República Bolivariana de Venezuela

Universidad Bolivariana de Venezuela

P F G - Estudios Jurídicos
Unidad Curricular: Estado, Ética y Servicio Público
Profesor: Manuel Rodríguez
Sección. 01N E.J.2-3

Ensayo acerca del Derecho Administrativo

En virtud de su acepción, así como las implicaciones de su Concepto y Características

del Derecho Administrativo, se puede decir que es la rama del Derecho Público que rige el
ámbito de actuación de la Administración Pública en sus diferentes niveles de organización,
en sus diversas y muy variadas estructuras, y en sus diferentes ramas que lo componen; así
como en las relaciones de la Administración Pública con los Administrados. Siendo que sus
características son por excelencia formar parte del Derecho Público, que le otorga
facultades a la Administración Pública en función de los objetivos estratégicos de la nación
a los cuales debe avocarse para la satisfacción de las necesidades de la sociedad a la cual
están orientadas sus políticas y normas de cumplimiento obligatorio.

El Artículo 141 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,

establece los Principios del Derecho Administrativo, que son los mismos que rigen el
accionar de la Administración Pública, siendo estos Principios: Honestidad, Participación,
Celeridad, Eficacia, Eficiencia, Transparencia, Rendición de Cuentas, y Responsabilidad en
el Ejercicio de la Función Pública, con sometimiento pleno a la ley y al derecho. Siendo
entonces pues, que los Principios que rigen precisamente son los que rigen de igual manera
la actuación del cuerpo social (entiéndase “sociedad”) a la que se apuesta como nuevo
modelo de sociedad, y por ser precisamente un nuevo modelo de sociedad, se pretende
con estos principios que debe erigirse también un nuevo modelo de Administración Pública
y Gobierno, el cual debe mantener relaciones prístinas entre sus diversos niveles y ramas,
así como con los Administrados a quienes debe servir, de acuerdo a los objetivos
programáticos de la Nación como estructura político – territorial de Gobierno en función
del desarrollo integral del Estado Nación.

Entre otros, el Principio de legalidad de la Administración Pública está íntimamente

ligado con el Principio de Legalidad Sustantiva y Adjetiva, versa con sus semejantes, a tenor
de que no hay sanción en el ámbito administrativo sin que esté estipulado en un cuerpo
normativo que lo contenga. Puesto que de no ser así, se estaría frente a un estado
discrecional en el que la anarquía y el hecho del príncipe serían los ejes cardinales de
actuación del estado, lo que implicaría un sistema político de gobierno de corte absolutista,
negando las bondades de un sistema de gobierno democrático en el cual la separación de
los poderes públicos así como sus diferentes niveles de articulación quedarían en manos del
poder político imperante, negando derechos y beneficios a los administrados quienes a la
postre quedarían a merced de un sistema político – filosófico – jurídico y social injusto, que
somete a su sociedad a designios inciertos que no responderían a los verdaderos intereses
de un Estado al servicio de sus administrados y en favor del desarrollo colectivo de su
sociedad en pleno.

Asimismo, surge en la palestra jurídica el Principio de Supremacía de la

Administración Pública, el cual establece que las potestades de la Administración Pública
aunque son amplísimas, no son ilimitadas, lo que implica que hay responsabilidad de los
funcionarios públicos o servidores públicos que ejercen funciones propias dentro de la
administración y aparatos o estructuras que comprenden el Estado, lo que implica unas
funciones variadas que van desde la función de satisfacción de las necesidades básicas,
hasta trabajar el Estado en función de lograr (como lo está orientado en el Estado
Venezolano) la “Mayor suma de felicidad posible”, lo que implica que en condiciones
normales de un sistema político, los objetivos del Estado son ciertos y finitos, sin embargo,
en los actuales momentos, Venezuela está enclavada en una guerra económica agresiva que
impide el cumplimiento de los fines del Estado en la forma como lo establece el
ordenamiento jurídico, sin embargo, es esa misma situación bélica la que ha logrado mutar
el sistema administrativo, que lo ha vuelto mutable, cambiante, dinámico, que ha logrado
extender esa supremacía hasta convertirla en una elasticidad suprema, orientada a la
consecución de los objetivos del Estado y del Gobierno.

Lo que nos lleva a niveles más elaborados y de avanzada de Principios Rectores, no

llega el Principio de Discrecionalidad de la Administración Pública, lo que nos da la idea de
que la Administración Pública además de Auto regularse, Auto normarse y Auto tutelarse,
implica además (desde nuestro punto de vista) que, es la propia administración pública es
la que atendiendo a las necesidades y expectativas de desarrollo nacional, adecuarse a la
ponderación fáctica del desarrollo nacional, para establecer las normas propias para la
ejecución de las políticas públicas atinentes al funcionamiento del aparataje estadal, lo que
sin violar el principio de legalidad y al principio de reserva legal, puede establecer objetivos
estratégicos dinámicos en virtud de las necesidades histórico – temporales a los cuales esté
sometida la sociedad, en nuestro caso, la Sociedad Venezolana.

Visto así, se desprende entonces el Principio de especialidad del Derecho

Administrativo, el cual no aísla esta rama del Derecho Público, sino que por la importancia
vital (hablando en términos históricos, jurídicos y políticos) de la materia que regula, lo
convierte en una especie diferenciada de estudios jurídicos cuya razón de existir depende
de la estructura del Estado, su funcionamiento, y a los objetivos a los cuales está orientado.
Es por ello que, se concierte no solamente desde el punto de vista de formación jurídica,
sino desde el punto de vista jurisprudencial o doctrinario en una especificidad especialísima,
que lo convierte en un sistema especial, digno de un propio cuerpo doctrinario.

Después de haber dado un recorrido breve por la Concepción, las Características y

los Principios que fundamentan el Derecho Administrativo en Venezuela, llegamos al punto
de reflexionar acerca de las Bases fundamentales del Derecho Administrativo, lo que nos
lleva por nuevos derroteros o caminos, lo que nos induce a investigar más acerca de cuáles
son esa bases, y llegamos a que existen dos tipos de bases, unas de carácter Normativo y
otras de carácter Auxiliar, lo que nos lleva a entender que esta es una escisión necesaria,
para comprender las fuentes (o bases, ya que las mismas en este tema pueden ser utilizadas
como sinónimas e interdependientes entre sí), lo que nos lleva a discriminar las mismas
bases o fuentes de la siguiente manera: Bases normativas: Constitución, Ley, Tratados
Internacionales, Decretos leyes, atendiendo a la clásica “Pirámide de Kelsen” hallaremos
unas de primer orden, las cuales tienen características de leyes formales, de carácter o
rango legal, por un lado; mientras que por el otro lado, hallaremos que existen otras de
rango sub legal, como lo son: Reglamentos, Circulares, Instructivos Presidenciales,
Instructivos de servicio, las cuales vienen a complementar las primeras aquí recién
nombradas. También en este rango, igual de sub legalidad o legalidad en sentido restrictivo
en cuanto a la aplicación territorial de las mismas, pues adolecen de amplitud territorial en
cuanto al Estado Nación, son propias y en sentido de leyes formales en el territorio en el
que van a fungir como instrumentos legales legítimos y que tienen vigencia temporal e
histórico dentro de sus respectivos territorios, pero no menos importantes, podemos
encontrar Directrices, Leyes Estadales, Reglamentos de los Gobernadores, Ordenanzas, las
cuales no solamente complementan el espectro jurídico territorial de la Administración
Pública, sino que además, acerca a la Administración Pública a las comunidades, a la raíz de
ser de la administración, a la satisfacción de las necesidades de la población. Lo que nos
lleva de manera indefectible a las Bases auxiliares: Principios generales del derecho,
Doctrina, aunque parezca contradictorio que, siendo precisamente como lo son los
Principios Generales del derecho y la Doctrina las fuentes no solamente directas, sino,
inmediatas de todo ordenamiento jurídico contemporáneo, ya que es precisamente el
legado heredado por el sistema jurídico continental, el cual viene siendo parte de la cultura
Helénica – Romana jurídica, que migró con los “conquistadores” quienes al trasladar sus
tradiciones jurídicas, nos impusieron Principios occidentalizados que aun hoy no pierden
vigencia, pues las sociedades del hemisferio giran en torno a sistemas jurídicos heredados,
como citamos anteriormente. No obstante, auxilian porque, con esos principios y esa
doctrina es que precisamente se llenan los vacíos que pudiesen presentarse, por la dinámica
social que son persistentes en la cultura actual globalizada y voraz.

Ante estos temas, llegamos a la necesaria realización de ciertas Consideraciones

Acerca del Derecho Administrativo en Venezuela. Jurisprudencia como criterio unificador de
la legislación administrativa. Visto así, podremos comprender que en estos tiempos
contemporáneos, en los que ha sido necesario la flexibilización, adecuación, rectificación
de políticas públicas, dinamización de los procesos sociales e históricos – culturales en los
que está imbuida la comunidad global, lo que no nos es ajeno y menos en estos momentos,
en los que un asedio criminal enmarcado dentro de una guerra económica, lo que ha
entorpecido el normal desenvolvimiento de las funciones del Estado – Nación Venezolana,
lo que ha hecho migrar al espectro jurídico esas estrategias necesarias de flexibilización,
adecuación y dinamización de las “reglas de juego” políticas y sociales, de la mano de esas
mismas estrategias desde el punto de vista jurídico. Lo que nos hace comprender
precisamente la necesidad de que los vacíos o situaciones novedosas desde el punto de
vista jurídico, han de ser necesariamente cubiertos o suplidos por la doctrina, que es el
estudio de casos nuevos o poco comunes, para no caer en casos de denegación de justicia
a los “débiles jurídicos” o administrados, quienes en suma, son los destinatarios del Derecho
Administrativo.

Alumnos:

Shirley Hernández
Luz Sojo
Milagros Fajardo
José Flores
Sol Bracamonte