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Sal y luz, luz y sal Muéveme en fin tu amor de tal manera Un barro dócil que confía en su Artesano,
mezclado entre la gente que aunque no hubiera cielo yo te amara barro que se funde y nace un nuevo vaso,
esta Jesús en la ciudad. y aunque no hubiera infierno te temiera. donde lleves el tesoro
Buscarás la verdad, no me tienes que dar porque te quiera de mi vida y de mi abrazo…
no habrá noche en tu vida pues aunque lo que espero no esperara
será siempre un despertar. lo mismo que te quiero te quisiera. Volver al barro para sentir mi presencia,
embarrarse para ganar transparencia,
YO TE AMO SEÑOR MI FORTALEZA
Luz, si tu iluminas Barro abierto al Soplo nuevo,
no puede ocultarse que hace nueva la existencia.
Yo te amo, Señor mi fortaleza,
la ciudad sobre la cima.
mi roca, mi baluarte, mi liberador.
Sal excelente Y tenele paciencia a tu barro…
Eres la peña en que me amparo,
mirando hacia el cielo Y tenele confianza a mis tiempos…
mi escudo y mi fuerza, mi Salvador.
con los pies en el presente. Y mirá cómo ejerzo este oficio…
Y volvete también alfarero…
En el templo se escuchó mi voz,
Y aunque quizás tropieces,
clamé por Ti en mi angustia.
no olvides El “día a día”, es taller simple y fraterno,
Extendiste tu mano y no caí,
que Jesús cayó tres veces. donde imaginar lo valioso y lo bueno,
tu poder del enemigo me libró.
donde modelar, pacientes,
¡Levántate y camina! el diseño de lo nuevo.
Las olas de la muerte me envolvían,
que con tu andar,
me aguardaba la ruina,
el mundo se ilumina. Volver al barro es consagrar lo cotidiano,
pero el Señor venció.
es involucrarse quedando embarrados,
Tu eres la luz que me ilumina,
es cuidar y amar el rostro
quien abre mis caminos,
PADRE YO TE ADORO bello y frágil de lo humano."
Tú eres mi Dios.
Estribillo
Padre, yo te adoro,
yo te ofrezco mi alma y vida, Cuando yo invoqué tu Nombre,
¡cómo te amo! con mano poderosa,
me salvó tu Amor.
Jesucristo, yo te adoro, Son perfectos tus caminos,
yo te ofrezco mi alma y vida, tu mano me sostiene
eres mi Rey.
¡cómo te amo!
Estribillo
Espíritu Santo yo te adoro,
yo te ofrezco mi alma y vida,
¡cómo te amo!
Baja hasta lo más hondo... Alabado sea el Santísimo Se habían reunido en un mismo lugar,
de nuestra condición. Sacramento del altar. y un viento muy fuerte empezaba a soplar...
Hasta lo más profundo /Y la Virgen concebida Un ruido del cielo se pudo escuchar
de nuestro corazón. sin pecado original./ (bis) y entonces las lenguas de fuego se vieron bajar...
Tú eres Rey, Hijo de Dios,
Señor Jesús. (Perdóname) Celebremos con fe viva Ven, Espíritu Santo, ven a traer tu Luz,
este Pan angelical. cumple ya la promesa que nos dejó Jesús,
Ama hasta lo más hondo... /Y la Virgen concebida ven, Espíritu Santo, ven a darnos tu Luz,
de nuestra condición. sin pecado original./ (bis) cumple ya la promesa que nos dejó Jesús.
Hasta lo más profundo
de nuestro corazón. Es el Dios que da la vida, Dulce huésped del alma, ven a sembrar la Paz,
Tú eres Rey, Hijo de Dios, y nació en un portal, para que entre los hombres florezca tu amistad,
Señor Jesús. /de la Virgen concebida Ven Espíritu Santo, ven a darnos la Paz,
sin pecado original./ (bis) para que entre los hombres florezca tu amistad.
Mira hasta lo más hondo...
de nuestra condición. El manjar más regalado Quémanos con tu fuego y haznos sentir tu Amor,
Hasta lo más profundo de este suelo terrenal ilumina las mentes y enciende el corazón.
de nuestro corazón. /es Jesús Sacramentado, Ven Espíritu Santo, ven a darnos tu Amor,
Tú eres Rey, Hijo de Dios, Dios eterno e inmortal./ (bis) ilumina las mentes y enciende el corazón.
Señor Jesús.
Ven, Espíritu Santo, ven... Ven a darnos tu luz, amen.
Libera hasta lo más hondo... Ven, Espíritu Santo, ven... Ven a darnos la paz, amen.
Sana hasta lo más hondo... Ven, Espíritu Santo, ven… Ven a darnos tu amor, amen.
Mira hasta lo más hondo...
Levanta hasta lo más hondo... COMO LA BRISA
Redime hasta lo más hondo...
Abro el corazón y las ventanas, cuando empieza la mañana,
por si quieres hoy venir.
Eres como el viento que no avisa, cuando sopla y trae la brisa,
ven y sopla sobre mí.
Y mi corazón vuelve a latir, y se renueva, si estás aquí.
Y mi corazón vela por ti, porque te espera, vuelve a venir.
Lléname (lléname)
con Tú presencia (lléname, lléname)
con Tú poder (lléname, lléname)
con Tú amor.