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Pontificia Universidad Javeriana

Facultad de Educación
Licenciatura en Educación Básica con énfasis en Humanidades
Y Lengua Castellana.
Profesora: Luz Stella Angarita
Alumnos Yesica Vanessa Marroquín Rodríguez
Asignatura: Simbólica Latinoamericana
Primer corte

“El símbolo es, al mismo tiempo, señal inequívoca de que la inmediatez con la realidad de
nosotros mismos, del otro y del mismo movimiento, nos facilita un contacto inmediato con ella”

Duch

Cuando se habla de símbolo, se hace referencia a un elemento cuyo significado se lo da el sujeto


a partir de sus conceptos previos construidos con la interacción que tiene del mundo y el contexto
socio cultural e histórico que lo precede, teniendo así herramientas que le permitan emitir un
significado propio sobre determinado objeto.

Ahora bien, su relación con la literatura converge en el desarrollo de elementos decisivos que, si
no se señalan, la simbología queda perdida en el limbo. Cada obra literaria y cada autor tiene un
contexto que le permite al lector poder inferir espacios, actitudes, formas, colores, sensaciones,
permitiendo que, mediante los pensamientos del autor, también cada sujeto desde su individualidad
sea capaz de construir un símbolo mental de lo que está leyendo, de la información que tiene a su
alcance, es en ese punto donde la ambigüedad y la singularidad del individuo desde su construcción
mental puede crear, dando así un significado a la información que posee.

Mediante la diversidad de obras literarias, desde el concepto semántico de significado, hallar


distintas y nutridas relaciones entre el significante (Cada trazo, dibujo, letra, palabra) cuyo efecto
provocado es el significado de la misma (crear concepto e imagen mental), donde el objeto son las
ideas del autor, y el significante aquella construcción social que el receptor da lo que lee. La
literatura ofrece al mundo variedad de símbolos que permiten al individuo explorar en diversos
mundos, brindándole la oportunidad de expandir su mente, salir de aquella zona de confort y dar
así protagonismo a aquellas simbologías que permiten navegar en el pensamiento del autor, en la
significación y construcción de un imaginario que solo un símbolo basado en un contexto social e
histórico bien definido puede regalar, a pesar de que el significante de aquel símbolo tenga carácter
ambivalente, depende de quien lo lea, donde lo lea, como lo lea, la personalidad y el contexto
social, económico, político e histórico del individuo.

En relación con lo anterior, se evidencia que la literatura como herramienta de transmisión de


saberes juega un rol elemental en la preservación de la cultura, símbolos, significantes y visiones
del mundo de muchos autores que desde diversos ángulos, han dejado un regalo a la humanidad
en general, construyendo por medio de unas formas y símbolos muy particulares, implementando
mediante las letras, convertidas en ideas, relaciones entre la expresión y lo sentires con los
diferentes referentes conceptuales y culturales particulares plasmando una serie de símbolos
ligados a unas construcciones de tipo social que basados en la polisemia, se pueden interpretar de
igual manera un abanico de posibilidades a la hora de su significación, teniendo en cuenta el
sentido del tiempo, tanto de existencia de la obra, como el tiempo real en el cual el individuo
interactúa con la misma.

No obstante, los símbolos desde la perspectiva social despiertan interés por parte del sujeto, no
solo de conocer, si no de interactuar con la realidad teniendo como punto de partida la construcción
de la sociedad, reconociendo la necesidad del ser humano de buscar darle significado a todo
aquello que encuentra a su alrededor y con lo cual tiene oportunidad de interactuar, creando
alrededor de los mismos una apertura al mundo circundante como razón de ser de todo individuo,
siendo la literatura aquella herramienta que despierte ese deseo de búsqueda, la voluntad de superar
sus propias concepciones y la apertura de mente para realizar el ejercicio consiente de construirse
como sujeto no solo con las herramientas que el entorno le brinda, si no también haciendo uso de
su deseo de exploración del mundo de las ideas, donde la literatura facilite la caracterización de
signos, símbolos y significantes,

A modo de conclusión, se puede aludir a la literatura un rol protagónico en la construcción y


significación de símbolos que le permiten al sujeto desde su particularidad e individualidad,
construirse partiendo del deseo, no solo con las herramientas que le brinda el entorno, si no con
darse la oportunidad mediante las letras y sin tener la necesidad de moverse a nivel físico del lugar
donde se encuentra, otras formas de significado y pensamiento, al igual que la diversidad de
culturas a nivel social cuyo único fin es siempre el mismo, dar sentido a la existencia en el mundo.
Bibliografía

Pardo, J.(2004) Simbólica latinoamericana. Pontificia Universidad Javeriana,

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