TEMA 1.

CARACTERÍSTICAS BÁSICAS DEL DESARROLLO PSICO-EVOLUTIVO DE

LOS NIÑOS Y NIÑAS DE LOS SEIS A LOS DOCE AÑOS. ASPECTOS COGNITIVOS,
MOTRICES, AFECTIVOS Y SOCIALES. IMPLICACIONES EN EL DESARROLLO DEL
PROCESO EDUCATIVO Y DE ENSEÑANZA-APRENDIZAJE.

1. INTRODUCCIÓN

El desarrollo infantil es un proceso que origina transformaciones y cambios de

manera paulatina, no solo en el cuerpo, sino también a nivel cognitivo y emocional. Se trata,
por tanto, de un proceso global de cambios, influenciado por su contexto social y cultural, a
través del cual, los niños son capaces de alcanzar niveles más complejos de movimiento,
pensamiento y sentimiento, estando todos ellos relacionados entre sí.

Con el objetivo de favorecer el desarrollo de los objetivos generales de la etapa, todo

maestro debe disponer de una serie de conocimientos acerca de la psicología evolutiva en
las edades que comprenden la educación primaria. Solo así se podrá llevar a cabo una
acción educativa que promueva un desarrollo personal adecuado en cada momento.

1.1. Normativa legal.

Antes de comenzar con su desarrollo, es preciso indicar la legislación vigente sobre

la que se sustenta el tema:

• Constitución Española de 1978, la cual recoge en su artículo 27 el derecho a la

educación, estipulando que será obligatoria y gratuita la educación básica.

• La Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación (LOE), modificada por la

Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre (LOMCE), para la mejora de la calidad
educativa, puesto que es la ley educativa que rige el funcionamiento de todo el
sistema educativo español, además de establecer entre sus fines el pleno
desarrollo de la personalidad y de las capacidades de los alumnos.

• La Ley 6/2008, de 26 de diciembre, de Educación de Cantabria, ya que regula el

sistema educativo de Cantabria y concede mucha importancia a la formación de
ciudadanos que adquieran y desarrollen las capacidades, conocimientos,
competencias, habilidades, estrategias y valores necesarios para desenvolverse
adecuadamente en una sociedad globalizada y en constante cambio
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 • El Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo
básico de la Educación Primaria y sitúa como finalidad de la Educación Primaria
la formación integral de los alumnos para contribuir al pleno desarrollo de la
personalidad.

• El Decreto 27/2014, de 5 de junio, que establece el currículo de Educación

Primaria en la Comunidad Autónoma de Cantabria, modificado por el Decreto
18/2016, de 7 de abril, teniendo en cuenta las características psicoevolutivas de
los alumnos, establece los contenidos para cada curso de la etapa.

2. CARACTERÍSTICAS BÁSICAS DEL DESARROLLO PSICOEVOLUTIVO DE

LOS NIÑOS Y NIÑAS DE LOS SEIS A LOS DOCE AÑOS.

Antes de abordar las características, es pertinente realizar algunas aclaraciones

conceptuales con el término “desarrollo”.

2.1. Concepto de desarrollo.

Se trata de un conjunto de cambios tanto en el pensamiento, como a nivel físico y

psíquico, que se producen a lo largo de la vida de una persona, y que se caracteriza por
ser un proceso continuo, que atraviesa diferentes fases y que se construye a través de la
interacción con el medio. Se plantea, por tanto, como un proceso:

 Dinámico: Está basado en la interacción con el medio.

 Adaptativo: El niño va modificando su comportamiento adaptándose al entorno.

 Global: Ocurre por la interacción tanto de factores genéticos como ambientales.

 Continuo: Se desarrolla como una sucesión de formas de actuar cada vez más
complejas.

 No uniforme: No ocurre en todos los niños del mismo modo y a la misma edad.
De aquí, la importancia de la atención a la diversidad de nuestros alumnos.

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 2.2. Características básicas del desarrollo psicoevolutivo de los niños y niñas
de los seis a los doce años.

El desarrollo en estas edades está marcado principalmente por la formación de las

estructuras neuronales y el gran avance psicomotor, perceptivo e intelectual que se
produce. Dicho desarrollo cuenta con ciertas características comunes:

a) Adquisición de autonomía progresiva; el niño cada vez es más autónomo y

depende menos de los adultos que le rodean.

b) Mayor autonomía en el movimiento, tanto a nivel manipulativo como de

desplazamiento.

c) Desarrollo del lenguaje, verbal, matemático, artístico… que van a facilitar las
posibilidades de socialización.

d) Creciente capacidad de abstracción que le va a permitir disociar las cualidades

de hechos y objetos y establecer así relaciones.

e) Se afianza la curiosidad intelectual.

f) Se produce un mayor interés por la observación y explicación más objetiva

de los fenómenos que le rodean.

Este desarrollo que lleva al niño/a desde niveles de inmadurez a otros más
avanzados y maduros constituye un desarrollo global en sus diferentes dimensiones:
sensoriales, cognitivas, físicas, socio-afectivas… (Marchesi, 2000).

3. ASPECTOS COGNITIVOS, MOTRICES, AFECTIVOS Y SOCIALES DE LOS

NIÑOS Y NIÑAS DE LOS SEIS A LOS DOCE AÑOS.

Los tres ámbitos que vamos a desarrollar por separado en este apartado están
relacionados entre sí y son indivisibles dentro del conjunto de la persona, por lo que
debemos contemplarlos desde un punto de vista global e interdependiente.

3.1. Aspectos cognitivos

La teoría de Piaget es útil para conocer los aspectos cognitivos ya que describe los
estadios de desarrollo cognitivo desde la infancia hasta la adolescencia. Piaget

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descompone el desarrollo cognitivo en una serie de estadios o fases que todo sujeto debía
superar para completar su desarrollo cognitivo:

 Estadio sensorio motor (de 0 a 2 años).

 Estadio preoperacional (de 2 a 6-7 años).

 Estadio de operaciones concretas (de 7 a 11-12 años).

 Estadio de operaciones formales (de 11-12 años en adelante).

Como vemos, la etapa de operaciones concretas abarca prácticamente toda la etapa

primaria y es, según Piaget, en la que el individuo alcanza el dominio cognitivo. En este
período aparece el pensamiento operacional, es decir, que el niño es capaz de representar
mentalmente una acción que obedece a ciertas reglas de organización.

Además, debemos tener en cuenta dos aspectos clave para el desarrollo cognitivo a
lo largo de esta etapa:

- Se origina un gran desarrollo de la inteligencia, entendida en el sentido clásico,

o de las inteligencias múltiples a las que hace referencia Howard Gardner (2003),
quien defiende que no existe una inteligencia única en el ser humano, sino una
diversidad de inteligencias que marcan las potencialidades de cada individuo.

- Se afianza la creatividad, definida por el educador y experto en este ámbito, Ken

Robinson, como el proceso de generar ideas originales con valor. Coincide con
Gardner en la necesidad de tener en cuenta la diversidad de inteligencias.

Una vez situadas esta serie de características generales a nivel cognitivo, es preciso
señalar las que son propias de los diferentes niveles de la etapa primaria:

• Primer nivel (6-8 años):

- Comienza a utilizarse la lógica concreta de forma gradual.

- El pensamiento es intuitivo y concreto

- La memoria a corto plazo es bastante limitada.

- La capacidad de atención se desarrolla, siendo capaz de centrarla en

características relevantes.

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 • Segundo nivel (8-10 años):

- Se consolida el pensamiento lógico-concreto, el cual también capta

transformaciones.

- Es capaz de realizar análisis y síntesis de datos concretos.

- Sus explicaciones son cada vez más racionales

- Se desarrolla significativamente la memoria.

• Tercer nivel (10-12 años):

- Se consolidan los conocimientos y habilidades adquiridos en niveles anteriores,

produciéndose un gran desarrollo del lenguaje y una automatización de la
lectoescritura.

- El pensamiento se hace más sistemático, ordenado y flexible.

- El desarrollo de las capacidades de análisis y síntesis les permite extraer los

aspectos más importantes de fenómenos y objetos, lo que posibilita la transición
hacia el pensamiento abstracto.

- Se desarrollan estrategias y actividades de aprendizaje autorregulado.

3.2. Aspectos motrices.

Aunque los cambios no sean tan rápidos y llamativos como en etapas anteriores, se
producen variaciones cualitativas relacionadas con el movimiento, como la agilidad, la
flexibilidad, la precisión, la resistencia o el equilibrio.

El desarrollo motriz se basa en tres leyes fundamentales:

- Ley céfalo-caudal: el niño adquiere antes el control de las zonas superiores del
cuerpo (las más próximas al cerebro) que de las inferiores.

- Ley próximo-distal: se adquiere antes el control voluntario de las zonas

corporales centrales que de las periféricas.

- Ley de diferenciación progresiva: se adquiere antes el control de grandes

masas musculares (motricidad gruesa), que el de los segmentos menos

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 voluminosos (motricidad fina). Por ejemplo, el niño controla antes los
movimientos de sus brazos que los de sus dedos.

Teniendo en cuenta las leyes que rigen el desarrollo motor podemos señalar una
serie de aspectos básicos que se producen en los diferentes niveles de la siguiente manera:

• Primer nivel (6-8 años):

- Se produce una aceleración de la estatura.

- Se desarrollan las habilidades de control postural y respiratorio.

- Se consigue la independencia de los segmentos corporales.

- Se produce una consolidación de la lateralidad.

• Segundo nivel (8-10 años):

- Los segmentos corporales se desarrollan de manera proporcionada en longitud

y grosor.

- Se alcanza la maduración nerviosa, provocando que los movimientos sean más

armónicos, precisos y seguros.

- El equilibrio mejora, al igual que los niveles de resistencia, fuerza o agilidad.

- Se adquiere la percepción espacial y temporal, que facilita ciertas habilidades y

destrezas como saltos, lanzamientos, recepciones, etc.

• Tercer nivel (10-12 años):

- Existe una consolidación del desarrollo motor.

- Las habilidades motoras finas están sometidas a una continua mejora.

- Aparecen cambios hormonales y procesos característicos de la pubertad que

pueden producir ciertos desequilibrios.

- Se produce una construcción de la imagen corporal y de la identidad sexual.

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 3.3. Aspectos afectivos y sociales.

La etapa de Educación Primaria es fundamental en el desarrollo social, ya que

comienza con la escolarización obligatoria y, por tanto, la convivencia en grupo y la creación
de lazos de amistad.

En este apartado cobran especial importancia los planteamientos de Erikson (1963),

que entiende que el desarrollo del ser humano se enriquece con el ambiente, ampliando
así la teoría psicoanalítica de Freud.

Dos aspectos fundamental que se desarrollan de manera notable a lo largo de esta

etapa son los conceptos de autoconcepto y autoestima. El psicólogo Carl Rogers
entiende el autoconcepto como el conjunto de percepciones, creencias y juicios descriptivos
y valorativos que el niño tiene sobre si mismo, y la autoestima como la valoración del propio
autoconcepto, es decir, el valor que el niño da a la imagen que tiene de si mismo.

Teniendo estos elementos en cuenta, podemos pasar a concretar las características

en cada uno de los niveles de la etapa.

• Primer nivel (6-8 años):

- Persisten los rasgos propios de la Educación Infantil, tales, como el

egocentrismo, los cuales irán desapareciendo progresivamente.

- Las relaciones con compañeros son más duraderas y suelen aparecer líderes
que mantienen la cohesión del grupo.

- Pierden influencia padres y profesores, en favor de compañeros.

- El juego se centra la asignación de roles de la vida real y además, aparece el

respeto a las reglas, lo que aportará orden al juego.

• Segundo nivel (8-10 años):

- Las relaciones entre compañeros se vuelven más solidas e intensas,

conformándose pandillas.

- Los juegos son marcadamente reglados, lo que exige respeto a las normas y
cooperación social, lo que ayuda también al desarrollo moral.

- Se desarrolla un moral rígida, en la que no se toleran trampas y mentiras.

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 - En el plano emocional, se produce exigencia consigo mismo y se desarrolla una
gran sensibilidad hacia las críticas.

• Tercer nivel (10-12 años):

- Alrededor de los 10 años, el niño es consciente del mundo real y de la realidad

que le rodea, ayudado por sus vivencias y experiencias, acabando así con la
mentalidad infantil.

- Los grupos comienzan a ser mixtos y aparecen los intereses de índole sexual.

- Padres, profesores y adultos en general son juzgados de manera crítica.

- Se manifiestan algunas características propias de la pubertad.

4. IMPLICACIONES EN EL DESARROLLO DEL PROCESO EDUCATIVO Y DE

ENSEÑANZA-APRENDIZAJE.

El ejercicio de la docencia no se circunscribe únicamente al conocimiento de teorías y el

manejo de instrumentos de carácter pedagógico y didáctico, sino que implica el conocimiento del
desarrollo evolutivo de los alumnos para llevar a cabo una buena intervención educativa, abarcando
sus aspectos cognitivos, motrices, sociales y afectivos.

a) Implicaciones a nivel cognitivo:

- Es importante realizar una evaluación inicial a los alumnos para conocer las
características tanto individuales, como del grupo en su conjunto.

- Es interesante el empleo de metodologías activas, mediante las cuales los alumnos son
protagonistas de su proceso de aprendizaje, mientras que el docente dirige el proceso y
genera reflexión, hipótesis, conflictos cognitivos e interacciona de manera constante
con el alumno.

- Por tanto, se deben ofrecer a los alumnos estrategias para pensar, conocer y aprender
por sí mismos, para lo cual, el trabajo autónomo y la actividad del alumno son claves.

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- Es necesario organizar situaciones de enseñanza-aprendizaje que generen curiosidad e
inciten a los alumnos a investigar. El trabajo por proyectos resulta idóneo en este
sentido.

- Las actividades han de estar contextualizadas en situaciones reales, que favorezcan el

aprendizaje y la motivación del alumno. Una propuesta de tareas integradas desde un
enfoque competencial, como puede ser la creación de un folleto o de un programa de
radio para dar a conocer su centro son buenos ejemplos.

b) Implicaciones a nivel motriz:

- Deben estar cubiertos los prerrequisitos físicos de los aprendizajes, aunque permanezca
alguna torpeza. Si hay alumnos que carezcan de ellos, se les debe orientar hacia una
rehabilitación especializada.

- Los dos primeros niveles de la etapa constituyen el mejor momento para el desarrollo
de las destrezas básicas.

- Durante el tercer nivel, se debe ofrecer al alumno la oportunidad de desarrollar

habilidades y destrezas especificas, que requieran de una eficiencia en la realización de
movimientos y que resulten de la combinación de las destrezas básicas.

- Es fundamental proponer tareas en la que, para su realización, se relacione el aspecto

motor con los demás aspectos de su personalidad, educando sus sensaciones y
percepciones que le posibiliten la adquisición de futuros aprendizajes.

c) Implicaciones a nivel afectivo y social:

- La personalidad del docente y el clima del centro y del aula juegan un papel muy
importante en el desarrollo afectivo y social del alumno, por lo que se han de tener en
cuenta para que el desarrollo sea óptimo.

- El aprendizaje cooperativo contribuye también a crear una atmósfera que facilite el

diálogo, donde el alumnado se puede sentir a gusto para preguntar, intervenir y debatir,
minimizando las amenazas hacia el autoconcepto y autoestima.

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 - Se debe implicar a la familia y al propio alumno en todo lo referente a la vida del centro
y a su proceso de aprendizaje, incluida la evaluación. Compartir con la familia unas líneas
de actuación comunes dota de coherencia y efectividad al proceso de enseñanza-
aprendizaje.

- Puesto que la autonomía moral se desarrolla a lo largo de la etapa primaria, en un

espacio de convivencia como la escuela, se deben favorecer las actitudes de
cooperación, tolerancia, resolución dialogada de conflictos y respeto a la
diversidad. El aprendizaje servicio (ApS) es una metodología que puede ayudar
a promover estas actitudes.

5. CONCLUSIÓN.

Las administraciones educativas establecen los objetivos de la etapa y diseñan el currículo

prescriptivo atendiendo a las característica psico-evolutivas de los alumnos y a los aspectos
cognitivos, motrices, afectivos y sociales que hemos desarrollado a lo largo del tema. Del mismo
modo, la psicología evolutiva constituye una fuente valiosa de información para cualquier docente,
pues permite adecuar los contenidos, la metodología, las actividades y el resto de elementos
curriculares a las características y con las necesidades y posibilidades educativas que cada edad
presenta.

En definitiva, debemos tener en cuenta que, cada persona, cada niño es, aún admitiendo las
pautas evolutivas propias de la edad, un ser individual al que debemos conocer en su interacción
educativa de una forma directa y personal para poder llevar a cabo una enseñanza verdaderamente
personalizada.

6. BIBLIOGRAFIA.

- ERIKSON, E. (1963): Infancia y sociedad. Nueva York: Norton. Este libro combina el
psicoanálisis clínico con el nuevo enfoque antropológico cultural. Esclarece el
significado social de la niñez y de las relaciones entre la educación del niño y la cultura.

- PALACIOS, J., MARCHESI, A. Y COLL, C. (2004): Desarrollo Psicológico y Educación.

Madrid: Alianza Editorial. Se presentan los avances más importantes conseguidos

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 durante las últimas décadas en la comprensión de los procesos psicológicos implicados
en la enseñanza y el aprendizaje escolar.

- PIAGET, J., INHELDER, B. (1969): Psicología del niño. Madrid: Morata. El autor ofrece
aquí una presentación definitiva de la psicología evolutiva que elaboró durante
décadas. Se trata de un soberbio sumario de su psicología del niño y la mejor de las
introducciones a su estudio.

7. NORMATIVA LEGAL.

- Constitución Española de 1978.

- Ley 6/2008, de 26 de diciembre, de Educación de Cantabria.

- Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, modificada por la Ley Orgánica

8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa.

- Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de

la Educación Primaria.

- Decreto 27/2015, de 5 de junio, que establece el currículo de Educación Primaria en la

Comunidad Autónoma de Cantabria, modificado por el Decreto 18/2016, de 7 de abril.

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