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x′ = f (x)
donde la incógnita es una función x(t). Este tipo de ecuaciones se llaman autónomas porque
la función f no depende de la variable independiente t. Observe que son ecuaciones de va-
riables separables. Existe un método para resolverla, lo que no quiere decir que siempre se
pueda resolver (es posible que las integrales que aparezcan no se puedan calcular). Por otro
lado, el hecho de que la ecuación sea de variables separables implica que existe una única
solución de la ecuación que satisface x(t0 ) = x0 si f (x0 ) 6= 0.
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x0 o si en cambio tomará otro rumbo completamente distinto. Planteamos ası́ la siguiente
definición:
Definición 2. Un punto de equilibrio x0 es estable si existe un entorno de x0 tal que toda
solución que en algún instante t caiga en ese entorno permanecerá dentro de él en el futuro
y tenderá a x0 cuando el tiempo t tiende a +∞. En caso contrario, el punto de equilibrio se
llamará inestable.
Ahora, serı́a bueno saber cómo decidir si el punto de equilibrio es estable o no. Para esto
volvamos a la argumentación de arriba: si la función f es positiva en x toda solución que en un
cierto valor t sea igual a x tendrá que ser creciente en el instante t. Por lo tanto, si f (x0 ) = 0 y
f (x) es positiva en un semientorno izquierdo de x0 , entonces para cualquier x en ese entorno,
se tiene que la solución que pasa por x crece y por lo tanto se mantendrá en el entorno y
tenderá a x0 . Si, en cambio, f (x) es negativa en un semientorno izquierdo de x0 , entonces la
solución que valga x decrecerá, alejándose ası́ de x0 . El mismo tipo de consideraciones sirve
para un entorno derecho de x0 .
•
• x0
x0
f
Estable Inestable
f
•
x0
•
f
x0
Inestable Inestable
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Si f es una función derivable, la condición de la Proposición 1 es verificada siempre que
f ′ (x0 ) < 0, y entonces se tiene el siguiente corolario:
Finalmente, observamos que, aún cuando una ecuación autónoma no pueda resolverse
por lo complicadas que puedan ser las integrales involucradas, de todos modos es posible
calcular el lı́mite de una solución cuando t tiende a ±∞. En efecto, supongamos que se tiene
determinado el signo de la función f y que x es una solución cuyo valor en algún instante t
pertenece a un intervalo (a, b) donde f es positiva y que f (b) = 0. Entonces x es una función
creciente, y sólo dejarı́a de ser creciente si en algún momento x(t) se pasa de b. Pero esto no
es posible porque el punto b es de equilibrio, y si x alcanza alguna vez el valor b quiere decir
que es b para todo t. Se concluye que la solución es creciente para todo t > 0, y resta ver
hasta donde llega, es decir, queremos saber todavı́a cuánto vale el lı́m x(t), que sabemos
t→+∞
que existe porque la x(t) es creciente. Afirmamos que el lı́mite es precisamente b: en efecto,
si fuera menor, serı́a algún α < b donde la f es positiva, y entonces x′ (t) es mayor que una
constante positiva a partir1 de un cierto t, y eso es absurdo ya que implicarı́a que la x(t)
tiende a +∞.
•
a x(t0 ) b
La conclusión es la siguiente:
si x(t0 ) pertenece a un intervalo donde f es positiva, entonces lı́m x(t) = b, donde b es la
t→+∞
menor de las raı́ces de f mayores que x(t0 ). Si no hay raı́ces de f a la derecha de x(t0 ),
entonces el lı́m x(t) = +∞
t→+∞
Idénticas consideraciones permiten afirmar que:
si f es negativa en un intervalo que contiene a x(t0 ), entonces x(t) es decreciente y tiende
a la mayor raı́z de f a la izquierda de x(t0 ). Como antes, si no hay raı́ces a la izquierda de
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En efecto, supóngase que lı́m x(t) = α ∈ (a, b), y sea ǫ ∈ (0, f (α)). Entonces lı́m x′ (t) = lı́m f x(t) =
` ´
t→∞ t→∞ t→∞
Rt
f (α) > ǫ, de donde existe t0 tal que x′ (t) ≥ ǫ si t ≥ t0 , y por lo tanto: x(t) = x(t0 )+ t0 x′ (s)ds > x(t0 )+ǫ(t−t0 ),
que tiende a ∞ cuando t → ∞.
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x(t0 ), entonces el lı́mite es −∞.
x′ = (x2 − 3x + 2)e−x
donde x(t) indica la temperatura en el instante t. Si intentamos resolverla como las ecuaciones
de variables separables, quedarı́a
x′
=1
(x2 − 3x + 2)e−x
o sea Z Z
1
2
dx = 1dt
(x − 3x + 2)e−x
y la integral de la izquierda parece difı́cil de calcular. Puede ser que nuestro interés sea
averiguar si la temperatura llegará a 0 o no y cuáles son los estados de equilibrio estables del
sistema.
Para eso estudiamos el signo de la función f (x) = (x2 − 3x + 2)e−x :
+ 0 − 0 +
1 2
Los puntos de equilibrio (o sea las raı́ces de f ) son x = 1 y x = 2; se tiene que f es negativa
entre 1 y 2 y positiva fuera del intervalo [1, 2].
Por lo tanto obtenemos las siguientes conclusiones: