"CREER EN DIOS O CREER A DIOS" Dios habló a Abraham acerca de su descendencia, le

dijo que sería tan numerosa como las estrellas del cielo y Abraham le creyó. Abraham no
tenía hijo, así que no tenía un fundamento en que basar su fe; sin embargo, él creyó que
Dios le daría una descendencia. (Génesis 15:5y6) "Entonces el Jehová Dios llevó a Abram
afuera, y le dijo: Mira bien el cielo, y cuenta las estrellas, si es que puedes contarlas. Pues
bien, así será el número de tus descendientes. Abram creyó a Jehová Dios, y por eso
Jehová Dios lo aceptó como justo". Una sola sílaba, puede significar una gran diferencia;
entre lo que significa "creer en” y "creer a" Dios, existe un gran abismo. La fe que tuvo
en esas condiciones, y en lo que Dios le dijo, le fue contada por justicia, por lo que él fue
declarado justo. Creerle a Dios es creer en Jesús, y creer en Jesús es creer lo que Dios ha
dicho acerca de él. Dios declara justos a los que creen este testimonio. (Romanos
3:23y24) “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo
justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús”.
Creerle a Dios es la base de todos los tratos de Dios con el hombre. Sin fe es imposible
agradarle. La honra de Dios se sustenta en su Palabra, y los que le creen, le honran. Así
que, no solamente debes creer en Dios, conoce a Dios a través de la Biblia y CREE A DIOS.
Esto es la fe que salva, creer a Dios y a Jesucristo, el Salvador prometido. ¿Le has creído
a Dios?¡Te deseo un hermoso día JUEVES, Dios te bendiga!!!

Estaba claro que Abraham sabía que Dios existía, cuando muchas veces le preguntamos
a las personas: ¿Crees en Dios? La gran mayoría nos responden con un "si" o "por
supuesto"; esto definitivamente es un "creer en".
Pero "creer en Dios", no tiene nada espectacular, cuando incluso los seres malignos
también creen en El. Esto lo confirma el Apóstol Santiago cuando dice:
"Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, tiemblan."
-Santiago 2:19
Cuando la Biblia nos dice que Abraham "creyó a" , relata que esto le fue contado por
justicia; "creer a" tiene en nosotros un efecto que se refleja de manera inmediata en
nuestra manera de pensar, en como vemos todo a nuestro alrededor y en como
comenzamos a actuar al respecto.
La fe que "cree a Dios" es una fe que se levanta por sobre las adversidades, porque no se
afirma en lo que es el hombre, sino en lo que Dios ha dicho en Su Palabra. Es una fe que
confía plenamente en Dios y deja de lado la impotencia del hombre. Creer a Dios no es
solo aceptar la existencia de Dios, sino aceptar su veracidad.
La gente usualmente afirma creer en Dios, y con eso calma su conciencia mientras en su
vida diaria rechaza la Palabra de Dios; no la leen, mucho menos la interpretan y su
pensamiento es contrario en muchos aspectos a lo que Dios dice en las Escrituras.
Basan sus creencias en lo que han escuchado, en tradiciones y más frecuentemente creen
en lo que más les conviene.
Creerle a Dios implica reconocer que él es Justo, Santo, Omnisciente, creador de todo,
Soberano, el único que tiene el derecho de establecer el camino para la Salvación.
El hombre cree que es “bueno”, que irá al cielo cuando muera porque se ha “portado
bien”, porque no es como aquel asesino o como aquel político corrupto, no ha robado,
etc…se compara a sí mismo con otros y su juicio no es justo. Solo Dios puede juzgarlo
todo, conoce el corazón del hombre y sabe el pecado que hay en él. Solamente con la
rebelión de no aceptar lo que Dios dice, no creer a Dios, ya es pecado. No aceptar la
voluntad de Dios sino nuestra voluntad también es pecado.