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Partes de la planta

La planta Epipremnum Aureum (planta de

teléfono) está conformada por raíces, hojas y el

tallo.

La autora Sánchez (2017), menciona que “en

la tierra hay diversos nutrientes y minerales que,

cuando llueve, quedan disueltos. Las raíces los

absorben a través de los pelillos

absorbentes para que la parte aérea, es decir, el

tallo y las hojas, pueda mantenerse sana y

crecer”.

Las raíces son el medio principal de absorción


Prince, P. (2017). Epipremnum Aureum “Golden Photos”. (figura 1). Recuperado de
https://www.flickr.com/photos/foundationandfriends/34263118751/in/photostream/
de agua y minerales provenientes del suelo,

además se encarga de sujetar firmemente la planta a la tierra y prevé que la tierra pueda

deslavarse. A su vez, se divide en 5 partes: el cuello, la zona suberificada, la zona pilífera,

zona de crecimiento y la cofia.

El cuello es la pieza que conecta el tallo con la raíz. La zona suberificada

(ramificación) es el sector que se localiza entre el cuello y los pelos absorbentes, en ella

surgen las raíces secundarías, las cuales tienen la labor de alimentar la planta. La zona

pilífera o también conocida como pelos absorbentes está ubicada entre la zona de

ramificación y la de crecimiento, esta está protegido por vellos que absorben agua y

minerales. La zona de crecimiento o zona de división celular se encuentra situada entre la


zona pilífera y la cofia, con ella brota el desarrollo de la raíz y por último la cofia, es una

capa que sirve para la protección de la punta de la raíz cuando es insertada en la tierra.

Sánchez (2017) se refiere al tallo como “una parte muy importante para las plantas.

El agua con sus minerales, conocido como savia bruta, viaja desde las raíces hasta las hojas

a través de unos tubos realmente finos llamados vasos leñosos”.

El tallo es el sostén de la planta, transporta los líquidos esenciales por medio de los

vasos conductores. Los tallos pueden ser de dos maneras, herbáceos o leñosos, los tallos

herbáceos se caracterizan por ser delgados y con flexibilidad mientras que los leñosos son

gruesos y duros. El tallo está conformado por tres partes: el cuello, el nudo y las yemas. El

cuello es el enlace del tallo con la raíz. del nudo germinan las ramas y las hojas y de las

yemas nacen las ramas.

La autora Sánchez (2017) comenta que las hojas “son la fábrica de alimentos de las

plantas. Gracias a ellas, pueden respirar, absorbiendo oxígeno y expulsando dióxido de

carbono; realizar la fotosíntesis y además pueden transpirar, que consiste en expulsar el

exceso de agua a través de los estomas”.

La hojas crecen de forma paralela y limitada, gracias a ellas la planta puede recorrer

la savia, y así proceder a la fotosíntesis. Estas pueden ser perennes o caducas, las hojas

perennes caen de manera que puedan surgir otras nuevas a los meses o cada año y las hojas

caducas caen en una estación del año (primavera, verano, otoño o invierno) determinada.

La hoja se divide en tres partes: el limbo, el pecíolo y la vaina. El limbo tiene una

forma de lámina y es la parte más aproximadamente plana, está conformada por el envés,

que es la cara inferior y el haz que es la cara superior. El pecíolo es la hebra que conecta la

hoja y esta se une al tallo o rama y la vaina es una expansión (del limbo o el pecíolo) que

está tejida, cubriendo al tallo.


Referencia

Sánchez M. (2017, junio 1). “¿Cuáles son las partes de las plantas?”. Jardinería On.

Recuperado el 2 de abril 2019 de: https://www.jardineriaon.com/partes-de-las-plantas.html

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