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ESTRATEGIAS TURISTICAS PARA LA EDUCACIÓN AMBIENTAL EN VISITANTES DE SAN CRISANTO YUCATAN

INTRODUCCIÓN
Susana Arizmendi Carrillo

ANTECEDENTES
Ante la crisis ambiental, antes incipiente, se comenzaron a buscar sistemas que previnieran las conductas depredadoras de las sociedades,
y una de las propuestas más atendidas, due la educación ambiental, ésta, se impartió en escuelas mayormente, pero hubo profesionistas
en turismo, que buscaron la unión de ambas actividades para lograr un resultado mejor. A pesar de que ha habido estudios muy variados
respecto al turismo y la educación ambiental, escasamente estos han sido enfocados a los turistas. De los 14 documentos revisados,
solamente tres, son dirigidos a turistas, ambos se llevan a cabo en un sitio de humedales, ecosistemas de gran importancia ecológica, sin
embargo, los instrumentos utilizados en estos estudios no permitieron dar resultados sustanciosos, por el contrario, inclusive, podrían ser
catalogados como superficiales, en uno de los dos casos, el instrumento fue prácticamente sesgado. Las propuestas en sí, son hacer un
recorrido por los humedales, y hablar de sus servicios ambientales, en un caso mediante un previo taller de “educación ambiental”, y en
otro durante la marcha, al finalizar se les aplicó a los participantes un cuestionario. Si bien tal sistema es perfectamente válido, no es
muy profundo.
En el siguiente documento, también se busca educar a los turistas, y su estrategia es la capacitación de recursos humanos, pero no de
guías especializados en turismo, sino de estudiantes que pretenden hacer servicio social, se ilustra entonces la formación de este grupo
estudiantil mediante talleres de concientización turístico- ambiental; dado que la presente propuesta, es abordar a los turistas directamente
como sujetos del cambio actitudinal, no abona mucho este documento de 2013.
Otro documento propone un Modelo de formación ambiental para el desarrollo del ecoturismo, sin embargo, está dirigido a la comunidad
local y no a los turistas, entre las consideraciones del modelo están: la necesidad de capacitación, la gestión, y los atractivos. El modelo
se basa por un lado en los saberes ancestrales de la comunidad, y por otro en bases teóricas, que para el caso son la andragogía ( educación
para adultos) y la educación no formal, lamentablemente, más allá de un esquema muy básico, no se despliega todo el desarrollo del
modelo.
Dónde si se profundiza a en las acciones para fortalecer la educación ambiental, es en el Programa Regional para E. A. en Áreas Naturales
Protegidas, resulta de gran importancia conocer la postura y el trabajo de una institución cuyo papel es protagónico en el turismo de
naturaleza en México, la Comisión de Áreas Naturales Protegidas; en este documento, se determinan por ámbitos, los acuerdos a los que
se llegaron, los cuales son muy numerosos, y, en algunos casos muy generales. Aunque se retoman más cuestiones teóricas que prácticas,
pues sus propuestas no se particularizan, se habla más bien de financiación, vinculación, legislación, sistematización, etc.
Dos casos más, si trataron de la formación ambiental mediante el turismo, pero en escuelas, una en México y otra en Chile, en la primera,
se hace énfasis en la interpretación ambiental como vía metodológica, idea con la que comulgo y aplaudo; en la segunda se ilustra un
proceso de años, y multidisciplinario, en el que los estudiantes, terminan por hacer de los alrededores de su escuela, un lugar eco-
turístico, este es un caso muy exitoso porque los alumnos pasan de desconocer y desdeñar su patrimonio natural, a valorizarlo
profundamente, identificarse con él, y querer compartirlo pero protegiéndolo, prueba de que el turismo es una poderosa herramienta, y
muestra de aliento para continuar por el camino de la educación ambiental.
Finalmente, ocho de los documentos revisados, no tienen línea turística, solamente ambiental, pero proveen de estrategias educativas
para convencer a los sujetos, de estrategias de identificación de las actitudes, de distintas metodologías orientadas a medir los cambios
en los comportamientos ambientales, y de discursos antiguos y nuevos para aplicar y renovar.

PROBLEMÁTICA
Resulta casi característico del siglo XXI un problema que no excluye a ninguna persona: el cambio climático, esté, es un fenómeno que
paulatinamente y desde los años 60´s, se ha ido manifestando a través de desastres naturales, e incluso hoy en día, continúa siendo puesto
en tela de juicio si verdaderamente está ligado a la acción antrópica, suponiendo que no hubiera evidencia suficiente de que así es, hay
otros fenómenos de corte medio ambiental que no dan cabida para el cuestionamiento, a saber, la aceleradísima pérdida de ecosistemas,
que conlleva a la extinción de especies de flora y fauna, la contaminación de los mantos freáticos, la erosión de los suelos y la consecuente
desertificación, la escasez de agua dulce, la proliferación de zonas muertas en los océanos a causa de la basura y la contaminación, y la
sobre producción de Gases de Efecto Invernadero ( GEI), todo ello es una realidad innegable en todo el globo, y pinta un panorama
lúgubre no solo para las generaciones venideras, sino para la vejez de las generaciones actuales, y más aún, para todo ser vivo aquel, que
no tenga la fortuna de haber nacido humano; vivimos pues, un momento de crisis.
Ante este desalentador escenario, se hace necesario que todos abonemos desde nuestras trincheras a la deconstrucción de una serie de
paradigmas que han llevado a las sociedades a un estilo de vida depredador. Dado que los problemas medio ambientales, son
inequívocamente atravesados por la sociedad, son las personas quienes pueden cambiar el curso de las cosas, de ahí la imperiosa
necesidad de concientizar a las masas respecto a la crisis medio ambiental, solo después de superar la ignorancia respecto a la dinámica
que implica todo este fenómeno, es posible sensibilizar a las audiencias para que haya, finalmente acciones concretas a través de cambios
conductuales.
Una atractiva opción para hacer esto, es el turismo de naturaleza. En el ámbito turístico, aproximadamente una década después de que
se empieza a hablar de los problemas medio ambientales, surgen modalidades de “Turismo Alternativo” (Blanke y Chiesa, 2011) que
son una respuesta al modelo fordista en la producción turística, buscan el desarrollo endógeno y optan por el conservacionismo, esto, en
el discurso, pues en la práctica, hay pruebas y autores que afirman que muchos desarrollos de Turismo Alternativo, usan más bien el
prefijo o el apellido “Eco”, “armónico”, “sustentable”, “rural” o “indígena”, como etiqueta para venderse a mercados más especializados
y a clientes cansados del “ sol y playa”; aunque claro, hay también casos de éxito, donde los postulados que se pregonan se cumplen y
tienen frutos.
La cruda realidad, a pesar de que hubieran más esfuerzos por hacer proyectos de verdadero turismo alternativo, estos, jamás
representarían una amenaza, o un cambio de modelo del turismo de masas, porque si el turismo alternativo se hace bien, se tiene que
hacer de abajo hacia arriba, desde células pequeñas, donde haya autodeterminación por parte de los pueblos, y dónde se calcule y vigile
una correcta Capacidad de Carga Turística para preservar los recursos, mientras que el turismo de masas tiene todas las facilidades
políticas y económicas de continuar creciendo gracias al modelo neoliberalista que predomina, tienen pues, apertura fiscal, mínimos
requisitos legales y de impuestos, apoyos para la infraestructura, mano de obra barata, etc. (Blazquez y Cañada, 2011; y Vilchis, 2016)
Dado que, a pesar de las buenas prácticas de educación ambiental que promete el turismo alternativo, no es una opción prometedora
competir con el turismo de masas, nace la idea de, aprovechar la inmensa cantidad de turistas que genera el turismo convencional, y
hacerlos objeto de un proceso de aprendizaje no formal, que, apoyado de la recreación, cambie la consciencia de las personas hacía una
cosmovisión más cercana a la naturaleza y al compromiso social para revertir la crisis medio ambiental. Pocos momentos podrían ser
tan apropiados para presentar un panorama tan crudo, tan impresionante, que cuando las personas están alejadas de su cotidianeidad, en
ese momento están abiertas a información nueva, porque están inmersas en lo exótico.
DELIMITACIÓN
Los impactos del cambio climático en el sector turístico son bastante íntimos dada la geografía que ocupan los gigantes de la industria.
“En algunas playas habrá tramos de arena que sufrirán serias reducciones, el equipamiento y los espacios turísticos ubicados cerca del
mar verán afectadas sus estructuras debido al aumento del nivel del mar y la alteración de las olas” (Campos B, 2011:12) además la
estética del paisaje se verá afectada como consecuencia de las nuevas dinámicas del clima.
El cambio climático tiene profundos efectos en las costas y mares del Caribe, como la erosión de las playas, resultado del crecimiento
del nivel del mar y el incremento en la frecuencia de huracanes, tormentas y otros fenómenos, así como cambios en la composición del
agua (anoxia), generada por nutrientes en demasía que provoca por ejemplo sargazo. Campos B (2011) cuenta además: generación de
desechos, necesidad de reservas de agua que, ya escasean en algunas zonas del Caribe mexicano, demanda energética, y de transporte,
apunta además que la presión sobre el ambiente natural, la destrucción del medio físico y la negativa alteración del paisaje son las causas
de las principales patologías ambientales generadas por el desarrollo del turismo. Sin embargo, es necesario destacar que el turismo no
resulta necesariamente ni especialmente dañino para el ambiente… sino en todo caso, lo hace su déficit en materia de planificación y de
inserción territorial.
En la península de Yucatán la actividad económica turística, se ha desarrollado vertiginosamente en apenas medio siglo. A partir de la
construcción del Centro Integralmente Planeado Cancún, la infraestructura turística y de conectividad se fue expandiendo contantemente.
La expansión a lo largo de la línea de costa, es un fenómeno común, que consiste en la construcción de hoteles y segundas residencias
primordialmente.
75% de la población en Quintana Roo vive en zonas costeras, por lo que se considera evidente que se está produciendo una
extrema competencia por el territorio, generando consecuencias como gran presión demográfica, desarrollo del transporte,
extensión urbana, y turismo… En el caso particular del Caribe mexicano, podemos mencionar que existe una presión sobre el
ambiente natural en los espacios donde se realiza y/o produce la actividad turística; estos se traducen en: a). Polución de sus
factores, como el agua; b) la degradación de su paisaje; c) la destrucción y desaparición de ciertas especies vegetales y animales;
d) la alteración de sus estructuras por los movimientos de tierra, de la ocupación de zonas dinámicas en términos de equilibrio
natural a escala local, como las playas (Campos B, 2011).

Yucatán escapa a la devastación que ha azotado a la Riviera maya y la Costa Maya. Mientras que a fecha de 2017, Quintana Roo contaba
con 1,067 hoteles, y 100,986 cuartos de hotel, Yucatán contaba con 487 hoteles, y 13,076 cuartos (DATATUR, 2017), lo que representa
apenas una séptima parte de la infraestructura de alojamiento de Quinta Roo. Sin embargo, en Yucatán los problemas ambientales no
son nulos, la investigación de Hoogesteijn L, Febles J, y Amapola V (2015), demuestra, que cenotes de interés turístico y recreacional
del estado que se encuentran publicitados en la red, presentan contaminación fecal en un nivel de más de 1 UFC por 100 ml.
Actualmente, esta región corre el riesgo de sufrir el mismo destino que la Riviera Maya en Quintana Roo, pues el proyecto presidencial
denominado Tren Maya que consiste en 1,500 km de vía ferroviaria, proyecta una gran crecimiento turístico en los estados de Campeche,
Yucatán, Quintana Roo y Chiapas. De las 17 estaciones que contempla, tres están en Yucatán: Maxacanu, Izamal, y Mérida. El
comunicado oficialista afirma que el territorio de selva que se necesita remover para cubrir el proyecto es de 750 hectáreas, aunque dada
la inversion de estadounidenses y chinos, se prevee ya que este proyecto implique la construcción de hoteles, ressorts y campos de golf
al rededor. “Zonas de la costa maya han experimentado un significativo desarrollo inmobiliario en los últimos años, por lo que se estima
que el Tren Maya ayudará a llevar este impulso más al sur” Vazquez A (2019).
Al respecto, en una asamblea del Consejo Nacional Indígena en septiembre de 2018, el concejal maya Koyoc, dijo que los pueblos son
conscientes de las implicaciones: “Sabemos lo que han significado los proyectos capitalistas para nuestros pueblos, donde han habido
proyectos en los último años hay contaminación y desabasto de agua, hay enfermedades, alimentos contaminados, semillas transgénicas,
muerte de las abejas, falta de miel, hay prostitución, crimen organizado, rompimiento de los lazos comunitarios. Los pueblos dejamos
de ser dueños de la tierra para ser explotados en espacios turísticos” (Dalirio p, 2019).
De continuar este mega proyecto, se espera un incremento en la actividad turística exponencial en Yucatán, primer estado con presencia
de cenotes, y especialmente rico en humedales, manglares, selvas húmedas, y playas cuasi vírgenes, por ello se hace relevante buscar
estrategias efectivas que implementar para amortiguar los impactos que el turismo genera y generará, siendo una de ellas, la educación
ambiental.
En este estado se encuentra el ejido de San Crisanto, comunidad que cuenta con 40 años de experiencia en Responsabilidad Social
Empresarial en su desarrollo ecoturistico. Cuenta con un área de 1472 hectáreas de las cuales el 70% se compone de tierras húmedas y
manglares, de los cuales 66 hectáreas componen el área urbana de la comunidad y se organizan también áreas parceladas en 300 hectáreas
que permiten a la comunidad sus actividades agrícolas. Esta comunidad empezó a trabajar en el año 1976, se ha dedicado a la pesca
artesanal, al cultivo del coco para, y a la producción de sal.
En el año 1995 dos huracanes, Ópalo y Roxana, forzaron la entrada en las cuestiones relacionadas con la restauración y responsabilidad
ambiental, hasta este momento existía el Ejido como comunidad solamente, pero bajo esta eventualidad se empezó a trabajar la idea de
la Fundación San Crisanto, con el propósito de conseguir financiamiento para la reconstrucción ambiental… La tarea principal para la
fecha, era la restauración de manglares, la restauración hidrológica, la conservación de la vida silvestre y la educación ambiental en la
comunidad. (OEA, 2014:2-3)
Desde el año 2000 existe un servicio de hospedaje en chozas mayas en la playa en el terreno de la comunidad San Crisanto. Se ha
establecido un proceso horizontal donde se genera, a través del turismo y de la conservación, una mayor capacidad de ingreso en la
comunidad, lo cual ayuda a reducir sus desigualdades. Las familias de la comunidad tienen sus micronegocios, talleres de artesanías,
dulces de coco y restaurantes. Toda la inversión económica es local, ya que no hay empresas externas a la comunidad. “La principal
industria de San Crisanto por lo menos en lo que concierne a la última década ha sido el turismo… Inicialmente, en el año 2001 se hacían
alrededor de 75 paseos por éstos, al año 2012 se llevaron a cabo alrededor de 10 mil visitas… en San Crisanto la ocupación llega al 60%
anual” ( OEA, 2014:3-4). San Crisanto es un lugar ideal para implementar las estrategias de educación ambiental, por su ambiente rico
en flora y fauna, y la predisposición de los locales a seguir fortaleciendo la responsabilidad ambiental, y las alternativas al turismo
depredador.
OBJETIVO GENERAL:
Desarrollar estrategias turísticas que fomenten una efectiva educación ambiental en los visitantes de Celestún Yucatán, que permee en
su cotidianeidad.
OBJETIVOS PARTICULARES:
1. Identificar el tipo de perfil que tienen los visitantes que llegan a Celestún Yucatán, bajo la categorización propuesta por Plogg.
2. Inventariar los recursos potenciales para la educación ambiental con los que cuenta Celestún.
3. Hacer un diagnóstico de la situación socio ambiental de la región en la que se inserta Celestún.
4. Experimentar distintas propuestas de estrategias con grupos de visitantes de Celestún para determinar cuáles son las más
efectivas.
JUSTIFICACIÓN
En México, la presencia de lo que se conoce como Gran Turismo, que es aquel turismo hegemónico que busca la interrelación de firmas
internacionales a través del capitalismo financiero, es innegable, particularmente en las costas, pues a pesar del creciente alcance de otras
modalidades, el turismo de sol y playa en México hoy en día sigue siendo una figura icónica y una de las modalidades más socorridas.
Este turismo masificado y sus implicaciones socio ambientales, forma parte de una dinámica que no es exclusiva del sector turístico,
sino que obedece a un sistema económico y político internacional, sin embargo, en el sector turístico, las consecuencias son
particularmente devastadoras por los sitios estratégicos que se ocupan, y es que el insumo básico para la actividad turística, es la
naturaleza exótica, aquellos sitios prístinos dónde abunda el paisaje verde, el agua y el clima agradable, y en México, vaya que proliferan
lugares así. Estamos hablando pues, de un país mega diverso “Alberga más del 10% de la diversidad biológica del mundo” (CONABIO,
2014). Además “México es el país con mayor diversidad ecológica de América Latina y el Caribe, ya que dentro de sus límites políticos
se encuentran los 5 diferentes ecosistemas, y 9 de los 11 tipos de hábitats.” ( Hydro Enviroment, 2014). Tan solo en cuanto a litoral, el
país cuenta con 11,122 km. Lo anterior, hace de los mexicanos, sujetos no solamente privilegiados por poseer tal riqueza, sino,
responsables de mantenerla, una tarea monumental.
Pero los ecosistemas de litoral, al igual que magníficos, son sumamente delicados, y su papel para mantener el equilibrio ecológico, es
imprescindible. En las costas, se encuentran la mayoría de los ecosistemas de humedal, que abarcan marismas, lagunas, ciénegas,
pantanos, manglares, deltas, ríos, estuarios, arrecifes, entre otros; su importancia radica en que bajo sus aguas, se encuentran los mantos
acuíferos, que almacenan agua dulce. “Estos sitios contribuyen a la recarga de mantos acuíferos subterráneos, donde se almacena el 97%
de las aguas no congeladas en el mundo… en los humedales habita más del 40% de las especies de flora y fauna del mundo” ( PNUMA,
2015).
Como evidencia Macías V. ( 2014) “México ocupa el cuarto lugar de entre los 125 países y regiones que cuentan con este ecosistema,
por debajo de Indonesia, Brasil y Australia, y posee el 20% del total de humedales a nivel mundial”. “En México 67% de los humedales
se ha perdido” ( Proceso periódico, 2018).
El desarrollo del turismo en las costas de México entonces, es una actividad que evidentemente prolifera fácilmente, pero que también
resulta peligrosa, pues como lo ha demostrado la historia, es una de las actividades con más rápido crecimiento, una vez que un destino
turístico se consolida, las cifras empiezan a ir a las altas y no paran. La cuestión es que en los litorales, se puede causar daños ecológicos
irreversibles, numerosos son los casos de playas donde la capacidad de carga fue rebasada y los fueron devastadores daños, baste con
mencionar icónicas playas españolas, como Benidorm y las Baleares. Por ello, los lugares donde más urgente es la educación ambiental
para los turistas, es en los humedales costeros.
La propuesta de tomar un destino turístico como campo de práctica para la educación ambiental, se defiende gracias a Gómez G (2008),
quien, si bien hablaba de la educación en las aulas, resalta la importancia de tomar el entorno inmediato como marco para contextualizar,
de retomar la realidad actual como plataforma del trabajo, dotándolo así de significatividad. Además, como plantea Beck en Latiesa
(2010) los riesgos se establecen en el saber, y en el saber pueden ser formados, ampliados, reducidos, o dramatizados, por lo que están
abiertos en medida especial a los procesos sociales de definición. Y siendo el turismo un proceso social con intenso amoldamiento por
parte del visitante, es una oportunidad ideal para moldear esos ‘riesgos’ ofreciendo saberes científicos.

Los teóricos de la sociedad del riesgo coincidirían algunos años después en que… el riesgo ambiental suele no apreciarse de manera
inmediata, salvo para los conocedores del hábitat, no solo profesionistas, sino productores y los involucrados en el ambiente, de no ser
por el cambio de un paisaje ecológico o por un desastre natural, el ciudadano promedio no se daría cuenta de sus actos. Más aún, puede
existir una crisis ambiental y el ser humano no siempre la afronta como riesgo ( Ruíz A, 2008:140)

Es por ello que es tarea del profesional en turismo, aprovechar la oportunidad, y mediante prácticas de Educación Ambiental, alertar a
las personas del riesgo inminente ante la crisis ambiental, pero además, utilizando el discurso necesario, y no el que han venido
manejando el sector empresarial y público, que hablan de la necesidad de construir una sociedad sustentable, asociado a la idea de reducir
la pobreza, y mejorar la calidad de vida con el máximo aprovechamiento de los recursos, en vez de manejarlo como la crisis civilizatoria
de la modernidad que es, la primera concepción es el nuevo discurso de la ONU, asociada a lineamientos meramente conservacionistas,
mientras que la segunda, implica un cambio de esquemas de producción y consumo (Serrano M, 2008)

METODOLOGÍA
Según Martínez G (2002):
En la Psicología Ambiental y Social, se admite la conveniencia de ampliar el alcance de la psicología experimental, ésta
describe cinco tipos de experimento: 1) de laboratorio, 2) natural (no controlado), 3) ex post facto, en el cual el
investigador trata de remontarse a partir de un efecto, hasta las causas que lo provocan, 4) de ensayo y error, que
parece referirse a todos los tipos de ensayos de nuevas formas de conducta social efectuados por legos, y 5) estudio
observacional controlado.

Para el caso del presente proyecto de investigación, se empleará el 4°: De ensayo y error, pues en efecto, se buscarán nuevas formas de
conducta social por parte de personas con poco conocimiento y experiencia en la materia. Por lo tanto el método de investigación es el
experimental, pero enfocado al experimento de campo. En esta metodología acorde con Gómez G y Reidl L (XXXX), se hace una
manipulación real de las condiciones por parte del experimentador, para determinar relaciones funcionales. La manipulación de la
variable independiente no se deja a la naturaleza; por el contrario, es ideada por el experimentador, este debe planear el diseño por
adelantado. Para el caso, la variable independiente, es la ‘Educación Ambiental’, y es tarea del investigador, hacer todo lo que esté en
sus manos para manipularla favorablemente, la variable dependiente es la ‘cultura ambiental’, pues su existencia depende al 100% de
que haya una educación ambiental. Continúan Gómez G y Reidl L (XXXX): Se puede decir que un experimento de campo es un proyecto
de investigación con orientación teórica en el que el experimentador manipula una o más variables independientes en alguna situación
social real. El contexto de un experimento de campo es natural y se estudian fenómenos sociales concretos. En efecto, para esta
investigación el contexto de San Crisanto es natural, y el fenómeno de la actividad turística vinculada a la educación ambiental, es social
y concreto.
Lo primero que se necesitará para la construcción de las estrategias, será identificar los mensajes claves que queremos hacer llegar a los
visitantes, pues las actividades irán orientadas a reforzar dichos mensajes, los cuales, prácticamente versarán sobre:
A) Problemáticas Ambientales. & B) Soluciones a las Problemáticas
Ambientales
Para lo cual habrá que hacer un recuento con perspectiva inductiva de la problemática ambiental actual, para así contextualizarla a un
micro nivel, y posteriormente discriminar la información, y dilucidar cuales son las emergencias ambientales que ameritan ser
comunicadas a la sociedad, y cuáles serían los mensajes concisos que hay que hacer llegar al receptor.

NIVEL PROBLEMÁTICA (con justificación científica) SOLUCIÓN (quizá parcial)

Península de Yucatán
Latinoamérica

Mundial

Cada problemática ameritará una cédula, ya que se trata de complejas situaciones con diversidad de actores, causas y consecuencias.
Para agregar el ingrediente turístico, los discursos serán comunicados en momentos y lugares específicos, acompañados (previamente,
durante, o después) de algunas actividades recreativas, pues como afirma Acuña M, y Mauriello A (2013) “La recreación es la
herramienta fundamental del educador ambiental para propiciar cambios de actitudes favorables al ambiente. Es un campo nuevo de
estudio el cual necesita de la profundización teórica para argumentar sus alcances para cambiar las situaciones ambientales
problemáticas”. Para ser definidas requerirán de un proceso previo que a continuación se ilustra:
Cabe mencionar que dentro de los elementos culturales, hay espacio para las manifestaciones artísticas, pues como afirma Novo (2016),
el binomio ciencia- arte, es necesario para la efectiva educación ambiental “La crisis ambiental que padece el planeta se constituye así
en un reto para la reconciliación y, a la vez, una oportunidad para el trabajo compartido, el abrazo constructivo entre científicos y artistas.”
( Novo, 2016: 12).
Cada uno de los recuadros lilas y amarillos será llenado en forma de cédulas, lo que proporcionará la información necesaria para conocer
los recursos con los que se cuenta para la definición de actividades. A la par, la información permitirá construir los discursos, que
procurarán enviar un fuerte mensaje conciso y entendible; una vez que esten, esté bien estructurados, será necesario empatarlo con el
itinerario las actividades.

ACTIVIDADES MENSAJE CENTRAL DISCURSO

A A
B... B...

C… C…

Pero además de la parte comunicativa, es importante no perder de vista los recursos que serán necesarios durante todo el proceso, por lo
cual, se utilizarán las siguientes cédulas para prevenir cada detalle.

Actividad Recursos Materiales (siguiendo a Urry J, 2002) Recursos Humanos Recursos Financieros Recurso
Miralejos/ vinoculares Turismologa $ Natural/Cultural
Visor (de snorkel) Guía local Especificar
Lupa Artista

C...

John Urry (2002), en su afamado escrito “The tourist Gaze”, desentraña la íntima relación que hay entre los turistas y el objeto de su
mirada, así como la importancia del sentido de la vista en los viajes: “La mirada del turista está dirigida a las características del paisaje
rural y urbano que lo separa de la experiencia cotidiana. El ver estos lugares turísticos implica diferentes formas de amoldamiento social,
con una mayor sensibilización hacia elementos del paisaje rural y urbano que aquel encontrado en la vida diaria” (Urry J, 2002:53). Para
efectos del presente proyecto, no solo se comulga con tal afirmación, sino que se traspola a la praxis de la educación ambiental en la
actividad turística. Elemento imprescindible en el proceso de sensibilización es la mirada, se le considerará inclusive una herramienta
de mayor o menor nivel dependiendo la claridad con la que se permita observar el entorno y sus características, por ello, se requerirán
de recursos materiales para mantenerla al mayor nivel posible. Novo (2012), también apoya esta premisa al afirmar existe “... olvido o
ignorancia de una idea crucial para entender cómo funciona el mundo, la idea de interdependencia, la comprensión de que todo está
íntimamente relacionado... que incluso visualmente todo es interdependiente, y mirar es someter el sentido de la vista a esta
interdependencia” ( Novo, 2016: 2).
La aplicación de las actividades se hará a grupos de visitantes de entre 3 y 10 personas que arriben a San Crisanto. El tipo de muestreo
será no probabilístico ‘por conveniencia’, evitando la presencia de menores de 13 años, y buscando sujetos que tengan buena
predisposición para participar en actividades guiadas y en equipo, y que acepten donar un poco de su tiempo para la entrevista previa,
así como tener un seguimiento vía electrónica, esas serán las únicas características que se buscarán, el resto, saldrán a relucir en el
instrumento de caracterización:
Universidad Autónoma del Estado de México
Instrumento de caracterización de visitantes para el proyecto de titulación “ Estrategias turísticas para la Educación Ambiental en Visitantes de San Crisanto” de la
alumna Susana Arizmendi Carrillo para obtener el grado de Licenciada en Turismo.
ppppp
Instrucciones: Lea cada reactivo y marque con una X la respuesta que considere más acertada.
1.- Nombre o pseudonimo: ___________________
2.- Contacto de skype o whats app: ______________________
3.- Nivel socioeconómico: A)Alto B)Medio/Alto C)Medio D)Medio/Bajo E)Bajo/Alto F)
Bajo/bajo
4.- Sexo: Femenino Masculino
5.- Edad: A)13- 23 B)24-33 C) 34-43 D)44-53 E)54-63 F)64 en adelante
6.- Dedicación: A) Amo de casa B) Profesionista C) Comerciante E) Estudiante F) Empleado G) Ejecutivo H) Servidor Público I)
Maestro J) Obrero
7.-Subraye de las siguientes afirmaciones, aquellas con las cuales se sienta identificado. Y dependiendo con qué lado empaten más sus
características, localicese dentro de la curva encerrando uno de los círculos amarillos:
Estos datos permitirán ir categorizando la muestra en distintas tipologías de visitantes acorde a la teoría de Plogg ().
Ahora bien, para identificar si la propuesta fue efectiva, y la sensibilización ambiental de los visitantes se transformó, será necesario
aplicar dos entrevistas, una previa a la realización de las actividades, y la otra posterior pero no inmediata, esto cesgaría los datos, pues
con la información fresca, los sujetos sólo devolverían los datos que acaban de escuchar, es por ello, que al ir eligiendo a la muestra, se
les explicará que participar implica necesariamente hacer una entrevista al menos una semana después de l actividad, vía electrónica si
ya no se encuentran en San Crisanto, la cual se ilustra a continuación:

1.- ¿ Se considera a sí mismo ecologista?


2.- ¿ Qué hábitos tiene que lo hacen considerarse ecologista?
3.- ¿ Qué acciones conoce pero no practíca que ayuden al medio ambiente? ___ ¿Que le ha impedido practicarlas?
4.- ¿ Qué sabe del cambio climático?
5.-¿ Que sabe del calentamiento global?
6.- ¿ Qué sabe de los problemas ambientales en México?
7.- ¿ Que sabe de los problemas ambientales en Yucatán?
8.- ¿ Qué sabe de la importancia ambiental de los ecosistemas costeros?

Cabe mencionar que tanto la entrevista previa como la posterior serán videograbadas, y que ambas consistirán en el mismo listado de
preguntas. Con estas evidencias, se hará una comparación del antes y después de la actividad con un minucioso análisis de contenido
para determinar, si hubo una efectiva educación ambiental en los sujetos que acrecentará su cultura ambiental, reconociendo qué
dimensiones de la cultura ambiental definidas por González (2010) se vieron afectadas y en qué grado, así como qué grupo del muestreo
fue más o menos susceptible a las estrategias.
El proceso se vuelve a iniciar creando distintas actividades, distintos discursos, o distintas combinaciones de ambos, para volverlo a
aplicar a nuevos grupos de visitantes, y comparar resultados.
*NOTA... estimada profesora: primero, iba a poner un método inductivo, y argumentar que paso de los problemas de San Crisanto, a los
de la península de Yucatán, pero creo que eso es solo un pequeño aspecto del proceso, además si quisiera replicar las estrategias a nivel
península, eso sería a posteriori y no creo que cuente, entonces me arrepentí. Luego iba a poner un método comparativo, argumentando
que para conocer los resultados, tendría forzosamente que comparar a los sujetos, pero creo que eso es algo muy obvio que tengo que
hacer y tampoco acaba de justificar mi metodología. Luego, como le quiero dar enfoque comunicativo, busqué cosas de esa rama (yo ya
topaba a Leff y a Luhuman, pero me sirven para justificar el enfoque y no con una metodología como tal, bueno Luhman si se podría,
pero sería un rolliiisimo! y no es el caso), encontré la semiótica, la lingúistica, la pragmática, y el discurso retórico, pero al leer al respecto
me encuentro con postulados sumamente complicados, poco operativos, y que creo que sí me sirven, me servirían más en marco teórico
que como metodología. Luego encontré que en sí la Educación Ambiental es una metodología según Delgado E (2014), pero se me hizo
súper chafa meter lo mismo en metodología que en teoría y lo descarté. Luego me topé con un artículo que dice que usó como vía
metodológica la interpretación ambiental, y pensé que eso si se amoldaba a mi esquema de trabajo, pero sospecho que no valdría como
metodología de investigación, así que tampoco lo puse. Finalmente leí que la psicología ambiental acredita el experimento, y recordé
que usted me había dicho que no podía usar el experimental porque no tengo hipótesis, pero sentí que era lo que más se amoldaba de lo
que había encontrado, y pues… seguí mi corazonada jaja. Pero me atengo a lo que indíque, no sin dejar de mencionar que creo que si
este metodo no esta bien, el segundo mejor sería algo de semiótica.
CAPÍTULO I MARCO TEÓRICO
1.1 Educación y Cultura Ambiental
La utilización del término “Educación Ambiental” por primera vez fue en 1972 en la cumbre de Estocolmo, durante la Conferencia
Internacional sobre el Medio Ambiente y desde entonces se le ha concedido preponderancia para generar los cambios que permitan
enfrentar seriamente la crisis ambiental del mundo (Severiche C. Gómez E, Y Jaimes J, 2016). Para efectos prácticos de este proyecto
se entenderá el término educación ambiental bajo la concepción de Severiche C. Gómez E, Y Jaimes J (2016) “... herramienta elemental
para que todas las personas adquieran conciencia de la importancia de preservar su entorno y sean capaces de realizar cambios en sus
valores, conducta y estilos de vida, así como ampliar sus conocimientos para impulsarlos a la acción mediante la prevención y mitigación
de los problemas existentes y futuros”. Siguiendo a Fernández G, y Guzmán A (2004), una de las características más importantes de la
educación ambiental, es “... la resolución de problemas concretos. Se trata de que individuos… perciban claramente los problemas que
coartan el bienestar individual y colectivo, diluciden sus causas y determinen los medios que pueden resolverlos” (UNESCO, 1980 en
Fernández G, y Guzmán A, 2004:178).

Como bien lo señala Gómez G (2008:201) “ La educación ambiental en México ha estado desde sus orígenes fuertemente influenciada
por la óptica de los países desarrollados, especialmente Estados Unidos, en cuya perspectiva se elude la vinculación entre los problemas
ecológicos y los problemas sociales.… ha estado vinculada sobre todo, a la adquisición de conocimientos acerca del ambiente, dando
muy poco espacio al desarrollo de las competencias relativas a la ética, la crítica y la planificación de estrategias” Sin demeritar la
importancia de adquirir conocimientos sobre el medio ambiente y los ecosistemas, es necesario apuntar que esta es una visión
reduccionista, es por ello que para el presente proyecto, se tomarán en cuenta tres de los cinco principios de la educación para el desarrollo
sustentable que publicó la UICN (2002): resaltar los valores de la diversidad biológica y cultural; reconocer que los recursos son finitos;
desarrollar la conciencia regional y planetaria. Y se seguirá el mismo propósito que apunta Gómez G (2008) que tiene la educación
ambiental: generar una consciencia individual y colectiva, que propicie conductas y competencias sustentables a favor de la diversidad
y la conservación (Gómez G, 2008). Y es que como bien señalan los organismos mexicanos CONANP & CECADESU (2010:11) “La
educación ambiental para la sustentabilidad impulsa una visión sistémica que permite ver el deterioro ecológico, no sólo como un
fenómeno aislado circunscrito a un mal manejo de los ecosistemas, sino como parte de una trama compleja en la que las dimensiones
sociales revisten suma importancia en su explicación”.
Resultado de la educación, es la cultura ambiental, esto según González (2010:111), quien afirma que esta se ve “… evidenciada en la
transformación de su conciencia social e individual; del sistema de conocimientos, sentimientos, actitudes y valores relacionados con la
situación ambiental; y su expresión en las relaciones entre los seres humanos, de estos con la sociedad, y de esta con la
naturaleza”. González (2010) afirma que los componentes básicos de la cultura ambiental se diferencian en su alcance, derivado de ello
define siete dimensiones, de las cuales para efecto de este proyecto, se considerarán solamente tres:

• Dimensión cognitiva, o ‘Saber ambiental’: conocimientos sobre el medio ambiente y su relación con las actividades económicas y
sociales, dentro de las cuales se destaca el turismo por el interés particular del estudio.
• Dimensión afectivo motivacional o ‘Querer hacer ambiental’: motivación con respecto a la protección y conservación del medio
ambiente en que tiene lugar el desarrollo económico y social.
• Dimensión comportamental o ‘Hacer ambiental’: comportamientos responsables con respecto al medio ambiente. (González
2010:111-112)

Según Capel H y Muntañola J (1981), todo proyecto de educación ambiental, debe basarse en: La sensibilización, la observación, el
análisis, el diagnóstico, y la prescripción (que se refiere a la toma de decisiones). Para lograr sensibilización, definen varios métodos:
Campañas en los medios de comunicación, campañas personalizadas, coercitivas y sanciones, acciones de protesta o simbólicas,
educación y participación, y contacto afectivo y multisensorial con la realidad, para efectos de proyecto, se utilizará este último. Definen
también cuatro tipologías de mensajes por el tono: amedrentadores, con carácter catastrofista y apocalíptico, basados en el miedo; los
esperanzadores, que presentan una visión optimista del futuro; los instructivos, que contemplan al ciudadano como un agente pasivo; y
los que apelan a la responsabilidad, perciben al ciudadano como un actor implicado en la conservación del medio, para efectos de este
proyecto, se utilizarán mensajes de tipo catastróficos, pues la crisis medioambiental es una urgencia, y el elemento temporal escasear
cada vez más para poder detener y revertir la situación, además, no hay necesidad de exagerar, sencillamente acotarse a los hechos, que
son en sí mismos, efectivamente, apocalípticos.
En cuanto a la observación, encuentran tres tipos: libre, que se produce siguiendo pautas personales de reconocimiento de la identidad,
naturaleza y circunstancias de la realidad; observación inducida, que pretende extraer, a partir de determinadas observaciones o
experiencias particulares, el principio general que en ellas está implícito, el sujeto interpreta el medio a partir de un cuestionario, una
relación de elementos, un relato, unas imágenes; u observación dirigida, que es aquella en la que el sujeto es informado, interrogado o
se le solicita una opinión sobre aquellos aspectos que el que dirige considera de interés para los objetivos de la actividad, puede ser
pasiva o requerir la participación del sujeto. (Capel H y Muntañola J, 1981 en Delgado E, 2014). Para esta propuesta, se utilizará la
observación dirigida.
El trabajo de análisis en este proyecto, iría implícito a lo largo de todo el análisis. El diagnóstico, vendría siendo la primer entrevista a
los visitantes, la cual revelará el nivel de cultura ambiental que tienen los sujetos.
En cuanto a la prescripción, se refiere a una toma de decisiones, la elaboración de propuestas y recomendaciones, o actividades
reivindicativas programadas con intervención y participación de los ciudadanos. Para el caso, consistiría en interrogar tras las actividades
a los sujetos sobre ideas que no se hayan propuesto ya, para contribuir a los problemas socio ambientales locales, así como solicitar su
apoyo en ciber redes para con los movimientos de lucha ambiental locales.
1.2 Vinculación a la Psicología Ambiental
La Psicología Ambiental se refiere al “Estudio de la interacción entre la conducta y el ambiente natural o construido”(Fisher y Loomis,
1978 en Latiesa 2010), que propone modelos de intervención en ambos niveles. Se considera a Fechner y Wundt como los fundadores a
mediados del siglo XX (Serrano, 2008) Los psicólogos ambientales, más que definir la disciplina, se han encargado de describir algunas
de sus características principales, entre ellas, está: Una perspectiva aplicada de resolución de problemas: la investigación está destinada
a descubrir los principios básicos de la conducta y a aportar la solución de los problemas sociales que involucran al ambiente físico
(García P, XXXX)
Una de las aportaciones de la psicología ambiental útiles para el desarrollo de esta investigación, proviene de Parsons (1968), destacado
sociólogo que tuvo la tendencia a considerar a los actores seres influenciados por las estructuras externas, más que actores voluntaristas,
desarrolló el concepto de orientación motivacional, que es individual y concerniente a la conciencia, pero en la cual, intervienen
criterios sociales, mejor aún, ‘culturales’, que guían la elección y que impiden actuar espontáneamente. Es lo que él llama
orientación valorativa o de valor, y tiene tres componentes: cognitivo, apreciativo y moral (Parsons y Shils, 1968).
La orientación de la acción resulta de una selección de alternativas en tres planos distintos, el intelectual, el afectivo y el moral,
estando esta elección determinada por los valores centrales e institucionalizados de la colectividad. La orientación de valor
alude entonces a estos modelos culturales que intervienen en el momento de sopesar soluciones en la acción, y que el actor ha
internalizado mediante su socialización…. En consecuencia, al perseguir intereses particulares los actores en realidad están
sirviendo a los intereses generales del sistema (Duek C, e Inda G,2014:158)

Trasladado al tema de la cultura ambiental, en efecto, puede percibirse en el grueso de la población, una conducta bastante desconectada
de la problemática ambiental, reflejada en un consumismo voraz, y en en la apatía ante la posibilidad ( dada por la tecnología) de
acercarse intelectualmente a los problemas ambientales para entender su dinámica, lo que encaja perfectamente a los intereses del sistema
economico y politico capitalista neoliberal, pues en la sociedad escasean las conciencias que: comprendan perfectamente la dinámica del
cambio climático, sepan de las soluciones (parciales), vean afectados sus emociones por las consecuencias de la crisis ambiental, y de
manera ética asuman una postura de responsabilidad activa.

Las prácticas turísticas, representan un momento de interacción social extra ordinario, es decir, fuera de lo cotidiano y común, y más aún
las prácticas turísticas guiadas, son una interacción muy particular, donde hay una jerarquización no formal, que por el carácter de ocio,
no rebasa el tamiz de autoridad, más sí permite al guía tener en cierta medida la batuta y la palabra, es por ello que son una oportunidad
para cambiar esos planos intelectuales, afectivos y morales respecto a la relación humano- medio ambiente; los visitantes vienen sin
ninguna armadura a situaciones incómodas ( como puede ser el cuestionamiento del propio estilo de vida), ya que no esperan en medio
de su servicio recreativo recibir mensajes negativos; tienen además buena disposición a seguir la experimentada recomendación del guía.

1.2.1 Cognición Ambiental.


Aragones ha hecho estudios de c.a.
1.2.2 Influencias ambientales en la comunidad.
Sundstrom
ambientes construidos
1.3 Enfoque Comunicativo para la Educación Ambiental
Un destacado cientista social afirma que “La sociedad no está compuesta de humanos, sino de comunicación, a modo de sistema”
(Luhman, 1993 en Rogel R, y Aguado E, 2000), afirmación con la cual para el caso, no se podría concordar más; los problemas socio-
ambientales de la modernidad particularmente, tienen una carga comunicativa intrínseca innegable. Tanto causa de males como cura y
vacuna, la comunicación es de las herramientas más poderosas en una sociedad compleja y cambiante, es por ello, que se usa como
principal recurso para la Educación Ambiental en el presente proyecto. Hay que señalar que, como bien destaca Chico F (1988: 25), “Un
acto lingüístico no es sólo un acto de decir o querer decir, sino, ante todo, un acto de elaboración macroestructural potencialmente
convertible en un acto concreto y social gracias al cual los miembros de una comunidad interactúan”
1.3.1 Pragmática
Es sabido que la pragmática constituye el tercer componente de la Semiótica Peirce, cuyos otros dos son la sintaxis y la semántica, así,
mientras que la sintaxis especifica en qué condiciones y según cuáles reglas los enunciados están 'bien formados' y la semántica indica
las condiciones para que los enunciados sean 'interpretables' (tanto en lo relativo al significado como a la referencia), a la pragmática se
le adjudica la tarea de ocuparse de las condiciones bajo las que las manifestaciones lingüísticas son aceptables, apropiadas u oportunas.
(Guerrero G, 1994).
Esta rama de la semiótica es particularmente fértil para la educación ambiental, porque “Parte de la filosofía pragmática establece que
los conceptos son entendidos a través de las consecuencias observables y que el aprendizaje implica el contacto directo con las cosas”,
cuando precisamente el método aquí empleado de la E.A. es el contacto directo con el ambiente.

Existen numerosas tradiciones que en pragmática lingüística se puedan distinguir, Conte M (en Chico F, 1998), estudia las razones
fundamentales que han motivado el reconocimiento operativo de esta extendida, encontrando la relevancia de la pluralidad de funciones
y de usos del lenguaje. Sin embargo, en todas ellas subyace un único denominador común, que es su preocupación por el estudio de las
relaciones entre contextos y expresiones lingüísticas (Chico F, 1998), por lo tanto, la pragmática lingüística tiene como objeto de estudio
según Albaladejo T (1998)las relaciones existentes entre el contexto de comunicación, donde se localizan los participantes
comunicativos, y las expresiones de lengua natural.
En definitiva, la pragmática estudia las condiciones y reglas para la idoneidad de enunciados (actos de habla) expresados por el hablante
en una situación comunicativa (contexto) determinada, es decir, se ocupa de la relación entre el lenguaje y el hablante (Guerrero G,
1994).
1.3.2 Discurso Retórico

CAPÍTULO II (MARCO DE REFERENCIA)


2.1 San Crisanto, paraíso ecosistémico
2.2 Los esfuerzos de los locales por el resguardo de las riquezas
2.3 San Crisanto, espejo de las problemáticas costeras de la Península
CAPÍTULO III (ESTRATEGIAS)
BIBLIOGRAFÍA
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 Urry J (2002) La Mirada del turista. Universidad de Lancaster. Inglaterra
 Gómez G (2008) Capítulo VI La educación Ambiental como eje transversal del currículo del bachillerato de la UAEM: Una
propuesta para su inserción procesual. en Serrano M Educación Ambiental. Una Perspectiva Interdisciplinaria México.
Dirección de Difusión y Promoción de la Investigación y los Estudios Avanzados.
 Latiesa M (2010) Propuesta de un Programa Educativo Ambiental para los Balnearios del Estado de Barinas. Universidad de
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Investigación y los Estudios Avanzados.
 Martínez G (2002 ) Localización de Actitudes Proambientales. Chile
 Gómez G y Reidl L (XXXX) Metodología de Investigación en Ciencias Sociales. UNAM
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TELOS. Revista
 Fernández G, y Guzmán A (2004) Educación Ambiental, itinerarios turísticos y sostenibilidad. Grupo de Estudios Ambientales
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 UICN (2002) Education and Sustainability. Responding to the Global Challengel.
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Científicas de América Latina y el Caribe, España y Portugal.
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 Liscovsky J., y Parra M (2011) Sustentabilidad ¿ un discurso de poder? La construcción del ecoturismo como política socio-
ambiental.
NOTA: Aún no meto las referencias de los antecedentes, necesito ordenarlas

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