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INDICE
1. INTRODUCCIÓN
2. LAS DOBLEMENTE CONDENADAS
3. LA MUJER OLA
4. LA MUJER BESTIA
5. LA VAMPIRESA
6. LAS MALAS SOMETIDAS
7. CONCLUSIONES
A través del siguiente ensayo pretendo analizar cómo es que la imagen de la mujer, a
través de la historia de la representación femenina, se ha convertido en un estereotipo1
que la coloca en un rol condenado por su cuerpo y sus deseos naturales. La indagación
viene a propósito de mi investigación de tesis para el posgrado en Artes Visuales, dónde
2
analizo desde la escultura, el fenómeno de la agalmatofilia y su sobrevenir en el
fetichismo por las muñecas.
Es por esta razón, la verdad de esta investigación, revisar la razón más fuerte, el deseo
más anhelado, el del hombre o el de la mujer, o ¿es el mismo acaso? Pero ¿Por qué en
un lado ha intentado ser borrado y reprimido?
Doble discurso que camina y se suscribe en la historia del arte, compone la visión
contemporánea de la mujer objeto. Si la mujer es fatal, si es una malvada y su poder de
seducción pone al hombre en una situación vulnerable, ¿No es mejor tomarla como un
juguete? De esta forma acercarse falsamente a ella.
Pero tomemos en cuenta que una muñeca es solo la representación de la mujer, doble y
triplemente falaz, porque es la representación arquetípica de lo femenino. Por ello tendría
prudencia redefinir a la mujer desde el fenómeno de lo sensorial, en un lenguaje
1
estereotipo.: 1. m. Imagen o idea aceptada comúnmente por un grupo o sociedad con carácter inmutable. (diccionario de la real
academia española XXII edición)
2
(del griego agalma ‘estatua’, y filia = amor) es la atracción sexual por estatuas, también llamado pigmaleonismo o galateismo,
haciendo referencia al mito griegode Pigmalión y Galatea. Dicha atracción puede incluir el deseo de contacto sexual real, tener una
fantasía sexual sobre encuentros con la cosa inanimada, el disfrute de observar estatuas teniendo sexo, el placer sexual obtenido
por la idea de ser transformado en estatua ó transformar a otrapersona en estatua para gozar de ella. Según una investigación
publicada en la revistaThe Scientist, la agalmatofilia es una clase de parafilia extremadamente habitual en los países del norte de
Europa.
antropológico, del ser humano que es ella y su experiencia sensorial en el mundo, sus
comportamientos de acuerdo a los objetos y el contexto social donde se desenvuelve.
Cuando pensamos en una de las máximas obras escultóricas del barroco realizada por
Bernini: El éxtasis de Santa Teresa, la reflexión es
más que mental, el éxtasis puede ser alcanzado
bajo el espectro de la sublimación del alma a
través de los sentidos, la experimentación con la
realidad es por medio de la experiencia, de la
existencia, la cual no es sin las sensaciones del
cuerpo.
Lilith llega a la vida de Adán, pero la pareja fracasó porque la mujer no quería someterse
al hombre. Lilith no quería fornicar debajo de Adán, sino encima, reclamado justicia por
el hecho de que ambos estaban hechos de polvo, por tanto eran iguales, así se negó al
dominio masculino. Por esta actitud rebelde, Dios condenó a Lilith y buscó una nueva
esposa que la reemplazara: Eva.
Eva María
Pensando que Eva fue la culpable de hacer caer al hombre en la trampa del lívido.
Platón nos habla en el banquete de la insensatez del cuerpo (diálogo Fedón), citando a
Lilith, la primera esposa de Adán, una mujer que poseía una larga y hermosa cabellera,
una mujer insubordinada, rebelde, prisionera de su cuerpo y los placeres que este
contiene.
María, al ser la figura femenina idealizada según el cristianismo, es una mujer
desexualizada, no cae en el pecado para poder ser madre, cumple el anatema hacia todo
goce de la carne.
Las mujeres “decentes” solo buscan tener relaciones sexuales para poder embarazarse o
para complacer al hombre, pero no gozan del sexo, y por lo mismo, por el segundo
aspecto, preferirían ser relevadas por otra mujer que satisfaga a su hombre.
Esta esposa monja, encargada de la casa, cuidada como una princesa de cristal,
inmaculada y frágil, debía tener las características de una muñeca de porcelana o de una
mujer enferma, sin vigor, la fortaleza y valor eran características masculinas, y si la mujer
las poseía, no era bien vista. Era mejor que conservaran las virtudes femeninas que
Pigmalión encontró en su obra: Tierna, débil, compasiva, tímida y coqueta Galatea”3.
La literatura también traería nuevas figuras femeninas que trasgredían estos códigos
matrimoniales y del orden social, novelas como Madame Bovary, Ana Karenina, Casa de
muñecas, La regenta, narraban las historias de mujeres que ponían en duda el arquetipo
femenino, y que además de amar a los hombres también los deseaban, no eran
espectadoras del deseo, sino protagonistas de escenas carnales y de adulterio.
Este amor femenino, cargado de erotismo, deseo, hace surgir la idea del amor femenino
como la pérdida irreparable de la inocencia, y a partir del simbolismo se concibe a la
mujer fatal. La mujer fatal surge con Rossetti y los prerrafaelistas, ya en el Manifiesto
simbolista, para Jean Moreas se dividen los dos mundos en inferior y superior:
3
P. Rousell, Systeme Physique et moral de la femme ou Tableau philosophique de la constitution de l´état organique, du
tempérament, des, moeurs et des fontioncs propes au sexe, París, 1775, (Citado por P Darmon, op cit., pág 175. Y citado por Erika
Bornay en “Las hijas de Lilith”, pag 69.
Para los simbolistas la mujer es la encarnación de la dominación del espíritu por el
cuerpo.
3. LA MUJER OLA
Una mujer es como una Ola, con fuerza, natural y arrastradora, la fuerza del agua, y la
fecundidad, la humedad.
Lilith embruja el corazón y la cabeza del hombre, lo hace dichoso por medio del placer,
pero también lo desgarra. Así se nos plantea un binomio de roles para la existencia
humana, por un lado el hombre como esclavo y víctima del otro personaje, quien es la
mujer, sexuada y castigadora. Este doble juego de la mujer y la muerte nos permite
remitirnos a Eros y Tanatos.
En un momento donde se busca la clase, el abolengo, el desarrollo de la perfección
intelectual y moral, el cuerpo animalizaba la visión humana.
4. LA MUJER BESTIA
Según Freud en "El malestar de la cultura”, las mujeres no están mentalmente dotadas
para sublimar sus instintos, a diferencia del hombre, ella es más sensorial, vive a partir de
su destino, que es la maternidad, lo cual nos hace pensar en una hembra, más que en
una mujer.
La sirena es una figura mitológica que hasta nuestros días está vigente en la imaginería
popular internacionalmente, Disney nos trajo la sirenita en los noventa, y su versión nos
muestra una sirena bondadosa pero rebelde, su idea era tener piernas y enamorarse del
príncipe Erick, por lo cual tiene que donar su principal atractivo, la voz, para seducirlo por
medio de su belleza y encanto.
4
Cuenta la mitología griega que Pandora fue una escultura perfecta, un castigo para Prometeo por haber robado del fuego de Zeús, las
diosas la dotaron de maldad por medio de belleza, encanto y poderes seductores, era una escultura de Hefeso. Al estar lista, Zeús la
dotó de vida y la envío a casa del ladrón quien al conocerla se enamoró y la desposó prontamente. Pandora tenía Consigo una caja,
con las desgracias y las virtudes de la vida, a pesar de ser advertida que debía cuidarla y mantenerla cerrada, su curiosidad pudo más
y al abrirla, ocasionó que todos los males se esparcieran por la tierra como virus que flotan en el aire, los bienes subieron al olympo y
lo único que pudo conservarse en la caja fue la Esperanza.
5
En esta imagen Munch realiza su versión de la célebre obra de Jaques Louis David, pero le da un sentido muy diferente. En el cuadro
original, el pintor neoclásico refiere un suceso real, teniendo como marco la revolución francesa, el 13 de julio de 1793 el periodista
Jean Paul Marat es asesinado en la ducha por una cruenta puñalada de Charlotte Corday, quien fue una mujer de la fracción política
opositora que lo cita con engaños y lo asesina convencida de que era culpable de grandes matanzas de inocentes, el pintor por ser
amigo de Marat al representarlo, lo exime de pecado y trastoca la verdadera historia que sería revelada décadas después.
En la obra de Munch el drama es en una habitación y las paredes presentan huellas de sangre, retoma la escena con una connotación
intimista y cotidiana, extrapolando el sentido histórico y político de la obra de David a un conflicto de lo personal y las relaciones
hombre-mujer.
Las sirenas provienen de la mitología griega, por medio de la voz seducen a los
marineros. A partir de la serpiente y las escamas de reptil, la mujer se convierte en pez, y
sus piernas forman una extremidad única a manera de serpiente. En realidad, la imagen
de la sirena surge de la figura de la harpía6, una raptora de almas.
5. LA VAMPIRESA
Lorena Velazquez en “santo contra las mujeres noble y que hoy, su lugar en la historia es el de una de
vampiro”, Director: Alfonso Corona Blake, escritor:
Alfonso Corona Blake . México 1962 las más grandes figuras del vampirismo y los mitos
terroríficos, pues más allá de que fuera o no una asesina serial, la parafernalia de la
historia, y el tinte de erotismo y maldad que la componen, es una de la grandes leyendas
que remiten a Lilith de nuevo, porque las vampiresas son personajes transgresores de la
moral convencional.
6
(Cf. harpía, del lat. harpyia, y este del gr. ῞Αρπυια).: f. Ave fabulosa, con rostro de mujer y cuerpo de ave de rapiña.(Diccionario de la
lengua española - XXII edición)
La protagonista altera no sólo el pudor cristiano, sino los convencionalismos de la doble
moral en que vivía la sociedad inglesa que la vio nacer. En Inglaterra la homosexualidad
estaba considerada un acto delictivo, sobre todo el lesbianismo, y la vampiresa vive su
amor con otra mujer sin ningún pudor ni empacho moral. “Carmilla” fue la obra inspiradora
para Bram Stoker, y es uno de los referentes que inspira al Bram Stoker para crear la
historia de “Drácula”.
En Enamorada, María Félix encarna a Beatriz, hija de un cacique, con buena posición y
hermosa, además es una mujer que viste con falda larga, rebozo y trenzas, católica,
asiste a la iglesia y se conmueve ante el altar. Pero Beatriz es una mujer de carácter
fuerte, su voz no es dulce y su temperamento no es sumiso, no le impactan las serenatas,
cartas o cumplidos que le haga su pretendiente José Juan (Pedro Armendáriz), ella lo
cachetea, lo burla y humilla cuantas veces sea necesario para hacerle entender que ella
es capaz de elegir a su pareja y de rechazarlo aún cuando él sea un importante general
de la revolución.
Para José Juan conquistar a Beatriz es un reto, es como ganar una batalla en la
Revolución. Le gusta precisamente por ser una mujer brava, de carácter fuerte, que le
planta cara a los hombres y les da de bofetadas, pero... es preciso domarla (como a las
yeguas salvajes).7
Y en realidad la reflexión que me lleva a la historia de esta película, es poner en
evidencia como en México, los roles de las mujeres también están condenados, y desde
el planteamiento del guión, la narración nos lleva como espectadores a un momento
donde realmente le reclamamos a Beatriz por su actitud grosera y pedante para con el
pobrecito José Juan.
Por ello, el desenlace de la historia, resulta complaciente, cuando ella termina cediendo,
venciendo su orgullo y vanidad, prefiriendo al macho mexicano, salvaje y rebelde, por
sobre su prometido el gringo, amoroso, adinerado y bonachón, pero desangelado.
Beatriz es finalmente una figura de gran relevancia para entender la concepción del
sujeto femenino planteado en el cine mexicano, que tienen que ver con el ideal occidental
7
Bartra Eli, El género en el cine de la revolución mexicana, Revista online UAM, octubre 1999:
http://www.uam.mx/difusion/revista/oct99/bartra.html
8
http://www.hispanetjournal.com/Mitosfemeninos.pdf PAG 6
de la mujer, y que ilustra algunos conceptos que he referido anteriormente en este
ensayo, como el hecho de que una mujer fuerte, libre y rebelde pierde feminidad.
7. CONCLUSIONES
Solo indagando al pasado es posible encontrar las claves de históricas que nos
permiten comprender los porqués de la condena en el deseo femenino.
Luego de este breve recuento iconográfico, solo queda la invitación a un acto reflexivo
para los lectores(as), para pensar en Lilith, en las vampiras, las mujeres Ola y las
mujeres-bestia, en cómo la historia configura el pensamiento más allá de nuestra
verdadera comprensión del mundo luego de la experiencia vivencial al interactuar y
conocer a nuestros semejantes.
En pleno siglo XXI, es necesario replantearnos con justicia esta condena para la mujer,
por parte de los hombres y mujeres que coexistimos en sociedades diversas, porque en
muchos casos, somos las mujeres las primeras que condenamos a nuestras hijas,
hermanas y madres; y somos nosotras las que educamos a nuestros hijos varones y
mujeres. Por ello el reto será que la igualdad de género respete la diversidad también en
la concepción de cómo vivir y ejercer derechos, y así conducir a la integración del sujeto
femenino en la sociedad contemporánea, sin estar condenada por antonomasia a un rol
determinado para poder irse al cielo.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS