Julián Camilo Calle Sierra

Santiago Alzate Tobón.

NUEVA ÉPOCA, NUEVAS HABILIDADES DEL DOCENTE

De acuerdo al documento leído en clase, el docente de hoy debe tener habilidades propias de esta
nueva época, las cuales están marcadas por la transformación de muchas conductas alrededor de
las tecnologías de las comunicaciones y la información. En este sentido, la propuesta presentada en
el texto abarca cuatro “nuevas” competencias (saber elegir la información; capacidad de trabajar
bajo situación incertidumbre; trabajar en red; pesar complejamente), y en base a ellas se nos solicita
realizar una propuesta o varias, sobre las nuevas habilidades que debe tener un docente respecto
de estas nuevas generaciones:

1. Aprovechamiento de la tecnología.

Es evidente que las nuevas tecnologías han transformado ciertas conductas. Por lo tanto, el docente
también debe transformar sus conductas al momento no sólo de dar la clase, sino también de
evaluar y en este sentido, debe aprovechar la tecnología y las innumerables herramientas
disponibles. Existen páginas web y aplicaciones para dispositivos móviles que facilitan estos
procesos, como quizziz.com, socrative, google forms, flipquiz, kahoot, etc. Bajo este contexto, el
docente debe entender que, si la forma de interactuar entre nosotros cambia, lo mismo ha de
ocurrir con las formas de enseñar, dinamizando el proceso educativo y logrando que el celular o los
dispositivos tecnológicos que los estudiantes suelen usar en clase para distraerse, los usen para
aprender. Un buen aprovechamiento de la tecnología en la educación, puede motivar e interesar
más a los estudiantes en sus actividades académicas.

A su vez, la tecnología permite compartir con los dicentes la información de manera más ágil y
económica que lo que normalmente solía hacerse, y sobre todo, permite interactuar de diversas
formas, en diferente tiempo y lugar al que estamos acostumbradas.

Así las cosas, no es sólo saber manejar la tecnología, es saber aprovecharla para obtener de ella
resultados positivos.

2. Humanizar su cátedra.

Las instituciones de educación superior, son un universo socio cultural y político conformado por
cada una de las personas que allí confluyen. Se pueden encontrar en ellas, personas con diferentes
gustos, intereses, identidades y capacidades. La información que se transmite entonces, debe ser
accesible y compresible por todos, sin que importe raza, religión, género, capacidades diferenciadas
y orientación sexual o política. Las universidades están diseñadas no sólo para aquellas personas
que encuadran en un modelo “normal” de ser humano, por el contrario, se ha reconocido que
cualquier persona puede acceder a la educación, pero la dificultad radica no en acceder sino en
permanecer en ella, dado que en muchas ocasiones, el docente no es consciente de las diversidad
de las personas que los escuchen, por lo cual el docente debe contar con la habilidad de identificar
dicha diversidad y romper con las barreras que trae su discurso cargado de tecnicismos con un
lenguaje que cualquier persona pueda entender.