Aportes p ar a l a
C e le
l eb r ac i ó n
Homilía y guión para la Santa Misa
La Santísima Trinidad 27 de mayo de 2018
Ciclo B. Color: Blanco Año XXII - Nº 1258
Aportes para la homilía
Con Dios Uno y Trino
renovemos la historia
Deut 4, 32-34. 39-40; Sal 32, 4-6. 9.
18-20. 22; Rom 8, 14-17; Mt 28, 16-20
El 11 de junio de 1580, luego de dos
intentos fallidos de fundación de la ciudad
de Buenos Aires y su puerto, Juan de Garay
estableció el asentamiento definitivo con el
nombre de “La ciudad de la Santísima Trinidad
y Puerto de Santa María de Buenos Aires”.
Este nombre recién fue cambiado en 1996,
cuando pasó a llamarse Ciudad Autónoma
de Buenos Aires. ¡Qué honor para el pueblo
argentino haber nacido bajo el nombre del
Dios revelado por Jesús! La Trinidad estuvo
desde los inicios de nuestro sufrido desarrollo
como Nación. Ante tal regalo de la historia, nos
preguntamos si hemos dejado que Dios acom-
pañe todos los procesos de crecimiento de la
pequeña aldea que hoy devino en metrópolis
cosmopolita y una Nación de brazos abiertos.
Pensamos que es posible retomar ese
hilo de la historia para que, creyendo en la
Santísima Trinidad, hagamos de la Ciudad de
Buenos Aires, donde están la sede de los tres
poderes del Estado y todo el pueblo argentino,
un proyecto de Nación nueva, fundamentado
en el nombre de Dios, que se revela como una
familia unida por el amor, y pide al ser humano
que sea siempre más humano y misericordio-
so con sus semejantes, que sea hijo de Dios
en el Hijo, en adoración permanente a Dios y
se deje guiar en todos los actos por el amor
del Espíritu Santo.
En el libro del Deuteronomio, Yahvé se
revela como el Dios de la alianza, que sufrió
viendo al pueblo sometido a la esclavitud de
Egipto y, movido por esta compasión, lo liberó,
lo condujo por el desierto y lo estableció en la
tierra prometida. Él no es como los dioses pa-
ganos, que están alejados y despreocupados
de sus hijos, gozando solo de su mundo celes-
te. Yahvé es el Dios de la liberación. Este es el
credo más profundo del pueblo de Israel. Esta
alianza dará un cambio a la multitud nómada,
porque de ahora en adelante deberán seguir
algo escrito, no la “voz de Dios que hablaba
desde el fuego”. Serán los mandamientos que
deberá cumplir. Y por eso deja de ser masa
informe, para ser pueblo organizado. Esas
leyes son para Israel como la Constitución
Nacional, que quedarán grabadas para ser
vividas, más que cumplidas.
San Pablo, preocupado porque entre los
cristianos de origen pagano aún subsistían
algunas formas antiguas de religión y entre
los cristianos de origen judío persistía una
fidelidad a normas ya pasadas, incompatibles
con la novedad de vida que trajo la resurrec-
ción de Cristo, les presenta el corazón de la
fe: Un Dios y tres personas. Es decir, ya no
debemos temer si no cumplimos tal o cual
ley antigua, porque ha sido abolido el espíritu
del temor al castigo como el de los esclavos,
que ante un error recibían un escarmiento por
parte del patrón.
Es por esto que san Pablo les recuerda
a los cristianos de Roma que deben llamar
“Padre” a Dios, porque tiene un corazón
misericordioso. Esta primera aseveración
(Continúa en la p. 4).
Aportes - 1
Guión para la Santa Misa
1)  Introducción a la celebración 4)  Gloria
Hermanos y hermanas: Bienveni- Nunca antes se oyó que Dios sea


dos a esta celebración. Dios es un uno y tres personas a la vez, hasta
Dios de amor. Dejemos que Dios, que lo reveló Jesús. Alabemos con
uno y Trino nos inspire en esta eu- alegría este único Dios en tres divinas
caristía. Cantamos… personas: Gloria…
2)  Saludo inicial 5)  Liturgia de la Palabra
Hermanos y hermanas: No sabría- Primera lectura (Deut 4, 32-34.
mos que somos hijos si no supié-
ramos que tenemos un Padre; no
sabríamos que somos hermanos si no
 39-40): Yahvé sella un pacto de
amor con su pueblo. Ya no serán
nómadas sino pueblo organizado.
adorásemos al Hijo; no seríamos comuni- Y obtendrán felicidad al cumplir la ley.
dad si el Espíritu no nos conformara como Salmo (Sal 32, 4-6. 9. 18-20. 22):
Iglesia. Este es el día de la Santísima El Señor y su pueblo caminan juntos.
Trinidad. Por eso: Él es creador y misericordioso, por eso
Dios, el Padre de misericordia, su Hijo el pueblo espera en él. Con el salmista
que dio la vida por nuestra liberación respondemos: ¡Feliz el pueblo que el
Señor se eligió como herencia!
y el Espíritu enviado para nuestra
misión y santificación, esté con todos Segunda lectura (Rom 8, 14-17): San
ustedes. Pablo expone a los romanos la acción de
cada una de las personas de la Trinidad en
3)  Acto penitencial los creyentes. Asimilemos esta enseñanza.
Somos el Pueblo de la Nueva Evangelio (Mt 28, 16-20): Jesús nos
Alianza. Él nos guía por el desierto pide que no escondamos el tesoro de la fe
de la vida y nos socorre cuando como él lo ha revelado sino que seamos
erramos el camino. Por eso invoquemos evangelizadores, para que otros crean y
su amor misericordioso. esperen en la Trinidad de Dios.
– Eres Padre y Creador. Porque 6)  Credo

 no respetamos al hermano ni a la
creación: Señor, ten piedad.
– Eres Hijo y Salvador. Porque
Nuestra experiencia de Dios se ha
formulado en el Credo. Hoy reno-
vamos esa fe en el Padre, el Hijo
buscamos la salvación en el tener, y el Espíritu Santo, para ser pueblo de la
el poder y el placer. Cristo, ten Nueva Alianza: Creo…
piedad.
7)  Oración de los fieles
– Eres Espíritu vivificador. Porque
nos dejamos atrapar por las redes El Espíritu suscita desde lo profun-
de la muerte y el desamor. Señor, do de nosotros nuestras oraciones
ten piedad. dirigidas al Padre, teniendo como
inspiración la buena noticia que nos dejó
Dios todopoderoso tenga mise- el Hijo.


ricordia de nosotros, perdone
nuestros pecados y nos lleve a la A cada intención respondemos:
vida eterna. Amén. Dios nuestro, en ti esperamos.
Aportes - 2
4  Por la Iglesia, para que afiance los el Padre. Esta nace en nosotros
vínculos de comunión que nacen de por inspiración del Espíritu Santo.
la fe en Dios uno y Trino. Oremos… Rezamos: Padrenuestro…
4  Por las comunidades cristianas que
las une la fe en la Trinidad, para que el 10)  Cordero de Dios
Dios de la paz las conduzca a la unión El Hijo es el Cordero que dio la
perfecta en el amor. Oremos… vida cumpliendo la voluntad del
Padre, y el Espíritu nos hace re-
4  Por nuestro País, afectado por tantas
conocerlo en el Pan de vida y el Cáliz de
divisiones, enfrentamientos y descon-
salvación. Este es el Cordero de Dios que
fianzas, para que el nombre de Dios,
uno y Trino nos haga renacer en una quita el pecado del mundo. Felices los
historia nueva. Oremos… invitados a la Cena del Señor.

4  Por los pobres, los desempleados, las 11)  Comunión

víctimas de las drogas, el alcohol y la Desde que hemos nacido como


trata de personas, para que los cris- pueblo argentino queremos que
tianos seamos las manos de Dios que Dios nos guíe. Al salir a comulgar
los libere de esos males. Oremos…
rehacemos el proyecto de ser una
4  Por los jóvenes argentinos que cul- Nación unida y en paz, guiada por Dios
minan el II Encuentro nacional de uno y Trino. Cantamos...
juventud, para que los días vividos los
motiven a generar una nueva historia 12)  Rito de conclusión
junto a Dios. Oremos… Motivación: A Dios Padre, Dios
(Se pueden añadir y/o Hijo y Dios Espíritu Santo le damos
sustituir oraciones). una misma adoración y gloria. Este
es nuestro Dios que nos conducirá por los
Padre Santo, escucha nuestras sú-
caminos de la unidad y de la paz.
plicas, que nacen de la escucha de
la Palabra de tu Hijo, y concédenos Bendición: El Señor esté con ustedes.
tu Espíritu para que seamos construc- Dios nuestro, que nos has revelado tu
tores de una nueva humanidad. Te lo nombre y nos has mostrado tu rostro,
pedimos a ti que vives y reinas por los bendícenos y condúcenos por los cami-
siglos de los siglos. nos de una nueva historia. Y la bendición
de Dios…
8)  Presentación de las ofrendas Despedida: La alegría juvenil nos haga
Dios uno y Trino es una constante volvernos a Dios, uno y Trino, para reno-


ofrenda de amor. El Padre nos ha var con él la historia del País y de nuestra
creado por amor y ha enviado al comunidad. ¡Vayamos en paz!
Hijo al mundo. Jesús dio y sigue
dando su vida por nosotros. El Espíritu es 13)  Canto final
caridad y suscita dones de bondad. Con Dios que es Padre, Hijo y Espíritu


estos sentimientos llevamos las ofrendas Santo va con nosotros en nuestro
al altar. Cantamos… peregrinar y está con nosotros
hasta el fin del mundo. Con esta
9)  Padrenuestro seguridad nos retiramos cantando…
Nuestra oración debe ser como la de Je-
sús, que se comunicaba filialmente con
Aportes - 3
(Viene de la p. 1).
es la revelación más genuina de Jesús que
quedó registrada en sus enseñanzas, como
la magnífica parábola del hijo pródigo o en la
oración de Padrenuestro o en su actitud de
oración constante invocando al “Abbá”, inclu-
so en el momento más doloroso de la cruz,
pidiendo el perdón para sus verdugos, porque
no sabían lo que hacían. San Pablo les enseña
que somos hijos en el Hijo, coherederos y el
sufrimiento del Señor es como el nuestro. En
el fondo recuerda la encarnación del Hijo,
su padecimiento en la cruz, pero también su
resurrección, que nos hace partícipes de la
gloria divina. San Pablo les muestra que el
Espíritu Santo está unido a nuestro espíritu,
somos templos del Espíritu, para que seamos
testigos “de que somos hijos de Dios”. El Es-
píritu nos guía por el camino del discipulado y
la misión, que consiste más que dar doctrinas,
en demostrar coherencia de vida en aquello
que creemos.
Ese envío a dar testimonio de la fe en
Dios uno y trino lo da Jesús a sus discípu-
los en Galilea, después de la resurrección.
El evangelista Mateo, en el fondo, nos está
invitando a dar testimonio de aquello que
creemos, y debemos hacerlo en un doble
sentido, primero bautizando y segundo, en-
señando a cumplir lo que él ha enseñado. En
esta tarea, él estará siempre con nosotros. La
propagación de la fe en la Trinidad Santa se
debe hacer desde la opción preferencial por
las periferias, representadas en la Galilea de
los gentiles. Luego, esa fe debe ser comuni-
cada, no puede permanecer encerrada en el
corazón o la mente. Cuando se transmite la
fe, otros hermanos encuentran un sentido a
sus vidas y el camino de creer se sella el día
del bautismo y comenzamos a ser personas
trinitarias, para representar el amor de Dios en
la tierra. La enseñanza de Jesús se centró en
el amor, que tiene muchas facetas, especial-
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mente cuando se demuestra en la promoción
del ser humano que está postrado y desvalido,
en el aspecto que sea: en lo espiritual, moral,
social, educacional, sanitario…
Hoy culmina el II Encuentro nacional de
Juventud, que se desarrolla en Rosario, en la
provincia de Santa Fe. Este encuentro tiene
como lema: “Con vos renovamos la historia”.
Por eso, este día es importante que volvamos
la mirada a la historia de nuestro País que na-
ció bajo el patrocinio de la Santísima Trinidad.
Son los jóvenes quienes deben ayudarnos a
recuperar el patrimonio moral y espiritual que
se ha deteriorado o ha sido cambiado por
criterios que no son los del evangelio.
Es importante volver a tomar la mentalidad
del diálogo con Dios, como el antiguo Israel, y
dejarnos guiar por su amor, que es su nueva
ley. Es decir, que sea la caridad lo que nos
mueva a hacer historia con los hermanos más
pobres y con los extranjeros migrantes que
vienen a progresar junto a nosotros, en esta
tierra generosa. Si reconocemos a Dios como
Padre, cuánto más deberemos reconocer el
rostro del otro como un hermano, admitir que
habitamos en una casa común y compartimos
la misión de hacerla próspera y más habitable,
cuidando sus recursos naturales. Si en el Hijo
somos hijos, los valores de Jesús deben ser
propuestos como cimientos de la sociedad,
tales como los valores espirituales, la soli-
daridad, la amistad social, la preocupación
por el otro, la protección de los jóvenes del
narcotráfico y el materialismo. Si el Espíritu
está dentro de nuestro espíritu, esto nos lleva
a respetar a los adversarios, demostrar alegría
en la convivencia, amar el bien común, siendo
una sociedad de la inclusión.
Como pueblo hemos nacido fundados en
la Santísima Trinidad. Queremos ser una Na-
ción unida, para abrir una nueva etapa de la
historia, junto a Dios uno y Trino, siendo más
fraternos, democráticos y testigos valientes
de nuestra fe.