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LA ACCION DEL
~ --

ESPI TU
SANT ~
HISTORIA

Las lluvi a s tempranas (años 100 - 550)

PABLO A. DEIROS
"
LA ACCION DEL

EspíRITU
SANTO ~
HISTORIA
Los prim eros 500 años

Los hisrorios del crisrionlsrno rrodkionoles se concentren


especíolrnenre en hisrorior cuestiones irsriructonoles. políricos.
con énfasis sobre reyes, obispos, monjes, ere. ¿Cómo sería uno
hisrorío del resrírnonio crisríono que siguiera el enfoque de
Lucas en Hechos?

Esro es lo ideo de esre libro. Lo acción del Espíritu Sonro en lo


historio es el primer romo de uno rrilogía que recupero de los
fue mes primarios de lo hisrorio del crisri anismo los resnrno nlos
de lo que ha hecho el Espíriru Somo o rrovés de los riernpos .
Capírulo rros copítulo. con gran erudic ión , el ou ror va orondo
o los podres oposró licos. los apologisras y orros como resriqos
de lo acción del Espíriru, según se iba reflejando en m ilagros,
prodigios , señales y especialmeme en el ejerc icio de los dones
espiriruales.

El DR. PABLO A. DEIROS espostor de uno iglesia bautista


renovado en Buenos Aires, Argentino. Durante muchos
años ha sido profesor de historio del cristianismo en el
Seminario Bourísro Internacional, yen numerosos
ocasiones ha sido profesar invitado en seminarios
teológicos como el Southwesrem l3aptist Serninory el
Northern l3aptist Theological Seminaryy el Princeton
Theologicol Seminary. Ha escrito numerosos libros, entre
ellos Latinoamérica en /lomos (obro que escribió con
Carlos Mraida) y Protestantismo en AméricaLatino.

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CARIBE
PABLO A. DEIROS
"
LA ACCION DEL
"
ESPIRlTU
SANTO ~-
HISTORIA
las Lluvias Temp ranas
( a ñ o s 100-550)

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CARIBE
CONHNIDO

Prefacio 5
Introducción 9

1. Los Padres Apostólicos 37


2. Los apologistas griegos 69
3. El cristian ismo del siglo 11 91
4. Heter odoxia y disidencia 119
Edilonal Caribe una d ivisión de Thom as NcJson Publishcrs
5. Oposición y fuente s apócrifas 141
I() 1998 [tlitllri",1C a r ihe 163
6. El cristianismo del siglo 111
E-Moi/: ..xIiloriol('!"1cJ itorialcari1'11:.r.;¡IIl\ 7. El cristia nismo institucio nalizad o 193
"'"'W .editoriafcaribecon¡ 227
8. El movimiento monástico
9. El cristianismo del siglo V 261
ISBN: O-tN 922-J 95_X
Bibliografta citada y consultada 293
Rese rvados lodos 101' derechos.
Prohibida la reproducción [(I(al tl parcial
de esta ob ra sin la debida autorización
de: los a:litur","S.

Impreso cnEE UU.


Pnnted in thc USA
PRffACIO
El Señor os ha dado la primera lluvia a su tiempo, y
o ••

hard descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía


como al principio. Joel 2.23

iI
Existe una continui dad dinámica entre la misión
de Jesús y la misión de la iglesia. Todos los
eva nge lios sinó pticos, qu e describen el ministerio
de Jesús, tienen un final que ind ica el rumbo de
la m isión de la iglesia (M ateo 28 .19-20; Marcos 16.15 ; Lucas
24.45-48). En el caso particular de Lucas, esta co ntinuidad
histór ica de la misión de Jesús e n la Iglesia es afirma da co n
mayo r énfas is. En las últimas líneas de su Evangelio, Lucas
recue rda la prom esa de Jesús: «He aquí, yo enviaré la promesa
de mi Padre sobre vosotros ; pero quedaos VOSotros en la ciudad
de J eru salén, hasta qu e seáis investidos de pod er desde lo alto»
(Lucas 24 .4 9). Es haciendo referencia a esta misma promesa
que Lucas comienza su relato de las primeras ex pe riencias
mis ioneras de la iglesia. «Y estando junto s, les mandó que no
se fu eran de jerusalén, sino que esperasen la pro mesa del Padre,
la c ual, les dijo. oíste is de mí» (Hechos 1.4 ).
El elemento conectivo en tre ambas misiones - la de Jesús
y la de la iglesia es el Espíritu Santo. El mismo Espíritu Santo
que obró po derosamente a 10 la rgo del minister io de Jesús
(Lucas 3.16,22; 4.1,14 ), es el que ope ra en la Iglesia y la llena de
pod er para ir al mu ndo con el testimonio del evangelio del Reino
(H echos 1.8). Co mo señala Yves M.J . Congar: «Para los Hechos
6 L\ ACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN (Jo. HISTORIA PREFACIO 7

de los apóstoles, el Espíritu Santo es esencialmente el principio y sigo ap rendiendo cada día. qu e la acción del Espíritu está
dinámico del testimonio que asegura la expansión de la lgle- test ificada de maner a con tinuada a lo largo del tiempo. toda
sia_. 1 vez qu e los cristianos han estado dispuestos a ser fieles a la
Es precisamente esta cont inuidad hist órico-carismática del misió n enco men dada por Jesús.
ministerio de Jesús en la misión de la Iglesia, el tema central Un trabajo de este tipo no puede llevarse a cabo de manera
de este libro. El eje he rmenéutico de esta historia es la acció n sa licaria. Reconozco la enorme contribución que los estudios
del Espíriru Santo, discernida a partir de sus man ifestaciones de otros historiado res han hecho a mi propia investigación . El
pod erosas y sobrenaturales. Tales manifestacion es co mpren- lecto r enc on trar á mencionad os a algunos de ellos en la bíblío-
den milagros, señales, prodigios y mar avillas. Pero también , y grafía qu e aco mpaña a este volumen . De gran valo r ha sido el
especialmente. tienen que ver con la confrontación con el reino d ictado de un seminario de posgrad o sobre el tema de este libro
de las tinieblas, el choque de poderes, la gue rra espiritual en en el Seminario Internacional Teológico Bautista de Buenos
todos sus niveles, y de manera pa rticular, la liberación de Aires. Las discusio nes en clase y el apo rte de mis estudiantes
per son as demonizadas en el nombre de Jesús y po r la ope ración han sido sumamente enriquecedores.
del Espíritu Santo. De particular significac ión es la co nsidera- Sobre rodas las cosas. este estud io ha sido de mucha
ción de la práctica de los don es espiritua les, ya que el ejercicio bendició n par a mi vida y ministerio. M ientras apre nd ía a ech ar
de los mismos es evidencia palmaria de la operación del mano del pod er y autoridad espirituales que nos han sido dad os
Espíritu en la Iglesia. Co mo herr amientas fund amental es para po r Jesús par a el cumplimiento de nuestr o ministerio (Hechos
la ed ificación de la Iglesia y test imonio de la presenc ia del 1.8) , fui leyendo de una manera diferente los documentos de
Reino .Ír Dios en la historia, los don es car ismáticos son un la historia an tigua de l cristianismo. Comencé a ver cosas que
eler.rento testimonial valioso de la acción del Espír itu Santo en antes no veía. Y me dí cuenca de que había una historia que no
la histori a. había sido narrada : la acción poderosa del Espíri tu Santo en
Este libro es el resultado directo de mi prop io peregrinaje medio de su pu eblo. Con oración y temblor me propuse
espi ritual y ministerial. Por haber sido formado en una trad i- recupera r tales hechos, utilizando la metodología de Lucas, es
ción evangélica no carismática , fue necesari o un larg o proc eso decir, ..escribir la historia de Jos hechos sucedidos ...• tal Ycomo
de lucha personal hasta descubrir la vigencia y valor de las nos los enseñaro n qu ienes, habiéndolos visto desde el comien-
manifestaciones del Espíritu arriba mencionadas. Sin embargo. zo. recibieron el encargo de anunciar el mensaje. (l.ucas 1.1-2,
guiad o por la Palabra de Dios y enseñado po r el Espíritu Santo. VP).
no solo llegué a conocer de primera man o el pod er de Dios. Si estas páginas sirven no solo para llenar una curiosidad
sino a recon ocer también que su acción poderosa no quedó histó rica, sino para desp ertar en el lector un anhelo ferviente
circunscripta a los tiempos bíblicos. Por mi expe riencia perso- po r ser llen o del Espíritu Santo, procurar los mejores dones
nal. de scubrí y sigo de scubriend o cada día. qu e la acció n del espirituales, estar abierto a ser utilizado por el Seño r para
Espíritu sigue siendo la misma que la que testifica Lucas en el pro ducir milagros, seña les y pr odigi os, y confro ntar con vic-
libro de los Hechos. Por mi investigación de la historia. aprendí to ria a las huestes de maldad. considerar é satisfecho mi deseo
y oración. Quien inicia o profundiza este proceso de vivir su
fe cristiana en un plano sobrenat ural y caris mático pued e esta r
l. Yves M.J. Congar, El Esplritu Santo, Editorial Herder, Barcelona, seguro. como demuestran las páginas que sigue n, que lo hace
1983, p. 7 1. aco mpañado de una com pañía de muchísimos santos que
8 LA ACCIÓN DEL Es píRlTU SANT O EN u.. HISTORIA
supieron dar lugar a la operación del Espíritu Santo en sus
vidas, y a través de ellos, en el mundo. «Por eso, nosotros,
teniendo a nuestro alrededor tantas personas qu e han demos-
trad o su fe, dejemos a un lad o todo lo que nos esto rba y el
pecad o que nos enreda, y co rra mos con forta leza la carrera qu e
tenemos po r delante» (Hec hos 12.1, VP). INTRODUCCiÓN
Dr. Pablo A. Deiros
Buenos Aires, Argentina

11
s correcto conside rar a Penrecosr és,según H echos
2, como el día de nacimiento de la iglesia cristia-
na. Sin embargo, Pentecostés fue posible solo
gracias a la resurrección de Cristo. La presencia
viva del Seño r a través del Espír itu Santo, que otorgaba a sus
seguido res el poder necesario para testificar de Él en todo el
mundo , es lo que constituye a la Iglesia (Hechos 1.8). H asta e!
advenimiento de! Espíritu, los discípu los no habí an testificad o
de la resurrección del Señor. Por lo tanto, un elemento fund a-
menta l del mensaje del evangelio fue incorporado a la procla-
mación fervorosa de aquellos seguidores de jesús.
En Pentecostés se cumplieron las pro mesas de Dios a su
pueblo (Hech os 2.17 ; véasejoel2.28-32) . También se hicieron
realidad las pr omesas de j esús (Luces 24.49; Hechos 1.4 -5 ;
véase Ju an 15.26; 16.7 ; 20.22). La entrega del Espíritu Santo
a diez de los Doce en la noche del día de la resur rección Oudas
había dese rtado y To más estaba ause nte), según Ju an 20.22,
parece contra decir el relato en Hech os 1.4 -8 y 2.4. El Evange-
lio de Ju an no se preocup a mucho en cuanto a fechas, sino que
su prop ósito es mostra r que el Espíritu San to es el don del
Cristo resucitado. Hechos coincide co n este concepto (2.33),
pero seguramente está acertado en fechar la dación del Espírit u
Sama algunas semanas después de la resurrección.
La venida del Espíritu Santo se hizo evidente a través de
fenómenos físicos audibles (eesttu endc ») y visuales {de nguas
como de fuego »} ; fenómenos espirituales (efuercn todos llenos
del Espíritu Santc »}; y fenómenos inrelectivos (ecomenzaron a
10 L\ ACCiÓN DEL Esetnr ru SANTO EN LA HISTORIA INTRODUCCiÓN 11

hablar en ot ras lenguas..). Esto último es lo que más ha captado Los discípulos todavía no ten ían claro hacia dó nde les
el inte rés de los estudiantes de la Biblia. llevaría la experiencia de Pentecostés. Pero en los siglos que
El uso de ..todos.. (gr. pantes) en el pasaje indica que tod os siguiero n, los cristianos miraron a aquel evento como la clave
los int egrante s del grupo recibieron el Espíritu Santo y hab la- para la definición de la natu raleza de la Iglesia y el cumplimien-
ron en otras lenguas o idiom as. Estas ..lenguas » (glossais) son ro de su misión. Como observaría más tarde Clemente de Roma:
diferentes de las que Pablo menciona en 1 Co rint ios 12 y 14. - Habiendo recibido sus órde nes, y estando plename nte seguros
Las lenguas de Corinto eran ininteligibles a menos que se las po r la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, y establecidos
inte rp reta ra, y eran el resultado de una expe riencia de carácte r en la palabra de Dios, con la plena seguridad que da el Espíritu
emocional y extático. Su propósito era la edificación espiritual Santo, partieron a proclamar que el Reino de Dios estaba
y personal de los creyentes (l Corintios 14.4) . En cambio las cerca-e! El libro de los Hechos presenta a los apóstoles como
lenguas de Pentecostés eran inteligibles y su propósito era la personas que saliero n al cumplimiento de su misión eq uipados
comunicación del evangelio a los incrédulos. Para Lucas, ellas con el Espíritu Sanro.t Fue esta participac ión activa del Espíritu
simbo lizaban el alcance mundial del mensaje cristiano (Hechos la qu e lo constituye en el protagonista pr incipal de la primera
2.8-11).
expansión del cristianismo . Su ob ra poderosa a través de los
Sin embargo, lo más imporranre en aquel día no fueron apó sto les, testificada po r el libro de los Hechos, fue clave para
las lenguas o idiomas co n los que los creyentes testificaron , sino
el crecimiento ta n notable de la fe cristiana . Los agente s de esta
su mensaje y el entusi asmo con que lo comunicaron. la venida
tarea fueron personas preñadas del Espíritu San to. Como
del Espíritu Santo significó una inyección de gozo. La fe no es
señalara Tomás de Aquino, fueron personalidades penetradas
una cuestión meramente intelectual, sino que tiene que ver con
toda la persona, incluidas las emociones. En realidad, la fe y co nfiguradas por el Espíritu Santo)
cristiana es el resultado de la experiencia cristiana. No puede Parece evidente , cuando uno lee los relatos en el libro de
haber una aut éntica fe cristiana, si no hay previamente una los Hechos y considera el testimon io de los Padres Apostólicos,
experiencia personal con Cristo . El testimonio del apóstol Juan que aquellos hombres y mujeres dispo nían y ejercitaban un
es, precisamente, que son los hechos redentores de Cristo y las poder sobrenatural que les venía del Espírit u Santo , y que
señales co ncreras de los mismos los que mueven a la fe en Él explica la efectividad sorprendente de su testimoni o cristia no .
co mo el Mesías y el Hijo de Dios. Dice Ju an en relació n con El destacado historiador Kennerh S. Latourerte llama la aten -
las señales que hizo Jesús, algunas de las cua les él registró en ción sobre este hecho, cuando afirma: ..Los disd pulos, co mo
su Evangelio : . Éstas se han escrito para que creáis que Jesús es otros hombres y cristianos de rodas los siglos, continuaban
el Cristo , el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengá is vida en siendo humanos. Sin embargo, en ellos hubo un poder, una
su nom bre.. (luan 20.31). Además, la venida del Espíritu Santo vida que les vino por medio de Jesús, el cual obraba una
significó el cumplimiento de las promesas del Señor y el fin de transfo rmación mo ral y espir itual. Aquel poder y aq uella vida
la espe ra. Desde ese momento en adelante los discípu los debían
hablar del Cristo vivo. El don del Espíritu significaba también
que tendrían un poder sobre natural para hacerlo. El gozo l. Clemente de Roma, Carta a fos Corint ios, 42 .3.
2. W. Mundle, ..Das Apostelbild der Aposrelgeschichre-, Zeit schri(t (ür
emocional de todos modos no fue lo más impo rtante, sino este die neutes tam entliche Wíssenscha(t 27 (1928): 36·54.
nuevo pode r para testificar, para sanar, para confrontar los l. Antoine Lemo nnycr, ..Les Apórres comme docteurs de la foi d'ap res S.
pod eres de las tinieblas, y para soportar el rechazo. Thomas-, Mélanges Thomistes (1923): 153·1 73.
12 LA ACCIÓN DEL EsrlRITu SANTO EN LA HISTü RlA INTRODUCCIÓN 13

resultaron contagiosos. El relato de la operac ión de aquel cu enta la op eración so brena tu ra l del Espír itu Santo en la
pode r y aquella vida en los siglos siguientes es la historia del Iglesia y a lo largo de la historia. Si se de ja de lado ta l
cristianis mo." ope ració n y no se evalúan convenient eme nte sus mú ltiples
H asta aquí la mayoría de los evangélicos guarda bastante ma nifestacio nes, la fe cr istia na queda vacía de co nt enido y
co nsenso en cuanto a la obra y man ifestaciones del Espíritu pierde su raz 6n de ser. Lo que es peo r: la Iglesia co mo
Santo. Pero , équ épasó después de qu e el último ap óstol murió ? exp resi6n po de rosa de la acci ón d el Espírit u termina siendo
¿Q ué ocurrió a partir del final de la era apostó lica? ¿Q ué impote nte, d ébil o muerta.
man ifestaciones de la acción y pod er del Espíritu Santo se No obstante, hoy co mo ayer , hay quie nes niegan la conti-
pueden enco ntrar con posterio ridad a la redacción de los nuidad histó rica de la acci ón maravillosa del Espí ritu Santo, tal
escritos apo stó licos y después de la formación del canon como está testificada en el primer períod o de la histo ria del
neotestamenrario ? cristianismo, y segú n está document ada especia lmente en el
Algunos estud iosos encuentran suficientes testimonios a libro de los H echos. Y otros, si bien no niegan tal acción
lo largo de to da la historia del cr istianismo, como para insistir poderosa, sí la limitan conforme a cánones hermenéuticos y
en qu e el Espíritu Santo, como agente de la ob ra red ent ora de prejuicios propios, ajenos a lo qu e aprendemos del Espíritu y
Dios, ha co ntinuado oper ando de la misma ma nera en que lo de su acci6n según el Nuevo Testamento. En un sentido, es
hizo en tie mpos neorestam entarios. Su fe en el Espíritu Santo corr ecta la afir mación de un especialista en este tema, como es
como Dios en acción los lleva a ver , a lo lar go de los siglos, Henry Barclay Swete: «Cuando el estudiante de la literatu ra
indicios ciertos de las mani festaciones poderosas de la obra del cristiana temprana pasa del Nuevo Testam ento a los escritores
Espíritu. No son pocos los que subscribirían las afirmaciones posca n6 nicos, nota una pér dida de po der tanto lite rar io como
de Charles W illiams: espiritual ... Los gigantes espirituales de la era apostólica son
sucedidos po r hombres de menor estatura y de más pobre
La historia de la cristiandad es la historia de una operación. capacidade s Sin embargo, este hecho no es suficiente argu -
Es una op eración del Espíritu Santo hacia C risto , bajo las mento para negar rotu ndamente to da manifestación del Espí-
condiciones de nuestra humanidad ; y fue nuestr a huma ni- ritu en los siglos que siguiero n a la era apos t ólica. Q ue el calibre
dad la que dio la señal, com o ocurrió, para esa o peración. espiritu al de los agentes humanos de la m isi ón en tiempos
El comienzo visible de la Iglesia es en Penteco stés, pero eso postapostólicos haya resultado comparativamente inferior al
es solo un resultado de su comienzo -y fin- real en los de los prime ro s testigos de la fe, no es un hech o que anule
cielos.s sumariament e la acció n y manifestación del Espír itu Santo.
Por otro lado, se ha señalado qu e la mayoría de los
No se puede entender la histori a del cristianismo y la suceso res de los ap6 stoles y muc hos de los pad res de la iglesia
supervivenc ia y tran smisión de la fe cristiana sin to ma r en antigua no men cionan co n la frecuencia qu e sería de esperar

4. Kenneth S. Latourette, Historia del cristianismo, 2 vals. Casa Bautista


de Publicaciones, El Paso, 1959, 1:95. 6. Henry Bard ay Swete, The Holy Spirit in the Ancient Church: A Study
s. Charles Williams, The Deseent o{ the Dove: The History o{ the Hofy o{ Christian Teacbíng in the Age o{ the Fathers, Maemillan, Londres,
Spirit in the Church, Meridian Books, Nueva York, 1956, 1. 1912, p. 3.
14 LA ACCIÓN DEL ESP!RlTU SANTO EN LA HISTORIA If'fTRO DUCCI6 N 15

los diversos ca rismas qu e se mencionan en el Nuevo T esramen- Hechos de los Apóstoles.., los historiado res que le siguieron
ro.? Aquf conviene co nside ra r lo que Eusebius A. Stepha nou desde Eusebio de Cesarea en adelante han co metido el mismo
señala, cuan do arguye qu e ese aparente silencio en cua nto a los err or. En lugar de honrar a quien da sentido y pod er a la Iglesia,
carismas no sugiere su ausencia ni fa lta de ejercicio en la iglesia se han limitado a dar gloria y lustre a obispos y reyes, papas y
antigua, del mismo mod o qu e la falta de referencias a cien os mo njes, y a exaltar el desarrollo de instituciones y organizacio-
libros del Nuevo Testamento no es evidencia de su rechazo nes humanas.
como no inspirados. ..No podemos lógicamente esperar que Este desplazamiento del Espíriru Santo y su rol protagó-
un maestro o pastor incluyera la (Oralidad de las creencias y nico com o capacitador de la Iglesia en el cumplimiento de su
prácticas cada vez que tomaba la pluma para escr ibirs. f misión de proclamar el advenim iento del Reino de Dios, se ha
En realidad, la clave de esta cuestión no es la falta de de bido a muchos factores, entr e los cuales cabe mencionar las
evidencias de la acción del Espíritu Santo a lo largo de la co nclusiones a las que ha llegado e! cesacionismo y e! d ispen-
histo ria, sino nuestra igno rancia de las misma s. Casi todos los sacio nalismo.
cristianos afirmarán su fe en el Espíritu y utilizarán su nombre,
pero no tendrán muy en claro su co nocimiento de Él y mucho El cesacionismo
meno s de su acció n a tr avés d e los siglos. Sranley M . Burgess
concluye: ..El Espíritu ha sido siempre el "lado oscuro de la El concepto cesacionisra afirma que los d ones espirituales
luna" en la teología cristiana. Su persona ha sido ignorada po r enumerados po r e! apósto l Pablo en 1 Co rintios 12 y otros
mucho tiempo y su o bra no ha sido muy reconocida•. 9 carismas y manifestacio nes del Espíritu San to no perm anecie-
ro n en ejercicio en la Iglesia a part ir de fines del pr imer siglo.
Si lo que señala Burgess es cieno respecto de la teo logía
Este concepto cesacionista com ienza a aparecer una vez que el
cristiana, lo es muchfsimo más en relación con la histo riografía cristianismo logra asentarse y ganar reconocimiento en el
cristiana. El Espíritu Santo ha sido el gran ausente en los ámbito del Imperio Rom ano. A medida que la Iglesia fue
estudios de historia del cristianismo. Si la obra de Lucas, en creciendo en pod er y autosuficiencia co n el respaldo del Estado
lugar de llevar po r tfrulc ..Los Hechos del Espíritu Santo.., (desde Cons ta ntino en adelante) , fue perdie nd o poco a poco
como debiera, ha sido injusta y equivocadamente titul ada ..Los su co nfianza en lo sobrenatu ral y milagroso. la iglesia co menzó
a d escansar más y más en el ritual y los sacramento s como las
ex presiones más adecuadas de la fe cristiana, y en la introduc-
7. U expresión -pad res de /2 iglesia_ se refiere especi21rnente 2 aquellos ción del fetichismo y el sacerdcralismc com o administrado res
escrito res cristianos que se caracte rizaron por expresar sus enseñanzas del poder divino.
dentro de lo que se consideraba era la doct rina ortodoxa (..sana El movimiento de renovación rep resentado por el monta-
dccr rina-) de la Iglesia. Se destacaron por su santidad de vida, la
aprobaci ón colectiva de sus escritos y su antigüedad. Por -anngüedad- nismo, hacia fines de! segundo siglo, significó un inte nto por
se entiende el periodo que va desde fines del primer siglo hasta Gregorio recuperar el ejercicio de los dones del Espíritu y volver a la
el Grande (604) o Isidoro de Sevilla (636 ) en Occidente, y Juan co nfianza en su poder. Pero el mo nta nismo fue co nde nado
Damasceno (749) en el este. co mo her eje por la iglesia ya esta blecida. La causa principa l
e. Eusebius A. Srephanou,«T be Charismara in the Early Cburch Parbers-,
The Greek Drthodox Theological Review 21, Summer 1976, 125· 146. de este recha zo no fue el ejercicio d e los carismas, sino la
9. Stanley M. Burgess, The Holy Spirit: Aneient Christian Tradítion Hen- apa rente pretensión de Montano de qu e sus declaracione s eran
drickson Publishcrs, Peabody, Mass. 1994, 1. iguales en autoridad a las de las Escrituras. Como reacción al
16 LAACCIÓN DEL ESpiRITU SANTO EN LA HISTORIA INT RODUCCIÓN 17

montan ismo y sus supuestos excesos, muc hos comenzaron a De esta manera, la cesación de los carismas se transfo rmó en
afir ma r que los carismas más sensacionales habían ter minado una parte de la teología clásica de la Iglesia.
con el ccmpletamiento del canon escrit urario. Esta fue la Vinso n Synan comenta sobre el particular:
opin ión de Agustín de Hi pona (354 43 0) y de m uchos otros
v

teólogos en los siglos que siguiero n. Sobre la cuestión de las


La exagerada reacción al monta nismo, que llevó a la creen-
lenguas, dice Agustín :
cia de que los carismas terminaro n con la edad a postóli ca
continuó hasta tie mpos modernos. Si bien la Iglesia Cató-
En los co mienzos de la Iglesia, el Espírit u San to cayó sob re
lica Romana dejóla puerta abier ta para los milagros en las
los creyentes, y ellos hablaron con lenguas no apren didas,
vidas de ciertos santos (algunos pocos de los cuales se dice
según el Espí ritu les daba que hab lasen . Esto fue una señal,
que hablaron en lenguas y produje ron milagros de sani-
adecuada para ese tiempo: tod as las lenguas del mun do
dad), la iglesia tend ió más y más a enseñar que los milagros
eran un significado adecuado del Espíritu Santo, porque el
de la edad apostólica terminaro n con la iglesia te mprana.
evangelio de Dios iba a tene r su curso a través de toda
Con la inst ituciona lización de la Iglesia, los carismas menos
lengua en todas las partes de la tierra. La señal fue dada y
espec tacu lares de gobierno, administra ción y enseñan za
luego pasó. No sot ros ya no esperamos que aquellos sobre
pasaro n al frente como los dones más aceptables al alcance
qu ienes la mano es impuesta para que pue dan recibir el
de la jerarquía. 12
Espíritu Santo, hablarán con lenguas. Cua ndo impusimos
nuestras mano s sobre estos ..infantes», los recién nacidos
miembros de la Iglesia, ninguno de vosotros (pienso) espe- La teoría cesacionista recibió su expresión clásica co n Juan
ró ver si ellos hablarían con lenguas, o viendo qu e no lo Crisóstomo, en el siglo IV, a través de sus homilías sobre 1
hicieron, tuvo la perve rsidad de argüir qu e ellos no había n Co rintios 12. Esre gran predicador no negaba el ejercicio de
recibido el Espíritu Santo, porque si ellos lo hubieran los dones en la iglesia de riempos neotestamentar ios, pero sí
recibido, habrían habla do en lenguas como sucedió al dejaba en claro que tales carismas habían terminado had a
principio.te tiem po. Confesando su ignorancia sobre el tema, Crisósromo
escribió en relación con 1 Corintios 12.4-11:
En cuanto a los otros dones extraordinarios del Espíritu,
la «teo ría cesacio nista» de Agustín tuvo mucha influencia sobre Todo este lugar es mu y oscuro : pe ro la oscuridad es
las generacio nes subsiguientes de teólogos. Agustín afirma: pro ducida por nues tra ignorancia de los hechos a los que
«é l 'or qué, se pregunta, Jos milagros no ocurren en nuestros se hace referencia y a su cesación, siendo qu e como tales
días, así como ocurrieron en tiempos anter iores? Yo podría solían ocurr ir, pero ahora ya no tienen lugar. ¿y por qué
responder qu e ellos fuero n necesarios ento nces, antes de que no ocurren ahor a? Porque, mirad ahora, la causa de la
el mundo llegara a creer, en orden a ganar la fe del mundo .U oscuridad tamb ién ha pro ducido en nosotros ot ra pregun-
ta: esto es, épor qué ocurri eron en tonc es, y aho ra no lo

10. Citado en Warren Lewis, Witnesses so the Holy Spirit, j udson Press,
1978, 121. 12. Vinson Synan, In the w tter Days: The Outpo uring of the Ho/y Spirit
11. Ibid., p. 122. in the Twentieth Century, Servara Books, Ann Arbor, MI, 1984,28.
18 LA ACCIÓN DEL EsplRITU SANTO EN LA HISTO RIA INTRODUCCiÓN 19

hacen más? .. Bien, équé fue lo que pasó entonces? Quien - la Iglesia hubo sido reunida y confirmada por estas señales,
quiera que era bautizado hablaba inmediatamente en len- no hubo necesidad de que cont inuara este envío visible del
guas y no solo con lenguas, sino que muchos también Espíritu Santo. te
profe tizaban , y algunos had an muchas ob ras maravillo-
sas... pero más ab un dante q ue ninguna otra cosa era el don Esta era la posición de Martín Lutero, quien abierta menre
de lenguas entre ellos.13 rechazó a los Schwórmer o entusiastasde sus días. Estos entusias-
tas insistían en el ejercicio y la vigencia de algunos do nes
espiritua les, especialmente el de pro fecía, y enseñaban que la
Los reformadores del siglo XVI respondieron a la deman- «voz interior » del Espíritu debía ser más seguida que la «voz
da de los católicos romanos de presentar milagros como evi- exterior» de las Escriruras.U Siguiendo el énfasis lutera no
dencias de autenticidad. utilizando los argumentos clásicos sobre la sola scriptura, Adolf von Harnack señala que don es
elaborados por Agustín y Cr isósto mo . Par a los protestantes del como el de profecía cesaron con el esrablecimiento del canon.
siglo XVI, tod as las mani festacion es sobrenaturales del Espíritu Dice él:
Sant o habían cesado. Desde la Refo rma en adelante, entonces,
destacado s teólogos pro testant es popularizaron el concepto de
El Nuev o Testamento, si bien no todo al mismo tiempo,
qu e la obra del Espíritu Santo y sus manifestacion es quedaron
puso fin a la situación en la que era posible para cualquier
reducidas a la predicación y enseñanza de la Palabra de Dios.
cristiano bajo la inspiración del Espíritu dar revelaciones o
Según ellos, los don es, señales, prodigios, milagros y maravillas
instrucciones autor itat ivas. Del mismo modo, previno la
dejaron de tener vigencia ant es de que el primer siglo termina-
creencia en las creaciones fantasiosas con las que tales
ra. La acción pod erosa del Espíritu qued aba redu cida, de este hombres enri queciero n la historia del pasado, y destruyó
modo , a una tarea de iluminación de la Palabra po r Él inspira- sus prete nsiones de leer el futuro. Así como la creació n del
da. Según Lutero: canon, si bien no de manera tajante y rápida, fijó el período
de la producción de los hechos sagrados, del mismo modo
El Espíritu Santo es enviado de dos maneras. En la iglesia descalificó para la fe pública toda pretensión de profecía
pri mitiva Él fue enviado de una manera visible y manifiesta. cristiana. te
Es así como descendió sobre Jesús en el Jordán en la forma
de una paloma (M ateo 3.16), y sobre los apósto les y otros Esra oposición o confro ntación ent re Escritu ra y Espíritu,
creyentes en la forma de fuego (Hechos 2.3). Este fue el que termina por afirmar que la profecía inspirada no puede
primer envío del Espíritu Santo ; esto fue necesar io en la coex istir con un cano n escriturario inspirad o, ha sido sostenida
iglesia primitiva, que tenía que establecerse con señales
por muchos auto res, con posterioridad a la Reforma. Según
visibles por causa de los incrédulos, como testifica Pablo.
algunos, toda inspiración del Espíritu terminó una vez que las
1 Cori ntios 14.22 : ..Las lenguas son para señal, no para los
que creen sino para los incrédulos». Pero más tarde , cuando
14. Citado en Lewis, Witnesses to the Holy SPirit, 173.
15. Latourene, Historia del cristianismo, 2:72.
!J. Juan Crisóstomo, Homiffas sobrelas Epfstolas de Pablo a los Corintios, 16. Adolf von Harnack, History of Dogma, 7 vals. Russcll and Russell,
Homilía 19.1. Nueva York, 1958,2:53.
20 LA ACCiÓ N DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA INTRODUCCiÓ N 21

escrituras del Nuevo Testamento quedaron termin adas y su grado de revelación o inspi raci ón divina. De igual modo ,
canon fue esrablecido. t? descalificaba el ejercicio de todo don espiritual especial. Para
La fuerte convicción de Lutero y del prote stantismo en él este tipo de experiencias eran pobres substitutos subjetivos
general sobre la autoridad de la Biblia ha continuado hasta de la autor idad e integridad de las Escrituras. Warfield ad mitía
nuestros días entre los evangélicos. Pero en algunos casos, el que se podía caracte rizar a la iglesia apostólica como una iglesia
énfas is sobre la proclamación de la Palabra ha ido acompañado en la qu e operaban los milagros y ot ras manifestacio nes del
de un concepto cesacioni sta en cuanto a los dones y otras Espíritu . Pero, se pregunta : « Cuaorc tiempo continuó este
manifestaciones del Espfriru Santo. Se afirma que las señales, estado de cosas?.. Su respuesta es:
prodigios y maravillas que ocur rieron durante el primer siglo
cristiano, según testifica el Nuevo Testamento, ya no ocurren Esta fue la peculiaridad característica de específicamente la
o han dejado de ser necesarios. Se dice que con el comp leta- iglesia apostólica, y, por Jo tanto, pertenecía exclu sivamen-
miento de tos escritos neoresramenrarios y la fijación de su te a la edad apo stólica... Estos dones ... fueron distintiva-
canon ya tenemos to do lo que hace falta par a la fe y la práctica me nte la a utent icación de los apóst oles. Fueron parte de
cristianas. Por otro lado. tales manifestaciones carismáticas las cred encial es de los apó stoles como los agentes autori-
quizás fuero n necesarias para autenticar los co mienzos del zados de Dios para la fundación de la Iglesia. Su funci ón.
testimon io cristiano en el mundo, pero al habe r encontrado su pue s, los confina distinrivarnenre a la iglesia apostólica , y
lugar en la historia. el cristianismo ya no requ iere de tales necesaria mente pasaron con ella.t v
demostraciones de poder . Su poder aho ra está en el testimon io
fiel de la Iglesia, en conformidad con la Palabra escrita en la
Biblia. Según Warfield, si hubo algún tipo de manifestación de tipo
Vinson Synan concluye : . A través de los siglos, entonces. sobrenatural, esta no debe ser considerada como acción del
la cristiandad. en sus ramas católica romana y protestante. Espíritu Santo, sino como supersticiones propias de la cultura
ado ptó el concepto de que los don es sobrenatu rales y especta- greco-romana pagana inyectadas dentro de la iglesia. Si bien es
culares del Espíriru habían termina do con la iglesia temprana cierro que muchas supersticiones paganas se introdujeron en la
y que, con el complerarnienrc del canon inspirado de las Iglesia alrededor y antes del año 200, esto no es un argumento
escrituras, jamás volverían a ser necesarios ». 18 convincente para descalificar la validez y operación de los dones
Como se indicó, esta posición ha tenido voceros desde la y manifestaciones del Espíritu para ese tiempo. ni fundamento
Refor ma hasta nuestros d ías. para afirmar que los mismos cesaron con el fin de la era apostó-
Entre los más recientes cabe mencionar a Benjamín B. lica. Como se verá más adelante, los operaciones del Espfritu
Warfield (185 1· 1921), profeso r de teo logía en el Seminario fueron muy importantes en el período apostólico, pero no
Teológico de Princeton. Warfield se opo nía terminantement e estuvieron limitadas al mismo. Lo que Pablo afirma en 1Corin tios
a todo tipo de experiencia religiosa que pret endiera algún 13.8-12, no fundamenta la cesación de los carismas con el fin de
la era apostólica o el compleramiento del canon, como afirma
Warfie1d, sino que señala a la Segunda Venida de Cristo como
17. Véase Edwln Cyril Blackman, MarcionandHíslntluence, SPCK, Londres,
1948, p. 33-35; YRoben M. Gram, The Letter and the Spirit, Macmi-
lIan, Nueva York, 1957, p. 75. 19. Beniamin B. Warfield, Counterfeit Mirad es, Charles Scribner's Sons,
18. Synan, In tbe Latter Days, 30. Nueva York, 1918, 5-6.
22 LA ACCIÓN DEL EsplRITU SANTO EN LA HISTORIA INT RO DUCCIÓN 23

el tiempo cuando la necesidad del ministerio de los don es La co nclusión de Smeaton (que publicó su libro por
llegará a su fin. La inform ación histórica sugiere que el flujo primera vez en 1882) ha ejercido un a notable influencia en
inicial de la obra poderosa del Espíritu sobrevivió a los após- los med io s evangélicos y en su interpretació n d e la vigencia
tol es por varias generaciones. de las man ifestaciones del Espíritu Sant o. Algunos historia-
No obstante, los vocero s del cesacio nismo ha n insistido dores, sin mucho análi sis crítico y guiad os por precon cep ros
en negar rodo testimonio de man ifestaciones externas o inter- o planteas a priori (como el dispensaci o nalismo) , han llega-
nas de la acción del Espíritu Santo, com o espúreo o falso. En do a conclusion es similares. A p rincip ios de siglo, Samuel G.
un libro muy ap reciado como de especial valo r en cuanto a la G reen escribió :
doctrina del Espíritu Santo desde una perspectiva evangélica,
su autor, George Smearon, se pregunta : Cuando emergemos en el segundo siglo, estamos, en buena
medida, en un mundo cambiado. Ya no está vigente la
¿Se le garantiza a la Iglesia qu e espere algunas revelaciones autor idad apo stólica en la comunidad cristiana; los mila-
inmediatas o visiones proféticas adicionales, después de gros apostó licos han pasado... No podemos dudar de que
que el canon de la Escritura fue cerrado ? La Iglesia antigua, había un prop ósito divino en separar la era de la inspiración
en contra de los mont anistas, respondió en la negativa. No y los milagros del tiempo subsiguiente, con una línea de
se trató de la cuestión de lo que Dios puede hacer, sino de límite tan amplia y deñnida.zt
si Él comunica algunas revelaciones adicionales del consejo
de su volunta d, además de la palabra escrita. Y la discusión En realidad , más que un testimonio de cesación de los
de esta cuestión con los montanistas ancló a la Iglesia en la carismas, lo que encontramos en los pad res de la iglesia es
convicción de que es temerario e injustificable esperar evide ncia del creciente choq ue entre un orden eclesiástico en
cualquier manifestación extra del Espíritu de Dios, y que proceso de institucionalización y el espíritu de profecía inspi-
las revelaciones inmediatas deben ser vistas más bien como rada y otros don es espirituales que luchaban por sobrevivir. En
emanando del adversario disfrazado de ángel de luz. Al otros térm inos, lo que vemos es el testimonio siempre presente,
argumento de que la Iglesia debe gozar de los dones a lo largo de toda la historia del cristianismo, de la tensión
milagrosos extraordinarios, y de que ella Jos ha perdido por ent re lo objetivo y lo subjetivo de la fe, entr e el dogma do ctr inal
su prop ia falta y a través de su propia incredulidad, la y la experiencia religiosa, entre el dominio de la razón y la
respuesta ento nces dada fue que los dones extraordinarios
vivencia de la fe. No obstante, como se verá más ade lante,
jamás fueron pro metidos a la Iglesia como una herencia
«antes de juan Crisóstomo (A.D. 347A 07 ) en el este y Agustín
permanente, con posterioridad al cierre del canon. Y ese
de Hipona (A.D. 354A3 0) en el oeste, ningún padre de la
tipo de argumento ha sido confirmado por la exp eriencia
iglesia sugirió que alguno o todos los carismata fueron solo
inquebrantable de casi dos milenios, que testifican que ellos
para la iglesia del pr imer siglo».22
fuero n quitados, y que no deben ser considerados como
perdidos po r su pro pia falta.zú
21. Samuel G. Green, Handbook of Church History; From the Apostolic
Era to the Daum of the Reformation, Religious Traer Scciery, Londres,
20. George Smeaton, The Doctrine of the Holy Spirit , The Banner oí Truth 1907, 22.
Trust, Londres, 1961, 266-267. 22. Burgess, Ancient Christian Tradítions, 14.
24 LA ACCIÓN DEL ESpíRITU SANTO EN LA HISTORIA INTRODUCC1ÓN 25

El dispen sacional ismo dispensación apostólica y el resto de la histo ria de la iglesia.


En el último siglo, los argumentos cesacionisras han estado Esta línea divisor ia marca el límite entre lo milagroso y lo no
ligad os funda menta lmente a una aproximación dispensaciona- milagro so .
Los dispensacicn alistas, que sostienen un concepto cesa-
lista de la historia. El dispensacionalismo es esa corriente
cio nista, enseña n que Dios utilizó las señales sobre naturales y
teológica que interpreta la histo ria hum ana co mo dividida en
los milagros con e! pro pósito de establecer su iglesia y auten-
difer ent es etapas o dispensacion es. Cada una de ellas es carac-
ticar la pr edicació n de! evangelio por los apóstoles. Las seña les,
terizada con mati ces par ticulares. En cada dispen sación, Dios
prodi gios y milagros del Espíritu, en co nsecue ncia, estuv ieron
actúa de manera diferente. Como doctrina teológica plena- limitad os a ese per íod o particular de la histor ia. Los así llama-
mente art iculada, el dispensacionalismo es relat ivamente re- dos «do nes extrao rd inarios» cesaro n con la muer te del últim o
ciente. Generalmente viene acompañado de una escatología apóstol, allá por los años 100 a 150. Según otros, tal cesación
premilenialisra. El dispensacion alismo moderno ha sido desa- ocurrió cuando el canon de las Escritu ras fue co mpletado en
rrollad o por J. N elson Darby (1800 -1882), uno de los funda- e! tercer o cuarto siglo.
dores de la deno minación de los hermanos libres, a principios Co n increíb le ingenuidad histórica y con una exégesis
de! siglo pasado. Esta corr iente se popular izó en los círculos deficie nte , las palabras de 1 Co rintios 13 .10 son tomadas para
conservado res y fund amentalisras de los Estad os Unido s, gra- fundamentar esta po sición : «M as cuando venga lo perfecto (e!
cias a las anotaciones de Cyrus Ingerson Scofield (1843-1921) cano n de las Sagrada s Escrituras), entonces lo que es en parte
y e.e. Ryrie en sus correspond ientes ediciones de la Biblia, y (los dones y manife stacion es del Espíritu) se acabará». Está
sus muchas publicacion es. También encontró eco en e! Semi- demás decir que muchos ex égeras mod ern os está n co nvencidos
nar io Teológico de Dallas (Texas) y en e! Institu to Bíblico de qu e «lo perfecto » (téJe jos) se refiere a encontrarse cara a cara
M ood y (Chicago). co n Jesucristo en su Segunda Venida y no al cierre del cano n
Dentro de! marco dispensacionalista, el rol de Dios y lo escritu rario, como arbitrariame nte arguyen algunos dispensa-
sobrenatural es plenamente reconocido. En este sentido, este cionalistas .
acerc am iento es «evangélico », co n una alta valo ración de la Co mo ya se indicó, tanto Lutero como Calvino afirmaron
doct rina de la revelación de Dios en las Escritu ras. Es precisa- la cesació n de los milagros. Par ece ser que ambos estaban
mente por el hecho de qu e los milagros y caris mas del Espír itu interesados, por un lado. en con tr arresta r los excesos de los
en la Biblia son tomados co n tanta seriedad, que la teo ría rad icales ana bautistas, que pretend ían tener revelaciones «ex-
dispensacion alista considera que los mismos están ausentes en tra- bíblicas» especiales. Por el otro lado, querían rechazar las
la Iglesia hoy. pretensiones sup uesta men te supersticiosas de los catól icos ro-
El argu mento dispensacionalista sobre las man ifestacion es manos, que afirmaban la realidad de milagros sobrenaturales
del Espíritu Santo es básicamente el siguiente. Dios ado pta una asociados a determinados santuarios o reliquias de santos.
estrategia y una metodología d iferentes en las diversas eras o Sin em bargo , la cuestión no está lo suficient eme nte clara.
dispensaciones de la histori a. Estas dispensaciones so n descri- El prop io Lutero dio testimoni o de la sanidad milagrosa de
tas co n gran detalle, y enrre los dispensacionalisras se da una Felipe Melanchton, desp ués de que él había orado person al-
gra n varieda d en cuanto a su número y las líneas divisor ias entre men te po r la restauración de su amigo . Calvino, en el prefacio
ellas. Sin embargo, un elemento común a las varias interpreta- de sus Instituciones, le escribe al rey católico de Fran cia,
ciones es una aguda división ent re la era neorestamenraria o Francisco 1, qu e los protestantes también tienen milagros para
26 LA ACCIÓN DEL EsplRlTU SANTO EN U. HISTORIA INTRODUCCIÓN 27

mostrar. Dice el refo rmador ginebrino : ...Porque nosotros no enfriado y qu e solo conservaba las formas muertas del cristia-
nos inve ntamos otro nuevo evangelio, mas retenemos aquel nismo. Incluso, Wesley escribió una réplica al tratado de
mismo para confirmación de cuya verda d sirven to dos los Conyers Middleton (1683-1750), qu e argumentaba en favo r
milagros que alguna vez Cristo o sus discípu los hicieron... Así de la cesación de los dones ext raordinari os del Espíritu, cita n-
que no nos faltan milagros y muy ciertos, y de quien ninguno do los milagros entre los hugonotes franceses del Cevennes y
se debe mofar- cas otros ejemplos con remporá neos.ze
En general, alguna forma de semi-dispensacio nalisrno pr e- No obstante, el espí ritu general del d ispensaciona lismo
valeció en la mayoría de las filas prot estantes. Esto sirvió co mo finalmente pre valeció también en el meto dismo, la rama más
un a ex plicación por las d iferencias marcadas entre la vida de joven e important e del protestantismo de aquel entonces. Con
las iglesias de los tiempos neo restarnenrar ios y las iglesias de el tiempo, la falta de sanidades y milagros extraordinar ios llegó
otros perí od os históricos. Calvino mismo soste nía una postu ra a ser considerad a como una virtud que otorgaba una forma de
cesacionisra. Según él: «Al presente ha cesado aquella gracia de fe más alta o superior, un a fe «pura » que no necesita de
sana r enfermos, como también los demás milagro s qu e el Señ or manifestaciones asombrosas del Espíritu Santo, es decir, una
quiso pr olo ngar durante algún tiemp o para hacer la predica- fe que no necesita «ver para creer ».
ció n del evangelio ~ue entonces era nueva admirable- Más ta rde , se co nstruyó una ..doctrina» (dispensacionalis-
siempre».24 De modo qu e el reformador ginebrino indica ba mol para confirmar y justificar la experiencia conte mporá nea
que dones como el de sanida d y otros pod ere s milagrosos de la Iglesia. La Biblia misma no ofrece indicios de d ivisione s
habían sido conc edidos temp or ariamente por el Señor a sus en términos de dispensacione s. Tampoco justifica la d ivisión
seguido res, para hacer qu e la nueva pr edicación del evangelio de los dones espiritua les en permanentes y temporarios. Y
resultase maravillosa. «Nada nos qu eda a nosotros al pr esente», mucho menos afirma que prodigios, seña les, maravillas y
agregaba él, «ya que no no s es conce dida la admin istración de milagros tenga n alguna fecha de cesació n.
las [tales] virtudes».2s Debido a su idea precon cebida de qu e las mani festaciones
En el crist ianismo poster ior a la Reforma, se presenta una sobrenatu rales del Espíritu Santo ya no ocurren, los dispensa-
clara excepción con el fundado r del metodi smo, Juan Wesley cionalistas son frecuentemente los primeros en denunciar com o
(1703 -1788), quie n rechazó el con cepto de que la declin ación fraudulento, falso o demon íaco a cua lquier fenó meno de ta l
en la man ifestación de algunos de los don es del Espíritu se índole qu e se at ribuya a la acció n del Espíritu. Para ellos, todas
debía al hecho de que ya no había necesidad de ellos, en razó n
de qu e tod o el mundo era cristiano. Precisam ente, una teoría
popular durante el siglo XVIII fue que este era el caso . Wesley, 26. Véase Conyers Middleton, A Free Inquiry ¡nto the Miraculous Powers
más bien, co nsideró que esta cesación estaba asocia da a la Which Are Supposed to Have Subsisted in the Christian Chu rch from
the Earliest Ages Through Severa! Successive Cmtun'es, by Whi, h lt Is
po bre co ndición espiritu al de la Iglesia, cuyo amor se había
Shown That We Have No Su{[icient Reason to 8elieve, Upon the
Authority o{ the Prímítiue Fathers, That Any Such Powers Were Conti-
nued to the Church, A{ter the Days o{ the Apost1es, Sherwood and Co.,
23. Juan Calvino, Instituci6n de fa religi6n cristiana , N ueva Creación, Londres, 1748. Y también su Introductor Disccurse, Londres. 1747.
Bueno s Aires y Grand Rapids, Mich, 1988, xxx-xxxi. Sobre la reacción de Wesley hacia Middle tc n, véase Frederick J. Snell,
2~. Ibid., libro 4, cap. 19.18. Wes/ey and Methodism , Charles Scribner's Sons, Nueva York, 1900,
25. Ibid. 151-155.
28 LAACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA Il'ITROD UCCIÓ N 29

las sanidades, milagros, prod igios y maravillas que puedan Desp ués del cierre del ca non, y después de la mu ert e de los
suceder son falsos y no deben ser atribuidos a la ope ración del apóstoles, esos pod eres maravillosos, tales como la ca paci-
Espíritu Santo, pues tal obra sob renatu ral ha cesado hace ya dad de resucitar a los muert os, cesaron. La obra del Espí ritu
mucho tiempo. De hecho que con ta l postura no dejan de Santo se to rnó prima riam ente la obra de iluminación de la
prestar un buen servicio a la Iglesia, al advertirnos con tra la Palabra de Dios, regeneración del alma, y for mación de la
credulidad y la aceptación ingen ua de cualquier fenómeno vida y mente de Cristo en el corazón del creyente indivi-
sobrena tural como obra del Espíritu . Pero en su rechazo de dua1.28
toda posibilidad de acción poderos a del Espíritu Santo en el
día de hoy, desafortunadamente son culpables de tirar la M ás recientemente , este tipo de argume ntación cesacio-
nisra-dispensacionista ha enco ntrado en John F. MacArt hur a
naran ja junto con la cáscara . un vocero muy influyente. En su ataque al movimiento caris-
Destacados pastores y maestros han seguido, sin mayor mático, MacArthur arguye que los apóstoles fueron un a casta
conside ración crítica, estas conclusiones, genera lmente ligan- muy especial, y que no tuvieron sucesores. Sus no mbres son
I
do su discusión con la ex per iencia monta nista y su descalifica- únicos, su oficio es único, su ministerio es único y los milagros
ción histórica. Así hace W.A. Criswell, quien afirma que los que hicieron son úni cos. «La era de los apóstoles y lo que ellos
dones milagrosos y sobrenaturales de los apóstoles cesaron con hicieron es pasado . Nada semejante será visto nuevamente
la muerte de estos. ..Cuando los apóstoles muriero n, los dones hasta que Dio s hable nuevamente en su Reino (véase Hechos
maravillosos concedidos a ellos tamb ién murie roncz" Criswell 2.17-21 j Apocalipsis 11)>>. Según él, pues, la era apostó lica fue
fundamenta esta afirmación en lo que, según él, dicen ..los libros única y terminó. Tres veces en una sola página afirma esto, y
de historia». Conforme esos mismos libros, ya no había dones declara : «Lo dice la historia, lo dice Jesús, lo dice la teo logía,
espirituales ni manifestaciones del Espíritu Santo en los días de y el Nuevo Testamento mismo testifica del hech o». Y agrega:
Policarpo , Papias, y ot ros, es decir, en los días de los discípulos «Lo que sucedió entonces no debía ser la norma para las
de los apóstoles. Yel montanismo no fue sino un intento fallido generacio nes siguientes de crisrianos-.t?
de restauración de tales manifestaciones sobrenaturales.
Para Criswell, «los libros de historia» han dejado clara s
dos concl usiones. La prim era tiene que ver con la finalidad de éQ ué dice la historia del cristianis mo?
las Escrituras. Al qued ar cer rado el texto y el canon bíblicos, A part ir de Pente costés, la historia del cristianismo registra
la obra del Espíritu Santo se limita a una acción de iluminación, múlt iples instancias de manif estacion es del Espíritu Santo. El
sin co nceder nuevas revelacione s. La segunda tiene que ver co n testimonio de estas manifestaciones es bastante abundante. No
la cesación de los don es milagrosos co nced idos a los apósto les. obstante, la comprensión de cada una de ellas, como evidencias
Al argumento montan ista de que los don es y señales debían de la ope ración del Espírit u, no siempre es clara. Por cierto,
co ntinuar por siempre, las iglesias respo ndieron que jamás se no todas las manifestacion es de carácter carismát ico que se
le pro metió a la iglesia que esas manifestacion es serían su
herencia permanente. Según Criswell:
28. Ibid., 19.
29. john F. MacArthur, The Cbasismatics: A Doctrinal Perspectiue, Zon-
27. W.A. Criswell, The Holy 5pirit in Today's World, Zondervan, Grand dervan, Grand Rapids, 1979, 83. Hay traducción castellana de este
Rapids, 1967, 18. libro.
30 LA ACCIÓN DEL Esr lRJ11J SANTO EN LA HISTORIA INTRODUCCIÓN 31

dieron ocurrieron dentro de un contexto regido por una fe Testamento. Aun admiti endo la evide nte diferencia que existe
cató lica u ortodoxa. Algunas estuvieron asociadas a herejías entre el testimonio neotestamen rario de esa obra y el inmediato
que la cristia ndad cató lica (en el sentido del cristianismo posterior a la era apostólica, sorprende, por ejemplo, la pro-
histórico, ortod oxo y universal) rechazó firmemente . Pero en funda con sciencia que la iglesia postapostólica tenía de las
otros casos, las expresion es penrecosrales fueron conforme a manifestaciones del Espíritu . Esto es así si se tom a en cuenta
las pautas bíblicas y en el marco de la sana doctrina neoresta - los hechos de poder sobrenatural atribui dos a la ope ración del
menta ria. Espíritu Sama, tales como los milagros y pro digios. Co mo bien
La infor mación bíblica no puede ayuda rnos en este estudio observa Harold Remus: «Considerando las creencias acerca del
históri co, ya qu e considera remos el desar rollo poste rio r a los milagro, la afirmación de que "nada hay imposible para Dios"
apóstoles. Pero la Biblia sí debe servirnos como nor ma para es prominente en el cristianismo tempran o e se
evaluar cad a movimiento . Lo que nos interesa en este libro es Los carismas, especialmente el de pro fecía, co ntinuaron a
rastrear en la histo ria de los primero s cuatro siglos de restimo- lo largo del período postapostólicc y después del estableci-
nio cristiano, aquellas manifestaciones poderosas del Espíritu miento del canon. Si hubo alguna declinación en su ejercicio,
Santo, qu e son similares a las que testifican los documentos del esto resultó del pr oceso de institucionalización de la Iglesia y
Nuevo Testamento. Por cierto, se tr ata de aquellas operac iones de la creciente auto ridad de los obispos, que comenzaron a
que son muy ante riores al surgimiento del pentecostalismo y co ncentrar en ellos el ejercicio de todos los dones y, en
el movimiento carismático y de renovación, pero que también particular, el don prof ético. u
están testificadas a lo largo de toda la histori a del cristian ismo. Hacia fines del segundo siglo, comienzan a verse las
Estas realidades en la vida y experiencia de la Iglesia a tra vés primeras manifestaciones del inexorable pr oceso de instituci o-
de los siglos no siempre han recibido suficiente atención por nalización de la Iglesia. Este proceso tuvo eno rmes co nsecuen-
parte de los histo riadores, si es que se le ha prestado algun a cias sobre la manera en que los creyentes interp retaron la
atención. Es sorprendeme cómo se ha histo riado acerca de acción del Espíritu Sama. Como señala Haro ld Remus:
co ncilios, papas, obispos y grandes teó logos y eclesiásticos,
pero no se ha presrado atención al Espíritu Santo y su acción
a través del tiempo. El nacimient o del pentecostalismo en la Lo que h abía sido aceptab le p ara el na cient e cristian ismo
primera parte de este siglo y su vigoroso crecimiento ha del primer siglo en Grecia y Asia M eno r, don de las nuevas
provo cado un nuevo inte rés por los fenó menos «entusiastas»
y «carismáticos» en la historia del cristianismo. Igual efecto ha
tenido más recientemente el surgimiento del movimiento ca- Jo. Harold Remus, Pagan·Christian Con/liet Over Mirade in the Seeond
Century The Philadelphia Patristic Foundation, Cambridge, Mass.,
rismático, la crecieme influencia de las «iglesias de la tercera 1983, 86. Además de las referencias en el Antiguo Testamento (Job
ola», y lo que se co noce hoy co mo las iglesias del nuevo 42.2) y en el Nuevo Testamento (Mateo 19.26; Marcos 10.27; 14.36;
parad igma apostólico o de la reforma apostól ica. t ucas 1.37: 18.27; Romanos 4 .2 1), véase los escritores del siglo 1 y 11
La impresió n sorprendente que queda, una vez que se citados en Henry Chadwick, ..O rigen, Celsus, and the Resurrecrion of
analiza la evidencia de las fuentes primarias de la historia del rhe Body-, Haruard Theological Review 41, April 1948,84; YRoberr
cristianismo, es que la acción del Espíritu Santo, a lo largo de M. Granr, MiracleandNatural Lawin Graeco-Bomanand Early Christian
Thought NOrlh-Holland Publishing Co., Amsterdam; 1952, 127-134.
los siglos inmediatamente posteriores a los tiem pos apostó li- J I. Véase James L Ash,Jr., ..The Decline of Ecstatic Prophecy in the Early
cos, es la misma que la que testifican las páginas del Nuevo Churc h-, Theclogical Srudies 36, junio 1976, 250.
32 LA ACCiÓN DEL ESP!R1TU SANTO EN Uro HISTORIA INT RODUCCiÓ N 33

revelacio nes y manifesta cion es y decla raciones neumáticas de J uan : "Cuando venga el Espíritu de verdad, Él os guiará
no eran extr añas, la form a de gobie rno era fluida, y la a to da la ver dad ". Aquella com unidad no cre ía que la
relación con la cultura greco-romana y el Imperio toda vía ca nonización de las Escrituras había cancelado esa prome-
estaban en buena me dida indefinidas, es inacep table par a sa. Los cristianos prim itivos no ten ían pro blem a en cree r
el cristianis mo troncal en la segun da mitad del segundo que los docu mentos del Nuevo Testament o fuero n dados
siglo a med ida que este procuraba acomodarse a esa cultu ra por inspi ració n de Dios. Después de to do , ellos sabían qu e
y al Imperio y colocaba cada vez más la auto ridad divina y tales docum ent os surgieron de su propia vida de confesión
la posesión del Espír itu en sus líderes que estab an en linea de J esucr isto bajo la direcció n del Espíritu , y se re co nocían
co n la suces ión de los apóstoles. 32 como una co munidad inspi ra da.at

No obstant e, Everetr R. Kalin ha demostrad o que los En un tiempo cuando la doct rina del Espíritu Santo no
Padres Apostólicos ente ndían que la obra de inspiración del estaba tod avía elaborada, "la conciencia cristiana se daba cuen-
Espíritu Santo no había cesado con el cierre del canon bíbli- ta de la importancia enorme de la ob ra cumplida po r el Espíritu
co.33 Este auto r señala que, si bien los Padre s afirman la en la vida de la Iglesia y de sus miembroscas Esta conclusión
inspiració n divina de las Escritu ras, también indican que ot ros no solo surge de la consideració n objetiva de la evidencia
escritos cristiano s estaban inspirados. El canon era único, pero histórica, sino tamb ién de un cambio en el planteo teológico y
no porqu e fuese el único escrito inspirado. Obispos, monjes, hermen éutico sobre la cuestión.
mártires, conc ilios, intérpretes de la Biblia, diversos don es Desde el pu nto de vista teológico, cabe plantear la cuestión
proféticos y varios otros aspectos de la vida de la Iglesia del carácter apostólico de la misión de la Iglesia. Los ccsacio-
también eran considerados como inspirados.J4 Kalin concluye nistas, en general, afirman la terminación del ministerio apos-
que la iglesia antigua no distinguía entre la edad apostólica y tó lico con la muerte del último de los apósto les. Co n ello
los siglos subsiguientes en cuanto a la obra del Espíritu Santo. terminan por negar tácitamente el carácter apostólico de la
La iglesia ant igua, dice él: Iglesia de Jesucristo. La Iglesia hoy cuenta con una autori dad
apostólica, que emana de una do ble fuente : su sujeción a la
Se veía como vivien do bajo la inspiración continua del
auto ridad de las Escrituras apostólicas del Nuevo Testamento
Espíritu Santo que fue derra mado en Pentecostés. Tomó
y su vivencia del poder apostólico por la operación del Espíritu
seriamente la pro mesa dada en el capí tu lo 16 del Evangelio
Santo. La Iglesia, como fuerza del Espíritu , predi ca el mensaje
apostólico registrado en las páginas bíblicas con denuedo ,
32. Remes, Pagan-Christian Conflict aver Mirad e, 180-181. mient ras el Seño r acompaña y autentica su palabra con las
JJ. Everert R. Kalin, -Tbe Inspired Community: A Glance at Canon señales y milagros de la acción sobrenatu ral del Espíritu Santo .
History-, Concordia Theological Monthly 43, septiembre 1971, 541- No hay razón lógica para pensar qu e hoy las cosas son diferen-
549. La frase «Padres Apostólicos- se refiere a los escritores de fines tes de ayer, cuando el Señor que predicamos y a quien servimos
del primer siglo y del siglo 11 que siguieron inmediatamente a los
redactores del Nuevo Testamento. Su audiencia y propósito se parecen
«es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos» (Hebreos 13.8).
mucho a los de las epístolas pastorales de las escrituras canónicas y
algunas de sus obras fueron alguna vez consideradas parte del Nuevo
Testamento. 35. íbíd.
J4. lbid., 547. J6. Swete, The Holy Spirit in the Anejent Church, 6.
34 LA ACCIÓN DEl EspíRITU SANTO EN U\ HISTORIA INTRODUCCIÓN 35

Por otro lado, el carácter apostólico de la misión de la qu e cae fuera d e las catego rías ace ptad as de la ra cio na lida d .
Iglesia no quedó limitado a un deter minado número de perso- Esto ha resultado en una «limpie za» d e la h istoria rel igiosa,
nas que vivieron hace dos mil años atrás. Las necesidades purgándola d e toda traza de «entusiasmo » o co n ducta no
humanas siguen siendo las mismas y tan demand antes como racio nal y de to dos lo s in formes de lo sobrenatural. El
entonces. Y la respuesta de la fe no ha cambiado . Las personas resultado ha sid o lo qu e yo llam o una -demitologización-
hoy siguen necesitando salvación, sanidad, liberación, consejo d e los santos -un int ento de negar los mu ch os relatos en
sabio, dirección y esperanza, todo lo cual puede ser satisfecho la tradición cristiana qu e están llenos con d acio n es caris-
po r la obra del Espíritu Santo a través de los testigos de Cris to. má ticas, mi lagros, señales y maravillas)?
Limitar su acción a una tarea de iluminación de las Escrituras
es pensar que Él solo t iene que ver co n la satisfacción de Este libro que está en manos del lecto r representa el
necesidades intelectuales y no con la totalidad de la vida intento de leer el pasado, pero desde una perspectiva diferente,
humana . Una comprensión integ ral del evangelio demanda de proc urando recup erar el testimonio escondido, negado, mar-
la afirmación de una acción integral y pod erosa del Espíritu ginado y distorsionado de la acción del Espíritu de Dios a lo
Santo, tal co mo ocur rió en los días neorestamentarios. largo de la histor ia del cristian ismo , y particu larmente del
Ade más, es necesario un nuevo planteo hermenéutico . El cristianismo de los primeros cinco siglos después de los após-
cesacionismo está ligado estrechame nte con ciertas aproxi ma- to les. No obstante, la tarea no es fácil. Mu chas fuentes son
ciones a la historia y a la Palabra de Dios. El fundamentalismo, prejuiciosas en un sentido u ot ro . Los histori adores pro-caris-
el d ispensacionalismo, el racionalismo, el liberalismo teológi- máticos suelen ver antecedent es a su movimiento en cualquier
co, el cientificismo, el hum anismo secularizado, entre otros hecho o fenóm eno. Qu ienes se o ponen, solo ven los aspectos
planreos, han descalificado la acción del Espíritu Santo en base negativos de los fenó menos apunta dos. Así, mientras los pr i-
a esquemas teóri cos apr ior ísticos, conforme a su particular meros describ en a un perío do como de gran despertar espiri-
visión de la realidad y de la fe cristiana . En tod os estos casos, tual, sus oponentes lo ven como un tiempo de división y
todo lo subjetivo y que se manifiesta en el plano de la expe- confusión para las iglesias, cuando no corno un período de
riencia queda descalificado por defini ción . De manera sumaria, domi nio satánico y de fanatismo religioso. Evidentemente,
cualquier experiencia que no encaja en ciertos cánones prees- estas son posic iones ext remas. H ay histo riadores que han
tablecidos es calificada de fraude, engaño, fantas ía, histeria o asumido posturas más balan cead as.' !
exceso emocio nal, cuando no se la encasilla como manifesra-
ción demoníaca.
Quienes critican con acidez la convicción y práctica de los 37. Stanlcy M. Bcrgcss, - Proclaimin g the Gospel with Miraeulous Gifts in
que afirman la vigencia de los carismas y otras man ifestaciones thc Posrbiblical Early Church-, en The Kíngdom and the Power, ed. por
del Espíritu y las condenan com o «subjetivismo», no siempre Gary S. Greig y Kevín N . Springer Regal Books, Ventura, California,
ap lican la misma agudeza crítica pa ra evaluar sus pro pias 1993,279.
presuposiciones subjetivas. Com o señala Sranley M. Burgess: 38. Véase E. Glenn Hinson, «A Brief History of Glcssolahe-, en G/o5501a-
Iia: Tengue Speaking in Biblical, Historícal, and PSJ,h%gical Perspec-
tive, por Frank Stagg, E. Glcnn Hinson y Wayne E. Cate s, Abingdon
Los cesacionistas pr otestan tes han estado infl uidos por el Press, Nashville, 1967, 45-75 ; Mort on T. Kelsey, TongueSpeaking:An
Ilu min ismo , o la Edad de la Razón, que ha llevad o a muchos Expenment in Spiritua/ Experíence, Gardcn Ciry, N.Y., Doublcday,
a ne gar la validez de cualquier cosa en la histo ria cristian a 1964; y L.D. Hart, «A Critique of American Pentecostal Th eo logv-,
36 LA ACCiÓN DEL ESpjRlTU SANTO EN lA HISTORIA

E. Glenn Hinson, un destacado historiador bautista, ha


presenta do una interesante periodización histórica para las
manifestaciones del Espíritu en la era postaposrólica, siguiendo
la imagen de la lluvia que se desarrolla en j oel 2.23·32) 9 En
este libro, que es el primero de una trilogía que el auto r espera
producir, to maremos, como esquema histórico general, sus
cuatro períod os de lluvias tempranas, gran sequía, lluvias
tard ías y lluvias recientes. No obstante, modificaremos las
fechas y períodos sugeridos por Hinson, para ajustarlos a
nuestra prop ia co mprensión del desarrollo histór ico y el cum-
plimienro de la profecía bíblica. Por razones de espacio, nos
concentraremos en los primeros cinco siglos de testimonio
cristiano posteriores a los apóstoles, es decir, en e! períod o de
,
las lluvias tempranas. Es e! propósito de! autor continuar la
investigación y seguir e! desarrollo histórico de los períodos
siguientes en futuras publicacione s.
LOS PADRtS APOSlOUCOS
Mi sincero deseo es que, después de recorr er las páginas

,
que siguen, e! lecto r,alabe co n acción de gracias al Seño r po r
la pr esencia activa de su Espíritu Santo en y a tra vés de su
pueblo a lo largo de los dos milenios de testimonio cristiano
en el mundo. Si la presenre investigación sirve par a que caigan
las escamas de los ojos de algún hermano o hermana en Cristo,
que todavía no co noce el pod er de la acción de Dios, tal como
se pon e de manifiesto por la operación de su Espíritu, me
sentiré sumamente satisfecho y gozoso. El Espíritu Santo mis-
mo ha sido muy paciente conmigo para enseñarme, a lo largo
11 Evangelio de Marcos term ina co n una declara-
ción sorprende nte sobre los carismas que acom -
pañan a los que confían en e! Señor: ..y estas
señales seguirán a los que creen : En mi nombre
echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en
las manos ser pientes, y si bebieren cosa mortífera, no les har á
de largos años de aridez y esterilidad, que ..Jesucristo es e! daño; sobre los enfe rmos pondrán sus manos, y sanarán..
mismo ayer, y hoy, y por los siglos.. (Hebreos 13.8). El Espíritu (Marcos 16.1 7-18). Si es cierto, como afirman alguno s erudi-
tambi én me ha enseñado que El mismo, com o ..el otro Jesús.. tos, que estos versículos no pertenecen al texto or iginal, sino
tampoco ha cambiado en su man era de obrar. que fuero n agregados en la prim era mirad del segundo siglo,
de todos modos son una valiosa evidencia postaposrólica y
exrrabfblica de que en muchas iglesias se ejercitaban tales dones
Ph.D. Dissertaric n, Southem Bapnsr Th eological Seminary, Louisville, y ministerios, como exp resión del poder de! Espíritu Santo .
Kcntu cky, 1978.
39. E. C lenn Hinson, •Th e Significance of Glossolalia in the History of
La iglesia primitiva no alardeaba de los dones de! Espíritu
Chnsrianity-, cn Speaking in Tongues: Ler's Talk About It, ed. por E. ni los discutía: los practicaba. Co mo indica Yves M. J. Ca ngar
M ilis, Word Books, Waco, T exas, 1973, p. 6 1·80. Véase especialmente, en su obra mon umental: «La iglesia de los o rígenes fue plena-
73. Véase también Hinson, .A Bnef History of Glossolaha-, 45-75. mente co nsciente de encontrarse bajo la acción de! Espíritu
38 LA ACCiÓN DEL ESP!Rlru SANTO EN LA HISTORIA LOS PADRES APOSTÓLICOS 39

Santo y de estar llena de sus dones- e! Como bien señalara a Quizás esto explique por qué en los document os que se pro-
comienzos de siglo A.J. Ma son : «Este fue, de hecho, el atractivo dujero n en el siglo que siguió al minister io de los apóstoles no
principal de la Iglesia en días tempranos: era considerada como hay la abundancia de referencias a las manifestacion es del
el hogar de la gracia y la santidad, y en consecuencia, de la Espíritu qu e sería de esperar.
salvación. En la iglesia, y en ninguna otra parte, pod ían las A pesar de esto, se encuentran numerosas referenc ias en
personas estar seguras de encontrar al Espíritu de Dios..,2 En los escritores cristianos de esa época al ejercicio de los carismas
aquellos tiempos se entendía que el Espíritu Santo, como y las manifestaciones del Espíriru.e
Sabiduría divina, obraba incluso inspirando las vidas de algu- De igual modo, llama la atención el lugar qu e el Espíritu
nos sabios griegos de la antigüedad) Santo ocupa, especialmente como inspirador del ministerio de
Pero el centro de la acción del Espíritu Santo era la iglesia. los padres apostólicos. Particularmente, por sobre todos los
Era allí donde el Espíritu se manifestaba a través de los dones do nes del Espíritu, se destaca el de profecía. La mayor parte
de profeda y de sanidades, y mediante la expulsión de demo- de las menciones tienen que ver con el «espíritu profético. y
nios. La presencia y obra del Espíriru Santo era evidente en la su adecuado ejercicio en la iglesia.
iglesia. El Espíritu de vida y el Evangelio eran su «columna y Por otro lado, las herejías y grupos disidentes pusieron un
fundamento», según Ireneo. Es el Espíritu qu ien viene sobre la fuerte énfasis en los aspectos sobrenaturalesde la fe. En algunos
iglesia como un águila volando, para protegerla con sus alas y casos, sus exageraciones mayores estuvieron asociadas a autén-
concederle tod os sus don es.s Él es el mismo «Espíritu que trajo ticos dones del Espíritu, especialmente el de profecía. En otros
a la unidad a tribu s distantes.. y qu ien nos permite llevar fruto casos, los motivos de condena fueron énfasis excesivos en
de vida al regam os con su lluvia celestial. «El Señor , que recibió experiencias sobrenaturales, como visiones, sueños o milagros.
al Espíritu como un don de su Padre, Él mismo lo confie re Sea como fuere, se trató generalmente de prácticas de la iglesia
tambi én sobre aquellos que participan de Él, enviando al llevadas a extremos. Lamentablemente, la incidencia de las
Espíritu Sama sobre toda la tierra ...5 herejías y las facciones llevaron a algunos al ejercicio tem eroso
No obstante, los padres apostólicos, al igual que los de muchos dones, y a otros al rechazo de las acciones sobrena-
apologistas, estaban confrontando a la cultura pagana y hosti l turales del Espíritu Sama.
del segundo siglo. Cualquier fenómeno sobrenatural, que a En el tiempo inmediatamente posterior a los apóstoles, los
juicio de los oposito res paganos fuese irracional, o superstic io- padres apo stólicos son una fuente documental fecunda en
so a sus ojos, pondría en evidencia a la Iglesia frente a la relación con las manifestaciones del Espíritu Santo . Sin embar-
sociedad, que ya tenía prejuicios de sobra en contra de ellos. go, cabe hacern os la pregu nta, équ é es lo que estamos buscando
cuando nos preguntamos sobre las operaciones sobrenaturales
del Espíritu Santo, según los padres apostólicos? Si nos apro-
l . Cangar, El Esplritu Sant o, p. 92 . ximamos al testimonio histórico con las listas de done s de 1
2. Anhur Ja mes Masen , -Concepno ns of th e Church in Early Tim es», en Corintios 12, Romanos 12 Ó Efesios 4.11 probablemente
EsSdyS 0 11 the Bar/y History o{ the Church and the Ministry, ed. por pondremos una limitación arbitraria al material que tenemos
H.B. Swere, Macmillan, Londres, 1918, p. 33 . por delante. De hecho, cuando comparamos estas listas de
3. Véase, e.g., el caso de Sócrates según jusrino Mánir, Segunda apotogla ,
p.lO.
~. Irenco, Contra herejlas, p. 3.1 1.8.
5. ¡bid., 3. 17.2. 6. Kelsey, Tongue Speaking, p. 33-34.
40 LA ACCiÓ N DEL EspfIUTU S ANTO EN LA HISTORIA Los PADRES APOSTÓLICO S 41

man ifestacio nes carismáticas con otr os materiales neo testa- Tal es el testimonio qu e se transpira en los escritos de los
menrarios, com o los que se encuen tran en Hechos y Hebreos, primeros padres de la Iglesia, a quiene s se conoce como los
descub rimo s bastante imprecisión y fluidez. Incluso si preten- padres apostó licos. Su testimonio es valioso porqu e fuero n
demos ser exhaustivos, deberemos recon ocer que vamos a personas asociada s o directamente relacionada s con los após-
encontrar qu e algunos dones parecen ser más prominentes que toles, de qui enes, se supone, derivaron su enseñanza y práctica.
otros. Seguramente, corno siempre suele ocurr ir, las manifes- Sus escritos son contemporáneos con los escrito s canónicos y
taciones más dramáticas llamarán mucho más la atención que rep resenta n la co ntinuida d de la doctri na y práctica de la iglesia
aquellas otras menos especta culares. neotestamenraria.
Es así que nos encontraremos con info rmes de la vigencia En las páginas qu e sigue n vamos a enumerar a las princi-
y ejercicio de don es espirituales como los mencionados en el pales fuentes patrísticas, siguiendo una secuencia más o men os
N uevo Testamento. En esto s casos, tendremos que pesar la cro nológica en base a su apa rición, sin tomar muy en cuenta
evidencia histórica y medir su valor y pertinencia par a nuestro su alineación en términos de la tradición teológ ica que repre-
estudio . En otras ocasione s, conside rare mos el testimonio de sentan o su ubicación geográfica.
personas que manifiestan tener experiencias espirituales car is-
máticas que par ecen similares a las del Nuevo Testamento, si
O das d e Sa lo món
bien no son exa ctamente iguales. Nuev amente, será necesar io
hacer una cuida dosa evaluació n, para co nstatar la continuidad Antes de terminar el pr imer siglo apareció un escrito
de las operaciones carismáticas de tiempos apostólicos a la era anónimo bajo el título Odas de Salom6n .8 Cua ndo Rendel
de los pa dres apostólicos. Harris las sacó a luz en 1909 después de siglos de esta r en el
Sea como fuere, veremos que la calidad del material dispo- limbo, el inter és de los estud iosos se vio no tablemente desp er -
nible no es la misma en todos los casos. Algunos son testimonios tado. Según James H. Cha rleswo rrh, se trata del himnario
excelentes, y otros parecen sumamente débiles. No obstante, la cristiano más ant iguo que se con oce.? Joh n H. Bernard, po r
conclusión a la que pod emos arribar a partir de un análisis
detallado y meticuloso de la evidencia testimonial de los padres
apostólicos es que la iglesia del segundo siglo era disrintivamente 8. Las Odasde Salomón son, en el terreno de la literatura poé tica cristiana
car ismática. Como afirma Ronald A.N. Kydd, «lo que surge de primitiva, el descubrimiento más importante, después del hallazgo de
un estudio de las fuentes es el cuadro de una iglesia que es la Didache, Su autor es desconocido, al igual que su carácter. Lo más
fuertemente carismática hasta aprox imadamente el año 200 », 7 probable es que expresen las creencias, prácticas y esperanzas de la
cristianda d oriental o palestina. Son himnos de alabanza, que reflejan
Los cristia nos primitivos vivían intensamente la experien-
una profunda espiritua lidad, similar a la de Juan e Ignacio y libre de
cia de la dirección del Espíritu Santo y se sometían a su po der todo pensamiento especulativo. Probablement e fueron escritas en Siria
par a llevar a cabo su misión de gana r al mundo par a Cr isto. El a fines del prime r siglo o co mienzos del siglo 11. Para el text o, véase
Señor glorificado ejercía su autoridad sobre la Iglesia a través James Rende l Har ris y A. Mingana, The oJes Qnd Psalms of Solomon,
del Espíritu Santo . Y esto era motivo de gozo y alaba nza. 2 vals. Th e University Press, Manchester 1916-1920. Para selecciones
del texto, véase E.C.E. Owen, Sorne AuthenticActs ofthe.Early Martyrs
Oxford University Press, Oxford 1927; y Swete, The Holy Spirit in the
Ancient Church, pp. 415-418.
7. Ronald A.N. Kydd, Charísmatic Gifts in the EarlyChurch Hendr ickscn 9. James H. Charleswort h, ed. y trad., The ades of Solomon, Texrs and
Publishers, Peabody, Mass. 1984, p. 4. Translations 13 Scholars Press, Chico, California 1977, vii. Ver también
42 LA ACCiÓN DEL Es rl RITU SANTO EN LA HISTORIA Los PADRES APOSTÓUCOS 43
otro lado, seña la que son himnos bautismales para el uso en la verdad, para que pue da producir fruto en ti: y abre para mí el
adoración pública, 10 Estas odas ponen de manifiesto una go - arpa de tu Santo Espíritu, para que con todas sus notas pue da
zosa alabanza po r la acción del Espíritu Santo. Este document o alabarte, oh Señor•. U En este caso , la refe rencia seria a diver sos
es pa rticularmente rico y fresco en cuanto a señala r la manifes- géneros de lenguas. Un caso similar pu ede ser la siguient e
tación poderosa del Espí ritu, de qu ien dice: ..Este es el Espí ritu expresión, si bien no se hace una mención explícita del Espíri-
del Señor. que no miente, que enseña a los hijos de los ho mbres tu : «Derramé alabanza al Señor po rque soy suyo: y hab laré su
a conocer sus caminos•. H Y agrega : ..Como la mano se mueve canció n santa, por qu e mi corazón es con Él. Porque su arpa
sobre el arpa, y las cuerdas hablan, así habla en mis miembros está en mis manos, y las odas de su paz no se silenciará n » , 16
el Espíritu del Seño r, y yo habl o por su amor.., l 2 Aparentemen- Las Odas par ecen hablar de la unción del Espíritu Santo
te lo que motiva tal exaltación y gozo son dones de revelación en expresiones como estas: ..Fu i vestido co n la cubierta de tu
y profecía. Espíritu, y ro quitaste de mi mi traje de pieb .t? ..Como las alas
Las expresiones del poe ta reflejan su conoci miento perso- de las palomas sobre sus polluelos, y las bocas de sus poll uelo s
nal del don profético. La co nsciencia pro fética se ve reflejada hacia sus bocas, asf tamb ién las alas del Espíritu está n sobre mi
claramente en pasajes como: ..El [el Espiritu Santo] me ha corazón. M i co razón se dele ita y salta, como el bebé que salta
llenado con palabras de verdad, pa ra que pu eda hablar lo en el seno de su madreeu ..Yo descansé en el Espíri tu del
mismo. Y como el fluir de aguas, así fluye la ver dad de mi boca, Señor: y ella [el Espíritu] me elevó a lo alto : y me hizo par arme
y mis labios mani fiestan sus frutos » , 13 El autor co nsidera qu e sobr e mis pies en la altu ra del Señor, dela nte de su perfección
el mensaje qu e tiene para com partir está inspirado por el y de su gloria, mie ntras yo estaba alabando [a él] por la
Esp íritu y depende de El para darl o. Dice él: ..Oh, Señor, por com posición de sus ca nciones. Ella [el Espfriru]!" me puso
amor a aquellos qu e son deficient es, no me prives de tu dela nte del ros tro del Señor; y si bien soy un hijo de hombre,
palabra•. 14 Más adelante seña la: ..Enséñame los salmos de tu fui llamado el Ilum inado, el hijo de Dios» , 20
El poeta expresa su exp eriencia de renovación espiritual
en el Espí ritu en estos términos: «Po rque tu mano derecha me
ldem , "Th e Od es oC Solomon ; Not Gnostic", Catboli& Biblic.al Qua,· leva ntó y quitó la enfe rmedad de mí: y llegué a ser poderoso
urly 31 (1969); pp. 357-369. en la ver dad, y santo por tu recti tu d .. . y me hice admirable
10. John H. Bcmard, TbeOdes ofSolomon, Text and Srudies 8.3 Cambrid- po r el nombre del Señor, y fu i justificado po r su bo ndad, y su
ge Universiry Press, Cambridge 1912, p. 42. paz es por siempre y siempre. Aleluya•.21 En otro verso, el
11. Odas de Salomón , 3 .12.
12. lbid., 6. 1·2.
auto r pa rece referi rse a la llenura d el Espíritu Santo , al señalar:
n . lbid., 12.1-2.
'4. lbid.; 18.4. Con respecto a este verso, Harris comenta lo siguiente; ..EJ
escritor de este Salmo habla como un profeta, que ha conocido la IS. lbid., 14.8.
visitaci ón divina, y ha sentido su efecto tanto en la mente como en el 16. lbid., 26.1·3.
cuerpo, en [a disipación del error y en [a sanidad de la enfermedad. El 17. lbid., 25.8.
ora por una conti nuidad del don celestial por amor de la gente 18. lbid., 28.1-3.
necesitada a quien él da su mensaje». Harrís y Mingana, The OJes al1d
Psafms of Saloman, 2.297-298. Hay otros pasajes en los que el poeta
19. -ella-.
El original sirtaco dice Debe notarse que en la literatura siríaca
primitiva era común hablar del Espíritu Sama como femenino.
parece ser también un profeta: Odas de Salomón, 2.1-2; 7.18; 14.8; 20. lbid., 36. 1·3.
16.5 Y40.2. 21. Ibid., 25.9-11.
44 U. ACOÓS DEl EsríRIru SA."ITD EN lA HISTORIA Los PADRES APOSTÚUCOS 45

«E.I altí~imo ~e ci~cuncidó por su Espíritu Santo, luego descu- en sus vidas. Seguramente la iglesia de la que este creyente
bri ó mi ser mrenor hacia él, y me llenó de su amo r. Y su formaba parte compart ía su entusiasmo al ser inspirados por
circuncici ón fue mi salvacíónczz el Espíritu y pronunciar palabra profética y ejercer otro s dones
El poema está lleno de «aleluyas»,especialmente asociados de revelación . Como concluye Kydd: ...EI clima religioso que
a la acción poderosa del Espíritu Santo. Una hermosa estrofa existía do nde Las Odas fueron escritas debe haber sido muy
cama de las aguas de vida, que fluyen abundantemente de favorable al ministerio de los do nescze
debajo del templo, y que crecen en su caudal a medida que
avanzan hasta cub rir la faz de toda la tierra, trayendo salud,
Clemente de Rnma (¿40 1-100)
fruto y vida etema.zs ¿No es esta una excelente manera de
describir poéticamente el fluir poderoso del Espíritu de Dios Clemente fue el tercer obispo de la ciudad de Roma , entre
en la vida del creyente y de la Iglesia? No es extraño, pues, que los año s 91 0111 00 . Una tradición muy antigua le atr ibuye una
la estrofa termin e con un estr idente «aleluya... Carta a / 05 corintios, que ..escribió en nombre de la iglesia en
Las Odas representan un buen material documental para Roma ». La carta gozó de mucho prestigio en la antigüedad.
nuestro estud io, porque reflejan el derramamiento del Espíritu Eusebio la llama ..epísto la grande y maravillosa», y agrega que
en la vida de alguien cautivado por Dios. Según R.M. Gra nt, era ..leída en voz alta a los adoradores reunid os en días
estos versos son como ..los salmos» individuales mencionados tempranos, como lo es en nuestros prop ios días...27 Clemente
en 1 Corintios 14 .26 .24 Si es así, estos poemas representan la escribió esta carta para hacer frente a un co nflicto generado en
experiencia de un cristiano que está hablando en obed iencia a la iglesia de Co rinto, allá por el año 95. Po r las expresiones de
los impulsos del Espíritu Santo. Dice el poeta : ..Yaguas par- Clemente, parece ser que la iglesia en Co rinto no apr end ió muy
lam es se acercaron a mis labios de la fuente del Señor co n bien las leccio nes que el apóstol Pablo quiso enseñarl e a través
plenitud . y yo bebí y fui embriagado con el agua de vida que de sus cartas. Aparentemente, la congregación co ntinuó en-
no muerev.t! En estas palabras, el auto r parece referirse al frentando las mismas dificultades que el apóstol había procu-
Espíri~ ~anto ya la experiencia de la unción, que muchas veces rado ayuda rle a superar.
se manifiesta con un estado de pérdida de control físico similar El problema era que había algunos creyente s qu e sostenían
al de la embriaguez (cf Hechos 2.13) . ' tener ciertos dones espirituales que , a su juicio, no recibían un
adecuado reconocimiento, especialmente de part e de los líde-
l~du~ablemente, .eI ~utor de las Odas es alguien que
res de la con gregación . Eran personas que se co nside raban
co noce bien .101 expe.n~nCl~ del obrar poderoso del Espíritu
Santo en su VI?3 Y, mmlsten o. Su lenguaje es el de un pro feta espiritualmente fuertes (38 .2), y que se jactaban de revelacio-
lleno del Espíritu. .EI y las personas a quienes dirige sus poe mas nes o conocimientos (gnosis) sobrenaturales, pero que no
tenían la expectativa de que Dios se invo lucrara activamente parec ían ser muy humi ldes (4 8.5-6) . Q uizás tambi én hablaban
en lenguas, pero lo had an co n arroga ncia (21.5 ; 57 .2) .
Siguiendo a O rígenes, Eusebio identifica a Clemente con
22. Ibid., 11.2·3. el personaje mencionado por Pablo como -cc labo rado r mío..
23. íbid., 6.7· 17.
24. Roben M. Gram, ..The Odes of Solomon and the Church of Antioch.
[aumal of Bib/ic.al Literature 63 (1944): p. 368. ' 26. Kydd, Charismatic Gifts in tbe Early Church, p. 25.
25. Odas de Salomón, 11.6-7. Cf. Juan 7.38.39 . 27. Eusebio, Historia eclesidstica, 3.16.
46 LA xccr óx DEL EspíRITU SANTO EN U. HISTORIA LOS PADRES APOSTÓ UCOS 47

(Filipenses 4.3). Veinticinco años después de [a caída de jeru- Es inte resante la mención que hace Clemente del «don
~Ién, una generación más ta rde de los horrores de la persecu- especial.. (en el o riginal griego se usa una forma del vocablo
c~6~ de Ne~~n. en Roma, y mientras en Asia empezaba n a charisma ). A la luz del contexto, el vocab lo es utilizado con un
vlVI~se las vicisitude s de la persecución de Domician o y Juan significado similar al que riene en pasajes neo testamenrarios
escribía su Apocalipsis en Parmos, Clemente les escribe a los corno Romanos 12.6 y 1 Co rintios 12.4. Se trata de habilidad es
corintios y los exhorta a mantener Ol la unidad del Espfriru•. inusuales que Dios da a las personas para ayudar les a ministrar
No obstante, llama la atención que Clemente "no dé la a otros. Clemente está hablando acerca de có mo deben condu-
m!s~a pro minencia que Pablo al lugar del Espíritu en la vida cirse los cristian os en la iglesia. En su carta (37.5 a 38.1 a) ilustra
cns n ana normal, ni sugiera que la iglesia de Co rinto de su día esto haciendo una compara ción entre la iglesia y el cuer po
es[uv~era ex perimentando una vida en el Espíritu como la que humano. «La cabeza », dice, ..no es nada sin los pies, así como
descnb~ el Apóstol en 1 Corintios 12 hasta 14• .28 Con algo de los pies no so n nada sin la cabeza... Así como los miembros del
nostalgia, en su carta, Clemente les recuerda a los corintios que cue rpo no pueden funcionar aislados, de igual modo la efecti-
en otros nempos "una profu nda y abundante paz fue concedida vidad de la iglesia se ve com prome tida cuando sus miembros
a to dos . .. y vmo sobre todos un pleno derramamiento del no tiran juntos. Clemente está arguye ndo en favor de la unidad
Espíritu 5anto ,..29 y el cuida do mutuo. Y es justo en el medio de esta argumenta-
En su amo nestación contra el divisionismo y la disensión, ción que coloca su men ción de los dones espirituales. Según él,
Clemente les pregunta : «é l'cr qué hay entre vosotros estas estos dones son importantes para ayudar a los creyentes a funcio-
contiend as y estallidos de pasión y faccione s y divisiones y nar como un cuerpo. Los dones tienen sentido cuando se utilizan
gu ~rras? ¿No ten emos tod os nosot ros un solo Dios, y un para servir a Otros y edificar el Cuerpo de Cristo . Son dadoscorno
Cristo, y un Espíritu de gracia que fue derr amado sob re un medio para bendecir a otros y cumplir la misión.
nosotros, y un llamami ento en Cnsrcz-so Para Clemente el En estos conceptos, Clemente se muestra muy cerca del
Espíritu Santo era una persona viva y activa. El afirma su fe apósto l Pablo. Indudablemente que en relación con los dones
trini ta~i~ al declarar:. «Dios vive, y el Señor Jesucristo vive, y
espirituales, Clemente tenía ideas similares a las que Pablo
el Esplr.,tu Santo, quienes son a la vez la fe y la esperan za de desarrolló en 1 Co rintios 12 y 14 Y en Romanos 12. Parece
claro, según el contenido de la carta de Clemente, que los dones
l~s elegid osc.n Por eso, era necesario que los corintios apren-
del Espíritu Santo estaban vigentes en la iglesia de Roma, a
d,~ran de una buena vez que eran un cue rpo cristiano, cuya
fines del primer siglo.
unid ad debían pr eservar. Y para ello, la mejor regla era: "Cada
También parece evide nte que esta iglesia conoda por
uno.debe esta r sujet? ~ su prójimo, confor me al don especial ex periencia lo que significa andar po r el Espíritu y ser obedien-
[carisma] que ha recibido-era De este modo, el Espíritu estaba te a sus direcciones. Clemente hace solo diez referencias al
sobre ellos, así como había estad o con sus predecesores en la Espíritu Santo en su Carla a los corintios, y en más de la mitad
fe, que habían hablado a través del Espíritu. de las mismas pone un énfasis particular sobre el Espíritu Santo
co mo el inspirador de las Escrituras, especialmente del Antiguo
Testamento .U En un pasaje dice: «M irad cuidadosamente en
28. Burgess,Anáent Christian Tradit íons, p. 17.
29. C1~mente de Roma, Carta a los corintios, p. 2.2.
JO. tbíd., 46.5-6.
J I. ¡bid., 58.2. J J. Son frecuentes las exp resiones : . EI Espíritu Santo dice», "El Espíritu
J2. ¡bid., 38.1. Santo dijo», "la Sagrada Escritura ... es inspirada po r el Espíritu Santo»,
48 LA ACCIÓN DEL EsrfRITU SANTO EN I.A H ISTORIA Los PADRES APOSTÓLICOS 49

las Escrituras, que son las verdad eras declaracione s del Espír itu más meti cul oso . N o obs tante , si bien sus escritos han sido
Sant o,,)" Pero también la obra de inspiració n del Espír itu co nside ra dos desde los más d iversos ángulos de aná lisis, no
Santo opera en la vida cotidiana de la iglesia neotesramentar ia. se ha pr estad o suficiente ate nción a su testimoni o en cua nto
Según él, los apóstoles gozaron de la misma inspiración que los a la acción del Espíritu Santo en sus dí as. Y sin em bargo,
profetas, ya que ..salieron con una convicción plena, que era co mo obispo y sier vo de Di os, Ignacio es un a fuente r iquísi-
del Espíritu Santo -. Ellos «probaro n.. a los obispos y diáconos, ma en cuanto a las manifestacio nes del Esp ír itu . El mis mo
a quienes designaron para su ministerio "por el Esptr iruc as era un pr o feta co n un gran aprecio por los do nes del Espí ritu
Pablo mismo les había escrito años antes bajo la inspiración del Santo.
Espíritu Santo, e incluso, la iglesia en Roma no dudaba que su Ignacio fue discípul o de los a pósto les y, por lo tanto, un
propia car ta, en esta ocasión, ta mbién estaba bajo la influencia impo rtante testigo de su enseñanza. En su Carta a los efesios,
del Espfriru.Je
Ignacio seña la qu e «aquellos que profesan ser de Cris to son
conocidos no solo por lo que dicen, sino po r 10 qu e practican ...
Ignacio de Antioqufa (¿40?-11 7) y agrega que «es mejor par a una perso na callar y ser (cristia na]
Ignacio sirvió como obispo de Antioquía a principios del que hablar y no serIo..)7 No obsta nte, en su Carla a los
segu ndo siglo, en época del emperador Tra jano. Hacia el año fiJadelfos se refiere al don de profecía. Quizás ex presa su prop ia
117, muri ó como mártir en la ciudad de Roma. En su viaje experiencia al man ifiestar que se sentía movido por el Espíritu
como prision ero a la capital del imperio, unos quince o veinte al hablar según el Espíritu le daba palabra . En un no tab le
años después que Clemente escribiera su epístola, el obispo de pasaje, que parece referirse al don de profecía, seña la:
Siria exhortó a los creyentes a guardarse de las herejías y los
alen tó en su fe. Con este prop ósit o escribió siete cartas: cinco Puede que haya algunos que querían engaña rme según la
a las iglesias de la prov incia de Asia; una a la iglesia de Roma, carne , pero el Espíritu no puede ser enga ñado, porque
hacia donde se dirigía; y otra a su amigo Policarpo, obispo de viene de Dios. Porque . Él sabe de dónde viene y a dónde
Esmirna. Estas cartas, escritas en algún momento entre los años va.., y expone lo que es secreto. Cuando estuve con 'lOSO--
98 y 117 mie ntras era llevad o a Roma, gozaron de conside rable n os clamé, levantand o mi voz - fue la voz de Dios-
autoridad y difusión durant e muchos años. Ignacio fue un «Prestad ate nción al obispo, al presbiterio y los diáconos",
fervo roso cristiano, imaginativo y espontáneo, qu e con sus Hu bo quienes supusieron que yo decía esto po rque sabía
escritos documenta un importante capítulo de la histori a del de an temano de las divisiones que ciertas personas harían.
cristianismo. Sus cartas transpiran convicción y poder espiritual. Pero Aquel en quien estoy ligado es mi testigo de que lo
Las cartas de Ignacio han concent rado la ate nción de los que supe no era de carne hum ana, sino del Espíritu que
eruditos durante muchos año s y han sido sometidas al escrutinio predicó por mis labios: ..No hagáis nada apa rte del obispo;
guard ad vuestros cuerpos como si fuesen templo de Dios;
valorad la unidad ; huid del cisma; imitad a Jesucristo asl
y..Cristo se dirige a nosotros a trav és de su Espíritu Sanro-. lbid., 13.1; como Él imitó a su Padr e",J8
16.2; 45.2; 22. 1.
H. lbid., 45.1,
35. lbid., 42.3-4. 37. Ignacio de Antioquía, Carta a los efesios, 14.2-15.1,
36. lbid., 47.3; 63.2. 38. Ignacio de Antioquía, Cartaa los fi/ade/fos, 7.1-2.
50 LA ACCiÓN DEL Es pfRIru SANTO EN LA HISTORIA LOS PADRES APOSTÓLICOS 51

Aparentemente, segú n estas palabras, el mismo Ignacio Hablando de los dones del Espíritu, afirma qu e los esmirnien-
pensa ba que había hab lado proféticamente en esa ocas ión. Es ses po r la misericordia de Dios han recibido tod o don : «voso-
interesante que, an tes de transm itir el mensaje, dice: «clamé, tros estáis llenos de fe y amor, y no os falta ningún don ».41 A
levant ando mi voz - fue la voz de Dios». En días de Ignacio, Policarpo de Esmirna 10 exhorta, d iciéndo le resp ecto a las
en contextos religiosos tan to cristianos como paganos, se realidades que no son visibles: "Pide que estas te sean reveladas,
consideraba com o la carac terís tica de un profeta in spirado que para que no carezcas de nada, sino que puedas abu ndar en
hablara en voz bien alta. Se suponía qu e alguien qu e hablaba to dos los don es- c'u Y a los magnesios les reconoce que están
bajo el contro l de la divinid ad debía hacerlo en el volumen más llenos de Dios.ea
alto posible. De mod o qu e, en el caso de Ignacio, no se trata Tod as estas expres iones hablan de su convicció n respecto
de un detalle insignifican te, sino de un a evidencia d ar a de que a la ob ra y manifestaciones del Espíritu, como parte viral y
él estaba profetizando bajo el contr ol del Espír itu Santo . vigent e en las iglesias a las qu e escribe.
Otro detalle inte resante tiene qu e ver co n su respuesta a Hay dos cosas dignas de destacar en lo que Ignacio le dice
aquellos que dudaron del origen sobrena tu ra l de su palabra. a Policar po . Nótese que Ignacio alienta a este célebre obispo y
Lo que había dicho era ran pr eciso qu e algunos supusieron qu e márti r cristiano a pedirle al Señor el privilegio de ver cosas
algu ien le había pasado la información con anterioridad sobre invisibles. ll. lam a la atenció n que un ob ispo exho rte a otro a
lo qu e ocurría en la iglesia. Ignacio niega terminantemente esta orar por revelaciones celestiales! Ade más, su consejo respo nd e
supos ición e insiste en que no había sido él qu ien había hablado a su deseo de que Policar po no se pierda nada de lo qu e Dios
sino el Espíritu. Indudablem ente, Ignacio recibió palabra de tiene pre pa rado pa ra da r a sus hijos, de modo qu e él ta mbién
ciencia y profetizó pod erosamente en aquella opo rtu nida d. pueda tener to dos los dones espirituales. En este co ntexto, el
En sus cartas hay varios pasajes en los que el ob ispo habla vocablo ut ilizado es una forma de la palabra griega cbarísma,
de re velaciones que había recibido (Romanos 7.2; Efesios 20.2;
que es utilizada con el mismo significado con qu e 10 hace Pablo
Trallianos 5 ; Filipenses 7). A la luz de estos text os, f .A.
en 1 Co rintios 12 y Ro man os 12 (véase 1 Co rintios 14.1).
Schilling destaca el aspecto profético del mini sterio de Ignacio,
Ignacio fue suceso r de los após toles y, por lo tant o, un
y señala: "De estas auto-revelacio nes sabemos que Ignacio
firme ment e se consideraba un profeta , si bien no se designó impo rtant e test igo de su práctica y enseñanza. Sus siete epí sto-
como tal,,)9 las presentan, con gra n fervor y poder espiritua l, un concepto
Ignacio escribió también sobre la capac idad de ent ender del cristianis mo que está muy vincu lado al tipo doctr inal del
los misterios y las cosas celestiales, aparentemente inspirado apóstol Ju an, de quien fue discípulo, si bien, hay también
po r el mismo Espíritu que inspiró a los profetas y a los rasgos típ icamente paulinos en su enseñanza.
a póstoles. Y d ice qu e él mismo tenía este don espiriru al.w Él veía evidencias de la ob ra del Espíritu en las vidas de
los miemb ros de la iglesia, a quienes describe en su Carta a /0 5
efesios como "pied ras del Temp lo, preparadas de ant emano
39, F.A. Schilling, -T he Mysticism oí Ignatius of Annoch - (tesis de Ph.D.,
para un edificio de Dios el Padre, levantadas por esa máq uina
Th e Universiry oí Pennsylvania, 1932), 50.
40. Ignacio de Antioquía, Carta a los tra//ianos, 5. 1-2. Es interesante notar
que en la salutación de todas sus cartas, Ignacio se califica a sí mismo 4 1. Ignacio de Antioqufa, Carta a los esmímienses, int. Ct. 1 Co rintios 1.7.
como _Thecforus-, «inspirado por Dios- o -portador de Dios». El 42. Ignacio de Antioquía, Carta a Policarpo, 2.2.
epíteto señala a alguien que tiene el don de profed a. 43. Ignacio de Antioqufa, Carta a los magnesios, 14.
52 LA ACCIÓ N DEL ESpíRITU SANTO EN LA HISTO RIA Lo s PADRES APOSTÓLICOS 53

de Cristo Jesús, (que es] Su Cruz; usando al Espíritu Santo doctrina de los dos caminos en términos muy parecidos a los
como cuerda- rt- de la Dídach é,
El obispo de Amioquía era ta mbién con sciente de la En cuanto a la obra del Espfritu Santo, el autor le reconoce
negligencia crecie nte en cuanto a la depend encia del Espír itu la doble función de inspiración y profecía. La Epístola presenta
en la iglesia de sus d ías. Co n dolor levanta una pregunta que al Espíritu princ ipalmente como el maestro de los héroes y
nos so rp rende por su actualidad : «¿Po r qué perecemos necia- profetas del Antiguo Testamento . Es Él qu ien «habla al corazón
mente por la ignorancia descui dada en reconocer el do n [cha- de Mois és-rts Este, a su vez, habla en el Espíritu.49 Abraham, en
risma] qu e he mos rectbido jvu Como seña la Swere, «el Espíritu el Espíritu, anticipa aJesús.50 y Jacob, porel Espíritu, ve un tipo
es para él un hecho fun dame ntal de la experiencia cristian a, de la iglesia cristiana [edel pueblo que surgiría después»).51
más bien que un tema de investigación y de def inición exac- Esta obra del Espíritu continúa bajo el Nuevo Pacto, en el
( 3 )>.46 que el don de pro fecía y la morada del Espíritu en el creyente
Al leer a Ignacio, resulta evidente que «la tradición de están relacionados. Refiriéndose al Espíritu Santo , dice el
profetas cont inúa desde el N uevo Testamento, pero está inse- autor: «Su pa labra de fe, su llamamiento de la promesa, la
parablemenre unida en [su] mente, como lo está en escrito res sabid uría de los estatutos, los mandamientos de la doctrina, Él
posteriores como Cipriano, con la jerarquía o rdenada de obis- mismo profetizando en nosotros , Él mismo morando en no so-
pos, presbíteros y di áconos-r' ? Sin embargo, todavía no se ve rros, abriendo para nosotros que estábam os esclavizados por
la tensión qu e más ta rde se desar rollaría entre profecía y orden la muerte las puertas del templo, esto es, la boca".S2 De este
eclesiástico o en tre un min isterio carismático y otro institucio- modo, el ejercicio de la profecía y la presencia del Espíritu eran
nal. El obis po Ignacio se presenta como un buen ad ministrador considerados por el auto r co mo elementos no rmativos para
aquellos que participan de la provisión divina. No sorprende,
de la iglesia, pero que ejerce su do n profético co n poder y habla
pues, que el autor exclame con gratitud al co mienzo mismo de
bajo la guía del Espíritu Santo.
su escrito : «M e gozo abundantemente y sobremanera en vues-
tros espíritus felices y gloriosos, porque a tal efecto habéis
Epístola de Bernabé (¿90-1101) recibido al do n espiritual injertado. Por lo cual también me gozo
interiormente tanto más, ...por que verdaderamente veo en voso-
Se trata de un escrito breve, de carácter d id áctico-edifica-
tros al Espír itu derramado desde el rico Señor de a mor-esa
tivo , cuyo autor es desconocido . La tradic ión lo atribuye a
Después de declarar qu e el Señor «nos ha creado de nuevo
Bernab é, el compañero de Pablo. Pero el contenido del texto
por su Espíritu», la Epístola se refiere a la morad a plena del
hace pensar que fue compuesto hacia el año 90 . El auto r Espíritu en el creyente, que pasa a ser el templo espiritual del
prob ablemente era un predicad or judea-cri stiano de Alejan- Espíritu Sama.
dría, Egipto, en tiempos del empera dor Ad riano . En la primera
parte, la Epístola ataca al judaísmo y en la segunda expo ne la
48. Epfstola de Bernabé, 12.2.
49. Ibid., 10.2.
44. Ignacio de Antioquía, Carta a fos efesios, 9.1. 50. lbid., 9.7.
~ 5 . Ibid., 17.2. H . lbid., 13.5.
46. Swere, The Holy Spirit in the Aneient Church, 16. n . lbid., 16.9.
47. Burgess, Ancient Christian Traditions, pp. 19·20. 53. lbid ., 1.2.
54 LA ACCiÓN DEL ESP!Rlru SANT O EN LA H ISTORIA Lo s PADRES APOSTÓ LICOS 55

¿Cómo ? Aprended [como sigue). Habiendo recibido el ha sido uno de los documentos posrap osrólicos y extra-canó-
perdón de pecados, y colocado nuestra con fianza en el nicos más estu diado. Los erud itos han prestado atención a un
nombr e del Señor, hemos llegado a ser nuevas criaturas, sin nú mero de cuestiones relacio nadas con el ma terial que
formadas de nuevo desde el principio. Por lo cual en contiene, per o no ha habido una co nsideración suficiente sobre
nuestra habitaci ón Dios verdade ra mente mora en n osotros. la Didaché corno testimoni o de la cont inuidad de la ope ración
,_, y al darnos arr epentimiento nos introdu jo al templo poderosa del Espíritu Santo en la iglesia postapostólica.
incorruptible o • • Este es el templo espiritual constru ido por Es prob able qu e el docume nt o haya sido escrito en Siria y
el Señcr .s-t para las comunidades cristianas de esa región.se Ha y mucha
discusión en cuanto a la fecha de co mposición, si bien la
Nuevamente, por lo que dice esta car ta, parece evidente mayoría de los eruditos lo ubica en la segunda mitad del primer
que no solamente su autor recono ce la o peración activa del siglo.J" Esto significa que es contemp oráneo con la redacció n
Espíritu en la vida del creyente, sino que destaca su participa- de algunos de los escrit os que luego entraron en el canon del
ción pod erosa en la vida de la comunidad de fe. Tal como era N uevo Testa mento. Esto le da al opúsculo un significat ivo
el clima prevaleciente en las co ngregaciones cristianas en Pa- valor docum ental en cuanto a la vida y práctica de las iglesias,
lestina y Egipto hacia fines del primer siglo y co mienzos del y la continuidad de la actividad del Espíritu Santo a tra vés de
segundo, la profecía y en general los dones de revelación manifestacio nes carismáticas. Por lo menos, par ece ser un buen
gozab an de un lugar preferencial. Su expresión "el don espiri- testimo nio de la realidad de las iglesias ligad as al cristianismo
tu al injertado» (o impartid o) recuerda la frase de Pablo en palestino o sirio, con lo cua l su mensaje llegó a cubrir un área
Romanos 1.11 : "Porque deseo veros, para comunicaros algú n geográfica bastante extendida.
don espiritu al, a fin de qu e seáis confirmados». Y, a su vez, la El do cumento gozó de gran autoridad, al punto que fue
presencia y op eración de este don espiritual (probablemente, confundido co n los escritos canónicos del Nu evo Testam ento.
profecía), pon e en evidencia el derramamiento del Espíritu La Didaché pr etend e basar su enseñan za en los apósto les. Se
Sant o, como daci ón de gracia de parte del Señor en la vida de present a co mo una síntesis moral, litúr gica y d isciplinari a, que
la co ngregación . De este modo, el testimonio que recogemos es posible haya sido utilizada para la edu cación cristiana de los
de la Epístola de Bernabé respalda la afirmació n en cuanto a la
continuidad de la actividad del Espíritu a través del ejercicio y
vigencia de los don es en las iglesias, al entrar en el siglo JI. en 1873. Veinte años más tarde, se encontró una versión latina del siglo
1II.
56. Véase M.H. Shepherd, - Didache- , en The lnterpreter's Dietionary of
Didaché (SO-lOO) the Bible, 6 vols., ed. E,S. Bur ke Abingdon Press, N ueva Yor k 1962,
1:842. La mejor discusión en cuanto a dónde fue escrita la Didache se
La Didaché o Enseñanza de los Doce Ap6stoles es un pequ e- encuentra en A. Adam, -E rw águngen zur Hern kunft der Didache»,
ño opúsculo de fines del primer siglo.rr Desde su descubrimiento, Zeitschrift für Kircbengeschichte 67 (1957): 1-47.
57. R. Glovcr, ..The Didache's Quotati ons and rhe Sync pric Oospels-, New
Testament Studies 5 (1958· 1959): 12-29¡ j ean-Pierre Audet, La Dida-
54. lbid., 16.8-10. ehé: instructions des Ap6tres J. Gabalda, Paris 1958, 170-173¡ john
rs. Clemente de Alejandría, Atanasio y Eusebio lo mencionan, pero recién A.T. Robinson, Redating the New Teu ament SCM, Londres 1976, pp.
se descubrió su texto en un códice en un monasterio de Constantinopla 322-327.
56 LA ACCiÓN DEL ESP!R1TIJ SANTO EN LA H ISTO RIA Lo S PADRES APOSTÓUCOS 57

catecúme nos. N o abunda en referencias al Espíritu Santo, pero actitu des equivocadas. Parece evidente que en su tiempo ya
sí lo hace de manera explfcira en dos lugar es. Po r un lado, es había un número considera ble de personas qu e pretend ían el
el documento no canó nico más temp rano en of recer la fórmu la ejercicio del do n y ministerio profético, tan to dentro como
trini taria del bautismo: «en el nombre del Padre, y del Hijo y fuera de la iglesia, sin ser verdaderos profetas inspirados por
del Espíritu 5aoto",58 Por otro lado, es el escrito post-ape st ó- el Espíritu Santo. De hecho, la pro fed a y el éxtasis pro fético
Iico más antiguo que informa de un min isterio de corte caris- no eran prácti cas exclusivamente cristianas. En el mun do
mático. Es interesante notar qu e este manual eclesiástico pri - pagano de los primeros siglos de nuestra era, estas prácticas
mitivo indi ca qu e había profetas que hablaban en el Espíritu, eran bastante frecuentes, según el testimonio de escr ito res
y advie rte con tra la falsa profed a en la congregació n. Así, pues, clásicos co mo Filón , Plotino, Ciceró n. Sófocles. Eurípid es y
dedica un gran espacio al minister io de los profetas en la iglesia Plar ón .et
y presenta los crite rios qu e pe rmiten evaluar su autent icidad . Esto mue ve al auto r a animar a sus lectores a no ser
La Dídacb é pone de manifiesto un ap recio mu y especial ingenuos y a juzgar adecuada ment e el ejercicio del don prof é-
por el min isterio pro fético en particular . Refiriéndose a los rico. Su advertencia es clara: «Sin emb argo, no tod o el qu e
procedimientos a seguir en ocasión de la Cena del Señor, e! habla en el Espír itu es un profera- .ez De allí qu e sea necesario
opúsculo ex ho rta: «Permitid a los prof etas dar gracias tanto pro bar la aute ntic idad del qu e ministra pr ofecía. La primera
como deseen - .J'' La admonición recuerda el co nsejo de Pablo prueba tien e qu e ver con la conducta per sonal del que profe-
a los corintios : «Procurad los do nes espirituales, pero sobre tiza. Una persona es un profeta autént ico «solo si se comporta
tod o qu e profeticéis» (1 Corintios 14.1). Es interesante notar como el Señor». La Didaché puntualiza y ejemplifica esta
qu e la en señanza del apóstol sobre los don es espiritua les sigue prueba de la verdadera y falsa profecía: «Es po r su con ducta
inmed iatamente a su enseñanza sobre la Cena de! Señor, tal que el falso pr ofeta y el [verda dero] pro feta pueden ser reco-
co mo lo hace la Didaché. De igual modo. el au to r del o púsculo nocidos. Por ejem plo, si un pr ofeta ordena un a mesa en el
asume que cualqui er palabra profética que se pronuncie en tal Espíritu, no debe comer de ella. Si lo hace, es un falso pro fe-
ocas ión va a ser de beneficio para los creyentes qu e la escuchen ta».63
(véase 1 Co rintios 14.3). Este ap recio po r el don profético se Una segu nda prueba para saber si estamo s frente a un a
hace patente en el siguie nte pasaje: «M ient ras un pro feta está profecía falsa o verdadera es to ma r en cuenta qu é es 10 que el
habland o en el Espíritu. no debéis probarlo ni examinarlo. profeta enseña y de qué manera lo qu e enseña se ve reflejado
Porque "todo pecado será perdon ad o, pero este pecad o no será en su propia vida. En Didacb é 11.1-2 se afir ma qu e el co nte-
perdonado'Scev nido del mensaje qu e se da debe confo rmarse con la instrucció n
No ob sta nt e, al igual que lo que ocurría con los corin tios, dada en la pr ime ra pa rte de la Didacb é, Si el profeta respo nde
ex istía el peligro de caer en abu sos y desorden. El autor es bien a esas pautas, puede ser bienvenido en la comun idad. La misma
co nsciente de esto y es claro en su ex hortación para evitar la prueba debe ap licarse a cualquier otr o mini sterio iti neran te
confusión y la int ro misión de falsos pro fetas o personas con (co mo el de los evangelistas). Además, dice el opúsculo :

58. Didach é, 7.1 , 3. Cf. M ateo 28.19. 61. Véase Kydd, Charismatic Gifts in the Ear/y Church, p. 89, not a 5.
59. lbid., 10.7. 62. Didaché, 11.8.
60. lbid., 11.7. 63. íbid.; 11.8 -10.
LA ACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA Lo s PADRES APOSTÓLICOS 59
58

Todo profeta que enseñe la verda d pero que no practiq ue los mensajes pr oféticos en sus iglesias, porqu e con sidera ban
10 qu e predica es un falso pro feta. Pero tod o profeta que eran de provecho para ellos. Pero, también eran bien
aprobado y genui no qu e actúa con miras a simbo lizar el conscientes del peligro de ser infiltrados po r falsos proferas.e"
misterio de la iglesia, y no os enseña a hacer tod o lo qu e él De este modo , según el testi monio de la Didacb é, hacia fines
hace, no debe ser juzgado por vosotros. Su juicio qu eda con del primer siglo en las comun idades .cristia nas sirias a las qu e
Dios. Por que de manera similar actuaron tambi én los el do cumento está dirigido, el ejercicio de los dones y minis re-
profetas de la antigüedad. Pero si algu ien dice en el Espíri- rios carismáticos era frecuente, especialmente el de pro fecía.
tu : ..Dáme dinero , o alguna otra cosa, "no le prestéis La existencia de abu sos y problema s es precisame nte evidencia
atenci ón". Sin embargo, si os dice que deis para otros en de la vigencia y difu sión de los mismos.
necesidad, nadie debe co ndenarlo. 64
Este tipo de cautela y análisis crítico de be a plicar se tam - Papias de Hierápolis (m. 150)
bién al tiempo que un profeta se queda ministrando en la
iglesia. En D ídacb é11.4·5 se nos dice qu e el máximo permitido
Es opo rtuno mencion ar aquí el testimonio de uno d e los
fragmentos de Papias de H ierápo lis, obispo de esa ciuda d de
son dos d ías. Probablement e el autor no se refiere solamente a
Asia M eno r. Papi as hab ía o ído predi car al apósto l Juan y era
pro fetas sino que incluye Otros ministerios itinerantes, como
ami go de Policarpo. Hacia el año 130 escrib ió un tratad o en
el de los apóstoles y evangelistas. No obstante, si el profeta cinco libros, que se titula Explicación de las sentencias del
prueba ser auténtico y qu iere establecerse en una comunidad, Seño r. Lo que se con serva de la obra tiene impo rtancia, pues
ésta de be sostenerlo.O contiene algo de inestimable valor, como es la enseñ an za oral
Según Stanley M . Burgess: de los discípulos de los ap óstoles. En un int eresa nte pasaje,
Papias relata algunos hechos milagrosos, señalando que él llegó
Obviament e, este aut or difiere de San Pablo en cómo debe al conocimient o de ellos por la tr adición o ral. Según él, las hijas
uno discernir las enseñanzas de los profetas. Pablo insiste de Felipe le conta ron de «un hombre mue rto qu e fue resucitado
en el discernimient o espiritual, mientras que el escritor de a la vida en sus días... Eusebio, que registra esto en su H istoria
la Didaché condena cualqu ier juicio espiritual de ese tipo. eciesidstica, agrega: ..El tambi én me ncio na otro milagr o rela-
El don de «discernimiento de espíritu s- parece haber pasa· cionado con J ustus, apodado Barsabés, que tragó un veneno
do en las iglesias a las que esta obra está dirigida . La única mortal, y no recibió daño por causa de la gracia del Señor». Y
prueba que queda es la del carácter personal.ee agrega: ..La misma pe rsona [Papias], además, ha registrad o
Indudablemente, el problema de los falsos profetas ya era otras histori as com uni cadas a él oralment e, ent re ellas algunas
bastante frecuente en el contexto al cual está d irigida la Dida- parábolas de sco nocida s y enseñanzas del Salvado r, y algu nas
ch é, Los pa sajes citad os ilustr an el dilema que confron taban otras cosas de natu raleza más fabu losa.., 68
tan to el au to r del opúsculo como sus lectores... Ellos qued an Si bien no tenemos disponible la obra de Papias, esto s
testi monios indi rectos sirven pa ra ver el carácter caris mático

64. lbid., 11.10· 12.


65. lbid., 13.1. 67. Kydd, Cnarismatic Gifts in the furly Chu"h, p. 8.
66. Burgess, Aneient Christian Traditions, p. 21. 6B. Eusebio de Cesárea, Historia eclesiástica, 3.39.
60 lA ACCIÓN DEL ESpIRITO SANTO EN LA. HISTORIA LOS PADRES APOSTÓLICOS 61

del min isteri o y acción de las iglesias en la época de los Pastor de Hermas (ca. 140)
sucesores inmed iatos de los a pó stoles. En este caso particular Es una alegoría religiosa dividida en tres partes: visiones,
se ve un a de las d ificultades qu e enfrent a el historiador cristia- mandamiento s y semejanzas. Fue escrita por Hermas, hermano
no para documentar la acción del Espíritu Santo en la historia. de Pío, obispo de la iglesia roma na, entre los años 139-140.
El argumento cesacionista de que los dones y manifestaciones Hermas es e! nomb re que se da a sí mismo el autor, sin
del Espír itu terminaron porque no hay evidencias históricas especificar su posición dentro de la iglesia de Roma, a la cual
qu e prueben lo contrario, no tom a en cuenta un pr incipio de su libro va dirigído.e? Hermas fue esclavo de nacimiento .
bue na hermenéu tica histór ica que es el hecho de que no todo Vendido por su amo a una tal Rod e, vino a Roma. Libertado
lo que se ha escrito se ha preservado hasta nuestro s días. por su nueva ama, fundó una familia y se empleó con éxito en
Muchos do cumentos históricos se perdieron por efecto del distintos negocios. La riqueza adquirida de manera deshonesta
tiempo o por la o bra destructor a de quienes consideraron su corrompió a su mujer y a sus hijos, quienes hasta llegaron a
contenido como equivocado, peligroso o herético en tiempos traicionar a sus propios padres. Sobrevino el castigo divino, y
posterio res. Hermas quedó en la miseria. Así, se vió forzado a cultivar una
Junt o con e! principio histórico enunciado, conviene rener parcela de tierra en las cercanías de Roma. Fue allí que tuvo
en cuenta otros de valor en relación con e! tema que nos ocupa. sus famosas visiones, que están registradas en la obra en
cuestión.
Primero, no to do lo que ha ocurrido está registrado en los
Lo que a nosotros nos interesa de esta obra es el hecho de
documentos. En muchos casos, e! ejercicio de los carismas o
que Hermas discute con bastante detalle la obra de! Espíritu
las señales y milagros eran cuestiones tan obvias, que los
Santo en la iglesia, y considera con particular interés el don de
autores no se molestaron en discutirlas, ni siquiera en mencio-
profecía. El material que presenta sugiere que especialmente la
narlas. Segundo, no todo lo registrado y que se ha preservado
profecía estaba tod avía en vigencia entre los creyentes a los
ha sido enconrrado. Los padres apostólicos hacen referencia a
cuales escribe. El prop io auto r parece presentarse como un
innumerables escritos que se conocen por nombre, pero cuyo profeta, ya que hay numerosos pasajes en su libro que sugieren
conteni do es desconocido, porque no han llegado a nuestros la revelación de Dios a través de visiones, si bien él mismo no
días o no se los ha descubierto todavía. Tercero, no todo lo se califica como tal. Incluso, hay pasajes en los que He rmas
que se ha logrado encontrar está al alcance de la mano del afirma que se le ha encomendado e! deber de dar a conocer sus
investigador. Esto es así, bien sea porque los materiales se VISiones.
encuentran en colecciones privadas, en archivos inaccesibles, El libro es apocalíptico en su forma. Comienza co n e!
en idiomas no conocidos por el estudioso, o todavía no han relato de una experiencia de rapto que vive su autor, qu ien
sido publicados y dados a conocer. Cuarto, no todo el material
de que se dispo ne es interpretado de la misma manera. Donde
un investigador ve manifestacion es carismáticas y expresiones 6'1. Sobre los deta lles de autor, fecha, lugar y destina tarios de la o bra, ver
de la acción de! Espíritu Santo, otro puede ver ejemplos de los estudios de G.F. Snyde r, The Shepherd ofHe-mas, en The Apostolic
herejías o desbord es de entusiasmo y fanatismo. De todos Fathers: A New Translation and Com mentary, ed, Roben M . Gram, 6
vols. Thomas Nelson and Sons, Carnden, N.J. 1968, 22-30; Stanislas
modos, lo poco que nos llegó de Papias es suficiente para Gier, Hermas et fes Pasteurs: les trois auteurs de Pasteu r d'Hermas
demostrar la vigencia de las manifestaciones poderosas del Presses Universitaires de France, París 1963, pp. 304-305; YRohinson,
Espíritu en las iglesias de su tiempo. & dating the New Testament , pp . 3 19·321.
62 LA ACCIÓN DEL ESpjRITU SANTO EN U. HISTO RIA Los PADRES APOSTÓUCOS 63

afirm a haber sido transpor tado por el Espíritu a través de un privado, ni tam poco habla el Espíritu Santo cuando el
de sierto sin caminos. Luego, los cielos se abren y com ienza una hombre quiete que el espíritu hable, sino que habla solo
visión . cuando Dios quiere que hable. Enconces, cuando un hom-
Un año más tard e se repite la experiencia. Son estas bre que tiene el Espíritu Divino viene a la congregación de
visiones las que Hermas puso po r escrito en su libro. lnduda- los justos que tienen fe en el Espíritu Divino, y esta asam-
blem eme, el autor no es un profeta en el sentido en que el don blea de ho mbres ofrece oración a Dios, ento nces el ángel
profético es descrito por Pablo en 1 Co rintios 12-14, o según del Espfritu prof ético, que está destinado para él, llena al
los ejemplos que enco ntramos en H echos 13.2 y 21.11. Tam - hombre; y el hom bre al ser lleno con el Espíritu Santo,
poco es un profeta al estilo de Ignacio de Am ioqu ía, según su habla a la multitud según el Señor desea. De esta manera,
relato en su Carta a Jos Filadelfos. No obstante, sí es un profeta entonces, se manifestará el Espíritu de la Divinidad.tu
parecido a los del Antiguo Testamento , al menos en la for ma
en que recibía los mensajes , es deci r, a través de visiones. En Nótese qu e el ministerio del pro feta verdadero tiene lugar
esto se parece a Pedro (Hechos 10), aunque sus visiones en el co ntexto de la adoración comunitaria (una ..asamblea..
parecen ser más frecuentes y dramáticas qu e la del apóstol. Sea que ..ofrece oración a Dios..). Por otro lado, el mensa je del
como fuere, en Hermas el don pro fético como manifetaci én profeta está dirigido al gru po y no a algún indi viduo en
del Espíritu parece no solo estar vivo sino también tener una particular, Su propósito es la edificación de la iglesia (l Co rin-
vigencia notable. tios 14.3), Además, el profeta es alguien lleno del Espíritu
No obstante, al igual que la Didaché, Hermas advierte a Santo y solo dice lo que Dios qui ere que él diga. De este mod o,
sus lectores contra los falsos profetas, respecto a los cuales hace el concepto de Hermas sobre la verdade ra profecía está muy
una cla ra distinció n. ..El falso profeta.., dice él, ..al no tener el cerca de la ense ñanza de Pablo en 1 Corintios 12- 14 en cua nto
poder del Espíritu Divino en él, les responde [a los que lo al ejercicio de este don y minister io.
consultan como adivino] según sus preguntas, y según sus En cambio, en el caso del falso profe ta, las actitudes son
deseos per versos, y llena sus almas con expectativas, según sus muy diferentes. El profeta espúr eo ..se exalta a sí mismo, y
propios deseos. Porque al estar él mismo vacío, da respuestas desea ocupar el primer asiento [en la con gregación], y es
vacías a inquisidores vados... Y agrega : ..N ingún espíritu que atrevido, e impru dente, y charlatán, y vive en medi o de muchos
es dad o por Dios necesita que se lo interrogue ; sino que ta l lujos y de muchas otras supercherías, y cobra din ero por su
espí ritu por te ner el poder de la Divinidad habla todas las cosa s profecía; y si no puede recibir recompensa, no profetiza... En
po r sí mismo, en tanto que procede de ar riba, del pod er del consecuencia, el espíritu qu e lo inspira y posee es ..terrenal ...
Espíritu Divino » . Es por esto qu e cualquier persona que pretenda ser ..portad or
Por eso, su recomen dació n es: del Espíritu .. debe ser probada por su vida y sus obras. ..Prob ad
por sus acciones y su vida al hombre que dice que está inspira-
Probad al hombre que tiene el Espíritu Divino por su vida. dO>l,71 La recomendación final de H ermas es: ..Confiad en el
En primer lugar, quien tiene el Espíritu Divino que viene Espíritu que viene de Dios, y qu e tiene pod er ; pero no co nfiéis
de arriba es manso, y apacible, y humilde, y se abstiene de
toda iniquidad y del vano deseo de este mundo, y se
contenta con menos exigencias que las de otros homb res, 70. Pastor de Hermas, Mandamiento 11.
y cuando se le pregunta no respon de; ni tamp oco habla en 7 1. lbid.
64 LA ACCiÓN DEL ESP!RJ l11 SANTO EN LA HISTORIA Los PADRES APOSTÓU COS 65

en absol uto en el espíritu que es terrenal y vacío, po rque no debía celebrarse la Pascua. Poco después de regresar a Esmirna,
hay poder en él: viene del Diablo ».72 quizás en febrero de! año 156, sufrió e! martirio, abrasado por
En su d iscusión de los verdade ros y falsos profetas, H er- las llamas de la hoguera en un circo ro mano. Es posible qu e
mas afirma la popularidad de este don y ministerio en sus días Policarpo haya sido el último so breviv iente de los que habían
y en Roma. Por eso, como apunta Kydd, se puede con cluir que, hablado con testigos oculares del minister io de Je sús. Los
«si la pregunta de cómo decid ir si un profeta era verdade ro o miembros de su iglesia, después de su muerte, testificaron de
falso er a un a cuestión, debe hab er habido un buen número de que su pastor tenía el don de profecía: «Ciertament e el muy
profetas dando vueltas».?] Co mo señala H enr y B. Swete : «Este admirable Policar po fue uno de estos [elegidos ], en cuyo
es un testim onio not able de la supervivenc ia de la profecía en tiem po entre nosotros se mostró co mo un maestro a postó lico
la Iglesia Rom ana hasta qu izás la cuarta o quima década del y pro fético y obis po de la Iglesia Católica en Esmima-Zs
segu ndo siglo».14 En un do cu ment o que se conoce como Acta del ma rtirio
Según Hermas, el Espíritu Santo se manifie sta también en de Policatpo, la obra de su género más antigua que se co nserva,
el gozo con qu e el cristiano sirve al Señor. Su exh ortación es: hay abu ndantes test imonios de los don es del Esp íritu qu e
«Por tanto, vesríos co n alegría, que siempre es agradable y ejercfa este siervo de Dios.zz El docum ento es un excelente
ace pta ble a Dios, y regocijaos en ella ... El Espíritu Santo, que testimonio del lugar que el Espíriru Santo ocupa ba en este
fue dado a los hom bre s es un Espíri ru alegre-cvs De este modo, tiem po en la vida , la fe y la adoración de la iglesia. Tod o el
e! go zo debe ser la co nd ición no rmal del creye nte, y la que está registro del marti rio de Policarpo está lleno de ex perie ncias
más en ar mo nía con el vino nuevo de la vida cristiana . El vino sobrenaturales y de mani festacion es del Espír itu Santo .
nuevo y el vinagre no se pueden mezclar . La manera en que Tres días antes de su arres to, mientras estaba orando, tuvo
este Espíriru de gozo afecta la vida del creyent e individual y e! una visión y vio su almo hada enc end ida con fuego, y volvién-
culto de la comunidad de fe sigue siendo evidente, incluso en dose a qu ienes estaban con él, profetiz6 : «Debo ser quemado
nuestros días, en tod a co ngregac ión en la qu e el Espíritu Santo viVO»J8 Más inte resante to dav ía es el hecho de qu e apa rente-
actúa librem ente . mente el documento mencio na la gloso lalia (hablar en lenguas
extrañas) en relació n co n el célebre mártir de Esmirna . Cuando
fueron a arresta rlo , Policarpo pidió permiso para o rar por un a
Policarpo de Esmirna (69-156)
ho ra, y «él se puso de pie y or ó, esta ndo tan lleno de la gracia
Policarpo fue d iscípu lo del apó stol J uan, maestro de Ire- de Dios, que por dos ho ras completas no pudo callar, para el
neo de Lyo n y de Papias, y ob ispo de la ciudad de Esmirna. En asombro de aquellos qu e lo escuchaban -Zs Cuando e! anciano
el año 155 fue a Roma a entrevistarse con e! obispo Anicero,
con motivo de una controversia en cuan to a la fecha en que
76. Acta del martirio de Pol ícarpo, 16.2.
77. El Acta del martirio de Policarpo es una carta escrita por la iglesia de
72. lbid. Esmima a la de Filomelio y a toda la iglesia cató lica. Su narración es
73. Kydd , Charismatíc Gifts in the Early Church, p. 20 . dramát ica y sincera . El vocablo -car élico- se utiliza en este libro en el
74. Swete, The Hofy Spírít in the Ancient Church, p. 25. Véase también: sentido de universal y ortodox o, y con referencia al cristianismo
Kirsopp Lake, -The Shepherd of Hermas and Christian Life in rhe histórico.
Second Century.., Haruard Theological Review 4 (19 11); 45. 78. lbid., 5.2; 12.3.
7.1. Pastor de Hermas, Man da miento 10.2. 7'J. Ibid., 7.3.
66 LA ACCi ÓN DEL EspíRITU SANT O EN LA HISTO RIA LOS PADRES APOSTÓLICOS 67

pastor fue finalmente llevado a la arena, «una voz del cielo vino que se cerrara el primer siglo. A la luz de los testimonios
a él, dicien do: «Sé fuerte, Po licarpo, y sé hombre», Na die vio recogidos, parece claro que el Espír itu Santo continuó ope ra n-
a quien le hablaba. pero aquellos de nuestro s hermanos que do en los creyentes y las iglesias de la misma manera que lo
estaban presentes oyeron la voz - ese vemos actuar según el libro de los Hechos.
Las últimas palabras de este honorablesiervo de Dios están Por ot ro lad o, es evidente que entre todos los dones, el
registrad as como su oración final, antes de morir mirando al que más se destaca es el ejercicio del don de pro fecía. Este don
cielo: . aparece como uno de los carismas más frec uentes en la vida de
las iglesias en todas partes en el períod o inme d iatame nte
Señor Dios To do poderoso, Padre de tu amado y bendito posterior a los apóstoles, así co mo lo fue en la época aposr óli-
Hijo Jesucristo, te doy gracias, po rque me has tenido por
o • • ca.83 Esto no sería de sor pre nder si se inter preta co mo una
digno de este día y esta hora , de que pueda ten er parte en adecuada vigencia y aplicació n de las recomendacione s de
el número de tus mártires, en la Copa de tu C risto, hasta Pablo en cua nto al ejercicio de los do nes del Espíritu en 1
la resurrección a la vida eterna tanto del alma como del Corintios 14. La mayor parte de las recom endaciones que los
cuerpo en la incor ruptibi lida d [impartida] por el Espíritu padres apostól icos dan en relación con el ejercicio de los don es
Santo ... Te glorifico, junto con el eterno y celestial Jesu- son las mismas que enco nt ramos en los escritos apostólicos del
cristo, tu amado Hijo, con quien sea gloria a ti y al Espíritu Nuevo Testam ento.
Santo ahora y en todos los siglos venideros. Amén.SI N o obstante, parece un hech o cierto que las con gregacio-
nes cr istianas cont inua ban siendo carismáticas en el sentido de
Esta es la primer insta ncia en qu e una doxologfa glorifica dar al Espíritu Santo y sus man ifestaciones un lugar destacad o
al Espíritu Santo junto co n e! Padre y e! Hijo. Co mo señala en la vivencia co lectiva e individua l de la fe. Si bien no es
Swete: «S i las palabras fueron pron unciadas por Policarpo, posible determi nar cuá n difund ida era la co nsciencia de los
como indica la carta, tienen una importancia especial co mo el cristianos de este período de actuar bajo la inspiración, guía y
testimonio final de un mártir que fue cristiano por treinta años pode r del Espíritu Santo, los casos citados son eloc uentes. Es
antes de fines del primer siglo y fue un oye nte de San Juan».82 posible, pues, concluir co n Swete, que en el cristianismo
Un repaso de los testimonios que se co nservan en cua nto sub-apostólico , «la presencia de! Espíritu en el Cue rpo de
a las manifestaciones del Espíritu Santo durante e! período Cristo era admi tida po r todas partes como un hech o recono-
inmediato posterior al ministerio de los apósto les, no nos deja cido de la vida cristiana; mientras que cada escrito r trató co n
to do el material que quisiéra mos par a el análisis y la evalua - el hecho según se le presentó en su prop ia experiencia o en la
ción. Sin embargo, es mucho más de lo que estarían dispuestos experiencia de la iglesia local en la que vivía».84
a cons iderar quienes señalan que los don es del Espíritu y sus
mani festaciones de pod er (señales, prodigios, maravillas y
milagros) terminaron co n el minister io de los apó stoles y antes

83. Para el importantísimo espado que se otorga a [a profeda en la épo ca


80. Ibid., 9.1. apostólica y postapost6lica, véase Pierre de C. Labriclle , La oi se
81. Ibid., 14. montaníste Em est Leruux, París 1913 , 112·123.
82. Swete, The Hofy Spirit in the Andent Church, pp. 17-18. 84. Swete, The Ha/y Spirit in the Ancient Church, p. 3 1.
LOS ~POLOGIST~S GRIEGOS

11 1 perío do de los apo logistas griegos comi enza


poco antes del final del período de los Padres
Apost ólicos. Los apologistas fueron hombres que
se propusieron escribir en defen sa de la fe cristia-
na contra las acusaciones populares y los ataques más sofisti-
cados de los intelectuales de sus días. La mayor parte de estos
escritos fueron dedicados a los emperadores de turno, y desti-
nados a los sectores más educados del Imperio Romano . Su
pro pósito era doble. Por un lado, querían dem ostrar la necedad
y deb ilidad del paganismo; y, po r el otro. deseaban presentar
a la fe cristiana como una religión intelectualmente válida. De
esta mane ra, estos defensores de la fe esperaban cambiar la
opinión pública en cuanto al Evangelio y llevar a los líderes de
la sociedad a su conversión. Los denomin amos ..apologistas
griegos» po rque casi todos ellos escribiero n en esa lengua. Su
propósito era hacer com pre nsible el cristianismo a los paganos
del mundo greco-romano, y para ello utilizaron una lengua y
70 LA ACCIÓN DEL ESpfRIlU S ANTO EN LA HISTORIA (.,OS APOLOGISTAS GRIEGOS 71

un lengua je que les resultase intel igible. Es así qu e, hicie ron Cuadrare de Atenas (ca. 130)
tod o lo posible por ada pta r su mensaje a la cultura impera nte.
Ent re los primeros apologistas surge el nombre de Cua -
Con esto , los apologistas helenizaro n al cr istianis mo y cristia-
drato, obispo de Atena s. Además, este hombre no solo defen-
nizar on al helenismo .
dió la fe cristiana escribien do una Apología, sino que era
En razón de estos objetivos, los apologista s tu vieron mu-
conocido como evan gelista y profeta . Eusebio d ice de él:
cho cuidado de presentar los aspectos más potables de la vida
«Entre las luces brillantes de este períod o estaba Cuadra to,
cr istiana, según los criterios de la cultu ra a la qu e dir igían su
quien según la evide ncia escr ita era, como las hijas de Felipe,
mensaje. En un sentido, los elementos sobrenatu rales de su fe eminente en su don prof ético-.z Es interesante que Eusebio ,
fueron desplazados para elabor ar una argu mentac ión más
na muy afecto a destacar el ejercicio de los car ismas con
racion al de la misma. Los secto res intelectuales y de poder
posterio ridad a los apósto les, agrega que «además de ellos
debían ser convencidos de la verdad del Evangelio por la
muchos otros eran bien conoci dos en ese tiempo, pertenecien -
racionalidad del discurso, más que por el impacto de las do a la primera etapa en la sucesión apostó lica».
señales, prod igios y mara villas obradas por el Espíritu Santo.
El caso de Cua drato y el testim onio de Eusebio son
De allí qu e, los apologistas no son la mejor fuente para testificar
oportu nos par a ilustrar una de las di ficultades que enfrenta el
de la obra y ministerio del Espíritu. Po r ot ro lado, su poca
histo riador cr istiano cuan do investiga la acció n del Espíritu
ate nció n a la act ividad del Espíritu Santo no es argum ento para
Santo en la historia. Hom bres como Eusebio estaban profun-
funda mentar la cesación de los dones espirituales o las señales
milagrosas. Utilizar este argumento significa desconocer las damente cond iciona dos por sus prop ias presuposiciones y
lim itaciones pro pias del géner o literario que utilizaban y las compromisos ideológicos con el medio ambiente. No debe
demandas del prop ósito que los movía. olvidarse que Eusebio escribe con posterioridad a la «co nver-
No obsta nte, es sorpre nde nte que a pesar de estos condi- sión» de Co nstantino (probab leme nte en 3 14 ó 3 15), y cuando
cionamientos, los escrito s de los apologistas contienen una la fe cristiana ha pasado de ser una «vil superstición» a enca-
notable variedad de testim onios de las ma nifestaciones pode- minarse a su co nsideración como la religión del Esta do roma-
rosas del Espíritu, du rante ese períod o de la histo ria del no. A los ojos de cristianos co mpro metidos con el Imp erio
cristianismo . N uevamente, de entr e todo s los dones del Espf- Romano y su cu ltur a (co mo era el caso de Eusebio), la simpleza
ritu Santo, el que más se destaca es el de profecía. Como bien y espontaneidad carismática de los pr imero s cristianos y sus
seña lara Mil cíades, el célebre adversario del montanismo , «el sucesores era algo para mantener callado. Que Cuadrare haya
don profético debe continuar en tod a la Iglesia hasta el regre so sido un gran varón de Dios, no significa que Eusebio se sienta
final, como insiste el ap óstol»;' en la ob ligación de destacar sus don es espirituales y su minis-
En las páginas que sigue n vamos a pro cu rar leer el testi- terio carismático.
mon io de algunos apo logistas, y desentrañar de sus palab ras Po r ot ro lado, el propi o Eusebio debe haber confronta do
las evidenc ias de las op eracion es sob renaturales del Espíritu el problema de la falta de suficiente información, no so lo sobre
Santo, que susta ncien la co ntinuida d de los carismas y accio nes Cuadrare , sino en relación con muchísimos ot ros «sucesores
de pod er después del pri me r siglo cristiano . de los apósto les», como él los llama. De tod os modos, la

l. Citado por Eusebio, Historia Eclesiástica, 5. 17 . 2. ¡bid., 3.37.


72 LA ACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 73

aparente ausencia de mate rial no prueba que hom bres como Cristo. AlU se menciona una y otra vez la ob ra del Espíritu
Cua drara no hayan ejercido un ministerio co mbinado, co mo Santo. s Cuando justino le pregu nta al anciano por un maestro
apo logista y pro feta, al mismo tiem po. Es muy pro bable que que pueda ense ñarle la verda d, este se refie re a los profetas
Cuad rara ejercía de manera poderosa el don pro fético, pero su hebreos que ..hablaron por el Espíritu Divino, y predijer on
ministerio no fue registrado, o si fue registrado se perdió el eventos que ocu rr irían. y que ahora están ocu rriendo ... Estos
material co n posterioridad. De hecho, el propio Eusebio reco- profetas, según el anciano, ..vieron y an unciaro n la verda d a
noce sus m uchas limitaciones al tratar de reconstru ir lo ocurri- los hombres•... no influidos por un deseo de gloria, sino
do co n posterio rida d al min isterio de los apóstoles) hablando solo de aquellas cosas que viero n y que oye ron,
cuando fuero n llenos con el Espíritu Santo».' Al desped irse, el
anciano le dice: ..O ra par a que, por sobre tod as las cosas, los
jusrino Márt ir (114-165) portales de esplendor te puedan ser abiertos; porqu e estas cosas
Ju stino es el primer apologista que usó la filosofía para no pueden ser percibidas o entend idas por tod os, sino solo por
defender el Evangelio . Este famoso defensor de la fe nació en el hombre a quien Dios y su Cristo le han impartido sabidu -
Flavia, Neápolis. Desde joven quiso conocer a Dios. Fue así ría...7 Sobre esta exper iencia, Swete comenta: «Palabras co mo
co mo recorrió los caminos del estoicismo, la filosofía de los estas, pronunciadas en una gran cr isis en la vida. no se olvidan
per ipat éticos y pitagóricos y. por último, el platonismo. Pero fácilmente. y la insistencia de este maestro descon oc ido sobre
en ninguna de estas filosofías encontró satisfacció n para su la obra del Espíritu encue nt ra un eco en la propia enseñanza
búsqu eda de la verdad . Dur ante la gue rra de Bar Koc hba de j ustino...8
(13 2- 135) se co nvirtió a la religión de Cris to , por el testimonio j ustino fue un filósofo que nu nca renu nció a la filosofía .
de un anciano a quien encontró mientras caminaba por la Por el contrario . buena parte de su vida estu vo ded icada a
playa. Se sabe poco de Justino después de su conversión . Se reflexionar profundamente sobre la verdad y en desarrollar
dice qu e co ntinuó vistiendo su toga de filósofo, pero que usó una filosofía cristiana. No obstante. no fue un pensador ence -
rrado en una to rre de mar fil y aislado de la realida d del
sus co nocimientos en la evangelización. yendo de lugar en
lugar, procurando gana r a otros para Cristo , tanto jud íos co mo Espíritu . Sobre tod o, Ju srino se transformó en el model o por
excelencia del apologista cristiano. que tiene un conocimiento
gentiles. f inalmente, par ece que se estableció en Roma co mo
amplio de la doctrina y práctica de la Iglesia en tod as partes.
maestr o cr istiano. Estando allí, los filósofos. especialmente los
En su ob ra, él procura despejar el temor y la sospec ha que se
cínicos, se com plota ron en su contra, y él selló su testimonio
estaba gesta ndo en relación con los cristian os y su religión .
de la verdad co n el martirio . Su obra fue fun damentalmente
a po log ética.s Ju nto con sus dores de filósofo y apo logista, Ju stino se
destaca ta mbién por su testimonio de los don es espi rituales.
En su obra Didlogo con Tritón, j usrino presenta el relato
Como señala Kydd : ..j ustino ocupa un a posición única entre
de su conversació n co n el per sonaje anóni mo que lo llevó a

5. Jusrino Mártir, Didlogo con Trit6n, 1·7.


l. tu«, 1.1. 6. Ibid., 7.
4. Escribió su Didlogo con el ¡udlo Tritón en Éfeso, y dos Apologúls 7. Ibid.
dirigidas al emperador, al senado y al pueblo de Roma. 8. Swete, The Holy Spirit in tbe Ancient Church, 34.
74 lA ACCIÓN DEL tsernrru SANTO EN LA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 75

los autores cristianos pr imitivos, cua ndo se considera la ma ne- vosotros, "los sabios en sus pro pios ojos, y los pruden tes
ca en que él ma neja la cuestión de los dones del Espfriru ...9 dela nte de sí mismos", sois necios». Para jusrino, pues, la
Especia lment e. llama la at ención su enseñanza so bre el particu, vigencia de los don es del Espíritu era una dem ostración de la
lar. El apologista señala que en sus días hab ía profetas, Co mo necedad e hip ocresía del judarsmo. t!
en los tiempos antiguos. Según él, los don es proféticos de los En su Didlogo con Tritón, después qu e este judío lo
judíos hab ían sido transferidos a los cristian os. 10 Al afirmar SU interroga sob re [salas 11.1-2, Justino responde qu e Jesús ten ía
fe trinitar ia. Justin o llama al Espíritu Santo. de manera carac- todos los pod eres del Espíritu qu e se mencionan en ese pasaje.
terística. «Espíritu pro f éríco c u Y agrega qu e ahora, transformados esos podere s en dones, «a
Este apologista es un buen test igo de la vida de la Iglesia partir de la gracia del pod er de Su Espíritu, Él los imparte a
en su tiempo, y presenta evidencias interesantes sobre la obra aquellos qu e cree n en Él, según con sidere a cada hombre dign o
del Espíritu . Con entusiasmo le testif ica al judío Trifón que de esto.., Según Justin o, ..había sido profetizado que esto sería
..diariamente algunos [de vosotros] os estáis hac iendo d iscípu- hecho po r Él [Cr isto] después de su ascensión al cielo.., H Y
los en el nombre de Cristo, y estáis abandonando la senda del señala : ..Ahora, es posible ver entre nosot ros muje res y hom-
erro r; quienes tamb ién están recibiendo do nes, cada uno de bres que posee n don es del Espíritu de Dios,..I5
ellos conforme es merecedor, siendo iluminados a través del Es interesante compara r la lista de don es qu e Justino
no mbre de este Cr isto. Puesto que un o recibe el espíri tu [don] present a en estos pasajes con las que Pablo confeccio na en
de ente ndi miento, otro de co nsejo, otro de fortaleza, ot ro de Romanos 12.6·8 y 1 Corintios 12.8·11. Al hacerlo, surge n
sani dad, otro de presci encia, otro de enseñan za, y ot ro del similitu des y di ferencias. Por un lad o, los dones de sanida des
temo r de Dios...U Al oír esto, Trifón le d ice que está fuera de y enseñan za ap arecen tanto en Pablo (1 Corintios 12.9 ; Rema-
sí, a lo qu e justi no responde qu e está profetizado qu e luego nos 12 .7) co mo en J ustino. Otros dones par ecidos son ..ente n-
del ascenso de Cristo al cielo, . Él nos liberaría del error y nos dimi enro - (epalabra de sabidu ría..) y «presciencia.. (epalabra de
daría dones... Y agre ga: «Po r lo tant o, nosotros que hemos ciencia"), Pero otros don es son propios de la lista de justino,
recib ido do nes de parte de Cristo , que ha ascendido arriba a como ..consejo .., ..fortaleza.., y ..temo r de Dios... De todos
las alturas, probamos a partir de las palabr as de pro fecía, que modos, parece que Ju stino está hablando de las mismas cosas,
es deci r, se refiere a las herramientas que el Espíritu Sant o da
a los creyentes par a qu e puedan cumplir co n su misión y
,. Kydd, Chari5m:ltit: Gi{t5 in tbe Early Church, 26.
edificar la Iglesia.
10. Justino . Márri,'i Didlogo con Trif6n, 82. Véase Gusrave Bardy, LA M ás significativo que la enumeració n de don es espirituales
thiologre de 1t:.gllSt: de Sam t Clémmt de Rome J Saint Irénét:, Unam es el hecho de qu e Justin o parece indicar qu e estos don es
Sanetam 13, Éditions du ú rf, París, 1945, 132 . estaban en pleno ejercicio y vigenci a en la Iglesia de sus día s.
11. jusnno M ártir, Primera ApoI0gf4, 6; 13; passím, - El Espíritu Santo de l os nu evos co nve rtidos del judaís mo al cristianismo estaba n
profeda _ en 44. 1.
recibiendo dones de parte del Señor... y esto era lo qu e estaba
12. Justin o Mártir, Didfogo con Tritón, 39.2. Véase Sruarr D. Currie,
«Speaking in To nguese, Int erpret er 19 (1965) : 288. Curr ie nota que
Jus~in o Mártir, cuando mencion a los do nes del Espíritu , exp resamente
omite las lenguas (p. 28 1). Sobre el panicula r, 'léase la discusión de U. [usrino Má rt ir, Diálogo con Tritón, 39.
Haro ld Hun ter, -Tongc es-Speech. A Patr isric Analysis_,loumal of the 14. Ibíd., 87. Cf. Salmo 68.18 y JoeI2.28 -29.
Evange/icaf Theological Society 23 (junio 1980): 127-12 8. IS. lbid ., 88. 1.
76 LAACCiÓN DEL ssnsrru SANTO EN LA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 77

ocu rriendo en las iglesias, mient ras él escribía a Trifén. Parece imped ir la co nver sión de los seres huma nos a Dio s y a Crisro. ts
evidente, pues, que en la experiencia de las iglesias con las que La prueba está en los herejes, qu e son los instrumentos de los
Justino estaba relacionado, el ejercicio de los done s del Espín; demonios, po rq ue enseñan un dios distinto del Pad re y del
tu, espec ialmente el de profecía, era regu lar y parte integral de Hijo . Los demon ios fueron los que cegaron e indujeron a los
la vida de las co ngregac iones . Su afirmación de que ..los dones judíos a infligir tod os los sufrimientos que pad eció Jesús. Pero,
proféticos fprophetika cbarismata1permanecen con nosot ros, sabiendo qu e Cristo recluta ría la mayo ría de sus seguidores de
incluso hasta el tiem po presente.., es categ órica.re De este entre los paganos, pusieron un empeño especial en que fraca -
modo , Justino presenta un fuerte argumento al señalar q ue sara con ellos . Desde este pu nt o de vista, es interesant e lo que
Dio s el Padre le dio a J esús los dones que anteriormente hab ía dice Justino del efecto del nombre d e Jesús sobre los demonios,
dad o a los judfos (según Isafas 11.1·2). Y, a su vez, en cum pli- cuando los creyentes lo invocan llenos del Espíritu .
miento del Salmo 68 .16 y de l oe! 2.28-2 9, Jesús comenzó a
entregar estos don es a los cristianos. Esto explica, según él, por Porque llamamos ayudador y redentor nuestro a Aquél,la
qué hay creyentes que poseen y ejercitan los dones espiritu ales, fuerza de cuyo nom bre hace estremecer a los mismos
como era el caso de muchos en sus día s. demonios, los cuales se someten hoy mismo conjurados en
Con esto, J ustino no solo deja sentado un importante el nomb re de Jesucristo, crucificado bajo Poncio Pilato,
testimonio de la vigencia de los dones en su tiempo, sino que procurador que fue de judea. De suerte que por ahí se hace
su testim onio -es el primer intento en la literatura cristia na patente a todos que su Padre le dió tal poder, que a su
primitiva d e da r cuent a de la presencia de los dones espi ritu ales nombre y a la dispensación de su pasión se someten los
en la iglesia•. 17 Para Justino los done s eran todavía un a pa rte mismos demon ios.20
integral de la exp erien cia cristiana. Y muy prob ablemente estas
observaciones no están limit ada s a la iglesia en Roma, sino que
T aciano (110-172)
refleja n de algún mod o la situ ación predominante en el crisria-
nismo en tod as par tes. Justino ten ía un amp lio conoci miento Taciano, quien fue discípulo de j ustino, era nati vo de la
del cr istianismo en muchos lugares, de modo que _muy pro ba- ciudad de Edesa, en Siria. H ijo de padres pagan os de lengua
bleme nte co nocía el cristia nismo , no en sus peculiar idades sirfaca, recibió una buena edu cación en Gr ecia, desde donde
locales, sino en sus cara cterísticas unive rsales y esenciales...I8 se dirigió a occi dente. Taciano era un hombre ans ioso por
Una última palabra sobre el testimoni o de jusrino, me rece conocer la verda d y por encont rar un a religión qu e le diera
su co nsiderac ión de la guerra espiritual en to dos los niveles. satisfacció n. Se estableció en Roma, donde probó muchas
Justino estaba convencido, co mo el após tol Pablo (2 Corint ios religiones, hasta que finalment e su búsqueda terminó, poco
4.4), que to do el esfuerzo de los demonios estaba enfocado en después del año 150, cuando se con virtió al cristiani smo .
Tacianc fue discipul ad o por justino en Roma. Después del
martirio de su ma estro, ab rió un a escuela en Roma (ca. 165),
16. lbid., 82.1.
17. Kydd, Charismatic Gifts in the Early Chureh, 28. do nde ejerció su ministeri o de enseñanza .
u. G.T. PUNes, The Testimony of [ustín Martyr to Early Christianity,
James Nisbet, Londres, n.f., 45. Véase también: L.W. Barnar d,Justin
M.artyr: His Life and Thought, At the Universiry Press, Cambridge, \9. j usttno M ártir, Apologfa, 1.26, 54, 57, 62.
1967, l B, 150. 20. Justino Mlrtir, Didlogo con Trifón, 30.3 .
78 U. ACCiÓN DEL Es r ínrru SANTO EN LA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 79

Su test imo nio de fe pone de manifiesto su desencanto Co n embargo, el ser humano natural no es co nsciente de la presen-
la civilizació n greco-romana. Su nota más positiva es su grati- cia y obra de los demonios. ..Los cuerpos de los dem oni os solo
tud a Dios por haber sido liberado de los innumerables di oses pueden ser visto s fácilmente por aq uellos en qui enes mora el
y espíritus malignos del politeísmo pagan o. Hablando de la Espíritu de Dios y a quienes Él fo rtifica, y no por otros en
apelación de la Biblia en su vida , en cont raste co n los pr eren- absol uto ... porque lo inferior no tiene la capacidad de apre-
didos misteri os enseñados por ot ros libros de religión y ocul- hender lo super ior...2J Los dem onios gobiernan sob re los
tismo, dice: incrédulos y los engañan con demostra cion es de poder.

Puse mi confianza en estas Escrituras, porque el estilo no Los demonios, inspirados con frenesí contra los hombres
era fantasioso, los orado res eran genuinos, la composición en razón de su prop ia impiedad, pervierten sus mentes, que
era fácilde entender, los eventos futuros eran predichos [se ya se indina hacia abajo, por medio de varias repre-
refiere a las profecías acerca de la venida de Cristo], los sentaciones escénicas engañosas, a fin de que queden inca-
mensajes eran mucho más de lo que uno podía habe r pacitados para subir a la senda que lleva al cielo. Pero para
esperado, y el universo tenía un solo principio guiador. nosotros las cosas que están en el mundo no están ocul tas,
Enseña do por Dios, llegué a entender que aquí había una y lo divino es fácilmente aprehendido por nosot ros si el
religión que nos hace libres de la esclavitud que hay en el poder que hace inmortal nuestras almas nos visiu .2"
mundo, y nos arreba ta de los muchos dominadores, sí, de
diez mil nr anos.z í Estas palabras de Tacian o parecen hacer referencia al don
de discernimiento de espíritus, tan necesario para llevar a cabo
Estas palabras de testimon io personal está n tomadas de la un ministerio de libera ción y sanida d inter ior. En la segu nda
ún ica obra que existe de Tacian o, su Discurso a los griegos. En sección de su Discurso, este apologista pre senta un verdadero
ella, Tacian o hace un duro ataq ue al paganismo al tie mpo qu e ma nual para el mini ster io de liber ación, co n instrucciones
testifica de su co nversión a Cristo . Habl ando del alma, dice bastante prácticas y precisas en cuanto a có mo pr oced er frente
que ..si esta continúa sola, tiend e hacia abajo, hacia la materia, a los dem oni os.
y muere con la carne; pero, si ent ra en un ión co n el Espíritu La manera de conquistar a los dem onios es estar armado
Divin o, ya no está más desvalida, sino que asciende a las con la armadura del Espíritu celestial (Efesios 6.13 -17). Mu-
regiones a las que el Espír itu la guía... Y agrega lo qu e podría chas veces los demon ios provocan enfermedades, " pero , al ser
ser una referencia al don de profecía: ..Pero el Espíritu de Dios golpeados por la palabra de Dios, se van en terror, y el enfermo
no está con tod os, sino que, asumiendo su morad a con aquellos es sanado ...25 Taci an o denuncia la falsedad de los sanado res
qu e viven jusramenre, y combinándose íntimamente con el alma, paganos, co n sus amuletos, cu ras mágicas, hierbas y raíces, y
anuncia cosas ocultas a otras almas med iante pro fed as..)2 ot ros medi os del ocultismo. Todas estas, dice él, son mani fes-
Taciano denuncia la ob ra de los demonios y anunc ia que taciones demoníacas que engañan en lugar de sanar. ..Si algu ien
será n castigados co n más sever idad qu e los seres hum anos. Sin

2). iu«, 15.


Z1. Taciano, Discurso a los griegos , S. 24. lbid., 16.
22. Ibid., 13. 2'. lbid.
80 LA ACCIÓN DEL EspjRI ru SANTO EN LA HISTORIA Lo s APOLOGISTAS GRl EGOS 81

es sanado po r la materia, mediante la confianza en ella, mucho pagano, se hizo cristiano en un perío do de aproxi madamente
más será sana do recurri endo al pode r de Dios». Y pregunta: tresciento s años, este erudito sintetiza varios factores hacia el
final de su libro. Entre ellos menciona: «énfasis sobre la
¿Por qué quien confía en el sistema de la mater ia no está demos tración milagrosa, un desafío co ntrontaci onal a los no
dispuesto a confiar en Dios? ¿Por qué razón no te acercas cristianos a una prueba de pode r, una confrontación directa
al Señor más poderoso, sino que buscas curarte a tí mismo , con los seres sobrenaturales inferiores a Dios, y un desplaza-
como el perro con pasto , o el ciervo con una víbo ra, el miento despectivo de las sendas meramente racionales ... hacia
cerdo con cangrejos de río, o elle ón con monos? ¿Por qué el verdadero conocimiento de lo dívino-us M acMullen men-
deificas los objetos de la nat uraleza? ¿y por qué, cuando ciona tamb ién otros aspectos relacionados con ministerios de
curas a tu prójimo, eres llamado un benefactor? Somérere poder tales como liberación de demonios y lucha co ntra el
al pod er del Le gos! Los demonios no curan, sino que por ocultismo, sanidades y milagros, y profecías. Según él, hay
su arte hacen de los hombres sus caurívos.ze numerosos testimonios de esto en la historia, muchos más de
los que los histori adores «incluidos los historiado res cristianos»
La guerra espiritual y el min isterio de liberación son otro s muchas veces están dispuestos a admitir.
de los elementos claves en los que se po ne de manifiesto la Taciano sabía por experiencia personal qué significaba la
acción del Espíritu Santo. Ignorar la importan cia del choque guerra espiritua l y qué era liberación de demonios, cuáles era n
de poderes co mo un elemento clave para la co mp rensión del las cadenas demoníacas que esta ban detrás del ocultismo y la
impresionante triunfo del cristian ismo en los pr imero s siglos idolatría de sus días, y có mo el poder liberador de Cristo a
de testimo nio, es dejar de lado un factor importante. A pesar través del Espíritu Santo podían trae r libertad a las person as.
de la enorme o posición en su contra, los cristianos pr imitivos
lograron saturar el mundo de sus días porque, como registra Aren ágoras (m. ca. 200)
el testimo nio de Taciano, supieron hacer frente a las fuerzas
de Satanás lleno s de pod er y autoridad en el Espíritu Santo. Atenágora s fue un filósofo ateniense, co ntempo ráneo de
Las palabr as de este maestro de Roma tienen una increíble Taciano, que se convirtió al cristianismo mientras leía la Biblia
actualidad. con el pro pósito de refutarla. Es el autor de una apología
El testimoni o de Taciano es con firmado por algunos titulada Súplica po r los cristianos , que presentó a los empera-
histo riadore s profe sion ales seculares de nuestros días. Uno de dores M arco Aurelio y Có modo en el año 177. Escribió
ellos es Ramsay MacMullen, profesor en la Universidad de Yale muchos otros libros, la mayo ría hoy perd idos. Fue anteceso r
y especia lista en la histori a del Imperio Rom ano. Este erudito de Panreno en la Escuela de Alejand ría. Tanto su apología
señala: «M i interé s se enfoca solo en cómo los no cristianos como su tr atado La resurrección de los m uertos - únicas obras
fuero n ganados para la iglesiacz" En respuesta a su pregunta que se co nservan- da n evidencia de su habilidad como escri-
de cómo fue que el Imperio Romano. que era totalm ente tor y de su rica cultura. Probablemente Atenágoras haya sido
el más capaz de todos los apologistas. Por lo menos, parece ser
el más elocuente de ellos.
26. Ibid., 18.
27. Ramsay MacMul1en, Christianizj ng the Roman Empírer A.D. 100-400 ,
Yak University Press, New Haven, er, 1984, 87. 28. Ibid., 112.
82 LA ACCIÓN DEL ESP!RITU SANTO EN LA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 83

En su apología, Arenágoras se refiere al don de profecía, Teófilo de Antioquía (130-190)


cuando señala: «Ya la verdad, el mismo Espíritu Santo, que obra
en losque hablan proféticamente, decimosque es una emanación Nació en un hoga r pagano y se con virtió por el estudi o
de Dios, emanando y volviendo, como un rayo del 501».2 9 Este cuidadoso de las Escrituras . En 168 fue nombrado ob ispo de
Espíritu Santo es el mismo Espíritu que movió las bocas de los Antioqufa. Escribió varias obras co ntra las herejías de sus días,
pro fetas del Antiguo Te stamento com o si fuesen instrumentos, co mentarios de los evange lios y del libro de Proverbio s. Lo
y que los impulsó a declarar sus profecías más allá de su propio único que nos queda de su producción literaria son tres libros,
entend imiento. Esto mismo marca la gran diferencia que existe que están dirigidos a su amigo Autólico. Cabe destacar que
entre Jos filósofos paganos y los pro fetas cristianos. Teófilo es el prim er auto r cristia no que aplica la palabra
«trinidad" a la Deidad.tt
Nosotros, en cambio, de lo que entendemos y creemos,
Teófilo relata su conversión a Cristo en estos términos:
tenemos por testigos a los profetas, que, movidos por
espíritu d ivino, han hablado acerca de Dios y de las cosas
No seas, pues, incrédulo, sino cree. Po rque tampoco yo en
de Dios. Ahora bien, vosotros mismos, que por vues tra
o tro tiempo creta que ello hubiera de ser ; ma s ahora, tras
inteligencia y por vues tra pieda d hacia lo de verdad d ivino
haberlo bie n considerado, lo creo, y porque juntamente leí
sobrepasáis a todos, diríais que es irr acional adhe rirse a
las sagradas Escrituras de los santos profetas, quienes,
opiniones humanas, abandonando la fe en el Espíritu de
inspirados po r el Espíritu de Dios, pr edi jero n lo pasado tal
Dios, que ha movi do, como a instru mentos suyos, las bocas
co mo pasó, lo presen te tal co mo sucede y lo por veni r tal
de los proferas.ao
como se cumplirá. T en iendo, pues, la prueba de las cosas
suce didas después de haber sido predichas, no soy incré d u-
Según Aten égoras, pues, estos profetas proclamaron las
lo, sino q ue creo y obedezco a Dios.aa
cosas co n las que fueron inspirados, porque el Espíritu los usó
tal como un flautista sopla en una flauta. De allí que al referirse
Teófilc menciona al Espíritu Santo por no mbre solo en
al Espíritu Santo, Atenágo ras prefiere denom inarlo , al igual
relación con la obra de la creació n y la inspiración. En cuanto
que otros escritores de su tiempo, «Espíritu profético».
a las manifestaciones del Espíritu, la que menciona en particu-
Es int eresant e notar que la descripción que Atenágoras
hace del don de profecía coincide co n la manera en que este lar es, como es obvio en su tiempo, la profecía. Co mo indica
don ha sido definido en la actualidad. Según C. Peter Wagner, Swere: «De la ob ra del espíritu de pro fecía, Teófilo, al igual
«el don de profecía es la habilidad especial qu e Dios da a ciertos que otros escritores cristianos de su tiempo, habla con total
miem bros del Cuerpo de Cristo para recibir y co munica r un convicción..,34 El cumplimiento de las profecías del Antiguo
mensaje inmediato de Dios a su pueblo a través de una decla- Testamen to prueba que los pro fetas anticiparon el futuro por
ración divinamente ungida»,31 la inspiración del Espíritu Santo . Según Teófilo, estos hombres
de la ant igüedad fuero n «po rtadores del Espíritu» o «aquellos

29. Atenágoras, Súplica por los cristianos, to .


30. tbid., 7, 9. 32. Teófilo, AAu tó/ico, 2.15.
31. C. Peter Wagner, Your SpirituaJ Gifts Can Hefp Your Church Grow H. lbid., 1.14.
(Ventura, CA: Regal Books, 1994), 253. l4. Swete, The Holy Spirit in the Ancient Church, 47-48.
84 LA ACCIÓN DEL EspfRITU SANTO EN LA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 85

qu e so n llevados [insp irados] por el Espíritu », al igual que los ya qu e este era el nombre de uno de sus protagonistas . Consiste
autores de los evangelios.U De hecho, TeófiJo es el primer en una discusión acerca del contraste entre el paganismo y el
escritor que enseña claramente la inspiración divina del Nuevo cr istia nismo . Minucio fue el primer apologista que escribió en
Tesrame nto.Js Sin embargo, no hace otra referencia a la obra latín, y su obra es ..la más bella apología de la Iglesia primiti-
del Espíritu en la Iglesia de sus d ías, fuera de la declaración de va»,38 Divid ió su libro en 4 1 ca pítu los, atractivos por su
qu e los cristianos son guiados por la Palabra sa nta y ense ñados lenguaje fácil y fluido. En su arg umentación contra el paganis-
por la Sabid urfa.J? Pero debe tenerse en cuenta que su libro mo, M inu cio señala que detrás de la adoració n pagana está n
está dirigido a pagano s y probab lemente no consideró o po rtu- o perando los demoni os.
no ser explícito sobre estas cuestiones.
Como oc urre en otros casos del segundo siglo, este auto r Estos espíri tus impuros ..los demonios», como se ve por los
des taca la imp ortancia del do n profético, especialmente su magos, los filósofos y po r Platón , consagrados bajo estat uas
ejercicio en el Antiguo Te sta men to . Pero se mu estra cautel oso e imágenes, acechan allí, y po r su inspiración logran la
en describir su ejercicio en sus propios días. Es dific il supo ner autoridad com o de una deidad presente ; al mismo tiem po
qu e T eófi lo haga un a valoración tan alta de este don, si el qu e mientras que son insuflados en los profetas, mientras
mismo no fuese relevant e en la iglesia de sus día s. Por otro qu e moran en los templ etes, mientras que a veces animan
lado. arguir la ause ncia o cesación de este carisma a partir del las fibras de las entrañas, controlan los vuelos de los
relativo silencio de T eó filo en cuanto al mismo, es no tomar pájaros , y dirigen las suertes, son tamb ién la causa de los
en serio su aprecio cierto por el don pro fético. Además, ta l oráculos que tienen qu e ver con muc has falsedades ... "Los
ar gu mento cesacio nisra no haría justicia con el propósito co n demon ios», al arrastrarse también secre tame nte adentro de
el qu e Teófilo escribe ni el carácter apologético de su ob ra los cue rpos humanos, co n sutileza por ser espíritus, fingen
dirigida a no creyentes. M uy probablem ente . si e! apóstol Pablo enfermedades, alarman las mentes, y apr ietan alrededo r de
en luga r de escr ibir su primera epísto la a ..la iglesia de Dio s que los miembros del cuerpo.J''
está en Corint o» (1 Co rintios 1.2 ), la hubiese dirigido a los
..indocto s o incrédulos» (1 Co rintios 14 .23) de aquella ciudad, Los demon ios son también los responsables de las acusa-
jamás hubiese escrito los cap ítu los 12 a 14. ciones falsas y calumnias relativas a la conducta y cree ncias de
los cristianos. De allí que la guerra espiritual es propia de la
Mi nucio Félix (m. ¿180?) militancia cristi ana. Mi nucio pro bablemente hace referencia a
la práctica de la iglesia cuan do describ e la liberación de demo-
Fu e un apo logista, de quien se desconoce su fecha de
nios en estos términos : ..Dado que ellos mismos "los demo-
nacimiento y lugar de origen, pero cuya ob ra fue muy influ-
nios" so n los testigos de que son demonios, créanles cuan do
yente en e! mundo roman o. Su obra lleva el título de Octavio,
confiesa n la ver dad sobre sí mismos; porq ue cuando se renu n-
cia a ellos "en el nombre" de! único y verdadero Dios, de mala
35. Teófilo, A Autólico, 2.9, 22; d . 3.12 .
36. joharmes Quasten, Patrología, 3 vols. Biblioteca de Autores Cristianos,
Madrid, 1961, 1:228. 38. Quasten, Patrologfa, 1.448.
37. Ibid., 3. 15. 39. Minucio Félix, El Octa/!io, 27.
86 LA. ACCiÓN DEL ESplRlTU SANTO EN LA Hi STORIA L o s APO LOGISTAS GRIEGOS 87

gana los seres perversos se estremecen en sus cuerpos, y saltan Esta observación de un historiador contemporáneo nos
de una vez o se van de a poco, según ayude la fe del que sufre ayuda a entender y evaluar mejor el testimonio de Minucio
o inspire la gracia del que sana... Esta es la raz6n por la que los Félix. Este intelectu al crisriano del segundo siglo, que tenía una
demoni os huyen de los vecindarios en que hay cristianos, y particular inclinación por dar su testimon io cristiano a las élires
pro vocan odio en su contra en las mentes de los gentiles, que pensantes de sus días, veía en el choque de pod eres un recurso
los odian aú n antes de co nocerlos, y esto 10 hacen por temor.40 misiono lógico fundamental. Su comp rensió n de la fe cristiana
Para Minucia, todas las acusaciones falsas en cont ra de los como un Evangelio de poder, bajo la guía del Espíritu Santo,
cristianos ..incesto, sacrificios de niños, orgías, ad oración de la tiene una actualidad nota ble y es de gran inspiración.
cabeza de un burro, y ot ras acciones detestables" son instigadas
por los demonios.
Nuevame nte es oportuno recordar algunas de las conclu- Co modiano (ca. 200-275)
siones a las que llega un historiador especialista en el mundo
Un planteo similar al anterior se puede enco ntrar en Las
greco- romano, Ramsay MacMullen . El señala, como uno de
los facto res claves para entender la impresionante ex pansión
instrucciones de_Comodiano , una ob ra escrita alrededo r del
año 240. Comodiano parece haber sido un obis po de África
del cristianismo en los prime ros trescientos años, a lo que
denom ina una «confrontación directa con los seres sobrenatu- del norte, y en su ob ra ataca a la idolatría como adoración de
rales inferiores a Dios-. En su libro, MacMullen presenta demonios. Los demonios tienen su orige n en los seres angeli-
abundancia de testimonios en relación con liberación demo- cales que se rebelaron contra Dios y sedujeron a mujeres
níaca, guerra espiritual contra el ocultis mo, además de sanida- hermosas, con las que pr ocrearon a los gigantes. Estos gigantes
des, milagros y profecías. Así, este histo riado r secular, en una u hombres de renombre fuero n los que enseñaro n a la hum a-
sección en que discute el ministerio de Pablo y de Juan en su nidad las artes e industrias . Cuando murieron, los ho mbres les
co nfrontación con Diana de los efesios, recuerd a la manera en erigiero n imágenes ...Pero el Todopoderoso, en razón de que
que el poder del cristianismo fue co nfirmado en Éfeso y cómo eran de una simiente mala, no apr obó eso, y cuando muert os,
qu edó «demostrado fro ntalmente en el altar hech o pedazos... ellos debían ser traídos de la muerte. De ahí que ahora, cuando
Según él: ..Eliminar to da competencia en el campo [de misión] ellos van de un lado a otro, destru yen a muchos cuerpos, y es
de manera frontal era crucial. El mundo, después de todo , tenía especialmente a ellos a qui enes ustedes en este día adoran y
muchas docenas y cientos de dioses. La elección estaba abierta oran como a dioses,..42 Luego sigue la lista y descripción de las
a rodo el mundo. Así que solo una fuerza muy excepciona l imágenes de los dioses que disfrazan la adoración de demon ios.
podía desplazar realmente las alterna tivas y motivar una alian- Su exhortación es: «Al éjense de esros, si qui eren resucitar con
za; solo las demostraciones más probatorias podían funciona r. Cristo,..4J y agrega: ..Eviten la adoración de templos, los
Debemos, por tanto , asignar a esto tanto peso, como pr incipa l oráculos de demon ios; vuélvanse a Cristo, y serán asociados
instrume nto de conversión, como los mejores y más tempranos con Dios,..44
informantes lo hacen".41

42. Las instrucciones de Comodiano , 3.


40. íbid. H íbid.; 21.
4 1. MacM ullen, Christianizing the Roman Emp íre, 27 . 44. lbid., 35.
88 LA ACaÓN DEL EspíRITU SANTO EN lA HISTORIA LOS APOLOGISTAS GRIEGOS 89

Debe tenerse en cuent a que Comodiano está escribien do Mel itó n de Sardis (m. 177)
a paganos, a quienes exh orta a aban do nar sus prácticas idolá - Hu bo m uchos otros apologistas, qu e no viene al caso
rrlcas, ya que son de carácter dem on íaco. Otra vez se desu ca mencio nar. Sí ca be recordar a M e!itón de Sard is, qui en pued e
el concepto de este pastor norafricano en cuanto al choque de habe r sido el sucesor del "ángel. de la iglesia de Sardis, a quien
pode res. N o obsta nte, no se tracasimplementede de un a teoría se env ía un me nsaje en Apocalipsis 3.1-6. Es muy probable que
teol ógica, sino de un a estrategia probada por la experiencia. conoc iera a Policarpo y a su di scípu lo lreneo.ee De él se dice
Para Comodiano, los demonios no son meros datos de una que ..vivió enteram ente en el Espíritu San (O. :19 j er ónimo cita
cultura pre-cienrífi ca, sino pode res reales con los que no se a Tertu liano segú n una obra perdida de este (Sobre el éxtasis),
puede negoci ar. En realidad, la lucha contra los demon ios era en la qu e el padre de Cartago se refiere a Me!itón como algu ien
parte fundamental de la mision ología de aquellos cristianos. a qu ien muc ho s consideraba n un poderoso profera.sc
Esto explica cómo fue posible para ellos conquistar a un Este es el lugar opo rtu no para considerar la relación entre
imperio tan paganizado (y demoniaco) como era el Imperio los min isterios carismáticos y residentes en las iglesias, a la luz
Romano. Contra lo que muchos historiadores suponen, ..no del caso de M elitón y su posición co mo profeta y ob ispo al
fue la liturgia, ni la moral, ni el monoteísmo, ni las organiza- mismo tiempo . Eviden temente, en él se daban al mismo tiempo
cio nes internas de la iglesia ... lo que les parecfa a los no la autorida d del obispo con la pasión del profeta. Ya en la
cr istianos como [cosas] totalmente diferentes de las de ot ras Didaché se pueden ver en operación estos dos niveles de
personas».45 El pun to de diferencia entre cristianos y no cristia- ministerio : los oficiales locales (obispos y diáconos) ejercie ndo
nos no era ningun o de estos elementos, qu e llenan tantas tamb ién d on es espiritu ales como profetas y maestros. Proba-
página s en los libro s de histo ria del cr istianismo. Más bien, ..e! blemente Melitón es un ejemplo de este matrimonio de un
ú nico punto de diferencia qu e parece más destacado era el ministeri o carismáti co y ot ro admi nistrativ o. Seguramente M e-
an tagonismo esencial en [el cristianismo] - antagonismo de lirón, al igua l qu e sus maestros Policarpo e lreneo, sosten ía
Dios hacia todos los demás pod eres sobrenatu ra les•. 46 firmemente la necesidad de un minister io pastoral reconocido
Mu y probablemente, Comodiano habría concordado con y bien establecido , con obispos fuertes a la cabeza. Pero, al
la defin ición que en lenguaje misiono lógico mod erno se da de mismo tiempo, se nos presenta co mo un pro feta, ca paz de
los encuentros o ch oques de poderes: ..Una demostración hablar bajo la gura y con trol del Espíritu Santo .
visible y práctica de qu e Jesucristo es más pod eroso que los Este doble papel es importante porqu e pone de manifiesto
espíritus , pod eres o dioses falsos ado rados o tem idos por los que , al menos en Asia Menor, hacia fines del segundo siglo,
miemb ros de un grupo de pueblo dado...47 De hecho, el mient ras len tam ente se iba constituyendo un clero recon ocido
testimoni o de Co modiano parece coincidir co n esta perspecti-
va, al tiempo que pone de manifiesto su con sciencia de la
acció n poderosa de! Espíritu Sam a en sus días. 4S. Melitón escribió una Apo/ogia dirigida a Marco Aurelio (ca. 170), en
la que se refiere a la crueldad imperial. Por la profundidad de su
pensamiento se lo conocía como -el fítósofc -, y se lo incluye entre los
45. MacMullcn, Christiani~jng the Roman Empire, 19. apologistas. Mu rió mártir, bajo Marco Aurelio.
49. Según Pclfcrates, obispo de Efeso, citado por Eusebio, H istoria Ecíe-
46 .lbid.
41. C. Peter Wagner, How to Hal/e a Healing Ministry in An y Church, Regal sidstica, 5.24 .5.
Books, Ventu ra, CA, 1988, 150. so. Jerón imo, Vidas de hombres ilustres, 24 .
90 LA ACCiÓN DEL EsplRITU SANTO EN LA HISTORIA

en las comunidades cristianas, los dones del Espíritu seguían


todavía en vigencia. Como concluye Co ngar, a la luz del caso
de Melitón: «la afirmación del papel de los obispos no difumi-
na en absoluto la vía carismática de la Iglesia. Eran hombr es
espiritua les en el sentido en que habla san Pablo (l Corint ios
2.10 ·15) y san Ireneo después de él: "El apóstol llama at ina-
damenre espirituales a aque llos que han recibido el don del
Espíritu y se conducen rectamente en tod o"») 1

El CRISTIANISMO DH SIGLO "

11 1 testimonio cristiano a comie nzos del siglo II


estaba bien establecido, especialmen te en Asia
Menor. Las comunidades cristianas se encontra-
ban bien organizadas e iban madurand o rápida-
mente , mientras su mensaje se esparcía de manera norable no
solo dentro de rod a el Imperio Romano sino basranre más allá
de sus fronte ras. Con entusiasmo desbordante, los creyenres
confesaban su fe acompañados de señales, prod igios y maravi-
llas obradas por el Espíritu Santo. No obsrante, este avance
norable no se daba sin dificultades. Problemas de afuera y
problemas de adenrro parecían amenazar el desarrollo del
testimonio cristiano, si bien estas dificultades fortalecían a los
testigos. De afuera comenzaban a sentirse las pr esion es del
Estado ro mano , que veía en los cristianos a una secta que seguía
una superstición extravagante y despreciaba a las religion es
reco nocidas. De adentro se levan taban voces, disidentes algu-
nas y herejes orras, que ponían en peligro la fe cristiana ral
SI. Congar, El EspintwSanlo, 93. como la habían enseñado los apó stoles de Jesús.
92 LAACCIÓN DEL EsrfRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEl. SIGLO JI 93

Frente a todos estos ataques, los cristianos se vieron conocedor de la iglesia y su test imo nio cristiano en sus días. Su
forzados a definir cuáles iban a ser sus escrituras sagradas, cuál experiencia pastoral tanto en el este como en el oeste, en
iba a ser su regla o confesión de fe, cómo iba a definirse su contextos rurales co mo urbanos, lo califica como uno de los
ministerio, qué actitud debían asumir frente al Estado y sus testigos más ade cuados del cristianismo de su tiempo.
persecucion es, qu é disciplina habrían de impo ner, y varias Iren ec fue un fiel testigo de la tradición. Vivió una gene -
otras cuestion es de suma importa ncia. Como veremos más ración de por medio de la edad apostólica y conoció a los
adelante, de par ticular preocu pación resultaron los movimie n- discípulos de los apóstoles. Su teologfa es fiel al cristianismo
tos heterodoxos y d isident es, especialmente aque llos que en su histó rico, y su ob ra escrita representa un intento de defender
fe y su práctica ponían un fuerte énfasis sobre la acción esa fe de las amenazas de las herejías, especialmente el gnosti-
pode rosa del Espíritu Santo . No obstante esto , y a pesar de las cismo . Ireneo demu estra ser un teó logo sumamente capaz y un
severas reaccio nes en contra del mo ntanismo y de sus apa rentes investigador puntilloso de las doctrinas y prácticas de sus
exageraciones carismáticas, las iglesias no dejaron de exp eri- adversarios gnósticos. En sus argumen tos, el Espíritu Santo
mentar poderosas mani festaciones del Espíritu Santo. Tampo- ocupa un lugar funda mental. t En su ob ra Exposici ón de la
co se inhibieron en razón de la oposición y ata ques de que eran predicación apost ólica, que es un tr atado apo logético, Iren eo
objeto por parte de pensad ore s paganos o los rumores y prese nta la regla de fe mencionando al Espíritu pro fético, y
calumnias de todo tinte qu e se circulaban a nivel po pular en el lleva sus funciones más allá de las reconocidas en el Antiguo
Imperio Rom ano. A riesgo de pa recer ridfculos en sus prácticas Testamento .
e ingenuos co n sus ideas, los cristianos del segun do siglo
respondieron co n sensibilidad a las op eracion es sobrenaturales Eltercer punto en la reglade nuestra fe es el Espíritu Santo,
del Espí ritu . Esto está atestiguado por varios de los más a través de quien los profetas profetizaron, y los padres
destacados pa dres de la iglesia y otros testimon ios a lo largo aprendieron las cosas de Dios, y los justos son guiados en
del siglo !l. el camino de la rectitud; y quien al final de los siglos se
derramó de manera nueva sobre la humanidad en toda la
tierra, renovando a los hombres para Díos.z
Ireneo de Lyon (ca. 130-202)
lreneo fue el más grand e de los teólogos del segu ndo siglo
y obispo de esa ciu dad en Galia. Probablem ent e nació en Asia l. Sobre la neumatología de Ireneo, véase, Hans-Jochen jaschke, Der
Menor, que en aqu el tiempo era una de las region es que tenía HeiligeGeíu ím Bekenntnis der Kirche: Eine Studie t ur Pneumatologie
des lrenáus von Lyon im Aumang van altchristfiche Glaubensbekennt-
el mayor núm ero de cr istia nos y de iglesias. De muchacho nis, VerlagAschendo rff, Munsrer, 1976; Heinrich Weinel, Die wirkun·
escuchó los sermones de Policarp o, ob ispo de Esmirna. Fue gen des geistes und der geister in nachapostolischen zeítalter bis auf
suceso r de Fotino en la sede episcopal de Lyon, durante el lrenaus, Oruck ven H. Laupp, Tubinga, 1898; A. Benoit, -Le Saint
reinad o de Mar co Aurelio . Envió misio neros a Ga lia, co mbatió Esprit et l'Eglise daos la th éclogie parrisrique des quat re premien
el gnosticismo , e hizo repetidos viajes a Roma procurando siecles..., enL'Es prit Saint et rEg/ise, Paris, 1969, 131· 136; YA. D'Alés,
«La doctrine de I'Esprit Saint chez Saine Irénée..., Recherches de Science
mantene r la paz ent re esta y Asia, calma ndo la to rmenta Refigieuse 14 (1924): 426-538.
suscitada con la condena del obispo Vfctor (monta nista) y de 2. Ireneo, Exposición de la predicación apost6lica, 6. Véase J. Armitage
aquellos qu e no seguían el calendari o latino en la celebración Robinson, Sto Irenaeus: The Demonstrat íon ofthe Apostolu Preaching,
de la Pascua. En todo esto, Ireneo se muestra como un profundo SPCK, Londres, 1920.
94 LA ACCiÓN DEL EsrlRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DELSIGLO 11 95

La ob ra del Espíritu fue fundamental en la unción del H ijo Espíritu, sin pape! o tinra•. 9 Y oran al Señor diciendo : ..Co n-
Encarnado. Una frase característica de Ireneo es: ..El Padre c édenos, po r nuest ro Señor Jesucr isto , el poder dominado r del
ungió, el Hijo fue ungido, el Espíritu fue la Unción.) De este Espíritu Santo . ,I O
modo, ..el Espíritu de Dios descendió sobre Él, [el Espíritu] de Igualmente d estacad a en Ireneo es la presencia del Espíritu
Él que había sido prometido por los profetas que lo ungiría, Santo en la Iglesia. Según él, el Espí ritu Santo y la fe que Él
para que noso tros, recibiendo de la abundancia de su unció n, enseña moran en la Iglesia como en un vaso excelente co nser-
pudiésemos ser salvos... 4 Así, pues, la unción de Jesucristo no vándose siempre joven, y renovan do la juventud del vaso en e!
fue más que el primer paso hacia la unción de toda la humani- que está. ..Porque e~te don de Dios ha sido confiado a la Iglesia,
dad con el Espíritu. como lo fue e! ahe nto al primer hombre creado con este
p:~p.ósito, que rodas los miem bros que lo reciben puedan ser
Porque [Dios) prometió, que en los últimos tiempo s ÉJ )0 vivifícadosc u El Paracleto fue dado a la Iglesia, y mo ra en cada
derramaría [al Es píritu ] sobre (sus] siervos y siervas, para uno de sus ~iembros . ..El Espíritu está en todos nosotros, y Él
que pu diesen pro feti zar ; para lo cual Él tambi én descen d ió es e! agua Viva, que el Señor concede a aquel los que rectamente
sobre el H ijo de Dios, hecho el H ijo del hombre, acostum- cree n en Él, y lo aman •. 12
brándose en co munió n con Él a morar en la raza hu man a, Es por el Espíritu de Cristo qu e la Iglesia desarrolla
pa ra q uedar con los seres humanos, y pa ra mo rar en las márti res y hombres espirituales hechos de nuevo a la imagen y
criaturas de Dios, obrando la voluntad del Padr e en ellos, semejanza de Dios. Dice Ireneo:
y renovándoles de sus viejos hábitos a la novedad de
Cristo. S Por qu e en la Iglesia, se dic e, Dios ha establecido a póstoles,
profe tas, maestros, y todos los ot ros medios a trav és de los
Swete destaca qu e ..Ireneo entra a los de talles de la ob ra cuales el Espíritu obra ; de los cuales no son participan tes
del Espíritu Santo sobre los corazones y vidas de los hombr es todos aquell os que no se un en a la Iglesia, sino qu e se
con una plenitud que está muy avanzada en relación con otros enga ñan en la vida por sus opiniones perve rsas y conducta
escrito res del segundo siglo».6 El Paracleto fue envia do a infam e. Por qu e al1fdonde está la Iglesia, allí está el Espíri tu
prepara r a los seres humanos para Dios, a colocarlos en unión de Dios; y donde el Espíritu de Dios está, allí está la Iglesia
y comunió n co n ÉI.7 SU énfasis es mayo r tod avía en relació n y todo tipo de gracia, porque el Espír itu es verdad. U
con la ob ra de! Espí ritu en la vida de los creyent es individual es.
..Allí donde está el Espíritu del Padre, hay un hombre viviente... La posesión del Espíritu, entonces, es una nota distintiva
sin el Espíritu de Dios no pod emos ser salvos-es Los creyentes de la Iglesia y, a su vez, la presencia de la Iglesia garantiza la
en Cristo ..tienen la salvación escrita en sus co razo nes por el presencia del Espíritu. La conclusión práctica de esto es que
..aquellos qu e no participan de Él no son nut ridos en la vida

J . Ireneo, Contra h"e,las, 3.18.3.


... íbid., 3.9.3. 9. tuc. s.«:.
.5. íbíd., 3. 17. 1. lO. Ibid., 3.6.4.
6. Swere, The Hofy Spirit in the Ancient Church, 89-90. 11. ¡bid., 3. 24.1.
7. Ireneo, Contra herejfas, 3 .17.2. 12. ¡bid.,5 .18.2.
8. íbid., 5.9.3. IJ. lbid., 3.24.1.
96 LAACCIÓN DEL EsrtRITIJ SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 97

por los pechos de su mad re, ni gozan de esa fuente sumament e Romanos 12 Y 1 Corintios 12. Es en base a esta s experiencias
limpia que brota del Cue rpo de Cr isto; sino qu e cavan para sí que, en el año 177, los creyent es de Vienne y de Lyon lo
mismos ciste rnas rotas de zanjas de tierra, y beben el agua enviaro n a Roma para que hablara con el obispo Eleute rio en
po dri da del cieno, huyend o de la fe de la Iglesia para no ser favor del mo vimiento prof ético y de las manifestacion es legf-
convencidos de culp a, y rechazan al Espíritu para no ser timas de los dones del Espíritu Santo.
insrruidosv.t't Irene o conside ra qu e el ministerio de la iglesia debe ser un
En cambio, el discípulo verdaderame nte espiritual, que ministe rio carismático. i.e., llevad o a cabo por hombres espi-
recibe al Espíritu de Dios en su vida, juzga todas las cosas y no rituales en el sentido en que habla el após tol Pablo (cf. 1
es juzgado por nadie. J uzga a los gent iles y a los jud íos, «juzga Corintios 2.10-15 ). Refiriéndose a este pasaje, dice Iren eo: «El
a aquellos que provocan divisiones, que están destitu ido s del Apóstol llama ati nada mente "espirituales" a aquellas person as
amo r de Dios, y que procuran su prop ia ventaja person al am es que po seen el don del Espíritu, y qu e no está n esclavizadas por
que la unidad de la Iglesia; y quienes po r razo nes insignifican - las lujurias de la carne, sino qu e están sujetas al Espíritu , y que
tes, o cualquier tipo de razón que se les ocurra, cortan en en todas las cosas se conducen conforme a la luz de la razón,
pedazos y dividen el gra nde y glorioso Cuer po de Cristo , y po rque el Espíritu de Dios mora en ellas- .t!
hasta donde les es posible, lo desrruyen. ct! Según él, «los apóstoles no co menzaron a predicar el
Ireneo se ocup a detalladamenre de la obra del Espíritu evangelio, o a regist rar nada, hasta que fueron dotados con los
Santo en la Iglesia, especialmente de su acció n a través de los do nes y el pod er del Espíritu 5anto».1 9 Y agrega: «Después de
variados carismas espirituales. Aun un testigo nad a afecro a las que nuest ro Señor resucitó de los muertos, [los apóstoles]
ma nifestacio nes carismáticas, como Eusebio, adm ite que en sus fueron inves tidos con el poder de lo alto cuando el Espíritu
obras Ireneo «aclara qu e hasta su prop io tiempo habían conti- Santo descendió [sobre ellos], fueron llenos de todos [sus
nuado en algun as Iglesias ma nifestaciones de poder divino y do nes], y tu vieron un conocimient o perfecto : [así] partieron a
milagroso- Uf los co nfines de la tierra, predicando las buenas nu evas») O
El obispo de Lyon relaciona los sucesos de Hechos 2 con Uno de los testimo nios más impresionantes de Ireneo en
su pro pio tiempo, cuando dice: «De igual mane ra nosot ros cuant o a la vigencia de los dones del Espíritu y sus manifesta-
también olmos a m uchos hermanos en la iglesia, que poseen ciones pod er osas en la iglesia de sus días es aquel en el que
don es pro féticos, y qu e a través del Espíritu hablan to do tipo rebate el ar gu mento de los her ejes haciendo referencia al
de lenguas, y traen a luz par a el beneficio general las cosas ministerio po deroso de la Iglesia:
ocultas de los hom bres, y declaran los misterios de Dios - .I?
Este material a parece en medio de un a discusión sobre la Por lo ta nt o, tam bién, aquellos que en verdad so n sus
perfección cristiana . N ueva mente, esta breve lista de dones discípulos, recibiendo gracia de part e de Él, de veras llevan
espirituales se asemeja mucho a las listas qu e presenta Pablo en a cabo [milagros] en su nom bre, de modo de promove r el
bienestar de otros hom bres, co nforme al do n que ca da uno

14. tbid.
IS. Ibid.; 4.33.7. 18. íbid., 5.8.2.
16. Eusebio, H istoria eclesiástica, 5.7. 19. íbid.; 3. 1.1.
17. trence, Con t ra herel(aS, 5 .6 . 1. 20. ¡bid.
98 LA ACaÓN DEL EspfRlTU SANTO EN lA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 99
ha recibid o de ~1. Porque algunos de cierto y verdadera- La lista de dones y o peracio nes del Espíritu que presenta
mente echa n fuera demonios, de mod o que aquellos que
Ireneo como vigentes en la Iglesia es impresionante. Incluye
han sido limpiados así de espíritus malos frecuentem ente
do nes como la capacidad de echar fuera demonios, el con oci-
cree n [en Cristo] y S(: unen a la Iglesia. Otros tienen
mi~nto del fur:uro, vision es y profecías, y todo esto junto con
pr econocimiento de cosas venideras: ven visiones, y decla-
sanidades y milagros, como la resucitación de muertos. Todo
ran expresiones proféticas. Aun otros sanan a los enfermos
esto coincide de manera notable con las listas de don es que
im poniendo sus manos sobre ellos, y dios son sanados. sr,
todavía más, como he dicho, incluso los muertos han sido
Pablo elabora en Ro manos 12 y 1 Co rintios 12. Tanto Pablo
resucitados, y permanecen ent re nosotros por muchos como lrene~ ,me.nCionan dones de revelación y sanidades, y
años. ¿y qué más dir é? No es posible nom bra r el número ambos también incluyen un don que tiene que ver con la
de los dones que la Iglesia, [esparcida] a lo largo de todo expulsión de demo nios; en el caso de Pablo es el discerni-
el mun do, ha recibido de Dios, en el nombre de j esucristo, miento de espíritus y en el caso de Ireneo la expu lsión de
quien fue crucificado bajo Poncio Pilato, y que ella ejerce espfrlrus.zs De tod os modos, lo más impo rtante es el hecho de
día por día para el beneficio de los gentiles, sin practicar que .Ir~~eo afirma que estos dones se pod ían ver en sus días y
engaño sobre nadie, ni tomar ninguna recompensa de dios a su JUICIO eran expresion es auté nticas de los dones del Espíritu.
(en razón de tales interposiciones milagrosas]. Porque así En su condena de Simón y Carpócrates como falsos hace-
como ella ha recibido gratuitamente de parte de Dios, dores de milagros, Ireneo contrapone sus engaños con la
tambi én gratuitamente ministra [a los demásJ.21 autent icidad de los verdaderos milagros que se hadan en su
iglesia: vista a los ciegos, oído a los sordos, expulsión de
Comentando este pasaje de Ireneo, W.W. Harvey nota: demo nios, ~u.ración de los d~bi les, cojos, paralfricos, y los que
«El lector no dejará de notar este testimoni o sumamente estaban afl.lgldos en cualquier otra parte del cuerpo. Dice
interesante, de que los charism ata divinos concedidos sobre la Ireneo: ...N I pueden proveer de remedios efectivos para aque-
joven Iglesia no estaban del todo extinguidos en los días de llos accidentes externos que pueda n ocurrir». Yagrega: "y tan
Ireneo. Posiblemente el venera ble Padre está hablando desde lejos están ellos de ser capaces de levantar a los muertos, como
su propio recuerdo person al de algunos que habían sido resu- el Seño r los levantó, y lo hiciero n los apósto les po r medio de
citados de los muertos, y habían conti nuado por un tiempo la oración, y como ha sido hecho frecuentemente [ho y] en la
siendo testigos vivientes de la eficacia de la fe cristiana...22 Sin hermandad en base a alguna necesidad --estando toda la iglesia
embargo, Ireneo no está hablando solamente del pasado en este en esa localidad particular rogando [la gracia] con mucho
pasaje. Con la larga lista de dones espirituales que presenta, es aY,uno ~ oración, e.l espíritu del hombre muerto ha regresado,
claro que él está hablando de las maneras en las que Cristo y el ha Sido concedido en respuesta a las oraciones de los santos
ministra a la humanidad a través de su Iglesia en el presente. -que ni siquiera creen que esto se pueda hacer..) 4
Ireneo no tenía dud as de qu e la Iglesia había sido adornada
con los do nes del Espíritu Santo. Sin embargo, se opo ne
21. íbid., 2.32.4.
22. W. Wigan Harvey, Sancti lrenaei ep. Lugdunensis librosquinque aducr:
sus haereses, 2 vals. Cambridge Umversity Presa, Cambridge, 1857, lJ. Kydd, Chansmatic Gifts in tbe EarlyChurt:h, 44.
reimp. 1949,2:335. 2~ . Ireneo, Contra herejlas, 2.31.2.
100 LA ACCIÓN DEL EspfRlTU SANTO EN LA H ISTO RIA E L CRJST lANlSMO DEL SIGLO 11 101

terminantemente a ciertos gnósticos, especialmente a uno lla- carisma pro fético por el que el ho mbre, cuando está invadido
mad o Marcus qu e, segú n él, prete ndía con falsedad ejercer los por Él, produce como fr uto la vida de Dios».28
dones espirituales, espec ialment e el de profecta.at En raz6n de N o obstan te, si bien Ireneo admitió la perm anencia y
esto, Irene o declara que el verdade ro cristiano espiritu al se vigencia de los don es como mani festac iones poderosas de la
sujeta a la tradición apostólica, segú n esta ha sido transmitida acció n del Esp íritu Santo en la Iglesia de sus días, también
por la sucesión de los obispos cató licos. contr ibuyó con su enseñanza a la instituci o nalizació n de los
ca rismas. «Él quería la prof ecía, per o solo dentro del orde n.
Pero [por otro lado, se ha mostra do]. que la predicación En su te mo r po r los abusos y su deseo int enso por estr ucturar
de la Iglesia es consistente en todas partes, y co ntinúa en el mo vimiento del Espíritu Santo dent ro de la doctrina apro-
un curso parejo, y recibe testimon io de los pro fetas, Jos piada y el episco pado , estableció el escenar io pa ra un a reduc-
apóstoles y codos los discípulos -como he probado- a ción en la vitalidad de la Iglesia».29 De este mod o, mu y pronto
través [de aque llos en] el principio, el medio y el final, y a los do nes queda ron en mano s de los ob ispos casi co n exclusi-
través de toda la dispensación de Dios, y de ese sistema bien vidad, y la experiencia espiritual se reduj o al marc o de la
fundado que tiende a la salvación del hom bre, es decir, par ticipación de los sacramentos, especialment e en la misa.
nuestra fe; que, habiendo sido recibida de la Iglesia, noso-
tros preservamos, y que siemp re, por el Espíritu de Dios,
renovando su juventu d, como si fuese algún depósito pre- Vivia Perpetua (ca. 181-202)
cioso en un vaso excelente, hace que el vaso mismo que lo Uno de los capítulos más inspir ad ores de la histor ia del
co ntiene renueve también su juventud... y los [medios de] cristianismo es el relato de la vida y muerte de Vivia Perpetua,
comunión con Cristo han sido distribuidos por to do Él, la joven cristiana qu e fue mue rta en la arena de Carrago en el
esto es, el Espíritu Santo , el anhelo de incorrupc ión, el año 202. Vivia Perpetua fue víctima de las persecu cion es
medio de confir mación de nuestra fe, y la escalera de instigadas por el empera dor ro ma no Septimio Severo . El ant i-
ascenso a Dios.ze guo do cum ent o, qu e cuent a de su arresto , juicio y muerte a
manos de un gladia do r, pro bablemente fue red actado o ed ita-
Un último testimonio de lreneo es el qu e apo rra en su do por T ertulíano.au Perpetua era cate cúm ena y ten ía unos
argument ación en conrra de Marción: "C ierta mente, so n hom- veintidós año s cuando fue martiriza da y dejó un hijo pequeño .
bres realmen te desgraciad os qui enes desean ser seudo -pro fetas, El relato de su testimo nio se encuentra en El martirio de
pero dejan de lado el don de profecía en la Iglesia, actuando Perpetua y Felicitas. Su redactor da cuent a de su convi cción en
como aquellos qu e, en razón de los que cae n en hi po cresía, se la vigencia de la acción y mani festación podero sa del Espíritu
abstienen, incluso, de la co munión de los hermanos- .é? En su Sant o, cua ndo afirma, después de citar j oe l 2.2 8-29 : «Y así a
ob ra Exposición de la predicación apostólica, señala: «Otros no nosotros, que reconocemos y reverenciamos tal com o lo hacemos
ace ptan los dones del Espíritu Santo y rep elen lejos de ellos el las profecías, se nos prometen igualm ente visiones modern as,

25. Véase la discusión de Ireneo contra Marcus en lbid.; 1.13. 28. lrenec , Exposici6n de fa predicaci ón apostólica, 99.
26. ¡bid., 3.24.1. 29. Burgess, Ancient Christian Traditions, 62.
27. lbid., 3.11.9. 30. Véase Quasten, Patrología, 1:181.
102 LA ACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 103

Y consideramos los otros pod eres del Espíritu Santo como inmediatamente digna, y llamada a rogar en su favor. y
herramientas de la Iglesia a la cual Él fue también enviado comencé a hacer súplica intensamente por Él, y a clama r
administran do todos los don es en todos, tal como el Señor los con gemidos al Seño r,33
distri buyó a cada un o - cs t
Este pasaje, al comienzo mismo del relato, es sumam ente Finalmente, llegó el día del martirio, y Perpetua estaba
interesant e. Po r un lado, llama la atención la manera en que se ..tan en el Espíritu y en éxtasis», que aun habiendo sido
equiparan las pro fecías con las visiones recient es. Es probable embestida por un a vaca salvaje, al volver en sí no podía creer
que por «profecías» se quiera significar las pro fecías del Anti- lo que había ocurrido , hasta que vio sus vestidos desgarrados
guo Testamen to, mientras qu e las «visiones» se referirían más y sus miembros hend os.> Para el autor de este docum ento, el
a experiencias actuales al estilo de las revelaciones monta nistas. testimonio de Perpetua la asemeja al testimonio de los anti-
De ser así, el aut or del relato coloca ambas en un mismo nivel guos. El ejemplo de estos mártires de su tiempo es «para la
de impo rtancia como herramient as a dispo sición de la Iglesia. edificación de la Iglesia, no menos qu e el de los antiguos, de
Por otro lado, el autor considera al Espíritu Santo co mo el don modo que nu evas virtudes también pueden testificar que uno
enviado a la Iglesia, y a su vez, Él y el Señor son quie nes y el mismo Espíritu Santo está siempre operando incluso hasta
ahora»)5
distribuyen los done s. Esto nos recuerda las afirmaciones de
Pablo en 1 Corintios 12.4 -6, y la manera en que el apóstol
asocia tanto al Espíritu como a Cristo y al Padre en la distribu - Clemente de Alejandría (150-215)
ción de los dones.
T ito Flavio Clemente nació hacia el año 150, de padr es
El testimonio de fe de Perpetua, poco antes de morir, es
elocuente en cuanto a la obra del Espíritu Santo en su propia paganos. Parece que su ciudad natal fue Alejandría, donde
vida. Estando en la cárcel, ella misma cuenta: «En ese mismo recibió su prime ra enseñanza. No sabemos la fecha de su
intervalo de unos pocos días fuimos bautizados, y el Espíritu conversión, ni su ocasión. Una vez que se hizo cristiano,
me dijo que en el agua del bautismo nada debía buscar, sino comenzó a viajar. Su propósito era recibir instrucci ón de
que Dios me diese resistencia físic a»,32 En los días siguientes y maestros cristiano s renomb rados. El mayor acontecimiento de
su vida fue llegar a Alejandría. Allí fue discípulo de Panteno , y
mientras continuaba su juicio, Perpetua tuvo varias visiones
que la llenaron de consuelo. Entre ellas, Perpetua refiere una le sucedió como director de la escuela de catecúmenos en el
interesante experiencia, que sugiere una palabra de revelación. año 189. Tu vo discípulos descollant es, como Orígenes y Ale-
jandro, obispo de Jerusalén y después márt ir. A causa de la
persecución de Septimio Severo, tuvo que salir de Egipto y
Después de unos pocos días, mientras está bamos tod os
or ando, de repen te, en medio de nuestra or ación, vino a
refugiarse en Capadocia, do nde probablemente mur ió, allá por
mi una palabra, y nombré a Dinócrates; y me sorpren dí de
el año 215.
que ese no mbre jamás había ven ido a mi mente hasta
entonces, y me apené al record ar su desgracia. Y me sentí
33. lbid., 2.3. Sigue una visión que Perpetua tuvo esa misma noche acerca
de Dinócrates, su hermano carnal, que según ella misma refiere, había
muerto a los siete años víctima de cáncer.
31. El martirio de Perpetua y Felicitas, prefacio. H . lbid., 6.3.
32. uu .; 1.2. 35. Ibid., 6.4.
104 LA ACCIÓN DEL Es rf RITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 105

Haci a el año 210, Clemente describe a la Iglesia como un elemento.J 8 Los fieles han sido at raídos a Dios como por un
corazón espiritual y santo, u n cuerpo espiritual. Dice él: «La magneto por el Espíritu Santo. «Así como la minúscula partícu-
Iglesia del Señor, el corazón espiritual y santo, es simbol izada la de acero es movida por el espíri tu de la piedra de H erácleo,
como un cuerpo» , Y agrega : «Quien se une al Señor en espíritu, cuando se difu nde por sobre muchos an illos de acero ; así
se transfo rma en un cuerpo espiritual por un tip o diferente de también, atraído po r el Espírit u Santo, el virtuoso es agrega do
un i6n ,.) 6 Como señala Swere, el padre alejandrino «habla por afin idad a la prime ra morada, y los otros en sucesión hasta
libremente de l Espíritu Santo, y con mucha belleza, pero con el últ imo».J9
referencia ya sea a algún pasaje de la Santa Escritura o la Los creyentes son también inspira dos por el Espíritu :
experiencia de la vida cristiana»)7 "Pero afirmamos que e! Espíri tu Santo inspira a aque! que ha
El pro pósito de Clemente era armonizar la filosofía griega creído ».4o Clemente compara tam bién al Espíritu con la unción
con la doctrina cristiana, o las verdades de la ciencia hu mana de aceite, cuando lo califica de «ungüento santo», y dice: «Este
con las verda des de la revelación divina. Su deseo era conven- ungimiento de fraga ncia agra dab le, Cristo lo prepara para sus
cer a los gentiles de la ver dad del cristianismo ; luego educa rlos discípulos, componiendo el ungüento con ingrediente s aromá-
en la vida cristiana; y, por fin, perfecciona rlos en los misterios ticos celesrialesv.t ! Además, el Espíritu es una luz guiado ra par a
de la fe. Este triple objetivo se desarr olla en sus tres ob ras el creyente que busca un conocimiento verdadero. Cua nto más
principales, que han llegado a nosotros: Exhortación a los una persona procura este co nocimiento, tanto más cerca estar á
gentiles (el Protréptico), el Pedagogo, y la Miscelánea o Tapices de la luz del Espíritu Sanee.e Todo con ocimiento verda dero,
(Stromata). En razón de su enfoque eminente mente intel ectual a difere ncia de la gnosis falsa, viene a través del Espíritu Santo.
del testimonio cristiano, Cleme nte elude toda mención a las "Pero el Señor, en su amor al hombre, invita a tod os los
manifestaciones más espectaculares del Espíritu Santo . El creía hombres al conocimiento de la verda d, y para tal fin envía al
qu e la filosoffa griega podía ser uti lizada para proveer de una Paraclerov.'O
base racional a la fe cristiana. Además, enseñaba que la vida La mejor belleza es la espiritual, que se cultiva cuando «el
espiritual es un proceso que va de la fe, a travé s del conoci - alma es adornada po r el Espíritu Santo, e inspirad a co n los
miento, hasta la visión de Dios y, en la vida venidera, hasta ser encantos radiantes qu e proceden de Él -c-rectirud, sabiduría,
hechos semejantes a Dios . fortaleza, temperancia, amor de lo bueno, mod esriacw Por ser
perfecto , Dios concede don es que son perfecros.e Es precisa-
No obstante, al distinguir ent re los gnóstico s falsos y los
mente po r estos dones perfectos que ha recibid o, que el
verdaderos, señala que los segundos son los que realmente han
hombre perfecto puede ser reconocido como tal. Es en este
obtenido un co nocimiento de Dios. En este co ntexto, Clemen-
te tiene bastante para decir acerca de la ob ra del Espíritu Santo.
Por ejemp lo, dice que el creyente, hecho de una substancia 38. Clemente de Alejandría, Stromata, 5.14 .
inferior, ha sido combinado co n el oro real, el Espíritu Santo, 39. lbid., 7.2.
en contraste con el judío, la plata, y los griegos, el tercer 40. Ibid., 5.14.
41. Clemente de Alejandría, Pedagogo, 2.8.
42. Clemente de Alejandría, Stromata , 4.17.
4 3. Clemente de Alejandría, Exhortación a los paganos, 9.
36. Clemente de Alejandría, Stromata, 7 .14 . 44. Clemente de Alejandrfa, Pedagogo, 3.11.
37. Swere, The Holy Spirit in the Aná ent Church, 124. ~5 . tbid., 1.6.
106 LA ACCIÓN DEL ESplR.lTU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 107

marco de la perfección cristiana que el padre alejandrino cita era la continuación de un tratado sobre los carismas.Jv Fuera
la lista de done s de 1 Corintios 12.4 6 Aparentemente, Clemente de la Didaché, esta obra es la más antigua y la más importante
da por sentado el ejercicio de los dones en la iglesia de sus días. de las constituciones eclesiásticas de la anrigüedad.U
«No parece probable que Clemente haya enumerado a los Según H ipóliro, la tradici ón es la que refuta las herejías.
carismas de 1 Co rintios 12 como evidencia de la gnosis verda- El mismo se muestra sumamente hosti l hacia toda forma de
dera si esos do nes no estaban siendo practicados en ese riem- herejía o disidencia, man ifestándose como un duro conserva-
po ..,4 7 Es así que, el padre alejandrino. al recorda r que Bezaleel dor celoso d e mantener las tradiciones establecidas en los dos
fue lleno del Espíritu Santo (Exodo 31.2-3), infiere que el gusto primeros siglos cristianos. H ay razó n para pensar, entonces,
y la habilidad artísticos son un don de Dios.se que en la Tradición apostólica, Hipól ito refleja fielmente lo que
Sobre la cuestión de los dones del Espíritu en Clemente, se pensaba y hada en las iglesias roma nas hacia fines del
concluye Swet e: "Clemente se refiere frecue nte mente al don del segundo siglo. G regory Dix llega incluso a afirmar que el
Espíritu como un hecho de la experiencia cristiana. Si bien no es contenido de esta ob ra "representa la mente y la práctica no
un montanista, reconoce plenamente el lugar del Espíritu Santo solo de San H ipólito sino de toda la Iglesia Católica del
en la vida del homb re, especialmente dentro de la Iglesia », 49 segundo siglo".5 2
El énfasis dominante en la Tradición apostólica está sob re
el Espíritu Santo y los dones espirituales en un sentido am-
Hipólito de Roma (ca. 170-235) plio .53 En la prim era oración de su escrito, señala: ..Es necesa-
Hay razones para creer que Hip élirc no era natural de rio exp oner la parte del discurso que concierne a los carismas
Roma, ni siquiera latino de o rigen. Poseía profund os conocí- -ccarismas que Dios desde el origen, acordó a los hombres
miemos de filosofía griega y seguramente recibió una forma- según su voluntad- pues ellos habrán de conducirlos nu eva-
ción teológica helenística. Su producción literaria es com pa ra- mente hacia su imagen de la que se han alejado...54 Estos carismas
ble en volumen a la de su contempo ráneo Orígenes, pero no a los que Hip óliro hace referencia no son acciones, sino personas:
así en profundidad y originalidad de pensamiento. H ipólito se obispos, sacerdotes (o presbíteros) y diáconos, verdaderos
interesó más en cuestiones prácticas que en problemas cienrí-
ficos. Parece que fue discípul o de Ireneo. Publicó tratados
50. Para ti texto, véase, Hipólito de Roma, lA tradiá 6n apost61~, Edito-
anriheréticos y hasta poesía religiosa. Fue elegido obispo de rial Lumen, Buenos Aires, 1981; Bcrron Seon Easron, trad., Tñe
Roma por un círculo reducido, pero influyente, convirtiéndose Apostolic Tradition of Hip polytus , Cambridge University Press, Cam-
así en el primer ..antipapa » , Hipélito fue uno de los más bridge, 1934; y Gregory Dix, The Tre41tÍ5e OP:I the ApostolK Tradition
grandes pensadores de sus días en occidente, si bien escribió ofSt. Hip polytus of Rome. SPCK, Londres, 1968.
en griego. De todos sus escritos, el más inte resante es la S l. Según Gregcry Dix, esta obra es la fuente de evidencia más iluminadora
que existe de la vida interna y la práctica religiosa de la iglesia cristiana
Tradición apostólica, que fue escrito hacia el año 215, y que antigua. Ibid., xliv.
52. lbid.
53. De inter és es el artículo de John E. Sram, ..CharismaricTheology in rhe
"6. Clemente de Alejandría, Stroma ta, 4.21 . Apostolil: Tradition of Hippolytus-, en Curtent lssues in Biblical and
"7. Bur gess, Ancient Christian Traditio ns, 72 . Patristic ln terpretatien , ed, por Gerald F. Hawrhorne E.erdmans, Grand
u . Clemente de Alejandrfa, Stromata, 1.4. Rapids, Mich, 1975, 267-276.
"9. Sweee, Tbe Ho ly Spirit in the Andent Church, 125. s... Hipólito de Roma, Tradición apost ólica, prólogo.
108 LA ACCiÓN DEL EsrfRITU SANTO EN U. HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 109

don es de Dios a la Iglesia. De allí que, de manera mu y especial, En una impresion ante oración elevada para la consagra-
el derram amiento del Espfritu es indispensable par a el ejercicio ción de la eucaristía, Hipólito ruega: ..Te pedimos qu e envíes
del ministeri o . Por eso, con la impo sición de manos para la tu Espíritu Santo sobre la oblación de la Santa Iglesia. Reunién-
ordenación de obispos, sacerdotes y diáconos, se elevaba una dolos, da a tod os el derecho de participa r en tus santos
oració n rogando tal op er ación del Espír itu en sus minisrerios.ss misterios [la eucaristía] para ser henchidos del Espíritu San-
En la o ración de o rdenación sacerdo tal, se ruega: ro,..58
Según Hipólito, el Espíritu Santo es quien asegura la
Dios y Pad re de Nuestro Señor Jesucristo. así co mo un día conservació n de la tra dición.J? Es el Espíritu quien opera
miraste a [U pueblo o rdenan do a M oisés elegir a los ancia- dent ro de la estructu ra de la iglesia, si bien Hip ólito admite
nos a quienes Tú llenaste del Espíritu, mira aho ra a tu también su acción fuera de la jerarquía eclesiástica y a través
servidor aq uí presente y acu érdale el Espíritu de gracia y de dones ext raordinarios en el Cuerpo de Cristo. Dios ha
de consejo del presbiterio, a fin de que ayu de y gobierne a concedido dones a los ho mbres conforme a su propio consejo
tu pueblo con un corazón puro.
o voluntad, y señala Hipólito: ..ya que tod os tenemos el
Además, Señor. cuidando indefectiblemente de noso tros, Espíritu de Dios,..6o
acu érdanos el Espíritu de tu gracia, y tórnanos dignos, una
No obstante, si bien Hip ólito admite la vigencia de los
vez colmados de este Espíritu, de servirte en la sim plicidad
dones espirituales, los coloca dentr o del marco del orden
del corazén.Je
eclesiástico. Tal es el caso de aquellos que ejercen el don de
sanidad. •Si alguien dice: Yo recibí el don de la curación en
De este modo, la Tradición apostólica enfatiza la relación
una revelación, no se le impon drá la mano. Los hechos mismos
entre la llenura del Espíritu, el ejercicio ministerial y la vida
demostrará n si dijo la verdad•.61 Hip óliro hace también refe-
cristiana de cada creyente, en conformidad con la tradició n
heredada. rencia al do n de enseñanza:

Si hu biera una cateq uesis (de la palabr a), preferirán co ncu-


Movidos por la carida d de tod os los santos, hemos llegado
rrir allí, estimando, en sí mismos, que es a Dios a qu ien se
a la esencia de lo que conviene a la Iglesia, a fin de que
escucha en la palabra del qu e instru ye.•• Nadie deberá llegar
todos aquellos que estén cor rectamente catequizados ob-
con retr aso a la iglesia, ya que es el lugar en qu e se revela
serven la tradición qu e subsistió hasta el pr esente de acuer-
la doct rina. Enton ces, el enseñante instruirá sobre lo que
do con la exposición que hacemos y, habiendo tomado
es eficaz y útil para cada uno, y se escucha rán cosas que se
conocimiento ..., se afirmen en el Espíritu Santo, confi rien-
ignoraban . Asi, se recibe la gracia del Espíritu Sama a través
do a los qu e tienen una fe sincera y firme la gracia perfecta,
del que realiza la instrucción, de esta man era la fe se
y para qu e todos los qu e conduzcan la Iglesia sepan cómo
forta lece a partir de lo que se escucha ... En consecuen cia,
deben ense ñar y guardar estas cosas.rz

58. Ibid., 4 .
55. íbid., 3; 7; 8. 59. [bid., prólogo.
56. Ibid., 7. 60. Ibid.; 16.
51. lbid., pr ólogo. 61. Ibid., 14.
110 LA ACQ ÓN DEL EsrfRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 111

cada uno se apresu rará a co ncurrir a la iglesia, el sitio donde de la fe cristiana contra los paganos, y en defensa de la
el Espíritu Santo florece.ez o rtodoxia con tra los herejes. Fue el primer teólogo cristiano
que escrib ió en lengua latina, y por ello, su pensamiento influyó
De esta manera, Hipólito relaciona al Espíritu con la notablemente sobre toda la teología occide ntal. Atraído por el
Palabra, co n el o rden eclesiástico , y con el ministe rio de todos rigor de la ética montanista abrazó esta co nvicció n. Po r esta
los creyentes. Esto permite concluir que en Roma, hacia me- razón fue sepa rado de la iglesia en el año 213. Burgess lo
diad os del tercer siglo, y en la tradición eclesiástica qu e H ipó - califica de ..el primer teól ogo pentecosral de importancia en la
lito re prese nta, ..los conceptos neumo-carism áricos y o ficial- Iglesia...67
sacramental... todavía coexisten sin mayor dificultad..,63 Co rno El concepto de Te rtu liano en cuanto a la relación del
señala Bur gess: «El Espíritu Santo, mientras q ue ope ra a Espíritu Santo con la Iglesia es notable.e! Para él, la Iglesia y el
t ravés de la jerarqu ía, está funci on ando también a través de Espíritu son t érminos casi equivalentes: ..La Iglesia misma es
mini stros laico s y en las asambleas de lo s cre yentes. Pero esta esencialmente, hablando propia y principalmente, el Espíritu
es la última generación en el oeste en la que se reconocerá mismo...69 Esta era su manera de negar que la mera asoci ación
en general que el Esp íritu ob ra realmente con y a través de de personas «natu rales.. confor maba la Iglesia, y afirmar la
tod a la Iglesia » , 6-4 esencia de la Iglesia como creación del Espíritu . Este es esen-
N o obsta nte , según Hi pó litc , esta acción del Espíritu se cialmente su énfasi s en las obras qu e escribió antes de volcarse
verifica solo en aquellos «que tienen una fe since ra y firme.., y al mo ntanismo, y que reflejan el ton o gene ral del cristianismo
no en qui enes caen en el erro r o se ext ravían.O Es precisamente ortodoxo del norte de África. As! en la Apologfa, uno de sus
el Espír itu quien guarda al creyente de tod a tentación y err or, pri meros escri tos, señala:
ya que «(el Adver sario) es alejado por el Espíritu qu e mora en
tu co razón ...66 y ellos [los paganos] están eno jados con nosotros, también,
porque nos llamamos hermanos ; po r ninguna otra razón,
Tertuliano de Cartag o (160-240) pienso , que: porque entr e ellos mismos tales nombres de:
co nsanguinidad son usados para exp resar una mera preten-
Era un hombre de una sólida educación y p robabl eme nte sión de afecto ... Al mismo tiempo, icu ánrc más dignos de
abogado de profesión . Se convirtió en Roma hacia el año 195 , ser llamados y contados como herm anos son aque llos que
y fue ordenado sacerdo te. Algún tie mpo de spués regresó a su ha n sido guia dos al conocimiento de Dios co mo su Padre
ciuda d na tal (Carrago), donde se ded icó a escribir en defensa común, quienes han bebido de un Espíritu de santidad y
que del mismo seno de una común ignorancia han pujado
hacia la misma luz de la verdad !70
62. lbid.; 41. Cf. 35. Probab lemente, este «enseñante - o maestro sería un
profeta.
6J . Hans von Campenhausen, EcclesiasticalAllthority and Spiritual Porun
in the Chllrch of the Fim Three Cm tunes, Stanford Universiry Press, 67. Burgess, Andent Christian Traditicns, 62.
Stanford, CA, 1969, 177. 68. Véase H .M. Evans, «Tertullian : Penrecosral of Carthege-, Paraciete 9
M. Burgess, Ancient Christian Tradit íons, 84. Fall 1975: 17-21.
65. Hipélito de Roma, Tradici ón apostólica, prólogo. 69. Tertu liano, Sobre la modestia, 2 1.
66. Ibíd., 4 2 . 70. Tertu liano, Apologla, 39.
112 U. ACCIÓN DEL ESpIRlTU SANTO EN LA HISTORIA El CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 113

Para Te rt uliano, la acció n del Espíritu Santo se manifesta, Contra Práxeas (año 213), tiene qu e ver co n el rechazo po r
ba en sus días de la misma ma nera que ocurría en tiem pos parte d e este d e lo s d ones d el Espí rit u San to . Para este tiempo,
neor estamentari os. En todos sus escritos, el padre norafricano Tertu liano ya se había identificad o con el montanism o, y ac usa
asigna un lugar importante al Espíritu. que llena la vida de la :1 Pr áxeas n o solo d e er ro re s en cuanto a la Trinidad , sino

Iglesia con todos los dones prometidos por Dios a trav és de los ta mb ién d e o pone rse a la n ueva profecía . La condena d e
profetas y los após to les. ..Ahora sobre la cuestión de los "dones Te rtulia no es terminante :
espirituales", tengo que destacar que estos fueron también
prometi dos por el Creado r a través de Cristo; y pienso que Práxeas fue el primero que trajo de Asiaa Roma este género
pod emos deducir de esto un a conclusión muy justa de que la de perversidad herética. Era hombre de carácter inquieto,
daci 6n de un don no es la obra de otro dios que no sea Aquel hinchado por el orgullo de haber sido confesor, solo por
que está probado ha dado la promesas."! algunos momentos de fastidio que padeci ó durante algunos
Precisament e, la vigencia de los dones del Espíritu en sus días en la cárcel. En aquella ocasión, aun cuando «hubiese
d ías era una evid encia cla ra d e la aure nricid ad d e la Nueva ent regado su cuerpo al fuego, de nada le habría servido .. (1
Profecía. D e allí que, en su ata q ue contra Marci6n, Tertuliano Cori ntios 13.3), porque no renfa amor. Había resistido a
lo desafíe a mostrar u na evidencia simi lar, a fin d e pro bar la los dones de Dios y los había destru ido. EJ obispo de Roma
autenticidad de sus pretensiones. habfa reconocido los dones proféticos de Montano, de
Prisca y de Maximila. Con este reconocimiento había
Que Marci6n exhiba, pues, como dones de su dios. algunos devuelto su paz a las iglesias de Asia y de Frigia, cuando
profetas, que no hayan hablado por sentido humano, sino Pr áxeas, urdiendo falsas acusacions contra los mismos
con el Espíritu de Dios, que hayan predicho cosas que van profetas y contra sus iglesias y recordándole la autoridad
de ocurrir y hayan puesto de manifiesto los secretos del de los obispos que le habían precedido en la sede (de
co raz6n; que él produzca un salmo, una visi ón, una oración Roma), le obligó a revocar las cartas de paz que había
-solo que sea por el Espíri tu, en un éxtasis, esto es, en un exped ido ya y le hizo renunciar a su pro pósito de reconocer
rapto, toda vez que le haya ocurrido una inte rpretaci ón de los carismas. Pr áxeas, pues, prest6 en Ro ma un doble
lenguas; que él me muestre también, que cualquier mujer servicio al demonio: echó fuera la profecía e intr odujo la
de lengua jactanciosa en su comunidad haya profe tizado herejía ; puso en fuga al Espíritu Sama y crucific ó al Pa-
alguna vez de entre aquellas hermanas especialmente santas dre.73
que él tiene. Ahora, todas estas señales (de dones espirirua-
les) se están manifestand o de mi lado sin ninguna dificul- De manera parti cular, T ertu lian o llama la atención sobre
tad, y concuerdan , tam bién, con las reglas, y las dispensa. el d o n d e p rofecía. Este do n podero so era eje rcido como u na
cienes y las instrucciones del Creador.72 experiencia d e éx tasis en la cu al, según T ertuliano , ..el alma
Precisa mente, su encarn izada o pos ició n a Práxeas, q ue: sensi b le se sa le d e sí m ism a, en u na man era qu e incl uso se
resul tó en uno d e sus más desta cados escrit o s po lémi cos, pa rece a la lo cura » , 74 Esta ex periencia d e profecía ext ática

71. Tertuliano, Contra Marcí6n, 5.8, 7J. Tertuliano, Contra Pr4xeas, 1.


n. [bid. 7~. Tertuliano, Sobre el alma, 45.
114 LA ACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 115

pr oviene de Dios y «puede ser comparada con la graci a real de Jesucristo (de Dios), ni qu e dejan de lado alguna regla de fe o
Dios, co mo algo ho nesto, santo, prof ético, inspirad o, instruc- esperanza par ticular, sino que ellos sencillamente ense ña n un
tivo, invitador a la virtu d, cuya naturaleza a bundante hace qu e ayuno más frecuente que el matrimonio »."?
fluya inclu so a los profan os-Zt Después de cita r las palabras Cuando los críticos del montanismo los acusaban de in-
. de Ped ro en el mont e de la tran sfiguración, y el comenta rio del troducir cosas nu evas y de alejarse de las tradiciones de la
tex to bíblico de que no sabía lo qu e decía, se pregun ta: iglesia, la respuesta de T ertuliano era : ..El Par acleto no trae
nada nu evo; to do lo que hace es decir claram ente lo qu e ya ha
sugerido, y demanda lo que ha mantenid o en estado latent e...
¿Có mo q ue no sabía? ¿Fue su ignora ncia el resultado de un
El Par acleto es más bien un restaurador que un orlginado r»."!
sim ple er ror ? ¿O fue sobre el principio q ue nosotros sost e-
De to dos modos, si bien el montanismo no of recía nada qu e
nemas en la causa de la nue va pro fecía, que el éxtasis y el
arrobamien to son incidentales a la gracia ? Porq ue cuando
fuese esencialmente nuevo, o que no tu viese sus raíces en la
un hom bre está absorto en el Espíritu , especialmente cua n-
tradición católica, en la dispensación del Espíritu había luga r
do conte mpla la gloria de Dios, o cuando Dios habla a para el progreso y el cre cimiento.
través de él, necesariamente pierde su sensación (excidat
El Paracleto, teniendo m ucha s cosas para enseñar plena-
sensu), porque es cubie rt o con el poder de Dios, - un
ment e que el Señor demoró hasta que Él vinie ra... come n-
punto en cuanto al cua l hay una cues tión entre nosotros y
los de mentalidad carnal (físicos).76 za rá da ndo testimo nio enfá tico de Cristo... y lo glori ficará,
y nos lo traerá a la mem or ia. Y cuan do Él haya sido así
reco nocido (como el Consolador promet ido), sob re la base
Te rtuliano destaca que lo más valioso del don de prof eda de la regla fundamen ta l, Él revelar á aqu ellas «muchas
es qu e pone de man ifiesto la realidad de que el Espíritu Santo cosas" que atañen a la con d ucta de la vida.79
sigue guiando a la Iglesia a la verdad y enseñá ndole. Si bien el
movimiento de la Nueva Profecía, co mo se conocía al monta- Es precisa mente en el campo de la ética do nde Te rtulian o
nismo, era reciente , el Espíritu qu e se ma nifestaba en sus día s se sint ió atraído por el montani smo, y donde considera fun da-
no era otro que el Par acleto que había sido prometido y ya menta l la acción del Espíritu en la vida del creyente.
en viado po r el Señor. Los cristianos carnales - ..ffsicos», según
T e rtuliano-e- en realidad rechazan la N ueva Pro fecía porque La razón por la que el Seño r envió al Paracleto fue qu e,
pone en evidencia su glotonería y lujuria. ..Son estos los qu e dado q ue la medi ocr idad hu ma na era incapaz de asumir
levantan controve rsia con el Pa racleto ; es por esta causa qu e to das las cosas de una vez, la disciplina debía, poco a poco,
las N uevas Pro fecías son rechazadas: no es qu e M ontan o y ser di rigida, o rd enada y llevad a a la perfecció n po r ese
Priscila y Maxim ilia predican a otro Dios, ni que separan a Vicar io del Señor; el Espíritu Santo... ¿Cuá l es, en tonces,
el ofi cio administra tivo del Paracleto sino este: la dirección

75. lbid., 47.


76. Tertuliano. Contra Marci61l , 4.22. Tertuliano llama ..físicos- a estos rr. Tertuliano. Sobre el aYUIlO, 1.
creyentes de mentalidad carnal, porque piensan que los arrobamientos 78. Tertuliano. Sobre la monogamia, 3. 4.
exrancos y las revelaciones han cesado en la Iglesia. 79. lbid., 2.
116 LA ACCiÓN DEL ESP!RJTI/ SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 11 117

de la discip lina, la revelació n de las Escrit uras , la refor ma cu idado más escrupuloso, en orde n a qu e su verdad pueda
del intelecto, el avance hacia las «mejores cosas»? Nada ser probada) ,8I
carece de etapas de crecimiento: todas las cosas aguardan
su tiempo... Así también la rectitud... al principio fue Para Terruliano la iglesia verdadera era la Iglesia del Espíritu,
r udimentaria, consistente en un temor natural a Dios: liderada por hombres espirituales y no por meros funcio narios
desde esta etapa avanzó, a tra vés de la Ley y los Profetas, religiosos (obisposj.az El estaba convencido de que una nueva
a la infancia; desde esa etapa pasó, a t ravés del evangelio, era del Espíritu estaba comenzando en sus pro pios días. El
al fervo r de la juventud: ahora, a través del Paracleto, se Espíritu Santo estaba dando revelaciones de la verdad y volun-
está asentando en la maderez.üü tad de Dios a través de la Nueva Profecía, representada por el
mon tanismo. Con vigor, Tertuliano defendía lo que él conside-
En su tr atado Sobre el alma, Tertuliano hace una clara raba era una aut éntica espiritualidad en los profetas vivientes
referencia al ejercicio de la glosolalia y ot ros dones de revela- de su tiempo, frente a la inoperancia y laxitud del grueso de
ción en la congregación como medio de revelación, cuando las iglesias qu e, según él, habían caído en un estado que, como
refiere: se indicó, describe como ..físico», «Nosotros, en cambio»,
indica él, «co n justicia nos llamamos espirituales por los caris-
Hay ent re nosotros en este momento una hermana cuya mas que manifiestament e nos perte necen-a'
suerte es qu e ha sido favorecida con diversos don es de Parece evidente que e! contexto eclesiástico en e! que se
revelacion es, qu e ella experimenta en el Espíritu mediante desenvo lvía Tertu liano era carismático. Los carismas se incor-
visione s exráricas durante los ritos sagrados del día del poraban a todos los creyentes desde el momento mismo de su
Señor en la Iglesia. Ella conversa con ángeles, y a veces compromiso con la Iglesia a través de! bautismo. En un pasaje
incluso con el Señor, y oye y ve comunicaciones misteri o- sumamente inter esante, Tertu liano señala: «Po r lo tanto, ben-
sas, entiende los corazones de algunos hombres, y a aqu e- dito s aquellos a qu ienes aguarda la gracia de Dios, cuando
llos que están en necesidad les distribuye remedios. Ya sea vosotros salís de ese baño muy santo que trae consigo e! nuevo
durante la lectura de las Escrituras, o en la ento nación de nacimiento y po r prim era vez levantáis vuestras manos dentro
salmos, o en la predicación de sermones, o en el ofrecimien - de tu Madre, la Iglesia, junto con vuestros hermanos, pedid al
to de or aciones, en tod os estos servicios religiosos ella Pad re, pedid al Señor que os haga afectos a las riquezas de la
encuentr a material y oportu nidad para sus visiones. Posi- gracia, a la distribución de los dones ».84 A la luz de lo que ya
blemente nos pued e haber ocurrido, qu e mientras esta hemos visto en Tertuliano, indudablemente se está refiriendo
hermana nuestra estaba absorta en el Espíritu, que hayamos a los dones espirituales cuando habla de la ..distr ibución de los
predicado en alguna man era inefable acerca del alma, dones». Si es aSÍ, la exhortación a los recién bautizados es que
Después de que la gente es despedid a en la concl usión del procuren los dones del Espíritu y que esperen recibirlos.
culto sagrado , ella tie ne el hábito regular de in fo rmarn os
cualesquiera sean las cosas qu e pueda habe r visto en visión
{porque todas sus co mun icaciones son examinadas con el
81. Tertuliano, Sobreel alma, 9.
82. Tertuliano, Sobrela modestia, 21.
83. Tertuliano, La monogamia, 1.
80. T ertuliano, Sobre el velo de las vfrgenes, 1. 84. Tertuliano, Sobre el bautismo, 20.5.
118 LA ACCIÓN DEL Esp fRIru SANTO EN I..J\ HISTORIA

Apare ntemente para Tertuliano esto es lo normal y esperable


en una comunidad cristiana.
El testimonio de Tertuliano en cuanto a la vigencia y
ejercicio de los dones del Espíritu Santo y la operación pode-
rosa de este en la vida de la Iglesia, es de sumo valor. Debe
recordarse que le debemos a este hombre el haber acuñado
expresiones tales como «trinidad», que han permanecido en el
vocabulario teo lógico hasta nuestros días. A su agudeza co mo
polemista y profundidad como teólogo fijador de la doct rina
en occidente, debe agrega rse su profundo corazón pastoral y
extrao rd inaria sensibilidad espiritual. Esto último mad uró en
él todavía más a parti r de su co mp romiso más abierto con el
monta nismo (cerca del año 207).85 Es quizás por esto que en
sus escritos encont ramos más referencias a los dones del Espíritu
Santo que en cualquier otro auto r cristiano de la antigüedad.
Además, la manera en que discute los do nes, pone de manifies-
HHfRODOXIA y DISlDfNCIA
to su invo lucramiento persona l en el ejercicio de los mismos,
como no ocu rre con otros que también tratan con los dones .
Sin embargo , toman do en cuenta las fechas en que Tertu -
liano escribió las varias obras aquí citadas, se puede concluir

11
que la convicción de este padre en cuanto a los do nes no fue En los primeros siglos de su existencia histórica,
algo que llegó después de su compromiso co n el montanismo. el cristianismo tuvo que confro ntar crisis qu e se
En realidad, su enseñanza y testimon io sobre la operación plantearon tanto en el frente externo como en el
poderosa del Espíritu en las iglesias con las que él estaba ligado interno. En e! prime ro, tuvo que defender se del
es bastante consistente tan to en sus obras más tempranas como judaísmo y e! paganismo, mientras que en e! segundo, los
en las más tard ías. De tal suerte que, como indica Kydd : «Los enemigos fueron el gnosticismo y el montan ismo. Estos últimos
do nes del Espíritu no fueron una fantasía pasajera en Tertulia- movimientos tenían como pun to de partida el cristianismo,
no, ni tam poco fueren novedades que fuero n descubiertas más pero lo concebían y expresaban de manera diferent e de la
tarde en su vida. El los conoció a lo largo de toda su carrera corriente tr oncal o católica. «Mie ntras los gnósticos eran par-
literari a, y su alta estima po r ellos jamás decayó » , 86 ridarios de un cristianismo adaptado al mund o, los montanistas
pred icaban la renuncia total de! mismo-e! No obstante, existe
en estos grupos marginales o fuera de la ortodoxia cristiana
8S. Sobre el panicular, véase: H .J. Lawlor, -Th e Heresy of rhe Phrygians-, testimonios abundantes de muchas prácticas cristianas simila-
en Eusebiana, Clarendo n Press, Ox ford, 1912, pp. 108-135; R.G.
Smit h, «Tertullia n and Montan isrn-, Theology 46 (194 3): pp. 127-136 ;
res a las de la iglesia neotestamentaria.
Douglas Powell, «Tenullianists and Cataphrygians-, vigiiiae Christía-
nae 29 (1975), pp. 33-54.
86. Kydd, Charismatic Gifts ;tI the Early Church, 70. l. Quasten, Patrologfa, 1:243.
120 LA ACCiÓN DEL ESl'lRJru SANTO EN LA HISTORIA HETERODOXIA y DISIDENClA 121

Sin embargo, las manifestaciones de tipo carismático pa- salvar con seguridad; los síquicos o animales, que en el mejor
recen haber sido más comunes entre los grupos heréticos y de los casos «apenas» se salvaban por la fe y son intermediarios;
disident es del segundo siglo, que en la iglesia cató lica en y los b úlicos o materiales, que no se salvaban porque no habían
proceso de institucion alización . De todo s modos, el hecho de recibido la luz.3 Los gnósticos fundamentaban su do ctr ina en
que la heterodo xia haya «exagerado» el ejercicio de los caris- textos como 1 Co rintios 2.7, 14-15. 4 Según ellos: «Muchos
mas es prueba de que los mismos estaban vigentes en la son los húlicos, no muchos son los síquicos,' y muy pocos son
ortodo xia. En buena medida, la enorme difusión de algunos los espiri tua les-.r
movimientos cristianos mar ginales o heréticos se expli ca por A pesar de la enorme con fusión teológica de la mayor
el hecho de que los don es del Espíritu y sus manife stacione s no parte de sus plantea s doctr inales y éticos, muchos gnósticos
eran desconocidos por la generalidad de los cristianos. Sobre conservaro n el fervor de la devoción cristiana primiti va y el
el particular, Yves M .j . Cangar comenta : «Esta abundancia de énfasis sobre la vida espiritual que la caracterizaba. Si bien los
carismas y el papel que se les atr ibuye ---especialmente al de la gnósticos limitaron la obra del Espíritu Santo al reino del
"profecía" ~ x plica que, cuando Mon tano comenzó a "pro- intelecto y la excluyeron de la natu raleza moral del ser huma -
fetizar" hacia el año 172, se viera rodeado de una atención tan no, tuvieron una cierta inclinación a enfatizar sus operaciones
acogedora- A Algo similar podría afirmarse en relación con el espirituales. Con su dependencia del «don super ior» del cono-
gnosticismo y otros gru pos heréticos. cimiento para comprender los «secretos del camino santo» y
En este capítulo, pro curaremos analizar el ejercicio de los «las cosas profundas de Dios», los gnósticos fácilmente desta-
carismas y otras manifestaciones sobrenatu rales en los sectores caron la acción del Espíritu Santo, especialmente la vigencia y
marginales del cristianismo y en aquellos fuera de los límites ejercicio de sus don es.
de la orto doxia. Lo haremo s tr atand o de espigar elementos En un tratado que lleva por título La interpretación del
cristianos en la fe y la práctica de estos grupos, e intentando conocim iento , se discute la cuestión de los dones y la impor-
leer más allá de su testimon io, las experiencias de los creyent es tancia de su adecuado ejercicio dent ro de la Iglesia, el Cuerpo
e iglesias del cristianismo troncal. de Cristo. Según Burgess:

Aparentem ente, el autor está escribiendo a una comu nidad


Los gnósticos d e creyentes gnósticos divididos por la cuestió n d e los
Los gnóst icos fueron de los primeros y más destacados do nes espi ritua les . Alg un os de los qu e ejercían dones d es-
herejes de todo este período. El Nuevo Testamento presenta preciaban a lo s "igno rantes» qu e ca recían de gnosis. Otros
evidencias de la infiltración de esta herejía en las primeras sentían re senti mi ento cuand o sus co m p añero s se rehusaban
comunidades cristianas. Los gnósticos dividían a la humanidad a compartir sus d o nes espi rituales, o envid ia cuando lo s
en tres grupos: los neumáticos o espirituales, que eran los
creyentes verdaderos, capaces de alcanzar el «co nocimiento
oculto» (gn osis), que había sido enseñado y transmitido en 3. Ireneo, Cont ra hereifas, 1.6.1-2, 7.5. véase Luis M. de C édu, Historia
de la literatura petnstíca, Editorial Nova, Buenos Aires, 1954, 154.
secreto por los apóstoles y que son los ún icos que se pod ían 4. Geo rge H. Williams y Edith Waldvogel, ..A History oí Speaking in
Tongues and Related Gifts_, en The Charismatic Movement , ed. por
Michael P. Hamilton WiIliam B. Eerdmans, Grand Rapids, 1975, 64.
2. Cangar, El Espfritu Santo, 94. 5. Citado en Swete, The HoJy Spirit in the Ancient Church, 58.
122 LA ACCIÓ N DEL ESpíRITU SANTO EN u.. HISTORlA H"ETERODOXIA y DISIDENCIA 123

dot ad os ocupaban un lugar prom inente en la congrega- que «es el Espíritu de preconocimiento el que capacita al
ci ón .e verdadero profeta a predecir hechos con precisión, cosa que el
falso profeta no puede hacer». 10 Y agrega que «la llenura del
El docu mento dice : alma con el Espíritu Santo está reservada para los salvados,
después que han vivido bien aquí; y el efecto será abrirles todas
Además, es adecuado que [cada uno) de nosotros (goce) el las cosas secretas y escondidas, sin que se formule una pregun-
don qu e ha recibido de [Dios, y] que no estemos celosos, ta».lI En otros escritos gnósticos se indica que el Espíritu fue
dado que sabemos qu e quien está celoso es un obstáculo en dado por Jesús a los discípulos con el pro pósito de abri r su
su (propia) [senda]. dado qu e solo se destroza a sí mismo entendimiento para recibir misterios. «Todas las generaciones
con el don y es ignorante de Dios. Deber ía regocija rse Iy]
os llamarán benditos, porque os he revelado estas cosas y
estar contento y participar de la gracia y abundancia Noo• •
vosotros las recibisteis de mi Espíritu y os hicisteis inteligentes
[lo] con sideres [ajeno] a ti; más bien, como a uno qu e es
y espirituales entendiendo lo que digo; y de aqu í en adelante
tuyo , a quien cada uno [del tus miembros hermanos reci-
os llenaré con toda la luz y todo el poder del Espíritu ».12 En
bió. [Si] tú [amas a la Cabeza que los posee a ellos, también
orros documentos se habla de un «bautismo del Espíritu Santo »
posees a ese uno de quien es que estos derramamientos de
diferente del bautismo en agua, e incluso de una «unción
dones existe n entre los herrnanos.?
espirirual-c U
Los documentos gnósticos mencionan a casi todos los En general, el gnosticismo prestó bastante atención al
do nes espirituales. Sobre profecía se dice: «é'Tiene alguien un Espíritu Santo . No obstante, «si bien la mayoría de los sistemas
don profético ? Compártalo sin dudar lo-es También hay indi- gnósticos asignaron impor tancia a la obra del Espíritu, tanto
caciones de la práctica de glosolalia en las varias sectas gnósti- en el bautismo como en la vida, su concepto de la vida espiritual
cas, y hay documentos que apare ntemente la atestiguan.? los llevó a buscar la esfera de sus op eraciones en el intelecto
En algunos documentos considerados gnósticos se en- más bien que en la natu raleza moral del ho mbre. Por esta razón
cuent ran declaraciones en relación con la obra del Espíritu el tono total de la enseñanza gnóstica sobre el Espíritu difiere
Santo, que no están lejos de la ortod oxia. En lo que se conoce ampliamente de la de los cristianos católicos en el segundo y
como las Homilías y los Reconocimientos clementinas se afirma tercer siglos».14
Es inter esante notar ciertas tendencia s al eliti smo gnós-
tico en algunos grupos pentecostales y carismáticos actuales.
Es decir, el concepto de que por el "bautismo del Espíritu
6. Burgess, Ancient Christian Traditions, 40 .
7. LA int erpretación del conocimiento, 11.1.15-17, en James M. Robin-
son, ed., The N ag Hammadi Library, Harper & Row, Nueva York,
1981, 432-433. 10. Homillas, 3. 14.
8. lbid. 11. Reconocim ientos, 2.21.
9. Véase, íbid.; 3.2.42, 43-44, 66, en Alexander Bchlig y Prederik Wisse, 12. Véase, Carl Schmidt, ed., Pistis sophia, E.J. Brill, Leiden, 1978; y J.H.
eds., Nag Hammadi Cadices lll, 2 and N , 2: The Cospel of the Petermann, Pístis Sophia, Berlín, 1851, 55.
Egyptians, Nag Hamm adi Srudies 4, E.J. Brill, Leiden, 1975, 196-197, 13. Véase, Carl Schmidt, ed., Koptisch-gnostische &hriften, ces, Berlín,
204. Véase también Charles W. Hedr ick, «Christian Motifs in the 1905,195.
Cospel of the Egyptians,., No llU m Testamentum 23 (1981): 251-252. 14. Swere, The H oly Spírít in the Ancien t Church, 66.
124 LA ACCIÓN DEL ESpíRITU SAmD EN LA HISTOIUA H ETERODOXIA y DISIDENCIA 125

Santo »,15 han sido «iniciados» a un ti po de vida cristia na criadas, y vestidas con elegancia, y de gra n riqueza, a quienes
superior e introducidos a una dimensión más profunda de la él buscaba frecuentemente para arr astrarlas tras él » , 18 Casos
fe que los demás cristianos. Algunos consideran que ellos son como estos sirvieron para desacreditar manifestacio nes legíti-
los verdaderos creyentes espiri tuales (eneum áricos»), si bien no mas del po der del Espíritu Santo. «Uno puede suponer», seña la
niegan que otros cristianos ( éde segunda clase?) puedan ser Burgess, «que tambi én resultaron en un creciente temor a lo
salvos (esfquicos»). Para creyentes evangélicos fuera del perite- novedoso y en una at mósfera menos receptiva hacia aquellos
cosralismo y del movimiento carismático , esta actitud ha sido que decían caminar en el Espíritu y ejercer sus dones».19
más irritante que su emocionalismo o ent usiasmo religioso . Dentro del gnost icismo puede incorporarse a Marción (m.
Sin embar go, convi ene tener en cuenta que hay una dife- 160). Natural de Sfnope, en el Po nto, su pad re fue ob ispo y él
rencia entre la act itud carismátic a y la gnós tica, ya que los mismo hizo una gran fortu na como ar mador de bar cos. Fue a
primero s ense ñan qu e el bautismo del Espíritu Santo -al igual Roma hacia el año 140, durante el reinado de Anto nino Pío,
qu e la salvación- es accesible a todos. Además, las sectas y al principio se ligó a la comunidad cr istiana. Pero muy pronto
gnósticas no pon ían mucho énfasis en la glosolal ia, si bien sus ideas suscitaron oposición, al puma que en el 144 fue
usaba n fórmulas de tip o mágico asociadas a la misma.te Los exco mulgado. A diferencia de otros gnósticos, que fundaron
gnósticos jamás consideraron a las lenguas como una señal o escuelas, Marcín constituyó su propia iglesia, con una jerar quía
evidencia de la admi sión a un círculo de iniciados. Pero en el de obispos, presbíteros y diáconos. La litu rgia era muy seme-
pentecostalismo hay casos en que la gloso lalia es tenida como jante a las de la iglesia en Roma, con lo cual logró muchos
rito o exper iencia de iniciació n.I? segu idores.
Ma yormente, lo qu e pro vocó la reacción de muchos No obstante, Marción puso a un lado al Espír itu Santo
polem istas cr istianos co ntra los gnóstico s fue el abuso de los dent ro de su sistema de creencias. Con ello, Marción rechazó
dones espirituales, y no ta nto su ejercicio. Ireneo describ e a un como válida y necesa ria toda acción o manifestación del Espí-
seguid or de Valentino, de nombre Ma rcos, como un charlatán ritu . Tertuliano lo ataca por su rechazo del don de profecía, lo
que se autoproclamaba profeta y decía qu e era capaz de cual, segú n él, significaba apagar al Espírit u.2o En otro pasaje,
concede r a orros el don de profecía. Con su palabrería, «se lo desafía a demostra r la validez de sus enseñanzas mostr ando
dedi caba especialmente a las mujeres, y aqu ellas que eran bien cuáles son los carismas qu e él y sus seguido res tienen. Y agrega:
«Aho ra, tod as estas señales (de don es espiritu ales) se está n
manifestando de mi lado sin ninguna dificultad, y co ncuer dan,
15. En este libro se usa la expresión «baut ismo del Espíritu Santo- (y no también, con las reglas, y las dispensacion es y las instrucciones
"con" o «en» como co rrespo nde bíblicamente), porqu e es la más común del Cread or », 21 En definitiva, pa rece evidente «que el desafío
en los medios penrecostales-carisrn áncos. de Marción a la iglesia institu cional resultó en un test imo nio
16. Hinson , .A Beief H istory of C losolaha-, 55.
17. D.L Gelp i dice qu e el gnosticismo es un fenómeno que se presenta una
claro del funcionamiento co ntinuado del Espíritu a través de
y otra vez en la escena religiosa. Véase Donald L Gelpi, Pentecostalismr
A Theofogical Viewpoint Paulist Press, Nueva York, 1971, 200 . Por su
part e, M ichael Harper, un líder carismático británico, adviene al 18. Ireneo, Contra herejias, 1.13.1-3.
movimient o contra el peligro de caer en el gnosticismo. Véase M ichael 19. Burgess, Ancient Christian Traditions, 44.
Harper, ..Are You a Gno snc j- Lagos Joumal 40, Mayo-j unio 1972: 20. Tertu liano, Contra Marción, 5.15.
42-43 . 21. lbid., 5.8.
126 LA ACCIÓN DEL EsrlRJTU SANTO EN Ur.. HISTO RIA H ETERODOXIA y DISIDENCIA 127

sus don es hacia fines del segundo siglo y comi enzos del rerce- que se trata de comunida des valentinas y no de la iglesia
ro .... 22 caeollca.zs Sea co mo fuere. e! testimoni o de Teod oro es evi ~
Otro caso interesante es el de Teod oto (m. ca. 200) , un de ncia de que las seña les de! Espíritu , y los dones de profecía
miembro de la rama ori enta l del valentinismo. Valentino (m. y san idades estaban en operación en las comunidades valenti-
160) fue un gnóstico muy influyente, que enseñó en Roma ca. nas orientales en la segunda mitad del segundo siglo. Es
136-ca. 160 . Sabemos de Teodoto a través de Clemente de probable que en algunas partes, e! ejercicio de los don es
Alejand ría, que escribió co ntra él y los valentinos . En los espir itu ales por parte de cristianos hete rodoxos o marginales
Stromata de Clemente hay, a modo de apéndice, algunas citas haya movido a aq uellos más ligados al cristianis mo histórico o
de escritos de Teod ot o, qu e tratan de los misterios del bautis- cató lico a un cierro rechazo de los mismos, o por lo menos , a
mo, de la euca ristía del pan y del agua, y de la unción, co mo una cautela vigilante respecto de su promoción y ejercicio
medios pa ra libra rno s de la dominación del po de r del malig- pleno en las iglesias.
00. 23
En un pasaje inreresanre atribuido a Teodoto, leemos lo
Montano y los m o n tanistas
siguiente: ..Los valent inos dicen que el Espíritu excelente que
cada uno de los profetas tenía pata su ministe rio fue de rramado En Montano y los montanistas encontramos uno de los
sobre todos aqu ellos de la Iglesia. Por lo ranro, las seña les de! casos más interesantes para nuestro estudio. El montanismo es
Espíritu. sanidades y profec ías, están siendo llevadas a cabo po r un segundo movimiento de la iglesia primitiva en e! que se
la Iglesia_.2-4 Aparentemente, Te od oro está diciend o aquí que atestiguan manifestaciones de carácte r carismático. Este movi -
e! Espíritu Santo que inspi ró a los profetas del Antiguo Tes ta- miento puede ser conside rado como un precursor primitivo
me nto es el mismo que en sus día s se estaba derramando sobre de! penrecostalismo actual. al menos en algunos aspectos,
la Iglesia. Así lo interpreta Kydd, quien señala: ..A partir del como su énfasis en la presencia activa del Espíritu Santo en la
hecho de qu e profecía y sanida des to davía se enco nt raban en iglesia viviente . Apareció en Frigia alrededo r del año 160,
la iglesia, cosas estas que habían cara cterizado los ministerios cuando Montan o (ro. ca. 179) y dos profetisas, Priscila y M axi-
de los pro fetas. Teo doro puede estar arguyendo qu e era el milia , protesta ron co nt ra e! formalismo y laxitud creciente de
mism o Espíritu el que estaba detrás de estas cosas en ambas la Iglesia, la declinación de los dones car ismát icos, la creciente
eras_. 25 clerical izaci ón del ministerio, y la pér dida de la ex pectativa por
Así, pue s. según e! gnóstico Teodo rc, había una suerte de la Segunda Ven ida de Cristo. Debe tene rse en cuenta que
co nt inuidad entre el minister io carismático de los profetas de Mo ntano y su movimiento nos son conoc idos exclusivam ente
la antigüedad y los ministerios carismáticos de la iglesia de sus a trav és de fragmentos en escritos ami-montanistas, y por unos
días. POt cierto, en las referen cias de Teodoro, la iglesia no es poco s dichos de Montano y sus primeros seguido res registra.
otra cosa qu e la ..asamblea de los elegido s», lo cual presupone do s por polemis tas católicos.
Prob ablemente el primero en condenar al mont ani smo
haya sido el obispo Eleuterio (174·1 89) . Eusebio afirma qu e
22. Burgess, Am:ient Christian Traditions, 46.
23. Quasren, Patro/ogfa, 1:254.
24. Clemente de Roma, Excerpta ex Theodoto, 24.1. 26. F.M .M. Sagnard, La gnose vaientinienne et le témoignage de St. l renee
2$. Kydd, Chansmatic Gifts in tbe E,arfy Church, 50. Librairie Philosophique J. Vrin, París, 1947,302·303. '
128 LA ACCiÓN DEL Es píRITU SANTO EN LA HISTO RIA HETERODOXIA y DISIDENCIA 129

allá por el año 177 Ó 17 8, este obispo de Roma recib ió a Ireneo, profetas. Pero otros imaginándose poseídos del Espíritu
quien le entregó dos cartas sobre el mo nta nismo. La primera Santo y de un don profético, se exaltaro n y se engriero n no
era de la comuniad cristiana de Lyon; la segunda, de los poco; y olvidando la distinción del Señor , desafiaro n al
mártires de Lyc n. Pa rece qu e am bas cartas abo gaba n po r que espíritu loco , insidioso y seductor, y fueron engañados y
los mo nta nistas fue ran tratados con más consideraci ón.s? No seducidos por él. Como consecuencia de esto, él ya no pudo
obstante, Eleurerio lanzó en co ntra de ellos una declaración ser mantenido bajo control, como para mantenerlo en
escrita, apa ren remenre muy viru lenta . silencio... Y él además entu siasmó a dos mujeres y las lleno
Otro opositor del montan ismo fue el octavo obispo de con el espíritu falso, de modo que ellas hablaro n salvaje,
Antioquía , Serapi6 n. Su episcopado coincide, más o menos, irraciona l y extrañamente, como Montano mísmo.zs
con el reinad o de Seprimio Seve ro. Su ca rta a Poncic y a Ca rtee
trata del montan ismo, y afirma qu e - la llamada nu eva profecía OtrOoposi to r (anónimo) del montanismo cita a M ildades
de este o rden falso es abominada en [Oda la cristiandad, en el (m. 193), qu e se refiere a su vez a un profeta montanista
mundo ente ro ...2 8 La declaración es algo exagerada, pero llamado Alciblades, señalando que ..un profeta no debe hablar
testifica de la actitud hostil del cristianismo en proceso de en éxtasis», corno apare ntemente lo hada) O Es int eresante
institucionalización co nt ra el movimiento montanista. notar que esta es la prim era denuncia conoci da en contra de la
Q uizás nadie fue más adverso al mo ntanismo que el profecía extática. Epifanio de Salamina (ca. 3 15 -403) acusa a
influyente Eusebio de Cesárea, quien presenta un a evaluación Mo nta no de pretender haber recibid o revelaciones nuevas del
muy negativa de M on tano en su H istoria eclesiástica: Espí ritu , superiores a las que la iglesia católica ya po seta y qu e
estaban registradas en las Escriruras. Asterio Urbano , lo descri-
Un convertido reciente, llamado Montano, debido a su be corn o alguie n que ten ía una excesiva lujuria d e alm a y qu e
inagotable deseo de liderazgo, le dio oportu nidad al adver- había abandonado la fe a fin de prostitu irse con el error.tt
sario en su contra. Y se puso de su lado, y estando repen- Algu nos crfricos del montan ismo levantaban acusaciones,
tina mente en una especie de frenesí y éxtasis, deliró y aparentement e falsas, con el fin de descalificar a sus líderes y
comenzó a musitar y decir cosas extrañas, profetizando de al movimiento. Tal es el caso de Apolonio, obispo de Asia, a
man era contraria a la costumbre constante de la iglesia quien se refiere Jerónimo, en estos términos:
transmitida desde el co mienzo por la tradición. Algunos de
los que escucharon sus declaraciones espúreas al tiempo Apolon io, hombre de muchísimo talento, escribió contra
que estaban indignados, y lo reprendían como a alguien Montano, Prisca y Maximila una obra notable y extensa.
que estaba poseído, y que estaba bajo el co ntrol de un En ella dice que Montano y sus insensatas profetisas mu-
demon io, y que era guiado por un espíritu engañoso, y rieron ahorcados, y muchas otras cosas, entre las cuales hay
estaba desviando a la multitud , y le pro hibieron hablar, lo siguiente sobre Prisca y Max imila: ..Si niegan que han
recordando la distinción hecha por el Señor y su adver- recibido regalos, que confiesen que los que los reciben no
tencia de guardarse vigilantes contra la venida de falsos

29. Ibid., 5.16.11.


21. Eusebio de Cesárea, H istoria edesiJstica, 5.3.4, 30. Citado por Eusebio en Ibid., 5.17.1.
28. Ibid., 5.19.2. 31. Asrerio Urbano, Tres libros contra los montanistas, 2.
130 LA ACCIÓ N DEL Es rl RlTIl SANTO EN LA HISTO RIA H ETERODOXIA y DISIDENCIA 131

son profetas, y yo produ ciré un millar de testigos que No obstante, la oposición no fue tanto contra el ejercicio
probarán qu e ellas recib ieron, en efecto, donativos, porque del don de profecía, como a la manera en que los montanistas
es ciertamente por ot ros frutos que demuestran ser profetas lo ejercían. Eusebio cita a un escritor anti-montanis ta, que
los q ue 10son de verdad. Dime, étiñe un profeta su cabello? llama la atención a la manera antinatural en que Montano
¿Mancha un profeta sus párpados con antimonio? ¿Se profetizaba, dejánd ose llevar por un éxtasis frenético, mientr as
adorna un profeta co n ricas vestiduras y piedras preciosas? pronunciaba palabras ininteligibles, más como si fuese un
éj uega un profeta a dados y a tablillas ? ¿Acepta la usura? energúmeno que como un verdadero profeta. De igual modo,
Qu e respondan ellas si estas cosas están permitidas o no, sus seguidoras profetizaban y hacían predicciones sobre e!
que mi tarea será demostrar qu e ellas las hacen ".32 fururo.s?
Por otro lado. en las fuentes anti-mo nranisras hay confu-
Es probable que Tertuliano haya escrito un séptimo libro sión en cuanto al lugar de la profecía y ot ras declaraciones
para responder a estas acusaciones falsas, mientras que otros exr áticas ent re los seguidores de la Nueva Profecía. De un lado
escritos suyosque también se han perdido, trataban de los dones se los acusa de practicar estos dones, y del otro. se los acusa
de profecía y el éxtasis que caracterizaba a los montanistas.U también de querer su terminación o consumación. Según As-
El montanismo enfatizaba especialmente el don de profe- terio Urbano : «El apóstol [Pablo] considera que el don de
cía. Montano se creía un instrume nto especial del Paradeta, profecía debería permanecer en toda la Iglesia hasta el tiemp o
que daba comienzo a una nueva dispensación del Espíritu del advenimiento final. Pero ellos no son capaces de mostrar
media nte sus don es proférlcos.a- Él y sus seguidores afirmaban
el don como estando en posesión de ellos incluso al tiempo
que Dios hablaba a través de ellos y se consideraban receptácu-
presente. qu e es apenas e! año décimo cuarto después de la
los vivientes del Espíritu Santo , e incluso aparentement e su
muerte de Max imilia».38
encar nación.as De allí que el do n de profecía fuese el más
enfatizado po r los montanistas, quienes se llamaban a sí mis- Por su lado, Ireneo señala que los montanistas rechazaban
el don de profecía. Ellos «desprecian e! do n del Espíritu»,
ma s «la nueva profecía-cae Según ellos, Dios hablaba a la Iglesia
a través de profetas y profetizas inspirados, cuya autor idad indica Ireneo, porque se mantienen alejados de la Iglesia, y no
debía ser seguida en lugar de la de los obispos, que carecían de aceptan el don de profecía según es ejercido en la iglesia
pod er. Quizás este ejercicio característico de! pro fetismo ins· católica. En definitiva, con su actitud, terminan por liquidar y
piracion ista es lo que provocó las mayores críticas por parte quitar el don de la lglesia.t? Según Burgess:
del cristianismo católico tradicional. Muchos obispos de Asia
Menor se opus ieron al movimiento, y algo similar ocurrió en Bien puede ser que Asterio Urbano perciba una declinación
Roma cuando se extendió allí. en los carismas entre los montanistas tardíos y que Ireneo
esté rea ccionando contra el rechazo mo nta nista de lo qu e
ellos percibían como una pro fecía "falsa» en la iglesia
32. Jerónimo, De vms illustribus, 40 . católica. Qu izás los montanistas inicialmente vieron a las
33. Quasten, Patrología, 1:596.
34. Heinz Kraft, ..Die altkirchliche Prophetie und die Entstehung des
Montanismus-, Theologisches Zeit schrift 11 (1955): 249-271, 37. Eusebio, Hi storia eclesiástica, 5. 16.
35. Labriolle, LA crise montan iste, 54 1. 38. Asterio Urbano, Tres libros contra los montanistas, 10.
36. íbid. 39. lrenec , Contra bereitas, 3. 11.9.
132 LA ACCIÓN DEL EspfRITU SANTO EN LA HI STO RIA HETERODOXIA y DISIDENCIA 133

pro fecías de Mo ntano y sus sacer dotisas como finales y solo extraña. y co nside rada co mo impropia pata ser expresada en
después de algunas décadas intentaron imitar a sus funda- público. La palab ra griega que se utiliza para describir el hab la
dores... No obstant e, Asterio Urbano, Ireneo y Eusebio de estos profetas en el tercer pasaje (tr aducida po r mí como
concuerdan en que la iglesia tro ncal de fines del segundo ..lenguaraces») es ametrcph ónous. El vocablo puede traducirse
siglo y principios del tercero ten ía un ente ndi miento claro de varias maner as, de modo de calificar a estos profetas co mo
de que el don de pro fecía iba a continuar hasta la «venida locuaces, de lengua irr efrenable, de un hablar incansable y
final», la parousía. Además, no parece pro bab le que los largo, o de hablar mucho y co n frecuencia.e't Sin emba rgo, es
mont an istas hayan estado dispuestos negativament e hacia muy probable que la expresión describa a profetas que co mu-
la profecía, dado que fue su ejercicio del don profético lo nicaban sus mensajes mediante glosolalia.O
que suscitó la cont roversia. Bien puede ser que ellos reac- Ade más. los montanistas eran acusados por las manife sta-
cionaron contra pro fetas fuera de su movimient o, especial- ciones de desborde que d istinguían a sus cultos: sobresaltos
mente si tales individuos respondían negativamen te al mon- convulsivos, gritos, enajenación del juicio, caídas, pérdida de
tan ismo en el proceso.e o contro l corporal. etc. También criticaban, no sin bastantes
prejuicios e intencion alidad, su calidad de vida, el espíritu
La glosolalia ta mbién estaba pre sente en el montanismo, aparentemente interesado de los nuevos profetas, y su inspira-
y a los más conservadores su práctica pública les parecía cionismo. No obstante, M ontano exho rtaba a las iglesias a usar
escandalosa. Ha y tres pasajes en la acusación de Apoli nario los dones carismático s y a vivir un estilo de vida ascético. Su
contra el montanismo. según Eusebio. en los que parece des- mensaje era : «T ienen la obligación de acoger los carismas- e-s
cribirse el ejercicio de algún don de revelació n a través de Estas vivencias espirituales eran acompañadas de un fuerte
lenguas espirituales. Un pasaje dice que Montan o «deliró y énfasis sobre la ética personal y co lectiva. Los montanistas
comenzó a musitar y decir cosas exrrañas -r'! preconizaban un ascetismo estricto y ayun aban mucho.
Otr o señala que Priscila y Maximilia «hablaron salvaje, Prob ablemente, mucho más que el ejercicio del don pro -
irr acional y extrañamente. como Montano mismo ».42 Y aun fético, la glosolalia y sus posibles excesos, lo que realmente
otro d ice: «Ellos nos llamaron "asesinos de profetas" po rque exasperaba del montanismo a la iglesia católica era la severidad
nosotros no recibiríamo s a sus pro fetas lenguaracesc-u Nótese de su ascetismo y su disciplina interna. Lo que era verdade ra-
que en los tres casos se trata de un habla inusual. incomprensible, mente nuevo y escandaloso de la Nu eva Profecía era que su
ascetismo riguroso era el resultado de una serie de profecías,
que ellos conside raban como una revelació n final de la verdad
40. Burgess, Ancient Christian Traditions, 50-5 1. Para una opin ión diver-
gente, véase, David F. Wright, ..Why Were the Mont anists Co ndem-
ned?- Themelios 2 (l976): 15-22. Según este autor, el problema fue 44. Este es el único lugar en tod a la literatu ra griega en que se ut iliza este
que los montanistas insistía n en ejercer los carismas en un tiempo tér mino, lo cual hace más difícil su traducció n precisa. Véase G.W.H.
cuando la cristiandad estaba pon iendo el énfasis sobre el oficio y el Lampe, A Patristie Greek Lexicon, At the Clarendo n Press, Oxfor d,
or de n en la Iglesia. Una cristiandad institucio nalizada seguramente se 196 1, 88.
iba a oponer a toda for ma de cristianismo carismático. 45. Véase Latourette, Histon'a del cristianismo, 1:173; Labriolle, La crise
41. Eusebio, Historia eclesidstica, 5.16. mo ntaniste, 17 1; y Emile Lombard, ..Le mon ranisme er l'in spir atio n»,
42. Ibid. Revue de Théologie et de Philosophie 3 (19 15): 299.
43. Ibid. 46. Labriolle, La crise montaniste, 136.
134 LA ACCiÓN DEL ESpíRITU SANTO EN lJ\ HISTO RIA H ETERODOXIA y DISIDENCIA 135

de Dios a la humanidad. Esta revelación nueva parecía superar Es difícil evaluar el montani smo po rqu e no hay mucha
en autori dad incluso las enseñanzas de Jesús y los após toles. A info rmación dl sponible.s? El movimiento original en Frigia
esto se sumó un fuert e sen tido de exclusividad, que soste nía aparentement e se desarrolló casi al bo rde de la ortodoxia. A
que solo la «iglesia del Espíritu » po día perd onar pecados, y no mi juicio pe rso nal, el montanismo fue más un mov im iento
la «iglesia que co nsiste de un número de obispos-e'? disidente qu e una expresión de heterodoxia. Según sus opcsi-
El montanismo era también ap oca líptico, y enseñaba que rores y críticos, este montanismo frigio era sabeliano. La
el m ilenio de Cristo era inminent e. La inminenc ia escato lógica declaración de Maximilia, según el registro de Euse bio, «Yo
y el descenso de la N ueva Jerusalén celestial en Pepu za (Frig ia) soy palabra y espíritu y poder.. suena a sabelia nismo.Jv N o
eran parte de su prédica. Por este fuerte énfasis escato lógico, obstante, el ascet ismo mo nta nista atrajo a un ho mbre de la talla
du rante un tiem po prohibieron los casamientos. El rigo rismo de Tertul iano de Cartago (155·220), allá po r el año 202 .
Tertuliano fue un declar ado opositor del sabelianis mo, al qu e
ético. junto con el profetismo, la contestación secta ria, y el
ligó con el rechazo de la N ueva Profecía.J! Este padre de la
énfasis escat ológico resultaron element os mu y atractivos para
iglesia en el norte de África ingresó al movi miento dos gene-
muc hos cr istia nos sinceros . Pero, po r otrO lado, este mismo raciones despu és de su fundació n, y luego de una seria consi-
ascetismo apocalíptico, unido a un fuerte exclusivismo, y a la deración del mismo . Tertu liano fue el más gra nde de los padres
tend encia a atacar sin misericordia al tradiciona lismo, y al occidentales y consideraba que el montanismo era orto doxo
cr eciente clericalismo y secularismo de la iglesia tron cal, hicie- en su doctrina y práctica ascética. Como ya se indicó, en su
ron del montanismo un blanco inevitabl e para las crít icas más controversia contra Mar ción (que era gnóstico), Te rtuliano lo
severas y el rechazo más categórico. desafió a presentar evidencias de los dones del Espíritu ent re
No ob stante, el montani smo tu vo una gra n difusión e sus segu ldo res.t z
influencia, no po rque int ro ducía algo nuevo a la vida y prá ctica No es fácil evaluar la natu raleza real del mo ntanismo
de la iglesia, sino porqu e enfa tizaba o reavivaba algo que ya como movimiento espiritual. Las op iniones var ían. ss Segú n
existía. Aun sus cr íticos más encarni zados, como Eusebio,
debían admitir:
O. Para un análisis más actual en la investigación sobre el montanismo,
Fue en este mismo tiempo, en Frigia, que M ontano , Alci- véase: F. Blanchetiere, -Le montanisme originei-, Rellue des Sciences
bíad es, T eodoto y sus seg uido res co me nza ro n a ad quirir
Refigieuses 52 (1978): 118-134 y 53 (1979): 1-22. Véase también
Bernard L Bresscn , Studies in Ecstasy, Vantage Press, Nueva York,
un a repu tació n muy difun dida como profetas ; pu esto q ue 1966, 27-30¡ Cecil M. Robeck, Jr., -Montamsm: A Problematic Spirit
nu merosas otras manifestaciones d e los dones mi lagro so s Movement-, Paracfete 15, Summer 1981, 24·29.
d e Dio s, qu e todavía oc u rr fan en d iversas iglesias, llevó a so. Eusebio de Cesá rea, Historia eclesiástica, 5.16.
mucho s a cree r que estos ho mb res también eran proferas.ea SI. Tertu liano, Contra Praxeas, 1.
52. Véase Tertul iano, Contra Marci6n, 5.8.
B. Hay autores que descalifican totalmente al montan ismo. Knox, Enthu-
siasm, 25-4 9, lo considera como un craso ejemplo de fanatismo reli-
47. Tertuliano, Sobre la modestia, 21. gioso. O tros auto res lo exaltan en demasía, especialmente algunos
48. Eusebio, Historia eclesiástica, 5.3. Véase RonaldA . Knox,Enthusiasm: escritores pentecostales y carismáticos, sin tomar en cuenta críticamen-
A Chapter in the History 01 Re/igion-With Specia/ Reference to the te sus enseñanzas y su lugar en la iglesia antigua. Véase M.F.C.
Seventeenth and Eighteenth Centuries At the Clarendo n Press, Oxford, Parmentier, -Montanisme' als etiket voor religieus eruhousiasme-,
1959, 25-49. Netherlands Theofogisch Tiidschtitt: 32 (1978): 310-3 17.
136 LAACCIÓN DEL EsplRfTU SANrD EN L\ HISTORlA,
HETERODOXIA y DISIDENCIA 137
algunos, se trató del resurgimiento de una trad ición mo ribun da
la tradici ón mayo r ha levantado su voz de crítica y rec hazo , y
de profecía cristiana fren te a la creciente insti tucionalización
se ha manifesta do con oposici6n y repudio, sin evalua r sufi-
de la iglesia. Burgess señala:
cientemente la acció n del Espíri tu Santo a lo lar go de la
historia.
Cuando la profecía estaba en la cúspide no había una
organizació n fija y rígida en la Iglesia. Para el tercer siglo,
Ju an Wesley, el funda do r del metodismo, con sider aba a
la vida espiritual libre, espontánea e impetuosa estaba Mon tano como uno de los mejores cristianos de su tiempo y a
dando lugar a una iglesia que rápidamente estaba desarr o- los montanistas como creyentes auténticos y brblíccs.te El
llando una regla de fe fija y un cano n de oráculos divinos desarro llo del montanismo es un testi monio incuestion able de
cerrado, gobernada por un orden de obispos establecidos que un buen nú mero de carismas (do nes de gracia), según se
por una regla de sucesión exter na. El profeta que goberna- describen en 1 Corintios 12-14, todavía se ejercían en el tercer
ha por revelación estaba dando lugar al obispo que gober- siglo. Co mo vimos, Ter tuliano los cons ideraba como evidencia
naba con autori dad. El ejercicio libre y espo ntáneo de los válida y pru eba de autenticidad de su propia fe en o posici6n
carismas esta ba siendo reemplazado po r un sistema infle- al hereje Marcién. Sin em bargo, a partir de aquí, los dones de
xible de forma y ritual. En este medio ambiente era impo- profecía y lenguas apa rentemente co me nzaro n a decl inar. Ter-
sible para la Nue va Pro fecía existir lado a lado con el nuevo ruliano ejerció una gran influencia sobre el montanismo, qu e
orden sin expe rimen tar gran tensió n.H en el norte de África llegó a con oce rse como «terrulianis mo » ,
Con Tertu liano, el montanismo perdió su carácter sectario . Por
Según otros, el montanismo no fue más qu e una instancia otro lado, el énfasis cayó sobre el ascetismo más qu e sobre el
temprana de los movimientos apocalípticos que han emergido carácter extá tico. La teología de Tertulian o era o rtodoxa, y
de tiem po en tiempo en la historia cristiana.Jt La histo ria del esto hizo más potable su montanismo . Pero él creía que la
cristianismo está llena del test imonio de voces proféticas, que comunicación directa de Dios con los hombres no había ter-
se han pronunciad o en los círculos de la trad ición menor de la minado con la era de los apósto les y que su revelaci6n cont i-
iglesia, y muchas veces en las expresiones marginales o disiden- nuaba.
tes de la fe cristiana. El celo reformador y apocal íptico de la El montanismo fue un avivami ento tem prano, que exhor-
Nueva Profecía, basado en la convicci6n del inminente e tó a la Iglesia a un mayor celo y co nsagració n. Pero, en raz6n
inmediato retorno de Cristo, la consumación de los tiempos y de que Montan o y sus profeti sas aparentemente habían caíd o
la con siguiente demanda de santidad de vida ha encontrado en algunos excesos espirituales y no permitieron que los dones
eco en much os movimientos cristian os, co mo los no vacianos, de profecía fuesen evaluados por Otros (d . 1 Co rintios 14.29),
don at istas, valdenses, anabauri sras, metodi stas y, más reciente- los dones más sob rena tu rales caye ron en descrédito . Segú n
mente, en los mov imien tos de santi dad, pe ntecostal, caris má- Ireneo de Lyon, el error de muchos en sus propios días fue que,
tico y de ren ovación. En estos casos también, la oposición de en su rechazo de los excesos montanistas, ter minar on por
repudiar el Evangelio de Juan, que era el preferido de ellos y
todo ejercicio legítimo del don de profecía.
H . Burgess, Aná tnr Christian Tradit íons, 52.
H. Robin Lane Fox, Pagans and Christians, Inglaterra, Harmondsworth,
1988,404-410.
S6. WiIliams y Waldvogel, «A History 01 Speaking in To ngues-, 80.
138 L\ ACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN lA HISTORIA H ETERODOXIA y DISIDENCIA 139

O tros, a fin de pod er a nular el do n del Espíritu, que en los las manifestaciones carismáticas fueron co nsideradas com o casi
últimos tiempos ha sido, por el buen plac er del Padre, herejías. La Iglesia jamás recuperó realmente su balance des-
derramado sobre la raza hum ana, no admiten ese aspecto pués que rechazó al rnontanismo - vt t En los siglos que siguie-
[de la dispensación evangélica) que presenta el Evangelio ron, cualqu ier avivamiento espiritual era desacred itado hacien -
de Juan, en el que el Señor prometió que Él enviaría al do refe rencia al antece dente histórico del montanismo. La
Parad ero; sino que de una vez dejan de lado tanto al iglesia establecida rechazó los fenómenos carismáticos por su
Evan gelio como al Espfritu proféríco.s? prejuicio anti-monranista, de la misma manera que siglos más
tarde rechazó el bautismo de creyentes por su prejuicio anti-
La lucha de la joven iglesia contra el gnostic ismo y otras anabautista.
herejías era cuestión de vida o muerte. Esta lucha, de algún Paul Tillich concuerda en evaluar la victo ria del cristianis-
modo, afectó también la actitud de la iglesia católica hacia mo cat ólico sobre el mon tanismo como una gra n pérdida para
cualquier forma de disidencia, en particular, el montanismo. la Iglesia:
En este confl icto. Tertuliano enseñ ó que solo la iglesia instiru-
cional tenfa el derecho y el poder de interpretar la Biblia. Pero La iglesia cristiana excluyó el montan ismo. Sin em bargo ,
esto abrió el camino para consagrar un grave error: la autori- su triunfo sob re ese movimiento tam bién significó un a
dad docente de la iglesia se co ncentró en el oficio episcopal. pérdida. Dicha pérdida se ve en cuatro aspectos: 1) El
El obispo fue con siderado com o el deposita rio de la sana canon tr iunfó sobre la posib ilidad de nuevas revelacion es.
doctrina apostólica y los creyente s perdieron su libre acceso al La sol ució n propuesta por el Cu arto Evangelio en el senti-
texto bíblico y a su interpretación bajo la guía del Espíritu do de qu e habrá visio nes nuevas, siempre por deba jo de la
Santo. Como señala Yves M.J. Ca ngar: «La Iglesia cató lica crítica del Cristo, se reduce en poder y en significa do. 2)
ten ía que rechazar la "nueva profecía" . Pero esto traía co nsigo Se con firmó la jerarquía tr adi cional contra el espíritu pro-
un peligro, el de concebir y edificar la vida de la Iglesia sin fético. Esto significó qu e el espíritu profético quedó casi
carismas y sin Espíritu Santo•. 58 Esto ocur rió especialmente excluido de la Iglesia organizada y tuvo que escapa r a
duran te la primera mitad del tercer siglo, gracias a las enseñan- mov imientos secta rios. 3) La escatología se hizo men os
zas de Cip riano de Cartago (m. 258 ). Según él, la esencia de la significa tiva de lo que había sido en la edad apostól ica. El
Iglesia estaba determinada por la jerarquía episcopal, y no por sistema eclesiástico adquirió mucho mayor importanci a. La
la vida y participación en el Espíritu Santo . Carisma y oficio expecta tiva del fin se redu jo a una advert encia a cada
eclesiástico se po larizaron deb ido a la lucha contra la herejía, individuo en el senti do de que se pre parara para su fin qu e
y la dimensió n carismática perd ió la partida en favor de la pod ía llegar en cualquier momento. La idea de un final de
estructu ra eclesiástica jerárquica. la histo ria no volvió a tener peso en la Iglesia despu és de
Según el teólogo cató lico romano Kilian McD onnell, el aquel momento. 4) Se perdió la disciplina estr icta de los
monta nismo sacó de quicio a la Iglesia: ..La Iglesia reaccionó monta nistas da ndo lugar a una laxi tud crecient e dentro de
al exceso (del montanismo) co n tal vigor extr emo, que rodas la Iglesia. En este aspecto, ta mbién sucedió algo qu e se ha

S7. lreneo, Contra here;fa5, 3.11.9. 59. Citado en Vinson Synan, ed., Aspect5 of Pel1teco5tal·Charismatic Or;·
n . Congar, El &pfritu Santo, 95. gil15, Lagos International, Plainfield, Nueva Jersey, 1975, 34.
140 LA ACCiÓN DEL EspiRITU SANTO EN LA HISTORIA

repetido con frecuencia en la historia de la Iglesia. Apare-


cen gru pos pequeños con una disciplina estricta; se los mira
con sospe cha; forman Iglesias más gran des; luego pierden
la disciplina original.60

l!no pod ría co~c1uir esta parte diciendo que cualquier


parecido con la realidad presente no es pura casualidad. No
obstante, a los propósitos de la tesis del presente libro, no
quedan ,dudas. de que en la segunda mirad del segundo siglo,
las manifestaciones del Espíritu Santo, el ejercicio de los dones
espirituales, y ot ras expresiones de carácter car ismático estaban
vigentes no solo en la cristiandad católica, sino también en
aquellas co munidades ligadas a la heterodoxia y especialmente
a la disidencia y el secrarismo cristiano de aquel ento nces.
OPOSICiÓN YfUENTES hPÓCRlfhS

[1 a mo ya hemos indicado, una buena cantidad de


material relacionado con las manifestacion es del
Espíritu San to no s vienen de auto res que se opu-
siero n encarn izadamenre a las mismas o no com-
prend iero n adecuad amente su significado. El investigado r
debe mirar por detr ás de la po lémica, el prejuicio, los precon-
cepros, y el calo r del debate para poder discernir objet ivamente
qué pensaban y had an aquellos que son señalado s como herejes
o fuera de la sana doctrina y práctica de la fe. Algo similar
ocur re co n las fuentes paganas o aquellas otras que fueron
estimadas co mo fuera de la co rriente literaria aprobada po r la
cristiandad católica. En el caso de la literatura cristiana apócri-
fa, conviene recordar que se trara de la «literatu ra popular
60. Paul T illich , Pensamiento cristiano y cult ura en occidente, vol. 1: De cristiana» de aquel entonces. Quizás no sea una fuent e primaria
los orfgenes a la Reforma, Editor ial la Auro ra, Buenos Aires 1976, de mucho valor, especialmente en relación con los após toles,
71-72 . ' pero sí lo es en cuan to a sus autores y lector es inmed iatos . En
142 LA ACCIÓN DEl EsrfRlTU SANTO EN LA HISrO RJA O POSICiÓN y FUENTES APÓCRIFAS 143

ta l sentido, es un material muy rico en cua nto al testi mon io de Algo similar ocurre con la literatura cristiana apócrifa. A
la obra del Espí ritu Santo en las iglesias) medida qu e se iban escrib iendo, editando y tr ansmitiendo los
La oposición más fuerte al cristianismo estuvo repre. escritos que más ta rde llegaron a co nstituir el canon de las
sentada por varios au tor es paganos, qu e conci bieron a la nueva escritu ras cristianas, se fue produciend o paralelamen te y con
fe como una supe rstición baja y propia de gente ignorante. En posteriorida d una cantida d co nsiderable de literatura. Este
el pensa miento de ellos, el cristia nismo era poco menos que material, al igual que los escritos canónicos, tenía el propósito
una exc recencia del juda fsmo, que ya de por sí era evaluado de de pr eservar la memo ria de los hech os, palabras y carácter de
manera negativa en el mundo greco-romano. Los ataques Jesús y los apóstoles. Muy pronto se vio que la trad ición oral
intelectuales a la fe de Cristo se multi plicaron, gene ralmente co rría el riesgo de perderse en razón de la expansión ex plosiva
exage rando algunas de sus ideas y prácticas, cuando no inven- del evangelio, o pod ía ser distorsionada por las nacientes
tando abusos y delitos morales. Los cristia nos del segundo y herejías o sincretismos que desde temprano ame nazaron la
tercer siglo se viero n some tidos a un juicio severo por pa rte de integridad de la fe cristiana.
quienes, llenos de prejuicios, los veían con extrañeza y an imo. No falta ro n auto res bien intencionados que quisier on
sidad . En parte, esta cierra cuota de rechazo resultaba de la agregar dramatismo o color a los relatos fundacionales del
igno rancia del verdade ro carácter del cristianismo y sus prác- cristianismo. Gran des lagunas de info rmación pa recían quedar
ticas, como también del temor que este inspiraba co n sus abiertas en los materiales que pasaron al canon neotestamen-
de man das rad icales y su actitud crítica hacia la cultura predo- rario, y algunos se sintieron en la obligación de llen arlas. Es así
minante. como co menzaron a apar ecer escritos que ofrecían detalles
A pesar de su carácter agresivo, denigratorio y con dena- sobre episodios no relatados en los evangelios canó nicos en
torio, los señalamientos de las fuente s paganas adversas con s- cua nto a la vida de Jesús o no co mentados en los Hechos d e
titu yen un testimonio ind irecto de la fe y las prácticas de los los Apóstoles en cuanto al ministerio de estos. «Apócrifo .. es
cristia nos pr imitivos. En estos testimonios hay bastante mate- transcripción de un adjetivo griego que significa «oculto .. o
rial par a analizar en relación co n las man ifestaciones del ..esco ndido», y se refiere a aque llos libros de tema y título
Espíritu Santo. Lamentablemente, solo unos pocos escritos de to mados del N uevo Testamento, pero que no han sido adm i-
estos aut ores pagan os han llegado hasta nosotros. A Otros los tidos en el canon bíblico. Estos mater iales son de origen
co noce mos mayo rmente a través de au to res crist ianos que cristiano, aunque no siempre en línea con el cristianismo
procuraron refutarlos. histó rico o tro ncal. La mayoría de ellos fueron escritos en
griego, y co mpre nde n los mismos géneros literarios del canon
neo testamenrar io: Evangelios, hechos, cartas y apocalipsis.
1. lamentablemente, los textos y los comentarios de esta literatu ra fueron Estos tex tos son de valor par a nuestra investigación, ya
trabajados por eruditos que desestimaron co mo ajenas al crist ianismo que ilustran gra nde mente el ambiente judeo-cristian c en que
ortodoxo toda manifestación de carácter carismático. Razón por la nacieron y, en algunos casos, co nfirma n la vigencia de las
cual, todo hecho sobrenatural fue ten ido como fantasioso, imaginario. manifestaciones del Espíritu Santo en las comunidades en las
y propio de la literatura apócr ifa, al margen de la ortodoxia. En su
mental idad raciona lista y gobernados por criterios cientificisras, estos
que eran lerdos y apreciados. De especial valo r testim oni al son
eruditos no pudieron valorar adecuada mente la riqueza testimonial de los Hechos apócrifos, que incluyen varias obras, como los
esta literatura en relación con la acción del Espíritu Santo en medio y Hechos de Pedro, Hechos de Pablo, Hechos de Pedro y Pablo,
a trav és de su pueblo. Hechos de Juan , Hechos de Andrés, Hechos de Tomás, Hechos
144 LA ACCiÓN DEL gselnrru SANTO EN u.. HISTO RIA OPOSICiÓN y fUENTES APÓCRIFAS 145

de Felipe, Hechos de Bernabé, y otros. Cada una de estas o bras escandalosos por los cuales acusar de superstición bar ata a los
trata de agregar detalles, especialmente fantasioso s y pintores, cristianos, estas manif estacion es debían esta r en vigenc ia en sus
cos, que pud iesen satisfacer la curiosidad y piedad populares días. Po r otro lado, si la religiosidad popular cristiana, ex pre-
en relación con la vida y ministerio de los apóstoles. Po; sada en sus elementos más fanta siosos y dramát icos co nside -
tratarse de obras destin ada s a satisfacer la fantas ía religiosa de raba a los dones del Espíritu y otras manifestacion es co mo
los creyentes, su confiabilida d como documentos históricos es parte de la vivencia de las comunidades cristianas a lo largo del
du dosa. Sin embargo, conviene tomar en cuenta la evaluación segundo siglo, estas experiencias no er an desconocidas por
de un gran erudito del Nuevo Testamento : ellas.

No obstante, a su mane ra, la Apócrifa del Nuevo Testa-


ment o consiste de docu mentos importantes. Es bien cieno
Celso (m. ca. 180)
qu e. com o fuentes histór icas de la edad apostólica carecen Quiene s levantaban calumnias y rumor es en contra de los
de valor. El valor per manente de este cuerpo de literatura cristianos, hablaban desde su ignorancia. A nivel popular se
está en otra dirección, es decir, en qu e re flejan las creencias inventaban muchas histo rias, con las que se acusaba a los
de sus autores y los gustos de sus prim eros lectores, qu e cristianos de ateísm o, incesto o canibalismo . Se decía que
encontraron beneficio tanto com o esparcimiento en relatos cuando se reunían para sus ágapes nocturnos, era solo par a
de este tipo . Esto es, la Apócri fa del Nu evo T estamento es participar de orgías y de todo tipo de perver sidad es ent re
impo rtante com o documentos históricos qu e nos dicen ..hermanos.. y ..hermanas.., lo cual era expresión de su práctica
mucho, no acerca de la edad co n la que ellos profesan del incesto . Cuando co mían, se decía, la carne y la sangre de
tratar, sino acerca de la edad qu e les dio a luz. Ellos la que participaban era la de un niño sacrificado ritualmente.
pretenden ser relatos con fiables de las palabras y accione s Estos rum or es estaban muy difundidos entre el populach o. Sin
de los após toles; en realida d ellos po nen de manifiesto , bajo embargo , con el tiempo, hubo gente bien ed ucad a que se
los nombres de los apóstoles, ciertos ideales de la vida ded icó a investigar seriamente al cristian ismo . Estos intelecrua-
cristiana y conceptos de la fe cristiana corrientes en el les leyeron los escritos sagrados de los cr istianos y averiguaron
segundo siglo y en los siglos que siguieron.z por sus prácticas reales. Fue así que levantaron preguntas
críticas junto con una fuerte refutación del cristianismo, utili-
En las páginas que siguen vamos a cons ide rar a uno de los zando los argumentos más sofisticados.
más encarnizados oponentes al cristianismo, a ot ro que fue un Uno de los hombres que más cuidadosamente llevó a cabo
cáustico sati rizante, y luego leeremos algunos textos seleccío- esta tarea de oponerse intelectualmente a la nueva religión , y
nadas de materiales apócrifos. En todos los casos, procurare- probablemente una de los primeros en hacerlo, fue Celso .
mos recuperar testimonios de op eracio nes sobrenatu rales del Algunas de sus objeciones han sobrevivido por siglos y todavía
Espíritu Santo . La idea es que, si los opositores del cristianismo se siguen planteando en nuestros días. Según él, la enca rnación
utilizaban las manifestaciones carismáticas como eleme ntos es imposible. Dios, qu e es perfecto y no cambia, no puede
rebajarse par a transformarse en un pequeño bebé. Además,
épo r qué la encarn ación ocur rió tan ta rde en la historia? En su
2. Bruce M. Merzger, An lnuoduction lo tbe Apocrypha, Oxford Univer- concepto, Jesús fue ta n solo un pobre hombre, incapa z de
siry Press, Nueva York, 1957, 263. mori r la mu ert e de un sabio, corno fue el caso de Sócrates. Sus
146 LAACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA O POSICIÓN y FUENTES APÓCRIFAS 147

enseñanzas no fuero n otra cosa que una pobre copia de las no saben de los castigos que les aguardan se arrepentirán y
enseñan zas más antiguas de Egipto y Grecia . La resurr ección clamarán en vano; mientras que a aquellos que me son
de su cuerpo no era otra cosa que una enorme mentira. fieles yo los preservaré eternamente".
Leyendo a Celso y sus objeciones al cristianismo, a través A estas promesas se agregan palabras extrañas, faná-
de las líneas de Orígenes, que le respondió varios años más ticas y tot almente ininteligibles, cuyo significado ningún
tarde (en el año 248), es posible di scernir su conocimiento de ser humano racional es capaz de determinar; porque son
que en ~u tiempo, en las co mu nidades cristianas que él analiza, tan oscuras que carecen de todo significado, pero ellos
las manifestaci ones del Espíritu Santo segu ían en vigencia. Para permiten a cualquier persona necia o imposto ra aplicarlas
un observado r tan puntilloso y crítico com o Celso, tales mani- para conformarse a sus propios propósiros.s
festaciones no d eben hab er pasado desape rcibidas. Seguramen-
te su ojo escudr iñador habr á observado con curiosidad y Como ya se indicó, Celso fue con toda probabilidad el
atención todo aquello qu e a su juicio fundamentaba su concep- auto r de la primera crítica pagan a contra el cristianismo de la
to de que el cristianismo era una vil superstición. que tenemos noticia. Probablemente su ataque haya estado
Es necesario recordar que Celso era un filósofo pagano dirigido contra justino Mártir. Su acusación principal co ntra
platóni co bastante ecléctico, y que su actitud era demostrar las los cristianos es que su actitud es sediciosa, y ter mina siendo
debilidades del cristianismo. Era un hombre bien educ ado, que una innovación y corrupción inaceptable respecto de la tradi -
investigó a fondo el cristianismo y lanzó un ataque sistemático ción religiosa ant igua. Su trabajo fue el resultado de una
contra la doctrina y la conducta de los cristian os. En su ob ra medulosa investigación, llevada a cabo en diverso s lugares,
Discurso verdadero, escrita en griego, Celso (citado y parafra- como Fenicia y Palestina. y con tod o el rigor posible. De hecho,
seado por Orígenes en casi la totalidad de su obra) mencio na en relación con el pasaje citado, según el co menta rio de
algo que bien pod ría tratarse del ejercicio de los dones del Orígenes, él afirma haber sido testigo pleno y personal de lo
Espíritu. Dice Celso: que relata. En su ataque, su estrategia es desacreditar al cristia-
nismo atacando sus raíces judías. Es decir, Celso qu iere demos-
Hay muchos, ... , que si bien no son nadie, con la facilidad trar que el cristianismo es falso, porque está fund ado en el
más grande y en la más mínima ocasión, tanto dentro como supuesto cumplimiento de las pr ofecías judías relativa s al
fuera de los templos, asumen los movimientos y gestos de Mesías, profecías estas que son absurdas, según él. No es válido
las personas inspiradas; mientras que otros lo hacen en que los cristianos fundame nten su preten sión de que Jesús es
ciudades o entre ejércitos, con el prop ósito de atraer la el Mesías, citando a los profetas del Antiguo Te stamento.
atención y provocar sorp resa. Estos están acostumbrados a Es en su argumento contra las profe cías del Antiguo
decir, cada uno por sí mismo: ..Yo soy Dios; yo soy el H ijo Te stamento, que Celso menciona la ridiculez de los profetas
de Dios; o, yo soy el Espíritu Divino; y yo he venido porque cristianos. Estos profetas están imitando un estilo pro fético
el mundo está pereciendo , y vosotros, oh hombres, estáis totalmente descalificado, según su criterio. Sea como fuere,
pereciendo por vuestras iniquidades. Pero yo quiero salva- parece evidente que Celso fue testigo del ejercicio del don
ros, y vosotros me veréis reto rnando nuevament e con profético en algunas co munidades cristia nas de sus d ías. Esto
poder celestial. Bendito es aquel que ahora me hace home-
naje. Sobre todos los demás yo haré caer fuego eterno,
tanto sobre regiones urbanas como rurales. Y aquellos que 3. Orígenes, ContraCe/so, 7.9.
148 LA ACCiÓN DEL EspfRITU SANTO EN LA HISTO RlA OP OSICIÓN y FUENTES APÓCRIFAS 149

es importante, ya que este brillante y crítico pensado r llegó a como arbitra ria al no poder ente nde r el discurso original. A su
conocer muy bien al cristianismo, las escritu ras del Antiguo parecer, esto dab a lugar a que cualquier «imposto r» o «enga-
Testamento y algunas escrituras crist ianas. No puede ha ber ñador» di era rienda suelta a su subjetivi dad e hiciera con las
dudas en cuan to a la objetivida d de su observación , si bien está palabras emitidas cualquier cosa qu e deseara para obtener «sus
equivoca do en su juicio. propios propósitos». La objec ión de Celso es la que cualquier
Celso int erp retó las palabras de los profe ta s como expre- persona inc rédu la o qu e desconoce los dones del Espíritu Santo
sando su pretensión de ser div inidades, sin ent en der un aspecto haría en una co ngregació n donde se ejercen los dones de
importante del lenguaje profético, cual es el uso de la primera profecía, lenguas e interpretación de lenguas. Desde ese ángu lo
persona: «Así dice el Señor: yo... » Es int er esante nota r que el de obse rvación, tales prácticas resultan expres ión de fanatismo
discurso de los profetas que él oyó es bien trinitari o: ..Yo soy cuando no de locu ra, co mo ya 10 advirtiera en sus días el
Dios», "yo soy el H ijo de Dios», "yo soy el Espíritu Divino». apósto l Pablo (1 Corintios 14 .23).
La palabra de juicio y el llam ad o al arrepentimiento es t ípico El testimo nio de Celso es important e, puesto qu e se trata
del me nsaje pro fético, al igual que la palab ra de esperanza para de la obse rvació n de un investigado r caut eloso. Y, según él,
aquellos qu e responden positivam ente al men saje. En línea con estos dones espiri tu ales estaban en pleno ejercicio, por lo
los pro fetas del viejo pacto, los profetas del nu evo pacto, bajo menos en Fenicia y Palestina. Co mo señala Hans Lierzmann:
la inspiración del Espíritu Sama, procl aman la misma palabra "Cuando Celso agrega que el discurso desbor daba en son idos
pro fética. Muy pro bablem ent e, entonces, Celso fue testigo del incomprensibles y locos, que no encerraban ningún significa-
ejercicio del do n profético manifestándose de la ma nera más do, y qu e, no obstante, era n exp uestos por un hombre qu e solo
legítima en algunas comunidades cristianas. po día haber sido un frau de, el caso era obviame nte un ejemplo
Otra cosa que llam a po derosa men te la atención en su de la gloso lalia ya co nocida co n la subsiguient e interpr eta-
testi moni o es la mención del carácter ext át ico del mini sterio ción»." Con esto , pode mos concluir co n Kydd qu e, «Celso sin
de estos profetas. Las expresiones que Celso ut iliza para carac- saberlo esraba dándonos algun a evidencia de la supervivencia
teriza r el discu rso profético y los co men ranos qu e hace de toda de los dones del Espíritu ent re los cristia nos en Palesrina en la
la exp erienc ia pa recen referirse al ejercicio del don de lenguas segunda mirad del segundo siglo».5
y probablemente del don de inte rp retación. Según él, las
palabras eran «extrañas» y uti lizand o voca blos propios de
«fanáticos», «to talment e ini nteligi bles », Evide nte ment e, no se Luciano (ca. 125-192)
trataba de idiomas en uso, ya que Celso hu biese podido Luciano fue un sofista y satirista griego, nacid o en Samo-
reco nocerlos, como tampoco era un discur so que siguiese un sata, a o rillas del río Eufrares. Era co noc ido en sus días con el
parrón racional {ecuyo significado ningú n ser humano racion al sobrenombre de "el blasfemador», 10 cua l descri be su acti tud
es cap az de determi nar»). Celso no pod ría haber hecho una hacia tod o lo qu e fuese religio so. En sus diálo gos afirma que
mejor descripci ón de «los diversos géneros de lenguas» que
menc ion a Pablo en 1 Corintios 12.10.
M uy probablemen te lo que Celso oyó fueron mensajes 4. H ans Licrzmann, A History of the Early Church, vol. 2, The Founding
proféticos que fueron dados a las iglesias en lenguas, y qu e se of the Church Universal, trad. B.L. Woolf Lun crwort h Press, Londr es,
comunicaron media nte el ejercicio del don de interpretación . 1961 ,55.
De allí la co nfusión de Celso, que consideraba tal interpretación s. Kydd, Charismatic Gifts in the Ear/y Church, 39 .
150 LA ACCIÓN DEL Esp fRlTU SANTO EN L\ HISTORIA OpOSICiÓN y FUENTES APÓCRIFAS 151

todas las cosas que se dicen acerca de los dioses, cualesquiera arrostran voluntariame nte . Su primer legislado r les co nvenció
que sean, son absurdas. Especialmente fue muy cáustico en de que eran todos hermanos. Después de abjurar de los dioses
contra del cristia nismo. Su burla cont ra los cristianos se expre- de Grecia. ado ran a su sofista crucificado y co nforman su vida
sa en su obra Sobre la m uerte de Peregrino, en la que llega a a sus pr ecepros. Por eso desprecian tod os los bien es y los tienen
blasfema r a Cristo mismo. O tra obra en la que hace referencias para su uso en común-.i o
al cristianismo es Alejandro el falso prcfeta:« Lucian o trabajó Una de las prácticas cristianas en las iglesias de sus días
como abogado en Antioquía, para dedicarse luego a ser un co ntra las que más se ensaña Luc iano es la profecía. Si bien los
retóri co sofista componiend o discursos y escribiendo inn ume- orácu los proféticos no eran exrraños en la cultu ra greco -roma-
rab les obras. En cumplimiento de esta profesión, viajó exten- na, Luciano encue nt ra en el ministerio prof ético cristiano un
same nte, visitando varias partes de Asia Me nor, Macedonia, ejemplo claro de charlatanería y abuso. Tanto en su sátira Sobre
Grecia, Italia y Ga lia. Estu vo en Roma y finalmente se esrable- la muerte de Peregrino com o en su obra Alejando el falso
ció en Atena s (año 165), donde pasó los sigu ientes veinte años profeta, Luciano describe la carrera de dos profetas embauca-
do res y charlata nes. U
de su vida y desde donde escribió la mayor parte de su
Si bien Luciano está satirizando claramente las acti vidad es
abundante obra, consistente ma yormente en diálogos de carác-
de cada uno de estos profetas, los hechos que él na rra reflejan
ter sarírico. Lucian o terminó sus días en Egipto, según se d ice,
seguramente lo qu e la gente pensaba acerca de estos per sona jes
comido por los per ros."
y su tarea. Como indica Luis M . de Cádiz: «Los filósofos que
La obra suya que más nos inter esa es Sobre la muerte de llevaro n la voz cantan te en ese movimi ento literario contra la
Peregrino, escrita alrededor del año 166 . Se rrara del relato de secta cristiana, la atac aron por todos los punto s que cre yeron
la muerre de Peregrino (Prot eus) de Parium , qui en, después de vulnera bles y se hiciero n eco•..., de tod as las calumnias que el
haber profesad o el cr istian ismo se hizo cínico y fina lmente se vulgo lanzaba conrra ella- tu No obstante, en general, en el
suicidó quemándose vivo en púb lico en Harpina, cerca de mundo greco-romano, las personas estaban bastante dispu estas
Olimpia, en el año 165. Según Luciano, él fue testigo ocular a aceptar un ministerio profético sin mayor criticismo . R.M .
de este hecho.! Las referencias al cristia nismo en este diálogo Grant coloca esta evidencia en una perspectiva más amplia al
son interesantes. particularmente las menciones que hace Lu- mostrar qu e la creencia en los o ráculos proféticos así como en
ciano de Cristo. «ese hombre qu e fue crucificado en Palestina otras «maravillas» ope radas por los d ioses era común en el
debido a que dio a luz a esta relig i ón- e? mundo mediterrán eo de los primeros cuatro siglos cristianos. 13
Lucian o habla de los cristianos , sus creencias y su devoció n Grane relacion a esta credulida d con el surgimiento del neopl a-
que él considera inhumana. Según él: «Estos desgraciad os están tonismo y el pitagorismo, según queda bien ilustr ad o en el
convencidos ame rod o de que son inmortales y de que van a consejo dado por el pitagó rico Jámblico (250-33 0): «No dudes
vivir ete rnamente. Por tamo, desprecian la muerte que muchos

ro. Ibid., 13.


6. Luciano, Alejandro el {a/50 pro{eta, 25 y 38. 11. La palabra que Luciano utiliza para referirse tanto a Peregrino como a
1. Sobre Luciano de Samosara, véase, Pierre C. de Labriolle, La reaaíon Alejandro es «profeta» (gr. prophete5). Véase, Luciano, Alejandro, 22,
paíenne, Ernest Leroux, París, 1934, 103. 24, SS, 60; YLuciano, Peregrino, 11.
8. Luciano, Sobre la muerte de Peregrino, 2. 12. De C ádiz, Historia de la literatura patrística, 119.
s. /bid., 11 . D . Gram, Miracfe and Natural Law, 6 1-63.
152 LA. ACCIÓN DEL EspfRlnJ SANTO EN lA HISTORIA OPO SICIÓN y FUENTES APÓ CRIFAS 153

de ninguna marav illa en cuanto a los dioses, ni de ninguna brinda un interesante testimonio de la vigencia de! do n y e!
doctrina religiosa- te Precisamente, Luciano reacciona contra ministerio profético en buena parte de! mundo greco-romano
este tipo de credulidad bastante difundid a a nivel popu lar Y. de sus días.
según él, part icularm ente entre los cristianos. Lo que más
ridiculiza es el carácter extá tico de muchos mensajes proféti- La literatura apócrifa
cos. En más de un caso, la natu raleza extát ica de la declaración
profética era enfatizada median te una conducta anormal, ya Como se indicó, la literatu ra apócrifa no es una fuente del
sea con danza, palabras ininteligibles (élenguasj), e incluso con tod o confiabl e para documentar los caracteres históricos a los
paroxismos frenéticos. que hace referencia, pero sí es una fuent e valiosa para conocer
Así es como Luciano describe las accione s del profeta la práctica real y corriente de la iglesia, ~ s decir, sus .hech?s
concretos en los siglos II y 11I. La Apócrifa es un resnmomo
Alejandro. Según él, este charl atán profetizaba «declarando
histórico importante de lo que pensaban sus autores y lectores,
algunas pocas palabas sin sent ido », como si fuese «un devoto
ya que sus relaros fant asiosos ponen en evidencia algunas de
de la Gran Madre en frenesí».15 Aparentem ente, este tipo de
esas prácticas. Es así que, en medio de relato s cargados de
conducta era bastante común entre los profeta s sospechados
dramatismo y espectacularidad, es posible detectar el ejercicio
de ser falsos o charlatanes y que, en consecuencia, se veían
de los dones espiritu ales. La atmósfera en muchos de estos
for zados a fingir un estado de éxtasis a fin de parecer auténticos escritos es típicam ente carismática. Una y otra vez se rep ite la
o tener más autoridad. Luciano describe precisamente esta frase «lleno del Espíritu Santo», asociada con el ejercicio de la
táctica en Alejandro. «Alejandro era un hombre distinguido y predicación, la oración, e! testimonio, la operación de mila-
notable, afecto como era a tener ocasionales arranques de gros, o e! ejercicio de los don es espiritua les. En los Hechos de
locura y a hacer que su boca se llenara de espuma. Él lograba Pablo se narra en tres oportunidades que una persona fue «llena
esto fácilmente masticando la raíz de la jabonera, la planta que con el Espíritu Santo » y luego comunicó un poderoso mensaje.
usan los tintoreros; pero a sus paisanos incluso la espuma les En la sección 9 de este libro se dice que Pablo, «lleno del
parecía sobrenatural e inspiradora de asombrc-.te Espíritu Santo», exhortó a los hermanos. En el mismo pasaje,
Si bien Alejandro era un pagano y Peregrino se supone que un tal Cleobio es lleno con el Espíritu y habla de la muerte de
era cristiano, para Luciano no había diferencia: ambos eran Pablo, y en la sección 11.3, Pablo es lleno y habla con pod er
impostores a los que solo les interesaba aprovecharse de la delante de N er ón. is
gente incauta. Por eso, dice de los cristianos: ..Si surge ent re Entre los don es espiritu ales mencionados con más fre-
ellos un hábil impostor , que sepa aprovecharse de la situación, cuencia están los dones de revelación, ent re ellos palabra de
pod rá enr iquecerse muy pron to dirigiendo a s1:1 gusto a esos ciencia. En los Hechos de Pedro se nos refiere que el apósto l
hom bres que no entienden absolutamente nada») ? De este Pablo, lleno del Espíritu Santo , recibió palabra de conocim ien-
modo , a pesar de su causticidad e incredulidad, Luciano nos to de que una mujer, que se había adelantado para recibir la

14. ¡bid., 75.


18. Todos [os textos de los hechos apóc rifos están toma dos de E. Hennecke
15. Luciano, A/eiandro, 13.
16. íbíd., 12 . y W. Schneemelcher, eds., New Testameru Apoa ypha, 2 vols. Lurter-
worth Press, Londres, 1963-1 965.
17. Luciano, Peregrino , 13.
154 LA ACCIÓN DEL Es píRITU SANTO EN LA HISTORIA OPOSICiÓN y FUENTES APÓCRIFAS 155

Cena del Señor , había estado invo lucrada en un a situ ación desconocido o recibir una palabra profética está ligada a la
moral que la descalificaba par a participar .J? En los Hechos de actividad del Espíritu Santo. Estas revelaciones oc urrieron
Pablo se cuenta de un cierto Pateado que , al igual qu e el joven cuando los apóstoles o las personas en cuestió n fueron ..llenos
en Troas (H echos 2.41), cayó desde una ventana y muri ó . El con el Espíritu Santo - o estaban ..en el Espfritu -. Si es así, lo
hombre había sido copero de Ne ró n, a qu ien se le di o noticia que tenemos aquí es más o menos lo mismo qu e enco nt ramos
inmed iata me nte de lo ocurrido. El texto afirma qu e Pab lo en 1 Corintios 12.8, 10, donde se nos dice qu e ..por el Espfriru»
hab ía percib ido -en el espfriru.. que esto iba a ocurrir.tú Algo a unos es dada ..palabra de sabiduría; a otro, palabr a de ciencia
similar se: lee en el siguiente pasaje, en el qu e parece haber un a según el mismo Espíritu ; ... a otro, profecía » ,
refere ncia al ejerc icio del don de prof ecía: En este sentido, es frecuente también la mención expl ícita
del discernimiento de espíritus. En la Kerygmata Petrcu, el
Pero el Espí ritu vino sobre Mina, de modo que ella dijo: apóstol Pedro afirma : ..Pues a una mente pía, natural y pura la
«H erma nos, (por qué [estáis alarmados a la vista de esta verda d se revela; ella no es adquirida a trav és de un sueño , sino
señal]? Pablo el siervo del Señor salvará a muchos en Rom a, que es conced ida al bueno a través del discernim iento. Porque
y nutrirá a muchos con la palabra, de modo que no hay en esta manera el H ijo fue revelado a mí también por el Padre.
núme ro (para contarlos), y él (?) se manifestará po r sob re Por lo cual yo conozco el poder de la revelación; yo mismo he
todos los fieles, y la gloria gra ndemente [..• vendrá] sob re aprendido esto de él•. 23
él, de modo qu~ hab rá una gran gracia en Ro ma». E Los apócrifos neotestamentarios tambi én testifican de
inmedi ata mente, cuando el Espíritu que estaba en Mirta otras manifestaciones del Espíritu, com o los diversos gén eros
q uedó en paz, cada un o tomó del pan y s~ regocijó según de lenguas. En un pasaje de los Hechos de Pablo, cuyo texto es
la cos tumbre [...) en medio del cán tico de salmos de David conocido como . EI comienzo de la esta da en Éfeso-, se lee:
y de himnos. 21
El ángel del Señor vino a la casa de Aqui la, y se paró frent e
Los d on es de revelació n son mencion ados con llamativa a todos ellos. H abló co n Pablo, de modo q ue todos fuero n
frecu encia en estos escritos apóc rifos, especialment e el don de turbados: po rq ue [este ángel] que estaba para do allf era
pro fecía. En los Hechos de Juan se describen experi encias realm ente visible (lit. revelado), pero las palabras q ue
similares a las anteriores. En un caso, Juan pud o anunciar a la estaba hablando a Pablo ellos (los circunstantes) no las ofan.
congregación lo qu e un o de sus miembros había hecho y Pero despu és qu~ él hubo dejado de hablar co n Pablo en
pensado antes de qu e tal person a llegara al culto. En ot ra leguas, ellos cayero n en temo r y confusió n, y estaban en
ocasión, el a pós to l pudo leer los pensamientos de otra perso - silencio . Pero Pablo miró a los herman os y dijo :.,.2"
na. 22 Evid entemente, en todos estos casos, no se trata de
clarividencia o adivinación, ya que la ca pacidad de co nocer 10 Aparen temente, el ángel habl ó en lengua s a Pablo, y este
interpretó el mensaje a la congregación. Dos don es del Espírit u
son mencionados aq uí: lenguas e interpretación de lenguas. En
19. He,hos de Pedro, 1.2.
20. Hechos de Pablo, 11.1 .
2 1. Ibid., 9 . 2l. Kerygmata Petrou, 17.5-18.1.
22. He, hos de]uall, 46; 56. 24. .. El comienzo de la estada en Éfeso- , en He, hos de Pablo.
156 LA ACCiÓN DEL ESpíRITU SANTO EN LA H ISTO RIA OPO SICIÓN y FUENTES APÓ CRIFAS 157

el primer caso, probablemente se trata de las «lenguas angéli- el poder de Jesús y la autoridad dad a al apóstol, el demon io
cas» a las qu e hace refer encia Pablo en 1 Corintios 13 .1. desapareció. La mujer fue liberad a y muchos más creyeron al
La guerra espiritua l y la con frontación con demonios mensaje de Tomás y creyeron en Jesús. «E imponiendo sus
tampoco es de sconocida para los autores de la Apócrifa del manos sob re ellos él los bend ijo, dicien do : «ll.a gracia de
N uevo Te stamento. En los Hechos de Pedro se nos cuenta de nuestro Señor Jesucr isto sea sobre ustedes para siempre !»
un incidente en casa de Marcelo, en Rom a. Allí Pedro ve a un Ento nces la mujer le pidió «el sello- (la unc ión o llenura del
joven y percib e que está ende moniado . Ent on ces or dena al Espíritu Santo). «Entonces él hizo que ella se acercar a a él, e
espíritu : «iTú tambié n, pues, cualquier demonio que seas, en imponiendo sus manos sobre ella la selló en el nombre del
el nombre de nuestro Señor Jesucristo , sal del joven y no le Padre y del Hijo y de! Espíritu Santo. Y muchos otros tamb ién
hagas daño; (y) muéstrate a todos los que están alrededort -zr fue ro n sellados con ella». H echo esto, comparti eron la cena
Así, pues, atado por la autoridad del ap óstol, el demonio dejó de! Seño r.zs
al joven y proced ió a destr uir una estatua de már mol del En todos estos pasajes encontramos ejemplos de un minis-
emperador. En los Hechos de Andrés se nos relata cómo este terio de liberación y casos muy similares a los qu e hoy se pre-
apóstol le ordena a un demon io a salir de un joven soldado, y sentan y tratan. Los apóstoles disciernen la presenc ia demonía-
este queda Iibre.16 O tro pasaje interesante se encuentra en los ca, repr end en a los demon ios y los atan en el nombre de Jesús,
Hecho s de Pablo, en ocasión de la visita del apóstol a la ciudad orde nan a los espíritus inm und os salir de las personas afecta-
das, y estos ob edecen y salen. Las persona s terminan co nfesa n-
de Tiro. Probablemen te, Pablo predica y también echa fuera
do su fe en Cristo co mo Hijo de Dios y Seño r, y reciben la
demonios. El texto dice: «Pero inme diatamente los demonios
unció n del Espíriru Santo (e! sello). Los do nes sobrenaturales
[huye ronl ·.27
de discern imiento de espíritus (1 Corintios 12.10) y de libera-
En los Hechos de Tomás, se nos cuenta que este apóstol se
ción de demonios son claramente mencionados.se
encontró co n una muje r muy hermosa, que durante cinco años
El choq ue de poderes y la guerra espiriruai es también
había sido atormentada por un demonio. El espíritu inmu ndo
testificada por los escritos apócr ifos. En los Hechos de Juan se
había ab usado de ella sexualmente (íncubo ). Co n angustia la
narra un interesante episodio en el ministerio de este apósto l,
mujer clamó : «Yo sé y estoy persuadid a de que los demon ios
cuando el templo de Artemisa (Diana para los romanos) en Éfeso
y espíritus y vengadores están sujetos a ti, y todos tiemblan a
fue destru ido por el poder de Dios. En su oració n, J uan declara :
tu oración. O ra, por ta nto , por mí, y saca de mí e! demo nio
que continuam ente me veja».28 Tomás re prendió al espíritu
Oh Dios, q uie n eres Dio s por sobre to dos los que se llaman
in mund o, que se manife stó de manera visible para e! apóstol y
d ioses; y no obstante eres rechaza do ha sta este d ía en la
la mujer, pero no para el resto de las persona s presentes. Y con
una voz bien fue rte, que fue oída por tod os, e! diablo intentó
defender su auto ridad sobre la mujer. Finalmente, reconociendo
29. Ibid., 47-49. Un relato similar se encuentra en lbid.; 62-67.
30. Según C. Peter Wagner, hay fundamento bíblico para afirmar la
vigencia del don de liberación de demonios como un don del Espíritu
25. Hechos de Pedro, 4.1 1. Santo. Véase Wagner, Your SpiritWJI Gifts, 97-100. Esinteresante señalar
26. Hechos de Andrés. que un defensor tan celoso de la fe católica, como lreneo de Lyon,
27. Hechos de Pablo, 6. parece considerar que la liberación de demonios merece ser considera-
2B. Hechos de Tomás, 43. da entre los dones espirituales. Véase, lreneo, Contra hereitas, 2.49.3.
158 LA ACCIÓN DEL EsrfRlTU SANTO EN LA HISTORIA O pOSICIÓN y FUENTES APÓCRIFAS 159

ciudad de los efesios; quien me pusist e en la mente venir a no mbre de Jesucristo, y muchísimos eran agregados cad a día a
este lugar, del cual nunca pensé ; quien condena tod a forma la gracia del Señor».J4
de ado ración, convirtiendo a (los hombres) a ti; a cuyo En los Hechos de Tomás se indica qu e la fama de este
nombre todo ídolo huye, y cada demonio y todo pod er apósto l «se esparció por todos los pueblos y villas, y to dos los
inmundo: ahora haz que a tu nom bre hu ya el demonio que que tenían enfe rmos o personas perturbadas po r espíritus
está aqu í, el engañador de esta gran mu ltitud; y muestra tu inmundos los traían, y los colocaban sobre el camino po r el
miserico rdia en este lugar, por que ellos han sido extravia- que él iba a pasar, y él los sanaba a to dos en el poder del Señor.
do s.J t Entonces todos los que eran sanados por él decían de común
acuerdo y a una voz: «¡Gloria sea a ti, Jesús, que (a todos) por
M ientras Juan estaba diciendo esto, el altar de Artemisa se igual has concedido sanida d a través de tu siervo y apóstol
rompió en pedazos, y todas las ofrendas se caye ron por el piso To más!»3S En Hechos de Juan, 37, se afirma que «J uan sanó
al igual que varias otras imágenes que estaban sobre el altar. todas (sus) enfe rme da des a través del poder de Dios». Tod os
Casi medio templo se vino abajo y un sacerdote murió al estos pasajes y muchísimos más esparcidos po r toda la litera-
desplomarse parte del techo. El resultado fue un gran temor y tura apócrifa recuerdan los do nes de sanidades mencion ados
la conv ersión de todos los pre sente s. en 1 Corintios 12.9.
Otros dones espirituales de frecuente mención en los Por cierto, la literatu ra apócrifa por ser fantasiosa y dra-
textos apócr ifos son los dones de sanida des. En numerosos mática, está llena de hecho s po rte ntosos. De mod o qu e señales,
pasa jes se narran ep isodios de sanidades milagrosas. En los pro dig ios y mar avillas abunda n en sus páginas. Los milagros se
Hechos de Pablo, leemos: «Alguien dijo : [Es] "mejor para él multiplican en sus relatos, pero no por ello dejan de ser
mo rir, para qu e [no} esté en dolor". Pero cua ndo Pablo hubo testimonio de la ocur rencia de estos cosas o por lo menos del
aq uietado a la multitud [to mó] su mano, lo levantó y le hecho de que para estos autores y sus prime ros lectores los
preguntó, dicie ndo : "H erm ócrates, ¿[...] qué es lo que deseas?" milagros estaban dentro de lo que en sus mentes ellos consi-
y él dijo : "Quiero comer". (Y) él tom ó un pan y se lo dio para deraba n como algo posible. Uno de estos hechos milagrosos es
comer. En esa hora él quedó sano, y recibió la gracia del sello la resucitación de mue rtos, que es mencion ada en var ios pasa-
(la unción ) en el Señor, él y su esposa».32 Ya se hizo mención jes.36 Los casos parti cular es involucran a hombres, mujeres y
del caso de Parroclo, quien cayó de un a ventana y fue resuci- niños que muriero n por un a diver sida d de causas.
tado po r Pablo .U En relación co n el minister io de Pedro en En los Hechos de Tomás se relata un caso interesan te de
Roma, se dice : «Y ellos traían las person as enfe rmas también a resucitación. Una mujer joven había sido asesinada por su
él en el día de reposo , rogándole que pudiesen ser curados de amante, quien luego de arre pentirse delante del apóstol fue
sus enferme dades. Y muchos paralíticos eran sanado s, y mu- curado de sus manos que se habían secado al qu erer llevar el
chos que sufr ían de hid ropesía y de fiebres de dos o cuatro días, pan de la eucaristía a su bo ca. Acto segu ido, el ap óstol fue a la
y eran cura dos de toda enfermedad corporal, al cree r en el

34. Hechosde Pedro, 9.1.


31. Hechos de Juan, 41 . 35. Hechosde Tomds, 59.
32. Hechos de Pablo, 4, (Pablo en Myra). 36, Hechos de Pedro, 26; Hechos de Pablo, 8; 11.1,2; Hechos de Tomds,
33. tu«, 11.1·2. 33, 54, Y81; Hechos de Juan, 23-24, 47, 52, 75, 80, Y83.
160 LA ACCiÓN DEL EsplRlTIl SANTO EN LA HISTORIA O POSICIÓN y FUENTES APÓCRIFAS 161

posad a dond e vivía la mu jer y ordenó que la tr ajesen . La joven Cuando reflexionamos sobre este material, vemos que los
fue llevada al med io de la po sada yaciendo en una ca ma. Tomás Hechos Apócrifos hablan acerca de hechos que nos recuer-
pu so su mano sobre ella y oró , diciendo: ..... esto suplicamos dan los dones del Espíritu. Ellos hacen referencia a expe-
de ti y rogamos, que en tu nombre santo tú levantes a la mujer riencias que van desde el discernimiento de espíritus hasta
que yace aquí por tu poder , para (tu) gloria y (la confirmaci6n la resucitación de muertos... Obviamente, estos documen-
de) la fe de aq uellos qu e están alred edor » . Y luego le pidió a l tos no nos dicen mucho que podamos confiar en cuanto a
joven que la había asesinado, después de o rar por la unción los apóstoles. Sin embargo, sr nos dicen un montón acerca
sobre él, que la tomara de la mano y le dijese: ..Yo con mis de lo que estos autores y los cristianos a quienes ellos
manos te maté co n hierr o, y con mis mano s por fe en Jesús yo escribían podían imaginar que ocur ría. Lo menos que
te levanto ». Al hacer esto , la joven se incorporó y se sentó, podemos decir es que estos cristianos tenían reminiscen-
mirando a la gran multitud que se había reunido. El relato cias, por más vagas que hayan podido ser, de los dones del
co nti núa co n los detalles de la opresión demoníaca de la que Espfritu. 3&
la jove n había sido víctima y de las visiones del infiern o que
había tenido durante el tiempo de su muerte. Esta fue una
bue na ocasión para qu e el a pós to l pr edicase el Evangelio y una
gran mult itu d creyese en el mensaje.J?
La resucitación de muertos es un milagro (l Co rintios 12.10)
que ocurrió en varias ocasiones tanto en el ministerio de Jesús
como en el de los apóstol es, según el testimonio neorestamenta-
rio. Pero el don de ..hacer milagros», que más específicamente se
refiere a la resucitación de muertos, no terminó con el último de
los apósto les, como parece sugerir el testimoni o de la literatu ra
apócrifa. Por lo menos, estos auto res, aun exage rando y presen-
tando relatos de naturaleza fabulosa, parece n admiti r su vigencia
como posible. El éxito y gran circulación de sus obras es indicativo
tambi én que sus lectores no estimaban como ajenos o extraños a
su pr opia experiencia tales prodigios.
Resumiendo, la Iiterarura apócrifa no s pone en contacto
con la manera de pensa r del cristiano co mún y anónimo de la
segunda mit ad del segundo siglo, y co n el hecho evidente de
qu e en su esquema menta l la actividad podero sa y sobre natural
del Esp íritu Santo se man ifestaba med iante el ejercicio y plena
vigencia de los dones espir ituales. De este mo do, pod emos
conclu ir co n Kydd , dicie ndo que:

37. He, hos de Tomds, 51-59. 38. Kydd, Charismati& Gifts in the Earfy Church, SS.
H CRISTIANISMO OH SIGLO 111

11 1siglo l1l fue un tiempo de grandes oportunidades


para el testimo nio cristiano , pero al mismo tiem -
po de enormes dificultades. Durante estos años la
Iglesia continuó crecien do notablemente, en es-
pecial en Ásia M enor. Pero hacia mediados del siglo, fuertes
persecuciones pusiero n en ser io peligro la supervivencia de la
Iglesia en muchas regiones y crearon profundos problemas inter-
nos entre los cristianos. No obstante, las tormentas gene radas por
la oposición hiciero n que la llama del evangelio se avivara. A
comienzos de este períod o, Terruliano escribió: «La sangre de los
mártires es semilla». Incluso las persecuciones más generalizadas
y sistemáticas, como las de Decio (249 -25 1) y Diocleciano
(284-305) no lograron detener el avance cristiano . Por el contra-
rio, las iglesias se mostraban vivas, creciendo en número e
influencia en la sociedad. La fe proclamada por esta religión
minoritaria iba adquiriente, de manera quieta pero profund a. una
cada vez mayor fuerza en el ámbito del Imperio Rom ano.
164 LA ACCIÓN DEL Es píRIT U S ANTO EN LA H ISTO RIA, f L C RISTIAN ISMO DEL SIGLO 111 165

En algunos casos, la oposición se levantó como una to r- milagros. junro con variadas expresiones del ejercicio de los
menta inte rna . Para el siglo m, la fe cristiana se estaba tra ns- dones espiritua les. estaban en operación en ese tiempo en
formand o en el movimiento más dinámico y cautivante dentro muchas comunidades de fe. Co mo muestra de ello, considera-
del Imperio. Much as de las mentes más brillantes se habían remos a algunos testigos cristianos importantes de este siglo.
transformado en seguido res del cristianismo . Algunos de ellos
hicieron el esfuerzo por expresar de una mane ra intelectu al-
mente potable, conforme los cáno nes del pensamient o de sus
O rígenes de Alejandría (185-255)
días, el testimonio evangélico. Hacia el año 185 un filósofo Nació en esa ciuda d de Egipto. y murió en Tiro de Fenicia.
estoico convenido llamado Panreno comenzó a enseñar la No fue un convertid o del paganismo, sino el hijo mayor de un a
doctrina cristiana a nuevos creyentes en Alejandría. Su rarea familia cristiana numerosa. Recibió su primera educación de
docent e fue continuada pr imero po r Clemente y más tarde por su pad re Leóni das. quien murió m ártir du rante la persecución
Or ígenes. A pesar de los períodos de intensa persecución, la de Septimio Severo (202) . Frecuent é la Escuela Catequista de
escuela para catecúmenos de Alejandr ía ganó prestigio. y sirvió Alejandría, donde escuchó a Panten o y a Clemen te. En 202 fue
para fortalecer la fe de muchos y at raer a nuevos convenidos. nombrado sucesor de Clemente, po r el obispo Demerrio,
El logro más notable de ho mbres como Clemente y O rí- cuando la persecució n de Severo obligó a Clemente a salir de
genes fue exp resar el evangelio en términos que pudiesen ser Alejand ría. Durante treinta años Orígenes dirigió la célebre
entendidos por aquellos que estaban embeb idos de las formas Escuela de esa ciudad. llevándola a su mayor florecim iento .
más sofisticadas del pensamiento y la cultura griega. En un AlH atrajo a un gran númer o de discípulos po r la calidad de su
sentido. se debe a ellos el haber establecido de manera defini- enseñanza, pero también por el ejemplo de su vida. Fue oyente
tiva la respetabilidad intelectual de la nueva fe. Sin embargo. del afamado fundado r del neo plaronismo, Arnmonio Saccas.
este esfuerzo intelectua l no se hizo sin un alto costo: los Se entregó al estud io de la exégesis bíblica, en la que sobresalió
elementos carismáticos y sobrenaturales de la experiencia cris- como maestro. Hacia el año 23 0 fue or denado sacerdo te en
tiana fueron desplazados a un lugar secundario. con miras a Cesárea. Sus homilía s, trabajos exegéticas y apologéticos son
darle mayor credibilidad intelectua l al evangelio a los ojos de innumerables.
las élires edu cadas helenísticas. Or ígenes fue un hombre de una conducta intachable y de
De tod os modos, a lo largo del siglo III la Iglesia expandi una erudición enciclopéd ica. uno de los pensadores más origi-
sus fro nteras geográficas y sociales a un ritmo asombroso. Poco nales de todos los tiempos. Pare ce ser que este prime r "teólogo
a poco se fue tr ansformando en un imperio dentro del Imperio. sistemático.. cristiano, asceta y erud ito bíblico, en su famosa
No es extraño. pues, que los propi os emperadores hayan polémica co ntra el filósofo pagano Celso, aparente mente ne-
observado con preocupación el desarroll o creciente de un gaba la práctica presente de los dones de profecía y de lenguas.
movimiento tan dinámico. y lo hayan visto como una amenaza Según él, los milagros visibles habían sido necesarios en la
a sus pretensiones hegemón icas. Las manifestaciones del poder iglesia naciente, pero para su tiempo ya no se consideraban tan
del Espíritu Santo no hacían más que agregar sospecha, temor necesarios (un argumento similar al que casi do s siglos más
y asombro a los paganos que eran testigos de ellas. En más de rarde seguirla Agustín de Hipona).
una instancia, fueron estas manifestacione s la ocasión para la Sin embargo, como vimos. Ce1so dice haber encontrado
opos ición más encarnizada. Sea como fuere, el siglo 111 rambié estos car ismas entre los cristianos) aunque puede ser que
presenta evidencias de que señales, prod igios. maravillas exagere en algunas de sus afirmaciones. Según él: ..Hay muchos
166 LA ACCIÓN DEL ESpíRITU SANTO EN u.. H ISTO RIA. EL CRISTIAN ISMO DEL SIGLO III 167

qu e, si bien sin nombre, co n la más grande facilid ad y a la más; pero de sde ese tiempo estas señales han disminuido, si
me no r ocasión, ya sea con o sin templos, asume n las mociones bien todavía hay trazas de su pr esencia en unos pocos cuyas
y gestos de personas inspiradas; mientras que otros lo hace n almas han sido pu rificadas por el evangel io, y sus acc iones
en cuidades o en los ejércitos, con el propósito de atraer la reguladas por su influencia-.c
atención y provocar sorpresa». A esto , Ce\so co ntinúa dicie n- Si bien co ndici onado a no lla mar la atención sobre las
do: "A estas promesas se agregan pa labras extrañas, fanáticas manifestacio nes más esp ectaculares del Espíritu Santo en razón
y totalmente inintel igibles, a las que ninguna persona racional de que su obra apologética Contra Ce/so no se lo permitía,
puede enco ntrar significado: po rqu e son tan oscuras, que no O rígenes apela al argumento de qu e la aut entici da d del cristia-
tienen ningún significado; pero ello s (1os creyentes) dan oca- nismo está pro bada por sus profecías y milagr os. En un intere-
sión a cua lqui er tonto o impostor pa ra aplicarlas según su sante pasaje, señala:
propio prop ósito e.t
No obstante, Orígenes escribe allá por el año 248 : «T o- El evangelio tien e una demostración propia, más divina que
davía se pr eservan entre los cristiano s huellas de ese Espíritu cualquiera establecida por la dialéc tica griega. Y este mé-
Santo que apareció bajo la forma de un a paloma. Ellos expul- todo más divino es llamado por el apóstol la "ma nifestación
san los esp íritus malos, rea lizan muchas curaciones, ven con del Espíri tu y de poder....Dei Espír itu.., en razón de las
antel ación determinados acontecim ientos según la volu nt ad pro fecías, que son suficientes para produci r fe en cua lquie-
del Logoss.z Orígenes tiene bastante que decir en cua nto al don ra qu e las lea, especial ment e en aquellas cosas qu e tienen
de profecía. Inclu so llega ta n lejos como a sugerir que una que ver con Cristo; y de ..poder », debido a las seña les y
perso na tiene que abri r la boca a fin de recibir el carisma de maravillas que debemos creer han sido hechas, ta nto en
pro fecía) muchas ot ras tierras, como sobre esta, que trazas de ellas
Según él, el Espí ritu Santo estuvo activo a través de señales, se preservan todavía entre aquellos que regula n sus vidas
prod igios y maravillas en el mini sterio de Je sús y los apó sto les. por los pr eceptos del evangelio.e
"Pero la demostración que sigu ió a las palabras de los ap óstoles
de Jesús fue dada de parte de Dios, y fue acredita da po r el En respue sta a argu mentos de Celso indica ndo que Escu-
Espíritu y por poder. Y, por lo tanto, su palabra corrió veloz y lapio de manera sob rena tural hacía curaciones y pronosticaba
r ápidamenrev.e En otro lugar, señala Orígenes: «Además, el el futu ro, O rígenes afirma que por la invocación del nombre
Espír itu Santo d io señales de su presencia al comienzo del de Jesús algunos cristianos de su tiempo tenían un maravilloso
ministerio de C risto, y desp ués de su ascensión dio todavía poder para sana r. Según él: «nosotros [los cristianos] podem os
clarament e mostrar un a multitud incontable de griegos y bár -
baros que reconocen la existencia de Jesús. Y algu nos dan
1. Citado en Contra Ce/so, 7.9. Véase Williams y Waldvogel, «A History evidencia de haber recibido a travé s de esta fe un poder
of Speaking in Tongues-, 69; y también Roben Glenn Gromacki, The mara villoso para las cur aciones, que realizan, invo cando nin -
Modern Tongues Movemenr, Presbyterian and Reformed Publishing gún otro nombre sobre aquellos que necesiran de su ayuda qu e
Co., Filadelfia, 1967, 15.
2. Orígenes, Contra Celso, 1.46.
3. Orígenes, Sobre Éxodo 4.4. Véase también, Orígenes, Comentario a
Cantares, 1. s. tbid., 7.8.
~. Orígenes, Contra Ce/so, 3.68. 6. Ibid., 1.2.
168 LAACCiÓN DEL EsplRITU SANTO EN LA HISTORiA. EL CRISTIANISMO DELSIGLO 111 169

aquel del Dios de todas las cosas, y de Jesús, junto con una qué son, o cómo existen, no lo ha exp licado con suficiente
menci6n de su historia», Además, Orígenes destaca qu e «por d aridad ».12 Celso parece que afirmaba que los cristianos ejercían
esto s medi os nosotros también hemos visto libe rada s a muc has poderes milagro sos por los nomb res de cierto s demonios y
personas de calamidades do lorosas, y de distraccio nes de la mediante el uso de encantamientos. A esto, Orígenes responde :
mente, y locura. y un sin fin de otras dolencias, que no podrían
ser curadas ni por hombres ni por demonios- e?Aparentemen te, No es po r encant amientos que los cristianos par ecen pre-
Orígenes está haciendo refere ncia principalmente a enferme- valecer (sobre los espíritus malos), sino por el nombre de
dades mentales. Jesús, acompaña do po r el anu ncio de los relatos qu e tienen
En el prefacio de su obra Sobre los principios, Orígenes que ver con él; po rque la repetic ión de estos ha sido
afirma que el Espíritu Santo es quien «inspiró a cada uno de frecuentemente el medi o de echar a los demonios fuera de
los santos, sean profetas o ap ósrolesc! Fue el Espíritu también los hombres, especialmente cuando aque llos que los repi-
quien escribió las Escrituras y les dio un significado espiri tual. tieron lo hicieron en un espíritu sano y gen uinamente de
Este «significado espiritua l que encierra la ley no es conocido fe.13
por todos, sino solo po r aquellos sobre quie nes es concedida
la gracia del Espíritu Santo en palabra de sabiduría y de Sea como fuere, para Orígenes la acción del Espíritu Santo
co nocimiento- e? Precisamente, según O rígenes, uno de los es real y poderosa. Sin embargo , tal obra se verifica solo en los
propósitos de los dones espiri tua les en la vida de la iglesia es creyentes. Dice él:
capacitarla para examinar y clarificar las enseñanzas de los
apóstoles: «los fundamentos de sus declaraciones deben ser Yo soy de opi nió n, de qu e .•. 1.1 operación del Espíritu Santo
exa minados por aquellos que merezcan los excelentes dones no tiene lugar en absoluto en aqu ellas cosas que carecen de
del Espíritu, y quienes, especialmente por medio del Espíritu vida, o en aquellas que, si bien viven, son todavía muda s;
Santo mismo, obtengan el don de lenguas, de sabiduría, y de más aún, no se encuent ra incluso en aquellas que realm ente
conocimiento -. Jv Según Burgess: «Es claro ... que Orígenes están dotadas de razón, pero están involucradas en cues-
entiende qu e los dones del Espíritu no son para todos los tiones mala s, y de ningún modo convertidas a una vida
cristianos. Más bien, estos están d irigidos a aquellos que son mejor. Pienso que la operación del Espíritu Santo tiene
ten idos por dignos, para aquellos que ya están viviendo una lugar solo en aquellas personas qu e ya se está n volviendo
vida crist iana guiada por el Esplritu-ct! a una vida mejor, y (están) caminando por el camino qu e
Más adelante, Or ígenes señala que «en cuanto al diablo y lleva a Jesucristo, i.e., qu e están involucradas en la realiza-
sus ángeles, y las influencias que se oponen, la enseñanza de la ción de bue nas acciones, y que permanecen en Díos.t't
iglesia ha estab lecido que estos seres realmente existen; pero
La obra del Espíritu en la vida del creyente se concreta
mediante la promoción de su crecimiento en santidad. La
7. lbid., 3.24.
8. Orígenes, Sobre los principios, prefacio, 4.
9. lbid., prefacio, 8. 12. O rígenes, Sobre los pnncípíos, pref acio, 6.
10. lbid., prefacio, 3. 13. Orígenes, Contra Celso, 1.6.
11. Burgess, A1Uient Christian Traditions, 77.
14. Orígenes, Sobre los principios, 1.3.5 .
170 LA ACCIÓN DEL ESpfRJTU S ANTO EN LA HISTO RIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 111 17 1

santi dad del cristiano, qu e es una ex periencia pro gresiva y no la gracia florezca en sus palabras ... Dice el profeta en el
repentina, deriva de la obra del Esp íritu Santo en él. 1S Es el salmo 67 : "A lasque evangelizan, el Señor dará una palabra
Espí ritu quien también ayuda al creyente en la oración, e muy pod erosa". Aun concediendo qu e entre los griegos se
intercede con el Padre cuando la mente humana no puede enc uentren las mismas doctrinas que en nuestras Escrituras,
orar.te Él es quien mueve la ment e hu mana e incluso su les faltada, sin emba rgo, ese poder de atraer y disponer las
imag inació n hacia las cosas qu e son de Dlos.tz Su asiste ncia es almas de los hombres a seguirlas.zú
funda me nta l para que los fieles puedan ent ender y apropiarse
de la verdad espiritual, y así evita r el erro r y la falsedad .t! De ningún modo, O rígene s pu ede ser considerado un
Para O rígenes, como par a cualquier verdade ro cristiano «carismático". Si bien es claro en su evaluación bíblica y
de to do s los tiempos, la eviden cia más palmaria de la op eració n evangélica de la persona y obra del Espíritu Santo, el padr e
del Espí ritu Santo es lo que Él hace en la vida de las personas. alejandrino reduce la obra del Paracleto mayorment e a un a
La divinidad 'j vida de Cr isto es evidente, no solo po r los tarea de inspi ración y orientación en la inte rp retación de las
milagros que El obró y por las profecías qu e se cumpliero n en Escrituras. En él pued e verse el reduccionismo ca racterístico
Él, sino por el poder del Espíritu Santo transfo rmando a las que resulta de toda ap licación de un intelecrualismo hu mano
a la acc ión incomprensible e im prede cible del Espíritu . En su
personas. Por eso, Orígenes se a treve a declarar: «Aunque
esfuerzo por acomodar la comprensión de la experiencia cris-
Celso, o el Judío, a quien introduce en su diálogo, se burl en de
tiana a las pautas del pensam iento griego pagano , para facilitar
lo qu e voy a decir, lo diré, sin embargo : mu chos se han
su digestión por parte de hombres co mo Celso , O rígenes
convertido al cristian ismo , por decirlo así, contra su voluntad;
parece perder lo más r ico de la fe de C risto: su dimensión de
cierto espíritu tra nsformó sus alma s, hacién doles pasar del od io poder en el plano conc reto de las vivencias human as. De todas
conrra esta doctr ina a una disposición de ánimo dispuesto a maneras, co mo se ha visto , a pesar de las p resiones en contra-
morir en su defensav.t? rio, este intelectual cristiano pudo reconocer algo de las ope-
La predicación del evangelio debe ser hecha con po der raciones del Esp íritu e ntre los creyent es de sus días.
para qu e sea efectiva. Un evangelio de poder es el ún ico que
puede provocar cambios radicales en las vidas de las perso nas.
Por eso, ex hor ta O rígenes: Cipriano de Carrago (200-25 8)
Ejerció en la ciudad de Cartago la prof esión de mae stro
La palabra de Dios (1 Corintios 2.4) declara que la predi- de elocuencia. Poco tiempo despu és de su baut ismo , que tuv o
cación, po r verdad era que sea en sí misma y mu y digna de luga r el 18 de abril del año 246, fue or denado presbítero y,
ser creída, no basta a tocar el corazó n hu mano ; es necesa rio más tar de, fue obispo de Ca rtago al morir Donaro en el a ño
que el predicador haya recibido cierto poder de Dios y que 248. Este episcopado fue agitado desde el pri ncipio por la
violenta persecución d e Decio, la cual dio ma rgen a las dos
fa mosas cu estio nes de la pen itencia y del bautismo de los
IS. Tbid., 1.3.8. herejes, qu e tanto ocu paron su activ idad pasto ral y literaria.
16. Or fgenes, Sobre la oración, 2. 14.
17. O rígenes, Cont ra Ce/so, 4.95 .
18. Orígenes, Sobre los principios, 2.7.2.
19. Orígenes, Contra Celso, 1.46. 20. íbid.; 6.2.
172 LA ACCiÓN DEL ESpíRITU SANTO EN LA HISTO RIA EL CRISTh\NISMO DEL SIGLO 1II 173

Como obispo mostró gran habi lidad ejecut iva, y mucho difícil comenzó a encontrar un medio de rea lización, lo que
senti do prác tico y bondad de espíritu. Le tocó vivir en una había considerado imposible, a ser capaz de ser logr ado.
época tormentosa. Dos veces fue víctima de persecucion es. Al De modo que fui capac itado par a reconocer que lo qu e
estallar la persecución del emperador Valeriana, Cipriano fUe previamente, nacido de la carne, había estado viviendo en
desterrado, llevado posterio rm ente a Ca rtago y, finalm ente, la práctica del pecado, era de la tierr a terrenal, pero ahora
conde nado a ser decapitado, cosa que ocurrió el 14 de setiem- había comenzado a ser de Dios, y era animado por el
bre del año 25 8. Cipriano escribió profusamente. Es el au tor Espíritu de santided.zz
de muchos tra tado s y cartas. Se inspiró mayormente en Tertu-
liano, quien fue su maest ro espiritua l. De él apr endi ó su Cipriano insiste mucho en la relación que existe entre la
concepto ascético de la vida crist iana. Pocos personajes de la obra de! Espíritu Santo en el creyente y el bautismo en agua .
iglesia antigua han sido tenidos en más alta estima por las Co nforme a la práctica en el norte de África, e! creyente era
edades subsiguientes. bautizado e inme diatamente se le imponían las manos con
La obra escrita de Cipr iano está salpicada de numerosísi- unción de aceite , a fin de que fuese lleno del Espíritu. Es
mas referen cias a la persona, obra y man ifestacion es de! Espí- interesante notar que esta es una práctica común hoy en
ritu Santo.e! Sumamente inte resante en cua nto a la obra rege- círculos carismát icos. Según Cipriano: «Es necesario que el que
neradora y santificadora del Espíritu Santo es el testimonio es bautizado sea también ungido, de modo que, habiendo
per sonal de Cipriano: recibido e! «crisma", es decir, la unción, pueda ser ungido de
Dios, y tener en él la gracia de Crisro. czs Recordando la
En cuanto a mí mismo, estaba atrapa do en ligadu ras por práctica apostólica de reclamar la llenura del Espíritu sobre los
los innumerables errores de mi vida previa, de los qu e no nuevos creyentes bautizados med iante la imposición de manos,
creía qu e pudiera de alguna manera ser libera do. Así que Cipriano señala: «así también es hecho entre nosotros ahora,
me incliné a conformarme en mis vicios adheridos. Y en mi de mo do que aquellos que son bautizados en la Iglesia son
desesperación por cosas mejo res, solía justificar mis peca- llevados a los lídere s de la iglesia, y por nuestras oraciones y
dos como si fuesen realm ente partes de mí y naturales a mí. por la imposición de manos obtiene n el Espíritu Santo, y son
Pero luego de eso, por la ayuda del agua del nue vo naci- perfeccionados con el sello del Seño r".24 Es interesante notar
miento, la mancha de años anterio res fue lavada, y una luz que esta unción con imposició n de manos para la llenu ra del
de arri ba, serena y pura, fue infund ida en mi coraz ón Espíritu despué s del bautismo era pr áctica com ún en e! norte
reconciliado , -después de qu e por la agencia del Espír itu de África a mediad os del siglo III, y está en conformidad con
sopló desde el cielo, un segundo nacimiento me había el uso y práctica en Roma a principi os del mismo siglo, según
restaurado en un nu evo hombre. Enton ces, de una manera lo describe H ipólito de Roma en su Tradición apostólica.
maravillosa, las cosas dudosas co menzaron de pronto a Cuan do esto ocur re, cuando el creyente vive lleno del
resulrarm c seguras, las cosas ocultas a ser reveladas, las Espíritu Santo y en santidad, está en con dicione s de contar con
cosas oscuras a ser iluminadas, lo qu e antes había pa recido

22. Cipriano, Carta a Donato, 4.


21. Sobre la comprensión que tenía Cipriano del Espíritu Santo, véase, l3. Cipriano, Carta 70, 2.
Campenhauscn, EcclesiasucalAuthority, 268-273. 24. Cipriano, Carta 72,9.
174 LA ACCiÓN DEL es PíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DELSIGLO III 175

el poder divino para ayudar a los que sufren de enfermedades samaritanos después del bauti smo de Felipe, med iante la im-
físicas, de todo tipo de opresione s espiriruales, o se en cuen tran posición de manos, de la misma manera también ellos co nfie-
perdidos en una vida sin paz ni esperanza. Solo un creyente ren sobre aquellos el Espíritu Santo ...27 No obstante, el bautis-
lleno del Espíritu puede ten er la autoridad suficiente para, mo del Espíritu no es necesario para la salvación . Pero sí el
como veremos más adelante, expu lsar a los espíritus inmun dos bautismo en el nombre de Jesucri sto, sin impo rtar qu ien lo
que se introduje ron en las personas para atorme ma rlas.as De administra, debe ser aceptado y suplementado por la invoca-
este modo. según Cipriano, la presencia poderosa del Espíritu ción del Espíritu Santo, co nforme con la prácti ca eradtcicnal.ae
en el creyente es fundamental para que este pueda cumplir con Este bauti smo de santidad debe ser procurad o por tod os los
el mandato de Jesús, según Marcos 16.15 . Nótese que Cipriano creyentes.
está hablando de una operación poderosa y abundante del Volviendo a Cipriano, no debe pensarse qu e tod o lo qu e
Espíriru Santo en los creyentes bau tizados. Cipriano ten ía para decir de la obra del Espíritu Santo estaba
En relación con la controversia suscitada a mediados del limitado a su relación con el bautismo. El don del Espíritu, que
tercer siglo en el none de África, en torno a la cuestión del según él se recibe en el mo mento del bauti smo, es una herencia
bautismo y el re-bautismo de los herejes, en la que Cipriano se que debe ser guardada y usada diligentemente por el bauti zado
involucró, hay un documento interesante que ilustra el pap el hasta el fin de su vida. Como parte de su propi o testimon io
del Espíritu en relación con este sacramento. Se trata del perso nal, Cipriano agrega:
Tratado sobre el re-bautismo, de un autor anónimo. En esta
obra se hace una distinción entre el bautismo en agua y el Pero si guardas el camino de la inocencia, el camino de la
bauti smo del Espíritu Santo. Cada uno es válido indepen- rectitud, si caminas con un paso firme y seguro, si, depen-
dientemente del 0((0, pero el segundo es dado por la imposi- diend o de Dios con todas tus fuerzas y con todo tu corazón,
ción de manos por parte del obispo. Después de afirmar que eres lo que has comenzado a ser, se te dará libertad y poder
..fuera de la Iglesia no hay Espíritu Santo .., el Tratado agrega: para hacer en proporción a tu crecimiento en la gracia del
..v por esa razó n, quienes se arrepienten y son corregidos por Espíritu. Porque no hay, como es el caso con los be neficios
la doctrina de la verdad, y por su propia fe, que subsigu iente- te rre nales, ninguna medida o restr icción en la dispensación
mente ha sido mejorada po r la purificació n de sus corazones, del don celes tial. El Espíritu fluyendo libremente no est<i
deben ser ayudados solo por el bauti smo espiri tua l, esto es, po r restringido po r límite alguno , no está ence rra do por barre-
la imposición de las manos del obispo, y po r la ministración ras dentro de ciertos espacios limitados. Fluye perpetua-
del Espíritu Santo » , 26 mente, es exube rante en su afluir. Dejemos qu e nuestro
Llama la atención el énfas is que pon e el Tratado en el corazón solo sea sedien to, y esté dispuesto a recibir. En el
ministerio del o bispo como ministrador del bauti smo espiritual grado en el qu e dispongamos de un a fe con capacidad, en
o llenura del Espíritu Santo . «Porque cuando por imposición esa medi da ext raeremos de Él una gracia desbordan te. De
de las manos del obispo el Espíritu Santo es dado a cada uno ahí en adela nte es otorg ado el poder, con castida d mod esta,
que cree, como lo hicieron los apóstoles en el caso de los co n una mente sana, con una voz simp le, con una virt ud

25. Ciprian o, Carta a Doneto, 5. 27, lbid., 3.


26. Tratado sobre el re-bautism o, 10. 28. lbid., 15.
176 LAACCIÓN DEL rsenrru SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO III 177

sin mancha, que es capaz de apa gar el virus de vene nos pa ra tenemos necesidad de una sant ificación diaria, que noso-
la sanidad de los enfermos, para purgar las manchas de las tro s que diariamente caemos podamos lavar nuestro s pe-
almas necias por la salud restau rada, para or denar la paz a cados por una santificación continua... Oramos pa ra que
aqu ellos que está n en enemistad, reposo al violento, ama- esta santificación permanezca en nosot ros... pedimos esto
bilidad al indomable, -por medio de pasmo sas amenazas día y noche, qu e la sant ificación y vivificación qu e se recibe
para forzar a los espíritus impuros y errantes que se han de la gracia de Dios pueda ser preservada po r su prorec-
metido en los cuerpos de los hombres a quienes se prop o~ ción.Jt
nen destr uir a darse a conocer, para forza rlos con fuertes
golpes a salir de ellos, para echarlos retorciéndose, aullan- De tod os modos, Cipriano advierte que es necesario ser
do, gimien do con aumen to de un dolor co nstantemente cuidadosos cuando de las manifestaciones del Espíritu se trata.
renovado, para golpearlos con azotes , para quema rlos con La herejía y la falsa profecía fácilmente se confunden con las
fuego. Allí se lleva a cabo la cuestión, pero no se ve. Los auténticas operaciones del Espíritu. y terminan po r provocar
go lpes infligidos están ocultos, pero la pena es manifiesta. engaño y escándalo. Sobre el parti cular. Cipriano cuenta un
Así. en relación con lo que ya hemos com enzado a ser, el caso interesante. que de tod os modos pone de manifiesto cuán
Espíritu que hemos recibido posee su propia libertad de vigentes estaban los dones carismáticos y las diversas ope racio-
acción.zs nes del Espíritu Santo en la iglesia del norte de África para
mediados del tercer siglo:
La unción del Espíritu es generosa. Según Cipriano, ..el
Espíritu Santo no es dado por medida, sino que es derramado De pronto se levantó entre nosot ros una cierra mujer, quien
tod o sobre el creyente ... sin diferencia de sexos. sin distinción en un estado de éxtasis se anunció a sí misma como
de años. sin acepción de person as, sobre todo el pueblo de Dios pro fetiza, y actuó como si estuviese llena con el Espíritu
fue derramado el don de la grada del Espíritu »} OFrente a un Santo. Y estaba tan movida por el ímpetu del demon io
regalo tan grandioso, los creyentes deben vivir vidas de santi- principal, que durante mucho tie mpo llenó de ansiedad y
dad. engañó a la hermandad, llevando a cabo ciertas cosas
maravillosas y po rtentosas, y prometió que ella haría que
Vivamo s com o tem plos de Dios, para que se vea que Dios la tierra se sacudiese. No era tant o que el poder del
mor a en noso rros. Qu e nuestras accio nes no se aparten del demo nio fuese tan grande como para que él pudiese lograr
Espíritu ; de mo do que los qu e hemos comenzado a ser sacudir la tie rra o pertur bar los elementos , pero sí que a
celestiales y espirituales, no poda mos conside rar y hacer veces un espíritu imp ío, presintiendo y percibiendo que
otras cosas sino las espiri tuales y celestiales ... Pedimos y habrá un terremoto, pre ten de que él hará lo qu e ve qu e va
rogamos que quien es he mos sido sant ificados en el beu tis- a suceder. Med iante estas ment iras y fanfar rone rías había
mo podamos continuar en aquello en lo que hemos co men- some tido tanto las mentes de los individuos, que ellos le
zado a ser. Y es por esto que ora mos diariam ente . Porque obed eciero n y siguieron adondequiera que él les mand aba
y con ducía. El también pod ía hacer que la mujer caminara

29. Ibid., Carta a Donato, 5.


30. Cipriano, Carta 69, 14. 31. Cipriano, Tratado sobre la oración del Señor, 11· 12.
178 LA ACCIÓN DEL ESpíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 111 179

en el invierno agudo con los pies des nudos so bre la nieve A pe sar d e su fuerte énfas is sobre el orden episcopal en la
congela da, y no sent ir molestias o daño de ningún grado iglesia , Cipriano es también fuertem ente ca rismá tico, si bien
por ello. Es más, ella diría que estaba ap urándose a ir a co ncentra el ejercicio d e lo s dones profét ico s en los ob ispos.
Judea y a J erusalén, fingiendo co mo q ue había ven ido de El m ismo, como obispo, testifica d e ha be r recibido n u merosas
allí. Aquí tambi én engaño a uno de los presbíteros, un revelacio nes a través de visiones, m uchas de las cuales so n
campesi no, y a otro , un diácono, de manera que ellos des critas en sus ca rtas.J" Este es un aspecto del testimonio de
tuv ieron relaciones sexuales co n esa misma mujer, lo que Cip riano qu e no siempre ha sid o suficientem ente toma d o en
poco despu és fue detectado . Porque de pro nt o se le a pare- cue nta . En realid ad , como señala Congar, «Al tratar d e la vida
ció uno de los exorcistas, un hom bre ap robado y siemp re de la igles ia antigua, es p reci so ha cer justicia a las visio nes,
de buena conducta con respecto a la disciplina religiosa, ad mo nicio nes, sugerencias atribuidas al Espíritu...35 En este
quien también estimulado por la exhortación de muchísi- sentid o , es interesante notar la ex p resió n de Cipriano en
mos hermanos que era n también fuertes ellos mismos y ocasió n d el concilio celeb rado en Ca rra go , bajo su presid encia,
dignos de alabanza en la fe, se levantó en contra de ese en la pr imavera del 252: «dete rmin amos, co n la in spiració n del
espíritu malvado para vencerlo, el cual además, por su
Espíritu Sama y el aviso del Señ o r po r medio d e repetid as y
falacia sutil, había predecido esto un poco tiempo antes, manifiestas visio nes...,,36 Así, pu es, como destaca C a ngar: «La
que un cierto carácte r adverso e incrédulo vendría. No
Iglesia quería ser d irigida por Dios; no sol? po r su Pa labra, sino
obsta nte, ese exorcisra, inspirado por la grad a de Dios,
po r las inspiracion es e indicaciones qu e El d ab a••)?
resistió bravamente, y mostró que aquello que antes había
El mismo comparti ó m ucha s de esta s revelaciones con lo s
sido considerado santo, era realmente un espíritu muy
fieles d e su congrega ción y co n el cle ro .
malvado.Jz
Fue mi deber no ocultar estas cuestiones especiales, ni
Así, p ues, la obra poderosa del Espí ritu Santo se ve tam-
esconderlas solas en mi pro pia consciencia, --cuestiones
bién en la man er a qu e o pe ra, a tr avés d e lo s creyentes, para
por las que cada uno de nosotros puede ser tanto instruido
lib er ar a las perso nas de la opresión demoníaca . como guiado. Y vosotros de vuestra part e no mantengáis
esta carta guardada entre vosotro s mismos, sino permitid
Porque así como los escorpiones y serpientes que reinan que los hermanos la tengan para leerla. Porque es el papel
sobre el suelo seco, cuando son arrojados al agua no pueden
de alguien que desea que su hermano no sea advertido e
valerse ni retener su veneno, así también los espíritus
malvados, que son llamados escorpiones y serpientes y son
pisoteados bajo nuestros pies por el po der dado por el 34. Véase, por ejemplo, Carta 7, 3·6. Sobre Cipriano y el don de profecía,
Señor, no pueden permanecer ya más en el cuerpo de un véase, Cecil M . Robeck, jr ., - Visio ns and Prophecy in the Wrirings of
hombre en quien, bautizado y santificado, com ienza a ser Cyprien-, Parac1ete 16, Summer 1982: 21-25. Sobre Cipriano y las
habitado por el Espíritu Santo ) 3 visiones, véase, Adolf ven Harnack, ..Cyprian als Enrhusiast», Zeits·
ehrift für neiaestamenúiche Wissenscharf 5 (1902): 177-191; y A
D'Alés, La théologie de Saint Cyprien, Cerf, París, 1922, 77-83.
35. Cangar, El EsPiritu Santo, 95.
32. Cipriano, Carta 74, 10. 36. Cipriano, Carta 57, 5.
33. Cipriano, Carta 75, 15. 37. Congar, El Espiritu Santo, 96.
180 LA ACCiÓN DEL EspfRITIJ SANTO EN LA H ISTO RIA EL C RISTIANISMO DEL SIGLO III 181

instruido int erceptar esas palab ras con las que el Señor N ovaciano (m. ca. 270)
condesciende amonestarnos e instruir nos.J ü
Novaciano era de origen frigio . Hacia el año 250 oc upaba
No obstante, estas visiones y revelaciones son solo para una posición influ yente en la iglesia de Roma. Fue ho mbre de
los ob ispos y sacer dotes, en qu ienes oficio y carismas se com- personalidad brillante, de gra n talento y erudición, aunq ue un
binan.J'' De modo que si los creyentes desean oír la voluntad tanto débil de carácte r. Se formó bien en la filoso fía esto ica y
de Dios, deben confiar en el ob ispo para que él la po nga de era maestro de retóri ca. Fue el prim er teó logo roma no que
mani fiesto . publicó libros en latí n y es, por lo tanto, uno de los fund ad ores
de la teología romana. Su lenguaje es culto; su estilo, esmerad o
Porque además de las visiones de la noche, duran te el día y muy estud iado , pero siemp re claro y sereno .
también, la edad inocente de los niños está entre nosotros En el contexto de las terri bles persecuciones de mediad os
que estamos llenos con el Espíritu Santo , vien do en un del ter cer siglo, Novaciano se opuso a aquellos qu e habían
éxtasis con sus ojos, y oyendo y hablando aque llas cosas negado la fe y qu erían reintegrar se a la Iglesia. Acerca del
por las cuales el Señor condesciende en advenimos e Espíritu Santo, Novaciano señala que, dentro de la Iglesia, Él
instr uirnos. Y vosotros debéis oír todas las cosas cuando el es el maestr o de toda verdad. El Espíritu Santo obra especial-
Señor, que me pidió que me alejara, me traiga de vuelta a mente medi ante la distr ibución de los don es carismáticos a la
vosotros ... Yo usaré ese pode r de admonición que el Señor Iglesia, par a qu e esta pueda cumplir con su misión en el mundo.
me pide que use.sü El Espíritu que o peró en los profetas de la antigüedad es el
mismo que obró en los apó sto les y que despué s de la resurrec-
Cipriano representa un punto de inflexión importante en ción fue dado por el Seño r a todos los d iscípulos. En un pasaje
la co mprens ión de los carismas y su ejercicio en la Iglesia desde sumamente inte resante y de gran valor testimonial, N ovaciano
los días de los apóstoles. Según Burgess, con «Cipr iano de señala :
Carrago culminó una tend encia entr e los escritores cristianos
antiguos qu e defendía la propieda d del carisma de pro fecía y El dio el Paracle to por necesidad a los discípulos, como
el ejercic io de ese don por par te del obispo par a sus pro pios para no dejarlos huérfanos en ningún grado, lo que era
pro pósitos, haciendo que el mismo, por lo tanto, careciese de poco deseable, y olvida rlos sin un defensor y algún tipo de
poder en las manos de orros- ru En las pa labras de James L. protector. Por que él es quien forta leció sus corazo nes y
Ash: «El carism a de profecía fue captu rado por el episcopado mentes, quien señaló los sacramentos del evangelio, quien
monárq uico, usado en su defensa, y dejado a mori r una muerte fue en ellos el iluminador de las cosas divinas. y ellos siendo
ina dver tida cua ndo la estab ilidad del verdadero ep iscopado lo fort alecidos, por el amor del nombre delSeño r no temieron
tra nsform ó en una herramienta superflua- ce- ni mazmor ras ni cadenas, y aun, incluso pisotearo n con sus
pies a los mismos poderes del mundo y sus torturas, dado
que fueron de aquf en adelante armados y fortal ecidos por
38. Cipr iano, Carta 7, 7.
3'1. Cipriano, Carta 68, 9·10.
el mismo Espíritu, teniendo en sf mismos los dones que este
40. Cipriano, Carta 9, 4. mismo Espíritu distribuye, y otorga a la Iglesia, la Esposa
4 1. Burgess, Ancient Christian Traditions, 86. de Cristo, como sus orna mentos . Él es quien coloca profe-
42. Ash, -T he Decline of Ecstaric Propbecy-, 252. tas en la Iglesia, instruye maestros, dirige lenguas, da
182 LA ACCIÓN DEL Es píRITU SANTO EN LA HISTO RIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO III 183

pode res y sanidades, hace ob ras marav illosas, o frece dis- Por otro lado , Nova ciano atribuye la perfección e integri -
cernimientos de espíritus, conce de poder es de gobierno, dad de la Iglesia a los do nes del Espíritu . Kydd señala sobre
sugiere consejos, y orde na y arregla cualesqui era otros esto: «No pienso que sea llevar las cosas demasiado lejos decir
dones de charism ata qu e haya. Yasí perfecciona y com pleta que Novaciano pond ría en dudas que la Iglesia pueda crecer
en todo a la Iglesia del Seño r en todas partes-u en la manera en que Dios quiere que lo haga sin que los don es
estén acttvcs-.« Su énfasis sobre la santidad en la vida de la
Nótese que Novaciano está hablando de «do nes de cbarís- Iglesia de sus días y sus altas normas mo rales presuponen la
mata», es decir, dones carismáticos. Esto lo coloca en línea co n operación del Espíritu Santo a través de sus do nes.s"
la enseñanza de Pablo en Romanos 12 y 1 Corintios 12. En su Tratado sobre la Trinidad, Novaciano presta suma
Evidentemente, Novaciano parece estar muy influido por la atenció n a la obra del Espíritu Santo, especialme nte en el
enseñanza apostól ica sobre los dones espiritua les. Esto se ve capítu lo 29 .48 Es interesante que inmediatamente después de
claram ente al com parar la lista de don es mencionados por el hablar sobre los dones, Novac iano pasa a d iscutir la vida
obispo rom ano con las listas de Pablo en Romanos 12.6-8 y 1 cristiana en general. Según él, es el Espíritu quien mejora la
Corintios 12.8-10. Cada uno de los don es mencionado por moralidad, edifica las relaciones entre las perso nas, y purifica
Novac iano tiene su co ntraparte en alguna de las do s listas a la Iglesia. Es en este contexto que afirma que el Espíritu Santo
pauli nas. Es más, a veces parece como que Novaciano se es ..el que produce el segundo nacimiento fuera de las aguas ...
ap ropia de las palabras mismas de! apóstol, como cuando dice: quien puede transformarnos en temp lo de Dios y hacernos su
«Ciertame nte, hay diversos tipos de deberes en e! Espíritu ».44 hogar, qu ien intercede ante los oídos divinos po r nosotr os co n
Pero, además, Novacia no no solo concuerda co n lo que gemidos ind ecibles, cumpl iendo los deberes de un aboga do, y
acerca de los do nes enseña el Nu evo Testamento, sino que desplegan do los oficios de un defensor, siendo dad o co mo un
parece que él mismo estaba muy familiarizado co n ellos y su mora dor de nuestros cuerpos y como alguien que pr oduce su
santidad-r' ?
ejercicio. Al menos, la manera en que él expone acerca del
Así, pues, para Novaciano, el Espíritu Santo no solo está
Espíritu Santo lleva a esta conclusión. Es e! Espíritu e! que
activo al com ienzo de la vida cristiana de cada creyente, sino
«coloca » profetas en la Iglesia, «instr uye maestros», ..dirige
ta mbién a lo largo de ella. De allí, la relación estrecha ent re la
lenguas», ..da» poderes y sanidad es, «hace» obras maravillosas,
operación pod ero sa del Espíritu y el proceso de santificación
etc. Todos estos verbos están en tiempo presente, co n lo cual
del creyente. «Realmente », dice No vaciano en cuanto al cre-
da la impresión como que el autor está simplemente descri- yente lleno del Espíritu, «este es quien tiene deseos contrarios
biendo lo que ocurría en su iglesia en sus días. Sobr e e! a la carne , po rque la carne lucha co ntra Él. Este es quien refrena
part icular, Kydd co ncluye: «Si es así, esto sería evidencia de la
presencia co ntinua de los don es del Espíritu entre los cristianos
en Rom a a mediados del tercer siglo».45 46 .íbid.; 6 1.
47. Véase Ronald A.N. Kydd, - Novatian's De Trinita te, 29 : Evidence oí
the Chari smaricb- Scottis h journa f of Theofogy 30 (1977): 3 13-3 18.
43. Novaciano, Tratado sobre la trinidad, 29. 48. Sobre el partic ular, véase, Russell J. DeSimone, The Treat ise cf Nov a-
44 .íbid., 29.4 . Esto recuerda [a expresión de Pablo: «Ahora bien, hay tian, the Roman Presbyter on the Trillity Instirnrum Parristicum Agus-
diversidad de dones- tinianum , Roma 11970,143 ; 147. 148; Y 158.
45. Kydd, Charismatic Gifts, 62. (l Corintios 12.4 -6). 49. No vaciado, Tratado sobre fa Trinidad , 29.16.
184 u.. Aca ÓN DEL EsplRffiJ SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 111 185

Jos anhelos insaciables y a pasionados , rompe con la lujuria cont ra. Este discurso le colocó el ep íteto de disi de nte y be re-
desconrronada, saca el ardor ilícito, conquista los impulsos siasca, y co n ello, incluso su testimon io de la obra del Espíri tu
flagrantes, po ne a un lad o la borra che ra, te rmina con la codicia, en sus dí as cayó también en descrédi to y cuestionamienro . No
evita los excesos disolutos... aba nd on a lo impuro •.so Al igual obstante, su Tratado sobre la Trinidad resultó ser la mayor ob ra
qu e Pablo (véase Gálatas 5 .16-25), Novaciano considera que teo lógica en latín que se haya producido en Roma en su tiempo .
solo el Espíritu puede obrar esta conducta en el cre yente. Pero Co mo tal, este escrito es un buen testi monio no so lo de la fe
su obra va todavía más allá, ya qu e es el Espíritu el que liga en sino también de la práctica de los cristianos en Roma a media-
amor a los cristianos y quien pro duce en nosotros su buena do s del tercer siglo. Y, lo más interesante e innegable, es que
vol unrad.n Esto significa, que el Espíritu es qui en une a los Novaciano da evidencias de qu e los don es del Espíritu estaban
cristianos en la Iglesia y crea la co mu nió n ent re ellos. De igua l vigent es en sus días en la iglesia roman a.
mo do, es el Espíritu qu ien ..repele a las sectas, prepar a la regla
de la verdad, y refuta a los herejes..; y es el Espí ritu qui en
..guarda pura e inviolable a la Iglesia por la santi dad de un a
Gregorio Taumaturgo (ca. 213-ca. 270 )
virginidad ininterrumpida y de verdad », H Su apodo significa «obrador de maravillas». Nació en
Todo esro, lleva a Kydd a concluir: «Cuando revisamos Neocesarea (en Pomo, Asia Menor) en una fam ilia rica y noble.
Sobre la Trinidad, 29, par ece qu e N ovaciano consideró al Su padre era devoto de de idad es pagan as. Cuando Gregario
Espíritiu como mu y act ivo en su día . Él no está interesado en tenía 14 años, su padre muri ó y él com enzó a estudiar con el
primera insran cia con lo que hab ía ocurr ido en algún tie mpo famoso teólogo ale jand rino O rígen es, bajo cuyo tur elaje se
anterior en la historia; él está relatando lo que estaba ocurrien - convirtió en un fiel cristiano. Orígenes le enseñó a pensar
do en su tiem po ...53 Efectivamente, su testi mo nio de la acció n críticament e, y a ser un investiga dor en filosofía, física y ética.
del Espíritu Santo en cuestiones tan vita les en la vida del Más tarde Gre gario ponderar ía a su maestro co mo alguien qu e
cristiano y la Iglesia como la uni dad, la sant idad, la o ración, el lo entre nó a través del carisma divino, hablando como aqu ellos
bautismo, y la en trega y operación de los dones espirituales, es que profetizan e inte rpre tan las palabras místicas y di vinas.54
sumamente valioso . Sobre todo, es evidencia clar a de qu e para Al terminar sus estu dios, alrededo r del año 230, Gregario
mediados del tercer siglo, los don es y ma nifestaciones del reg resó a su ciudad natal, donde tu vo un éxito extraordinario
Espíritu Santo estaban vigentes entre los cristianos en la ciudad en llevar a la co nversión a su pueblo . -Los métodos de Gregario
de Roma. estaban bien adaptados a su propósito . A los milagros pagan os
No o bstante, el problema co n Novaciano fue qu e, al igual él o puso los cr istianos y expuso las prácticas fraudu lentas de
que H ip éliro, en un momento de su vida, se co locó co ntra los los sacerdotesc.rr La co nversión de N eocesarea fue asombrosa.
representantes del cris tianismo estab lecido o tron cal. Esto lo Según su discípulo, Gregario de Nyssa, había tan solo 17
cristiano s. Cua ndo Gregar io Taumat urgo murió cua renta
ma rginó y silenció, y creó un nuevo discurso - o ficial.. en su
años más ta rde , en Neocesarea había solo 17 que no eran

50. lhid., 29,18 -19.


51. lbid., 19. H. Grega rio Taumaturgo, O ración y panegmco dirigidos a Orlgenes, 15.
52. lbid., 26. 55. Kennerh S. Larourette, A History of the Expansion of Christianiry, 7
H. Kydd, Charismatic Gifts, 63. '0'0[5. Zo ndervan, Grand Rapids, 1970, 1:90.
186 LA ACCi Ó N DEL t snarru SANTO EN lA HISTORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 111 187

cnsríanos.se [C ómo fue que se logró tal conversión masiva? de la gracia, tanto en palabra co mo en acción , una luz
Por lo menos cuatro de los pad res de la iglesia responde n a esta pa reció estar brillan do siemp re, muestra del poder celestial
pregunta. Uno de los herederos espirituales de Gregario fue de lo invisible que lo siguió. S8
Basilio de Capadocia. En su famosa ob ra Sobre el Espíritu
Santo, Basilio arg uye que Gregario debería ser co locado entre G regario de Nyssa, otro de los segu idores de G regario
los apóstoles y profetas como una perso na que caminó por el Taumatu rgo, escribió un ensayo sobre su predeceso r, que
mismo Espíri tu que ellos. Dice Basilio: procura explicar el éxito evangel ístico del obrador de milagros.
A 10 largo de su obra, el autor asume que los milagros y otros
éPo r ventura no colocar emos ent re los apóstoles y los fenómenos sob renatu rales obrados a través del Taumaturgo
profet as a este hombre que ha tenido por guía, como ellos, resultaron en conversiones masivas.J? Severo de Amioqufa
al Espíritu Saneo, que durante toda su vida ha realizado a afirma que G regario T aumaturgo recibió to dos los dones del
la perfección la conducta evangélica? sr, yo Jo proclamo; Espíritu y rea lizó to do tipo de acciones podero sas. incluso secó
faltaríamos a la verdad si no contásemos a esta alma en el un lago y detuvo un río. Según él. el Ta umaturgo llevó a cabo
número de aqu ellas que estu vieron unidas a Dios. Gregorio sanidades. liberó a personas del erro r pagano. y recibi ó cono-
fue como una lumbrera luminosa que resplandeció en la cimiento por medio de la revelación divina.w En su historia de
iglesia de Dios .S1 la iglesia pr imitiva. el historia dor del cuarto siglo. Sóc rates.
informa que los paganos no estaban me nos atraídos a la fe
El mismo Basilio y Máximo (Homilía 54) certifican la cristiana por sus hechos maravillosos que po r su s palabras.
mu ltitud de sus milagros y profecías. que valieron a Gregario Seña la Sócra tes que muchos milagros. sanidades de enfermos
el sob renombre de ..taumaturgo... es decir. obrador de mara- y expulsión de demonios se produjeron por medi o de sus
villas o milagros. Especfficamenre, Basilio informa que po r la carras.et Jeró ni mo. qui en nos provee co n el directo rio más
operación con junta del Espíritu. Gregario tenía un pode r antiguo de la Iglesia. ha bla de informes que circulaban a fines
tr eme nd o sobre los demonios. y estaba tan dotado espi ritua l- del siglo IV y comien zos del V en el senti do de que los escritos
mente que su evangelismo era dramáticamente exitoso. Basilio de G regario er an superad os por las señales y marav illas qu e
en umera algunos de los mi lagros atribui dos al ministerio de aco mpañaban su evangelización. trayendo gran gloria a las
G regario . la lista inclu ye su min ister io de pr ofed a y el desvío iglesias. 62
del curso de ríos . Y co ncluye: A la luz de estos testi monios. lla ma la atención que el más
gra nde de los historiador es eclesiásticos de este período, Euse-
Por la superabunda ncia de dones, ope rados en él por el bio de Cesárea, guarda silencio en cua nto al carácter milagr oso
Espíritu en todo po de r y en señales y en maravillas, él fue
catalogad o como un segundo Mo isés por los ene migos
mismos de la Iglesia. Así, en todo lo que él logró a través
58. íbid.
59. Grcgory de Nyssa, Vida de San Gregorio Taumaturgo, 46.
60. Citado en Burguess, The Holy Spirit: Eastem Christian Traditions,
56. Gregcric de Nyssa, Vida de San Gregario Taumaturgo, 46. V éase Fox, Hendrickson Pubhshers, Peabody, Mass, 1989, 206.
Pagans and Christians, 517-542. 6 1. Sócrates, Historia edesiastíca, 27.
57. Basilio de Capadocia, Tratado sobre el Espfritu Santo, 29.74. 62. Jerónimo. Vidas de hombres ilustres. 65.
188 LA ACCIÓN DEL Es píRITU SANT O EN LA H IST O RIA E l. CRlSTIAN ISM O DEL SIGLO 11I 189

del ministerio de Gregario y no lo llama Ta umaturgo.es Sobre tiempo se lo llegó a conocer com o «el Ilumin ador», por causa
el partic ular, come nta Stanley M. Burgess: de la eficacia de su labor apostólica y po r haber iluminado a la
nació n armenia con la luz del evangelio.
La fuente principa l para co no cer la vida y obra de este gran
Este silencio ha sido aprovechado por los «demitologiza-
ho mbre de Dios es el historiador Agathángelos. Según él,
do res» mo dernos pa ra sugerir que ellos [los testi monios de
Gregario «expuso tod as las palabras del Espíritu Santo en
señales y prodigios] eran mera mente ficciones de las ima-
ginaciones de los discípulo s. Pero tal argumento, basado
debido orden y explicó su interpretación po r el poder del
mismo Espíritu».65
sobre evidencia negativa - basado sobre la ausencia de
evidencia a favor o en contra- no demuestr a nada. Los Para Gregario, el Espíritu Santo es el Espíritu creador, que
mismos eruditos argumentan, además, que las tend encias se movió durante la creación sobre la faz de las agu as y el mismo
filosóficas y reflexivas de Grega rio habrían sido incompa- que descendió sobre Jesús en la for ma de paloma durante su
tibles con un ministerio qu e evidenciara un -e vangelismo bautismo. Este Espíritu creativo es ta mbién el qu e recrea a
de pode r». Uno no puede menos que preguntarse cómo, rodas aquellos que vienen a ser renovados po r el bautismo. Es
dado este razonamiento, pueden ellos aceptar tan gustosa- él qu ien «abre de nuevo la matriz mediante el agu a visible,
mente la misma mezclaen la vida de San Pablo (d . Hechos preparando a los nacidos de nuevo el plumaje nuevo por la
17.28 y Romanos 15.18-19).64 regeneració n de la fuente, para vestir a to do s los que nacerán
una vez más con ropajes de luz».66
En Pentecostés, enseña Gregario en su Catecismo (obra
Gregorio el Iluminador (ca. 240-325) atr ibuida a él por la tradició n armenia), la obra del Espíritu
Santo se reveló a la humanida d.s? La venida del Espíritu como
Según el historiador griego Sozó menos, los arme~ios fue-
Consolador fue asombro sa e inco rnprensible.sf El fue enviado
ro n los prime ros en aceptar la fe cristiana corno nación. El
desde la gloria divina a los que estaban reu nidos en el aposento
promot or de esta con versión fue el hijo de un nobl e armenio,
alto, a fin de atraer a los santos a sí mismo y confirmarles la
qu e fue educado como cristiano en Cecarea de Capadocia (Asia
ob ra completa llevada a cabo po r Crisro.e? En aquel día, Él se
Menor) , donde los cristianos eran muy numerosos por ese
tiemp o. Su nombre cristiano fue Gregario. Despu és de muchas
peripecias, pudo regresar a su país, do nde sus enseñanzas
fuero n mu y bien recibidas. Por to da Armenia se destruyero n 65. Véase, Roben W. Thomson, ed., Agathangelos: History of the Arme-
nia ns, State University oí New York Press, AJ bany, N.Y., 1976, 267,
los ídolos, los templos pagan os fueron limpi ad os de idolatría 371.Agathangelos escribió una Vida de Gregario, que estásaturada de
y consag rados como iglesias cristianas, y much os sacerdotes se relatos Iantasticcs y muchas historias de milagros. La obra fue compi-
incorporaron al clero cr istiano. Grega rio, que hasta ento nces lada alrededor del año 450.
no hab ía tenido ninguna posición eclesiástica, fue consagrado 66. Gregorioellluminador, Catecismo, párrafos 412-414. Para el textodel
como el primer ob ispo de Arm enia, en el año 294. Con el Catecismo, véase, Roben M. Thomson, ed., The Teaching oi Sto Gre-
gory: An fAr ly Armenian Catechism , Harvard University Press, Cam-
bridge, Ma ss., 1970).
67. Ibid., párrafo 670.
63. Eusebio de Cesárea, Historia eclesiástica, 6.30 . 68. Ibid., párrafo 500.
64. Burgess, -Prcclaiming the Gospel-, 281. 69. lbid., párrafo 505 .
190 LA ACCIÓN DEL EspfRlTU SANfQ EN LA HI STORIA EL CRISTIANISMO DEL SIGLO 111 191

reveló como fuego, de modo que «los malvados se que mase n río abundante de la salvación, con copas de gozo y de amo r
y los elegidos fuesen llenos co n las copas de gozo del Espíritu, llenas po r fuentes de un fluir perperuo.zs
co n los dones del tesoro inagotable que jamás deja de ser ». G regario también se refiere frecuen temente al Espíritu
Llenos hasta rebosar con el Espíritu, estos primeros cristianos co mo paloma. Es sobre sus alas que los evangelistas de Cristo
fueron iluminados por el pod er de su natu raleza ardienre.Zv A son levan tados. Es así como los apóstoles pro fetizaron, habla-
medida que ellos compartían este fuego del Espíritu con gozo, ron en todas las lenguas com o para enseñar a todas las nacio-
los apóstoles se embriagaron con la co pa de la profecía, y se nes, y recibieron revelaciones y visiones. De igual modo.
transformaron en portadores de esa copa a través de toda la fuero n capacitado s para revelar los misterios de la Palabra
tierra, dando de beber en el banquete de la boda del reino a i nefabl ~ y del matrimon io ete rno de Cristo con su Ig1esia.79
los que estaba n espiritualmente sedientos . Este mismo Espíritu le dio conocimiento para entender la
El Espíritu se reveló como fuego (o lenguas de fuego), unidad consustancial de las tres personas de la T rinidad. así
dan do a entender co n esto el horno que quema los pecados, como para compr ender las pro fecfas del Antiguo Testamento
primero de los apóstoles y luego, en razón de sus esfuerzos. y ser guiados a toda verdad. Ellos fueron llenos co n el fluir del
aquellos del resto del mundo.Zt El fuego fue el agenre santi fi- pode r del Esptn ru.sc Fue bajo su influencia que tuvieron éxito
cador del Espíritu ,72 Así. pues, los apóstoles recibiero n en sus en cu mplir con la misión que el Señor les había encomendado .
bocas el fuego de la vida del Espíritu. y con ese fuego ellos Pero esta obra poderosa del Espíritu no terminó en Pen-
puri ficaro n la sal del mundo. sazonando a todos po r el fuego.za tecos tés ni se agotó con los primeros apóstoles. La gracia del
De este modo, se transformaron en antorchas encendidas co mo Espíritu se reveló y fue derramada sobre toda persona. hacien-
en un candelero. esto es, sobre la cruz,74 Dice Grega rio: -Los do de cada uno alguien digno de la nueva gracia de la Deida d.e!
justos han sido metidos adenrro del horno de la justicia y Aquellos que han visrc a Dios y han sido llenos y embebidos
teñid os con los times y colores del Espíritu Santo ..,7S con el Espíritu han co ntinuado sirviendo al Señor con gracia y
Otra imagen que utiliza Gregario para referirse al derra- poder de lo alto. De este modo , la tr adición posterio r reco no-
mamiento del Espíritu es la de una pode rosa inundación de ció también en Gregario la operación poder osa del Espíritu
aguas, que en los últimos días viene sobre muchos pueblos.zs Santo. Si bien es necesario ser cautos en aceptar todo los
Según él. el Espíritu de rramó para ellos la du lzura de las prod igios y maravillas que le son atrib uidos, especialmente po r
fuentes, y -de la fuente de luz ellos bebieron gracia » , n Los Agatbangelos, es posible concluir que la acción pod erosa del
apóstoles trajeron renovación a todo el mund o mediante el Espíritu era tenida como actual en sus días.
agua y el Espíritu, tr ayendo con ello el vasto mar de la paz y el

70, íoid., párrafo 507.


71. lhid., párrafo 682.
72. lbid., pár rafo 676.
73. Ibíd., párrafo 681.
7~. íbid., párr afo 683. 78. lbid., pár rafo 682 .
75. Ibid., pá rrafo 170. 79. uu.; párr .afo 699.
76. lbid., párr afo 67 1, so. Ibid., párr.afo 674 .
rt. íbid.. párrafos 546 y 68 1. 81. Ibid., p árrafo 673.
H CRISTIANISMO
INSTITUCIONALIZADO

ID
acia com ienzos del siglo IV, el cristianismo 10gr6
, superar, al menos en el oeste, las enormes presio-
• nes que significaro n las grandes persecuciones de
las décadas anteriores. Con la «conversión» de
Constantino (añ o 3 12) la suerte del crist ianismo en el ámbito
del Imperio Romano, com enzó a cambiar. De religión perse-
guida pasó a ser la religión favorecida por el Imperio. hasta
que co n el emperado r Teod osio se transformó en la religión
oficial del Estado romano (37 9). Estos cambios rad icales de la
situación respecto del poder político afectaro n profundamente
al cristianismo en general. Con ellos, se logró una mayor
libertad para el testimonio cristiano, se produjo un gran creci-
miento num érico, y la cultura recibió un impacto más profun -
do de las in fluencias cristianas. No obsta nte, las condiciones
más favorables relajaron las conviccio nes cristianas, la ética, el
194 LA ACCiÓN DEL EsrfRlTU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO INSTITUCIONALIZADO 195

celo evangelístico y misionero, y el compromiso con un estilo de su co ntinua o peración en la iglesia. la imp resión general que
de vida según el evangelio del Reino. quedaba en la mente popular era la de su trascendencia y no
El cristianismo se fue institucionalizando poco a poco, de su inman encia..)
ced iendo a las pr esion es imperiales, que apetecían utili zar la Además. a partir de com ienzos del siglo IV, el inexorab le
fuerza cohesionante de la fe cristiana para lograr los fines proceso de institucionalización y cristianizació n fue liquidando
políticos de la unificación del Imp erio en. dec.ad encia. Fue el ejercicio de los carismas por parte del pueblo, y fue licuando
inevitable qu e las iglesias y su liderazgo se rmmenzaran con las la fe de este en la operación pod erosa del Espíritu a tra vés de
estructu ras del Estado, y a la som bra de su protección, apren- señales. prodigios y maravillas. Así comenzó el pa radi gma de
dieran a confiar más en los mecanismos del pod er humano que la cristiandad, que sigue todavía vigente en nuestros d ías, si
en la efusión del Poder divino. Es así que el proceso de bien está en franca decad encia. En este par adigma, la Iglesia
institucionalización del cristianis mo estuvo acompañado de (ek-klesia, «la asamblea de los llamad os afuera..) pasó a ser la
una des-earismatizaci6n proporcional. congregació n de los «llamados ade ntro » , La Iglesia, el mundo
Sumad o a estos factores socioló gicos y espirituales, cabe y el Imper io era n una sola cosa. Ser ciuda dano del Imp erio era
mencionar las crecientes cont roversias teológicas que plagaron ser cristia no y viceversa. Ciudadanía imperial y condició n
este pe ríod o . La fe implíc ita en las Escritu ras debía ser.explici. cristiana llegaro n a ser sinónimos. El pod er de la carne com en-
rada mediante fórmulas teol ógicas. Pero no tod os co incid ían zó a imponerse sobre el poder del Espíritu, por lo menos en
en dar las mismas respu estas a los interrogantes qu e la fe y la Occidente.
práctica cristiana suscitaban. Primero, hubo que resolvez: :1 En este contexto. el sacerdocio universal de los creyentes
problema de la relació n ent re las Person as de~tro de la Trini- dio lugar al surgimiento de un clero. y este clero se rransformó
dad . Luego. la relació n entre el Padre y el HIJO. Adem ás, fue en el sfmbolo de lo sagrado . Los caris mas qu e habían estad o
nec esario afirmar la di vinidad del Espíritu Santo y la cuestió n en manos del pueblo, pasaron a ser el ejercicio exclusivo de los
de su procedencia, co mo también discutir la naturaleza huma- líderes de la Iglesia. Los clérigos se transformaron en los únicos
na y divina en Cristo . dispensadores del minister io de la Palabra al pueblo espiritual-
Es en este tiempo de tanta controversia y conflicto que se mente ignorante. Fueron ellos los únicos capaces de ministrar
formula una doctrina del Espí ritu Santo y se afirma su divi ni· a los enfermos y afligidos; los capellanes imperiales que se
dad. Pero esto mismo suscitó otros problemas, qu e todavía no' ocupaban d e manten er el consenso culrural y el conrrol social;
se han resuelto. Co mo señala Paul Tillich, desde que el Co nci- los d irectores de las cerem on ias públi cas de ad oración y los
tia de Cons tantino pla en el año 381 declaró la divinidad del ritos de pasaje como el bauti smo, la confi rmación, el marr imo-
Espíritu Santo en el mismo sentido qu e la del Hijo. el Espíritu nio y la muerte. Fueron los miembros del clero los únicos que
comenzó a ser reemplazado pro gresivamente en la pieda d podía n hablar en lenguas. en realidad, en la única lengua
popular por la devoción a la virgen María) Sobre el particular, religiosa o ficial: el latín. Los úni cos que pod ían ungir con aceite
Stanley M . Burgess co menta qu e «mient ras ciertos padres de la para sanidad ; los únicos que podían exo rcizar a los endem o-
iglesia del siglo cuarto escribieron efectivamente acerca del niados ; los únicos qu e pod ían ten er palabr a de ciencia o de
papel vital del Espfritu en el acto redentor de Dios, e inclu so sabiduría; los únicos autorizados para inter pretar las Escrituras.

t. Ti llich, Pensamiento cristiano y cult ura en occidente , 78 . 2. Burgess, Anc íent Christian Traditions, 98 .
196 LA ACCiÓN DEL Es pjRlTIf SANTO EN U. HISTORIA EL CRISTIANISMO INSrrruCIONAUZADO 197

De este mod o, es a parti r de este período y bajo estas circuns- Él era un hombre prejuicioso. Sus convicciones teológi-
rancias que comienza a rob ársele al pueblo creyeme el derec ho cas se metieron en el camino de su imparcialidad histó -
a ejer cer los carismas bajo la guía del Espíritu y el privilegio de rica, y esro no es más cierto en ningún otro lugar que
servir como agentes del poder recibido por la presencia y cuando él está tr atando co n la herejía o los perseguido-
operación del Espíritu. res. En el caso de aquellos que han distorsionado la fe
No obstante, a pesar de ingresar a un nuevo paradigma en verd adera , él jamás les perm ite hablar por sí mismos sino
el desar rollo del cristianismo, es pos ible descubrir la acción del qu e siemp re filtra sus ideas a través de escrito res «o rto -
Espíritu Santo, según es testificada por muchos escrito res de doxos". Trata las fechas de los grupos herej es como pa ra
este per íodo . Algunos de ellos constituyen la expresión máxi- hacerlas aparecer lo más recient es posible, reduciendo
roa del proceso de institucionalización y cristianización, por 10 así la credibilidad de sus redamos de ser legítimos suce-
que su testimonio tiene un especial valor documental. sores de los Apóstoles.3

Así, pues, el testi monio de Eusebio está profundamente


Eusebio de Cesa rea (ca. 260-339 )
condicio nado por su posición como teólogo de la corte imp e-
Destacado teólogo, considerado como el «padre de la rial, lo cual le quita capacidad crí tica y objetividad . En un
historia eclesiástica», nació alrededo r del año 260 en Palestina. sentido, el casami ento de la Iglesia y el Estado que se produjo
Pasó su juventud en Antioquía y Cesare a y fue discípulo del a partir de Constanti no, significó un a profundización del
exégeta y mártir Pánfilo (ca. 240 -309) . Ganó el favor del proceso de instituc ionalización de la Iglesia y la disminución o
emperador Constantino y fue no mbra do obis po de Cesa rea pérd ida de la frescu ra y espontaneidad carismática, que la había
(3 13) . Desempeñó un pap el important e en el Co nci lio de N icea caracterizado en siglos anre rio res. Eusebio mismo contribuyó
(325) , donde actuó como aseso r confi dencial del em perador y mucho a este proceso, especialmente con su rechazo radical del
como jefe del partido moderado o semia rriano, que se oponía movimient o mo nta nista. Su preocu pación mayor era con servar
a la discusión sobre la natu raleza de la T ri nida d. Más tarde, el status qu o favorable logrado co n Consta nt ino, más qu e la
fue presidente del Síno do de Tir o (335), don de se condenó y liber tad del Espíritu manifes tá ndose de maneras poco co ntro-
exiló a Ata nasio (296-372). Fue co nsejero de la corte de lables e impredecibles.
Consranrino y un escritor prclffico, si bien no se destac ó co mo No obsta nte , aun en su ataque con tra el mont anismo,
pensador original y profundo . Su obra cumbre es la Historia Eusebio tiene que admitir la vigencia de los dones del Espírit u
eclesiástica, que trata desde la fun dación de la Iglesia hasta el como clave para entender y explicar la rá pida expansión de
triunfo de Constantino sobre Licinio. M uchos aco nte cimie ntos este movimie nto en el co razón de Asia Menor. En su Historia
de la historia del cristianismo antiguo los conocemos a través eclesiástica, señala: «Fue en ese mismo tiempo, en Frigia, que
de esta ob ra. Montano, Alcibíad es, Teodoto y sus seguido res come nzaro n a
El interés qu e Eusebio tenía en el pasado, lo llevó a adquirir una reputación amplia en cuanto a la profecía ; pues
co nsiderar y evalua r las ma nifestaciones del Espíritu Santo, numerosas otras man ifestacio nes del don milagro so de Dios,
especial mente en la segunda mita d del siglo 11. Sin embargo, si qu e todavía ocurrían en muchas iglesias, llevaro n a muchos a
bien su aproximación histórica es co herenre y ad ecuada, su
evaluación de los hechos qu e narra está plagada de prejuic ios.
Como indica Kydd : J. Kydd, Charismatic Gifts, 47.
198 LA ACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN lA HISTORIA EL CRISTIANISM O INSlTfUCJONAUZADO 199

creer que estos hombres también eran profet as- ce Esta es la cristianismo qu e po r su vita lidad espiritual. Es por esto que su
manera en que Eusebio explica la rápida difusión del monta- reacción contra el montan ismo es tan dura y negativa. Con
nismo hacia fines del siglo JI. Nótese que, según él, el hecho gra n caus tic idad califica a la «N ueva Profecía» de «seudo-pro-
de que en ese tie mpo muchas iglesias todavía ejercían Jos dones fecía» y «nove dad». De igual mo do , les recuerd a a sus lectores
del Espír itu, fue un contexto favorab le par a la expa nsión de la la d istinción que hizo Jesús entre profetas falsos y verdaderos.s
N ueva Pro fecía, como se denominaba en ese tiempo al mo nt a- Es más, en el caso de los montanistas, él no tiene dudas de que
nismo . Los creye ntes y las iglesias esperaban ver manifesta cio - están inspirados por el diab lo y no por el Espír itu Sanro.s Este
nes sobrenatu rales del Espíritu Santo en aquel entonces, tal espíritu engañador es calificado por Eusebio co mo «espí ritu
como quedó probado al considerar otras fuentes del siglo 11. arrogante», qu e «denigra a toda la Iglesia Cató lica por to do el
Además, co nvien e aclarar que el ataque de Eusebio contra mun do, porque el espíritu de seudo-profecía no recibió ni
el mo nta nismo no significa su negación de la vigencia y valor hon or ni adm isión a ellacre
del don de profecía o de otros caris mas en la iglesia de sus días . Sin emba rgo , en el caso de Eusebio mismo, en su comen-
En su obra Preparación para el evangelio, Eusebio habla del tario sobre Isalas, el padr e de la hisrori a eclesiástica compara
Espíri tu Santo y seña la que «Él sup le a aquellos que están el po der y las acciones de los serafines con los santos hombres
debajo de los po deres superiores (que está n) en Él mismo». Y de Dios que co mparte n los car ismas más excelentes, tales como
agrega qu e e! Espíritu rec ibe del Padre, a través del Hij o, los profecía, sanidades, resucitació n de muert os, hablar en len-
dones qu e Él dispensa «a aquellos que en par te so n dignos a guas, y sabiduría y conocimienro .tt Su discusión del Salmo
través de la ministraci ón y med iación de! Segu ndo (el Hi jo), en 78.18 inclu ye un a comparación del rayo qu e acompaña a una
la med ida alcanzable po r cad a uno». Y El mismo «es gobe rna- to rmenta co n los carismas del Espíritu Santo, con los cuales la
dar y líder de aquellos que le slguenc! iglesia ha sido adornada.tt
En dos ocas iones, Eusebio se refiere positivam ente a indi- La conclusión de Burgess sobre la posición de Eusebio en
viduos qu e manifesraron una vida llena del Espíritu . El primero cua nto a los ca rismas es:
es Cuadrato, quien al igual que las hijas de Felipe, era conocido
po r sus dones proféticos. De él y de otros «sucesores de los A través del curso de la historia cristiana han habido figuras
apóstoles» (como los llama Eusebio), dice que «muchos pode- clave que ha n colocado la unidad en la Iglesia por encima
res milagrosos del Espíritu divino operaban a través de ellos, de cua lesquiera otras consideraciones. Eusebio se destaca
de mo do qu e al oírlos po r pri me ra vez mu ltitudes enteras co mo como un a de las gra ndes voces en favor de la uni dad en el
un cue rpo abrazaban con ent usiasmo sincero la adoración de! siglo cua rto. Por causa de la unida d, aceptó las decisiones
Creador universa l- ce El otro caso es el de M elitón de Sar dis, del Concilio de Nícea, incluso cuan do iban más allá de su
«el eunuco, que vivió enterame nte en el Espíritu Santo»'? propia pers uasión doctrinal. Atacó a la Nu eva Profecía, no
No obstante, quizá s influido por su imperial protector, porque desdeñara a los carismas, sino más bien porque
Co nstantino, Eusebio estaba más preocupado por la unidad del

8. Ibíd., 5.16.4.
~. Eusebio de Cesarea, Historia eclesiástica, 5.3. 9. Ibid.
5. Eusebio de Cesárea, Preparación para el evangelio, 7.15. ro. Ibid.
6. Eusebio de Cesarea, Historia eclesiástica, 3.37.4. 11. Eusebio de Cesares, Comentario sobre balas, 6.2.
7. íbid., 5.24.5. 12. Eusebio de Cesarea, Comentario sobre Salmos, 77.18.
200 LA ACCIÓN DEL EsplRlTU SANTO EN U HIST0R.L\ EL CIUST1ANISMO IN5rrruC10 NAU ZADO 20 1

despreciaba el abuso pro fético de practicantes auto-procla- Luego cita Romanos 8.14-15 y 1 Cori ntios 12.3·11, y
mados que ope raban fuera de la iglesia tro ncal.lJ 3grega: ..Aquí tenemos una declaraci6n del prop6sito y resul-
t3dos del Don ; y no puedo con cebir qué duda puede qu edar,
Hilario de Pciriers (ca. 300-367) después de una definición tan clara de su O rigen, su acci6n y
sus poderes... 15
Na ció de nobles padr es gentiles. Se dedicó al estu dio de Hilario ani ma a sus lectores a utilizar al máximo al Espíritu
las filosofías griega y judía sin hallar en ellas lo que buscaba: la Santo, com o don de Dios: . . Por lo tanto, hagamos uso de este
verdad sobr~ <:1fin último delser humano. Ensu obra principal gran beneficio, y procuremos la experiencia personal de este
Sobre la Trinidad cuenta cóm o halló la verdad en los libros Do n tan necesario». Así co mo ciertas facultades del cuerpo
sagrados. En el año 355 fue nombrado obispo de Poitiers, pero
humano permanecen dormidas si no son utilizadas, ..así tam -
poco después fue desterr ado a Asia Men or (356-360). A su
regreso, luchó por la victoria de la ortodoxia, al punto que bién el alma del hombre, a menos que por la fe se haya
llegó a ser para Occidente lo que Atanasia fue para Oriente. apro piado del don del Espíritu, no tendrá la facultad in nata de
Celoso enemigo del arrianismo, se dedicó a combatirlo mien- aprehender a Dios, sino que estará pr ivada de la luz del
tras desplegó una actividad incansable como obispo en Galia. conoci miento... A esto agrega:
Hilario murió en el año 36 7, dejando tras suyo una amplísima
obra escriba. Entre sus obras se cuentan: Sobre los Salmos Ese Don, que es en Cristo, es Uno, y no obstante , es
Sobre San Mateo y Tratado de los misterios. Es considerado ofrecido y ofrecido plenamente, a todos; no es negado a
un? de los grandes himn61ogos latinos. En realidad, fue él nadie, y es dado a cada uno confo rme a la medida de su
qui en p ~obabl ~mente introdujo en Occidente el canto litúrgi co d isposición a recibir ... Este don está con nosotros hasta el
de los fieles. Sin embargo, no le resultó fácil imponerlo entre fin del mundo, es el solaz de nuestra espera, la segurida d,
los galos a causa de la exte nsi ón y profundidad excesivas de po r los favores que Él concede, de la esperanza que ser á
los himnos compuestos por él. nuestra, la luz de nuestras mentes, el sol de nuestras almas.
Hilario se refiere a la obra santificadora e iluminadora del Este Espíritu Santo debemos nosotros buscar y procurar, y
Espíritu Santo haciend o referencia a Juan 16.12 -14 . Y señala: luego afirmarnos por medio de la fe y la obediencia a los
mandamientos de Dios.t e
Estas palabras fueron habladas para mostrar de qué manera
las multitudes debían entrar al Reino de los cielos; ellas
Hilar io tiene varias referenc ias a las operaciones sobrena-
contienen una garantía de la buena voluntad del Dador, y
turales del Espíritu Santo y en parti cular a sus dones. La fuente
del modo y términos del Don. Ellas nos dicen cómo, debido
a que nuestras mentes débiles no pueden comprender al
de la teo logía de los dones en Hilari o (al igual que en Cirilo de
Padre o al H ijo, nuestra fe, que encuentra la encarnació n
Alejand ría y otros padres) es el texto mesiánico de Isafas
de Dios difícil de creer, será iluminada por el don del 11.1-2. Para Hilario este texto se refiere al don del Espíritu
Espíritu Santo , el Lazo de un ión y la Fuente de luz.l4 Santo y a las diferente s maneras en que Él acraa .t? Utilizar

15. Ibid., 2.34.


13. Burgess, Ancient Christian Traditions, 104.
16. Ibid., 2.35.
1<4. Hilariode Poiriers, Sobre la Trinidad, 2.33. 17. Hilario de Poitiers, Sobre Mateo, 15.10.
202 LA ACCiÓN DEL ESP!RITU SANTO EN LA HISTORIA. EL CRISTIANISMO INSTITUCIONALIZADO 203

plenament.e ,el don del Espíritu Santo significa ejerce r los varios persona plural. En verdad, son los incrédulos y los herejes los
dones espirituales que El concede. Según el testimonio de que, según él, no tienen el don del Espíritu Santo, y en
Hilario, parece que en su propio día los dones del Espíritu consecuencia, caminan en el error .
estaban todavía vigentes y eran practicados. Al menos así lo
sugiere el sigui ente pasaje: Atanasio de Alejandría (295 -373)
Por.que el don del Espíritu se manifiesta, allí donde la Nació en Alejandría, donde recibió su formación clásica y
sabid ur ía ha bla y so n o ídas las palabras de vida , y allí donde teológica. En su juventud se relacionó con los mon jes de la
es~ el conocimiento que viene del discerni miento dad o por Tebaida, en Egipto. En el año 3 19 fue ordenado diácono por
D IOS, •••0 por el do n de san ida des, para que por la cu ración e! obispo Alejand ro (¿-328), a cuyo servicio entró como secre-
de las enfermedades podamos dar testimon io de su gracia tario. Acompañó a su obispo al Concilio de Nicea (325), donde
que co ncedió estas cosas; o por el hacer milagros, para que llamaron la atenció n sus discusiones con los arrianos. Tres años
lo que hac emos pueda ser entendido como que es del poder más tarde sucedió a Alejandro como obispo de Alejandría.
de Dios, o por profecía, para que a través de nuestra Después de cinco destierros fue rehabilitado en su oficio el 1
comprensión de la doct rina podamos ser conocidos como de febrero de 366. Pasó en paz el resto de sus días y murió e!
enseñados por Dios; o por el discernimiento de espíritus, 2 de mayo del año 373 .
para que no seamos incapaces de decir si alguien habla con El gran tema de discusión en sus días, y el que lo involucró
un espíritu santo o pervertido, o por géneros de lenguas, en serias confrontaciones teológicas, fue e! de la relación del
para que el hablar en lenguas pueda ser otorgado como una Padre y el Hijo en la Tr inidad. No había en él ni en sus
señal del don del Espíritu Sant o ; o por la interpre tación de contemporáneos, al menos en Occidente, un interés muy
lenguas, para que la fe de aquellos que oyen no sea pue sta especial en e! Espíritu Santo o en su acción. De hecho, el credo
en peligro a través de la ignorancia, dado que el intérprete de Nicea elaborado por e! propio Atanasio, dedica solo una
de una lengua explica la lengua a aquellos que son igno- frase al Espíritu: ..Creemos también en el Espíritu Santo ...
rantes de ella. Así en todas estas cosas distribuidas a cada No obstante, la contribución del obispo de Alejand ría al
uno para provecho hayal mismo tiempo la manife stación desarrollo de la doctrina de! Espíritu fue importante. El Espl-
del Espíritu, siendo evidente el don del Espíritu a través de ritu Santo es la unción y el sello; Él es el Espíritu que se mueve
estas vent ajas maravillosas concedidas sobre cada uno. 18 en e! creyente y a través de quien somos participantes de Dios.
Cuando el Espíritu está en el creyente esto significa que la
Así, pues, Hilario de Poitiers enumera los dones del Palabra (Cristo) está en él, dándole el Espíritu, de modo que
Espíritu, y nota al pasar que las lenguas y su interpr etación cuando bebemos del Espíritu, estamos bebiendo de Cristo.
está~ ord enadas por Dios y son parte del ministerio de la Cuando somos movidos por el Espíritu, esto es evidencia de
Iglesia. Además, parece evidente que Hilario consideraba a que Cristo mora en nosotros. 19
to~?S los dones enu~erados como vigentes en sus días, ya que Atanasia fundamenta y defiende la persona y obra del
utiliza con frecuencia el pronombre personal de la primera Espíritu basándose en su cristología. Entre el Espíritu Santo y

18. Ibid., 8.30. 19. Atanasio, Carta a Serapión, 1.19-20, 23-24.


204 Lo\. ACCIÓN DEL ESrfRlTIJ SANTO EN LA HISTORIA EL CRJSTlANISMO INSrrruO ONALIZADO 205

el Hijo existe, según él, una relación aná loga a la que une al obra del Espíritu Santo , ya que se consideraba al baurismo
Hijo con el Padre. ..Porque la condición propia que hemos como sacramento del Espíritu . En una de estas lecciones, Cirilo
recon ocido {como la] del Hijo respecto del Padre, veremos que se refiere a la gracia del Espíritu como agua, y afirma que ..el
es precisamente la que el Espíritu posee respecto del Hijo...2o Espíritu Santo, siendo uno, y de una naturaleza, e indivisible,
De este modo, Atanasia aplica al Espíritu un esquema lineal. repart e a cada uno su gracia, según como Él quiere: ...Y si bien
dinámico : del Padre por el Hijo en el Espíritu. El padre Él es uno en natu raleza, no obstante muchas son las virtud es
alejandrino escribe: ..El Padre es luz, el Hijo su respland or, el que por la voluntad de Dios y en el nombre de Cristo Él
Espíritu el qu e nos ilumina•. En otro lugar, dice: ..Siendo el opera ..)4 Y agrega :
Padre fuente y el Hijo llamado río, se dice que bebemos del
Espíritu •. Y así sucesivamente para todo lo que concierne a la Porque Él emplea la lengua de un hombre para sabidurfa;
comun icación y relación de la vida divina.u Por otro lado, por el alma de otro Él ilumina por profecía, a otro le da poder
ser cons ustancial al Padre y al Hijo, el Espíritu pued e hacernos de echar fue ra demonios, a otro le da interpretar las
conformes al Hijo y unirnos, mediante esta confo rmación, al Escrituras divinas. Él fortalece el dominio propio de un
Padre. Es así que podemos ser divinizados por ÉI.22 hombre; Él enseña a otro la manera de dar limosnas; a otro
Atanasia menciona a los dones del Espíritu que estaban en enseña a ayunar y disciplinarse; a otro enseña a despreciar
ope ración en la iglesia de sus días en varias ocasio nes. Según las cosas del cuerpo; a otro prepara para el martirio;
él, había obispos que obraban milagros, así como había otros diversos en diferentes hombres, pero no diversos de Él,
que no lo hacían.U como está escrito.2S

Según él, los dones y la enseñanza del Espíritu son un


Cirilo de Jerusalén (315-386) verdadero antídoto contra los males de este mundo , especial-
Nació en Jerusalén, de padres piadosos. AHí también se ment e la riqueza, el rango y los apeti tos de la carne.26 El
educó. En el año 334 fue o rdenado diácon o; diez años más Espíritu no es un fluido o fuerza imperson al, ni una creación
tard e, fue ordenado sacerdote y se destacó com o pred icado r y del lenguaje hu mano. "Él es un Espíritu Viviente, que da
maestro. En el año 350 fue obispo de Jerusalén. En el año 381 sabid uría en el hablar, hablando y enseñando Él mismo..,l7 Su
part icipó del Tercer Co ncilio Ecuménico en Constanti nopla. pro pósito y manera de ob rar en el creyente es única.
Tuvo muchos problemas con los arrianos , que lo hicieron
objeto de sus ataq ues. Mu rió el 18 de marzo del año 38 6. ~I viene para salvar, y para sanar, enseñar, amonestar,
Cirilo es el autor de veinticuarro leccion es carequ éticas. fortalecer, exhortar, iluminar la mente, primero a aquel
Debe tene rse presente que, en sus días, la enseñanza que que lo recibe, y después a otros también a través de ~J. Y
precedía al bautismo consideraba exte nsamente la persona y aslcomo un hombre, qu ~ habiendo estado previamente en

20. íbid., 3. 1. H. Cirilo de j erusalén, Lecciones catequetícas , 16.12.


21. lbíd., 1.19. 25. tbid.
22. ¡bid., 1.25 . 26. íbid., 16.19.
23. Atanasio, Carta a Draconcic, 9. 27. ¡bid., 16.13 .
206 LA ACCIÓN DEL Esr fRlTU SANTO EN LA HISTORIA EL CRlSTIANISMO INSTIruCIONAUU DO 207
tin ieblas de pronto contemp la el sol, es iluminado en su Al salir del agua bautismal y ser ungido po r quien bautiza,
visió n corporal y ve claramente cosas que no veía, del el creyente es dotado por el Espíritu para servir al Señor.
mismo modo aquel a quien el Espíritu Santo es concedido,
es iluminado en su alma, y ve cosas más allá de la visión Así como C risto, al ascende r del Jordán, recibió una mues-
humana. que Él no conocía 0' _ porque el Verdadero llumi- tra de la esencia del Espíritu, así a ti cuando saliste de la
nadar está presente con Él. El hombre está dentro de las fuente se te dio un a unción que es el anti tipo de aquella
paredes de una casa ; sin embargo el poder de su conocí- con la que C risto fue ungido. Esa unción no fue mero
miento llega lejos, y V(: lo que otros hombres están hacien- aceite... el santo aceite despu és de la invocación ya no es
do.28 más mero aceite común, como dice la gent e, sino un don
de Cristo y el Espíritu Santo, hecho efectivo por la presen-
Cirilo describe la plenitud de una vida llena del Espíritu, cia de su Deidad... y así co mo con el aceite visible se unge
el pode r sobrenatural qu e la caracte riza, el don de profecía, la el cuerpo, el alma es santifica da po r el Santo Espíritu
presencia y protección permanent es del Espíritu, y los do nes vivificante .J t
de gracia de todo tipo, incluid o el fruto del Espfriru. Escribién-
doles a los catecúmen os a punto de ser baut izado s, les dice: Todo lo que el Espíritu Santo toca es santificado y trans-
formado. Por eso, le dice Cirilo a los catecúmenos : «Tú
Si eres ten ido por digno de la gracia, tu alma será ilumina- también eres "santo", dado que tú has sido co ntado co mo
da, recibirás un poder que no tienes, recibirás armas te rri- digno del do n del Espíritu Santo. Las "cosas santas " por lo
bles para los espíritus malos; y si tú no arrojas tus ar mas, tanto corresponde n a las "personas santas" » , J 2 Evidentemente,
sino que guardas el Sello sobre tu alma, ningún espíritu en estas palabras es posible escuchar a un buen pastor, que con
malo se te acercará a ti ; porque se acobarda rá; po rque amor y cuidado pastoral escribe a los catecú menos o recién
verdaderame nte por el Espíritu de Dios son expulsados los bautizados, a quien es o rienta especialmente acerca de la obra
malos espíritus.29 del Espíritu Santo. Cualquier buen pastor hoy debería hacer lo
mismo, ya que la Iglesia es la fuerza del Espíritu y la unc ión del
y agrega: ..Si tú crees, no solo recibirás la remisión de San ro es fundam ental para un servicio efectivo en el Reino.
pecados, sino también las cosas que sobrepasan al poder hu- Solo hombres y mujeres llenos del Espíritu Santo pueden ser
mano. ¡y también pod rás ser digno del don de pro fecía! ...Y Él capaces de proclamar el evangelio del Reino con pod er y
te dará dones de gracia de todo tipo, si tú no lo con rristas por autoridad d e lo airo.
el pecado...Jo De este modo , Cirilo alienta a los nuevos creyen-
tes a experime ntar la presencia y la ob ra del Espíritu Santo . La Didimo el Ciego (310-395)
única limitació n que él impo ne a los fieles es la de no ir más
allá de lo que la Biblia autoriz a y mencio na. Q uedó ciego a los cuatro años. No obstante , llegó a ser
presidente de la escuela catequística de Alejandría y ocupó ese

28. Ibid., 16.16.


29. tu«, 17.36. 31. lbid., 22.
JO. lhid. 17.37. 32. lbid., 23.
208 LA ACCIÓN DEL EsplRITU SANT O EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO INSTInlCiONAUZADO 209

puesto durante medio siglo. Fue maestr o de Rufino (ca. 345- el Hijo, y esta unicidad de operación involucra unicidad de
410) Yde Jerón imo (ca. 340 -420). Se destacó como apologista esencia. Él es el Dedo de Dios; el Sello que estampa la
en co nt ra del arrianismo . Fue un prime r defen sor de la verdad imagen divina sobre el alma humana. Pero Él no es mera-
ortodo xa, un sólido creyente, y un hombre de excelente carác- mente una mena operativa; Él es una Persona divina.Je
ter cristiano . Escribió com entarios sobre Miqueas, O seas y Díd imo se refiere a la unción del Espíritu como una
Zacarfas, y sobresalió en su co nocimientos de la Biblia. Según o peración singular suya , cuan do cita 1 Ju an 2.20 y declara qu e
Paladio: ..Estaba ta n dorado co n el don del ap rendizaje, que las el creye nte tiene una unción del Espíritu Santo, co mo la qu e
Escritur as se cumplieron literalmente en él: ..El Señor hace Jesús recibió en su enca ma ci ón.J? A tr avés de esta unción , el
sabio a los ciegos..)3 alma es fortificada, de modo que puede compartir la vida de
Entre sus varias ob ras se destacan dos. La primera, Sobre Dios . De este modo, iluminada por el Esp íritu que mora en el
el Espíritu Santo es una protesta en co nt ra del macedon ianis- cristiano bautizado como su templo, el alma es digna de la
mo . Fue escrita con anterio ridad al Segundo Co ncilio Ecumé- presencia de Dios y se le permite beber de la fuente eterna. Es
nico, que se reunió en Constantinopla (381), y se conserva en en el bautismo qu e el Espíritu regenera y sant ifica al alma. Esta
una versión latina hecha por Jerónimo. La segu nd a, Sobre la es una funci ón propia del Espíritu, mientras qu e el baut ismo
Trinidad está escrita en tres libros y probablemente fue redac- es el sacramento del Espíritu . Por eso , si un o se acerca a la pileta
ta da después del Concilio de Co nstanti nopla.
del bautismo con sinceridad, el Espí ritu Santo sirve como el
Según él, el Espíritu Santo es d gra n Don de Dios a los
distribuidor de todos los grandes dones.
seres humanos, d punt o culminante de todos los dones de
Dio s, el Don común del Padre y Él es el prime r Don, po rque [Él] nos renueva en el bautismo, y obrando con el Padre y
Él es amor, y el amo r es la razón del H ijo. el Hijo, nos lleva de vuelta de nuestra condición de defor-
El ser de to dos los dones divinos. En la substa ncia del midad a esa de belleza prístina, llenándonos con su gracia
Espír itu Sa nto está comp rend ida la plenitud de to dos los de modo que ya no demos lugar a nada que sea indigno de
dones.w Nada es dad o por Dios sin Él. T odas las ventajas que nuestro afecto. Él nos libera del pecado, de la muerte, y de
hemos recibido del favor de los dones de Dios fluyen de esta las cosas terrenales. Él nos hace hombres espirituales, que
Puenre.as Según él: comparten en su gloria divina. Nosotros somos hijos y
herederos de Dios y del Padre. ÉJ nos conforma a la imagen
El Espíritu Santo del Nuevo Testamento es idéntico con el del Hijo, haciéndonos co-herederos y sus hermanos - no-
Espíritu Santo del Antiguo. Su nombre mismo implica una sot ros que vamos a ser glorificados y a reinar con Él. El
naturaleza ajena a la de la criatura y similar a la de Dios; Espíritu nos da los cielos a cambio de la tierra. Él nos
una naturaleza esencialmente santa y buena, infinita, indi- concede el paraíso de su abundancia, Él nos hace más altos
visible, y por lo tanto no la de una criatura hecha por la que los ángeles. En las aguas de la pileta bautismal, Él
Palabra. En su operación, el Espíritu es uno con el Padre y extingue el fuego inextinguible del infierno.Jé

H. Paladio, La historia lausíaca, 4.2. 36. lbid., 34-36.


H. Didimo el Ciego, Sobreel Esplritu Santo, 9. 31. Didimo el Ciego, Sobre la Trinidad, 2.6.23.
15. lbid., 4, 9,28 . 18. lbid., 2.11.
210 LA ACCIÓN DEL asrnrru SANTO EN LA H ISTORIA EL CRISTIANISMO INSTITlJCIONAUZADO 21 ¡

La obra regeneradora del Espíritu es indispensable para Los hombres tien en que aprende r de antem ano lo qu e van
tener los dones celestiales, sin importar cuán perfecta e impe- a enseña r. Ind uso esto no me cayó en suerte. Yo ent ré a los
cable sea la vida de alguien. Solo la marca del sello de su a puro nes al oficio sacerdotal desde la silla y placa de un a
sant ificación nos hace santos y nos permite intima r con el magistratura, y al principio tuve qu e enseña r lo qu e no
Señor. Solo aquellos que han sido vivificados espiritualmente había aprendido. Conmigo , el aprendizaje y la enseñanza
son capaces de ent ender el pod er y la majestad suprema del debieron ir simultáneamente, porque no tu ve tiempo para
Espíritu de Díos.as aprender hasta qu e me hice maesrro.sü

Sin embargo, le cabe a Ambrosio el mérito de ser el primer


Ambrosio de Mi lán (340-397) escritor occidental que dedicó un a obra separada de cierta
Fue obi spo de M ilán, nació en la Galia y estud ió derech o magnitud a la doct rina del Espíritu Santo . Por cierto, no se
en Rom a. En el año 370 fue nombrado magist rado con sula r trata de una obra original, ya qu e se basó en sus lectu ras de
del Imper io, co n sede en Milán, y se ganó la veneración del Atanasia, Basilio y Dídimo sobre la misma cuesrión.e ! Su
pueblo por su benevolencia y sabid uría . En 3 74 recibió la pro pósito es ofrecer a sus lectores un a explicació n cuidadosa
sede episcopal de Milán, y ado ptó una decidida posición y completa de la natu raleza y ob ra de la tercera persona de la
ortodoxa fren te al arrianismo , resistiendo con éxito el inten- Trinidad.
to de la emperatriz Justina de introd ucirlo en la ciudad. Su Ambrosio ve al Espíritu Sant o como un río caudaloso que
conocimiento del griego le ayudó a co nseguir un mayor riega a la Jerusalén mística, que es la Iglesia:
acercamiento entre Oriente y Occidente. Su más valioso
legado es el de sus himnos, reunidos en una obra titulada Así, pues, el Espíritu Santo es el río, y el río caudaloso, que
Canto Ambrosiano. En muchos de sus himnos, Ambros io según H ebreos fluía desde Jesús en las tierras, ta l como lo
exalta la divinidad del Espíritu Santo y su poder. Co mo hemos recibido en profecía por la boca de lsaías. Este es el
escr itor, de jó múltitud de ob ras, mayormente discur sos y gran río que fluye siempre y nu nca falla. Y no solo un do,
exposicio nes. Manifestó un a gran erud ición y vivacida d sino también uno de una corriente copiosa y de una gran-
intelect ual. Si bien la sede de Mi lán no dep endía de la de deza desbor da nte, como también dijo David: ..Del río sus
Roma, Ambro sio se mostró respetuoso hacia el ob ispo de corrientes alegran la ciudad de Dio».
Roma, co ntribuyendo así a desarroll ar la unidad de la Iglesia Porque tampoco es esa ciu dad, la Jerusalén celestial, regada
Cató lica ligada a Roma y al proceso de rápida instituciona- por el cana l de cualquier río terrenal, sino por el Espíritu
lización eclesiást ica. Ortodoxo en su doctrina, se destacó Santo, que procede de la Fuente de Vida, por quien somos
co mo o rador y predicador . saciados aun con una pequeña corriente suya , y qu ien
Ambrosio de Milán fue el maestro de Agustín de Hipona parece flui r más abu ndantemente entre aqu ellos trono s,
(354-43 0). No obstante, proba blemente ningún otro maestro
de la iglesia entró a sus labores tan desprovisto de conoci mien-
tos teológicos como él. Co mo él mismo indica: 40. Ambrosio de Milán, Sobre los oficios, 1.1.
41. Sweee, The Holy Spirit in the Ancie1lt Church, 317·3 18. Sobre la
doctrina del Espíritu Santoen Ambrosio, véase, Norman joseph Belval,
The Ho/y Spirit in Saínt Ambrose, Officium Libri Catholici, Roma,
39. Ibid., 2.12. 1971.
212 LA ACCIÓN DEL EspfRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO INSrrruCIONAlIZA DO 213

dom inios y pod eres celestiales, ángeles y arcángeles, flu- es la mano derecha del Padre, y el Espíritu es su ded o. Esto
yendo en el curso compl eto de las siete virt udes del Espíri- muestra la coop eració n que existe entre ellos: la mano derecha
tu. Porq ue si un rfo qu e se levanta por sobre sus riberas y el dedo de Dios es Dios en operación, es el Padre obrando
desborda, cuánto más lo hace el Espíritu, levantándose por por el Hijo, y el Hijo por el Espíritu Sanro.ee Por eso, al igual
sobre toda criat ura, cuando él toca, como lo hace, los que Basilio, Ambrosio reconoce qu e toda actividad creadora
campos bajos de nuestras mentes, y alegra esa naturaleza que el Padre lleva a cabo a tr avés del Hijo recibe su cumplí-
celestial de las criaturas con la fertilidad mayor de su miento y compleramiento en la acción del Espíritu. El Espíritu
sant ificación. Santo es Dios en acción. To do el universo, incluyendo al ser
y que no te preocupe que aquí [Salmos 46.4] se diga humano, recibe su actualidad y perfección de parte del Espíritu.
«ríos» o en o tra parte ..siete Espíritus" [Isaías 11.2], porqu e Lo que el Espíritu crea es también lo que el Espíritu
po r la santificación de estos siete dones del Espíritu, como renueva. Dice Ambrosio:
dijo lsalas, se da a entender la plenitud de toda virtud; el
Espíritu de sabiduría y de inteligencia, el Espíritu de con- ¿y quién puede negar que la creación de la tierra es la obra
sejo y de pod er, el Espíritu de conocimiento y piedad y el del Espíritu Santo, cuya obra también es qu e ella sea
Espíritu de temor de Dios. Uno, ento nces, es el Río, pero renovada ? Porque qu ienes quieren negar que ella fue crea-
muchos los canales de los do nes del Espíritu. Este Río, da po r el Espíritu, dado que no pueden negar qu e es
entonces brota desde la Fuente de Vida.42 reno vada po r el Espíritu , quieren también separar las per-
sonas y deben mantener que la operación del Espíritu Santo
Esta corriente que procede de la Fuente viviente de Dios es superior a la del Padr e y del Hijo, lo qu e está lejos de la
es realmente la gracia del Espíritu, pro metida por el profeta verdad ; po rque no hay dud a de que la tierra restaurada es
Joel (2.28). El Espíritu Santo es derramado a las almas y fluye mejor que la que fue creada.e?
en los sentidos, de manera qu e con este caudal pod amos apagar
el ardor de la sed de este mundo. En esta línea argumenta l, Ambrosio considera la obra
Para Ambrosio, el pod er creativo pertenece al Espíritu renovadora del Espíritu en los creyentes. Según él, el Espíritu
Santo. Él estuvo involucrado en la creación del mund o; El fue es el autor de la renovación espiritual y del ungimiento de
el autor de la encarnación, dado que Él formó la humanidad Cristo, o del óleo de alegría.48 La misión del Espíritu en
del Señorj y Él crea de nuevo a los creyentes por el bautismo.O relación co n los seres humanos es como la de Cristo: ser fuente
Además, El es el dador de todos los do nes, que vienen del Padre de vida. «El Espíritu no es, entonces, enviado como si fuese de
a través del Hijo.44 El Hijo mismo fue enviado por el Espíritu, un lugar, ni tampoco Él procede como si fuese de un lugar,
quien lo ungió para su ministerio, y el Hijo a su vez envió al sino que Él procede como el Hijo, como el Hijo mismo dice:
Espíritu, y ambos fueron dados por el Padre.O Por eso, el Hijo "Yo he venido del Padre , y he venido al mundo .....49

42. Ambrosio de Milán, Sobreel Espfritu Santo, 1.16. 46. íbid., 3.3-5.
4J . lbid., 2.1-5. 47. íbíd.; 2.5.34.
44 . lbid ., 2.10-12. 48. íbíd., 1.9.102; 2.7.64.
45. lbid., 3.1. 49. íbid.; 1.11.119.
2 14 LA ACCiÓN DEL Es r lRJ11J SANTO EN U. HISTORIA EL CRISTIANISMO INSnruCIONAU ZADO 215

Adem ás, según Ambrosio, el Espíritu Santo crea dor es simplemente repitiendo lo que dice la Biblia, o si sus palabras
tambi én el dad or de toda revelación : «Po rque nuestro conoci- reflejan sus propias experiencias y la práctica en su Iglesia. No
miento procede de un Espíritu, a trav és de un Hijo a un Padre; obstante, para él, el Espíritu Santo es esencialmente no alguien
y de un Pad re a través de un Hijo a un Espíritu Santo es que recibe, sino alguien que imparte.U Por eso, cuando se
entregada la bondad y la santificación y el derecho sobe rano afirma que somos bautizados con agua y el Espíritu, no hay una
del poder eternolO .50 No obstante, su papel en e~ plan de equiparación d e los dos bautismos. El agua es meram ente e!
salvación no se cumplió hasta Pentecostés, cuando El descen- símbolo de nu estr o entierro en la muert e de Cristo , mientras
di ó co n plen o pcde r.t! Fue ento nces qu e el Espíritu se rrans- que el Espíritu es e! poder qu e nos resucit a a una novedad de
fo rmó en el lazo primario qu e liga a Cristo con su Iglesia. La vida, e imprime en no sot ros la imagen divina.56 Es pre cisamen -
Iglesia es edificada po r el Espír itu, qu e une a jud fos y gentiles te en e! sacramento de la co nfirmaci6n qu e e! Espíritu sella el
en un solo pueblo. ü Sin la infusión del Espfritu Santo no pue de alma de! cr eyente y le imp arte sus siete dones (véase Isaías
habe r una bendición completa, y es Él quien infunde sus dones 11.2): ..Y recu erda qu e recibiste el sello de! Espíritu; el espíritu
a las almas individuales: de sabiduría y de inteligencia, el espíritu de consejo y de pod er,
e! espíritu de conocimie nto y piedad , y el espíritu de sama
y la sabiduría de Dios dice: ..Os enviaré profetas y apósto- temor, y preserva lo qu e has recibido. Dios e! Padre re selló,
les... Y ..A uno es dada.., como está escrito. ..a través del Cristo el Seño r te fo rtaleció, y te dio las arr as del Espí ritu en
Espíritu, palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia, tu co razón ...57
según el mismo Espíritu; a otro fe, en el mismo Espíritu; a
otro, el don de sanidades, en el mismo Espíritu; a otro, la
operación de milagros; a otro. profecía... Por lo tanto.
Crisóstomo de Constantinopla (347-407)
según el apóstol, la profecía no es solo a través del Padre y Juan Crisósto mo fue e! gran padre de la iglesia oriental y
del Hijo, sino también a través del Espíritu Santo, y en uno de los pioneros de la teología de la Iglesia O rtodoxa. Na ció
consecuencia el oficio es uno, y la gracia una. De modo en Antioquía y fue ed ucado religiosamente por su madre. En
que encuentras que el Espíritu es también el autor de las e! año 381 fue orde nado diácono, a los do s años de ser
pro fecías.at bautizado, y en e! 386 fue co nsagrado sacerdo te y predicad or .
Fue el más grande orado r de su tiempo, lo que le valió el
Según él, pues, cada creyente recibe los dones menciona- sobrenombre de «Boca de Oro..: Cris ósromo. En el año 398,
dos en 1 Corintios 12 que desea o merece, según su capacida d. contra su voluntad, fue nombrado metro politan o de Constan -
Incluso el min isterio sacerdotal es un don del Espír iru. H Sin tino pla. AlU atacó la inmoralidad de la corte imperial. Después
embargo, no es posible saber co n segu ridad si Ambrosio está de largas luchas fue desterrado . Murió en el exilio el 14 de
setiembre del año 407, con las palabras que fueron el lema de
toda su vida : _¡Gracias a Dios por todo!"
50. Ibid., 2.12.130.
5l. Ibid., 3.14.98-99.
52. Ibid., 2.10.110. H . Ambrosio de Milá n, Sobre el Esplritu Santo, 1.5.
53. íbíd., 2.13 .143. .56. lbid., 1.6.
H. Ambrosio de Milán, Sobrela penitencia, 1.2.8. .57. Ambrosio de Milán, Sobre los misterios , 7,42.
2 16 LA ACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO INSnruDONAUZA DO 217

El siglo IV fue. para la Iglesia Griega, un siglo de oro. ya se hace referencia y a su cesación, siendo que como tales
que en él nacieron y vivieron algunos de sus más gran des solían ocu rrir pero aho ra ya no tienen lugar. i.Y por qué no
represen tantes. Entre ellos estaba C ris6sromo . Sin embargo, ocu rren ahora? Porque, mirad ahora , la causa de la oscuri-
Juan no había pensado en dedicarse a la Iglesia. Su primera dad también ha producido en nosotros otra pregunta: esto
vocación, así com o sus estud ios, le llevaron previamente al es, <por qu é ocurrieron entonces, y ahora no lo hacen
ejercicio de la abogada (al igual que Ambrosio d e M ilán). Fue más? .. Bien, <qué fue lo que pasó entonces? Qu ienquiera
so lo más tar de cuan do , po r el estudio de las Sagradas Escritu - que era bautizado hablaba inmediatamente en lenguas y no
ras, decidió dedicar se a la predicació n evangé lica qu e, en el solo con lenguas, sino que muchos también profetizaban,
seno de la Iglesia Gr iega, enton ces como aho ra, nunca estu vo y algunos hadan muchas obras matavillosas... pero más
vedada a los laicos. abundante que ninguna otra cosa era el don de lenguas
Cris ósto mo fue un hombre de gran piedad y ex periencia entre ell05.60
religiosa. En sus sermones presta una consi derable atención a
la persona y obra del Espíritu . N o obstant e, su énfasis se orienta Como pu ede verse, este gran predi cado r no negaba el
más bien hacia el fruto del Espíritu (Gálatas 5.22-23), que hacia ejercicio de los dones en la iglesia de tiempos neotestamenta-
los dones extraordinarios del Espíritu y las señales sobrenatu - rios, pero sí dejaba en claro que tales carismas hab ían termina-
ral es de su acci ón.ss Su preocupación mayor no era de carácter do hada tiempo. Estos dones hab ían jugado un pape! funda -
misionológico, sino ético . El estilo de vida y la cond ucta de sus mental en los comienzos de la iglesia. pero pa ra sus días ya
oyentes era n par a él más impo rta ntes, que los recursos que habían cesado .
estos necesitaba n para el bien co mún y la edificació n de la De manera más esp ecífica. tal era su comprensión del don
Iglesia. No es extraño, pues, qu e él viera al Espíritu Santo más de lengu as. En tiempos antiguos, según él, cuando los paganos
como la fuente de forta leza y santificación, que como la fuente conven idos eran bau tizados, hablaban lenguas desconocidas
de los recursos espiritua les para el servicio. En su conce pto, (pero existe ntes) , como el persa, latfn e indio. Según su expli-
una vida cri stiana piadosa «era e! más gra nde de los milagros, cación, era el Espíritu qui en hablaba. Sin embargo, un a vez que
la más maravillosa de las seña les...59 la Iglesia se había establecido, don es tales como las lenguas ya
No llama la atención, entonces, que Crisósromo rechace no eran necesari os.
los carismas. Él afirma que no ent iende los do nes de 1 Corintios La po sición de Crisósromo sobre este panicula r es bien
12, porque ya no ocurren. Confesando su ignorancia práctica fuerte, al punto que parece tener una cuestión perso nal contra
sob re el tema, Crisóstomo escribe en relación co n 1 Corintios el hablar en lenguas, qu izás deb ido a alguna mala experiencia
12.4-11: habida en su vida .et En consecuencia. la iglesia oficial de sus
~ías debía desalentar don es tales como profecía. lenguas e
Todo este lugar es muy oscuro: ~ro la oscuridad es Interpretación. po rque fácilmente podían co nfundi rse con ma-
produci da por nuestra ignorancia de los hechos a los que nifestaciones de «un espíri tu inferiorcez Lo inte resante es que

58. Sobre el concepto de Crisóstomo en cuanto a los don es, véase, Andrew 60. Cns óstomc, Homilfas sobre las Epistolas de Pablo a los Corintios,
T. Floris, -Chrysosrom and the Charismata.., Paracfete S, Winte r 197 1, Hornilla 29.1.
11·22. 61. Hunrer, ..To ngues-Speach -, 134.
59. Crisósto mo, Homil fa 14, sobre Romanos. 62. Véase, Grom acki, The Modern Tonglt~s MOlltm ent , p. 16.
218 LA ACCIÓN DEL ESplRITII S ANTO EN LA HISTORIA E L CRISTIAN ISMO INSlTfUCIO NAUZADO 219

el don de lenguas se ha practicado de manera más o menos o más bien, nace de su igno rancia personal de tales manifesta-
ininterrumpida en la Iglesia Orto doxa Griega, especialmente ciones de poder. Por otro lado, no es extraño que alguien a la
en los mon asterios, hasta el día de hoy. cabeza de la iglesia en la capiral misma del imperio o riental
Este obispo del siglo IV parece sugerir también que los desestimase como fuera de lugar los dones espirituales y las
milagros habían cesado para sus d ías. Según él: «Q ue nadie, señales milagrosas, en razón de o frecer a las auto ridades impe-
por lo tanto, espere milagros (hoy)... Si por el contrario riales una imagen más potable del cristianismo, según los
pract icamos esta (la car idad), y toda la abnegación que fluye criterios por los que estas eran guiadas. El juicio y la actitud de
de ella, no tendremos necesidad de señales; incluso por el ot ro Crisósto mo tienen una actualidad notable, y son un testimonio
lado, si no la practicamos, no ganaremos nada con las seña- elocuente de la relación directa que existe entre instituc ionali-
les»,63 zación eclesiásrica y cesacionismo.
Hay que tener en cuenta que Crisósto mo está indicando
esto fre nte al hecho de que su siglo vio el surgimiento de una Grego rio de Nacianzo (329-388)
hagiografía satu rada de lo milagroso. El gran predi cado r afir-
ma que «Pablo poseía una virtud muy superior a la palabra y El proceso de institucionalización afectó ta mbién al Impe-
capaz de obrar mayore s hazañas, pues con su sola presencia y rio Roma no Ori ental. En esta región de amplio desarrollo del
sin pronunciar una palabra aterrab a a los demonios». Pero , testimonio cristiano, especialmente en Asia M enor, habitaba la
agrega Crisóstomo, «los hombres de hoy, au n juntá ndose mayo r cant idad de cristianos en el mundo de aquel entonces.
todos, aun con mil ora ciones y lágrimas», no lograrían 10 que All í también se producían en estos años los debate s teológicos
en una ocasión pudieron los delantales de Pablo (Hechos más encarniz ado s. Frent e a diversas herejías, co mo e! arri anis-
19.12) . Además, señala, «Pablo, con sola su oración , resucitaba mo, se levantaron líderes que articularon un pensamiento
muertos y hacía otros prodigios tales que llegó a ser ten ido por ortodoxo y ayud aron a fij ar la do ctrina cristiana. Entre los
Dios por los gentiles (Hechos 14.10-12), y aun ante s de salir líderes eclesiásticos más destacado s de este tiempo cabe men-
de la presente vida, fue digno de ser arrebatado hasta el tercer cionar a los grandes teólogos de Capadocia: Basilio Magno,
cielo, do nd e se le co municaron palabras que a la humana Grego rio de Nisa y Gr egario de Nacianzo. Al primero 10
naturaleza no le es lícito escuchar». En conrraste, dos hombres consideraremos en e! próximo capítulo. Los otros do s serán
de ahora... N o quie ro decir nada desagradab le ni pesado, pues tratados en este, ya que de algún modo, en razó n de su posición
tampoco esro lo digo co n ánimo de insulrarlos, sino maravilla- en la estructura eclesiástica, representan e! cristianismo insti-
do mas bien de cómo no tiemblan de ponerse en parangón co n tucionalizado de su tiempo. No obstan te, en cada uno de ellos
varón tan grande-es- se percibe una vivencia pro fund a de la obra del Espíritu y su
Parece muy claro que Crisóstomo habla como lo haría testimonio da cuenta de su acción poderosa en la iglesia de sus
cualquier cesacionisra de nuestros días. La pregunta que queda es días.
si su rechazo es el resultado de una ausencia verificada y real de Gregori o de Nacia nzo fue amigo de Basilio Magno y de
los carismas del Espíritu y de otras operaciones sobrenaturales, su hermano Grega rio de Nisa, con quienes co nstituyó el tr ío
conocido como los «Grandes Capadocics». Nació en Capado-
cia (Asia Menor), cerca de Nacianzo , donde su padr e era
6J. Cris6stomo, Homilía 46 sobre Mateo. obispo. Le gustaba la vida solitaria y conte mplativa. Se educó
64. Cris6sto mo, Los seis libros sobre el sacerdocio, 4.6. en Atenas, y finalmente llegó a ser obispo en el año 372, y más
220 LA ACCiÓN DEL ESpíRITU SANTO EN LA HISTO RIA EL CRISTIANISMO INSrrruCIONAUZADO 221

tard e (en 379) ocupó la sede de Consta nti nop la, co mo restau- Grega rio expresa la impo rtancia del ejercicio de los don es
rador de la fe ortodo xa. Gregar io tuvo gran influencia sobre del Espíritu en la mini stración sacerdotal, haciendo referencia
la formación del pensamie nto ortodox o. Su habilidad como a su propia exp eriencia person al:
predicador era superior a la de cualquiera de sus asociado s,
pero la ejerció en las más variadas posiciones. Como escritor ¿Cómo puedo atreverme a ofrecerle el sacrificio externo,
está a la altu ra de su amigo Gregario de Nisa. Co mo él, y junto el antitipo de los grandes misterios, o vestirme con el hábito
a Basilio M agno, es consider ado uno de los grandes pad res y el nombr e de sacerdote, antes de que mis manos hayan
orientales, y posteriorment e, en O riente se le d io el título de sido consagradas por obras santas; ..• antes de que mi oído
«teólogo», Se destacó también como poeta y activo líder ecle- haya sido abierto lo suficiente a la instrucción del Seño r, y
siástico. Fue pre sidente del Co ncilio Ecuménico de Constanti- Él haya abierto mi oído para oír sin pesadez, y haya
nopla en 381. Más tarde, dejó todos estos privilegios para colocado un aro de oro con sardónice precioso, esto es, la
volver a la vida solitaria, donde se entregó a sus estu dios y palabra de un hombre sabio en un oído obediente; antes
trabajos literar ios, hasta su muerte. de que mi boca haya sido abierta para fluir en el Espíritu,
Gr egorio se sentía como viviendo en la era del Espíritu. y esté bien abierta para ser llenada con el Espíritu que habla
Según él, en sus días se estaba cumpliendo la promesa divina y misterios y doctrinas; y mis labios [hayan sido] ligados, para
la esperanza de los creyentes. Los días de la presencia física de usar las palabras de sabiduría, por el conocimiento divino,
Cristo entre sus discípulos habían term inado, y ahora era el y, como agregaría, soltarse en su debido momento; antes
tiempo del Esptrlru.e! La acció n del Espíritu se verifica de ntro de que mi lengua haya sido llenada con exultación, y se
del creye nte: haya tornado en un instrumento de la melodía divina,
despertando con gloria, despertando bien temprano, y
En cuanto a las cosas del Espíritu, que el Espíritu esté trabajando hasta que se pegue a mis mandíbulas ... y me
con migo, y me conceda tanto discurso como deseo; o si no haya rend ido al Espíritu?68
es esto, que sea en la proporción debida a la ocasión. De
todos modos, Él estará conmigo como mi Señor; no de El Espíritu Santo re parte una diversidad dones a cada
manera servil, ni esperando una orden, como algunos creyente, pero al mismo tiempo, Él es el qu e de sarrolla la
piensan. Porque Él sopla donde quiere y sobre quién Él unidad del Cuerpo de Cristo. H aciendo un co ntraste con la
quiere, y en la medida en que Él quiere. Es así como somos confusió n que Dios provocó en la torre de Babel, Gregario
inspirados tanto a pensar como a hablar del Espíntu.ee señala como un milagro la armo nía que el Espíritu produce en
la Iglesia. «Porque siendo derramado un mismo Espíritu sobre
Pero la acción del Espíritu se verifica tambi én en la Iglesia, muchos hombres, esto los po ne nu evam ente en armonía. Y hay
especia lmente en el sacrame nto del bautis mo. Según Gregario, un a diversidad de do nes, que necesitan to davía de otro Don
Jesús bautiza en el Espíritu , lo cua l es el bautismo perfecto.e? para discernir cuál es el mejor, allí dond e to dos so n dignos de
alabanzas.e?

65. Gregario de Nacianzo, Sobre Pentecostés, 5.


66. Ibid. 68. Gregario de Nacianzo, Apologeticus de fuga.
67. Gregario de Nacianza, Oración robre las luces santas, 17. 69. Gregario de Nacianzo, Sobre Pentecostés, 16.
222 L\ ACOÓN DEL EsplRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO INSTI11JO ONALlZADQ 223

De gran valor para nuestro propósito es su testimon io de solemnes ; y entonces él fue levantado por aq uel qu e levant a
una sanidad que experimentó su padre, mientras todavía era a los mue rtos ... Al principio se mo vió un poco. luego más
obispo. lo interesante del relato es el reconocimient o del decididamente; luego co n una voz débil e ind efinida llamó
anciano obispo de que su sanidad fue el resultado de la por nombre a uno de sus siervos qu e tenfa cu idado de él, y
o peración pod erosa del Espíriru Santo . le pidió que se ace rcara y le trajera sus ropas, y lo sostu viera
co n su mano. ~I se acercó alarmado y gustosamente lo
Todo su cuerpo esta ba encendido co n una fiebr e excesiva, asistió. mientras él, apoyándose en su mano como so bre un
ardiente. Su fortaleza había decaído. No pod ía to mar cayado, im itando a M oisés sobre el mo nt e, acom odó sus
co mida, su sueño se había alejado de él, estaba en gran manos temb lorosas en oración, y en unión con o en no mbre
aflicción, y agitado con palp itaciones. Dentro de su boca, de su pu eblo celebró anh elan te los misterios, co n tan poca s
el paladar y rod a la superficie superior estaba co mpl eta- palabras com o sus fuerzas le perm itían, pero, según me
ment e tan ulcerada y dolorida, que le era di fícil y peligroso parece. co n la intención más per fecta. ¡Qué milagro! En el
traga r incluso agua . La pericia de los médicos, las o raciones santuario sin un san tuario, sacrifica ndo sin un altar, un
de sus am igos, por más fervient es que fuesen , y toda sacerdote lejos de los ritos sagrados: no obstante, todo esto
atención posible eran por igual sin efecto. Él mismo. en esta estuvo prese nte para él en el poder del Espíritu r eco noc ido
co ndición desesperant e. mientras su aliento se acortaba y por él, aunque no visto por aquellos que estaban allí.
acele raba, no tenía perc epción de las cosas pre sent es. sino Ent onces, después de agregar las pala bras de acción de
que esta ba tot almente a usente , inmerso en los objetos qu e gra cias acostumbradas y después de bende cir al pueb lo, él
por tiempo había deseado, ahora alistados para él. Noso- se retiró nu eva mente a su cama y después de tomar un poco
tros estábamos en el tem plo, mezcland o sú plicas co n los de comida, y gozar del sueño recu per ó su espíritu y su salud
rito s sagrados, po rq ue con desesperanza en cuanto a todos se mejoró gra d ualmente para el nu evo día de la fiesta co mo
los ot ro s, ha bía mos recurr ido al Gran M édico, al po der de nosotros llamam os al primer do min go después del festival
esa no che, y al último so corro, co n la intención, diría, de de la res urrección. ~l ent ró al templo e inau guró su vid a
guardar una fiesta o de lamentar; de tener un festival o de que había sido pr eservad a, co n todo el clero, y o freció el
prest ar los honores fun erales a alguien que ya no estab a sacrificio de acción de gracias. Para mí esto no me parece
allí. iOh, esas lágr imas qu e fueron der ramadas en ese menos notable que el milagro en el caso de Ezeq uías, qui en
momen to por todo el pu eblo! iOh, voces y lam ent os e fue glorificado por Dios en su enfermeda d y o racio nes co n
himnos mezclados con la salmodia! En el te mplo, ellos una extensión de la vida.tü
buscaron al sacerdote. en el ri to sagrado a l celebra r. en
Dios a su digno soberano. con mi M iriam para guia rlos y Inmediatamente después de este relato. Gregorio cuenta
para batir la pandereta no de tr iunfo, sino de súplica; de un milagro similar en relación con su madre, quien no podía
aprendiendo entonces po r la primera vez a ser ave rgonza- Comer y que fue sanada a través de u n sueño, en el qu e se veía
dos por la desgracia, y a invocar al mismo tiempo al pueblo comiendo de una canasta llena de panecillos blancos. También
ya Dios.•. describe un viaje por mar cuando él era joven y antes de su
¿Cuál fue, entonces, la resp uesta de aquel q ue era el
Dios de esa noche y del ho mbre en fermo ? ... El tiempo del
misterio llegó, ... cuando se gua rda el silencio para los ritos 70. Gregario de Nacianzo, Sobre la muerte de su padre, 28-29.
224 LA ACCIÓN DEL Es plRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO INSnruCIONAUZADO 225

bauti smo, en el cual sufrió una tormenta terr ible. Sus padres, y el creyente, al participar de estos elementos mater iales
que esraba a mucho s kiló metros de distancia, tuvieron una santificados, es transformado por la misma bendición o santi-
visión durant e la noch e en el mismo mom ento en que la ficació n del Espíritu. N o son los elem entos solos los qu e
tormenta estaba en su peor mom ento. Sus ora cion es pidiendo proveen el don del renacimiento espiritual, sino ..la visitació n
liberación para su hijo fueron oídas y a su regreso a casa el del Espíritu qu e viene sacramentalmente para hacemos li-
milagro quedó confirmado,"! bres•. 72
Con el bautismo, el creyente es regene rado por el Espíritu
e introducido a una vida en el Espíritu, en la que la gracia fluye
Gregorio de Nisa (335-395)
constantemente para aquellos que la aceptan . Cuando una
junto con su hermano Basilio Magno y Gregario de persona es regenerada, el Espíritu Santo viene a ella y mora en
Nacianzo constituyen el trfo conocido como los ..Grandes ella, haciendo arde r su alma . El Espíritu es para el cre yente
Ca padocios -. Gregario de Nisa fue uno de los tr es G rega rios como una paloma que imparte don es, en este caso, el fruto del
que ilustraron la Iglesia de Or iente. Era herma no menor de Espíritu .
Basilio y amigo de Gregario de Nacianzo. En su juventud
ejerció el oficio eclesiástico de lector y fue pro fesor de elocuen- Permite tiempo a la Paloma para que vuele a ti, esa Paloma
cia. Mejor aconsejado , volvió a su antigua voca ción eclesiásti- que Jesús hizo bajar por primera vez en figura desde el
ca, y en el año 371 fue consagrado ob ispo por su hermano cielo. Esa Paloma es sencilla, mansa y muy f értil. Cuando
Basilio para la sede de Nisa . Aquí sostuvo combates co n los ella encuentra a una persona limpia, como una leña encen-
arrianos, que finalmente lograron desterrarlo . A la mu erte del dida bien preparada, ella mora en esa persona y enciende
emperador romano de O riente, el ar riano Valente (328 ·378), su alma a la manera de un aveque empollasobre sus huevos
un edicto de tolera ncia le permitió volver. Asistió en 379 al para incubarlos. La Paloma luego da a luz a muchos
Sínodo de Antioquía, y en el año 3 81 al Co ncilio de Constan- vástagos excelentes. Estos hijos son buenas acciones, pala-
tinopla. El mérito principal suyo es su demostr ación y defensa bras santas, fe, piedad, justicia, temperanza, castidad y
de la fe cristiana. Su originalidad y capacidad intelectual fue pureza. Estos son los hijos del Espíritu. pero son nuestra
notable. posesión.73
De manera singular, Grega rio relacionó la acción del
Espíritu en el cre yente y en la Iglesia con los sacramentos o En cuanto a los dones espirituales, Gregario los relaciona
..misterios» de la Iglesia. A su vez, es a travé s de los sacramentos también con el crecimiento en la vida cristiana. Despu és de
que el Espíritu transforma al ser humano a la imagen de Dios citar 1 Cori ntios 13.1-8, señala:
y lo per fecciona en la vida cristiana. Hay, pues, en todo esto,
un verdadero proceso de ..deificaci ón », que es operado po r el lnd uso si alguien recibe los otros dones que el Espíritu
Espíritu en la vida de la person a, a través de los sacramentos. imparte (me refiero a las lenguas de ángeles y profecía y
De este mod o, el Espíritu transforma los elementos sacramenta- conocimiento y la gracia de sanar), pero jamás ha sido
les (agua, pan, vino, aceite, erc.) a través de su poder santificador.

7l. Gregorio de Nisa, Sobre el bautismo de Cristo.


11. uu ., J I. 73. Gregorio de Nisa, Contraaquellos que difieren Id bautismo.
226 LA ACCiÓN DEL Esplluru SANTO EN LA HISTORIA

totalmente limpiado de las pasiones tur bulentas dentro


suyo a tr avés del amor del Espíritu, y no ha recibido el
rem edio final de la salvación de su alma, tal per sona está
tod avía en peligro de perderse si no gua rda sólido y firm e
al amor entre sus virtude s.
No te conformes con sus don es, pensando que en razón de
la riqueza y de la generosa gracia del Espíritu ni ngu na otra
cosa te es necesaria par a la perfección. Cuando estas riqu e-
zas vengan a ti, sé mo desto en tu pensam iento, siempre
sumiso y pensando del amo r como el fundamento del
tesoro de la gracia para el alma ... La "nueva creación .. es
el ma ndato apostó lico ... Él denom ina como nueva cria tu ra
a la morad a del Espíritu Santo en un alma pura y sin culpa,
alejada del mal y de la maldad y de la vergüenee.v-t
HMOVIMlfNTO MONÁSTICO

m ;
espués de su supuesta conversión en el año 312,
Constantino co ncedió la paz a las iglesias dentro
del Imperio Romano . Esto significó enormes ven-
tajas, pero entrañó también graves peligros. Como
dice Jerónim o: "La Iglesia creció en riqueza y pod er, pero se
empobreció en virt udes». Al contemplar a las décadas que
siguieron, parece eviden te el retroceso de los cristianos en el
fervor religioso y en la mo ralidad. Las causas de esta decaden-
cia espiritua l y mora l fueron múltiples. Faltó el estímulo de las
persecuciones. M uchos nuevos convertidos no abando naban
sus vicios paganos, porq ue su co nversión se debía a co nvenien-
cia más que a un verdadero cambio de vida. Las controversias
reológicas fueron causa de que muchos obispos y líderes reli-
giosos d ieran ejemplos poco edificantes a los fieles, que por
otro lado, no siempre entend ían los vericuetos de las cuestio nes
que se debatían. El perma nente hostigamiento de los pueblos
74. Gregorio de Nisa, Sobre el modocristiano de ricia. bárbaros sobr e las fronteras del Impe rio, y en algunos casos su
22 8 LA ACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL MOVIMIENTO MONÁSTICO 229

ingreso violent o al mismo, sembraban la inquietud por to das monástica. Es precisament e en estos ámbitos donde co n más
partes e imped ían un a vivencia más profund a de la fe. La frecuencia, a pa rtir del siglo IV, se pueden ver manifestacion es
instrucción religiosa del pueblo era muy pobre, cuan do no casi y evide ncias de la acció n pod ero sa del Espír itu Santo.
totalmente ausente. El mon astic ismo surgió también com o un a reacción cont ra
Cuando se lee la literatura cristiana de este tiempo, es la centralizació n clerical y la restricció n de los dones del
posible ver a los padres de la iglesia qu ejar se continuame nte en Espíritu. Pero los monje s se transformaron en una especie de
sus hom ilías y en sus escritos del escaso entusiasmo religioso, aristocracia espiritu al, en cristianos de ..primera clase», según
la charura espiritual y la bajísima moralidad de los creyentes. un nu evo tipo de concepción gnóstica. Es así qu e los cat ismas
Junto con este clima de creciente deterioro de la vida y el sobrevivieron básicam ent e en dos contextos : bajo el co nt rol
testimonio cristiano, no es extraño constatar un creciente institu cional del cler icalismo, dentro de las or ganizacio nes
descuido del ejercicio de los dones del Espíritu Santo y la monásticas; o bien en grupos periféricos perseguido s o muy
disminución de los testim onios de señales, prodigios y maravi- lejos del tron co principal de las iglesias estable cidas . En el
llas. A pesar de tod o esto, la acció n del Espíritu no desapar eció segundo caso. el resultado fue una tendencia al fanati smo,
ni se interrumpió . Él pudo encontrar vidas de hombres y cua ndo no se cayó en flagrantes herejías. Por eso, su aislamien -
mu jeres a través de los cuales ex presa r su poder. N o es raro to fue inevitable, y la co ndena oficial llevó a estos grupos a su
incluso saber de familias enteras de pe rsonas obe dientes y casi desaparición . En otros casos, todas sus energías se agotaron
llenas del Espíritu, com o la de Basilio el Grande, cuya madre en sus esfuerzos de supervivencia frent e :J. la intolerancia de la
y herman os fueron extraordina rios ejemplos de co nsagració n jerarquía eclesiástica.
y servicio. En este cap ítu lo con sideraremos los testimonios que pro-
El Estado imperial acogió la influencia positiva de esto s vienen del primer conte xt o, es decir, del movimi ento monás-
cristianos sujetos al seño río de Cristo y sancionó leyes civiles, tico qu e. tanto en Oriente como en Occidente. se desarro lló
qu e tuvi eron un profu nd o sentido mora lizador. Fueron prohi- con cierta anuencia del clero establecido . En este caso , los
bidos los juego s de gladiadore s. Se prohibió la crucifixión, po r testimonios de la acción poderosa y sobre natu ral del Espíritu
respet o a la muerte de Cris to. Se castigó el infanticidio y el Sant o son so rprendent es y abu ndantes. El problema aq uí no es
aborto. La esclavitud perdió much o de su brutalidad . Se con- la falta de mater ial, sino la evaluación y selección del mismo ,
servó y amplió la ayuda a los pobres y men este rosos, y es así ya que en las hag iografías se da una profusión aso mbrosa de lo
como aparecieron los primeros asilos y hospita les para ind i- legendario y fantástico . De modo que, buen a par te de la ta rea
gentes, peregrinos y extranjeros. Pero estos destellos de pro- del investigador co nsiste en desent rañar de la abundancia de
greso mo ral no fuero n suficientes para balancear el estado relatos prod igiosos la verdad de los hechos acaecidos.
generalizado de debacle espiritual. qu e se estaba gestando en
aquellos años.
Los m onjes del de sierto
Si bien la espiritu alidad y la moralid ad co nt inuaro n su
mar cha descend ent e, hay qu e afirmar también que había un El ideal de imitación perfe cta de Cristo brotó desde
sector significativo dentro de la cr istiandad qu e llevaba una tiempos bastante remotos de ntr o del cristiani smo. Mu chos
vida de altísima vivencia espiritual y que se había pro puesto fieles, por amor a Cristo , ado ptaron un ten or de vida apa rtada
como idea l la imitació n perfecta de Jesucristo . Expr esión de del mundo, cara cter izada po r un reti ro del mismo más o menos
esto es el desarro llo admi rab le de la vida ascética o vida perfecto, el voto de castida d y la ent rega a una estricta vida
230 LA ACCIÓN DEL EsplRIru SANTO EN LA. HISTO RIA EL MOVIM IENTO MO NÁSTICO 231

penitencial. Este tipo de vida fue asumido por los ascetas, que vida ascética . Este género de vida anacorética se difundió
come nzaron a crecer en número e impo rtancia a partir del siglo rápi damente por to do Egipto gracias a la influen cia de Anro-
IV, especial ment e en O riente. nio. Estos anacoretas vivían solita rios cada un o en su choza,
Sobre la base de la vida ascética, ramo de hombres co mo pero recibían la dirección de un padre espiritu al, que era como
de mujeres, se edificó lo que se puede considerar como el el director del conjunto de chozas más o menos cer canas. En
primer estad io de la vida mon acal: el anaco rerismo .! En oca- el caso de Anton io, según el testimonio de Ju an Casiano , su
sión de las persecucio nes sistemáticas co nt ra el cristianismo, vida fue un ejemplo de renunciami ent o, sacrificio y martirio
especialmente durante el siglo 111 (Decio y Dioc1eciano), mu- diario por amor a Cristo.a
chos cristianos aban do naron las ciu dades y se fueron a vivir al Se atribuye a Atanasio de Alejandr ía una obra biográ fica
desier to. AlU permanecieron incluso después de aca badas las sobre Antonio) El impacto de este libro sobre el surgimiento
persec ucio nes, llevando una vida solitaria, entregado s a su del ascetismo fue notable,
perfección religiosa y la comtemplación. Según esta obra, Antonio fue un hombre lleno del Espíritu
Una vez que el martirio dejó de ser el ideal del cristiano Santo y poderoso en milagros, señales y mara villas. ..Cuando
perfecto, por haberse terminad o las persecucion es sangrient as, muchos estaban an siosos y dispuestos a imitar su disciplina , y
la vida mon acal se con virtió en el sustituto por excelencia . De sus con ocidos vin ieron y comenzaro n derrumbar y sacar por
este mod o, los mon jes pasaron a ser una suerte de herederos la fuerza la puerta [del lugar donde estaba encerrado], Antonio,
de los mártires, y la ascesis el estilo de vida qu e se supo nía co mo de un templo, salió iniciado en los miste rios y lleno con
seguía más de cerca las hu ellas de Jesús. Este de seo de imitació n el Espí ritu de Dios. Ent onces por pr imera vez él fue visto fuera
de Cristo fue el qu e pobló los desiertos de an acoretas, co mo del fuerte por aque llos que habían veni do a verlo ....4 Después
Pablo el Erm itaño (m. 34 1). de casi veinte años de vida solitaria y de cr ucifixión al mundo
como un má rti r viviente, Antonio come nzó a actua r bajo el
poder del Espíritu , ..A través de él, el Señor sanó las dol encias
Antoni o (250-356)
corpo rales de muchos de los gue estaban pre sentes, y limpió a
El movimient o nació en Egipto, y comenzó con el ejemplo ot ros de malos espíritus. Y El le dio gracia a Antonio en el
de Ant onio, qu ien se estableció a unos pocos kilóm etr os del hablar, de modo qu e conso ló a muchos que esta ban dolidos, y
Mar Rojo , al sur de la acrual ciudad de El Caico. Antonio llevó unió a aqu ellos qu e estaban en discordia, exhortando a todos
al principio un a vida solitaria, desde el añ o 270. Ha cia el año a prefe rir el amor de Cristo antes qu e tod o lo qu e está en el
29 0 ya se habían juntado a él algunos d iscípulos, los cuales mundo- e!
formaron un conjunto de celdas de ermi taños ba jo su direc-
ción . Esta fue precisame nte la novedad introducida po r él a la
2. Jua n Casiano, CoLJcíOlU$, 14.2¡ e InstituciOlU$, 4.34-35.
J. Atanasia de Alejandría, La vidd tU san A1ltonio. Sobre el contenido y
l. los anacoretas eran personas que se retiraban del mundo para vivir una valor histórico de esta obra, véase, A.C. Baynes, ..St. Anthony and rhe
vida solita ria de silencio, oración y mon ificación . T écnicamente, el Dernons-, Joumal o( Egyptidn Archaeofogy, 40, 1954, 7.1 0; y jean
tér mino incluye a los cenobitas (es decir, a aquellos que vivían en una Daniélou. wl.es d émonsde l'airdans la " Vie d'Antoine"~,Studid Ame/mid·
comun idad), como también a [os ermitañ os, si bien generalmente se lo na 38.1956. 136-145.
restringe a estos últimos. Los ermitaños son anacoretas que viven ~ . Atanasio de A[ejandda, LA vida de san Antonio, 14.
retirados en una ermita (santuario o capilla pequeña) y cuidan de ella. 5. ¡bid.
232 LA ACCIÓN DEL EspfRITU SANTO EN L\ HISTORIA EL MOVlMIENTO MONÁSTICO 233

Lo qu e sigue, es un relat o que abunda en la descri pción de que padecían, cuan do él no que ría abrir su puerta, dormían
milagros, señales y maravillas. Especialmente se destaca la afuera de su celda, y por su fe y o raciones sinceras eran
capacidad qu e ten ía Antoni o para discern ir espíritus inmundos sanados•.8
y para liberar a quienes estaban oprimidos por ellos. La llenura Llegó un momento en el que Antonio tuvo qu e mudar se
del Espíritu es la que da el pod er y la auto ridad para liberar a de lugar, debido a la cantidad de gente que se agolpaba para
aquellos qu e están afligidos por los demonios. LA vida de san recibir un milagro y que interrumpía de este mod o su vida
Antonio narra el siguiente caso : solitaria. Llama la atención la mane ra en que Antonio recon oce
con humildad que todas estas acciones de poder son el resul-
Martiniano, un oficial militar, vino y perturbó a Anto nio. tado de la obra de Cristo en él, como alguien que sigue al
Porque tenía una hija afligida con un espíritu malo. Pero Espíritu. «Antonio ... no sanaba dand o ó rdenes, sino por medio
cuando él cont inué por un buen rato golpeando a la pu erta, de la orac ión y hablando en el nombre de Cristo. De modo que
y pidiéndole que saliese y orase a Dios por su pequeña, era claro a todos que no era él mismo quien obraba, sino el
Antonio, no soportando abrir, miró por arriba y dijo: Seño r quien mostraba misericordia por sus medios y sanaba a
- Homb re, épor qué me llamas? Yo también soy un hombr e los dolientes. Pero la parte de Anton io era solo o ración y
tal como tú. Pero si tú crees en Cristo a quien yo sirvo, ve, disciplina...9
y conforme tu crees. o ra a Dios, y esto va a ocu rrir•. Otro don del Espíritu que se le atribuye es el de profecía,
Inmediatamente. por tanto, él partió, creyendo e invocan - especialmente la capacidad de ver cosas. En cierra oportu nidad
do a Cristo, y recibió a su hija limpia del demonio. ElSeñor, mientras él se encontraba en las montañas, observó lo que
que dijo «Buscad y os será dad o•• hizo también muchas estaba ocurriendo en Egipto. También tuvo una visión, en la
otras cosas a través de Anronio.s que vio
Este poder de discernir espíritus y de echa rlo s fuera en La mesa de la Casa del Señor, y mulas alrededor de ella por
el nombre de J esús no es dado por el Espíritu sin ciert a todos lados en un círculo, y estaban pateando las cosas que
pre paración previa . ..Hay necesidad de mucha oración y de había en ella, tal como una manada patea cuando cae en
disciplina , para qu e cuando un hombre ha recibido a través con fusión.... Estas cosas vio el anciano, y después de dos
del Espíritu el don de discernimiento de espíritus. él pue da años, ocurr ió la irrupción presente de los arri anos y el
ten er poder para recon ocer sus características: cuáles de despo jo de las iglesias, cuando de manera violenta sacaron
ellos son menos malos y cuáles más; de qu é natural eza es el los vasos, e hiciero n que los paganos se los llevaran ... y en
emp eño de cada uno ; y có mo cada uno de ellos es vencido su presencia hicieron con la Mesa como quisieron . Enton-
y echado fuera » , 7 ces nosotros todos entendimos que estas paradas de las
El texto también abunda en el relato de sanidades diver - mulas significaban para Antonio lo que los arrianos, insen-
sas. En much os casos, Antoni o ni siquiera hizo un a o ració n siblemente como bestias, estaban haciendo aho ra.10
por la sanidad de los qu e fueron curados . «Muchos de los

8. lbid., 48 .
6. íbíd., 48. 9. lbid., 84.
7. lbid., 22 . 10. ¡bid., 82.
234 LA ACCIÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL MO VIMI ENT O MONÁSTICO 235

Pacomio (ca . 292-346) Hay varias biografías de Pacomi o, en las que se mencionan
O~ro gran representante del anacoretismo egipcio fue diversos milagros y acciones sobrenatu rales obradas por el
Pacomio. Con él comenzó un nuevo estilo de vida ascética Espíritu Santo a trav és de él. En una de ellas, leemos que Dios,
Había sido solda do y después anacoreta, hasta que se transfor- en lugar de llena r la tierra con tri steza. escogió más bien llenarla
mó en el creador del cenobitismo . Cuando en anacorerisrno con un Espíritu embriagador, que especialmente bendij o a
egipcio estaba en pleno proceso de desarrollo, Pacomic dio aquellos que siguieron la vida monásrica, como Pacornio. ü Al
forma en el sur de Egipto al cenobitismo o vida monástica igual qu e Antoni o, el padre del monasticisrno cenobítico egip-
pro piamente dicha. La vida cen obítica consiste sustancialmen- cio también sufrió en varias ocasiones d ramá ticos ataques
te en una forma de vida común, bajo un supe rio r así designado. de moníacos, de los que salió airoso.U En otros casos, Pacomio
La vida cenobítica se extendió rápidamente por tod o Egipto, sanó a much os enfermos, como una mujer con flujo de sangre.
como más conform e con el ideal de perfección evangélica. y una niña afligida poseída por demonios.t't Además, el monje
Cada monje vivía por separado en su choza, pero todos dentro recibió en muchas ocasiones visiones en relaci ón con here jías
d~ una mls~a área y llevando vida de comunidad, bajo una y otras situacio nes. atribuidas a la revelación del Espíritu . U
misma autoridad. Com o indica Burgess: Estos mismos padres del desierto enseñaron y entrenaron
en los do nes del Espíritu a sus discípulos. a pa rti r de su propio
Los padres del desierto ejercieron una autoridad carisma- ejem plo y práctica. De allí que. asociadas a las vidas de los
rica tanto sobre los monjes como las mon jas que los se- grandes padres. hab ía una serie interminable de histor ias de
gufan, así como sobre la gente cristiana que no había señales. prodigios. milagros y maravillas, como también testi-
tom ~do los votos. Es interesante notar que, mientras los mo nios de los múltiples dones car ismáticos que estos ejercían .
monj es copros te nían reglas for males, ellos descansaban Es asf como. en el caso de Pacomio, se cuenta de este monje
menos en ellas que la mayoría de ot ros ascetas tanto en del desierro en Egipto, muerto a media dos del cuarto siglo.
Oriente como en Occident e. En lugar de esto, había una hablaba la lengua de los ángeles, y en cierta ocasión, habló
confianza fuerte en la palab ra y dirección carismática de un griego y latín en el Espíriru, si bien jamás había tenido oporru-
anciano que era considerado por su discípulo obedie nte nidad de aprender estos idiomas. Una variante del relato dice
c~mo un pneumatoforos-i.e. una persona llena del Espí- que despué s de tres horas de oración ferviente pudo hablar en
ntu Santo . En el proceso, los desiertos de Egipto se tra ns- latín con un visitante occidenra l.te
formaron en centr os de entrenamiento del Espíritu (muy No es extraño qu e multitudes hayan salido al desierto para
diferentes de los medio s acad émicos de la escuela carequé- conocer a estos hombres y mujeres de Dios. Los info rmes
ti.ca de Alejandría) en los que el novicio apr endía por el
ejemplo de su maestro a discernir entre el mal y los
pensamientos justos que brotaban de dentro de la mente 52·65; y jean-Claude Guy, - Educanonal Innovation in the Desert
humana . t t Fathers-, Eastern Churches Review 6 :1, Spnng 1974, 44·51.
12. v éase, Ap óstolos N. Athanassakis, trad., The Life of Pat:. homius Scbolars
Press, Misscula, Montana, 1975, 5.
u . Vida de Pacomio, 18,20, 52.
11. Burgess, Eastem Christian Traditions, 138-139. Sobre la autoridad H. lbid., 41, 44.
ca ri s má~ic a d~
los padres del desierto, véase, Fram;ois Neyr, . A Form 15. lbid., 102, 48.
of Charismanc Aurboriry-, Eastem Churches Review 6:1, Spring 1974, 16. Williams y Waldvogd, . A Hisrory of Speaking in Tongues-, 69.
236 LA ACCIÓN DEL EsrfRlTU SANTO EN lA HISTO RIA EL MO VIMIENTO M ONÁSTICO 237

hablan de miles de monjes y monjas en desiert o egipcio. Para que en cierta ocasión el monje egipcio fue transp ortad o física-
medi ad os del siglo V, se calcula ba que la mitad de la pobl ació n mente por Dios del desierto al río N ilo.
adu lta de Egipto (exclu yendo Alejandría) estaba involucrada La Apopbtbegmata Patrum (los dichos de los padres)
en la vida anacorética, y en algunas partes del país había villas mencionan con frecuencia el co nflicto de M acar io con los
en las que no había adultos qu e no esruviesen bajo los votos demo nios. A través de las pruebas espirituales, el santo prob ó
monásticos. 17 Estas person as desarrollaron un a forma de reli- ser invulnerable a las fuerzas del ma l en razón de su profunda
giosidad popul ar asociada al anaco rerismo, qu e esperaba lo humildad y depend encia del Espíritu. Los demonios huían de
milagroso com o no rmal. ..Estas expecta tivas incl uían exo rcis- él debido a su fe en Dio s.zt Prec isamen te, po r habe r ejercido
mos, la con cesión de fertilidad a mujeres esté riles, la restau ra- los do nes del Espíri tu, Macari o fue co nsiderado co mo digno
ción de objetos perd idos o robad os, la a parición de un santo del sacerdocio.t z Fue un predicador famoso, que dejó una
dad o o de la Virgen María, y especialmente, la sani dad de los buena cantidad de homilías, diálogos, dichos, y cartas. Estos
enfermos tan to en la mente como en el cuerpo..) S De este escritos, según indica Burge ss: ..Comparten la expectativa
mod o, el ejercicio de los car ismas y las o peraciones sobrenatu - dia ria de lo mila groso, una dependencia de los don es de gracia
ra les del Espíritu, no fueron extrañas para los cr istianos que div inos par a vencer a las fuerzas demon íacas, un a consciencia
vieron en la vida apartada en el desierto, el ideal de su profu nda de los efectos del peca do, y, com o resultado, una vida
compromiso con Cristo . de o ración y un estilo de vida ascético qu e va en procura de un
ideal de perfe cción extremadamente alto ... 2J
Macar io insiste en que a través de la oració n, el alma se
Macario (ca. 300-ea. 390)
llena de un éxtasis indecible al poder ver co n los o jos hu manos
Macario fue un destacado mo nje del desierto egipcio, de la luz que está en Dios. Él habla del Espíritu co mo la antorc~a
fines del siglo IV. A los treinta años comenzó su vida anacoreta divina en el corazón , sin cuya ope ración no se puede descubrir
y vivió durant e sesenta años como ermi tañ o . Mu y pron to fue la image n real. El Espíritu es un a luz inefable, y la luz del
seguido por un grupo de discípu los, que admiraban su sabidu- Espí ritu es la vida del alma. 24 La mente del cristiano está
ría, d iscernimiento espiritu al y ejemplo de vida. Se dice qu e se siempre encend ida con una llama celestial debido a la luz del
ocupaba intensame nt e de la oración y qu e hab ía entrado en un Espíritu que mora en él.25 Por eso, todo co nocimiento verda-
estado de éxtasis conti nuo . Para cuan do llegó a los cuar enta de ro es revelad o po r el Espír itu, qu e deja impresiones secreras
añ os, Macari o era con ocid o por ejercer los done s de sanidades, e indecibles en la mente humana . Y qu ienes de veras son
liberación de dem oni os y profecra. te Paladi o y Casiano cu en- gu iados po r el Espíritu no pueden aprender de ningú n otro ,
tan que Macari o de Egipto resucitó un hombre mu ert o, con el
propósito de con vencer a los herejes qu e no creían en la
resurrección de los muenos.ze Los informes habla n tam bién de
21. Véase,BenedictaWard, trad., '111eSayingsoftlleDesert Fathm, Mowbray,
Londres y Oxford, 1975, 130.
22. Paladio, Historia lausiaca , 17.2.
17. Stephen Gaselee, The Copts. The Royal Central Asian Sociery, n.f. 13. Burguess, Eastem Christian Tradition, 144 . ..
Londres, 35. 24. Macario de Egipto, Homilía 1.7. Véase, Arrhur J. Mason, Fifty Sp,,!tual
18. Burgess, Bastem Christian Traditions, 138. Hcmilies af Sto Macan'us the Egiptian SPCK, Londres; Macmillan,
19. Paladio, Historialausíaca, 17,2, 5. Nueva York, 1921).
20. Juan Casiano, Colaciol/es, 15.3; Paladio, Historia lausíaca, 17. 11. 25. Macano de Egipto, HomiUa 5.11.
238 LA ACCiÓN DEL EsplRlTU SANTO EN lA HISTORIA EL MOVlMIFNfO MONÁSn CO 239

sino qu e en su men te ellos pasan, po r la o peración del Espír iru son dis pensados por Cristo a to dos aquellos que busca n un a
a otra era, la del Reino celesrial.ze ' vida en ÉI.3S Cada persona está adorna da de manera singular ,
. En M acario, el Espíritu Santo es el traje de bodas que se y cada un a retiene su propia natu raleza y personalida d. si bien
recibe cuando el creyente buscala unión con Dios. Quienes están está llena con el mismo Espíritu. 36 Cada un o es ca da uno, pero
vestidos con el Espíritu divino son hijos de luz y son transforma. el Espíritu obra en todos y cada uno de manera singular. Los
dos en <Cr istos y Dioses... La riqueza qu e viene de Dios es la dones espirituales son da dos de modo que el creye nte pueda
operaci ón del Espíritu)1 Pero la acción del Espíritu no solo tener pode r.s" Con este poder, el creyente lleno del Espíritu
tie ne que ver co n provisión , sino también con la consciencia puede «volar por sob re toda maldad".38
del p~oceso divino en uno mismo. Es a través del espe jo del
Espíritu que las bendiciones inefables de Dios se pu eden ver)8 Arn m o n as (fines s. IV)
El don del Espíriru está más a llá de to da medida, co mo un
tesoro real, y esta abunda ncia hace que M acari o alie nte a sus A fines del siglo IV adquirió reno mbre otro mo nje del
seguidores a «vestirse con la pú rp ura del Esp íriru..)9 desi erto, conocido por e! nombre de Amm onas. Sabe mos mu y
. El Espí ritu sala y leud a el alma hum ana con el pode r de poco sob re él. Aparentemente pasó un os catorce a ño s en el
DIOS'.30 Él es qui en provee nut rim iento al alma a partir de un a desie rto egipcio , bajo la tu tela de Antonio . Luego pasó a d irigir
a mplia gama de comida y bebida espiritual, ya que el al ma un monasteri o y qui zás fue incluso ordenado obi sp o. Se le
hu man a pu ede recibir su a lime nto de! mun do o del Espíritu.ar atribuyen unas trece ca rtas, en las que ex presa la absoluta
C uando e! Espíriru no s llena, qu edamos verd aderam ente satis- necesida d de la llenura del Espíriru para hacer fr en te al pecado
fechos, y ser em briaga dos con el Espfriru es un a em br iaguez y a los demonios. El creyent e debe pedir a Dios, con todo su
inefable.az corazó n, que llene su vida con e! Espfr iru Santo, el mismo
Espfriru qu e obró en los grandes profetas del Antiguo Testa -
Macar¡ o enseña abundantemente acerca de los dones del
mento. Cuando esto ocu rre, los misterios del cielo son revel a-
Espfriru. Según él, el Esp íritu da dones y gracias a a lgu nos sin
dos al creyente tan pr onto como el Espíritu es recib ido . No hay
necesidad de que se retiren del mundo, mientras que otros palabras que puedan describir estas ma ravillas y la intensidad
debe n espera r hasta más adelanre.as Los dones del Espíritu de esta ex periencia. El creye nt e es liber ado de todo temor y es
(edenes rea les-) son dados a todo el que los pida.34 No debe n inunda do por el gozo celestial. Es como si la persona ya hu biese
ser busca dos como fines en sí mismos, sino que más bien ellos sido transportada al Reino de los cielos mientr as que todavía
está en el cue rpo. El creyente llen o de! Espíritu, ya no necesita
orar por sl mism o, sino que pued e ded icar to do su tiempo al
26. Ibid., 15.2; 49.1. amor. el servicio y la intercesió n por otros .39
27. lbid., 18.6.
28. lbid., 5.5.
29. Ibid., 50.4.
30. lbid., 1.5; 14.3-4. 3S. lbid., 45.7 .
31. lbid., I.t )· 11; 31.5 . 36. lbid., 32.3.
32. Véase, Granville Penn, ed., lmtitutes af Christum Perteaion, Joh n 37. lbid., 27.17.
Mur ray, Londres, 18 16, 145. 38. lbid., 44 .6.
JJ. Macario de Egipto, Hom íua 29.1-2. 39. Arnmonas, Carta 8. v éase, Derwas J. Chitry, ed, The!.etten ofAmmemas,'
H. Ibid., 4.6; 39.1. SuaessorofSaint Antony Sisrers of rhe Love of God Press,Oxford, 1979.
240 LA ACCi ÓN DEL EsP!RITU SANTO EN LA HI STORIA EL M OVIMIENTO MO NÁSTI CO 241

Según Ammo nas, el Espíritu Santo imparte gozo y dul- Elraín de Siria (306-373)
zura a medida que los fieles pu rifican sus corazo nes. Cuando Nació no antes de! año 306, y su fallecimiento suele fijarse
los creyentes persisten en este proceso de puri ficación y de en el año 373. Su patr ia fue Nisibis, en Mesoporamia. Sus
búsq ueda del ros tr o de Dios con lágri mas y ayuno , negándo - padres eran cristianos y fue discípulo de Jacobo Afraares,
se a sí mismos, reciben un gozo mayo r que ant es, y so n obispo de aquella ciudad, quien le llevó al Concilio de Nicea
establecidos aun más flrmem enre .w Es, precisamente, al (325). Afraares lo nombró maestro de su escuela episcopal en
pasar y vencer a las pruebas y tentaciones, que el creyente Nisibis. En e! año 363 , la ciudad cayó bajo el dominio persa y
adquiere el don espiritua l de discernimiento. Este discerni - la escuela fue suprimida y Efrafn emigró a Edesa, centro
mien to no tiene tanto que ver con los ma los espírit us como espiritual y religioso de toda la región. Basilio lo or denó
con el propósito de conocer y entender la voluntad de Dios, diácono; se duda si llegó a la dignidad sacerdotal. Se cree con
en oposición a la voluntad propia y el engaño satánico. 4 1 fundamento qu e vivió de o rdinario, como ermitaño, en un
Am monas m enciona varios dones espirituales, entre ellos, monte próximo a la ciudad, donde recogió alumnos y discípu-
asombro, llanto, fortaleza y la capacidad de llevar fruto. De los, y de donde bajaban con frecuencia a predicar a sus mora-
hecho, el fin de todos los dones espirituales es poder prestar dores. AIIfco mpuso la mayoría de sus libros, escritos en idioma
un servicio más efectivo, ya que los individuos «reciben dones sirfaco, y que le granjearon gran fama y lo constituyen en el
y ayudan a los hombres».42 más grand e de los escritores en lengua sirfaca. Teod oreto lo
llama ..el Arpa del Espfritu 43
lO

Efrafn fue un prolífico escritor de comenta rios bíblicos,


El monasticismo oriental homilías (incluyendo obras conrroversiales), e himnos u odas.
Si bien el ideal monástico nació en Egipto, muy pron to se Especialmente, se destacó en la poesía, a la qu e recurri ó co mo
difundió po r todo el mundo cristiano dur ante el siglo IV. De
1 medio de enseñanza, exhortación y adoración. De allí que, al
todas partes iban personas devotas a Egipto para conocer a los igual que ot ros escrito res orientales, le p~este ~u~ha atenc!ó n
padr es del desierto y recibir sus enseñanzas. De este modo, la a la obr a del Espíritu Santo. Para él, la Vida Cristiana consiste
vida y práctica cristianas c épt icas tuvieron una influencia en permitir al Espíritu Santo efectuar nuestra ent rada en e!
notable. Las hagiografías de Pablo, Antonio, Pacomio y otros tiempo sagrado (Le. el tiempo de la celebración litúrgica,
comen zaron a recorr er el mundo cristiano, co n sus relatos de especialmente de la eucaristía) en c~ulquier momento de. la
portentos y maravillas obrados por estos hombres bajo el poder vida. El Espíritu es también quien quita las escamas de los OJos
del Espíritu. Así, pues, en Oriente comenzaro n a aparecer de mod o que el cristiano pueda reconocer el mundo como
monjes que imitaban el ideal de vida solitaria de los egipcios, transfigurado y el Reino de Dios como existiendo dentro suyo.
incluso con alguna exageración . A conti nuación, considerare- En esta mezcla de lo terrenal co n lo celestial, de lo temporal
mos algunos ejemplos. con lo no tempor al, de lo conocido con lo descon ocido, la obra
del Espíritu Santo es central."

. 0. Arnmonas, Carta 9.
u Arnmonas, Carta 11. . 1. Teodc reto, Carta 145; d . Carta 151.
• 2. Arnmonas, Carla 6. ••. Burgess, Eastem Christian Tradítions, 178.
242 LA ACCIÓN DEL EsrtRITIJ SANTO EN LA HISTO RIA EL MOVIMIENTO MONÁSTICO 243

La acción del Esp íritu se hace evidente a lo la rgo de to do el fuego del Espíritu es impa rt ido a los participa ntes en la
el plan de salvación, y se extiende en el tiempo lineal ordi nario euca ristía a fin de sanríflcarlos.se Su calor di vino pro vee de
desd e el co mienzo de la creación hasta el clímax de las edades vestido a los que de otro mod o andarían desnudos. Este calo r
y el juicio final. Efra ín ve la operación poderosa del Espíritu del Espí ritu tiene un a virtud vivificadora. Efraín de Siria habla
crea do r cua ndo se mov ía sobre la faz de las agu as para c rea r al del calor div ino del Espíriru qu e de rrite to do )0 que está
mundo. tanto como cuando se mueve en las aguas del bautismo co ngelado, que brando la capa de hielo del pecado, madurando
para crear nu evas personas. En el acto de bautismo, la persona to das las cosas, y trayend o la prima vera a la iglesia. Los labios
qu e ha nacid o de nuevo se trans for ma en un hijo de Dios, con qu e está n ce rrados se abren y son ca paces de hablar sin t~ mor
la posibilidad de llegar a ser un a criatura divina. Por la acción ..como pájaros en las altu ras.., con lenguas de fuego enviadas
del Esp íritu Santo, la criatura caída es transformada y llevada por el Esplritu.J !
de nuevo a su prístino estado paradisfaco.w En los escritos de Efra ln, la actividad del Espíritu Sa nto
Al bautismo le sigue la unción con aceite, por la que el no está limitad a a los misteri os sacramental es. En la lectura y
Esp friru impri me sus marcas sobre sus seguidores. Como un comprensión de las Sagra das Escri tu ras, el Espí ritu. está activo
an illo de sello cuya impresión qu eda sob re la ce ra, así el sello inspi rando al creyente pa ra ente nde r el texto . Para ilustrar este
escond ido del Espíritu es impreso por el aceire sob re los punto, él co mparte varias exper iencias per sonales, qu e le
cuer pos de aq uellos que son ungidos en el baunsmo.se Los ocurrieron mient ras estaba leyendo la Biblia. En cierta ocas ión,
cue rpo s son ungid os con ó leo para el perdón de sus pecados. mientras estaba med itando en los primeros versículos del
De esre mo do, e! ace ite acompaña al cristia no baur izado en su Gé nesis, fue lleno por e! Esp íritu con tal gozo, q.ue se sintió
necesidad, qu ien sale de las agua s del bau tismo vestido con la co mo elevado y transportado desd e ..el seno dellibro al seno
a rmadura de! Esp íritu Santo, brillando a la semejanza de los mismo del para íso...52 De igual modo, Efraín se refiere a las
ángeles.e? Es así com o se recibe el don del Espí riru. ~or eso,
visio nes pr oféticas, tant o de los profetas del Antiguo T esta-
..aquellos cuyos cuerpos ha n sentido la humedad del agua, mento como los del Nuevo. En la iglesia primitiva, al igual que
deb en senti r en sus almas el don del Espíriru ... pu diéndo [sus]
co n los profetas, el Espíritu Sant o reveló el plan divino y habl ?
almas sentir inte riormente el derr am amiento del Espí riru sobre
a través de la boca de los fieles.53 Los apósto les fue ro n arqur-
ellas... 48 El nuevo bautizado se viste el vestido o ro pa je del
tecros del Espí ritu, por que después de Pent ecostés se d edicaron
Espíritu, como 10 hicieron los apó stol es desnudos, porque en
el nuevo paraíso de la iglesia ningun o de los santos está a resta urar la fe que estaba siendo sacudida . Estos ho mbres y
desnudo-e mujeres fueron bauti zados en el Espíritu y nut.ridos con la
O tra imagen del Espíriru característica en Efraín es la del medi cina de la vida.H Además, recibieron los van os dones del
fuego . En Efrafn, como en mu chos otros escritores o rienta les, Esp íritu.U De este modo, mediante la .. imposición de manos..,

~5. Véase, j ean Daniélou, Frcm Shadows ro Reality, T he Newman Press, 50. Efraín de Siria, Himnos sobre fa fe, 10.8-13.
wesnninster, MD, 1960, 23·30. 5 1. lbid., 10.7·17.
~ 6. Efrafn de Siria, Himnos sobre la virginidad, 7.6. 52. Efraín de Siria, Himnos sobre el para(so, 5.3.
~ 7. Efrafn de Siria, Himnos sobre la epj(ml(a , 3. 1·3. 53. Efraín de Siria, Himnos sobre la fe, 60.5·6.
~8. Efrafn de Siria, Homiíta sobrenuestro Señor, 53. H. Efraín de Siria, Himnos de Nisjbis, 46.8.
~ 9. Efrafn de Siria, Himnos sobre el parafso , 6.9. 55. Efraín de Siria, Comentario sobre el Diatessaron, 3. 1.5, 11. 1.
244 LA ACCIÓN DEL ESrlRITIJ SANTO EN LA HISTORIA EL MOVIMIENTO ~ IONÁSTICO 245

el sacerdoc io de Cristo fue delegado de los apóstoles a los Estud ió en Capadocia, Co nstantinopla y pasó un tiempo en
obispos.56 Atenas. Su estilo tenía influe ncias de Platón y Hom ero. Co no -
Efraín mismo había ejercid o ciertos don es de man era s ció personalmente al famoso o rado r Libanio. Fue un gran
poco co munes. Se dice qu e hab ía recibido del Espíritu el don obispo, de pro fund a co nciencia social cr istiana y defensor de
de lágrimas, con tal abundancia que para él era tan natural los más hum ildes.
llorar como pa ra ot ros lo es respi rar.J? Efraín habla de don es De todos los padres de la iglesia antigua probablemente
especiales en otras personas, incluso se refiere a un monje qu e ninguno mostró más interés en las cosas del Espíritu qu e
era co noci do por haber can tado los salmos del Espíritu,s ' Sin Basilio . Tamo es así, qu e se le dio el títu lo de ..Doctor del
embargo, esros dones no debían ser buscados , ya qu e buscarl os Espíritu Santo... Su obra Sobre el Espíritu Santo muy posible-
pod ía disminuir la bend ición de Dios. Los don es del Espír itu mente es la más gra nde sob re el tema que se haya producido
son como miembros que ayu dan a la Iglesia acrece r1 y no son en toda la historia del cristianismo. Basilio vivió en la misma
para el beneficio o jactancia de un lndivíduo.rs región de Asia Menor que Grego rio Taumaturgo. Él ad miraba
Finalmente, para Efraín, el Espíritu ha venido a mo rar en al Taumatu rgo como un pneumatoforos, un receptáculo activo ,
el templo, o sea, en la Iglesia. Pero también mo ra en los cuerpos un portador y d istr ibuidor del Espíritu. Sus conclusio nes sobre
vivientes individuales, y esta mora da del Espíritu es el pod er la acción del Espíritu Santo reflejan el grad o profundo de la
de la resurrección, poder que se experimenta tanto aquí como influencia del ob rado r de maravillas sobre su propia vida y
en el más allá .6o minisre rio .
En la historia del cristianismo, se reconoce a Basilio co mo
el ho mbre que proveyó a la cristiandad oriental co n la descrip-
. Basilio Magno (331-379) 1 ción más articulada y pod erosa de la persona y oficios de la
Onundo de Cesárea, en Capadocia, fue obis po de esa Tercera Persona de la T rini dad . Burgess dice que ..La compren-
ciu dad del 370 al 379 . Fue un gran gu ía de la Iglesia, y el sió n de Basilio sob re el alcance toral de la ob ra del Espíritu
fundador del monasticisrno en la Iglesia Ori ent al, con sus vot os Santo en la vida del cre yente es quizás la más excepcional en
de obediencia, casti dad y pobreza. Tuvo opo rtu nidad de visitar el mund o anríguoce t
los centros monásticos de Palestina, Siria y Egipto, do nd e El Espíri tu es e! creador de la Iglesia, que, a su vez, cum ple
aprend ió mucho de lo qu e más ta rde a plicó en el Ponto . Basilio su misión a través de! Espíriru en la santificación de la creación.
es recordado po r establecer una regla monástica, qu e todavía En la Iglesia hay una sinfon ía o armonía qu e está conducida
por el Espíritu, qu ien vence la división, contrad icción y corrup-
hoy es seguida po r los monje s en la cristianda d ori ental.
Esencialmente fue un asceta y un teólogo, seguidor de Atanasia . ción.62 La Iglesia es e! Cuerpo de Cristo y la co munión del
Espí ritu, una hermandad y co munida d de amor gob ernada e
inspirada po r el Espíritu Santo. El Espír itu es el alma q ue mora
en la Iglesia, así como Cristo es su cabeza.O La Iglesia es la
56. Efraín de Siria, Him nos de Nisibis, 17.2-6.
57. Gregoric de Nisa, Contra Es conro.
sa. Henry Burgess, Seíeaed Metrical Hymns and Homil ies o( Ephraem
Syrus, Roben B. Blackadcr, Londres, 1853,44 . 61. Burgess, Anc íent Christian Traditicn , 139.
S!J. Efraín de Siria, In Paulum , 3. 62. Basilio, Sobre el Esplritu Santo, 16.38.
60. Efraín de Siria, Himnos de Nisibis, 49.9, 50.7. 63. Basilio, Carta 90, 1; Homil ía sobre los Salmos, 48.1.
246 1.J1. ACCIÓN DEL Es pfRlru SANTO EN LA HISTORIA El MOVIMIENTO MONÁSnCO 247

asamblea de todos aque llos a qu iene s el Espíritu Santo llama La predicación cristiana no es un a tarea que pueda hacerse
de (Odas las naciones del mundo con su kerygma de salvación por iniciativa propia ni tampoco puede ser impuesta. La pro -
a rravés de los profetas, los apóstoles, y to dos aq uellos en clamación del evangelio es un carisma del Espíritu San to, un
gen eracion es posterio res que han recibid o los don es de la ministe rio sagrado que debe ser ejercido en la comunida d
palabra y la enseñanza.e- Así, pues, uno de los con ceptos cristiana para el beneficio de otros . Aquellos a quienes se les
singu lares de Basilio en cuanto a la Iglesia es que esta es un co nfía el carisma de la palabra y de la enseña nza en la Iglesia
cuer po carismá tico, en el que cada persona ejerce dones únicos deben to mar sus voces prestad as del Espíritu de mo do que él
y part icular es, sin los cua les la comunidad co mo un todo se pue da escrib ir palabras de vida ete rna en los corazo nes de los
veda empobrecida. Basilio veía a la Iglesia co mo un cuerpo de creyentes. De esre modo, uno de los carismas que Basilio
miembros individ uales, cada uno con un don particular dado alenta ba más era el de una predicación de poder, si bien
por el Espí ritu : también enfatizaba el don de enseñanza. Q uienes tienen el don
de enseñanza, dice él, son estimulados por la gracia d ivina . Sus
Dado que los dones del Espíritu son diferentes, y uno no palabras son co mo flechas afilada s po r el pod er del Espíritu .68
pued e recibir todos [los dones] ni tod os [recibir) los mismos Basilio tendía a depender mucho del liderazgo de aquellos
dones. Cada uno debe permanecer con sobriedad y gratitud que tenían y ejercían los dones espirituales. Para él, la autor idad
en el don que le fue dado, y todos deben armonizarse unos y el minister io en la Iglesia estaban más allá de la po sición o
co n otros en el amo r de Cristo, como miembr os en un experiencia qu e se ten ía. y dependían totalmente en los don es
cuerpo. De modo que aquel que es inferior en dones no espirituales con que se contaba. Como obispo, prefer ía dar
debe desesperarse en comparación con aquel que sobresale, responsabilidades de liderazgo a monjes menores o herm anos
ni tampoco debe el más grande despreciar al meno r. Porqu e laicos, pero qu e estuv iesen dotados espiritualmente. Él espera-
quienes están divididos y en discordia con los demás me- ba que aque llos que ejercían el liderazgo y tenían responsabi-
recen perecer.s! lidades en la Iglesia fuesen personas de alto nivel espiritual, que
tu viesen don es de discernimiento de espíritu s y pudiesen sanar
De este modo, la edificación o la vida y crecimiento de la a los enfermos. También debían ser capaces de predecir el
Iglesia dep end en de qu e haya la coo peración mutua de sus futuro (i.e., tener dones proféticos: Hechos 11.27· 28; 20 .22;
miem bros en el ejercicio y participaci ón de los don es qu e cada 21.1 0.11 ).
ind ividuo ha recibido.ee La Iglesia crece y se expande en la Según Basilio, los carismas son don es del Espíritu Santo,
medida en que el Para cleto opera en ella a través de la insrru- dad os y aceptados para el beneficio de otros.es De este mod o,
men talidad de creye ntes dorad os co n los dones de palabra y los carismas no son fines en sí mismos sino instrumentos de
enseñanza.e? virtud . Su prop ósito , pues, es el servicio al pró jimo. Estos do nes
no co nsisten solo de pro fecía y sanida des, sino tam bién de
todos los bienes y servicios terre na les. J unto con los don es
6... lbid. Véase, W.K.L. Clarke, The Aseetic Works of Sto Basií, SPCK,
espirituales, que producen unid ad en el Cuerpo de Cristo, la
Londre s, 1925, 127.128.
65. Basilio, Los mora/es, 60.1.
66. Basilio, Reglas tratadas exten sament e, 7.2. 68. lbid., 44.4 , 6.
67. Basilio, Hom jlla sobre los Salmos, 48. 1. 69. Basilio, Esbozo previo de la vida ascética, 3.
248 LA ACCIÓN DEL ESP!RlTIJ SANTO EN LA HISTORIA EL MOVIMIENTO MONÁSTICO 249

koinonia de las posesione s materiales contribuye a la edifica- ejemplo del pneumatoforos, expresando co mo pocos antes de
ción de la comunión cristiana.Zü él o después de él, la ext raordinaria riqueza de la vida en el
Las co munidades mo násticas fundada s y organizadas por Espíritu. Su confianza en la vitalida d de la provisión di vina es
Basilio se caracteriza ro n por ser profunda mente carismát icas. inquebra ntable, tal como puede verse en las palabras fina les de
Paul J. Fedwick concluye qu e «Un estudio más prof undo [del su tratad o sobre el Espíritu Santo:
o rdenamien to carismát ico de las comunida des basilianas) casi
seguramente mostrará que la estr uctu ra ministerial de sus Mi tarea ahora está hecha. Si encu eraras que he hablado
herma nda des fue más bien suelta , flexible y abierta, permi tie n- satisfacto riamente, hagamos que esto sea el final de nuestra
do considera blemente más libertad para las manifestaciones discusión de estas cuestiones. Si piensas que algún punto
carismáticas que las qu e uno estaría listo o dispuesto a admi- requiere mayor elucidación, ora para que no dudes en
tir»,71 Fedwick muestra que en la enseñanza de Basilio, el proseguir la investigación con toda diligencia, y en agregar
Espfritu está activo en cada eta pa del crecimiento del alma, ya tu propia información levantando cualquier pregun ta no
sea en su pu rificación, iluminació n o perfección . Y esto es contro versial. Ya sea por medio mío o a través de otros, el
especialmente cierto en relación co n la comunida d monástica Señor conce de rá una explicación plena sobre cuestio nes
ideal. que to davía necesitan ser clarificadas, conforme al conoci -
Pero Basilio no limita la obra del Espíritu al co ntex to miento suplido a aqu ellos que son dignos por el Espíritu
monástico . Todos los creye ntes son recipientes del don del San to. Amén.73
amor, que es el más sublime de tod os los dones del Espíritu , y
la síntesis de todas las ob ligaciones del ser human o hacia Dios
y sus pró jimos. Por eso, el aspecto más impresio nante de la vida Epifanio de Salamina (315-403)
e infl ue nc ia carismát ica de Basilio fue su sing ular co mbina - En el año 335 fundó un monaster io en Eleurer ópolis, cerca
ció n del mi nisterio de pred icació n y enseñanza co n la acción de Gaza (judea), su ciudad natal. De allí, después de treinta
socia l cristiana. El monje capadociano creó un a co mun ida d , años (367) pasó a Co nstancia (Salam ina) en Chi pre, don de
lla mada "Pue blo N ue vo», y más ta rd e co nocida como Basi- sirvió como obispo. Fue muy am igo de Jerón imo, y lo aco m-
Iead, para llenar las necesidad es socia les de mile s de perso - pañó cuando este fue a Roma, en el año 381, a visitar al obispo
nas, entre ellas viudas, huérfanos, lepro sos, pobr es e incl uso Dámaso . Epifanio adquirió una gran reputació n por sus co no-
viajeros.R En este proceso, Basilio guió a ot ros al rol de cimientos y santidad. Se le debe a Epifanio la conservació n del
pneumatoforos : aquel los guia dos por el Espíritu para dar d e Credo de Constantinop la (38 1), en el que se señala que «el
sí mismos en lugar de buscar lo suyo prop io. Y él mismo, Espíritu Santo no es distinto del Padre ni del Hijo respecto a
p rimero co mo mon je y más ta rde como obis po, fue el mejor la substancia ». 74
Se lo conoce a Epifani o como uno de los caza herejes más
celoso de los tiempos antiguos. Sus obras contra las herejías y
70. Basilio, Homi/fa sobre íos Salmos, 11.5.
71. Paul J. Fedwick, The Church and the Charisma 01 Leadership in Basif
01 Caesarea, Pontifical Institute oí Medieaeval Studies, Toronto, 7J. Basilio, Sobre el Espfritu Santo, 30.79.
1979, 39.
74. Epifanio, Ancoratus, 73.
72. Gregario de Nacianzo, Panegtríco sobre san Basilio.
250 LA ACCiÓN DEL EsPÍRITU SANTO EN LA HISTO RIA EL MOVIMIENTO MON ÁSTICO 251

en favor de la ortodoxia suman cerca de ochenta, ent re ellas el [Pepuza] es santo, y que aquí desciende Jerusal én desde los
Ancoratus. Sin embargo, de todas ellas, la mejor co nocida es cielos-ceo
Panarion, gene ralmente citada de manera abreviada como Epifanio señala, en oposición a los excesos del montanis-
Haer. , que conserva muchos extractos de obras que ya no mo, que los verdade ros pro fetas pro fetizaron sin perder su
existe n. Entre estos fragmentos, Epifanio presenta el registro razó n.ét Él ta mbién informa que Mo ntano pretend ía haber
de algunas declaracion es de Montano y sus seguidores. Entre recibido una revelación más plena del Espíritu Santo que
ellas, según Epifanio, Montano afirmó : «He aq uí el ho mbre es aque lla que poseía la Iglesia. Po r otro lado. pa rece que sus
como una lira, y yo vuelo sobre ella como un plectro. El discípulos reclamaban poco menos que la obligación de ejercer
los don es del Espíritu Santo. «Tenéis la obligación de acoge r
hombre duerme, y yo permanezco despierto . H e aquí es el
los carismas». decían ellos. segú n Epifanio .az En el año 375 ,
Señor que sacude los corazones de los hombres, y les da
Epifanio reaccio na a esta demand a, señalando: «Tenemos el
corazones a los hombres..) 5 En otro pasaje, pone en boca de
deber de aceptar tam bién los car ismas... Pero añade: "La santa
Monta no las siguientes palabras: «Yo soy el Seño r Dios Todo-
Iglesia de Dios los acoge igualmente. pero (en ella) se trata de
pod ero so, morando en el ho mbre. N o es un ángel ni un carismas verdade ros, autenti ficad os po r el Espíritu para ella;
embaja dor, sino yo, Dios el Padre, que vengo»}6 que le vienen de los profetas, de los apóstoles y del Señor
Es muy probable que Epifan io esté co rrecta mente regis- mismo ».83 De este mod o , parece claro que Epifanio no descarta
trando palabras de profecía dadas por M ontano, pero qu e sin los caris mas ni su ejercicio en sus días. sino los excesos mo n-
ente nde r adec uadame nte el ejercicio de este don carismáti co. tan istas en relación co n los mismos.
to ma ra estas expresiones como indicativas de la falsedad de
M ontano y su ar roga ncia espiritual. En el mismo sentido cita
a la profetiza Maximilia, cuan do dice: «No me o igáis a mí, sino El monasticisrno occident al
oíd a Cnsro-."" N uevamente Maximilia apa rece diciendo : Los pr imeros con atos de monasticismo en Occidente tie-
..Después de mí ya no habrá más profetizas, sino la consuma- nen que ver co n ciertas for mas de ascetismo de origen remoto .
cíó n»."! Y también: «El Señor me envió a ser la líder del Pero el anteced ente más importante para este movimiento en
partido, informante, intérp rete de esta tarea, pro fesión. y esta parte del mundo fue la obra y el ejemplo de Atanasia de
pacto. cons tre ñida, sea que él quiera o no, a aprende r del Alejan dría. En el año 340 llegó a Roma acom pa ñado de dos
conocimiento de Dios».79 monjes, Isidoro y Amm ón, que causaron gra n admiración. La.
Epifanio registra fragmentos similares to mados, según él, Vida de San Antonio. escrita por el mismo Atanasia , ejerció un
de labios de la ot ra profetiza de Montano. Priscila: «Cristo vino poderoso influjo y deshizo algunos prejuicios que ex istían en
a mi en la semejanza de una mujer. vest ido co n un ropaje
brillante, y él plantó sabidurí a en mí y reveló que este lugar
80. Ibid., 49 . 1.
8 1. íbid., 48.2. Citado ta mbién en Pierr e C. de Labriolle, ed., Les so urces
7S. Epifanio, Pananon, 48.4. de l'histoire du montanisme, Librairic de l'Universir é, Friburg o, 19 13,
76. íb íd.; 48 .11. 117.
rr: tbid., 48. 2. 82. Epifanío, Pana non, 48. t . Véase, Labriolle, La crise m ontaniste, 136.
78. Ibid. 83. Epifanío, Panarion, 48.1. Véase Labriolle, Les sourccs de í'histoire du
79. Ibid., 48.12-13. montanisme , 115, n. 88.
252 LA ACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTORIA EL MOVIMIENTO MONÁSTICO 253

Occidente co ntra los monjes or ientales. Asf fue que, pronto to davía y encont rándose en e! norte de Galia, vivió una expe-
comenzaron a pr olifera r los monasterios por todas partes. En riencia singular. Ha bía compartido su capa con un mendigo en
el norte de Italia, Ambrosio y Eusebio de Vercelli fundaron sus un frío día de invierno , y esa no che, en un sueño, vio al Señor
monaster ios. En Roma, Jerónimo hizo lo propio, desp ués de con la mita d de su ca pa qu e había regalado, y que le decía qu e
haber hecho var ios años de vida er mitaña en la Tebaida, donde había sido él e! mendigo a qu ien de este modo Martín había
conoció el anacoretismo y el cenobismo. Estando en Roma, bendec ido . Después de baut izado y de aband onar e! ejército,
llamado por el obispo Dámaso (383-385), contribuyó a difundir se unió a Hilari o de Poitiers (ca. 300 -367), famoso cam peón
el amor a la vida monástica. De sus cartas y demás escritos sesacó de la ortodoxi a nicena. Después de intent ar ganar a sus padres
un conjunto de normas, que se conocen como Regla de San a la fe cristiana, se hizo ermitaño. Otros se reun ieron con él y
je rónimo, si bien él no escribió una regla propiamente dicha. se formó un grupo, qu e vino a ser el comienzo de una comu-
En África, Agustín de Hipona fom entó de mu y diver sas nidad mo nástica. De este modo, y con e! tiemp o, llegó a ser el
maneras la vida mo nástica. Com puso una Regla (Regula ad princi pa l dirigente de! mo nasti cismo en Gali a.
servas Dei), la cual completada con la Carta 21 1, dirigida a un a Los ciudadanos de Tours querían que fuese su obispo y 10
mo nja, co nstitu yen la Regla de San Agustín. En Fran cia, Martín constriñeron a que aceptase esa responsabilidad. Así lo hizo,
de Tours fue el pion ero de la vida monástica, al funda r mie ntras co nt inuaba viviendo como un ermitaño y realizando
mo nasterios en Tours y Poiti ers. A su muerte en 397 existían numerosos milagros. Su fama creció muy pro nt o y mu chos lo
en Francia más de dos mil mo njes. En e! sur de Francia siguiero n en su vida monástica. Gracias a sus esfue rzos evan-
(Marsella), Casia no fund ó en 4 10 e! monasterio de San Víctor. gelizado res s~ convirtió la mayor parre del distrito ru ral cerca-
Sus Instituciones y sus Colaciones son un buen co njunto de no a Tou rs. El guió a sus frailes a la predicación, a la destruc-
no rmas sobre la vida monástica. San Cesáreo de Arlés, mo nje ción de los tem plos paganos, y a la administración del bauti smo
primeram ente en e! mo nasterio de Lerins, funda do po r H on o- a miles.
rato (405), compuso dos Reglas, para monjes y monjas, y un a Conocemos de Martín a través de una hagiografía escrira
Recapitulación, donde expone la organización de la vida mo- por Sulp icio Severo, vida de San Martín, qu e fuera una de las
nástica de su t iempo. En España, e! Co ncilio de Zaragoza (380) primeras obras en su género . Severo, su biógrafo, nació de una
ya habla de monjes en esa región . El ascetismo era co nocido familia aristocrática en Aquitania hacia el 360, y fue bautizado
desde mucho antes. El Sínodo de Elvira, de princip ios de! siglo quizá haci a e! 389 para consagrarse finalment e a la vida
IV, habla en sus cánones 4 y 13 de vírgenes co nsagrada s a Dios. monástica y al estudio. Conoció person almente a Marrín de
A! igual qu e ocurrió en Oriente, es en e! monasticismo Tours, quien fue su consejero. Su biog rafía de Martín fue
occidental donde con más frecuencia se encuentran los testi- escrira en vida aún del mismo y fue pu blicada hacia e! año 400.
monios de las o peracio nes sobrenatu rales de! Espíritu Sant o. En e!la, Sulpicio destaca el ascetismo, espiritua lidad y santidad
Vamos a considerar dos casos sumamente interesant es, ambos de Ma rtín, al tiempo que subraya el carác ter sor prendente de
ubicados en la Galia cristiana (Francia). sus milagros. Con un fuerte tinte apo logético y propagandfsri-
co, la obra de Sulpicio debe ser considerada con ca utela ya qu e
al igual qu e cualquie r hagiografía tiende a la exageració n.
M artín de To urs (¿ ·397)
Luego de narrar la infancia de Martín y los primeros años
Mar tín era hijo de padres paganos. A! igual que su pad re, de ministeri o, Sulpicio muestra al obispo de Tours cumpliendo
sirvió co mo oficial del ejército, hasta que, siendo catecúmeno su voca ció n de monj e y taum atu rgo . Re!ata su ministeri o de
254 Lo. ACCIÓN DEL ESpíRITU SANTO EN lA H ISTO RIA E L MOVIMIENTO MONÁSTICO 255
evangelización rural, sostenido por sus don es de sanidades, o peración poderosa del Espíritu a través de los creye ntes.
echando fuera a los demonios de las vidas de mu chas personas, Como señala Bur gess:
y llevan do a cabo una guerra espiritua l inrensa. e' La co nclusión
del libro de Severo presenta a Martín como maestr o espiritual, Los cristianos del siglo cuarto leían y se mara villaban de las
asceta y sanro.as De este modo , la suya fue la vida y la accio nes de los santos y sant as, acciones que estaban mucho
espiritua lidad militante de un soldado conve rtido en mon je y más allá de las qu e se esperaban de los creyentes com unes.
obispo . El po der detrás de tajes maravillas er a atr ibu ido al Espír itu
La profusión de elemen to s milagrosos en el relato de Santo, cuyos dones extraordinarios estaban reservado s para
Seve ro ha gene ra do no poc as pol ém icas y c rít icas en algu nos unas po cas perso nas especiales. Desde el siglo IV en ade-
estudi osos . Se lo acusa de imposto r y exagerado en atribu ir lant e, este nú mero selecto vino de entre el episco pado y los
a Ma rt ín hechos so bre natu ra les qu e no existi ero n. Otros han ascetas destacados. Los mo njes aho ra estab an cam ina ndo
ind icado qu e Sever o es co herente con el género de liter atu ra en los zapatos de los má rtires - y, de igual modo, ellos
que pr oduce, y qu e escri be co n la lib ertad t ípica de la habí an heredado el manto del Esprrnu.ü?
hagio gra fía de la época, mezclando verda d y ficci ó n, según
la inspi ració n, a la vez mística y popular , de su imagi na-
Juan Casiano (365-435)
ció n. 86
El lecto r debe esta r ad vertid o qu e cuando tratamos co n Na ció en la Escitia, pero alguno s escritores piensan que
los testimon ios de la acción del Espíritu Sant o en el monasti- era de origen pro venzal (Francia) . Desde mu y pequeño, se
cisma, esta mo s básicamente utilizando como fuentes de in for- de dicó a la vida religiosa, y para ello viajó a Tierra Santa.
mació n material hagiográ fico. Este tipo de literatura general- Recibió su educación juvenil en Belén y luego residió du rante
ment e a pela a lo fantasioso e imaginario para elevar la figura un os di ez años entre los monjes de Egipto y de Ni rria. Hacia
del santo o san ta de qu e trata. T od o esto supone un probl ema el año 40 0 fu e ordenad o diácono en Co nstantinopl a por el
de cred ibilida d y objetividad del testim onio en conside ración. patriarca Ju an Crisóstomo, a quien defendió ante al papa
No obsta nt e, muchos de los milagros, señales, prodigios y Inocencia 1, cua ndo cayó en desgracia y fue desterrado de su
maravillas que se mencio nan guardan relación con los milagros sede . Más ta rde fue a Roma, dond e recibió la ord enación
que se registra n en el Nu evo T estam ento. Este pu ede ser un sacerdo tal. No es seguro qu e haya regresado a Consta ntinopla,
bu en criterio para despojar a las hagiografías del componente pero se sabe co n certeza que en el año 4 10 fijó su resid encia
fant asioso y desentra ñar la riqu eza del testimo nio cierto de la en Mar sella (Francia), donde fundó dos monasterios, un o pa ra
varones (el famoso monasterio de San Víctor) y otro para
mujeres.
84. Sulpicic Severo, Vida de San Martfn, 5·7. Su pensamient o teológ ico era ortodoxo, si bien en mater ia
85. lbid.; 8 . de la gracia sos tenfa una po stu ra semi-pelagiana. A ped ido de
86. Entre los críticos, véase, E. Charles Babut, Saint Martin de Tours, París,
1912). Entre los defensores de Severo, véase, C. ju llian, "Remarques
quien más tarde llegó a ser el pa pa León I, escrib ió un tratado
critiques sur lessources de la Vie de saint Milrtin , sur la vie er les oeuvres titul ado Siete libros sobre la encarnación del Señor contra
de saint Martin-, RelluedesEtudesAnciennes 24 (1922); YH. Delehaye,
-Sainr Marrin er Sulpice Severe-, Anaiecta Boliandiana 38, 1920,
5- 136. 87. Burgess, Anáent Christian Traditions, 123.
256 LA ACCiÓ N DEL ESpfRlTIJ SANTO EN LA HISTO RlA EL M OVIMI ENTO M ON ÁSTICO 257

Nes torio (430). Sin embargo , su co nt ribución mayor tiene que [pronuncia) con gemidos qu e no pued en ser pronunciados ...
ver co n el surgim iento del monacato occidental. Cas iano fue o [que puedan ser] recordad os por la ment e [con posteriori-
una suerte de misionero del cenobismo egipcioen Galia. Si bien dad] ... 89 Q uien vive esto es tambi én inundado po r un gozo y
no fue él qui en introdujo el mo nasticismo en Europa, sí fue él arro ba miento indecibles.
un o de los más ent usiastas prop agandistas del mismo en el su r Inclu so, llega un mo mento en el que, cuando un a per son a
de la Ga lia. Co n sus escritos austeros contribuyó al fomento contempla a Dios en una o ración perfecta e incorrupt ible, no
de las prácticas ascéticas y a la instrucci ón y edificación de los se pued en pronunciar palabr as. Pero la mente está ence ndida
monjes. Sus dos obras principales son: Sobre las instituciones co n una agudeza de espír itu incalcu lable, qu e resulta en el
de los cenobios y sobre Jos remedios de los echo vicios prínci- éxtasis del co raz ón.w Esta exp er iencia de oració n sublime y
paJes (co noc ida co mo Instituciones), y Colaciones de los gran. extá tica es el resultad o de la acción secreta del Espíritu Santo.
des Padres (conocida co mo Colaciones, es decir, conferencias). Casia no la propon e como la meta que debe ser buscada por
La que más nos interesa es la segunda, ya que en sus cada uno de sus monjes. Así, pues, describe la oración per fecta
Colaciones, Cas iano refiere las conversaciones que él y su en estas palabras:
amigo Germán tuvi eron con los mon jes de Egipto . Adem ás,
esta ob ra está dedicada especialmente al fomento de la vida Yo siento que por la visitación del Espíritu Santo he obre-
inte rior y espiritu al de los mon jes. Por su tema, su estilo sencillo nido propósito de alma, firmeza de pensamiento, agudeza
y popular, este libro tu vo mucha aceptación y a lo largo de roda de corazón, junto con un gozo inefable y la traslación de
la Edad Media fue mu y estimado como manual para la vida mi mente ; y en la exuberancia de los sentimientos espiri-
espiritu al en los círculos cenob íticos. ruales he percibido, por una iluminación repentina del
Casiano nos dejó un testimonio interesante de lo que Señor, una abundante revelación de ideas de las más
puede ser la práctica de la oración en lenguas, bajo la inspi ra- santas, que anteriormente estaban totalme nte escondidas
ción del Espíritu San to. La oración es uno de los elementos para mí.91
esencia les de la vida monástica. La oración constante es fun da -
mental pa ra llegar a la perfecci ón . Pero hay varios niveles de Cualquier cristiano qu e haya experimentado la unci ón o
oración. La o ració n perfecta solo se alcanza gradualmente y a llenura del Espíritu, con sus ma nifestacion es características,
través de varias etapas. La última etapa es solo pa ra aquellos puede senti rse identificad o co n el tipo de experiencia que
qu e han desarr aigado de su alma to do lo que es dañino , y qu e, Cas iano describe.
en consecue ncia, pueden entregarse de lleno a la o ración de El Espíritu Santo es también qu ien permite al crey ente
fuego qu e trasciende a toda expresión y com prensión hurna- pasar de un co noci miento meram ente práctico y natur al a un
na.as Esto es lo que Casiano denomina como "oració n perfec- co no cimiento espiritual y sobrenatu ra l. En el decir de Cas iano,
ta », Este tipo de o ració n se caracteriza por la presencia de una esto es ascender a los «secretos de los mister ios invisibles » , 92
llam a incom prensible y con sum idora, que atraviesa tod os los
niveles y form as de la oración, y ofrece «a Dios las o raciones
indecibles de la fuerza más pu ra, que el Espíritu mismo ... 8!J. [bid.
!JO. íbid.; 10.1.
!JI. [bid. 10.10.
88. Juan Casiano, Colaciones, 9,15 . sz. lbid., 14.1.
258 LA ACCiÓN DEL EspfRITU SANTO EN u.. HISTORIA EL MOVlMIENTO MO NÁSTICO 259

Este conocimie nto tiene que ver con la comprensión de los la gracia divina. Este don debe ser uti lizado para discern it los
significados más secretos de las Escrituras, pero también de la espíritus qu e se manifiesta n en el monje mismo, así como para
realidad. El creyente lleno del Espíritu puede, de este mod o, identificar a los espíritus inmundos que operan en los ende mo-
«contemplar co n el ojo puro del alma los misterios profundos níados.ss
y escond idos ; porque esto no se puede obtener por el apren- Según Casiano, el ejercicio de los dones espiritua les carac-
dizaje hum ano, ni alguna condi ción del mundo, sino solo por terizó el ministerio de los profe tas y apóstoles. Todos ellos
la pureza del alma, por medio de la iluminación del Espíritu recibieron de Dios alguna porción de su Espít itu. Pero todos
Sanro..93 ellos no llegaron a la estatura de Cristo, quien es en sí mismo
Tal parece como que Casiano está refiriéndose aq uí al don toda la plenitud de la Deidad.s" No obstante, cualquier creyen-
carismát ico de palabra de ciencia o conoc imiento. Sea co mo te que busque la perfección puede recibir estos do nes. Sin
fuere, él com para este conocimiento espiritua l co n el aceite que embargo, nadie debe ser admitido a la vida monástica en base
fue de rramado sobre la cabeza de Aaeón y qu e descendió sobre a su ejercicio de algún don espiritual, po rque los verdaderos
su bar ba y llegó hasta el borde de sus vestiduras (Salmos 133.2 ). dones espirituales son actos de la gracia de Dios y son dados
Este conocimiento espiritua l es «más dulce que la miel y que para ayuda r a los individuos en sus actividades específicas en
el panal. Salmos 19.10b).9<4 O tra vez, cualquier hermano en la vida. De este modo, los dones son ente ndidos por Casiano
Cristo que haya recibido del Espíritu el don de palabra de como herramientas con las cuales servimos al Señor, y no como
ciencia, puede hacer propias las expresiones de Casiano . elementos sobre los cuales podemos gloriarnos .s!
Al igual que el após tol Pablo, Juan Casiano relaciona la Todos los creyentes debemos ser templos de Dios, en los
presencia del Espíritu Santo en la vida del creyente co n el que el Espíritu de Dios puede morar y funcionar.ss Ningún
desar rollo de ciertos dones espirituales y con las varias mani - miembro de la Iglesia puede preten de r tene r todos los dones
festaciones del fruto del Espíritu. Casiano divide los don es en ni ejercer los ministerios de otros miembros, porque todos
tre s grupos o sistemas. Están aque llos dones que son impartidos tenemos diferentes dones (l Corintios 12.28).100 Además,
por el Espíritu para sanidad (sanidad de los enfermos, resuci- todos los don es espir ituales son dados por un tiempo, y luego
tación de muertos, limpieza de leprosos, expulsión de demo- pasarán, es decir, no son permanentes. Lo único que permane-
nios). Están aquellos otros que son para la edificación de la cerá es el arnor.tet Y sin el amo r, incluso los dones más
Iglesia (sabid uría, co nocimiento, fe, erc.). Y están tam bién los excelen res (como podría ser el martirio) desaparecerán. Así
dones falsos, inventados por los demonios engañad ores.ss que, lo máximo de la perfecció n no está en los do nes espiri-
De entre todos los don es, probablemente el más apreci ado tua les o en la ejecución de milagros, sino en la pureza del amo r,
por Casiano sea el de discern imiento de espíritus. Consistente que es eterno. 102 Por eso, la excelencia de los do nes no
con los escritos de los padres del desierto, Casiano también
conside ra a este don como una rare za y algo especial. Según él,
el d iscern imiento de espfritus es la recompensa más gra nde de 96. Véase, Ibid., 2 Y7. 12.
n Juan Casiano, Siete libros contra Nestorio, 5. 14.
98. Juan Casiano, Colaciones, 15.2.
99. Juan Casiano, Instituciones, 9.3.
93. Ibid ., 14.9. 100. Juan Casiano, Calad anes, 14.5.
94. Ibid., 14.14. 101. Ibid., 1.11.
95. Ibid., 15.1. 102. Ibid., 11.12; 15.1-2.
260 LA ACCIÓN DEL Es pfRITU SANTO EN LA HISTORIA

consiste en milagros, sino en humildad. Es mejor expulsar a los


pecados propios, que a los demoni os ajenos. tú! Es más, Casia-
no llega a sugerir que si bien muchos de los monjes tenían
abu nda ncia de don es espiritua les, debían abstenerse de usarlos ,
a menos que una necesidad ext rema o inevitab le los llevara a
hacerl o. 104
A pesar de estas advertencias prácticas, es evidente que
Casiano presenta suficientes ejemplos de la vigencia y opera-
ción de los dones espirituales en sus días. En sus escritos hay
abun dantes referencias a monjes conocidos por sus hechos
portentosos y sobrenaturales. Casiano cuenta de Macario de
Egipto , que resucitó a un muerto; o de un abad llamado
Abraham que curó los pechos de una mujer de modo que pudo
amamantar a su infante, y que también sanó a un hombre
paralítico dur ante muchos e ñes.res
H CRISTI~NISMO DH SIGLO V

.
m I
a hemos considerado los efectos de la conversión
de Co nstantino, la alianza con el Imperio Roma-
no, y la creciente instituc ionalización de la iglesia
en Occidente sobre el ejercicio de los carismas de!
Espíritu y la valoración de sus manifestaciones sobrenaturales
en la iglesia. Estos factores continuaron teniendo sus conse-
cuencias a lo largo del siglo V. Sin embargo, desde un punt o
de vista político, las crisis más graves de Occidente dur ante este
siglo fueron la debacle del Imperio Romano, la profundización
de las invasiones bárbaras, y la separación entre e! este y el
oeste. En Ori ente, los emperado res bizantinos, si bien también
padecieron las invasiones y tuvieron que mantener una po lítica
defensiva cont ínua cont ra los bárbaros, lograron manten er su
autoridad gracias a no tener fractu ras internas. Pero en el oeste
IOJ. lbid., 15.7-8. las cosas fuero n diferentes. En el primer cuarto del siglo, los
104 .lbid., 15.2.
105. lbid., 15. 3-5.
visigodos se establecieron en el sur de Celia, y en e! segundo
los vándalos asolaron e! norte de África, mientras los hunos
262 LA ACCiÓ N DEL ESpíRITU SANTO EN LA HI STORIA EL CRISTIANiSM O DE SIGLO V 263

penetraban en Galia e Italia. La defensa co ntra estos adversa- los testimonios escritos de esta cristiandad orienta l están en
rios fue asumida por genera les bárbaros al servicio de Roma. lengu a sirfaca y son de teología nestoriana.
Estos generales fueron desplazando a los emperad or es, hasta Hacia fines del siglo V, el emp erador bizantino cer ró la
que po r fin ter minaron co n el Imperio y crearon sus propi os escuela teológica de Edesa, que era tenida por centro nestoria-
reinos germá nicos. no . La escuela se instaló enton ces en el territorio persa de
En este siglo ta n conv ulsionado, la Iglesia fue un reflejo Nisibis. De este modo, a partir del sínodo de Ctesifo nre (año
de esta situac ión política. de modo que fue inevitable la 486), el nestorianismo pasó a ser la for ma de cristianismo
separación entre la iglesia oriental y la occidenta l. entre Roma oficial de los cristian os que vivían de ntro del Imperio Persa.
y Co nstantinopla, arguyendo cuestiones teológicas. Los deba- Estos cristianos querían romper tod o tipo de relación con el
tes teológicos crearo n una enorme ansiedad colectiva y aromi- Imperio Romano, y especialmente librarse de la acusación de
zaron las fuerzas para el testimonio cristiano. Lo políti co y lo que eran espías al servicio del emperad or de Co nsta ntinopla.
teológico estuvo ínti mamente ligado , co n lo cual las centro- Separados de O ccidene, los nestorianos persas fuero n grandes
versias adquirieron un grado de virulencia y violencia inusita- misioneros y llevaro n el evangelio tan lejos como Chang-an,
do. El imperio de la carne se fue imponiendo al dominio del en la China.
Espítitu. Las grandes masas de co nverti dos nominales que En todo este proceso es posible detectar testimonios de la
ingresaron a la Iglesia, no ten ían una verdadera y auténtica acción del Espíritu Santo. Sorprende que, a pesar de las perse-
expe riencia de conversión, que les permitiese conocer la reali- cuclones.Ias contro versias teológicas, la división entre Oriente
dad de la presencia del Espíritu en la vida, y mucho menos, y Occidente, y la turbulencia política de estos años, creyentes
ex perimentar su poder y manifestaciones. e iglesias consideraba n corno poderosa y d inámica la operaci ón
No obstante, a pesar de la turbulencia, confusión. ansie- del Espíritu en med io de ellos.
dad, y conflictos de este siglo, el Espíritu San to no se quedó
inactivo o ino pera nte en medio de su pueblo. De ello dan
Na rsés (413-ca. 503)
testimonio numerosos siervos del Señor, ta nto de Ori ente
como de Occidente, algunos de los cuales co nsideraremos en Como se indicó, el centro del desarroll o del nestorian ismo
las páginas que siguen. en Oriente, hacia mediados del siglo V, fue la escuela nestoria -
na de Nisibis, ciudad dentro del Imperio Persa. AlUenco ntra-
ron refugio y oportunidad de mini sterio muchos seguido res
Cris tiandad oriental
del nestorianismo que tuvieron que dejar Edesa y otras ciuda -
La cristiandad or ienral durante el siglo V se vio afecta da des o rientales en razón de las persecucion es, tanto de parte de
notoriamente por las decisiones y secuelas de dos importantes la Iglesia com o del Estado. Entre estos fugitivos se encontraba
co ncilios ecumé nicos: el de Éfeso (431) Y el de Calcedonia Narsés, qu ien llegó a dirigir la escuela de Nisibis po r cerca de
(451 ). Estos có nclaves pusieron fin respectiva men te a las co n- cincue nta años. Sus ad versarios lo llamaban ..el lep roso .., per o
troversias nestoriana y mo nofisita, pero el resultado práctico los nestorian os lo recordaban com o ..doctor admirable.., ..arpa
fue el desmembramiento de la Iglesia y la división entr e el este del Espfritu Santo.., ..lengua de Oriente.., etc. Probablemen te,
y el oeste. Hacia O riente, en las provincias persas de Nisibis y fue el pensador más pro fundo y original de la gran Iglesia del
Seleucia se impuso el nestorianismo, mientras que en las de este o iglesia asiria, más conocida como iglesia nestori ana. Fue
Siria y O sroene pre do minó el monofisismo. La mayor par te de un escritor bastante fecundo , destacándose por sus homilías,
264 L\ ACCIÓN DEL Es r lRJTU SANTO EN LA HISTORIA El CRISTIANISMO DE SIGLO V 265

una liturgia, un a exposic ión de los sacramentos del bautismo otros. De este modo, mediante la imp osición de manos, el
y de la eucaristfa y un tratado Sobre la corrupci ón de Jas sace rdo te recibe el pod er del Espíritu , de suerte ta l qu e es
costumbres. 1 ca pacitado para llevar a cabo los misteri os d ivinos. El ro pa je
Al igual qu e otros escritores de su tiempo, tanto o rient ales del Espír itu ad orna su alma y ahora tiene al Espír itu en la pu nt a
como occidentales, Nars és asocia la unción del Espíritu Santo de su lengu a.e
al sacramento del bautismo. Y ligado a este rito cristiano La llenura o un ción del Espíritu es descrita en términos
fundamental, destaca la virtud revelad ora del Espíritu. En su que resultan bastante familiares en nue stros días. Narsés se
bautismo, el Espíritu reveló a Jesús; y Ju an el Bautista, llamado refiere en varias partes a esta experiencia, gene ralment e aso-
por el Espíritu a proclamar la venida del reino, lo vio venir y ciada con la celebración de la eucaristía o el baut ismo, y la llama
anheló encontrarsecon aquel a quien los profetas y reyes habían la ..droga del Espfritu -. En el culto eucarístico, el sacerdote
estado buscando.t Fue all í, en su bautismo, que el hombreJesús invita al Espíritu a descender sobre la con gre gación reunida. a
recibió al Espíritu bajo la figura de un a paloma y fue ungido fin de que por su don ella pueda ser dig na de recibir el Cuerpo
<;00 un poder oculto, de mod o que por el poder del Espíritu y la Sangre. El Espíritu hace que el poder de su de idad mo re
El pudiese echar fuera demonios y sana r a los enfermos. El en el pan y el vino, completando el misteri o de la resurrección
Espíritu lo ungió no co n el aceite de la ley mosaica, sino con del Señor de entre los muertos. La presencia del Espíritu es
un o superio r a todos los demás) De este modo. jesús fue esencial para la celebración de la eucaristía.?
armado con el Espíritu para redi mir a su raza del ma l al cubrirla Algo similar ocurre con el sacramento del bautismo. En
con el ropaje del bautismo y al darle una corona totalment e este rito. el bautizado muere simbó licamente al pasar por la
tr enzada con los sellos del Espíritu.é Así, pu es., a través del don tumba del agua, y es levantad o en representación de la resu-
del Espíritu, j esús completó y per feccion ó aquello qu e era rrección que tendrá luga r al final de los riernpos.t Na rsai
deficiente en la humanidad, al pe rmit ir a otro s miembros de también compara la pileta bautismal a un horno en el que el
su ral a humana compartir en la riqueza del Espíritu.5 Espíritu hornea la débil arcilla humana .s Med iant e este calo r
del Espíritu la escoria de cuerpo y alma del creyente es limpia-
El Espíritu Santo se mani festó también poderosament e en
la exper ienc ia de la muerte y resurrección de jesús. Pero fue da, y el bautizado sale del agua no como arcilla sino refundido
como oro espiritual, con la matriz de los seres celestiales. 10 En
en Pentecostés qu e el teso ro del Espíritu fue en tregado en las
manos de un nuevo sacerdo cio , para qu e este lo dispense a este proceso, el sacerdot e es como un pintor del Espíritu. sin
manos. U y la ..droga del Espíriru.. (la un ción) está en el agua
com o en un horno, para purificar la imagen humana de toda
l. Sobre Nars és, véase, R. Hugh Co nnoJly, ed., The Liturgical Homi/ies
Impureza.ta De este modo, el sacerd ocio fue establecido por
01 Narsai, en Studies and Tea s 8 Universiry Press, Cambridge, 1909 ; y
especialmente, Fredenck G. McLeod , ed. , Narsaí's Metrical Homilies
on the Nativity, Epiphany, Passíon, Resu"ection and Asu mion, en 6. Co nnolly, ed., Homilies of Narsai, 40.
Patrolog{aOrienta/is 40:1, Brepo ls, Turnh out, Bélgica 1979. En a mbos 1. lhid., 20-23.
casos, los núm ero s indican los números de página en estas ob ras. 8. íbíd., 5 1-52.
2. McLeod , ed., Nanai's Metrical Homilies, 79, 85. 9. Mcl.eod, ed., Narsai's Metrica/ Homi/ íes, 87.
3. Ibid., 89, 9 1, 99. \0. Co nnally, ed., Homifies ol Narsaí, 32, 49.
4. uu; 67, 9 1, 95, 97, 137, 163. 11 . lbid., 34.
S. Ibid., 97. 12. ¡bid., 43, 48-49, 64.
266 LA ACCiÓN DEL EspfRITU SANTO EN u.. HI ST ORIA El CRISTlA."olISMO DE SIGLO V 267

Dios para sanar la iniquidad y pa ra proveer de sanidad también Concilio de Calce donia (451) . En el año 519, cuando sub i6 al
al cuerpo. El sacerdo te sella (unge) también a sus ovejas en el trono impe rial j usrino y este respaldó la postu ra o rto do xa,
nombre del Padre, del H ijo y del Espíritu Santo, a quienes los Filo xeno fue captura do y deportad o a Tracia, dond e murió de
nuevos bautizados ahora pertenecen, y con estos nombres ellos muerte violenta por aho gamie nto .
son marca dos . U Conocemos a Filoxeno como un celoso representante y
Per o la un ción del Espí ritu Santo no se agoca con el acto defen sor de una teología monofisita en oposic ión al credo
del bauti smo . Por el co nt rario, des pués del bau tismo, el Espí- calced6 nico. Algun os de sus escritos han llegad o a nue stros
ritu toca a aquellos que tienen enfermedad en sus alma s e día s, especialment e ochenta obras do gmáticas, exegéticas, as-
iniquidad en sus pensamientos para qu e corran al sacerdote c éricasy homiléticas. Hizo también un a versión del N uevo
co ntinuamente a fin de recibir esta ..droga del Espfriru... 14 De Te stamento, revisada más tarde po r Tomás de Heraclea, ade-
este modo, a través de la un ción, el sacerdo te ayuda a los bebé s I más de cartas y ot ros escritos menores. Lame ntab lemente,
espiri tuales a crece r co n el aliment o del Espíritu (la co mida del muchos de sus escritos todavía no han sido trad ucid os, o no
pan y el vino de la eucaristía). A lo largo de tod os los escritos han sido publicados.
de Na rsés hay exh ortaciones qu e alientan a los creyentes a Segú n él, el Espíritu Santo está ocupado en una ob ra
procurar las riquezas del Espíritu, la promesa del rey que no cread ora constante a través de la fe, qu e hace que lo imposible
puede ser quebrantada : - Iv enidl ¡Esforcémonos para recibi r se torne real. La fe es la fuerza a través de la cual se hacen los
gratis la riqueza del Espíriru!» 15 milagros y ocurren otros eventos sobrenatu rales. Santos siervos
y siervas de Dios ob ra n maravillas por la fe, hablando en
Filoxeno de Mabbug (ca. 440-523) no mbre de Dios, haciend o caer fuego del cielo, levant and o a
los muertos, y hablan do a los muertos co mo si víviesen. te
Sus padres se habían con vertido al cristianismo siendo él La ob ra del Espírit u en el creyent e co mienza con el
tod avía un niño. Fue educado en la escuela persa de Edesa, Desde bautis mo en agua . Es a través del bau tismo que el cr eyente se
joven se vio involucrado en las controve rsias teológicas en opo- une a Cristo y al Espíritu, nace de nuevo al mundo del Espíritu,
sici6n al nestorianismo. Dejó Edesa y fue a Anti oqu ía, de donde y es introducido a la vida en el Esp üiru.t ? Es allí qu e el nuevo
fue ex pulsado por monofisita, hasta que llegó a ser obis po de bautizado recibe directamente de Cristo el don del Espíritu, al
Mabbug o H ier6po lis (eciuda d santas]. Tuvo mucho éxi to en ..vestirse del Espíritu •. Esto ocu rre de suerte ta l qu e, «en vez
la evangelización de su ciudad, si bien estu vo envuelto en de agua vemos el bau tismo del Espíritu, y en vez d e aceite, el
controve rsias de manera continuada con las autoridades civiles pod er de Cristo•. u Ahora, si bien es en el mom ento del
y militares del lugar. En su adultez, Filoxeno de sarroll ó un bautismo que el Espíritu es dado al creyente, es solo con la
carácter más con ciliatorio y pacífico. Parece que ejerció algu na experiencia personal de Pent ecostés (llenura del Espí ritu ) que
influ encia en el cierre de la escuela de Edesa en 4 89, mientras
mantenía un a firme postura en contra de las conclusiones del
16. Filoxeno de Mabbug, Segunda homilla sobre la fe. v éase, EoA. Wallis
Budge, The DiscoursesofPhifoxetlus. Bishop ofMabbogh. AD4S5·5 19,
13. Ibid., 35, 44. Asher and Co., Londres, 1894, 34-42.
14. Ibid., 73. 17. Filoxe no de Mabbug, Novena hornilla sobre la pobreza.
IS. McLeod , ed., Narsaj's Metri,al Hom ilies, 103. 11. Filoxeno de Mabbug, Tercer horniUa sobre la fe.
EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 269
268 LA ACCiÓN DEL EspíRITU SANTO EN LA HISTO RIA

creyente es compa rada co n la luz en el ojo, que hace posible la


el recepto r acep ta consciente mente el don y comienza más
visión. Sin el Espíritu, una perso na es como un ho mbre ciego
plename nte a beneficiarse de Él. En este momento, el Espír itu
que no puede ver a su alrededor, aun cuando está en la
unge a los fieles con el óleo de gozo en una medi da que está
más allá de aque llos qu e tod avía no ha n experimentado Pen- presencia de objetos visibles y tiene ojos.
tecost és.t? Incluso, Filoxeno observa que a veces pasan muchos El Espíritu es también qu ien pro vee de las fuerzas y la
años desde el tiemp o del bautismo en agua hasta que un o voluntad para pro du cir la espiritualización del cuer po, es decir,
experimenta la experiencia de la llenura del Espíritu (Pente- el co ntrol del cu erpo por el alma.24 Es a través de la un ión con
costés), es decir, «cuando una persona es renacida por su propia el Espíritu Santo que se pued e pon er fin a la lujuria de la carne,
libre voluntad de un estilo de vida corporal a uno espiritual, y de modo de dar lugar a la «lujur ia del alma», que es ese impulso
ella misma se tra nsform a en un seno qu e da a luz a una que nos mueve hacia Dio s.
rendición cornpleraczo
Co mo sacerdote del Espíritu, Jesús después que fue glori- Monjes de Egipto
ficado, envió al mismo Espír itu qu e obró a través de Él, a morar
co n sus seguidores. Y al darles los dones del Espíritu, los Es imposible hacer mención de la enorme cant idad de
capacitó para que pud iesen hacer milagros y así, tra nsformarse padres del desierto egipcio que han dejado testimonios de la
ellos tamb ién en sacerdotes, introduciendo a ot ro s en una vida acción del Espíritu Santo. En muchos casos. sus escritos todavía
en el Esprríru.n Este don del Espíritu permanece con el creyente están en forma manu scrita o no han sido tradu cidos a una
y es retenido solo por la fe y no por las buenas obras. No obstante, lengua moderna. Mucho s otros recién han llegado a conocerse
si bien el Espíritu no deja al creyente, sus dones no op erarán hasta en Occidente en las últimas décad as, y todavía se están inves-
que «la voluntad muestre su fruto-caz Esto está directamente tigando críticamente. Suponemos qu e buen a parte de la igno-
relacionado con el proceso de santificación, que también es obra rancia del testimonio monástico egipcio se debe al rechazo del
del Espíritu, y que se conoce como la vida en el Espíritu. que han sido objeto en Occidente desde tiempos antiguos, en
A medida qu e la fe aumenta, así crece el creyente en el razón de qu e representa un cristianismo no católico, o co nde-
reino espiritual. Tod o lo qu e el cristiano necesita aprender, el nado como he reje po r el cristianismo tr oncal. No obstante, es
Espíritu de Dios se lo ense ña; cosas tales como el significado posib le mencionar a alguno s pocos ejemplos, a mod o de
de los no mbres y palabras de Dios. La luz espiritual brillará de ilustración, que dan cuenta de la obra del Espíritu en sus días.
manera gloriosa, revelando las cosas de Dios y fo rtal eciendo la Uno de esto s padre s del desierto egipcio más destacados
fe)3 De este modo, la presencia del Espíritu en la vida del fue Shenoure de Atripe (¿334- ca. 451 ), conside rado como el
más grande de los autores de la literatura saídica (una lengua
coprej.zs De él tenemos algunas homilías y una biografía
19. Filoxeno de Mabbug, De U /lO et sancta Tnnitate íncorporato et passeo, detallada escr ita po r su discípulo y sucesor co mo abad en el
9.15 t . Véase, Maurice Briere y Francois Graffin, eds., Phiíoxeni Mab-
bugensin De uno et sancta Trinitateincorporato et passeo, en Patrologia
Griental ís 40:2, Brepols, Tu rnhout, Bélgica, t 979-198 1, 263. 24. Filoxeno de Mabbug, D écimoprimera homi/fa sobre la abstinencia.
20. Filoxeno de Mabbug, Novena homiíia sobre fa pobreza. 25. Theodor Mommsen, The Prootnces 01 the Raman Empire (rom Caesa r
21. Filoxeno de Mabbug, De UII O et sam ta Trinítate, 10.88-89. to Diccletian, 2 vols. Charles Scribner's Sons, Nueva York, 1906,
22. Filoxeno de Mabbug, Novena hornilla sobre la pobreza . 2:265.
23. Piloxcno de Mabbug, Segunda homilla sobre la fe.
270 L\ ACCIÓ N DEL ESpfRIllJ SANTO EN LA H ISTORIA EL CRISTIAN ISM O DE SIGLO V 27 1

Monasterio Blanco de Panopolis, Besa. Desde pequeño se pecaminosa, sino más bien po r el Espíritu de Dios que mora
caracterizó po r su pied ad, al punto que, a la muerte de su padre, en ella (Roman os 8.9 ). 29 La perso na es sellada por el Espíritu
se hizo mo nje. Su talento como organizad o r y ad ministr ad o r y pu ed e ser llen a del Es píritu. Pero esto requiere de vigilan cia
le diero n un lugar destacado en la comunidad monástica. Pero co nstante. Para ell o, Shenoute seña la co n frecuenci a al ejem plo
su liderazgo se extendió más allá de las pa redes del monasterio , de los profet as y los apóstoles, cuyas vidas dep endieron y
ya que sus reglas y su sabiduría carismática fue seguida por fuero n llen as co n el Espíritu San ro.sc De este modo, el creye nte
muchos que no estaban ligados al cenobitismo. Un hombre de lleno del Espíritu puede recib ir ta m bién los frutos del Espíritu .
carácter fuerte, supo manejar con mano firme su comunidad Par a Shenoure, el papel del Espíritu Santo no está limitad o
de monjes. Participó del Concilio de Éfeso (431), y no es a ayuda r al creyente a evita r el pecad o y triunfar so bre él, sino
pro bab le q ue haya estado en el de Calcedonia (451) . ram bién a proveer sanidad para el alma herida por los demo-
A pesar de que qu ed an poco s escritos suyos , Shenoute fue nios . En uno de sus esc ritos, el padre del desierto señala :
un escritor prolífico, especial me nte de cartas espirituales so bre
una vari ed ad de tema s. Su testimo nio so bre la acción del El Espíritu de Dios nos invita siempre a través de su santo
Espíritu está desparra mado en sus escritos . Al leer este material, profeta [jer emías]: ..Sube a GaJaad, y toma bálsamo, virgen
que da la impresió n q ue no le inreresaba mucho el debate hija de Egipto». Así que, para los cristianos que somos
teol ógi co, tan calien te en sus d ías. En consecue nc ia, la mayor llamados con el llamamiento santo, es correcto que sigamos
parte de sus referencias al Espíritu Santo se dan en el co ntex to la proclamación del Espíritu Santo, y subamos a Galaad y
de su propia lucha constante contra el pecado y las fuerzas del recibamos el bálsamo sobre nuestras heridas dolorosas con
mal. Par a él hay un conflicto permanente entre las fue rzas del las que los espíritus malos nos han lastim ado.Jt
mal y las fue rzas del bien por el alma humana.ze El deseo de la
carne está en conflicro con el del Espíritu y el del Espíritu Otro de los padres del de sierto dign o de men ción es Besa
contra el d e la came.at Precisament e, es necesa rio co nq uista r (m. ca. 465), de quie n casi no ten em os info rmación. Lo que
al pecado, porqu e el Espíritu Santo no va a habita r en un al ma sabe mos de él nos viene a tr avés de la biografía que él escribió
que está contro lada por un espíritu inm undo . de su maestro y a bad, el famoso She noute de At rip e, y de sus
Para poder ve nce r el pecad o, el creyente necesita de la propias cartas y sermo nes. Co mo abad del Monasterio Blan co,
asiste ncia del Espíritu Santo. Po r eso, todos los q ue aman a tenía bajo su su pervis ió n a más de 2.200 monjes y unas 1.800
D ios invocan al Espír itu, y este responde rra nsfo rmándose en mo njas. Su rema favorito era la lucha co ntra el pecad o. La
una fuerza vivificadora para aq uellos q ue lo lnvo can.za Cuando presencia del ma l es ev ide ncia de que el espíritu del d iabl o está
el corazón es purificado y el Espíritu d ivino entra en él, entonces presente en el mundo. La sata nolog ía y la dem onolo gía ocupa n
esa perso na ya no está contro lada po r la vieja natura leza un lugar muy importante en la rel igión de Besa. El d iablo, qu e
envid ia a los miembros de la co munida d religiosa, procura
26. E. Amélineau, ed., Oeuvres Schenoudi, 2 vols., Ernesr Leroux, Pans,
end urecer el co razón de los mo njes, para destru ir en ellos la
1907-1911, 2:509.
27. K.H. Kuhn, ed., Pseudo-Shenoute on Christian Behaviour, en Corpus
Scriptorum Christianorum Orientalium 207, Copnc 30, Secrérariat du 29. lbid., 2:273-275.
CorpuSCO, Lovaina, 1960), 17.5-6. 30. Ibid., 1:101, 336, 348·349; 2:140.
28. AméJineau, ed., Oeewes Schenoudi, 2:499. 31. Kuhn, ed ., Pseudo-Shenoute on Christian Behaviour, 1.11·16 .
272 LA ACCiÓ N DEL EspjRITIJ SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 273

buena dirección y prop ósito por el cual han avanzado en la si Besa o sus mo njes se atribuían alguno de los dones que ellos
obed iencia a Dios. Por eso, qu ienes le dan lugar al d iablo viero n op erar en Shenourecee
siempre resisten también al Espíritu Santo .R Y el Espíritu de
Cristo no puede vivir allí don de hay indignida d y donde
Cristiandad occidenta l
habitan los espíritus inmundos. Por eso, el Seño r no habita rá
en los corazon es enrenebrecidos por los demo nios. El Señor . En Occidente , a lo largo del siglo V, la cristiandad va
Jesús no le permitirá a su Espíritu Santo habita r en tal oscuri - toma ndo la forma del modelo de la organización política,
dad. Deigual modo, esimposible que el espíritu de losprofetas administrativa y económ ica del Imperio Romano en decaden-
y los apóstoles venga a los débiles y desobedientes, en quie nes cia. Poco a poco, el obispo se va transformando en el jefe
los demon ios se multiplican y triunfan . El Espíritu solo puede supremo de la co munidad cristiana en una ciudad. A su vez,
morar en aqu ellos qu e son «hijos de paz» (Lucas 10.5- 6).33 las iglesias de cada ciudad se integran a una provincia eclesiás-
Sin embargo, si una persona avanza hacia Dios y le sirve tica, trazada según la división política de las prov incias del
con todo su corazón, entonces se le dará el gran poder de Dios Imperio. El obispo de la capital prov incial, la metr ópoli,
y esta persona experimentará el amo r de Cristo y el amor del adquiere una autoridad jerárqu ica superior, y puede incluso
Espíritu Santo , e incluso orará en el Espíritu.J4 Allí dond e convocar a síno dos provi nciales. Es así como en estos años se
reside el Espíritu Santo hay Iiberrad de toda acción diabólica.J5 afirma el pr estigio y autoridad de ciertas sedes episcopales,
De este modo, parece claro que para Besa la morada del incluso por encina de los metropolitanos . Estos eclesiásticos
Espíritu en una persona depende de la dignidad del recipiente. son los que están establecidos en las ciudades principales del
Imperio y que están ligadas con los orígenes del cristianismo:
Esto contrasta con las enseñ anzas del apóstol Pablo e incluso
Roma, Alejandría, Antioquía, y también Cartago. Los obispos
de Filoxeno de Mabbug, quie nes enseñaron que la permanen-
de estas ciudades ejercen su influencia más allá del territorio
cia del espíritu no de pende de la d ignidad o del mérito huma-
de su prov incia, y convocan co ncilios, confirman obispos, y
nos. definen la docrrina.
Finalmente, la biografía que Besa escribió sobre su ante-
Para el siglo V, el obispo de Roma representaba en el
cesor Shenoure contiene un co nsiderable número de relatos de
Occidente latino un papel semejante al que el obispo de
milagros. Parece evidente , a la luz de su testimonio, que ciertos Alejandría tenía en Egipto y en Libia. Pero su prestigio y pod er
carismas o pode res milagrosos todavía estaban vigentes en se iban incrementando a medida que el Imperio Romano se
aquellos días, especialmente en relación con el estilo de vida venía abajo. Es decir, la Iglesia de Roma fue ocupando la
ascético. No obstante, como indica Burgess, "es imposible decir posición de pod er y de contro l social que había tenido el
Imper io. Los argumentos en favor de la primad a del obispo de
Roma se perfeccionan para este siglo. Co n León I el Grande
32. j oh annes Leipoldt y W.E. Crum, eds., Sinuthii archimlmd,jtae vita el (390 -461) tales pretensiones se consolidan. Basánd ose en M a-
opera omnia, en Corpus Scnptonon Cbristianorum Orientalium, 41· teo 16.18-19 para desarr ollar una teo logía de su pr imado,
42, Cc ptic 1-2, Imprimerie Or ientaliste, L. Durbecq, Lovaina, 1951 ,
León se atr ibuía el derecho y el deber de dirigir el co njunto de
4 1:47,63·65.
33. lbid., 4 1: 114-116.
34. Ibid.,4 1:1, 5 .
35. Ibid ., 4 1:3 1. 36. Burgess, Eastern Christian Tradítions, 161.
274 LA ACCiÓN DEL EsP!RlTU SANTO EN L\ HI STORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 275

la iglesia, como sucesor de Pedro. Los demásobispos solo podían El obispo de H ipon a es la cumbre de la era patrística. En
..participar de su solicitud pastoral, pero no de la 'pleniru~ de su él se combinaron de manera maravillosa lo mejor de la espi ri-
poder». Para León, el obispo de Roma era un obispo universal, tualidad y la reflexión teológica oriental co n lo más eficie nte
un obispo de obispos, la fuente de la autoridad episcopal. del pragmatismo romano. Abrevando de la teología nicena,
En un contexto así, tan saturado de pretensiones de: poder Agustín le dio forma definitiva a la teología occide ntal. A
humano, es fácil suponer una disminución del poder divino. diferencia de la iglesia o rienta l, que sostiene que e! Espíritu
Hay una relación directa entre el pr oceso de institucio naliza- Santo procede del Padr e a través del Hijo, Agustín fijó la
ció n de la Iglesia y la acu mulación de poder humano en las posición de la iglesia occidental que afirma la doble proceden-
manos de sus ob ispos, y la disminución de las evidencias de las cia del Espíritu (de! Padre y del Hijo). El Espíritu Santo es Dios,
man ifestaciones del poder del Esplriru Santo y sus carismas. y es el don del Padr e y el H ijo a la Iglesia. La neum atologfa
Esto puede verse al considerar al más gran de y destacad o de agustina ha sido sumamente influyente en e! desarrollo de la
los padres latinos de este períod o: Agustín de Hipona. neumatología protestante. Sin embargo, Agustín está muy lejos
de ser un «carismático ...
La neumarología agustina expresa e! genio de este gran
Agustín de Hipona (354-430)
doctor de la Iglesia, que co mbina e! calor místico y la profun -
Nació en Tagaste, en la provincia africana de Nurnidia, y dida d int electu al de O riente con el pragmatismo de la mente
muri ó en Hipona poco antes de que esta ciuda d fuese incen- latina. A su vez, Agustín se fundamenta sélidamenre en la
diada por los vándalos, que hab ían invadido África. Luego de tradición del pasado, pero su síntesis teológica tien e una
una infancia, ad olescencia y juventud traspasadas por todas las ext rao rd inaria vitalidad espiritual no solo para su pre sente sino
te ntaciones del mundo y del intelecto , se destacó como profe- para todos los tiempos. Para él, e! Espíritu Santo es tanto Dios
sor de retórica en Roma y de elocuencia en M ilán. Había sido como e! Don de Dios, ta nto del Padre como del Hijo, a la
educado como cristiano, pero se había hecho maniqueo. En lglesiaa" Él es consubstancial y coete rno con e! Pad re y con e!
Milán se sintió atra ído por las enseñan zas y pred icación de Hijo, por lo tanto, Él es e! Espíritu del Padre y del Hijo, y en
Ambrosio, y de nuevo fue introduciéndose en la fe cristiana. consecuencia, pro cede de ambos. En la Trinidad, el Espíritu
Regresó a Tagasre y se hizo ermitaño. Más tarde (396) fue ope ra a semejanza de la facultad de la vo luntad humana, es
des ignado ob ispo de Hipona. Argumentó contra e! maniqueís- decir, es Dios en acción. Agustín apela a diversas metáforas
mo, el donatismo y e! pelagianismo. Contribuyó en gra n para describir la acción del Espíritu : lo co mpa ra con el fuego ;
manera a la exposición de la doctrina cristiana . lo llama la co rriente de! río que alegra la Ciudad de Dios; lo
Agustín puede ser con siderad o el primer filósof o del describe co mo la Espada del Señor, el Creado r, el Pan, el
cristianismo. Una de sus obras más famosas son las Confesio- Pasto r. el Espíritu lncambiable, e! Energizado r y e! Ma estro.
nes, de gran valor literario y human o. En esta pieza inm ortal, Además, el don del Espíritu es pura gracia.
el autor, al mismo tiempo que traza su biografía, presenta un El Esp íritu Santo, según Agustín, solo opera en la Iglesia,
sólido conocimiento de Dios. Se deben a él también muchos po rque fuera de la Iglesia no hay Espíritu Santo. El Espíritu se
otro s escritos de gran valor . Ningún padre de la iglesia latina recibe solo en la Iglesia, y esto media nte la imposición de
ha dejado una obr a escrita tan amp lia, min uciosa y de mayo r
din amismo espiritual y religioso. En verdad, Agustín escribió
más de lo que una person a puede leer en toda su vida. 37. Agustín, Sermón 21.18; véase también, Agustín, Enchiridion , 2 1.117.
276 U ACCiÓN DEL EspfRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 277

manos.J8 Es Él qu ien obra la justificación del creyente por aquel tiempo él (el creyent e] fue conocido como alguien
gracia mediante la fe, y quien lo nutre, llena de amor y del que había recibido el Espíritu Santo, porqu e hablaba con
conocimiento de Dios. A su vez, es también el Espíritu qu ien las lenguas de todas las naciones, así también ahora él [el
asiste a los santos en la oració n, cuando esto s no sabe n cómo creyente) puede reconocer que ha recibido el Espíritu
o rar (Romanos 8.26), y quien hace de ello s verdade ros inter- Santo, porque Él es tenido como el vínculo de la paz de la
cesores. Además, el Espíritu Santo es quien introduce a los Iglesia, que está esparcida por todas las naciones. De donde
creyent es en las cosas secretas de Dios. el apóstol dice: ..Solícitos en guard ar la unidad del Espíritu
Según Agustín, en las primeras comunidades cristianas en el víncu lo de la paz ~ . 3 9
hab ía señales adecuadas a aqu ellos tiempos fundacionales del
cr istianismo . Pero estas seña les disminuyeron o desap arecieron Una y otra vez, Agustín niega la continuidad del do n de
con el tiempo. El descenso del Espfritu en Pent ecostés estuvo lenguas en la Iglesia. Los siguient es so n alguno s ejemplos :
signado por las lengu as de mu chas naciones. El fen óm eno de
las lengu as en Pentecostés (Hechos 2.4, 8-11 ) fue un símbolo En los primeros tiempo s, «el Espíritu Santo cayó sobre los
de que la predicación del evan gelio llevada al Espí ritu Santo que creyeron , y hablaron con lenguas.., que no habían
por todo el mundo. Para Agustín ya era un hecho co mpro bado aprendido, ..según el Espíritu les da ba que hablasen». Estas
en sus días que la Iglesia, en virtud de sus congregaciones fuero n señales ada ptadas a ese momento. Porque era nece-
esparcidas por todo el orbe, hab laba los idiomas qu e hab ían sario que hubiese esa demostración del Espíritu Sant o en
estado representados por los individuos qu e estu vieron presen · todas las lenguas, para mostrar que el evangelio de Dios iba
tes en aq uel día único. Así qu e, para él, aquellas lenguas a esparcirse a través de todas las lenguas por sobre toda la
co nsistie ro n en idiomas de varias naciones, qu e más tarde no tierra. Esto fue hecho como una demostr ación, y luego
fuer on nec esarios como pr ueb a de la presencia sobrenatural pasó. En la impo sición de manos, aho ra, para que las
del Espíritu, porque la Iglesia aho ra estaba en todo el mu ndo, personas puedan recibir al Espíritu San to, (esperamos que
predicando el evangel io en to do s los idio mas. De este modo, ellas hablen en lenguas?
las lenguas de Pen tecostés fuer on reemplazadas con posterio- O cuando impusimos las manos sobre estos infantes,
ridad como un a prueba de la presencia del Esp íritu, por el (esperó ver cada uno de ustedes si ellos hablaban con lenguas?
vínculo de la paz. Señala Agustín : y cuando vio que ellos no hablaban con lenguas, éesrcvo
alguno de ustedes tan extraviado como para decir: Estos no
Con miras a esta comu nión , aquellos a quienes Él vino han recibido el Espíritu Santo? ... Si, entonces, el testimonio
primero hablaro n con las lenguas de todas las naciones. En de la presencia del Espíritu Santo ahora no es dado a través
razón de qu ~ por las lenguas la comunión de la hum anidad de estos milagros, (por medio de qué es dado? ¿Por medio de
está más estrechamen te unida, era necesario que esta co- qué uno llega a saber que alguien ha recibido el Espíritu
mun ión de los hijos de Dios y miembros de Cristo, que Santo? Que tal persona le pregunte a su propio corazón. Si él
debla existir entre toda s las naciones, fuese representada ama a su hermano, el Espíritu de Dios mora en él.40
por las lenguas de todas las naciones ; para que así co mo en

39. Agustín, Sermón 2 1.28.


38. Agustín, Sobre el bautismo contra los donatistas, 3.16.21. 40. Agustín, Lz epfstoJa de San Juan, hornilla 6.10.
278 LA ACCIÓN DEL ESP!RITU SANTO EN Ur.. HISTORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 279

Respondiendo a los argumentos de Periliano, Agustín el Espíritu Santo, y recibirá tanto más cuanto mayor sea el
señala: vaso de la fe que lleve a la fuente. Pues, si ahora se recibe
también el Espíritu Santo, preguntará alguien: ¿Por qué no
Bien sabes por otra part e, y tú mismo lo recuerdas, qu e la habla nadie las lenguas de todas las naciones? Porque la
venida del Espíritu San to tuvo tal eficacia qu e hizo hab lar Iglesia misma habla ya las lenguas de todas las naciones. Al
en todas las lenguas a cuantos en tonces llenó. ¿Qué signi- principio solo existía la Iglesia en una nación, y en ella
ficaba aquel milagro prodigioso ? ¿Por qu é al presente se da hablaba las lenguas de todas. Señal era esto de 10que había
el Espíritu Santo de ta l suerte que nad ie qu e lo recibe puede de acontecer: que, esparcida la Iglesia por las naciones,
hablar en toda s las lengu as, sino porque un mi lagro tan llegaría a hablar las lenguas de todas ellas.O
gran de anu nciaba que todas las nacione s habían de creer y
así el evangelio había de hacerse presente en todas las En gener al, Agustín no esperaba ninguna manifestación
lenguasi'ü sobrenarural o ex traordinaria del Espír iru en sus días, o al
me nos, no la consideraba ta n nec esaria co mo fue al principio
De este modo , para Agustín, las lenguas de Pentecostés del testimonio cr istiano en el mundo. La vida en el Espíritu ya
fueron un antic ipo profético de la universalidad del evangelio estaba bien regulada por los ritos de la iglesia instituc io na l. En
y de su alcanceecuménico. Para él, la llegada del Espíritu Santo respuesta a los donat istas, d ice Agustín :
en Pentecostés co n leng uas significó «que el evangelio había de
estar en todas las naciones y que el Cue rpo de C risto había de Porque el Espíritu Santo no es dado solo mediante la
resona r en todas las leng uas por todo el orbe de la tierra c-u imposición de manos en medio del testimonio de milagros
Así, pues, en el caso de las lenguas, como de otras ma ni- sensibles y temporales, como fue dado en días anteriores
festaciones de la acció n sobre natura l del Espíriru, Agus tín para ser las credenciales de una fe rudimentaria, y para la
sostiene una interpretación bastante cesacio nista. H ay abun- extensión de los primeros comienzos de la Iglesia. Porque,
dan cia de afirmaciones suyas en el sentido de qu e las lenguas équién espera en estos días que aquellos sobre quienes se
terminaron co mo práctica cari smática en la experie ncia d e la imponen las manos para que reciban el Espíritu Santo
Iglesia. Entre muchos o tro s pa sajes, leemos el siguie nte, en el inmediatamente van a comenzar a hablar con lenguas?44
que discute la llen ura del Espíri tu asociada a la práctica del
bautismo en agua, y las lenguas: Las palabras de Agustín parecen dic ha s por algún cristiano
«cesacio nista» o «dis pensacio nalista» de ho y. Con él, pues, se
¿Qué, pues, quiere decir eso, hermano s? Porque el que se pued e marca r un ca mb io, ya q ue a par tir de com ienzos del siglo
bautiza ahora en Cristo y cree en Cristo, pero no habla en q uinto hay poca evidenc ia de glosolalia o de cualq uier otro don
las lenguas de todas las naciones, (se debe creer que no ha extático del Espíritu. El concepto agu stino del carácter simbo-
recibido el Espíritu Santo? Lejos de nuestro corazón tan lico de las lengu as fue confirmado y ampliado por el papa León
pérfida tentación. Ciertos estamos que todo homb re recibe el Grande (440A61) . La mayor pa rte de las evide ncias que

41. Agustín, Réplica a las cartas de Petiliano, 2.32.74. 43. Agustín, Tratado sobre el Evangelio de San Juan, 32.7 .
42. íbid. 44. Agustín, Sobre el bautism o cont ra los donat istas, 3. 16.
280 LA ACCIÓN DEL EsplRlTU SANTO EN LA HISTORIA
El CRISTIANISMO DE SIGLO V 28 1
encontramos duran te la Edad Media se refieren a xenolalia, es milagros bíblicos. La diferencia está en el alcance de un testi-
decir, la capacidad de hablar idiomas desco nocidos, dada por mo nio y el del otro, y, en co nsecuencia, en la autori dad de cada
el Espíritu Santo . uno. Esto es impor tante, pues el propio obispo de Hipona
N o obstante, Agustín admite ciertas operaciones sobrena- presenta un argumento anticesacionisra valioso: la ignorancia
turales del Espíritu , y en particular, de los don es espiritua les. de lo milagroso no es argu mento suficiente para negar su
En general, para él, los don es del Espíritu son como estrellas, realidad y actualidad. Qu e yo ignor e las evidencias de la
a las que se permite mirar a los creyentes inmaduros, hasta que ope ración sobrenatural del Espír itu Sant o no significa que el
sean capaces de mirar directo al Sol (a Cristo), para ser Espíritu Santo no actúe sobrenaturalmente.
iluminados por Él y comer carne sólida.45 A pesar de su Algunos párrafos más adelante, Agustín repite la misma
cesacionismo, Agustín parece hacer mención del don de dis- idea :
cernimiento de espíritus, cuando dice: ..Por lo tanto por esto
entended el espír itu que es de Dios. Dad a los vasos de barro Asf, pues, también aho ra se hacen muchos milagros, obrá n-
una tap a, sornetedlos a pru eba, si quizás se qui ebran y dan un dolos el mismo Dios por medio de quien quiere y como
sonido incierto: ved si suenan nítidos y claros, ved si hay amor quiere, el que hizo igualmente aquellos que leemos, aunque
allf.46 estos no son tan notor ios como los otros, y para que no se
Si bien Agustín niega vigencia de las lenguas en sus días, olviden , se suelen reno var con la frecuente lección de ellos,
sí admite la realidad de numerosos milagros contemporáneos. como preser vativo de la memo ria. Porqu e aun donde se
pone exacta diligencia, como la que se ha empezado a
T ambién al presente se hacen milagros en su nombre, ya sea poner aquí ent re nosotros de que se reciten al pueblo los
por medio de sus sacramentos, ya por las oraciones o memo- memoriales o relaciones instr umenta les de los que reciben
rias de sus santos; aunque no son tan claros ni ilustres y los oficios divinos. fe s que se hallan presentes lo oyen solo
famosos ni se divulguen con tanta gloria como aquellos; una vez, y los más no se hallan presentes, de man era que
porque el Canon de la Sagrada Escritura, el cual con vino que ni los que lo presenciaron, pasados algunos días se acuer-
se promulgase, hace que se lean aquellos por todo el mundo da n de lo que oyeron, y apenas se halla uno que quiera
y que queden fijos en la memoria de todo el pueblo ; pero contar lo que oyó al que sabe que estuvo ausente.es
estos, donde quiera que sucedan, apenas se saben en toda la
ciudad o por alguno de los que están en el lugar, porque la De manera detallada, Agustín relata ciertas maravillas que
mayor parte aun allí lo saben poqufsimos, ignorándolos Jos ocurrieron en su pro pia iglesia en Hip ona, que se asemejan
demás, principalmente si es grande la ciudad-O mucho con los «dones de sanidades por el mismo Espíritu», a
los que hace referencia el apósto l Pablo en 1 Corint ios 12.9.
Es inte resante que Agustín no cuestiona la autenticidad de Incluso, hay una referencia en la que aparentemente toda su
los milagros de sus días ni su naturaleza en relación con los co ngregación, llena de entusiasmo por un gran milagro que
ocur rió, estalló en gritos que, como el propio Agustín los
califica, eran insoportables: «Gritaban en alabanza a Dios no
45. Agustín, Confesiones, 12.18.23.
46. Agustín, La epístola de San Jua n, homilía 6.13.
47. Agustín, Ul ciudadde Dios, 22.8.2.
48. Ibid., 22.8.22 .
282 LA ACO ÓN DEL Es plRITU SANTO EN U. HISTORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 283

palabras, sino voces sin semido,..49 Agustín, por cierto, no Estaba alH tendido, próximo a la muerte o muy semejante
desaprobó esta expresión de alabanza y gozo tan singular. Por a un muerto. La señora del lugar, al caer de la tarde, entró,
el con trario, esperó a qu e la congregación se sosegase y gua r- como de costumbre, con sus criadas y algunas religiosas a
dase silencio, antes de leer la Biblia y predicar el sermón del cantar los himnos vespertinos y a hacer sus oraciones.
día, Ento nan los himnos y sigue el canto. El demonio, romo
Entre los don es del Esp íritu, Agustín parece hacer refer en- herido por esa voz y no pudiendo o no atreviéndose a
cia a un don de revelación, cuando refiere la man era en qu e el mover el altar, lo asía con una conmoción terrible, como
obispo de Milán, Ambrosio, supo de la ubicación de los si estuviera atado o clavado a él. Luego, rogando con
cadáveres d e dos mártires (Gervasio y Potasio)...Estos cuerpos, grandes lament os que le perdonasen, confesaba dónde,
qu e estaban enterrados y eran casi desconocidos, fuer on des- cuándo y cómo había entrado en el adolescente. Por fin,
cubiertos en sueños al obispo Ambrosio ...5 o Un caso similar es prom etiendo que saldría de allí, nombraba cada uno de los
miembros y amenazaba que al salir los cortaría. Y entre esas
el de Inocencia, una dama de Cartago, a la que más adelante
palabras salió del joven.54
haremos referencia en relación con un milagro de sanidad, y
el de un médico de la misma ciudad.ü Un extranjero que
pad ecía de gota, «tuvo una revelación que le mostró el remedio El testimonio de Agustín en cuanto a casos de liberación
que debía aplicar cuando sintiese el dolor. Aplicaba ese reme- es valioso e interesante: ..Yo conozco una señorita de Hipona
dio, y el dolor se calmaba al instan te ~ .s2 que, habiéndose frotado con el aceite en que el sacerdote que
La guerra espiritual y la liberación no son desconocidas oraba por ella había mezclado sus lágrimas, fue al instante
para el obispo de Hipona, quien cuenta de un vecino de su librada del diablo. Sé, además, que lo mismo acaeció a un
ciudad, Hesperio, que tenía una quinta fuera de la ciudad. muchacho la primera vez que un obispo, sin haberlo visto, oró
«Habiendo visto que en su casa los espíritus malignos atormen- por él...55
taban a sus siervos y a sus animales, rogó a nuestros sacerdotes, Por cierto que en los casos de milagros, sanidades y
en ausencia mía, que se dirigiera allí alguno de ellos para liberaciones que refiere Agustín se mezclan algunas prácticas
ahuyentarl os con sus oraciones. Fue uno, ofreció allí el sacri- no evangélicas (veneración de reliquias, culto a los mártires,
ficio del Cuerpo de Cristo [la eucaristía] con las más fervientes sacramenralismc , erc.). No obstante, es de notar que, en casi
oraciones para que cesara la vejación. Y al instante cesó por la todos los casos, el obispo de Hipona destaca el lugar de la
misericord ia de D ios~. 53 Más adelante harem os referencia al oración a Dios como el factor al que responde la acción
caso de un adolescente que, «estando a mediodía y en pleno sobrenatural y milagrosa del Señor. En todos estos casos que
verano bañando su cabello en el río, fue poseído por un refiere Agustín, es evidente que él no tiene dudas que se trató
demonio». Según Agustín : de acciones sobrenaturales de origen divino. De hecho, él las
relata como testimonios probados por él y hechos públicos en
la comunidad como acciones milagrosas obradas por Dios.
49. lbid.
50. lbid., 22.8.2.
51. lbid., 22.8.3-4.
52. lbid., 22.8.14. 54. [bid., 22.8.7.
53. Ibid., 22.8.6. ss. [bid., 22.8.8.
284 LA ACaÓN DEL Es plRlTIJ SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 285

El argumento de que estos testimonios de Agustín carecen los milagro s de ento nces•. Segú n Agustín, los milagros bfblicos
de valo r co mo pru eba de la acción pod ero sa de Dios a tra vés cumplieron un fin misiológico. • Las cosas increíbles que se
de su Espíritu en sus días, en razón de qu e pa recen teñidos de realizaban, y que tod os veían, han per suadido de una cosa
superstición y son más bien expresión de una mentalidad increíble que nadie veía», Es por eso que, segú n él, «no se puede
pre-cienrífica, es insostenible. Con el mismo criterio habríaque negar que se obraron much os milagros par a afirmar este grande
descalificar a Agustín en su teología, a pesar de que se lo y saludable milagr o : que Cristo resucitó y subió al cielo con su
considera el fundador de la teología cristiana occidental. Ade- carne•. Es por eso que tales prodigios «est án consignados en
más, el teólogo no rafricano en estos pasajes no está argumen- las veraclsimas Letras, que recogen la realidad del milagro y la
tando a favor de los milagros, sino a favor de la resurrección verdad que intimaban. Los milagros se han mani festad o par a
de Cris to. Precisamente, porque Él es un Dios vivo es qu e por dar fe, y la fe que han dad o los manifestó co n mayor clarid ad .
su Espí ritu Santo puede hacer estas cosas maravillosasen medio Se leen a los pueblos par a que los crean , pero no se les leyeran
de su pueb lo. Como Agustín mismo señala: ..Estos milagros , si no los creyeran ya. ) S
éde qué otra fe dan auténtico testimonio sino de esta en que se Luego de esta afirmación de la verac idad y propósito de
predica que Cristo resucitó en carne, y qu e sub ió a los cielos los milagros bíblicos, Agustín declara algo interesante, como
con su propia carne?.56 ya citamos: ..También ahora se hacen milagr os en su nombre,
Por otro lado, Agustín no niega la posibilidad de las sea por sus sacramentos, sea po r las oracio nes o las reliquias
o peraciones sobrenatu rales del Espíritu Santo. De hecho , pa ra de los santos; pero no se extiende su fama y su gloria como la
él la continuidad y universalidad de la iglesia cristiana es en sí de aq uellos•. La diferencia está en que los milagros bíblicos son
mismo un verdadero milagro . A qui enes negaban los milagros, bien co nocidos a trav és del testimonio escriturario, que los
él les respon de: ..Este so lo grande milagro nos basta; que todo pregona por todas partes. Por el co ntrario, los milagros que
el mundo haya creído sin milagros » , S7 Es así que Agustín llega ocurre n en sus dí as, - no son conocidos más que en los lugares
a admi tir algunos milagros que ocurrieron en sus días, e en qu e se realizan, y apenas los conoce la ciuda d entera. Con
inclu so, co mo ind iqué, en su propia iglesia en Hipo na. frecuencia en las ciudad es, sobre tod o si son gra ndes, los
En respaldo de su argumen tación sobre la realidad de la co nocen unos pocos y los demás los ignoran. Añadid que los
resurrección de los muertos, Agustín discute la cuestión de los fieles qu e los cuentan a los fieles de otras regiones no llevan
milagros (pasados, presentes y futuros), en el último libro de avalada su autoridad por un reconocimiento que no deja lugar
La ciudad de Dios. Sus opositores levantaban la cuestión de po r a duda •. 59
qué los milagros de qu e habla la Biblia no se producían en sus No obstante, la cantidad de hechos milagrosos de los que
d ías. La respu esta de Agustín es: «Pod rfa decir que fuer o n Agustín puede dar testimonio fehaciente es aso mbrosa. Si bien
necesarios antes de qu e el mundo cre yera, para qu e cre yera el hace referencia a muchos casos, el obispo de Hipona se ve
mundo . H oy el que pida toda vía milagros para creer se co n- obligado por co rtesía a excusarse de no poder mencionar a
vierte él en un gra n milagro, pues no cree creyend o ya todo el todos. • ¿Q ué har é? La promesa de dar fin a esta obra me urge
mundo . Más hablar así pare ce hacer dudar de la realidad de y no me permite citar aquí todos los milagros que conozco. N o

56. ¡bid., 22.9. 58. íbid.• 12.8.1.


57. ¡bid., 22.5. 5'. lbid.
286 LA ACCIÓN DEL ESpjRITU SANTO EN LA HISTORIA EL CRISTIANISMO DE SIGLO V 28 7

dudo qu e muchos de los nuestros, cuando lean esto, se qu ejará n yo allf. Un ciego recobró la vista. Y este llegó a conocimiento
de qu e he pasado po r alto muchos milagros qu e conocen co mo de muchos».64 Otro caso inte resante es el de un tal Inocencia,
yo. Desde ahora les pido qu e me excusen ... Tomé esta decisión de Cartago, que por mucho tiempo había sufrido aparentemen-
[de relatar solo algunos de los milagros ocurridos] al ver que te de hemorroid es ulcerosa, a pesar de varias ope racio nes.
también en nuestros días so n corr ientes milagros semejant es a Finalmente, cuando to do estaba listo para una últ ima opera-
los ant iguos y que no deben pasar lnadvertídos- iev ción , Agustín y otros se pusieron a clamar en oración junto con
Agustín refiere uno tras otro varios casos de milagros, de el enfermo . Al ot ro día, cuand o el médico que lo iba a operar
los cuales él mismo fue testigo . Algunos tienen que ver con la saca las vendas y descubre la herida, «busca y rebusca la fístula
resucitación de muer tos. ..Un día unos bueyes desmand ados, qu e había de sajar; ausculta, toca, usa to dos los medios a su
que llevaban un carro, atrop ellaron con la rueda a un niño alcance, y por fin halló una cicatriz muy cerrada... Agustín, que
peq ueñito que jugaba en la era y le mataro n. Su madre, fue testigo ocular de todo esto, señala: «Mis palabras son febles
tomán do lo en brazos, lo colocó en la misma memoria [las para ex presar la alegría, la alabanza y la acción de gracias que
reliqu ias de San Esteban], y el chico no solo recobró la vida, bro tó de la boca de tod os, entre gozosas lágrimas, al Dios
sino que apareció com pletamente ileso ».61Ligada a las mismas misericordio so y omnipotente... Y concluye: «La escena se
reliquias de San Esteban está la resucitación de un sacerdote presta más para un a meditación que para un discurso».65
español. Este homb re, fue «presa de una enfe rmedad que le Agustín da crédito a otro milagro de sanidad. «En Carrago
dejó ta n abatido que ya le habían atado los pulmones», pero mismo, Inocencia, mujer muy piadosa y distinguida dama de
«resucitó con la gracia del dicho mártir». Ocurrió que «llevaron la ciud ad, tenía en el pecho un cáncer, enfermedad, según la
la túnica del sacerdote para tocar la reliquia, la pusiero n sobre ciencia médica, incurable». La mujer se encom endó a Dios en
el cuerpo del yacente y al instante volvió a la vida».62 Algo oración.•Próx ima ya la Pascua, fue advertida en sueños que la
similar pasó con una religiosa muy enfe rma, cuyo vestido fue prim era mujer qu e topase en la part e que mira al bautisterio le
llevado a la misma memoria, o sea, el lugar donde se rendía hiciese la señal de la cruz sobre el miembro dolorido. H ízolo,
culto al santo. Pero la mujer murió antes de llegar el vestido y al instante recobró la salud». También en Cartago ocurrió un
puesto en contacto con las reliquias. «No obstante, sus padr es milagro en relación con un médico, conocido de Agustín, que
cubrieron el cadáver con ese vestido , y recob ró el espíritu, y padecía de fuertes do lores en los pies y de podagra (gota en el
quedó curadas.e! pie). Según este hombre, estas d ole~ cias se debían a demoni?s
La mayor parte de los hecho s sobrenaturales a los que que lo afligían para que no obedeciese el mandato del bautis-
Agustín hace referencia tienen que ver con milagros de sanidad -. mo. Pero él, no obstan te, ..se bautizó, a despecho de ellos, y en
Su propio testimonio parece indicar la práctica de los done s de el acto del bautismo quedó libre no solo de sus extraordinarios
sanidades mencionados por el apóstol Pablo en 1 Co rintios dolores, sino también de la podagra, sin que en adelante se
12.9 . En un caso, él d ice: «El milagro se obró en M ilán, estando haya resenti do, a pesar de que ha vivido largos años ».66 Un
caso similar de curación en ocasión del bautismo fue el de un

60 . lbid.; 22.8.20.
6 1. lbid., 22.8.15. ~. lbid., 22.8.2.
62. lbid., 22.8.12. 6S, lbid., 22.8.3 .
63. lbid., 22.8.16; otro s casos similares en 22.8.17, 18, 19. 66. lbid., 22.8 .4. •
288 LA ACCIÓN DEL EspfRl TU S ANTO EN LA H1STORlA El CRISTIANISMO DE SIGLO V 289

antiguo acto r escénico de Curube (hoy Kurbah , en el no rte de milagroso, una vez que este había sido probado conv eniente-
África). «Co n el bautismo [él] fue curado de una parálisis y de mente por las autori dades religiosas, a fin de que el mismo
una hern ia. Y salió de la fuerte de la regeneración libre de ambas fuese leído al pueblo,"! Por otr o lado, el obispo de Hi pona no
molestias, co mo si no hub iera tenid o ningún mal en el cue r- duda en afirmar : «Se realizan, pues, aún hoy muchos milagros,
po ».67 Agustfn cuenta de otro paralíti co, un joven campesino, y los realiza el mismo Dios que hizo los que leemos y por las
qu e pidió a sus padr es que lo llevaran a un lugar de oraci ón . personas que quier e y como quiere».72
«Una vez allí, oró, y al momento se alejó de allí por sus Quizás conviene aqu í transcribir el testimonio completo
pro pios pies, perfectamente curadocss de un os milagros que el prop io Agustín refiere con gra n
Un joven adolescente fue liberado de un dem onio por el emoción, y qu e suenan no solo co mo casos de sanidad física
canto piadoso de un grupo de mujeres (ver más arriba), pero sino también de sanidad interior y liberación:
casi pierd e un ojo. «Al ver esto los circunstantes (pues habían
acudido otros al oír las voces y se hab ían postrado tamb ién en Diez herman os (siete varones y tr es hembras), oriundos de
oración po r él), aunque gozosos por ver al joven en su sano Ces área de Capadocia y de con dición no humilde, habien-
juicio, se dolía n por la pérdida del ojo y se decían que era do sido recientemente mald ecidos por su madre por una
preciso buscar al médico. En esto, el marido de su hermana, injuria que le habían hecho después de la muerte del padre,
que lo había llevado allí, dijo: Poderoso es Dios, que ah uyentó fuero n castigados con una pena con sistente en un ho rr ible
al demonio por las oraciones de los santos, para devolverle la temblor de miembros. No pudiendo soportar las miradas
vista. Luego colocó co mo pudo el ojo en su sitio y 10 ató con de sus paisanos, se fuero n cada uno por su sitio, en vaga-
el pañu elo. Así lo mantuvo durante siete d ías. Al cabo de ellos bundeo por casi tod o el Imperio Romano. Dos de ellos
lo halló perfectamente curado ». Agustín agrega: «En el mismo llegaron a nuest ra ciudad, un hermano y una hermana,
lugar fuero n curados otros, cuya enumeració n sería larga».69 Pablo y Paladia, conocidos ya en otros muchos lugares po r
Agustín asocia muchos milagros de sanidad a las reliquias de la pu blicidad de su miseria. Llegaro n unos quin ce días antes
los mártires, particularm ente, como vimos, las reliquias de San de la Pascua. Visitaba n a diario la iglesia y en ella la
Esteban. Una mujer ciega, un obispo que padecí a de una fístula, memoria del gloriosísimo San Esteban , rogand o a Dios que
un sacerdo te que sufría del mal de piedra, un hombre llamado se apiadara y les devolviese la salud. Allí y dond equiera que
Marcial que estaba a punto de mor ir, do s gotosos, y otros iban se atraían las miradas del pue blo. Los que los habían
fueron curados por la supuesta inte rcesión de Esteban.Z'' visto en otra parte y conocían la causa de su temblor lo
Más allá de los detalles folklóricos y de religiosidad pop u- conta ban a los demás a su modo. Llegó la Pascua, y el
lar de cada caso particular, es interesante notar que los milagro s dom ingo po r la mañana, cuando ya un gran gentío llenaba
eran muy frecuentes en los días de Agustín. Era costumbre la iglesia, el joven, asido a las verjas del lugar santo dond e
establecida poner por escrito el testimonio d e cada hecho estaban las reliquias del mártir, orando , cayó de golpe y
qu edó te ndido como si durmiera . Más no temblaba, como
solía hacer durante el sueño. El accidente infundía a unos
67. Ibid., 22.8.5.
68. Ibid., 22.8.6.
69. Ibid., 22.8 .7. 71. Ibid., 22.8.21.
70. Ibid., 22.8.10-14. 72. ¡bid.
290 LA ACCiÓN DEL ESP!RlTU SANTO EN LA HISTORIA EL CRlSTL\.'J ISMO DE SIGLO V 291

dolor y a otros temor. Unos querían levantarlo, pero otros que emple e en unos com o min istros a los espíritus de los
se lo prohibían, diciendo que era mejor esperar el desenla - mártires, como a hombres aún con cue rpos, o en todos a
ce. y he aquí que el joven se levantó sin temblor, porque los ángeles, a qu ienes manda invisible, inmu table e incor-
había cura do y estaba perfecta mente, mirand o a los curio- po ralmeme, interponiendo los márt ires sola mente sus pre -
sos. ¿Qu ién no alabó a Dios entonces! Una olea da de voces, ces, no su operació n; sea qu e los obre de cualquiera otra
clamores y enhorabuenas llenó las naves de la iglesia. manera incomprensible para los mo rtales, lo cierto es que
Corren hacia mí, que estaba ya dispu esto para sali r. Venían siempre dan testimoni o de la fe qu e pre dica la resurrección
unos tras ot ros, contando el últi mo lo mismo que había etern a de la cam e.t s
co ntado el primero. Yo, albo roza do y da ndo int eriormen te
La pregunta que surge, entonces, es: épor qué en la
gracias a Dios, vi llegar entre la multitud al agracia do. Se
cristiandad occidental parece como que «cesó" el ejercicio de
postró a mis pies, y yo le abracé y le levanté. Nos dir igimos los carismas hacia el año 400? Se pueden sintetizar varias
al pueblo. Estaba la iglesia de bote en bote. Resonaban las razones. (1) Los dones sobrenaturales se refugiaron en los
voces de júbilo y solamente se oían de aquí y de allá estas monasterios, cuando la iglesia en general comenzó a criticarlos.
palabras : ..iGracias a Dios! iBendito sea Dios!.. Saludé al (2) Hubo un intento de «institucionalizar.. al Espíritu Santo en
pueblo y se oyó un nuevo clamor aún más ferviente. Por la vida de la iglesia. (3) Existía el sentir de que las cuestiones
fin, ya en silencio, se leyeron las lecciones de la divina más controversiales debían quedar en manos de los sacerdotes.
Escritura. Al llegar al pasaje de mi sermón diri gí unas (4) El ingreso de miembros «convertidos a medias.., después de
pa labras segú n el tiempo y (a grandeza de aque lla alegría, la «conversión» del empe rador Constantino, hizo respetable al
pues preferí que gustasen la elocuencia de Dios en una obra cristianismo, pero le quitó fuerza espiritual. (5) El control
tan grandiosa a qu e escuchasen mis palabras.73 clerical de los carismas se transfor mó en una salvaguarda
contra el fanatismo entusiasta, pero anu ló al creyente común.
Tr es días más tarde, la hermana del que había sido curado
(6) Sacerdote s y obispo s querían regular la acción del Espíritu
recibió sanidad. Nuevamente la congregación estalló en gozo.
para guiarla a los canales sacramentales. (7) La decadencia
«Alababan a Dios porque aún no habían orado por ella y ya moral y espiritual de la iglesia se incrementó, ya que estuvo
había oído sus plegarias. Gritaban en alabanza a Dios no más interesada en el poder mundano que en el pode r divino,
palabras, sino voces sin sentido, tan fuertes, que apenas nues- con lo cual se neutralizó la ob ra del Espíritu Sama.
tros oídos podían aguantarlas. ¿Qué había en los corazones de Así y todo, como hemos visto, el Espíritu no se quedó
este pueblo tan jubiloso sino la fe de Cristo, por la que San quieto ni dejó de actua r poderosamente en medio de su pueblo
Esteban había derramado su sangre?..74 a lo largo de los primeros quinientos años de testimonio
Por eso, Agustín concluye: cristiano en el mundo . La razón de esta operación sobrenatur al
Sea qu e Dios obr e esos milagros según el modo maravilloso y maravillosa es muy simple: Jesucristo nos dio el Espíritu
qu e tiene el etern o de obrar en los efectos temporales, sea Santo para cumplir su propósito redentor en la vida de tod os
qu e los obr e por sus ministros; y, en este último caso, sea aquellos que confiesan su nom bre. Y El «es el mismo ayer, y
hoy, y por los siglos» (Hebreos 13.8).

73. [bid., 28.8.22 .


74. lbid. 75. lbid., 22.9.
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