You are on page 1of 12

Revista Cubana de Ciencia Agrícola

ISSN: 0034-7485
rcca@ica.co.cu
Instituto de Ciencia Animal
Cuba

Acosta, A.; Cárdenas, Mayra


Enzimas en la alimentación de las aves. Fitasas
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, vol. 40, núm. 4, 2006, pp. 377-387
Instituto de Ciencia Animal
La Habana, Cuba

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=193017672001

Cómo citar el artículo


Número completo
Sistema de Información Científica
Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal
Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006. 377

Enzimas en la alimentación de las aves. Fitasas


A. Acosta y Mayra Cárdenas
Instituto de Ciencia Animal, Apartado Postal 24, San José de las Lajas, La Habana, Cuba,
Correo electrónico: aacosta@ica.co.cu

Se refiere la utilización de las enzimas en la alimentación de las aves, desde que fueron descubiertas hasta que
comienza a comercializarse el primer producto enzimático. Se exponen sus características generales, así
como los factores que intervienen en su actividad. Se analizan los antecedentes y el estado actual del uso de
estos aditivos en la alimentación de las aves, enfatizando en las fitasas, enzimas más conocidas por los
expertos en nutrición de animales monogástricos. Se tratan los diversos tipos de fitasas, su modo de acción,
los factores que influyen en su actividad y sus principales formas de uso en las aves. Se profundiza en la
importancia del fósforo, así como en el papel que desempeñan las fitasas.
Palabras clave: enzimas, fitasas, fósforo, aves, economía, ambiente.

INTRODUCCION

Los expertos en nutrición de animales La adición de las fitasas en la industria de


monogástricos son quienes más conocen las alimentos balanceados es cada vez más frecuen-
enzimas fitasas y las posibilidades que brin- te, debido a los beneficios económicos que re-
dan para la alimentación de esta especie. Sin porta su utilización. Así, en Centroamérica,
embargo, éstas constituyen menos del 20 % EE.UU., México, Brasil y Suramérica, su utiliza-
del total de las enzimas comerciales que se uti- ción en las principales integraciones de pollos
lizan en la alimentación de animales monogás- de engorde se ha incrementado (Wincker 1999).
tricos (Bedford y Shulse 1998). Esto ha ocasionado que, en los últimos diez
Hasta mediados de la década del noventa, años, su empleo en las dietas de aves haya ido
el uso de las fitasas estuvo limitado por su en aumento, desde 0 hasta 95 %. Según Oyango
precio. Sin embargo, los problemas de conta- et al. (2005), las fitasas son las enzimas más
minación ambiental, la reducción de los costos comúnmente empleadas, después las
de producción, así como la aplicación de nue- xylanasas y en un tercer lugar, muy distante,
vas tecnologías y la consideración de otros las celulasas.
efectos adicionales, unidos a las mejoras en la Sin embargo, al contrario de otros aditivos
absorción de Ca, Zn, Mg y aminoácidos, han alimenticios como los aminoácidos y las vita-
posibilitado que su utilización sea común en minas, que en el animal tienen una potencia y
las condiciones europeas. En este espacio, requerimiento bien definidos, existe aún un
además del beneficio económico que represen- conocimiento limitado acerca de las relaciones
tan, las regulaciones ambientales de produc- entre las unidades analizadas, las dosis reque-
ción hacen que su uso sea, prácticamente, obli- ridas y bioeficacia óptima para los diferentes
gatorio (Kornegay 1996). productos enzimáticos.
378 Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006.
HISTORIA DE LAS ENZIMAS

Desde hace cientos de años, las enzimas se enzimas con destinos diferentes, que hicieron
utilizan en procesos de fermentación, como por ejem- que su utilización se extendiera a disímiles ra-
plo, la fabricación de quesos, pan, vino y cerveza. mas de la industria tales como detergentes, fa-
En 1860, Luis Pasteur comunicó que los fermentos bricación del papel, fabricación textil, trata-
estaban íntimamente ligados con la estructura vital miento de cueros, farmacia, destilería, aceites,
de las células de la levadura. En 1876, Willian Kuhne grasas, almidones y azúcares.
les propuso el nombre de enzima, término que deri- En 1982, la compañía finlandesa Cultor co-
va de las palabras griegas en (en) y zyme (levadura). mienza a desarrollar enzimas alimenticias para
En 1897, Eduard Buchner probó que las enzimas la nutrición animal y pone en el mercado
podían extraerse de las células de las levaduras y finlandés el primer producto enzimático. Ya en
usarse por sí mismas (Mandels 1976). 1986 comienza a comercializarse una enzima
A partir de este descubrimiento y de diver- específica para aves.
sos substratos, se empezaron a extraer otras

CARACTERISTICAS DE LAS ENZIMAS

Las enzimas son productos de origen bioló- Para que una enzima (E) actúe, es necesario
gico que catalizan las reacciones bioquímicas re- que se forme un complejo entre ella y el sustrato
lacionadas con la vida celular y forman combi- (S). Este complejo (ES) se escinde después,
naciones químicas con uno o varios sustratos. dejando en libertad los productos (P) de la re-
Son proteínas de alto peso molecular (entre 10 acción y la enzima sin alterar:
000 y 500 000 Daltons) y, al igual que el resto, E+ S −> ES −> E + P
son sensitivas al ambiente físico-químico que Las enzimas se clasifican de acuerdo con el
puede modificar su actividad (Ferket 1993). tipo de reacción catalizada:
Las enzimas pueden catalizar la reacción de - Hidrolasas (reacciones de hidrólisis)
una gran cantidad de sustrato en un pequeño - Isomerasas (reacciones de isomerización)
período de tiempo. Se ha informado que un - Óxido-reductasas (reacciones de oxida-
mol de enzima puede reaccionar 1000 -10 000 ción-reducción)
veces por segundos con el sustrato. La rápida - Transferasas (transferencia de grupos
velocidad de reacción se debe a la afinidad de funcionales)
la enzima por su sustrato, la cual se refleja en la - Liasas (adición a los dobles enlaces)
unión de ambos y en el rendimiento de los pro- - Ligasas (formación de enlaces con esci-
ductos (Sabatier y Fish 1996). sión del ATP)

ACTIVIDAD ENZIMATICA

La actividad enzimática es una propiedad estabilidad de las enzimas y pequeñas varia-


característica de las enzimas, que se ha defini- ciones en estos factores pueden alterar de ma-
do como el efecto catalítico producido por la nera considerable su actividad (Klivanov 1982).
enzima, en proporción con la cantidad presen- La velocidad de las reacciones catalizadas
te de ésta en el medio reactivo (Mandels 1976). por enzimas se incrementa con la temperatura.
Generalmente, la temperatura y el pH ejer- Este factor ejerce una marcada influencia, tan-
cen una marcada influencia en la actividad y to en la expresión de las enzimas por los
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006. 379
microorganismos como en su actividad. El he- ción biológica. Por esto, los perfiles de las cur-
cho de que las enzimas posean una temperatu- vas de actividad en función del pH tienen gene-
ra óptima, es aparente, ya que al ser proteínas, ralmente forma acampanada (Volkin et al. 1991).
se desnaturalizan por la acción del calor y se El agua está involucrada en muchas de las
inactivan cuando el aumento de la temperatura reacciones responsables de la desactivación de
sobrepasa cierto punto. las enzimas (Palacios 1992). La disminución de
Las enzimas trabajan en un pH característi- la humedad en el medio reduce la estabilidad
co, en el cual su actividad es máxima. Por encima de la proteína. Es decir, la actividad y estabili-
o por debajo de éste, la actividad disminuye e dad de la enzima está íntimamente relacionada
impide así la extensión y velocidad de la reac- con el estado de hidratación de la proteína.

ANTECEDENTES Y ESTADO ACTUAL DE LAAPLICACION DE ENZIMAS EN LA


ALIMENTACION DEAVES

Las enzimas se han evaluado experimental- A partir de este primer paso, la industria
mente en la alimentación de las aves desde hace para la alimentación animal ha apoyado estu-
más de 40 años. Sin embargo, su éxito inicial dios de otros productos enzimáticos (proteasas,
fue poco, debido a la naturaleza de los comple- á -galactosidasas, ß-mananasas) para mejorar el
jos enzimáticos utilizados. uso de diferentes fuentes proteicas y eliminar facto-
Al principio, las enzimas se aislaron a partir res antinutritivos como los oligosacáridos de las
de órganos animales, hecho que facilitaba su leguminosas (Bedford 2000). Recientes estima-
desnaturalización. Recientemente, la biotec- ciones sugieren que este mercado mueve una
nología ha permitido sintetizarlas a partir de cifra de 20 millones de dólares y que un 5 % de
microorganismos (White et al. 1983), así como las dietas para pollos, a base de maíz-soja, con-
comercializarlas de modo espectacular. tienen enzimas (Juampere et al. 2005).
En el año 2000, el mercado internacional de La utilización de las enzimas en la alimen-
enzimas para la alimentación animal llegó a in- tación de las aves no solo representa una me-
volucrar 100 millones de dólares. Sin embargo, jora en el valor nutricional de los alimentos,
solamente el 10 % de los piensos de aves eran sino que también permite incrementar sus po-
suplementados con mezclas enzimáticas (Soto- sibilidades en el uso de materias primas. Asi-
Solanova y Wyatt 2000). mismo, ofrece mayor variabilidad de alimen-
Actualmente se reconocen los efectos be- tos a la planta y más ganancias al productor
neficiosos en los animales monogástricos, al de alimentos balanceados. Además, represen-
suplementar con enzimas las raciones con con- ta una gran oportunidad de negocio a nivel
tenidos apreciables de polisacáridos no internacional para la nutrición avícola (Simons
amiláceos (PNA) (Edney et al. 1989 y Bedford et al. 1996).
y Classen 1992). En la última década se han La tabla 1 muestra un resumen de las
celebrado cuatro simposios sobre este tema enzimas más usadas en la alimentación de las
(Suiza 1993, Holanda 1995, China 1996 y Ho- aves (White et al. 1983, Edney et al. 1989,
landa 1999) y la Comisión Europea ha acepta- Choct y Annison 1990, Bedford y Classen
do las enzimas como nuevos aditivos desde el 1992, Ferket 1993, Cleophas et al. 1995 y
año 1993, en la Directiva 93/113/CE. Bedford 2000).
380 Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006.
Tabla 1. Efectos de la adición de enzimas en sustratos específicos
Enzimas Sustratos Efectos
Xylanasas (arabino- )Xylanos Reducción de la viscosidad de la digesta
Glucanasas ß - Glucanos Reducción de la viscosidad de la digesta
Pectinasas Pectinas Reducción de la viscosidad de la digesta
Celulasas Celulosa y derivados Mejora la digestibilidad de la fibra y la celulosa
Proteasas Proteínas Mejora la degradación de la proteína
Amilasas Almidón Mejora la degradación de los componentes amiláceos
Fitasa Ácido fítico Mejora el aprovechamiento del fósforo vegetal
Galactosidasas α - galactosidos Eliminación de los - galactosidos

EL FOSFORO EN LAALIMENTACION DE LAS AVES

El fósforo está asociado a varias y muy debido al bajo nivel intestinal de las fitasas, el
importantes funciones metabólicas. Intervie- P se convierte en un nutriente crítico que se ex-
ne en el metabolismo energético (relación con creta, casi, en su totalidad. Por esto contribuye a
peso y conversión alimentaria), en la forma- la contaminación ambiental (Coelho 1996).
ción y mantenimiento de los huesos, así como Una vez en el suelo, el exceso de P llega a los
en la constitución del cascarón del huevo. embalses y lagos mediante la erosión y
Constituye, además, parte de los fosfolípidos escorrentías, mientras que a los cuerpos de agua
que integran la membrana celular e interviene subterráneos llega por infiltración. La vegeta-
como tampón en la regulación del pH corporal ción acuática y las cianobacterias utilizan gran-
(Marbey 1998 y Harter-Denis 1999). des cantidades de este mineral, lo que ocasiona
Los alimentos para aves deben contenerlo la proliferación desmesurada de dichos organis-
en cantidades que permitan un adecuado aporte mos y promueve el proceso de eutrofización. La
durante cada fase de producción. Una deficien- proliferación causa disminución en los niveles
cia de fósforo causa pérdidas en la productivi- de oxígeno disuelto en el agua y provoca la muerte
dad animal, mientras que los excesos conducen de la fauna acuática por hipoxia.
a una menor eficiencia en la absorción. Esto re- La inclusión de menores cantidades de P
sulta en concentraciones más altas en las heces en las dietas es una de las vías para reducir la
(Keshavarz y Nakajima 1993). excreción. De hecho, la adición de fitasas
Sin embargo, como las dietas para aves se microbianas a las dietas mejora el aprovecha-
constituyen, principalmente, por ingredientes miento del P, reduce el desperdicio de fosfato
en los que el P está presente, casi totalmente y permite utilizar menores cantidades de P in-
como fitato, y su disponibilidad es muy pobre, orgánico en la dieta (Waldroup et al. 2000).

LAS FITASAS

Las fitasas son fosfatasas que pertenecen proceso de hidrólisis del ácido fítico (IP-6) y
a un conjunto diferenciado de enzimas, clasifi- liberan, de forma secuencial, hasta seis grupos
cadas en fosfatasas alcalinas, fosfatasas áci- ortofosfatos libres, plenamente disponibles
das de alto y bajo peso molecular y fosfatasas- para los animales monogástricos (Vincent et
proteína (Gibson y Ullah 1990). Catalizan el al. 1992).
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006. 381
Estas enzimas hidrolizan únicamente los cia de otras fosfatasas que actuarían de forma
fitatos en solución, por lo que su acción requiere sinérgica y que son, probablemente, de origen
humedad en el medio y condiciones determina- endógeno.
das de pH y temperatura. Estas condiciones son Las fitasas están presentes de forma natu-
variables, según el tipo de fitasa. La hidrólisis de ral en numerosos cultivos de bacterias y hon-
fitatos in vitro da lugar a una acumulación tem- gos. Se encuentran, además, en ciertos gra-
poral de fosfatos de mioinositol, de 3 a 1 grupo nos y pueden llegar al tracto intestinal de to-
fosfato (IP-3 a IP-1), los que no se perciben en la dos los animales por la ingestión de plantas
digesta ileal de cerdos y aves que reciben dietas que las contienen o por la propia microflora
suplementadas con fitasas microbianas (Kemme intestinal que las produce, así como también
1998). Esto indica que en el organismo animal la por la producción enzimática endógena de la
acción de las fitasas se favorece con la presen- mucosa (Applegate et al. 2003 y Moran 2004).

FITASAS INTESTINALES ENDOGENAS

Las fosfatasas intestinales endógenas solo El contenido digestivo del estómago y del
son capaces de hidrolizar las moléculas de inter- intestino del cerdo y del buche, así como el
mediarios del inositol con escaso número de proventrículo e intestino de las aves, presen-
iones ortofosfatos (IP-3 a IP-1). Además, poseen tan escasa actividad fitásica propia. De cual-
escasa significación práctica, pues estos gru- quier forma, se estima que su interés práctico
pos, a diferencia de los IP-6, no causan efectos es muy reducido (Ravindran et al. 1999).
nocivos en el animal (Jongbloed et al. 1993).

FITASAS ENDOGENAS CONTENIDAS EN LOS INGREDIENTES DE LA RACION

Existe un cierto número de semillas con ac- ción 6 de la molécula de mioinositol. El primer
tividad fitásica propia, particularmente dentro intermediario obtenido es el D-mioinositol 1, 2, 3,
del grupo de los cereales. El contenido es im- 4, 5 pentakisfosfato. A partir de aquí, la 6-fitasa
portante en el caso del trigo, centeno y triticale actúa de forma secuencial, y defosforila la mo-
y de poco interés en el resto de los granos que lécula en su totalidad (Rodehutscord 1988).
se utilizan en la práctica (Ravindran et al. 1995). El pH óptimo para la actuación de estas
Esta actividad fitásica es muy reducida en fitasas está entre 4,0 y 7,5. La mayoría de ellas
harinas proteicas (soya, colza y algodón) y están por encima de 5,0 y pierden irreversible-
granos de leguminosas (Frapin et al. 1996). En mente su actividad a pH comprendidos entre
cualquier caso, su contenido varía en función 2,5-3 (Pointillart 1993). Su temperatura óptima
de la variedad y de factores medioambientales. de acción se sitúa entre 45 y 60 ºC y se degra-
Por el contrario, los subproductos de la dan rápidamente a temperaturas superiores.
molinería, en especial aquellos que proceden del Se estima que las fitasas vegetales son 10 %
trigo (salvados) o los que se obtienen mediante menos eficientes que las de naturaleza fúngica
procesos fermentativos (solubles de destilería, (Pointillard 1994). Según Ward (2002), la razón
raicilla de cebada, gérmenes de maíz) son ricos podría ser el estrecho rango de pH al que estas
en actividad fitásica (Yi y Kornegay 1996). fitasas son activas, pues sus valores óptimos
De manera general, las fitasas vegetales son de máxima actividad superan los encontrados
del tipo 6-fitasa y su acción fundamental con- en el buche y en el estómago, principales pun-
siste en liberar el grupo ortofosfato en la posi- tos de acción.
382 Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006.
FITASAS DE ORIGEN MICROBIANO PRODUCIDAS POR LA FLORA DIGESTIVA

Numerosos hongos y microorganismos pre- ra microbiana tiene lugar en el intestino grue-


sentes en el tracto intestinal producen 3- fitasa so. Por ello, aunque las fitasas microbianas
(Eeckhout y De Paepe 1991). Los rumiantes y hidrolicen los fitatos y liberen el P inorgánico,
el conejo pueden beneficiarse de esta activi- el animal no se beneficia, ya que este se excre-
dad fitásica. Sin embargo, en la mayoría de las ta enteramente en las heces.
especies monogástricas, la actividad de la flo-

FITASAS MICROBIANAS DE PRODUCCION INDUSTRIAL

Numerosos hongos y bacterias son capa- especies y, a diferencia de las bacterianas, la


ces de producir fitasas en condiciones natura- mayoría dan lugar a enzimas extracelulares
les o de laboratorio (Jongbloed y Kemme 1997, (Douglas et al. 2000). Como principal microor-
Oloofs et al. 1998 y Phillippy 1999). Sin embar- ganismo productor de fitasa fúngica se desta-
go, las fitasas bacterianas (a excepción del can los hongos de los géneros Aspergillus y
Bacillus subtilis) son de naturaleza intracelular Peniophora (Liebert et al. 1993). Sus enzimas
y, en general, no tienen un buen comportamien- son del tipo 3-fitasa y su sustrato preferido es
to en cuanto a productividad, en condiciones el mioinositol hexafosfato (IP-6), al que
de laboratorio. Además, su pH óptimo de acti- hidrolizan a partir de la posición 3 de la molé-
vidad es neutro o alcalino, lo que reduce su inte- cula. Además, el pH óptimo de actividad oscila
rés como aditivo en piensos (Zhang et al. 2000). entre 2,5 - 7,5 y son activas en un amplio rango
Por el contrario, las fitasas de origen de temperaturas (35 y 63 ºC).
fúngico se producen por un mayor número de

MODO DE ACCION DE LAS FITASAS

Hidrólisis del fitato a diferencia de otras especies, tienen la habili-


A pesar que todas las fitasas son capaces dad de defosforilar la molécula de fitato con
de hidrolizar el fitato, ya sea a partir de la fosfatasa ácida (Rutherfurd et al. 2004).
posición 3 ó 6 de la molécula (figura 1), su El conocimiento de la hidrólisis del fitato per-
habilidad para defosforilar posteriormente la mite evaluar las diferencias en la eficacia entre
molécula del fosfo-inositol, varía sustan- las diferentes fuentes de fitasa. Diversos facto-
cialmente (Nasi et al. 1999). res críticos dentro del tracto gastrointestinal
Una vez que el fósforo inicial se remueve impactarán la capacidad de la fitasa para su ópti-
de la molécula del hexa-fosfoinositol, las aves, mo desempeño (Payne et al. 2005).
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006. 383

Figura 1. Estructura de la molécula de fitato y posibles sitios de


actuación de las fitasas

FACTORES QUE INFLUYEN EN LAACTIVIDAD DE LAS FITASAS

Esta enzima, como todas, puede desenca- Algunos nutrientes o aditivos limitan la
denar su acción en condiciones medio ambien- actividad de las fitasas al quelarse con el
tales determinadas (temperatura y pH) y, a su substrato. Por ejemplo, Atia et al. (2000) y
vez, presenta retos en términos de enzimas Tamim et al. (2004) encontraron que ciertos ni-
proteolíticas y concentraciones significativas veles de inclusión de calcio en la dieta para
Sitio de acción de las 3-fitasas
de minerales, tanto de origen endógeno como pollos influyen directamente en la función de
en la dieta (Maenz et al. 1999). las fitasas y reducen la habilidad de estos para
La razón de establecer un óptimo de activi- utilizar fósforo.
dad en la parte ácida es que el fitato es más Augspurger et al. (2004) y Banks et al.
soluble y susceptible ante el ataque de la fitasa (2004) señalaron que altos niveles de zinc o
a los niveles bajos de pH. En un estudio re- cobre pueden quelar al fitato en la región del
ciente, Bedford (2004) obtuvo micro imágenes yeyuno (rango de pH de 5-6). Esto ocasiona
de diferentes secciones del tracto digestivo y una baja eficacia de la fitasa y menor retención
demostró que, aproximadamente, 100 % del fitato de fósforo en cerdos y pollos.
soluble en dietas no suplementadas con fitasa En una revisión, Kornegay et al. (1998)
reaparece en el yeyuno de manera íntegra. mostraron una respuesta exponencial de las
Lo anterior es importante porque cuando el fitasas fúngicas en la digestibilidad del fósfo-
alimento pasa Sitiodel
de proventrículo hacia el intesti- ro en cerdos. Sin embargo, hubo una variación
acción de las 6 fitasas
no delgado el pH se incrementa, y la solubilidad significativa en la respuesta a través de las
del substrato y su susceptibilidad ante el ataque pruebas, lo que indicó la presencia de factores
de la fitasa se ven disminuidos (Zhang et al. dietéticos que pudieron alterar los beneficios
2000). De este modo, la estrategia de la fitasa de estas fuentes de fitasa.
para ser exitosa es que la hidrólisis debe estar Por ello, la composición de la dieta y las
concentrada en las partes altas del tracto diges- condiciones del animal necesitan considerar-
tivo, especialmente en el proventrículo, donde se para que el valor obtenido por el uso de la
por los rangos de pH no solo se solubiliza el fitasa sea consistente.
fitato, sino que se favorece el trabajo de la fitasa.
384 Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006.
USO DE FITASAS EN AVES

Es bien sabido que las fitasas tienen un En otro trabajo, Namkung y Leeson (1999)
efecto directo en la digestión del fósforo. Sin demostraron un efecto positivo de aproxima-
embargo, estudios recientes en animales, jun- damente 2 % con la suplementación de fitasa
to con experimentos de digestibilidad, sugie- (1200 UI/kg) en la digestibilidad de la proteína
ren que los beneficios de las fitasas pueden ir y de aminoácidos totales en pollitos de engor-
más allá que la simple liberación de fósforo de.
(Beaulieu et al. 2004 y Plumstead et al. 2004). En un estudio semejante, Ravindran et al.
Sebastian et al. (1996) concluyeron que pollitos (1995) observaron aumento en la digestibilidad
alimentados con raciones de maíz-soya y 600 U de ileal de la proteína bruta y de la energía de 2.4 y
fitasa/kg, tuvieron desempeño semejante y ma- 3.9 %, respectivamente, en raciones de maíz/
yor retención de P, Ca, Cu y Zn, con respecto a torta de soja suplementadas con fitasa.
los pollitos que no recibieron la enzima. Namkung y Leeson (1999) también cuantifi-
En otro estudio, pero con lotes comerciales caron el efecto de la fitasa en el contenido de ener-
de ponedoras, Niekerk y Reuvekamp (1997), gía metabolizable aparente (EMA) en una dieta
llegaron a la conclusión de que es posible uti- típica de maíz y soya para pollos. Estos autores
lizar fitasas en avicultura, con equivalencias hallaron que la suplementación con 1200 UF au-
de 1 g de fósforo disponible por cada 500 UF, mentó el contenido en EMA de 11.87 MJ/kg a
sin que haya diferencias en los resultados. 12.15 MJ/kg en el grupo suplementado.

UTILIDAD ECOLOGICA DE LAS FITASAS

Otro de los beneficios del uso de fitasa en lograrse en pavas, según informes de Yi et al.
las dietas de monogástricos es la menor excre- (1996).
ción de fósforo al ambiente, debido al mayor Sin embargo, en trabajos recientes, Acosta
aprovechamiento que hace el ave del fósforo (2005) pudo reducir, completamente, la
fítico. Según Kornegay (1996), el uso de fitasa suplementación con fósforo inorgánico (Pi) en
(200 a 1000 U/kg) reduce la excreción de fósfo- dietas de gallinas ponedoras, al utilizar 450 U/kg
ro en las heces entre 25 y 50 %. de fitasa (Natuphos), sin que se afectaran los
En una revisión de Waldroup et al. (2000) indicadores productivos ni el metabolismo mi-
acerca de cómo reducir la excreción de fósforo neral. Además, fue posible reducir en casi 60 %
al ambiente, citó a varios autores que demos- la excreción de fósforo al ambiente.
traron la efectividad de la fitasa en disminuir el Según estimaciones actuales, si se añadie-
contenido de P en la excreta. ran fitasas a todos los piensos para cerdos y
Wincker (1999) informó que con el uso de aves, sería posible reducir la cantidad de fós-
fitasa en dietas de maíz y soya para pollos foro liberado en el medio ambiente en 2,5 mi-
puede disminuir el aporte de fósforo inorgáni- llones de toneladas cada año, a nivel mundial
co (Pi) entre 20 y 50 %. Esto también puede (Leske y Coon 2002 y Payne et al. 2005).

UTILIDAD ECONOMICA DE LAS FITASAS

En la práctica se ha visto que el uso de depende del precio y disponibilidad de los in-
fitasa en dietas para aves puede disminuir el gredientes, así como del requerimiento de
costo de la ración entre 0,5 y 5 dólares por nutrientes definido en cada fórmula (Kornegay
tonelada. Sin embargo, la magnitud del ahorro 1996).
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006. 385
En pruebas de campo realizadas en Centro tas bajas en P (control negativo) y dieta baja
América con 450 000 aves testigo y 477 000 en prue- en P con Ronozyme P demostraron que no
ba, no se observaron diferencias significativas hubo diferencias en los indicadores producti-
en la conversión alimentaria y el peso corporal; vos. Sin embargo, el efecto en reducción del
pero el ahorro en dólares, por tonelada métrica de costo de la dieta fue importante para la inte-
pienso, fue cercano a 1.90 (Juampere et al. 2005). gración (Murano 1996 y Keshavarz y Autic
Pruebas realizadas en Brasil con pollos 2004).
hembra y tratamientos con Ronozyme P, die-

CONSIDERACIONES FINALES

El problema del fósforo, la contaminación la aplicación de las enzimas fitasas como estra-
ambiental, así como las duras restricciones a tegia nutricional ha mostrado ser un método
que esto conlleva, es situación bastante co- eficaz para reducir el fósforo contenido en el
mún para todo el mundo. En algunos países estiércol de los animales monogástricos. Estas
asiáticos esta cuestión es especialmente se- enzimas desempeñarán un importante papel,
ria, porque las densidades de animales domés- en el futuro, para reducir los crecientes proble-
ticos son muy altas. En ciertos países euro- mas medioambientales del mundo. ¿Quién po-
peos, los residuos producidos por los anima- dría pensar que un simple hongo podría ayu-
les corresponden, más o menos, al doble de lo dar a reducir la contaminación procedente de
que producen los habitantes. En este sentido, cerdos y aves?

REFERENCIAS

Acosta, A. 2005. Una opción técnico, económica y inclusion in diets for growing swine. Banff Pork
ambiental del empleo del fósforo en la alimenta- Congress Proc.
ción de gallinas ponedoras. Tesis de Maestría Bedford, M.R. & Classen, H.L. 1992. Reduction of
en Producción Animal Tropical. Instituto de intestinal viscosity through manipulation of
Ciencia Animal. La Habana, Cuba dietary rye and pentosanase of broiler chicks:
Applegate, T.J., Jaern, B.C., Nassbaun, D.L. & An- J.Nutr.122:560
gel, R. 2003. Water soluble phosphorous in fresh Bedford, M.R. 2000. Exogenous enzymes in
broiler litter is dependent upon phosphorous monogastric nutrition - their current value and
concentration fed but not on fungal phytase future benefits [Review]: Anim Feed Sci. Tech.
supplementation. Poult Sci. 82: 1024 86:1
Atia, F.A., Weibel, P.E., Hermes, I., Carlson, C.W. Bedford, M.R. 2004. Enzymes and enzyme
& Walser, M.M. 2000. Effects of dietary cocktails for enhancing nutrient retention. Multi-
phosphorous, calcium and phytase on perfor- State Animal Nutrition Conference Proc.
mance of growing turkeys. Poult Sci. 78: 231 Bedford, M.R. & Schulse, P. 1998. Exogenous
Augspurger, N.R., Spencer, J.D., Webel, D.M. & enzymes for pigs and poultry. Nut Res Rev.
Baker, D.H. 2004. Pharmacological zinc levels 11:91
reduce the phosphorus-releasing efficacy of Choct, M. & Annison, G. 1990. Antinutritive
phytase in young pigs and chickens. J Animal activity of wheat pentosans in broiler diets:
Sci. 82: 1732 British Poult. Sci. 31:811
Banks, K.M., Thompson, K.L. P., Jaynes & Cleophas, G., Van Hartingsveldt, W., Somers,
Applegate, T.J. 2004. The effects of copper on W.A.C. & van der Lugt, J.P. 1995. Enzymes can
the efficacy of phytase, growth, and phosphorus play an important role in poultry nutrition. World
retention in broiler chicks. Poult. Sci. 83:1335 Poult 11:12
Beaulieu, A.D., Zijlstra, R.T., Bedford, M. & Coelho, M.B. 1996. Ecological Nutrition: A Costly
Patience, J.F. 2004. Dose response to phytase or Smart Move In: Phytase in Animal Nutrition
386 Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006.
and waste management, a BASF Reference Ma- Klivanov, A.M. 1982. Stabilization of enzyme
nual Ed. by Michael B. Coelho and E.T Kornegay against thermal inactivation. Adv. Appl.
41- 60. USA Microbiol. 29:1
Douglas, M.W., Meter, C.M., Boling, S.D., Parson, Kornegay, E.T. 1996. Nutrient management of food
C.M. & Baker, D.M. 2000. Nutritional evaluation animals to enhance and protect the environment.
of low phytate and high protein corns. Poult Sci. Ed. E.T. Kornegay. CRC Press. Inc. New York.
78:1586 p. 277
Edney, M.J., Campbell, G.L. & Classen, H.L. 1989. Kornegay, E.T., Radcliffe, J.S. & Zhang, Z. 1998.
The effect of ß-Glucanase supplementation on Influence of phytase and diet composition on
nutrient digestibility and growth in broilers given phosphorus and amino acid digestibilities, and
diets containing barley, oat groats or wheat. Anim. phosphorus and nitrogen excretion in swine.
Feed Sci. Tech. 25:193 BASF Tech. Symposium. Durham NC. p. 125
Eeckhout, W. & De Paepe, M.1991. The quantitative Leske, K. & Coon, C. 2002. The development of
effects of an industrial microbial phytase and feedstuff retoinable phosphorous values for
wheat phytase on the apparent phosphorus broilers. Poult Sci. 81: 1681
absorbability of mixed feed by piglets. Med. Fac. Liebert, F., Wecke, C. & Schöner, F.J. 1993. Enzyme
Landbowwet. Rijkuniv. Gent. 56:1643 use in soy-based diets. Proc. 1st Symposium on
Ferket, P.R. 1993. Practical use of feed enzymes for Enzymes in Animal Nutrition. Eds. C. Wenk y
turkeys and broilers. J. Appl. Poult Res. 2:75 M. Boessinger. Karthause Ittingen, Suiza. p. 202
Frapin D., Guivarc’h, F. & Nys, Y. 1996. Microbial Maenz, D.D., Engele-Schaan, C.M., Newkirk, R.W.
and plant phytase activity in gastrointestinal & Classen, H.L .1999. The effect of minerals
tract of broilers. Proceed. XX World’s Poult Cong. and mineral chelators on the formation of
New Delhi. India. Vol. IV. p. 52 phytase-resistant and phytase-susceptible forms
Gibson, D.M. & Ullah, A.B. 1990. Inositol of phytic acid in solution and in slurry of canola
metabolism in plants. Eds. D.J. Morre, W.F. Boss meal. Anim Feed Sci. & Tech. 81:177
y F.A. Loewus. Wiley-Liss. New York. p. 77 Mandels, M. 1976. Measurement of saccharifying
Harter-Denis, J. 1999. Biotechnology in the feed cellulose. Biotech. Bioeng. Symp. Proceedings.
industry. Proc. Alltech’s 15th Annual. Symposium. 6; 21. USA.
Eds. T.P. Lyons y K.A. Jacques. Nottingham Marbey, S. 1998. Influence of dietary phosphorus
University Press. USA. p. 511 on performance of laying hens. Feedstuffs 70: 1
Jongbloed, A.W., Freitag, M., Hensche, H.U., Moran, E. 2004. Use of exogenous corn-soybean
Schulte-Sienbeck, H. & Reichelt, B. 1993. The meal enzymes to relieve food pathogen
effects of feed additives as substitutes for per- infections in broilers. Arkansas Nutrition
formance enhancers in pig production. Report Conference Proc.
No. 8. Ed. Forschungsber. F.H. Soest. Faculty of Murano, F. 1996. Efeito de la fitasa en la
Agriculture. Alemania biodisponibilidade del fòsforo en raciones con
Jongbloed, A.W. & Kemme, P.A. 1997. XIII Curso farelo de arroz desengordurado para pollos de
de especialización FEDNA. p.191. Madrid ngorde. Rev. Soc. Bras. Zoot. 25: 932
Juampere, J., Pérez-Vendrel, A.M., Angulo, E. & Namkung, H. & Leeson, S. 1999. Effect of phytase
Brafaw, J. 2005. Assessment of potencial enzyme on dietary Nitrogen-Corrected Apparent
interactions between phytase and glycosidase Metabolizable energy and the ileal Digestibility
enzyme supplementation on nutrient of nitrogen and acids in broiler chicks. Poult Sci.
digestibility in broilers. Poult Sci. 84: 571 78: 1317
Kemme, P.A. 1998. Phytate and phytases in pig Nasi, M.K., Partanen, H. & Piironen, J. 1999.
nutrition. PhD. Thesis. Agricultural University Comparison of Aspergillus niger phytase and
of Wageningen. Holanda Trichoderma reesei phytase and acid
Keshavarz, K. & Autic, R.E. 2004. The use of low- phosphatase on phytate phosphorus availability
protein, low-phosphorus, amino acid and in pigs fed on maizesoybean meal or barley-
phosphorus excretion. Poult Sci. 83:75 soybean meal diets: Archiv fur Tierernahrung
Keshavarz, K. & Nakajima, S. 1993. Re-evaluation 52:15
of calcium and phosphorus requirements of laying Niekerk, G.C & Reuvekamp, B.F.1997. Nutritional
hens for optimum performance and eggshell evaluation of low phytate and high in poultry.
quality. Poult Sci. 72:144 World Poultry 13:26
Revista Cubana de Ciencia Agrícola, Tomo 40, No. 4, 2006. 387
Oloofs, K., Dolbusin, A. & Jeroch, H. 1998. Einfluss Sebastian, S., Touchburn, S.P. & Chavez, E.R. 1996.
von mikrobieller und nativer weizen phytase auf Efficacy of supplemental microbial phytase at
die phosphor-verwertung bei broilern. Archiv für different calcium levels on growth performance
geflügelkunde 62:260 and mineral utilization of broiler chikens. Poult
Oyango, E.M., Bedford, M.R. & Adeola, O. 2005. Sci. 75:1516
Efficacy of on envolved Escherichia coli phytase Simons, O., Gruppen, H., Classen, H.L., Close, W.,
in diets of broilers chicks. Poult Sci. 84: 248 Khan, N., Acamovic, T., McCleary, B., Morgan,
Palacios, M. 1992. Inmovilización enzimática y ce- A. & Cowan, D. 1996. Enzymes in action. World
lular. Trabajo realizado para la asignatura de Poult-Misset 12:61
Doctorado: operaciones y procesos unitarios para Soto-Solanova, M.F. & Wyatt, C.L. 2000. Use of
la industria bioquímica. Escuela Técnica Supe- feed enzymes to realice the full potential of
rior de Ingenieros Industriales de Madrid. alternative feed ingredients. Zootecnia
Payne, R.L., Lavergne, T.K. & Southern, L.L. 2005. International. 12:343
A comparison of two sources of phytase in liquid Tamim, N.M., Angel, R. & Christman, M. 2004.
and dry forms in broilers. Poult Sci. 84:265 Influence of dietary calcium and phytase on
Phillippy, B.Q. 1999. Susceptibility of wheat and phytate phosphorus hydrolysis in broiler
Aspergillus niger phytases to inactivation by chickens. Poult Sci. 83:1358
gastrointestinal enzymes. J. Agric. Food Chem Vincent, J.B., Crowder, M.W. & Averill, B.A. 1992.
47:1385 Hydrolysis of phosphate monoesters: a biological
Plumstead, P.W., Lenfestey, B.A., Brake, J. & problem with multiple chemical solutions. Trends
Bedford, M.R. 2004. Comparative Efficacy of Biochem. Sci. 17:105
Two Thermotolerant Microbial Phytases. 2 Volkin, D., Parson, C.M., Baker, D.H. & Boling,
Broiler Livability and Skeletal Development. S.D. 1991. Effect of supplementation of phytase
Poult Sci. 83: 1755 on egg production. Biotech. Bioeng. 37: 843
Pointillart, A. 1993. Proc. 1st Symposium on Enzymes Waldroup, P.W., Kersey, J.H., Saleh, E.A, Fritts,
in Animal Nutrition. Eds. C. Wenk y M. C.A., Yang, F. Stilborn, H.L., Crum, R.C. & Raboy,
Boessinger, Kartause Ittingen, Switzerland. p. 192 V. 2000. Non phytate phosphorous requirement
Pointillart, A. 1994. Phytates, phytases: leur importance and phosphorous excretion of broilers chicks fed
dans l’alimentation des monogastriques. INRA diets composed of normal or high available
Prod. Anim. Nutr. 68: 1 phosphorous corn with and without microbial
Ravindran, V., Cabahug, S., Ravindran, G. & Bryden, phytase. Poult Sci 78:1451
W.L .1999. Influence of microbial phytase on Ward, N.E. 2002. Phytase stability may be improved
aparent ileal amino acid digestibility of feedstuffs by new technology. Feedstuffs. March 4
for broiler. Poult Sci. 78:699 White, W.B., Bird, H.R., Sunde, M.L., Marlett,
Ravindran, V., Korneagy, E.T., Potter, L.M., J.A., Prentice, N.A. & Burger, W.C. 1983.
Ogunabameru, O.B., Welton, M.K., Wilson, J.H. Viscosity of â-DGlucan as a factor in the
& Patchanacorn, M.1995. An evaluation of various enzymatic improvement of barley for chicks.
response criteria in assessing biological availability Poult Sci. 62: 853
of phosphorus for broilers. Poult Sci. 74: 1820 Wincker, D. L. 1999. Phosphorus Reduction
Rodehutscord, M. 1988. Proc. BASF Tech. Techniques Examined. Feedstuffs. 2:12
Symposium. Raleigh, NC. pp: 32 Yi, Z. & Kornegay, E.T. 1996. Sites of phytase
Rutherfurd, S.M., Cheng, T.K., Morel, C.P. & activity in the gastrointestinal tract of young pigs.
Moughan, P.J. 2004. Effect of microbial phytase Anim Feed Sci. and Tech. 61:361
on ileal digestibility of phytate phosphorus, to- Zhang, Z.B., Kornegay, E.T., Radchiffe, J.S.,
tal phosphorus, and amino acid in a low- Henbow, D.M., Viet, H.P. & Larsen, C.T. 2000.
phosphorus diet for broilers. Poult Sci. 83:61 Comparison of genetically engineered microbial
Sabatier, A.M. & Fish, N.M. 1996. Method of and plant phytase for young broilers. Poult Sci.
analysis for feed enzymes: Methodological 78:709
problems?. Journal of Applied Poultry Sci. 5:408

Recibido: 20 de octubre de 2005.

You might also like