i Lea el siguiente texto en silencio.
El Padre
Un viejecito de barha blanca y larga, higa-
tes enrubiecidos por la ricotina, manta roja,
zapales de taco allo, sombrero de pita y un
ccanasfo al brazo, s¢ acercaba, s¢ alejaba y walvia
timidamente a la puerta del cuartel. Quiso
intesrogar af centinela, pero el soldado le corti
la palabra en la boea con el grito:
—jfabo de quardia!
Elsuboficial aparecié de un salta ena puerta,
‘como si hubiera estado en acecho.
Interragade con ia vista ycon un mavimiento
de la cabeea hacia arriba, el desconocida hablic
—