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RITUAL DEL MATRIMONIO II ED.

TÍPICA
Estudio estructural – Lizwaun Martínez Guerra

CAPÍTULO I
CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO DENTRO DE LA MISA
En los días en que se permiten las misa rituales, se celebra la Misa por los esposos con las lecturas propias;
cuando ocurre unos de los días marcados en la tabla de los días litúrgicos con los números 1-4, se celebra la
Misa del Día, pero manteniendo en ella la bendición nupcial y , si se juzga oportuno, también la formula propia
de la bendición final; cuando la misa, en la que se celebra el Matrimonio, es la del domingo y en ella participa la
comunidad parroquial, se celebra la Misa del día, incluso en los domingos del tiempo de Navidad y en los
domingos del tiempo ordinario durante el año.
RITOS INICIALES

Primer modo A la hora convenida, el sacerdote revestido completamente (alba, estola y casulla del color de la Misa) se dirige
a la puerta de la Iglesia, recibe a los novios, los saluda afablemente y les expresa que la Iglesia comparte con
ellos su alegría. Terminado esto, se hace la procesión hacia el altar (pueden acompañar honoríficamente por lo
menos los padres y dos testigos). Mientras se entona un canto, y al llegar al presbiterio el sacerdote saluda al
altar y lo venera.
Segundo modo A la hora señalada, el sacerdote revestido completamente se acerca al lugar preparado para los novios o a la
sede. Cuando los novios hayan llegado a su lugar, el sacerdote los recibe y los saluda afablemente y les expresa
que la Iglesia comparte con ellos su alegría y mientras se entona el canto de entrada el sacerdote saluda al altar
y lo venera.
Saludo Hecha la señal de la cruz, saluda a los presentes con unas de las formulas del Misal Romano. Después se dirige
brevemente a los contrayentes y a los presentes con el fin de disponerlos internamente para la celebración del
Matrimonio.

Acto penitencial Se omite.


Gloria Se canta o se recita cuando se prescribe.
Oración colecta Esta colecta no se emplea juntamente con la primera oración de bendición nupcial (nn. 92 y 142).
LITURGIA DE LA PALABRA
Lecturas y homilía La liturgia de la Palabra se desarrolla en la forma acostumbra. Elíjase, sim embargo, una lectura que trate
explícitamente del Matrimonio. Y cuando se celebra la Misa ritual, pueden tomarse una de las lecturas que en
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el Leccionario se propone para esa Misa, a no ser que ocurra un día de los marcados en la tabla de los días
litúrgicos con los números 1-4. Después, el ministro partiendo del texto sagrado, explica, en la homilía el misterio
del Matrimonio cristiano, la dignidad del amor conyugal, la gracia del sacramento y los deberes de los cónyuges;
teniendo, sin embargo, las diferentes circunstancias de las personas.
LITURGIA DEL SACRAMENTO
Si se celebra dos o más Matrimonios simultáneamente, debe hacerse siempre en singular para cada matrimonio:
el interrogatorio antes del consentimiento; el consentimiento mismo; la aceptación del consentimiento. Lo demás
sin excluir la bendición nupcial, se dirá en plural una sola vez para todos.
Monición Estando todos de pie, incluso los contrayentes, con los testigos colocados a uno y otro lado, el sacerdote se
dirige directamente a los contrayentes para recordarles las responsabilidades del Matrimonio. Con lo cual
prosigue a preguntarles acerca de su determinación y propósito.
Interrogatorio antes del El sacerdote interroga a los contrayentes acerca de la libertad, la fidelidad, la aceptación y la educación de los
consentimiento hijos.
Consentimiento El sacerdote invita a los contrayentes a expresar su consentimiento; no obstante, si por razones pastorales
pareciere más oportuno, el sacerdote puede pedir el consentimiento de los contrayentes en forma interrogativa.
Estos se dan la mano derecha y el novio primeramente expresa su consentimiento, y después de él la novia
(existen seis fórmulas de las cuales se usa la que parezca más oportuna al sacerdote).
Ratificación del El sacerdote que recibe el consentimiento lo confirma: lo que Dios ha unido no lo separe el hombre.
consentimiento
Bendición y entrega de los El sacerdote bendice los anillos, los cuales se entregan uno al otro como signo de amor y de fidelidad. Si se
anillos cree oportuno, el sacerdote asperja los anillos y los entrega a los esposos.
Entrega de los anillos El esposo introduce en el dedo anular de la esposa el anillo destinado a ella y si se cree oportuno, dice: N.,
recibe este anillo en señal de mi amor y de mi fidelidad a ti. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo. De igual modo la esposa introduce en el dedo anular del esposo el anillo destinado a él, y si se cree
oportuno repite las mismas palabras que ella ha dicho.
Oración universal Se hace de forma acostumbrada: van dirigidas principalmente a los nuevos esposos, y a todas las familias
cristianas.
Credo Se dice si las rubricas así lo prescriben.

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LITURGIA EUCARÍSTICA

En la preparación de los dones, el esposo y la esposa si se juzga oportuno pueden llevar al altar el pan y el vino;
además, en la plegaria Eucarística se hace la conmemoración de los esposos, empleando la fórmula que se
propone.
Oración sobre las ofrendas Se le ofrecen al Señor los dones en virtud de la alianza matrimonial donde Dios es el autor de dicha unión.
Prefacios y plegarias Ver p. 208 ss.
Eucarísticas
Bendición nupcial Dicho el Padrenuestro y omitido el líbranos, el sacerdote de pie vuelto hacia los esposos, invoca sobre ellos la
bendición de Dios; esta bendición nunca se omite.
Comunión Si uno de los dos esposos o ambos no comulgan, en el invitatorio se omiten las palabras que van en paréntesis;
en el último párrafo de la oración, las palabras que está en paréntesis se puede omitir cuando las circunstancias
parezcan aconsejarlo (por ejemplo, si los esposo son de edad avanzada); los esposos se acercan al altar o, si
se parece mejor, permanecen en su lugar y se arrodillan; los esposos, sus padres, los testigos y familiares
pueden recibir la comunión bajo las dos especies.
Oración después de comunión Se enfatiza para que quienes han participado de la Mesa del Señor y se han unido en matrimonio permanezcan
fieles al Señor.
Rito de conclusión El sacerdote bendice a los esposos y al pueblo solemnemente; posteriormente cuando haya concluido la Misa
los testigos y el sacerdote subscriben el acta de Matrimonio. La firma puede hacerse en la sacristía o delante
del pueblo, pero no se haga sobre el altar.
CAPÍTULO II
CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO FUERA DE LA MISA
Cuando por necesidad o porque se crea conveniente no se celebra la Eucaristía, se emplea este ritual. Este
ritual también lo emplea el diácono cuando presencia el Matrimonio.

RITOS INICIALES
Primer modo A la hora convenida, el sacerdote revestido con alba o con sobrepelliz y estola blanca o festiva o también de
capa pluvial (o el diácono de dalmática) se dirige a la puerta de la Iglesia, recibe a los novios, los saluda
afablemente y les expresa que la Iglesia comparte con ellos su alegría. Terminado esto, se hace la procesión
hacia el altar (pueden acompañar honoríficamente por lo menos los padres y dos testigos). Mientras se entona
un canto, y al llegar al presbiterio el sacerdote saluda al altar y lo venera. Pero si es el diacono no saluda con el
beso al altar, simplemente venera al altar.

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Segundo modo A la hora señalada, el sacerdote revestido con alba o con sobrepelliz y estola blanca o festiva o también de
capa pluvial (o el diácono de dalmática) se acerca al lugar preparado para los novios o a la sede. Cuando los
novios hayan llegado a su lugar, el sacerdote los recibe y los saluda afablemente y les expresa que la Iglesia
comparte con ellos su alegría y mientras se entona el canto de entrada el sacerdote saluda al altar y lo venera.
Pero si es el diacono no saluda con el beso al altar, simplemente venera al altar.
Saludo Hace la señal de la cruz e inmediatamente saluda a los presentes. Después habla brevemente a los novios y a
los presentes con el fin de disponerlos internamente a la celebración del Matrimonio. Termina con la oración
colecta.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lecturas y homilía Se hace de la manera acostumbrada (p. 125ss). Se ha de elegir por lo menos una lectura que trate directamente
del Matrimonio. Después, el ministro partiendo del texto sagrado, explica, en la homilía el misterio del Matrimonio
cristiano, la dignidad del amor conyugal, la gracia del sacramento y los deberes de los cónyuges; teniendo, sin
embargo, las diferentes circunstancias de las personas.
CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO
Si se celebran dos o más Matrimonios simultáneamente, debe hacerse siempre en singular para cada
matrimonio: el interrogatorio antes del consentimiento; el consentimiento mismo; la aceptación del
consentimiento. Lo demás sin excluir la bendición nupcial, se dirá en plural una sola vez para todos.
Monición Estando todos de pie, incluso los contrayentes, con los testigos colocados a uno y otro lado, el sacerdote se
dirige directamente a los contrayentes para recordarles las responsabilidades del Matrimonio. Con lo cual
prosigue a preguntarles acerca de su determinación y propósito.
Interrogatorio antes del El que preside interroga a los contrayentes acerca de la libertad, la fidelidad, la aceptación y la educación de los
consentimiento hijos.
Consentimiento El ministro invita a los contrayentes a expresar su consentimiento. Ahora bien, si por razones pastorales
pareciere más oportuno, el sacerdote puede pedir el consentimiento de los contrayentes en forma interrogativa.
Estos se dan la mano derecha y el novio primeramente expresa su consentimiento, y después de él la novia
(existen seis fórmulas de las cuales se usa la que parezca más oportuna al ministro).
Ratificación del Confirmación del consentimiento por el ministro: lo que Dios ha unido no lo separe el hombre.
consentimiento
Bendición y entrega de los Quien preside bendice los anillos, los cuales se entregan uno al otro como signo de amor y de fidelidad. Si se
anillos cree oportuno, el sacerdote asperja los anillos y los entrega a los esposos.
Entrega de los anillos El esposo introduce en el dedo anular de la esposa el anillo destinado a ella y si se cree oportuno, dice: N.,
recibe este anillo en señal de mi amor y de mi fidelidad a ti. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo. De igual modo la esposa introduce en el dedo anular del esposo el anillo destinado a él, y si se cree
oportuno repite las mismas palabras que la novia ha dicho.

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Oración universal En primer lugar el ministro invita a orar; siguen las peticiones la oración universal con la respuesta de los fieles,
de tal manera que concuerden con la bendición nupcial y no la duplique; si no se distribuye la sagrada comunión,
sigue el Padrenuestro; finalmente omitida la oración conclusiva, el ministro invoca la bendición de Dios sobre el
esposo y la esposa, lo que nunca se debe omitir.
Bendición nupcial Los esposos permanecen en su lugar y se arrodillan. El ministro con las manos juntas inicia la bendición y luego
con las manos extendidas prosigue con la oración sobre los cónyuges (los demás oran en silencio) enfatizando
en la unión de la alianza matrimonial, el amor mutuo, la educación de los hijos
Sagrada comunión Si se distribuye, terminada la bendición nupcial, el ministro se dirige al lugar donde se reserva la Eucaristía, toma
el copón con el Cuerpo del Señor, lo coloca sobre el altar y hace genuflexión. Inmediatamente introduce el Padre
nuestro. Después si se juzga oportuno el ministro invita a los fieles a darse la paz. Se distribuye como de
costumbre.
CONCLUSION DE LA CELEBRACIÓN
Bendición de los esposos y del pueblo, ya sea con la formula sencilla: la bendición de Dios todopoderoso, ya
sea con una de las fórmulas solemnes (p. 50ss). Terminada la celebración los testigos y el sacerdote subscriben
el acta de Matrimonio. La firma puede hacerse en la sacristía o delante del pueblo, pero no se haga sobre el
altar.
CAPÍTULO III
CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO ANTE UN DELEGADO LAICO
- El laico que tiene facultad recibida del Obispo diocesano para ejercer el oficio de asistente en la
celebración del Matrimonio, debe ser solícito tanto, de la instrucción catequética de los
contrayentes, como de su preparación espiritual. Debe encargarse de organizar todo, tanto lo
referente a los preceptos del derecho, como a la acción litúrgica, a las oraciones, a las lecturas, a
la participación de la comunidad, de tal manera que el rito del Matrimonio se celebre de manera
recta, consciente y fructuosa.
- El laico asistente no sólo ejerce la función de recibir el consentimiento de los contrayentes, sino
que modera toda la celebración del Matrimonio. La celebración se hace de ordinario en la Iglesia.
el asistente usará una vestidura digna que no desdiga este ministerio, o la que esté aprobada por
el Obispo.
RITOS INICIALES
Reunido el pueblo, y estando todo preparado, el delegado, acompañado de los ministros, recibe a los
contrayentes y los saluda afablemente. Enseguida dice: Bendito sea Dios, Padre de todo consuelo,
quien ha tenido misericordia de nosotros. Después el delegado habla a los contrayentes y a los
presentes para disponerlos internamente a la celebración del Matrimonio.
LITURGIA DE LA PALABRA

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Lecturas El lector o uno de los participantes, o el mismo delegado lee uno de los textos que se encuentran en
la p. 125 ss (se puede hace una o dos lecturas). Se ha de elegir una lectura que trate explícitamente
sobre el Matrimonio.
Evangelio Se introduce así: escuchen, ahora, hermanos, las palabras del santo Evangelio según san N.
Homilía Conviene que el delegado haga una exhortación o lea una homilía preparada por el Obispo o por el
párroco.
CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO
Cuando se celebran dos o más Matrimonios simultáneamente, debe hacerse siempre en singular para cada
matrimonio: el interrogatorio antes del consentimiento; el consentimiento mismo; la aceptación del
consentimiento. Lo demás sin excluir la bendición nupcial, se dirá en plural una sola vez para todos.
Terminada la exhortación estando todos de pie, incluso los contrayentes, con los testigos colocados a uno y otro
lado, el delegado se dirige directamente a los contrayentes para recordarles las responsabilidades del
Matrimonio. Con lo cual prosigue a preguntarles acerca de su determinación y propósito.
Interrogatorio antes del El delegado les interroga acerca de la libertad, la fidelidad, la aceptación y la educación de los hijos.
consentimiento
Consentimiento El que preside invita a los contrayentes a que expresen su consentimiento. Cada uno de los contrayentes
responde por separado. Si por razones pastorales pareciere más oportuno, el sacerdote puede pedir el
consentimiento de los contrayentes en forma interrogativa (existen seis fórmulas diferentes).
Ratificación del Luego el delegado que recibe el consentimiento lo confirma: lo que Dios ha unido no lo separe el hombre.
consentimiento
Aclamación después del El delegado invita a los presente a alabar a Dios: bendigamos al Señor o demos gracias a Dios.
consentimiento
Bendición y entrega de los El delegado bendice los anillos en señal de amor y de fidelidad. Si se cree oportuno el delegado asperja los
anillos anillos y los entre a los esposos.
Entrega de los anillos El esposo introduce en el dedo anular de la esposa el anillo destinado a ella y si se cree oportuno, dice: N.,
recibe este anillo en señal de mi amor y de mi fidelidad a ti. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo. De igual modo la esposa introduce en el dedo anular del esposo el anillo destinado a él, y si se cree
oportuno repite las mismas palabras que ella ha dicho.
Oración universal Van dirigidas a Dios por la salud y prosperidad de los esposos, por la alianza de los mismos, por el amor perfecto
y fecundo de ellos y para que den testimonio de buenos cristianos.
Bendición nupcial El delegado con las manos juntas dice la bendición sobre los esposos, quienes están de rodilla, en la que
participa todo el pueblo con la respuesta: bendito seas por siempre Señor.
Sagrada comunión Si no se distribuye la sagrada comunión se concluye la celebración, tal como se encuentra en la p. 102. Si se
distribuye, terminada la bendición nupcial, el ministro se dirige al lugar donde se reserva la Eucaristía, toma el
copón con el Cuerpo del Señor, lo coloca sobre el altar y hace genuflexión. Inmediatamente introduce el Padre
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nuestro. Después si se juzga oportuno el ministro invita a los fieles a darse la paz. Se distribuye como de
costumbre.
CONCLUSION DE LA CELEBRACIÓN
El delegado termina la celebración santiguándose y concluye: Dios nos colme con el gozo y la alegría de ser creyentes…además se
recomienda terminar la celebración con un canto adecuado. Por último, terminada la celebración los testigos y el sacerdote subscriben
el acta de Matrimonio. La firma puede hacerse en la sacristía o delante del pueblo, pero no se haga sobre el altar.

CAPÍTULO IV
CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO ENTRE CONTRAYENTE CATÓLICO Y CONTRAYENTE
CATECÚMENO O NO CRISTIANO
- La celebración se hace ya sea en la Iglesia, ya sea en otro lugar conveniente.
- La celebración que se emplea aquí la debe emplear el sacerdote o el diacono que hayan recibido
del Ordinario del lugar o del párroco la delegación para asistir y bendecir en nombre de la Iglesia
los Matrimonios que se celebren.
- Si el Matrimonio según la norma que se habla en el n 25 ante un asiste laico delegado para esto
por el Obispo diocesano, se empleará el mismo ritual aquí descrito, cambiando lo que sea
necesario en cuanto a la bendición nupcial.
- El asiste usará una vestidura digna de este ministerio, o la designa por el Obispo.
RITOS DE ACOGIDA
- A la hora convenida, quien preside, si es sacerdote revestido con alba y estola blanca o festiva o también de capa pluvial
(o el diácono de dalmática) se dirige a la puerta de la Iglesia, recibe a los novios, los saluda afablemente y les expresa que
la Iglesia comparte con ellos su alegría. Terminado esto, el ministro, los novios y demás acompañante se dirigen a sus
puestos.
- Si las circunstancias lo aconsejan, omitido el rito de acogida el matrimonio se inicia con la liturgia de la Palabra.
LITURGIA DE LA PALABRA
Lecturas Puede tenerse una o dos o más lecturas. Pero si las circunstancias muestran que es más oportuno puede
hacerse sólo una lectura. Elíjase siempre una lectura que trate explícitamente sobre el Matrimonio.
Evangelio En ausencia del sacerdote o del diacono el Evangelio se introduce así: escuchen, ahora, hermanos, las palabras
del santo Evangelio según san N.
Homilía Se parte de las lecturas, adaptándolas a la situación y a las condiciones de los contrayentes. Si es un delegado
laico conviene que el delegado haga una exhortación o lea una homilía preparada por el Obispo o por el párroco.

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CELEBRACIÓN DEL MATRIMONIO
Terminada la exhortación estando todos de pie, incluso los contrayentes, con los testigos colocados a uno y otro
lado, el delegado se dirige directamente a los contrayentes para recordarles las responsabilidades del
Matrimonio. Con lo cual prosigue a preguntarles acerca de su determinación y propósito.
Interrogatorio antes del El delegado les interroga acerca de la libertad, la fidelidad, la aceptación y la educación de los hijos.
consentimiento
Consentimiento El que preside invita a los contrayentes a que expresen su consentimiento. Cada uno de los contrayentes
responde por separado. Si por razones pastorales pareciere más oportuno, el sacerdote puede pedir el
consentimiento de los contrayentes en forma interrogativa (existen seis fórmulas diferentes).
Ratificación del El presidente confirma el consentimiento: lo que Dios ha unido no lo separe el hombre.
consentimiento
Bendición y entrega de los Si las circunstancias lo aconsejan, se puede omitir la bendición y entrega de los anillos, pero si se conservan el
anillos sacerdote o el diácono deben hacer la bendición; y si es un laico delegado hace la misma bendición, pero omite
la señal de la cruz. Si se cree oportuno el delegado asperja los anillos y los entre a los esposos.
Entrega de los anillos Entrega de los anillos El esposo introduce en el dedo anular de la esposa el anillo destinado a ella y si se
cree oportuno, dice: N., recibe este anillo en señal de mi amor y de mi fidelidad a ti. En el nombre del Padre, y
del Hijo, y del Espíritu Santo. De igual modo la esposa introduce en el dedo anular del esposo el anillo destinado
a él, y si se cree oportuno repite las mismas palabras que ella ha dicho.
Oración universal Por los nuevos esposo, por sus familiares y amigos, por los jóvenes, por las familias del mundo, por los difuntos,
etc. Se prosigue con el Padre nuestro.
Bendición nupcial Habitualmente se dice la oración nupcial sobre los esposos. Pero si las circunstancias lo aconsejan, puede
suprimirse y en vez de ella se dice la oración que se encuentra en el n. 230. Los esposos, si parece oportuno,
se arrodillan, en su lugar.
Sagrada comunión
CONCLUSION DE LA CELEBRACIÓN
Si es un sacerdote o diácono concluye con la bendición, y si es un delegado laico concluye santiguándose y dice
una oración final.
CAPÍTULO V

LECCIONARIO (LECTURAS BÍBLICAS PARA ESCOGER) pp. 125-172.


Antiguo Testamento
Nuevo Testamento

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Salmos de Respuesta
Versos para antes del
Evangelio
Evangelios
APENDICES pp. 173-174
Apéndice I Bendiciones de los prometidos, pp. 175-184.
Apéndice II Bendición de los cónyuges dentro de la Misa con ocasión de aniversario del Matrimonio, pp. 185-194.
ORDINARIO DE LA MISA
Ritos iniciales pp. 195-201.
Saludo pp. 196-199.
Acto penitencial Se omite, p. 199.
Gloria Se dice o se canta, pp. 199-200.
Oración colecta pp. 200-201.
Liturgia de la palabra p. 201.
Liturgia del sacramento p. 201.
Oración de los fieles p. 202.
Credo pp. 202-204.
Liturgia Eucarística pp. 204-207.
Prefacio I p. 208.
Prefacio II p. 209.
Prefacio III p. 210.
PLEGARIAS EUCARÍSTICAS
Plegaria Eucarística I pp. 213-223.
Plegaria Eucarística II pp. 224-230.
Plegaria Eucarística III pp. 231-237.
Plegaria Eucarística IV pp. 238-245.
Rito de comunión pp. 246-253.
Rito de conclusión p. 254.

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