Ensayo del aborto

Carlos Andrés Rodríguez Rojas

Actualmente uno de los temas más polémicos en la sociedad ha sido el del

aborto. Se llama aborto a la expulsión provocada del feto antes de que
nazca. La expulsión normal del feto al término de un embarazo es el parto,
si el feto se expulsa antes de los nueve meses se habla del aborto. Existen
tres tipos de aborto provocado: el intencional, que constituyó hasta hace
poco  un delito en casi todas las legislaciones modernas; el no intencional,
ocasionado sin el propósito de causarlo y el honoris causa, practicado para
impedir la deshonra de la embarazada.
El aborto es un atentado a todos los derechos humanos, a todo orden
moral, y, por tanto, una amenaza gravísima a toda la sociedad. El aborto
provocado es la mayor violación al derecho humano, porque destruye la
vida de una criatura inocente e indefensa que no tiene voz ni nadie que la
defienda.

Hoy por hoy la gente no disfruta de su sexualidad, son esclavos a una

práctica de sexo sin compromiso y actúan acorde a esa esclavitud. Ese es
el verdadero problema de fondo detrás del aborto. No es lógico querer
justificar una práctica tan monstruosa como el aborto. Por cuestiones como
son que fue violada, condición social precaria, o enfermedad. Que un
hombre haya violado a una persona y esta haya quedado embarazada no
hace culpable a la criatura que se gesto del accionar de su progenitor.
Además de estar reposando sobre un falso concepto, el cual es pensar que
porque la mujer aborte se va a aliviar su dolor. Eso es incorrecto, la mujer
va a seguir acarreando su violación. Y con respecto a la condición social
precaria, tampoco es lógico dado que hay otras alternativas a el aborto,
como es dar el bebe en adopción. Por ende no es justificable de ningún
punto de vista esta práctica y lo único que se manifiesta es el querer
deshacerse de las consecuencias de las propias acciones de uno.

Todos los seres humanos fueron creados iguales y han recibido del Creador
ciertos derechos personales, entre ellos el derecho fundamental a la vida;
La vida humana debe ser preservada y protegida por los demás seres
humanos en la sociedad, así como también por la propia sociedad. La vida
humana debe ser preservada y protegida desde su formación biológica, a
través de toda la vida natural del ser humano, utilizándose todos los
mecanismos ordinarios y los esfuerzos razonables disponibles; La vida de
todo ser humano deberá ser preservada y protegida en todas las etapas de
su vida, independientemente de su estado de salud o condición de
dependencia.

En nuestros días es  frecuente oír que se  hable  acerca de que el aborto es

un atentado  contra la Vida (así, con mayúscula),  y la Vida se dice,  es
un  don de Dios, que nadie puede quitarla sino sólo Dios mismo.
Pero viéndolo de otro punto de vista olvidan que si Dios creó al mundo, no
sólo creó la vida, sino también la muerte y la no vida, como la de las
piedras, y que  la Vida, así en general, no siempre tendría que salvarse ni
defenderse, cuando en lo particular  se trata de la de bichos y gérmenes
nocivos y no sólo de brutales asesinos como los secuestradores y
violadores. Cuando rociamos insecticidas o nos inyectamos antibióticos
parece que no estamos conscientes de que atentamos y acabamos
con   muchas, a veces millones, de vidas.

La Iglesia católica siempre ha considerado al aborto como una falta grave.

La religión (el catolicismo) contribuye al considerar pecado grave su
práctica. Supone que al  abortar intencionalmente y sin necesidad se
comete un crimen, pues se priva de la vida, a un ser humano.

En la rama de la filosofía, el aborto tiene implicaciones éticas, naturalmente

el problema que se formula es el de  saber si es moral o inmoral su práctica
consciente, con independencia de  los casos permitidos o prohibidos por las
leyes. No se trata de legalidad, sino de moralidad y hay que insistir en ello
no todo lo que es legal es moral, pues existen conductas permitidas
legalmente, pero enormemente inmorales.
A menudo las personas que discuten sobre el tema se olvida justamente de
eso a saber,  que naturalmente el nuevo engendro vive  desde el mismo
momento que el óvulo  es fecundado, pero claro vive de la misma manera
en que  también viven  los gametos masculino y femenino,  antes de la
fecundación, y que los espermatozoides no fecundantes  mueren por
millones. Pero, la cuestión, insisto,  está justamente en preguntarse, si esa
vida es ya vida humana, o sólo se trata de  vida biológica. Al no ser
fecundado un óvulo y morir y al morir los múltiples espermatozoides,
¿mueren con ellos millares de seres humanos? Si así fuera habría que
evitar la procreación pues quien eyacula se convertiría en un homicida
múltiple. ¿En qué momento, pues,  la vida  es vida humana y no sólo vida
biológica? Este es uno de los problemas filosóficos en relación
con el aborto.

La estrategia más eficaz para prevenir y evitar el aborto es la educación

moral y ética, sobre todo en la infancia, la adolescencia y la juventud.
Particularmente, esta formación deberá impartirse (principalmente en el
ámbito familiar), en los temas relativos al valor de la vida, la sexualidad, el
amor, el matrimonio y la familia. No basta dar información de los datos
biológicos, fisiológicos y anatómicos del cuerpo humano, sino que, además,
se ha de impartir formación en los valores, de tal modo que las nuevas
generaciones adopten una actitud responsable, ordenada y digna ante la
sexualidad y las facultades generativas.
En los casos de aborto por violación se ha de castigar al violador, no al niño
inocente, fruto del acto delictivo. Rechazamos toda situación de atropello a
la que la mujer pueda ser expuesta en caso de tal afrenta, pero sostenemos
que si a la mujer violada se le provoca un aborto, no solamente no se la
libra del trauma de la violación, sino que se le genera un nuevo trauma, el
remordimiento de haber matado a su propio hijo.

Esas son algunas de las razones por las que hay que estar en contra del
aborto, una de las mejores opciones que pueden tomar esas mujeres las
cuales se encuentran invadidas por ese pensamiento tan confuso de abortar
es la adopción por terceros, esta es una estrategia humanitaria de indudable
valor. En los casos de violación de una mujer discapacitada mentalmente, la
solución no está en matar al niño, sino en ayudar a la mujer para que lleve
el embarazo hasta el nacimiento. Promover un ambiente adecuado para
estas mujeres, de modo de prevenir nuevos casos de abusos.
Bibliografía

http://ciencias.jornada.com.mx/foros/
http://www.vidahumana.org/vidafam/opiniones.html
http://www.aciprensa.com/aborto/
http://www.lacabeza.com.mx
http://www.psicologiacientifica.com/bv/psicologia-225-1