El programa de investigación de Sims hizo hincapié en la necesidad de prescindir de

restricciones dinámicas ad hoc en modelos de regresión y descartar exogeneidad empíricamente

inverosímil

suposiciones. También hizo hincapié en la necesidad de modelar todas las variables endógenas de
forma conjunta en lugar de uno

ecuación a la vez.

La capacidad de las representaciones estructurales de los modelos VAR para diferenciar entre

la correlación y la causalidad, en cambio, han permanecido como contenciosas.

Solo después de descomponer los errores de pronóstico en choques estructurales que son

no correlacionados mutuamente y tienen una interpretación económica podemos evaluar los

efectos causales de estos

choques en las variables modelo.

Esto significa, primero, que hay tantos choques estructurales como variables en el modelo.
Segundo,

los choques estructurales, por definición, no están correlacionados mutuamente, lo que implica
que Σ es diagonal. Tercero,

normalizamos la varianza de todos los choques estructurales a la unidad. La última normalización

no implica

una pérdida de generalidad,

siempre que los elementos diagonales de 0 permanezcan sin restricciones.

Está claro por inspección que las innovaciones de forma reducida son en general una media
ponderada

de los choques estructurales

Una forma popular de desenredar las innovaciones estructurales de las reducidas-

forma innovaciones

es para "ortogonalizar" los errores de forma reducida. La ortogonalización aquí significa hacer
los errores

no correlacionado Mecánicamente

La característica distintiva de "ortogonalización" por la descomposición de Cholesky es que el

resultado

el modelo estructural es recursivo (condicional en variables rezagadas). Esto significa que

imponemos
una cadena causal particular en lugar de aprender acerca de las relaciones causales a partir de los
datos. En

esencia, resolvemos el problema de qué choque estructural causa la variación en imponiendo

un

solución particular. Esta solución mecánica no tiene sentido económico, sin embargo, sin

una interpretación económica plausible para la ordenación recursiva