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Dignas autoridades presentes, Sr.

Director de la IE Coronel
Bolognesi, Su majestad Massiel Primera, Representantes de los
diferentes estamentos de nuestra querida institución, Compañeros
de trabajo de nuestra IE, Estimados Alumnos, Invitados todos,

Tengo la magnífica oportunidad de dirigirme a Ustedes y no puedo


comenzar sin antes expresar mis más cordiales y afectuosos saludos
de bienvenida a tan distinguidas visitas que nos acompañan en este
acto tan significativo para nosotros, cuando estamos celebrando 84
años de vida al servicio de la educación en Tacna.
Quiero iniciar mi participación rindiendo homenaje a los
bolognesianos que ya no están entre nosotros, ya que partieron
hacia otras aulas mucho más elevadas en pos de sabidurías
superiores, a los bolognesianos que formaron ciudadanos, y a los
bolognesianos que estamos formando juventudes.
Para mí representa un orgullo el tomar la palabra en este día tan
especial y ser el portavoz de alegría, identidad y orgullo en esta
memorable fecha.
La gloriosa historia bolognesiana se inició hace 84 años, estoy muy
seguro, que se forjó en base a sacrificio, esfuerzo y la unión
institucional; hoy en día, frente a un panorama diferente, los que
formamos parte de esta familia bolognesiana tenemos el reto de
superar el legado de nuestros antecesores; retos que no serán
posibles sino contamos con la participación y el compromiso
activo de los padres, de las autoridades de la región, de nuestros
ex alumnos y de la sociedad civil organizada.
Muchos son los logros de nuestros estudiantes ya sea en los
Concursos de ciencias, letras, en las artes y en actividades cívicas,
razones suficientes que nos animan festivamente el día de hoy y
que son el soporte para apoyarnos en la superación de nuestras
debilidades, que como colegio público naturalmente las tenemos.
Por ello debemos destacar y valorar los recursos humanos de esta
institución que nos hacen, sin falsas modestias, ser la mejor
Institución Educativa de esta parte del Perú.
Es por todos bien sabido que un colegio no dice nada por sí solo,
sino es con la comunidad educativa que lo conforma. Un colegio no
dice nada a través de sus muros de concreto, un colegio vive, un
colegio respira a través del trabajo incansable de sus maestros y
maestras, un colegio crece, ríe y llora con sus alumnos, un colegio
mira con esperanza al futuro a través de las familias que unas veces
sufriendo y otras con alegría, ven como poco a poco sus ilusiones y
sus anhelos van dando sus frutos. La importancia de nuestro
colegio radica en que ha sido y sigue siendo el punto de referencia
de la educación en Tacna y de una educación que va camino a la
excelencia, de exigencia, de mejora y de innovación constante.
Empezamos a escribir una nueva página en la historia de nuestro
colegio y debemos escribirla haciendo que cada letra sea una
semilla de futuro, intentando sacar lo mejor de cada uno de
nosotros. Estos 84 años tienen sentido no por el colegio en sí, sino
porque muchos a través de él han dejado una huella imborrable de
dignidad y humildad, los maestros han sido una pieza más para que
los próximos 84 años el faro de nuestro colegio siga encendido.
Unas veces la luz será tenue, otras brillará con más fuerza, pero
siempre servirá para poder guiar a cada uno hacia su estrella o
hacia su camino.

Por ello pido, que reforcemos nuestros esfuerzos, que nos


encontremos más unidos y más comprometidos; no solo directivos,
colegas y administrativos sino también ustedes queridos alumnos
que son el eje, el motor que hace que cada día nos esforcemos
más.
Estamos aquí para reafirmar nuestro compromiso al igual que
nuestro Patrono: El Coronel Francisco Bolognesi hombre índice,
hombre probo, constante y, fundamentalmente, militar ejemplar;
el pundonor y la dignidad eran las constantes de su vida, austera
desposeído de grandes comodidades, más bien, lindantes con la
dignidad de la pobreza material.
Bolognesi vivió sin mancharse con el lodo de las guerras civiles ni
con la locura de las riquezas dilapidadas. Bolognesi fue como esas
aves de plumaje blanco que no obstante posarse en el pantano,
elevan el vuelo con las limpias. Bolognesi y sus hijos Enrique y
Augusto, muertos también defendiendo la patria, los tres, padre e
hijos entraron a la gloria, limpios. ¿Quién más?

Para sintetizar todo lo expuesto lo diré parafraseando un viejo


dicho: Después de todo, hemos comprendido que lo que el árbol
tiene de florido, vive de lo que tiene sepultado.
Para terminar, me dirijo a los jóvenes bolognesianos con algunos
pensamientos que la experiencia nos ha dejado: Jóvenes,
aprovechen al máximo estos años dorados, de descubrimientos, de
aprendizajes, de energía inacabable, de fuertes amistades, esta
oportunidad de crecimiento interior para ser mejores personas, no
permitas que esta época pase de largo, vívela para revivirla
después con el corazón joven de estudiantes, vivan el ejemplo de
las promociones plateadas y doradas que después de 25 y 50 años
respectivamente, se siguen emocionando al entonar las estrofas de
nuestro himno bolognesiano.
Al terminar, deseo expresar a cada uno de Ustedes, estimados
amigos, el abrazo fraterno y el agradecimiento por apoyarnos en
nuestra tarea, por creer en nosotros y por darnos la oportunidad
de ser parte del desarrollo de Tacna.
MEJOR QUE UN BOLOGNESIANO, SOLO OTRO BOLOGNESIANO
Muchas gracias y Hasta siempre. Feliz cumpleaños para todos
INSTITUCIÓN EDUCATIVA EMBLEMATICA “CORONEL BOLOGNESI”
CORONEL FRANCISCO BOLOGNESI

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