Professional Documents
Culture Documents
UNIVERSITARIOS
(Stacey Woods)
"Y en la práctica, sin intervención de afuera, vez tras vez han aparecido grupos universitarios
evangélicos, con los mismos principios y fines que profesamos. El movimiento del cual somos
herederos nació por medio de la iniciativa estudiantil. Dios pone en el corazón de uno o dos la
inquietud de alcanzar a los compañeros, ellos buscan con quienes orar y servir, y así nace un núcleo de
testimonio estudiantil evangélico"2.
(Douglas Stewart)
¿Qué es lo básico que debo saber para iniciar un grupo misionero en la universidad?,
¿Qué implica esa responsabilidad?, ¿Cuáles son las ventajas y sus peligros?, ¿Cuáles
son los lineamientos básicos que debo tener en cuenta antes de iniciar?.
Son algunas preguntas que daremos respuesta con el fin de contagiar una visión
misionera a los jóvenes universitarios de las iglesias locales.
La acción misional debe ser asumida, iniciada, establecida, continuada y sostenida por
ellos.3 el estudiante evangélico por un lado es un estudiante comprometido con la
universidad que a la vez es su tierra de misión y por el otro es un misionero que está
comprometido con el Dios Trino que tiene para toda la creación un plan de redención,
donde la universidad está incluida.
Hoy en las universidades del país existe más presencia de jóvenes de iglesias
evangélicas pero son muy pocos con entusiasmo evangelizador y menos las iglesias
locales que los respalden. Las iglesias locales en su mayoría olvidan lo que puede
significar para la iglesia y la sociedad la conversión de un estudiante universitario.
En cambio el gran predicador del siglo XIX Charles Simeon, de Cambridge, cuando en
su iglesia entraba un estudiante, se decía a sí mismo: «¡Ahí van seiscientas personas
más!». Pensar en la gran influencia que pueden llegar a tener en el futuro5, el privilegio
que tiene el joven de acceder a los estudios universitarios entraña la responsabilidad
de ser un agente del reino de Dios en un lugar de estudio, y luego en su lugar de
trabajo profesional.
ALGUNAS QUEJAS HISTÓRICAS QUE TIENEN LAS IGLESIAS FRENTE A LOS GRUPOS
MISIONEROS UNIVERSITARIOS9.
I. Algunos grupos estudiantiles tienen una visión pobre de la iglesia local. Algunos
de ellos actualmente funcionan como iglesias para estudiantes. Y otras más
funcionan estrictamente dentro de sus líneas denominacionalistas. No es de
sorprender entonces que las iglesias locales muestren mucha reserva para
extender su apoyo a la obra estudiantil.
II. Los ancianos de las iglesias se sienten amenazados cuando los estudiantes
hacen preguntas desconcertantes o inteligentes en los estudios bíblicos, ó
cuando los graduados insisten en elevar la calidad del manejo de los asuntos de
la iglesia. El hecho de que estas preguntas no son siempre presentadas en un
espíritu de humildad y discreción simplemente agrava el problema.
III. Una queja común es que creen que las organizaciones para-eclesiásticas
(CBU´s) vacían las iglesias tomando sus recursos humanos y financieros. La
atención de los estudiantes y de otros es fácilmente atraída por los grupos
para-eclesiásticos porque es allí donde “pasan cosas”, por ejemplo: pequeños
grupos de estudio bíblico, conferencias, seminarios de enseñanza, esfuerzos
evangelísticos, etc. En algunos casos toman medidas para desanimar a los
estudiantes de verse involucrados fuera de la iglesia.
En cuanto a (I), es debido al descuido en cuanto a la mala elección del liderazgo en las
CBU´s porque se pone en el liderazgo a estudiantes que recién vienen al grupo y no ha
pasado por los espacios formativos locales o regionales, y en muchos casos sin una
ayuda de un obrero que ayude encontrar una visión de trabajo misionero. (II) En las
CBU´s se ha enfatizado que los estudiantes desarrollen una mente cristiana pero en
muchas ocasiones no un corazón cristiano, es decir uno humilde. Es necesario
fortalecer la formación integral (mente y corazón; intelecto y espíritu) en los grupos
universitarios. (III) Las CBU´s siempre deben tener en cuenta que debe servir a las
iglesias y no servirse de las iglesia. Los movimientos estudiantiles deben siempre
recordar que su vocación humilde pero gloriosa es la de ser un fermento, un
movimiento en marcha dentro del pueblo de Dios, aunque sean frágiles y pequeños.
Ello es más bíblico y realista que convertirse en un movimiento institucional ajeno a
la vida de las iglesias10.
Notas:
1. Citado por Douglas Stewart, La responsabilidad estudiantil en la obra universitaria, pág.2.
2. Ibid;pág.11.
3. Darío López, tomado del resumen CBU: un modelo de misión, pág.4.
4. Samuel Escobar, Una década en tiempo de misión, CIEE, Quito,1987,Págs. 29-30.
5. Michael Green & Alister McGrath, ¿Cómo llegar a ellos? Defendamos y comuniquemos la fe cristiana a
los no creyentes,CLIE,2003,Pág.73
6. Pedro Blowes, Universidad un desafío a la iglesia, Certeza, Buenos aires,2007,pág.16-17.
7. Estas cinco ventajas son tomadas del libro de Douglas Stewart, La responsabilidad estudiantil en la obra
universitaria, págs. 6-7.
8. La responsabilidad estudiantil no significa que toda la iniciativa procede de los estudiantes, o que no
necesitan de la ayuda de los de afuera, es decir, de pastores, profesionales, secretarios de los
movimientos, egresados y amigos. Significa que, si bien la iniciativa a veces viene de otro (para el caso de
empezar un grupo nuevo, por ejemplo), la meta siempre es la de establecer un grupo plenamente
responsable. Y a todas luces queda evidente que esta meta debe determinar los métodos que se emplean
(por ejemplo, en cuanto a las finanzas, ¿se le exige sacrificio o se les da todo servido en bandeja a los
estudiantes?; respecto a la conducción del grupo, ¿se buscan líderes o funcionarios?). Y además,
significa que aunque los estudiantes pidan ayuda de los de afuera (como es necesario y correcto, puesto
que forman parte de la iglesia de Cristo y necesitan de los miembros de ella, con sus dones), no deben
llegar a depender de ellos ni estar subordinados a ellos. Así entendemos y utilizaremos el término
responsabilidad estudiantil".
9. Estas tres quejas históricas más comunes son tomadas del libro de Samuel Escobar ,Bobby Sng ,Oliver
Barclay, El estudiante evangelico,Certeza,1993, págs.21-22.
10. Samuel Escobar, Una década en tiempo de misión, CIEE, Quito,1987,Pág.34.
11. Douglas Stewart, La responsabilidad estudiantil en la obra universitaria,pág.6-7.
12. Samuel Escobar, Una década en tiempo de misión, CIEE, Quito,1987,Pág.32.
13. Ibid;pág.32-33.