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Ensayo Teoría Humanista- Gordon W.

Allport

A lo largo del desarrollo de la psicología se han realizado un sin número de estudios que han
tenido como producto la formulación de diversas teorías, que vienen siendo propuestas desde
diferentes enfoques, ayudado a fortalecer y estructurar a la psicología como ciencia. Entre
algunos de los más importantes enfoques tenemos el psicoanálisis, el conductismo, el
cognitivismo y el humanismo, este último se tomará como referencia para el desarrollo del
presente escrito. Para iniciar se hará un breve acercamiento al contexto histórico a cerca del
humanismo y del cual se puede decir que no se tiene una fecha exacta de su concepción,
pues como menciona (Villegas Besora, 1986) “ aunque el primer Encuentro Nacional de la
American Association for Humanistic Psychology (AAHP) tuvo lugar en 1962, la Asociación se
había constituido ya como tal en verano de 1961. Con anterioridad en la primavera del mismo
año, había aparecido el primer número del Journal of Humanistic Psychology. De manera que
puede considerarse 1961 como el año en que la Psicología Humanista nace a la luz pública.”
Cabe resaltar que entre los integrantes de la junta directiva de esta asociación se encontraba
Abraham Maslow, quien fue uno de los humanistas más reconocidos debido a su teoría sobre
la pirámide de las necesidades humanas. Entrando en el postulado humanista, este enfoque
tiene como premisas la creatividad, el amor, los valores, la autonomía, el crecimiento, la
autorrealización y la gratificación de las necesidades básicas, donde la persona es consciente,
intencional, en constante desarrollo y cuyas representaciones mentales y estados subjetivos
son una fuente válida de conocimiento sobre sí mismo. Este postulado que tiene como
grandes exponentes a Abraham Maslow quien como ya se había mencionado antes formuló la
teoría de la pirámide de las necesidades y también destacó con la teoría de la
autorrealización, de igual manera Carl Rogers introdujo la forma de terapia enfocada en el
cliente y por ultimo Gordon W. Allport de quien se hablará más a fondo.
Allport al igual que los demás humanistas se enfocó en estudiar a las personas
psicológicamente sanas y le dio un cambio a la concepción del termino personalidad, ya que,
en contraposición al psicoanálisis, sacó a la personalidad del campo de las psicopatologías y
la dimensionó hacia el crecimiento individual y motivacional, como forma de realización.
Dentro de los estudios que realizó tuvo un destacado reconocimiento por su Psicología de la
personalidad, donde la definió como “La organización dinámica dentro del individuo de los
sistemas psicofísicos, donde no sólo nos ajustamos a nuestro ambiente, sino que nos
reflejamos en él. Además, nos esforzamos por dominarlo y en ocasiones tenemos éxito. Por
tanto, la conducta y el pensamiento contribuyen a la supervivencia y el crecimiento” (Sollod,
Wilson, & Monte, 2009). A este concepto de personalidad, Allport le agrego algunos
componentes importantes como los rasgos, que son estructuras neuropsíquicas reales y que
están inmersos en el funcionamiento del sistema nervioso y dirigen la conducta, estos, fueron
clasificados en: rasgos cardinales (aquellos que son evidentes y marcados en las actividades
de un individuo), rasgos centrales (son los que representan las pautas de comportamiento,
son características destacadas de un individuo) y rasgos secundarios (son los menos
generalizados, ya que no son tan evidentes y constantes), la clasificación de un rasgo dentro
de la personalidad de una individuo está dado por la frecuencia o importancia que se le dé a
este, por ejemplo, el gusto por el estudio puede ser un rasgo cardinal para una persona,
mientras que para otra este puede ser secundario ya que tiene menos importancia. Otro
termino muy importante dentro de la psicología de la personalidad es el Proprium o “mi, yo
mismo y yo”, que son aquellas motivaciones autodeterminadas, tema central de vida o metas,
que son la esencia del esfuerzo propio y que dominan la historia de vida de un individuo.
Allport propuso que el Proprium se va desarrollando a lo largo de la vida en siete aspectos: el
yo corporal (se desarrolla en el primer año y comprende aquellas percepciones mediante las
cuales el individuo siente placer, dolor y limitaciones físicas), la identidad del sí mismo (se
desarrolla al segundo año y es la experiencia que se realiza a través del lenguaje), Autoestima
(al tercer año y es el orgullo por los logros), extensión del sí mismo ( entre cuatro y seis años,
donde se tiene un concepto abstracto de posesión), autoimagen del sí mismo (también entre
cuatro y seis años, se identifica el sí mismo bueno, sí mismo malo y hay sensibilidad ante el
elogio y la culpa), el sí mismo como agente racional (de seis a doce años, se dan soluciones
realistas las tareas, el sí mismo mediador entre la necesidad y la realidad ), esfuerzo proprium
(de doce años a la adolescencia, se definen metas propias y hay autocontrol sobre los
sentimientos, necesidades y pensamientos), y finalmente el sí mismo como conocedor ( se da
en la adultez, comprendiendo la totalidad de los aspectos previos del proprium, alcanzando
una conciencia de sí mismo), en resumen el proprium es el objetivo final del desarrollo
individual, donde la persona es capaz de saber y de saber que sabe. Así pues, la teoría de
Allport es una postura donde las personas son constructores activos de su propia vida y hace
énfasis en la importancia de la personalidad individual, donde siempre se está funcionando en
el presente de una manera adaptativa y creativa, impulsado por el desarrollo motivacional.

Este teórico dentro de sus postulados nos da un gran aporte para nuestro quehacer como
futuros psicólogos, pues divisando de forma general su teoría, esta sería muy aplicable dentro
del campo organizacional y el clínico, ya que por enfocarse en el individuo como tal, nos dará
herramientas muy útiles para identificar rasgos de personalidad en alguien que esté pasando
por un proceso de selección en alguna empresa o alguien que acuda en busca de tratamiento
psicológico. También nos ayudara a entender que las personas son y se hacen a través de
sus historias de vida, por lo cual muchas veces no nos debemos de enfocar solo en las
patologías, sino que debemos de entender que estamos ante un ser humano, que tiene
motivaciones y deseos, que siente y que ese sentir es producto de su experiencia y que esa
experiencia puede ser una gran fuente información para enriquecer nuestro conocimiento
sobre ellos.

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