FIRMES E INCONMOVIBLES

(1 Corintios 15:58)

Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor
siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano. 1 Corintios 15:58.

INTRODUCCIÓN

La palabra de Dios nos anima a enfrentar la vida cristiana como una batalla,

En la que se requiere que seamos firmes constantes e inconmovibles, manteniendo un

crecimiento espiritual constante, sin perder de vista, que todo lo que hacemos por la obra es
tomado en cuenta por el Señor.

Jesús Nos animó a escudriñar en la escritura para comprender estas verdades de forma personal y
profunda.

1.-Firmes e inconmovibles.
Mientras caminamos en la vida cristiana, diversas situaciones pueden hacer tambalear nuestra fe.

El Apóstol Pablo nos exhorta a mantenernos firmes.

Tenemos una posición que defender, hemos sido comisionados para pelear, y aunque la lucha
arriesgue huir, no es una opción, siempre mantendremos en alto nuestra bandera, aunque nos
cueste nuestro último aliento.

La obra de Dios requiere de hombres y mujeres que se enfrenten cara a cara con el
infierno,
Esto requiere firmeza en lo mental y en lo espiritual.

Es una lucha que tendremos que enfrentar todos los días de nuestra vida.

Y en una campaña larga de nuestro caminar las emociones pueden traicionarnos,

Por lo que la palabra nos llama también a ser inconmovibles, es decir imperturbables, actuando
siempre por convicción.

2.-Progresando siempre.
Mantener nuestra posición no es suficiente, hemos sido llamados a conquistar, ganar terreno
pase lo que pase venga lo que venga, a resistir
No aguantamos nuestra posición, que aguante el enemigo, nosotros avanzamos no conformarnos
en lo que somos.

Satanás solo tiene dos opciones:

Replegarse y huir,

O sufrir las consecuencias.

En esta guerra no se toman prisioneros, sino vencer o morir es nuestra consigna.

No nos guardamos para otra pelea, entregamos todo en cada enfrentamiento.

El deseo de Dios para los creyentes es que crezcan,

El mismo otorgó dones necesarios para realizar diferentes formas de ministerio, a fin de que su
pueblo sea entrenado en todas las disciplinas necesarias para lograrlo (Efesios 4:11-13).

En lo personal, cada cristiano tiene una batalla que pelear cada día, pero dice resiste.

Me encantaría terminar esa batalla con la solvencia que tuvo el Apóstol Pablo (2 Timoteo 4:7).

3.-Su trabajo no es en vano.

En una campaña tan grande como esta, de la que depende la eternidad de las personas, resulta
fácil sentir que estamos solos, como le pasó en alguna oportunidad al Profeta Elías.

Pero muchos otros están peleando en esta misma guerra, junto a nosotros o en otros frentes.

Dios tiene cuidado de cada situación operación, de la ubicación de cada unidad táctica ministerial.

El ministerio de la iglesia aquí en la tierra es extremadamente importante, debido a que Dios lo

utiliza para cambiar la eternidad de la personas.

El alcance de su ministerio puede parecerle pequeño, un grupo con poca asistencia, sus
compañeros de oficina, sus vecinos o su familia.

Pero nada en la obra de Dios es pequeño, él puede tomar cinco panes y dos peces para alimentar
a cinco mil personas (Mateo 14:13-21).
Satanás usa diferentes armas para evitar que los hijos de Dios cumplan con él y el plan y ministerio
que se les ha encomendado.

En algunas ocasiones es la pereza (Proverbios 19:24),

En otras puede ser el orgullo (Proverbios 21:4),

Para otros pueden ser las adicciones o cadenas de pecado que nos asedian (Hebreos 12:1);

Cualquiera que sea el caso, repelamos el ataque y avancemos en la obra.

La decisión más importante que tomo en su vida es Que Dios le ama, y entregó a su hijo Jesucristo
el rescate por usted (Juan 3:16).

A pesar que todos los seres humanos somos pecadores, y esto nos condenaba a la muerte eterna
(Romanos 3:23).

La consecuencia del pecado es la muerte, pero Dios le ofrece un regalo, la salvación por medio de
Jesús (Romanos 6:23).

CONCLUSIÓN

Hemos visto en la escritura que la firmeza con la que debemos enfrentar la vida cristiana, es
similar a la requerida por un soldado en batalla, avanzando en todo momento, sin tomar
descansos, ganando terreno a Satanás, cambiando la eternidad de las personas.

El desánimo y otras afecciones emocionales pueden atacarnos, pero nos consuela que todo en la
obra de Dios es valioso y tendrá una recompensa en el cielo.

Usted puede es un hijo de Dios, recibiendo a Jesús como su salvador, creyendo en su nombre
(Juan 1:12).

La forma de hacer esto, es que usd. Ha hecho de confesar sus pecados a él en oración; que el es
fiel y justo, le ha perdonado (1 Juan 1:9).