toda la confianza en Dios
SANTO DE LA HISTORIA sólo y no en las alianzas políticas que en-
trañan múltiples contactos religiosos po-
Este profeta es un hombre culto, de familia niendo en peligro la fidelidad al Yavismo:
relevante de la casa de Judá, y ejerce su mi-
nisterio en Jerusalén a partir del año 740. «No estéis diciendo: conspiración;
Caracterizan su mensaje la fe y la santidad pues no habla de otra cosa este pue-
de Yavé, «el santo de Israel», y predica blo sino de conspiración; antes bien,
incesantemente la justicia y la devoción, sin no temáis lo que tanto él teme, y no
las cuales el culto se reduce a unas cuantas os amilanéis. Al Señor de los ejérci-
formas sin sentido:
Misterio de la Salvación
91
tos, a Él sólo, glorificad; El sólo sea tendrá fin; se sentará sobre el sollo
el que os haga temer y temblar.»38 de David, y poseerá su reino para
afianzarle y consolidarlo, haciendo
Isaías predice el castigo, el Día de Yavé,
reinar la equidad y la justicia desde
pero al propio tiempo la perseverancia de
unos cuantos fieles: ahora y para siempre.»40
«Los residuos de Jacob, los residuos, Aparte de contadas excepciones, los treinta
digo, se convertirán al Dios fuer- y nueve primeros capítulos del libro de
Isaías son del propio profeta; el resto está
te.»39 constituido por textos de sus discípulos,
Son célebres sus profecías mesiánicas, es- cercanos o lejanos, por razones de pertene-
pecialmente las del «libro de Emmanuel»: cer a la misma «escuela de espirituali-
el Mesías, descendiente de David, hará que dad».
reinen la justicia y la paz y extenderá el co- MIQUEAS
nocimiento de Yavé:
Este profeta, contemporáneo de Isaías, no
«Pues ha nacido un parvulito para dejó una colección de textos tan abundante
nosotros, y se nos ha dado un hijo, el como la de aquél, pero su ministerio marcó,
cual lleva sobre sus hombros el prin- según afirma el libro de Jeremías, una hue-
cipado, o la divisa del rey, y tendrá lla profunda en Jerusalén.41 Sus palabras
por nombre el admirable, el conseje- claras y concretas y su amor hacia los hu-
ro, Dios, el fuerte, el padre del siglo mildes y pequeños, recuerdan mucho a
venidero, el Príncipe de la Paz. Su aquel otro profeta, hijo también de labrado-
imperio será amplificado, y la paz no res judíos, Amos.
Misterio de la Salvación
92
El libro de Miqueas comienza con la pre- bilidad y de una piedad auténtica. Dios le
dicción de la ruina de Samaría y del castigo llama en el año 627 y ejerce su ministerio
que amenaza a Judá, dejando traslucir con una fidelidad ejemplar, en medio de to-
siempre una esperanza que va a parar en el da clase de sufrimientos. Es amante de su
anuncio de la restauración mesiánica y de la patria, y se ve obligado a predecir las futu-
fidelidad de «unos cuantos», e insistiendo ras calamidades que la asolarán. Es de ca-
sobre el carácter de descendiente de David rácter pacífica, y ha de luchar continuamen-
respecto del Mesías: te con adversarios encarnizados. Es afec-
«Y tú ¡oh Belén!, llamada Efrata, tú tuoso y, en cambio, padece persecución y
soledad. Pero aun sumido en el mayor aba-
eres una ciudad pequeña respecto de
timiento, Jeremías sigue predicando las pa-
las principales de Judá; pero de ti
labras de Yavé. Su vida es aparentemente
nacerá el que ha de ser dominador un fracaso, pero en realidad, Jeremías tiene
de Israel, el cual fue engendrado una importancia considerable en la evolu-
desde el principio, desde los días de ción religiosa de Israel durante el Exilio y
la eternidad.» 42 después de él: es el profeta que predijo el
SIGLO VII DEL REINO DE JUDÁ: JE- castigo de Jerusalén, el que predicó y vivió
REMÍAS una religión verdadera y anunció la Nueva
Alianza. Con todo ello, ejerció una influen-
Entre los últimos profetas del preexilio,
cia notabilísima sobre la espiritualidad de
aparece Jeremías, el más relevante entre
los «pobres de Yavé» y fue el «padre del
otros contemporáneos (Sofonías, Nahum y
Habacuc). Nace en las cercanías de Jerusa- judaismo en su línea más pura».43
lén, en el seno de una familia sacerdotal,
hacia el año 645. Es de una riquísima sensi-
Misterio de la Salvación
93
LOS CRISTIANOS Y LOS PRO- en que Dios hablaba por medio de sus pro-
FETAS DE ISRAEL fetas y el tiempo en que habla por medio de
su propio Hijo. Asimismo, su mensaje está
EN LA ANTIGUA Y LA NUEVA ALIANZA infinitamente por encima de los textos pro-
En el Antiguo Testamento, el profeta, susci- féticos:
tado di rectamente por Dios, exhortaba al
«A Dios nadie le ha visto jamás: El
pueblo a guardar fidelidad a la Alianza en
Hijo unigénito, existente en el seno
su vida concreta, profundizaba el mensaje
espiritual de la Alianza, era instrumento de
del Padre, Él mismo, en persona, es
la Revelación y mantenía la esperanza en la quien lo ha dado a conocer a los
futura salvación. Jesucristo, Mediador de la hombres.»45
Nueva Alianza, realiza en un plano superior Respecto de la Iglesia fundada por Cristo,
la Ley y los profetas: puede afirmarse a la vez que carece de pro-
«No penséis que he venido a destruir fetas, y que tiene una misión profética. A
la Ley ni los Profetas; no he venido a pesar del carisma de profecía tantas veces
destruirla, sino a darle su cumpli- repetido en el Nuevo Testamento, puede
decirse que no existirán más profetas, pues
miento.»44
Jesús declaró:
Cristo se sucede a los profetas y consagra
«...os he hecho saber cuántas cosas
su esperanza, pero no es un simple profeta,
sino Dios mismo que habla a los hombres: oí de mi Padre.»46
la Palabra, el Verbo de Dios encarnado. La Iglesia tiene, por tanto, una misión pro-
Nos lo recalca con toda precisión la epístola fética, porque está llamada a predicar a to-
a los hebreos, cuando menciona el tiempo das las naciones la Nueva Alianza, recor-
Misterio de la Salvación
94
dándoles las exigencias que de ésta se des- fetas de Yavé y su minuciosidad en con-
prenden en función del presente. Ha de es- frontar las prescripciones del Testamento
crutar siglo tras siglo la Revelación recibi- con los problemas de cada época, constitu-
da, para distribuir y disfrutar de sus inmen- yen una enseñanza preciosísima para los
sas riquezas espirituales. Ha de mantener que vivimos en la Nueva Alianza.
viva la esperanza en la vuelta del Señor, fin
de la Alianza. Todo cristiano en comunión
con la Iglesia y su Jerarquía (sucesores de LECTURAS
los Apóstoles) participa, con su actuación Amos, 2, 6-16; 9, 8-15.
propia, de esta misión profética. Oseas, 2, 4-25; 11, 1-11.
EL CRISTIANO Y LOS PROFETAS Isaías, 5, 1-7; 6, 1-12; 7-11.
Miqueas, 5, 1-7.
El cristiano que cumple con su misión no
Jeremías, 1; 19, 1-20, 6.
puede considerar como extraños a los profe-
Ezequiel; 12,- 1-2Q.
tas, sino que ha de sentirse solidarizado
conscientemente con aquellos héroes del
Yavismo, que ejercieron una influencia de- 1. Hebreos, 1, 1.
cisiva en Israel y contribuyeron a la realiza- 2. Véase cap. 2, n. 5.
ción del divino designio de salvación en 3. Nûm. 12, 6-8.
que él también coopera. Encontrará en ellos 4. Deut., 34, 10.
5. Am, 8, 11-12; Ez., 7, 26.
unos excelentes maestros espirituales y la
6. Jn., 1, 21.
lectura de sus libros le ayudará a concebir al 7. Mal. 3, 1, 4, 5-6.
Dios Santo, Fiel, Misericordioso... y a co- 8. CHAINE «Introduction a la lecture des prop-
nocer la actitud que debe adoptar ante Él. hètes», 3. éd., Paris, 1932, pâg. 12.
Por último, la fidelidad intrépida de los pro- 9. 1 Sam., 19, 20-24; véase 10, 5-6.
Misterio de la Salvación
95
10. J. CHAINE, op. cit., pág. 13 24. Os., 11, 1-11, véase la explicación de J.
11. 1." Reyes, 19, 1 y sig. DHEILLY en «Le peuple de l'ancienne Allian-
12. Jer., 14, 14. ce», París, 1954, págs, 256-257; Os. 2, 4-25.
13. 1." Reyes, 22, 24. 25. Is., 20, 1-6; Jer., 19, 1 y sig.; Ez., 37, 15 y sig.
14. Her., 28, 1-7. 26. P. GRELOT «Pages bibliques» París, 1954,
15. Deut, 18, 21-22. pág. 99.
16. Deut., 13, 2-6. 27. Véase J. DHEILLY, o. cit., págs. 255.
17. Jer., 1, 9. 28. P. VAN IMSCHOOT, «Théologie...», I, págs.
18. Jer., 15, 19; véase Is., 30, 2. 179-180.
19. Is. 6. 29. Idem., pág. 181.
20. Am., 9, 11-15. 30. JEAN STEINMANN, La geste d'Elie dans
21. 1.° Reyes, 22, 26-26-27; Jer., 20, 2-3; 37, 15- l'Ancien Testament, en el libro «Elze le prop-
16. hète selon les Ecritures et les traditions chrétien-
22. Jer., 1 7-8. nes», D. de Brouwer, 1956, pág. 97; léanse
23. Se admite que participe también la imagina- también los textos sobre el profeta Elias en el
ción del profeta al anunciar los acontecimien- libro 1. de los Reyes, 17, y. en el 2.a, n. 1.
tos. «Si bien está iluminado por Dios sobre el 31. Am., 2, 6-8; 5, 12; 5, 21-22; 6, 4 y sig.
hecho a profetizar el vidente puede no estarlo en 32. Am., 5 15.
cuanto al tiempo y al modo, de donde se deduce 33. Am., 5, 15.
la posibilidad de conjeturas personales y de 34. Os., 6, 6.
idealismos; así se explican los textos relativos a 35. Os., 8, 13.
la invasión de Senaquerib, Is., 10, 28 y sig.; a 36. Os., 11, 4.
las ruinas de Babilonia, Is., 13, 47; Jer., 50,51; 37. Is., 1, 15-17; 29, 13.
o de Jerusalén Ez., 9, 1-10. 8.» A. ROBERT 38. Is., 8, 12-13.
«Imitation biblique», 3.' ed., París, 1954, pág. 39. Is., 10, 21.
293. 40. Is., 9, 5-6.
41. Jen, 26, 18-19.
42. Mi., 5, 1.
Misterio de la Salvación
96
43. Véase capítulo sobre «los pobres de Yavé». 45. Juan, 1, 18.
44. Mt., 5, 17. 46. Juan, 15 15.
Capitulo Octavo
Misterio de la Salvación
100
EL EXILIO
EL EXILIO EN BABILONIA Y así les dirás: Ésta es aquella na-
A pesar de la destrucción del reino de Sa- ción que no ha escuchado la voz del
maría en el año 721, de los múltiples avisos Señor Dios ni ha admitido sus ins-
de los profetas y de la tentativa de reforma trucciones. Muerta está su fe, deste-
religiosa efectuada por Josías en 622, el rrada está de su boca.»1
conjunto de la nación judía fue infiel a Las innumerables infidelidades a la Alianza
Yavé y traicionó los valores espirituales que (injusticias descomunales, desenfrenos, cul-
tenía mandado conservar: tos idólatras a Baal y Astartés, sacrificio de
«... desde el día en que salieron vues- niños, abandono de Yavé) ,2 exigen una pu-
tros padres de la tierra de Egipto rificación:
hasta el día de hoy... Yo os enviaré a
«Por lo tanto, ya viene el tiempo, di-
vosotros todos mis siervos los profe-
ce el Señor... en que los cadáveres de
tas, cada día me daba prisa en envia-
este pueblo serán pasto de las aves
ros; mas no me escucharon, sino que
del cielo y de las bestias de la tierra;
se hicieron sordos y endurecieron su
y no habrá nadie que las ahuyente.
cerviz, y se .portaron peor que sus
Yo haré que no se oiga en las ciuda-
padres. Tú, pues, les dirás todas es-
des de Judá, ni en las plazas de Jeru-
tas palabras, mas no te escucharán:
salén, voz de regocijo, y de alegría,
los llamarás; mas no te responderán.
Misterio de la Salvación
101
voz de esposo y esposa: porque toda exilio, en tierras extrañas, lejos del país que
la tierra quedará desolada.»3 Dios había donado a los descendientes de
Abraham.
El castigo llegó: en el año 598, Nabucodo-
nosor conquistó Jerusalén y deportó al rey Además, el pueblo exilado se ve acechado
Joaquín y a los magnates de la población. por innumerables tentaciones. Babilonia,
Unos años después, el nuevo rey Sedecías, según los descubrimientos arqueológicos,
tío de Joaquín, faltando a su palabra conspi- superaba «en esplendor y magnificencia
ró contra el soberano caldeo, obligando ello a todas las capitales de la Antigüedad,
a Nabucodonosor a emprender una nueva comprendidas Atenas y Roma»,6 y su
ofensiva, asediando y tomando la ciudad atracción era para los judíos una prueba in-
santa en el año 587, victoria que fue segui- cesante. El mayor dios de los caldeos, Mar-
da de una nueva deportación.4 duk, ¿sería, tal vez, más fuerte que el Dios
de Israel, cuyo pueblo había sido vencido y
Humanamente hablando, ha terminado su país asolado? Las dimensiones de la ca-
aquí el destino religioso del pueblo de tástrofe y la duración del exilio amenazan
Dios: el templo, morada de la presencia di- con extinguir toda la esperanza de los ju-
vina y centro del culto de Israel, está en rui- díos fieles: ¿habrá abandonado Yavé a su
nas; la nación, como tal, ha dejado de exis- pueblo? Los sarcasmos de los caldeos agra-
tir; la capital ha sido arrasada por el vence- van indeciblemente esta tentación de des-
dor, y el último monarca, Sedecías, ha sido aliento:
apresado y conducido al cautiverio después
de haberle castigado cruelmente por su per- «Rómpense mis huesos cuando mis
contrarios me insultan, cuando me
jurio;5 lo más escogido de Israel vive en el
Misterio de la Salvación
102
En la visión de los huesos secos «este cre- individual, explica el sentido del castigo
yente imperturbable», como le llama Re- y afirma la posibilidad que cada hombre
nán, 16 proclama la certeza de la redención': tiene de volver a gozar del favor de Dios.
En oposición con el concepto de la solidari-
«Hijo de hombre, todos esos huesos dad bajo el castigo, sostiene Ezequiel el
representan la familia de Israel; ellos principio de la retribución individual:
dicen: secáronse nuestros huesos, y
«Hablóme nuevamente el Señor, di-
pereció nuestra esperanza, y noso-
ciendo: ¿Cómo es que entre vosotros,
tros somos ya ramas cortadas. Por lo
en tierra de Israel, habéis convertido
tanto, profetiza tú, y les dirás: esto
en proverbio este dicho: Los padres
dice el Señor Dios: Mirad, yo abriré
comieron el agraz, y los hijos sufren
vuestras sepulturas, y os sacaré fuera
la dentera? ¡JuroYo, dice el Señor
de ellas, ¡oh pueblo mío!, y os con-
Dios, que esta parábola no será ya
duciré a la tierra de Israel... y habré
más para vosotros un proverbio en
infundido en vosotros mi espíritu, y
Israel. Porque todas las almas son
tendréis vida, y os daré reposo en
mías; como es mía el alma del padre,
vuestra tierra; y conoceréis que Yo,
lo es también la del hijo; el alma que
el Señor, hablé, y lo puse por obra,
pecare, ésa morirá»18
dice el Señor Dios.» 17
Cada uno es responsable de sus actos y su-
A todos aquellos que podían creerse aban-
frirá las consecuencias, pero del mismo
donados definitivamente por Yavé por los
modo, cada uno tiene posibilidad, incluso
innumerables pecados de su nación, predica
en el exilio, de recobrar la gracia de Dios
Ezequiel la doctrina de la responsabilidad
Misterio de la Salvación
105
por la conversión, que es el verdadero obje- plo ideal» que describe en sus últimas pá-
to del castigo: ginas). Este movimiento de reagrupación no
«Si el impío hiciere penitencia de to- favorecía de por sí al espíritu misionero y,
dos los pecados que ha cometido, y si se hubiese concedido la prioridad a la ob-
observare todos mis preceptos, y servancia exterior en vez de a la acción in-
terior, se habría corrido el riesgo de formar
obrare según derecho y justicia, ten-
una sociedad demasiado cerrada; pero era
drá vida verdadera, y no morirá...
necesario para la reanudación y sosteni-
Convertios y haced penitencia de to- miento de la vida religiosa de Israel. En
das vuestras maldades; y no serán esos momentos, «en ausencia de una or-
éstas causa de vuestra perdición. ganización política firme y de unas
Arrojad lejos de vosotros todas vues- fronteras materiales, se constituye en
tras prevaricaciones que habéis co- conjunto legislativo del que Ezequiel es,
metido, y formaos un corazón nuevo, como mínimo, el inspirador, y que cons-
y un nuevo espíritu. Y ¿por qué has tituirá el código del judaísmo disperso,
de morir, oh casa de Israel? Pues pudiendo hablarse sin temor de Eze-
que Yo no deseo la muerte de aquél quiel como de uno de los fundadores e
que muere, dice el Señor Dios, con- inspiradores de la comunidad judía
vertios y viviréis.»19 postexiliada».20
La obra de Ezequiel es admirable, además,
Como Jeremías, Ezequiel anuncia la
por cuanto contribuyó eficazmente a re-
Alianza Nueva. Yavé se dejará suplicar
agrupar a los exiliados en torno al sa- por la casa de Israel. Él mismo producirá la
cerdote, al Templo y a la Ley, (el «tem- purificación —y la renovación de los cora-
Misterio de la Salvación
106
zones, lo cual enmienda la idea de los tex- mis ovejas, y las reconoceré y conta-
tos precedentemente citados en los cuales ré... Yo mismo apacentaré mis ovejas
parece que el pro feta conceda al hombre la y las haré sestear... Y estableceré so-
iniciativa de su conversión: bre mis ovejas UN SOLO PASTOR
«Y derramaré sobre vosotros agua que las apaciente, esto es, el hijo de
pura, y quedaréis purificados de to- David, siervo mío: él mismo las apa-
das las inmundicias, y os limpiaré de centará y él será su pasto. Y yo, el
todas vuestras idolatrías. Y os daré Señor, seré su Dios; y mi siervo Da-
un nuevo corazón, y pondré en medio vid será el príncipe en medio de
de vosotros un nuevo espíritu, y qui- ellos: Yo el Señor lo he dicho.» 22
taré de vuestro cuerpo el corazón de
piedra, y os daré un corazón de car-
Dios realizará una Alianza Nueva:
ne. Y pondré mi espíritu en medio de «Y el siervo mío David será rey suyo,
vosotros, y haré que guardéis mis y no habrá más que un pastor de to-
preceptos, y observéis mis leyes y las dos ellos: y observarán mis leyes, y
practiquéis.»21 guardarán mis preceptos, y los pon-
drán por obra. Y morarán sobre la
En las palabras de Jesús cuando utiliza la tierra que Yo di a mi siervo Jacob, en
alegoría del Buen Pastor, Dios anuncia que
la cual vivieron vuestros padres; y en
será pastor de su pueblo y suscitará a su
la misma morarán ellos y sus hijos, y
siervo David como príncipe mesiánico:
los hijos de sus hijos eternamente; y
«Porque esto dice el Señor Dios: He David mi siervo será perpetuamente
aquí que Yo mismo iré en busca de su príncipe. Y haré con ellos una
Misterio de la Salvación
107
extinguidos como mecha que se apa- réis salvos; porque Yo soy Dios, y no
ga. hay otro que lo sea.»28
No os acordéis más de lo de otras
Varios párrafos del libro de las consolacio-
veces,
nes mencionan a un misterioso «Siervo de
no hagáis atención a lo pasado;
que voy a hacer una obra nueva Yavé»,29 un justo que sufre y que, en algu-
que ya está comenzando; ¿no lo nos puntos, parece ser Jeremías; pero su in-
gente misión no es ni puede ser realizada
veis?
por ninguno de los personajes del Antiguo
Voy a abrir un camino en el desierto,
Testamento: él expía los pecados de los
y a llevar ríos a la soledad27 demás e intercede en favor de los pecado-
El segundo Isaías ofrece unas perspectivas res; a su muerte sucede una glorificación y
universales a la comunidad de exiliados una grandiosa fecundidad espiritual: he aquí
encerrados en sí mismos por el sufrimiento, una lección importantísima sobre unos su-
por los anhelos patrióticos y por la lucha frimientos y una muerte vivificadora, una
por la fe: profecía que se realizaría en Jesucristo.
«Reuníos y venid y acercaos todos Algunos exegetas atribuyen estos textos,
vosotros que habéis salido salvos de cumbre doctrinal del Antiguo Testamento,
entre las naciones: ¿Por ventura no al segundo Isaías, y otros prefieren hacerlo
a uno de sus discípulos, suponiendo que los
soy Yo el Señor? ¿Acaso hay más
escribiría en los años inmediatos al regreso
Dios que Yo? Dios justo y que salve,
no hay sino. Yo. Convertíos, pues, a del exilio.30
Mí, pueblos todos de la tierra, y se-
Misterio de la Salvación
109
14. E. RENAN, «Histoire du Peuple d'Israël», Pa- 28. Is., 45, 20-22.
ris, 1891, tomo 3, pág. 303. 29. Referencias al cap. 10, n. 28.
15. Ez„ 36, 22 y sig. 30. ROBERT, Les Psaumes, pág. 46; véanse tam-
16. Obra citada, pág. 403. bién numerosas opiniones citadas por A. GE-
17. Ez., 37, 11-14. LIN, art. Messianisme, D.B.S., 1.194 y sig.
18. Ez., 18, 1-4. 31. GELIN, Rencontres Bibliques, Lille. 1954,
19. Ez., 18, 21, 30-32. pág. 73.
20. P. AUVRAY, «Ezechiel», París, 1947, págs. 32. ROBERT, Initiation Biblique, 3.' éd., Paris,
158-159. 1954, página 296.
21. E2., 36, 25-27 y 37. 33. GELIN, Problèmes..., pág. 94.
22. Ez., 34, 11, 15, 23-24. 34. D. C. CHARLIER, La lecture chrétienne de la
23. Ez., 37, 24-28. Bible, 5 éd., Maredsous, pág. 211.
24. Is. 40-55. 35. 1 Cor., 1, 17 y sig.
25. Is., 40, 1-2. 36. Rom., 8, 28.
26. Is., 41, 1-4; 45, 1-6, 12-13. 37.Luc, 24, 26.
27. Is., 40, 3; 43 16-19. 2S.
Misterio de la Salvación
113
Capítulo Noveno
Misterio de la Salvación
116
«Esto es malo, esto no vale nada, di- pecto neutral) y se remiten periódica-
ce todo comprador; y después de ha- mente a la Ley (Toráh)».16
berse llevado la cosa, entonces se
«Más vale poquito con temor de
gloría de la compra.»
Dios, que grandes riquezas, que nun-
«Dice el perezoso: Fuera hay un
ca nos sacian.»
león; y si salgo seré muerto en medio
«El corazón del hombre forma sus
de la calle.»14 designios; mas del Señor es el dirigir
En segundo lugar, tiene fe en Dios Omnis- sus pasos.» 17
ciente y Omnipotente; medita día y noche
Los sabios no solamente juzgan el mundo a
la Ley de Yavá y se esfuerza por descubrir
la luz de la fe, sino que siembran innumera-
la sabiduría divina que emana de la crea-
bles consejos prácticos y transmiten una vi-
ción y que brilla en la historia del pueblo de
sión de la vida que repercute en la conducta
Dios.15 A pesar de que los libros de la Sa- cotidiana del hombre, descubriéndole la sa-
biduría insisten sobremanera en la expe- biduría divina a través de la creación, a tra-
riencia, no puede hablarse, a este respecto, vés de la historia de Israel y, sobre todo, a
de «moral laica», y su enseñanza es, en través de la Ley; pues toda la sabiduría del
definitiva, una actitud adoptada por «con- hombre consiste exactamente en imitar a
formismo con las leyes de este género»: Dios y en ser fiel a la Ley y al espíritu de la
«Incluso en los fragmentos más anti- Ley. Léase, a este respecto, la siguiente
guos de los Proverbios, las máximas son descripción del escriba, hecha por Ben Si-
profundamente religiosas (bajo su as- rac:
Misterio de la Salvación
121
los judíos residentes en tierra pagana para ojos de los insensatos pareció que
que, uniéndose a los paganos de buena vo- morían; y su tránsito, o salida del
luntad, preparen sus almas a la ulterior mo- mundo, se miró como una desgracia,
ral cristiana. 33 y como un aniquilamiento su partida
LIBRO DE LA SABIDURÍA (entre los años de entre nosotros: más ellos, a la
100 y 50) verdad, reposan en paz. Y si delante
Este libro, juntamente con el de Daniel y de los hombres han padecido tormen-
con el segundo de los Macabeos, da la solu- tos, su esperanza está llena o segura
ción al problema de la recompensa. Su au- de la inmortalidad... Probólos como
tor es un judío, conocedor absoluto de la al oro en el crisol, y los aceptó como
lengua y de las costumbres griegas, que re- víctimas de holocausto; y a su tiempo
dacta en griego, probablemente en Alejan- se les dará la recompensa. Entonces
dría, y que se propone demostrar a sus brillarán los justos como el sol, y
compatriotas judíos la superioridad de la como centellas que discurren por un
sabiduría israelita sobre la filosofía pagana: cañaveral, así volarán de unas partes
la primera se ha otorgado a Israel mediante a otras. Juzgarán a las naciones, y
la Ley divina, y la segunda es, en cambio, dominarán a los pueblos; el Señor
puramente humana. Desde el punto de vista
reinará con ellos eternamente.» 34
doctrinal, el libro se consagra a la revela-
ción de la inmortalidad del alma: En esta revelación de la inmortalidad del
alma y de su recompensa en el otro mundo,
«Las almas de los justos están en la consiste la solución que reclamaban las in-
mano de Dios; y no llegará a ellas el quietudes de Job y del Eclesiastés. Es una
tormento de la muerte eterna. A los respuesta al problema del sufrimiento del
Misterio de la Salvación
126
exigencias de la fe, por responder a las ne- revelará la sabiduría divina que los sabios
cesidades de nuestro tiempo en perpetua fi- de Israel habían dejado entrever:
delidad con el Evangelio... Fueron verdade- «...para los que han sido llamados a
ros precursores del Evangelio: unos plan- la fe, tanto judíos como griegos, es
tearon problemas, otros aportaron solucio- Cristo la virtud de Dios y la sabidu-
nes, y Dios se sirvió de sus reflexiones hu-
manas como de un vehículo de la Revela- ría de Dios.»38
ción, lección maravillosa de la colaboración
que Dios solicita del hombre en los grandes
hechos de su plan salvador.
Un siglo escaso después del Libro de la Sa-
biduría, dirá Jesús, el Sabio por excelencia,
a los fariseos:
«La reina del mediodía... vino de los
extremos de la tierra para escuchar
la sabiduría de Salomón, y con todo,
aquí tenéis quién es más que Salo-
món.»37
Jesucristo, en el Sermón de la montaña y a
lo largo de toda su predicación, expresará la
sabiduría en su forma más sublime y, en su
persona y en el misterio de su Crucifixión,
Misterio de la Salvación
128
22. Véase el artículo Béatitude de H. CAZELLES. 32. La Sainte Bible Maredsous, pág. XXXIII.
Y L'Idée de béatitude dans la Sainte Ecriture, 33. Véase J. DHEILLY, ob. cit., pág. 413.
en Catholicisme, c. 1.344. 34. Sab., 3, 1-8. Los textos más importantes del
23. Ez., 14, 14. Antiguo Testamento sobre la Resurrección se
24. Job., 2, 13. encuentran en Daniel, 12, y 2, Mac, 7 12, 14.
25. Job., 1, 8. 35. P. GRELOT, Pages bibliques, pág. 326.
26. La Sainte Bible, Maredsous, pág. XXVIII. 36. M. DUBARLE, Les Sages d'Israël, Paris,
27. ROBERT, ob. cit., pág. 195. 1946, pág. 4.
28. Eclesiastés, 1, 2-3. 37. Mat., 12, 42.
29. fd., 10, 17. 38. 1 Cor., 1, 24.
30. ROBERT, ob. cit., pág. 196.
31. D. DOESBERG, Les Seribes inspirés, Paris,
1939, vol. 2.°, 1. 2; Le livre de raison d'un
bourgeois de Jérusalem.
Misterio de la Salvación
131
Capítulo Décimo
Misterio de la Salvación
134
desatada en medio de una dura opresión del vos despedazáis mi pueblo, y desha-
débil, las injusticias sociales y la corrupción céis a golpes los rostros de los po-
de los jueces de Israel: bres, dice el Señor Dios de los ejérci-
«...por cuanto ha vendido por dinero tos?»15
al justo, y por un par d? sandalias al El segundo abuso combatido por los profe-
pobre. Abaten hasta el suelo las ca- tas fue la utilización de los bienes recibi-
bezas de los pobres, y se esquivan del dos de Dios para pecar contra Él.. En
trato con los humildes... Yo soy aquel vez de dar gracias a Yavé, los israelitas se
que os saqué de la tierra de Egipto, y entregaron varias veces a los cultos de fe-
os condujo por el desierto cuarenta cundidad cananeos, como si fuese Baal
años, para poneros en posesión de la quien les proporcionase cosechas y rique-
tierra de los amorreos... Y he aquí zas, y no Yavé, único Dios:
que os haré crujir como un carro «Ella (Israel, esposa de Yavé) dijo:
muy cargado de gavillas...»14 Iré en pos de mis amantes, que son
Las mismas severas amonestaciones leemos los que me dan mi pan, y mi agua, y
en Isaías: mí lana, y mi lino, y mi aceite, y mi
«El Señor entrará en juicio con los bebida... Y no sabía ella que fui Yo
ancianos de su pueblo y con sus quien le dio el trigo, y el vino, y el
principios. Porque vosotros sois, les aceite, y el que le dio la abundancia
dirá, los que habéis devorado mi vi- de plata y de oro que ofrecieron a
da, y en vuestra casa están las rapi- Baal. Por esto Yo me portaré de otro
ñas hechas al pobre. ¿Por qué moti-
Misterio de la Salvación
139
modo, y a su tiempo recogeré mi tri- ria de los anauim, pues orienta la idea de
go, y mi vino...»16 pobreza con un sentido netamente religioso.
Hacia el año 630 comienza a emplear un
El castigo anunciado, precursor de una re- vocabulario de pobreza con valor propia-
novación general, reconoce que «la priva- mente religioso, invitando a sus contempo-
ción de los bienes —dones de Dios— ráneos a practicar la pobreza espiritual e
puede ser la senda necesaria para hallar identificando al pueblo mesiánico con un
de nuevo a Yavé»17. Sin embargo, antes pueblo de pobres. Les presenta la pobreza
del exilio «no se canonizó la noción de como el único medio de escapar al castigo:
pobreza como un ideal religioso por el «Buscad al Señor, todos vosotros,
que hubiese que despreciar toda clase de «pobres» de la tierra, que habéis
bienes. Igual que los demás israelitas de guardado sus preceptos; id en busca
su tiempo, los profetas estimaron la ri- de la justicia, buscad la mansedum-
queza porque a sus ojos representaba, bre, por si podéis poneros a cubierto
normalmente, la recompensa por la vir- en el día de la ira del Señor.»19
tud; y en consecuencia, la era escatoló-
gica aparecía ante ellos como una era Y anuncia que el «residuo del pueblo esco-
gido, que recibirá las bendiciones mesiáni-
de perfección moral y de abundancia
cas, será un pueblo de pobres:
material a la vez. »18
«En aquel día, ¡oh Jerusalén!, no se-
SOFONÍAS, PRIMER PROFETA DE LA rás confundida por todas las obras
POBREZA
tuyas con que prevaricaste contra
Sofonías ocupa un lugar preeminente entre Mí; pues entonces yo quitaré de en
los profetas de antes del exilio y en la histo-
Misterio de la Salvación
140
JEREMÍAS, «EL PADRE DE LOS PO- rrea más que continuos oprobios y
21 escarnios.» 24
BRES»
Jeremías, el gran defensor de los pobres, no A pesar de cuanto padece y de todas las
perteneció a la clase humilde, pero las per- persecuciones de que es objeto, Jeremías
secuciones que sufrió, el odio que levantó permanece fiel a Yavé, descansando en Él
su predicación y el infortunio que le rodeó con la mayor confianza:
constantemente, le afligieron mucho más «Pero el Señor, cual esforzado cam-
que la pura pobreza material. En sus «Con- peón, está conmigo; por eso caerán y
fesiones», escritas a partir del año 610, o quedarán sin fuerzas aquellos que me
sea, después de incorporarse la renovación persiguen... Tú, Señor de los ejérci-
yavista, expresa con el mayor realismo su tos, que haces pruebas del justo; Tú
verdadera pobreza, quejándose amargamen- que disciernes los afectos interiores
te de sus sufrimientos.
del corazón, haz que yo te vea tomar
«Maldito el día en que nací; no sea de ellos venganza, porque a Ti tengo
bendito el día en que mi madre me encomendado mi causa.»25
dio a luz... ¿Para qué salí del seno
materno a padecer trabajos y dolo- Interpreta la prueba como una oportunidad
para la disposición interior y para la pobre-
res, y a que se consumiesen mis días
za del alma, diálogo místico en el que se
en afrenta?... ¡Oh Señor! Tú me des-
funden la confianza y la alegría propia de la
lumbraste al encargarme este penoso
ministerio; y yo quedé deslumbra- fe.26 Es, pues, un ejemplo de pobre auténti-
do;...la palabra del Señor no me aca- co. Su fisonomía religiosa influirá notable-
mente después del exilio en la comunidad
Misterio de la Salvación
142
así que por causa de nuestras iniqui- de naciones; y repartirá los despojos
dades fue Él llagado, y despedazado de los fuertes: pues que ha entregado
por nuestras maldades; el castigo del su vida a la muerte, y ha sido con-
que debía nacer nuestra paz con fundido con los facinerosos y ha to-
Dios, descargó sobre Él, y con sus mado sobre sí los pecados de todos, y
heridas fuimos nosotros curados.» ha rogado por los transgresores.»30
Después de los dolores de este pobre, capa- El «Siervo de Yavé» es la más alta expre-
ces de justificar a los pecadores, recibirá sión del ideal de pobreza que el Antiguo
una misteriosa glorificación: Testamento contiene. No dudarán los discí-
. «Y quiso el Señor consumirse con pulos de Cristo muerto y resucitado en re-
trabajos: mas luego que Él ofrezca conocerle como el Pobre que profetizara
su vida como hostia por el pecado, aquel lejano discípulo de Isaías.
verá una descendencia larga y dura-
dera, y será cumplida por medio de
Él la voluntad del Señor. Verá el fru-
to de los afanes de su alma, y queda-
rá saciado. Este mismo Justo,-mi
siervo, dice el Señor, justificará a
muchos con su doctrina; y cargará
sobre s: los pecados de ellos. Por lo
tanto, le daré como porción, o en he-
rencia suya, una gran muchedumbre
Misterio de la Salvación
144
pequeños, que tiene con sus semejantes el ga a Él. Brotan los anauim del terreno pri-
pobre de Yavé fiel a la Ley. vilegiado de la pobreza real y viven de hu-
Sigue la humildad total y sincera ante mildad, señal inequívoca de verdadera fe.42
Dios, unida a una fe y confianza absolutas LA VIRGEN MARIA, ESPERAN-
en el Santo, Piel, Justo y Misericordioso.
En ocasiones, esta fe se traduce en una peti-
ZA SUMA DE LOS POBRES
ción de castigo para los malvados, y esto no El Evangelio nos presenta a algunos anau-
ha de escandalizarnos, ya que las exigencias im: el anciano Simeón, la profetisa Ana,
morales de la época no habían alcanzado la Juan el Bautista...; pero, sobre todo, la Vir-
perfección del Evangelio. Las perspectivas gen María, 43 la cumbre, la expresión más
de recompensa temporal que los hebreos auténtica de las aspiraciones de todos los
suponían., nos ajnidan a comprender tales pobres: «Ella alberga en su alma la po-
plegarias. tencia del deseo de todos los pobres de
El anau se caracteriza, además, por la es- acoger a Dios en la tierra; Ella, la que
peranza de la futura redención del Me- engendra a Cristo, resume la inmensa
sías prometido por Yavé; Mesías humilde, espera, que es la dimensión espiritual de
39
amigo de los pequeños, 40 que anunciará Israel».44 Todo el Antiguo Testamento ha-
a los pobres la buena nueva de la salva- bía sido el largo período de preparación de
ción.41 los pobres, en la humildad y en la disposi-
ción para recibir a Dios. Y con María llega
Entendida de este modo, la «pobreza» no la plenitud, cuando responde libre y espon-
es una virtud como las otras, sino una acti- táneamente:
tud religiosa, un deseo de Dios y una entre-
Misterio de la Salvación
147
«He aquí la esclava del Señor; há- voluntad del Padre y en un constante amor a
gase en mí según tu palabra.»45 los hombres, hasta el sacrificio supremo:
Su «canto de pobreza», el Magníficat, «Porque bien sabéis cuál haya sido
descubre a la mujer «que asimiló profun- la libertad de nuestro Señor Jesucris-
damente el alma de los anauim, y fue su to, el cual, siendo rico, se hizo pobre
expresión más vibrante y más perfecta por vosotros, a fin de que vosotros
en el instante sublime e inesperado de la fueseis ricos por medio de su pobre-
Encarnación.»46 za»49
Escribe San Pablo a los cristianos de Corin-
JESUCRISTO, EL POBRE DE to. La muerte de este Pobre nos redimió y
DIOS desde aquel momento es imprescindible
Al proclamar, en los comienzos de su mi- convertirse, como Él, en pobre para entrar
nisterio, las Bienaventuranzas, Jesucristo en el Reino de los Cielos.
se revela como Mesías de los pobres y con- ACTUALIDAD DEL MENSAJE
sagra la pobreza como medio de ganar el
Reino de Dios: DE LOS POBRES
Es evidente que el cristiano ha de hacerse
«Bienaventurados los pobres de espí-
pobre para seguir a Jesucristo y, en conse-
ritu porque de ellos es el Reino de los
cuencia ha de comprender el grado de per-
Cielos.»47 fección a que elevó Cristo la .espiritualidad
Él no tuvo «donde reclinar la cabeza»,48 de los pobres. Es imposible interpretar lite-
y vivió de pobreza, de sufrimiento y de ralmente las oraciones en que se pedía a
abandono, en una continua aceptación de la Yavé el castigo de los enemigos ante un
Misterio de la Salvación
148
Mesías que dicta un mandamiento nuevo.50 sea una situación cómoda y conforta-
Pero todo cuanto hay de positivo en la his- ble?»51 Incluso muchas veces el cristiano
toria y en la espiritualidad de los anauim, descubre que necesita, como condición
conserva su valor permanente para el cris- irrebatible para seguir a Cristo, renunciar
tiano de hoy, y debe ayudarle a vivir la ver- efectiva y totalmente a los bienes de este
dadera pobreza. mundo.
Imbuido del mensaje de los anauim y ante La actitud del cristiano, en cuanto a su
la imagen de Jesucristo Pobre, el cristiano trato con los pobres, ha de ser fraternal,
no puede aprovecharse jamás de la situa- exigida no sólo porque el hombre ha sido
ción precaria de su prójimo para aumentar creado a imagen y semejanza de Dios, sino
su propio bienestar ni puede utilizar los do- por su fe en el Dios de la misericordia que
nes de Dios para obrar en contra de su Ca- salvó a Israel y que entregó a su Hijo para
ridad. Lejos de dar a la riqueza más valor la salvación del mundo; actitud ésta sin pa-
que el de un simple medio de servicio, y de ternalismos, puesto que sabe el cristiano
convertir al éxito y al progreso temporal en que también él es objeto de misericordia.
ideal de su vida, el cristiano ha de conside- Frente a Dios, su actitud será la humildad,
rar que la pobreza material es el camino de
entrega del alma de Dios, y no podrá ser sabiendo que «todo es don de Dios»52, in-
discípulo de un Dios que se hizo Pobre, cluso su propia respuesta libre al Señor que
aquel que no matice de austeridad toda su le redime:
vida: «¿Quién, sino los hombres que se « ¿Qué cosa tienes tú que no la ha-
dicen cristianos y que rinden culto a yas recibido de Dios? Y si todo lo
Mamón, puede creer que el cristianismo que tienes lo has recibido de Él, ¿de
Misterio de la Salvación
149
CRISTO
«Cumplido que fue el tiempo, envió por Él hecho, y con todo, el mundo
Dios a su Hijo, formado de una mu- no conoció.»2
jer, y sujeto a la Ley, para redimir a
Está en continuidad con la historia de la
los que estaban debajo de la Ley, y a
humanidad: como testimonio, San Lucas
fin de que recibiésemos la adopción
nos facilita la genealogía de Cristo, no sólo
de hijos.»1 desde Abraham, padre del pueblo escogido,
CRISTO, EN CONTINUIDAD DE sino desde Adán, padre del género humano:
LA HISTORIA DE LA SALVA- «Jesús... hijo de David... hijo de
CION Abraham... hijo de Adán...»3
Al empezar el Nuevo Testamento con la Está en continuidad con la historia del
venida de Cristo, se comprueba que está en pueblo de Dios: desde el primer versículo
continuidad con la historia del universo: del Evangelio lo indica San Mateo con las
el Verbo que se ha encarnado es Creador dos articulaciones de la genealogía:
del mundo: «Genealogía de Jesús-Cristo, hijo de
«Por Él fueron hechas todas las co- David, hijo de Abraham.»4
sas; y sin Él no se ha hecho cosa al-
guna de cuantas han sido hechas... Jesús es «hijo de David», el Mesías anun-
En el mundo estaba y el mundo fue ciado. Es «hijo de Abraham», el realiza-
dor de la promesa hecha al Patriarca, según
canta la Virgen al final de su Magníficat:
Misterio de la Salvación 155
por las riquezas de su gracia... para, Fuera de Cristo no puede realizarse absolu-
hacernos conocer el misterio de su tamente nada positivo respecto de la salva-
voluntad, fundada en su mero bene- ción; todos cuantos no le hayan conocido,
plácito, por el cual se propuso el res- no serán salvados sino por su gracia:
taurar en Cristo, cumplidos los tiem- «Sin Mí nada podéis hacer.» 11
pos prescritos, todas las cosas de los
cielos y las de la tierra, por Él mis- También se opera en Cristo —Salvador de
todos los hombres— el restablecimiento
mo.»8 de todos los seres del universo en la ple-
Jesús, cuyo nombre significa «Yavé nos na armonía con Dios.
redime»9, es el Salvador del mundo: no Y toda la espera de la Iglesia está orien-
solamente del pueblo de Israel, sino de to- tada hacia la vuelta de Cristo a la tierra.
dos los hombres, como nos enseña el evan-
gelio de la Samaritana: después de conver- LA PERSONA DE JESUS
sar con ella, permaneció Jesús dos días en El Cristianismo se distingue de las demás
Samaria, con aquellos que eran herejes para religiones por esperar su salvación en una
los judíos y que, al fin del episodio, mani- persona, y ser ésta el Hijo de Dios encarna-
fiestan el valor teológico de sus vivencias: do. Sería una religión desnaturalizada si la
«Y decían a la mujer: Ya no creemos redujésemos a un conjunto doctrinal aun
por lo que tú has dicho: pues noso- elevadísimo, olvidándonos de Quién es la
Verdad y la Vida. Hemos de poner especial
tros mismos le hemos oído, y hemos
cautela en impedir que «las ideas genera-
conocido que Este es verdaderamen-
te el Salvador del mundo.»10
Misterio de la Salvación 157
les sustituyan a la persona de Jesucris- los discípulos ante quien conocen tan gran-
to».12 de y tan asequible; su embeleso al contem-
plarle; su so licitud por obedecer sus efica-
Su proximidad y su infinita dignidad apare- ces palabras; su impresión por la autoridad
cen claramente en el Evangelio. Jesús se con que enseña, y que le distingue de los
muestro muy humano y vive cerquísima escribas; su presentimiento de haber hallado
de sus conciudadanos: es invitado a las bo-
al Mesías, Hijo de Dios, 14 ante el poder
das de Cana, se sienta fatigado junto al po-
zo de Jacob, y pide agua; llora ante el se- con que Él perdona los pecados, cura en sá-
pulcro de Lázaro, su amigo; atiende a las bado y calma al viento y al mar. San Juan
personas, a la Samaritana, al joven rico; también declara la soberana libertad con
muestra delicadezas exquisitas, por ejem- que Cristo acepta y cumple la voluntad de
plo, tras resucitar a la hija de Jairo, viéndo- su Padre, cuando vislumbra el peso de la
los a todos estupefactos, se preocupa Él de traición de Judas y la inminencia de la Pa-
que den de comer a la niña; acoge con sen- sión produce en el corazón del Maestro, que
cillez a cuantos acuden a Él: los ciegos de se conturba al presentir su cercana muerte.
Jericó, los enviados de Juan Bautista, los Desde mucho tiempo atrás, soñaba Jesús
niños que le presentan..., y se digna incluso con la hora crucial para la que había sido
responder a quienes le interrogan para ten- enviado, y sabía quién le habría de entregar;
y el relato de su Pasión, según San Juan,
derle una trampa.13 subraya singularmente la real libertad de
La persona y el comportamiento de Jesús Cristo en su sacrificio. 15 El misterio de su
crea, en sus interlocutores, una sensación persona, propio de Hijo de Dios hecho
de misterio. A lo largo del Evangelio de hombre, se trasluce a través de todos sus
San Marcos, se suceden la admiración de hechos y actitudes.
Misterio de la Salvación
158
Jesús se presenta ante sus discípulos y ante LAS TRES FASES DE MISTERIO
todo el pueblo judío, tan consciente de la DE JESUS
trascendencia y de la santidad de Yavé, co-
mo Mesías, testificando con su acción y con LA ENCARNACIÓN
sus palabras su calidad de Hijo de Dios, Después de haber hablado de la existencia
confesión y testimonio que le llevan a la eterna del Verbo en el Padre y de su obra
muerte:16 creadora, el evangelista emplea precisamen-
te la palabra «carne» y no la palabra
«Nosotros tenemos tina Ley, y según «hombre» para traducir el realismo de la
esta Ley debe morir, porque se ha Encarnación; no pretende designar el cuer-
hecho Hijo de Dios.»17 po en contraposición con el alma, sino que
Resumiendo este tema del mensaje de Jesús escoge una acepción semítica muy genera-
y de la fe de la Iglesia primitiva, escribe lizada referente al hombre, cuya naturaleza
San Juan: es débil y miserable:
«En el principio era el Verbo, y el «Toda carne es heno, y toda su glo-
Verbo estaba con Dios, y el Verbo ria como la flor del prado. Se seca el
era Dios... y el Verbo se hizo carne... heno y la flor cae, así que se dirige
A Dios nadie le ha visto jamás: El contra él el soplo del Señor.»19
Hijo unigénito, existente en el seno Ante el prodigio de la Encarnación, es natu-
del Padre. Él mismo en persona es ral y justo que contemplemos con amor y
quien le ha hecho conocer a los ternura al Niño Jesús recostado en el pese-
hombres.»18 bre de Belén, pero no podemos detenernos
aquí: la fe de un adulto necesita proyectarse
Misterio de la Salvación 159
sobre el misterio del Dios hecho hombre. talmente en nuestra condición humana, lo
Sin dejar de ser Dios, el Hijo unigénito se que demuestra que Dios no desprecia la
ha hecho uno de nosotros: materia que ha creado, que desea salvar
«...y habitó entre nosotros.» por completo al hombre (no sólo su alma,
sino también su cuerpo) y que no invierte
Esta proximidad de Dios es un signo de
ni excluye el orden inicial de la Crea-
su amor y una llamada suya a una vida
ción. Cristo no viene a salvar al hombre li-
de comunión con Él.
berándole de la materia, sino liberándole
A la objeción de que Cristo se mantuvo ale- del pecado. Su gracia se derrama sobre la
jado de nosotros porque no conoció el pe- tierra sin destruir el orden que el Creador
cado20 puede contestarse que la dificultad estableció, antes bien, santificando a todos
es sólo aparente, pues lejos de existir una los hombres y restaurando en toda la crea-
distancia entre Él y nosotros, su santidad in- ción el orden del Plan de Dios. El concepto,
finita le acerca más a quienes redime: «todo cristiano del matrimonio, las manifestacio-
pecado procede de un egoísmo que en- nes concretas de la caridad, la existencia de
cierra el corazón en sí mismo y dismi- una Iglesia visible y la institución sacra-
nuye su potencia de entrega» y, por con- mental, son expresiones diversas de este
siguiente, la infinita santidad de Cristo «le principio tradicional contenido ya en el he-
cho de la Encarnación. Volvemos a palpar
une intensamente a nosotros como her-
el maravilloso optimismo de la Revelación
mano nuestro».21 ante el mundo creado, que encontramos en
A excepción del «pecado y de su colisión la primera página del Génesis («Y vio Dios
con nuestra carne»,22 Cristo participa to- que lo hecho era bueno») y producido
por la fe en la resurrección.
Misterio de la Salvación
160
uno solo, serán muchos constituidos su promesa con sus pecados, celebraba cada
justos.» 27 año la fiesta de la Expiación. En aquel, día,
el Sumo Sacerdote recogía la sangre del sa-
El sacrificio de Cristo es también el sacri- crificio, símbolo de la vida del pueblo; pe-
ficio de la Nueva Alianza entre Dios y netraba en el «Santo de los Santos» y ro-
los hombres. «Mediador de la Nueva ciaba con la sangre el Propiciatorio, plancha
Alianza», 28 Cristo dice: de oro macizo colocada sobre el Arca de la
«Ésta es mi sangre, del Nuevo Tes- Alianza, que era el lugar de la manifesta-
ción de Yavé a Israel. El rito simbolizaba la
tamento, que será derramada por
reconciliación del pueblo con el Señor y la
muchos para remisión de los peca- reanudación de la vida común que el peca-
dos.»29 do había vulnerado. Cuando escribe San
Su sacrificio es la Expiación que libra del Pablo que:
pecado a los hombres y los une vital- «Dios destinó (a Jesucristo) para ser
mente a Dios. Este aspecto de la Pasión lo la víctima de propiciación en virtud
expresa San Pablo en sus epístolas a los he- de su sangre por medio de la fe.»30
breos y romanos, y se entiende recordando
el ritual de la expiación en el sacrificio de la Quiere decir que el sacrificio de Cristo es el
Alianza del Sinaí: el derramamiento de san- sacrificio decisivo de la Expiación, que li-
gre de las víctimas sobre el pueblo y sobre bra del pecado a los hombres y los une a
el altar, que representaba a Dios, significaba Dios de manera vital.
que, en adelante, habrían una vida común Es la Pascua nueva, según confirma San
para Dios y el pueblo. Israel había prometi- Pablo:
do observar la Ley, pero como quebrantaba
Misterio de la Salvación
162
Con su gloriosa resurrección, tras haber do, vivo eternamente, que envía, en cada
ofrecido su vida en la cruz, Jesucristo momento de la historia, el Espíritu Santo
concluye su carrera mesiánica y, situan- que fecunda al mundo.
do su humanidad santísima a la diestra del JESUCRISTO, FUENTE DE GRA-
Padre, con dignidad plena de Señor y de
CIA Y DE VERDAD
Mesías, entra en posesión del Espíritu
Santo y lo derrama sobre el mundo, se- Después de testimoniar el milagro de la En-
gún lo prometió. Después de Pentecostés — carnación, San Juan relaciona Moisés —por
que es, según expresión del Rdo. P. Congar, quien fue entregada la Ley— con Jesús,
portador de la Gracia y de la Verdad:
«la Pascua que dio fruto»—,35 su obra de
Mesías se convierte en la de Señor Santifi- «Porque la Ley fue dada por Moisés,
cador y Asistente continuo de su Iglesia por mas la gracia y la verdad fue traída
medio del Santo Espíritu: por Jesucristo.»37
«Elevado, pues, al cielo, sentado allí Así, Jesucristo sacia las aspiraciones fun-
a la diestra de Dios, y habiendo reci- damentales del hombre en cuanto a la Reli-
bido de su Padre la promesa de en- gión, a su deseo de conocer a Dios y de par-
viar al Espíritu Santo, lo ha derra- ticipar de su vida. Todas las religiones no
mado del modo que estáis viendo y reveladas muestran ingentes esfuerzos por
elevar el conocimiento hasta Dios, y Moi-
oyendo.»36
sés, en el Antiguo Testamento, rogó a Dios
A Él está unido por la gracia el cristiano que le comunicase su nombre y le dejase
desde su bautismo; a Él dirige sus ruegos, a
contemplar su gloria.38 Jesucristo viene a
Él recibe en la Eucaristía: al Señor resucita-
colmar este deseo del hombre, cuya razón
Misterio de la Salvación
164
tro, y que es punto primordial del Cristia- AMOR, y los cristianos serán los únicos
nismo.46 que verdaderamente amen, o cesarán de
— porque descansa sobre un principio ser cristianos».47
nuevo, no solamente el amor de Yavé res- ACTITUD NUESTRA ANTE JE-
catando de Egipto a Israel, sino el amor de SUCRISTO
Jesucristo hasta morir por todos los
Al acabar su Evangelio, San Juan expresa
hombres, lo que constituye el fundamento
en pocas palabras el objeto que se propuso
de la caridad cristiana.
al escribirlo:
— porque Jesucristo lo ha elevado a la
«Otros muchos milagros hizo tam-
mayor perfección en su objeto y en su bién Jesús en presencia de sus discí-
medida. El precepto del Levítico afectaba a
pulos, que no están escritos en este
los israelitas y a los extranjeros que con
libro. Pero éstos se han escrito con el
ellos convivían, pero el precepto de Cristo
es absolutamente universalista y concierne fin de que creáis que Jesús es el Cris-
a todos los hombres. El mandato del Levíti- to, el Hijo de Dios; y para que cre-
co exigía amar al prójimo como a sí mismo, yendo tengáis vida eterna en virtud
pero el mandato de Jesucristo exige amar al de su nombre.»48
prójimo como Él le ha amado, es decir, con La actitud esencial del hombre ante Je-
una intensidad capaz de inmolarnos a noso-
sucristo es la fe, lo que no impugna las re-
tros mismos. Semejante precepto es incom- flexiones precedentes sobre el amor, pues la
patible con la aceptación consciente de una
fe implica una actitud de caridad. Ante
vida mediocre: «El Cristianismo se reveló el Verbo Encarnado, se dividen los que vo-
al mundo antiguo como la Religión del
Misterio de la Salvación 167
luntariamente rehusan creer en Él y los que, «En el mundo tendréis grandes tribu-
mediante la gracia, pero totalmente libres, laciones; pero tened confianza. Yo he
aceptan su testimonio, creen en su persona vencido al mundo.»50
y reciben la vida;
Por último, esta fe implica la aceptación
«Vino a su propia casa, y los suyos
de la Voluntad de Dios, manifestada por
no le recibieron. Pero a todos los que
las palabras y por el mensaje de Jesu-
le recibieron, que son los que creen
cristo, sin lo cual la fe no sería del todo
en su nombre, dioles poder de llegar
sincera: «recibir a Cristo» es adoptar ante
a ser hijos de Dios.»49 Él una actitud religiosa en que se entregan
La fe de que habla Juan es la fe en una totalmente la persona y la vida; según San
persona: Cristo; y esto da idea del lugar Juan y San Pablo, ha de ir acompañada ne-
que ocupa la persona de Cristo en la vida de cesariamente de la caridad. «La verdadera
un cristiano. Esta fe es la acogida que dis- fe, la única auténtica, implica la entrega
pensamos a la palabra de Dios pronun- total de nuestra persona a la Persona de
ciada por su Hijo, de donde se deduce la Jesucristo».
importancia que tiene el conocimiento del LECTURAS
Evangelio para el creyente, y la necesidad
San Juan 1, 1-18.
que éste experimenta de orientar toda su vi- Epístola a los Efesios 1, 3-19.
da espiritual en función del mensaje y del A los Filipenses 2, 6-11.
misterio de Cristo (Encarnación-Pasión- Primera a los Corintios 1, 17-2, 9.
Resurrección). Es una fe saturada, tam- A los Romanos 5, 1-21.
bién, de esperanza: Hechos de los Apóstoles 2, 14-36.
Primera de San Juan 3, 1-2.
Misterio de la Salvación
168
Capítulo Decimosegundo
LA IGLESIA
LA IGLESIA EN LA CONTINUI- «Vosotros, al contrario, sois el linaje
DAD DE LA HISTORIA DE LA escogido, una clase de sacerdotes re-
SALVACION yes, gente santa, pueblo de rescate,
para publicar las grandezas de Aquél
En la continuidad del plan divino de la sal-
que os sacó de las tinieblas a su luz
vación, la Iglesia constituye el pueblo de la
admirable. Vosotros, que antes no
Nueva Alianza, sucesor del pueblo de la erais pueblo, y ahora sois el pueblo
Antigua Alianza. San Pablo no vacila en de Dios: que no habíais alcanzado
considerar a Abraham, padre del pueblo
misericordia y ahora la alcanzas-
elegido, como padre de los cristianos, sean
o no descendientes suyos según la carne: teis.»3
«Siendo vosotros miembros de Cris- Incluso el vocabulario del Nuevo Testa-
to, sois por consiguiente hijos de mento indica la continuidad que existe entre
Abraham y los herederos según la el pueblo de Israel y el pueblo de la Nueva
Alianza. La expresión «Iglesia de Dios» se
promesa.»1 refería, en el Antiguo Testamento, a la
Según la expresión del Apóstol, el pueblo asamblea (en el griego ekklesia) de los is-
cristiano es el «Israel de Dios» 2 y, al diri- raelitas reunidos por Moisés, por orden de
girse a las comunidades cristianas en la Yavé; y cuando se hablaba del «día de la
terminología del Antiguo Testamento, es- Asamblea», designaban el día en que ha-
cribe San Pedro:
bían recibido, reunidos, la Ley del Sinaí.4
Misterio de la Salvación
172
Cuando San Pablo habla de la «Iglesia de escogido ni que deba asimilarlos par-
Dios en Corinto», o simplemente de la cialmente».5 La elección de Israel como
«Iglesia» en las epístolas de su cautiverio, depositario de los promesas y de la Revela-
utiliza expresiones que se referían a Israel, ción iba -orientada hacia Cristo y hacia la
dedicándolas a la comunidad cristiana e in- Iglesia, y su carácter particular probaba que
dicando, de este modo, que ésta constituye era provisional y preparatorio -de una reali-
el nuevo pueblo de Dios. Cuando Jesucristo zación más universal y perfecta.
habla de su Iglesia es, seguramente, para
distinguirla del pueblo de la Antigua Alian-
La Iglesia no está ligada a un pueblo
za, y para mostrar al mismo tiempo que el determinado, sino que es universal: «En
pueblo del Nuevo Testamento sucede al an- lugar de ser prerrogativa de un grupo
terior en la historia de la salivación. humano por ejemplo, el antiguo pueblo
de Dios— los trasciende a todos sin ex-
A este respecto, hay que decir de la Iglesia
lo mismo qué de Ja obra de Cristo: que está, cepción alguna»:6
al mismo tiempo, en continuidad y dis- «Ya no hay distinción de judío ni
continuidad con el Antiguo Testamento. griego, ni de siervo, ni libre, ni tam-
Recuérdese que Cristo dio cumplimiento a poco de hombre, ni mujer. Porque
la Ley, pero con una realidad muy superior todos vosotros sois una cosa en Jesu-
a la profetizada. La Iglesia es el pueblo de
cristo.»7
la Nueva Alianza, prefigurado histórica-
mente por el pueblo del Antiguo Testamen- Las especiales estructuras de la Ley han
to; pero esto no quiere decir que «haya he- desaparecido porque no tienen razón de ser
redado los estatutos del antiguo pueblo ante una realidad más perfecta, y esto solu-
cionó el conflicto existente entre judíos y
Misterio de la Salvación 173
verdadera viña que recibe la vida por su dor que Cristo, «Cabeza», comunica a toda
unión con Cristo; en su plática después de la Iglesia:
la Santa Cena, se presenta Jesús como la
única vid a la cual es necesario adherirse «Siguiendo la verdad con caridad, en
para producir fruto: todo vayamos creciendo en Cristo,
que es nuestra Cabeza, y de quien
«Yo soy la verdadera vid... Todo
todo el cuerpo trabado y conexo en-
sarmiento que en Mí no lleva fruto,
tre sí recibe, por todos los vasos y
será cortado; y a todo aquél que die-
conductos de comunicación, según la
re fruto (mi Padre) le podará para
medida correspondiente a cada
que dé más fruto... Permaneced en
miembro, el aumento propio del
Mí, que Yo permaneceré en vosotros.
cuerpo, para su perfección mediante
Al modo que al sarmiento no puede
de suyo producir fruto si no está uni- la caridad.»19
do con la vid, así tampoco vosotros, Al tratar de la Iglesia, como Esposa de Cris-
si no estáis unidos conmigo, y Yo con to, subraya la unión y la sumisión del amor
él, ése da mucho fruto, porque sin Mí de la Iglesia hacia Aquel que, además de ser
su Cabeza, es Salvador de todo el Cuerpo
nada podéis hacer.»17
místico.20
Cuando trata San Pablo de la Iglesia como
Cuerpo místico de Cristo, insiste en dos Esta íntima unión de Cristo y su Iglesia
puntos: la solidaridad entre los cristianos y ayuda a comprender el lugar que la misma
su unión con Cristo, 18 y el influjo vivifica- ocupa en el plan de Dios: la Iglesia se en-
cuentra incipiente ya en la Encarna-
ción, en el misterio de Dios hecho hombre,
Misterio de la Salvación
176
que pasa a formar parte de la Historia para tamento, profetizaba la venida del Espíritu
salvar a los hombres. Santo.23 Jesús la anunció después de la
Esta unión de la Iglesia con el Verbo En- Santa Cena y también antes de la Ascen-
carnado; la predicación del Evangelio; su sión:
insertación entre los libros inspirados que «Juan bautizó con agua, mas voso-
forman el Nuevo Testamento; los Sacra- tros habéis de ser bautizados en el
mentos, signos sensibles y eficaces de la
Espíritu Santo dentro de pocos
Gracia de Cristo («el bautismo de agua
días.»24
con la palabra de vida»,21 la constitución
de la liturgia alrededor de la «fracción del Una vez ascendido a la diestra del Padre,
después de su muerte y su Resurrección, Je-
pan»,22 la institución de los apóstoles y je- sús termina su obra mesiánica enviando el
rarquías de la Iglesia, semejante a las de to- Espíritu prometido sobre la Iglesia el día de
das las agrupaciones humanas..., todo esto, Pentecostés; este misterio, plenitud de la
lejos de reducir la Iglesia a una sociedad Pascua, continuará hasta la consumación de
puramente humana, hace resaltar el lugar los siglos. Es el último misterio cristológi-
que la misma ocupa en la prolongación de co, hasta la segunda venida de Cristo. La
la Encarnación. Iglesia recibe solemnemente el Espíritu
EL ESPIRITU SANTO Y LA Santo en una teofanía que es, a la vez, su
IGLESIA «bautismo», el don de su Ley interior y su
vocación misionera. Esta comunicación del
En su discurso de Pentecostés, San Pedro Espíritu es definitiva para su condición reli-
hace referencia a un pasaje de Joel que, giosa, llenándola de luz, de vida y de fuer-
como otros muchos textos del Antiguo Tes- za.
Misterio de la Salvación 177
tra a fondo los corazones, conoce ciones eclesiásticas, pues unos y otras son
bien qué es lo que desea el espíritu; dones del Espíritu Santo.
el cual no pide nada por los santos, Cristo envió el Espíritu sobre la Iglesia
que no sea según Dios.» concreta que Él había fundado. Ahora bien:
Conjuntamente con el Padre y el Hijo, el jamás habremos de suponer que exista an-
Espíritu reparte los dones espirituales y las tagonismo con lo sustancial del mensaje de
vocaciones en la Iglesia: Cristo o con lo institucional de su Iglesia.
«Si está actuando verdaderamente el
«Hay, si, diversidad de dones espiri-
Espíritu Santo y no hay que valorizar de
tuales, pero el Espíritu es uno mis-
forma excesiva o jurídica la institución
mo... Mas todas estas cosas las causa
eclesiástica para no caer en el error de
el mismo indivisible Espíritu, repar-
dejar el Espíritu en segundo término,
tiéndolas a cada uno según quie-
podría surgir el peligro de esperarlo to-
re.»29 do directamente del Espíritu Santo, omi-
A pesar de la interpretación corriente de la tiendo la acción positiva de la Institu-
palabra «carisma», se advierte que puede ción del Señor, cuya misión es precisa-
significar, además de dones místicos o ex- mente actuar en nosotros por medio del
traordinarios, ministerios que no presentan mismo Espíritu».31
un carácter excepcional (apóstoles, pasto-
res, doctores, don de asistencia, de go- El Espíritu Santo sostiene a la Iglesia en
bierno, etc., según las epístolas de San Pa- su testimonio de Cristo, según predijo Je-
sús a los apóstoles antes de salir de este
blo).30 Los carismas no se oponen a las un-
mundo:
Misterio de la Salvación 179
«Recibiréis, sí, la virtud del Espíritu se interrogó a una estudiante china sobre la
Santo que descenderá sobre vosotros, razón de su fe y respondió: «Nuestra or-
y me serviréis de testigos en Jerusa- ganización secreta es el Espíritu Santo.
lén, y en toda la Judea, y Samaria, y En Manchuria, en África, en América,
hasta el cabo del mundo.»32 en Europa y aquí, por todas partes, los
católicos creen y afirman lo mismo,
En los Hechos de los Apóstoles se revela a
porque es el mismo Espíritu quien habi-
cada instante el dinamismo misionero que
el Espíritu comunica a la Iglesia y la fuerza ta en nuestros corazones y habla por
que le otorga en la persecución, tal como nuestra boca. Él me está inspirando lo
aseguró Jesús: que estoy respondiendo, que será idénti-
co a lo que todos los católicos del mun-
«Cuando os hicieren comparecer (a
do contestarán.»
los tribunales) no os dé cuidado el
cómo o lo que habéis de hablar, por- MISION DE LA IGLESIA
que os será dado en aquella misma La misión de la Iglesia es prolongar la obra
hora lo que hayáis de decir, pues que de Cristo, venido al mundo para ser Verdad
no sois vosotros quien habla enton- y Vida: incorporar progresivamente a la
ces, sino el Espíritu de vuestro Pa- humanidad a Cristo resucitado, comunicán-
dre, el cual habla por vosotros.»33 dole esa vida y esa verdad de que es deposi-
taría. No las comunica como realidades ex-
Hoy día sigue el Espíritu suscitando en la teriores, sino que, por el Cuerpo de Cristo,
Iglesia misioneros y apóstoles y sostenien- es el lugar preciso en donde se realiza la
do a los cristianos para que den testimonio comunión con Él.
en todas las circunstancias. Recientemente
Misterio de la Salvación
180
el mundo después de veinte siglos de cris- zarse por corresponder con fe y con caridad
tianismo, es natural y legítimo, siempre y a la llamada que recibió para trabajar en:
cuando se tenga en cuenta que la causa, en «La perfección de los santos en las
las mismas proporciones, ha sido el pecado funciones de su ministerio, en la edi-
y la omisión personal de cada cristiano. No
ficación del cuerpo de Cristo, hasta
deben olvidarse las condiciones concretas
que arribemos todos a la unidad de
en que se desenvuelve la vida del cristiano
ni tampoco que el combate espiritual vuelve una misma fe, y de un mismo cono-
cimiento del Hijo de Dios, al estado
a librarse en cada hombre.47
de un varón perfecto, a la medida de
La Iglesia no es una mera herencia del pa- la edad perfecta, según la cual Cristo
sado, sino una realidad actual, viviente, se ha de formar místicamente en no-
dinámica, en calidad de cuerpo de Cristo sotros.»50
que crece y se desarrolla. El que se incorpo-
ra a ella mediante el bautismo no puede La orientación escatológica de la Iglesia no
permanecer inactivo, porque al pertenecer a hace del cristiano un extraño entre los hom-
bres; porque si bien la Iglesia, según afirma
ese cuerpo que se nutre «de la caridad»,48
San Juan, no es de este mundo (tomando
al formar parte de ese pueblo de Dios en
la palabra mundo en contraposición a
marcha hacia la Nueva Tierra Pro-metida,49 Dios), está enclavada en él:
queda comprometido en esa edificación y
en esa marcha y tiene su medida de respon- «Yo les he comunicado tu doctrina, y
sabilidad. Estando en la comunidad fraterna el mundo los ha aborrecido, porque
de los que viven en Cristo, habrá de esfor- no son del mundo, así como tampoco
Yo soy del mundo. No te pido que los
Misterio de la Salvación 185
saques del mundo, sino que los pre- ACTITUD DEL CRISTIANO EN
serves del mal.»51 LA IGLESIA
El Reino de Cristo no pertenece a este La primera actitud del cristiano en presen-
mundo, pero no puede en modo alguno de- cia del misterio de la Iglesia ha de ser la fe.
sinteresarse de la comunidad humana quien La Iglesia es el ámbito que Dios ha escogi-
pertenece a la Iglesia. El orden establecido do para mostrar su fidelidad a las promesas
por Dios en la Creación, la intención divina de salvación y donde la humanidad entera
de restaurar todas las cosas en Jesucristo y encuentra a Cristo. No concierne al cris-
la caridad que se exige del cristiano, obli- tiano el decidir los medios por los que pue-
gan a éste, manteniéndose fiel al Evangelio, da Dios realizar sus designios salvíficos,
a cumplir su misión como hombre con sino que sólo le atañe entrar libremente en
cuanto comporta de deberes cívicos, socia- el Plan de Dios. Lejos de conformarse con
les y familiares. La esperanza de la Patria una visión superficial, y por tanto inexacta,
celestial no ha de arrancar al cristiano del de la Iglesia, el cristiano ha de esforzarse
mundo en que Dios lo ha colocado. Cuanto por conocerla en su interior, a través de la
más dignamente lleve su nombre de «cris- Revelación y del magisterio de la Jerarquía,
tiano», tanto más útil será el hombre a la concediendo una importancia primordial a
comunidad humana.52 El slogan «la reli- la unidad y a la vida de la fe. Así obedece a
gión es el opio del pueblo» es producto de Cristo, por medio de la obediencia a la Je-
un total desconocimiento de la caridad y del rarquía, y puede rezar, con Newman: «Haz,
Cristianismo. Señor, que yo no me olvide nunca de
que Tú estableciste en la tierra un Reino
que te pertenece; que la Iglesia es obra
Misterio de la Salvación
186
Tuya..., que cuando Ella habla, eres Tú den inducirle a juzgar a la iglesia a lo fari-
quien hablas..., que ante la flaqueza de seo, por lo exterior, sino a sufrir con ella.
tus representantes humanos, no me ol- «Mide tu vinculación a la Iglesia en la
vide de que eres Tú quien habla y obra medida en que te afecte todo cuanto se
por medio de ellos».53 refiera a Ella. No temas el sufrimiento,
Con esta actitud de fe, el cristiano adquiere sino el alejamiento. Jamás te apartes de
el sentido de su pertenencia a la Iglesia. Ella. Sufrir por la Iglesia no tiene senti-
Consciente de su calidad de miembro de esa do: has de sufrir en la Iglesia.»54 El cris-
comunidad fraterna, no puede sentirse ais- tiano conoce la fragilidad de la condición
lado, sino solidarizado con todos sus her- humana, y no puede escandalizarse por las
manos en Jesucristo. La liturgia, especial- faltas o los fracasos que advierta, que sirven
mente el Santo Sacrifiicio, le ayuda a ven- de acicate para una fidelidad más exacta y
cer el individualismo y a expresar con sus para una caridad más fraternal. Un estu-
gestos y su actitud la «comunión de los diante chino reaccionó con estas palabras
santos». Debe interesarse por la acción y ante la claudicación en la fe de una compa-
por la vida de la Iglesia en el mundo, para ñera hecha prisionera: «Os habéis apode-
poder sentir su parte de responsabilidad en rado del corazón de nuestra hermana, y
el Mensaje de Salvación.; de esta forma, no esto nos hace sufrir; pero no penséis
buscará en el apostolado un éxito personal, que nos desalienta. Orando a Cristo en
sino la realización de la tarea al servicio de el fondo de nuestro corazón afligido,
la edificación del Cuerpo de Cristo. Las de- hemos descubierto nuestra propia debi-
ficiencias de sus hermanos en la fe no pue- lidad. Nuestra hermana ha claudicado
después de resistir más de un año inco-
Misterio de la Salvación 187
dad humilde en Cristo, una alegría intensa 10. Mt, 16, 18.
11. Mt, 28, 20.
por cumplir la voluntad divina, y un agra-
12. Mt., 16, 18.
decimiento fervoroso al Padre por haberle 13. Hechos, 19, 5.
introducido en el Reino de su Hijo. 14. 1º Cor., 1, 2.
15. Jn., 3, 5 (bautismo) y 55 y sig. (Eucaristía).
LECTURAS
San Mateo, 16, 13-20; 28, 16-20.
Misterio de la Salvación
188
16. Is., 5, 1-7; símbolo que utilizan muchos profe- 36. J. DANIELOU, Essai sur le mystère de l'histoire, pág.
tas, e incluso hoy, en algunas monedas del Es- 275.
tado de Israel. 37. 1.» Cor., 9, 16.
17. Jn., 15, 1-5. 38. 2." Tim., 4, 1-2.
18. 1." Cor., 12, 12 y sig. 39. Efes., 4, 5.
19. Efes., 4, 15-16. 40. Gal., 1, 8.
20. Efes., 5, 22-23. 41. Jn., 17, 23.
21. Efes., 5. 26. 42. Mt., 28, 19-20.
22. Hechos, 2, 42. 43. 1.« Cor., 12, 13.
23. Hechos, 2 16-21; Joel, 3, 1-5. 44. 1.» Cor., 10, 17.
24. Hechos, 1, 5. 45. Es muy conveniente demostrar cómo el Papa
25. Jn., 14, 25-26. y los Obispos son los sucesores legítimos de
26. La predicción de la destrucción del templo y Pedro y los apóstoles. Estudíense los textos
su reedificación en tres días, Jn., 2, 22; la en- referentes a la Promesa de Jesús a Pedro (Mt.,
trada mesiánica en Jerusalén, Jn., 12 16. 16, 13-20), supremacía (Luc, 22, 31; Jn. 21
27. 1º Cor., 3, 16. 15-17) la «lección de los Apóstoles por Jesús
28. Gai., 4, 6; Rom., 26-27. y la misión que les confía, su promesa de asis-
29. I.» Cor., 12, 4, 11. tir a la Iglesia con el Espíritu Santo... La for-
30. Cor., 12, 8-10, 28-30; Rom., 12, 6-8; Efes. 4 ma en que ha vivido la Iglesia la misma insti-
11-12. tución jerárquica que le dio Cristo; importan-
31. Y. CONGAR, La Pentecôte, Chartress, 1956, pág. cia de Pedro y de los Apóstoles en el libro de
48. los Hechos y en las epístolas; la transforma-
32. Hechos, 1 8. ción de las comunidades que estaban dirigidas
33. Mt., 10, 19-20. por un consejo de ancianos supervisado por
34. Me, 16, 15. los Apóstoles, en comunidades gobernadas
35. Efes., 3, 8-11. por un obispo regente, como por ejemplo, en
la época de San Ignacio de Antioquía. (Las
Misterio de la Salvación 189
epístolas pastorales reflejan este período de 52. El sacrificio de algunos compromisos tempo-
transición correspondiente a los últimos años rales en las vocaciones sacerdotales o con-
de vida de los Apóstoles.) Por último, hay que templativas se justifica incluso desde el sim-
demostrar que la Iglesia, asistida por el Espíri- ple punto de vista de la comunidad humana,
tu Santo, comprendió desde el principio que porque le aportan el testimonio vivo de las
las promesas dirigidas por Jesucristo directa- realidades espirituales, testimonio que necesi-
mente a Pedro y a los discípulos, se prolonga- ta, no sólo para ayudar a los que la componen
ban más allá de la vida terrena y establecían, a no limitar sus aspiraciones a la ciudad terre-
en sus pastores, hasta el fin de los siglos. No nal, sino también para darles a ellos y a sus
podemos anotar aquí la exposición teológica compromisos temporales un equilibrio com-
que sería necesaria: véanse los tratados teoló- pletamente humano.
gicos sobre la Iglesia, y especialmente Le mystè- 53. Oración citada en H. LUBAC, Méditation sur
re de l'Eglise, del P. LrÉGÉ, en Initiation théologique, l'Eglise, página 226, n.° 81.
tomo 4.°, 2.' ed. Paris, 1956. Consúltese tam- 54. P. A LESORT, Ie vent soufjle où il veut, París,
bién para estudiar con precisión el fundamen- 1954, página 285.
to, el objeto, las condiciones y la extensión de 55. Ayudada por la oración y la caridad de sus
la infalibilidad de la Iglesia. compañe ros, esta estudiante volvió en segui-
46. Y. CONGAR, Esquisses du Mystère de l'Eglise, Paris, da a encontrar la fe.
2.éd., 1953, pág. 8.
47. Respecto a la condición del cristiano justifi-
cado véase la epístola a los Romanos, 6.
48. Efes., 4, 16.
49. Evocación del carácter peregrino de la Iglesia
en la 1.» Cor., 10, 1-11.
50. Ef., 4, 12-13.
51. Jn., 17, 14-15.
Capítulo Decimotercero
Misterio de la Salvación
192
Cuando San Pablo escribe a los Efesios so- Cristo y a su Iglesia para salvarse. Vo-
bre la terminación del Plan de Dios, con- luntad expresa del Señor es que la Iglesia se
templa a la Iglesia unida a su Cabeza en la esfuerce en incorporar visiblemente al ma-
Gloria, y compuesta por todos los miem- yor número posible de hombres; sólo puede
bros salvados. Nadie se salva sin formar aceptarse la participación invisible en la
parte de la Iglesia de algún modo; y en el Iglesia visible, ante la ignorancia sin solu-
caso de los paganos, puede haber, implícita ción que mantiene alejadas de Cristo a las
una disposición interior hacia el orden y los almas cuyas condiciones de salvación son
medios de salvación implantados por Dios evidentemente anormales.
y en relación con la gracia emanada de La Biblia no deja lugar a dudas ante lo im-
Cristo y de su Iglesia. No hay que suponer prescindible que es la fe para salvarse. No
que baste esa pertenencia implícita como basta con conocer racionalmente a Dios ni
norma general o como condición suficiente con admitir desde un punto de vista filosó-
en todos los casos. La afirmación de Cristo fico que Dios existe:
es contundente:
«Sin fe es imposible agradar a
«Id por todo el mundo; predicad el
Evangelio a todas las criaturas. El Dios.»6
que creyere y se bautizare, se salva- Según los casos, podrá expresarse la fe de
rá; pero el que no creyere, será con- forma más o menos explícita, o permanece-
denado.»5 rá en su estado inicial, o será elevada a un
grado más perfecto: pero siempre se exigirá
Todo hombre que ha recibido verdade- la misma disposición religiosa esencial para
ramente la luz del Evangelio, necesita poderse salvar eternamente.
pertenecer explícita y visiblemente a
Misterio de la Salvación
196
Como hemos dicho, la actitud del hombre hombres civilizados que viven en ambientes
que quiera salvarse es la fe, la adhesión ateos podrían expresar menos explícitamen-
religiosa a la revelación divina, al mensaje te estos dos artículos de fe; se preguntan si
que Dios le envía por medio de todas sus esta fe en embrión no se encontrará ya en el
obras; actitud que implica la disposición a hombre que, sostenido por la gracia, escoge
recibir la Palabra de Dios en el caso de es- vivir su vida renunciando al egoísmo y
cucharla o conocerla: dando una primacía constante a valores mo-
rales que para él son un absoluto, algo sa-
«El que se llega a Dios, debe creer
grado: especialmente una conducta auténti-
que Dios existe, y que es remunera-
camente fraternal con su prójimo. Si el
dor de los que le buscan.»9 hombre obedece y es fiel a esos valores mo-
Dios existe y cuida de la salvación de los rales, es evidente que, aunque no tenga ple-
hombres: «Para cualquier hombre, en na conciencia y no se aperciba de que va
cualesquiera tiempo o lugar que viva, la conducido por el Espíritu Santo, obedece y
fe en estos dos artículos es absolutamen- es fiel a Aquel Ser que es «el Absoluto»,
Dios, fundamento y fin de toda vida moral.
te necesaria para salvarse.» 10 Surge aquí En este comportamiento voluntario y per-
una pregunta interesante: estos dos artículos sonal del hombre existiría, de modo inicial
de fe —que serían insuficientes para un pero vital, una cierta actitud de fe que tal
cristiano—, ¿habrán de ser adoptados explí- vez llegaría un día a ser más explícita. A
citamente por todos los hombres que viven condición de discernir bien que no se trata
fuera de la Revelación positiva? Los teólo- de una actitud de alta elevación moral que
gos, pasmados por las condiciones religio- tampoco se trata de una forma de altruis-
sas del mundo moderno, se preguntan si los
mo,11 y a condición, por otra parte, de dar a
Misterio de la Salvación
198
esta opinión su carácter investigador y no que sinceramente adopte esa actitud de fe,
despojarla de las aclaraciones y matices que será fiel a esa voluntad que cree de Dios,
dictan los teólogos,12 esta explicación que que será, en definitiva, la ley natural inscri-
precede, abre un horizonte amplísimo al es- ta en su corazón:
tudio y reflexión teológicos, e infunde un «Cuando los gentiles, que no tienen
optimismo sano ante el problema de la sal- ley escrita, hacen por razón natural
vación de los paganos. lo que manda la Ley, esos tales, no,
La fe del no evangelizado se traduce gene- teniendo ley, son para sí mismos ley
ralmente por la religión que practica, in- viva y ellos hacen ver que lo que la
cluida entre las religiones no reveladas: Ley ordena está escrito en sus cora-
éstas representan una sustitución del Evan- zones, como lo atestigua su propia
gelio, y fueron la vía normal de la actitud conciencia y las diferentes reflexio-
religiosa hasta la venida de Cristo; y a pesar nes que allá en su interior ya los
de sus titubeos y de sus imperfecciones, es- acusan, ya los defienden...»13
tas religiones son, por el elemento de ver-
dad que expresan y por el sostén social que Ésta es la condición religiosa del no evan-
representan, una eficaz ayuda para la vida gelizado, haya vivido antes de Cristo o haya
de la fe. vivido después con obstáculos, involunta-
rios por su parte, que no le hayan permitido
La fe del no evangelizado repercute en su la evangelización. Condición que, si bien no
propia vida; como es el reconocimiento re- es desesperada, resulta precaria y evidente-
ligioso de Dios y de su Providencia salvífi- mente menos favorable para la salvación
ca, y como implica confianza y propósito de que la fe expresa en Cristo y la pertenencia
obrar según la voluntad divina, el hombre visible a la Iglesia, en el seno de la cual ha-
Misterio de la Salvación 199
simboliza el sacrificio perfecto y definitivo salvarse con una fe implícita en Cristo, con
de Cristo; la misma Ley es una pedagogía mayor motivo se salvará el judío que cree
que conduce a Él. 14 Y por último, la gracia sinceramente con toda su alma que debe se-
que justifica a los israelitas y les da fuerzas guir su religión, y cuya fe va orientada ha-
para ser fieles a las prescripciones de la cia el Mesías que, por una ignorancia invo-
Ley, les viene concedida en función de los luntaria, no llegó a reconocer. Y aunque,
méritos del Redentor anunciado. desde la predicación y expansión del Evan-
gelio, la religión judaica no es la vía normal
DESPUÉS DE LA VENIDA DE CRISTO
que conduce a Dios, es, no obstante, más
«Vino a su propia casa y los suyos no perfecta que la del pagano que vive alejado
le recibieron.» 15 de toda revelación positiva. La fe del israe-
lita está en relación más directa con Cristo,
Israel, el pueblo elegido de Dios, no recibió
esperanza de Israel, que la fe del pagano.
a Cristo y no entró en la Iglesia, y se halla,
como pueblo, fuera del camino de la salva- En realidad, la incredulidad de Israel no
ción. presenta dificultad más que contemplando
la posición histórica del pueblo hebreo en el
La incredulidad de Israel no plantea ningún
Plan de Dios. A este punto de vista se refie-
problema complejo para la reflexión teoló-
re San Pablo en los capítulos ix-xi de su
gica, estudiándolo desde el plano de la per-
epístola a los Romanos, lo cual no hay que
sona; en efecto, el judío que rechaza volun-
olvidar para no interpretar erróneamente el
tariamente el Evangelio, se coloca en la po-
aludido texto. El Apóstol mantuve discu-
sición del que, habiéndolo recibido, lo
siones sobre este problema en los medios
rehúsa con pleno conocimiento de su acto.
judíos y judío-cristianos. Examinando suce-
Por otra parte, si el no evangelizado puede
sivamente la conducta de Dios y la de Is-
Misterio de la Salvación 201
rael, Pablo demuestra que el pueblo es cul- las rodillas delante de Baal. De la
pable16 de su incredulidad, y que no se misma suerte, pues, se han salvado
puede acusar a Dios de injusticia, porque ha en este tiempo algunos pocos que
sido eternamente fiel a sus promesas. Luego han sido reservados por Dios según
expresa el Apóstol una visión de conjunto la elección de su gracia.»17
sobre el plan divino y afirma que Dios no
Además, la incredulidad de Israel ha sido
rechazó a su pueblo, y que, según una ley
de acción divina registrada en el Antiguo
permitida para que los paganos puedan
acceder más fácilmente al Evangelio:
Testamento, existe un residuo o grupo de
israelitas, fieles y dóciles al Evangelio: «Su caída ha venido a ser una oca-
sión de salud para los gentiles, a fin
«Según esto, digo yo ahora: ¿Por
ventura ha desechado Dios a su pue- de que el ejemplo de los gentiles les
excite la emulación para imitar su
blo? No, por cierto. Porque yo mis-
mo soy israelita del linaje de fe...»18
Abraham y de la tribu de Benjamín. La primera persecución evitó, de hecho, que
No ha desechado Dios al pueblo su- la primera comunidad cristiana se encerrase
yo, al cual conoció en su presencia. en sí misma, y aceleró la proclamación del
¿No sabéis vosotros lo que de Elias Evangelio fuera de Jerusalén y más allá de
refiere la Escritura: de qué manera Palestina;19 la impugnación de los judíos
dirige él a Dios sus quejas contra Is- hizo que San Pablo se desplazase a numero-
rael...? Mas qué le responde el sas ciudades y regiones para anunciar la Pa-
oráculo divino? Heme reservado sie- labra de Dios a todos los gentiles.20 La pre-
te mil hombres que no han doblado
Misterio de la Salvación
202
gamos en razonar demasiado sobre las del Señor? O ¿quién fue su conseje-
cantidades reales que implican estas ex- ro? O quién es el que le dio a Él pri-
presiones de masa, de plenitud y de tota- mero alguna cosa, para que pretenda
lidad. San Pablo utiliza estas locuciones ser por ello recompensado? Todas
de número con un sentido distinto del las cosas son de Él, y todas son por
nuestro. En Principio, hemos de inter- Él, y todas existen en Él: a Él sea la
pretar que Dios salvará a todo Israel. gloria por siempre jamás. Amén.»23
Sólo Él decidirá cuál será el número de
judíos que visiblemente se unirán a la ACTITUDES CRISTIANAS
Iglesia en el curso de los siglos».22 RESPECTO DE LOS JUDÍOS
Antes de abordar el problema de la incredu-
La división del plan divino según la cual,
lidad de Israel, San Pablo enumera compla-
después de incorporarse todas las naciones
cido los privilegios .religiosos del pueblo
a la Iglesia, dejará Israel su infidelidad y
escogido.
realizará su conversión con inmenso prove-
cho sobrenatural, produce en Pablo un sen-
timiento de admiración contemplativa ante «de quienes desciende Cristo según
la sabiduría misericordiosa de Dios:
la carne»,24
« ¡Oh profundidad de los tesoros de
y después de manifestar que la incredulidad
la sabiduría y de la ciencia de Dios: de Israel ha sido permitida para la conver-
cuan incomprensibles son sus juicios, sión de los paganos, invita a los cristianos
cuan insondables sus caminos! Por- provenientes del paganismo a que sean hu-
que, quién ha conocido los designios mildes:
Misterio de la Salvación
204
«Si las primicias de los judíos son adoptar un racismo inconfesable, dis-
santas, esto es, los patriarcas, lo es frazado con pretextos religiosos; recuer-
también la masa o el cuerpo de la de que todos los hombres han sido rescata-
nación, y si es santa la raíz, también dos por Cristo y que todos son llamados-a
las ramas, y si algunas de las ramas salvarse; y observe con todos, «judíos y
han sido cortadas, y si tú ¡oh pueblo griegos», la misma conducta fraternal y
gentil! que no eres más que un ace- la misma caridad. El cristiano, conocedor
buche, has sido injertado en lugar de del designio divino sobre Israel, ha de an-
ellos, y hecho participante de la sa- helar sinceramente su entrada en la Iglesia
via que sube de la raíz del olivo, no y debe contribuir en cuanto de él depende,
tienes de qué gloriarte contra las a prepararla:
ramas. Y si te glorías, sábate que no «Es cierto, hermanos, que siento en
sustentas tú a la raíz sino a la raíz a mi corazón un singular afecto a Is-
ti.»25 rael, y pido muy de veras a Dios su
Jamás puede ser despreciativa la actitud salvación.» 26
del cristiano ante los judíos que no han RESPECTO A LOS NO EVANGELIZADOS
abrazado el cristianismo: ha de respetar en
El cristiano no adoptará ante los paganos
ellos a los antiguos patriarcas que constitu-
yeron el pueblo de la promesa; y ha de re-
una actitud demasiado cerrada, pues Je-
sucristo murió por todos los hombres; la ac-
conocer que, por gracia de Dios, ha encon-
ción de su gracia se extiende más allá del
trado él a Jesucristo, por lo cual es absurdo
sentirse orgulloso ante aquellos que todavía círculo de los bautizados;27 y los que no
le buscan. Vigile el cristiano para no pertenecen de forma visible a la Iglesia qui-
Misterio de la Salvación 205
zás estén incorporados al Cuerpo Místico libre y gustosamente a los impulsos ín-
del Redentor «por un especial deseo y por timos de la gracia divina y a esforzarse
un anhelo inconsciente».28 Debe por salir de un estado en el cual nadie
desechar todo apologético mal interpretado, puede estar seguro de su salvación eter-
que le conduzca a despreciar los valores na; pues aunque por un especial deseo y
reales de las religiones no cristianas para por un anhelo inconsciente están incor-
demostrar la grandeza del Cristianismo.29 porados (los paganos) al Cuerpo Místico
del Redentor, están privados de tantos y
El espíritu abierto no ha de desembocar
tan grandes auxilios y favores celestia-
en una especie de indiferentismo en ma-
les, que sólo pueden disfrutarse en la
teria religiosa. La Verdad recibida de Cris-
to es un tesoro insustituible, inaccesible Iglesia católica»30.
fuera de la Revelación, y está destinada a Como miembro de esta Iglesia que por la
todos los hombres. Salvo en circunstancias voluntad de su «Cabeza» es esencialmente
excepcionales, el pertenecer a Cristo y a la misionera, y sabedor de que los hombres
Iglesia por la fe y por el bautismo, es nece- hallarán la plenitud de las condiciones para
sario para la salvación desde la promulga- salvarse sólo en comunión visible con Ella,
ción del Evangelio, y aquellos que cono- el cristiano, enfrentado con la descristiani-
ciendo la voluntad de Dios y el pensamien- zación de tantos países y con la existencia
to de la Iglesia rechazasen esta incorpora- de multitud de paganos, deberá sentirse
ción, rechazarían al mismo tiempo su salva- vivamente consciente de su obligación mi-
ción. Los demás caminos son imperfectos y sionera y de la imposibilidad de vivir una
precarios. El cristiano debe escuchar la in- vida cristiana sin dimensiones apostólicas.
vitación del Soberano Pontífice «a ceder Al contemplar un mundo que desconoce a
Misterio de la Salvación
206
do entre lo que nosotros creemos en realidad y 22. Mons. CERFAUX, Une lecture de l'épitre aux
las ideas con que nos expresamos a nosotros Romains, París, 1947, págs. 105.
mismos lo que creemos y por las que nos hace- 23. Rom., 11, 33-36.
mos conscientes de nuestra creencia.» El análi- 24. Rom., 9, 4-5.
sis de Santo Tomás sobre la primera opción 25. Rom., 11, 17-18.
moral del hombre (I-II,89,6) ayuda a com- 26. Rom., 10, 1.
prender mejor el problema precedente. 27. El papa Alejandro VIII condenó la siguiente
13. Rom., 2, 14-15. proposición: «Los paganos, los judíos, los heré-
14. Gal., 3, 24. ticos y otros hombres semejantes no reciben
15. Jn., 1, 11. ninguna influencia de Jesucristo» (véase Lu-
16. Rom., 10, 14-21. mière et Vie, n.° 18, pág. 49).
17. Rom., 11, 1-5. 28. Encíclica Mystici Corporis Christi, pág. 57., ed.
18. Rom., 11, 11-12. de la Buena Prensa.
19. Hechos, 8, 14; 11, 19-21, y los textos siguien- 29. J. DANIELOU, Essi sur le mystère de l'histoi-
tes. re, pág. 106.
20. Hechos, 13, 46; 18, 6-7; 19, 9. 30. Ene. Mystici Corporis Christi, pág. 57.
21. Rom., 11, 25-26, y 11, 15.
Misterio de la Salvación
208
Capítulo Decimocuarto
LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO
LA FE EN LA SEGUNDA VENIDA mundo, desde el último cabo de la
DE CRISTO tierra hasta la extremidad del cie-
Desde los comienzos de la Iglesia, la fe de lo.»2
los cristianos se orientaba hacia el segundo En la misma línea se sitúa la advertencia de
advenimiento de Cristo, y fundada en las los ángeles a los apóstoles después de la
palabras del Salvador, va reafirmándose a Ascensión:
lo largo del Nuevo Testamento, desde el re- «Varones de Galilea, ¿qué estáis ahí
lato de la Ascensión hasta el Apocalipsis.
parados mirando al cielo? Este Jesús
Jesucristo habló muchas veces de su segun- que separándose de vosotros ha
da venida,1 especialmente en el discurso es- subido al cielo, vendrá de la misma
catológico: suerte que le acabáis de ver subir
«En aquellos días... el sol se oscure- allá.»3
cerá, y la luna no alumbrará, y las
La idea del retorno del Señor surge conti-
estrellas del cielo caerán, y las potes-
nuamente en las cartas de San Pablo, y en la
tades que hay en los cielos se bambo- epístola a los hebreos queda bien patente la
learán. Entonces se verá venir al Hi- fe común:
jo del hombre sobre las nubes con
gran poder y gloria. Y enviará luego «Cristo ha sido una sola vez inmola-
sus ángeles, y congregará a sus es- do para quitar los pecados de mu-
cogidos de las cuatro partes del chos; y otra vez aparecerá, no para
expiar los pecados ajenos, sino para
Misterio de la Salvación
210
dar la salud eterna a los que le espe- al fin del mundo?, ¿en qué parará todo el
ran con viva fe.»4 universo actual?, ¿qué importancia tiene la
segunda venida del Señor en cuanto al mis-
El Apocalipsis, que está enteramente pene- terio de la salvación? El problema funda-
trado de esta esperanza en la segunda veni- mental es el último, pero lastimosamente
da de Jesús, termina con el anhelo litúrgico los problemas anteriores que son secunda-
que expresaban las primeras comunidades: rios, acaparan toda la atención en detrimen-
Ven, ¡oh Señor Jesús!5 to de la cuestión esencial. Como veremos
más adelante, la Revelación no satisface la
La fe en este advenimiento segundo y la es-
curiosidad, sino que da respuestas directas
peranza que comporta, no han dejado para los problemas que pueda hallar el ver-
nunca de animar a la Iglesia; volúmenes dadero creyente.
enteros podrían componerse con los textos
de los Santos Padres sobre el retorno del VOCABULARIO Y ESTILO LITE-
Señor glorificado, que sucederá al fin de los RARIO
tiempos. Basta recitar el Credo para adver- Antes de pasar el examen de la adecuada
tir que, desde los primeros siglos, creen los respuesta precisaremos el sentido de ciertas
cristianos «en Jesucristo, Hijo único de expresiones del Nuevo Testamento respecto
Dios... y ha de volver con gloria a juzgar al fin de los tiempos, aclarando algunas
a los vivos y a los muertos. Y su Reino descripciones que las acompañan.
no tendrá fin»... Para designar la doctrina sobre el fin de las
Sobre esta segunda venida se formulan in- realidades actuales —hombre y mundo—,
numerables preguntas: ¿cuándo será?, ¿de se emplea muy a menudo la palabra escato-
qué forma se sucederán los acontecimientos logía, procedente de dos voces griegas: es-
Misterio de la Salvación 211
la victoria de Cristo, que no dejará nunca de Testamento para describir los sucesos es-
santificar la tierra por el Espíritu Santo; catológicos, y ello ayuda eficazmente a
aunque ello no priva de que la plenitud de descubrir el valor exacto y pedagógico de
los efectos de tal victoria se dejen sentir los símbolos. Esos autores, en su labor des-
únicamente en el mundo futuro.10 criptiva sobre la máxima manifestación di-
vina que acaecerá al fin de los siglos, co-
La palabra apocalipsis significa, en griego,
pian numerosos detalles de las teofanías del
«revelación», y así se llama el libro escrito Antiguo Testamento. Tenemos, por ejem-
por San Juan en la isla de Patmos11 Tam- plo, los escritos de San Pablo, referentes a
bién, en la Biblia y en los escritos "judíos la segunda venida de Jesucristo, en la cual:
de la época precristiana, aparecen distintos
«Todos resucitaremos... en un mo-
«apocalipsis»,12 dedicados a todo lo con- mento, en un abrir y cerrar de ojos,
cerniente al futuro del mundo y escritos al son de la última trompeta, porque
dentro de un género literario determinado. sonará la trompeta, y los muertos re-
Contienen signos e imágenes que expresan sucitarán en un estado incorrupti-
el mensaje recibido y que no hay que inter-
pretar literalmente, concediéndoles sólo el ble.»13
valor simbólico que suponen. Su lectura La trompeta es imagen tradicional del ju-
puede servir de introducción a las visiones daismo, y ocupa un puesto destacado en el
del Apocalipsis de San Juan. relato de la venida de Yavé sobre el monte
Resulta muy interesante buscar de un modo Sinai:14 el Éxodo describe un fuerte sonido
general, el origen de algunas imágenes em- de trompeta, que fue, en realidad, el rugido
pleadas por Cristo o por autores del Nuevo del viento huracanado que se desencadenó
Misterio de la Salvación 213
se acabará un día y será sustituido por blo tiene un punto de vista muy distinto y
un mundo nuevo. Una vez fijado ya este cree que el mundo futuro será el mismo
principio, es imposible precisar los medios presente, pero maravillosamente transfor-
o la naturaleza de tal transformación. La se- mado y renovado por la gloria divina; él
gunda epístola de San Pedro nos habla de afirma que el retorno de Cristo se cumplirá
una ruptura completa entre ambos mundos, en esta tierra y no en un «ciclo» indetermi-
aniquilándose totalmente el actual «merced nado22; que la creación no desaparecerá pa-
a una caótica convulsión»:19 ra dejar sitio a otro mundo, sino que será
purificada y libertada del yugo de la vani-
«El día del Señor vendrá como la-
dad. El Apóstol, discretísimo al hablar del
drón; y entonces los cielos, con es-
cielo y de la tierra «nuevos», no concibe
pantoso estruendo, pasarán de una
una destrucción total y una nueva creación
parte a otra; los elementos, con el
ardor del fuego, se disolverán, y la del mundo,23 lo cual parece armonizarse
tierra, y las obras que hay en ella, con el tema de Cristo, «Nuevo Adán», cu-
ya primacía se extiende a la humanidad y al
serán abrasadas.»20 universo entero. Según San Pablo, el Cos-
Aquí también cabe preguntar dónde termina mos se estremecerá y la tierra será renovada
el simbolismo y dónde empieza la realidad, por la venida gloriosísima de Jesucristo.
puesto que, en la tradición judía, el fuego La Parusia es, sobre todo, la hora de la re-
purificador era un instrumento al servicio
surrección general a la vida o a la
del Divino Juez, y la filosofía grecorromana
muerte eternas, esto es, a la glorificación
utilizaba a menudo la metáfora de la des-
o a la condenación.
trucción total por el fuego.21 Pero San Pa-
Misterio de la Salvación 215
«Vendrá tiempo en que todos los que «Venid, benditos de mi padre... Por-
están en los sepulcros oirán la voz que Yo tuve hambre, y me disteis de
del Hijo de Dios; y saldrán los que comer;...era peregrino y me hospe-
hicieron buenas obras, a resucitar dasteis...
para la vida eterna; pero los que las «Apartaos de Mí, malditos, al fuego
hicieron malas, resucitarán para ser eterno, preparado para el diablo, y
condenados.»24 sus ángeles; porque tuve hambre, y
no me disteis de comer; sed, y no me
Cristo juzgará entonces a todos los hom-
bres: disteis de beber; era peregrino y no
me recogisteis...»26
«Cuando venga, pues, el Hijo del
hombre con toda su majestad, y Y Pablo le recuerda a Timoteo la importan-
acompañado de todos sus ángeles, se cia de la fe:
sentará entonces en el trono de su «Te conjuro, pues, delante de Dios, y
gloria; y hará comparecer delante de de Jesucristo, que ha de juzgar vivos
Él a todas las naciones, y separará a y muertos, al tiempo de su venida, y
los unos de los otros, como el pastor de su reino: predica la palabra de
separa las ovejas de los cabritos.»25 Dios con toda fuerza y valentía...
Que yo ya estoy a punto de ser inmo-
Al anunciar el Juicio Final, Jesús insiste en
lo importante que es el precepto de la cari- lado, y se acerca el tiempo de mi
dad fraterna: muerte. He combatido con valor, he
concluido la carrera, he guardado la
fe. Nada me resta sino aguardarla
Misterio de la Salvación
216
Pero, después de la Parusia, los fieles se ve- nifestación de los hijos de Dios. Por-
rán libres del pecado por toda la eternidad; que se ven sujetas a la vanidad o
recobrarán la amistad de Dios que será mudanza no de grado, sino por causa
«Todo de todos» 31 y que morará en medio de Aquél que les puso tal sujeción;
de los hombres.32 La resurrección de los con la esperanza de que serán tam-
cuerpos, incorruptibles para siempre por la bién ellas mismas libertadas de esa
acción vificadora del Espíritu Santo, consti- servidumbre a la corrupción, para
tuirá «la plena realización de su condi- participar de la libertad y gloria de
ción de hombres espirituales».33 Cristo los hijos de Dios. Porque sabemos
triunfará universalmente sobre la muerte: que, hasta ahora, todas las criaturas
están suspirando por dicho día y co-
«Y la muerte será el último enemigo
mo en dolores de parto.» 36
destruido.» 34
En esta fusión del mundo material con la
Desaparecerá también el dolor: gloria de los hijos de Dios —por medio del
«Dios enjugará de sus ojos todas las hombre resucitado, destinado por Dios a
lágrimas: ni habrá ya muerte, ni dominarla— la creación entrará en contacto
llanto, ni alarido, ni habrá más do- con la gloria divina, y ocupará el lugar teo-
lor, porque las cosas de antes son lógico que le corresponde.37
pasadas.» 35 El regreso del Señor será la plenitud de su
Será extinguida la esclavitud de la vanidad: victoria sobre el pecado y terminará la his-
toria de la salvación.
«Así, las criaturas todas están,
aguardando con grande ansia la ma-
Misterio de la Salvación
218
tira golpes al aire, sino que castigo to, porque todos los hombres están llama-
mi cuerpo y lo esclavizo, no sea que dos a pertenecer a Él en el momento de la
habiendo predicado a los otros, ven- Parusia.
ga yo a ser reprobado.» 53 Hemos dicho que la espera del segundo
Advenimiento del Señor permite al cris-
La venida del Señor es lo esencial de su
tiano apreciar todas las cosas en su valor re-
esperanza en el Reino:
lativo. Pero no se entienda que debe adoptar
«¿De qué le servirá al hombre el ga- una actitud de desprecio respecto de los
nar el mundo entero I si pierde su hombres y del mundo creado ni de indi-
alma?»54 ferencia respecto de la comunidad hu-
Esta esperanza en la Parusia le induce a mana. La caridad le empuja a participar
apreciar sabiamente las cosas y los lealmente en esta comunidad. No hay duda
alguna ante las vibrantes arengas de San
acontecimientos terrenales; y a vivir
Pablo a los tesalonicenses. La actitud del
despegado del mundo, «cuya escena... se
cristiano debe ser escatológica, pero no
pasa»:55 por ello, escoge vivir en castidad «consiste en descuidar los deberes del pre-
perfecta, a fin de rendir un mayor servicio a sente, ni en desinteresarse de la tierra, ni en
Dios y a sus hermanos; a practicar la pobre- aplazar la acción de la caridad hasta que
za y el don de sí en cuanto sea posible a su
llegue el fin del mundo».56
estado laico. El desprendimiento cristiano
es testimonio del juicio de valores que con- LECTURAS
tiene el Evangelio. Y según ese juicio, el San Marcos, 13, 1-37.
cristiano ha de considerar como primor- San Mateo, 25, 31-46.
dial la predicación del mensaje de Cris- 1º Corintios, 7, 29-31; 15, 22-28.
Misterio de la Salvación 223
1º Tesalonicenses, 5, 13-5, 11. 16. Is., 13, 9-10; Ez., 32, 7-8; Joel. 2, 10-11; 3, 1-
2º Tesalonicenses, 2 y 3. 5.
Apocalipsis, 21 y 22. 17. Mc, 13, 31.
18. Ap., 21,1.
19. M. E. BOISMAR,, O. P., Le retour du Christ,
1. Lc, 18, 8. en Lumiére et Víe, n.° 41, pág. 63.
2. Mc, 13, 24-27. 20. 2 P., 3, 10.
3. Hechos, 1, 11. 21. R. P. BOISMARD, id, y en la Bible de Jérusa-
4. Hebreos, 9, 28. lem.
5. Ap., 22, 20. 22. R. P. BOISMARD, id., pâg. 64.
6. 1º Cor. 15, 23. 23. J. BONSIRVEN, L'évangile de Paul, Paris,
7. Am., 5, 18; Joel, 1, 15; 2, 1-2. 1948, pág. 332.
8. 1º Cor. 1, 8. 24. Jn., 5, 28-29.
9. Véase la obra de Oscar CULLMANN. Christ 25. Mt. 25, 31-32.
et le temps, Neuchátel, 1947, pág. 33. 26. Mt. 25, 34-35 y 41-43.
10. El empleo de tal distinción se encuentra, por 27. 2º Tïm. 4, 1-2, 6-8.
ejemplo, en la 1º Cor. 2, 6, en donde el Após- 28. 1º Cor. 15, 22-24.
tol trata de la «sabiduría de este siglo» y del 29. 1º Ts., 4, 17.
«príncipe de este mundo». 30. Gen. 3, 18.
11. Ap., 1, 9-10. 31. 1º Cor. 15, 28.
12. Ex., 38-39; Dan., 7-12; Zac, 9-14; IV Esdras. 32. Ap., 21, 3.
13. 1º Cor., 15, 51-52 33. J. SCHMITT, Jésus ressuscité dans l prédica-
14. D. Jacques DUPONT, O. S. B., L'union avec tion apostolique, París, 1949, pág. 47. La pala-
le Christ-suivant St. Paul, Louvain, 1952, págs. bra «espiritual» no es sinónimo de «inmate-
68-69. rial», pero designa la cualidad de quienes re-
15. Ex., 19, 19. ciben la influencia del Espíritu Santo.
34. 1º Cor., 15, 26.
Misterio de la Salvación
224
sas, y somos nosotros por Él cuanto de los esposos y el de la madre con el hijo.
somos.» 1 La historia de la salvación está compuesta
Un Dios que se da a conocer por por innumerables iniciativas de Dios por
amor a los hombres: la Creación, la Alian-
medio de sus obras:
za, la Encarnación redentora; la fundación
«Los cielos cuentan la gloria de
de la Iglesia, el don del Espíritu Santo...
Dios, y el firmamento anuncia la Dios llega a manifestar su trascendencia
obra de sus manos.» 2 con el mismo amor que la sabiduría humana
Un Dios que se revela por las palabras que no comprende: la locura de la Cruz, que es
dirige a los hombres, por la manera de tratar Sabiduría de Dios,5 y la proclamación de
a su pueblo predilecto y, especialmente, por las Bienaventuranzas, tan opuestas al con-
el hecho de encarnarse. La Biblia es luz de cepto humano de felicidad...
vida porque contiene la revelación de Dios,
«Los pensamientos míos no son vues-
que es Luz y es Vida.3 tros pensamientos, ni vuestros cami-
El Dios de la Biblia es trascendente. Es el nos son los caminos míos, dice el Se-
Señor de la historia, su guía y su término, ñor; sino que cuando se eleva el cielo
en quien ella encuentra su verdadero senti- sobre la tierra, así se elevan mis ca-
do. Es el Dios del amor, el Señor «de ter- minos sobre los caminos vuestros, y
nura y de piedad»,4 cuya misericordia es mis pensamientos sobre los pensa-
semejante al amor de la madre para con el mientos vuestros.» 6
hijo que dio a luz, aunque éste hubiere pe-
cado. Un amor que los profetas representan
con la imagen del mayor amor humano, el
Misterio de la Salvación
228
Es el Dios fiel a sus promesas y a su Alian- reuniendo todas las cosas en Cristo según el
za, que nunca nos deja y en quien siempre eterno designio de Dios.9 Dios quiere que
podemos apoyarnos: los hombres se salven y su deseo es uni-
«Porque Dios, por el cual habéis si- versal, pues Cristo murió por todos. La
do llamados a la compañía de su hijo Iglesia es católica, o sea, encargada de
Jesucristo nuestro Señor, es fiel en anunciar por todo el mundo el Evangelio y
sus promesas.» 7 reunir en Jesucristo a todos los hombres y a
todos los valores humanos. Cada hombre
LA BIBLIA CONTIENE UNA que corresponde a la llamada divina será
MISTICA DE DIMENSIONES salvado en cuerpo y en alma, punto éste
UNIVERSALES en que difiere el cristianismo del pensa-
Además, la Biblia es luz porque contiene miento griego, según el cual la salvación es
una mística de dimensiones universales. La la liberación de la materia. Para el cristiano,
la creación, salida de las manos de Dios, es
historia bíblica va del Génesis al Apoca-
buena, y la salvación consiste en purificarla
lipsis. Comienza en la creación del mundo y
de todo pecado. Es decir, el cristiano no es
acaba en los «cielos nuevos y la tierra
materialista ni falsamente espiritualista,
nueva». La Parusia manifestará la primacía sino un clarividente optimista ante el mun-
de Cristo Salvador sobre toda la creación, do.
que:
«está aguardando con grande ansia
LA BIBLIA MANIFIESTA EL
la manifestación de los hijos de SENTIDO DE LA HISTORIA
Dios»,8 La mística bíblica, de dimensiones cósmi-
cas, sin impedirle al historiador el estudio
Misterio de la Salvación 229
de los hechos y de las civilizaciones, sin ello— libertar al hombre; pero nosotros
vedarle al sabio el análisis de las fases geo- decimos que únicamente puede hacerlo
lógicas, da a conocer el verdadero sentido Jesucristo y sus seguidores... Lo que da
de la historia y la visión reveladora de su contenido propio y constituye en defini-
dinamismo a través de los siglos. A la luz tiva su trascendencia es Jesucristo, Hijo
de la Biblia, la historia no es una renova-
ción perpetua de las mismas cosas; a pesar
de Dios, causa de nuestra salvación.» 10
de que se producen acontecimientos análo- De esta forma, la Biblia manifiesta al cre-
gos, debido a la naturaleza común de los yente el profundo sentido de la historia.
hombres y a su inclinación al pecado; está No existen dos historias del mundo más o
compuesta por vidas personales, concretas, menos paralelas, la puramente humana —
insustituibles, y su curso no es cíclico sino formada por una sucesión de imperios— y
lineal, formado por una sucesión de he- la que podríamos considerar de carácter es-
chos orientados hacia un mismo fin, ta- piritual, superpuesta artificialmente a la
les como la Creación, la elección de primera: no; existe una historia única, cuyo
Abraham, la Alianza, la Encarnación, la carácter espectacular recogen los tratados
Pascua, la fundación de la Iglesia, Pentecos- históricos, y cuyo aspecto más profundo y
tés, etc. de mayor realidad recoge la fe basada en la
Palabra Divina. Simultáneamente con los
El sentido de la historia bíblica es liberar sucesos y con las civilizaciones, se realiza
al hombre en Cristo. Verdad y Vida, libe- la historia del Cuerpo de Cristo que irá
ración que se consumará en la Parusia., «El desarrollándose hasta el segundo adveni-
sentido de la historia es, como dicen los miento del Señor : «Para el cristiano, las
marxistas —y estamos de acuerdo en apariencias históricas son únicamente
Misterio de la Salvación
230
prepara al segundo advenimiento de Cris- cias del Espíritu, está esencialmente salva-
to.13 do. Pero el bautismo no le ha inmunizado
contra el pecado, y Jesús le aconseja que es-
«Quien tiene bienes de este mundo, y té alerta para permanecer fiel al Evangelio y
viendo a su hermano en necesidad, no desviarse de la senda que ha de llevarle a
cierra las entrañas para no compa- Dios.
decerse de él, ¿cómo es posible que
Insiste San Pablo de manera particular en
resida en él la caridad de Dios?»14 que la salvación es un don gratuito:
El cristiano no vive su cristianismo indi- «Dios, que es rico en misericordia,
vidualmente, sino como miembro de una movido del excesivo amor con que
comunidad. El bautismo le justificó perso- nos amó, aun cuando estábamos
nalmente; Cristo le conoce y le ama tam- muertos por los pecados, nos dio vi-
bién personalmente,15 y será juzgado de sus da juntamente en Cristo, por cuya
propias acciones. Pero su salvación se reali- gracia vosotros habéis sido salva-
za en la Iglesia, en la solidaridad del Cuer- dos.»
po Místico, y finalizará en la Resurrección «...porque de pura gracia habéis sido
general con la salvación de todos sus her- salvados por medio de la fe, y esto no
manos. viene de vosotros, sino que es un don
El cristiano, en las condiciones presentes, de Dios.»16
ha conseguido ya su salvación, pero aun-
que el bautismo le purificó del pecado, El hombre debe corresponder, por tanto, li-
puede caer otra vez y perderla. Si vive bremente, a la misma, pues Dios lo ha crea-
una vida nueva en Cristo y posee las primi- do a su imagen, inteligente y libre, y no le
Misterio de la Salvación
232
ciones de todos los siglos. AMÉN.» 10. J. DANIELOU, Essai sur le mystère de l'histoi-
22 re, pág. 83 y 116.
11. J. FOLLIET, L'Eglise dans l'histoire en Infor-
mations Ca-tholiques internationales, 1 febrero
1956, pág. 3.
1. 1º Cor., 8, 8.
12. Jn.. 17, 11, 15-16.
2. Salmo, 18, 2.
13. Ef., 4, 16 y sig.
3. Jn., 8, 12.
14. 1º Jn., 3, 17.
4. Ex., 34, 6. La raíz «rahám» que sirve para tra-
15. Jn., 10, 3, 14.
ducir la ternura misericordiosa de Dios, evoca
16. Ef.. 2, 4-5.
la conmoción del amor materno.
17. Lc., 9, 23.
5. 1º Cor., 1 y 2
18. Rom., 15, 4.
6. Is., 55, 8-9.
19. 1º 10, 11.
7. 1º Cor., 1, 9.
20. R. POELMAN, La Bible et le prêtre, Louvain.
8. Rom., 8, 19.
1951, página 169.
9. Ef., 1, 10.
21. R. M. A., Réforme, 2 febrero 1957.
22. Ef., 3, 17-21.
Misterio de la Salvación 237
BIBLIOGRAFIA
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1957.
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Cahiers «Evangile». Paris.
H. DE LUBAC: Méditation sur l'Eglise. Paris, 1954.
Misterio de la Salvación
238
INDICE
Capítulo Primero ........................................................................................6
¿CONTIENE UNA «MISTICA» LA BIBLIA? .........................................7
Capítulo Segundo .....................................................................................16
LA CREACION Y EL PECADO .............................................................17
Capítulo Tercero .......................................................................................32
ABRAHAM, PADRE DEL PUEBLO ELEGIDO....................................33
Capítulo Cuarto ........................................................................................44
FECHAS Y LUGARES DE LA HISTORIA BIBLICA ...........................45
Capítulo Quinto ........................................................................................51
MOISES Y EL EXODO ...........................................................................52
Capítulo Sexto ..........................................................................................65
MOISES Y LA ALIANZA.......................................................................66
Capítulo Séptimo ......................................................................................77
LOS PROFETAS Y LAS PROFECIAS ...................................................78
Capitulo Octavo.......................................................................................99
EL EXILIO.............................................................................................100
Misterio de la Salvación
240
Capítulo Noveno.....................................................................................115
LOS SABIOS DE ISRAEL ....................................................................116
Capítulo Décimo.....................................................................................133
LOS POBRES DE YAVE ......................................................................134
Capítulo Décimoprimero ........................................................................153
CRISTO..................................................................................................154
Capítulo Decimosegundo .......................................................................170
LA IGLESIA ..........................................................................................171
Capítulo Decimotercero..........................................................................191
PAGANOS Y JUDIOS ANTE LA SALVACION .................................192
Capítulo Decimocuarto ...........................................................................208
LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO .................................................209
Capítulo Decimoquinto ..........................................................................225
LA SAGRADA BIBLIA, LUZ DE VIDA..............................................226
BIBLIOGRAFIA ....................................................................................237
Misterio de la Salvación 241
La peculiaridad de nuestro caso radica en que, históricamente, la Iglesia de nuestro país está
comprometida, ya que fue beligerante en una guerra civil que enfrentó a los españoles.
9. DESTINO DEL MUNDO, VOCACION DEL HOMBRE
Una nueva perspectiva de la Gaudium et spes a partir de unos planteamientos revolucionarios
de búsqueda y de intento de síntesis. El texto íntegro de la Constitución con introducciones,
apéndices, comentarios y notas de Mn. Casimiro Martí, Mn. José Bigordá, Mn. José M. Ro-
vira-Belloso y Alfonso C. Comín.
10. DIARIO DEL CONCILIO
Henri Fesquet
El acta de un acontecimiento histórico único. Todo el proceso del Vaticano II visto, día a día,
por un periodista excepción!, en el que se recogen los debates internos, las anécdotas, la ela-
boración ardua y difícil de los documentos, las contradictorias posiciones de sus participan-
tes. Una obra de la que no se podrá prescindir en adelante para el estudio de la historia de la
Iglesia.
11. PROGRESO DE LOS PUEBLOS
Pablo VI
El texto íntegro de la Populorum progressio, con un análisis crítico que llega hasta las raíces
de sus planteamientos religiosos y de sus condicionamientos o implicaciones históricas. Un
estudio en el que han intervenido Mn. José Bigordá, Mn. Casimiro Martí, Antonio Pérez
González, José M. Pinol y Mn. J. M. Rovira-Belloso
Misterio de la Salvación 245