You are on page 1of 25

CONCEPTOS GENERALES DE ECOCARDIOGRAFIA

Dra. Hilda R. Peralta Rosado

La ecocardiografía constituye una de las técnicas diagnósticas más útiles de la


medicina moderna y es la modalidad de imagen cardiaca más empleada en
todo el mundo para el estudio de la anatomía y funcionamiento del corazón, los
grandes vasos y el flujo sanguíneo dentro de ellos.
Se le considera una técnica no invasiva, segura, reproducible y de bajo costo,
que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia ( > 20,000 ciclos/seg [Hertz]), para
formar las imágenes del corazón.
El haz de ultrasonido atraviesa la interfase entre tejidos de diferentes
densidades y parte de esta energía es reflejada y parte es transmitida. Las
ondas reflejadas son detectadas por una sonda o transductor que proporciona
una imagen de la estructura en estudio. (fig 1,2 y3).

Fig1.- Diagrama que representa un haz de ultrasonido

Fig 2.- Cuando el sonido choca con una interfase, una parte se refleja y otra se transmite
Fig 3 y 3A.- Las ondas reflejadas son detectadas por una sonda o transductor que proporciona una
imagen de la estructura en estudio.

Se reconoce que el empleo del ultrasonido en medicina empezó en el decenio


de 1950 y sus aplicaciones se fueron ampliando, incluyendo diversos órganos y
especialidades.

Desde su introducción hasta mediados de los 70’s la mayoría de los estudios


ecocardiográficos, emplearon una técnica llamada modo-M en la cual el haz de
ultrasonido colocado manualmente sobre la estructura cardiaca genera un
registro gráfico de su posición y movimiento.
Los registros en modo-M permiten medir las dimensiones cardíacas, posición,
grosor y desplazamiento de las estructuras cardíacas y relacionarlas con el
tiempo; sin embargo tiene la limitante de que el haz de ultrasonido debe incidir
en forma perpendicular a la estructura en estudio de lo contrario se podrían
caer en errores de medición. Otra limitante, es que no permite el estudio de las
estructuras laterales las cuales sólo se obtendrían mediante un barrido, por lo
que actualmente se considera que su uso es limitado pero no menos
importante. (Fig.4)
Septum
interventricular

Cavidad
ventricular
izquierda

Pared posterior

Fig. 4.- Registro en modo-M del ventrículo izquierdo.

Foto1.- Registro en modo-M en donde la parte inferior de la foto corresponde al VI y la parte superior al
VD. VI= ventrículo izquierdo. VD= ventrículo derecho.

La imagen bidimensional se obtiene, en que de manera secuencial se envía un


abanico de haces de ultrasonido en un área determinada y que al ser recibidas
permiten registrar en “tiempo real”, cortes tomográficos del corazón en
movimiento del sector seleccionado y relacionarlas en el tiempo (Fig.5, 6). Foto
2)
Fig.5.- Diagrama que muestra la obtención de una imagen bidimensional

Fig.6.- Diagrama que muestra el corte tomográfico del sector escaneado.

Foto 2.- Imagen en modo bidimensional del corazón en una vista paraesternal eje largo. Nótese la
dilatación del VI. VD= ventrículo derecho, VI= ventrículo izquierdo, AI = aurícula izquierda, AO = raíz
aorta, S= Septem, PP= pared posterior.

La utilidad clínica de la imagen bidimensional es enorme ya que todas las


estructuras del corazón pueden ser estudiadas y son relativamente fáciles de
obtener. Sin embargo se deben ajustar una serie de parámetros en los equipos
de ultrasonido para optimizar la imagen. Estos parámetros son: las ganancias
totales que intensifican la señal en toda el área, ganancias individuales que
pueden intensificar la señal en zonas determinadas, ganancias laterales que
mejoran la señal de las estructuras que se encuentran en las márgenes del
sector, también se puede ajustar el tamaño del sector, la profundidad a la que
se realiza la exploración, determinar la zona o zonas de enfoque. (foto 3 y 3A).

Foto 3.- Imagen bidimensional, vista paraesternal eje largo con adecuado ajuste de ganancias y
profundidad.

Foto 3 A.- Imagen bidimensional. Vista paraesternal eje largo. En este paciente será necesario realizar
ajustes de las ganancias y profundidad para obtener mejores imágenes.

Un examen ecocardiográfico utilizando registros en modo-M y bidimensional


proporciona una gran cantidad de información anatómica y funcional del
corazón, sin embargo con estos métodos no es posible estudiar el movimiento
de la sangre a través del corazón y los grandes vasos debido a que las señales
que emiten las células sanguíneas son tan débiles que no pueden ser captadas
por este tipo de registros.
En ecocardiografía, se conoce como técnica Doppler al método para detectar la
dirección y velocidad del movimiento del flujo sanguíneo dentro del corazón y el
sistema vascular.
La primera descripción del Doppler se le atribuye al científico matemático
Johann Christian Doppler quien en 1842 describió el cambio de frecuencia del
sonido al acercarse o alejarse el observador de la fuente, así como el cambio
de color de las estrellas relativo a su posición con respecto a la tierra (Fig. 7).

Fig. 7.- Un ejemplo de Doppler en la vida diaria. Cuando una fuente emisora de sonido se acerca a un
observador ( receptor ) la frecuencia de sus ondas aumenta y cuando se aleja disminuye

Adoptando este concepto al flujo sanguíneo intracardíaco, el cambio de


frecuencia Doppler es directamente proporcional a la velocidad a la que se
desplaza la sangre. Otro punto importante a considerar es que para obtener la
velocidad máxima del flujo sanguíneo se requiere que el haz de ultrasonido y el
vector del flujo sanguíneo estén alineados a 0o grados (paralelamente).
Para este propósito es necesario entender los patrones del flujo sanguíneo y
reconocer las diferencias entre los mismos.
El flujo sanguíneo normal es de tipo laminar, esto quiere decir, que es un flujo
ordenado que se desplaza en capas concéntricas con mayor velocidad al
centro y un vector de flujo paralelo a la pared del vaso. Su velocidad
generalmente no rebasa a los 1.5 m/seg en el humano (Fig.8)
Fig. 8.- Diagrama que representa el flujo laminar normal.

En contraste, el flujo turbulento es un flujo desorganizado que está presente


cuando hay alguna obstrucción y esto produce componentes transversales con
diferentes velocidades y direcciones. En el corazón el flujo turbulento siempre
es patológico, tiene una velocidad alta que supera a los 2.5m/seg. Aparece en
obstrucciones o insuficiencias valvulares y en cortocircuitos (Fig. 9).

Fig. 10.- Diagrama que representa el flujo turbulento, anormal.

Existen diferentes modalidades de Doppler integradas a los equipos de


ultrasonido.
Doppler contínuo.- El sonido se emite y se recibe continuamente, por lo que el
flujo sanguíneo se registra durante todo el trayecto por el que pasa el haz de
ultrasonido. Puede registrar velocidades tan altas como de 12m/seg. Su
principal desventaja es que no puede seleccionar un punto determinado del
corazón (Fig. 10. Foto 4 ).

Fig. 10.- Doppler contínuo. El transductor recibe y emite continuamente los datos de ultrasonido.
Foto 4.- Registro con Doppler continuo del flujo transvalvular aórtico. Notese el ligero aumento de su
velocidad (2.02m/seg). El espectro de flujo observado por encima de la línea cero corresponda a una
insuficiencia aórtica.

Doppler pulsado.- El sonido se emite en forma intermitente o por pulsos y se


recibe durante los intervalos entre los pulsos. Utiliza una “marca” (volumen
muestra) que se posiciona en el sitio de interés, obteniéndose el registro de la
velocidad de dicha región seleccionada. Tiene la desventaja de que registra
velocidades bajas, menores a 2 m/seg. Cuando se rebasa la velocidad máxima
registrable se pierde la capacidad para identificar la dirección del flujo
sanguíneo produciéndose el fenómeno de “aliasing” y que se puede corregir al
aumentar la frecuencia de repetición de pulso. (Fig. 11, foto 5).

Fig. 11.- Doppler pulsado. El transductor transmite y recibe en forma alternada los datos del volumen
muestra del ultrasonido.
Foto 5.- Registro con Doppler pulsado (DP). El volumen muestra se coloca a nivel del tracto de salida de
VI (TSVI). Las velocidades máximas obtenidas en este ejemplo fueron 1.2m/seg.

El procesado de los datos de Doppler se realiza mediante el análisis espectral.


La representación en pantalla se despliega de una manera que en sentido
vertical se registra la velocidad y en sentido horizontal el tiempo. El registro
consta además de una línea basal o línea cero que sirve para identificar el
punto de velocidad cero y la dirección del flujo sanguíneo. La dirección de la
sangre está codificada para que todo lo que se ubica por encima de la línea
cero, es lo que se acerca al transductor y por debajo se aleja del transductor
(Fig.12).

Fig. 12.- Representación esquemática de la dirección del flujo.

Doppler color.- Funciona como un Doppler pulsado, por lo tanto tiene sus
mismos principios básicos. Es la representación a color del flujo sanguíneo
sobrepuesta a la imagen bidimensional. Cuando el flujo sanguíneo a través del
corazón y los vasos sanguíneos es normal, se codifica en color rojo el flujo
sanguíneo que se acerca al transductor y en color azul el flujo que se aleja; y
cuando existe un flujo anormal, esto es un flujo turbulento, aparecen puntos de
colores entremezclados rojo, azul y verde de diferentes tonalidades y esto se
describe como mosaico de colores o tipo “confeti”. (Foto 6 y 6A).
Foto 6.- Vista apical 4 cámaras en el que el color rojo en las aurículas es el flujo de sangre que se acerca
al transductor y el azul en los ventrículos el que se aleja.

Foto 6 A.- Vista apical 4 cámaras en el que se observa flujo turbulento en la AI. Corresponde a una
insuficiencia mitral severa por ruptura de cuerda tendinosa.

Una nueva aplicación de la tecnología Doppler se el Doppler tisular, el cual


sigue los mismos principios que el Doppler pulsado. Estudia la velocidad a la
que se mueve el miocardio en sístole y en diástole por lo que puede analizar el
comportamiento del miocardio de manera segmentaria. En la práctica clínica
ayuda a diferenciar una pericarditis constrictiva de una miocardiopatía
restrictiva; se puede emplear también en la evaluación de la función ventricular
y cálculo de la presión capilar pulmonar (Foto 7 y 7A)
Foto 7.- Doppler tisular. Se obtiene la velocidad pico sistólica del miocardio en la cara anterior del VI.

Foto 7A.- Doppler tisular. Velocidad pico sistólica del miocardio en el septum del VI. Nótese que la
velocidad es menor que la de la cara anterior.

La utilidad del Doppler radica en que con esta técnica se pueden evaluar:
estenosis valvulares, insuficiencias valvulares, prótesis intracardíacas, función
diastólica, obstrucción intraventricular, cálculo de presiones, cálculo de
volúmenes, cortocircuitos intracardíacos.

En una persona de constitución promedio, la posición del corazón puede ser


definida desde su caja torácica (Fig. 13).
Fig.13.- Representación de la posición del corazón en relación con el tórax.

La mayor parte del corazón está cubierta por estructuras óseas y por los
pulmones; sin embargo el pulmón izquierdo no cubre al corazón
completamente, quedando libre por debajo del tercero, cuarto y quinto espacio
intercostal, a 2-3 cm del borde paraesternal izquierdo (Fig. 14).

Fig.14.- Representación del área del corazón que queda libre (no cubierta).

La posibilidad de visualizar al corazón desde diferentes sitios del tórax permite


su estudio en diferentes planos tomográficos con el ecocardiograma.
Los puntos del tórax que permiten el paso del haz de ultrasonido con mayor
facilidad se denominan ventanas ecocardiográficas y son las siguientes:
- Paraesternal izquierda.- Situada entre el 3º y 4º espacio intercostal izquierdo
y el borde esternal.
- Apical.- Se encuentra en la punta del corazón.
- Supraesternal.- Está en el hueco supraesternal.
-Subcostal.- Se encuentra por debajo del apéndice xifoides o por debajo del
reborde costal izquierdo.
- Para esternal derecho.- Se ubica entre el 3º y 4º espacio intercostal derecho.
Es útil en los casos de dextrocardia.
(Fig.15).
Fig. 15.- Abordaje ecocardiográfico del corazón.

Tradicionalmente en ecocardiografía se han descrito las imágenes del corazón


en relación al plano del corazón mismo y no en referencia al eje del cuerpo. Las
imágenes están basadas en tres planos ortogonales (Fig. 15 y Fig.15A).

Fig. 15.- Imagen que representa el eje del cuerpo y el eje del corazón.

Fig. 15 A.- Planos ecocardiográficos en referencia al eje del corazón.


El plano longitudinal (eje largo), corta al corazón desde la raíz de la aorta hasta
el apex del ventrículo izquierdo e incluye a las válvulas aórtica y mitral. Es un
plano que es casi perpendicular al esternón y corre aproximadamente desde el
hombro derecho hacia el riñon izquierdo. El plano transverso (eje corto), corta
al corazón a nivel de la unión atrioventricular y corre desde la línea media
clavicular izquierda hacia la cadera derecha. El plano sagital (4 cámaras), va
desde el apex a la base del corazón y es perpendicular al septum
interventricular e interauricular. Como su nombre lo dice, es un corte que
incluye a las 4 cavidades del corazón. Es paralelo al plano del esternón e
incluye el apex y el hombro derecho (Fig.15A).
Las imágenes obtenidas en el ecocardiograma bidimensional, reciben sus
nombres por el sitio desde donde fueron adquiridas y por los cortes
tomográficos que representan:
- Paraesternal eje largo
- Paraesternal eje corto
- Apical 4 y 5 cámaras
- Apical longitudinal
- Subcostal
- Supraesternal
Estos abordajes son posibles de obtener en la mayoría de los pacientes
adultos; sin embargo en los pacientes con tórax en “tonel” como resultado de
enfisema crónico, por ejemplo, es necesario manipular el transductor y realizar
la adquisición de las imágenes desde éstas mismas vistas pero modificadas.

Fig.16.- Paraesternal eje largo (longitudinal). Se observan las estructuras que se pueden registrar.
Fig. 17.- Paraesternal eje corto a nivel de los grandes vasos.

Fig. 18.- Paraesternal eje corto a nivel de los músculos papilares. Se señalan las estructuras que se
pueden observar.

Fig. 19.- Apical 4 cámaras. Se señalan las estructuras que se pueden observar.

Fig.20.- Apical 2 cámaras. Se señalan las estructuras que se pueden registrar.


Fig.21.- Subcostal. Se Señalan las estructuras que se pueden visualizar.

Para la realización del estudio, es necesario descubrir el pecho del paciente y


color tres electrodos para obtener el trazo de una derivación del
electrocardiograma. Convencionalmente se coloca al paciente en decúbito
lateral izquierdo con el brazo izquierdo por debajo de la cabeza. En algunos
centros hospitalarios el ecocardiografista que realiza el estudio se coloca detrás
del paciente empleando la mano derecha para manipular el transductor y en
otros se coloca adelante del paciente y el estudio lo realiza con la mano
izquierda. Existen situaciones especiales en los cuales el paciente no podrá
colocarse en decúbito lateral como por ejemplo, aquellos en estado crítico con
apoyo ventilatorio mecánico, que tengan fractura de cadera, etc. En estos
casos se deja al paciente en la posición adecuada para él.
El estudio se inicia con la ventana paraesternal, entre el segundo y cuarto
espacio intercostal izquierdo colocando el transductor con la marca dirigida
hacia el hombro derecho del paciente hasta que se obtenga la imagen
bidimensional paraesternal eje largo (Fig.16). En esta vista, desde la parte
superior de la pantalla hacia abajo observamos: pared anterior del ventrículo
derecho (VD), cavidad ventricular derecha, septum interventricular que se
continúa con la pared anterior de la aorta, válvula aórtica con 2 de sus valvas
(la coronaria derecha arriba y la nocoronaria abajo), cavidad ventricular
izquierda, pared posterior del VI, válvula mitral cuya valva anterior se continúa
con la pared posterior de la aorta (continuidad mitroaórtica) y aurícula izquierda
(AI). Por detrás de las cavidades izquierdas pude verse un segmento de la
aorta torácica (Fig. 21).
Fig. 21.- Paraesternal eje largo.

Desde esta proyección se realizan las mediciones de:


1.- Anillo aórtico.- Se mide en sístole, del borde interno de la pared anterior de
la aorta al borde interno de su pared posterior por debajo de las valvas de la
válvula aórtica.
2.- Aorta ascendente.- Del borde externo de su pared anterior al borde externo
de la pared posterior, por arriba de los senos de Valsalva.
3.- AI.- Del borde interno de la pared posterior de la aorta al endocardio de la AI
en telesístole.
4.- Ventrículo derecho.- De la pared anterior al endocardio septal derecho al
inicio del complejo del QRS.
5.- Septum interventricular.- Del endocardio septal derecho al endocardio septal
izquierdo, al inicio del QRS.
6.- Pared posterior.- Del endocardio al epicardio de la pared posterior al inicio
del complejo QRS.
7.-Diámetro diastólico final de VI.- Del endocardio septal al endocardio de la
pared posterior, al inicio del QRS.
8.-Diámetro sistólico final de VI.- Del endocardio septal al endocardio de la
pared posterior, en el momento de mayor excursión de la pared posterior
(vértice de la onda T del electrocardiograma).
Una vez obtenidas estas medidas, se angula el transductor hacia abajo, a la
derecha y con un giro antihorario para obtener el eje largo del VD con su tracto
de entrada, válvula tricúspide y aurícula derecha (AD) (Fig. 22).

Fig. 22.- Paraesternal eje largo VD.

Paraesternal eje corto a nivel de los grandes vasos.- Se obtiene girando el


transductor hacia arriba, a la izquierda y en sentido horario y observamos a la
válvula aórtica en el centro con sus tres cúspides que durante la sístole se
observa que el espacio entre ellas adopta la forma de triángulo invertido.
Anterior a la aorta está el tracto de salida del VD, y a la derecha la válvula
pulmonar, tronco de la arteria pulmonar hasta su bifurcación y sus ramas. A la
izquierda de la aorta se observa la válvula tricúspide, el tracto de entrada del
VD y la AD. Por debajo de la aorta está la AI y el septum interauricular y que
corre diagonalmente hacia la izquierda dividiéndola de la AD (Fig.23 y 23A).

Fig.23 y 23A.- Paraesternal eje corto. A nivel de los grandes vasos.

Paraesternal eje corto a nivel de la válvula mitral.- Con una rotación de 90º
del transductor en sentido horario desde el paraesternal eje largo se obtiene el
registro de la válvula mitral la cual se observa en el centro del sector con sus 2
valvas; la de arriba corresponde a la valva anterior que es la más larga, y la de
abajo corresponde a la valva posterior de menor longitud pero con un área
mayor de inserción en el anillo mitral. A ambos lados de las valvas se
encuentran las comisuras anterolateral y posteromedial. La imagen
ultrasonográfica característica de la válvula mitral en movimiento es la que se
llama “boca de pescado” por la forma que adoptan sus valvas. Desde esta vista
es posible estimar el área valvular mitral por planimetría. Por arriba de la
válvula mitral se ubica el septum interauricular y la cavidad del ventrículo
derecho que adopta la forma de media luna (Fig. 24).

Fig. 24.- Eje corto a nivel de la válvula mitral. La imagen de la izquierda es en díástole cuando esta abierta
la válvula mitral y la imagen de la derecha en sístole, cuando está cerrada.

Paraesternal eje corto a nivel de músculos papilares.- Se obtiene


angulando el transductor hacia el apex. Desde esta proyección la cavidad del
VI tiene forma circular, interrumpida por dos prominencias hacia la cavidad que
corresponden a los músculos papilares, el anterolateral, hacia la derecha de la
imagen y el posteromedial hacia la izquierda de la imagen. La cavidad
ventricular está rodeada por la pared anterior, septum y las paredes lateral y
posterior (Fig.25).

Fig. 25.- Paraesternal eje corto a nivel de músculos papilares.

Apical eje largo.- Se obtiene moviendo el transductor a la posición apical. Es


similar a la obtenida en paraesternal eje largo. En esta proyección se observa
la cara posterior del VI en todo su extensión incluyendo el apex así como el
aparato subvalvular mitral (Fig.26). Una variante de esta vista es la apical 2
cámaras que incluye la pared anterior del VI.

Fig.26.- Apical eje largo del VI.

Apical 4 cámaras.- Desde la posición apical eje largo, se rota el transductor


90º en sentido horario para obtener el apical 4 cámaras. Desde esta proyección
se observan las aurículas en la parte inferior de la pantalla y los ventrículos
arriba. Las cavidades izquierdas quedan en el lado derecho de la pantalla y las
cavidades derechas en el lado izquierdo de la pantalla. Dividiendo las aurículas
y los ventrículos están el septum interauricular e interventricular
respectivamente que junto con la unión aurículoventricular forman la cruz del
corazón. El ventrículo izquierdo tiene forma de hemielipse con una superficie
endocárdica “lisa”, se observan también los 2 grupos musculares. El VD tiene
forma triangular, su superficie endocárdica es trabeculada y en su tercio inferior
se observa la banda moderadora. La válvula tricúspide se observa más cerca
del apex que la mitral. En la AI se pueden observar como drenan 1 o 2 venas
pulmonares. Con una angulación posterior del transductor puede observarse el
seno coronario drenando en la AD y en ocasiones la válvula de Tebesio
(Fig.27).
Fig.27.- Apical 4 cámaras.

Apical 5 cámaras.- Desde la posición apical 4 cámaras y una angulación


anterior del transductor se registra la vía de salida del VI, válvula aórtica y parte
de la aorta ascendente (Fig.28).

Fig.28.- Apical 5 cámaras.

Subcostal 4 cámaras.- En este corte las cavidades derechas se observan en


al parte superior de la pantalla y las cavidades izquierdas en la parte inferior,
con sus respectivas válvulas aurículoventriculares. Es una de las proyecciones
ideales para registrar el septum interauricular (Fig.29).

Fig.29.- Subcostal 4 cámaras.

Subcotal eje corto.- Este corte es similar al obtenido en el paraesternal. Se


observa la aorta en posición central, a la izquierda está la AD y válvula
tricúspide, hacia arriba el VD con su tracto de salida y a la derecha de la aorta
se observa la válvula pulmonar y la arteria pulmonar. La principal aplicación de
este corte, es que se puede obtener un eje corto en sujetos con pulmones
hiperinsuflados en los cuales el abordaje paraesternal es imposible.

Colocando el transductor ligeramente a la derecha del apéndice xifoides y


dirigido posteriormente, se puede observar la vena cava inferior entrando a la
AD (Fig. 30)
Fig.30.- Imagen ecocardiográfica en la que se observa la vena cava inferior entrando a la AD.

Supraesternal.- El transductor se coloca en el hueco supraesternal con la


marca dirigida hacia atrás y se registra aorta ascendente, cayado, troncos
supraórticos y aorta descendente (Fig.31); rotando el transductor en sentido
horario, se ve el cayado aórtico en eje corto, rama derecha de la pulmonar, AI
con sus 4 venas pulmonares.

Fig.31.- Imagen ecocardiografica desde un abordaje supraesternal.

El Doppler es parte fundamental del estudio ecocardiográfico. Se recomienda


iniciar con el Doppler color que nos permite identificar alteraciones del flujo
sanguíneo (estenosis, insuficiencias valvulares, cortocircuitos). El flujo a través
de la válvula mitral se obtiene desde una vista apical 4 cámaras. Con el
Doppler pulsado el volumen muestra se coloca en el vértice de ambas valvas y
con el continuo en el centro del orificio mitral en diástole. El registro obtenido
tiene forma de M identificándose diferentes ondas:
E.- Fase de llenado rápido del VI
A.- Llenado tardío del VI (telediastólico) y corresponde a la contracción
auricular, la cual desaparece por ejemplo en la fibrilación auricular.
Entre ambas se encuentra una meseta que es la fase de llenado lento y que
casi no se observa cuando se acorta la diástole (Fig.32)

Fig.32.- Doppler pulsado de flujo transmitral.


El registro del flujo a través de la válvula tricúspide comprende las mismas
fases y ondas que el de la mitral, sin embargo sus velocidades son menores.
Con Doppler continuo se obtiene el registro transvalvular aórtico que consiste
en una onda sistólica, con aceleración rápida y pendiente vertical y
desaceleración de menor velocidad (Fig.33).

Fig.33.- Registro Doppler continuo flujo aórtico. El espectro registrado de la línea base hacia abajo, es una
onda sistólica con aceleración rápida. El espectro registrado hacia arriba corresponde a una insuficiencia
aórtica que en condiciones normales no debe aparecer.

Con el Doppler pulsado se obtiene el registro a nivel del tracto de salida de VI,
el cual en condiciones normales es de menor velocidad que el obtenido con el
Doppler contínuo del flujo aórtico (Fig.34).

Fig.34.- Registro con Doppler pulsado del tracto de salida de VI (TSVI).

El flujo a través de la válvula pulmonar se obtiene desde una vista paraesternal


eje corto; es igual que el de la válvula aórtica pero con velocidades menores.
Con Doppler pulsado se obtiene el flujo del tracto de salida del VD (TSVD).

REFERENCIAS
Weyman AE.Phisical principles of ultrasound. En Weyman AE Principles and
Practice of Echocardiography.2a Ed. Lea & Febiger. Philadelphia. 1994; p: 3-28
Weyman AE. Principles of Doppler flow measurement. En Weyman AE
Principles and Practice of Echocardiography.2a Ed. Lea & Febiger.
Philadelphia. 1994; p: 143-183.
Weyman AE. Principle of flow. En: Weyman AE Principles and Practice of
Echocardiography.2a Ed. Lea & Febiger. Philadelphia. 1994; p: 184-200.
Weyman AE. Doppler signal processing. En: Weyman AE Principles and
Practice of Echocardiography.2a Ed. Lea & Febiger. Philadelphia. 1994; p: 201-
217.
Weyman AE. Principles of color flow mapping. En: Weyman AE Principles and
Practice of Echocardiography.2a Ed. Lea & Febiger. Philadelphia. 1994; p: 184-
200.
Rosas E. Principios y bases de la ecocardiografía Doppler. En Rosas E.
Ecocardiografía: metodología, diagnóstico y aplicación clínica. 1ª Ed. Manual
Moderno 2004; p: 1-13.
Rosas E. Ecocardiografía normal. En: En Rosas E. Ecocardiografía:
metodología, diagnóstico y aplicación clínica. 1ª Ed. Manual Moderno 2004; p:
15-32.
Feigenbaun H. Instrumentation. En: Echocardiography 3ª Ed Philadelphia. Lea
& Febiger. 1981;p:1-50.
Feigenbaun H. Instrumentation. En: Echocardiography 3ª Ed Philadelphia. Lea
& Febiger. 1981;p:51-110.
Otto R, Kasal Ch. Basic principles of Doppler color flow imaging.
Echocardiography. 1986, 3: 493-503.
Hatle L. Angelsen B. Phyisics of blood flow. En: Hatle L. Angelsen B: Doppler
Ultrasound in cardiology. Physical principles and clinical applications.Lea &
Febiger. Philadelphia. 1982, p:8-31.
Tajik AJ. Seward JB. Et al. Two-dimensional real time ultrasonic imaging of
the heart and the great vessels. Technique, image, orientation, structure,
identification and validation. Mayo Clinic Proc 1987, 53: 271-303.
Kisslo JA. Two-Dimensional Echocardiography in the normal heart. En:
Essentials of Echocardiography # 1. www.echoincontext.com
Kisslo JA. Basic Doppler. En: Principles of Doppler Echocardiography and the
Doppler examination. www.echoincontext.com
Yale University. Atlas of Echocardiography.
www.med.yale.edu/intmed/cardio/echo_atlas
VIDEOS
1.- Imagen bidimensional. Paraesternal eje largo. Se observa VI, AI, válvula
mitral, raíz de aorta, válvula aórtica ( 2 de 3 valvas) y VD.
2.- Imagen bidimensional. Para esternal eje corto a nivel de los grandes vasos.
Se observa válvula aórtica trivalva en el centro. Aurícula derecha, ventrículo
derecho, tronco de arteria pulmonar y aurícula izquierda.
3.- Imagen bidimensional. Paraesternal eje corto a nivel de la válvula mitral.
4.- Imagen bidimensional. Paraesternal eje corto a nivel de los músculos
papilares.
5.- Imagen en modo-M. Corte a nivel del VI obtenido desde una vista para
esternal eje largo. Se observa septum interventricular, cavidad ventricular y
pared posterior.
6.- Imagen en modo-M. Corte a nivel del VI obtenido desde una vista
paraesternal eje corto. Se observa septum interventricular, cavidad ventricular y
pared posterior.
7.- Imagen bidimensional y con Doppler color. Paraesternal eje largo.
8.- Imagen en modo-M y Doppler color obtenida desde un paraesternal eje
largo. El corte es a nivel de la raíz de la aorta y aurícula izquierda.
9.- Imagen en modo-M. Para esternal eje largo. Registro de la válvula mitral.
10.- Imagen bidimensional y Doppler color. Paraesternal eje corto a nivel de los
grandes vasos.
11.- Doppler pulsado a nivel del tracto de salida del ventrículo derecho.
12.- Imagen bidimensional. Apical 4 cámaras. Se observa abajo en la pantalla a
las aurículas, arriba los ventrículos, a la derecha la válvula mitral y a la
izquierda a la válvula tricúspide.
13.- Imagen bidimensional. Apical 5 cámaras. En el centro se observa la aorta,
arriba los ventrículos, abajo las aurículas, a la derecha la válvula mitral y a la
izquierda la tricúspide.
14.- Imagen bidimensional. Apical 2 cámaras. De arriba hacia abajo se
observa: ventrículo izquierdo, válvula mitral, aurícula izquierda.
15.- Imagen bidimensional. Apical 3 cámaras. Ventrículo izquierdo, raíz aórtica,
aurícula izquierda.
16.- Imagen bidimensional con Doppler color. Apical 4 cámaras.
17.- Imagen bidimensional con Doppler color. Apical 5 cámaras.
18.- Doppler pulsado. Se registra el flujo a través de la válvula mitral.
19.- Doppler contínuo. Se registra el flujo transvalvular aórtico.
20.- Doppler contínuo. Se registra el flujo a través de la válvula tricúspide.
21.- Imagen bidimensional y Doppler color. Supraesternal. Se observa cayado
aórtico y aorta descendente.
22.- Imagen bidimensional y Doppler color. Subcostal. Se observa la vena cava
desembocando en la aurícula derecha.

You might also like