Professional Documents
Culture Documents
CURSO
DERECHO REALES
DOCENTE
CEVALLOS BONILLA, HECTOR
ALUMNO
LOZANO ROJAS, BRANDON
1
INTRODUCCIÓN.
La Posesión según el art. 430 del Código Civil es: “La tenencia de una cosa o el disfrute de
un derecho por una persona. Posesión civil es esa misma tenencia o disfrute unidos a la
intención de haber la cosa o derechos como suyos.”
La posesión se ejerce en las cosas o en los derechos por la misma persona que los tiene y
los disfruta o por otra en su nombre (art. 431 CC.)
Se reputa poseedor de buena fe al que ignora que en su título o modo de adquirir exista
vicio que lo invalide. Se reputa poseedor de mala fe el que se halla en el caso contrario.
(art. 433 CC)
Sólo pueden ser objeto de posesión las cosas y derechos que sean susceptibles de
apropiación. (art. 437 CC).
Todo poseedor tiene derecho a ser respetado en su posesión, y, si fuere inquietado en ella,
deberá ser amparado o restituido en dicha posesión por medios que las leyes de
procedimientos establecen. (art. 446 CC).
La posesión de los bienes muebles, adquirida de buena fe, equivale al título. Sin embargo,
el que hubiese perdido una cosa mueble o hubiese sido privado de ella ilegalmente, podrá
reivindicarla de quien la posea.
2
registral una presunción posesoria, instrumentando un procedimiento específico y distinto
al de la Ley de Enjuiciamiento Civil de 1881 para los interdictos.
3
POSESIÓN.
DEFINICONES.
*La posesión es el poder físico que se ejerce sobre una cosa con intención de
manejarse como verdadero propietario de ella.
CONCEPTO.
4
ELEMENTOS DE LA POSESIÓN.
Intención de tenerla como suya, explicada por los romanos como animus possidendi
o simplemente animus por los intérpretes. Es el elemento subjetivo y supone una intención
permanente en el poseedor de disponer de la cosa exclusivamente con relación a los demás;
apenas cesa la intención en el sujeto, la posesión se pierde. Es el animus lo que distingue la
posesión de la detentación o mera tenencia.
5
Así el depositario, el arrendatario, el comodatario sólo detentan la cosa depositada,
alquilada, prestada, y no la poseen porque no pueden disponer de la cosa como suya, ya que
su disponibilidad está limitada por la relación obligatoria con el propietario de la misma: tal
disponibilidad se acaba cuando la relación obligatoria se extingue.
En todo caso, sería irrelevante que tuviesen animus, ya que las citadas relaciones no
vienen contempladas por la ley entre aquéllas que conllevan posesión, y porque, como dice
Paulo, nadie podía cambiarse asimismo la causa de la posesión (neminem sibi impsum
causam possessionis mutare potest), lo cual significa que el detentador no puede
transformar por sí mismo la detentación en posesión. Un ejemplo: el comodatario es
detentador de la cosa prestada, y no se convierte en poseedor por el simple hecho de
comenzar a tener la intención de poseer.
CLASES DE POSESIÓN.
POSSESSIO NATURALIS.
6
A pesar de ello, existe un reducido número de casos de possessio naturalis que,
excepcionalmente, disfrutaron siempre en Roma de la protección posesoria, y a los que los
romanistas califican de anómalos: son el precarista, el acreedor pignoraticio y el
secuestrario. Todos ellos tienen la disponibilidad de una cosa que un determinado momento
deberán restituir, y la protección de que gozan responde a razones prácticas, posiblemente
como residuo y vestigio de una situación histórica precedente.
La concesión, revocable a voluntad del propietario, solía hacerse a ruegos del precarista (no
es mera coincidencia que precario y precarista deriven de preces=ruego, súplica), quien no
podía tener el animus possidendi.
b) Acreedor pignoraticio. El que tenía la posesión de una cosa del deudor como garantía
del cumplimiento de la obligación; si el deudor pagaba, el acreedor debería restituirle la
prenda.
c) Secuestrario (sequester). Era aquella persona a quien las partes que litigaban sobre la
propiedad de una cosa, se le confiaban para que la guardase mientras se resolvía el litigio y
la restituyese al vencedor del mismo.
7
POSSESSIO O (POSSESSIO AD INTERDICTA)
POSSESSIO CIVILIS.
Adquisición De La Posesión
Paulo nos dice que conseguimos la posesión con el cuerpo y con el ánimo, y no
solamente con el ánimo o con el cuerpo (Adipiscimur possessionem corpore et animo,
neque per se animo, aut per se corpore). Por tanto, para adquirir la posesión era necesario
que el sujeto tuviese al mismo tiempo la tenencia física de la cosa (corpus) y la intención de
8
tenerla como suya (animus). Se exigía la concurrencia de ambos elementos para comenzar a
poseer, no siendo suficiente uno solo de ellos.
PÉRDIDA DE LA POSESIÓN.
Ahora bien, ya a principios del s. III d.C., a partir de la solución de una serie de casos
prácticos, se va consolidando el principio possessio solo animo retinetur. Tal principio,
elaborado por la jurisprudencia clásica, sobre todo por obra de Paulo, quiere decir que la
posesión se mantiene con la
Ejemplos:
9
Por la pérdida del animus: Si el poseedor de una casa la vende y se queda a título de
inquilino, ya no posee y solo sería instrumento de la posesión de otro.
Por la pedida del corpus: Como en el caso en que una persona se quedara con una
joya, ya sea clandestinamente o por violencia.
INTERDICTOS.
10
CONCLUSIÓN.
Para concluir este tema podemos decir que la posesión en la antigua Roma fue, el
hecho (disponibilidad, o el poder físico) de disponer de una cosa, con la intención de
manejarse como verdadero propietario de ella.
11
BIBLIOGRAFÍA.
www.google.com
www.derechoromano.es
12