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UN MODELO DE LA DINASTIA DE TENOCHTITLAN,
Las historias aztecas, igual que Tos libros de historia on ctros
Igares, se ocupan do Jas actividades de los gobernantes, e3-
pocialmente do sus conguistas. Si bien las tradieioes histri-
fas de muchas de las diferentes ciudadesostado de valle de
México se han conservado, en e2os doenmentor esta claro que
‘Tenochtitlan era de Suprema imprrtancia. Esa ciudad enea-
bezaba el impeno tributsric amato imperio azteca y conocido
sae formalmonto despuss de Ja conqsista expaiiola como
‘Triple Alianza de Tencehtitlan, Texcoco y Tlacapan (Ciibson,
1971:889). A Tos gobornantes de Tenochtitlan se atribuia la
‘anquista de muchos de los puebfos que la Triple Alisnza so-
juz y oblig6 a pagar tributo, y por lo tanto sus hazavias so
‘encuentran en Iss tradiciones histirieas de muchas endades
el valle de México asl como de Ise regione cere,
El pueblo de Tenochtitlan tenfa los mismos patrones cul-
turales hasicos y la misma lengua (el néhustl que la mayorta
de Ins demas eitdades del valle de México, pero todas las elu:
dades se consideraban pertenecientes a carion grupos étaicas.
_ diferentes, Sus diferencias eran destacadaa eapocialmente en
sus historias tradicinales, que relataban emma cada uno de las
grupoe habia llegado al valle en distin
hhabian establecdo en diferentes areas, De
tos sagrados narrados por los letrados de Teuorhttlan, el pu:
blo de esa ciudad era conocido como mesien,y mis tae mo
¢l nombre de tenochca, después de Ia fundacién de Ia ciudad.
Se eonsideraban a sf mismos intrasos en al valle, uno de lot
‘muchos pusblos chichimecss, que en origea eran eazadoces y
recolectores némads ¥ cuya patria de origon estaba en algtin
Inga del noroeste de México, Abandonaron su lugar de erigen
(Gg. 1.0, conocido por ls varios nombres de Chicomdztec, Az-
tan y Culhusean o Teoeulhaacan, y emprondieren Ia larga mic
sracin hacia el velle de México. Las guiaba su deidad tutelae,6 Lasagna DIECORDIA
lus MoDELO De LA OINASTIA DE TENOCHTELAN a
ig. 14 Ls chchineas aldo dou hse de agen, Chicmsce Ste
(Coeur para emproner nr mirc belnal ede Kn, nto de
tecsmer aparece cans eben ents de are. Labbe vie
tem pines yen equip dl sar ot corspende sou seven Duran,
‘eornte 3
1 hombre-dios Huitilopochiti Colibri de Ia Taquierda”?, que
habia nacido en ciunstanciaa milagrosas, yuna rere de ef
seculares. Los mexlens y demas grupos chichimocas que éven-
tualmente se establecieron alrededir del Iago de Texcaco, el
principal Inge del valle de México, adoptaron sipidamente la
civiinacin de ls agrcultores sedentarcs que ya residfan ea la
ribera sur de lyp.
“Los mexicas crelan que eran el sltimo pugblo que abi
abandonado su Iugar de organ y legado al valle. en momentos
fon quo todas las tiorras do ln regién ya habian sido ocupadas
por ateos grapos. Las prineipales potoncias del valle en esa €p0-
2 eran los tepanecas al poniente del lago, los aculhuas al
doriente y los eulhuas al sur. Eneabezados por un jefe Hamado
Huitailthuitl el Viejo, ls mexicas se establecieron én Chapuite-
pec on la rihera cast dol lag, tereturi considorade coma pro-
pio por grupas establecidos con antorioridad. Las otras ciuda
des eonspiraron para expulear aloe mexicas de Chapultepec, y
‘toa 20 vieron toligadoe a buscar refugio en Tizaapan, parte
el terrtorin de Colluacan, la eapital do los eulluas.
‘Bventualmentelograren construir su propia cudad, Tench-
ig. 12, La fndsin dea ina de Teak en ump del ago de
‘Teco donde haya a sate an mpl a stew oe
tae eae pn an apt domeha of nv del ces ie an
soon on rp al noel ote pq no suet Foy
{doc resieas wl naman de ofan de eine Rowen
Dante torre 8
ticlan, on unm isla del lago, Fueron ditigidos a ese lugar por
‘una visin, un 4guila parada sobre an nopal, producida por ea
ios, Esa visin incarporabe ol lito de lugar de Tenoehtitien,
tuna roca (=e) de Ia que brota un nopal (= noobt), lo que da
Jos sonidos del nombre Tenechttlan, Ea alguns versiones, ef
Jefe de los mexicas en ose momento se lamaba Ténoch yla
‘dad oe Hlam ast por 4 ig. 12). Una parte del pueblo mexiea
se separo para formar olza ciudad inmediatamente al norte de
‘Tenochtitlan, Tlteleen. Bn Ta époce de In conquista espaol
‘atelotco estaba pricticamente eonfundida con Tenochtitlan,
‘came resultado de la violenta toma de Tlatelolco por Tenoch”
‘itlan
Con Ia fundacin de su propia cindad, los mexicatenocheas
4quisieron establecer una verdadera dinastia real para sustithir
‘sus jefes militares. El primer *rey"Hatoant, que vgiica “el
que habla" fue Acamapieht- Aun cuanto shora Ta ciudad te
nia un rey, Tenochtitlan 00 era un everpo plftic independisn-
te sino que era tibutaria de Azcapotealc, ln capital tepaneea
sitaada al poniente del lag. Seguin la tradicié, Ia hegemonia
‘epancea fue finalmente derroeada por los tenochets bajo si8 Lise DELADSORDIA
cvarto rey, Itzatl, con ayuda de a ciudad de Texcovo, capital
el grapo étaico aculhua. Al termina de exa guerra, Ttzebatl
roarganizé la estructura spciopoliti y econémiea desu ciudad,
Se eres una poderosa alianza entre Tenochtitlan, Texcoco
‘Thacopan la nueva capital tepanees) para gobernar ol valle de
México, imponiendo trbato a otras cindades, Tennehtitian e=-
taba a la cabaza de esa alianza. Posteriores gobernantes te-
‘nocheas contiguaron la expansion del imperio con nuevas con
‘uistas, muchas de ellas en rogiones muy alejadas del valle do
‘México, Las hazalias de los royos pesteriares proporcionan &
Jas historias gran parte de su detalles,
Tia forma de les tradicionos azteca, por lo tanto, o8perfee-
tamento comparable con las leyendas historias de otror puc-
Does, puesto que su propésit y funcién eran los mistos: stl
2ar ia historia para compeander In renlided pretente, Se han
ehcontrade pat fico, por ejemplo, para Tos miaories de
Naova Zelanda (Sahlins, 1985:57) y para muchos pueblos
[ss traicones stress atiennasl pueden constr, on realidad, en
tn primer perioda que ex poco mds que uaa sere de puntor-cero
posta para el igen de grupos soialee como tibuso anes un
rea seogrdfien 0 isco un punto cardinal un relate dela psinera
‘eupacién del teviorio tribal; un aatepaside epénizo ain mie
tsbto que ol de oor el primero; v qusds, alternatvament, un
lntepasad do arigen miagroso que por lo ants ex alga mas gue
Ihumano y ace ova que ming sr mano ba ech an depen
‘de i mitas que peroven ser enmunes en las eoiedades cn jefe,
‘donde los yobernantes efeccivamente nfirman poseer poderes
extaontinrig
‘Ncontinuacin vine un sagundopsrodo en que procs scales
bien coneefas no basen ms quo repels Las Snaje ersen 7 =
ivan Tas jofs se sueeden. Las acmatsinintns biti no on
“nis” por el conteara, aun lo mae lication poable». Finalmente
hha “emo histénao, um peredo en que han tnido ugar ante
‘imieata reales y del cual ne ronerdan genealogie ea Richard,
1860:177-179,
1a historia dinéstica de Tenochtitlan puede hallarse en docu
mmentos que relatan las tradiciones de muchos de los grupos
“tnicos, a menudo en forma de una lca rugia qed Ins foes
LUN ODELO BELA BLAS DE THACHITTLAN o
‘de entronianeién de los gobernantas do Tenochtitlan, a veces
‘con informacisn adicional sobre sus conquistas. Rsos gobor-
antes deseendian de un linge comin, formando ana geneslo-
‘sia dnica, que eel foco del andlisis de edi Ios aatocas conce-
Bian y explicaban #1 mundo deando la histaria “en este eago, la
Ihistoria condensada y ropresentada por Ja genealozia real més
‘importante,
a los documentos histricos de comienzos del perioda co-
lonial aparece ana serie de contradicciones acerca de las
relaciones bioldgieas de los reyes de Tenochtitlan. Bsas contra
Gieeiones no aparecen al azar, tino de acuerdo cou un patrén
‘gue ravela elerias concepeionessubyacentes del gobierno, la cos:
tmologia el tiempo. Esto eapttulo resume las versions exis
tentes de fa historia dinastica, mostrando que sus incongren-
cas pueden sor entondidas camo refieos dam modelo genera-
tonal de Ia sueesion de reyes. Hse mndolo giraba en tornn a
tiertas mujeres clave quo desempofiaban un papel impor-
teantisimo: elas oran quienes eanferfan los propio atrbutos de
Inrealeza
‘os REYES ne TANOCITITLAN
‘Se dice que nueve reyes 9 tatague (plural de datoani) go-
bbernaron TenochtiUan desie la fandacién de la ciudad, que la
fradieién situa ene] siglo 3, hasta la legada de los espatoles
‘on 1519, Despuss de la muerte del noveno rey pero antes de le
falda de Tenosbtitian en moe de Cortés, dos personas més
‘ctuaron corso gobernantes de Tenochtitlan (fig. 1.3) La may
a do Ine fusntes dacamentalat eatin de ecuord en sus nom
bres y en el orden do su roinado, como sigue (as etimologias
proceden de Codex en Cruz 1981:1)
1, Acamapichtli “Bfanajo de Catia, de deat! = xia o Me
cha + mapichtli = asda en Ia mano); eu gifo a= una mano
osteniondo exis 9 lochs.
2, Huitailihuit "Pluma de Colibe’ de huitzlin » eoibet +
‘itl = puma; su gif es a menudo un elibrf 9 una eabe-
‘za de colibri con plums encima