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La Navidad
Para Colorear y Meditar en familia
Todas las citas bíblicas están tomadas de l Nuevo Testamento de Ediciones RIALP, Madrid 1986
José canta este villancico mientras lleva por el ronzal a su burrita. El Rey de Reyes
tiene que nacer. José cumple con el decreto imperial y -como es de sangre real, al
ser descendiente de David- decide ir a Belén. Así, obedeciendo a las autoridades
civiles, cumplió lo que profetizaron las Escrituras.
Belén significa “casa del pan”. Jesús es el Pan de Vida que ha bajado del Cielo
para ser nuestro alimento.
Arre, burra, arre, nosotros con este Pan también nos ponemos en camino hacia el
Cielo. Nos acompañan siempre María y José. Si alguna vez nos perdemos, ellos nos
llevan de la mano otra vez al camino que es Jesús.
Dios quiere nacer en cada familia. Por eso, los cristianos celebramos la Navidad
como una fiesta familiar. Es la Fiesta de la Familia y del amor fiel y generoso.
Pero allí donde hay una familia hay un hogar. No importa lo feo o lo bonito que
sea. La familia convierte cualquier lugar en una casa: desde la primera Navidad, el
establo es la imagen perfecta de la casa cristiana. Y el pesebre es imagen de
nuestro pobre corazón, en el que Jesús quiere nacer cada Navidad.
Los pastores supieron reconocer la señal indicada por el Ángel: “un niño envuelto
en pañales y recostado en un pesebre”.
Sólo las personas sencillas, que saben hacerse niños pequeños, pueden entrar en
el Portal de Belén. Dios nos ha dado a su hijo nacido de unos padres virginales.
María y José están encantados de presentárnoslo. Esta es la señal. Ojalá sepamos
nosotros reconocerla, para que podamos convertirnos también nosotros en Hijos
de Dios (Cf. Jn 1, 12).
Los Reyes Magos nos enseñan a buscar nuestra estrella y a seguirla siempre, sin
desánimos. Y si algún día perdemos el rastro, entonces, preguntaremos a quienes
pueden indicarnos su paradero. Y reaparecerá la Estrella y -como los Magos- nos
llenaremos de alegría.
El amor es eterno.
Dios es familia y quiso nacer como hombre en una familia.
Tú también has nacido en una familia para que aprendas a amar y así puedas
entrar en el Cielo que es Dios. Jesús ha nacido en Belén para enseñarte a amar.
Todos los días puedes hacer cosas buenas. Todos los días puedes ofrecérselas a
Jesús, como un regalo.
Sólo tienes una cosa que está a la altura. Tu vida entera. Pero, es necesario que
se la entregues todos los días, levantándote de la cama de un salto, venciendo la
pereza y diciéndole:
Jesús, que has nacido en Belén, haz que me porte bien en este día en que te
ofrezco el corazón y el alma mía.