ws Mi querido amigo, Degeotys meats Wr at Seana arn, Gus/uabloucs igo "veto y patel dnpregnaiuel para seturarme «l Jado de us ted de toda 1a poesia austera y honda que debe haber alli. Tiene usted razon: nosotros no podemos cambiar unas cuantas frases trivicles, Tenemos muchas inquietudes comunes, En la Eepafa Moderna 1e4 algunos capitulos del "Sentimiento tragico de 1a vida" y vi una vez nas cuah cerca esta mi espiritu del de usted De ningun hombre de mi raza me siento tan cerca.Cuan- do le envie, creo que antes de un mes, mi tomo de versos "Serenidad", ver& como sigue cobijéndonos la misma ala de la He fidue J como cont inuanonseabiaheo lmsreauas Wa man "age negro."Yo, desde un gren dolor que tuve enenero de 1912,me descepé mis definitivamente si cah@\de Jas usuales cosas de la vida,para asomarme abetitie, y angustiosemente «] més alla. Nada he cescubierto, nada sé, nkdie responde @ mis precuntas,, ate dinte, obatitacion; (cathe tdhudes (ed segase. inquiriendo y llamando a 1a Puerta,jno es por venture un signo?;Porqué,e pesar del siiencio,yo no me ddealiento y « diario me despierto con 1a voluntad inquebrantable de dar aldebonazos otre vez? Tengo las tres cuartas partes ee mi mismo, desde ese mes de enem de que le hablo, en el lado"de al1&" y lo tinico que me interesa es "saber",,.lsted comprende estas “cosas porque tiene €] senti- 0 del misterio exquisitamente desarroliado, Y no es usted, no, un mistico 2 le espafiole, aunque 1o diga, El mistico 2 1a espa-fiola no dude. Para ¢1 e1 dogma es de cal y canto. Sobre esa, piedra edifica,y 1a propia escala de Jacob tiene apoyados los odes en ella, En Espafia ni exiete ni ha existido jamés el protle= ma metafisico y en e] espiritu de usted sf est’ planteado con un apremio absolutamente moderno,En Inglaterra si que existe yen Estados Unidos. Ha leieo? (por supuesto) la Experiencia religiosa de William James? En Espafia se reirian de muchas in quietudes que en €] pueblo anglo-sajon gon venero inagotable de libros y de conferencias. En Francia misma se piensa mucho en esto. Los pastores tienen bigri fuertad de criterio para es- cudrifiar, que el presbitero catélico ni siquiera sospecha. A- 11i esté por ejemplo Wilfreé Monod, cuyas conferencias " Aux 4 Croyants et aux Athécs‘estan Jlenas de esa inquictud de que le F En fin de todo esto usted sabe mucho mas que yo. Un die hablaremos, De hecho estemos hablando siempre, hace afios, hablo Hosta siempre y el) mas cordial y devoto saludo de * A Cecee Madrid, enero 20 de 1914, i *