Conflictos muhiculturales de la poro pensar Y justamente en nuestro tiempo la norma de consumo es ci lugar globalización. de la construcción doméstica de la con- ciencia industrializado (Adorno). La GARCIA CANCLINI, Néstor. <1995): compilación de articulas del nuevo tra- México. Grijalbo. bajo presentado por García Canclini aborda precisamente el reto de com- lo largo de su trayectoria académi- prender la nueva redefinición de lo pú- A ca, Néstor García Canclini ha de- mostrado como los cambios en las for- blico y el proceso de determinación ne- gociada de la identidad por las clases mas actuales de consumo alteran los populares. En este sentido, merece espe- posibilidades y expresiones del ser ciu- cial interés el lúcido epígrafe dedicado dadano en la posmodernidad. al melodrama y la (pos>política como vi- deojuego o espectáculo morienista. Par- En su ultimo libro, el proyecto de análisis te de los planteamientos de este análisis iniciado con Las culturas populares en el de la político y la comunicación, que capitalismo y más recientemente culmi- tantos estudios ha suscitado en el campo nado con Culturas híbridas adquiere as- académico a raíz del ejemplo de diver- pectos de resonancia cultural de intere- sos casos poradigmáticos (Fernando Co- santes consecuencias paro lo llar, Berlusconi, Fujimori, Menem, etc...) comprensión teórica de las comunicacio- y que ya tratara sucintamente en otros nes en el nuevo milenio. Estas configuran ocasiones, de nuevo es desarrollado por el sentido de las nuevas redes transna- Canclini incidiendo sobre aspectos sus- cionales organizando los símbolos de lo tantivos de la obra de Martín Barbero multiculturalidad alrededor de las gran- sobre el sentido histórico de identidad des nelworks comerciales yel sentimiento en las culturas populares. de pertenencia. El valor simbólico de consumir “lo nuestro”, sostenido por una El núcleo sin embargo de esta obra es racionalidad económica voraz, desplazo la recopilación de artículos en torno al así todo indicio de necesidades por lo problema de lo globalizoción. Un asun- magia seductora del deseo. Lo propio y to complejo y múltiplemente contradicto- aleno se desdibujan en la era de la glo- rio respecto a las definiciones conven- balización. Pues lo propio reduce su ám- cionales de la realidad social que han bito de percepción, restringe ci código dado yo lugar al uso de conceptos co- de lo social. El tribalismo del que habla mo economía-mundo,ai hablar de la Moffesoli es un regreso al territorio. cultura glocolizada (“Glocalizej, esto es, las ciudades sin mapa o los subur- Por ello eí estudio de los nuevos espa- bios posnacionoles. cias ciudadanos (grandes superficies comerciales, zonas residenciales, con- Las continuos transacciones entre lo pú- centración de ocio, disgregoción territo- blica y lo privado (véase a Flichy) son rial y localización del trabajo, etc....) aquí objeto de análisis pormenorizado adquiere en nuestro tiempo especial re- con el fin de comprender los fenómenos levancia sociológica. multicuiturales solapadas bojo el apa- 202
rente manto de la americanización de
c!onalidad interpretativa y comunicativa los espectadores. García Canclini de- de una sociedad”. Comprenderlo es el muestra lo relativa indeterminación de primer paso para poder transformarlo. esta nueva complejidad dialéctica. Ni la (F.Sierra) industria cultural alieno o uniformo (co- mo comenta Schiller ) ni la multicultura- lidad emancipo universolmente gracias a las tecnologías de la información (co- Crítica de lo comunicación mo apunta Negroponte>. SEEZ, tucien. 1995), Buenos Aires. El nuevo espectador multimedia es un ti- Amorrortu Editores, pode público híbrido, hipertextual y polivalente. Es un espectador alienado par el “autismo”, pero liberado en parte L ;~9ut po tran ariedad del objeto de las restricciones del espacio/tiempo marginal de interés por parte de las cien- de la historia y lo realidad. Tenemos cias de la información, pese o estar si- por tanto un receptor/ciudadano/con- tuado en el núcleo de las transformacio- sumidor “glocalizado”, que deambulo nes epistemológicos que experimento el por el ciberespacia en busca de deseos conjunto del conocimiento y, en especial, realizables, y vendibles. La heteroglosia las ciencias sociales. El celebre trabajo bojtiniona se convierte aquí en hetero- de Lucien Sfez es quizás de las pocas doxia. Por supuesto, se trata de una he- obras visionarias, que aborda el conjun- terodoxia comunicativa variable y com- to de transformaciones sistémicas de ca- placiente, nada critico. Ahora bien, este rácter estructural en el umbral del vago e cambia del receptor ilustrada, del racio- difuso camino de las incertidumbres. cinante y distinguido público, desplaza- do par el hamo faber, muestra signos Desde una mirada profundamente criti- alentadores de esperanza. Como subra- ca, culturalista y filosófica, Sfez elaboro ya Canclini en el libro, esto rearticulo- un agudo análisis sobre las rupturas in- ción entre lo público y lo privado pone formacionales que, en el ámbito del so- en evtdencia la necesidad de refundo- y u~uríuísriiu en os uííererit¿s campos ción de un nuevo concepto de ciudada- de los social, ha introducido el concepto nía mas pegada al territorio sin dejar heurístico de información. A través de de ser universalista ‘las identidades - un amplio recorrido por la cibernética modernas eran territoriales y casi siem- de segundo generación (Von Foerster), pre monolinguísticas/las identidades los teorías sobre la autoarganización posmodernas son transterritoriales y biológica (Maturana y Varela), las estu- multilinguisticas”-, esta es, la ciudad y dios culturales, lo acción comunicativa las industrias culturales no solo son ob- (Hobermas) y la inteligencia artificial jetas instrumentales de extrañamiento (Simon y Newell), entre otros muchos social, sino también lugares íntimos de planteamientos, el autor de Critique de identidad publica en el que se imagina, la decisión Vislumbro los retos de la pa- se suena y se narro las posibilidades radoja camunicaliva en el tiempo de las del porvenir como futuro “nuestro”. “El lógicas babélicas y multiculturales de lo consumo construye gran parte d0 la ra- social como o “instituido y permaríen te-