La Ley del Régimen Electoral General define el censo electoral como el registro que “contiene

la inscripción de quienes reúnen los requisitos para ser elector y no se hallen privados,
definitiva o temporalmente, del derecho de sufragio”. Este censo está compuesto por el de
residentes en España y el de “residentes-ausentes que viven en el extranjero”. Ningún elector
podrá figurar inscrito simultáneamente en ambos censos.

Nombre, apellidos y DNI

La inscripción en el censo electoral es obligatoria. Además del nombre y los apellidos, único
dato necesario para la identificación del elector en el acto de la votación, se debe incluir
también el número del Documento Nacional de Identidad del elector. Los ayuntamientos son
los encargados de elaborar este censo y deben inscribir de oficio a los residentes en su término
municipal.

En el caso de los españoles residentes en el extranjero, son las Oficinas Consulares de Carrera y
las Secciones Consulares de las Misiones Diplomáticas quienes se encargan de la inscripción.

Secciones territoriales

El censo electoral se ordena por secciones territoriales. A cada elector le corresponde una
única sección, ya que “nadie puede estar inscrito en varias secciones, ni varias veces en la
misma sección”, indica la ley. Ese censo electoral es permanente y su actualización es mensual,
con referencia al día primero de cada mes.

Para realizar estas actualizaciones mensuales, los Ayuntamientos tienen que enviar a las
Delegaciones Provinciales de la Oficina del Censo Electoral, hasta el penúltimo día hábil de
cada mes, todas las modificaciones del padrón que se hayan producido a lo largo del mes.
Además, en enero, los ayuntamientos deben informar de quiénes son los residentes que
cumplirán 18 años a lo largo del año y, por tanto, se incorporarán al censo. También debe
actualizarse el censo de los electores que viven en el extranjero. En este caso serán los
consulados quienes se encargarán de registrar los cambios de domicilio.

Consulta permanente
El censo podrá consultarse de “forma permanente” a través de los Ayuntamientos, los
consulados o en la propia Delegación Provincial. Los electores pueden formular reclamaciones
sobre los datos censales que dirigirán a las Delegaciones Provinciales de la Oficina del Censo
Electoral.Estas quejas deben resolverse en el plazo de cinco días.

El censo que se usará el 26 de mayo será el que se cerró el pasado 1 de diciembre, de acuerdo
con lo que marca a ley. Los ayuntamientos deben dar ocho días para que los electores
consulten el censo y comprueben si sus datos están correctamente registrados.Los interesados
podrán recurrir si sus datos son erróneas o han cambiado de domicilio.