PLAZA DEL 20 DE JULIO – BOGOTÁ D.C.

, COLOMBIA

Introducción al documento

La plaza del 20 Julio ubicada en la localidad de San Cristóbal de la ciudad de

Bogotá, es uno de los muchos espacios capitalinos en dónde podemos observar
diversas prácticas de gubernamentabilidad, en lo corrido de nuestra investigación y
observación damos cuenta del comportamiento del individuo, de sus maneras
múltiples del manejo de los espacios en lo que comúnmente conocemos como “el
espacio público”.

Objetivo

El objetivo general de nuestra investigación es identificar las causas que puedan

dar impresión de un mal o buen uso del espacio público, describiendo las
representaciones sociales, las prácticas de gubernamentabilidad y las interacciones
con relación al espacio público respecto a la interacción de los grupos de
vendedores ambulantes, con los posibles clientes, y el espacio en donde se
presentan miles de hechos sociales a diario, la plaza del barrio 20 de Julio, ubicada
a las afueras del Santuario del Divino Niño Jesús en el suroriente de la ciudad de
Bogotá D.C. localidad de San Cristóbal.

Contenido

Para el desarrollo de éste documento definiremos el concepto de espacio público,

abordaremos una breve reseña respecto a la historia del sector, continuaremos con
un análisis basado en la matriz elaborada durante el trabajo de campo en relación
con las prácticas de gubernamentabilidad, el uso de del espacio, y las múltiples
interacciones entre los diferentes autores identificados.

Análisis

Para el desarrollo de éste escrito, es necesario tener claro un concepto de espacio

público, el cual entenderemos de la siguiente manera:
“El espacio público es el conjunto de inmuebles públicos y los elementos
arquitectónicos y naturales de los inmuebles privados destinados por naturaleza,
usos o afectación a la satisfacción de necesidades urbanas colectivas que
trascienden los límites de los intereses individuales de los habitantes. El espacio
público es el lugar que hace posible el encuentro cotidiano entre personas, quienes
mediante su acción crean su propia historia y cultura. Tiene su origen en Grecia con
el Ágora, en Roma con el Foro; espacios que posteriormente pasaron al servicio de
la comunidad. Estas eran las plazas de carácter cívico en donde se desarrollaba la
vida social, política y económica.”₁.

En este orden de ideas, tenemos que la plaza del 20 de Julio es un espacio público,
considerando que es un espacio donde se desarrollan prácticas económicas,
financieras, espirituales y sociales, para el fortalecimiento individual y colectivo de
los residentes del sector y visitantes.

El 20 de Julio es un barrio con una historia propia en Bogotá, su desarrollo estuvo

bastante influenciado por la iglesia católica y el trabajo de los curas Salesianos
como el padre italiano Juan del Rizzo, en el año de 1935, una labor que estuvo
sujetada con la misión de los jesuitas en el barrio Villa Javier.

El 20 de Julio fue poblándose en mayor parte de obreros bogotanos mas no de

campesinos, como sucedió con la mayoría de los barrios del sur de la ciudad.

Pregunta de investigación.

¿Qué tipo prácticas en la plaza del 20 de Julio de la ciudad de Bogotá, podrían dar
indicios de un mal uso del espacio público?

Con base al análisis que iremos desarrollando, hemos identificado que, el espacio
público en la plaza del 20 de julio como una propiedad colectiva en dónde existe
una libre circulación y permanencia sin condición alguna, permite un equilibrio de

₁.Cartilla, principios del espacio público. ORGANIZACIÓN DE ESTADOS IBEROAMERICANOS PARA LA

EDUCACION LA CIENCIA Y LA CULTURA FUNDACION NEXOS NEXOS MUNICIPALES;
http://cdim.esap.edu.co/bancomedios/documentos%20pdf/principios_del_espacio_p%C3%BAblico_(16_pag_5
0_kb).pdf
funcionamiento no sólo de la plaza sino de la ciudad. En este sentido, si hablamos
concretamente de éste sector, vemos inevitablemente los numerosos actores que
interactúan en éste espacio.

Hipótesis

A partir de la investigación realizada, con fuentes primarias, hemos observado que

en gran parte el problema que da la impresión de un mal uso del espacio público en
la plaza del 20 de Julio, apareció desde hace aproximadamente de 40 a 50 años, a
raíz de la construcción de la iglesia y el crecimiento económico-religioso como foco
de las actividades comerciales, debido a la falta de una apropiada planeación del
sector, ésta plaza empezó a ser construida bajo el modelo de un barrio obrero, los
espacios no tiene relación entre sí, sus calles aledañas son usadas tanto para llevar
estructuras improvisadas (casetas móviles, puestos con carpas, puestos con
estructuras complejas, puestos en el piso…) para la venta de diversos productos,
en su gran mayoría artículos religiosos, como la circulación de personas y todo tipo
de trasporte, (automóviles, motocicletas, bicicletas, etc).

Análisis Matricial

La plaza se relaciona con la ciudad por las prácticas que allí se realizan, sin
embargo, no existe relación alguna dentro del sector y sus usos, con la ola cultural
y comercial que ya existe, todo esto se reduce a un inevitable déficit de movilidad
en la red de senderos peatonales, andenes y espacio público.

A raíz de la existencia de éste comercio desmedido, vemos que además de

presentarse un alto déficit de movilidad, entran a jugar un papel muy importante a
nivel colectivo, la higiene y la seguridad, debido al alto flujo de individuos al pasar
las horas, a la constante actividad comercial, no es anormal encontrar las calles
inundadas de basuras al finalizar la jornada, como tampoco es nada nuevo
encontrar casos de inseguridad, a diario éste sector recibe visitas de cientos de
individuos que van con un fin distinto, entre éstos fines se encuentra el de
aprovechar la oportunidad para hurtar mediante infinitas modalidades, el llamado
“cosquilleo” es una de las modalidades más comunes, aprovechando la multitud, se
presenta también básicamente por la distracción de las personas, y por un sin fin de
actividades que están pasando, también cuando el comercio cierra a una
determinada hora las calles quedan solas.

Es fácil suponer que las plazas públicas de Bogotá, cada vez son menos visitadas,
gracias a la aparición de nuevos espacios, en dónde también existen prácticas de
interacción, que son privados, pero tienen “sub espacios” que llegan a ser en parte
públicos en cuanto a la libre circulación dentro del mismo, como lo son los centros
comerciales, los cuales son espacios más limpios y organizados, sin mencionar el
nivel de seguridad que se experimenta en éstos sitios, aunque la inseguridad
siempre ha estado presente en casi todos los espacios públicos y privados, digamos
que hablando particularmente de los centro comerciales, podemos decir que
evidentemente existe mucha más seguridad que en las plazas públicas., sin
embargo éstas son de una alta importancia para la ciudad ya que son el origen y el
centro de un enorme encuentro cultural, gastronómico, comercial, social y religioso.

A continuación, expondremos los diversos autores que investigamos y en los cuales

se basa nuestra investigación.

La práctica de la economía y ventas ambulantes que llevan consigo la apropiación

del espacio público, en donde se refleja una gran variedad de productos, el mercado
se acomoda según los días de alto flujo de visitantes en el día, en donde ponemos
en relación los domingos siendo estos los días más recurridos para la plaza del 20
de Julio por lo cual el espacio público son tomados por quienes practican el
comercio.

Quienes recurren a este espacio, la mayoría de estos son visitantes del mismo
sector, igualmente de la ciudad de distintos sectores socioeconómicos, turistas tanto
del país como extranjeros, ya que la fe y la devoción al divino niño es universal, o
simplemente llegan turistas para conocer la estructura de la catedral, vienen por
admiración a la arquitectura.

Dentro de estas visitas podemos encontrar frecuentemente que los visitantes a este
lugar son grupos de familias, que dentro de estas podemos ver que algunas se
encuentran conformadas por jóvenes con sus hijos, o con más integrantes de su
núcleo familiar; igualmente los abuelos prefieren llevar a cabo sus visitas entre
semana o los domingos pero recurren a la misa de 5:00 am esto con el propósito de
evitar aglomeraciones; igualmente encontramos una gran parte de jóvenes, lo cual
podemos entender que no todos ellos acuden a este lugar por razones de carácter
religiosos, algunos solo van acompañar a sus familiares, los estudiantes del colegio
Salesiano Juan del Rizzo quienes son los jóvenes que más frecuentan este lugar
por motivos de carácter religioso, esta plaza no solo constituye un lugar de fe, sino
también un lugar para el comercio, la cultura, la gastronomía y la recreación.

Los visitantes acuden a la plaza del 20 de Julio por devoción al Divino niño, a
observar el santuario o a practicar su actividad religiosa, en donde estas visitas
pueden no solo dar importancia a la fe sino también a la actividad comercial de
carácter informal, por cuanto los productos y mercancías se encuentran por un
menor costo a comparación de otros lugares en la plaza y en la ciudad, por lo cual
esta actividad comercial tiene un gran interés en quienes visitan la plaza ya que
muchos acuden los días domingos a comprar diferente clases de artículos
religiosos.

Las personas que asisten a rendir culto al divino niño Jesús en el 20 de Julio tienen
un gran sentido de religiosidad sin importar su estrato socioeconómico, en ese lugar
buscan poder solucionar diversas dificultades como salud, seguridad, problemas
emocionales, de desempleo, en donde para los visitantes por esta expresión de
devoción puede llegar a concedérsele milagros; con el paso del tiempo este culto
tomó una característica propia, en donde vienen devotos de todas partes del país.

Como hemos venido manifestando, nuestra principal fuente de investigación es el

comercio informal, en la plaza podemos encontrar una gran diversidad de
comerciantes ambulantes, como aquellos que llevan 2, 5, 10 años o más
practicando esta actividad en las calles del 20 de Julio ya sea con sus puestos de
ventas de comidas: aguas aromáticas, tamales etc..; artículos religiosos como:
escapularios, imágenes, rosarios, veladores etc.., igualmente aquellos que se han
instalado al lugar con productos que no llevan una relación con objetos religiosos y
gastronómicos; podemos observar que el comercio de carácter informal son
pequeños comerciantes sin ningún tipo de estabilidad o seguridad en este lugar,
este comercio informal se presenta como una salida para los sectores
desfavorecidos socialmente y económicamente, en la plaza del 20 de Julio podemos
también presenciar la monopolización de los espacios públicos que pueden verse
reflejados en la ocupación del espacio la cual es administrada por una o más
personas las cuales se le pueden llegar a ver reflejados el pago del uso del espacio
por días, en donde estos mismo se hacen ver como propietarios del espacio.

El mercado ambulante en la plaza del 20 de Julio comienza a levantarse desde las

6:00 am en donde va ganando su lugar el vendedor que llegue primero, igualmente
encontramos los diferentes puestos de venta que nombrábamos anteriormente, en
donde podemos encontrar:

Las casetas móviles: en donde gran parte de estas son utilizadas para la venta de
artículos religiosos estas usualmente ubicadas en las paredes del colegio, en donde
encontramos que un vendedor atiende 2 o más puestos al tiempo reflejándonos así
la monopolización de los espacios.

Los puestos con carpas, en donde algunos de ellos son puestos compartidos con
varios vendedores en donde se observa apoyo entre cada uno de los vendedores
que se encuentra en el mismo puesto; algunos también se construyen con tablas y
techo de plástico los cuales sirven al momento de que se presenten lluvias la
mercancía pueda estar intacta, la mayoría de estos vendedores se dedican a la
venta de zapatos, ropa etc…

Puestos con estructura compleja: estos corresponden más que anda a aquellos
dedicados a la preparación y venta de comidas, en los cuales estos suelen ser más
grande y posen más bienes muebles como madres, sillas, estufas a gas, olla etc…,
la mayoría de estos atendidos por mujeres o por familias que se dedican a la
preparación y venta de comidas.
Puestos en el piso: este puesto se encuentra construidos por una mesa o
simplemente un plástico en el piso y la mercancía encima de ellas la mayoría de
estos venden toda clase de artesanías.

Exponiendo así los diferentes puestos de ventas ambulantes, encontramos

diferentes tipos de productos, el comercio ambulante ofrece una gran variedad de
productos a bajos costos para la población que en mayoría acuden al sector los
domingos; dentro de sus productos encontramos veladoras, imágenes, comidas,
calzado, ropa, artículos para el hogar, entro otros, algunos vendedores se dedican
a la venta de una clase especifica de producto como ropa y otros venden variedad
de productos, es ahí donde la dinámica del mercado en este sector es determinado
en cierta medida por quienes visitan este lugar.

Diariamente se puede evidenciar conflictos ente los vendedores ambulantes una de

las causas de estos conflictos es generado por el tamaño de los puestos, ubicación
o apropiación del espacio que algunos vendedores han proclamado como suyos
por la antigüedad que llevan ejerciendo la actividad en ese lugar; este tipo de
conflictos entre los vendedores por el uso del espacio público se resuelve entre
ellos mismos, teniendo en cuenta que no pueden acudir a una autoridad para que
se les sea establecido quien puede usar ese espacio público ya que en cierta
medida ese espacio público se está usando de manera indebida por los vendedores
del sector.

No solamente los conflictos se presentan entre vendedores ambulantes sino

también entre los vendedores ambulantes con las autoridades y los comerciantes.

Frente a la organización del espacio público la policía y la administración local han

puesto disposición de los vendedores ambulantes lugares para que los mismos
puedan establecer sus puestos para así realizar su actividad económica y que el
espacio público de la plaza sea más ameno, más transitable para los feligreses,
estudiantes, turistas y habitantes del sector, pero esta medida no se han podido
llevar a cabo porque tanto policías y vendedores ambulantes entre ellos prestan
conductas agresivas, y que los vendedores se rehúsan a dejar de instalar sus
puestos en la plaza ya andenes del sector, con la justificación de que los lugares
proporcionados por la administración local los dejan alejados de la plaza del 20 de
Julio y así mismo podrían generar pérdidas para ellos.

El conflicto entre comerciantes y vendedores ambulantes, es constante ya que los

comerciantes que son aquellos que poseen un establecimiento de comercio, se
encuentra registrados ante la cámara de comercio en calidad de comerciantes,
estos expresas que los vendedores ambulantes llevan a cabo una competencia de
carácter desleal y que por ello se ve afectada su actividad comercial ya que la
ocupación del espacio público por parte de los vendedores ambulantes no solo
obstruye el paso de los visitantes del sector sino también las entradas a los
establecimientos de comercio en propiedad de los comerciantes, donde
normalmente los comerciantes acuden a la policía como instrumento mediador del
conflicto en el ámbito de ocupación del espacio y obstrucción de las entrada al
establecimiento de comercio de los comerciantes .

Las personas que asisten al rendir culto al divino niño Jesús en el 20 de Julio tienen
un gran sentido de religiosidad sin importar su estrato socioeconómico, en ese lugar
buscan poder solucionar diversas dificultades como salud, seguridad, problemas
emocionales, de desempleo, en donde para los visitantes por esta expresión de
devoción puede llegar a concedérsele milagros; con el paso del tiempo este culto
tomó una característica propia, en donde vienen devotos de todas partes del país.

La administración local junto con la policía ha diseñado estrategias de seguridad

para los días domingos los cuales son los más recurridos en la plaza del 20 de Julio,
esta estrategia de seguridad consiste en poner a disposición personal capacitado
de la policía para que atiendan cualquier tipo de circunstancia que pueda llegar a
ocurrir en la plaza del 20 de Julio.

Teniendo en cuenta el numeroso flujo de visitantes a la plaza, el mal uso del espacio
público, la policía se ha dedicado a mantener el orden y regular las ventas
ambulantes, igualmente el control del tráfico en las zonas cercanas al santuario.