Bendito el que Viene

La entrada triunfal de Jesucristo

Sinopsis

Jesucristo entró a Jerusalén montado en un pollino para el regocijo de sus seguidores, pero
provocando a los líderes religiosos judíos.

El pollino utilizado en la entrada de Jesús a Jerusalén

Las instrucciones de Jesús a sus discípulos

Lc 19.29–31

Lucas 19.29–31 (NVI) — 29 Cuando se acercó a Betfagué y a Betania, junto al

monte llamado de los Olivos, envió a dos de sus discípulos con este encargo:
30 «Vayan a la aldea que está enfrente y, al entrar en ella, encontrarán atado
un burrito en el que nadie se ha montado. Desátenlo y tráiganlo acá. 31 Y si
alguien les pregunta: “¿Por qué lo desatan?”, díganle: “El Señor lo necesita.”
»

La obediencia de los discípulos

Ver también

Mt 21.6

Mateo 21.6 (NVI) — 6 Los discípulos fueron e hicieron como les había
mandado Jesús.

La entrada de Jesús a Jerusalén

Jn 12.14–15

Juan 12.14–15 (NVI) — 14 Jesús encontró un burrito y se montó en él, como dice
la Escritura: 15 «No temas, oh hija de Sión; mira, que aquí viene tu rey, montado
sobre un burrito.»

Ver también Is 62.11 ; Zac 9.9

Isaías 62.11 (NVI) — 11 He aquí lo que el SEÑOR ha proclamado hasta los confines
de la tierra: «Digan a la hija de Sión: “¡Ahí viene tu Salvador! Trae su premio
consigo; su recompensa lo acompaña.” »

Zacarías 9.9 (NVI) — 9 ¡Alégrate mucho, hija de Sión! ¡Grita de alegría, hija de
Jerusalén! Mira, tu rey viene hacia ti, justo, salvador y humilde. Viene montado en
un asno, en un pollino, cría de asna.

La respuesta de la muchedumbre a la entrada de Jesús a Jerusalén

La proclamación de la realeza de Jesús

 Mt 21.8; 2 Re 9.13 Tender los mantos por el camino era un acto de homenaje real.

Mateo 21.8 (NVI) — 8 Había mucha gente que tendía sus mantos sobre el
camino; otros cortaban ramas de los árboles y las esparcían en el camino.

2º Reyes 9.13 (NVI) — 13 Dicho esto, todos se apresuraron a tender sus

mantos sobre los escalones, a los pies de Jehú. Luego tocaron la trompeta y
gritaron: «¡Viva el rey Jehú!»

La proclamación de que Jesucristo era el Mesías

Mt 21.9

Mateo 21.9 (NVI) — 9 Tanto la gente que iba delante de él como la que iba
detrás, gritaba: —¡Hosanna al Hijo de David! —¡Bendito el que viene en el
nombre del Señor! —¡Hosanna en las alturas!

Ver también Sal 118.26

Salmo 118.26 (NVI) — 26 Bendito el que viene en el nombre del SEÑOR.

Desde la casa del SEÑOR los bendecimos.

La proclamación de la victoria de Jesucristo

Jn 12.13 Las ramas de palmera eran utilizadas en la celebración de una victoria.

Ver también; Lv 23.40; Sal 118.27; Ap 7.9

Juan 12.13 (NVI) — 13 tomaron ramas de palma y salieron a recibirlo,

gritando a voz en cuello: —¡Hosanna! —¡Bendito el que viene en el nombre
del Señor! —¡Bendito el Rey de Israel!

Levítico 23.40 (NVI) — 40 El primer día tomarán frutos de los mejores

árboles, ramas de palmera, de árboles frondosos y de sauces de los arroyos,
y durante siete días se regocijarán en presencia del SEÑOR su Dios.

Salmo 118.27 (NVI) — 27 El SEÑOR es Dios y nos ilumina. Únanse a la

procesión portando ramas en la mano hasta los cuernos del altar.

Apocalipsis 7.9 (NVI) — 9 Después de esto miré, y apareció una multitud

tomada de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas; era tan grande que
nadie podía contarla. Estaban de pie delante del trono y del Cordero,
vestidos de túnicas blancas y con ramas de palma en la mano.

La respuesta de los fariseos a la entrada de Jesús a Jerusalén

Lc 19.39–40

Lucas 19.39–40 (NVI) — 39 Algunos de los fariseos que estaban entre la gente le
reclamaron a Jesús: —¡Maestro, reprende a tus discípulos! 40 Pero él respondió:
—Les aseguro que si ellos se callan, gritarán las piedras.