You are on page 1of 17

Valores y normas de los escolares en

España desde la perspectiva de las


diferencias de género (8-14 años)

PETRA Mª PÉREZ ALONSO-GETA *

1. ANTECEDENTES Y ESTADO ACTUAL

E
l presente estudio surgió del deseo
DEL TEMA
de conocer en profundidad la cultu-
ra de la norma en los escolares (8-
El estudio de las normas es un tema clave,
14 años) desde la perspectiva del género. Se
tanto en el ámbito antropológico como en el
inscribe dentro de la línea de investigación
educativo ya que la cultura es siempre norma-
sobre valores y estilos de vida en el periodo
tiva y la educación es el primer vehículo de
infantil-juvenil del Instituto de Creatividad
transmisión cultural. En el ámbito de Antro-
e Innovaciones Educativas de la Universi-
pología y Educación ya Spindler dedicó gran
dad de Valencia y ha sido financiado por la
parte de su trabajo al estudio de cómo los indi-
Fundación Santa María.
viduos perciben y responden a las normas
La finalidad del estudio no ha sido sólo socioculturales en situaciones de aculturación.
avanzar en el conocimiento del proceso de Más recientemente, en los estudios del aula
transmisión-adquisición de la norma, sino como contexto de enculturación, el análisis de
desde una perspectiva más amplia, conocer la normatividad se ha llevado a cabo con técni-
también cómo son las diferencias (niños / cas etnográficas dentro de los clásicos estudios
niñas) en relación a la norma y cuál es el sobre el comportamiento docente. (Bryan,
marco de socialización en la misma. Es 1980; Woods y Hammersley, 1977; etc.).
decir, los procesos de identificación y segui-
Concretamente, desde el ángulo de la
miento, la motivación y sentimientos ante el
transmisión cultural de la norma, hay que
cumplimiento o transgresión de la norma
mencionar las investigaciones llevadas a
(cuidado de la naturaleza, violencia, etc.),
cabo en el marco de la etnografía crítica y el
los referentes significativos, etc. En definiti-
interesante trabajo etnográfico escolar de Le
va, avanzar en el conocimiento de la cultura
Compte (1975) con cuatro profesoras de las
de la norma de los escolares españoles desde
escuelas del Suroeste de Norteamérica.
la perspectiva del género.

2.- PLANTEAMIENTO GENERAL

La cultura se asienta en las ideas y en la


* Universidad de Valencia. personalidad del individuo a través del proce-

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


85
ESTUDIOS

so de socialización y educación desde la infan- A nivel macro-subjetivo tenemos las nor-


cia. En esta transmisión cultural las normas mas y valores socioculturales. En el plano
y valores juegan un papel capital pues consti- objetivo estarían las instituciones (familia/
tuyen una importante vía de acceso al conoci- escuela), la sociedad, los sistemas mundiales.
miento y a la identificación cultural. En este En relación a esto, los patrones culturales
sentido somos deudores de la corriente antro- vienen a estar distribuidos en forma de uni-
pológica «cultura y personalidad» de orienta- dades de análisis, como la organización de la
ción Boasiana. familia, las redes sociales de relación, las nor-
mas, etc. Ethos y Eidos forman un todo cultu-
Nuestra propuesta de investigación estudia ral (Geertz, 1996).
no sólo la comprensión y descripción de las nor-
mas en que los escolares se socializan y edu- El trabajo se ha realizado en dos fases cla-
can, sino que intenta también acercarse «pro- ramente diferenciadas, la primera con una
babilísticamente» a los condicionamientos de metodología etnográfica (cualitativa), la
género que subyacen a valores, transgresión y segunda desde metodología cuantitativa.
seguimiento de la norma y a las «tipologías»
con respecto a las normas de los escolares.
3. METODOLOGÍA
Estas propuestas antropológico-educati-
vas precisan un marco de referencia. En este Metodológicamente somos deudores de los
sentido nuestro análisis, buscando la simpli- planteamientos de O, Lewis, Balan, Jociles,
cidad, se inscribe dentro del «modelo integra- Rubio y tantos otros que abogan por la inter-
do» que propone Ritzer (1993), que se deriva disciplinariedad y el eclecticismo en las técni-
de la intersección de los dos continua de los cas de investigación antropológicas en las
niveles de la realidad sociocultural. El prime- sociedades complejas.
ro, el continuun micro-macro (pensamiento y
acción individual, grupos, organizaciones, Para alcanzar nuestros objetivos se ha lle-
sistemas mundiales). El segundo es el conti- vado a cabo una metodología de observación
nuun objetivo-subjetivo formado por dos tipos global en dos etapas de recogida de la infor-
polares; y una serie de «tipos mixtos» com- mación claramente delimitadas. En la prime-
puestos de diversos elementos que se sitúan ra fase (cualitativa) se han utilizado técnicas
entre los dos extremos (actores, estructuras etnográficas que concluyeron con la redacción
burocráticas, familia, escuela, trabajo, cons- de notas de campo y la formulación de las
trucción social de la realidad, normas, valo- correspondientes hipótesis. En la segunda
res), que nosotros completamos con la pers- fase (cuantitativa) se elaboró el correspon-
pectiva Emic-Etic. diente instrumento de medida, se fijaron las
condiciones de pase y se determinaron los
Desde esta perspectiva, el estudio de la datos del muestreo. Concluyó con el trata-
cultura de la norma se convierte en el estudio miento estadístico de los datos y la contrasta-
de los mecanismos que emplean individuos y ción de hipótesis planteadas en la primera
grupos para orientarse en los distintos con- fase.
textos donde desarrollan sus vidas. A nivel
micro, se recogen las dimensiones subjetiva y La técnica de observación global puede
objetiva de la definición social (interaccionis- considerarse fundamental para el estudio
mo simbólico). El interaccionismo simbólico antropológico en general y para la Antropolo-
expresa la realidad de las normas que rigen el gía de la Educación en particular dentro de
comportamiento, al tiempo que define como las llamadas sociedades complejas (socieda-
causa de éste las normas imperantes en la des populosas con estratificación social y
sociedad. gobiernos centralizados), como el caso de

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


86
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

España, cuando se quieren obtener datos 4.1.1. Muestra utilizada en la fase


válidos y representativos de la variación de cualitativa
un país (estratificación social, roles, compor-
tamiento en relación al género, etc.), con res- El tipo de metodología utilizada en esta
pecto a determinados tópicos de análisis. En fase trata de detectar la existencia de unas
esta técnica, la combinación de investigación pautas culturales, valores y normas, no de
con encuestas y estudios en profundidad establecer en términos estadísticos la proba-
(etnográficos) puede proporcionar nuevas bilidad de que aparezcan en cada sesión de
perspectivas para el estudio de la cultura y la clase. Es decir, metodológicamente sólo es
vida social de carácter general, sobre un pre- posible el estudio de algunos casos, y ésta es
supuesto básico en cualquier investigación, la base sobre la que se realizó el diseño de la
tener un conocimiento directo (en profundi- muestra.
dad) y global del campo de estudio.
Después de diversos contactos, negativas y
sustituciones, la muestra definitiva ha que-
4. RECOGIDA DE INFORMACIÓN dado constituida por observaciones realiza-
das en tres centros, con las características
4.1. Recogida de información: fase que se describen a continuación.
cualitativa (Etnográfica)
Nº 1. El primero de estos centros es una
escuela privada con una trayectoria caracte-
Seleccionar casos en etnografía es decidir
rística de muchos centros privados creados en
dónde, cuándo y con quién. Así como qué infor-
los años 60. Escuela que incide en la ense-
mación registrar y cómo hacerlo. En el proceso
ñanza de idiomas, utiliza una pedagogía acti-
de extracción de muestras existen tres grandes
va. Sus alumnos /as proceden de la nueva cla-
dimensiones: el tiempo, la población y el con-
se media, con posibilidad de ascenso social a
texto, de acuerdo a los objetivos planteados.
través del éxito escolar. Se realizaron 60
Objetivos primera fase: cualitativa (Etno- observaciones.
gráfica). Observación conductual.
Nº 2. La escuela 2 está situada en un barrio
a) Descubrir y describir las secuencias de obrero. Se trata de una escuela pública con
interacción en el aula, a través de las todos los cursos de enseñanza primaria y
normas y valores (seguimiento / trans- ESO. Se tomaron muestras en 6 aulas, aun-
gresión). que no según nuestro diseño previo, por opo-
sición de algunos de los maestros. Se realiza-
b) Formular las correspondientes conclu- ron 60 observaciones.
siones e hipótesis, que sirven de base
para la 2ª fase (cuantitativa) dentro de Nº 3. Esta escuela será designada con el
la técnica de observación global. número 3. Se trata de una escuela concerta-
da, religiosa, que durante muchos años fue
Para llevar a cabo el trabajo de campo se exclusivamente masculina. En los últimos
seleccionaron tres tipos de colegio: público, cursos ha pasado a ser mixta y tiene una pro-
privado y concertado. Y en cada uno de ellos porción similar de niños y de niñas. Los alum-
«un aula» por curso de escolarización de 2º nos /as proceden de clase media. En total se
ciclo (3º y 4º), de 3º ciclo (5º y 6º) y ESO (7º y realizaron 64 observaciones.
8º), enseñanza secundaria obligatoria. El pro-
yecto fue presentado a directivos y profesores En total se recogieron 184 observaciones
en una reunión informativa y pactado a todos en un tiempo total de 287 horas. La duración
los niveles el acceso al campo. de las observaciones giró en torno a 45 minu-

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


87
ESTUDIOS

tos para las sesiones de comedor; 30 minutos mina con el desplazamiento físico de los par-
para los recreos; 15 minutos para las obser- ticipantes fuera del área».
vaciones en otros lugares (entradas, salidas,
etc.); 2 horas para las observaciones en el
aula (convencionales y tutorías). Una vez 4.1.3. Definición de los códigos y categorías
expuestas las características de la muestra
utilizada es necesario insistir en el alcance de 1. Códigos. Se definen en relación a: Quié-
los resultados obtenidos. Se trata de un estu- nes están en el grupo o escena; Qué está
dio exploratorio de casos a través del cual sucediendo (interacción, contenido de
intentamos detectar la cultura de norma las conversaciones); Dónde (escenarios
escolar. y entornos); Cómo interrelacionan los
participantes (pautas y normas); Por
qué, qué símbolos, tradiciones, valores,
4.1.2. Tipo de observaciones realizadas se pueden descubrir en la interacción.

Previamente al inicio del trabajo de cam- 2. Definición de las categorías de interac-


po se fijaron las categorías (normas y valo- ción.
res) sobre las que debía realizarse la obser-
vación. Variables que pertenecen básica- Tipo nº1: Propuestas. Se recogen las
mente a dos ámbitos: comportamientos y intervenciones en las que se propone algo en
opiniones. En relación a los comportamien- concreto.
tos se distinguieron dos tipos: Comporta-
Tipo nº2: Correcciones. Son aquellas
mientos verbales y no verbales. Especial
intervenciones que corrigen una actitud o
interés tuvieron las observaciones en las cla-
intervención anterior del profesor/a o compa-
ses de tutorías donde las interacciones gira-
ñero/a.
ban casi exclusivamente en torno a actitudes
y comportamientos referentes a valores y Tipo nº3: Ataques a otros compañeros. En
normas que los niños perciben en los distin- varias observaciones de aula y en los recreos
tos espacios de socialización (escuela, fami- aparecieron conflictos de orden personal en
lia, grupo de iguales, TV, etc.). los que a veces interviene el docente y otras
Dado que pasamos mucho tiempo en las veces no. Se incluyen acusaciones, burlas y
escuelas, llegamos a movernos con libertad agresiones.
casi absoluta, lo que nos permitió participar
Tipo nº4: Exposiciones de protesta por
en numerosas actividades.
ataques de otros compañeros. Dada la exis-
La observación cubría un gran número de tencia de conflictos en las interacciones, con-
aspectos de los fenómenos estudiados. A par- sideramos interesante poder recoger las res-
tir de los datos recogidos se desarrolló una puestas de orden defensivo a los ataques.
tipología de la que surgió la unidad de regis-
Tipo nº5: Puesta en común y compromiso
tro. La finalidad fue identificar y desarrollar
(valores y normas). Son las observaciones pri-
las categorías adecuadas en la interacción.
vilegiadas de nuestra investigación. En ellas
A partir de los anteriores supuestos se se ponen en común determinadas situacio-
delimitó al máximo la unidad de registro que nes, soluciones de conflictos, búsqueda de la
denominamos «episodio interactivo». La mejora del clima del grupo, experiencias per-
hemos definido como «secuencia de conducta sonales (familia, escuela, grupo de iguales,
que comienza con la presencia de dos o más etc.). Generalmente se aportan soluciones y
participantes en un área de actuación y ter- se llega a compromisos.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


88
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

A partir de las categorías y propuestas 4.1.5. Conclusión de la fase cualitativa.


codificadas se extrajo la información que Formulación de hipótesis
recogían las interacciones en la escuela, las
cuales nos sirvieron de base, junto a la infor- A modo de resumen, de los datos de la fase
mación obtenida en las entrevistas, para for- cualitativa de nuestra investigación, se dedu-
mular las correspondientes hipótesis. ce que los escolares se mueven en tres niveles
de la realidad que no siempre coinciden. En
La recogida de datos se llevó a cabo a tra- primer lugar, la imagen mental, que represen-
vés de la observación participante. En ella ta sus valores y su visión ideal del mundo, en
adoptamos un papel real dentro del grupo la que se incluye también la idea que tienen
escolar. La observación participante se com- formada en su mente de lo que es una norma
pletó con entrevistas semiestructuradas a los social. Esta imagen han ido extrayéndola en
profesores que nos permitían delimitar con- su contexto escolar en base a significaciones.
ceptos y hacer más explícito y conciso el con- En segundo lugar, lo que ven en el colegio y en
tenido de las categorías. Asímismo, se reali- casa, qué hacen y dicen sus modelos de refe-
zaron entrevistas a determinados alumnos rencia (padres, profesores, compañeros), cuál
por grupos de edad (8-9; 10-11; 12-14), que se es el cumplimiento real de las normas que ven
juzgó podían aportar información relevante. a su alrededor. En tercero y último lugar, cómo
actúa él o ella en las situaciones concretas y el
grado de coincidencia entre lo que piensan que
4.1.4. Entrevistas realizadas debe ser y lo que finalmente hacen.

Entrevistas a profesoras y profesores En términos generales creen que las nor-


mas son necesarias, y su existencia les da
Se realizó una entrevista con cada uno de seguridad. Intentan cumplir la norma y
los profesores y profesoras en cuyas clases se denuncian a los transgresores. De este com-
habían tomado datos. Esta entrevista, condu- portamiento participan más los escolares
cida como un diálogo abierto, se basó en un más pequeños (8-11 años) y las niñas. Ambos
cuestionario común para todos. Los temas colectivos muestran, en general, un compor-
sobre los que se les preguntó fueron: opinio- tamiento más heterónomo.
nes sobre actitudes, creencias y comporta-
mientos de alumnos /as respecto a las normas Los escolares pertenecen a diferentes gru-
y valores. pos sociales según edad, sexo, etc. En térmi-
nos generales, piensan y actúan colectiva-
mente como miembros de estos grupos, por-
que el hecho de pertenecer al grupo les indu-
Entrevistas a alumnos /as
ce a tener unos determinados valores y a
seguir una serie de normas. La pertenencia al
Finalmente se realizaron entrevistas a dos
grupo es un referente a todos los niveles.
alumnos /as por curso considerados por los
profesores como significativos respecto al Se observa que las niñas son más normati-
liderazgo. El cuestionario semiestructurado y vas y los niños de mayor edad más transgre-
común para todos, además de los datos perso- sores. Asímismo, en cuanto a la violencia y
nales, giraba en torno a las siguientes cues- agresividad, se observa que los violentos jus-
tiones: opiniones sobre actitudes, creencias y tifican siempre la agresión por la actitud y
comportamientos que creía normales en los comportamiento de la víctima.
chicos /as de su edad respecto a las normas y
valores, diferenciando en el colegio, casa y Los datos obtenidos en las entrevistas sir-
grupo de iguales. vieron para entender mejor el marco axiológico

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


89
ESTUDIOS

y normativo. Por ejemplo, la categoría del com- das. En definitiva, conocer si los datos obteni-
portamiento y valor «responsable», algunos dos en las observaciones llevadas a cabo en la
profesores/as y alumnos/as la definían como fase etnográfica (cualitativa) pueden genera-
obediencia a las órdenes del profesor/a. Otros, lizarse para el resto de los escolares (8-14
los menos numerosos y chicos/as más mayores años) en España.
lo entendían desde el punto de vista de la auto-
nomía y el compromiso personal del alumno. Los objetivos planteados para esta segun-
da fase fueron los siguientes:
Para la validación de esta primera fase se
compararon las distintas fuentes de recogida a) Mostrar estadísticamente el nivel de
de la información. Finalmente, la redacción identificación, seguimiento y transgre-
de las notas de campo sirvió para conocer el sión de la norma, así como los sistemas
repertorio de normas y valores de los escola- de valores y patrones culturales de los
res y terminó con la estructuración de las escolares y sus tipologías.
correspondientes hipótesis, que quedaron
configuradas de la siguiente forma: b) Analizar los contextos y sistemas de
referencia de la norma infantil.
• Las creencias de los escolares hacen refe-
rencia a valores instrumentales, mate- c) Determinar estadísticamente el análi-
riales y de carácter más finalista como sis tipológico en la población escolar
por ejemplo, los valores prosociales. infantil en España.

• La transgresión y seguimiento de la La búsqueda de información y puesta en


norma se relaciona con significados sub- marcha de los objetivos señalados ha preci-
jetivos y emotivos con que los partici- sado de una metodología compleja para per-
pantes interpretan la realidad. mitir el análisis a todos los niveles de los
• Los índices de transgresión y segui- datos.
miento de la norma se relacionan con
variables como sexo y edad.
4.2.1. Instrumento de medida. Cuestionario
• La identificación con la norma se rela-
ciona con los distintos referentes y con- Partiendo de las hipótesis formuladas en
textos de socialización. la primera fase del estudio, se llevaron a cabo
• Se pueden establecer tipologías de esco- las dinámicas de grupo con niños /as y profe-
lares en relación a las normas y valores sores /as del segmento estudiado, que permi-
que explicitan. tieron perfilar el correspondiente «cuestiona-
rio estructurado» como instrumento de reco-
• En relación a los estereotipos de género, gida de información.
las niñas, con independencia de su edad,
manifiestan un talante progresista que En todo momento se ha cumplido escrupu-
las diferencia significativamente de los losamente con la normativa ética vigente de
chicos. encuestas a la infancia en la Comunidad
Europea.

4.2. Recogida de información: fase La elaboración y cierre definitivos del


cuantitativa cuestionario se llevó a cabo tras el correspon-
diente pase piloto, efectuado en distintas
La fase cuantitativa nos va a permitir con- zonas y tipos de colegios (públicos, privados y
trastar las hipótesis anteriormente plantea- concertados) de Valencia.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


90
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

4.2.2. Análisis de la población y muestreo norma como un sistema ordenado de signifi-


caciones en cuyo seno se lleva a cabo la inte-
1. Universo gración social del individuo. En un primer
plano está el marco de las creencias y de los
El universo considerado en la presente inves- valores, en virtud de los cuales los individuos
tigación es la totalidad de la población escolari- definen su mundo, expresan sus ideas y emi-
zada española de 2º y 3º ciclo de enseñanza pri- ten sus juicios de valor. En un segundo plano
maria y E.S.O. (Enseñanza Secundaria Obliga- están sus acciones y conductas orientadas
toria), niños / as de 8 a 14 años. desde el plano mental. Entre ambos, el esque-
ma de integración motivacional del individuo
para el seguimiento, transgresión, etc., de la
2. Datos del muestreo
norma, así como los sentimientos que se
generan ante seguimiento y trasgresión. Des-
Con el fin de obtener la comprensión ade-
de esta perspectiva, la cultura de la norma es
cuada y poder dar información con un nivel
la urdimbre de significaciones, atendiendo a
de error aceptable (menos del 3%), tanto en
las cuales los escolares interpretan su mundo
los resultados globales como en función de las
y orientan su acción.
variables de segmentación, se ha estimado
conveniente trabajar con una muestra de
1.600 individuos, lo que garantiza, a nivel
5.1.1. Creencias respecto a valores
global, un error máximo + 2´5 (inferior al +
3%), con un nivel de confianza del 95´5% equi-
valente a 2 sigma, considerando los compo- Entre los valores que pueden fundamentar
nentes de la varianza poblacional p = q = los diferentes comportamientos hemos esta-
50%. El tipo de muestreo utilizado es el estra- blecido una distinción a efectos operativos.
tificado con afijación proporcional de extrac- En primer lugar están los valores prosociales,
ción sucesiva (polietápico). La estratificación que son estimables para cualquier grupo
se realizó en función del sexo (niña - niño), social. Por otra parte, están los valores más
nivel de escolarización, edad (de 8 a 14 años) ligados a la posmodernidad, como pueden ser
y el tipo de colegio al que acuden los escolares la naturaleza y el consumo, propios de socie-
(público, concertado o privado). Para cada dades complejas industrializadas. A través
hábitat se ha considerado el número existen- del cuestionario les hemos pedido que nos
te de colegios privados, públicos y concerta- expresen su grado de acuerdo o desacuerdo
dos, repartiéndose de forma proporcional el con cada uno de los items planteados y de esta
número de niños /as informantes en cada forma poder determinar el peso que asignan a
intervalo de edad al número de colegios consi- los diferentes valores.
derados de cada tipo. En resumen, el número
En cuanto a los valores prosociales, el
de unidades muestrales (1.600) ha quedado
71,8% de los niños y niñas encuestados están
repartido proporcionalmente en función de
«de acuerdo» y «muy de acuerdo» en que «la
sexo, edad, comunidad y tipo de colegio.
tolerancia hacia los demás nos hace más feli-
ces». Esta postura es respaldada más amplia-
5. ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS mente por los escolares más pequeños (8-11
años) y por las niñas. Los porcentajes son
5.1. Descripción: creencias, valores y mucho más elevados cuando se piensa en ser
normas tolerantes y no discriminar a las personas por
razón de sexo, raza, etc., a nivel teórico, el
A efectos operativos en la descripción de 86,2% se muestra globalmente («de acuerdo»
los resultados, entendemos la cultura de la y «muy de acuerdo»). Sin embargo cuando

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


91
ESTUDIOS

descendemos a situaciones inmediatas y rea- de importancia les conceden. El 89,6% de los


les —ser tolerante con el compañero de al niños está «de acuerdo» y «muy de acuerdo»
lado— los porcentajes bajan considerable- en que «los ambientes naturales son más
mente. sanos y saludables». Los más pequeños secun-
dan dicha afirmación en el 91,4% de los casos
En cuanto a la solidaridad y ayuda mutua, y en cuanto al sexo, se percibe una ligera
el 65,2% de los encuestados está «de acuerdo» mayoría de las chicas sobre los chicos en su
y «muy de acuerdo» en que con la familia, conformidad con este planteamiento.
amigos, compañeros: «hoy por tí, mañana por
mí». Son los más pequeños nuevamente los Esta misma rotundidad en respuestas la
que muestran una actitud más solidaria. Así encontramos cuando el 89,5% de los escolares
mismo, al 83,1% «les gustan mucho los perso- entrevistados confiesa estar «de acuerdo» y
najes que ayudan a la gente» . Nuevamente «muy de acuerdo» en que «en la naturaleza
son las niñas con el 89,8% y los escolares más podemos encontrar cosas bonitas y bellas».
pequeños con el 85,7% los que se sitúan por Esta misma opinión es respaldada por el
encima de la media. Cuando se les pide que 91,1% de los escolares de 8 a 11 años. Es evi-
muestren su grado de acuerdo con la afirma- dente que el valor de la ecología y de la natu-
ción «la ayuda desinteresada a los amigos raleza está fuertemente arraigado entre los
unida al esfuerzo de cada uno permite hacer más pequeños. Las niñas reflejan una opinión
grandes cosas», sólo el 35,8% globalmente se mucho más favorable que los niños (el 93,7%
muestra «muy de acuerdo». Los escolares de 8 de las chicas frente al 85,2% de ellos). Así mis-
a 11 años, con el 39,7% se sitúan nuevamente mo, el 71,3% de los entrevistados declara que,
por encima de la media. cuando van de excursión, «siempre» y «muchas
veces», traen a casa los desperdicios. Este por-
Es interesante observar en items de natu- centaje se eleva en el caso de los más pequeños
raleza similar cómo «hay que ayudar a los (8 a 11 años), mientras que, de nuevo, podemos
demás aunque cueste trabajo» 75,5% «muy comprobar que las cifras descienden en el caso
de acuerdo» y «de acuerdo» y «hay que estar de los más mayores y de los chicos.
dispuesto a trabajar por los demás» 74,1%
«muy de acuerdo» nuevamente es el colectivo En definitiva, los niños valoran los
de los más pequeños y las niñas los que ambientes naturales. La naturaleza está pre-
muestran mayor grado de acuerdo con la sente en todas las fuentes de información a
propuesta. las que accede un niño: en sus libros, en sus
programas de televisión, en el colegio.
Un porcentaje muy elevado, el 87,6% de los
encuestados, está «de acuerdo» y «muy de • Consumismo / materialismo
acuerdo» en que «cualquier persona merece
respeto». Lo cual significa que son conscientes En cuanto a los valores materiales y de
de la igualdad entre las personas y, en conse- consumo, el 64% de los encuestados se mues-
cuencia, que todas las personas merecen un tran «en desacuerdo» y «muy en desacuerdo»
trato similar. Es importante destacar que con la afirmación de que «el dinero es lo más
esta opinión es más rotunda en el caso de los importante en el mundo»: esta cifra es supe-
menores y las niñas. rior en el caso de los niños más pequeños y en
las niñas, mientras que, como era de esperar
• Valores ecológicos / Naturaleza los niños de 12 a 14 años, con el 55%, son
menos tajantes en su desacuerdo.
Veamos ahora en qué medida los niños
proyectan en sus conductas los valores ecoló- Asimismo, el 61,6% de los escolares encues-
gicos, si son percibidos por ellos y qué grado tados se muestra «de acuerdo» y «muy de

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


92
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

acuerdo» en que «poder comprar cosas nos Con respecto a si «se necesita orden y nor-
hace más felices». Por tanto, a los niños les mas claras para que las cosas vayan bien»,
cuesta ver en el dinero un valor esencial en la está «muy de acuerdo» el 42,9%. Con diferen-
vida, sin embargo relacionan más fácilmente cias estadísticamente significativas, el grupo
un estado de felicidad con el hecho de poder de 8 a 11 años muestra el mayor grado de
comprar todas las cosas que deseen. acuerdo con esta proposición, el 51,4% frente
al 33,1% del grupo de 12 a 14 años. A la cues-
En síntesis, los escolares españoles pare- tión de si piensan que «hay que actuar
cen identificarse, en primer lugar, con los siguiendo las normas de casa, colegio, etc.», el
valores ecológicos, en segundo lugar con los 71,4% contesta «afirmativamente», frente a
valores prosociales y en tercer lugar con los un 28,6% que contesta «negativamente». En
valores de contenido material y de consumo. la misma línea, la gran mayoría de los niños
Se confirma el cambio de valores operado en entrevistados, concretamente el 73,9 %, está
la sociedad española hacia una cultura más «de acuerdo» y «muy de acuerdo» en que
ecológica y postmaterialista de la que los «cuando se cumplen las normas todos salen
escolares en su medida participan. ganando». De nuevo, son los más pequeños y
las niñas los que responden con mayor rotun-
didad.
5.1.2. Creencias respecto a las normas
Para la mayoría, la norma se identifica con
¿Cuál es la imagen que tienen formada los «el buen camino» y, por tanto, el cumplimien-
niños españoles de la norma? . Veamos algu- to de las normas es el medio para lograr bue-
nas de la preguntas donde podemos reconocer nos resultados. Son normativos y heteróno-
esta asociación por parte de los escolares. mos, en términos generales y, en mayor pro-
porción, los escolares más pequeños y las
Acerca de la identificación con la «norma niñas.
dada» los datos indican que el 74,2% de los
escolares afirma que «es mejor que te digan lo
que puedes hacer, para no equivocarte». Por 5.2. Grupos de referencia social en
edades, el grupo de los más pequeños (8-11 relación a la norma
años) con el 76,0% , supera porcentualmente
al de los mayores (12-14 años) con el 72,1%. Los niños, desde muy pequeños, desarro-
Las niñas (77,4%) presentan niveles de asen- llan fuertes vínculos con las personas con
timiento mayores. Son más normativas que quienes tienen un contacto más regular y
los chicos. Los resultados son estadísticamen- estrecho; padres, profesores y amigos son sus
te significativos. referentes más cercanos.
Nos interesaba saber qué piensan en cuan- Por los datos extraídos, valoran positiva-
to al nivel de autonomía y heteronomía en el mente «pertenecer a un grupo o pandilla». El
seguimiento de la norma. A la cuestión de si 62,6% de ellos declara estar «de acuerdo» y
piensan que los niños /as «deben hacer lo que «muy de acuerdo» con esta afirmación. Lógi-
ellos estimen y crean correcto», el 59,5% («muy camente, son los más mayores (12-14 años)
de acuerdo» y «de acuerdo») comparte la idea los que le dan mayor valor a tal condición.
de que deben actuar conforme a su voluntad, Sin duda los amigos suplen ese distancia-
siguiendo sus propios criterios. Comparando miento familiar que se produce al llegar a
estos dos items puede concluirse que los niños esta edad.
prefieren (74,2% frente al 59,5%) normas cla-
ras y seguimiento heterónomo frente a la Les hemos preguntado también si se iden-
autonomía normativa. tifican con la norma en relación al grupo de

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


93
ESTUDIOS

iguales. El 69,0% afirma que deben cumplir te al 69,7% de los mayores (12 a 14 años) los
las normas y reglas de los juegos. Las dife- que muestran mayor aceptación a la norma.
rencias estadísticamente significativas son
muy grandes en relación a la variable edad, el
78,2% en el tramo de 8 a 11 años frente a sólo 5.2.1. El género como referente de la norma
el 58,3 % para los de 12 a 14 años. En la varia-
ble sexo, las niñas con el 71,4% se sitúan nue- En referencia a la relación norma /género,
vamente por encima de la media, frente al el rol social que la mujer ocupa en la mente de
66,6% de los niños. En línea con los resulta- niños /as se forma de lo que ellos extraen de la
dos anteriores, los más pequeños y las niñas realidad. En términos generales, a los escola-
siguen siendo más normativos. res les gustan las madres que hacen lo que se
espera de ellas, que cuidan la casa y son orde-
En cuanto al papel de los padres como refe- nadas. Tan sólo el 34,1% de los entrevistados
rente, casi la mitad de los escolares encuesta-
está de acuerdo con tener un tipo de madre
dos (47%) declara estar «de acuerdo» o «muy 1
como la de Konrad , desordenada. Es curioso
de acuerdo» en que «los padres siempre tienen
observar cómo los que muestran un mayor
la razón», aunque también es significativo el
rechazo hacia este tipo de personaje sean los
alto porcentaje que se muestra «indiferente»
más pequeños (31,2%) frente al 37,5% de los
ante tal afirmación (22,4%). De nuevo, las
mayores, y las niñas con el 31,2% frente a los
cifras reflejan que los más pequeños están
chicos (37,1%). Las diferencias son estadísti-
más unidos afectivamente a la familia, valo-
camente significativas.
ran más el papel de los padres y por tanto
están más convencidos de este hecho. Los En esta misma línea de definición norma
mayores discrepan más de tal afirmación. /género, al 61,8% de los escolares les gusta
que las madres sean cariñosas y afectivas y
Solamente el 25,5% de los encuestados
son los más pequeños los que defienden en
declara estar «de acuerdo» con que «en su
mayor medida tal afirmación. Preguntados
casa hay demasiadas normas». Con diferen-
directamente por el cuidado que deben pres-
cias estadísticamente significativas, sólo el
tar a los demás, el 26,8% afirma que «las
grupo de 12 a 14 años, con el 28,5%, se sitúa
madres deben estar pendientes de todos». Es
por encima. Las niñas y los más pequeños
curioso que las niñas esta vez se sitúan por
siguen mostrando una actitud más normati-
debajo de la media y muestran un mayor
va y heterónoma.
rechazo (21,3%) que los chicos (32,4%), inclu-
Profundizando un poco más, se les ha pre- so por debajo del grupo de los mayores (12 a
guntado si creen que es mejor «que les casti- 14 años), con el 22,6%. Señalan «que les gusta
guen en casa cuando se lo merecen porque han que las madres y las niñas luchen por lo justo»
hecho algo mal». El 67,4% se muestra «muy (57,4%), las niñas (65,1%) frente a los chicos
de acuerdo» o «de acuerdo». Con diferencias (49,6%).
significativas, estadísticamente se sitúa el
En definitiva y a la vista de los datos, los
grupo de los más pequeños (8 a 11 años) con el
escolares consideran que la mujer, en primer
70,8%, frente a los mayores (12 a 14 años) con
lugar, como madre, debe ser cariñosa y afecti-
el 61,6%. La variable sexo no presenta signi-
va, en segundo lugar que luche por lo justo y
ficación. En esta misma línea, el 73,9% de
en tercer lugar que sea ordenada. Es impor-
escolares se muestra «muy de acuerdo» y «de
acuerdo» con la proposición de que «cuando se
cumplen las normas en casa, colegio, grupo, 1
Hace referencia a un cuento de literatura infantil,
todos salen ganando». Nuevamente son los Konrad, el niño que salía de una lata de conservas, cuya
más pequeños (8-14 años), con el 77,4%, fren- madre era una desordenada.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


94
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

tante destacar que tan sólo el 13,6% de los femenino; ellas se muestran más activas y
niños y niñas encuestados declara gustarles representan la lucha por la igualdad.
que las madres hagan todo el trabajo de casa.
Este porcentaje es ligeramente superior en el Por otra parte, para ver hasta qué punto
caso de los chicos. Pero sin duda es importan- los niños ponen en práctica sus declaraciones
te comprobar que los escolares se están amol- en favor de la igualdad, les hemos pedido que
dando a los nuevos hábitos de nuestro siglo y nos digan con qué frecuencia forman grupos
el nuevo reparto de papeles en la familia, en clase con niños de diferente raza, forma de
como reflejan estas datos. pensar, sexo, etc. Veamos cuáles han sido sus
respuestas.
El 60% de los entrevistados declara estar
en desacuerdo y muy en desacuerdo con la El 44,3% de los encuestados declara que
afirmación de que las mujeres no deben tra- «siempre» y «muchas veces» «forma grupos en
bajar. Como es lógico, son las niñas las que se clase con niños diferentes». Esta cifra no es
oponen a tal afirmación con mayor rotundi- especialmente alta y apenas varía según la
dad. edad o el sexo de los niños entrevistados. En
este sentido es especialmente significativo el
dato de los escolares que confiesan no invitar
5.3. La norma infantil: formas de nunca a una excursión a los niños diferentes
respuesta en la vida real (21,1%). Esta cifra se eleva aún más en el
caso de los más pequeños, alcanzando un
Tratamos de ver ahora cómo los escolares 26,3%. El 22,2% de los chicos declara no
siguen la norma en la vida real,. comparando hacerlo nunca, una cifra muy parecida a las
pensamiento y realidad con respecto a las chicas (21,9%). De estos datos se deduce que
tareas, fuera ya de opiniones anteriores sobre aunque se manifiesten en favor de la igual-
los papeles que el hombre y la mujer tienen dad, lo cierto es que, en la práctica, no suelen
para los escolares. El 57,4% de los encuesta- tener iniciativas que procuren la integración
dos declara ayudar «siempre» o muchas con los diferentes, como reflejan las cifras
veces» en las tareas de la casa. Aunque la anteriores. Tan sólo podemos observar una
mayoría de los escolares colabora en casa, leve diferenciación entre los niños con eda-
aún sigue existiendo una minoría que confie- des comprendidas entre 12 y 14 años, puesto
sa no hacerlo. En concreto, el 15, 4% de los que es lógico pensar que poseen una mentali-
niños de 12 a 14 años confiesa no ayudar dad más abierta y adulta, además de la par-
«nunca» o «muy pocas veces» en casa. ticularidad de que a esta edad es más fre-
cuente formar grupos de iguales más hetero-
Los escolares, en las sociedades avanzadas
géneos.
están siendo educados cada vez más en la
igualdad. El hecho de que el papel de la mujer En torno al comportamiento solidario, el
en la sociedad ha ido evolucionando año tras 37,1% de los encuestados reconoce ayudar a
año ha hecho posible que vean con normali- algún amigo en los estudios tan sólo alguna
dad que hombres y mujeres son capaces de vez. Solamente el 17,5% de los niños declara
desarrollar las mismas funciones. La tenden- hacerlo siempre. En este caso son los más
cia en España es que ambos sexos reciban la mayores y las niñas en particular quienes
misma educación, acaten las mismas normas, reconocen ayudar con menos frecuencia.
compartan las mismas aspiraciones y, lo que
es más importante, ellas piensan que son Tampoco el panorama es más alentador en
capaces de llegar a hacer las mismas cosas. otro tipo de actividades solidarias. El número
La tendencia es progresar. Sin embargo, esta de escolares que ayuda siempre a los demás y
tendencia es más acusada en el colectivo favorece a la integración del resto de niños en

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


95
ESTUDIOS

el grupo de trabajo, deportivo, etc., es muy En teoría la mayor parte de los escolares
bajo. Sólo el 18,8% de los niños integran siem- rechaza las conductas violentas. Y, así, el
pre a niños con minusvalías y sólo el 22,4% 58,2% de los niños son contrarios al hecho de
forma equipos de deporte con niños «malos» que «la violencia pueda ser justa para solucio-
deportivamente hablando. Asímismo, sólo el nar algún problema». Sin embargo, preocupa
52,2% de los niños entrevistados declara que el 22% se muestre conforme con la propo-
dejar «siempre» y «muchas veces» los apuntes sición. En la misma línea, el 26,8% afirma que
a algún compañero. No existen diferencias hay que pegar cuando se lo merecen, siendo los
estadísticamente significativas en razón de escolares más mayores (27,5%) y los chicos
sexo o edad. (33,8%) frente a las chicas (20,0%) quienes
manifiestan la conducta más violenta.
Los datos obtenidos ponen de manifiesto
que los escolares tienen un seguimiento de la Y, para finalizar, les hemos preguntado
norma, en la práctica, mucho menor que la qué opinan sobre la expresión de «quien pega
idea que manifiestan a nivel mental. primero pega mejor», con el fin de ver hasta
qué punto la violencia puede ser para los
escolares una forma de imponerse a los
5.3.1. Norma y conducta agresiva demás. El 59,4% de los niños y niñas entre-
vistados se muestran «en desacuerdo» y «muy
La antropología comparada ha puesto de en desacuerdo» con dicho planteamiento. De
manifiesto la importancia que para la adqui- nuevo podemos comprobar que, de existir una
sición del comportamiento agresivo tiene el ligera aprobación de este tipo de comporta-
medio donde se desarrolla el individuo. El miento, es por parte de los escolares mayores
bebé está dotado de grandes posibilidades y los chicos, con una proporción superior a la
para el altruismo y para la agresión, las cua- de las chicas.
les activa en contacto y dependencia de los
tipos específicos de intervención-sociocultu- Asímismo, cruzados estos ítems con las
ral a que se ve expuesto (Monatgu, 1983). variable tipo de hábitat en el que viven los
escolares, las conductas más agresivas se vin-
Un niño que crece en un entorno no agresi- culan a los hábitats más deprivados. No pode-
vo, donde el diálogo es la vía de resolver los mos establecer aquí el significado total de tal
problemas, donde en la convivencia el enten- hábitat, sólo apuntar que se trata de pobla-
dimiento y la armonía son un hecho, será un ciones que, frecuentemente, han tenido un
niño que aprenderá a expresarse a través del crecimiento muy rápido y descontrolado, con
lenguaje y el razonamiento. Por el contrario, una fuerte movilidad y que, consecuentemen-
un niño puede aprender que, en un entorno te, los niveles de equipamiento, en todos los
agresivo el comportamiento violento es una órdenes, suelen presentar grandes deficien-
forma eficaz para manejar la situación o con- cias, a la vez que se observa un menor arraigo
seguir sus propósitos. Así, ante la proposición con respecto a los mayores.
de si están «de acuerdo» en «hay que hablar
antes de pelear», el 83,7% de los niños encues-
tados se muestra «muy de acuerdo» y «de 5.3.2. Motivación para el seguimiento de la
acuerdo» en que es necesario hablar antes norma
que pelear con alguien. Un porcentaje bajo
(5%) se muestra en desacuerdo con la afirma- ¿Por qué un niño acepta una norma?,
ción planteada. Las chicas (89%) son más ¿Cree siempre que lo que le obligan a hacer es
partidarias de esta conducta que los chicos lo mejor?, ¿Qué motivos le llevan a seguir
(78,3%). Preocupa ese 5% que manifiesta una ciertas reglas?, ¿Actúa siempre por obliga-
actitud tan violenta. ción? En cuanto a la motivación, el 67,7% de

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


96
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

los entrevistados afirman que son obedientes siguientes motivos: para sentirse bien
(«siempre» o «muchas veces’) porque así están (84,5%), para no sentirse mal (74,8%), auto-
contentos con ellos sus padres, profesores, etc. satisfacción moral (69,3%), para que los con-
La edad establece diferencias estadística- sideren buenos (68,9), para que estén conten-
mente significativas. En los escolares de 8 a tos sus padres, profesores, etc., (67,7%), por-
11 años, el 75, 2% manifiesta un mayor grado que saben que si no hacen lo que deben los
«de acuerdo» frente al 58,9% del grupo con castigan (65,0%).
edades comprendidas entre 12 y 14 años. En
la misma tónica, son obedientes porque tiene Los datos aportados ponen de manifiesto
sus compensaciones, el 84,1% (8 a 11 años) que la transgresión de la norma genera senti-
frente al 77,9% (12 a 14 años). mientos de malestar y que las normas actúan
como importantes reguladores culturales.
Asímismo tenemos que el 65,0% de los
escolares encuestados está «de acuerdo» y
«muy de acuerdo» con que «los padres casti- 5.4. Discusión y conclusión: La cultura
gan si no haces lo que debes». Como es lógico, de la norma en escolares de 8 a 14
los más pequeños (69,3%) secundan esta afir- años
mación con más rotundidad que los mayores
(59,7%). Por tanto, los escolares saben que Somos conscientes que estudiar cómo los
deben obedecer para no recibir castigos. escolares procesan y siguen las normas en los
distintos contextos es un tema complejo,
Por otra parte, el 69,3% de los escolares se
puesto que en la mente y conducta infantiles
muestra de acuerdo, en términos generales,
intervienen muchos factores que no permiten
«con hacer las cosas bien aunque nadie se
entere». La razón que mueve esta conducta es explicar de modo simplista, el porqué el indi-
la autosatisfacción moral. Ponen de manifies- viduo actúa como lo hace. Nuestro objetivo se
to una mayor autonomía moral. En otro resuelve solamente con aportar una serie de
orden de cosas, el 68,9% de los escolares datos que permitan avanzar en el conoci-
encuestados confiesa que «siempre» y miento de la realidad normativa infantil (8-
«muchas veces» mantienen buenas relaciones 14 años) en la población española.
con los otros, para que les consideren legales,
Esquemas normativos en la infancia
buenos. De igual forma, el 84,5% afirma que
portarse bien hace sentirse contento con uno Para la mayoría de los niños, la norma se
mismo. Nuevamente las chicas con el 89,3% identifica con el buen camino y se sienten
se sitúan por delante de los chicos 78,6%. bien consigo mismos cuando la siguen. Por
tanto, el cumplimiento de la norma es bueno
En cuanto a los sentimientos que genera la
y de ello se obtienen buenos resultados. El
transgresión de la norma, el 74,8% de los entre-
grado de acuerdo es muy elevado cuando, en
vistados confiesa sentirse mal cuando han
términos generales, se les pregunta por la
hecho algo malo «siempre» y «muchas veces»,
necesidad de la existencia de las normas. Hay
aunque no les pillen. Este sentimiento está
que concluir que desean vivir en un marco
más presente entre los escolares comprendidos
normativo claro. Por eso, otro de los motivos
entre 8 y 11 años (55,9%), que en los de 12-14
que impulsa a los niños a actuar respetando
años (42,8%) y entre las niñas (54,5%) frente a
las reglas es que están totalmente convenci-
los chicos (45,1%), con diferencias estadística-
mente significativas. dos de que es el camino mejor. Por ello, no
perciben la norma como una orden impuesta
En síntesis, los escolares en términos contra su voluntad sino como algo correcto
generales, parecen seguir la norma por los que les beneficia si la cumplen.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


97
ESTUDIOS

En línea con lo anteriormente expuesto, Por tanto, debemos deducir que las niñas,
les gusta que la gente siga y cumpla las nor- así como los escolares de menos edad, se
mas en cualquier situación. Cuando las nor- sienten más atados normativamente a la
mas se derivan de valores, principios mora- familia que los niños más mayores. Conside-
les, prosociales, etc., la mayoría afirma sen- ran también, de forma mayoritaria, que pre-
tirse mal si las infringe. Por otra parte, tam- fieren tener normas para saber qué camino
bién puede concluirse que a la mayor parte de seguir.
los escolares les gusta que en su vida todo sea
normal, como en el resto de las casas de sus Finalmente, con respecto a los estereotipos
compañeros y amigos. Son, en su mayoría, de género, a los niños /as les gustan las
conservadores, aunque les parezca divertido madres que hacen lo que se espera de ellas y
la transgresión en otras situaciones. Las consideran que las mujeres, como madres,
deben ser cariñosas y afectivas, es bueno que
variables edad y sexo explican diferencias
luchen por lo que creen que es justo y, por
significativas en el seguimiento e identifica-
supuesto, han de ser ordenadas. Sin embargo
ción con la norma, que se resuelve, en térmi-
es esperanzador que muy pocos (sólo el
nos generales, a favor del grupo de edad de
13,6%) entrevistados declaren gustarles que
los más pequeños y de las niñas.
las madres hagan todo el trabajo en casa.
Todo apunta a que las niñas son ligera- También la mayoría considera que las
mente más reacias a actuar de manera autó- madres deben trabajar fuera de casa. Sin
noma que los niños y esto, más que ser debido duda, es importante comprobar cómo en los
a un sentimiento más acusado de responsabi- escolares va calando el espíritu y los hábitos
lidad, está motivado por el hecho de que los de mayor igualdad y justicia, respecto al
niños prefieren presumir más de su rebeldía género, de los nuevos tiempos. Aunque quede
que las niñas. Esto les confiere una imagen mucho por hacer, son las niñas quienes asu-
emancipada y un talante libre, muy atractivo men su papel en la liberación. Como lo mues-
para ellos. tra que en sus preferencias los porcentajes se
sitúen cercanos a los escolares más pequeños
En torno a la violencia escolar, si bien la (8-11 años), salvo en los items relacionados
mayoría rechaza el comportamiento violento, con el género en que se posicionan con simila-
hay un 5% que prioriza la acción violenta res valores a los escolares mayores (12-14
sobre el diálogo, un 22% considera que la vio- años).
lencia puede ser justa, eficaz para solucionar
problemas, y un 20% entiende que hay que
pegar cuando se lo merecen, lo justifican. 5.4.1. Tipologías con respecto a la norma
Estos datos no por minoritarios dejan de ser
preocupantes. Se puede apreciar, asímismo, que apare-
cen diferentes grupos en los cuales los escola-
Es importante mencionar, a modo de con- res se agrupan con respecto a la norma. Estos
clusión con respecto a los grupos de referen- grupos no se distribuyen de manera homogé-
cia, que los escolares entienden que la nor- nea, sino que se identifican, en mayor o
ma viene determinada por los padres y pro- menor medida, con diferentes sectores de la
fesores, y que una parte la sigue por temor al población infantil, en función precisamente
castigo. A pesar de que la mayoría de los del seguimiento, identificación, transgresión,
niños expone su visión positiva de la norma, etc., de la misma.
existe una minoría que declara su indiferen-
cia y, aún más, su desacuerdo con las opinio- Un primer grupo lo componen, en términos
nes planteadas. Este desacuerdo siempre es generales, escolares que siguen la norma de
más evidente en los chicos que en las chicas. forma heterónoma y por evitar sanciones.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


98
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

Están muy condicionados e interesados por el la realidad (tolerar al compañero, dejar apun-
grupo de iguales. Son niñas, mayoritaria- tes, etc.) los porcentajes bajan considerable-
mente, de 8 y 9 años. mente: Una cosa es pensar y otra hacer. Así-
mismo, aunque en los escolares españoles van
En un segundo grupo tenemos a los que se calando hábitos de mayor igualdad y justicia
identifican fuertemente con el «grupo» social respecto al género, son las niñas quienes pre-
y la ayuda mutua (familia, iguales entre sí, sentan posturas más avanzadas y, en definiti-
etc.). Son normativos y más bien heteróno- va, asumen su papel en la liberación.
mos. Corresponde, en términos generales, al
perfil de edad de 9 y 10 años, tanto niños Esta investigación sugiere múltiples pro-
como niñas. puestas para la toma de decisiones pedagógi-
cas:
El tercer grupo lo componen escolares a los
que no les importa transgredir la norma con- • Generar en los escolares buenos hábitos
vencional de principios, etc., pero siempre y actitudes positivas para la acción en
que no se enteren y les pillen. Son heteróno- torno a los distintos valores, para que lo
mos y actúan «bien» sobre todo por miedo al mental (valores prosociales, ecológicos,
castigo. Mayoritariamente tienen 12 años, etc.) y lo conductual sigan la misma
aunque también los de 11 son numerosos. línea.

El cuarto grupo lo conforman individuos Entre ellas destacamos la necesidad de


en mayor medida entre 13 y 14 años y se avanzar en el desarrollo de una moral de
reparten por igual entre chicos y chicas. Es autonomía en los escolares para que su com-
muy importante para ellos ser como los portamiento ético ante el seguimiento de la
demás. Se siente mal cuando infingen la «nor- norma finalmente obedezca, no al castigo que
ma de principios», aunque no se entere nadie. la transgresión puede generar, sino a la bús-
Se esfuerzan por conseguir sus propósitos. queda de la propia satisfacción y estima ante
Piensan que en casa hay demasiadas normas. el cumplimiento de la misma.
Lógicamente siguen la norma de forma autó-
• Promover escenarios educativos donde
noma y por sentirse bien consigo mismos.
se implante la competencia emocional y
Finalmente, un quinto grupo lo integran social de los individuos para contrarres-
niños que se definen por la transgresión de la tar la socialización de algunos escolares
norma y la falta de valores de referencia ya en la agresividad y violencia, como for-
ma de actuación eficaz para manejar la
sean prosociales o de la naturaleza. En térmi-
situación.
nos generales, se agrupan en él los escolares
de 14 años de forma mayoritaria. Le siguen • Seguir implantando programas de coe-
los de trece, aunque hay representantes por ducación, dirigidos a los escolares mas-
toda la población. Es el grupo más minorita- culinos, que permitan avanzar hacia
rio de individuos. Están escolarizados, gene- una sociedad más igualitaria respecto al
ralmente, en colegios públicos. género.
Hay que concluir, a modo de resumen, que
globalmente existe una gran diferencia en los
BIBLIOGRAFÍA
escolares entre pensamiento y realidad. Se
identifican, en porcentajes elevados, con las
BRYAN, K. (1980). Pupil perception of transfer bet-
grandes propuestas axiológicas y normativas ween nilde and high schools. En Hargreaves, A.
(tolerancia, cooperación, solidaridad, cuidado y Ticke, L. (comp.). Middle schools. Harper.
de la naturaleza), pero cuando se desciende a London.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


99
ESTUDIOS

ELSTER, J. (1992). El cemento de la sociedad. NAVAL, C y URPI, C. Una voz diferente en Edu-
Gedisa. Barcelona. cación moral. Eunsa. Navarra.
GEERTZ, C. (1996). La interpretación de las cultu- PÉREZ ALONSO-GETA, P.M. y otros (1992). Los
ras. Gedisa. México. valores de los niños españoles. SM. Madrid.
GERVILLA, E. (1993). Postmodernidad y Educa- PÉREZ ALONSO-GETA y CÁNOVAS LEON-
ción. Valores y cultura de los jóvenes. Dykinson. HARDT (1996). Valores y pautas de crianza
Madrid. familiar, S. M. Madrid.
GOETZ, J .P. y LE COMPTE, M. D. (1988). Etno-
RITZER, G. (1993). Teoría sociológica clásica.
grafía y diseño cualitativo en investigación edu-
MaGraw-Hill. Madrid.
cativa. Morata. Madrid.
STREICH, W. (1984). The Anthropological field
HYDE, A. (1987). «Theory used in ethnographic
method of Classroom observation and Teacher
Educational evaluations: Negotiation Values».
Anthropology & Education Quarterly, 18, Evaluation. Washington: OERI.
pp.131-148. VÁSQUEZ, A. y MARTÍNEZ, I. (1996). La sociali-
MONTAGU, A. (1983). La naturaleza de la agresi- zación en la escuela. Una perspectiva etnográfi-
vidad humana. Alianza. Madrid. ca. Paidós. Barcelona.

PÉREZ ALONSO-GETA, P.M. (2001) «Las influen- WOODS, P. y HAMMERSLEY, M. (1977). School
cias básicas en la formación moral y cívica». En experiencie. Croom Helm. Londres.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


100
PETRA M.ª PÉREZ ALONSO-GETA

RESUMEN: El presente estudio tiene como objetivo conocer la cultura de la norma en los escolares (8-14
años) desde la perspectiva del género. Ha sido realizado por el Instituto de Creatividad e Inno-
vaciones Educativas de la Universidad de Valencia y financiado por la Fundación Santa
María. Se ha llevado a cabo una metodología de observación global en dos etapas de recogida
de información En la primera fase –cualitativa– se han utilizado técnicas etnográficas. En la
segunda fase –cuantitativa– se elaboró el correspondiente cuestionario y se determinaron los
datos del muestreo. Concluyó con el tratamiento estadístico de los datos y la contrastación de
las hipótesis planteadas.
Se identifican, en porcentajes elevados, con valores y normas (tolerancia, solidaridad, etc.),
pero cuando se desciende a la realidad (tolerar al compañero, etc.) los porcentajes bajan consi-
derablemente. Van calando hábitos de mayor igualdad respecto al género, pero son las niñas
quienes asumen el papel en la liberación.
Esta investigación sugiere múltiples propuestas pedagógicas. Entre ellas destacamos la nece-
sidad de avanzar en el desarrollo de una moral de autonomía en los escolares para su compor-
tamiento ético ante el seguimiento de la norma.

REVISTA DEL MINISTERIO DE TRABAJO Y ASUNTOS SOCIALES 40


101

You might also like