Professional Documents
Culture Documents
Dentro de las NEE más frecuentes en enseñanza pre-básica y que reciben apoyo
de fonoaudiólogos, se encuentra el trastorno específico de lenguaje (TEL), con
una prevalencia de un 72% dentro de las necesidades educativas especiales de
carácter transitorio (CONADEE, 2014), además, es una de las necesidades
educativas más estudiadas, respecto a la relación pura entre el lenguaje y el
aprendizaje. El trastorno específico de lenguaje es un trastorno del desarrollo del
lenguaje, caracterizado por déficit en la morfología comprensiva y/o expresiva, la
sintaxis y el vocabulario, en presencia de habilidades cognitivas, sensoriales y
motoras normales (Leonard, 2014).
Los niños con dificultades de lenguaje, a menudo tienen dificultades en la
alfabetización (Gosse, Hoffman & Invernizzi, 2012), el logro de objetivos
académicos y la socialización a lo largo de sus años escolares (Glover,
McCormack & Smith- Tamaray, 2015).
Es por esto, que resulta importante hacer una revisión de cada una de las
dimensiones del lenguaje y su impacto en proceso educativo de los estudiantes:
Desempeño discursivo
Los déficit en el discurso narrativo son predictores de dificultades en la adquisición
de la lectura y escritura (Wellman, Lewis, Freebairn, Avrich, Hansen, & Stein, 2011;
Glover, McCormack & Smith-Tamaray, 2015), comprensión lectora (Coloma,
2013b) y rendimiento académico (Acosta, Ramírez, & Hernández, 2015). Por
ejemplo, los estudiantes con Trastorno específico de lenguaje, evidencian
dificultades en la estructuración del discurso narrativo oral (Bellon-Harn, Byers, &
Lappi, 2014; Smith-Lock, Leitão, Prior, & Nickels, 2015), evidenciando en
resultados significativamente inferiores respecto a grupos controles (Reuterskiölds,
Hansson & Sahlen, 2011; Coloma, 2013a). Los niños con TEL presentan
dificultades en el procesamiento narrativo global y en la organización y aprendizaje
de los diferentes elementos que integran la superestructura narrativa (Acosta,
Ramírez, & Hernández, 2015).
Es por esto, que en base a las revisiones de la relación entre el discurso narrativo
y el proceso de escolarización y alfabetización de los estudiantes, el discurso
puede ser foco de los apoyos entregados en contextos educativos.
Según un estudio realizado por Snowling, Duff, Nash, & Hulme (2016), no todos
los niños con TEL experimentarán dificultades en el aprendizaje de la lectura y
estructura, sin embargo, aquellos que al iniciar el proceso de alfabetización
continúa con TEL pueden enfrentarse a barreras en el proceso, en comparación a
estudiantes que fueron dados de alta en la etapa preescolar. En general,
dependiendo de las características del Trastorno específico de lenguaje que
presente un estudiante, se generarán diferentes Necesidades educativas y
barreras para afrontar el proceso educativo. Es por esto que resulta fundamental
crear respuestas educativas que permitan disminuir las barreras de aprendizaje en
etapas tempranas, para que los estudiantes cuenten con las habilidades
necesarias para enfrentar el proceso de escolarización.
Desempeño a nivel pragmático
Las interacciones efectivas entre los docentes con los estudiantes y entre los
estudiantes, es un elemento clave para el aprendizaje, según lo planteado por
Jauregi (2013), en grupos de aprendizaje, en los que había más comunicación, es
decir, los estudiantes hablaban más y durante más tiempo, profundizaban más sobre los
temas y se detectaron mayor cantidad de secuencias de negociación.