MULTAS PARA TRANSPORTES PESADOS

29º SESION ORDINARIA 31-10-02

EXPEDIENTE Nº 15.845-BR-02

ACTUALMENTE SE ENCUENTRA EN TRATAMIENTO EN LA COMISION DE

TRANSPORTE, INDUSTRIA, COMERCIO Y ASUNTOS TECNICOS

FUNDAMENTOS:

Se ha observado en nuestra ciudad capital, la frecuente circulación y

estacionamiento de vehículos de transportes pesados, ya sean camiones o colectivos de
larga distancia, de peso superior a los 6.500 kg. por lugares no permitidos, de acuerdo a la
normativa vigente en la materia (Ordenanza 1.593).

Esta indeseable circunstancia, ocasiona en reiteradas oportunidades

distintos inconvenientes a los habituales transeúntes de nuestra ciudad, ya que tanto la
circulación como estacionamiento de este tipo de vehículos, además de atentar contra la
seguridad y fluidez del tránsito automotor por las distintas arterias urbanas, provocan
cuantiosos y costosos daños en la infraestructura vial, en razón del tamaño y peso de dichos
rodados, para los cuales las cintas asfálticas y de hormigón con que están revestidas o
construidas nuestras calles, no están preparadas ni planificadas.

Como tampoco escapa a la observación de nuestros vecinos, las

calles de Río Gallegos se encuentran notoriamente deterioradas, no obstante haber sido
reacondicionadas en varias oportunidades en los últimos años, por ejemplo con las célebres
repavimentaciones de 112 cuadras de nuestra ciudad.

En este tópico, y sin perjuicio de los ingentes esfuerzos de las

autoridades municipales por mantener en buen estado la infraestructura vial urbana,
mediante las recurrentes inversiones en obra pública para su reparación y ampliación, es
necesario prevenir su uso inapropiado y virtual destrucción progresiva a que dichas obras se
ven sometidas, cuando son transitadas por vehículos inadecuados para su uso.

Cabe contemplar también, en la actual coyuntura económica por la

que atraviesa nuestro país, el notable aumento de los valores de la industria de la
construcción, en atención a los elevados costos que implica encarar una obra de
repavimentación o construcción de pavimento nuevo, costos que en definitiva deben ser
solventados por los contribuyentes municipales, que en su abrumadora mayoría no son
responsables de su prematuro deterioro.

Otro aspecto de singular importancia en esta cuestión, también es el

peligro que representa para los peatones, especialmente los niños de corta edad, que estos
vehículos se desplacen por lugares no habilitados para tal fin, en muchos casos en calles y
pasajes de reducidas dimensiones. Para corroborar este riesgo, resulta más que suficiente
retrotraer la memoria a un reciente accidente ocurrido a principios del año en curso, en el
Complejo Habitacional 152 Viviendas, que resultara fatal para un niño habitante de ese
barrio.

Es justo considerar que este Honorable Concejo Deliberante, se ha

ocupado en reiteradas ocasiones respecto de esta problemática. Así, advirtiendo que la
circulación y estacionamiento de vehículos pesados en lugares no permitidos es un
problema histórico en nuestra ciudad, se promovió en la 26º sesión ordinaria del 26 de
octubre de 2000, la solicitud al DEM, de la implementación de un predio destinado
especialmente al estacionamiento de este tipo de vehículos, a fin de evitar su tránsito por
lugares prohibidos del ejido urbano. Esta iniciativa fue enviada al archivo el 29 de noviembre
del año 2001.

Posteriormente, se ingresó en la sesión ordinaria 30º del 23 de

noviembre de 2000, un proyecto de Resolución solicitando al DEM los estudios de
factibilidad pertinentes para la modificación de la traza urbana de la Ruta Nacional Nº 3,
desplazando la misma hacia el sector suburbano ubicado entre el Autódromo ‘Ciudad del
Centenario’ y el actual Puesto de Control Sanitario. Este proyecto también fue desestimado
por mayoría y enviado al Archivo en la misma fecha -29 de noviembre 2001-.

En concomitancia con las iniciativas anteriores, se presentó en la

sesión ordinaria 5º del 29 de marzo de 2001, un proyecto de Resolución solicitando a la
Administración Nacional de Aduanas, el estudio de factibilidad para que los controles de los
transportes de carga internacional, se realizaran en un lugar lindante a la Ruta Nacional Nº
3, en un sector suburbano de nuestra ciudad. Este proyecto, en contradicción con los
antecedentes citados precedentemente, fue aprobado por unanimidad bajo la Resolución Nº
017/01, tal vez considerando que se comprometía la actuación de una autoridad extraña a la
Municipalidad de Río Gallegos.

En el mismo sentido, se presentó en la sesión ordinaria 29º del 25 de

octubre de 2001, un proyecto de Resolución mediante el cual se denunciaba el
estacionamiento habitual de colectivos de larga distancia en espacios abiertos del Barrio
Jorge Newbery, linderos inmediatamente a las viviendas familiares y con acceso directo a las
calles que circundan dicho complejo habitacional. Este proyecto aún continúa su lento y
tedioso trámite parlamentario en las Comisiones de este Honorable Cuerpo.

Finalmente, en la 3º sesión ordinaria del 21 de marzo del corriente

año, se reingresó el proyecto de Resolución que tenía por objeto el predio de
estacionamiento para vehículos pesados de transportes de cargas y pasajeros, que fuera
archivado por el voto de la mayoría en noviembre de 2001. Lamentablemente, la decisión de
admitir nuevamente el tratamiento de esta iniciativa, no respondió a otro criterio que el
oportunismo político de la mayoría de este Honorable Cuerpo, ante el fatal accidente
causado por un camión de transporte de cargas, a principios de este año en el Barrio 152
Viviendas, en que perdiera la vida un niño de corta edad. Suficiente evidencia de este
deleznable oportunismo, es que el proyecto de mención, aún se encuentra en tratamiento
en comisiones cuando ya estamos finalizando el período de sesiones 2002.

Como corolario de los antecedentes legislativos reseñados, surge en

forma ostensible que el gravísimo problema que implica la circulación y estacionamiento de
vehículos pesados libremente por la red vial urbana de Río Gallegos, se encuentra lejos de
ser una cuestión prioritaria para la seguridad del tránsito, desde la perspectiva de las
autoridades que detentan la iniciativa política en la Municipalidad de Río Gallegos y en este
Honorable Cuerpo, habiéndose tomado cartas en el asunto sólo después de haberse
consumado accidentes desgraciados que despertaron la justificada indignación de la
comunidad contra las autoridades municipales, como después del accidente ocurrido en la
intersección de la Ruta Nacional Nº 3 con calle Corrientes, en que perdieran la vida tres
jóvenes, y que este Honorable Cuerpo aprobara el 14 de junio de 2001 un proyecto de
Resolución presentado en la 13º sesión ordinaria del 2000, que solicitaba al DEM la
instalación de una garita de control de tránsito sobre la Ruta 3. No obstante, y siguiendo en
la misma línea de subestimación de esta problemática, el DEM hasta el día de la fecha no ha
cumplido el objeto de la Resolución Nº 053/01, brillando por su ausencia la garita de control
de tránsito tan necesaria sobre la Ruta Nº 3.

Con el fin de evitar situaciones como las abordadas más arriba, y

ante la ostensible y flagrante violación a las normas vigentes, que no pocos transportistas
tienen por costumbre infringir, resulta adecuado contemplar el agravamiento de las
sanciones previstas por las normas especiales para estas conductas contravencionales.

En este aspecto, se encuentra estipulada en la Ordenanza municipal

1.593, la prohibición para los vehículos de esta clase de estacionar en el radio comprendido
en circulación de tránsito pesado, siendo habitual no obstante ello, observar el
estacionamiento en dichas arterias así como también en inmediaciones de estaciones de
servicio.

En tal sentido, se encuentra prohibida la circulación de camiones y

acoplados cuyo peso, en forma individual sea igual o mayor a 6.500 kilos, por las calles o
avenidas de la ciudad fuera de la ‘red de tránsito pesado’ prevista por la reglamentación
(artículo 1º), acceder o regresar de su terminal de carga y descarga por un itinerario que no
sea el más corto hasta la ‘red de tránsito pesado’ (artículo 3º), y el estacionamiento de estos
vehículos pesados en la ‘red de tránsito pesado’ o en las vías de acceso a las ‘terminales de
carga y descarga’ (artículo 6º Ordenanza 1.539).
 Asimismo, la violación a la prohibición de circular o estacionar en
lugares no permitidos por parte de vehículos de transporte pesado, está calificada como
‘falta grave’ por el Artículo 73º Inciso 22 de la Ordenanza 2.039 (modificada por la
Ordenanza 2.301).

A su vez, esta falta al igual que las demás transgresiones tipificadas

como ‘faltas graves’, se encuentran reprimidas con pena de multa de 5.000 a 10.000
módulos ($ 150 a $ 300), por el Artículo 74º de la Ordenanza 2.039.

A los fines de sancionar debidamente estas infracciones, las

sanciones vigentes resultan inocuas e ineficaces, contemplando la capacidad y solvencia
económica de los propietarios de los vehículos infractores, en su mayoría importantes
empresas transportistas de importancia regional y nacional. A esta circunstancia, debe
sumarse también la falta de controles apropiados por la autoridad de aplicación en materia
de tránsito vehicular, para quienes pasan desapercibidos estos vehículos por las calles de
nuestra ciudad, aún cuando en numerosas ocasiones estos rodados permanecen
estacionados por prolongados períodos en lugares prohibidos, provocando justificadas
quejas de los vecinos ante la complaciente actitud de los funcionarios competentes.

Por ello, estimamos que este tipo de infracciones deben ser

eliminadas de la categoría del Artículo 73º del Código de Faltas, retornando a la vigencia del
Artículo 137º del Código de Faltas, sancionándose las infracciones a los Artículos 2º, 3º y 6º
de la Ordenanza sobre Red de Tránsito Pesado (Nº 1.593), con multas de 70.000 módulos
($ 2.100 ) a 150.000 módulos ( $ 4.500 ).

De tal modo, se implementaría un régimen represivo que responda a

parámetros aceptables de equidad y justicia, evitando asimilar el riesgo e importancia
económica de los daños provocados por los vehículos de transporte pesado, al de las
infracciones cometidas por los automóviles particulares, que hasta la actualidad, en razón de
la vigencia del Artículo 73º Inciso 22 y 74º de la Ordenanza 2.039, reciben un tratamiento
que por igualitario resulta ostensiblemente injusto.

Incoamos la sanción favorable de la presente iniciativa, en la

convicción de que acompañada de una acción agresiva en materia de control preventivo por
parte de las áreas competentes del DEM, redundará en la eliminación definitiva del grave
problema que representa el tránsito de vehículos pesados por arterias y lugares no
autorizados.

POR ELLO:

EL HONORABLE CONCEJO DELIBERANTE EN SESION ORDINARIA DEL DIA DE LA

FECHA, SANCIONA CON FUERZA DE:

ORDENANZA

Artículo 1º.- DEROGASE el Inciso 22 - del Artículo 73º de la Ordenanza 2.039

(modificada por la Ordenanza 2.301).

Artículo 2º.- MODIFICASE el Artículo 137º de la Ordenanza 2.039, el que quedará

redactado de la siguiente forma:

Artículo 137º.- Las infracciones a las disposiciones de la Ordenanza sobre Red de

Tránsito Pesado (Nº 1.593), serán penadas con las siguientes multas:
Por infracción al Artículo 2º, 3º y 6º desde 70.000 módulos hasta 150.000
módulos.-

Artículos 3º y 4º.- DE FORMA.-

JORGE CRUZ
CONCEJAL