ENLACE QUÍMICO en un máximo de 2 folios, destacando aquello que consideres más importante para la METALURGIA EXTRACTIVA.
Un enlace químico es una fuerza de naturaleza electrostática que
mantiene unidos los átomos de una molécula. Se produce enlace entre dos átomos o entre dos grupos de átomos cuando existe una fuerza que los atrae uno hacia el otro y les permite formar un conjunto suficientemente estable. Se sabe que el enlace resulta de las fuerzas de Coulomb entre las cargas eléctricas positivas y negativas del núcleo y los electrones. La creación de un enlace entre dos o más átomos va acompañada, obligatoriamente, de una liberación de energía e implica su acercamiento hasta una distancia de enlace. La distancia interatómica es, pues, el criterio experimental de la existencia de enlace, y un enlace es más fuerte y libera más energía cuanta más pequeña es esa distancia.
En una reacción química se rompen y se forman enlaces, punto fundamental
en la metalurgia extractiva puesto que aplicando determinadas técnicas (pirometalúrgicas (alta temperatura) o hidrometalúrgicas (añadiendo un disolvente)) se producirán ciertas reacciones que nos permiten extraer el metal de mineral en el que se encuentra, ya que permitirán romper los enlaces. Éstos varían ampliamente en su fuerza, pero podríamos decir que el enlace covalente y el enlace iónico son fuertes, mientras que el enlace de hidrógeno y las fuerzas de Van der Waals son débiles. Los enlaces se clasifican básicamente en tres tipos: enlace iónico, enlace covalente y enlace metálico (los cuales representan casos límites, siendo posibles también todos los casos intermedios). La diferencia entre estos tres enlaces estriba en la diferente distribución electrónica en las proximidades de los átomos enlazados y, por tanto, en la diversa direccionalidad de las fuerzas que resultan. En todos los casos, cada núcleo conserva cerca de él los electrones que no forman parte de la capa de valencia. Los electrones de valencia, por otra parte, están localizados de manera diversa.
Concretamente, estos tres tipos de enlaces se definen como:
-Enlace metálico: se da cuando los átomos enlazados son elementos
metálicos. Los electrones son compartidos por los átomos pero pueden moverse a través del sólido proporcionando las propiedades características de los metales: conductividad térmica y eléctrica, brillo, maleabilidad y ductilidad.
-Enlace covalente: se da entre elementos no metálicos. Si los átomos
enlazados son no metales e idénticos (como en N2 o en O2), los electrones son compartidos por igual por los dos átomos, y el enlace se llama covalente apolar. Si los átomos son no metales pero distintos (como en el óxido nítrico NO), los electrones son compartidos en forma desigual y el enlace se llama covalente polar (polar porque la molécula tiene un polo eléctrico positivo y otro negativo, y covalente porque los átomos comparten los electrones, aunque sea en forma desigual). Estas sustancias no conducen la electricidad, ni tienen brillo, ductilidad o maleabilidad.
-Enlace iónico: cuando una molécula de una sustancia contiene átomos de
metales y no metales, los electrones son atraídos con más fuerza por los no metales, que se transforman en iones con carga negativa y los metales, a su vez, se convierten en iones con carga positiva. Entonces, los iones de diferente signo se atraen electrostáticamente, formando enlaces iónicos. Las sustancias iónicas conducen la electricidad cuando están en estado líquido o en disoluciones acuosas, pero no en estado cristalino, porque los iones individuales son demasiado grandes para moverse libremente a través del cristal.
En conclusión: cuando los electrones son compartidos simétricamente, el
enlace puede ser metálico o covalente apolar; si son compartidos asimétricamente, el enlace es covalente polar; la transferencia de electrones proporciona enlace iónico.
Por otro lado, la metalurgia extractiva es la parte de la metalurgia
que estudia los métodos químicos necesarios para tratar una mena mineral o un material que se va a reciclar de tal forma que se pueda obtener, a partir de cualquiera de ellos, el metal, más o menos puro, o alguno de sus compuestos. Es decir, estudia la tecnología de obtención de los metales de los minerales y la recuperación y reciclado de chatarras y residuos metalíferos aplicando recursos científicos de la química y la química-física principalmente. En el caso de que el metal se presente en combinación química poco estable (enlace químico débil), el método a seguir es: preparación de las materias primas para facilitar la extracción del metal, extracción propiamente dicha del metal obtenido en estado bruto carente de la composición y forma requeridas para su comercialización, y afino del metal bruto y conformado del metal fino según especificación comercial. Pero si el metal se presenta en el mineral en combinación química muy estable (enlace químico fuerte), la estrategia operativa es diferente ya que tras la preparación del mineral, se extrae y purifica el compuesto en el que se halla el metal y posteriormente se descompone a metal fino comercial.
Aquí se ve la relación entre el enlace químico y la metalurgia extractiva,
puesto que según la estabilidad y la fuerza del enlace en que se presente el metal objeto de la extracción serán necesarias unas operaciones u otras, y se observa además que cuanto más fuerte sea el enlace químico del metal en el compuesto en el que se presente en el mineral se complica y por tanto se encarece el proceso de obtención del metal del mineral, puesto que son necesarias más operaciones metalúrgicas ya que es más difícil separar el metal.