El fundar ciudades resulta ser uno de los principales
pilares de la colonización del _Nuevo Mundo.
Una vez fundada ciudades en el Perú, como en el caso de
Arequipa obedecen a necesidades que los conquistadores vieron como estrategia para seguir con la campaña de conquista y como centros intermediarios que faciliten una mejor articulación y control entre las ciudades.
Antes y durante el tiempo de fundar ciudades se realizaron
varias visitas al interior del Perú, mandados por los conquistadores.
La riqueza de las indias eran en verdad, sus indios. Es
cierto que los conquistadores vivieron atraídos en primera instancia por el oro y plata. Pasada las jornadas de Cajamarca y el Cusco, ya no hubo grandes tesoros a repartir, y sin embargo seguían llegando españoles para obtener beneficios. Pero ya no había abundancia de objetos de oro y plata pero existía la fuerza de trabajo indígena para producir riquezas.
El objetivo de los conquistadores era obtener una
encomienda de indios. Este logro fue alcanzado solamente por un reducido número de españoles.
El grupo de encomendadotes estuvo compuesto por los
primeros conquistadores, también obtuvieron encomienda aquellos españoles que llegaron al Perú con poderosas recomendaciones. La encomienda tiene que ver con la forma como la agricultura europea se fue estableciendo en los andes, posibilitando un proceso de apropiación de tierras y expansión de la actividad agrícola.
La primera encomienda que otorga Pizarro fue la de Atico y
Caraveli en 1535 a Cristóbal de Burgos.
Las guerras civiles, la datación de las nuevas Leyes, la
Rebelión de Gonzalo Pizarro y la creación del Virreinato Peruano. Fueron hechos que alteraron profundamente el doblamiento y colonización de nuestro territorio y que necesariamente influenciaron en la zona de Arequipa.
En 1541 Francisco Pizarro ordenó a Garcí M de Carvajal para
que la Villa de Arequipa contribuyera con hombres para la guerra contra Manco Inca. El Rey de España nunca vio con buenos ojos que se forme una clase de señores feudales sobre la base de los encomenderos. El Rey le temía a una potencial clase dominante que se sentía con derechos particulares sobre la tierra conquistada. Por ello desde las nuevas leyes, la corona orientó a limitar el poder de los encomenderos. Estos se revelaron en 1544 y fueron derrotados por el pacificador Pedro de la Gasca después de una cruenta guerra civil. Después de la derrota de Gonzalo Pizarro, el Rey de España ordenó que se formen corregimientos, como forma de administrar las provincias. El corregidor era un funcionario situado por debajo del Virrey, representaban al poder ejecutivo y al judicial.
Francisco Toledo nombrado Virrey del Perú en 1568 con el
fin de consolidar los derechos y privilegios reales frente a los encomenderos y poner término a las sublevaciones de los indios tomó posesión del cargo en noviembre de 1569 sustituyendo al Virrey Lope Gracia de Castro. Inicio su gobierno llevando a cabo una visita general al Virreynato del Perú, gracias a ello pudo conseguir información sobre la demografía del territorio y la organización administrativa incaica.
El Virrey Toledo es considerado el organizador del
virreinato peruano ya que estableció las bases de lo que sería el sistema colonial en el Perú. Especialmente a través de las llamadas ordenanzas del Virrey Toledo.
Es así que nombró como Visitador y Juez reductor de la
provincia de Arequipa y sus corregidores, al capitán Juan Maldonado Buendía. Esta provincia comprendía siete corregimientos: Arequipas, Characato y Vitor, Camaná, Condesuyos, Collaguas, Carumas y Ubinas del Colesuyo y Arica.
El corregimiento de Arequipa comprendida la ciudad del
mismo nombre y el poblado de la Chimba donde fueron reducidos los indios de las rancherías y arrabales de la ciudad así como los mitimaes y yanacunas.
El corregimiento de Characato y Vitor comprendía tres
repartimientos y sus indios fueron repartidos en tres pueblos como el repartimiento de Paucarpata, characato y Chiguata. El corregimiento de Camaná constituida por nueve repartimientos siendo reducida su población en diez pueblos: Majes, Hacari, Ocoña, Quilca, Atiquita, Caravelí y Atico, Mollehuaca. También el Corregimiento de Condesuyo había once repartimientos y su población fue reducida en catorce pueblos. Chuquibamba, Arones, Machaguay, Pampacolca, Chilpacas, Achamaca. Así mismo el corregimiento de los collaguas; era el más rico de la provincia comprendía tres repartimientos y su población fue reducida en 24 pueblos. El corregimiento de los Carumas y Ubinas de Colesuyo comprendías cinco pueblos. De otro lado el corregimiento de Arica comprende seis repartimientos y su población nativa fue reducida en once pueblos.
De tal manera que la provincia de Arequipa en la visita
general que se efectuó por orden del Virrey Toledo, comprendía siete corregimientos, treinta y cinco repartimientos y setenta reducciones de indios o pueblos.
Pizarro implantó el sistema de trabajo por turnos que en la
época incaica se llevó a cabo en beneficio de la autoridad inca durante el período colonial se hacía en beneficio del Virreinato del Perú. Durante la época Virreinal la mita adquirió otro sentido donde los gobernantes coloniales devolvían los servicios de la mita con un sueldo, pero este era muy bajo y no permitía el mantenimiento del mitayo. Así los indígenas sentían que la mita se había transformado y les resultaba sumamente dolorosa.
La mita era un trabajo forzado en la colonia, así como
también garantizar mano de obra barata especialmente en la minería. Los indios tenían que dejar sus tierras agrícolas para realizar el trabajo de la mita. Existían diversos tipos de mita como: agraria, urbana, de Tambo, atrajera y la más importante la minería.
Durante estos años se da la llegada de las órdenes
religiosas para la evangelización del Perú, nos referimos a la orden de Santo Domingo que en el Sur del Perú como Cusco y Arequipa se eleva a la categoría de conventos las vicarias.
También la orden de la Merced, donde llegaron al interior
del País como Arequipa.
La orden de San Agustín y la Compañía de Jesús de igual
Historia del Perú: Una guía fascinante de la historia peruana, desde la civilización chavín y otras antiguas civilizaciones andinas hasta el presente, pasando por el Imperio incaico