Professional Documents
Culture Documents
8 de Marzo de 2009
¿EN DONDE QUEDAN LOS AFECTOS?
1 Crónicas 29:3
“…por cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios”
Introducción: ¿Cómo se encuentra mi querido lector? Espero que el Señor esté
derramando sus más ricas bendiciones sobre su vida. En esta oportunidad quisiera
desafiarlo con unos pensamientos. ¿Sabía usted que sólo 3 de cada 10 personas que
asisten a la iglesia contribuyen para sostener su ministerio? Esto tal vez parezca un
tanto sorprendente para usted, sin embargo, manifiesta un desacuerdo entre
nuestro afecto por las cosas de Dios y/o las cosas que ofrece el mundo. 1 Crónicas
29:3 nos revela que David fue un hombre cuyo afecto estaba en la casa de Dios. ¿Y
los suyos, dónde están emplazados? Permítame explicarle.
En el capítulo 28 de Crónicas tenemos los consejos de un buen padre a su hijo:
1. Familiarízate con Dios
v.9, “reconoce al Dios de tu padre” En este caso, la palabra “reconocer” en el idioma
hebreo hace referencia al ejercicio de aprender a conocer, discernir, distinguir. Y en
verdad, no se pueden discernir las cosas de Dios a menos que conozcamos a Dios, no
solo en forma relacional, sino también su carácter o atributos. Muchos de los
problemas con el servicio a Dios en nuestro tiempo es que no hemos llegado a tener
un correcto conocimiento acerca de Él; y esto desafortunadamente como
consecuencia de maestros que no toman tiempo de presentar enseñanzas claras y
bíblicas acerca de la persona y cualidades de Dios.
2. Trabaja para Dios
v.9b, “… reconoce… y sírvele…” El hombre de hoy más bien trabaja para sí, buscando
sus propios intereses, no tanto los del cielo. Este egoísmo es causa de muchas
injusticias incluso de orden social en el mundo, y esto se puede ver en los gobiernos
que rigen nuestras naciones, las empresas que nunca se satisfacen de hacer
ganancias exuberantes explotando cada vez más a los hombres, y estos a su vez
aclimatados a un temple de egolatría y desinterés por las necesidades de otros. El
consejo de este padre es servir a Dios.
Sin embargo, tome nota mi querido lector que dicho servicio debe llevarse a cabo
con la actitud correcta:
1
IGLESIA BAUTISTA CASTELLANA
Pastor: Edgardo Piesco
IGLESIA BAUTISTA CASTELLANA
343 Keele Street, Toronto, ON, M6P 2K6;
Tel. (416) 963-9073
www.iglesiabautistacastellana.ca
ibcastellana@rogers.com
a. Con un corazón perfecto (completo, íntegro)
v.9b, “sírvele con corazón perfecto”
b. Con una mente dispuesta
v.9c “sírvele… con ánimo voluntario”
Y el principio de esta advertencia es doble:
1) Dios conoce al hombre
“… porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende” Tome
nota cómo conoce a cada uno en particular; en otras palabras, Dios
conoce lo que hay en su corazón y en su mente cuando se trata de
servir.
2) Dios se ofrece al hombre
v.9d, “… Si tú le buscares, lo hallarás; mas si lo dejares, Él te desechará
para siempre”
3. Cumple tu propósito en la vida
v.10, “Mira, pues, ahora, que Jehová te ha elegido para que edifiques casa para el
santuario; esfuérzate, y hazla” Parece notable que Dios haya escogido a Salomón
para esta gran obra de construir el templo de Dios. ¿Se ha puesto a meditar cuál es el
propósito de Dios con su vida? El consejo de la palabra de Dios es que nos
esforcemos en ello y lo hagamos.
Sin embargo, algo que es iluminador en este pasaje es el hecho de que no solo
debemos tener un corazón íntegro cuando se trata del servicio a Dios, sino que
debemos tenerlo centrado en el lugar correcto. En el caso de David, nos dice el
capítulo 29:3, lo tenía ubicado en la casa de Dios; sus propias palabras son, “…por
cuanto tengo mi afecto en la casa de Dios.” Esta palabra “afecto,” significa satisfacción
o placer. Si tomamos estas palabras en conjunto con las del v.3 apreciamos donde
estaba el corazón de este hombre y como manifestaba su devoción a Dios, “…por
cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios… he dado para la casa de mi Dios.” Así
que, su afecto por las cosas de Dios está manifestado por el ejercicio de dar para
dichas cosas.
Por supuesto, aquella fue una obra monumental para levantar un inmueble, sin
embargo hoy, los creyentes han sido llamados para contribuir a la edificación del
Templo espiritual de Dios que es su iglesia. Para ello, es necesario familiarizarse con
Dios a través de Cristo, debemos trabajar para Dios y lógicamente debemos cumplir
con sus propósitos en nuestras vidas. El manifestar estas pautas mostrará donde
están nuestros afectos. Póngase a pensar en esto mi querido lector, ¿están sus
2
IGLESIA BAUTISTA CASTELLANA
Pastor: Edgardo Piesco
IGLESIA BAUTISTA CASTELLANA
343 Keele Street, Toronto, ON, M6P 2K6;
Tel. (416) 963-9073
www.iglesiabautistacastellana.ca
ibcastellana@rogers.com
afectos en la obra de Dios, en la proclamación del evangelio, en la edificación de Su
iglesia? Estas son cosas que demandan nuestro apoyo, no solo personal, sino
también financiero. ¿Está envuelto en esta misión? Ojalá que las palabras de aquel
gran hombre de Dios que aconsejaba a un hijo, puedan ser de estímulo para que
cumplamos nuestro papel en la obra que Dios nos ha legado, incluso, si fuere
necesario, y ciertamente lo es, con nuestras finanzas. Considérelo.
Pastor Edgardo Piesco.
3
IGLESIA BAUTISTA CASTELLANA
Pastor: Edgardo Piesco