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Nos quedan tres lecciones para abordar

todas las ETAPAS FAMILIARES. Hemos


estado aprendiendo mucho de la mano de
Claudio y Pamela Consuegra sobre esa
institución que tanta influencia tiene en
todos los aspectos de la vida: la familia.

En esta semana hablaremos de cómo la


cultura influye en la fe y también qué
LECCIÓN 11: podemos hacer para que nuestros hijos
FAMILIAS DE FE.
Edición para Maestros de la Guía de Estudio de la Biblia permanezcan en la iglesia.

Ahora vayamos a la página 132 del folleto de


maestros donde encontrarás como título EL SÁBADO ENSEÑARÉ y a partir de ahí
elaboremos el plan de ruta para dar la clase.

La vamos a dividir en cuatro bloques a los que llamamos


El Sábado MOTIVA, EXPLORA, APLICA Y CREA. Los tres primeros los
sacamos del folleto de maestros y el último de nuestra
Enseñaré… creatividad guiada por el Espíritu Santo.

Con la ayuda de Dios tu clase será dinámica, los alumnos van


a participar casi de manera automática y natural, y lo más importante es que ayudarás a
que sus caracteres se vayan formando a la imagen de Cristo.

¿Estás listo para alcanzarlo? COMENCEMOS…

El primer bloque de la lección busca introducirla destacando


MOTIVA su importancia y creando el ambiente adecuado para trabajar
en grupo. Se trata de MOTIVA y sale de la RESEÑA que
[3 Minutos] encuentras en la página 132.

Recomiendo que uses la última frase de ella. Diles algo como


esto: “la lección de esta semana nos advierte que los que no son
conscientes de las influencias culturales en su vida pueden estar conformándose a ella sin
pensarlo, pero con la ayuda de Dios nuestro repaso de hoy nos permitirá hacer la
diferencia”.

Esto es suficiente para alcanzar todo lo que buscamos de MOTIVA ¡Y en menos de tres
minutos! ahora pasemos al siguiente bloque.
La parte más desafiante de este modelo de repaso de la
EXPLORA
lección es EXPLORA, porque dispone de tan solo 15 minutos
para resaltar los puntos más importantes del contenido de la
[15 Minutos] lección.

Bajo el título COMENTARIO que encuentras en tu folleto de


maestros hay muy buenas ideas para definir esos puntos. De
mi parte recomiendo los siguientes:

1. LA INFLUENCIA CULTURAL EN LA FE. Uno de los aspectos más tangibles en las


iglesias es la influencia que tiene la cultura sobre nuestras creencias. No es solamente
un asunto de nuestra denominación sino de todas las denominaciones y todas las
religiones, sean cristianas o no.

Y si a eso le agregamos el hecho de vivir en un mundo globalizado, el desafío es


mucho mayor. Sin embargo, esto no es un tema de ahora, la Biblia nos muestra que la
cultura tiende a empujar los principios.

La reina Ester en Susa y Daniel en Babilonia tuvieron que sentir el acorralamiento del
medio cultural donde vivían en todos los sentidos: desde la alimentación y la forma de
vestir hasta los aspectos más sensibles de su fe.

Nosotros tenemos nuestra posición eclesiástica en cuanto a las joyas, sin embargo,
intenta que tu clase imagine cómo debió ser para una reina o para el gobernador
supremo de Babilonia el uso de estas.

Lee con la clase Ester 2:12-17 y resalta cómo ella se sometió a las recomendaciones de
Hegai para su arreglo personal. Remarca también que en Daniel 5:29 se nos dice que el
profeta debió aceptar que lo vistieran de púrpura y le pusieran un collar de oro. En
ambos casos nota la influencia de la cultura.

Sin embargo, hubo influencias sobre la fe que no fueron tan “inocentes”, como es el
caso de la SUBROGACIÓN de la que Sara echó mano, al solicitar a su esposo que su
sierva Agar la sustituyera para engendrar un hijo. En su época no solo era una
costumbre cultural aceptada, sino también reglamentada jurídicamente, y la pareja del
pacto la usó creyendo que estaba bien.

Actualmente hay muchas cosas que no son tan evidentes como el ejemplo anterior,
que son completamente culturales y no religiosas, pero que las vemos bajo ese lente,
como por ejemplo el uso de la corbata en la iglesia.

Pregunta a tu clase: ¿Qué ejemplos podríamos dar de asuntos meramente culturales


que asociamos erróneamente con lo espiritual? Y más importante que eso, ¿cómo
podríamos tener bien diferenciados los principios de fe con las formas culturales?
2. CONSERVAR LOS HIJOS EN LA FE. Cuando una persona experimenta la conversión
surgen muchos cambios en su vida que tienden a solidificarlo en la fe. Algunas de las
cosas que suceden es un reemplazo paulatino en sus relaciones, ¿cómo sucede?

Pues al testificarle a sus familiares y amigos algunos de ellos aceptan su nueva fe y la


vida de todos empieza a girar en torno a Cristo y su Palabra. Sin embargo, hay otros
que se irán alejando poco a poco ya que sus nuevos hábitos, recreación, y hasta
lenguaje no son compatibles con los de ellos.

Al cabo de unos pocos años, el recién convertido también hará nuevos amigos en su
comunidad eclesiástica que comparten lo que para él es lo más importante: su fe.
Dependiendo de su edad, se casará con un creyente y sus hijos nacerán en el entorno
de su iglesia.

Para esos niños, la iglesia es lo único que conocen, se familiarizarán con ella,
participarán de sus programas enfocado en ellos y los adultos asumirán que, por el
hecho de haber nacido en un hogar cristiano, ellos también lo son.

Sin embargo, esos niños al crecer, en muchísimos casos no experimentarán la


conversión que sus padres tuvieron. La enseñanza de las creencias no es lo mismo que
conocer personalmente a Dios. Asistir a una reunión de culto no es lo mismo que
adorar. Conocer de Dios no es equivalente a conocerlo a Él.

Lo más dramático es que los adultos asumen que los niños, al saber en temas
religiosos lo que otros no, ya son cristianos y no se preocupan por contribuir a formar
un ambiente en que se produzca encuentros de los niños con Dios.

¿El resultado? Que al no haber conversión no hay cristianismo real y a cierta edad,
cuando el uso de razón está maduro, la elección natural de un corazón sin Cristo es
mantenerse alejado de Él.

Nuestro deber como padres es mucho más serio de lo que creemos. Lee con tu clase
las recomendaciones de Dios para educar a los hijos en la fe en Josué 4:4-7 y
Deuteronomio 6:6-7, y luego pregúntales: Según Jueces 2:8-10, ¿Por qué pasó esto con
la siguiente generación?

Permítele a tu clase hablar, pero al final enfatiza el hecho de que, aunque habían hablado
de Dios, y los monumentos levantados les recordaban de Dios, esos padres no cayeron en
cuenta que no enseñaban meramente información sino cómo tener una RELACIÓN con el
Señor.
El tercer bloque del repaso de la lección es APLICA, donde
APLICA por lo menos durante 10 minutos nos esforzamos como
maestros en HABLAR POCO y lograr que la clase PARTICIPE
[10 Minutos] MUCHO.
El propósito es plantear escenarios en los que los alumnos se
sientan deseosos de dar sus opiniones. Las preguntas que se
formulen deben ser tales que las respuestas a ellas no se consideren correctas o
incorrectas.
Ese tipo de preguntas las puedes encontrar en el material para el maestro bajo el título de
PREGUNTAS DE APLICACIÓN. Otro lugar para buscar es las PREGUNTAS PARA
DIALOGAR que aparece todos los viernes en la lección de alumnos. Esta es mi propuesta:
1. ¿Cómo crees que se puede enseñar a relacionarse con Dios a un niño de 7 años?

2. Si ya no tienes hijos pequeños, ¿qué papel puedes desempeñar en favor de los niños de
la iglesia?

3. Es posible que en la iglesia se encuentre un padre que, aunque se haya esforzado en


mantener sus hijos en la fe, alguno de ellos decidió abandonarla. ¿Qué le dirías para
animarlo?

4. Se puede dar el caso de asuntos culturales que no vayan en contra de la fe. Pregúntale
a tu clase si pueden encontrar algunos.
5. ¿Qué herramienta de tu cultura puede servir de herramienta para el evangelio?

CREA es la manera en que en dos minutos le dejas una tarea


CREA a tu clase para que desarrollen en casa. Esto les permitirá
llevar la enseñanza a la vida real, así que no dejes que el
[2 Minutos] tiempo te impida proponerla.
Para esta semana te propongo que le digas a los miembros
adultos de tu clase que oren para que el Señor les ayude a escoger un niño de la iglesia y
se conviertan su mentor espiritual, con el objetivo de ayudarlo a tener una relación real
con Cristo.
CONCLUSIÓN.
Lo que resta ahora es concluir la lección. Esto se hace con una sola frase que sea a la vez
sencilla y elegante. Esta puede ser: “nuestra lección nos mostró que debemos esforzarnos
más en que nuestros niños de la iglesia conozcan a Cristo y no solamente de Él”.

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