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Universidad de Zulia
Escuela de Filosofía
Paul Sartre
Realizado por:
Mónica Castellano
C.I. 18.258.746
C.I. 11.258.819
1
Introducción
Nada
Conclusiones
2
INTRODUCCIÓN
dejado en un segundo plano, donde el mundo, las ideas y las ciencias eran lo
anteriores, sólo que esta vez se encara a la existencia tal como nos es dada, el
abandono por las filosofías clásicas, nos referimos al tema del Otro. El análisis
3
objeto, y eso me roba, me enajena y me posee. Esto es terrible para Sartre es
una lucha constante entre dos seres que no quieren ser descubiertos y
otro.
procederá a la búsqueda información que tenga que ver con la obra de Jean
4
además de las influencias que recibió y que ayudaron a forjar dicho
pensamiento.
5
CAPITULO I:
El siglo XX está lleno de todas las nuevas tendencias del pensamiento, las
artes, ciencia, etc., pero no es por estas razones que se le recordará, sino por
Alemania, unificada a fines del siglo XIX, el cual se notó no sólo en el amor e
interés por el progreso del país sino que se fue al imperialismo, a la conquista
6
A lo largo de la guerra se movilizaron, por parte de la Triple Alianza, doce
El mayor revés que sufrió esta última, fue el descalabro del frente oriental en
con las obligaciones que le impuso el Tratado de Versalles, por lo cual se hará
7
se consideran culpables. El período interbélico de veinte años, sirvió a
concepciones bélicas. Con el nazismo bajo el liderazgo del Führer Adolfo Hitler
comienza una nueva era para Alemania. Hitler, era un antisemita patológico,
como el Holocausto.
Japón, agresores, que formaron los países del Eje Roma-Berlín-Tokio; y los
del Eje se inició por parte de Japón en Manchuria (1931), de Italia en Etiopía
agresión con Rusia para dejar libre el camino oeste, a fin de invadir a Francia
8
Los ejércitos alemanes ocuparon, paulatinamente, Polonia,
en el sur, con Petain y Laval, esta Francia fue conocida como la Francia de
Rusia respondió al ataque por el este europeo y avanzó hasta tomar Berlín
La guerra ocupó el ámbito más vasto que guerra alguna: el noventa por
racial más sufrido fue el de los judíos, de quienes murieron más de seis
millones. Europa fue destruida en su mayor parte, sus grandes capitales fueron
9
Mussolini fue acribillado en la calle. El emperador japonés Hirohito sigue
10
1.2 Datos Biográficos.
Jean Paul Sartre nació en París, el 21 de Junio de 1905. Fue uno de los
momento su madre se lo lleva a vivir con sus abuelos. Sartre era un principito
En 1915 Jean Paul inicia su formación en el liceo Henri- IV, de París, donde
corriente. Paseaban por París durante horas imitando a sus héroes literarios,
2
ROWLEY, Hazle: Sartre y Beauvoir: La historia de una pareja. Lumen, p.24
11
convencido de que el amor no tenía nada que ver con la posesión. Para Sartre
Husserl.
para lo que más tarde se convertiría en el tratado filosófico “El Ser y la Nada”.
Una de sus ideas centrales es que la relación con los demás siempre implica
un conflicto.5
Sartre es apresado, el día que cumplía 35 años. No le fue tan mal durante su
prestaron una cuidada edición en tapa dura de “El Ser y el Tiempo”). Los
3
Ibíd. 57
4
http://www.antroposmoderno.com/antro-articulo.php?id_articulo=619. Consultado 31/10/2009
5
ROWLEY, Hazle op. cit., p. 158
12
martes por la noche daba conferencias de filosofía a un público formado en su
haciéndose pasar por civil. Cuando volvió a París había cambiado, no volvía a
como era la vida en una ciudad ocupada por los nazis. Era conciente de que
los franceses no la habían pasado tan mal. “Me gustaría explicarles que se
equivocan, que la ocupación fue una experiencia terrible, que no es cierto que
suerte de sus aliados ingleses”.6 Con este artículo Sartre no pretendía que los
Aún bajo la ocupación de París por las tropas nazis, la actividad cultural se
obra teatral “Las Moscas”, sabía que los censores alemanes jamás permitirían
una obra sobre la ocupación, así que decidió disfrazar el mensaje utilizando la
mitología griega. Ese mismo año también publica su tratado filosófico “El Ser y
hasta después de la guerra, los que lo leyeron sabían que representaba un hito
13
del mundo que le rodeaba. También publica la obra de un solo acto “A puertas
cerradas”, donde se encuentra su famosa sentencia: “El infierno son los otros”.
resistencia, como editor del periódico clandestino Combat, donde Sartre fue
el existencialismo un humanismo?”, era complejo, así que pensó que iría poca
gente, cuando llegó quedo impresionado al ver que se había congregado una
ser libre. 7
posguerra no fue una coincidencia. Los lectores de Sartre habían pasado por la
14
condición humana y, al mismo tiempo, insistía en la libertad y la posibilidad de
En 1956 participa en los actos que tienen lugar contra la guerra de Argelia,
insumisión.
8
Ibíd. 237
15
En 1963 tiene lugar la primera edición de "Las palabras". Continuando con
premio Nobel de literatura. Ese mismo año participará en la edición del primer
vida política francesa en los años siguientes. En 1968 Sartre apoya las
de mayo, del que será director durante un breve período, al verse obligado a
Montparnasse.
16
1.3 Influencias Recibidas.
17
distintas posturas en torno a la existencia, donde podemos encontrar la
dominantes del marxismo. Por lo demás, hay que tener en cuenta de forma
El periodo fenomenológico
con los planteamientos fenomenológicos. Lo mismo ocurre con sus otras obras,
imaginario".
9
http://www.webdianoia.com/contemporanea/sartre/sartre_filo.htm. Consultado 31/10/2009
18
El período existencialista
El período marxista
Sin que se pueda decir que abandona las tesis más radicales del
como libertad. De esta época datan obras tan importantes como la "Crítica de
la razón dialéctica".
CAPITULO II:
19
2.1 El “Ser y Otro” en el planteamiento de J.PS
llegar al tercer piso sin antes haber pasado por el primero y el segundo, así son
sus ideas, no podemos llegar al “otro” sin antes encontrarnos con el ser, este
En primer lugar el ser del que nos habla Sartre es, el ser del fenómeno.
realidades no humanas.
esencia ya han sido dadas, es por esto que la noción de creación no se aplica
en él, simplemente es. Y por ser de esta manera, sin justificación, sin poder ser
Antes de llegar a la segunda región del ser conviene decir que, Sartre no
la nada tiene su origen en los juicios negativos, y se debe entender que como
10
SARTRE, Jean Paul: El Ser y la Nada. Ediciones Altaza, S.A. Barcelona, 1993, p.18
20
el ser-en-sí es plena positividad, no contiene en sí misma ninguna negación,
proposiciones judicativas, Sartre propone una cuestión, ¿si son estos juicios el
Aprovechemos haber tocado el tema de la realidad humana para dejar, por los
en-sí es lo que es, Sartre dirá que el para-sí es, un “ser que no es lo que es y
una circunstancia que no ha elegido él; es, en tanto que está arrojado a una
otra manera porque, es, en tanto que hay algo en él cuyo fundamento no es él:
su presencia en el mundo.12
11
Ibíd. 113
12
Ibidem.
21
que no necesariamente afecta al ser; otra posibilidad sería la que se nos
son, que ellos han de ser. En este caso, el ser mantiene en el ser sus propias
en la situación que lo constituye y puede ser esta o aquella (en sí mis manos
está ser mozo de café o un profesor). Entendemos con esto ese perpetuo
de Sartre: “(…) el hombre no es otra cosa que lo que él se hace”.14 Ahora bien,
nunca llega a ser algo concreto, como el ser-en-sí, hay una fisura en la plenitud
necesariamente libre, pues como parte del hombre, la nada llega por ella
13
Ibíd.115
14
SARTRE, Jean Paul: El Existencialismo es un Humanismo. Ediciones Orbis, S.A.Barcelona 1980, p,61
22
La libertad no precede al hombre, ni viene después de él, él es libertad, y esta
presenta ante esos pasos a dar, ante las decisiones que ha de tomar, “la
conducta decisiva emanará de un yo que todavía no soy, así que lo que yo soy
conciencia, la mala fe, esta va mas allá de una simple mentira, en palabras
misma persona, y la verdad que se oculta está referida a esa misma persona.
dejamos que las cosas pasen como si no fuésemos totalmente libres. Para
“Un camarero sirve a los clientes con excesivo celo, con excesiva
pierde su propia libertad porque antes que camarero es persona y nadie puede
15
SARTRE, Jean Paul: El Ser y la Nada. Ediciones Altaza, S.A. Barcelona, 1993, p.64
16
Ibíd. 69
17
Ibíd. 89
23
individual con el mundo, pero dentro de este mundo ha ocurrido algo, luego
distinto al mío; me descubre también que él es una relación con las cosas y
una organización de ellas como las mías, pero que no son las mías.” 18 Pero
¿de qué forma el ser-para-sí es sorprendido por esta otra conciencia que no es
la de él? ¿Cómo es que se nos presenta este Otro? Sartre dirá que el otro se
nuestra relación con el Otro. No profundizaremos en este punto, dado que este
planteamiento de Sartre.
18
SARTRE, Jean Paul: El Existencialismo es un Humanismo. Ediciones Orbis, S.A.Barcelona 1980, p.31
24
Como mencionábamos en el apartado anterior, es a través de la mirada
nuestro campo. Pero, ¿de qué trata este aparecer del Otro, que implica para “el
presencia del Otro, no sólo por el hecho de haberlo visto, sino porque el Otro lo
ve, esto da comienzo a todo un problema, una fuga de ese mundo donde
catástrofe? Pues, hay mucho más oculto en esa mirada, y esto es que debido a
ella descubrimos lo que somos. Cuando el Otro entra en nuestro campo con su
en él, nuestro universo se diluye y corre hacia ese nuevo punto de vista, de allí
a que se diga del Otro como aquel que nos ha robado el mundo. Ese es el
efecto que causa en nuestro mundo, pero cuando la mirada se fija en nosotros,
comienzo de su tesis sobre el Otro, que nos dará una idea de lo que ocurre con
aprehensión vergonzosa de algo y ese algo soy yo. La vergüenza realiza, pues,
25
total vulgaridad de mi gesto, y tengo vergüenza.”19 Por este simple hecho, en
para soportar nuevas cualificaciones, soy vulgar, y lo estoy siendo ante otro, mi
podríamos captar por completo lo que somos. Y el comienzo fue tan sólo una
mirada.
Para-sí y En-sí.
aparece como un en-sí más, sin ninguna diferencia con las otras cosas a su
alrededor, pero poco a poco se va descubriendo como algo más que un objeto,
es el del para-sí, “el prójimo es, ante todo, la fuga permanente de las cosas
captado como objeto, el otro, va mucho más allá, porque genera una relación
con las cosas que el para-sí no puede captar tal como el Otro las capta,
19
SARTRE, Jean Paul: El Ser y la Nada. Ediciones Altaza, S.A. Barcelona, 1993, p.251
20
Ibídem.
21
Ibíd.,.283
26
relación de ese hombre y su libro es la grieta por donde se fuga el mundo que
el para-sí percibe.
Sin duda hemos dejado atrás ese objeto que representaba el prójimo,
este se ha revelado como aquel que ve lo que el para-sí ve, y es muy posible
que el para-sí sea visto por el prójimo, con esto queda claro que el prójimo es
mirada ajena?
nuestro campo perceptivo. Lo que pone de manifiesto a la mirada son los ojos,
una operación de asalto, los hombres se arrastran por el boscaje captan como
mirada a evitar, no dos ojos, sino toda una granja blanca que se recorta contra
más allá de los ojos, al estar sobre nosotros, su sola presencia despliega una
distancia que nos aparta, podemos quitar la mirada, o podemos mirar, pero
mirada fija sobre nosotros, o es lo uno o es lo otro, puesto que percibir es mirar
tomar conciencia de ser mirado. “La mirada pone de manifiesto los ojos, de
22
Ibíd., 286
23
Ibídem.
24
Ibíd., 287
27
lo que captamos en una situación en la que nos escondemos de algo, por dar
Sartre sólo nos hable del ocultamiento físico, podría encontrarse una situación
celos, por vicio ha llegado a pegar la oreja en una puesta, o mira por el ojo de
una cerradura, no es conciente de ello, por lo tanto nada hay que pueda
ofrecen sus potencialidades, que son del para-sí sus posibilidades propias.
Detrás de la puerta hay una conversación a oír, por el ojo de la cerradura hay
como instrumentos y obstáculos. Hace lo que tiene que hacer, no hay nada
sobre lo cual se pueda emitir algún juicio, su conciencia se apega a sus actos y
estos están regidos sólo por los fines a alcanzar y los instrumentos a utilizar.
“El fin por alcanzar organiza todo los momentos que lo preceden; el fin justifica
los medios, los medios no existen por sí mismos y fuera del fin.”25 Todo el
posibilidades, que son los celos, y como esa posibilidad que es, organiza todos
25
Ibídem.
28
los utensilios (instrumentos) y los trasciende hacia el fin, pero esos celos él no
refleja su libertad para cumplir dicha tarea. Pero cuando oye pasos a su
nos revelan esa mirada, y al mismo tiempo nos hacen conocer la situación de
es ante todo, reconocimiento de que soy el objeto de una miada y que soy
mala fe puedo enmascarar este ser que soy, pero a fin de cuentas ya estoy
medio de las cuales nos encontramos, vuelven hacia el otro un rostro que se
trasciende las posibilidades del para-sí con su libertad; Cuando aquel que
el acto por otro, tiene la posibilidad de huir, pero el Otro trasciende esa
trascendida.”26
“El hecho de ser visto me cambia a un ser sin defensa ante una libertad
que no es mi libertad.”27 Se puede concluir con esto que la mirada del otro nos
26
Ibíd.,291
27
STERN, Alfred: La filosofía de Sartre y el psicoanálisis existencialista. Fabril Ediciones,
Buenos Aires, 1962 p, 123
29
hace, nos constituye, pero también nos hace esclavos de su libertad, y aquí se
amos. Esta lucha da comienzo con la mirada, pero continúan a medida que
siguiente apartado.
30
Ya conocimos de “vista” al Otro, y su existencia como un para-sí nos fue
revelada, su aparición nos fue dada a través de una simple mirada, pero en ella
juzgarnos y con esto trascendió nuestra libertad con su libertad. Pero todo esto
fue un instante, el instante en que nos vio, ahora bien, ¿qué es lo que sucede
comienzo de una lucha, la lucha por imponer nuestra libertad. Esto es lo que
quitarle su carácter de tal, son las dos actitudes primitivas que adopto con
presencia del otro, y que a raíz de ese momento (en el que huimos del otro) es
conductas o actitudes en las que el para-sí intenta asimilar la libertad del otro.
luchamos por librarnos del dominio del otro, éste lucha por librarse del nuestro,
su libertad, y una de las primeras actitudes que toma para lograr tal empresa,
es el amor.
28
SARTRE, Jean Paul: El Ser y la Nada. Ediciones Altaza, S.A. Barcelona, 1993, p.388
29
Ibíd., 389
31
Antes de continuar, debemos aclarar que Sartre sólo se remite al tipo de
amor que existe entre un hombre y una mujer, puesto que en este tipo de amor
propias. Pero es el ideal del amor, su motivo y su fin, su valor propio. El amor
cuales apunta a realizar ese valor”.30 El amor nos pone en relación directa con
la libertad del otro, por lo tanto también implica un conflicto. La libertad ajena es
amor, y esta apropiación no sólo es física, sino que llega hasta el punto de
es querer apoderarse de la libertad del otro. Pero ese apoderamiento del ser
aburrido de que el ser amado no tenga voluntad propia, esto hace que el
tipo especial de apropiación: quiere poseer una libertad como libertad.” 31 Quiere
30
Ibíd., 391
31
Ibíd., 392
32
determine a convertirse en amor, que se entregue por su propia voluntad al
dominio del amante y que este no sea la causa, sino la ocasión, o mejor dicho
la razón por la cual permite que su libertad sea modificada. No puede ser la
amante el que se permite ser un objeto, puesto que quiere ser el <mundo
entero> para el ser amado, que sea por su ser objeto que el otro acepte
las trascendencias, es decir, puede trascender todos los demás objetos, pero al
amante-objeto no. El que el otro lo ame hace que no pueda ser trascendido, y
se convierte en el fin absoluto d ese amor. “El objeto que el otro debe hacernos
cual se ordenan como puros medios todas las cosas utensilios del mundo. Al
situarse más allá de todo sistema de valores, ser la condición por la cual el
prójimo valora todos los valores. Por esta razón el amante hace que el ser
amado rompa con los actos morales <<que robe y mate por él>>. El amante
hace existir el mundo del otro, es el objeto fondo sobre el cual el mundo se
destaca, con esto está a salvo de la finitud que la mirada del prójimo transmite,
está cautivado.
Sin duda en estos dos últimos apartados hemos sido tentados a hacer
33
Esclavo>>, donde el rol del amo es fácilmente adaptable al de amante, y el de
esclavo al del ser amado, pero Sartre aclara que hasta allí debe llegar tal
Mientras que en el amor, según Sartre, el amante exige ante todo la libertad del
ser amado, puesto que así, el amante es elegido libremente como amado. Ya
pensar que ha sido elegido entre otros. Lo que debería ser es, que esta
elección sea absoluta, una forma de entenderlo es en las frases clichés; “Almas
gemelas” o “Estamos hechos el uno para el otro”, lo que estas frases encierran
nuestro ser-objeto exijo de él que el libre surgimiento de su ser tenga por fin
único y absoluto su elección de nosotros, es decir, que haya elegido ser para
queda salvada.”33 Este es el objetivo del amante, a través de la libertad del otro
amado. “Seducir es asumir enteramente como un riesgo que hay que correr mi
objetividad para otro; es ponerme bajo su mirada y hacerme mirar por él; es
33
Ibíd., 395
34
Ibíd., 396
34
Por otra parte, no debemos olvidar algo que señala Sartre en el texto;
“Todo lo que vale para mí vale para el prójimo.” 35 Así mismo como nosotros
Cuando proyecte ser amado, nos dice Sartre. Cuando haga todo lo que el
ser mirados por un tercero, los amantes son petrificados en objeto, son
obligados a ser ante los ojos de los demás, y ante los suyos, e irónicamente
la diferenciación sexual nada tiene que ver con la existencia, ya que hombre y
mujer existen por igual. Y sucede porque siempre ha sido considerada como
35
Ibíd., 389
36
PRINI, Pietro: Historia del Existencialismo. Librería “El Ateneo” editorial, Argentina, 1975 p,
139
37
SARTRE, Jean Paul: El Ser y la Nada. Ediciones Altaza, S.A. Barcelona, 1993, p,402
35
una función contingente del cuerpo, las “reacciones psico-fisiológicas”, y no
animal (a menos que se posea una patología, que no viene al caso) se desea a
disposición del órgano sexual para fecundar y procurar goce son sólo un
una forma total, una forma en situación, a un cuerpo más allá de su cuerpo. “El
deseo pone el mundo y deseo al cuerpo a partir del mundo, y a la bella mano a
partir del cuerpo. (…) El deseo no es sino una de las formas más generales
deseo es el deseo del cuerpo ajeno, deseo de poseerlo, con nuestro propio
para esto el cuerpo debe hacerse “carne”, para eso una la caricia. “Al acariciar
al otro, hago nacer su carne por mi caricia, bajo mis dedos, la caricia es el
rodean. (…) La caricia no es en modo alguno distinto al deseo: acariciar con los
38
Ibíd., 410
36
ojos y desear son una y la misma cosa; el deseo se expresa por la caricia como
del otro? No, al contrario, también es un fracaso, sucede algo parecido a lo que
reciprocas, en la que dar, para el otro, sin recibir nada a cambio no funciona, el
prójimo se hace carne para quien se hace carne para él. Esto en líneas
existen otros factores que llevan a la sexualidad al fracaso, uno de ellos está en
lo efímero que es el deseo, ya que muere, y lo hace a través del placer. “El
eyaculación.
Estas actitudes son los proyectos por los cuales el para-sí intenta
trascendencia del otro, pero ninguno se basta a sí mismo, por tanto “el prójimo
Para Sartre “el respeto por la libertad ajena no es más que una palabra vana:
aun si pudiéramos proyectar respetar esa libertad, cada actitud que tomáramos
respecto del otro sería una violación de esa libertad que pretendíamos
39
Ibíd., 414
40
Ibíd., 431
41
Ibíd., 432
37
respetar.”42 Esto es en tanto que las actitudes expuestas encierran en sí una
lucha y un conflicto por poseer el uno al otro. Aquí la solución como actitud
mundo donde está el otro, quien a su vez nos atrapa, y aunque intentamos, (a
apoderarnos de ella.
al para-sí encontrarse atrapado entre los otros, y habiendo agotado todos sus
perseguir la muerte del otro y a esta libre determinación se le llama Odio. Esto
hecho padecer, lo cual considera Sartre como un acto humillante, ya que cada
acto que el prójimo realiza nos revela nuestra objetividad como instrumento
“la abolición del otro, para ser vivida como el triunfo del odio, implica el
43
reconocimiento explícito de que el prójimo ha existido.” Así el otro ya no esté
42
Ibíd., 433
43
Ibíd., 435
38
ser un para-otro) por el resto de sus días, su imagen se borrará, pero no sus
actitudes para con nosotros. De esta forma ni aunque estén vivos o muertos
podemos escapar de los otros, es por esto que para Sartre “¡El infierno son los
Otros!”44
toca contrastar estas ideas con ciertos pasajes de la obra “La Nausea”, ya que
39
por ello podemos encontrar dentro de la narración, que versa en la vida
pueden unirse para crear algo magnifico y perdurable. Sin más preámbulos
acerca de la vida del Marques De Rollebon, un aventurero del siglo XVIII, con
allí no tenía amistades, una que otra vez mantenía relaciones sexuales con la
Antoine coincidirá con él varias veces dentro de aquel recinto, pero no es hasta
40
almuerzo termina en una discusión sobre el Humanismos, de quien el
descubre que ese amor por los hombres va más allá del sentido filantrópico,
perturbaba era la Nausea, la primera vez que la sintió fue cuando quiso lanzar
un guijarro al agua, pero se detuvo y lo dejó caer, otra vez fue cuando intentó
alzar un papel del suelo y no pudo, sintió una especie de repugnancia dulzona
que le tocaba, por esto piensa que los objetos no deberían tocar y sin embargo
verdadera realidad, ésta se le presenta ahora como una masa deforme, blanda,
formas definidas en el que habita, ya no es más que una cosa débil, “montada
45
RIU, Federico: Ensayo sobre Sartre. Monte Ávila Editores, Caracas, 1968 p, 29
41
ataque de la nausea fue en un café, entonces lo ataco la angustia, ya no tenía
escapatoria, hasta que un día descubre algo que hacía que la nausea se
arruinaba por desconocer de qué se trataban. El día del encuentro llega, Anny
que Anny, al igual que Roquentin, pensaba que existía por existir, que todo eso
de los momentos perfectos no eran mas que tonterías, por eso renunció a ellos.
la ama, quería estrecharla entre sus brazos, no es capaz, ella está sola como
él, no puede decirle nada ya que tampoco tiene motivos para vivir. Antoine le
42
cuenta su vida, sus sensaciones nauseabundas, tratando de que ella se diese
cuenta de que pensaban igual y pasaban por lo mismo, pero Anny no lo cree, él
confiesa a éste haber leído Los Ejercicios Espirituales de Loyola y que le han
sido muy útiles. Después de no tener más nada que decirse y de un silencio
alguien que aun no es como ellos, todavía. Antoine está decepcionado, ella le
él se va, en cierto modo se aleja, la última vez que la ve ella está tomando un
regresa por ultima vez ya que decide irse definitivamente a París, se pregunta
que no vale la pena volver a empezar, que siempre la vida será una partida
perdida. Está solo y cree haber visto la verdad, es libre, pero esa liberta se le
parece un poco a la muerte. Pero cuando creía que ya todo estaba perdido,
justo antes de marcharse de Bouville, escucha su viejo rag-time por ultima vez,
le parece que la música y la cantante van más allá de toda esa nausea, ellos
han logrado purificarse, se han “librado del pecado de existir”. Ante esto,
Antoine se llena un poco de esperanza, quizás no todo está perdido, siente que
a través de algo así (no la música naturalmente) podría, aunque sea un poco,
la vida de alguien, ese fue su error con Rollebon, por eso quedó estancado, por
43
querer justificar la existencia de otro existente. Éste sería otra clase de libro, un
libro de historias que no puedan suceder, de aventura, bella y dura, un libro que
atreve aun a escribir algo así, aunque lo entusiasma la idea de poder ser
recordado como el tipo aquel que escribió tal libro. Así, un día pensando,
Sus interacciones con los objetos y la manera de observarlo todo no son más
que afirmaciones de sí, aunque este pensamiento lo angustie por sentir que su
existencia no tiene tanta fuerza como la de las cosas; “Dios mío con que fuerza
existen hoy las cosas”47. El darse cuenta de ello lo sensibiliza, es decir, siente
con mayor intensidad todo lo que toca, lo que ve, lo que escucha. En términos
ningún lado, mientras que los en-sí están allí, hechos ya, y es indignante saber
47
Ibíd., 151
44
la novela, Roquentin siente la angustia, pero la acepta, acepta su estado de
espejo, ve como sus facciones se asemejan cada vez más a las de un cadáver,
“y para poder soportar su vista en los espejos, ese horrible rostro de cadáver
Cuando comenzamos este capitulo dijimos que, las relaciones con los
tiene distintos matices; existe una mirada definidora, tanto por parte de Antoine
pasaje; “Tal vez sea imposible comprender el propio rostro ¿o acaso es porque
soy un hombre solo? Los que viven en sociedad han aprendido a mirarse en
los espejos. Tal como los ven sus amigos. Yo no tengo amigos; ¿por eso es mi
carne tan desnuda? Sí, es como la naturaleza sin los hombres.” 49 Es por el otro
naturaleza sin hombres está ahí, pero carece del sentido que estos le dan.
48
Ibíd., 108
49
Ibíd., 36
45
También encontramos el poder de la mirada propia, Roquentin la utiliza
fascinada, pero este de golpe da unos pasos y la mira, la niña está quieta,
que somos o que estamos siendo, que antes de ser sorprendidos, la acción
que hacíamos no tenía conciencia de sí, puesto que en ese momento no hay
bien podría contrastarse con el ejemplo que nos da Sartre en el Ser y la Nada y
uno de los jóvenes a los ojos le sonría y le hablaba, momentos más tarde
50
Ibíd., 120
51
Ibíd., 122
46
Antoine levanta su mirada nuevamente y ve una mano pequeña que reposaba
sobre la mesa, floja suave y sensual, luego ve otra mano velluda grande, con
toda la falta de gracia del sexo masculino, y esta comenzó a acariciar la mano
presta atención está inmerso en su acción. Hasta que por fin fue sorprendido;
en el fondo sabía que ya todo estaba hecho y nada podía evitar lo que seguía.
pederasta.
mujer que aun amaba. Las relaciones amorosas que explica Sartre en el Ser y
amante pretende que el otro lo ame y con esto poseerlo, el amado se cansa y
En la Nausea , lo poco que nos muestra Sartre del amor entre Anny y Antoine
su amor y que la necesita, nos da cierto conocimiento de lo que esta mujer era
capaz de hacer con los momentos que compartían, era ella la que parecía
porque Antoine deja ver cierto complejo de inferioridad existencial, es decir, esa
forma en que su existencia se deja reducir por los objetos, que estos le afecten.
52
Ibíd., 244
47
Cuando él le confiesa esa sensación, pensando que ella podía identificarse con
quería que su vida tuviera la perfección de una pobra de arte. Junto a Antoine
tuvo esas situaciones, pero casi siempre el terminaba haciendo algo que lo
arruinaba. Podríamos decir que Anny era muy exigente, que el querer lograr
figura dominante, ya que ve a Antoine más que como una persona real, lo ve
quien lo coloca en esas aventuras, ella es su mundo que dispone todo para
algo suceda. El fracaso llega, y con esto nos referimos al alejamiento de 3 años
de los dos, en que quizás el tiempo hizo que Antoine se diera cuenta de la
Antoine comienza a ver la existencia como lo que realmente es. Una vez se
53
Ibíd., 221
48
reencuentran, él desea encontrar algo de esperanza, algo que lo salvara de lo
perfectos que proponía Anny, pero se dio cuenta que al igual que él Anny
que “aun en los momentos mas álgidos y sublimes, la vida tiene siempre el
mismo fondo de vulgaridad.”54 Él no podía hacer más nada, el amor entre ellos
la pensión donde vive, pero como él mismo dice, lo hacen de igual a igual, no
Sin embargo hay algo latente en la novela, un concepto que tiene mucho
refugiarse entre las personas, pero sólo si sentía ese peligro. Sin embargo
encontraba entre las personas, pues detrás de sus máscaras, todas sus
grandes virtudes y cualidades no había mas que la miseria y la farsa. Por eso
49
espejos, dentro de la soledad del individuo estos no son más que el sustituto de
la mirada del otro, al reflejarse en ellos, Antoine intentaba definirse, pero sólo
libro quizá, sería recordado como algo más que un perdedor, y el en su interior
aceptación del Otro en su vida, como aquél que dará sentido a su existencia en
un futuro.
CAPITULO III
una revolución de ideas que bien aportaron en otras áreas del saber, así como
50
En el presente capitulo abordaremos a aquellos quienes trabajaron en
psicoanálisis, y aquel que trabajó el problema del Otro con una nueva esencia,
que puede significar el Otro, Lévinas va más allá de toda ontología y se centra
Sartre en cuanto a ese encuentro con el Otro, ya que también trabaja la mirada,
lo cual se salvó del trato que recibieron otros judíos en los campos de
51
habitaba en Lituania no tuvo la misma suerte y fue masacrada por los nazis.
Por esta razón Lévinas rompe la relación que mantenía con Heidegger por su
formado una filosofía fría, donde lo más importante era el ser, el ego
opone como Otro. El conocimiento representa para éste autor una estrategia
que sería el descubrimiento que hace el “Yo” del “Otro”, cambiando la propia
perspectiva por la del Otro, lo que implica que el interés legado por la ontología
sea sustituido por el des-interés que consista en ponerse en el lugar del Otro,
El Otro es aquel quien no somos, aquel que nos es anterior y por el cual
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mismidad del Yo y lo reconduce al terreno de la Otredad. Por eso, para
del “Yo”. Por la ética el hombre se abre a su más íntima alteridad. La Ética se
del Otro exige una mirada distinta de aquella con la cual se mira una casa o un
animal que se pasea, exige una mirada más profunda. Al mirar el rostro,
rostro es la parte del cuerpo más expuesta a la mirada, “la piel de rostro es ña
que está más desprotegida, más desnuda, (…) guarda una relación con lo
con lo desnudo y en consecuencia, con quien está solo y puede sufrir ese
supremo abandono que llamamos muerte. Así pues en el rostro está siempre la
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otra parte y al mismo tiempo – esto es lo paradójico- el rostro es también el
<<No Matarás>>.”55
La muerte del Otro es una posibilidad, más aún matara al Otro, pero
recordemos que es el Otro quien nos pone limites, y es por esto que surge el
responsables del Otro es una obligación. Para darnos cuenta del tamaño de la
obligación que tenemos con el Otro, Lévinas identifica a este con tres figuras; la
pérdidas y los desarraigos que nos llaman a tomar una actitud de absoluta
responsabilidad.
manifestación sin intermediarios del encuentro con el Rostro del Otro, del
55
LÉVINAS, Emmanuel: Entre Nosotros: Ensayos Para Pensar En Otro. Editorial Pre-
Textos, España 1993, p.130
56
LÉVINAS, Emmanuel: Totalidad e Infinito. Editorial Sígueme, España 2002, p.220
54
verificación y entrega al Otro, el dialogo permite el encuentro de los rostros,
comparar a los otros es necesario que alguien juzgue, para juzgar hace falta
justicia del Estado es una mengua de caridad y no como creía Hobbes, una
57
LÉVINAS, Emmanuel: Ética e Infinito. Editorial Visor/Machado, España 1993, p. 14
55
Psicoanálisis Existencial
interpretarlas.
igual que Freud, Sartre considera el acto humano como simbólico, traductor
fundamental del individuo, mientras que los términos tomados por Freud como
56
que vive en el mundo, de igual manera los dos tratan de reconstruir la vida de
individual, lo conciente, lo total del ser humano, Sartre parte del postulado de la
libertad absoluta del hombre. Para Sartre la vida humana es siempre producto
empíricos del hombre, es decir, sacar a plena luz las revelaciones que cada
de su vida, enferma por el absurdo del propio vivir, por la falta de razón de su
57
en forma libre y sin estar signado o marcado por una esencia, esto siguiendo la
como asuntos que surgen en la vida, mas que como señal de una enfermedad.
espirituales.
concentración nazis. Al ver quien sobrevivía y quien no, concluyó que el filósofo
Friedrich Nietzsche tenía razón: aquellos que tiene un porqué vivir, pese a la
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adversidad, resistirán. Pudo observar como personas que tenía la esperanza
de reunirse con sus seres queridos o que poseían proyectos, parecían tener
conformidad y por supuesto algo que no debe faltar en este ámbito, los círculos
viciosos neuróticos; las obsesiones por tal o x cosa, las fobias, etc. El punto es
que no importa lo que hagamos, nunca será suficiente para llenar el vacío.
Según Frankl el hombre ha superado la parte de los instintos por medio de las
esos modos placebos de llenar el vacío. Entonces ¿de qué forma se halla el
sentido de la vida?
persona a través del amor. Por medio de nuestro amor podemos inducir
propio.
59
FRANKL, Víctor: Ante el vacío existencial,Ediciones Herder, Barcelona 1994, p.133
59
2. Valores Creativos, esta es la idea existencial por excelencia, consiste
vida.
del ser humano para poder elegir nuestra virtud con entera
existir. Que mejor esbozo del significado de este valor que con la
frase: “Al mal tiempo buena cara”. Sin embargo, el ejemplo más
insoslayable.
además que este sentido es mucho más profundo que cualquier lógica, por
inclinar.
60
Para cerrar este capitulo anexaremos el análisis crítico hecho a toda la
Aportes Críticos
no en tanto a tocar el tema del Otro, sino a la perspectiva que se le da, que
consiste en ver al Otro como ese que nos roba el mundo. Cuando analizamos
una perpetua búsqueda es la vida del ser humano, queriendo alcanzar algo
problema, ya que observar al Otro como el enemigo, como aquel que nos
aliena y nos roba la libertad, es perturbador. Sin embargo no todo está fuera de
el Otro nos mira, nos queda esa definición que el Otro nos provoca, el
61
“Reconozco que soy como el prójimo me ve”. Es cierto que ante el prójimo
tenemos un sentimiento que sólo aparece con el Otro, el Pudor, pudor al ser
sorprendidos desnudos. Desde ese ángulo estamos bien, pero cuando Sartre
constante trato con el Otro, así que (desde el punto de vista de Sartre) la
Pasando ahora a lo que Sartre entiende como Amor, esto no es más que
un intento por poseer la libertad del Otro desde su propia libertad. Conviene
hablar de que no podía quedarse con una sola mujer puesto que eso coartaba
planteamiento una excusa para justificar su incapacidad de ser fiel a una sola
mujer? La visión de Sartre sobre el Amor es fría, más aun aquella que tiene
concepto a la filosofía existencial, este mérito no sería tan grande puesto que
toda esta visión está viciada por esa ambición de poseer al Otro, poseer su
La forma en que Sartre nos muestra al Otro llega a ser hasta paranoica,
62
punto extremo, decir que es inevitable el irrespeto del Otro, puesto que toda
última opción para deshacerse del Otro es la muerte de este por el Odio, nos
pone frente a una pregunta que desde el principio nos ronda ¿En qué estaba
pensando Sartre y hasta que punto pudo verse afectado por la guerra? Claro
que si la tomamos como una idea absoluta podríamos entrar en ese círculo
las actitudes que tomamos con el prójimo, nos puede parecer cierto ¿por qué?
Pues porque existen miradas que, aunque suene cliché, matan y con ello nos
referimos a aquellas miradas que intimidan, que con su fuerza hacen bajar la
vista, la guardia del Otro. Existen amores posesivos, en los que la mujer o el
poder, de la libertad del amado, es capaz de herir y el ser amado sigue allí.
cabida, no queremos decir que tenga toda la razón y que sea totalmente cierto,
dota de realidad.
63
Emmanuel Lévinas acerca del Otro, este lo coloca en el centro de su filosofía,
mejor dicho, en su ética, las similitudes que existen entre éste y Sartre se
pueden decir que sólo son de nombre, puesto que Lévinas tiene una nueva
esencia que darle al Otro, si bien este es por el cual nos reconocemos, al igual
que en Sartre, ese reconocimiento no será por algo negativo, ni en un acto que
habla del no respeto al Otro, para Lévinas este será el momento ético, el
mientras que en Lévinas este tercero se convierte en la entidad que vela por la
una pasión inútil, por lo tanto no alcanza ese sentido, en cambio para Frankl el
60
MOUNIER, Enmanuel: Introducción a los Existencialismos. Ediciones Guadarramas, Madrid
2ª Edición, 1973, 80
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hombre como esencia (entidad sobre la tierra) busca su sentido, y puede llegar
camino hacia ello encuentra cosas que lo llenan, que le dan sentido, como el
amor, sus propios proyectos, sus propias virtudes y sus actitudes ante la vida
CONCLUSIONES
la relación entre el para-sí y el Otro sólo puede llegar a conflicto. Pues desde el
momento en que aparece el Otro se presenta como una amenaza para el para-
como un objeto, un en-sí mas, lo define, pero ese hecho le quita libertad pues
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lo deja quieto, vulnerable ante los juicios del Otro. Entonces comienza la lucha,
quien cosifica a quien, y esto trasciende hasta el punto que, es por la libertad
que se lucha, puesto que el Otro al cosificar al para-sí tomó su libertad, y las
vías de recuperarla son las relaciones que se entablan con el Otro: el amor, la
sexualidad y como el recurso final el odio, todos ellos fracasan, los dos
primeros porque son relaciones recíprocas y esto porque lo que quiere el uno lo
quiere el otro, pero aquí lo recíproco llega a medias pues sólo uno puede
recibir (dentro de este planteamiento), al momento que el otro pide las mismas
queda el odio extremo, donde se pretende matar al Otro, pero este también
existencia, también pareciera que aquí Sartre incluye dentro de ese fracaso y
para con el para-sí. Es de esta forma como, según Sartre, el Otro es aquel al
que no podemos respetar, puesto que vivimos en continuo conflicto con él, y
cada actitud hacia el otro es una afrenta ante su libertad, es por esa libertad
infierno son los Otros”. Pero este panorama se aclara un poco cuando
Otro para que de sentido a nuestra vida por medio del recuerdo. Si no le
66
prestamos atención a la cronología, esto puede ser así, pero resulta que la
Nausea fue escrita antes que el Ser y la Nada y aparentemente Sartre cambió
su perspectiva.
Sin más no nos queda más que reconocer el gran trabajo que hizo
100% de acuerdo con él, nos deja un espacio para la crítica y para desarrollar
Bibliografía
Fuentes Primarias:
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Buenos Aires, 1968
• SARTRE, Jean Paul: Bosquejo de una teoría de las Emociones.
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• SARTRE, Jean Paul: La Nausea. Editorial Época, S.A. México 9ª
Edición, 1978
• SARTRE, Jean Paul: El Ser y la Nada. Ediciones Altaza, S.A. Barcelona,
1993
• SARTRE, Jean Paul: Huis Clos Gallimard, París 1944
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Fuentes Secundarias:
• BOSCHETTI, Ana: Sartre y “Les Temps Modernes”. Ediciones Nueva
Visión, Buenos Aires, Argentina, 1990
• GABRIEL, Leo: Filosofía de la Esxistencia: Kierkegaard, Heidegger,
Jaspers, Sartre. Dialogos de las Posiciones. Biblioteca de autores
cristianos, Madrid, MCMLXXIV
• MOUNIER, Enmanuel: Introducción a los Existencialismos. Ediciones
Guadarramas, Madrid 2ª Edición, 1973
• PRINI, Pietro: Historia del Existencialismo. Librería “El Ateneo” editorial,
Argentina, 1975
• RIU, Federico: Ensayo sobre Sartre. Monte Ávila Editores, Caracas,
1968
• ROWLEY, Hazle: Sartre y Beauvoir: La historia de una pareja. Lumen,
Barcelona, 2005
• SIMON, Pierre Henry: Proceso al Hombre. Universidad Central de
Venezuela, 1962
• STERN, Alfred: La filosofía de Sartre y el psicoanálisis existencialista.
Fabril Ediciones, Buenos Aires, 1962
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