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el Destino.
Posted on septiembre 1, 2009 by Miguel Angel Tellaeche in Principal
Serie: El Amor Redentor – La Seguridad Bendita.
Sermón 1 de 4
Por Miguel Ángel Tellaeche B.
INTRODUCCIÓN: Usted es libre para escoger, pero no es libre para
escoger las consecuencias de su decisión. Ha escuchado la
frase: “Cada uno es arquitecto de su propio destino”. Estas
palabras sugieren que el ser humano viene al mundo con una ruta
trazada que tiene que cruzar de forma inevitable. También hay
quienes afirman que nuestro futuro esta designado por las estrellas,
meses del año, climas y cristales, eliminando así toda responsabilidad
del ser humano.
¿Por qué dar importancia a mis decisiones si de todas maneras
estoy yendo por el camino que me toca? Pero en la historia que nos
cuenta las Escrituras, es muy común encontrar a un Dios que abre
puertas de camino en bendición para su pueblo mientras este pueblo
decide ir por donde va, camino a la perdición. Si Dios trazó el mejor
destino para la humanidad, ¿por qué estamos dónde estamos? Es que
ni las estrellas, ni los cristales, ni el zodiaco determinan nuestro
destino. Sino, las Decisiones que Tomamos. Le invito a estudiar: “Es
la Decisión Lo que Determina el Destino”. Tome notas por favor.
Deseo compartir con usted una verdad maravillosa: “Dios no nos
ama porque somos valiosos, somos valiosos porque Dios nos
ama”. Yo lo llamo El Amor Redentor y de eso se trata todo el libro de
Rut. El título de nuestro mensaje: “Es la Decisión lo que Determina
el Destino”, y estudiaremos en cuatro mensajes el libro de Rut bajo la
Serie: El Amor Redentor. Dios tiene un destino para usted, pero
usted tiene una decisión que necesita tomar, recuerde “Es La
Decisión lo que Determina el Destino”.
Le invito a tomar la Palabra de Dios en el libro de Rut, lo
encontrará en el Antiguo Testamento después del libro de Jueces. Es
una historia de amor, y a todos nos gustan esas historias. Realmente
es como el cuento de la Cenicienta porque Rut era de Moab, ella no
pertenecía a la “alta sociedad” pero se casó con el soltero más
perseguido de Belén, cuyo nombre era Booz. ILUSTRACION: Unas
universitarias estaban orando en su dormitorio y decían: “Señor, danos
corazones limpios, Señor danos corazones puros, Señor danos
novios, y todas las muchachas respondieron ¡amén! (Je, je). Nos
fascinan las historias de amor.
Ahora, permítame hablar del trasfondo de este libro. Fue escrito en
tiempos difíciles, en días tenebrosos, fue escrito en tiempos de los
Jueces y si está en el libro de Rut, simplemente retroceda al libro de
los Jueces y observe el ultimo versículo del libro de los Jueces y este
versículo dice: 25En estos días no había rey en Israel; cada uno hacía
lo que bien le parecía. Es decir, eran tiempos difíciles, eran tiempos
espiritual y nacionalmente tenebrosos. Había caos, apostasía y
anarquía en la nación, eran días económicamente tenebrosos, había
hambre, eran días domésticamente tenebrosos como lo vamos a ver.
En todo sentido eran tiempos difíciles y aun así después del libro de
Jueces tenemos el libro de Rut. Esta allí como una estrella
deslumbrante en medio de una noche oscura, como una gardenia un
desierto árido de desesperación y el libro de Rut realmente es
(escúcheme) es una esperanza resplandeciente en los días
tenebrosos. Amigos, estos son días tenebrosos pero hay una
esperanza resplandeciente, y quizás como Rut usted va a enfrentar
días tenebrosos, problemas, tiempos de desesperación y Jesucristo
llegará a ser para usted lo que Booz llegó a ser para Rut. Y cuando
usted entregue su corazón a Jesucristo va a encontrarse en medio de
una hermosa historia de amor.