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¿Eres de los que a fin de mes llega ajustado? ¿O de las personas que no ahorran porque
no le alcanza? Aunque usted no lo crea, ganar más dinero no necesariamente es la
solución a tu problema económico. La principal razón por las que las personas son
pobres es porque tienen malos hábitos.
Si tus hábitos son malos, no habrá sueldo que te hagan salir de la pobreza, aunque
ganes millones, pero si cambias algunos de ellos, estarás mejorando tus hábitos
financieros.
Pero, ¿a qué hábitos nos referimos? Son actividades que realizamos a diario, fumar, por
ejemplo. Fumar es uno de esos hábitos que, además de dañar tus pulmones, también
afecta la salud de tu bolsillo. Si erradicas el consumo del tabaco, tu salud podría
mejorar, podrías ahorrar algo de dinero y tus seguros de gastos médicos y de vida
serán más baratos.
Lo peor de todo es que los niños están aprendiendo del sistema educativo, los políticos
y los medios de comunicación en donde se les está enseñando que los ricos son
corruptos y codiciosos, que tienen demasiada riqueza y que ésta debe ser redistribuida
a todos.
Todos nacemos con las mismas capacidades que con el tiempo uno deberá
desarrollarlo. Si realmente quieres salir de la pobreza, debes quitar de tu mente esta
idea de que estamos condenados a ser pobres, eso hará que nos cerremos a la
posibilidad de triunfar en la vida. Todo está en uno mismo.
3. No leer libros
Cada vez existen más jóvenes que se preocupan por tener un buen físico, gastan mucho
dinero en el gimnasio, aunque no es malo, lo recomendable es no destinar todo el gasto
en los músculos, el cerebro también es un músculo y necesita siempre ejercitarse,
aprovecha mientras eres joven para aprender cosas nuevas que siempre te serán útiles
en la vida.
Debemos ser conscientes de nuestros malos hábitos y que cuando avanza nuestra edad
seremos más propensos a padecer: diabetes, hipertensión arterial, cólera, problemas
cardiovasculares, obesidad, caries, cáncer, y muchas otras enfermedades que nos harán
gastar mucho dinero.
6. Esperas ayuda del gobierno
Cuando estamos esperanzados a recibir ayuda externa, nuestra mente se limita y nos
volvemos dependientes. Además esa ayuda no estará ahí siempre, tarde o temprano
llegará el momento en que dejemos recibir esa ayuda y si no hemos aprendido a ser
independientes nos afectará mucho.
Las personas que nos rodean, ya sean amigos o familiares van a influir siempre en
nuestras costumbres, sean buenas o malas.
Por ejemplo, los amigos te dirán vamos a las fiestas y ello conlleva gastos innecesarios,
aunque no es malo divertirse, no debemos excedernos. Nuestros amigos podrían ser
buenas influencias cuando también nos animan a progresar en la vida.
Gastar el dinero significa emplearlo para adquirir o comprar una cosa que no nos dará
una posible ganancia en el futuro más que el placer de utilizarla o consumirla. Por
ejemplo comprar un TV es un gasto, ya que solo sirve para entretenimiento personal, ir
al supermercado a comprar comida también es un gasto.
Invertir nuestro dinero significa realizar un consumo en el presente con la esperanza
de obtener una ganancia en el futuro. Invertir en un tu educación es lo mejor que
puedes hacer.
Las personas que siempre están comprando la lotería creen que la riqueza proviene de
la suerte o el azar. Este pensamiento nos condena a la pobreza.
Como si tus abuelos hubieran sido analfabetos, tus padres apenas tengan secundaria
completa y a ti te han obligado a estudiar algo que no quieres para salvar a la familia.
Aprende de los ricos, ellos no andan cargando culpas ni pretextos, han salido desde
abajo, aun cuando Velasco arruinó a sus familias.
Hay pequeños factores que diferencian a los millonarios de las personas que luchan
diariamente con su situación financiera.
Ahora que ya conoces los malos hábitos que te condenan a ser pobre, comienza a
cultivar buenos hábitos y obtendrás una idea de lo que es el éxito financiero real,
aprenderás cómo ser millonario y desarrollarás tu independencia económica.