1 Introducción.

• 1.1 Definición:
Según la Real Academia Española, se define la fachada como el parámetro exterior de
un edificio, generalmente el principal. Aunque también podemos definirlo más
extensamente como; Cualquier parámetro exterior de un edificio, aunque por defecto
cuando se habla de fachada se hace alusión a la parte delantera o principal.
• 1.2 Breve introducción Histórica:
La fachada, ha sido y será objeto de especial cuidado arquitectónico, muy ligado al arte
y por tanto, con múltiples y grandes cambios a lo largo de la historia en consonancia
con los distintos tipos de estilos dominantes, en diferentes épocas.
En la mayoría de las veces es el único recurso disponible para caracterizar la
construcción desde un punto de vista estético o artístico.
Las fachadas, como hemos mencionado antes han evolucionado durante la historia
siguiendo unos patrones artísticos pero sobre todo, siguiendo patrones tecnológicos.
Al comienzo de los tiempos, la fachada tuvo una gran importancia como elemento
estructural del edificio, por tanto, existían dificultades técnicas en la apertura de huecos
o ventanas, era la época románica (s. XI, XII, mediados del XIII). Este hecho es lo que
hoy en día conocemos como muros de carga.
Con la aparición de los pilares, columnas y arcos que distribuían la carga a través de lo
denominado como estructura, la fachada sufrió una transformación radical
(Renacimiento, s. XV, XVI), ya no tenía la responsabilidad estructural de antaño, y los
arquitectos se centraron en el toque artístico, sin olvidar, la importancia máxima que
debe de tener una fachada, la de aislar el espacio interno con el exterior.

Construcción Románica, podemos

observar la carencia de huecos en la
fachada debido al carácter estructural de
la misma, es importante matizar que en
este tipo de construcciones la altura
máxima del edificio estaba muy
limitada y no será hasta el renacimiento
Foto1, Fuente, www.educa.madrid.org cuando evolucionen las fachadas.
• 1.3 Introducción a la tipología de fachadas:
Posteriormente, a mediados del siglo XIX, con la aplicación masiva de la obra de
fábrica, disminuyen sensiblemente los grosores, hasta configurar un sistema basado en
una interdependencia de paredes para dar estabilidad al conjunto.
A medida que la técnica del hormigón armado adquiere mayor protagonismo gracias a
unas instrucciones que sistematizan el cálculo, que las armaduras metálicas ofrecen una
gran fiabilidad respecto a la resistencia y que el hormigón preparado evita el problema
del espacio de las obras, se produce la gran ruptura en los criterios constructivos, ya que

9
la estructura se independiza del resto del edificio y acaba siendo una nueva
especialidad.
Podríamos situar este hecho en la década de los sesenta, cuando la construcción fue
masiva.
Este esquema constructivo responde a una nueva forma de hacer más contemporánea;
normalmente se construye primero la estructura (a menudo de hormigón) y con
posterioridad se cierra el edificio (aún ahora con los mismos materiales tradicionales).
Constituye un nuevo concepto de fachada, ya que el paramento general está formado
por la suma de pequeños fragmentos encajados entre pilares y forjados.
Por lo tanto, podemos decir, que la fachada contemporánea se apoya sobre la estructura,
utilizando diversas técnicas y materiales para fijarlas a ésta, y así recubrirlas.
En definitiva, llegada del acero y del hormigón armado, terminó definitivamente por
liberar a la fachada de su dependencia estructural. Se introdujeron huecos horizontales
en lugar de los tradicionales verticales, utilizándolos tanto por adecuarse mejor a la
visión de las personas, como para evidenciar su independencia de la estructura.
A mediados del siglo XX empiezan a surgir fachadas con disposición irregular
de los huecos que atiende a las necesidades de iluminación interiores, así como la
aplicación de nuevos materiales.
Esta nueva tendencia origina la aparición de fachadas ligeras (sin función
estructural), como las de vidrio sobre montantes de metal que permiten una gran
iluminación interior. Así como las fachadas de módulos prefabricados, de fácil
ensamblado, compactas y aislantes tanto térmica como acústicamente.

2 Tipología.

Distinguimos dos tipos de fachadas en función del peso: Ligera y pesada.

• 2.1 Fachada Ligera

Características:

Las fachadas ligeras funcionan como una piel colgada del edificio. Como su propio
nombre indica, son ligeras, y no contribuyen a la estabilidad de la estructura. Debido a
su poca masa, son malas aislantes del ruido, por lo que no son aplicables para edificios
que requieran ambientes silenciosos, como por ejemplo el uso residencial. Tampoco
suelen funcionar bien como aislantes térmicos, exigiendo generalmente un gasto extra
en calefacción o aire acondicionado. Sin embargo, su reducido peso, su gran capacidad
para permitir la entrada de luz, y su rapidez de montaje las hacen idóneas para
rascacielos y una gran variedad de espacios públicos.

Se componen de tres elementos:

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 • Montantes: elementos de sujeción verticales que se anclan a la estructura del
edificio.
• Travesaños o perfiles secundarios: elementos horizontales anclados a los
montantes, y que terminan de conformar el armazón.
• Cerramiento: puede ser de vidrio o paneles ligeros (madera, aluminio…etc.).
Éstos pueden ser fijos o practicables.

En función de si la «piel de fachada» es continua o se interrumpe en cada forjado, las

fachadas ligeras se pueden clasificar en «muros cortina» o «fachada panel»,
respectivamente.

• 2.1.1 Muros cortina: Cuando la fachada pasa de forma continua por

delante de los forjados del edificio.

• 2.1.2 Fachada panel: Cuando la fachada se interrumpe en cada forjado

delimitando paneles o zonas independientes.

MONTAJE:

El peso aproximado del Muro Cortina o Fachada Ligera está entre 50 y 75

Kg. /m2, y su espesor es de aproximadamente 10 cm.

9
 La construcción de la fachada comienza fijando los montantes (elementos de
fijación verticales) a la estructura primaria de la obra y dominan sobre los travesaños
(elementos de fijación horizontales). El montaje se efectúa en sentido horizontal
considerando una cantidad determinada de montantes según sea el caso. En la parte
superior de los montantes se halla el anclaje tridimensional.

Montaje de cerramientos en una fachada de muro cortina

Los anclajes llevan un elemento que sirve de rotura de puente térmico y

antivibraciones, también alojan en su parte superior los elementos de guía y ensamble
para montarlo con el inmediato superior, con una distancia entre sí de 10 mm, lo cual le
permite absorber dilataciones y movimientos de distinto tipo. Estos trabajos se van
repitiendo planta por planta, realizando verificaciones intermedias para garantizar
aplomado sin desvíos.

Posteriormente se procede a la colocación de los cerramientos en los montantes,

vidrios para las zonas de visión y de entrada de luz natural, paneles opacos para las
zonas ciegas y elementos practicables para facilitar la ventilación y/o la limpieza de la
fachada.

• 2.2 Fachada pesada

Características:

Son las de mayor peso. A base de elementos autoportantes (materiales de obra de

fábrica o paneles prefabricados).Estas a diferencia de las anteriores, aportan su propio
peso. Esta categoría abarca todas las fachadas tradicionales, ya sean de ladrillo visto,
enfoscados, aplacados, de piedra, de madera u otras, además de las tras ventiladas y las
prefabricadas.

• 2.2.1 Fachadas trasventiladas

Son parecidas a los muros cortina. También constan de montantes, travesaños, y

cerramientos, pero a diferencia de las anteriores, los montantes se anclan a muros de

9
fábrica, y las piezas de cerramiento son pesadas: normalmente placas de piedra o
cerámica. Al existir una hoja de cerramiento interior (habitualmente de ladrillo), las
placas no necesitan presentar una junta estanca, y en el montaje se separan entre sí unos
pocos milímetros, permitiendo que el aislamiento térmico ventile por esas rendijas. Este
tipo de fachadas se suele utilizar en edificios institucionales, debido a que ofrece una
elevada calidad de acabado.

• 2.2.2 Fachadas prefabricadas

Son fachadas compuestas por módulos de pared que vienen hechos de taller,
ensamblándose unos a otros en obra. Dependiendo del nivel de prefabricación pueden
incluso montarse paredes de fachada con las ventanas o la puerta ya instaladas. El
material más utilizado en prefabricación es el hormigón, aunque también está extendido
el uso de madera, y otros materiales más modernos como el GRC. Los sistemas de
unión entre los distintos módulos ya vienen incorporados en las propias piezas, de modo
que suelen ser construcciones de junta seca.

Las ventajas de este método residen en un mayor control de calidad, al fabricarse las
piezas en taller, y en un proceso de montaje muy rápido que no demanda mucha mano
de obra. Por este motivo en países industrializados, donde la mano de obra es
comparativamente más cara que los materiales, está ganando popularidad.

. En algunos casos llevan el aislamiento incorporado.

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 • Capa Exterior.
Es la capa en contacto con el exterior, a merced de los agentes atmosféricos; esta capa
sirve de protección y determina el aspecto de la fachada
• Capa Calorífuga
Utilizando placas o materiales espumosos aislantes, se reduce notablemente el espesor
de los paneles.
El uso de hormigón gaseoso también responde en forma óptima como capa calorífuga.
• Capa de Arriostramiento de Hormigón Armado.
Esta capa funciona como sustentación a las cargas de la cubierta y del techo,
permitiendo la colocación de las armaduras o ubicándolas en forma longitudinal, en
cuyo caso el paramento vertical con hueco para ventana o puerta, no trabaja para la
carga.
• 2.2.3 Fachada de Ladrillo Visto
Se utilizan para fachadas como vistos los ladrillos macizos o perforados de formato
normal y de primera calidad, para asegurarse color parejo, desportillados y baja
tolerancia de dimensiones.
Pueden ser confeccionados a mano o a máquina; los primeros son de elevado coste y de
reducida aplicación.
También pueden utilizarse ladrillos aplantillados, por lo general fabricados a máquina.

• 2.2.4 Fachada de Hormigón Visto

Los bloques de hormigón vistos se utilizan para fachadas habiendo hecho una buena
elección de los mismos, que deberán tener superficies lisas, aristas rectas y bien
marcadas.
Existe una gran variedad en formatos y modelos.
También se fabrican con rehundidos u otro tipo de superficie o canaleta, a saber: bloque
tipo Gero, tipo Tarraco, tipo Split, entre otros.

9
3 Las fachadas de la UPV.

3.1 Fachadas Ligeras:

• 3.1.1 Muros cortina:
Edificio Ciudad Politécnica de la Innovación:

Ciudad de la Innovación:

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Este edificio tiene una parte de la fachada acristalada, la cual será la que cumpla con las
características de Muro cortina.
Según el Archivo del “Servicio de Infraestructuras”, se trata de vidrios laminados, con
aguante a agentes externos, que no le hagan perder su emplazamiento, con bastidores
que soporten el peso de los vidrios. Los huecos de los bastidores vienen sellados para
hacerlos estancos.
En el caso de más de un vidrio en el mismo emplazamiento, y varios grosores, el de
mayor grosor es el que va en la parte interior.
La estructura también incluye galces y junquillos para unir bastidores y vidrios, estos
últimos se sellaron para evitar corrosiones.
• 3.1.2 Fachadas Panel:
Escuela técnica superior de gestión en la edificación:

3.2 Fachadas Pesadas:

• 3.2.1 Fachada transventilada
ETS de Ingeniería geodésica, cartografía y topografía:

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 • 3.2.2 Fachada Prefabricada:
ETS de Ingeniería del Diseño:

En este edificio se usaron:

1. Placas o paneles de cartón-yeso, hormigón fibra-madera y escayola.
2. Perfilería de acero conformado en frio.
3. Losas de hormigón armado.

• 3.2.3 De ladrillo Visto:

Instituto de Tecnología Eléctrica (6C)

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Como podemos observar en el Campus de la UPV podemos encontrar multitud de tipos
de fachadas, como esta última, que corresponde a una muy típica en la construcción de
edificios.

• 3.2.4 De Hormigón visto:

Edificio de Arquitectura Técnica (2F)