Professional Documents
Culture Documents
DESARROLLO
Desarrollo humano. Estudio científico de los procesos del cambio y la estabilidad
durante el ciclo vital humano.
Desarrollo del ciclo vital. Concepto del desarrollo humano como proceso de toda
la vida, que puede ser estudiado científicamente.
Desarrollo físico. Proceso de crecimiento del cuerpo y el cerebro, que incluye las
pautas de cambio de las capacidades sensoriales, habilidades motrices y salud.
Desarrollo cognoscitivo. Pauta de cambio de los procesos mentales, como
aprendizaje, atención, memoria, lenguaje, pensamiento, razonamiento y
creatividad.
Desarrollo psicosocial. Pauta de cambio de emociones, personalidad y relaciones
sociales. En la teoría de las ocho etapas de Erikson, el proceso de desarrollo del
yo o el mí mismo es influido por la sociedad y la cultura.
Desarrollo psicosexual. Según la teoría freudiana, secuencia invariable de etapas
del desarrollo de la personalidad infantil, en la que la gratificación pasa de la
boca al ano y a los genitales.
Desarrollo moral. Uno de los cambios importantes en el pensamiento que
ocurren durante la niñez y la adolescencia es el desarrollo del razonamiento
moral. Lawrence Kohlberg estudió este tipo de desarrollo contando a sus
participantes historias que ilustraban complejos problemas morales. El “dilema
de Heinz” es la historia más conocida:
En Europa, una mujer estaba a punto de morir de cáncer. Un medicamento podía
salvarla: una forma de radio que un farmacéutico de la misma ciudad había
descubierto recientemente. El farmacéutico la vendía en $2,000, diez veces más
de lo que le costó elaborarla. El esposo de la mujer enferma, Heinz, le pidió a
todos sus conocidos que le prestaran el dinero, pero sólo pudo reunir la mitad
del precio. Le dijo al farmacéutico que su esposa estaba muriendo y le pidió que
se la vendiera más barata o que le permitiera pagarle después. Pero el
farmacéutico se negó. El esposo se desesperó y se introdujo en la farmacia a
robar el medicamento para su esposa (Kohlberg). A los niños y adolescentes que
escucharon esta historia se les preguntó “¿Debería el esposo haber hecho eso?
¿Por qué?”
Sobre la base de las respuestas de sus participantes a esas preguntas (en
particular a la segunda, “¿por qué?”), Kohlberg propuso que el razonamiento
moral se desarrolla en etapas, en forma muy parecida a la explicación que Piaget
dio del desarrollo cognoscitivo.
• Nivel preconvencional. Los niños preadolescentes están en lo que Kohlberg
llamó el nivel preconvencional del razonamiento moral. Tienden a interpretar la
conducta en términos de sus consecuencias concretas. Los niños menores en
este nivel basan sus juicios de la conducta “buena” y “mala” en el hecho de que
se reciba una recompensa o un castigo. Los niños algo mayores, todavía en este
nivel, guían sus elecciones morales sobre la base de lo que satisface necesidades,
en particular las suyas.
• Nivel convencional. Con la llegada de la adolescencia y el cambio al
pensamiento de las operaciones formales, se establece el escenario para avanzar
al segundo nivel del razonamiento moral: el nivel convencional. En este nivel, el
adolescente define al principio la conducta correcta como la que agrada o ayuda
a los demás y que es aprobada por ellos. Hacia la mitad de la adolescencia, se
da otro cambio hacia la consideración de varias virtudes sociales abstractas,
como ser un “buen ciudadano” y respetar la autoridad.
Ambas formas de razonamiento moral convencional requieren la habilidad para
pensar en valores abstractos como “deber” y “orden social”, considerar las
intenciones que están detrás de la conducta y ponerse en “los zapatos de la otra
persona”.
• Nivel posconvencional El tercer nivel de razonamiento moral, el nivel
posconvencional, requiere una forma aún más abstracta de pensamiento. Este
nivel se caracteriza por un énfasis en principios abstractos como la justicia, la
libertad y la igualdad. Los estándares morales personales y profundamente
arraigados se convierten en los criterios para decidir qué es lo bueno y lo malo.
El que esas decisiones correspondan a las reglas y leyes de una sociedad
particular es irrelevante. Por primera vez, las personas pueden tomar conciencia
de las discrepancias entre lo que juzgan que es moral y lo que la sociedad ha
determinado que es legal.
Las opiniones de Kohlberg han sido criticadas por varias razones. En primer
término, la investigación indica que muchas personas de nuestra sociedad,
adultos y adolescentes, nunca progresan más allá del nivel convencional de
razonamiento moral (Conger y Petersen). ¿Significa esto que esas personas son
moralmente “subdesarrolladas” como implicaría la teoría de Kohlberg?
Segundo, la teoría de Kohlberg no toma en consideración las diferencias
culturales en los valores morales (Nucci). Kohlberg puso las consideraciones de
“justicia” en el nivel más alto del razonamiento moral. Sin embargo, los
investigadores descubrieron que, en Nepal, un grupo de monjes adolescentes
budistas asignaban el mayor valor moral a aliviar el sufrimiento y mostrar
compasión, conceptos que no tienen cabida en el esquema de desarrollo moral
de Kohlberg (Huebner, Garrod y Snarey).
Tercero, la teoría de Kohlberg ha sido criticada por sexista. Kohlberg encontró
que los muchachos por lo regular obtenían calificaciones más altas que las chicas
en su prueba del desarrollo moral. De acuerdo con Carol Gilligan, esto se debe a
que los muchachos están más inclinados a basar sus juicios morales en el
concepto abstracto de justicia, mientras que las muchachas tienden a basar el
suyo más en los criterios de mostrar interés por los demás y la importancia de
mantener las relaciones personales. En opinión de Gilligan, no hay razón válida
para asumir que una de esas perspectivas es moralmente superior a la otra.
Aunque la investigación posterior ha encontrado que las diferencias de género
en el pensamiento moral tienden a disminuir en la edad adulta (L. D. Cohn),
permanecen las preocupaciones por el sesgo de género en la teoría de Kohlberg.
La investigación más reciente sobre el desarrollo moral ha avanzado en la
dirección de ampliar el énfasis de Kohlberg en los cambios en el razonamiento
moral.
Esos investigadores están interesados en los factores que influyen en las
elecciones morales en la vida diaria y en el grado en que esas elecciones
realmente se ponen en práctica. En otras palabras, quieren entender la conducta
moral tanto como el pensamiento moral (Power).
DESARROLLO MORAL SEGÚN PIAGET
ETAPA PREMORAL
De los 2 a los 6 años los niños son capaces de representar las cosas y las acciones
por medio del lenguaje, esto les permite recordar sus accione y relatar sus
intenciones para e futuro, no pueden comprender el significado de las normas
generales.
ETAPA HETERÓNOMA O DE REALISMO MORAL
Esta etapa se da entre los 5 y los 10 años. Los niños en esta edad tienden a
considerar que las reglas son impuestas por figuras de autoridad poderosas,
como podrían ser sus padres, Dios o la policía, cualquier mal acto tarde o
temprano será castigado. De los 7 a los 11 años, los niños adquieren la capacidad
de realizar operaciones mentales con los objetos que tienen delante. De aquí
surge la noción de la convencionalidad de las normas o reglas de os juegos, que
son vistas como productos de acuerdos entre os jugadores. Surgen sentimientos
morales como la honestidad necesaria para que los juegos funcionen y la justicia.
ETAPA AUTÓNOMA
A partir de los 10 años los niños ya se percatan de que las reglas son acuerdos
arbitrarios que pueden ser impugnados y modificados con el consentimiento de
las personas a las que rigen. El adolescente formula principios morales generales
y los afirma de un modo autónomo frente a las normas exteriores. El respeto a
estas últimas se realiza de un modo personal.
DESARROLLO MORAL SEGÚN GILLIGAN
Carol Gilligan señaló que el sistema de Kohlberg se preocupa principalmente por
la justicia. Con base en estudios de mujeres que se enfrentan a los dilemas de
la vida real, Gilligan argumenta que existe también una ética del cuidado. Como
ilustración, Gilligan presentó la siguiente historia a niños estadounidenses de
entre 11 y 15 años de edad:
Buscando refugio del frío, un puercoespín pidió a una familia de topos que
compartieran una cueva durante el invierno. Los topos estuvieron de acuerdo.
Pero, debido a que la cueva era pequeña, pronto se dieron cuenta de que, al
moverse, el puercoespín los rasguñaba cada vez más. Al final, pidieron al
puercoespín que se fuera. Pero el puercoespín se negó y dijo: “si ustedes, topos,
no están satisfechos, les sugiero que se vayan”.
Los niños que leen esta historia tienden a optar por la justicia para resolver el
dilema: “es la casa de los topos. Es un trato. El puercoespín debe irse”. Por el
contrario, las niñas tienden a buscar soluciones que mantendrían a todas las
partes felices y cómodas, como: “deberían cubrir al puercoespín con una manta”.
El punto de Gilligan es que la mayoría de los psicólogos varones tienden a definir
la madurez moral en términos de justicia y autonomía. Desde esta perspectiva,
la preocupación de una mujer por las relaciones puede verse como una debilidad
y no como una fortaleza. (Una mujer que se preocupa por lo que agrada o ayuda
a otros se colocaría en el nivel convencional dentro del sistema de Kohlberg.).
Sin embargo, Gilligan cree que el cuidado también es un elemento importante
para el desarrollo moral y sugiere que los hombres pueden tardarse en lograrlo
(Botes; Gilligan y Attanucci).
¿La evidencia apoya la postura de Gilligan? Diferentes estudios han encontrado
poca o ninguna diferencia en la capacidad de razonamiento moral global de los
hombres y de las mujeres (Glover; Levenson). De hecho, tanto los hombres
como las mujeres pueden usar el cuidado y la justicia para tomar decisiones
morales. El criterio moral que utilizan parece depender de la situación a la que
se enfrentan (Wark y Krebs). De igual forma, Gilligan merece el crédito por la
identificación de una segunda forma importante en la que se toman las
decisiones morales. Se puede argumentar que nuestras mejores opciones
morales combinan la justicia, el cuidado, la razón y la emoción, lo cual puede ser
lo que llamamos sabiduría
Constructo social. Concepto o práctica que parecería natural y obvia para quienes
la aprueban, pero que en realidad es una invención de una cultura o sociedad
particulares.
Diferencias individuales. Diferencias en las características, influencias y
resultados del desarrollo.
Herencia. Rasgos o características innatos heredados de los progenitores.
Medio ambiente. Totalidad de las influencias sobre el desarrollo que no son
hereditarias, sino fruto de la experiencia.
Maduración. Desenvolvimiento de una secuencia natural de cambios físicos y
conductuales
TEORÍAS E INVESTIGACIÓN
Conductismo. Teoría del aprendizaje que pone de relieve la función predecible
del ambiente como causa de la conducta observable.
Condicionamiento clásico. Aprendizaje basado en la asociación de un estímulo
que por lo general no provoca una respuesta particular con otro estímulo que sí
la provoca.
Condicionamiento operante. Aprendizaje basado en la asociación de una
conducta y sus consecuencias.
Reforzamiento. Según el condicionamiento operante, proceso que fortalece y
estimula la repetición de una conducta deseada.
Castigo. Según el condicionamiento operante, proceso que debilita y desalienta
la repetición de una conducta.
Teoría del aprendizaje social. Teoría que sostiene que el comportamiento se
aprende por observación e imitación de modelos. También se llama teoría
cognoscitiva social.
Determinismo recíproco. Término con que Bandura designaba las fuerzas
bidireccionales que afectan el desarrollo.
Aprendizaje por observación. Aprendizaje que se logra a través de la observación
de la conducta de otros.
Eficacia personal. Sentido de la capacidad personal de superar dificultades y
alcanzar metas.
TEORIA DE PIAGET
La Noción Piagetiana de Estadio.
Piaget creía que el conocimiento evoluciona a lo largo de una serie de etapas. El
pensamiento de los niños en cualquier etapa concreta es cualitativa y
cuantitativamente diferente del pensamiento en la precedente o en la etapa
siguiente. Hay cuatro características de los estadios piagetianos.
En primer lugar, la secuencia de aparición de las etapas es invariante, esto es,
los estadios siguen un orden fijo determinado. No obstante, las personas
avanzan a distinto ritmo, es decir, se producen fluctuaciones en cuanto a la edad
de su aparición y no todos los individuos alcanzan las etapas finales.
En segundo lugar, existe una estructura de conjunto característica de cada
estadio. Piaget consideraba que el pensamiento de los niños experimenta algún
cambio abrupto en períodos breves. En estos momentos surgen las nuevas
estructuras cognitivas. La emergencia de distintas estructuras explica el hecho
de que todas las tareas que es capaz de resolver un niño tengan una complejidad
similar.
En tercer lugar, los estadios son jerárquicamente inclusivos, esto es, las
estructuras de un estadio inferior se integran en el siguiente. Por ejemplo, en el
estadio de las operaciones concretas se mantienen todos los progresos del
período sensoriomotor, y puede decirse que las operaciones concretas se
construyen sobre los logros del período preoperacional.
Finalmente, la transición entre estadios es gradual. El paso entre estadios no
es abrupto, ya que en cada uno de ellos se encuentra una fase de preparación y
otra en la que se completan los logros propios de esa etapa.
Etapa sensoriomotriz. Según Piaget, es la primera etapa del desarrollo
cognoscitivo, en la cual los infantes aprenden a través de los sentidos y la
actividad motriz.
SUBETAPAS:
1. Uso de reflejos (Nacimiento a un mes). Los infantes ejercitan sus reflejos
innatos y adquieren algún control sobre ellos. No coordinan la información
de los sentidos. No toman el objeto que están mirando. Ejemplo: Dorri
comienza a succionar cuando siente en la boca el pecho de su madre.
2. Reacciones circulares primarias (1 a 4 meses). Los infantes repiten las
conductas agradables que ocurren por casualidad (como chuparse el dedo).
El niño enfoca las actividades en el cuerpo, más que en los efectos de su
comportamiento en el ambiente. Además, llevan a cabo las primeras
adaptaciones; es decir, succionan distintos objetos de manera diferente.
Comienzan a coordinar la información de los sentidos y a tomar objetos.
Ejemplo: Cuando le dan la mamila, Dylan (que por lo general toma pecho)
puede adaptarse para succionar el chupón de hule.
3. Reacciones circulares secundarias (4 a 8 meses). Los infantes se interesan
más por el medio ambiente; repiten las acciones que producen resultados
interesantes (como agitar una sonaja) y ponen en práctica las conductas que
ya aprendieron. Las acciones son intencionadas, pero no enfocadas
directamente en una meta. Ejemplo: Alejandro empuja trozos de cereal seco
por el borde de su silla alta, uno por uno, y mira cómo caen al suelo.
4. Coordinación de esquemas secundarios. (8 a 12 meses). La conducta es más
deliberada e intencional; los infantes coordinan previamente el esquema
aprendido (como mirar y tomar la sonaja) y usan las conductas previamente
aprendidas para alcanzar sus metas (como gatear por la sala para tomar su
juguete favorito). Pueden anticipar los sucesos. Ejemplo: Anica presiona el
botón de su libro de rimas infantiles con música y suena “Estrellita”. Oprime
el botón una y otra vez, y lo prefiere antes que los botones de otras canciones.
5. Reacciones circulares terciarias (12 a 18 meses). Los niños muestran
curiosidad y experimentan; de manera deliberada varían sus acciones para
ver los resultados (por ejemplo, agitan varias sonajas para oír cómo suenan).
Exploran activamente su mundo para determinar qué tiene de nuevo un
objeto, suceso o situación. Ensayan actividades nuevas y resuelven
problemas por ensayo y error. Ejemplo: Cuando la hermana mayor de Bjorn
levanta sobre la cuna su libro de cartón favorito, él se estira para tomarlo.
Sus primeros esfuerzos por meter el libro en la cuna fracasan, porque el libro
es demasiado ancho. Pronto, Bjorn pone el libro de lado, lo jala y lo abraza,
encantado por su éxito.
6. Combinaciones mentales (18 a 24 meses). En este punto, los niños pueden
formar representaciones mentales de los objetos, y ya no están restringidos
al método de ensayo y error para resolver los problemas. El pensamiento
simbólico les permite comenzar a pensar en los sucesos y anticipar sus
consecuencias sin pasar siempre a la acción. Comienzan a mostrar alguna
introspección. Usan símbolos, como gestos y palabras, y pueden fingir.
Ejemplo: Jenny juega con su caja de figuras. Busca con esmero el orificio
correcto para cada figura antes de insertarla, y atina.
Reacciones circulares. Término de Piaget para denominar los procesos por los
cuales un infante aprende a reproducir las situaciones deseadas, que primero
ocurrieron por casualidad.
Capacidad representacional. Término de Piaget para denominar la capacidad de
guardar imágenes mentales o símbolos de objetos y sucesos.
Principales desarrollos de la etapa sensoriomotriz
1. Imitación. Hacia los nueve meses se desarrolla una imitación invisible; la
imitación diferida comienza después del desarrollo de representaciones mentales
en la sexta subetapa (18 a 24 meses).
Lo reciente: En estudios polémicos se ha visto imitación invisible de expresiones
faciales en neonatos e imitación diferida en la sexta semana. Al parecer, la
imitación diferida de actividades complejas está presente ya a los seis meses.
2. Permanencia del objeto. Se desarrolla de manera gradual entre la tercera
y la sexta subetapas.
Lo más reciente: Los infantes de incluso tres meses y medio (segunda
subetapa) parecen mostrar un cierto conocimiento de los objetos, aunque está
en disputa la interpretación de estos resultados.
3. Desarrollo simbólico. Depende del pensamiento representacional, que se
desarrolla en la sexta subetapa (18 a 24 meses).
Lo más reciente: La comprensión de que las imágenes representan otra cosa
aparece hacia los 19 meses. Los niños de menos de tres años tienen dificultades
para interpretar modelos a escala.
4. Categorización. Depende del pensamiento representacional, que se
desarrolla durante la sexta subetapa (18 a 24 meses).
Lo más reciente: Los infantes de incluso tres meses parecen reconocer
categorías perceptuales; al finalizar el primer año, pueden categorizar por
función.
5. Causalidad. Se desarrolla de manera lenta entre los cuatro a los seis meses
y un año, basada en el descubrimiento del infante, primero, de los efectos de
sus acciones y luego, de los efectos de las fuerzas externas.
Lo más reciente: Algunas pruebas apuntan a una conciencia temprana de
ciertos sucesos causales del mundo físico, pero la comprensión general de la
causalidad se desarrolla más lentamente.
7. Número. Depende del uso de símbolos, que se desarrolla en la sexta subetapa
(18 a 24 meses).
Lo más reciente: Los infantes de incluso cinco meses reconocen y manipulan
mentalmente números pequeños, pero la interpretación de los resultados está
en debate.
ESTADIO PREOPERACIONAL (DE 2 A 7 AÑOS)
La capacidad de pensar en objetos, hechos o personas ausentes marca el
comienzo de la etapa preoperacional. Entre los 2 y los 7 años, el niño demuestra
una mayor habilidad para emplear símbolos —gestos, palabras, números e
imágenes— con los cuales representar las cosas reales del entorno. Ahora puede
pensar y comportarse en formas que antes no eran posibles. Puede servirse de
las palabras para comunicarse, utilizar números para contar objetos, participar
en juegos de fingimiento y expresar sus ideas sobre el mundo por medio de
dibujos. El pensamiento preoperacional tiene varias limitaciones a pesar de la
capacidad de representar con símbolos las cosas y los acontecimientos. Piaget
designó este periodo con el nombre de etapa preoperacional, porque los
preescolares carecen de la capacidad de efectuar algunas de las operaciones
lógicas que observó en niños de mayor edad. Antes de comentar las limitaciones
del pensamiento preoperacional vamos a examinar algunos de los progresos
cognoscitivos más importantes de esta etapa.
Pensamiento representacional
Durante la etapa preoperacional, el niño puede emplear símbolos como medio
para reflexionar sobre el ambiente. La capacidad de usar una palabra (galletas,
leche, por ejemplo) para referirse a un objeto real que no está presente se
denomina funcionamiento semiótico o pensamiento representacional. Piaget
propuso que una de las primeras formas de él era la imitación diferida, la cual
aparece por primera vez hacia el final del periodo sensoriomotor (la capacidad
de repetir una secuencia simple de acciones o de sonidos, horas o días después
que se produjeron inicialmente).
Durante la etapa preoperacional se observan otros ejemplos del pensamiento
representacional. A menudo se considera que los años preescolares son la “edad
de oro” del juego simbólico (Singer y Singer). El juego comienza con secuencias
simples de conducta usando objetos reales; por ejemplo, fingir beber de una
copa o comer con un objeto parecido a la cuchara. A los cuatro años de edad, el
niño puede inventar su propia utilería, crear un guión y representar varios
papeles sociales.
En términos generales, el juego simbólico se inspira en hechos reales de la vida
del niño (por ejemplo, el patio de juego, ir a la tienda, ir de viaje), pero también
los que tienen personajes de la fantasía y superhéroes son muy atractivos para
él. Muchos expertos piensan que este tipo de juego favorece el desarrollo del
lenguaje, así como las habilidades cognoscitivas y sociales. Favorece además la
creatividad y la imaginación.
Según Piaget, el desarrollo del pensamiento representacional permite al niño
adquirir el lenguaje. Los años preescolares son un periodo de desarrollo
acelerado del lenguaje: la mayoría de los niños pronuncian sus primeras palabras
hacia el segundo año y van aumentando su vocabulario hasta alcanzar cerca de
2000 palabras a los 4 años.
Cuando el niño comienza a hablar, utiliza palabras referentes a actividades y a
eventos, lo mismo que a sus deseos actuales. Durante el periodo preoperacional
empieza a emplearlas en forma verdaderamente representacional. En vez de
centrarse exclusivamente en las actividades del momento o en sus deseos
inmediatos, comienza a usarlas para representar objetos ausentes y
acontecimientos pasados (Ginsburg y Opper).Dicho de otra manera, las usa para
referirse a eventos que no experimenta de modo directo. Piaget creía que el
pensamiento representacional facilita el desarrollo lingüístico rápido en el periodo
preoperacional. Es decir, el pensamiento antecedería al desarrollo lingüístico.
Durante la etapa preoperacional, el niño comienza a representarse el mundo a
través de pinturas e imágenes mentales, lo cual ha hecho que algunos expertos
califiquen de “lenguaje silencioso” el arte infantil. Los dibujos nos revelan mucho
sobre su pensamiento y sus sentimientos. Por ejemplo, cuando a los niños de 2
y 3 años de edad se les pregunta qué están dibujando o pintando, lo más
probable es que respondan: “Nada más estoy dibujando”. Sin embargo, entre
los 3 y 4 años comienzan a combinar trazos para dibujar cuadros, cruces, círculos
y otras figuras geométricas. Inician la etapa representacional del dibujo hacia los
4 o 5 años. Dibujan casas, animales, personan, personajes de caricaturas y otros
objetos. Las figuras pueden representar objetos reales del entorno o personas
de la fantasía que han visto o de los cuales han oído hablar. En la figura se
muestra este avance evolutivo en los dibujos infantiles. A medida que va
creciendo, el niño enriquece sus dibujos con detalles, incorporando incluso
palabras que desarrollan el guión. Cuando los inscriben en la educación infantil,
algunos ya saben escribir su nombre. Ahora las palabras impresas, lo mismo que
las pinturas, pueden representar un objeto real del ambiente.
Progresión evolutiva de los dibujos infantiles:
a) Etapa de colocación: garabatea (32 meses de edad);
b) formas básicas: círculo (42 meses);
c:) etapa de diseño: diseños combinados: de 40 7 47 meses); pictográfica:
figuras humanas de 48 a 60 meses).
Conceptos numéricos
Junto con la mayor habilidad de usar como símbolos las palabras e imágenes,
los niños empiezan a utilizar los números como herramienta del pensamiento
durante los años preescolares. Piaget sostuvo que los niños no adquieren un
concepto verdadero del número antes de la etapa de las operaciones concretas,
cuando comienzan a entender las relaciones seriales y jerárquicas. Sin embargo,
la investigación reciente ha demostrado que algunos principios numéricos
básicos aparecen durante la etapa preoperacional.
Los trabajos de Rochel Gelman y sus colegas señalan que algunos niños de 4
años logran entender los siguientes:
Principios básicos del conteo:
a) puede contarse cualquier arreglo de elementos:
b) cada elemento deberá contarse una sola vez;
c) los números se asignan en el mismo orden;
d) es irrelevante el orden en que se cuenten los objetos;
e) el último número pronunciado es el de los elementos que contiene el conjunto.
Los niños de edad preescolar comprenden un poco las relaciones numéricas. Así,
la mayoría de los niños de 3 a 4 años de edad, saben que 3 es más que 2.
Los preescolares comienzan a comprender algunos conceptos básicos de los
números, pero conviene recordar que cometerán muchísimos errores de conteo.
Omiten algunos números (por ejemplo, 1, 2, 3, 5), no incluyen elementos
mientras cuentan, etc. Además, a la mayoría de ellos y a los niños de primaria
le es difícil contar grandes grupos de objetos desorganizados (Baroody, 1987).
Limitaciones del pensamiento preoperacional
Hasta ahora hemos explicado algunos importantes progresos del pensamiento
del niño durante el periodo preoperacional. Veamos ahora algunas de las
limitaciones. Las tres más importantes son egocentrismo, centralización y rigidez
del pensamiento.
El egocentrismo es la tendencia a “percibir, entender e interpretar el mundo a
partir del yo” (Millar). Esta tendencia se manifiesta sobre todo en las
conversaciones de los preescolares. Como son incapaces de adoptar la
perspectiva de otros, hacen poco esfuerzo por modificar su habla a favor del
oyente. Los niños de tres años parecen realizar los llamados monólogos
colectivos, en los cuales los comentarios de los interlocutores no guardan relación
alguna entre sí. Entre los 4 y 5 años de edad, el niño comienza a mostrar
capacidad para ajustar su comunicación a la perspectiva de los oyentes.
Otra limitación del pensamiento preoperacional es la centralización. La
centralización significa que los niños pequeños tienden a fijar la atención en un
solo aspecto del estímulo. Ignoran el resto de las características. Como veremos
más adelante, la centralización explica por qué a los niños les resulta difícil
efectuar tareas relacionadas con la conservación. Supongamos que a un niño de
4 años le mostramos dos vasos idénticos con la misma cantidad de agua y que
luego vaciamos uno en un vaso alto y delgado. Cuando le preguntamos: “¿Cuál
vaso tiene más?”, él se concentrará en la altura del agua y escogerá el más alto.
Prescindirá de otras dimensiones del vaso como el ancho.
El pensamiento de los niños pequeños tiende a ser muy rígido (Millar). Con el
tiempo, el pensamiento de los niños se torna menos rígido y comienza a
considerar cómo pueden invertir las transformaciones (vaciar el contenido de un
vaso en otro). La habilidad de invertir mentalmente las operaciones es una de
las características de la siguiente etapa del desarrollo cognoscitivo, la de las
operaciones concretas. Mientras el niño no aprenda algunas operaciones
mentales, como la reversibilidad, tenderá a basar sus juicios en el aspecto
perceptual y no en la realidad. Si un vaso da la impresión de contener más agua,
supondrá que la tiene. Flavel y sus colegas (Flavell, Green y Flavell) estudiaron
la comprensión de las apariencias y de la realidad en el niño. Descubrieron que
la capacidad de distinguir entre la apariencia y la realidad se adquiere de los 3 a
los 5 años.
EL ESTADIO DE LAS OPERACIONES CONCRETAS (DE 7 A 11 AÑOS)
Durante los años de primaria, el niño empieza a utilizar las operaciones mentales
y la lógica para reflexionar sobre los hechos y los objetos de su ambiente. Por
ejemplo, si le pedimos ordenar cinco palos por su tamaño, los comparará
mentalmente y luego extraerá conclusiones lógicas sobre el orden correcto sin
efectuar físicamente las acciones correspondientes. Esta capacidad de aplicar la
lógica y las operaciones mentales le permite abordar los problemas en forma
más sistemática que un niño que se encuentre en la etapa preoperacional.
De acuerdo con Piaget, el niño ha logrado varios avances en la etapa de las
operaciones concretas. Primero, su pensamiento muestra menor rigidez y mayor
flexibilidad. El niño entiende que las operaciones pueden invertirse o negarse
mentalmente. Es decir, puede devolver a su estado original un estímulo como el
agua vaciada en una jarra de pico, con sólo invertir la acción. Así pues, el
pensamiento parece menos centralizado y egocéntrico. El niño de primaria puede
fijarse simultáneamente en varias características del estímulo. En vez de
concentrarse exclusivamente en los estados estáticos, ahora está en condiciones
de hacer inferencias respecto a la naturaleza de las transformaciones.
Finalmente, en esta etapa ya no basa sus juicios en la apariencia de las cosas.
Los tres tipos de operaciones mentales o esquemas con que el niño organiza e
interpreta el mundo durante esta etapa son: seriación, clasificación y
conservación.
Seriación
La seriación es la capacidad de ordenar los objetos en progresión lógica; por
ejemplo, del más pequeño al más alto. Es importante para comprender los
conceptos de número, de tiempo y de medición. Así, los preescolares tienen en
general un concepto limitado del tiempo. Es su mente, 2 minutos es igual que
20 o que 200 minutos. Por el contrario, los niños de primaria pueden ordenar los
conceptos de tiempo a partir de la magnitud creciente o decreciente. Para ellos,
20 minutos son menos que 200 pero más que 2.
En uno de sus experimentos, Piaget pedía a los niños ordenar una serie de palos
como los de la figura, a los 3 y 4 años de edad, los niños pueden localizar los
más largos y los más cortos. Parecen entender la regla lógica del cambio
progresivo — es decir, los objetos pueden ordenarse atendiendo a su tamaño
creciente o decreciente—, pero les es difícil construir una secuencia ordenada de
tres o más palos. Para ello necesitan efectuar al mismo tiempo dos operaciones
mentales: deben seleccionar el palo apropiado pensando en su longitud en
relación con los que ya usó y también en relación con los restantes. El preescolar
no puede realizar esta tarea porque se centra en una dimensión a la vez (esto
es, su pensamiento está centralizado). La capacidad de coordinar simultánea-
mente dos elementos de información se desarrolla gradualmente en los primeros
años de primaria, cuando el pensamiento del niño comienza a orientarse menos
a la centralización.
Para resolver los problemas de seriación, el niño debe aplicar además la regla
lógica de la transitividad. Parte del problema de los niños de primaria radica en
que no comprenden que los objetos en la mitad de una serie son a la vez más
cortos y más largos que los otros. Los niños de mayor edad pueden construir
mentalmente relaciones entre los objetos. Saben inferir la relación entre dos si
conocen su relación con un tercero. Por ejemplo, si saben que el palo A es más
corto que B y que éste es más corto que el palo C, el palo A deberá ser entonces
más corto que C. La respuesta es una deducción lógica que se basa en la regla
de transitividad (A < B y B < C; por tanto, A < C). Conforme a la teoría de Piaget,
la transitividad se entiende entre los 7 y 11 años de edad.
Clasificación
Las personas aprenden a clasificar objetos de acuerdo a sus semejanzas y a
establecer relaciones de pertenencia entre los objetos y los conjuntos en que
están incluidos. Piaget distingue tres tipos de contenidos básicos: la clasificación
simple, la clasificación múltiple y la inclusión de clases.
La clasificación simple consiste en agrupar objetos en función de alguna
característica. La clasificación múltiple implica disponer objetos simultáneamente
en función de dos dimensiones. La inclusión de clases supone comprender las
relaciones entre clases y subclases (p.ej., entre los animales y los mamíferos).
La tarea de clasificación simple consiste en mostrar al niño elementos
geométricos. Estas figuras varían al menos en dos dimensiones: el color, la forma
y el tamaño. Se le pide al niño, de forma ambigua, que “ponga juntas las cosas
parecidas”.
Para la clasificación múltiple se le presenta el problema de las matrices. El niño
debe completar una tabla de doble entrada, para lo cual tiene que elegir los
objetos según se adecuen a dos exigencias de clasificación: la de las filas y la de
las columnas.
Para investigar la inclusión de clases, se presenta al niño una serie de objetos y
se pide al niño que determine si hay más o menos elementos pertenecientes a
una clase a una subclase.
Los requisitos para el dominio de la clasificación son los siguientes:
a) comprender que un objeto no puede ser miembro de dos clases opuestas;
b) elaborar un criterio de clase, por ejemplo la forma y entender que los
miembros de una clase son semejantes en algo;
c) saber que una clase puede describirse enumerando todos los elementos que
la componen; d) comprender los distintos niveles de una jerarquía.
Piaget y sus colaboradores describieron tres etapas evolutivas para lograr el
dominio de la clasificación. La primera de ellas se denomina “colecciones
figurales”, propia de los niños menores de 5 años de edad. Los niños, en vez de
clasificar, realizan dibujos con los elementos que se les ha proporcionado. Por
ejemplo, un niño coloca un triángulo sobre un cuadrado y dice que es una casa.
Por tanto, aún no es capaz de clasificar teniendo en cuenta las semejanzas de
los objetos.
La segunda etapa es la de “colecciones no figurales”. En este momento los niños
agrupan objetos en función de una simple dimensión, por ejemplo, el color (todos
los azules en un sitio, los rojos en otro) o la forma (todos los cuadrados por un
lado, los círculos por otro…). El niño, no obstante, tiene limitaciones. Por un lado,
no son capaces de cambiar de criterio una vez realizada la clasificación. Así, una
vez que han clasificado los objetos basándose, por ejemplo en el color, tienen
dificultades para volver a clasificar todos los objetos basándose en otra
dimensión, por ejemplo la forma. Por otro lado, tienen problemas con las
clasificaciones múltiples. Por último, los niños en esta etapa no comprenden las
relaciones de inclusión entre clases. Por ello, al presentar al niño un conjunto de,
por ejemplo, cinco perros y tres gatos, si se le pregunta “¿qué hay más perros o
animales?”, suele contestar que hay más perros.
En la tercera etapa los niños dominan la tarea de la clasificación múltiple y
comprenden las relaciones de inclusión de clases. Antes de los siete u ocho años,
los niños saben que la capital de España es Madrid, pero no entienden las
relaciones que vinculan esos dos conceptos. Así, no comprenden que todos los
madrileños son españoles y que sólo algunos españoles son madrileños. Por lo
tanto, los niños antes de esta edad aprenden una expresión verbal, pero no las
implicaciones lógicas que conlleva.
Conservación
De acuerdo con la teoría de Piaget, la capacidad de razonar sobre los problemas
de conservación es lo que caracteriza a la etapa de las operaciones concretas.
La conservación consiste en entender que un objeto permanece igual a pesar de
los cambios superficiales de su forma o de su aspecto físico. Durante esta fase,
el niño ya no basa su razonamiento en el aspecto físico de los objetos. Reconoce
que un objeto transformado puede dar la impresión de contener menos o más
de la cantidad en cuestión, pero que tal vez no la tenga. En otras palabras, las
apariencias a veces resultan engañosas.
Piaget analizó el conocimiento de los cinco pasos de la conservación en el niño:
número, líquido, sustancia (masa), longitud y volumen. Aunque se trata de
procesos que difieren en la dimensión a conservar, el paradigma fundamental es
el mismo. En términos generales, al niño se le muestran dos conjuntos idénticos
de objetos: hileras idénticas de monedas, cantidades idénticas de barro o vasos
idénticos de agua. Una vez que acepta que los objetos son iguales,
transformamos uno de ellos de modo que cambie su aspecto pero no la
dimensión básica en cuestión. Por ejemplo, en la tarea de conservación del
número, acortamos o alargamos una hilera de monedas. Le permitimos al niño
observar esta transformación. Después le pedimos decir si la dimensión en
cuestión (cantidad, masa, área u otra) sigue siendo la misma.
Los niños que han iniciado la etapa de las operaciones concretas responderán
que el conjunto de objetos no ha cambiado. Un objeto puede parecer más
grande, más largo o pesado, pero los dos siguen siendo iguales. En opinión de
Piaget, los niños se sirven de dos operaciones mentales básicas para efectuar las
tareas de conservación: negación, compensación e identidad. Estas operaciones
se reflejan en la forma en que un niño de 8 años podría explicar por qué la
cantidad de agua en dos vasos permanece inalterada:
“Se puede volver a vaciar y será la misma” (negación).
“El agua sube más pero es porque el vaso es más delgado” (compensación). “Tan
sólo lo vaciaste, no se agregó ni se quitó nada” (identidad) (Entre los 7 y 11 años
de edad, el niño aprende las operaciones mentales necesarias para reflexionar
sobre las transformaciones representadas en los problemas de conservación.
Estará en condiciones de realizar la abstracción reflexiva, cuando sepa razonar
lógicamente respecto al número, a la masa y el volumen sin que lo confundan
las apariencias físicas. Entonces podrá distinguir entre las características
invariables de los estímulos (peso, número o volumen, por ejemplo) y la forma
en que el objeto aparece ante su vista. La adquisición de las operaciones
mentales con las que se efectúan las tareas de la conservación no se realiza al
mismo tiempo en todas las áreas. La comprensión de los problemas de
conservación sigue una secuencia gradual (figura). Por lo regular, el niño
adquiere la capacidad de la conservación de los números entre los 5 y los 7 años.
La de conservación del área y del peso aparece entre los 8 y los 10 años. Entre
los 10 y los 11 años, casi todos los niños pueden ejecutar tareas relacionadas
con la conservación del volumen.
Desfase horizontal es el nombre que Piaget le dio a esta falta de uniformidad del
pensamiento infantil dentro de una etapa.
EL ESTADIO DE LAS OPERACIONES FORMALES (DE 11 A 12 AÑOS EN
ADELANTE)
Una vez lograda la capacidad de resolver problemas como los de seriación,
clasificación y conservación, el niño de 11 a 12 años comienza a formarse un
sistema coherente de lógica formal. Al finalizar el periodo de las operaciones
concretas, ya cuenta con las herramientas cognoscitivas que le permiten
solucionar muchos tipos de problemas de lógica, comprender las relaciones
conceptuales entre operaciones matemáticas (por ejemplo, 15 + 8 = 10 + 13),
ordenar y clasificar los conjuntos de conocimientos. Durante la adolescencia las
operaciones mentales que surgieron en las etapas previas se organizan en un
sistema más complejo de lógica y de ideas abstractas.
El cambio más importante en la etapa de las operaciones formales es que el
pensamiento hace la transición de lo real a lo posible (Flavell). Los niños de
primaria razonan lógicamente, pero sólo en lo tocante a personas, lugares y
cosas tangibles y concretas. En cambio, los adolescentes piensan en cosas con
que nunca han tenido contacto (por ejemplo, cuando lea una historia, trate de
imaginar qué significa ser esclavo en la década de 1850); pueden generar ideas
acerca de eventos que nunca ocurrieron (por ejemplo, ¿cómo sería Europa si
Alemania hubiera ganado la Segunda Guerra Mundial); y puede hacer
predicciones sobre hechos hipotéticos o futuros (por ejemplo, si el gobierno de
un país aprobara una ley que deroga la pena de muerte, ¿qué sucedería con los
índices de criminalidad?). Los adolescentes de mayor edad pueden discutir
complejos problemas sociopolíticos que incluyan ideas abstractas como derechos
humanos, igualdad y justicia. También pueden razonar sobre las relaciones y
analogías proporcionales, resolver las ecuaciones algebraicas, realizar pruebas
geométricas y analizar la validez intrínseca de un argumento.
La capacidad de pensar en forma abstracta y reflexiva se logra durante la etapa
de las operaciones formales, la cual tiene cuatro características fundamentales
de pensamiento: la lógica proposicional, el razonamiento científico, el
razonamiento combinatorio y el razonamiento sobre probabilidades y
proporciones.
Lógica proposicional
Las operaciones mentales del adulto corresponden a cierto tipo de operación
lógica denominada lógica proposicional, la cual según Piaget era indispensable
para el pensamiento de esta etapa. La lógica proposicional es la capacidad de
extraer una inferencia lógica a partir de la relación entre dos afirmaciones
premisas. En el lenguaje cotidiano puede expresarse en una serie de
proposiciones hipotéticas.
Consideremos el siguiente ejemplo:
Si los lactantes son mayores que los adultos;
Y si los lactantes son mayores que los niños;
Entonces los adultos son mayores que los niños.
La conclusión es correcta de hecho pero inválida, porque no se deduce de la
información que la precede. David Moshman y Bridge Franks comprobaron que
los niños de primaria tienden a evaluar la conclusión anterior basándose en la
verdad objetiva más que en la validez del argumento. Sin embargo, cuando
realizan las operaciones formales comienzan a considerar la validez intrínseca
del argumento. En esta etapa, la validez del argumento se relaciona más con la
forma en que se relacionan las proposiciones que con la veracidad del contenido.
De acuerdo con Piaget, el razonamiento consiste en reflexionar sobre las
relaciones lógicas entre ellas.
Muchos tipos de situaciones en los que se resuelven problemas requieren utilizar
la lógica proposicional. Así, para resolver problemas algebraicos se necesita la
habilidad de reflexionar sobre proposiciones. La lógica proposicional también es
indispensable para razonar acerca de problemas científicos, como determinar la
manera de clasificar un animal o planta. Los buenos escritores, abogados,
políticos y profesores se valen de la lógica proposicional cuando quieren defender
un punto.
Los adolescentes que dominan esta habilidad, no sólo discuten más, sino que
saben defender mejor sus ideas. Pueden descubrir las falacias de nuestro
razonamiento y atacarnos con un contraargumento apropiado.
Razonamiento científico
A medida que el adolescente aprende a utilizar la lógica proposicional, empieza
a abordar los problemas de un modo más sistemático. Formula hipótesis,
determina cómo compararlas con los hechos y excluye las que resulten falsas.
Piaget dio el nombre de pensamiento hipotético-deductivo a la capacidad de
generar y probar hipótesis en una forma lógica y sistemática.
Para estudiar la adquisición de este tipo de pensamiento, Piaget se sirvió del
experimento del péndulo que se describe gráficamente en la figura. A un niño se
le da una vara en la cual penden cuerdas de distinta longitud. En cada una
pueden colgarse pesos de diferente tamaño. Al niño se le indica cómo funciona
el péndulo y luego se le pregunta cuál de los cuatro factores —longitud de la
cuerda, peso del objeto, fuerza de impulso o altura de la caída— causa la rapidez
con que el péndulo oscila. Antes de contestar, se le permite manipular el aparato
para encontrar la solución
¿Cuál cree que sea la respuesta correcta? ¿Cómo acometería este problema? El
primer paso consiste en formular una hipótesis o en hacer una predicción. En la
etapa de las operaciones concretas, el niño puede aplicar esta estrategia de
solución de problemas. El siguiente paso consiste en probar las hipótesis y,
generalmente, es el que distingue la etapa de las operaciones concretas y la de
las operaciones formales. La clave está en cambiar uno de los factores o variables
del problema, manteniendo constantes los demás. El niño que se halla en la
etapa de las operaciones concretas comienza bien pero no logra probar todas las
combinaciones posibles. A veces cambia más de una variable a la vez (por
ejemplo, la cuerda y el peso). Pero como no aborda el problema en forma
sistemática, a menudo extrae conclusiones erróneas cuando necesita tener en
cuenta muchas variables. Por su parte, el niño que se encuentra en la etapa de
las operaciones formales suele considerar todas las combinaciones.
Razonamiento combinatorio
Otra característica de las operaciones formales es la capacidad de pensar en
causas múltiples. Supongamos que usted le reparte a un grupo de estudiantes
de primaria y de secundaria cuatro fichas de plástico de distintos colores y les
indica que las combinen en la mayor cantidad posible de formas. Lo más probable
es que combinen sólo dos a la vez. Pocos lo harán sistemáticamente. En cambio,
los adolescentes pueden inventar una forma de representar todas las
combinaciones posibles, entre las de tres y de cuatro fichas. Hay además
mayores probabilidades de que generen las combinaciones de una manera
sistemática.
Razonamiento sobre las probabilidades y las proporciones
Los niños de primaria generalmente tienen un conocimiento limitado de la
probabilidad. La teoría de Piaget contribuye a explicar porqué. La figura muestra
una distribuidora de chicles de globo, con 30 globos rojos y 50 amarillos. Si un
niño introduce una moneda en la máquina, ¿de que color es probable que salga
el chicle en forma de bola? Si el niño se encuentra en la etapa de las operaciones
concretas dirá “amarillo”, porque hay más bolas amarillas que rojas. El que se
halle en la etapa de las operaciones formales se representará mentalmente el
problema en forma diferente. Se concentra en la diferencia absoluta entre ambas
cantidades. Reflexionará a partir de la razón de bolas rojas y amarillas. Tenderán
más a decir que tiene mayores probabilidades de obtener una bola amarilla
porque existe mayor proporción de ellas que de rojas. La razón no es algo que
podamos ver; es una relación inferida entre dos cantidades. Este ejemplo ilustra
que los dos tipos de pensadores dan la misma respuesta a la pregunta, pero
usando un sistema lógico cualitativamente distinto.
Imitación invisible. Imitación con partes del propio cuerpo que no pueden verse.
Imitación visible. Imitación con partes del propio cuerpo que se ven.
Imitación diferida. Término de Piaget para denominar la reproducción de una
conducta observada después de un tiempo al remitirse a un símbolo guardado
de ésta.
Imitación elicitada. Método de investigación en el que los infantes son inducidos
a imitar una serie específica de acciones que han visto, pero que no
necesariamente han realizado antes.
Permanencia del objeto. Término de Piaget para denominar la comprensión del
pequeño acerca de que la existencia de una persona u objeto sigue cuando no
esté a la vista.
Perspectiva cognoscitiva. Visión de que los procesos de pensamiento son
centrales para el desarrollo.
Teoría de las etapas cognoscitivas. Teoría que sostiene que el desarrollo
cognoscitivo de los niños avanza en una serie de cuatro etapas que comprenden
tipos cualitativamente distintos de operaciones mentales.
ESTRUCTURA: Son el conjunto de respuestas que tienen lugar luego de que el
sujeto de conocimiento ha adquirido ciertos elementos del exterior. Así pues, el
punto central de lo que podríamos llamar la teoría de la fabricación de la
inteligencia es que ésta se "construye" en la cabeza del sujeto, mediante una
actividad de las estructuras que se alimentan de los esquemas de acción, o sea,
de regulaciones y coordinaciones de las actividades del niño. La estructura no es
más que una integración equilibrada de esquemas. Así, para que el niño pase de
un estado a otro de mayor nivel en el desarrollo, tiene que emplear los esquemas
que ya posee, pero en el plano de las estructuras.
ESQUEMA: Término de Piaget para designar los patrones organizados de
pensamiento y conducta que se siguen en situaciones particulares.
Representa lo que puede repetirse y generalizarse en una acción; es decir, el
esquema es aquello que poseen en común las acciones, por ejemplo "empujar"
a un objeto con una barra o con cualquier otro instrumento. Un esquema es una
actividad operacional que se repite (al principio de manera refleja) y se
universaliza de tal modo que otros estímulos previos no significativos se vuelven
capaces de suscitarla. Un esquema es una imagen simplificada (por ejemplo, el
mapa de una ciudad).
La teoría de Piaget trata en primer lugar los esquemas. Al principio los esquemas
son comportamientos reflejos, pero posteriormente incluyen movimientos
voluntarios, hasta que tiempo después llegan a convertirse principalmente en
operaciones mentales. Con el desarrollo surgen nuevos esquemas y los ya
existentes se reorganizan de diversos modos. Esos cambios ocurren en una
secuencia determinada y progresan de acuerdo con una serie de etapas.
ORGANIZACIÓN: Término de Piaget para designar la formación de categorías o
sistemas de conocimiento. Es un atributo que posee la inteligencia, y está
formada por las etapas de conocimientos que conducen a conductas diferentes
en situaciones específicas. Para Piaget un objeto no puede ser jamás percibido
ni aprendido en sí mismo sino a través de las organizaciones de las acciones del
sujeto en cuestión. La función de la organización permite al sujeto conservar en
sistemas coherentes los flujos de interacción con el medio.
Las personas nacen con la tendencia a organizar sus procesos de pensamiento
en estructuras psicológicas o sistemas para comprender y relacionarse con el
mundo. Las estructuras simples se combinan y coordinan continuamente para
perfeccionarse y con ello ser más eficaces. Por ejemplo, los niños muy pequeños
pueden mirar un objeto o asirlo cuando está al alcance de sus manos, pero no
coordinan ambas acciones al mismo tiempo. Sin embargo, al desarrollarse
pueden organizar estas dos estructuras conductuales en una estructura
coordinada de nivel superior de mirar, alcanzar y asir el objeto. Por supuesto,
también pueden continuar usando esas estructuras por separado (Ginsburg y
Opper) .
Piaget denominó a estas estructuras esquemas, y en su teoría son los bloques
básicos de construcción del pensamiento, sistemas organizados de acciones o
pensamientos que nos permiten hacer representaciones mentales, "pensar en"
los objetos y acontecimientos de nuestro mundo. Los esquemas son mínimos y
específicos, como el esquema de "beber con una pajilla (o popote)" o el de
"reconocer una rosa", o bien amplios y más generales, como el esquema de
beber o el de clasificar las plantas. En la medida en que se organizan los procesos
de pensamiento y se desarrollan nuevos esquemas, la conducta se hace más
compleja y se adapta mejor al ambiente nuevo y de ajustarlo a lo que ya se
conoce. En ocasiones podemos distorsionar la nueva información en la tentativa
de ajustaría a lo que conocemos. Es el caso de muchos niños que al ver un zorrillo
le llaman "gatito" en un intento por adecuar la nueva experiencia al esquema
que poseen para la identificación de animales.
EQUILIBRIO: (equilibración). Término de Piaget para designar la tendencia a
buscar un balance entre los elementos cognoscitivos; se alcanza a través de la
asimilación y la acomodación.
Es la unidad de organización en el sujeto cognoscente. Son los denominados
"ladrillos" de toda la construcción del sistema intelectual o cognitivo, regulan las
interacciones del sujeto con la realidad, ya que a su vez sirven como marcos
asimiladores mediante los cuales la nueva información es incorporada en la
persona.
El desarrollo cognoscitivo comienza cuando el niño va realizando un equilibrio
interno entre la acomodación y el medio que lo rodea y la asimilación de esta
misma realidad a sus estructuras. Es decir, el niño al irse relacionando con su
medio ambiente, irá incorporando las experiencias a su propia actividad y las
reajusta con las experiencias obtenidas; para que este proceso se lleve a cabo
debe de presentarse el mecanismo del equilibrio, el cual es el balance que surge
entre el medio externo y las estructuras internas de pensamiento.
De acuerdo con Piaget, la organización, la asimilación y la acomodación pueden
verse como una especie de acto complejo de ponderación. En su teoría, los
cambios en el pensamiento tienen lugar mediante el proceso de equilibrio: la
búsqueda de balance. Piaget suponía que para alcanzarlo, la gente pone a prueba
de continuo lo adecuado de sus procesos de pensamiento.
De manera breve, el proceso de equilibrio funciona de la siguiente manera: hay
equilibrio si al aplicar un esquema en particular a un acontecimiento o una
situación el esquema funciona; pero si el esquema no produce un resultado
satisfactorio, entonces hay un desequilibrio y nos sentimos incómodos. La
incomodidad nos motiva a buscar una solución mediante la asimilación y la
acomodación, con lo que nuestro pensamiento cambia y avanza. Para equilibrar
nuestros esquemas de comprensión del mundo y los datos que éste proporciona,
asimilamos continuamente nueva información mediante nuestros esquemas y
acomodamos el pensamiento siempre que los intentos desafortunados de
asimilación produzcan un desequilibrio.
Proceso de Equilibración: Aunque asimilación y acomodación son funciones
invariantes en el sentido de estar presentes a lo largo de todo el proceso
evolutivo, la relación entre ellas es cambiante de modo que la evolución
intelectual es la evolución de esta relación asimilación / acomodación. Para
PIAGET el proceso de equilibración entre asimilación y acomodación se establece
en tres niveles sucesivamente más complejos:
1. El equilibrio se establece entre los esquemas del sujeto y los acontecimientos
externos.
2. El equilibrio se establece entre los propios esquemas del sujeto.
3. El equilibrio se traduce en una integración jerárquica de esquemas
diferenciados.
ADAPTACIÓN: Término de Piaget para designar el ajuste de la nueva información
sobre el entorno. Además de la tendencia a organizar sus estructuras
psicológicas, la gente también suele por herencia adaptarse a su ambiente.
El proceso de adaptación busca en algún momento la estabilidad y, en otros, el
cambio. En sí, la adaptación es un atributo de la inteligencia, que es adquirida
por la asimilación mediante la cual se adquiere nueva información y también por
la acomodación mediante la cual se ajustan a esa nueva información. La función
de adaptación le permite al sujeto aproximarse y lograr un ajuste dinámico con
el medio. La adaptación y organización son funciones fundamentales que
intervienen y son constantes en el proceso de desarrollo cognitivo, ambos son
elementos indisociables. Existen dos procesos básicos implicados en la
adaptación: la asimilación y la acomodación.
a. La asimilación. Término de Piaget para designar la incorporación de nueva
información en una estructura cognoscitiva anterior. La asimilación se
refiere al modo en que un organismo se enfrenta a un estímulo del entorno
en términos de organización actual. "La asimilación mental consiste en la
incorporación de los objetos dentro de los esquemas de comportamiento,
esquemas que no son otra cosa sino el armazón de acciones que el hombre
puede reproducir activamente en la realidad" (Piaget).
De manera global se puede decir que la asimilación es el hecho de que el
organismo adopte las sustancias tomadas del medio ambiente a sus propias
estructuras. Incorporación de los datos de la experiencia en las estructuras
innatas del sujeto.
La asimilación implica tratar de comprender algo nuevo al ajustarlo a lo que
ya conocemos. En ocasiones, tenemos que distorsionar la información
nueva para que se ajuste. Por ejemplo, la primera vez que muchos niños
ven un mapache, lo llaman “gatito”. Tratan de adecuar la nueva experiencia
a un esquema existente para identificar animales.
b. La acomodación. Alteración de los esquemas existentes o creación de otros
en respuesta a la nueva información. Ocurre cuando una persona debe
cambiar esquemas existentes para responder a una situación nueva. Si los
datos no pueden ajustarse a ningún esquema existente, entonces deben
crearse estructuras más adecuadas. Ajustamos nuestro pensamiento para
acomodar la información nueva, en vez de ajustar la información a nuestro
pensamiento. Los niños realizan acomodación cuando añaden el esquema
para reconocer mapaches a sus otros sistemas de identificación de
animales.
La gente se adapta a su entorno cada vez más complejo mediante el uso
de esquemas existentes, siempre que dichos esquemas funcionen
(asimilación), y modificando y añadiendo elementos a sus esquemas
cuando se necesita algo nuevo (acomodación). De hecho, la mayor parte
del tiempo se requiere de ambos procesos. Inclusive el uso de un patrón
establecido, como beber un líquido utilizando una pajilla, requeriría cierta
acomodación si la pajilla difiere del tamaño o la forma a los que estamos
acostumbrados.
Si usted alguna vez ha intentado beber jugo de los empaques de cartón,
sabrá que tiene que agregar una nueva habilidad a su esquema de succión:
no apretar el empaque o el jugo se saldrá por la pajilla e irá a dar a su
regazo. Siempre que se asimilan nuevas experiencias en un esquema
existente, éste se amplía y cambia en cierta forma, por lo que la asimilación
implica cierta acomodación (Mascolo y Fischer).
También hay circunstancias en que no se utilizan ni la asimilación ni la
acomodación. Si la gente encuentra algo que no le es familiar, quizá lo
ignore. La experiencia se filtra para ajustar el tipo de pensamiento de una
persona a un momento específico. Por ejemplo, si usted por casualidad
escucha una conversación en un idioma extranjero, no intentará darle
sentido, a menos que tenga algún conocimiento de ese idioma.
La acomodación ocurre cuando una persona debe cambiar los esquemas
que posee para responder a una nueva situación. Si no es posible ajustar
los datos a ninguno de los esquemas, entonces hay que establecer
estructuras más apropiadas.
En lugar de ajustar la información para adecuarla a nuestro pensamiento,
ajustamos nuestro pensamiento para adecuarlo a la nueva información. Los
niños muestran cuando agregan el esquema para reconocer los zorrillos a
los sistemas que ya poseen para identificar animales.
Para adaptarse a ambientes de complejidad creciente la gente utiliza los
esquemas que posee, siempre que funcionen (asimilación), y modifica y
aumenta sus esquemas cuando se requiere algo nuevo (acomodación). De
hecho, la mayor parte tiempo se requieren ambos procedimientos. Incluso
el uso de un patrón establecido como beber por una pajilla puede requerir
cierta acomodación si la forma o el tamaño de la misma difieren del tipo
conocido. Si alguna vez ha intentado beber jugo del empaque, de seguro
sabe que es necesario agregar una nueva habilidad al esquema de sorber:
no debe apretar el empaque o el jugo saldrá disparado por la pajilla, directo
al aire y al regazo. Cada vez que se agregan nuevas experiencias a un
esquema, éste crece y se modifica, por lo que la asimilación implica cierta
acomodación.
Desequilibrio. En la teoría de Piaget, estado "fuera de balance" que ocurre
cuando una persona se percata de que su manera actual de pensar no funciona
para resolver un problema o para entender una situación.
El pensamiento reversible participa en muchas tareas que son difíciles para el
niño preoperacional, como la conservación de la materia. La conservación es el
principio que afirma que, en tanto nada se agregue o se elimine, la cantidad o
número de algo permanece igual aunque cambien la organización o la apariencia.
Usted sabe que si corta una hoja de papel en varias piezas seguirá teniendo la
misma cantidad de papel. Para demostrarlo, sabe que puede invertir el proceso
y pegar los pedazos.
La seriación. Es el proceso de hacer arreglos ordenados de mayor a menor o
viceversa. Esta comprensión de las relaciones secuenciales permite al estudiante
construir una serie lógica en la que A < B < C (A es menor que B que es menor
que C) y así sucesivamente. A diferencia del niño preoperacional, el niño que se
encuentra en la etapa de las operaciones concretas puede comprender la idea de
que B sea mayor que A pero menor que C
Operaciones formales. Tareas mentales que comprenden el pensamiento
abstracto y la coordinación de diversas variables.
Razonamiento hipotético-deductivo. Estrategia de solución de problemas de
las operaciones formales en que el individuo empieza por identificar todos los
factores que influyen en un problema para luego deducir y evaluar
sistemáticamente las soluciones concretas.
Egocentrismo adolescente. Suposición de que todos los demás comparten los
pensamientos, los sentimientos y las preocupaciones de uno.
Función simbólica. Término de Piaget para referirse a la capacidad de usar
representaciones mentales (palabras, números o imágenes) a las cuales el niño
les atribuye significado.
Juego de simulación. Juego que implica personas y situaciones imaginarias; se
conoce también como juego de fantasía, juego de representación o juego
imaginativo.
Transducción. Término de Piaget para referirse a la tendencia de los niños
preoperacionales a relacionar mentalmente ciertos fenómenos, exista o no una
relación causal lógica. Por ejemplo, Luis puede pensar que sus “malos”
pensamientos o comportamientos ocasionaron la enfermedad de su hermana o
el divorcio de sus padres.
Animismo. Tendencia a atribuir vida a objetos inanimados.
Centración. En la teoría de Piaget, tendencia de los niños pre-operacionales a
concentrarse en un aspecto de la situación e ignorar los otros.
Descentrarse. En la terminología de Piaget, pensar de manera simultánea acerca
de varios aspectos de una situación.
Egocentrismo. Término de Piaget para referirse a la incapacidad de considerar el
punto de vista de otra persona; es una característica del pensamiento de los
niños pequeños.
Conservación. Término de Piaget para referirse a la comprensión por parte del
niño de que dos objetos siguen siendo idénticos, con independencia de que uno
de ellos sufra una transformación a nivel perceptivo siempre y cuando no se quite
ni se añada nada a los objetos.
Irreversibilidad. Término de Piaget para referirse al hecho de que un niño
preoperacional es incapaz de entender que una operación puede realizarse en
dos o más direcciones.
Teoría de la mente. Conocimiento y comprensión de los procesos mentales.
La teoría de la mente es la conciencia de la amplia variedad de estados
mentales humanos (creencias, intenciones, deseos, sueños, etc.) y la
comprensión de que otros poseen sus propias creencias, deseos e intenciones
distintivas. Tener una teoría de la mente nos permite entender y predecir la
conducta de otros y dar sentido al mundo social. El campo emergente de la
neurociencia social ha contribuido a la comprensión de la teoría de la mente
mediante la obtención de imágenes cerebrales mientras los individuos realizan
tareas que exigen la comprensión de una intención, creencia u otro estado
mental.
Piaget fue el primer estudioso en investigar la teoría de la mente de los niños,
su incipiente conciencia de sus procesos mentales y los de otras personas.
TEORÍA SOCIOCULTURAL DE VYGOTSKY
Teoría sociocultural. Destaca la función que desempeñan en el desarrollo los
diálogos cooperativos entre los niños y los miembros de la sociedad con mayor
conocimiento. Gracias a tales intercambios, los niños aprenden la cultura de su
comunidad (formas de pensar y de comportarse).
Lev Vygotsky (1896-1934) fue un destacado representante de la psicología rusa.
Propuso una teoría del desarrollo del niño que refleja el enorme influjo de los
acontecimientos históricos de su época. Tras el triunfo de la Revolución de
Octubre de 1917, los líderes de la nueva sociedad soviética destacaron la
influencia de cada individuo en la transformación de la sociedad mediante el
trabajo y la educación. Vygotsky formuló una teoría psicológica que correspondía
a la nueva situación del país. Su teoría pone de relieve las relaciones del individuo
con la sociedad. Afirmó que no es posible entender el desarrollo del niño si no se
conoce la cultura donde se cría. Pensaba que los patrones de pensamiento del
individuo no se deben a factores innatos, sino que son producto de las
instituciones culturales y de las actividades sociales. La sociedad de los adultos
tiene la responsabilidad de compartir su conocimiento colectivo con los
integrantes más jóvenes y menos avanzados para estimular el desarrollo
intelectual.
Por medio de las actividades sociales el niño aprende a incorporar a su
pensamiento herramientas culturales como el lenguaje, los sistemas de conteo,
la escritura, el arte y otras invenciones sociales. El desarrollo cognoscitivo se
lleva a cabo a medida que internaliza los resultados de sus interacciones sociales.
De acuerdo con la teoría de Vygotsky, tanto la historia de la cultura del niño
como la de su experiencia personal son importantes para comprender el
desarrollo cognoscitivo. Este principio de Vygotsky refleja una concepción
cultural-histórica del desarrollo.
A Vygotsky se le considera uno de los primeros críticos de la teoría piagetiana
del desarrollo cognoscitivo. En su perspectiva, el conocimiento no se construye
de modo individual como propuso Piaget, sino que se coconstruye entre las
personas a medida que interactúan. Las interacciones sociales con compañeros
y adultos más conocedores constituyen el medio principal del desarrollo
intelectual. Según Vygotsky, el conocimiento no se sitúa ni en el ambiente ni en
el niño. Más bien, se localiza dentro de un contexto cultural o social determinado.
En otras palabras, creía que los procesos mentales del individuo como recordar,
resolver problemas o planear tienen un origen social (Weistch yTulviste).
De acuerdo con Vygotsky, el niño nace con habilidades mentales elementales,
entre ellas la percepción, la atención y la memoria. Gracias a la interacción con
compañeros y adultos más conocedores, estas habilidades “innatas” se
transforman en funciones mentales superiores. Más concretamente, Vygotsky
pensaba que el desarrollo cognoscitivo consiste en internalizar funciones que
ocurren antes en lo que él llamó plano social.
Conceptos fundamentales
Vygotsky considera cinco conceptos que son fundamentales: las funciones
mentales, las habilidades psicológicas, la zona de desarrollo próximo, las
herramientas del pensamiento y la mediación. En este sentido, se explica cada
uno de estos conceptos.
Funciones mentales
Para Vygotsky existen dos tipos de funciones mentales: las inferiores y las
superiores. Las funciones mentales inferiores son aquellas con las que nacemos,
son las funciones naturales y están determinadas genéticamente. El
comportamiento derivado de estas funciones es limitado; está condicionado por
lo que podemos hacer.
Las funciones mentales superiores se adquieren y se desarrollan a través de la
interacción social. Puesto que el individuo se encuentra en una sociedad
específica con una cultura concreta, estas funciones están determinadas por la
forma de ser de esa sociedad. Las funciones mentales superiores son mediadas
culturalmente. El comportamiento derivado de las funciones mentales superiores
esta abierto a mayores posibilidades. El conocimiento es resultado de la
interacción social; en la interacción con los demás adquirimos conciencia de
nosotros, aprendemos el uso de los símbolos que, a su vez, nos permiten pensar
en formas cada vez más complejas. Para Vygotsky, a mayor interacción social,
mayor conocimiento, más posibilidades de actuar, más robustas funciones
mentales.
De acuerdo con esta perspectiva, el ser humano es ante todo un ser cultural y
esto es lo que establece la diferencia entre el ser humano y otro tipo de seres
vivientes, incluyendo los primates. El punto central de esta distinción entre
funciones mentales inferiores y superiores es que el individuo no se relaciona
únicamente en forma directa con su ambiente, sino también a través de y
mediante la interacción con los demás individuos.
Habilidades psicológicas
Para Vygotsky, las funciones mentales superiores se desarrollan y aparecen en
dos momentos. En un primer momento, las habilidades psicológicas o funciones
mentales superiores se manifiestan en el ámbito social y, en un segundo
momento, en el ámbito individual. Por lo tanto "sostiene que en el proceso
cultural del niño, toda función aparece dos veces, primero a escala social, y más
tarde a escala individual. Primero entre personas (interpsicológica) y después en
el interior del propio niño (intrapsicológica). Afirma que todas las funciones
psicológicas se originan como relaciones entre seres humanos".
Cuando un niño llora porque algo le duele, expresa dolor y esta expresión
solamente es una función mental inferior, es una reacción al ambiente. Cuando
el niño llora para llamar la atención ya es una forma de comunicación, pero esta
comunicación sólo se da en la interacción con los demás; en ese momento, se
trata ya de una función mental superior interpsicológica, pues sólo es posible
como comunicación con los demás. En un segundo momento, el llanto se vuelve
intencional y, entonces, el niño lo usa como instrumento para comunicarse. El
niño, con base en la interacción, posee ya un instrumento para comunicarse; se
trata ya de una función mental superior o las habilidad psicológica propia,
personal, dentro de su mente, intrapsicológica.
Como se puede ver, se da un paso de una etapa a otra, con esto es posible decir
que "una de las tendencias del desarrollo más importantes en la adquisición de
conceptos, es la que consiste en el cambio gradual de una base precategorial a
otra categorial de clasificar la experiencia, o de una base relativamente concreta
a otra verdaderamente abstracta de categorizar y designa significados
genéricos..."
El paso de las primeras a las segundas es el concepto de interiorización o
internalización. Designa el proceso de construir representaciones internas de
acciones físicas externas o de operaciones mentales. Un buen ejemplo de este
proceso de internalización se observa cuando un adulto le lee a un niño pequeño.
Por ejemplo, un progenitor puede señalar los objetos en una página y separar
contando “uno”, “dos”, “tres” y así sucesivamente. La siguiente vez que los dos
lean juntos el libro, el niño señalará las ilustraciones y tratará de contar los
objetos sin ayuda. Un niño muy pequeño tenderá a pronunciar además las
palabras. En la interpretación de Vygotsky, el niño está internalizando una forma
de usar los números para darle sentido a un conjunto de objetos. Cuando
comienza a separarlos contando sin la presencia ni ayuda de un padre que facilite
la tarea, habrá realizado esta operación externa por su cuenta. La operación de
contar se ha convertido en parte de su organización interna y la lleva a cabo sin
asistencia de otros. En último término, el desarrollo del individuo llega a su
plenitud en la medida en que se apropia, hace suyo, interioriza las habilidades
interpsicológicas. En un primer momento, dependen de los otros; en un segundo
momento, a través de la interiorización, el individuo adquiere la posibilidad de
actuar por si mismo y de asumir la responsabilidad de su actuar.
Herramientas del pensamiento
En forma parecida a la concepción de Piaget, Vygotsky definió el desarrollo
cognoscitivo en función de los cambios cualitativos de los procesos del
pensamiento. Sólo que los describió a partir de las herramientas técnicas y
psicológicas que emplean los niños para interpretar su mundo. En general, las
primeras sirven para modificar los objetos o dominar el ambiente; las segundas,
para organizar o controlar el pensamiento y la conducta.
En el ejemplo anterior (el adulto que lee al niño pequeño), el niño está
aprendiendo a utilizar un sistema de conteo que le permite ordenar los objetos.
Los números, las palabras y otros sistemas de símbolos son ejemplo de
herramientas psicológicas. He aquí otros: los sistemas lógicos, las normas y
convenciones sociales, los conceptos teóricos, los mapas, los géneros literarios
y los dibujos. Algunos ejemplos de herramientas técnicas son papel y lápiz,
transportadores geométricos, máquinas, reglas y martillos. Según Vygotsky,
toda cultura posee sus propias herramientas técnicas y psicológicas que
transmite a los niños por medio de las interacciones sociales. Y a su vez las
herramientas culturales moldean la mente.
¿Cuáles son algunas de las formas en que la sociedad moldea el pensamiento del
niño? A principios de la década de 1900, por ejemplo, las madres enseñaban a
sus hijas a hacer mantequilla y a hilar cuando llegaban a la pubertad. Pocas
jóvenes aprenden hoy esas destrezas. Antes del advenimiento de las
calculadoras baratas, los estudiantes debían memorizar hechos aritméticos,
como las raíces cuadradas. En la mayoría de las escuelas modernas se les
permite usar calculadoras en las clases de matemáticas y de ciencias. Otra
herramienta tecnológica, el ordenador, cada vez tienen más aceptación en el
aula y en el hogar. Educadores y maestros empiezan a preguntarse cómo
afectará el ordenador al desarrollo cognoscitivo y social de los niños durante la
era tecnológica.
Lenguaje y desarrollo
Para Vygotsky, el lenguaje es la herramienta psicológica que más influye en el
desarrollo cognoscitivo. Al respecto dice (1962): “El desarrollo intelectual del
niño se basa en el dominio del medio social del pensamiento, es decir, el
lenguaje” (p. 24). Distingue tres etapas en el uso del lenguaje: la etapa social,
la egocéntrica y la del habla interna.
En la primera etapa, la del habla social, el niño se sirve del lenguaje
fundamentalmente para comunicarse. El pensamiento y el lenguaje cumplen
funciones independientes.
El niño inicia la siguiente etapa, el habla egocéntrica, cuando comienza a usar el
habla para regular su conducta y su pensamiento. Habla en voz alta consigo
mismo cuando realiza algunas tareas. Como no intenta comunicarse con otros,
estas autoverbalizaciones se consideran una habla privada no una habla social.
En esta fase del desarrollo, el habla comienza a desempeñar una función
intelectual y comunicativa.
Los niños internalizan el habla egocéntrica en la última etapa del desarrollo del
habla, la del habla interna. La emplean para dirigir su pensamiento y su
conducta. En esta fase, pueden reflexionar sobre la solución de problemas y la
secuencia de las acciones manipulando el lenguaje “en su cabeza”.
Zona del desarrollo proximal. Término de Vygotsky para referirse a la diferencia
entre lo que un niño puede hacer solo y lo que puede hacer con ayuda.
Una de las aportaciones más importantes de la teoría de Vygotsky a la psicología
y a la educación es el concepto de zona del desarrollo proximal. A Vygotsky
(1978) le interesaba el potencial del niño para el crecimiento intelectual más que
su nivel real de desarrollo.
La zona de desarrollo proximal incluye las funciones que están en proceso de
desarrollo pero que todavía no se desarrollan plenamente. La zona de desarrollo
proximal define aquellas funciones que todavía no maduran sino que se hallan
en proceso de maduración. Funciones que madurarán mañana pero que
actualmente están en un estado embrionario. Debe llamárseles “botones” o
“flores” del desarrollo y no sus “frutos”. El actual nivel del desarrollo lo
caracteriza en forma retrospectiva, mientras que la zona de desarrollo proximal
lo caracteriza en forma prospectiva.
En la práctica la zona del desarrollo proximal representa la brecha entre lo que
el niño puede hacer por sí mismo y lo que puede hacer con ayuda. . Por ejemplo,
a un niño de 6 años podría serle difícil armar por su cuenta un avión a escala,
pero podría hacerlo con la ayuda y la supervisión de un hermano mayor de más
experiencia.
Vygotsky supuso que las interacciones con los adultos y con los compañeros en
la zona del desarrollo proximal le ayuda al niño a alcanzar un nivel superior de
funcionamiento.
La ZDP es un término de Vygotsky para referirse a la diferencia entre lo que un
niño puede hacer por sí solo y lo que puede hacer con ayuda. De acuerdo con
Vygotsky, en cualquier punto del desarrollo hay problemas que el niño está a
punto de resolver, y para lograrlo sólo necesita cierta estructura, claves,
recordatorios, ayuda con los detalles o pasos del recuerdo, aliento para seguir
esforzándose y cosas por el estilo. Por supuesto, hay problemas que escapan a
las capacidades del niño, aunque se le explique con claridad cada paso. La zona
de desarrollo próximo es el área en la que el niño no puede resolver por sí mismo
un problema, pero que lo hace si recibe la orientación de un adulto o la
colaboración de algún compañero más avanzado (Wertsch). En este punto, la
instrucción tiene éxito porque el aprendizaje real es posible.
Podemos ver ahora la forma en que las ideas de Vygotsky sobre la función del
habla privada en el desarrollo cognoscitivo se ajustan a la noción de la zona de
desarrollo próximo.
A menudo, el adulto ayuda al niño a resolver un problema o a cumplir una tarea
usando apoyos verbales y estructuración.
Este andamiaje puede reducirse gradualmente conforme el niño se haga cargo
de la orientación. Al principio, quizá se presente los apoyos como habla privada
y, finalmente, como habla interna. Avancemos a un día futuro en la vida de la
niña que en el ejemplo anterior había perdido un juguete y escuchemos lo que
piensa al darse cuenta de que le falta un libro de la escuela.
Evaluación. Una implicación de la zona de desarrollo próxima tiene que ver con
la evaluación. Casi todas las pruebas miden únicamente lo que los estudiantes
hacen solos, y aunque la información que arrojan puede ser útil, no indica a los
padres o maestros cómo apoyar a los estudiantes para que aprendan más. Una
alternativa puede ser la evaluación dinámica (Spector) o la evaluación del
potencial de aprendizaje (Feuerstein). Para identificar la zona de desarrollo
próximo, estos métodos piden al niño que resuelva un problema y luego le
ofrecen apoyos e indicaciones para ver cómo aprende, se adapta y utiliza la
orientación.
Los apoyos se incrementan en forma gradual para ver cuánta ayuda necesita y
cómo responde. El maestro observa, escucha y toma notas cuidadosamente
acerca de la forma en que el niño emplea la ayuda y el nivel de apoyo que
necesita. Luego se sirve de esta información para planear agrupamientos
instruccionales, tutoría entre compañeros, tareas de aprendizaje, trabajos para
casa, etcétera.
Enseñanza. La segunda implicación del trabajo de Vygotsky se relaciona con la
enseñanza, pero la evaluación y la enseñanza están muy relacionadas. Los
estudiantes deben ser colocados en situaciones en las que si bien tienen que
esforzarse para entender, también disponen del apoyo de otros compañeros o
del profesor. En ocasiones, el mejor maestro es otro estudiante que acaba de
resolver el problema, ya que es probable que opere en la zona de desarrollo
próximo del primero. La teoría de Vygotsky propone que además de disponer el
entorno de forma que sus alumnos puedan descubrir por sí mismos, los
profesores deben guiarlos con explicaciones, demostraciones y el trabajo con
otros estudiantes que haga posible el aprendizaje cooperativo. También será
conveniente que un alumno trabaje con alguien que sea sólo algo mejor que él
en la actividad. Además, debe alentarse a los estudiantes a servirse del lenguaje
para organizar su pensamiento y expresar lo que pretenden lograr. El diálogo y
la discusión son rutas importantes al aprendizaje.
ZONA DE DESARROLLO POTENCIAL. Su teoría propone que el niño va
adquiriendo conocimiento mediante interacciones con otros (plano
interpsicológico), que luego internaliza sumándole su valor personal (plano
intrapsicológico). El concepto de Zona de Desarrollo Potencial (ZDP), a la que
distingue de la Zona de Desarrollo Real (ZDR), es la región dinámica en la que
se lleva a cabo la transición desde el funcionamiento interpsicológico al
intrapsicológico. Para estudiar estas problemáticas en el campo del sonido
musical, se diseñó el Test de Atributos del Sonido (TAS) que indaga, de modo
análogo al MDE, la formación de conceptos en esta área de conocimiento. La
resolución del TAS permite observar dos tipos de desempeño en los sujetos de
estudio: en tanto algunos realizan la tarea de modo independiente (ZDR), otros
lo hacen en colaboración con el examinador (ZDP). Este estudio analiza las
intervenciones del examinador durante la administración del TAS y su incidencia
en la modificación del desempeño de los sujetos. Los resultados indicarían que a
medida que aumenta la edad, estos desempeños se vuelven más independientes
y que la ayuda sólo resultaría efectiva en aquellos casos en los que, según se
presupone, estaría aconteciendo el proceso de transición hacia la siguiente etapa
de desarrollo, lo que pondría en evidencia la presencia de una ZDP. El
conocimiento musical parece incidir en alguna medida en generar la ZDP de
modo que el aprendizaje específico permitiría adelantar el desarrollo de las
capacidades requeridas para alcanzar más rápidamente la formación de
conceptos. Diferencias en la rapidez y la amplitud de las modificaciones
producidas por los sujetos podrían ser indicadoras del estado actual de la ZDP y
su análisis aportaría información valiosa para favorecer los procesos de
enseñanza.
ZONA DE DESARROLLO REAL. Corresponde a los conjuntos de conocimientos
que posee y las actividades que el niño puede realizar por sí mismo sin la guía y
ayuda de otras personas.
LA PERSPECTIVA SOCIOCULTURAL DE VYGOTSKY
En definitiva el papel que cumple la cultura en el desarrollo cognitivo de los seres
humanos es muy importante ya que se desenvuelve dentro de ella. Los seres
humanos, al nacer, poseen funciones mentales elementales que luego sufren
cambios debido a las diferentes culturas, es por ello que; si tenemos dos niños,
uno de occidente y otro de oriente, nos será posible observar que presentan
distintas formas de aprendizaje que los llevarán a desarrollar sus funciones
mentales superiores.
Al hablar de culturas, por lo tanto, nos estaremos refiriendo a una variedad de
ellas y a diferencias entre ellas por lo que el desarrollo de la inteligencia no será
un mismo producto en todo sentido.
De lo dicho anteriormente se puede decir que "ningún conjunto de capacidades
cognoscitivas es necesariamente más "avanzado" que otro; en lugar de ello,
representan formas alternativas de razonamiento o "herramientas de
adaptación", que ha evolucionado debido a que permiten los niños adaptarse con
éxito a los valores y tradiciones culturales...".
Los niños pequeños son exploradores curiosos que participan de manera activa
del aprendizaje y descubrimiento de nuevos principios. Sin embargo Vygotsky
otorga menor importancia al descubrimiento autoiniciado debido a que hacía
hincapié en la relevancia de las contribuciones sociales al crecimiento
cognoscitivo.
Muchos de los "descubrimientos" importantes que realizan los niños ocurren
dentro del contexto de diálogos cooperativos, o colaborativos, entre un tutor
experimentado, que modela la actividad y transmite instrucciones verbales, y un
discípulo novato que primero trata de entender la instrucción del autor y con el
tiempo internaliza esta información usándola para regular su propio desempeño.
Para ilustrar de mejor manera el aprendizaje colaborador, imaginemos lo
siguiente: Annie una niña de cuatro años de edad, recibe un rompecabezas como
regalo. Cuando trata de armarlo no lo logra, hasta que llega el padre y le da
algunos consejos. Le sugiere que podría armar primero las esquinas. Cuando
Annie se frustra, el padre coloca dos piezas que encajan cerca una de la otra de
modo que ella lo note y cuando Annie tiene éxito la estimula y felicita. De este
modo, a medida que Annie va entendiendo el proceso, trabaja cada vez más
independiente.
Vygotsky sostiene que el lenguaje es crucial para el desarrollo cognoscitivo.
Proporciona el medio para expresar ideas y plantear preguntas, las categorías y
los conceptos para el pensamiento y los vínculos entre el pasado y el futuro. Al
pensar un problema, por lo general pensamos en palabras y oraciones parciales.
Vygotsky destacó la función del lenguaje en el desarrollo cognitivo, ya que
consideraba que bajo la forma de habla privada (hablarse a uno mismo) el
lenguaje orienta el desarrollo cognoscitivo.
Podemos decir además que, dentro del lenguaje encontramos el habla privada,
que es un esfuerzo del niño por guiarse.
"...el habla privada, como la denomina, no es egocéntrica y que, por el contrario,
ocurre cuando los niños pequeños encuentran obstáculos o dificultades y
representan su esfuerzo por guiarse."
Además es posible encontrar relación entre el pensamiento lógico y la capacidad
lingüística, puesto que el desarrollo lingüístico no está al margen de, por
ejemplo; representaciones abstractas. Esta relación servirá para la
internalización de operaciones lógicas, lo que permitirá entender y manipular
otras relaciones de carácter abstracto.
Puesto que el habla privada ayuda a los a los estudiantes a regular su
pensamiento, tiene sentido permitir e incluso alentar su uso en la escuela. Insistir
en que se guarde absoluto silencio cuando los jóvenes estudiantes resuelven
problemas difíciles puede hacer que el trabajo les resulte todavía más arduo.
La autoinstrucción cognoscitiva es un método que enseña a los estudiantes la
forma de hablarse a si mismos para dirigir su aprendizaje. Por ejemplo, aprenden
a recordarse que deben trabajar con calma y cuidado. Durante las tareas "se
habla continuamente" diciendo cosas como "Bueno, ¿qué tengo que hacer
ahora?...Copiar el dibujo con líneas diferentes. Tengo que hacerlo despacio y con
cuidado."
El habla interior no sólo resulta importante en la edad escolar sino que de hecho
"el niño en edad preescolar dedica horas enteras al lenguaje consigo mismo.
Surge en él nuevas conexiones, nuevas relaciones entre las funciones, que no
figuraban en las conexiones iniciales de sus funciones...".
Como hemos visto ya, Vygotsky le mucha importancia al aspecto sociocultural
en el desarrollo cognoscitivo, pues tomando en cuenta esto diremos que el habla
como factor importante en el aprendizaje se da de una manera progresiva.
Así mismo, Vygotsky mantiene la importante función de los adultos y
compañeros, dado que creía que el desarrollo cognoscitivo ocurre a partir de las
conversaciones e intercambios que el niño sostiene con miembros más
conocedores de la cultura, adultos o compañeros más capaces.
Otro concepto importante es el del aprendizaje guiado. En muchas culturas, los
niños no aprenden en la escuela con otros niños, ni sus padres les proporcionan
lecciones sobre tejer y cazar de manera formal. En lugar de ello, aprenden por
medio de participación guiada, debido a que participan en forma activa en
actividades relevantes desde el punto de vista cultural al lado de compañeros
más hábiles que les proporciona la ayuda y el estímulo necesarios. La
participación guiada es un "aprendizaje para pensar" informal en el que las
cogniciones de los niños son moldeadas cuando participan, junto con los adultos
u otros individuos más expertos en tareas cotidianas relevantes desde el punto
de vista cultural tales como preparar los alimentos, lavar la ropa, cosechar las
siembras o tan sólo conversas sobre el mundo que los rodea.
De acuerdo con Vygotsky, un niño usualmente aprende en circunstancias en las
que un guía (por lo general sus padres) le van presentando tareas cognoscitivas,
entonces aquí vemos lo importante del trato interpersonal, que por ejemplo,
Piaget no da importancia tan relevante.
Andamiaje. Apoyo temporal para ayudar al niño a dominar una tarea.
Modelo de interacción social. Modelo, basado en la teoría sociocultural de
Vygotsky, que postula que los niños construyen recuerdos autobiográficos
cuando conversan con los adultos acerca de sucesos compartidos.
Pragmática. El conocimiento práctico que se necesita para usar el lenguaje
con propósitos de comunicación.
Habla social. Habla que se pretende sea entendida por otros.
Habla privada. Hablar en voz alta con uno mismo sin intención de comunicarse
con otros.
MODELOS DE APRENDIZAJE DE BRUNER:
1. Modelo enactivo
El modelo enactivo que propuso Bruner es el modo de aprendizaje que aparece
primero, ya que se basa en algo que realizamos desde los primeros días de vida:
la acción física, en el significado más amplio del término. En este, la interacción
con el entorno sirve como base para la representación actuante, es decir, el
procesamiento de la información sobre aquello que tenemos cerca que nos llega
a través de los sentidos.
Así, en el modelo enactivo de Jerome Bruner el aprendizaje se realiza a través
de la imitación, la manipulación de objetos, el baile y la actuación, etc. Se trata
de un modo de aprendizaje equiparable a la etapa sensoriomotriz de Piaget. Una
vez consolidados ciertos aprendizajes a través de este modo, aparece el modelo
icónico.
2. Modelo icónico
El modo icónico de aprendizaje se fundamenta en el uso de dibujos e imágenes
en general que puedan servir para aportar información sobre algo más allá de
ellas mismas. Ejemplos de aprendizajes basados en el modelo icónico son la
memorización de países y capitales observando un mapa, la memorización de
distintas especies animales viendo fotografías, o dibujos o películas, etc.
Para Jerome Bruner, el modo icónico de aprendizaje representa la transición de
lo concreto a lo abstracto, y por tanto presenta características que pertenecen a
estas dos dimensiones.
3. Modelo simbólico
El modelo simbólico se basa en el uso del lenguaje, ya sea hablado o escrito.
Como el lenguaje es el sistema simbólico más complejo que existe, es a través
de este modelo de aprendizaje como se accede a los contenidos y procesos
relacionados con lo abstracto.
Aunque el modelo simbólico es el último en aparecer, Jerome Bruner recalca que
los otros dos siguen produciéndose cuando se aprende de este modo, si bien han
perdido buena parte de su protagonismo. Por ejemplo, para aprender los
patrones de movimiento de una danza tendremos que recurrir al modo enactivo
independientemente de nuestra edad, y lo mismo ocurrirá si queremos
memorizar las partes del cerebro humano.
PERSPECTIVA CONTEXTUAL
Perspectiva contextual. Visión del desarrollo humano que considera que el
individuo es inseparable del contexto social.
Teoría bioecológica. Teoría de Bronfenbrenner para explicar los procesos y
contextos del desarrollo humano, en la que se identifican cinco niveles de
influencias ambientales.
TEORÍA BIOECOLÓGICA
DE BRONFENBRENNER
En los círculos
concéntricos se
muestran los niveles de
influencia ambiental
sobre el individuo, desde
el ambiente más íntimo
(el microsistema) hasta
el más dilatado (el
cronosistema), todos
situados sobre la
dimensión perpendicular
del tiempo.
PERSPECTIVA EVOLUTIVA/SOCIOBIOLÓGICA
Perspectiva evolutiva / sociobiológica. Visión del desarrollo humano que se
centra en las bases evolutivas y biológicas del comportamiento.
Etología. Estudio de las conductas de adaptación de especies animales
evolucionadas para favorecer su supervivencia.
Psicología evolutiva. Aplicación al comportamiento individual de los principios
darwinianos de selección natural y supervivencia del más apto.
ENFOQUE DEL PROCESAMIENTO DE INFORMACIÓN.
Enfoque del estudio del desarrollo cognoscitivo mediante observación y análisis
de los procesos mentales que se aplican para percibir y manejar la información.
Modelo similar a una computadora usado para describir la forma en que los seres
humanos codifican, almacenan y recuperan la información.
Codificación. Proceso mediante el cual se prepara la información para el
almacenamiento a largo plazo y la recuperación posterior.
Almacenamiento. Retención de la información en la memoria para uso futuro.
Recuperación. Proceso mediante el cual se recuerda o se tiene acceso a la
información del almacén de memoria.
Herramientas culturales. Las herramientas reales (computadoras, básculas,
etcétera) y los sistemas de símbolos (números, lenguaje, gráficas) que permiten
que los miembros de una sociedad se comuniquen, piensen, resuelvan problemas
y generen conocimientos.
MEMORIA
Memoria. Capacidad para recordar las cosas que hemos experimentado,
imaginado y aprendido.
Memoria sensorial. Almacenamiento inicial, breve y temporal, de la información
sensorial.
Memoria de corto plazo (MCP). Almacenamiento de corto plazo de la información
que se procesa de manera activa. La información que es codificada o recuperada
se mantiene en la memoria de trabajo, llamada a veces memoria de corto
plazo, un almacén de corto plazo para la información sobre la que una persona
trabaja activamente, es decir, la información que trata de entender, recordar o
pensar. Estudios de neuroimagen cerebral han demostrado que la memoria de
trabajo se localiza en parte en la corteza prefrontal, la porción grande del lóbulo
frontal que se ubica directamente detrás de la frente
Memoria de largo plazo. Memoria de trabajo; almacena brevemente y procesa la
información seleccionada de los registros sensoriales. La parte de la memoria
que es más o menos permanente, correspondiente a todo lo que “sabemos”.
Almacenamiento de capacidad prácticamente ilimitada que conserva la
información por largos periodos. Este mecanismo también puede recuperar
información de la memoria de largo plazo para realizar un procesamiento más a
fondo. También puede ampliar de manera temporal la capacidad de la memoria
de trabajo mediante el desplazamiento de la información a dos sistemas
subsidiarios separados mientras él se ocupa de otras tareas. Uno de esos
sistemas subsidiarios retiene la información verbal (como en la tarea con los
dígitos) y el otro conserva imágenes visuales y espaciales.
Memoria genérica. Memoria que produce guiones de rutinas familiares para
dirigir la conducta. Ejemplo: como el viaje en autobús al jardín de niños o un
almuerzo en la casa de la abuela. Ayuda al niño a saber qué esperar y cómo
actuar.
Memoria autobiográfica. Memoria de sucesos específicos en la vida de la persona.
No todos los componentes de la memoria episódica se convierten en parte de la
memoria autobiográfica, sino sólo aquellos que tienen un significado personal
Memoria implícita. Recuerdo inconsciente, por lo general de hábitos y destrezas;
también se llama memoria procedimental. Memoria para la información que no
podemos expresar fácilmente en palabras y que podemos no estar conscientes
de tener; esos recuerdos no pueden recuperarse intencionalmente de la
memoria.
Memoria explícita. Recuerdo intencional y consciente, por lo regular de hechos,
nombres y sucesos. Memoria para información que podemos expresar fácilmente
en palabras y que estamos conscientes de tener; esos recuerdos pueden
recuperarse de la memoria de manera intencional.
Memoria episódica. Memoria de largo plazo de experiencias o sucesos específicos
ligados a tiempo y lugar. . Parte de la memoria de largo plazo que almacena
eventos experimentados personalmente.
Memoria semántica. Parte de la memoria de largo plazo que almacena hechos e
información general.
Memoria procedimental. Parte de la memoria de largo plazo que almacena
información relacionada con habilidades, hábitos y otras tareas perceptuales
motoras.
Memoria emocional. Respuestas emocionales aprendidas a varios estímulos.
Recuerdo. Capacidad para reproducir material de la memoria.
Función ejecutiva. Control consciente de los pensamientos, emociones y acciones
para alcanzar metas o resolver problemas.
Ejecutivo central. En el modelo de Baddeley , elemento de la memoria de trabajo
que controla el procesamiento de la información.
Reconocimiento. Capacidad para identificar un estímulo ya conocido.
Guión. Bosquejo general recordado de un suceso familiar repetido, que se utiliza
para dirigir la conducta.
Participación guiada. Participación del adulto en la actividad del niño, que ayuda
a estructurarla y a lograr que la comprensión que el niño tenga de dicha actividad
se acerque a la del adulto
LENGUAJE
Lenguaje. Sistema de comunicación basado en palabras y gramática.
Habla prelingüística. Precursora del habla lingüística; emisiones de sonidos que
no incluyen palabras, sino llantos, arrullos, balbuceos e imitación accidental y
deliberada de sonidos sin que haya una comprensión de su significado.
Habla lingüística. Expresión verbal destinada a comunicar significados.
Holofrase. Palabra única que comunica un pensamiento completo. El bebé
promedio dice su primera palabra entre los 10 y los 14 meses, con lo que inicia
el habla lingüística: la expresión verbal que comunica significados. Al principio,
el repertorio verbal total de un infante se reduce casi a “mamá” o “papá”. O es
una sílaba simple que tiene más de un significado, el cual depende del contexto
en que el niño la profiere. “Pa” puede significar: “Quiero eso”, “Quiero salir” o
“¿Dónde está papá?”. Esta palabra, que expresa un pensamiento completo,
Habla telegráfica. Forma temprana de uso de frases que consta de pocas
palabras esenciales. Cuando Rita dice “Abeda bade”, quiere dar a entender “Mi
abuela barre el piso”.
Sintaxis. Reglas para formar frases en un idioma particular.
Nativismo. Teoría según la cual los seres humanos nacen con una capacidad
innata para adquirir el lenguaje. La postura de Chomsky se llama nativismo. A
diferencia de la teoría del aprendizaje de Skinner, el nativismo subraya la función
activa del que aprende. En razón de que el lenguaje es universal entre los seres
humanos, Chomsky (1957, 1972, 1995) propuso que el cerebro tiene una
capacidad innata para adquirirlo. Los bebés aprenden a hablar de manera tan
natural como aprenden a caminar. Chomsky sugirió que un dispositivo de la
adquisición del lenguaje programa el cerebro del niño para analizar el idioma
que escucha y averiguar sus reglas.
Dispositivo de la adquisición del lenguaje (DAL). En la terminología de Chomsky,
mecanismo innato con el que los niños infieren las reglas lingüísticas de lo que
oyen.
Mezcla de códigos. Uso de elementos de dos idiomas, a veces en la misma
emisión de voz, de parte de niños pequeños en hogares donde se hablan dos
lenguas.
Cambio de código. Alternar idiomas de acuerdo con la situación, como en los
pueblos que son bilingües.
Habla dirigida a niños. Forma de habla que se utiliza para dirigirse a los bebés o
niños pequeños; es lenta y simplificada, en tono agudo, con vocales exageradas,
palabras y frases cortas y mucha repetición.
Alfabetismo. Capacidad de leer y escribir.
Desarrollo físico y cognoscitivo en la niñez temprana habilidades motoras
gruesas. Habilidades físicas que involucran a los músculos largos. Ejemplo: como
correr y saltar, que involucran a los músculos largos.
Habilidades motoras finas. Habilidades físicas que involucran a los músculos
cortos y la coordinación ojo-mano. Ejemplo: abotonar camisas y dibujar,
implican la coordinación entre el ojo, la mano y los músculos pequeños. La
mejora de esas habilidades permite al niño asumir mayor responsabilidad en su
cuidado personal.
Sistemas de acción. Combinaciones de habilidades de complejidad creciente que
permiten una gama mayor o más precisa de movimiento y más control del
ambiente..
Lateralidad manual. Preferencia por el uso de una mano particular. Dado que el
hemisferio izquierdo (que controla el lado derecho del cuerpo) suele ser el
dominante, la mayoría de las personas utiliza más el lado derecho.
En las personas cuyo cerebro es funcionalmente más simétrico, suele dominar el
hemisferio derecho, lo que las convierte en zurdas. La lateralidad no siempre
está tan bien definida; no todos prefieren una mano para todas las tareas. La
probabilidad de ser zurdos es mayor entre los niños que entre las niñas.
Registros sensoriales. Puntos de entrada para la información pura de los
sentidos.
Atención. La selección de parte de la información de entrada para su
procesamiento posterior.
Segmentación. El agrupamiento de la información en unidades significativas para
que la memoria de corto plazo la maneje de manera más sencilla.
Repaso mecánico. Consiste en retener la información en la memoria repitiéndola
una y otra vez.
Efecto de posición serial. Efecto que consiste en que cuando nos piden recordar
una lista de elementos no relacionados, el desempeño es mejor para los
elementos colocados al inicio y al final de la lista.
Repaso elaborativo. Conexión de la nueva información en la memoria de corto
plazo con el material familiar almacenado en la memoria de largo plazo.
Esquema. Conjunto de creencias o expectativas acerca de algo que se basan en
la experiencia previa.
Fenómeno de la punta de la lengua. Fenómeno que consiste en saber una palabra
sin ser capaz de recordarla de inmediato.
Potenciación a largo plazo (PLP). Cambio de larga duración en la estructura o
función de una sinapsis que incrementa la eficiencia de la transmisión nerviosa
y se cree que está relacionado con la manera en que se almacena la información
en las neuronas.
LA MEDIACIÓN
LA MEDIACIÓN PEDAGÓGICA. Referida a la intencionalidad con la que se realizan
las propuestas de trabajo, los materiales empleados y las estrategias y
actividades a llevar a cabo en el aula por parte del docente, está representada
en los objetivos de aprendizaje de los proyectos que fueron caracterizados en
2014. Todos los proyectos son claros en establecer propósitos pedagógicos
tendientes a fortalecer dominios del aprendizaje –matemática, lectura y
escritura, ciencias naturales– o a favorecer procesos de pensamiento –iniciativa,
creatividad, relaciones lógicas–.
La mediación pedagógica es el conjunto de acciones, recursos y materiales
didácticos que intervienen en el proceso educativo para facilitar la enseñanza y
el aprendizaje (Córica). También se define la mediación como «la interacción,
experiencia de aprendizaje y de transmisión cultural […] (que) potencia las
capacidades del sujeto, despierta su competencia, regula la conducta, busca
significados, transforma los estímulos, provoca análisis metacognitivos de todo
proceso formativo para crear la autonomía del aprendizaje» (Zubiría)
Dentro del proceso de la mediación existen características significativas para ser
efectivos a la hora de valorar los procesos de avance de aprendizaje; por
ejemplo, ser específico con el logro o meta que se quiere alcanzar, buscar la
manera de facilitar la interacción entre los estudiantes, tener en cuenta la
estructura y concepciones de un enfoque pedagógico, proveer los contenidos
necesarios para alcanzar los logros, incluir recursos tecnológicos, tener en cuenta
elementos propios del contexto y de la cultura y no dejar de lado las experiencias,
las prácticas cotidianas, profesionales y disciplinares. De esta forma, la
mediación va a facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje y las interacciones
que se llevan a cabo entre los actores, el conocimiento y la cultura en un entorno
específico.
MEDIACIÓN TECNOLÓGICA. Es aquella en la que se hace uso de artefactos
culturales que tercian en las interacciones humanas, se evidenció en algunos de
los proyectos analizados en este estudio. Experiencias pedagógicas que
incorporan las tecnologías a los procesos de enseñanza y aprendizaje, no con un
carácter instrumental sino como herramienta mediadora entre el pensamiento,
el lenguaje, la enseñanza y el aprendizaje.
Para generar un proceso de mediación tecnológica hay unos claros protagonistas
más allá del artefacto usado y son los docentes, los estudiantes y las familias,
quienes son partícipes de la generación de saberes, de la construcción de
conocimiento, razón por la cual destacamos su papel dentro de este proceso de
aprendizaje.
De acuerdo con Prieto (2004), debido a que el diseño de mediaciones
pedagógicas tiene muy en cuenta el lenguaje y la comunicación, las tic juegan
un gran papel a la hora de transformar el uso de símbolos, lenguajes y materiales
que integran al máximo las posibilidades comunicativas del lenguaje digital –
escrito, visual, sonoro– y del medio a través del cual se presenta –audio, video,
texto, multimedia–. Se busca entonces que el docente haga uso de esta
diversidad de herramientas, apoyando la construcción de conocimiento, el
desarrollo de autorregulación y la eficacia en los estudiantes a través de la
mediación con artefactos tecnológicos. Sin embargo, la sola presencia del
«artefacto» tecnológico no produce de por sí tal conocimiento; la construcción
del mismo se realiza a través de las interacciones lingüísticas producidas en el
espacio curricular, donde el lenguaje es «la principal herramienta con que
cuentan los estudiantes y los maestros para llevar adelante la construcción del
conocimiento».
COGNICIÓN. La cognición es un concepto que hace referencia a distintos
aspectos de procesos como pensar, razonar, usar la memoria, formar conceptos,
consolidar habilidades, percibir o dirigir la atención hacia algo (García Madruga).
La cognición se define como el conjunto de procesos mentales por medio de los
cuales se organiza y se da sentido a la actividad, al pensamiento, al
razonamiento, a la acción, y a diferentes formas de relación de las personas con
el mundo y con la información que obtiene de él.
Las teorías computacionales de la cognición –también conocidas como teorías de
las ciencias cognitivas o del procesamiento de información- plantean que la
actividad humana funciona utilizando piezas de información que se combinan o
desarrollan en procesos, siguiendo una serie de reglas o principios. En este
sentido, nuestra manera de funcionar sería como un sistema computacional que
combina elementos de información para llegar a una meta particular en cada
proceso de percepción, atención, memoria, toma de decisiones, solución de
problemas, etcétera.
Las teorías constructivistas teorizan e investigan acerca de cómo los seres
humanos crean sistemas para entender de forma significativa sus mundos y
experiencias. Existen distintas formas de constructivismo, dentro de las cuales
resaltaremos dos:
La teoría constructivista operacional se sustenta en los planteamientos de
Jean Piaget sobre el desarrollo de los procesos cognitivos en el niño y el
adolescente. Esta teoría plantea dos principios: el de continuidad funcional y el
de discontinuidad estructural. El principio de continuidad funcional hace
referencia a que hay procesos funcionales que estarían siempre presentes en
cualquier proceso de relación de la persona con el mundo, independientemente
de su momento de desarrollo o de su punto de vista particular. Dichos procesos
son: la organización, la asimilación y la acomodación.
La teoría histórico-cultural tiene su raíz en la psicología histórico-cultural de
Lev Semiónovich Vygotski. Esta perspectiva plantea que los procesos mentales
son transformaciones de facultades predeterminadas, en función de la
participación de la persona en las prácticas y demás elementos de la cultura en
la cual crece y se desempeña. De acuerdo con lo anterior, los procesos
desarrollados en la actividad interpersonal se convierten en formas de actuar
propias, por medio de la participación en actividades convencionales con sentido
en los grupos sociales en los cuales se vive y se participa.
COGNICIÓN SITUADA. Es una teoría que afirma que el conocimiento no puede
ser separado de la acción, argumentando que todo el conocimiento está situado
en una actividad vinculada a contextos sociales, físicos y culturales. Dentro de
las teorías de cognición situada se incluyen también la cognición distribuida y la
cognición corporeizada. Estas teorías tienen diferencias en torno al grado de
corporización y de aspectos externos al sujeto, que son considerados cognitivos.
Sin embargo, comparten el principio de que la cognición no debe ser analizada
en abstracto, o como una acción puramente mental, sino en el contexto en que
se desarrolla. El aprendizaje, en este caso, es visto como mejoras en el
desempeño de un sujeto en una situación, en vez de verse como una pura
acumulación de conocimiento.
COGNICIÓN CORPOREIZADA. Sostiene que los procesos cognitivos se
desarrollan cuando un sistema, fuertemente integrado, emerge de interacciones
en tiempo real y dirigidas a objetivos entre organismos y sus ambientes; la
naturaleza de esas interacciones influencia la formación y, eventualmente,
especifica la naturaleza de las capacidades cognitivas que se desarrollan
(Anderson, 2007). Las teorías de cognición corporeizada resaltan la cognición
como un rasgo evolutivo, por lo cual consideran que debe estudiarse en términos
de la función adaptativa que provee al organismo. Además de esto, la cognición
se desarrolló en organismos con características físicas específicas, que permiten
aprovechar dichas peculiaridades.
COGNICIÓN DISTRIBUIDA. Plantea que lo cognitivo se encuentra más allá del
individuo, llegando a su ambiente y a la sociedad. La cognición distribuida supone
que los procesos cognitivos pueden estar distribuidos entre distintos miembros
de un grupo social; además, involucran la coordinación entre estructuras
internas y externas (materiales). La cognición distribuida retoma también los
planteamientos de la cognición corporeizada en torno a la función evolutiva de
la cognición y el papel que las interacciones con el ambiente tienen en el
desarrollo de capacidades cognitivas específicas, pero va más allá, planteando
que la estructura mental es una propiedad que emerge de la interacción entre
los recursos internos y externos del sujeto.
DEMANDA COGNITIVA.
En educación, se define por las operaciones mentales que se activan en los
estudiantes al realizar una determinada tarea. A mayor número de operaciones
mentales requeridas para ser resuelta la tarea, mayor es la demanda cognitiva
de la misma. La demanda cognitiva de las tareas aumenta de un nivel a otro. Es
importante no confundir complejidad con dificultad de las tareas. En un mismo
nivel es posible encontrar tareas fáciles y difíciles pues la demanda cognoscitiva
y el nivel de dificultad de una tarea no tienen un correlato necesario.
Lo cognitivo es aquello perteneciente o relacionado al conocimiento. En principio
la cognición se define como la facultad de una persona para procesar información
a partir de la percepción, el conocimiento adquirido, la experiencia y
características subjetivas que permiten valorar la información. Consiste en
procesos tales como el aprendizaje, razonamiento, atención, memoria,
resolución de problemas, toma de decisiones y procesamiento del lenguaje.
El desarrollo cognitivo se enfoca en los procedimientos intelectuales y en las
conductas que emanan de estos procesos. Este desarrollo es una consecuencia
de la voluntad de las personas por entender la realidad y desempeñarse en
sociedad, por lo que está vinculado a la capacidad natural que tienen los seres
humanos para adaptarse e integrarse a su ambiente. De todo esto se desprende
la llamada Demanda Cognitiva de una tarea o actividad de enseñanza que es el
tipo y nivel de pensamiento requerido de los estudiantes para poder participar
en la tarea y resolverla con éxito.
Lo que la tarea exige a los estudiantes determina la demanda cognitiva de la
tarea y en parte su potencial de aprendizaje. Se entiende por demanda cognitiva
de una tarea, a la caracterización que se hace de las tareas que se proponen al
estudiante, según la complejidad de los procesos cognitivos involucrados en la
resolución de dicha tarea. Los procesos cognitivos en el que se implican los
estudiantes determinarán lo que ellos pueden llegar a aprender.
Definida a partir del nivel implícito de trabajo intelectual requerido por cada uno
de los ejercicios propuestos a los estudiantes. Es decir que se define por las
operaciones mentales que se activan en los estudiantes al realizar una
determinada tarea.
A mayor número de operaciones mentales requeridas para ser resuelta la tarea,
mayor es la demanda cognitiva de la misma. La demanda cognitiva de las tareas
aumenta de un nivel a otro. Es importante no confundir complejidad con
dificultad de las tareas. En un mismo nivel es posible encontrar tareas fáciles y
difíciles pues la demanda cognoscitiva y el nivel de dificultad de una tarea no
tienen un correlato necesario.
NIVELES DE LA DEMANDA COGNITIVA. La demanda cognitiva presenta cinco
niveles en los que se pueden clasificar los ejercicios de los estudiantes.
PROCESOS METACOGNITIVOS
METACOGNICION
Según Glaser (1994), la metacognición es una de las áreas de investigación que
más ha contribuido a la configuración de las nuevas concepciones del aprendizaje
y de la instrucción. A medida que se han ido imponiendo las concepciones
constructivistas del aprendizaje, se ha ido atribuyendo un papel creciente a la
conciencia que tiene el sujeto y a la regulación que ejerce sobre su propio
aprendizaje.
Flavell, uno de los pioneros en la utilización de este término, afirma que la
metacognición, por un lado, se refiere “al conocimiento que uno tiene acerca de
los propios procesos y productos cognitivos o cualquier otro asunto relacionado
con ellos, por ejemplo, las propiedades de la información relevantes para el
aprendizaje” y, por otro, “a la supervisión activa y consecuente regulación y
organización de estos procesos, en relación con los objetos o datos cognitivos
sobre los que actúan, normalmente en aras de alguna meta u objetivo concreto”.
Así, por ejemplo, se practica la metacognición cuando se tiene conciencia de la
mayor dificultad para aprender un tema que otro; cuando se comprende que se
debe verificar un fenómeno antes de aceptarlo como un hecho; cuando se piensa
que es preciso examinar todas y cada una de las alternativas en una elección
múltiple antes de decidir cuál es la mejor, cuando se advierte que se debería
tomar nota de algo porque puede olvidarse.
Carretero, por una parte, se refiere a la metacognición como el conocimiento que
las personas construyen respecto del propio funcionamiento cognitivo. Un
ejemplo de este tipo de conocimiento sería saber que la organización de la
información en un esquema favorece su recuperación posterior. Por otra, asimila
la metacognición a operaciones cognitivas relacionadas con los procesos de
supervisión y de regulación que las personas ejercen sobre su propia actividad
cognitiva cuando se enfrentan a una tarea. Por ejemplo, para favorecer el
aprendizaje del contenido de un texto, un alumno selecciona como estrategia la
organización de su contenido en un esquema y evalúa el resultado obtenido.
Esta distinción entre el conocimiento metacognitivo y el control metacognitivo es
consistente con la distinción entre el conocimiento declarativo relativo al “saber
qué” y el conocimiento procedimental referido al “saber cómo”.
En consecuencia, es posible diferenciar dos componentes metacognitivos: uno
de naturaleza declarativa (conocimiento metacognitivo) y otro de carácter
procedimental (control metacognitivo o aprendizaje autorregulado), ambos
importantes para el aprendizaje y relacionados entre sí.
El conocimiento metacognitivo se refiere:
a) al conocimiento de la persona. En este caso, se trata del conocimiento que
tenemos de nosotros mismos como aprendices, de nuestras potencialidades y
limitaciones cognitivas y de otras características personales que pueden afectar
el rendimiento en una tarea;
b) conocimiento de la tarea. Hace alusión al conocimiento que poseemos sobre
los objetivos de la tarea y todas aquellas características de ésta, que influyen
sobre su mayor o menor dificultad, conocimiento muy importante, pues ayuda
al aprendiz a elegir la estrategia apropiada;
c) conocimiento de las estrategias. El aprendiz debe saber cuál es el repertorio
de estrategias alternativas que le permitirán llevar a cabo una tarea, cómo se
aplicarán y las condiciones bajo las cuales las diferentes estrategias resultarán
más efectivas.
APRENDER A APRENDER
¿Qué es enseñar a pensar?
La capacidad para aprender continuamente tiene mucho que ver con el
aprendizaje de estrategias generales del pensamiento que nos permiten conocer,
y buscar la información que necesitamos, en un momento dado, para resolver
una tarea o solucionar un problema. Esto implica que tan importante es saber
cuál es la información que uno tiene como saber la que le falta, en un momento
dado, para resolver la tarea o solucionar el problema. Esto también implica que
para favorecer un aprendizaje permanente se necesita sobre todo enseñar al
sujeto las capacidades que le permitan generar de manera continua la
información que va necesitando. Por lo tanto, podemos entender por estrategias
de enseñar a pensar el aprendizaje de estrategias generales del pensamiento,
que son objeto de instrucción explícita (MEC). Esta instrucción puede y debe
realizarse a través de las diferentes áreas del currículum, aunque puede aparecer
explícitamente como objetivo en algunas de ellas. Por ejemplo, enseñar a
diferenciar las ideas principales de las secundarias en un texto de Lengua;
enseñar a planificar un proceso de trabajo, estableciendo una secuencia de
operaciones, tiempo y recursos necesarios en Tecnología; enseñar a seleccionar
información relevante a partir de centros de documentación de fácil acceso en
Ciencias Sociales…etc. Con otras palabras, el aprendizaje de estrategias
generales de pensamiento no es asunto exclusivo de la Filosofía o de las
Matemáticas, aunque estas áreas contribuyan de manera específica en su
desarrollo, sino que de pueden desarrollar a través de todas y cada una de las
áreas (Ruggiero, 1988; Fischer,1990). En el capítulo siguiente se analizarán los
diferentes componentes del proceso de enseñar a pensar.
¿Se puede enseñar a pensar?
La respuesta a este interrogante para por resolver antes la cuestión de la
modificabilidad de la inteligencia. Si la inteligencia es o no modificable se inscribe
en el viejo marco histórico de las disputas entre genetistas y ambientalistas.
Actualmente la cuestión no se plantea en términos disyuntivos “o herencia” “o
ambiente”, sino en los del grado y forma que presenta su indiscutible interacción.
Herencia y medio sí pero ¿cuánto de una y de otra?
¿Cómo interactúan entre sí? (Pinillos; Mayor). Son bien conocidas las
experiencias de Feuerstein realizadas con hijos de emigrantes recién llegados a
Israel. Este psicólogo sospechó que los malos resultados de esos niños en los
test de inteligencia podían deberse fundamentalmente al hándicap sociocultural
provocado por el cambio al que fueron sometidos y también quizás, por la
deprivación cultural que ya traían.
Con otras palabras, los tests que se utilizaban para medir la inteligencia no eran
socioculturalmente neutrales, y favorecían a los sujetos de la cultura dominante
y de niveles socioeconómicos más elevados. Feuerstein trató de aplicar un
programa de adiestramiento que compensara en lo posible esos déficits
socioculturales. Trató fundamentalmente de “medir” no solamente lo que ya
sabían los sujetos sino sobre todo determinó lo que eran capees de aprender o
si se prefiere su “potencial de aprendizaje”. Este potencial nos indica las
posibilidades de cambio futuro y las posibilidades reales de mejora del sujeto.
No mide lo que es sino lo que puede ser a nivel intelectual. Existen pruebas
empíricas que ponen de manifiesto la modificabilidad cognitiva.
Un requisito fundamental de esta modificabilidad cognitiva es al mediación o
mediaciones instrumentales y sociales que usemos en el proceso de
aprendizaje. Algunos autores que han estudiado la adquisición del conocimiento
(Piaget; Bruner) han puesto mucho énfasis en la naturaleza constructiva
personal del sujeto y cada vez más se reconoce la importancia de la dimensión
social. El aprendizaje y el pensamiento tienen lugar en un contexto social,
están influenciados por la cultura y el entorno histórico e institucional en el que
se inscriben (Wertsch; Brown y otros). En la figura 1 se presenta un modelo
representativo del funcionamiento mental de la persona, el papel de la
cognición, de la metacognición y de la motivación-afectividad en un contexto
cultural, histórico e institucionalmente determinados. Actualmente sabemos
que los procesos cognitivos se desarrollan gracias a las interrelaciones sociales
que el sujeto realiza en su entorno (Vigotsky; Newman y otros).
Estrategias cognitivas
Una estrategia es un plan de acción para lograr un objetivo. Las estrategias
cognitivas constituyen métodos o procedimientos mentales para adquirir,
elaborar, organizar y utilizar información que hacen posible enfrentarse a las
exigencias del medio, resolver problemas y tomar decisiones adecuadas.
Se han propuesto diferentes denominaciones y clasificaciones de las estrategias
cognitivas.
Estrategias cognitivas de elaboración.
La elaboración es un proceso más complejo y profundo que la simple recepción
o repetición. La elaboración supone relacionar e integrar las informaciones
nuevas con los conocimientos más significativos. Se trata de favorecer el uso de
estrategias diversas que permitan codificar, asimilar y retener la nueva
información para poder recuperarla y utilizarla posteriormente. Mediante las
estrategias de elaboración el profesorado y el alumnado se implican más
activamente en el aprendizaje. Estas estrategias incluyen la elaboración
mediante imágenes (por ejemplo, una estrategia para facilitar el aprendizaje
consiste en utilizar imágenes o crear analogías que presentan el material o que
se relacione con ello; pueden ser generadas entre el grupo de compañeros-as o
facilitadas por el profesorado) y la elaboración verbal (por ejemplo, parafrasear
un texto, hacer inferencias explícitamente, formular y responder a
autopreguntas, resumir, pensar o hacer aplicaciones, establecer relaciones y
extraer conclusiones).
Estrategias cognitivas de organización.
Son los procedimientos utilizados para transformar y reconstruir la información,
dándole una estructura distinta a fin de comprenderla y recordarla mejor. Implica
un sujeto más consciente, activo y responsable en sus aprendizajes. Incluyen
estrategias de agrupamiento (por ejemplo, ordenar o clasificar en categorías
según características compartidas) y de esquematización (por ejemplo, para
comprender un texto los procedimientos pueden consistir en identificar las ideas
principales y secundarias, establecer relaciones entre conceptos, etc… para
conseguir una comprensión más profunda y una retención más eficaz).
Estrategias cognitivas de recuperación.
Las estrategias de elaboración y organización que hemos comentado permiten
un nivel más profundo en el procesamiento de la información, es decir, una
comprensión más exhaustiva y una codificación y retención más eficaz. Pero una
vez registrada la información en la memoria a largo plazo es necesario
recuperarla y utilizarla ante las distintas exigencias del medio.
Los procesos de recuperación estarán en estrecha dependencia de los procesos
habidos en la elaboración y organización de tal manera que si hacemos uso de
imágenes, dibujos, analogías, categorías, esquemas, etc… facilitamos también
los procesos de recuperación.
Estrategias motivacionales.
En el aprendizaje, además de los factores y estrategias cognitivas que hemos
mencionado, están siempre presentes factores motivacionales, que resultan tan
importantes como los cognitivos para lograr buenos resultados.
En algunas ocasiones el alumnado fracasa en las tareas académicas, no tanto
por carecer de estrategias cognitivas, como por un déficit en estrategias
motivacionales que les permitan desarrollar y mantener un estado motivacional
y un ambiente de aprendizaje apropiado.
Se presentan a continuación algunos criterios de actuación para la organización
motivacional de la instrucción, que se pueden traducir en aplicaciones concretas
(Alonso Tapia). Hay cinco factores a los cuales tiene que prestar atención el
profesorado:
1. La forma de presentar y estructurar la tarea;
2. La forma de organizar las actividades en el contexto de la clase;
3. Los mensajes que da antes, durante y después de la tarea y que afectan a la
relevancia y valor de las metas y a la valoración del sujeto;
4. El modelado de valores, así como de las formas de pensar y actuar al
enfrentarse con las tareas y
5. La forma que va a adoptar la evaluación del alumnado.
1. En relación con la forma de presentar y estructurar la tarea un criterio sería
activar la curiosidad y el interés del alumnado por el contenido del tema a tratar
o de la tarea a realizar. Algunas estrategias que podrían utilizarse son:
· Presentación de información nueva, sorprendente, incongruente con los
conocimientos previos del alumnado.
· Plantear o suscitar en el alumnado problemas que haya de resolver en su vida
cotidiana.
· Variar los elementos de la tarea para mantener la atención.
Otro criterio sería explicitar por qué es interesante realizar la tarea o contenido
que propone el profesorado mostrando así su relevancia. Se sugieren algunas
estrategias para ello:
· Relacionar el contenido de la instrucción, usando lenguaje y ejemplos familiares
al sujeto, con sus experiencias, con sus conocimientos previos y con sus valores.
· Mostrar la meta para la que puede ser relevante aprender lo que se presenta
como contenido de la instrucción, a ser posible mediante diferentes ejemplos.
2. En la relación con la forma de organizar las actividades en el contexto de la
clase un criterio sería organizar algunas actividades en grupos cooperativos, en
los cuales la evaluación de cada alumno depende de los resultados globales del
grupo, de tal manera que las expectativas se basen en que todos tienen algo que
aportar y la existencia de puntos de vista diferentes suscite la búsqueda de
nuevas informaciones, etc.
Otro criterio de actuación interesante sería dar el máximo de opciones posibles
de actuación, ofreciendo diferentes oportunidades de aprendizaje para conseguir
buenos resultados en condiciones de riesgo moderado.
3. En relación con los mensajes que da el profesor, criterio sería orientar la
atención del alumnado antes, durante y después de la tarea. Antes, hacia el
proceso de solución más que hacia el resultado. Durante, hacia la búsqueda y
comprobación de posibles medios de superar las dificultades. Después, informar
sobre lo correcto e incorrecto del resultado, centrando la atención del sujeto en
el proceso seguido y en lo que se ha aprendido.
Otro criterio sería promover explícitamente el autoconocimiento personal del
alumnado en relación con la toma de conciencia de los factores que les hacen
estar más o menos motivados enseñándoles a controlar su propio proceso de
aprendizaje.
4. En relación con el modelado que realiza el profesorado al afrontar las tareas
y valorar los resultados, un criterio de actuación sería intentar ser coherentes en
la práctica para que no se dé una incongruencia entre lo que hacemos y decimos.
5. En relación con la evaluación, un criterio sería organizar las evaluaciones a lo
largo del curso de forma que el alumnado las considere una ocasión para
aprender y se evite, en la medida de lo posible, la comparación de unos con
otros. Algunas estrategias podrían ser:
· Explicar e indicar los requerimientos para lograr buenos resultados a lo largo
del proceso.
· Facilitar la autoevaluación del alumnado con respecto a las propias capacidades,
limitaciones y logros alcanzados a lo largo del proceso de aprendizaje.
Estrategias metacognitivas.
El punto clave del aprender a aprender estriba en ofrecer al sujeto herramientas
que le ayuden a tomar conciencia de su proceso de aprendizaje y que sea la
persona misma quien lo supervise y controle. De ahí que muy frecuentemente
se hable en psicología del aprendizaje de favorecer el conocimiento
metacognitivo del sujeto. Cuando hablamos de estrategias de enseñar a pensar
nos referimos a este conocimiento metacognitivo. Podemos precisar ahora un
poco más en que consiste.
La metacognición hace referencia a los procesos de pensamiento que la persona
tiene acerca de su propio sistema cognitivo ( contenidos, procesos, capacidades,
limitaciones…) y, por otra parte, a los efectos reguladores que tal conocimiento
puede ejercer en su actividad ( Weinert y Kluwe).
Según Flavell, este conocimiento metacognitivo estaría formado por tres
variables importantes : variables personales o conocimientos de las capacidades
y limitaciones cognitivas propias, variables de tarea o conocimiento de las
características y dificultades específicas de una tarea determinada y variables de
estrategia o conocimiento de las ventajas o inconvenientes de los diferentes
procedimientos en la realización de las tareas.