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TIEMPO PARA LA VIDA

LA CRISIS ECOLOGICA EN SU DIMENSION TEMPORAL

Comprendiendo de lo leído del libro que publica Jorge Riechmann se


reúnen muchos de sus documentos que describe la relación de cómo se
encuentra en el tiempo la crisis ecológica no solo a nivel nacional sino
también a nivel mundial. En general se describe metafóricamente la
relación del ser humano en la convivencia con la naturaleza, donde se
encuentra que la relación entre ellos es dramática y despiadada.

En el libro se describe que realizaron diversos estudios a nivel científico


de tipo cuantitativo y cualitativo para poder explicar que la percepción del
tiempo no es única sino ha sido llevada a través de la historia para ser
cultural a los ojos de los demás, por otra parte expresa de cómo se acaba
el tiempo para salvar el mundo un ejemplo de esto muy significativo es el
cambio climático del planeta, la destrucción de los bosques tropicales en
apenas 3 o 4 generaciones, si nos ponemos a pensar en las palabras
textuales del autor podemos analizar que nuestro mundo se está agotando
para nuestras futuras generaciones ni si quiera nosotros mismos estamos
disfrutando de algunas especies animales que ya fueron extinguidas del
planeta tierra.

En un argumento del libro se describe y se pregunta si el hombre tiene la


culpa de la destrucción de la naturaleza y su entorno donde vive y si tiene
razón estamos cambiando la naturaleza, los grandes bosques tropicales
por grandes y extensas edificaciones, estamos acabando con los árboles
que cumplen una función muy grande en nuestro planeta tierra el cual es
capturar el co2 y liberar oxígeno, en algún momento se tendrá que utilizar
el genoma para clonar especies que estamos desapareciendo rápidamente
por el consumo innecesario.

A pesar de que la tecnología avanza rápidamente los dispositivos cada


vez son más los que se reciclan pero aún se denotan bastantes daños al
ecosistema, estamos acabando con nuestra propia vida, la existencia
humana remontada a siglos a.c donde los humanos eran cíclicos y no eran
esclavos del tiempo ni de la tecnología.

En nuestras vidas hay ritmos basados en la repetición como el día y la


noche la rutina de todos los días, el transcurso de las estaciones pero
notamos que el tiempo es único jamás se recupera ni se vuelve a repetir.
El tiempo va cambiando como lo ilustra el libro a medida que pasa
cambia el uso y el consumo de bienes se denota la perdida de la
biodiversidad las industrias farmacéuticas y los alimentos transgénicos
marca las consecuencias en el ser humano.

La velocidad de reproducción y producción de las personas han llevado


a la caída del tiempo para detenerse y pensar como estamos actuando
otro claro ejemplo puesto es las cifras de la infiltración del tráfico en las
grandes ciudades; entre mas rápidos son los vehículos mayor distancia
recorremos y el tiempo que invertimos en desplazarnos es el mismo de
hace un siglo pero implica un consumo de combustible y otros recursos de
poca o lenta renovación.

Cada vez hay menos tiempo para conocer otras personas dialogar,
hacer amistades, hay menos democracia ya que exige discusión, reflexión
y comunicación entre distintas personas que expresan diferentes culturas,
el ser humano un ciudadano actual que no tiene tiempo a largo plazo el
poco tiempo que tiene es dedicado al consumo de bienes y servicios un
ejemplo claro es el uso del celular y las redes sociales es un estilo de
consumismo ya que nos quita un valioso tiempo todos los días, es un
secuestro del tiempo, nuestro tiempo no es manejado por nosotros mismos
si no que el uso que se le da es una serie de imposiciones que son
creadas por otros haciéndonos esclavos de lo ajeno.

Hoy en día las grandes empresas y compañías nos obligan a cumplir


horarios extensos, los medios de comunicación y otras alternativas de
entretenimiento “llamadas capitalismo cultural” es el secuestrador del
tiempo de las personas, reduciendo el tiempo para la vida, la tranquilidad,
la espontaneidad para expresar y entender las actividades autotelicas es
decir cuando se hace por sí mismo, en el sentido de vivirla y sentir
nuestras habilidades mejorando la concentración y el autoestima.

Estamos viviendo el tiempo con un aumento de velocidad inesperado


como un bien escaso esto ha generado en parte la actual crisis económica
y ecológica la única manera de enfrentarla es modificando nuestro tiempo,
además no sería la primera vez que esto sucede es necesario
ralentizarnos como en otros tipos de sociedades hay que exigir tiempo
para la vida que se recupere su importancia para que como seres
humanos podamos preservar, restaurar y cuidar cosas que
verdaderamente valen la pena y esfuerzo, que no todo sea monotonía con
beneficios poco tangibles a corto plazo.

Según el autor del libro Jorge Riechmann propone un capitalismo


desmaterializado despojarse de todo aquello que no nos implique ideas
convencionales de progreso y desarrollo así podemos establecer una
relación con los recursos y el tiempo estrechando mejores relaciones con
las personas y la naturaleza.

Para concluir lo leído y analizado sobre el libro EL TIEMPO PARA LA


VIDA LA CRISIS ECOLOGICA EN SU DIMENSION TEMPORAL pienso
que debemos parar y reflexionar si realmente es necesario tener todo lo
que hoy en día tenemos si es necesario ser un mundo totalmente
consumista y seguir acabando con la naturaleza y el planeta tierra para
satisfacer nuestras necesidades como seres humanos, estamos acabando
el tiempo para poder salvar el mundo tenemos que usar y gastar realmente
lo necesario.
Nuestro tiempo es muy corto a comparación del tiempo del planeta tierra
por eso hemos avanzado tan rápido causando un gran daño a la
naturaleza y a los animales causando la extinción de varias especies
llevándolas aceptar a los cambios tan drásticos que estamos viviendo hoy
en día.

Si queremos salvar al mundo, aportar a su naturaleza que nos está


pidiendo a gritos que hagamos algo por remediar lo que el ser humano
está destruyendo tenemos que evitar que sigan explotando la naturaleza
que sigan acabando con miles y miles de hectáreas de bosques tropicales
tenemos que dejar de pensar en el beneficio económico que es el que nos
está matando sin darnos cuenta, estamos a tiempo de ayudarnos como
seres humanos y ayudar al planeta es hora de ralentizar el tiempo y
devolverle un poco de todo lo que le hemos quitado a la madre naturaleza.

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