Professional Documents
Culture Documents
Objetivo:
Temas:
2.- Las leyes y las costumbres.- Dentro de un derecho consuetudinario, las leyes
se forjan con el pasar de los acontecimientos que las tradiciones van perpetuando, en
el caso de las leyes mexikah eran aquellas que la misma tradición había venido
heredando desde hacía ya algunos siglos atrás, pues eran manifestación de sus
propias costumbres, es por tal motivo que nos resulta tan importante rescatar los usos
costumbres nahuas y sus tradiciones antiguas para entender sus leyes, pues para
ellos la costumbre se fue adoptando como la ley, que debía ser fielmente acatada y
los guerreros se encargaban de custodiarla.
3.- La formación guerrera en los kalpultin. Cada kalpulli debía tener su propio
telpochkalli, pues era lo que les daba las bases de entrenamiento físico y rendimiento
académico que incorporaba a los mazehualtin y piltin en el engranaje del Estado, y de
hecho, lo que les abría la puerta para poder participar en las decisiones de gobierno.
Cuando llegaron los españoles se dieron cuenta de que los telpochkalli eran colegios
militares en donde se preparaba a los jóvenes para la guerra, pues no debemos
olvidar que Tenochtitlan se caracterizaba por ser una ciudad de guerreros que
luchaban por conservar sus propias leyes y costumbres.
4.- El telpochkalli: semillero del cuerpo militar. Sin duda el colegio militar era
una de las instituciones educativas más importantes, pues en ella se enseñaban las
bases de la formación. Era indispensable, no sólo para la educación, sino para
mantener una defensa de la ciudad en particular y de la Confederación de Anahuak en
general. Lo más importante de dicha institución era la de proveer al Estado una
cantera de guerreros que forjaran una nación unida, disciplinada y poderosa, pues su
gran misión de conservar las leyes toltekah era una tarea ardua que solo los más
aptos y preparados en las ciencias militares podían realizar. Pues por ser el
telpochkalli una institución de educación militar en un pueblo eminentemente
guerrero era trascendental que sus dirigentes tuvieran experiencia en la carrera de las
armas y no sólo eso, ya que la imagen del guerrero ejemplar era aquel que se había
vencido a si mismo en su propia importancia personal y en sus debilidades de la
carne. El guerrero era un ejemplo de honor y fidelidad hacia su raza.
5.- Poetas guerreros. La poesía es la manifestación más sublime de la palabra, es
una expresión del logos que nos transporta a la interpretación del pensamiento
autóctono mexihka-tolteka. De entre los más afamados poetas del linaje azteka-
tolteka-akolhua (el más refinado en cuanto a logros científicos, artísticos, políticos y
guerreros, que marcaron distintas épocas entre los de su raza roja). Recordaremos al
poeta guerrero Nezahualkoyotl a través de su poesía, para desentrañar el significado
de la guerra desde su propio pensamiento, para esclarecer su importancia para el
desarrollo personal que iba de la mano con la ocupación de cargos al frente del Estado
y decisiones de gobierno.
Dice Sahagún que cuando el niño entraba en el telpochkalli, sus padres debían
encomendarle a los guerreros su educación:
Por lo tanto os le damos por vuestro hijo y os le encargamos porque tenéis cargo de criar a los
muchachos y mancebos, mostrándoles las costumbres, para que sean hombres valientes y para que
sirvan a Tlaltekuhtli y a Tonatiuh, que son la tierra y el sol (y para que sirvan) en la pelea, por eso
ofrecémosle al señor dios todopoderoso Yaotl o por otro nombre Tezkatlipoka 3
Esta crónica española nos habla de que todo aquel que ingresaba en el telpochkalli
era ofrecido a Tezkatlipoka-Yaotl. Las investigaciones del siglo XXI descartan la visión
castellana de un panteón de dioses tenochkah, por el contrario, los nuevos
descubrimientos conllevan el entendimiento de la tradición oral nahua y su aval en
las fuentes indígenas de los informantes de los frailes españoles que intentaron
recuperar la cultura nativa. Hoy con ayuda de la psicología y el psicoanálisis,
descubrimos en la ciencia de Tezkatlipoka (el humear del espejo), la ciencia de la
mente y el estudio del inconciente, el objetivo de encontrar la información que se
guarda en lo más profundo de la memoria y que se esclarece a través del
alumbramiento de la conciencia a través de la palabra. Para los tenochkah el guerrero
del sol, el guerrero de luz, era un hombre virtuoso que sabía como fluir con la fuerza
luminosa del centro del universo y en contemplación con el sol de soles iluminaba su
memoria para florecer en su propio entendimiento. Yaotl se traduce como enemigo,
aquello que impide el libre fluir (según los toltekah es la propia importancia personal).
Para los mexihka el espejo de Tezkatlipoka es el culto al reflejo personal (el
narcisismo). En la ciencia de Tezkatlipoka Nekok Yaotl es el recuerdo que se esconde
en la profundidad de la memoria y al no ser esclarecido atormenta y traumatiza
obstruyendo la libertad. En este contexto el joven debía vencer a Yaotl para ser un
genuino guerrero del sol, un guerrero de luz, de virtud, a la más antigua usanza de la
tradición atlante-tolteka. La metáfora náhuatl de Tezkatlipoka aparece representada
ideográficamente en los códices como una espina y un espejo horadando un cráneo,
que se traduce como el alumbramiento del inconciente, el entendimiento de la
memoria, del recuerdo resignificado que edifica la conciencia permitiendo de nuevo
la libertad y la fluidez, propiciando la virtud.
El telpochkalli era uno de los centros para la educación mexica, cuyo objetivo primordial era
formar excelentes guerreros que se distinguieran por su carácter, por su cortesía y por el
conocimiento de las formas rituales.
Para adiestrar sus cuerpos se les sometía a trabajos rigurosos y a los deberes ordinarios del
culto. El uso de las armas era uno de los aspectos más destacados. La educación estaba bajo la
dirección especializada de hombres expertos, telpochtlahtokeh y teachkauhtin. No solamente
tenían que atender a la educación física de sus discípulos, sino también el desarrollo intelectual.
El maestro era el ejemplo del ideal que el alumno tenía como meta. El mentor personificaba el
valor, la destreza, la experiencia, la cultura y el saber.
Los educandos se llamaban telpochtli, recibían una educación basada en el respeto a los
mayores: obediencia, disciplina, urbanidad, conocimiento de las tradiciones y costumbres, pero su
educación tenía como base los ejercicios de tácticas y estrategia militar.
El adiestramiento en las artes de la guerra empezaba a los quince años para fortalecerlos y
aumentar su resistencia. (...) Sí dominaban los ejercicios guerreros y practicaban buenas
costumbres, podían ser designados como instructores recibiendo el grado de tiachkauh que quiere
decir: animoso, intrépido, valiente.
En cuanto (el niño) entró al telpochkalli, luego le encomiendan el barrer, el encender fuego; y luego
le hacen empezar la penitencia.5
Una forma mucho más adecuada, me parece, para referirse al tra-bajo espiritual.
La educación más conveniente es aquella que consiste en formar el cuerpo mediante la
gimnástica y el alma por medio de la música, así el niño podrá mantener un cuerpo sano que lleva
consigo una mente sana y a través de la música identificará lo bello de lo feo, a la postre la virtud
del vicio y finalmente el bien del mal6
Entonces se canta en la noche donde vienen con los demás, donde bailan con los demás. Se
dice es tomado el baile y el canto con los demás”7
Y ya jovencillo, entonces lo llevan al bosque, lo hacen cargar a la espalda los llamados troncos
cilíndricos, quizá uno solo, quizá entonces dos8
Desde temprana edad los jóvenes guerreros acudían a campañas militares con el
objetivo de aprender y poner en práctica el arte de la guerra, ya que una forma de
ascender de rango dentro del sistema del telpochkalli era obteniendo cautivos en el
campo de batalla, pero debía cautivarlos vivos, no podía darles muerte, por tal motivo
el joven debía aprender a controlar a su oponente sin causarle daños grabes, a través
de la aplicación del arte guerrero, que se vincula directamente, con la conquista que
el guerrero hace en favor de la luz del conocimiento y del poder del sol, literalmente
educaba a su contraparte, lo cautivaba, lo conquistaba.
•
Tiachcauh.- Joven educado, prudente, apto en el lenguaje y de corazón
piadoso.
•
Telpochtlahto.- El joven que habla por los demás, los dirige, los juzga y los
sentencia.
•
Oquichtli.- El joven que hacía cuatro cautivos podía especializar su carrera
militar para obtener rangos de tlakatekatl, tepochkakcatl y kuauhtlahto.
También podía obtener el rango de achkauhtli que es lo equivalente a un
alguacil.
Cabe mencionar que de la misma forma que existió una casa para los jóvenes
guerreros, también existió el ichpochkalli que era el templo en donde las mujeres
aprendían las labores propias para ellas, principalmente acerca de la crianza de los
niños, para su cuidado antes y después del embarazo, momento crucial en la
formación del ser, para dar un alumbramiento sano y una educación sustentada en los
valores de la tradición atlante-tolteka, hasta su ingreso al templo de las jóvenes
guerreras.
Desde pequeños, los niños aprendían las tradiciones, o lo que es lo mismo, las
normas jurídicas mexihka-tolteka, de esta forma todos conocían desde muy pequeños
sus derechos y obligaciones.
La educación consistía en el arte de criar y educar a los hombres, conferidas por los sabios o
filósofos, tlamatinimeh, los ancianos y autoridades, huehuetehkeh, y los mayores achkahuau,
transmitiendo a los demás la tlakahuapahualiztli, crianza y educación de los hombres, consistente
en la sabiduría de la tradición, ixtlamachilizli, para el desarrollo armónico y progresivo del Estado.
(...) El derecho tenia la encomienda de disciplinar los espíritus en beneficio común, se transformó
en enseñanza por su cometido de impulsar al hombre hacia el progreso y la libertad9
Ninguna cosa más me ha admirado, más digna de alabanza, que el cuidado y orden que en criar
a sus hijos tenían los mexicanos. Porque entendiendo bien que en la crianza e institución de la
niñez y juventud consiste toda la buena esperanza de la república, dieron en aportar a sus hijos de
regalo y libertad que son dos partes de aquella edad y en ocuparlos en ejercicios provechosos y
honestos12
Esta última nota confirma una vez más que no es verdad que occidente haya
civilizado al Anahuak, más bien me parece que lo que efectivamente nos trajeron los
invasores, fue el subdesarrollo, el hecho de que la educación fuese accesible y
obligatoria para todos, en un tiempo en que la sociedad europea trataba a los niños
casi como animales, habla de una sociedad mexihka mucho más preocupada por la
formación y la salud de los niños que la España Católica del siglo XVI y talvez podría
pensar que del México de inicios del siglo XXI.
Para concluir acerca de su valor y guerras que hizo. El mato doce reyes, con
el rey Maxtla, monarca tirano de esta tierra, por sus propias manos. Hallose
personalmente en treinta y tantas batallas sobre diversas partes, y jamás fue
vencido ni herido en ninguna parte de su cuerpo con ser el primero en batallas;
era ligerísimo y animoso sobremanera; tenía grandes ardides en las guerras.
Sujetó cuarenta y cuatro reinos y provincias.15
Así mismo fue muy misericordioso y caritativo para con los pobres, viejos,
viudas y enfermos, que todas sus rentas las gastaba en darles de comer y
sustentarlos y no se había de sentar a comer hasta que los pobres hubiesen
comido y los años estériles y de hambre, mandaba abrir sus graneros para todos
sus vasallos, especialmente los que tenían necesidad y era muy gratísimo y
pagaba muy bien a los que le servían, así en las guerras como en otras cosas,
haciéndoles grandes mercedes conforme a la calidad de sus personas. 17
El segundo tiene que ver con la muerte en la guerra, la muerte ideal desde la
perspectiva Tenochka-akolhua del pensamiento militar de Nezahualkoyotl .
ESMERALDAS, TURQUESAS.
“Esmeraldas
turquesas,
son tu greda y tu pluma
¡oh por quien todo vive!
Se sienten felices
los príncipes,
con florida muerte a filo de obsidiana,
con la muerte en la guerra”2.
Conclusiones.
Notas
1
Espindola José Luís “La Re-evolución Mexihka-Tolteka”, Tesis, Universidad Hipanomexicana, México 2005.
2
Diaz Infante Fernando “La educación de los Mexicas” Ed. Panorama. Mex 1992.
3
Sahagún Fray Bernardino De “Historia General de las Cosas de la Nueva Españ. Ed Porrua,. México 1956. Tomo I Cap
IV p.289
4
Fuentes Raul, “Cultura Castrense” SDN, México, 1999. pp.67-70.
5
Austin Lopez “Educación Mexica, Textos Sahaguntinos” UNAM Mex. 1994 pp.29
6
Platón “La República” Ed. Porrua, Col. Sepan Cuantos # 13 México 1996
7
Ibid Sahagun pp.29
8
Ibid.
9
RomeroVargas Yturbide “Organización política de los Pueblos de Anahuac” Ed. Luciérnaga , México, 1957.
pp.246
10
Ibid pp.248.
11
Ibid Austín Lopez pp.35
12
León Portilla, “ La Filosofía Nahuatl” UNAM pp 220
13
Soustelle Jacques “La vida cotidiana de los aztecas” FCE Mex 1955.
14
Martinez José Luís “Nezahualcoyotl” Rev. Arqueología Mexicana #58 INAH México 2002 pp.20-21.
15
Alva Ixtlixochitl Fernando, Obras Históricas, T1. UNAM, México, 1975 pp. 446.
16
Ibid pp. 447.
17
Ibid.
Bibliografía
Alva Ixtlixochitl Fernando, Obras Históricas, T1. UNAM, México 1963.
Díaz Infante Fernando La educación de los Mexicas Ed. Panorama. Mexico 1992.
Martinez José Luís Nezahualcoyotl Rev. Arqueología Mexicana #58 INAH México 2002.