DELEGACION DE FUNCIONES ADMINISTRATIVAS

GUSTAVO ADOLFO ENCISO PARDO

JORGE ENRIQUE CORTES HERNANDEZ
UNIVERSIDAD SANTO TOMAS
ESPECIALIZACION DERECHO ADMINISTRATIVO

De conformidad con nuestra constitución política, la Ley 489 de 1998 y la

resolución de delegación citada y hablada en la clase de contratación estatal,
podemos encontrar que el tema principal de nuestro interés, que es la delegación
de funciones administrativas, observamos que la mencionada resolución hace uso
de ella, transfiriendo funciones a sus colaboradores y/o a otras autoridades, es por
ello que vamos a realizar un pequeño análisis sobre el tema que tanto nos ocupa
enfatizando que cualquier delegación emitida, realizada o efectuada por un ente
estatal que de acuerdo a nuestra constitución permita delegar alguna, o todas sus
funciones no lo exime de la responsabilidad que recae en los actos administrativos
expedidos bajo su competencia y obligación, es por esto que es de aclarar que
esta delegación no deja a un lado la responsabilidad principal que recae al
delegante, por cuanto a que los actos administrativos expedidos por autoridad o
entidad delegada son susceptibles de interponer los recursos de Ley.

La Ley 489 de 1998, regula lo siguiente “por la cual se dictan normas sobre la
organización y funcionamiento de las entidades del orden nacional, se expiden las
disposiciones, principios y reglas generales para el ejercicio de las atribuciones
previstas en los numerales 15 y 16 del artículo 189 de la Constitución Política y se
dictan otras disposiciones” por consiguiente encontramos que en sus artículos 9,
10, 12 y 78 reglamenta lo referente al tema de la responsabilidades, la forma en
que se deben expedir los actos de administrativos de delegación, los requisitos
para el desarrollo de las funciones delegadas, su control, vigilancia y el retorno de
las funciones delegadas entre otros temas.

El soporte jurídico que dio origen a la Ley 489 de 1998 regulara el tema de la
delegación, lo hayamos en el artículo 209 de la Constitución Política, el cual
estipula que “La función administrativa está al servicio de los intereses generales
y se desarrolla con fundamento en los principios de igualdad, moralidad, eficacia,
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economía, celeridad, imparcialidad y publicidad, mediante la descentralización, la

delegación y la desconcentración de funciones. Las autoridades administrativas
deben coordinar sus actuaciones para el adecuado cumplimiento de los fines del
Estado. La administración pública, en todos sus órdenes, tendrá un control interno
que se ejercerá en los términos que señale la ley” sustento por el cual la Ley 489
de 1998, en su artículo 9 establece la delegación como un mecanismo que hace
posible que las autoridades administrativas transfieran el ejercicio de sus
funciones asignadas, motivados en que es la mejor solución para cumplir los fines
del Estado y permitir que la gestión administrativa sea eficiente y eficaz para la
aplicabilidad de los principios del estado y la ejecución de los intereses para
nuestro país. El citado ordenamiento jurídico, es decir, crea la finalidad, los
elementos, y el objetivo del porque debe existir la delegación y sus beneficios,
pero en ningún instante nos da a conocer un concepto claro y explícito sobre
¿Qué es la delegación? ¿Qué se entiende por delegación de funciones? Es por
ello que la doctrina y la jurisprudencia son los que han tenido la obligación de
debatir y llenar este vacío jurídico.

En razón a la gran importancia que recae sobre la delegación, encontramos que

la Honorable Corte Constitucional emitió un concepto para determinar su alcance y
finalidad, el cual es “La delegación es una técnica de manejo administrativo de las
competencias que autoriza la Constitución en diferentes normas (art. 209, 211,
196 inciso 4 y 305), algunas veces de modo general, otras de manera específica,
en virtud de la cual, se produce el traslado de competencias de un órgano que es
titular de las respectivas funciones a otro, para que sean ejercidas por éste, bajo
su responsabilidad, dentro de los términos y condiciones que fije la ley” en
consecuencia se vio obligada a aclarar en General el vínculo existente entre
delegante y delegatario, el cual lo define de la siguiente manera “Al delegar se
establece un vínculo funcional especial y permanente entre delegante y
delegatario para el ejercicio de las atribuciones delegadas. Es especial en cuanto
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surge a partir del acto de delegación, de forma adicional a la relación jerárquica o

funcional que exista entre ellos y es permanente en cuanto permanece activo
mientras rija el acto de delegación. En virtud de tal vinculación, el delegante
conserva y ejerce la facultad para reformar o revocar los actos o resoluciones del
delegatario y para revocar el acto de delegación”, Sentencia C-693/08, M.P. Dr.
MARCO GERARDO MONROY CABRA.

Es pertinente señalar nuevamente que de acuerdo a nuestra constitución política,

en su título V que trata sobre la organización del Estado, Capitulo 1.de la
estructura del Estado podemos inferir que es poder ejecutivo el encargado de
velar y ejecutar la función administrativa de nuestro Estado a través del Gobierno y
la administración del Estado por intermedio de los instrumentos determinados por
nuestra carta magna junto con las Leyes de nuestro país, motivo por la cual a
Corte Constitucional ha manifestado que la delegación de funciones busca
“descongestionar los órganos superiores que conforman el aparato administrativo
y, facilitar y agilizar la gestión de los asuntos administrativos, con el objeto de
realizar y desarrollar los fines del Estado en beneficio de los administrados, en
cumplimiento y desarrollo de los preceptos constitucionales”.

En conclusión podemos decir que es la delegación es una figura jurídica muy útil y
vital para que el Estado pueda ejecutar sus funciones, sin evadir su
responsabilidad, y que a pesar de los errores cometidos a causa de la corrupción
producto del hombre, no es motivo para ser eliminado y retirado de nuestro
ordenamiento jurídico, puesto que este instrumento está siendo perfeccionado de
forma continua, para que quien posee las funciones primarias al momento de
delegarlas, no se exima de toda responsabilidad.