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MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 1

Temprano para Morir, Temprano para Subir


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 2

Early to Death,
Early to Rise
KIM HARRISON
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 3

Prólogo
Traducido por Glad

D
iecisiete años…muerta, y al mando de los ángeles
oscuros del cielo—todos ansiosos por ir a matar a
alguien. Sip, esa soy yo, Madison, la nueva y sin
experiencia cronometradora oscura. Exactamente, así no es
cómo visualicé mi educación superior, huyendo por la noche,
de mi baile de graduación y muriendo al pie de un barranco.
Había logrado sobrevivir a mi propia muerte robando el
amuleto de mi asesino.

Ahora, es mi responsabilidad, enviar a un Caronte Oscuro a


terminar la existencia terrenal de una persona. La idea es salvar
el alma a costa de su vida.

Predestinada, dirían los serafines. Pero no creo en el


destino; creo en la elección, lo cual significa que estoy a cargo
de la gente contra la que una vez peleé.

Los serafines están confusos por los cambios que estoy


tratando de hacer en un sistema en el que no creo, pero están
dispuestos a darme una oportunidad. Al menos, en teoría. La
realidad es un poco m{s…complicada.
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Capítulo 1
Traducido por Glad

E
l coche estaba caliente bajo el sol, y deslicé las puntas de mis dedos
sobre él mientras le traspasaba. La excitación se acoplo sobre mi piel
como una segunda aura. Encorvada y furtiva, seguí a Josh en su
primer-día-de-escuela con sus jeans y enfundado en una camisa, mientras
zigzagueaba a través del estacionamiento hacia su camión. Sí, este era el primer
día de escuela, y sí, zigzagueábamos, no era algo que, se hiciera a menudo en tu
primer día de escuela. Además, sabía que los serafines me perdonarían; era un
alma marcada a la que yo iba a salvar.

Josh se giro hacia mí, mientras se detenía, estaba agachado justo detrás de
un Mustang rojo mientras alejaba su pelo rubio de sus ojos y me daba una
sonrisa. Era tan obvio que este no era nuestro primer escape. No era la primera
vez que zigzagueábamos fuera de la escuela, o lo que sea, pero nunca lo
habíamos hecho junto a un grupo de rescate. Le devolví la sonrisa, pero
mientras la fija mirada de Josh fue detrás de mí, su sonrisa se desvaneció.

"Ella hará que nos pillen," él susurró.

Mis tenis amarillos con calaveras-y-tibias cruzadas tenían los cordones


sobre el pavimento, mientras me gire a mirar.

Barnabás andaba correctamente escondido entre los autos, con sus serios
oscuros ojos y su sombría expresión. Nakita, sin embargo, caminaba
casualmente, balanceando sus brazos con perfección absoluta. Ella llevaba
puestos mis jeans de diseñador y uno de mis cortos tops, luciendo mejor de lo
que alguna vez pudiera ser, con su oscuro pelo brillando y sus negras uñas del
pie destellando bajo el glorioso sol. Ella no les había pintado de ese color, eran
naturales. Normalmente detestaba a Nakita por su sola apariencia, pero la
Caronte Oscura no tenia la menor pista de lo hermosa que era.

Deteniéndose, y aun encorvado junto a mí, Barnabás frunció el ceño, el


perfume de plumas y girasoles emanaban de él. El ángel estaba disfrazado
como un estudiante mayor de la escuela secundaria en sus descoloridos jeans
negros y una descolorida camiseta de alguna banda; él había caído dos veces:
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La primera vez, cuando había sido expulsado del cielo hace incontables
milenos, y ahora por haber cambiado de mando en medio de la guerra de cielo.

"Nakita no tiene la más remota idea de cómo hacer esto," el Caronte se


quejó, alejando sus rizos cafés de sus ojos y los entrecerraba. Los dos habían
estado en bandos diferentes en medio de la guerra del cielo, y no se requería
demasiado para que pelearan uno contra el otro.

Me encogí de miedo, agitando mis manos para que Nakita se ponga de


cuclillas, pero ella se mantuvo caminando. Nakita era mi guardiana oficial,
asignada a mí, por los serafines.

Técnicamente, como la Cronometradora Oscura, yo era su jefa. Aunque yo


era muy lista en asuntos terrenales, ella conocía mi trabajo y lo qué estaba
supuesta a ser hacer. El problema era, que yo no quería hacerlo a la manera del
cielo. Yo tenía otras ideas.

‚¡Agáchate, tu tonta!‛ Barnab{s gruñó, y la pequeña, hermosa, y mortal


chica miro tras de ella, confundida.

Sobre su hombro, estaba el bolso de moda que le había dado esta mañana
para completar su apariencia. Hacia juego con sus rojas sandalias y estaba
absolutamente vacío, pero ella había insistido en llevarlo porque pensaba que la
ayudaba a mezclarse.

‚¿Por qué?‛ dijo mientras se acercaba. "Si alguien nos detiene, simplemente
le golpearé fuerte‛.

¿Golpear? Pensé, haciendo una mueca. Ella no había estado mucho en la


tierra. Barnabás encajaba mejor, habiendo sido echado de cielo antes de que las
pirámides estuvieran construidas porque él creía en la elección, y no en el
destino, pero Nakita una vez me dijo que había un rumor de que lo habían
expulsado por haber amado a una chica humana.

"Nakita," dije, tirando de ella cuando se acerco, ella obedientemente se


agachó, con su largo pelo meciéndose. "Ya nadie usa esa palabra".

"Es una palabra perfectamente fina," ella dijo, ofendida.

‚¿Tal vez podrías probar con ‘abofetear personas’?‛ Josh sugirió.


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Barnabás frunció el ceño. "No la alientes" él susurró.

Nakita se levanto. "Deberíamos seguir," dijo, mirando alrededor. "Si no


llegas hacia la marcada y ella escoje un mejor camino antes de que Ron envié a
un Caronte Blanco a mantenerle viva, voy a tomar su alma para salvarla‛.

Con eso, Nakita comenzó a andar hacia el camión de Josh. ‘Tomar su alma’
era una forma agradable de decir "le mataré". La enormidad de lo que estaba
tratando de hacer cayó sobre mí, y mis hombros se hundieron.

Yo era la nueva Cronometradora Oscura, pero a diferencia de los


guardianes oscuros que me antecedieron, yo no creía en el destino. Yo creía en
la elección. La situación entera era un gran chiste cósmico _ aparte del hecho de
que yo estaba muerta. El antiguo Cronometrador Oscuro pensó que matarme, a
mi, a su reemplazo predestinado, le daría inmortalidad. Nadie sabía quién era
yo, hasta que fue muy tarde para cambiar las cosas, y ahora, yo estaba
ineludiblemente comprometida con el trabajo hasta poder encontrar mi cuerpo
real y así poder perder la unión con el amuleto que me conserva viva.

Josh se levantó, mirando fijamente la entrada del estacionamiento a través


de las ventanas del Mustang. "Venga. Adelante. Tenemos que llegar a mi
camión antes de que ella tome el asiento delantero. No conduciré con ella y su
escopeta de equitación".

Las rodillas dobladas y agachada, partimos en busca de ella. Barnabás se


manejaba mucho mejor en estas cosa de rescatar almas, de lo que yo lo hacia, el
sabia cómo usar su amuleto y tenia experiencia encontrando a las personas
marcadas con una muerte temprana y salvarlas de los Carontes como Nakita.

Aunque él había cambiado de bando para quedarse conmigo, y eso era tan
extraño como yo, siendo escogida como la nueva Cronometradora Oscura que
tenia que empezar. Tal vez, era culpa mía por haberle mantenido junto a mí,
desde que había fracasado con mantenerme viva cuando había sido marcada
para morir. Quizá era por su odio hacia su antiguo jefe, Ron, el Cronometrador
Blanco, quien nos había mentido debido a su búsqueda de la supremacía. O
posiblemente podía ser que Barnabás pensó que yo tenía las respuestas para las
preguntas, que la traición de Ron había incrementado. Cualquiera que fuera la
razón, yo estaba contenta de que Barnabás estuviera aquí. Ninguno de nosotros
estaba de acuerdo con la filosofía del cielo de matar alguien antes de que estos
se vuelvan malos, pero ya que yo estaba destinada a convertirme en la nueva
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Cronometradora Oscura, yo podía hacer cosas mucho peores, que haberme


ganado la lealtad de Barnabás.

Nakita no confiaba en él y pensaba que él era un espía.

"Uh, ¿chicos?‛ dijo Josh, y me congelé cuando seguí su fija mirada hacia el
coche patrulla que estaba estacionado frente a la escuela. Al lado de este estaba
una mujer con uniforme, con sus manos en las caderas y mirando nuestro
recorrido.

"¡Mierda!" Grité, agachándome. Josh estaba junto a mí, y Barnabás no elevo


su cabeza por encima del borde del coche. ‘¡Abajo!’Casi grito hacia Nakita,
pero, sin embargo la jale bruscamente hacia el pavimento. Mi pulso enloqueció.
Ok, ya lo sé. Estaba muerta, intenta explicarle eso a mi mente. Quien pensaba que
estaba viva, y con la ilusión táctil de un cuerpo, ¿quién era yo para decirle algo
diferente? Era embarazoso. Cuando solía estar sentada, no hay nada _ pero en
los momentos que estaba emocionada, la memoria de mi pulso se ponía en
marcha. Era tan injusto tener que lidiar con toda la basura física de tener miedo
cuando yo ya estaba muerta, pero por lo menos ya no sudaba más.

Mi espalda se presiono contra el coche que nos escondía. Al mí lado, Josh


lucia preocupado. "Es la Oficial Levy. ¿Crees que nos vio?‛ Susurré. Era
simplemente estupendo, yo ya estaba en el radar de la mujer. Ella me había
seguido de cerca hacia el hospital cuando Nakita casi había matado a Josh-hace
dos semanas. Sip, ella estuvo a punto de hacerlo, sólo a medias. No diría que
ahora son amigos, pero al menos Nakita ya no esta tratando de matar a Josh.

Agachada frente a mí, Nakita comenzó a levantarse. ‚Voy a darle una


bofetada‚.

"¡No!" Ambos, Barnabás y yo gritamos, tirando de ella para que se agache.

Josh mantenía su mirada a través de las ventanas. "Ella esta yéndose‛.

Demonios. ¿Cómo se supone que debo de salvar la vida de algún chico si aun no
puedo salir a hurtadillas del estacionamiento de la escuela secundaria?

Le había dicho a los serafines que si yo podía hablar con él _ él marcado _ y


el tomaría una mejor elección, entonces, no tendría que morir para salvar el
alma. Éste probablemente era mi mejor oportunidad para probar que mis ideas
podían surtir efecto. No quería perder mi oportunidad llegando a la fiesta
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demasiado tarde. Y no iba a echar todo a perder, porque estaba sentada en


detención _ y después encerrada en mi cuarto cuando mi padre se enterará.

Mis dedos rodearon mi amuleto, y mi preocupación se robusteció. Debería


ser capaz de detener el tiempo usando la piedra negra, debería volverme invisible, y así
hacer toda clase de cosas, pero la última vez que había probado algo, casi me había
destruido. Pero si no hacia algo…

Barnabás puso su mano alrededor de la mía, ambos sujetamos la negra y


brillante piedra que parecía con vida, me gire hacia él, pestañeando debido a la
sorpresa. "Yo me encargaré de esto," él dijo, la compasión en sus ojos
profundamente cafés.

Mis labios se separaron, y asentí. No tenia que hacer esto a solas. Él y


Nakita estaban aquí para ayudarme, hasta que yo lograra hacerlo por mi
misma. Viendo mi gratitud, él sonrió, y su mano se deslizo de la mía, mientras
se ponía de pie.

‚¿Tú?‛ Nakita ladró, mientras ella también se levantaba. "¡Si alguien tiene
que hacer algo, seré yo!"

Josh suspiró. "Ahí van otra vez".

La expresión de Barnabás se convirtió en irritación, pero sus ojos se


agrandaron cuando él miro detrás de ella. El aclaramiento de una garganta seca,
me conmociono, y me detuve y levante, cuando vi a la Oficial Levy con sus
manos todavía en sus caderas y la decepción en su expresión.

‚¿No es un poco temprano para un viaje al campo?‛ Ella preguntó. Lucia


demasiado joven como para ser un policía, pero no – la severidad en sus ojos
exigía un respeto que iba más allá de su seco corte de pelo y su estatura
delgada.

‚¡Oficial Levy!‛ Dije, sintiéndome tonta mientras limpiaba mi falda. Era


negra, con calaveras y tibias cruzadas en el borde. Hacían juego con mis
pasadores. Y con las mallas negras, el traje estaba allí, pero yo no. "Wow, es
bueno verle otra vez. No sabia que usted fue asignada aquí, " le dije.

Mi voz se apago, y nadie más dijo cualquier cosa mientras ella nos miraba a
cada uno de nosotros a su vez.
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"Ah, sacábamos algo del camión de Josh," mentí, mirándola dos pasos de
distancia _ dos pasos de distancia y seis horas de diferencia. Mierda.

Sus cejas se elevaron, y ella alejo sus manos de su cintura. "¿Josh,


Madison… y ustedes dos…?‛ Ella preguntó.

"Barney" dijo Barnabás, sin levantar la vista y mostrar sus ojos plateados.
Ese era el nombre que yo utilizaba cuando estaba disgustada con él, el cual,
según él, le había marcado.

"¿Y usted, señorita?"

"Nakita", la Caronte Oscura dijo atrevidamente mientras acariciaba su


amuleto como si estuviera disponiéndose a usarlo.

"Ella es mi hermana," Barnabás dijo, atrayéndola hacia el, en lo que la


Oficial Levy pensaría era una abrazo lateral, aunque yo sabia que era una
severa advertencia para que se comportara. El problema era, que ambos
pensaban que eran los que estaban al mando, y eso sólo empeoró las cosas
cuando ella le apartó de un empujón. ‚Somos ‘estudiantes transferidos’ de
Dinamarca," él agregó, y le miré sorprendida.

Pensé que era Noruega. "Se están quedando conmigo en mi casa", añadí.

La Oficial Levy pareció relajarse, aparentemente satisfecha con nuestras


expresiones abatidas. "Estarás en libertad condicional si intentas escapar de
nuevo," ella dijo, quedándose a nuestras espaldas, mientras nos hacia señas
hacia la escuela. ‚Entren. Todos. No les daré un jalón de orejas en su primer día
de escuela. Entren", ella dijo mientras nos guiaba frente a ella, y uno a uno,
empezamos a movernos.

"Lo siento," Josh masculló cuando me puse a la par de él, pero si él estaba
hablándome a mi, o a la Oficial Levy, no lo sabia. La decepción me envolvió,
con desesperación. El pelo en la parte trasera de mi cuello se erizo, cuando oí a
la Oficial Levy detrás de mí. No vamos a ir en silencio, ¿verdad? Pensé, pero el
guiño y la astuta sonrisa que Barnabás me dio, cuando le miré me detuvo con
anticipación.

"Sigue caminando", él pronunció, y después jaló el brazo de Nakita para


ponerla junto a Josh y a mí misma. No pude evitar sonreír ante su queja
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amortiguada mientras Barnabás puso su cabeza a la par de la de ella y la


convenció de no golpear a la mujer.

"Vi lo que ibas a hacer," él dijo, su mano en su amuleto mientras este


comenzaba a resplandecer en un verde apenas perceptible. Solía ser de un color
rojo rubí, pero desde que él había abandonado su estatus de Caronte Blanco
este se había cambiado hacia la oscuridad, este había cambiado a un espectro _
para la vergüenza de Barnabás. "Impactarla con eso, tiene la delicadeza de un
rinoceronte, Nakita," él agregó. "Necesitas aprender el arte de la minimización.
Simplemente mira".

Entonces, más suave, para mí, Barnabás susurró, "Madison, comienza a


bajar la velocidad de tus pasos, hasta estar a la derecha de la Oficial Levy. Josh,
lo siento; no puedo protegerte. La mujer tiene que coger a alguien. Lo mejor que
puedo hacer es que no te metas en líos".

Josh suspiró, estudiándome con la mirada mientras tomaba mi mano. "Te


veré más tarde," él dijo suavemente, su expresión era triste y resignada. "Sabia
que era demasiado bueno para ser cierto‛.

Mis dedos se deslizaron de los suyos, y me estremecí. ‚¿Llevaras las tareas


para mí?‛

"Sí. Pasare por tu casa después de clases. ¿Tienes mi número?‛

Toqué mi bolsillo, tratando de llegar a mi celular. "Siempre," dije, y Nakita


hizo un sonido de rabieta, no entendiendo el asunto del todo. Más todo lo que
era lógico para ella. Era lo que le diferenciaba con Barnabás. A pesar de su
amargura, él seguía a su corazón.

Me sentí sucia por deshacernos de Josh, ¿pero qué más podía hacer?
Lentamente comencé a ralentizar mi paso, Nakita y Barnabás se quedaron
conmigo hasta que Josh continuó delante de nosotros, con su cabeza gacha y
sus manos en sus bolsillos. Contuve mi aliento cuando me desvié hacia el lado
derecho de la Oficial Levy. Barnabás tocó mi codo, y me detuve. Su otra mano
estaba alrededor de su amuleto, y sus ojos eran plateados como si estuviera
tocando algo divino, cambiando los recuerdos de la Oficial Levy,
eliminándonos de ellos. Era una tarea menor, pero pienso que ambos eran
renuentes a enseñarme a hacer eso. Si, yo era su jefe, pero había conseguido el
trabajo sin la disciplina y el aprendizaje que usualmente lo precedían.
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Estaba en medio de los coches y observé, incrédula como la Oficial Levy


parecía olvidarse completamente de nosotros, escoltando a Josh de regreso a la
escuela como si él fuera el único que ella había visto. Magia de Carontes _ tú la
amarías.

"La mujer va a recordar", dijo Nakita con una pataleta, moviendo sus
caderas y mirando, también. "Utilizaste tan poco poder divino, que el recuerdo
falso no pegará".

"Se adherirá lo suficiente como para que nosotros salgamos de aquí, y eso es
todo lo que necesitamos". Josh claramente olvidado, Barnabás tomó mi codo y
me guio al campo, hacia el borde del estacionamiento, pero mis ojos estaban en
la escuela, detrás de nosotros y las ventanas abiertas. "Y cuando ella regrese a
mirar y no encuentre nada, entonces dudará de si misma. De aquí a una
semana, ella no lo recordará porque costará menos esfuerzo que ella olvide".

Una semana, pensé, esperando que él no se equivocara. Había pensado que


sería más seguro que eso. Nakita, también, pareció no-convencida.

Hombro con hombro, dimos vuelta y dejamos los autos detrás de nosotros
para salir caminando sobre un largo campo de barbecho grueso con abejas y
flores diminutas. No pude evitar sentirme extraña mientras caminaba por entre
los dos ángeles, un Caronte Blanco, y un Oscuro, como si estuviera en cierta
forma vinculada con todo el pasado que me había antecedido y el futuro que
aun no conocía. Si no habría sabido que la escuela estaba a nuestras espaldas, ni
olido el pavimento y el metal caliente, podría haber estado caminando sobre el
Edén.

Nakita miró hacia el cielo y sacudió su pelo hacia atrás. Una sonrisa tan
bella que me dolía se apodero de ella. A medida que extendía sus brazos hacia
cielo, sus alas _ sus gloriosas alas, de plumas negras, alas imposiblemente
grandes _ se mostraron, reluciendo bajo el sol. Caronte Oscuro, alas oscuras.

Preocupada, miré detrás de nosotros hacia la escuela. Cuando me gire,


Barnabás había mostrado sus alas, también. Las de él eran blancas, y me
pregunté si ellas eventualmente cambiarían de color como su amuleto lo había
hecho.

Tenía menos de veinticuatro horas para intentar ayudar un alma anónima


que estaba a punto de encontrarse en el centro de una pelea por su propia vida.
Y nosotros, pensé mientras Barnabás envolvía un brazo alrededor de mi cintura
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y yo daba un paso atrás hacia sus pies para que él pudiera llevarme hacia el
aire, podríamos ser los únicos que podrían salvarle. Éramos ambos, su salvación y su
muerte…porque si yo no podía convencerle de hacer una elección diferente,
Nakita iba a matarle.
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Capítulo 2
Traducido por Isabella

F
ort Banks Mall fue una ola de frescor de aire acondicionado. De
hecho, podía sentir el calor del sol dejándome mientras esperaba en
el Stand de información a Barnabás y Nakita, que estaban teniendo
en ese momento una reunión detrás de las puertas dobles de cristal. Grace, mi
ángel de la guarda en su momento, ahora había sido convertida en mensajera,
quien tarareaba en algún lado por encima de mí. La bola de luz del tamaño de
una pelota de softball se había unido a nosotras tan pronto como habíamos
entrado y fue con su ayuda que habíamos encontrado el pequeño pueblo en
medio de los maizales.

Yo solo había visto realmente a Grace las pocas veces que me había
separado de mi amuleto – y casi muero por cierto. Aun siendo pequeña, era
hermosa, con una cara demasiado brillante para mirarla. La mayoría de las
veces, ella aparecía como una nube de luz brillante, algo así como las motas de
luz que aparecen en las fotografías.

Así era exactamente como salía ella en la película y era la única manera de
que un humano normal supiera que estaba allí. Yo la oía. Mis Carontes podían
también, pero los humanos no. Afortunados de ellos.

‚Había una vez una Chica Cronometradora,‛ cantaba alegremente Grace


mientras se paseaba encima mío, aburrida jugando con los ecos del techo, ‚que
no estaba de acuerdo con su Caronte. Entonces ella peleo una buena batalla, pensando
simplemente en elegir, y atrapar al chico malo.‛

‚Gracias Grace,‛ le dijo con ironía.

Ella se ilumino, su risa sonando como una cascada. A Grace le gustaba su


nuevo trabajo de mensajera, el cual había adquirido cuando le di su nombre por
primera vez. Le concedí la promoción accidentalmente, sin saber que los
nombres tenían mucho poder en el reino de los ángeles. Creo que los serafines
la asignaron a mí como castigo, pero me gustaría haberlo hecho de otra forma.
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‚¿Que pasa con los Carontes?‛ pregunto ella, volviéndose invisible cuando
se poso en la parte superior de la papelera a mi lado. Cuando las alas se
detuvieron, ella dejo de brillar intensamente.

‚Haz trabajar juntos a un Caronte Oscuro y un Caronte Blanco y veras si


ellos no tienen problemas.‛ Dije, suspirando mientras me apoyaba en el
directorio y esperaba. Mi mano recorrió mi amuleto y con mi mente me puse en
contacto con la parte divina que estaba alrededor de la piedra negra. Al igual
que la magia – que era algo así – la oscura piedra desapareció a pesar de que su
peso aun se notaba en la palma de mi mano.

Hacer desaparecer mi amuleto fue una de las primeras cosas que Nakita me
había enseñado. Algún día, me gustaría ser capaz de de hacer que se viera como
otra cosa, pero por ahora, esto era todo lo que podía manejar.

Las alas de Grace aparecieron borrosas ante mi vista debido a mi


‘habilidad’, luego se desvanecieron. ‚Por lo menos est{n hablando.‛

‚No est{n hablando, est{n discutiendo,‛ le dije. Esto iba a ser más difícil de
lo que pensaba si ellos iban a discutir todo a muerte. Estábamos aquí, era
momento de empezar a buscar la marca.

‚Tu no creerías que cambiar el cielo y la tierra iba a ser f{cil, ¿verdad?‛
pregunto Grace, y yo arrugue la frente.

‚Seria mas f{cil si pudiera dar un salto adelante y ver el futuro,‛ me queje.

‚Dale una oportunidad,‛ dijo Grace con sequedad. ‚Has dañado seriamente
el amuleto al disociarte de el.‛

Hice una mueca ante el tono de acusación en su voz. Ella me había dicho
que no lo hiciera, la ignore. Una vez hecho entonces me había salvado, pero
hasta que mi amuleto volviera a la normalidad, serian los serafines los únicos
capaces de leer las líneas del tiempo y enviar a mis Carontes Oscuros a matar
gente.

Que los serafines leyeran las líneas del tiempo era una propuesta imperfecta
ya de por si. Podían hacerlo, pero tenían complicaciones para separar el pasado
del futuro, motivo por el cual los Cronometradores eran humanos. Humanos
cronometradores - que en este caso seria yo – cogen cierta flexibilidad a lo largo
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de los milenios en el espacio cielo, dando una forma de adaptarse


perfectamente como seres humanos imperfectos cambiando sus relaciones con
la vida, el universo y todo.

Estaban teniendo lugar cosas que yo no sabia nada de ellas, y eso me


molestaba. Los serafines sabían que yo quería cambiar las cosas, y no podía
evitar sentirme como si me hubieran dado esto a modo de prueba. Como si yo
no pudiera hacer que este chico viera una nueva elección y tomar una decisión
diferente, ¿como podían esperar que yo comandará a los Carontes Oscuros?

Al verme deprimida, Grace rondo cerca. ‚No te preocupes,‛ me tranquilizo.


‚No pasara mucho tiempo antes de que seas tu quien lea las líneas temporales.
Creo que ya lo estas haciendo inconscientemente. Tu instinto de parar en el
centro comercial fue bueno. Yo no sabia que el estaba aquí.‛

‚¿Lo esta?‛ pregunte, y ella se ilumino, mientras el amuleto de Barnabás y


Nakita finalmente llegaban a un acuerdo y cabeceaban hacia nosotros. Tal vez
tenía razón. Se había producido un leve cosquilleo en mi mente cuando
habíamos volado sobre el centro comercial, algo así como la sensación de que
alguien me observaba. Cuando se lo mencione a Barnabás, el tenia un ángulo
inmediato del parkin. Esto me había dado un impulso de confianza, pero ahora,
al mirar hacia el lugar, me pregunte si había sido un verdadero sentimiento o
simplemente mis ganas de volver a poner los pies en el suelo. El centro
comercial no parecía muy prometedor.

Era lunes, así que había mucha gente, sobre todo madres arrastrando a sus
hijos a la tienda de la ropa del colegio, o los niños arrastrando a sus madres por
el mismo motivo. En un carro, un par de niñas me estaban mirando. Yo movía
mis zapatillas amarillas en las baldosas, sintiendo como encajaban
perfectamente con mi pelo punky con las puntas de color morado.

‚¿Crees que Josh esta bien?‛ le pregunte a Grace mientras arremangaba


para hacer corta mi camisa negra y roja. Si hubiera sabido que iba a ocurrir lo
de esta mañana, habría usado algo más llamativo.

‚Estará bien,‛ dijo Grace mientras Barnab{s se detenía frente a nosotros.


Los pasos de Nakita eran precisos y seguros, pero al verme perdió parte de su
postura erguida, aun intentando adaptarse mientras miraba a las niñas del
quiosco.
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‚Entonces, Grace,‛ dijo Barnab{s sin rodeos, ‚¿estas segura de que los
serafines no pueden decirnos nada mas acerca de esta marcado?‛

Suspire. Marcado. Así era como llamaban los Carontes a sus posibles
victimas. Como si el o ella no fuera a ser otra cosa que una marca en una lapida.

Nakita sonrió, sacudiéndose el pelo hacia atrás, y sonriendo hacia la neblina


rodante que era Grace. El mensaje original era que teníamos que salir del
colegio y salir en busca de ella, pero eso, Barnabás ya lo había escuchado.
‚¿Cual es el problema, Barnabás? ¿No hay suficiente información para ti? Pensé
que eras bueno en esto.‛

Era deliciosamente maliciosa y mientras Barnabás y Nakita empezaban a


pelear de nuevo, mantuve mi mirada errante.

Un grupo de chicos que estaban en la tienda de revistas nos había visto, o a


Nakita más bien, mostrando su vientre a ratos mientras le impartía clases a
Barnabás sobre la supremacía de los serafines.

Dando media vuelta, me aleje para sentarme en una de las mesas vacías. La
zona de comidas estaba bien, pero no me bastaba con sentir, necesitaba saber.

Inmediatamente sus argumentos me sonaron lejanos, y oí que empezaban a


seguirme. Grace les ofreció una de sus rimas acerca de ‘Los Carontes pelean, con
todas sus fuerzas hasta que su cuidador los deja atrás’ Honestamente, tenia
suficiente. Ellos no estaban ayudando en absoluto.

Encontré una mesa que estaba más o menos limpia, saque una silla para
sentarme de espaldas a las puertas. Silencio por fin, los dos Carontes ocuparon
sus puestos a ambos lados de mí. Nakita puso su bolso vacio en su regazo,
moviendo nerviosamente su amuleto mientras miraba a las niñas del quiosco de
pendientes. Su expresión era preocupada, no por mi estado de animo, si no
porque las niñas llevaban encaje negro y una camisa roja. Barnabás estaba
huraño mientras cabizbajo miraba su camiseta descolorida, en buen estado de
todos modos con el pelo rizado tapándole.

‚Grace,‛ dije, preguntándome como iba a convertirme en la cabeza fría de


este círculo. ‚¿Que fue exactamente lo que dijeron los serafines?‛
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Esta vez los Carontes se mantuvieron tranquilos, y el ángel mensajero bajo a


la mesa, la bruma desapareció mientras se acercaba.

‚No mucho,‛ dijo Grace, su voz etérea parecía insertarse en mi mente. ‚Los
serafines no son muy buenos dando descripciones físicas. Aparte de la
localización de la ciudad, se que el es bueno con los ordenadores.‛

Echándome hacia atrás en la silla de plástico, tache mentalmente leer en el


quiosco la revista de pistolas y municiones.

‚Los serafines nunca dijeron que el fuera un friqui de los ordenadores,‛ dijo
Barnabás secamente.

Nakita soplo. Su mano descendió a su amuleto y levante las cejas cuando vi


que la piedra gris se había vuelto una cruz gótica. ‚Los serafines predijeron que
un virus informático se liberaría en el colegio como una broma,‛ me dijo
mientras lo miraba. ‚Yo diría que se le dan bien los ordenadores. Es cuando se
entra en los sitios locales que la gente empieza a morir. Los serafines dicen que
el encontrara tanto placer en la notoriedad anónima que va a hacer que la gente
este jodida el resto de su vida. Así que tu puedes ver cuales son los mejores
intereses, Barney, para conseguir tu alma pronto, antes de que este tan
manchada y no pueda pedir la redención.‛

Apretando los dientes, Barnabás se mantuvo tranquilo, y yo me moví


nerviosamente en la silla. Es curioso como ella podía hacer que la muerte
sonara una cosa buena.

Mi sentido arácnido había dejado de zumbar y puse los codos sobre la


mesa, pensando que esto era tan productivo como la sala de estudios que
frecuentaba. Estaría dispuesta a apostar que el tipo de la camiseta de de Harley
con la chica que le iba detrás hablando por teléfono estaban saliendo. Tenia que
encontrar a alguien con un protector de bolsillo.

‚Friqui de los ordenadores,‛ murmure, entrecerrando los ojos mientras


miraba hacia las ventanas brillantes del techo. Supuse que agradecería
cualquier información que los serafines pudieran darme, pero frustrada, deje
caer la cabeza sobre la mesa. Sonó como un golpe frio y seco contra mi frente.

Barnabás me puso una mano sobre el hombro. ‚Madison, esta bien,‛ dijo el,
haciéndome sentir aun peor. ‚Estamos intentando encontrar a este tipo lo mas
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 18

rápido que podamos. Las líneas de tiempo son más difíciles de leer cuanto mas
lejos son del presente. Incluso Ron es incapaz de dar una descripción ante esto y
eso es por lo general, pocas horas antes de la elección de la marca falta, un día
entero. Estamos confiando en las interpretaciones angelicales, así que rel{jate.‛

Levante la cabeza, sin dejar de mirar la mesa. El Cronometrador Blanco no


era mi persona favorita en estos días, pero me sentí mejor sabiendo que Ron
también andaba de cabeza intentando salvar a este chico. Una vez lo supiera,
las cosas serian mas difíciles.

‚¡Madison lo estas haciendo bien! Tu nos has traído aquí, ¿no?‛ Dijo
Barnabás, con la mano aun ahí. ‚Yo puedo sentir la marca también. Tus
instintos son buenos. Lo encontraremos.‛

Alce la mirada para leer primero su esperanza, y luego la duda de Nakita.


Sobre la mesa, Grace se quedo en silencio, escuchando.

‚¿A tiempo?‛ pregunte. ‚¿Antes de que Ron se de cuenta y envié a alguien


a que nos detenga? No creo que un Caronte blanco se crea que intento salvar a
ese chico con Nakita de pie a mi lado, estas dispuesto a matarlo si no puedo
hacerle cambiar de opinión, ¿lo harías?‛

Barnabás lanzo una mirada a Nakita, y el apretón de su amuleto se tenso.


‚Claro que lo haría.‛ Dijo, pero el estaba mintiendo. ‚Madison no te preocupes,
lo encontraremos. Es solo nerviosismo por tu primera prevención.‛

‚Es una Caronte,‛ dijo Nakita , mirando sus largas uñas y luego adelante.
‚No es un Caronte de prevención.‛

‚Eso es lo que hace Madison,‛ disparo Barnabás, con la cara roja.

‚Bueno, ¡me tengo que ir!‛ dijo Grace, el suave resplandor se alzo en sus
alas y envió aroma de fresas hacia mi. ‚Me dijeron que te trajera aquí y luego
me fuera.‛

‚¿Te vas?‛ le pregunte, preocupada, pero entonces algo en las palabras de


Grace me llamo la atención. ‚¿Volver?‛ repetí, y su brillo por encima de la
mesa se volvió casi un verde enfermizo. ‚¿No dejarnos? ¡Maldita sea Grace!,
¿estas espi{ndonos?‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 19

Barnabás se enderezo preocupado y un gemido agudo vino desde Grace.


‚¡No seas tonta!‛ exclamo ella.

‚Los serafines est{n confundidos y quieren asegurarse de que llegar a la


marca es posible. Es por eso que tu has conseguido este Caronte, Madison.
Siempre hay un cambio de política cuando un nuevo Cronometrador se hace
cargo, pero nunca ha habido uno tan grande como el que quieres. No creo que
un Caronte pueda abrir la mente de un ser humano para elegir un camino
diferente sin dejar de ser anónimo, sobre todo si tiene tanto a Carontes Blancos
como Oscuros trabajando juntos para hacerlo. Si Barnabás y Nakita no pueden
hacer esto con tu ayuda, ¿como se espera que lo hagan juntos y sin ti?‛

¿Estoy ayudando a Barnabás y Nakita? Pensé confundida. Todo lo que había


estado haciendo era pensar como iba a salvar a ese chico, no sentar un
precedente para que otros me siguieran. Pero tenia que admitir que Ron no
había venido el mismo, pero envió a sus Carontes Blancos y se fue como alma
que lleva el diablo.

‚¿Juntos?‛ le pregunte, mirando a Barnabás y Nakita, ambos con aspecto


enfermo. ‚¿Porque haría falta que fueran los dos?‛

‚Porque si la el Caronte blanco no puede efectuar el cambio, los serafines


quieren un Caronte Oscuro allí para segar el alma.‛ Dijo el ángel de la guarda
alegremente. ‚¡Y no estoy espiando! ¡Estoy evaluando!‛

‚¡Es la misma diferencia!‛ Exclame, entonces me encorve en mi asiento


cuando el tipo que leía la revista levanto la cabeza.

‚Bueno no es como si tu realmente desearas el trabajo,‛ espero Grace.


‚¿Cuanto apoyo incondicional se supone que los serafines tienen que poner a
tus ideas si tu dejaras tu posición tan pronto como encuentres tu cuerpo real y
vuelvas a vivir de nuevo?‛

La expresión de Nakita se helo, una sombra de miedo apareció en la parte


superior de su mirada. Oh mierda. El zumbido de las alas de Grace parecía
aumentar. Nakita no aparto la vista de mí. Era como si yo ya la hubiera
abandonado- yo, la persona que había dañado su sabiduría perfecta de la
muerte humana. Ella no encajaba ya como uno de sus hermanos oscuros y yo
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 20

era posiblemente la única que podía ser capaz de ayudarla a entender porque,
ya que era mis recuerdos y temores lo que ella había cambiado.

‚Bueno, tal vez si pudiera mantener mis ideas un poco mas, podría
mantener el trabajo después de encontrar mi cuerpo,‛ dije en un susurro. No
era la primera vez que había considerado mantenerlo una vez encontrara mi
cuerpo. Los cronometradores no tenían que estar muertos – de hecho, creo que
era la primera que lo estaba. Pero no me quedaría en un sistema que no creía en
el. O bien me dejaban hacer las cosas a mi manera o estaba fuera de esto.

‚Yo no creo en el destino final y no voy a enviar Carontes Oscuros a


sacrificar almas, porque la gente ignore la elección,‛ dije sabiendo que a través
de ella mis palabras serian escuchadas. ‚Si los serafines no me ayudan, yo no
voy a hacer esto viva o muerta.‛

Estaba discutiendo con el cielo, pero no me importaba. Grace se quedo en


silencio, después de que la bruma se iluminara. ‚No se porque quieres estar
con vida de todos modos,‛ murmuro, al parecer dispuesta a concederme el
punto. ‚Es complicado. Quiero decir, arrojas liquido por todos los orificios y no
puedes permanecer despierto.‛

‚Si y comemos también‚, dije con amargura. ‚¿Sabes cuanto tiempo ha


pasado desde que la comida sabia bien?‛ Era una buena cosa que no lo hubiera
necesitado, porque me habría muerto de hambre.

Ella hizo un pequeño mohín y una nueva capa de urgencia cayó sobre mí
como una segunda piel. Oleaje. ¿No solo tenia que salvar la vida de un chico,
tenia que hacer que Barnabás y Nakita trabajaran juntos en el proceso? Genial.
Simplemente genial.

‚No creías que iba a ser tan fácil, ¿verdad?‛ Dijo Grace desde el centro de la
mesa, con su brillo cambiando violentamente a través del espectro antes de que
se alzara como una estrella y deslizándose hacia las claraboyas altas. Parecía
que estábamos solos, pero apuesto a que ella estaba mirando.

Nadie dijo nada, mire a Barnabás y Nakita, que estaban haciéndome caso
omiso, con expresión sombría. ‚Voy a por un batido,‛ dije de pronto, no
hambrienta por supuesto, pero necesitaba una excusa para alejarme de ellos un
momento. ‚¿Queréis algo?‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 21

No espere respuesta, de pie casi tropiezo con una silla que alguien había
dejado fuera. La cogí mientras caía, me detuve en seco y con cuidado la coloque
debajo de una mesa, intentando hacer que pareciera que era mi intención
hacerlo.

Di unas zancadas hacia el restaurante, y juro que me pareció oír reír a


Grace. Me escapaba de la escuela con grandes expectativas, pero ahora me
sentía totalmente inadecuada. No era una emoción desconocida, pero esta era
la primera vez que la vida de alguien estaba en la balanza. Escogí un
restaurante cualquiera, puse las manos sobre el mostrador y me quede mirando
el menú, en realidad sin verlo. Tenia el dinero que mi padre me había dado
para el almuerzo, y no es que ya comiera almuerzo. ¡Mierda! tenía que enviarle un
mensaje diciéndole que llegaría tarde hoy después de clase.

‚¿Vas a seguir leyendo o vas a pedir?‛ dijo una voz a la derecha delante
mío, me sacudí de mi aturdimiento y mire hacia abajo para encontrarme con un
tipo de mi edad con un delantal rojo con un pollo en el que afirmaba
audazmente, EL MEJOR POLLO. Un sombrero de papel intentaba contener su
pelo color rubio arenoso, pero fracasaba. Tenía un rostro agradable, y sonrió al
ver mi vergüenza. Su etiqueta con el nombre decía Ace. Mis pensamientos se
movieron hacia Josh y sentí un momento de culpa por haberle dejado en el
colegio.

‚Uh, ¿puedes ponerme un batido de vainilla? Pequeño,‛ le dije, porque no


era como si fuera a bebérmelo.

‚¿Algo para tus amigos?‛

Me volví para ver a Nakita con una mano el bolso que me miraba con
mirada perdida. Barnabás tenía la cabeza echada atrás, mirando al techo, como
si estuviera aburrido. Por lo menos no estaban peleando. ‚¿Has estado
mirándome?‛ Le pregunte, inclinando la cabeza para mirarlo tímidamente.
Estúpida pero tímida.

Cogió una taza de tamaño más grande al que había ordenado y sonrió.
‚Bonita forma de moverse con la silla. Casi parecía que tu intención era hacer
eso.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 22

Rodé los ojos, maldiciendo a Grace por haberla dejado allí para mí. ‚Si,‛
dije, pasando de un pie a otro terriblemente consciente de mí pelo. No había
visto nadie aquí con el pelo morado excepto alguna chica trabajando en un sitio
caliente.

Ace estaba en silencio, de espaldas a mí mientras llenaba la copa. Solo había


un chico trabajando en la trastienda, limpiando los hornos. Era demasiado
temprano para el almuerzo. ‚Así que, ¿cuando empieza el colegio para ti?‛
Pregunte, necesitando decir algo.

Ace se dio la vuelta, mirándome con malicia como si hubiera sacudido la


parte superior, ‚Mañana. No se suponía que tenia que estar aquí esta mañana,
entonces me llamaron. Hombre, podría haber matado a mi madre.‛ Deslizo la
bebida hacia mí. ‚Ya tenia mi día planeado. Navegar por la web y comer queso.
Esta es la ultima vez que dejo que mi madre coja el teléfono y responda por mi.‛

‚Trabajo a tiempo parcial en una tienda de flores y odio cuando mi padre lo


hace.‛

Ace se ajusto el sombrero haciendo una mueca. ‚Si estoy en el trabajo, ella
sabe donde esto.‛ Dijo con amargura. ‚Ella siempre me vigila como si fuera un
niño. Trabaja en el hospital, por lo que ve entrar de todo por la sala de
urgencias y piensa que voy a tener un accidente.‛

Mi mente revoloteaba al despertar en la morgue del hospital, muerta en un


accidente de coche. Mi corazón empezó a dar golpes. Pensé que no era el
recuerdo de mi muerte. Un hormigueo subió a través de mi aura mientras un
pensamiento evolucionaba en mi mente. ¿Su mamá trabaja en el hospital?
¿Puede ser tan fácil? Tal vez es eso lo que Barnabás quería decir con lo de mis
buenos instintos. ‚Te escucho,‛ le dije, mirando a Barnabás y Nakita , pero ellos
estaban mirándome a mi obviamente.

‚Así que ahora todo lo que quiero hacer hoy, lo hare mañana.‛ Dijo Ace,
encogiéndose de hombros.

Di un respingo, ‚Has dicho que tienes clase mañana.‛

‚Dije que mañana empieza el colegio, no que yo fuera a estar allí.‛


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 23

Oh, un poco rebelde ¿verdad? Cogí una pajita, la abrí y la metí en el vaso.
‚¿Vas a perderte el primer día de clase?‛ le pregunte, fingiendo tomar un sorbo
de mi vaso.

‚Algo así,‛ dijo devolviéndome una sonrisa. ‚Tengo cosas mas importantes
que hacer.‛

‚¿Como que?‛ le dije, sonriendo como las chicas guays de mi escuela me


habían enseñado antes de que la dejara.

Ace se rio, halagado de alguna forma. ‚Música. Shoe y yo tenemos la


música.‛

‚¿Estas en un grupo?‛ pregunte. ¡Mierda!, no tenia nada después de todo.

‚No, no lo tengo. La conseguimos. Antes de que sea puesto a la venta.‛

La tensión que había puesto en sus palabras me llamo de nuevo. ‚¿La


robáis?‛ le pregunte, con los ojos muy abiertos. Si podía hackear la música, un
equipo del hospital no seria nada.

Emocionada, me incline hacia delante. Ace no perdió el tiempo y se inclino


sobre el mostrador golpeando el botón de venta y cerrando la caja antes de que
se abriera. ‚La semana pasada,‛ susurro, con los ojos brill{ndole, ‚Shoe se
metió en la web de un importante sello discográfico y hackeo una pista de
música de Cold Play que no sale hasta la próxima primavera.‛

Me estremecí. Mi aura parecía sonar. Podía entrar en sitios seguros. ‚¿En


serio? ¿Puedo escucharlo?‛

Ace se echo hacia atrás con astucia, de pie detrás del mostrador como si
fuera el rey del mundo. ‚Shoe y yo no dejamos escuchad a nadie. No hasta que
no hayamos terminado. Tengo que ponerle la portada al disco. Entonces se
puede comprar.‛

Solté mi respiración. Fingiendo incredulidad, ladee la cabeza. ‚De acuerdo,


lo entiendo,‛ dije con tono aburrido. ‚Lo que tu digas.‛

Pero Ace se echo a reír. ‚¿No me crees?‛ Se giro hacia la parte de atr{s y
grito. ‚¡Shoe! Dile el nombre del nuevo {lbum de Coldplay.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 24

El chico de la parte de atrás salió del horno que estaba limpiando. Había
manchas de grasa en su hombro y parecía estar loco. ‚¿Que diablos te pasa
Ace?‛ exclamo. ‚¡Vas a conseguir que nos cojan!‛

‚¡Amigo!‛ dijo Ace, sosteniendo una mano arriba en rendición. ‚Me fio.
Ella no va a decir nada."

Shoe lanzo el trapo que había estado usando a Ace, pero se quedo corto.
‚¡Ni siquiera se quien es!‛ grito y una puerta lateral de la cocina se abrió de
golpe y un hombre de baja estatura con una camisa que le venia demasiado
pequeña entro por ella. Jefe. Me di cuenta antes de ver sus zapatos marrones con
cordones.

‚Mitch, ¿hay algún problema?‛ pregunto, y Shoe se volvió hacia el.

‚¡No!‛ grito. Cogiendo el limpiador del horno, y lo roció salvajemente en la


pared frontal.

‚Chill, ¡amigo!‛ dijo Ace. ‚¡No es gran cosa!‛ Estaba casi riendo y solo hizo
que Shoe se enojara más, lo que convirtió sus movimientos en rápidos y
erráticos.

El director lo vio también y se acerco. ‚Relájate,‛ dijo el hombre intentando


parecer que estaba a cargo. ‚He soportado tu mal genio todo el verano.‛

Shoe se dio la vuelta. ‚¿Si? Bien. ¡Renuncio!‛ Grito, golpeando el horno.


‚¡No necesito esta mierda!‛

‚No, ¡Estas despedido!‛ dijo el hombre y Ace se puso a reír, mirando hacia
la zona de las mesas para ver quien estaba mirando.

‚Vete fuera y no vuelvas mas. ¡Te voy a enviar un cheque por última vez! Y
no te molestes en pedir referencias.‛

‚Te puedes guardar tu dinero,‛ murmuro Shoe, y vi como se quitaba el


delantal y lo arrojaba con asco. En cuanto a Ace, a quien claramente creía que
todo era una gran broma, Shoe le dijo: ‚Eres un maldito perdedor, Ace, ¿lo
sabes? Eres tan estúpido que ni siquiera puedes mantener la boca cerrada. Ya
hemos terminado, ¿entendido? Estas por tu cuenta.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 25

La cara de Ace se encendió, la ira grabada en su rostro en un instante.


‚¿Si?‛ dijo en voz alta. ‚Bien, ¡puedes irte por ahí pendejo!‛ el repentino cambio
a la ira de Ace me hizo sentirme mal y agarre mi batido con mas fuerza,
intentando averiguar.

Mi boca se abrió y di un paso atrás. Todas las mesas nos estaban mirando
ahora.

‚¡Fuera!‛ grito el jefe, con su redonda cara roja. ‚¡Los dos!‛

‚Yo ni siquiera quería venir hoy, cubo relleno de manteca de cerdo,‛ dijo
Ace en voz baja, pero sabia que el jefe lo había escuchado, porque empezó a
soplar como si estuviera sin aliento.

Temblando de ira, el jefe señalo las puertas del centro comercial. ‚¡Fuera!‛

Fui dando pasos hacia atrás cuando Ace puso una mano sobre el mostrador
y lo salto. Desde la parte trasera de la cocina llego un portazo pesado mientras
Shoe salía. Cogió el sombrero que llevaba sobre la cabeza y Ace lo dejo caer al
suelo. ‚Este trabajo apesta,‛ dijo y se alejo, quitándose el delantal mientras se
iba y tirándolo al suelo.

El Jefe estaba que echaba humo y le dije tímidamente. ‚¿Cuando le debo?‛

Miro hacia arriba como si reparara por primera vez en mí, sus
pensamientos claramente puestos en Ace y Shoe. ‚Nada. Es gratis.‛ Dijo el.
‚Siento que hayas tenido que ver esto. Han sido un dolor en la boca durante
todo el verano. Debí haberlos sacado al tercer día de estar aquí.‛

‚Lo siento,‛ dije, sin saber porque me disculpaba. Sintiéndome extraña me


di la vuelta y volvió con Nakita y Barnabás. Con la mirada agachada me deslice
en mi asiento y tome un sorbo.

Barnabás se aclaro la garganta. ‚¿Que era todo eso?‛

La fealdad se fue de mi, levante la vista, sonriendo a Nakita y luego a


Barnabás. ‚Encontré a nuestra marca. Es Ace.‛

Nakita movió los dedos por su amuleto como si quisiera seguirle y segar su
alma en el estacionamiento. Estaba empezando a entender porque los serafines
creían que los Carontes Blancos y Oscuros no podían trabajar juntos. Como
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 26

contener a Nakita hasta haberle dado la oportunidad a Ace de cambiar sus


maneras no iba a ser fácil.

‚¿Estas segura?‛ me pregunto con los ojos encendidos y llenos de ganas.

Asentí, compartiendo su entusiasmo, pero no la razón de el. Podía hacer esto.


Me relaje igual que Barnabás había dicho y deje que me intuición me dijera.
‚Bastante segura,‛ dije. ‚Ace es bueno con los ordenadores y no le importa
romper la ley. Dice que empieza mañana el colegio, pero que no ira. Su madre
trabaja en un hospital y lo tiene muy controlado porque cree que es probable
que vaya a hacer alguna cosa que la haga enfadar.‛ Vi a Ace caminar hacia el
parquin, y todo lo que pude pensar fue en mi padre y lo cerca que el había
estado de verme. Ya no llevaba su delantal. Ace era como un diamante en bruto
con sus pantalones desgastados y una camiseta de color negro.

‚Vamos,‛ les dije cuando Ace lleno de rabia golpeo un coche al azar.
‚Tengo que hablar con el.‛

Nos pusimos de pie como uno solo, pero Barnabás vacilo. ‚No se,‛ dijo,
mientras le seguíamos. ‚Sonó como si Shoe fuera el tipo del ordenador.‛

Me volví hacia el, con un sentimiento de frio en las manos. ‚¿Oíste eso?‛

‚Todo el mundo lo escucho,‛ dijo Nakita, sacudiéndose el pelo. Su bolso


colgado del hombro, se dirigió hacia las puertas como si fuera una modelo de
pasarela.

La duda me golpeo y ralentice mi ritmo.

‚Shoe es el que perdió los estribos primero,‛ dijo Barnabás. ‚Y el es el que


corto el sistema, entonces es el que puede crear el virus, no el tipo que hace las
caratulas.‛

Fruncí el ceño mientras llegábamos a las puertas y salíamos al sol de la


tarde. Mas allá de la línea amarilla de la zona de aparcamiento de empleados,
Ace estaba de pie junto a un coche deportivo y discutiendo con Shoe.
Mordiéndome el labio pensé en la experiencia de más de mil años de Barnabás
en comparación con mi intuición. Probablemente era Shoe, pero no quería
perder de vista a Ace. El recuerdo de lo rápido que su estado de ánimo había
cambiado, no me dejaba. Algo estaba mal.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 27

‚De acuerdo,‛ dije vacilante, mientras empez{bamos a andar de nuevo.


‚Barnabás, si tu crees que es Shoe debes seguirlo. Nakita y yo seguiremos a Ace
y aprenderemos lo que podamos.‛ Y os mantendré a Nakita y a ti separados,
también.

Nakita emitió un sonido contento, contenta de estas medidas adoptadas.


‚Debería ser yo la que siguiera a Shoe, no Barnabas,‛ dijo ella firmemente. ‚De
esta forma si intenta poner un virus en el ordenador, estaré allí para matarlo.‛

Me detuve en seco, y ella siguió dos pasos antes de detenerse. Mi mirada


fue hacia Barnabás y me miro con una expresión indefensa. ‚Um, Nakita, creo
que deberías venir conmigo.‛

La Caronte no tenia ni idea de muchas cosas, pero no era estúpida. Un


suave rubor empaño su rostro y se puso rígida, las uñas de sus pies brillando al
sol. ‚Estas intentando mantenerme lejos de Shoe.‛

Estaba intentando mantenerla alejada de Barnabas también. Tome aire para


protestar, pero lo deje escapar. ‚Si, pero ven conmigo de todos modos. Ace le
gustan las chicas bonitas. El te dirá cualquier cosa.‛ Nakita me miro y añadí.
‚Vamos, ayúdame con esto. Ron no puede saber que estamos fuera de los Tree
Rivers, sin embargo, tenemos tonelada de tiempo.‛

‚Es tu jefa,‛ murmuro Barnabás, y Nakita frunció el ceño.

‚Esta bien,‛ dijo ella recapitulando, ‚pero si Shoe hace algo, prométeme que
me llamaras, Barnabás.‛

‚¿Quieres que te llame?‛ dijo Barnabas, con los pulgares en los bolsillos de
sus pantalones vaqueros. ‚¿Como?, eres un Caronte Oscuro y yo Blanco.
Nuestras resonancias están demasiado separadas para que nuestros amuletos
puedan llamarse.‛

Nakita sonrió, cambiando su amuleto de cruz gótica de nuevo a su piedra


normal plana acomodada en una canasta de plata. ‚Ya no eres tan blanco como
crees, Caronte. ¿Has mirado tu aura últimamente? Te estas volviendo neutral.
Apostaría a que podemos hablar a través de nuestros amuletos. Te estas
volviendo oscuro. Amigo.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 28

La expresión de Barnabás se horrorizo, y miro su propio amuleto. Cogiendo


a Nakita por el brazo nos puse en movimiento antes de que Ace se alejara. Sabía
que Barnabás no estaba contento por haber perdido su condición de Caronte
Blanco, pero ella no tenia que atormentarle al respecto. Desde que dejo a Ron y
los Carontes Blancos, se le consideraba un Caronte Sombrío, un grupo de
ángeles vigilantes despreciados por los Carontes Blancos y Oscuros por igual,
por su costumbre de matar sin razón.

Si había una plaga, los Carontes Oscuros estaban allí. La guerra era su
corralito. No seria hasta que el color del amuleto de Barnabás se moviera hacia
el mío para que el fuera considerado respetable de nuevo, pero desde que era
un Caronte Oscuro que no creía en el destino, no iba a encajar en el cielo , y
probablemente no le dejarían volver, tampoco.

‚Os cogeré unos teléfonos la próxima vez en el centro comercial,‛ les dije
con acritud. Pero si yo supiera como usar mi puto amuleto para hablar en
silencio con ellos, entonces no seria necesario.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 29

Capítulo 3
Traducido por Nuria


¡Ace!" Grité, el duro pavimento envió sacudidas a mi cuerpo conforme
mis pies impactaban contra el suelo al correr hacia el camión.
"¡Espérate!"

Nakita, aparentemente, no entendió que había que darse prisa, y ella


tranquilamente iba detrás de mí con su bolso y sandalias a juego. Barnabás iba
en dirección opuesta, probablemente buscando un lugar tranquilo para esperar
y echar a volar tras Shoe. La espalda de Shoe estaba encorvada mientras se
detenía junto a un solitario coche deportivo que estaba estacionado en un lugar
sombreado.

Oyendo mi voz, Ace se apoyó contra su camión y puso sus pulgares en sus
bolsillos. Desaceleré, aun sin respirar pesadamente. Vale, quizás tuviese
algunos beneficios esto de estar muerto. Nakita me alcanzó, y desaceleré aún
más. "Está enfadado", dijo ella simplemente a medida que acompasábamos los
pasos. "¿Estás segura de que nos contará algo?"

"Sí, bueno, los amigos a veces se enfadan" dije, recordando cómo había
estado furiosa con Wendy, mi mejor amiga en Florida, donde había vivido antes
de mudarme a Three Rivers. La mayor parte de nuestras discusiones habían
provenido de mi penosa cabezonería de formar parte de la gente guay, pero
Wendy era demasiado independiente. Aun cuando peleamos, sin embargo,
permanecimos siendo amigas.

"¿Cómo puedes estar enfadado y te puede caer bien alguien al mismo


tiempo?" preguntó Nakita.

Observé a Shoe entrar en su coche y ponerlo en marcha, acelerando al


máximo el motor. "Simplemente lo haces. A ti te cae bien Barnabás, ¿verdad?
¿Aun cuando discutáis?"

"No," ella dijo inmediatamente, entonces vaciló. "Él es más listo de lo que
pensaba. Podría ser que tuviese razón y yo estuviese equivocada".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 30

"Esto es lo mismo" dije, señalando a Ace, quien se había subido encima del
camión y se alisaba la camiseta con una mano.

Ella manoseó su amuleto y preguntó, "¿Quién tiene razón aquí?"

Le sonreí a Ace y dije, "No tiene importancia".

Ella suspiró. "No lo entiendo".

‚Es un asunto de amistad‛. Desviando mi sonrisa más brillante, arrastré los


pies para parar, y me coloqué en modo chica-popular. Usualmente me ayudaba
a conectar con los desconocidos, de esta forma el tiempo que había empleado
intentando ser popular no había sido una pérdida de tiempo. Supongo.

Pero mi sonrisa se desvaneció cuando Ace casi ladró, "¿Qué quieres?"

Nakita trató de alcanzar su amuleto, y ‘accidentalmente’ caí encima de su


pie. "Uh, nada," dije mientras ella me apartaba de un empujón, pero yo ya me
mecía de regreso. "Quería decirte que lamento haber hecho que te despidiesen.
Fue un poco mi culpa". Ah, el poder de una cara bonita.

Le di una mirada amarga, de grandes ojos, y de seguro, él cambió su cara


de P.O1. Pero él no me miraba a mí, sino a Nakita. Pero ella era un ángel. ¿Por
qué iba a competir con eso?

"No fue vuestra culpa", dijo él, su voz mitigándose. "Shoe es un burro." ¡Un
destello de cólera enrojeció su cara, y él gritó tras el coche de Shoe, "¡Idiota!"

"¿Le puedo segar2, también? ¿Simplemente por amor al arte?" Nakita


preguntó, y Ace se giró, conmocionado.

"Basta", mascullé, pero él había escuchado.

"¿Qué has dicho?"

Me lamí los labios, luchando por encontrar las palabras. "¿Así que te gusta
la música?" Barboté, y él regresó a mí.

1
P.O: Iniciales de ‘Piss Off’: Vete a la mierda.
2
Segar: Matar.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 31

Mientras el miraba de mi a Nakita, casi podía ver a sus pensamientos


reorganizarse, preguntándose si tenía una oportunidad con ella. Seguro, eso era
muy probable. No.

"Sip", dijo él, a pesar de eso mirándola, y ella de pronto sonrió y soltó una
risita como Amy, mi némesis terrenal de la escuela con sandalias de diseño.
Escuchar ese ruido salir de ella hizo que exprimiese su cerebro, y no estaba
sorprendida cuando Ace agregó, "No tengo nada para hacer ahora mismo.
¿Quieres escuchar algo?"

‚¡Por supuesto!‛ Dije apasionadamente, y él salió de la puerta, golpeándose


el hombro en el espejo lateral y tratando de no perder los nervios.

"Entra," él dijo, abriendo la puerta. "Vivo a veinte minutos de aquí. Puedes


escuchar las nuevas melodías".

Por un momento, me asomé al largo asiento, recordando la última vez que


me metí en el coche de un desconocido. Había terminado en el fondo de un
barranco, muerta. Bien, no puedes matar a alguien dos veces, pensé. Además,
Nakita iba conmigo.

Con paso cuidadoso para evitar a los CDs esparcidos por todas partes,
entré, deslizándose a la puerta del otro lado. El camión era viejo, los asientos
estaban rasgados y polvorientos y eran de un vinilo pasado de moda. Las cajas
de CDs reflejaban destellos brillantes cuando la luz los iluminaba, y arranqué
con fuerza uno de debajo de Nakita antes de que ella se sentase sobre él. Era
claramente una maqueta casera, con una calcomanía a un lado. Josh tenía un
viejo camión, también, pero él por lo menos lo mantenía limpio. Se me pasó por
la cabeza el mandarle un mensaje para ver cómo le iba, excepto por el hecho de
que hacer eso delante de Ace probablemente no era la mejor forma para
convencerlo de mostrarme sus descargas ilegales.

"¿Esto es obra tuya?" Pregunté a medida que entró Ace, cerrando de golpe
su puerta dos veces para conseguir que se cerrase correctamente. Simplemente
de mirar sus coches, podría decir que había una gran diferencia entre Ace y
Shoe, y me pregunté si eso contribuía a la rabia que se tenían. Celos,
Posiblemente.

"Es de Shoe" dijo él con sequedad.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 32

"No, quiero decir las ilustraciones," agregué, y su mandíbula apretada se


relajó a medida que giraba la llave y el motor arrancó. "Me gusta".

La música sonaba muy fuerte, la percusión era fuerte, y el cantante gritaba


tanto que no podías comprender lo que decía. "Gracias," dijo él mientras bajaba
el volumen de la música para que pudiésemos escucharle. "Mi madre piensa
que podría recibir una beca, ¿pero para qué? No creo que pudiese ganarme la
vida haciendo garabatos".

Pensé acerca de mi propio sueño de ganarme la vida con mi fotografía, y


suspiré al comprender lo que decía. "Tal vez," dije vacilante. "Pero es más fácil
de encontrar la forma de ganar dinero con algo que te gusta que aprender a
amar un trabajo con el que puedes ganar dinero."

Él no dijo nada, y sintiendo los ojos de Nakita sobre mí, bajé la ventanilla.
¡Jesús!, era de manivela, y estaba dura, como si hiciese un año que nadie la
usaba. Lentamente el aire estancado fue reemplazado por aire nuevo a medida
que nos dirigimos hacia la salida, saliendo de la misma forma en que Shoe lo
había hecho antes. Había visto un pequeño pueblo al este de aquí cuando
habíamos entrado volando, justamente en la mitad de los campos de maíz.

Ace inclinó su cabeza al compás de la música, observando a Nakita para ver


si le gustaba.

Mi atención descendió hacia el CD que sujetaba, mientras lo ponía en el


tablero de mando del automóvil, manoseando otra caja decorada de forma
similar. Era todo remolinos y colores extremos, brillantes, recordándome a un
nudo celta.

"Esto es bueno", dije conforme miraba el puñado de discos que tenía a la


vista. "Las ilustraciones, digo. Deberías hablar con tu profesora de arte. Apuesto
a que ella sabe de una beca".

"Las personas como ellos no ayudan a la gente como yo," dijo Ace, su
estado de {nimo estaba por los suelos. "Adem{s, la universidad… no es para
mí".

Mis cejas se levantaron. ¿A las personas les caía bien él?

"Eso es mío, también," dijo él, y seguí la dirección de su dedo hacia el


viaducto por el que circulábamos. Está cubierto de un grafiti con los mismos
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 33

remolinos y ángulos. Los símbolos del original estaban por todas partes,
haciéndolo parecerse a una mezcla entre un tatuaje y un vitral3.

"Vaya," dije, moviéndome en mi asiento para ver que el otro lado de la


carretera estaba decorado también. "Es precioso‛.

Ace me dio una sonrisa de chico malo y golpeó ligeramente sus dedos al
compás de los tambores. "Casi me pillan la noche que lo pinté. Me estaban
esperando. Vigilándome desde el tanque de agua".

Nakita hizo un sonido estrangulado, y seguí su mirada hacia el objeto


bulboso creciendo a gran altura sobre los campos de maíz. Me quedé
boquiabierta y con la mirada pasmada.

"¿Te gusta?" preguntó Ace, y asentí con la cabeza, demasiado horrorizada


para hacer nada más.

"¡Se parece a un ala negra!‛ Nakita susurró, y asentí con la cabeza otra vez.
Envuelto alrededor del tanque de agua había un cuervo blanco y negro, parecía
como si se estuviese disolviendo en un charco de babas. Era exactamente lo que
un ala negra debía parecer a los vivos, solo que en una mezcla de grafiti y
petroglifos Nativo Americanos. Los alas negras eran animales carroñeros poco
inteligentes del mundo de alma, al parecer segaban las esperanzas robándolas
de las almas desatendidas. Los odiaba, y me ponían la carne de gallina. Ambos
Caronte, tanto los Blancos como los Oscuros los utilizaban para localizar a
algún objetivo, por muy odiosos que fuesen.

"De hecho esa es mi marca registrada" decía Ace, y arrastré mi atención de


vuelta hacia él.

"¿Los cuervos?" Dije, reprimiendo un temblor. "¿De dónde te vino la idea de


ponerlos así derritiéndose?"

Su mandíbula se apretó con fuerza. "Shoe".

De vuelta a Shoe. Daba la impresión de que Barnabás estaba en lo correcto:


Shoe era nuestro blanco, no Ace.

Ace quitó una mano del volante y miró a Nakita. "Tú no hablas mucho".

3
Vitral: Ventana con vidrios de colores.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 34

"No le veo la gracia cuando las acciones son más convincentes," dijo ella
rígidamente, comportándose completamente al revés de como lo había hecho
anteriormente con aquella sonrisa.

Asintiendo con la cabeza como si hubiese dicho algo importante, Ace dijo,
"Yo también".

Tuve que regresar a Shoe. Barnabás había estado en lo cierto. "Oye, lo siento
por tu amigo," dije con vacilación, intentando hacer creer que la conversación
iba sobre él.

Ace refunfuñó. "Es tonto. Le he conocido desde el tercer grado, y siempre


ha sido un borrico. Nada es lo bastante bueno para él. Siempre persigue ir a la
gran ciudad y disfrutar de 'la gran vida'. ¿Qué hay de malo en simplemente
quedarse aquí y ser normal?"

"¿El es hacker?" pregunté."Tú haces el trabajo artístico, ¿y él consigue las


cosas?"

Ace se quedó con la mirada fija, sin aminorar la velocidad. "Yup," dijo
sarcásticamente.

"Soy simplemente el tío que lo pone guay. Él se marcha a la universidad a


finales de este año. Entre llenar aplicaciones y prepararme para la prueba de
aptitud, sólo le veo en el trabajo".

Ohhh, está celoso. Se siente utilizado. No quería pasar el día con Ace cuando
era Shoe el que estaba en peligro.

Podría no ser el momento oportuno, pero los campos de maíz se estaban


terminando. "Uh, ¿crees que nos podrías llevar a la casa de Shoe?‛ Pregunté, y
Ace se inclinó hacia adelante más allá de Nakita para verme.

"Te estas quedando conmigo" dijo Ace con repugnancia. "Todo esto fue
para llegar hasta él ¿verdad? Las chicas sois todas iguales. Veis un coche
elegante y pensáis que soy una mierda".

"¡No!" Exclamé, mi pulso saltó a la vida. Sintiendo eso, Nakita me miró.


"Ace, Shoe está en peligro", dije, y viendo su cólera, barbullé, "lo sé todo acerca
del virus que él quiere subir a Internet en la escuela. Va a matar personas".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 35

El camión desvió del rumbo y Ace me miro, conmocionado.

‚¡Mira la carretera!‛ Grité a medida que recordé entrar en la cañada


profunda. Mi mano se cerró de golpe alrededor del tablero. Pero él no me
estaba escuchando.

"Los virus informáticos no mata personas," dijo, enojado. ‚¿Cómo te


enteraste de eso? ¿Te lo dijo él? ¿Te lo dijo Shoe, y entonces te mosqueaste
conmigo por hablarte sobre nuestra estúpida música?‛

Su voz hirió mis oídos, y recorrí la mirada de él hacía la carretera, contenta


de que nadie estuviese viendo esto. "Él no me lo dijo," musité "es mi trabajo
saber cosas".

Ace se rió, pero respiré aliviada cuando él volvió la mirada hacia la


carretera. Nakita permaneció inmóvil entre nosotros, palpando su amuleto y se
mantuvo al margen, pero su ceño fruncido me dijo que pensaba que estaba
cometiendo un error.

"Es vuestro trabajo, ¿eh? ¿Y quién eres tú, la niña silenciosa? ¿Su músculo 4?"

Nakita dejó caer su mano para estabilizar su cartera pequeña en sus


rodillas. "Sí".

Él se rió fieramente otra vez, negando con la cabeza mientras mascullaba,


"Soy un imán para las pollitas chifladas. Imán de las pollitas locas".

Un arranque de ira se encendió en mi interior. "No me importa si me crees o


no", dije abruptamente, "pero ese virus va a librarse de la escuela y meterse en
el hospital. Las personas van a morir".

Baje el tono y dije. "Me tienes que ayudar a convencer a Shoe para que no lo
haga. Él no me escuchará, pero tú eres su amigo".

Ace me miró a mí, sus ojos manteniendo una cólera intoxicarte. "Vete al
diablo," dijo repentinamente. ‚Y el puñetero Shoe. ¿Por qué debería ayudarte
con tu locura sobre él?"

4
Musculo: Hace referencia a ‘guardaespaldas’
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 36

Frustrada, solté el tablero. Shoe iría a la universidad, y Ace no. Él temía no


ser lo suficientemente bueno para seguir adelante, y era más fácil culpar a Shoe
que intentarlo y fallar.

"¿No vamos a ver Shoe? preguntó Nakita.

"Antes me iría al infierno," dijo Ace, y Nakita se movió.

"¡Oye!" gritó Ace repentinamente devolviendo a Nakita a su asiento y


agarrándola por la camisa.

"No vas a ir al infierno. Vas a llevarnos a la casa de Shoe" ella requirió, y el


camión dio un viraje.

"¡Nakita! Grité cuando cruzamos la línea amarilla, entonces dimos un viraje


de vuelta, nuestras llantas girando hacia la derecha sin rumbo.

"¡Suéltame, pollita chiflada!"

Ace gritó, aun sujetando el volante sin tomar rumbo a más de 60 millas por
hora. Lentamente él nos trajo de vuelta hacia el pavimento, y sólo después de
que todas las cuatro ruedas estaban en la vía pisó el freno y dimos bandazos
para parar.

"¡Largaos!" Ace estaba gritando. "¡Salid de mi camión, bichos raros!‛

No me lo pensé, abrí de un empujón la puerta y me deslicé hacia el caliente


pavimento. Estaba sacudiéndome, casi enferma, recordando el accidente
automovilístico que me había matado.

"Te dije que nos llevases con Shoe" dijo Nakita desde el interior del camión.

"¡Y yo te dije que te largues!" Su cartera voló, aterrizando por mis pies.
"Nunca le he pegado a una chica, pero estás empujando a ello, nena. ¿Por qué es
que las sexualmente atractivas están todas majaras?"

¿Nena? ¿De verdad la había llamado nena?

Nakita se había dado por vencida y yo tiraba de su brazo. "Vamos, vamos."

Tiré del derecho mientras Ace apretaba el acelerador, los neumáticos


chirriaron sobre el pavimento. La puerta no estaba cerrada todavía.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 37

"¡Pollitas chifladas!" gritó, dejando una nube de humo de aceite y el sonido


desvaneciente de su motor.

Nakita estaba a mi lado, temblando de ira. "No estoy loca", dijo mientras
recogía su bolso rojo, y yo permanecía en silencio de acuerdo con ella. El sonido
del camión de Ace se desvaneció rápidamente, y miré de arriba a abajo la
desierta carretera, preguntándome dónde estaba Barnabás.

"Esto no funcionó como yo quería", me dijo, empezando a caminar en la


dirección en la que Ace se había ido. La ciudad no puede estar demasiado lejos.

Nakita se ajustó las sandalias, y empezó a hacer clic, clic, clic sobre el
pavimento caliente. "Le dijiste demasiado. No se lo iba a creer. Para eso son las
guadañas."

Hubo una acusación silenciosa en su tono de que estaba siendo estúpida,


por tratar de cambiar varios miles de años de tradición. Pensativa, observé las
filas rectas de maíz que iban cambiando de altura poco a poco a medida que
caminábamos. Por lo menos Barnabás estaba viendo a la persona adecuada.

"¿No deberíamos buscar a Barnabás?‛ preguntó Nakita, viendo mi silencio


continuó. "Traté de llamarlo cuando estaba en la camioneta de Ace y no pude
llegar a él. No está lo suficientemente oscuro todavía. Pero tu podrías
alcanzarlo, sin embargo."

‚¿Yo? ‚chillé, avergonzada al pensar en las veces que lo había intentado


junto a Barnabás. "Mi amuleto está demasiado lejos del suyo, también. Caronte
Blanco, Cronometrador de Oscuro... Ya sabes," dije, contenta de haber tenido
mi teléfono. En el peor de los casos, me gustaría llamar a mi padre y decirle que
estaba haciendo algo con Josh. Podría cubrirme. No debería haber dicho todo
aquello a Ace. No es de extrañar que él pensase que estaba loca. Yo también lo
pensaría.

Los pasos de Nakita se silenciaron mientras caminaba por en medio de la


carretera siguiendo la línea amarilla. ‚El amuleto de Barnab{s era rojo, cuando
era un Caronte de blanco‛ dijo, y me miró, pensando que me hacía una idea.
‚Cambió a verde neutral desde entonces. No puedo llegar hasta su amuleto
fluyendo desde el mío, tú eres la que ha estado practicando con él. Puedo sentir
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 38

su amuleto en el éter. Podría llevarte, pero sería más fácil encontrar a Barnabás
si supiésemos exactamente donde est{‛

Yo suspiré, tocando con mi mano mi amuleto. Cada vez que trataba de


usarle, o no pasaba nada o cometía un error.

"¿Qué vas a perder por intentarlo?" rogó Nakita. "Barnabás debe saber lo
que pasó. Tendrá una insufrible actitud sabe-lo-todo, pero es parte de nuestro
equipo...."

Ella había dicho la última palabra, muy a su estilo, y una ligera sonrisa
iluminó mi estado de {nimo. Lo estaba intentando. ‚Muy bien‛ dije
alegremente,‛ pero si no puedo llegar hasta él, lo encontraremos por vía aérea".

Ella asintió con la cabeza, y me estremecí de anticipación. Sería genial si


pudiera hacer esto. Mi amuleto era el mismo profundo y brillante negro que
había sido desde que lo tenia, pero Barnabás se había desplazado hacia abajo
del espectro. Nakita tenía razón: podría ser posible.

Emocionada, me dirigí a los altos campos de maíz, pasando la desierta


carretera y escuchando el sonido del viento. O no pasaría nada, o me haría el
trabajo. No era como si yo no supiese la teoría después de tantas noches
intentándolo. Parada, me senté derecha en el borde de la carretera.

Nakita comprensiblemente se me quedó mirando.

"No soy buena en esto," le expliqué, avergonzada. "Necesito sentarme".


Cerrando los ojos, tomé tres respiraciones lentas, era mi manera de inducirme
una sensación de calma. Mis hombros se aliviaron mientras exhalaba.

En mi mente, traté de imaginar mi aura. En realidad no era mi aura, ya que


estaba muerta, pero la resonancia del amuleto actuaba de la misma forma.
Porque tenía el amuleto de Cronometradora Oscura, mi aura o resonancia era
de un violeta tan oscuro como para estar fuera del espectro visible, básicamente,
negra. Con los ojos cerrados, extendí la mano para sostener el negro brillante de
la piedra acunada en un alambre de plata y colocada alrededor del cuello con
una simple cuerda.

Mientras seguía a veinte metros de mí, tenía la ilusión de un cuerpo. Si me


alejaba demasiado, las Alas Negras me sentirían y se comerían mi miserable
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 39

alma llevándome a la muerte total. Se parecía mucho a un amuleto de Caronte,


pero era más poderoso y, sin embargo, como había dicho Nakita más flexible.

Reclamar eso desde mi predecesor no había hecho estallar mi alma y


convertirla en polvo como hubiese pasado al reclamar el amuleto de un
Caronte. La mayoría de la gente no los distinguiría si no se los señalabas con tu
dedo... Podría quitármelo, pero no tenía muchas ganas de hacerlo.

Los hilos de plata que sostenían la piedra se estaban calentando, ahora la


piedra era más cálida, como si se estuviera reteniendo el calor del sol. Todo lo
que tenía que hacer, en teoría, era imaginar mis pensamientos en el mismo color
o longitud de onda que mi aura para poder deslizarme. Entonces yo tenía que
sostener mis pensamientos mientras cambiaba de color para que coincidiese con
el aura de Barnabás para que mi pensamiento pudiese deslizarse a través de su
aura y así me escuchase. Su resonancia era verde ahora. No debería ser tan
difícil como tratar de cambiar todo el camino hasta el espectro. Tal vez podría
hacerlo. Tal vez.

Evoqué a Barnabás, su sonrisa, su humor oscuro, su forma extraña de mirar


el mundo, la edad detrás de sus ojos café, y cómo emitieron plata cuando él tocó
la divinidad. Barnabás, pensé, desviando mis pensamientos tan ‘violeta’ como
podría conseguirlos pasando por mi aura. Nakita y yo nos hemos quedado tiradas
en la carretera.

Una emoción se encendió dentro de mí a medida que sentí que mis


pensamientos se deslizan con alas fuera de mí para producir un efecto
indeseado en contra de la esfera de aire que rodeaba la tierra. Pero entonces, mi
pensamiento entero pareció estallar en una luz brillante. Horrorizada, abrí mis
ojos y pestañeé.

"Los sentí dejarte," dijo Nakita, sonriente. "Pero se dispersaron cuando


difractaron contra el sol. Necesitas modificar tus pensamientos hacia su aura
antes de que ellos reboten fuera de la atmósfera, no después".

Ella lo sintió, pensé, reprimiendo un estremecimiento de anticipación.


Barnabás nunca lo había dicho cuando practicábamos. Cambié de posición
torpemente en el pavimento para disfrazar mi temblor, pensando que esto se
vería estúpido para alguien que condujese por aquí. No es que hubiese pasado
nadie por eso. Esto era lo más cercano que alguna vez había conseguido de
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 40

conseguirlo. Nakita estaba capacitada para enseñarme cómo doblar la luz


alrededor de mi amuleto para esconderlo, también. Tal vez Nakita, por todas
sus incapacidades embarazosas entre personas, era la mejor maestra. ¿Y estaría
Barnabás contento con eso?
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 41

Capítulo 4
Traducido por Glad

N
akita estaba junto a mi con sus pantalones vaqueros y sus sandalias
de diseñador, las uñas negras de sus pies brillando bajo la luz de
sol. Sus ojos bajaron rápidamente desde el cielo hacia los crujientes
campos en ambos lados de nosotras. Su amuleto ardía en un violeta púrpura
que enviaba destellos de luz en contra de las sombras más oscuras en el maíz.
Meciendo su pelo, ella dio vueltas en círculos, escudriñando el cielo.

"Barnabas, ¿dónde estás?‛ Ella dijo, y yo temblé. Ya no había vacilación ni


torpeza. Ella era un ángel vengador, y nada más. "Quizá deberíamos de evitar
esto. Yo capturo la firma de tu amuleto, pero si Barnabás puede seguir el eco de
tus pensamiento hasta aquí, entonces Chronos también lo hará".

No me moví, escuchando al viento sacudir ruidosamente las delgadas hojas


como el papel y escudriñando los cielos y mi aura ante cualquier picazón de
energía. Maldita sea, si Ron sabía que estábamos aquí, haría todo más difícil.

"Barnabas," Nakita suspiró mientras ella fijaba su mirada en algo que yo no


podía ver, y tuve un pensamiento de que probablemente esta era la primera vez
que ella estaba muy a gusto por verle.

Mis propios hombros se entumecieron, y me sentí intranquila cuando


recordé que Ron también podía sentirme. Era él, podía verle en mi cabeza. Así
como yo podía alcanzar sus pensamientos, él también podía alcanzar los míos.
¿Y quién era el chico que le acompañaba? ¿Su reemplazo? ¿Mi futuro
adversario?

Ron o Chronos, como usualmente era llamado—era sucio. Sí, él creía en la


elección por sobre el destino, como yo. Sí, el enviaba a los Carontes Blancos
para impedirle a los Carontes Oscuros matar almas antes de tiempo, el antes me
había caído bien. Si las cosas fueran diferentes, ambos trabajaríamos en lo
mismo. Pero él me había mentido, acerca de quién yo era cuando había muerto.
Él me había ocultado que yo era una pequeña cronometradora, hasta que el
tiempo señalado paso, y Kairos escondió mi cuerpo, obligándome a aceptar mi
estatus del Cronometradora Oscura para permanecer viva. Él me había
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 42

traicionado a mí y Barnabás, a ambos, y le había mentido al cielo en su intento


de desviar el balance de poder divino a su favor.

Y se suponía que el era el bueno.

Las sandalias de Nakita se rasparon contra el pavimento, la preocupación


estaba grabada profundamente en su frente. "Tan pronto como Barnabás llegue,
nos iremos. Ningún de nosotros podrá enfrentarse a Chronos," ella dijo,
visiblemente molesta. "Él puede detener el tiempo".

Avancé lentamente hacia ella, deseando que Barnabás ya hubiera


aterrizado. Él simplemente era un manchón blanco en contra del cielo azul.
"Está bien," dije, como si tratara de convencerme a mi misma. "Incluso si Ron
congela el tiempo, él no me puede matar‛.

Ella se giro hacia mí, sus ojos cambiando del plateado a un divino color.
"Pero ¿qué si él te lleva donde no puedo seguirte?‛

Tragando saliva, me encogí de hombros. "¿Por qué lo haría? Solo estamos


parados en medio de un camino. Tal vez él simplemente envié a un Caronte a
hacer una comprobación". Pero era más que eso, y ambas lo sabíamos. Una vez
que Ron supiera lo que estábamos tramando, él simplemente movería una
mano, y enviaría un ángel de la guarda con Shoe y yo perdería.

Mire hacia arriba, cuando la luz fue eclipsada por un instante, sólo para
cegarme cuando un par de alas blancas parpadearon frente al sol. En una ráfaga
de aire, Barnabás aterrizó frente a nosotras, sus ojos café brillando con deleite.
"¡Madison, lo hiciste!" Él dijo, sus alas arqueándose hacia arriba, las puntas
uniéndose por un instante antes de desaparecer. Caminando a grandes, él
exclamó, "Sabia que podrías hacerlo. ¡Cuando tu pensamiento se metió entre los
míos—estoy tan orgulloso de ti!" Pero entonces él se detuvo bruscamente al
darse cuenta de Nakita y mi preocupación. "¿Qué hay de malo?‛

Nakita volvió a tomar una posición firme, sus ojos en el cielo. "Su mensaje
también hizo eco en la mente de Chronos así como en la tuya".

"Probablemente el también esta viniendo" dije miserablemente.

‚¿Cómo?‛ Barnabás dijo, luciendo confundido. "Su resonancia no es la


misma que la mía".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 43

Los ojos de Nakita escaneaban el cielo por todas partes. "Ambos son
Cronometradores," ella dijo. "¿No crees que los serafines les crearon de la
misma manera por si quisieran hablar?‛

"Vi a través de sus ojos," añadí.

"¡Dulces querubines voladores!" Barnabás maldijo. "¿Estas escudándola?‛

‚¡Por supuesto que la estoy escudando!, ¡Tu ángel caído!" Nakita espetó.
"Pero estoy segura de que él recibió un vislumbre de donde estamos, antes de
que yo pudiera escudarla completamente. Tu así lo viste, ¿verdad?‛

Barnabás hizo una mueca. Tomando mi codo, nos saco de la carretera, hacia
los tallos de maíz. "Muy bien. Vámonos", él le dijo a Nakita. ‚Salgamos de aquí
antes de que él se presente‛.

Nakita asintió y su amuleto resplandeció mientras ella se encogía de


hombros y sus alas aparecieron. En un instante, estaba de nuevo en medio de
dos ángeles, uno con alas blancas, el otro con oscuras, ambos estaban
preocupados. ‚¿Por qué no puedo hacer nada bien?‛ Pregunté, sin esperar una
respuesta, pero me asuste cuando el hablo.

Barnabás estiró sus alas de nuevo _ echaron a andar de un lado de la vía


hacia el otro. "No es correcto o equivocado," él dijo, abrazándome mucho más
cerca a el, mientras me arrastraba hacia el aire. "Lo hiciste, y ahora necesitas
aprender a enfocarte. ¿Por qué esperas ser perfecta la primera vez? Te haría
intentarlo de nuevo ahora mismo, pero tenemos que permanecer escudados de
aquí en adelante, y una mente escudada es una que esta cerrada".

Silenciosa, me recliné hacia él, respirando el olor del sol y de sus plumas.
Aunque el me había dicho de que estaba bien, yo aun seria culpable si Ron
sacara en claro lo que estábamos tramando.

"Lo hiciste bien," él dijo mientras uno de sus brazos se presionaba a mi


alrededor. "Haz trabajado duro para esta habilidad, y deberías estar feliz‛

"Gracias," dije, sintiéndose ligeramente mejor mientras daba un paso hacia


sus pies.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 44

Pero él no se movía. En realidad—nada se movía—ni Barnabás, ni el viento,


o el maíz—Me estremecí cuando sentí algo nebuloso tocar mi amuleto y
reclamar una parte de él.

El instinto me golpeo, y basándome en mis horas de practica, tome una


visión interior de mi amuleto, colocándole entre la tela del tiempo.

El "ahora" era una línea trémula extendiéndose hacia el infinito. Mi alma


empezó a enviar pensamientos hacia el futuro, arrastrándome hacia el futuro en
el mismo instante, antes de que se convirtiera en el presente. Detrás de mí en mi
visión interna podía ver mi pasado, entretejiéndose pesadamente en Barnabás,
Nakita, e incluso en los brillantes pensamientos de Ace. Pero no sólo mis
pensamientos estaban atados a mi amuleto y al presente, como era lo normal.
Había alguien más.

Ron, pensé en pánico, mientras pasaba una mano sobre el tejido del tiempo
para destruir los lazos de su amuleto, con el mío.

Abrí mis ojos. Todo el proceso había tenido una duración menos de la que
una burbuja estallara.

"¿Barnabás?‛ Yo temblaba, viendo su brazo todavía a mi alrededor. Me


deslicé de su agarre inmóvil. El pánico se deslizo entre mi pensamiento y mi
acción. Ron había detenido tiempo. El hijo de perra.

Con mi corazón latiendo, di vuelta en la quietud absoluta del tiempo


suspendido. Allí, justo en la medio de la vía, estaba Ron.

Ron no era un hombre alto, poco más que mi altura, lo cual no era
sorprendente, ya que él nació hace miles de años. Creo que su altura le
molestaba. Tenía un pelo gris rizado que una vez había sido negro, y su tez era
obscura. Sus ojos cambiaban de color según su estado de ánimo, y me pregunté
si los míos hacían lo mismo, también. Llevaba puesto el mismo traje de color
claro que le había visto usar, hace unos momentos atrás en mi cabeza, algo
griego.

Verle de pie, a solo tres metros de distancia con una expresión


conmocionada me dio un destello de satisfacción. Tal vez él no había esperado
que yo haya roto su alcance tan fácilmente.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 45

"Detén esto," dije mientras el sujeto mi amuleto. Si el trataba de quitarme mi


amuleto, lo que no era probable, ya que el no podría usarle, pero aun así me fue
difícil dejarle de presionar fuertemente mi piedra caliente.

Ron miro la vía detrás de mí. "Felicitaciones," dijo, "Tanto por quebrantar
mi agarre en tu amuleto y aprender a conversar silenciosamente con él. Sé que
Barnabás no te lo enseñó. Él tiene la imaginación de una lombriz. ¿Lo hicieron
los serafines? Tal vez, la próxima vez puedas usar tu voz interior. Ya que
estabas gritando".

Él estaba siendo sarcástico, y levante una mano de precaución, cuando él


dio un paso al frente. Parando repentinamente, él puso una mano en su cadera
para mirarme como si estuviera viendo a un perro dando ladridos agudos
detrás de una cerca. "¿Qué estas haciendo aquí afuera? ¿No es este un día de
clases?‛

"Nada por lo que necesites preocuparte," le dije, retrocediendo para estar a


la par con Barnabás y Nakita. ‚Déjales ir‛.

Él sonrió. Y recordé los días cuándo yo creía en el. "No necesitas tener
miedo de mí, Madison. No te lastimaré. Los serafines me matarían. Tu significas
una gran esperanza para ellos". Él negó con la cabeza, casi riéndose de mí.

"Hay peores cosas que ser herido‛. Y apuesto que sabes todo eso, pensé,
deseando tener a Barnabás y Nakita para respaldarme. ¡Diablos!, era extraño
tenerlos cerca y en silencio justo detrás de mí. Con un pensamiento repentino,
mire dentro de mi mente, buscando la tela de tiempo con el resplandor violeta
de Nakita y el verde brillante de Barnabás. Encontrándolos, pase mi mano sobre
todos los hilos que los conectaba con el amuleto de Ron.

Sintiendo eso, Ron maldijo, retrocediendo mientras Barnabás y Nakita


cobraban vida.

Una oleada de emoción me inundo, y tambalee debido al esfuerzo de


intentar dividir mi atención entre el ahora y el futuro. En el momento que
dejaba de limpiar los hilos del amuleto de Ron, ellos estarían congelados
nuevamente.

‚¡Déjale en paz, Ron!" Barnabás gritó mientras él me atrapaba, y sentí una


sensación extraña de cosquilleo a través de mi aura.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 46

Nakita estaba en medio de nosotros, y quise llorar. ¡Los había liberado! No


estaba tan indefensa después de todo, Barnabás estaba evitando mi caída.

"No soy yo," Ron dijo misteriosamente. "Ella no es justamente buena en lo


que está tratando de hacer".

El brazo de Barnabás se cerró herméticamente a mí alrededor, y lentamente


fui encontrando mi equilibrio. ‚Bueno," dije suavemente cuando dividir mis
pensamientos se hizo más fácil. Antes, había practicado limpiar los hilos, pero
no lo había hecho en mucho tiempo. Aun así, aquella vez se trataba de destruir
los hilos de mi amuleto, no el de otro. Esto era—duro, y no podía concentrarme
en todo.

Nakita lentamente se agazapo instintivamente, sabiendo que Ron no iba a


lastimarnos. Él solo quería saber lo que estábamos haciendo. No íbamos a
decírselo, y él lucia infeliz mientras poco a poco lo mantuve bajo mi propio
poder. Todo lo que teníamos que hacer era alejarnos de este lugar, y él no
conseguiría nada.

"¿Qué quieres?‛ le pregunte, aunque era obvio. ¿Y quién estaba contigo en el


desierto? Tienes suficiente tiempo para enseñarle, ¿verdad?

Ron extendió sus manos mientras intentaba verse razonable. "Saber lo que
están haciendo," él dijo. "No están guadañando, o yo ya lo sabría".

Nakita se desplazo para poner su pequeño cuerpo entre mí y Ron. "Así que
creo que debes de irte, ¿verdad?‛ Ella le dijo, pero él la ignoró, mirando hacia
Barnabás en su lugar.

"Matas a aquellos que una vez me juraste proteger," dijo Ron


sarcásticamente, y me di cuenta de que ellos dos no habían hablado desde que
me había convertido en Cronometrador Oscuro y Barnabás le había dejado. "Te
di tu amuleto. Eras el mejor, Barnabás, pero no te tomaría de regreso así te
humillaras junto a una roca durante mil años. ¿Te has asociado con el mismo
Caronte Oscuro contra el que alguna vez peleaste? Mírala, con sus uñas negras
y su bolso brillante. Ella no es guerrera. Te haces ver a ti mismo como un inepto
y un tonto. Ahora, verdaderamente has caído, {ngel‛.

"Tu no me diste mi amuleto," Barnabás dijo fuertemente. "El predecesor de


tu predecesor lo hizo," él dijo, soltando su amuleto y dejando que la pureza del
verde neutral brillara. Nakita y yo intercambiamos una mirada de curiosidad.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 47

¿Justamente cuánto tiempo había estado Barnabás en esto? "Todavía creo en la


elección," él siguió estoicamente. "Las tiempos cambian. Tú no lo hiciste. No te
debo nada. Tu me mentiste", Barnabás terminó amargamente.

"Me haz fallado," dijo Ron, como si no le importara. "te dije que
mantuvieras la boca cerrada. Si lo hubieras hecho, todo habría ido bien y los
Carontes Blancos tendrían el mando a esta hora".

"Confié en ti para hacer lo correcto," Barnabás dijo suavemente. "Ahora


confío en Madison".

Ron lanzó resoplidos. "Tan fácilmente haz sido convencido, para matar
inocentes," el Cronometrador Blanco se burló, intentado no mirarnos, mientras
avanzaba lentamente.

"No lo soy," dijo Barnabás dijo, y Nakita le empujó.

"Y la marca no es un inocente," ella dijo con vehemencia, el rubor subiendo


por sus mejillas. "¡Él deliberadamente dejara que las personas mueran por sus
acciones, y después, lo hará de nuevo!‛

Alarmada, le disparé a una mirada de advertencia. ‚¡C{llate!‛ Exclamé.


¡Ella estaba diciéndolo todo!

Pero el daño ya estaba hecho, y los ojos de Ron se iluminaron. "Es una
cosecha," dijo. "Pero yo aún no le he visto brillar".

Nakita hizo una pose dramática. "Los serafines ven más lejos que tu".

‚¿Quieres callarte la boca?‛ Barnabás gritó.

"Y no te preocupes, Chronos," Nakita se jacto, imperturbable. "Le mataré


antes de que puedas poner un ángel de la guarda a protegerle en sus últimos
días. ¡Tu no empañaras la vista perfecta de los serafines esta vez!‛

Estupendo. Simplemente grandioso. Esto no estaba bien, y miré directamente


hacia los congelados campos de maíz mientras nosotros estábamos de pie en la
mitad de una carretera vacía, el cielo sujetaba un sol que no se movía. "Ron,
¿serías capaz de desistir?‛ Dije, sabiendo que él no lo haría. "Ya sea que lo creas
o no, estoy tratando de salvar a alguien".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 48

Barnabás hizo un ruido constreñido, y me gire hacia él. "¿Qué?, ¿Cómo si el


no hubiera descubierto que esta es una cosecha?‛ Dije agriamente. "Nakita
amablemente hundió este bote".

Nakita se estremeció con una ola de pesar, apenas dándose cuenta de lo que
había hecho.

"Tú," dijo Ron, señalándome con el dedo, "Eres una asesina por permitir
que un ángel guadañe al chico. ¡Intenté salvarte de eso, pero echaste a perder tu
propia oportunidad de hacer una diferencia en la tierra!‛

Mis ojos se estrecharon, y di un paso adelante hasta que el toque de


Barnabás me detuvo. "¡Bueno!, ¡tal vez si no me hubieras mentido, yo podría
ver las cosas diferentemente!‛ Exclamé, quitándose de encima a Barnabás. Sí, yo
trabajaba para los Carontes Oscuros, pero estaba tratando de cambiar las cosas,
hacer lo que los serafines esperaban y creían de mí. Ron, sin embargo, nunca iba
a entenderlo.

"No me importa si me crees o no," dije. "Estoy tratando de salvar la vida de


alguien. ¿Por qué no te vas?‛

Sonriendo, él deslizó su mirada fija hacia Nakita. Ella estaba allí para matar
a Shoe si fallábamos, y un brillo calculador entró en sus ojos. No importa qué, él
siempre me vería con malos ojos—encadenada por lo que él creía de mí, y
también por todo lo que él sabía.

"Estas tratando de salvar a alguien," él repitió, burlándose de mí. "Con un


traidor Caronte Blanco que se ha convertido en sombrío y un Caronte Oscuro al
lado por si fallas".

"¡No soy un traidor por hacer lo que creo!‛, dijo Barnabás, y alcé mi
barbilla.

"Le encontraremos primero," manifesté.

Ron se rió ahogadamente, comenzó a retroceder con su talón lentamente.


"Vamos a ver," él dijo a sabiendas. "No sabes a quién estas buscando. Porque,
aun no has visto el brillo intermitentemente. Quiero decir. Eres mucho más
confiada. ¿Los serafines están dándote la información? Buena suerte con eso.
Son tan previsores que no pueden ver lo que está debajo de sus engreídas
narices. No tienes idea de lo que estas haciendo".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 49

"¿Sí?‛ Devolví la mirada, fijamente. "¿De quién es la falla?‛

Una enorme sonrisa apareció sobre su cara. "Mía," dijo, mirándome, y de


repente él desapareció.

El mundo precipitadamente salto al movimiento con un zumbido de


sonido, y yo salte, conmocionada por el torrente de ruido y luz nueva. Mi
enfoque se nublo mientras me encontraba intentando limpiar los hilos de un
amuleto que ya no estaba allí.

Le había visto irse esta vez, sucumbiendo en sí mismo para dejar de existir
en un brillo fresco, sin sonido. Yo nunca podría hacer eso.

"Dios te ayude, Nakita," dijo Barnabás mientras el caminaba a grandes


pasos lejos del medio de la vía. "¿Por qué no le dibujaste una foto del que
estamos intentando salvar?‛

Nakita giro sobre sus talones. "Tu, aun sigues creyendo que yo estoy
tratando de salvar a Shoe", ella dijo, apuntando su bolso hacia él como si fuera
un arma. "Aun siendo un ala negra, un Caronte Blanco, o ángel de la guarda le
voy a matar. ¡No esperare hasta que un loco Cronometrador Blanco ponga un
ángel de la guarda que cuide a Shoe!‛

"¡Ron no es loco!" Barnabás gritó, aun sintiendo un poco de lealtad,


aparentemente hacia él.

"Sí, ¡lo es!‛

Suspiré, sentándome en medio de la caliente vía dándoles la espalda,


esperando que ambos terminen de gritarse. Al menos Ron creía que no
sabíamos quien era el marcado.

‚Tu no mataras a Shoe!" dijo Barnabás. "¡No te dejaré!‛

"Cuidado, Barnabás," ella se burló. "Las sombras est{n alcanz{ndote‛.

Eso era un golpe bajo, y me gire para mirarla con una mano en una cadera,
parada a centímetros de él. Él fruncía el ceño, pensativo, sintiendo vergüenza.
Barnabás no era sombrío. Claro, él había dejado a Ron, pero él aun no era un
vigilante que existía sólo para matar el alma de alguien.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 50

"No dejare que un ángel de la guarda cuide de Shoe," ella dijo, señalando
vagamente hacia la—no vista cuidad. "Desde el momento que él elige matar, y
causarle dolor al mundo. ¡No hay manera de que el viva de esa manera!‛

‚Curioso, ¿no es lo que tu haces? ¿Matar personas?‛ Él le devolvió el golpe,


y ella dio un grito amortiguado de frustración.

"Cierra tu ruidosa boca," le dijo entre dientes a Barnabás. "Toda esta


conversación meterá a Madison en problemas. Los serafines la observan".

"Entonces debes ser tu quien se calle," él lanzó resoplidos, pero sentí una
mezcla de nueva preocupación. Había olvidado eso. Los serafines me
observaban, y si no podía lograr que un Caronte Blanco y un Oscuro trabajaran
juntos, entonces esto nunca iba a funcionar.

"Barnabás," interrumpí, sin levantar la vista del campo de maíz. ¿Ron sabe
lo que estamos haciendo es eso imposible, o simplemente difícil?‛

Finalmente dejaron de discutir. Los pasos de Barnabás fueron silenciosos en


sus descoloridas zapatillas mientras el se ponía frente a mí. Sus alas habían
desaparecido, y él lucia embrujado. Claramente Ron le había remecido. "Hasta
que Ron pueda identificar quién es la marca, creo que nada ha cambiado,"
Barnabás dijo, y Nakita bufó. "Necesitaremos ser más prudentes para evitar que
nos siga. Uno de nosotros necesita quedarse contigo y así esconder la
resonancia de tu amuleto". Su mirada fue hacia mí detrás, posándose en Nakita.
"Seria mucho más fácil su no estuvieras empeñada en matar a Shoe".

‚¡Aun no le he matado!" Ella protestó, asechando hacia adelante. "Pero no


dejare que Chronos o uno de sus Carontes le ponga un ángel de la guarda para
protegerle. Un ángel es para siempre, y con la protección autómata del cielo, él
podría hacer un daño incalculable‛.

Me pregunté cuántos de los recientes dictadores de la historia habían sido el


resultado de que Ron pusiera a un Caronte Blanco a defender su derecho a la
elección. Poniéndome de pie, suspiré. "Esto es en realidad extraño," dije
mientras limpiaba mis mallas negras. "Les quiero a ambos, y no sé por qué‛.

Nakita pestañeó, su atención se desvió de Barnabás hacia mí. "Porque eres


la Cronometradora Oscura," ella dijo, como si fuera obvio.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 51

Suspirando, miré de arriba a abajo la vía, queriendo estar en cualquier otra


parte. Cualquier otro lugar. ‚¿Qué piensas que él hará?‛ Le pregunté a
Barnabás. "Ron, quiero decir. Tu le conoces mejor".

Barnabás miró hacia el lugar del pavimento donde Ron había estado
parado. "Probablemente él busque en las líneas del tiempo locales hasta que
averigüe donde hemos estado, entonces intentara identificar a la gente con la
que hemos tenido contacto. Pero en realidad, él no podrá actuar hasta que la
marca brille y el pueda ver el futuro. Allí es cuando el enviara a un Caronte. A
veces el Cronometrador Oscuro ve el brillo primero. La ultima persona que vea
el brillo, tiene la imagen de la marca más clara, así eso iguala las cosas,
supongo".

Asentí, pensando que eso tenia sentido. Mientras más cercano era el
destello del tiempo al momento decisivo, más claras eran las percepciones del
cronometrador. Haciendo una mueca, recorrí con la mirada mi reloj de pulsera.
Se hacía tarde, e iba a requerirme un rato llegar a casa, incluso volando. "Tengo
que regresar a la escuela," dije, preocupada. "Ver a mi papá. Y recoger mis
deberes de Josh".

‚Me quedaré aquí," dijo Barnabás inmediatamente, y Nakita


predeciblemente se erizó.

‚¿Por qué?‛ Ella preguntó beligerante, de puntillas sobre sus pies.

Busque los ojos de Barnabás, diciéndole sin decir palabra alguna que yo iba
a ocuparme de eso. Ella estaba lo suficientemente disgustada. "Porque Barnabás
no matará a Shoe, si Ron envía alguien a observarnos‛. Nakita comenzó a
protestar, y yo me enojé. "Mira," le dije, mostrando un poco de mi frustración.
"No hay alas negras a la vista. No he visto el brillo aún, y tampoco Ron.
Barnabás, ¿puedes alcanzar mis pensamientos en una distancia tan grande?‛

"No cuando estas escudada," él dijo con tristeza.

"No hay problema", le dije, pasando una mano por mi cabeza para alisar mi
pelo. "No necesito estar escudada cuando este en casa. Ron sabe dónde vivo, y
si él me ve allí, entonces él podría perder las esperanzas de espiarme. Nakita me
puede llevar volando a casa, y traerme de regreso cuando papá se haya ido a
dormir. Mientras tanto, tu nos iras avisando por si algo cambia por aquí".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 52

Ese era un buen plan, hasta donde se podía decir, pero Barnabás lucia tan
poco entusiasmado como lo estaba Nakita. "Te llamaré si algo cambia," él
estuvo de acuerdo, luciendo abatido, y me percaté que lo que le molestaba era
que su resonancia oficialmente había cambiado de posición hacia lo sombrío. Él
ya no podía considerarse entre los Carontes Blancos, no importaba lo que el
creía.

Su contacto conmigo le había cambiado tanto como lo había hecho con


Nakita.

"De acuerdo," dije dócilmente, no me gustaba verle deprimido. Él había


sido un Caronte Blanco por un largo tiempo. No estaba entre sus planes ser
parte de los Carontes Oscuros, aun si su amuleto cambiaba en un color tan
negro como el mío. Él iba a estar solo y alejado por el resto de su vida.

Me aproximé a Nakita, nunca antes había volado con ella, pero ya que
Barnabás podía hacerlo, ella también podía hacerlo. Por un momento, ella lucia
como alguien que iba a protestar, pero al ver la tristeza de Barnabás, ella
simplemente arqueó sus alas a gran altura para que estas se tocaran por encima
de su cabeza. Me quedé mirando fijamente, pensando en lo hermosos, y
brillantes que eran, aun mientras ella usaba esas sandalias y ropas coloridas.
Mire por último a Barnabás, y me sentí mal por dejarle de esa manera.

‚¿Puedes volar con otra persona?‛ Le pregunté, y Nakita me dirigió una


mirada para después volver a mirar a Barnabás.

"Te lo diré en un momento," ella dijo, mientras yo me alegraba en mi


interior por esta muerta

Viendo que ya nos disponíamos a marchar, Barnabás nos regalo una leve
sonrisa. "Váyanse" dijo. "Me mantendré en un lugar distante desde donde
pueda observar a Shoe sin que pueda descubrirme. Creo que tenemos al menos
hasta la medianoche para que Ron encuentre la resonancia de Shoe entre los
hilos del tiempo".

Por su incomoda postura, no sabia si debía de creerle. Suspirando, camine


para estar junto a Nakita. Su brazo envuelto alrededor de mi cintura con
vacilación, para luego abrir sus alas tambaleantes, las que nos elevaron tan solo
una pulgada para luego caer. Mi corazón latía con fuerza, y ella cambio de
postura.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 53

"Siento mucho que seas diferente, ahora," ella le dijo a Barnabás. Sus
palabras eran suaves, pero yo sabia que el las había escuchado mientras el
matorral de sus cabellos revoloteaba. "Ella cambia a las personas," ella dijo,
como si yo no estuviera de pie allí mismo. "Tal vez ese es su propósito".

"Tal vez," dijo Barnabás; y después se agacho cuando Nakita abrió sus alas
y paso por encima de él.

Me quedé sin aliento mientras el maíz a nuestro alrededor se aplanaba y de


repente ya estábamos en el aire. El repentino desplazamiento de presión del aire
me hizo respingar _ sin mencionar el ascenso inestable de Nakita _ y miré hacia
abajo mientras Barnabás miraba hacia arriba. Él estaba de pie en la mitad de la
desierta vía, las impresiones de las alas de Nakita habían formado algo que
lucia casi como un círculo que solían aparecer a veces en los campos de cosecha.
Mi estómago se sacudió, y me sujete del brazo de Nakita haciéndome
fuertemente a ella. Ella no era tan buena como Barnabás para llevarme, pero
sabía que podía hacerlo, y me relajé, oyendo como se le escapaba un suspiro de
alivio.

Mientras ella me llevaba de regreso a Three Rivers, mi mente seguía


formando remolinos sobre el hecho de que Nakita había sentido pesar por
Barnabás cuando ella una vez había sentido sólo desdén y desprecio hacia él.
Yo la había cambiado, también.

Dedicarle tu vida a la persona que accidentalmente había metido a los alas


negras dentro de ti para que se coman sus memorias y enseñarle el significado
de la muerte, no podía ser una cosa muy fácil de hacer.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 54

Capítulo 5
Traducido por Mekare

L
a salsa del espagueti olía a picante, como a mí me gustaba. O como me
había gustado. Gire mi tenedor, envolviendo un fajo de espaguetis
que le iba a pasar a Josh tan pronto como mi padre mirara hacia otro
lado. La existencia muerta era como aspirar agua sucia. Yo nunca me había
dado cuenta de lo mucho que había disfrutado de los alimentos hasta que ya no
pude hacerlo. Sentada frente a mí en la cocina de mi papá, Nakita empujó su
comida tan bien como pudo. Josh no estaba ayudándola a comer su espagueti, y
mi papá estaba empezando a mirar preocupado hacia el plato lleno de ella.

‛¿Demasiado orégano?‛, Él preguntó, empujando sus lentes hacia el puente


de la nariz.

‛Esta muy bueno, Sr. A,‛ dijo Josh alegremente con su boca llena.

Los ojos de mi padre estaban en mí, sin embargo, sonreí, obligándome a


poner un bocado en mi boca y masticar. Simplemente no era lo mismo. La
ilusión de mi cuerpo sólido tomaba todo lo que necesitaba de mi amuleto. No
necesitaba energía extra para existir, y el deseo de comer simplemente no estaba
allí. Podría hacerlo, pero era como masticar pasteles de arroz.

‛De primer nivel, pap{‛ le dije, pero era evidente por su sospechoso
‘mmmm...’ que él no me creyó. ‚Tome una merienda cuando llegué a casa de la
escuela ‚, dije, añadiendo mentalmente, El año pasado, cuando estaba en penúltimo
año, para tratar de mantener mi mentira.

‚Bueno, no lo hagas mañana, ¿ok? ‚ Dijo, limpi{ndose los dedos en una


servilleta antes de tomar un sorbo de agua. ‚Estoy cansado de preparar comida
para que permanezca en el plato. ‚

Mi papá se levantó y fue a abrir la ventana sobre el fregadero. El inicio del


canto de un grillo y el silencio de un coche que pasaba en nuestra calle
residencial tranquila, se deslizaba con la bruma de oro de un sol que se
escondía. Rápidamente intercambie los platos con Josh, y Nakita frunció el
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 55

ceño. Iba a tener que deshacerse de la comida de otra manera. Josh estaba lo
suficientemente ávido, pero el no era tan grande como un chico.

Nakita y yo habíamos regresado cerca de las tres y media para encontrar a


Josh en los escalones de la entrada, en buenas condiciones mientras se sentaba
con una pila de libros de texto nuevos. Yo le debía a él mucho. Algo mucho más
grande que la cena en mi casa. Yo llame a mi papá desde el teléfono de casa y
luego nos sentamos en el patio, mirando a Josh comer patatas fritas mientras, yo
le contaba la historia. Josh había escuchado todo, claramente decepcionado de
no haber estado allí.

Eran como las siete, y yo estaba ansiosa por Shoe. Ron debía de haber
encontrando algo por ahora, pero Barnabás no había dicho una palabra, es
decir, el status quo no había cambiado. Suspirando, fui por otro fajo de
espaguetis y se lo pasé a Josh, quien lo tomó alegremente, balanceando la
cabeza, mientras su boca seguía masticando el último bocado.

El roce de los zapatos de mi padre en el linóleo se desvaneció cuando


retrocedió alrededor, y yo respiré el aroma de aceite y tinta que se aferraba a él
desde el trabajo, cuando se acercó a la mesa. Sus pensamientos no estaban
claramente en la cena.

Ellos probablemente estaban en mí.

Mi papá era la clásica rata de laboratorio, un friki, delgado—tal vez cuando


era joven, más cómodo en una bata de laboratorio que en una camisa con
corbata o a la moda. Además el gris que estaba empezando a aparecer en su
cabello y la leve sonrisa que provocaba arrugas alrededor de sus ojos, parecía el
mismo que había sido cuando él y mi mamá se habían separado hacía casi diez
años.

Mamá se había mudado a la Florida conmigo a cuestas. Ella era una experta
en fondos de obtención variable, que básicamente significaba que era una
asesina a sueldo para obras de caridad de buena reputación. Su especialidad era
seducir el dinero de las mujeres mayores—a veces ella era muy buena—pero
eso era una fuente constante de conflictos entre nosotras cuando yo no tenía
estómago para ponerme los guantes blancos y actuar como un puntal en su
perorata. Mi padre se había quedado aquí.

El estruendo de los truenos era débil, pero estaba creciendo fuertemente, y


la bruma de sol que entraba por la ventana se atenuó cuando las nubes lo
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 56

alcanzaron. Un atardecer temprano comenzaba a afianzarse. Patiné otra bola de


espagueti alrededor de mi plato, servilmente cuando me encontré con los ojos
de Nakita. Ella tenía todo un plato lleno. Hice un gesto hacia Josh para que ella
le diera por lo menos un bocado, y sus labios se apretaron cuando ella lo pensó.

Mi papá se sentó y se echó hacia atrás, evaluándome mientras masticaba.


‚Ustedes dos señoritas no se ven demasiado flacas‛, dijo, sus ojos castaños
todavía manteniendo una capa de dolor.

‛¿Qué?‛ balbucee, mir{ndome a mí misma.

‛Debe ser una cosa de chicas de secundaria‛, agregó, sonriéndole a Nakita.


‚Te diré algo. ¿Qué tal si me ayudas a hacer la cena de mañana por la noche, eh
Madison? Lo que tú quieras.‚

Josh soltó un bufido, inclinado sobre su plato, y se estremeció, recordando


cuando hice la cena con mi papá cuando yo había tenido cinco. Tener a una
niña en edad preescolar cocinando guisantes no le hacía tener más ganas de
comer, pero cuando mis padres se asfixiaron con las verduras mezcladas con
salsa de barbacoa—había sido para morirse de la risa a mis cinco años de edad.
La noche había terminado en risas y risas. Tal vez debimos de haber tenido
guisantes a la barbacoa con más frecuencia.

‚De acuerdo‛ dije con los ojos bajos mientras yo recordaba.

Otra vez mi padre hizo ese sonido ‘mmm...’, como si buscara en el futuro. O
a lo mejor el pasado. Una tristeza melancólica me embargó, y me obligue a
comer un bocado de pasta, tratando de disfrutar el sabor de los tomates y la
dulzura del almizcle del orégano.

Me habían enviado hasta aquí hace casi seis meses, justo al final de mi
penúltimo año. Me había perdido mi baile de graduación y todo eso. Lo que
había sido la gota que colmó la espalda de camello de mi mamá, todavía era un
misterio.

Podría haber sido cuando los policías me llevaron a casa por romper el
toque de queda cuando ella pensaba que yo estaba en internet. O cuando fui a
aquella fiesta en la playa cuando le dije que no iría, o aquel crepúsculo en el que
cruzamos con los chicos y nadamos cerca de las boyas, lo cual no fue totalmente
mi culpa. Yo la llamé para decir dónde estaba. Mi mamá estuvo cerca de hacer
estallar sus perlas esa vez.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 57

Pero por alguna razón mamá había decidido enviarme de nuevo al norte,
yo estaba alegre por ello, y sonreí mientras miraba el feo papel tapiz con rosas
amarillas en él, que yo recordaba vagamente de mi infancia. Había pensado que
iba a ser un traslado de un carcelero irrazonable a otro, pero conociendo a mi
padre otra vez había estado gratamente sorprendida, especialmente cuando él
en realidad me escuchó cuando le dije por qué yo tenía que tener un par de
sandalias. Mi mamá no me había dado el sentido de la moda en absoluto. Mi
papá no lo había hecho tampoco, pero al menos lo intentaba.

En serio, yo estaba tratando de ser buena. No me había escapado de casa en


casi una semana, además de la vez en la que tuve que mantener a los las alas
negras lejos de Josh. Llamaba cuando iba a llegar tarde, y siempre estaba aquí
para la cena menos cuando fingía que iba comer en la casa de Josh. Esto se iba a
poner más difícil, sin embargo, ahora que yo iba a combatir a los demás
guardianes del tiempo e iba a tratar de salvar almas.

‛Todos est{n muy tranquilos‛, él dijo de la nada, y yo sacudí la cabeza en


alto. ‚¿Estuvo bien la escuela hoy?‛

Mierda, ¿qué?, ¿quiere hablar acerca de la escuela?

‛Estoy tomando economía doméstica‛, ofreció Nakita vacilante, viéndome


casi a punto de entrar en pánico.

Una ligera mueca cruzó el rostro de mi padre, pero él se relajó, poniendo un


codo sobre la mesa. ‚Yo odiaba esa clase. ¿Ellos todavía te hacen fabricar bolsas
para libros, este año?‚

Nakita acuñó un fajo de pasta fuera del tenedor y comenzó a enrollar otro
carrete. ‚¿Por qué un libro necesita una bolsa? ‚

‛Uh, Nakita y yo estamos tomando fotografía juntas‛, interrumpí, tratando


de distraerlo de la expresión de perplejidad de ella. Todo lo que mi papa sabía,
es que Nakita era de Nueva Escocia y hablaba francés como su lengua materna.
En la escuela pensaban que si ella estaba viviendo en mi casa era una pequeña
intervención de un ángel. Nadie se había molestado en comprobar de donde
era. En realidad, yo no sabía dónde ella iba cuando se fue. Josh se comió un
bocado de pan.

‚Tenemos física juntos‛, dijo en torno a su comida. ‚Yay‛.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 58

Sonreí ante su exclamación mediocre. ‚Fue genial ver de nuevo a todos‛,


dije mientras aniquilaba con el tenedor la pasta. Mi padre sonrió con
complicidad. ‚Este año ser{ mejor. Ya lo ver{s ‚, predijo mientras sacaba un
pedazo de pan de la hogaza y lo sumergía en el aceite de oliva y vinagre. ‚Y
luego la universidad‛.

‛¿Podré conseguirlo pasando primero física?‛ Le pregunté con un gemido.


‚Por lo menos tengo fotografía este año. Ese ser{ divertido‛.

La cabeza de mi padre se sacudió. ‚Eso me recuerda‛ dijo, mirando por


encima del mi hombro en el panel de corcho hacia el teléfono en la pared.
‚Recibí una llamada de tu profesor de fotografía con una lista de los
suministros de clase. ¿Por qué demonios ella no te lo dio cuando tú estabas en
la escuela?‚

‛¿La Sra. Cartwright?‛. Le pregunté, sintiendo una oleada de preocupación,


y él asintió. ‚Um, tal vez ella no lo sabía en ese momento,‛ Sugerí, intentando
no mentir. Genial, pensé mientras miraba a Josh, quién se encogió de hombros.

‛¿Necesitas ir al centro comercial esta noche?‛ Mi padre preguntó, su


mirada conmovedora en las uñas negras de Nakita.

‛Yo puedo llevarte‛, dijo Josh voluntariamente, viendo claramente una


forma de volver a la guadaña de prevención, pero mi primer impulso a decir
que sí, murió. Sería una buena manera de salirse del radar de mi padre durante
un par de horas, pero no podía salir hasta que él pensara que yo estaba en la
cama.

‛Uh, no‛ balbuceé, y Josh ahogó su decepción. ‚Probablemente tengo la


mayor parte de esto arriba.‛ Yo no había visto la lista, pero yo tenía todas mis
cosas del año pasado.

‛Necesito una c{mara‛, dijo Nakita de repente, su voz sonó preocupada.


‛Tengo una que puedes tomar prestada‛, le dije r{pidamente. ‚No te preocupes
por eso, Nakita‛.

Se limpió los labios con una servilleta. ‚Nunca he usado una antes. No
quiero romperla.‛

Nakita parecía genuinamente preocupada, y mi padre se rió. ‚Si es lo que


estoy pensando, tu no puedes.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 59

Puso un codo en la mesa y se inclinó ‚Madison solía ser muy ruda con sus
cámaras, pero no puedo culparla. Ella ha estado tomando fotos desde que tenía
cuatro. ¿Cuánto tiempo has estado tú detrás de la lente?‚

Nakita parpadeó, sorprendida como siempre, cuando mi papá trataba de


incluirla en la conversación. A Mi papá le gustaba ella, pensó que la
estudiosidad tranquila que ella le mostraba a él podría asentarse en mí. Pero yo
probablemente podría traer a casa una chica motociclista y él le pediría que se
quedara a cenar, como prueba de que yo no estaba deprimida escaleras arriba y
sola, o evitando a las personas, como había hecho en mi primer año aquí. Ahora
que tenía dos amigos para cenar probablemente había realizado su semana.

‛No mucho‛, dijo ella, en vez de decir nunca, y luego añadió: ‚Yo no soy
creativa. Estoy allí porque Madison piensa que me ayudará a encajar‛

‛En una nueva escuela‛, espeté yo.

‛Nunca voy a ser capaz de tomar fotos como Madison‛, dijo Nakita.

‚Sí‛ exclamó Josh mientras limpiaba lo último de su salsa con un pedazo


de pan. ‚Madison toma fotos geniales‛.

‚¡Ah!‛ Exclamó mi padre, haciéndome saltar. ‚Todo el mundo tiene


creatividad. Sólo tienes que estirar los músculos. Madison ha estado en ello un
tiempo‚, dijo, su visión alej{ndose en la memoria. ‚Ella probablemente no se
acuerda, pero yo la solía llevarla conmigo cuando me iba a sitios remotos para
las muestras. Su madre le dio una cámara para mantenerla ocupada.‚

‛Me acuerdo‛ dije, pregunt{ndome si mi padre se daría cuenta de que


intercambié los platos con Josh. Yo había tratado echar a la basura mis álbumes
con fotos de nubes y otras cosas, hace casi tres años, pero mi mamá los había
rescatado de la basura y escondido en alguna parte. ‚Yo tengo mi vieja c{mara
arriba.‛ Y al ver la manera de salir de allí, me levante, tomando mi plato casi
lleno en la mano.

‛¿Has acabado?‛ Mi pap{ exclamó, mir{ndome con una expresión perdida


cuando Nakita siguió mi ejemplo.

Josh parpadeó hacia nosotros, luego le arrebató un último trozo de pan de


su comida mientras permanecía de pie, también.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 60

Una vez más, la culpa me golpeó, incluso cuando estaba arrojando la


comida y me volví para enjuagar el plato. Mi padre había sido realmente
genial desde que me había mudado, haciéndome sentir querida y sin embargo
dándome el espacio que yo necesitaba. Morir y no ser capaz de decirle a nadie
parecía poner un muro más grande entre nosotros que cuando habíamos estado
separados por mil millas.

Pero yo no podía deshacerme de la sensación que él me recordaba de la


noche en que yo había muerto. No era que él dijera algo, pero había una duda
ahora donde no había estado antes. Barnabas había arreglado esto para que mi
papá no recordara, pero creo él lo hacia-en algún punto. Y yo no quería estar
sola con él, temerosa de que él pudiera traerlo de vuelta.

Nakita estuvo en silencio mientras ella tiraba su comida. A su lado, Josh


enjuagó su plato. ‛Ser{ mejor que llegue a casa‚, dijo Josh sonando
decepcionado. Me hubiera encantado que él hubiera podido venir conmigo de
regreso a Fort de Banks, pero Nakita podía llevar sólo a uno. ‚Tengo tiempo
para ayudar con los platos, sin embargo,‛ agregó.

‛Nakita y yo lo llevamos bien‛, le ofrecí r{pidamente. De algún modo te lo


debo, pensé, pero no lo dije. ‚Es probable que quieras llegar a casa antes de que
llueva. ‚

‛Puedo conducir en la lluvia‛, dijo Josh con una sonrisa.

Mi pap{ se adelantó y se unió a nosotros en el fregadero. ‚Gracias por


venir, Josh‛, dijo alegremente. ‚Me gusta tener una casa ruidosa y cocinar para
más de uno.‚

‛Pap{...‛ Me quejé. ‚Simplemente no estoy hambrienta‛.

Él no dijo nada, sus cejas altas. Josh se limpió las manos en los vaqueros,
meciéndose en el lavamanos cuando él me miró, claramente queriendo decir
algo. ‚Tengo que sacar mis cosas‛, dijo al fin, a continuación, se alejo de la
cocina para dejar un silencio incómodo.

Nakita llevó el plato de pan a la pileta, vacilando sólo un momento antes de


llegar a la bolsa para ponerlo en ella.

‛¿Podemos lavar los platos m{s tarde?‛ Le pregunté a mi pap{. ‚Yo


quiero...‛ ¿quiero qué? Pensé en pánico. ¡Yo no podía admitir que quería hablar
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 61

con Josh! Mi padre podría creer que era mi novio o algo así. Quiero decir, era
una especie de novio, pero no era como si nos hubiésemos besado ni nada. Aún.

‛Ve, ve, ve‛, dijo, haciendo adem{n de disparar. ‚Voy a limpiar. Tu anda a
hablar con Josh ‚.

Nakita estaba frunciendo el ceño. No le gustaba mucho Josh. Yo, sin


embargo, estaba encantada, y me di la vuelta, limpiándome las manos en la
toalla de secado. ‚¡Gracias, pap{!‛

‛Tengo que llamar al Oficial Levy de todos modos‛, dijo él, mirando el reloj
en la estufa. ¿Oficial de Levy? Oh, mierda.

Me sacudí y me detuve. Nakita y yo nos miramos, yo preocupada, ella


molesta, probablemente con Barnabás por detenerla de segar a la mujer. Mi
padre, sin embargo, no parecía preocupado, cuando se detuvo a su altura
máxima.

‛Pap{, puedo explicarlo,‛ comencé. ¿Cómo voy a explicarlo? Pensé,


maldiciendo mentalmente a Barnabás. Esta era la segunda vez que el había
cambiado la memoria de la gente, sólo para devolvérselas lo suficiente como
para complicar mi vida. Esto probablemente provenía de su viejo hábito de
salvar al humano-luego-partir. Él nunca tuvo que tratar con las personas que
recordaban las mentiras que les había hecho creer.

Pero mi padre no parecía estar molesto mientras enjuagaba su vaso. ‚Ella


me llamó al trabajo. Algo sobre asegurarse de que tenías un permiso para
estacionarte en la parte de la escuela‚, dijo en tono divertido mientras trabajaba
los grifos. ‚Le dije que tú no tenías coche, y ella se confundió. Pero en cualquier
caso, quería hablar conmigo acerca de un evento para recaudar fondos.‚

‛Oh,‛ dije, relaj{ndome. Detr{s de él, los ojos de Nakita eran de un sereno
azul. Si se hubieran vuelto plata, ella estaría haciendo el control de daños. Lo
que sea que Barnabás había hecho era aparentemente sostenible. ‚Bueno,
supongo que no tenemos de que preocuparnos por un coche, ¿eh?‚ dije con
amargura, y él suspiró. Yo había estado gimiendo sobre mi coche en Florida
desde que llegué aquí, y su respuesta era siempre la misma: ‚Todavía no‛.

Pero esta vez, en lugar de dar su precisa respuesta, se volvió hacia mí con
ojos preocupados y preguntó: ‚¿Madison, est{ todo bien?‚
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 62

Podía oír los golpes de Josh bajando las escaleras, y yo asentí, empujando la
toalla de secado sobre la parrilla cuando me di cuenta de que estaba
apret{ndola entre mis dedos. ‚Confía en mí, pap{‛ le dije, con lo que yo
esperaba que fuera la cantidad correcta de molestia y sinceridad, mientras
caminaba de vuelta hasta el pasillo, enganchando a Nakita en el camino. ‚Me
gusta estar aquí. No voy a arruinarlo. Ahora tengo amigos y todo. Incluso si no
tengo un coche‛.

Su atención recayó en Nakita, y, sonriendo, dijo: ‚Sólo prométeme que me


dirás si necesitas hablar. No puedo ayudar si no sé lo que está mal.‚

Esto estaba muy cerca de lo que realmente quería confesar y pedirle su


consejo. Pero lo que hice fue tirar la lista de suministros de clase de la nevera y
murmuraba: ‚Son sólo cosas normales de adolescentes‛.

‛’Normal’ y ‘adolescente’ no van juntos‛, dijo, y yo rodeé la arcada de la


sala.

‚Llama a tu mamá esta noche, ¿de acuerdo?‚, agregó cuando Nakita salió
antes que yo. ‚Ha llamado esta tarde, con ganas de hablar contigo. Justo
durante el horario escolar. Le dije que no se puede tener un teléfono en la
escuela y que se calmara, pero sabes como es tu mam{‛.

Su voz tenía una vieja frustración, y me detuve en el arco, viéndolo revivir


el pasado. Yo, sin embargo, estaba un poco más preocupada con el presente. Mi
madre estaba a mil millas de distancia, y su radar de problemas estaba todavía
trabajando.

‚Voy a llamarla. Y gracias por dejar que Nakita pase la noche aquí ‚

‛Yo no sé cómo dejo que me pidas cosas como esta‛, rezongó él y se volvió
hacia el fregadero y se arremangó sus mangas. ‚A mi nunca se me permitió
llevar a alguien para dormir y mucho menos en una noche de escuela‛.

Sonriendo, regresé de nuevo, poniéndome de puntillas para darle un beso


en la mejilla. Estaba sin afeitar, y él olía como... pap{. ‚Porque soy tu favorita‛
dije, trayendo de vuelta una vieja broma familiar que no había sido dicha en
diez años.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 63

Mi padre sonrió, borrando todos mis sentimientos incómodos. ‚La única‛,


dijo, dándome un abrazo torpe mientras él trataba de no echarme espuma de
jabón. ‚!Las luces se apagan a las diez. Lo digo en serio!‚

Nosotros estábamos bien, y, caminando con paso ligero, me fui al pasillo


para encontrar a Josh de pie con Nakita, su bolsa para libros sobre su hombro.
Al verme, lo dejó deslizar hasta el piso. Desde la cocina, el torrente de agua que
llenaba el fregadero se detuvo momentáneamente.

Josh miró a la cocina mientras me acercaba. ‚¿Nos vemos mañana?‛, Dijo, y


yo asentí. Probablemente sería de una u otra manera por la salida del sol.

‚Gracias por todo‛, le dije, mirando hacia su bolsa de libros, y luego hice
una mueca. ‚Josh, lo siento. Sé que querías venir con nosotras.‚

Sus ojos estaban en el techo. ‚La próxima vez, tal vez‛ dijo, haciéndome
sentir peor.

Nakita cruzó los brazos sobre el pecho, desplazando su peso a un pie. La


mirada de Josh regresó a ella, y él frunció el ceño. ‚¿te importa si hablo con
Madison a solas?‛, Preguntó.

Ella exhaló poniendo los ojos en blanco. En un arrebato, ella giró sobre un
tacón y pisoteó las escaleras. Te lo juro, algunas de estas cosas oportunas ella las
entendía muy rápido.

Yo seguía sonriendo cuando llevé mi atención de vuelta a Josh. Pero al ver


sus ojos iluminarse mientras lo miraba, Sentí una chispa de nerviosismo
llenarme. ¿Él quiere estar a solas conmigo?

‛¿Tienes todas tus tareas?‛, Preguntó, mirando a la nota en mis manos.

‚Sí, gracias a ti‚, le dije, empujando la nota en un bolsillo. ‚Yo realmente


quería que vinieras. Nakita no puede llevar a más de una persona.‚

Sus ojos se dirigieron a la arcada abierta en la cocina. ‚Est{ bien‛, dijo,


alej{ndose un paso atr{s hacia la puerta. ‚Sólo no me conviertas en el chico de
la librería que busca las cosas para ti y siempre pierde.‛ -Sonrió-. ‚La cena
estuvo buena.‚

‛Te tomare la palabra sobre eso.‛


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 64

Josh sacó las llaves del carro de su bolsillo y alcanzó la puerta detrás de él.
‚Bueno, te veré mañana ‚, dijo, arrojando su mochila en su hombro.

La decepción se filtró en mí, ¿pero que esperaba? No era como que


habíamos estado en una cita—excepto por el baile del año pasado, y que fue un
desastre. Alcanzándolo, toqué su mano. Josh se detuvo, la puerta se abrió.

‚Gracias‛ le susurré. ‚Josh, lo digo en serio.‛

Él miró abajo hacia nuestras manos, luego a la cocina, donde mi padre


estaba ruidosamente poniendo los platos en el lavavajillas.

‛¿Tu padre enloquecer{ si te beso de despedida?‛, él preguntó.

Parpadeé, mi corazón dio un golpe antes de que pudiera detenerlo.


‚Probablemente‛, le dije, sintiendo mi aliento. Yo había besado a chicos antes,
mi mamá no se preocupaba por mí porque yo era una santa, pero yo había
estado a un lado últimamente por estar muerta y había permanecido aparte. El
hecho de que él quisiera darme un beso me emocionó hasta los dedos de los
pies.

Josh tomó mi mano con más firmeza. Desde la cocina llegaba un ruido de
cacerolas en el fregadero. Yo contuve el aliento, sintiendo el recuerdo de mi
corazón latiendo con toda su potencia. ‚¿No te olvides de mí?‛ Susurró, con la
cabeza junto a la mía, no besándome, pero realmente cerca.

El aroma de espagueti, pan, y el champú me llenó de una sensación de


seguridad. ‚Nunca‛, le dije, puntualiz{ndolo.

Incliné la cabeza, y cerré los ojos. Nuestros labios se tocaron, como yo


esperaba que lo hicieran. Calientes contra la míos, los suyos estaban apenas allí
antes de que el se alejara. Un temblor subía y bajaba a través de mí, y mis ojos
se abrieron encontrando los suyos. Él sonreía suavemente. Esto había ocurrido
muy rápido, y él bajó la cabeza cuando la vajilla de plata tintineó. Me sentía
vacía, caliente. Emocionada y calmada todo al mismo tiempo.

‚Debería irme‛, dijo él, levantando su mochila al hombro de nuevo.

‚Sí‛ dije, pregunt{ndome cómo algo tan simple hacia que el mundo luciera tan
diferente.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 65

‛Hasta mañana, Madison‛, agregó, mirando a la cocina.

‛Adiós.‛ Yo realmente no quería que él se fuera.

Josh se acercó, me cogió la mano y luego permitió que esta se deslizara de la


mía mientras caminaba hacia la puerta y la cerraba detrás de él.

Deje escapar un respiro que había estado conteniendo quien sabe desde
hace cuánto tiempo, mi atención agitándose hacia la cocina cuando mi padre
gritó por la ventana abierta, ‚Adiós, Josh. Tómalo con calma de regreso a casa.‚

‛Cuente con ello, Sr. A,‛ dijo de vuelta ligeramente, y me volví hacia la
escalera, sacudiéndome cuando vi a Nakita esperándome en la parte superior.
Josh no había dado ninguna indicación de que ella hubiese estado allí, pero yo
sabía que por su expresión de molestia que había visto toda la cosa.

‛Él te besó‛, dijo antes de que yo estuviera siquiera en la mitad del camino.

‛¿Quieres decirlo un poco m{s alto?‛ dije con acritud. ‚Mi pap{ podría no
haberte escuchado.‛

Se hizo a un lado cuando llegué junto a ella, su postura incómoda. ‚Eso


hizo que tu pulso saltará‛, dijo ella, dando un paso detr{s de mí.

‚Sí‛ dije, sonriendo. A través de la casa, oí acelerar el camión de Josh. Mis


pensamientos estaban todavía en él cuando me dejé caer en mi cama. Realmente
era un buen tipo. Nakita cerró la puerta detr{s de ella. ‚¿Crees que debería
pintarme las uñas?‛

El cambio de tema sacó mi atención hacia el techo, y me apoyé en un codo.


‚¿Viste a mi padre verlas?‛ Le pregunté, y ella asintió con la cabeza, su hermosa
cara manteniendo una cantidad casi cómica de preocupación. ‚Si tu quieres‛

‚Yo quiero‛, dijo, luciendo aliviada ahora. ‚Y los dedos de mis pies‛

‛Me gusta la forma en que son‛, dije, rodando sobre mi estómago para
llegar a la mesa de noche. Manteniéndola abierto, rebusqué hasta que encontré
un rojo brillante que vino con su bolso, ahora sentada en mi cómoda al lado de
nuestros libros de texto.

Josh los había traído, también. Hombre, yo realmente se lo debía.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 66

‛¿Que tal?‛ Le pregunté mientras la levantaba para ella.

Nakita la tomó, su expresión vacía. ‚¿Tienes un color m{s p{lido?‛

Pronto me di cuenta que estaba tratando de lucir normal- de encajar- y me


volví para mirar de nuevo. ‚Tengo rosa,‛ dije, y Nakita se relajó visiblemente.

‛Gracias‛.

Ella era toda sonrisas de nuevo. Pensando que nadie mas podría ser
etiquetado con el trastorno bipolar, empuje el cajón cerrándolo y cavé en la lista
de suplementos de la clase de fotografía en mi bolsillo, recorriendo el papel
arrugado y mentalmente comparando eso con lo que tenía en mi armario.

‚La mayor parte de esto lo tengo,‛ dije, dando vueltas y cayendo sobre mis
pies. ‚¿Quieres mi c{mara de color rojo o la negra?‛

‛Negra. No, roja,‚ ella dijo inmediatamente, y luego siguió con: ‛¿Cuál
elegirías?‚

Abrí mi armario. Con las manos en mis caderas, busqué la caja en donde las
había escondido. Josh dijo que yo tomaba fotos geniales. Mi padre había dicho
lo mismo, pero al oír que provenían de Josh tan casualmente me dejó una
sensación de calor, y el calor era algo que yo no había sentido en meses.

‛Ahí est{‛, dije en voz baja, inclin{ndome sobre mis viejas faldas, tops, y
pantalones vaqueros para llegar a la caja en la parte posterior. Esta era de la
tienda de comestibles de mi madre, y sentí una punzada de nostalgia cuando la
coloque en mi escritorio. Llama a mamá. No lo olvides.

El aroma inconfundible de partes electrónicas salió cuando la abrí,


cosquilleando recuerdos. ‚La roja es m{s reciente, pero la negra tiene m{s
versatilidad ‚, dije, y cuando ella parpadeó inexpresivamente hacia mí, le di la
negra.

‛Esta toma mejores fotos. No se enfoca autom{ticamente, y tú puedes elegir


que enfocar. A veces disparar a algo difuso hace más fácil ver lo que estás
tratando de mostrar‚. Está bien, no tenía mucho sentido, pero ella tomó la
cámara vieja, cuidadosamente descomprimiendo su bolso y metiéndola en su
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 67

interior. Juro que vi su sonrisa cuando la bolsa hasta ahora inútil de pronto
tenía un propósito. Era la única cosa allí.

‛Puedes mantener el esmalte de uñas, también‛, dije, pensando que una


bolsa realmente debería tener más de una cosa en ella.

‚Gracias‛ dijo ella seriamente cuando puso la bolsa al lado de sus libros y
se quitó las sandalias como una persona normal. Normal, sí, pero las cuñas
puestas perfectamente debajo de mi ventana, como si todo el tiempo habían
estado depositadas allí.

‚Nunca voy a ser tan buena como tu ‚, dijo con nostalgia.

Eché un vistazo a sus pies perfectos, entonces miré hacia otro lado. Por
Dios, no es de extrañar a los chicos cayeran sobre sí mismos al hablar con ella.

Hasta sus pies eran hermosos. ‚Ser ‘bueno’ como otra persona no es la
meta‛, le dije, dej{ndome caer sobre la cama para mirar hacia mi techo. Llamaré
a mi mam{ después. ‚Encontrar una manera de mostrar cómo algo te hace
sentir lo es. No hay ningún método equivocado de hacer una foto. Si te hace
sentir algo, entonces lo has hecho bien.‚

La cama se movió cuando ella se sentó en el extremo, y yo cambié mi peso.


‚¿Crees que a tu pap{ le van a gustar?‛ me preguntó. ‚Mis fotos, quiero decir.‛

Nakita era tan segura de sí misma cuando estaba en una guadaña, que era
extraño verla tan insegura. ‚Sé que lo har{.‛

Una sonrisa curvó los rincones de mi boca cuando me la imaginaba


mostrándoselas a él. Mi padre amaba mi fotografía. Había una pared entera en
el comedor formal dedicado a mis cosas, con luces brillando en sus favoritas y
todo. Él fue el único que me habló de cómo capturar algo que te hace sentir, y
yo creo que él trató de averiguar lo que estaba pasando en mi cabeza por lo que
estaba saliendo de mi impresora.

El olor del esmalte era fuerte. Esta espera era exasperante, pero no
podíamos salir hasta que mi papá estuviera en la cama. Mi mirada se desvió,
encontrando la imagen de Wendy y mi ex-novio, Ted, en mi espejo.

Se veían felices juntos en la playa al atardecer. Me di la vuelta para poder


ver a mis viejos amigos en posición vertical. Había dejado ir la idea de Ted en
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 68

mi vida casi tan pronto como me había mudado aquí. Los Chicos eran como
cachorros - a veces leales pero se distraían con facilidad- y yo había sabido tan
pronto como me fui, que él había encontrado a alguien a quien seguir a todas
partes.

Esa había sido mi mejor amiga, Wendy, lo cual no fue una sorpresa.
Entrecerrando los ojos, me pregunté si yo podía ver una nube de color azul en
torno a Wendy, mezclándose con una sombra de color amarillo sobre Ted. ¿Sus
auras? Mis pensamientos volaron de regreso a Josh y ese primer beso. Y sonreí.

‚¿Crees que Barnabás est{ haciéndolo bien?‛ Le pregunté a Nakita.

‚No lo sé. No lo puedo alcanzar ‚, dijo ella, sonando casi maliciosa.

Vaya, ¿qué está mal con ella esta noche? Me volví mirándola doblarse en un
ángulo agudo para poner su cara cerca de sus pies. Su pelo cubierto a un lado,
enmarcando sus pómulos fuertes y acentuando su tez perfecta. Su amuleto se
balanceaba con suavidad mientras ella se cubría las uñas de negro de color rosa,
ocultando lo que era.

Francamente, parecía una modelo. Yo, que estaba muy plana de pechos, y
como estaba muerta ahora, estaba atrapada esperando al hada de los senos por
el resto de mi existencia. ¿No es agradable...?

Nakita sabía que no podría ponerse en contacto con Barnabas, pero eso no
significa que tenía que desperdiciar el próximo par de horas. Mi cuerpo estaba
en algún lugar entre el ahora y el después, de acuerdo con el serafín que había
presenciado mi toma al papel de cronometrador oscuro. Si pudiera encontrarlo,
entonces podría volver a la realidad de la vida y dejar de ser el jefe de un
sistema con el que no estaba de acuerdo. Podría olvidarme de cronometradores,
amuletos, segadores, y las alas negras. Podría ser yo misma otra vez. Incluso si
eso significaba olvidar todo esto.

Echando un vistazo a Nakita, me pregunté si eso era algo que yo todavía


quería hacer.

Por supuesto que lo es, me dije, y luego miré hacia el techo, preguntándome
cómo se encontraba el espacio entre el ahora y el después.

El silencio llenó mi alma, y yo cerré los ojos. Yo no sabía dónde mirar


siquiera. Pero dondequiera que fuese, probablemente tenía que encontrarlo con
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 69

mi cabeza, no con los ojos. Tomando tres respiraciones lentas y reteniendo el


último, dejando escapar el aire lentamente hasta que mis pulmones estuvieran
vacíos. Era el primer paso en el ejercicio de Barnabás del ‚centro de ti mismo‛

‛¿Qué est{s haciendo?‛, Preguntó Nakita, asust{ndome a pesar de que su


voz había sido suave.

Tomé aire. ‚¿Adem{s de esperar que mi pap{ se vaya a dormir? A ver si


puedo encontrar el ahora y el después.‛ Era eso, o llamar a mi mam{.

La oí cambiar de posición y comenzar con el otro pie. ‚Buena suerte con


eso.‛

Enarqué las cejas. La frase moderna había sonado rara viniendo de ella.
Ella estaba loca. ‚Estás fingiendo muy bien, Nakita‚, dije mientras abría los ojos
y me sentaba con las piernas cruzadas sobre mi cama. ‚Sonaste casi como un
verdadero adolescente en eso.‚

‛No quieres ser un controlador de tiempo‛, acusó ella, sus ojos azules
intermitentes, a continuación, luego cambiaron, diciendo malhumorada: ‚Tú no
quieres ser el cronometrador oscuro. Creo que si tuvieras la oportunidad, tu
pondrías un {ngel de la guarda en tu lugar‛.

¿Es eso lo que la está molestando? ‚Yo no voy a poner un {ngel de la guarda
en mi lugar‛, le dije. ‚Un {ngel de la guarda no lograría nada‚ Cogí el esmalte
de color rojo y froté la botella entre las palmas de mis manos para mezclarlo sin
poner aire en él.

Nakita me miró mezclar el esmalte, y casi podía ver su archivo de


información de lejos. Sus ojos próximos, ya que apretó los labios y miró. ‚tu no
crees en el destino. Tan pronto como no necesites ese amuleto para mantenerte
viva, vas a dar la espalda. Y luego te olvidarás de todo. Yo estaba allí. Te
escuché decirle al serafín… ‚

‛Nakita...‛ yo engatusé.

‚Est{ bien‛ dijo ella con fuerza, y mojando el pincel en la botella en precario
equilibrio sobre sus rodillas dobladas. ‛Yo soy un Caronte oscuro. Es mi trabajo
matar a la gente. No espero gustarte‛.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 70

Esto estaba cada vez peor. Suspirando, puse la botella sobre mi armario y
cuidadosamente lo abrí ‚Tu me gustas‛, le dije, incapaz de mirarla mientras me
ponía una raya roja en las uñas negras. ‚Creo que eres genial. ¡Dios, Nakita,
puedes volar!‚ Miré hacia arriba. ‚Pero echo de menos dormir. Me gusta tener
hambre, y luego sentirme bien después de comer. Me siento mal acerca de la
mentira a mi papá y el cambio de sus recuerdos. Y no puedo ser el jefe de un
sistema en el que no creo. Si no puedo cambiar las cosas, entonces yo voy a
renunciar tan pronto como tenga a mi cuerpo de regreso ‚

Ella tomó un aliento para hablar. Sus ojos fijos en los míos, y yo no podía
apartar la mirada. ‚Pero tu eres buena en esto ‚, dijo en voz baja.

¿Soy buena en esto?

Asombrada, la miré fijamente, y una gota roja golpeó mi edredón. ‚¿Cómo


es eso?‛ dije, dejando caer la brocha en la botella y luchando por obtener un
pañuelo de papel. ‚Tu has dejado claro que piensas que estoy haciendo las
cosas mal. ¿Cómo puedo convencer a los serafines, si ni siquiera puedo
convencerte?‚

Genial. Papá va a estar loco por el edredón, pensé, nerviosa mientras secaba
para llegar a lo peor de todo, pero la confusión estaba pellizcando sus ojos
cuando levanté la vista hacia ella.

‚No lo sé‛, dijo ella, ‛pero tu crees en lo que estás haciendo. Los
Cronometradores cambian por una razón. Tú eres... apasionada sobre ayudar a
la gente, aunque no entiendo lo que estás tratando de hacer. Los errores no
importan. Es lo que ocurre cuando te equivocas en lo que haces.‚

Reconocí su expresión perdida con la mía propia. Comprendí lo que estaba


diciendo, al menos, pero yo no podía tener ambas cosas.

‛Adem{s‛ dijo en voz baja Nakita cuando ella volvió su atención a sus
uñas‛, te extrañaría si te vas.‚

Me senté en mi cama, dos uñas pintadas, el resto seguía siendo


completamente negro. Yo no sabía qué decir. Mis cortinas moviéndose en una
ráfaga de viento, y un trueno le dio más peso a sus últimas palabras. El sol
estaba todavía, probablemente, pero yo no podía ver detrás de las nubes
oscuras.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 71

El suspiro de Nakita se mezcló con las primeras gotas de lluvia golpeando


el techo. Tenía que decir algo, pero nada pasó a través de mi felizmente mente
vacía mientras grandes golpes de lluvia golpeaban de forma esporádica y el
olor húmedo de las tejas a la deriva en la brisa.

Aún seguía en la búsqueda de algo que decir que le diera consuelo y a la


vez dejar mis intenciones claras, y me moví cerca de mi ventana.

‛Nakita‛ empecé, mirando en la oscuridad temprana y las nubes grises


planas. Sin embargo, un sonido suave, oh-tan-familiar raspó mi conciencia como
un cuchillo. Era el sonido de zapatillas encontrando un agarre en el techo. Y
entonces el suave tintineo de Grace cantando, ‘Había una vez un niño en un
techo, quien se mantuvo a si mismo demasiado distante. Al igual que un caracol
que se arrastraba, hasta que tuvo una gran caída. Porque en realidad él era un
gran estúpido’.

¿Barnabás regreso? ‚¿Barnabás?‛. Grité en voz alta, asom{ndose por la


ventana.

Nakita levantó la vista terminando las uñas de los pies. Una escarbada
repentina desde arriba en el techo conmocionó a través mí. Buscando la
protección, la levante libre y la dejé a un lado. Un grito de alarma desde el techo
puso a Nakita de pie, y con el sonido aterrador de deslizamiento de arena, una
sombra blanca cayó delante de mi ventana. Agitando los brazos y las piernas,
alguien se dejó caer desde el tejado. Un fuerte golpe seguido de un gemido se
alzó con el retumbar suave de los truenos.

Me volví hacia Nakita. ‚No creo que sea Barnabas,‛ dije.

Su rostro estaba tranquilo, pero sus ojos eran de plata. ‚No puedo decirlo.
Sea quien sea, est{ escondiendo su aura‛. Ansiosa por encontrarlo, ella me
entregó su esmalte. ‚Yo ya vuelvo‛. Mis ojos se abrieron. ‚¡Nakita!‛ Susurré,
pero ella ya había enviado la mano a su amuleto. Un brillo de luz color violeta
pasó por encima de ella, y luego apareció su espada en su mano libre. ‚¡Nakita,
espera!‛ Exigí mientras mantenía el abrillantador abajo, pero ella estaba a
medio camino entre mi ventana y el techo.

‛Maldita sea, quiero verte aquí sobre la alfombra‛, le susurré mientras ella
permanecía de pie en el borde del techo y miraba al suelo con una mano en su
cadera. El viento soplaba y la lluvia repiqueteaba con mas fuerza, las ramas por
encima de mi cuarto bloqueando la mayor parte.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 72

‛¿Quién eres?‛ Ella dijo en voz alta mientras miraba hacia abajo y después
se perdió de vista.

‛¡Grace!‛-Grité-. Está bien, no había escuchado a Barnabás, pero era


alguien, y Grace podría haberlo hecho caer.

El ángel mensajero voló, trayendo consigo el olor a ozono y la lluvia,


lanzándose con disgusto, si es que una bola de luz podía lucir molesta.

‛ ¡Caray, Madison! Yo no quería que supieras que estaba aquí, ‚dijo ella en
tono decepcionado. ‚No estaba espi{ndote. ¡Lo prometo! Fue ese niño de un
cronometrador en acenso. ¡Paul no estaba siendo amable, así que lo hice caer.
No se supone que tu sepas que estuve aquí!‚

‛Ve a buscar a Barnabas,‛ dije, con mi mano en el alféizar.

‛¿Estas loca?‛ El resplandor era todo lo que podía ver de ella mientras sus
alas dejaban de moverse.

‚No, pero lo voy a estar si no buscas a Barnabas. Está protegido, y no puedo


llegar a él‚. En realidad, yo estaba furiosa, pero estaba más preocupada por
Nakita y el que se había caído de la azotea.

‛Enseguida vuelvo‛, replico de regreso, y ella se lanzó por la ventana.

Tomando un respiro, alcance de nuevo la ventana. Un sorprendente


arranque de furia se produjo desde el patio bajo mi ventana, seguido por un
sonido metálico. Era más un sentimiento que un sonido y un lavado de color
violeta en la parte inferior de las hojas del árbol de roble sobre mi cuarto.

Eso no se veía bien. Empujando las cortinas a un lado, salté al tejado


caliente, húmedo y me adentré en la pesada noche.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 73

Capítulo 6
Traducido por Isabella

M
is zapatillas de deporte se deslizaron sobre la arena húmeda de
la cubierta y me senté rápidamente antes de caerme. Las ramas
colgando encima de la casa hacían la noche más oscura de lo
que parecía y cuidadosamente me acerque al borde, mirando hacia abajo para
encontrar a Nakita de pie al lado de alguien más.

Tenía dos espadas, una en cada mano. Mis labios se separaron cuando
reconocí al chico, ahora completamente de pie en mi patio. Yo lo había visto en
el desierto a través de los ojos de Ron. Tenía un amuleto de un brillante verde
oscuro tierra.

El profundo color se reflejo en una de las espadas que levantaba Nakita—la


suya, obviamente. Grace lo había llamado Paul.

‚¡Dime quien eres!‛ Exigió Nakita.

Suspirando, eche mis pies hacia adelante y me deje caer por el alero,
empujándome hacia fuera para no engancharme las medias en nada.

Caí al suelo, en un fuerte golpe y empuje mi falda rápidamente hacia abajo.


‚¡Nakita! ¡Tómatelo con calma!‛ Dije en un susurro mientras el shock del
impacto me hacia estremecerme.

Se volvió hacia mi y yo añadí, ‚Creo que es el reemplazo de Ron, Paul.‛

‚Cronom—‚, empezó, para después gritar y saltar hacia atrás mientras el


chico le golpeaba.

Sandy, el Golden Retriver5 de nuestro vecino, se puso a ladrar y a dar saltos


cerca de la verja. El chico se revolvió y se levanto, arreglándose la ropa,
mientras se ponía delante de Nakita. Tonto mortal.

5
Raza de perro.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 74

‚Dame mi guadaña6,‛ exigió, pero Nakita no le escuchaba. Tampoco Sandy


aun cuando yo le pedía que se callara. Estaba lloviendo con más fuerza y aun
estando debajo del árbol nos estábamos mojando.

‚¿Tu eres el nuevo Cronometrador Blanco?‛ le pregunte, con el rostro


sombrío pero con un claro tono de voz. ‚Apenas tienes la edad suficiente.‛

Hice una mueca simpática mientras el apretaba los dientes y tendía la


mano. ‚Solo dame mi espada, ¿de acuerdo?‛ Su acento era claramente del
medio-oeste norte americano, a pesar de su ropa—la misma horrible camiseta y
los pantalones que había visto a través de los ojos de Ron, hoy—luciendo como
alguien de aspecto a lo artes marciales. Estaba segura que Ron le daba consejos
divertidos sobre su ropa.

La barbilla de Nakita se levanto y tomo una postura mas firme. ‚¿Porque?


¡Tu nos estabas espiando!‛

‚Porque darle su espada es lo mas decente que puedes hacer,‛ dije,


pensando en que parte de mi conversación con Nakita, él habría escuchado.
Genial. No necesitaba que Ron supiera que Nakita estaba preocupada por mi
futura traición.

Sandy finalmente se calló y me acerque con sigilo junto a Nakita. Fue


agradable sentirme bajo control por una vez, y le mire fijamente mientras el me
hacia un repaso de arriba abajo. ‚Vete al infierno,‛ me dijo simplemente.

Ohh, genial. ‚Nuevo plan. No le des su espada,‛ le dije, y el se retiro hacia la


sombra del garaje, mucho mas cerca de Sandy. El amistoso perro empezó a
cavar en la valla.

‚¿Ves? Es un maleducado,‛ dijo Nakita mientras me entregaba su espada y


Paul se ponía rígido.

La espada de Paul pesaba en mis manos, con algún tipo de cosquilleo, pero
sabía que no debía moverme y demostrarle que no sabía como usarla. Nunca
había visto una piedra tan bonita, sin embargo el brillo verde de su
empuñadura iba perfectamente a juego con su amuleto, con unas motas
doradas atravesándolo como los ojos de un gato.

6
Guadaña: espada usada por los Carontes para ‘matar’.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 75

El chico se calmo, claramente no le gustaba que yo la sostuviera. ‚No soy el


único que mata por elecciones y hechos que aun no han realizado.‛

‚¿Quién?, ¿yo o ella?‛ pregunto Nakita.

Eche una mirada a la ventana abierta de mi habitación. ‚¿Podéis


tranquilizaros? Mi padre esta dentro,‛ dije, pero nadie estaba escuch{ndome.
Los ojos de Paul estaban fijos en su espada. Oh, genial. El la quería
desesperadamente.

‚¿Donde esta Ron?‛ le pregunte, con una idea repentina y su rostro perdió
expresión. Estaba oscuro, pero todavía podía ver su rostro en la tenue luz del
porche delantero. El sonido de la lluvia se hizo mas pesada y una ligera bruma
empezó a silbar entre las hojas, llegándonos.

A mi lado, Nakita hizo un pequeño ruido de placer, ‚El tiene miedo,‛ dijo,
levantando la punta de su espada, y el dio otro paso hacia atrás, hacia la valla.
‚Conozco el miedo. Se que es mejor que cualquier Caronte que nunca haya
cogido las alas. Los Cronometradores no saben que tu estas aquí y tienes
miedo.‛ Ella me miro, curvando sus labios. ‚El me recuerda a ti. Impulsiva.‛

Wow, gracias, pensé, mientras el aprendiz de Ron se puso rígido.

‚¡Yo no soy como tu!‛ afirmo, entonces, levanto su mirada hacia el cielo, al
sonido de las alas.

Era Barnabás—también Grace—y mis hombros se aliviaron. El aroma de los


girasoles pronto lleno el aire pesado. Un destello de luz ilumino la noche y un
trueno resonó sobre nosotros. Rayo. Si, esto terminaría muy bien.

‚¡Estamos bien! Todo estamos bien!‛ dije tan fuerte como me atreví,
mirando a la ventana brillante de mi segundo piso. Lo último que necesitaba
era otro bajo mi guadaña.

Grace dio tres vueltas a mi alrededor y el de Nakita y luego se lanzo hacia


el árbol. Paul no la miro.

Curioso…
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 76

Nakita mantuvo su apretón a la espada mientras llegaba Barnabás. Sus alas


se desvanecieron y se vio como siempre, con sus pantalones vaqueros y una
camiseta gris que a veces llevaba, deambulando por la hierba de forma casual.

Las quejas de Sandy aumentaron, su cola se movía como loca y hacia que
Paul estuviera mas inquieto.

‚Se quien eres,‛ le dijo Paul a Barnabás, se movió hasta la verja hasta que se
dio cuenta de que el perro hacia otro movimiento. ‚Te has vuelto sombrío.
¡Traidor asqueroso! Eres peor que ellos.‛

‚¡El es grosero!‛ dijo Grace. ‚¡Es por eso que le hice caerse de la azotea,
para que se de un gran golpe!‛

Sabia que la acusación de Paul a Barnabás le había dolido, pero no parecía


afectado, su paso no vacilo mientras venia hacia nosotros y luego siguió
adelante. Paul palideció. Viéndose asustado, retrocedió a lo largo de la cerca,
pero Barnabás fue hacia el perro, quien le dio un lengüetazo cuando murmuro
un saludo suave y le paso los dedos alrededor de la cadena.

‚Bien bien bien,‛ dijo ligeramente mientras cogía la espada de mi inexperta


mano. Un cosquilleo me recorrió mientras el la cogió y me estremecí. ‚Mira
quien se ha deshecho de la correa,‛ agrego, estudiando la joya verde. ‚¿Tu eres
el reemplazo de Ron, no? ¿El nuevo cronometrador?‛

Paul tercamente no dijo nada, pero era obvio que así era.

‚Ya te dije que lo era,‛ Grace soltó alegremente. ‚Los serafines lo vieron
salir y me mandaron a vigilarlo. Yo no estaba espiando a Madison. Yo sabia que
Madison estaría bien con Nakita.‛ El ángel voló en círculos a mí alrededor. ‚De
verdad Madison. Yo no lo hacia.‛

‚Te creo,‛ le dije y juraría que sus alas se hicieron tan brillante que Paul
tuvo que fijarse en ella. Pero no, su mirada me decía que pensaba que estaba
hablando con Barnabás.

‚Se cayo del techo,‛ dijo Nakita. ‚El es tan imprudente como Madison. Van
a ser unos próximos cien años bien difíciles hasta que averigüen que están
haciendo.‛

Paul frunció el ceño, yo tampoco estaba muy contenta por eso.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 77

Grace se ilumino. ‚¡Oh!‛ exclamo ella, finalmente comprendiendo que Paul


no tenia ni idea de que ella estaba allí. ‚¿El no puede verme? ¿Porque no?‛

Ella se precipito hacia abajo para revolotear delante de su amuleto. ‚Había


una vez un portero llamado Ron que tenia la inteligencia de una gamba7. Hizo
un amuleto, que luego le dio a su alumno, pero sus poderes eran considerados
un bostezo8.‛

¿Ron le había dado a Paul un amuleto de nivel inferior? ¿Porque no me


sorprendía? Nakita se reía y hasta Barnabás también rio.

‚¿Como es que estabas en mi techo?‛ le pregunte, con los ojos fijos en la


joya mientras Barnabás giraba la hoja de manera que esta brillaba bajo la luz del
porche delantero.

‚Eso es lo que me gustaría saber,‛ dijo Barnabás, empezando a manejar la


espada, probando el balance de la hoja con unas series rápidas, cambios
intrincados casi demasiado rápidos para seguir, girándose una y otra vez,
mientras se movía. Yo estaba acostumbrada al dominio del ángel, pero Paul,
miraba con la boca abierta de asombro. La espada había sido creada por el
amuleto de Paul y hasta que su energía volviera a la piedra, su amuleto se vería
disminuido. Había tomado el control del amuleto de Nakita una vez para
apoderarme de su espada. Paul tenía derecho a estar preocupado.

‚¡Devuélveme mi espada!‛ dijo Paul y Barnabás lo miro de arriba abajo


cuando detuvo sus movimientos. La ira en los ojos de Barnabás era algo nuevo
y no me gustaba verla ahí.

‚¿Porque estabas en el tejado de la Cronometradora Oscura?‛ Barnabás


exigió, y me di cuenta cuanto le había molestado esto. Yo estaba molesta
también, y ahí de pie hombro con hombro junto Nakita, acorralamos a Paul
contra la valla.

Detrás de el, Sandy se quejo. Estaba empezando a llover enserio y juro que
podía oler las plumas mojadas.

7
Gamba: fruta. De a cuerdo al contexto, Grace dice que Ron no es muy inteligente.
8
Sinónimo de aburrido, tomando en cuenta el contexto de la oración.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 78

Paul se quedo en silencio, sus ojos brillaron bajo la luz tenue. Puse una
mano en mi cadera, a punto de dejar que Nakita siguiera su camino, cuando
una voz desde el interior grito, ‚¿Madison?‛

Mierda, era mi padre. Haciendo una mueca, mire por la ventana brillante.
Había sonado como si me hubiera llamado desde abajo, pero eso podía cambiar
muy rápido.

‚Yo me encargo de eso,‛ dijo Barnabás mientras me entregaba la espada de


Paul. Estaba caliente en mis manos, resbaladizas por la lluvia y otra vez me
llamo la atención lo mal que se sentía en mis manos. Después de echarle una
mirada de advertencia a Nakita para que se comportara, Barnabás corrió hacia
la puerta principal y llamo al timbre.

‚Vuelve a las sombras,‛ siseo Nakita, y pasamos a estar de pie al lado del
garaje. Aquí era donde usualmente se subía al techo cuando se escondía y yo
buscaba a tientas las galletas de perro que tenia en el alfeicer de la ventana del
garaje, lanzándolas por encima de la valla para mantener ocupada a Sandy
mientras mi padre abría la puerta. Paul se agacho mientras el perro salía con las
puntas de su pelo chorreando.

‚Tu no puedes tocarme,‛ le dijo a Nakita, aunque el también parecía


ansioso por no quedarse atrapado.

‚Ella puede simplemente matarte,‛ le dije sin rodeos y Grace suspiro


profundamente. ‚Fue la espada de un Caronte el que me mato.‛

Los ojos de Paul se ensancharon y Nakita sonrió. ‚¿No sabias eso verdad?‛
susurro mientras mi padre abría la puerta de entrada y Barnabás decía hola.

‚Había una vez un hombre con un gran ego‛, cantaba Grace suavemente,
popo a poco perdiendo altura hasta que aterrizo en el alfeicer de la ventana,
‚…que pensaba que era una gran héroe. Como un Caronte Oscuro, el mató a un
Cronometrador. Pero eso solo hizo de el un gran cero.‛

Ella estaba hablando de Kairos, el cronometrador cuyo amuleto ahora tenía.


No solo había tratado de matarme para retener la posición, el había matado a su
predecesor para ganar el titulo inicial.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 79

Paul se acobardo, por lo que se movió para dar un vistazo alrededor de la


esquina. Un rayo de luz en la noche iluminaba a Barnabás bordeándolo. Se que
estaba en mi imaginación, pero mi padre se veía pálido en comparación con él.

‚Hola, Sr. A‛, dijo Barnabás, sonando completamente normal. ‚Se que es
tarde, pero tengo que llevar a Nakita a casa.‛

Una punzada de culpa me golpeo e hice una mueca cuando la silueta de mi


padre eclipso la luz y su voz retumbo dijo: ‚pensé que iba a pasar la noche.
Vamos entra.‛

‚Tenia,‛ dijo Barnabás mientras se limpiaba los pies y entraba. ‚Pero ella
no—‚. La puerta se cerró y no pude escuchar la mentira que iba a decirle.

‚Por las plumas rotas de Gabriel,‛ juro Nakita, mirando hacia la ventana.
‚Ahora tengo que ir a hacer acto de presencia. Madison, ¿estarás bien?‛

‚Claro,‛ dije, sopesando la espada de Paul. ‚Simplemente no tardes


mucho.‛ Iba a darle a Paul su espada tan pronto como ella saliera de mi vista. Si
intentaba algo después de eso, Grace lo retendría y le haría tropezar sobre sus
propios pies.

Sin darse cuenta de mis planes, Nakita le dirigió una mirada vehemente
para comportarse. Deslizándose más allá del techo del garaje, salto hacia arriba,
agarrando y balanceándose sobre si misma como una estrella del deporte. Yo lo
hacia así, pero necesitaba un cubo de basura para hacerlo. Yo era mucho menos
elegante también. Cuando estuvo de pie, se sacudió el polvo de sus pantalones
vaqueros e hizo un recorrido corto hacia mi ventana. Oí más que vi, como se
deslizaba en su interior.

Al fin solos…

‚Si intenta algo,‛ dijo Grace a mi lado, ‚Voy a soltar a Sandy encima suyo.‛

No quería saber como estaba pensando conseguir que Sandy pasara la


valla. Podría implicar un rayo. Exhalando un suspiro de aire que había tomado
probablemente dos minutos antes, mire a Paul.

‚Aquí esta,‛ dije, entreg{ndole su espada, con la punta hacia abajo. ‚Lo
siento. Nakita es un poco intensa.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 80

‚¡Madison!‛ exclamo Grace, convirtiéndose en tres tonos más claros, y la


ignore.

Efectivamente, Paul no tomo la decisión inteligente. ‚¡No dejare que mates


de nuevo!‛ grito y tuve que saltar atr{s cuando el me ataco, golpeando la
espada a un lado del garaje. Algo que se sentía como unas frías plumas oscuras
se deslizaron a mi lado y me quede sin aliento.

‚¡Hey!‛ grite cuando me di cuenta de que había esquivado algo. ‚¿Cual es


tu problema amigo?‛ Exclame, marcada mientras Sandy ladraba furiosamente.

Grace se estaba riendo, levantando la voz fuera de mi rango de audición


mientras su resplandor se desplazaba violentamente a través del espectro.

Yo sin embargo no le veía la gracia.

Paul me miraba fijamente, con la espada apretada en su puño, mientras la


lluvia hacia regueros por la cara. ‚¡Te he golpeado! ¡Se que te he golpeado!‛ dijo
el, sonando traicionado. ‚¡Pase a través de ti y tu estas bien! ¡De verdad estas
muerta!‛

‚¿Tu crees?‛ dije bruscamente mientras tiraba de la camiseta para ver si la


había cortado. Grace rodaba por la hierba con un color rojo de la risa. ‚¿Quieres
estar muerto también? Solo tienes que seguir este camino, chiflado. ¿Qué
diablos te pasa?‛

Se quedo mirando, mientras daba pasos atrás hasta que golpeo la cerca.
Sandy salto hacia el y dio un paso adelante distraído, con patas mojadas de
perro en la espalda seguramente. ‚Ron dijo que lo estabas,‛ balbuceo.

‚El ocasionalmente dice la verdad.‛ Afortunadamente la espada de Paul


estaba diseñada para romper almas no tela. Mi camiseta estaba bien. ‚¿Tienes
idea de cuanto me cuesta una como esta?‛ Le pregunte, aliviada de no tener que
explicarle a mi padre. ‚¡El hecho de que vayas por ahí como Luke Skywalker9
no significa que el resto queramos ir vestidos con harapos!‛

‚Paul era un Cronometrador en practicas que quería ser como un Caronte.


Giro su gran espada como un señor medieval y eso lo hizo parecer un
desgraciado.‛

9
Luke Skywalker: Personaje de Star Wars.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 81

‚Eso casi tiene sentido, Grace,‛ dije, y ella se alzo de nuevo. Ella brillaba
suavemente, y una criba de polvo cayo de ella mientras se deshacía de la lluvia
en sus alas.

Los ojos de Paul miraron alrededor cuando se dio cuenta de que no estaba
tan sola como me veía. Inseguro, se quedo en silencio hasta que nuestros ojos se
miraron. ‚Tu no eres lo que yo pensaba que serias.‛

Me encogí de hombros, la espalda apoyada en el garaje para permanecer


fuera de la lluvia y cruzando los brazos sobre mi pecho hasta que me di cuenta
que me hacia parecer vulnerable y puse los pulgares en los bolsillos. ‚¿Ron te
dijo que era la muerte con patines de ruedas?‛ dije, todavía enfadada por lo de
la espada. ‚¿Te dijo que el me mintió sobre quien era yo? ¿Después de que yo
estuviera muerta y todo eso? ¿Te dijo como le escondió mi existencia a los
serafines para que no pudieran darme mi cuerpo y yo no pudiera volver a
vivir? Estoy muerta Paul, y es una mierda.‛

Paul bajo los ojos. Grace, también se quedo en silencio, probablemente


recordando su papel en todo ello. Ron la había utilizado muy bien. Un trueno
distante sonó y la luz del farol de la calle alumbro el pelo mojado de Paul.
Ahora se veía negro, pero cuando lo había visto en el desierto se veía marrón.

‚Yo no quería ser la Cronometradora Oscura,‛ dije y sus labios se apretaron


como si no me creyera. ‚Todavía no lo quiero. Yo podría haber recuperado mi
cuerpo en ese momento y dejar todo esto.‛ Le mostré mi amuleto, queriendo
que viera cuanto más viejo era que el suyo. Podría saber como usarlo, pero era
mucho mas potente que el que Ron le había hecho. ‚Pero Ron no se lo dijo a
nadie y cuando se supo la verdad, Kairos había muerto y era demasiado tarde.
Ron te hablo de el, ¿verdad?‛

‚El antiguo cronometrador,‛ dijo Paul. ‚¿Tu lo mataste?‛

‚¿Que parte de no soy una asesina no has entendido?‛ Grace murmuro y


sentí una oleada de calor que me llenaba mientras se posaba en mi hombro.

‚No,‛ dije. ‚Nakita lo segó cuando se entero de que le había mentido y que
yo era su reemplazo. A ella no le gusto que el estuviera yendo en contra de los
serafines matándome. ¿Sabes lo que es tener a alguien intentando matarte?‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 82

Di un paso adelante dejando la pared del garaje y el dio un medio paso


hacia atr{s. ‚No,‛

‚Es que a mi me pasa todo el tiempo.‛

Paul miro su espada y Grace se quito de mi hombro. Por un instante, la


espada brillaba en toda su longitud. Luego ceso y su mano estaba vacía. Un
brillo de oro nadaba en las profundidades de su amuleto y luego, este también
se quedo oscuro y en reposo. Era una piedra plana negra.

‚¿Porque has venido aquí?‛ le pregunte, sintiéndome casi deprimida. Este


tipo me odiaba y ni siquiera me conocía.

Paul miro a la calle y luego a mí. ‚Ron dijo que tu declaraste que intentabas
salvar a alguien. Pero es tu trabajo enviar Carontes para terminar con la vida
antes de tiempo. Quería verlo por mi mismo.‛

No le había creído a Ron. Más curioso.

Las alas de Grace se hicieron mas existentes y ella susurro, ‚Te dije que no
te estaba espiando. Los serafines sabían que vendría a tu encuentro esta noche y
he sido enviada para asegurarme de que ambos sobrevivís.‛

Oh, ¿enserio? Eso era… inquietante. Dejando esto de lado, me enderece.


‚¿Y?‛ pregunte.

Detrás de el, Sandy estaba tranquilamente sentada en la lluvia, con la cola


moviéndose como saludando la tierra. ‚Bueno, tu eres la Cronometradora
Oscura,‛ dijo malhumorado.

‚Ser oscuro no significa ser malo,‛ dije con vehemencia. ‚La luz para la
elección humana es fácil de ver. Oscuridad es para el destino oculto, otra opción
para matar.‛ Tome una respiración lenta. El podría irse ahora si quisiera—el
hecho de que no había dicho mucho. O tal vez quería decir que quería algo. ‚Mi
nombre es Madison,‛ le dije en el caso de que Ron no se lo hubiera dicho.

El dudo y luego dijo con cautela. ‚Yo soy Paul.‛

‚Y yo soy Grace. Pon una sonrisa en tu cara. Por toda la raza humana.
Hazle caso a Madison,‛ Grace murmuro, elevándose un poco y atrás.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 83

Me sentía sola. Paul se veía tonto de pie bajo la lluvia, con el pelo pegado a
la frente y gotas de agua en su dobladillo. ‚Hazme un favor, Paul,‛ le dije. ‚Dile
a Ron que quiero que de marcha atrás. Estoy intentando salvar a este chico. La
intromisión de Ron es lo que anima a Nakita de... ah, hacer lo suyo,‛ concluí sin
querer decir matar al chico. ‚Sea lo que sea lo que creas, yo creo en la
posibilidad de elegir tanto como tu.‛

Paul se echo a reír con amargura. ‚¿Elegir? Los Cronometradores Oscuros


no creen en la elección.‛

‚Si, lo se,‚ gemí. ‚Pero ahí esta, ¿ok? Estoy intentando encontrar una
manera de hacer mi trabajo de una forma que no vaya en contra de todo lo que
creo. Dame un respiro, ¿quieres?‛ Estaba frustrada y más agitada de lo que
quería, y más confiada—aunque estuviera empapada bajo la lluvia.

Con el agua resbalando por su cuello, dijo. ‚¿Porque no me dices


simplemente quien es la marca para poder ponerle un ángel de la guarda?‛

Volví a las palabras de Nakita una hora antes y me sentí mal. Si le había
prometido a ella que no, ¿porque iba a decir ahora si? ‚¿Es esa tu respuesta?‛
dije, deseando que Barnabás se diera prisa. ‚¿Poner un ángel de la guarda?
¿Puedes pensar un poco más a corto plazo? Además el tipo es escurridizo, Paul.
El va a causar mucho dolor y angustia a menos que ocurra algo que cambie su
camino.‛

‚Entonces sigue adelante,‛ dijo en voz baja.

‚No,‛ dije, sin querer admitir que no era capaz de hacer realmente de
Cronometrador. ‚Los serafines me lo dijeron.‛

‚Y tu los creíste.‛ Su expresión era horrible, como si los serafines fueran


malos.

‚Ellos no tienen ninguna razón para mentir‛.

Paul, creía, había dejado de escuchar. El sonido de mi puerta delantera


abriéndose me llego y le tire a Sandy el último hueso para perros. ‚Estoy
intentando hablar con el,‛ dije mientras Barnabás y Nakita salían discutiendo.
‚Si puedo ayudar a este hombre a cambiar su vida, entonces el destino no
podría dictar que se prohibiera. Eso es todo. Eso es todo lo que estoy haciendo.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 84

Ahora, ¿puedes decirle a Ron que se retire y me deje hacer un intento real? Tan
pronto como un Caronte Blanco o unas Alas Negras se muestren voy a tener
problemas para mantener a Nakita lejos de—‚

‚Matarlo,‛ finalizo Paul por mi, con dureza en la mirada. ‚Toda persona
tiene derecho a tomar una decisión, equivocada o no.‛

‚No estoy discutiendo contigo,‛ le dije mientras Barnabás y Nakita se


acercaban. ‚Pero, ¿porque permitir que alguien haga una mala elección cuando
un poco de información puede generar una mejor? Es difícil despertar y ver el
sol si las nubes te ciegan. Soy una tiradora ciega, Paul. Deja de intentar que me
tire por la ventana.‛

Lo pensó, mirando como se aproximaban los Carontes. ‚Dime a quien vas a


segar,‛ exigió antes de que llegaran lo suficientemente cerca para oír, ‚A lo
mejor entonces te creo.‛

‚No voy a traicionar a Nakita.‛ Dije en voz baja bajo la lluvia que silbaba.
‚Ella es mi amiga.‛

‚Seria mas f{cil si tu lo hicieras.‛

El sonido de pasos de Barnabás estaban muy cerca y me moví para hacerle


espacio. Nakita llevaba su bolso moviéndolo como si fuera a usarlo como
martillo. Yo sabia que me veía nerviosa y cuando Barnabás vio mis manos
vacías, se dio cuenta de que Paul tenía su espada—suspiro. ‚Madison,‛ se
quejo.

Es evidente que no íbamos a llegar a ninguna parte y yo solo quería que


Paul se fuera, así que le dije: ‚Paul se estaba yendo,‛ entonces me gire hacia el,
‚¿Verdad?‛

Barnabas murmuro. ‚Sera mejor que llame a Ron entonces. No lo voy a


llevar volando a casa.‛

‚No necesito volar hasta casa,‛ dijo Paul, y arqueando las cejas
astutamente, se deslizo hacia un lado y desapareció en una línea brillante de
color negro.

‚¡Mierda santa!‛ exclame, cayendo de nuevo en estado de shock. ‚¡Yo no


puedo hacer eso!‛ me gire hacia Barnabás y Nakita. ‚¿Como es que yo no
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 85

puedo hacer eso?‛ Por Dios el podría haberse ido después de que le hubiera
devuelto la espada. ¿Porque no lo había hecho?

‚Tu puedes,‛ dijo Nakita, recuper{ndose r{pidamente.

‚Simplemente no sabes como‛, dijo Barnabás.

Grace emitió un sonido agudo de sorpresa. ‚¡Lo tengo, lo tengo!‛ grito ella.
‚Mi nombre es Grace, desde el espacio celestial. Estoy viendo a Paul, cuyo culo
ha transportado. Tengo prisa.‛ Y en ese mismo tipo de deslizamiento de luz ella
desapareció.

Molesta, metí mi amuleto detrás de mi camisa húmeda con disgusto. ‚¿No


vienen estas cosas con un manual?‛ Refunfuñe. Una cosa buena había salido de
esto sin embargo: si Grace estaba vigilando a Paul, no estaba vigilándome a mí.

Barnabás se estremeció, con las alas que brillaban bajo la farola. ‚¿nos
vamos?‛ supuse y Barnabás asintió arqueando las alas para cubrirme. ‚¿Que
pasa con mi padre?‛

Nadie dijo nada y me volví hacia Nakita con los labios fruncidos. Mis
pensamientos volvieron a la discusión al salir de la casa. ‚¿Que pasa con mi
padre?‛ pregunte de nuevo, mas fuerte.

Barnabás cogió mi brazo y me acerco. ‚Esta en el sof{, viendo la televisión.‛

El olía a plumas mojadas y me quite su mano de encima. ‚¿Que le habéis


hecho a mi padre?‛ le acuse y el se enrojeció.

‚¡Nada!‛ exclamo. ‚Vamos. Puedo secarte en el camino.‛ No me moví, y le


dispare una mirada encerrada a Nakita cuando ella dio un suspiro.

‚Vale, Vale.‛ Añadió Barnabás. ‚Yo simplemente le di un recuerdo de que


estas en la cama ya. No me voy dejándoos a Nakita y a ti aquí, y no puedo dejar
a Shoe durante mucho tiempo más. Tu padre va a estar bien. ¿Podemos pasar a
través de las nubes, por encima de la lluvia por favor?‛

Desde las sombras, una Nakita con oscuras alas se quejaba de que ella
podía haber hecho un mejor trabajo manipulando a mi padre.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 86

De pie, con la lluvia cayendo por mi rostro, me pregunte si Paul estaba en


lo cierto. Podría haberle dado el nombre de Shoe y esto habría terminado.
Excepto que Shoe pasaría el resto de su encantadora vida causando un caos.

Y mas importante, habría traicionado la confianza de Nakita.

Vacilante, mire a Barnabás. La lluvia goteaba de las puntas de su pelo


aplastado mientras esperaba silenciosamente, con un interrogante en su frente.
Con un repentino destello de claridad, me di cuenta de que había dejado de
forma intencionada a Nakita en casa para que yo pudiera hacer esto. El me
había dado la oportunidad de contarle a Paul lo que buscábamos.

Y cuando yo le sonreí y sacudí la cabeza, pareció relajarse. No quería, pero


me había dado la oportunidad. De alguna manera, eso me hizo sentir bien. Al
igual que por fin había hecho algo bien.

Nakita miro de el hacia mi y viceversa, a sabiendas que algo no dicho había


cruzado entre nosotros, pero sin saber que. ‚¿Vamos?‛ pregunto lentamente.

‚Por supuesto,‛ dije y Nakita sonrió. Creía en la elección, pero ponerle un


ángel de la guarda a Shoe no era una opción. Era una manera de escabullirse.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 87

Capítulo 7
Traducido por Isabella

M
e alegraba de que mi cuerpo no fuera real cuando me agache
frente a la ventana de Shoe, porque mis rodillas me dolerian
ahora mismo. Me enderece y me puse a un lado de la ventana y
eche un vistazo a su cama ordenada. A mi lado, Barnabas miraba a Shoe, con
sus ojos color cafe sin pestañear. Nakita estaba en el patio delantero, hacindo
fotos a las hojas, los arboles y una grieta en la acera, lo que me ponia nerviosa a
pesar de tener el flash apagado. Por lo menos aqui no llovia. Pequeño favor.

Si bien el aire me habia secado, pero me habia dejado con una especie de
humedad pegajosa, envidiaba la capacidad de Barnabas de secarse por
completo de alguna manera. Nakita tambien estaba genial en sus vaqueros y
sandalias, con las uñas de los pies ahora de un color rosa nacarado. Habia
terminado de pintarlas momentos antes, aburrida de todo.

"¿No podemos ir a hablar con el?" susurre cuando Nakita oscilo cerca otra
vez, haciendo una imagen de lo que parecia nada. Estaba cansada de estar
merodeando alrededor. Quiero decir, este era el tipo al que se suponia debia
salvar, y yo no habia hablado con el todavia. Tenía dos Carontes ayudandome,
pero uno estaba distraido con su nuevo juguete y el otro estaba demasiado
arraigado con el protocolo antiguo para probar nada nuevo.

"Solo un minuto mas," dijo Barnabas alrededor de la sexta hora. "Quiero ver
lo que esta haciendo."

Desde las sombras, Nakita miro la parte de atras de la camar, con el brillo
de luz sobre su rostro se quejo.

"Es un humano, causando la muerte. Tiempo de matar humanos."

Barnabas fruncio el ceño debajo de sus rizos y suspire.

No me gustaba espiar y yo estaba entre los arbustos y el revestimiento,


pensando acerca de los errores mientras me ponia el pelo humedo detras de la
oreja y miraba hacia el patio oscuro. El barrio era un lugar bonito—mas
agradable que el mio—y me pregunte porque un tipo que lo tenia todo tenia la
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 88

necesidad de tomar todo de otra persona.

Las estrellas mostraban agudos contornos más alla de los tejados y me


preocupaba que Ron pudiera aparecer. Barnabas o Nakita habian estado
escondiendo la resonancia de mi amuleto desde que habiamos salido de mi
patio trasero. Probablemente deberia aprender a hacerlo por mi misma. No me
gustaba depender de Barnabas o Nakita.

Una explosion de ruido sobre el teclado me llamo la atencion y me asome al


borde de la ventana para ver a Shoe todavia encorvado sobre su ordenador. La
habitacion del chico era aburrida, con paredes de color blanco palido y una
alfombra gris que parecia pertenecer a un consultorio medico. Su escritorio
estaba terriblemente limpio. Todo estaba en un estante o en un cajon. No habia
ropa ni desorden por ahi. Incluso su cama estaba hecha.

Aparte de la bandera de Harvard, el unico color era el Ace Artwork. Habia


varios CD's encima del ordenador escritorio y un cuadro grande de aguilas con
las garras estiradas al lado de la puerta del armario.

Tal vez su madre tenía algo contra las chinchetas en la pared. Su musica era
aburrida era como alguien tocando la lira y a mi, con mi pelo morado me hacia
sentir somnolienta. Yo, dormir... y no habia tomado una buena suesta desde
que habia muerto.

"¿Esto es lo que hace un Caronte?" dije, mirando hacia Barnabas. "¿Espiar a


la gente?"

"Algo asi," dijo Nakita, haciendo crujir los matorrales mientras se acercaba.

Sus ojos nunca dejaban a Shoe, Barnabas se deslizo para hacerle sitio. "Es
una actitud de Caronte preventivo, no de Caronte," dijo el en voz baja. "No
estoy seguro de que hacer y no hay nada de malo en mirar hasta que tengamos
una idea."

Un sonido suave, casi un gruñido, salio de Nakita mientras se ponia de


espaldas a la casa. "Hay unos cien posibles accidentes en esa habitacion," dijo.
"Puedo hacer que parezca que su cable de alimentacion se deshilacho y se
electrocuto."

"¡No!" Barnabas y yo exclamamos en voz baja.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 89

Shoe levanto la vista del teclado, tal vez habiendo escuchado. Me eche hacia
atras y arrastre a Barnabas y Nakita hacia un lado. La musica se hizo más
fuerte, pero no fue hasta que el repiqueteo de las teclas se reanudara que no nos
relajamos y mire por la ventana de nuevo.

"¡No vas a matarlo!" dijo Barnabas, ella puso su camara en el bolso


frunciendo el ceño mientras se levantaba.

"No tienes ni idea de lo buena que estoy siendo," susurro Nakita, viendo a
Shoe apretar el boton de la impresiora, luego inclinandose paa coger un papel a
medida que salia disparado. "El Cronometrador nos podria haber seguido hasta
aqui. Si me da una bocanada de el, lo juro, lo voy a matar,"

¿Quién?, ¿Ron o Shoe? Pense, mirando a Shoe. El tipo era un total geek, pero
eso no le hacia digno de segarlo. Lo que los serafines alegaban simplemente no
encajaba con lo que yo habia visto esta noche. Lo habia visto ayudando a su
hermano pequeño con un juego de ordenador de mano y el no se la habia
quitado para enseñarle que hacer a pesar de sus diez años de edad.

"Me gustaria verte intentarlo," dijo Barnabas, sin alterar su mirada de la


habitacion de Shoe.

Nakita resoplo, y puso los ojos en blanco. No de nuevo... "No puedes


detenerme," dijo con altivez, un poco demasiado alto para mi gusto. "Esto es lo
que hacemos. Acostumbrate o dejalo. Eres el angel nuevo aqui. No yo."

Barnabas se volvio con expresion molesta. "Esa es una buena idea," dijo con
amargura. "Mata a Shoe y convierte en polvo de estrellas la oportunidad de
Madison de hacer las cosas a su manera."

Sus ojos se estrecharon. "Ron puede estar viendonos en este momento. ¡No
voy a permitir que le ponga un angel de la guarda a Shoe!"

¡Oh, Señor!. Iban a hacer suficiente ruido como para hacer que Shoe viniera
a la ventana. No era la presentacion que me gustaria. "En realidad," dije antes
de que Barnabas pudiera contestar con nada, "Nakita tiene una preocupacion
valida."

Las hojas se movieron y Barnbas se giro hacia mí. "¿Que?"

Siin mirarle a los ojos, mire a Nakita. "¿Porque no haces unas rondas para
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 90

ver si Ron o Paul nos estan viendo?"

Barnabas oculto su sonrisa un poco demasiado tarde. Nakita lo vio y se


puso rigida. "Estas deshaciendote de mi,"

"Bueno, si," dije, sin querer mentirle. La habia engañado suficiente."Pero


tienes razon. Alguien deberia vigilar. Te elijo a ti."

Fruncio el ceño, y mientras sus ojos se ponian plateados por un momento,


entonces dijo, "Bien‛ y se fue.

Exhale, frotando la parte de detras del cuello en señal de socorro mientras


ella abria sus alas y con un empuje bajo tocando la hierba, se lanzo al aire.

Barnabas se levanto y se estiro. "¿El termino 'bien' significa lo mismo


cuando lo dice Nakita que cuando lo dices tu?"

"Si," mirando hacia atra a Shoe, senti un momento de inutilidad.


"Simplemente esta llenando solicitudes para la universidad. Barnabas, Shoe es
tan emocionante como la harina de avena. ¿Estas seguro de que estamos
vigilando a la persona adecuada? Incluso si es un genio de los ordenadores, no
parece el tipo de persona que de forma anonima mata gente."

Barnabas se acerco más, y el aroma de las nubes llego a mí. "¿Tu crees?" dijo
el en voz baja. "El esta abriendo una carpeta oculta."

De pronto, mucho mas interesada, mire para ver a Shoe todavia sentado
delante de su ordenador. Desviando los ojos, lei, ‘Operacion Vacaciones’, en la
parte superior de la nueva ventana.

"Suena bastante inocuo," dije en voz baja.

Barnabas se estiro hinchando el pecho, cambiando su peso de un pie a otro.


"¿Recuerdas lo que Grace dijo? Los ordenadores del colegio son los primeros
infectados. ¿Vacaciones? ¿Al igual que el cierre del colegio y la obtencion de un
dia o dos libre?"

Ohhh, nada bueno. Sin embargo, yo no estaba convencida, incluso cuando


Shoe cogio un CD decorado con los filigranas de Ace y lo puso en el portatil.

"Tengo que hablar con el. Ahora."


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 91

Barnabas se volvio hacia mi con los ojos muy abiertos. "¿Viste eso?"
Pregunto. "¡El disco tenia un ala negra en el!"

El parecia sorprendido, y yo hice un gesto con la mano quitandole la


importancia. "Lo siento. Quiero decir que te lo dije. Es Ace," dije. Volviendo mi
mirada de nuevo al dormitorio gris y blanco. "El es un artista. ¿No es
escalofriante? El le dio la idea a Shoe."

"Escalofriante no es la palabra que yo usaria," gruño Barnabas, resentido.

Vi como Shoe se recostaba en una silla, mientras el disco se grababa.


¿Porque lo ponia asi?. ¿Tal vez iba a colarlo en el colegio disfrazandole de
musica?

¿Porque sigo aqui sentada? Me pregunte de repente. Estaba guardando el


virus. ¿Tengo que ver como lo hace?

¿Sere tonta? "Voy a hablar con el," dije, cogiendo fuerzas y abriendome paso
entre los arbustos para llegar al patio delantero.

Las ramas rozaron mis brazos y me detuve cuando un par de faros se


encendieron en la calle. Se veian... azules. No los faros si no la luz.

"Espera," Barnabas susurro mientras se levantaba para ponerse a mi lado,


pero me senti mareada y me detuve, entrecerrando los ojos cuando los faros
mostraron el coche de Ace estacionado en la calle. Su musica fuerte se paro
unos segundos despues de parar el motor y la puerta dio un ruido sordo y seco.
Caminaba suave, su forma oscura rodeo la parte de delante del coche y se
dirigio al camino.

"Ace," dije, apretandome el estomago. Me sentia mareada. No podia ver la


puerta principal desde donde estaba, pero era bastante facil sseguir su ritmo
rapido por el sendero y luego escuchar el sonido del timbre de la puerta.

De la habitacion de Shoe llego una maldicion entre dientes. Barnabas me


llevo detras de un arbol y juntos observamos inquietos a Shoe, de pie ante su
ordenador y casi cayendose cuando intentaba ponerse sus zapatos. "¡Rapido!"
murmuro a la unidad que aun zumbaba. Mis ojos no estaban funcionando bien,
y yo parpadee, intentando que la bruma de la luz azul se fuera. Al mirar hacia
abajo a mi amuleto, me pregunte si tambien parecia azul o era mi imaginacion.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 92

Barnabas me apreto el brazo. "Tenemos que irnos," dijo, con los ojos en la
ventana.

"¿Porque?" le pregunte, intentando sacudirme un zumbido de mis oidos.

Se volvio hacia mi, sus ojos castaños impacientes y molestos. "Porque creo
que Shoe va a salir por la ventana tan pronto como termine lo del ordenador."

Efectivamente, llevaba una sudadera con capucha, y unos zapatos negros,


parado frente y viendo la pantalla. Desde fuera, podia escuchar asu madre en la
puerta, invitando a Ace a entrar. Haciendo una mueca, me agacche detras del
arbol, fuera de su vision.

El sonido del viento entre las plumas atrajo nuestra atencion y no me


sorprendio ver a Nakita tomar tierra ligeramente en el techo. "¡Quedate ahi!" le
susurro Barnabas, y el Caronte Oscuro me hizo temblar al ver su expresion
feroz. Mis ojos se abrieron cuando ella capto el mensaje, y entonces dio un salto
atras en el aire para poder seguir a Shoe, que claramente iba a salir sin permiso.

Desde el interior, oi llamar a la madre de Shoe. Esto se iba a poner feo muy
rapido.

"¿Sabe siquiera Nakita lo que esto significa?" le pregunte poniendo una


mano en el pecho. ¿Porque no estaba mi corazon latiendo? siempre latia cuando
me ponia nerviosa.

Barnabas me llevo de nuevo detras del arbol. "No lo creo," dijo y parpadee
mirandole. Sus ojos estaban plateados. "Tenemos que irnos."

Todo estabab poniendose azul, pense. Me senti aturdida, confusa.

Shoe finalmente apago la pantalla y se subio a la ventana mientras pasaba


hacia fuera. Sus cortinas ondearon cuando las cerró para ocultar la ventana
abierta.

"Tenemos que salir de aqui," dijo Barnabas y se lanzo a correr por la hierba.
Tome aire y me anime a mi misma a moverme. Si no fuera por el viento en
contra sobre la cara, no habria sido capaz de decir que estaba en movimiento.
Era como un sueño en el que corria y corria y nunca llegaba a ningun lugar.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 93

"¡Madison!" Barnabas me llamo desde la acera y me detuve. Parpadeando


mire hacia abajo. Todavia estaba al lado del arbol. Espere un momento. Sabia
que habia corrido... a algun lado.

"¡Madison! ¡Vamos!" repitio Barnabas y yo vacile. "¡El va a salir!"

"No me siento muy bien," le dije, entrecerrando los ojos.

Y entonces la luz de la calle fue de repente totalmente azul. Al igual que un


vaso de agua cai al suelo y rebote contra las paredes de luz blanca y azul hasta
que fue todo de un solo color. ¡Oh esto no puede ser bueno!.

"Ummm," respire mientras Barnabas corria atras y me cogia del brazo.


"Creo que tengo problemas," le dije.

Entonces mis rodillas cedieron y me desplome.

"¡Madison!"

Golpeandome la cabeza, senti que Barnabas me cogia. "¡Por los dedos de


Gabriel!," murmuro y yo abri los ojos.

Su rostro brillaba como cuando los vemos en las peliculas, con un aura
blanca. Podia ver sus alas. Tendi la mano, trate de tocarlas, encontre que solo
estaban en mi visión, no eran reales. Parecia un angel que habia caido en
desgracia. El era la unica cosa real al final. Todo lo demas era de color azul,
convirtiendose en el color de la monotnia.

"Barnabas," dije en voz baja, necesitando un gran aliento de aire para


hacerlo. "Algo esta mal."

"¿Tu crees?" el dijo, sonando con panico cuando me levanto en sus brazos.
"¿Que te pasa? ¿Estas herida?"

Mi mirada se poso en su amuleto, y lo mire con asombro. Estaba


absolutamente negro. No era un violeta profundo sino negro. Con una
compresion repentina, me di cuenta que era ultravioleta el color para caerse el
espectro visible.

Mi cabeza colgo y me quede sin aliento cuando vi las estrellas. Eran un


arcoiris de nanocolores. Yo podia ver las longitudes de ondas a todo volumen y
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 94

empece a llorar. Era demasiado. Yo era solo humana. No se supone que pueda
ver todo esto, para saber que existian estos colores.

"¡Madison!"

Barnabas giro mi rostro desde el cielo y sollozando como si el fuera lo unico


real.

"Algo esta...mal," balbucee. Queria volver a mirar, pero no podia soportarlo.

"Voy a encontrar a Ron," dijo Barnabas. Su voz era sombria y aunque una
ola de mareo me golpeo, me centre en el.

"No," sople y luego mas fuerte. "¡No! Simplemente no me dejes mirar las
estrellas." Estaba llorando, y veia las olas azules saliendo de mi, rebotando en el
como las olas rebotando en una playa. "No me dejes ver las estrellas..." susurre.
Y mientras Barnabas demostraba su panico, senti mi mente expandirese.

Al igual que soplar una llama, el se disolvio en una nube de humo azul y
desaparecio. Que rapido, estaba sola, y todo lo que me sostenia fue el
resplandor de su aura a mi lado mientras me sumergia en el tejido del tiempo.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 95

Capítulo 8
Traducido por Mekare
Corregido por Ryan Archer

¿ Dónde diablos estoy? Pensé, viendo mis dedos moverse a través de una
niebla azul mientras agarraba la parte posterior de una silla con
ruedas y la hacía girar para colocarla frente a la computadora que
había frente de mí. ¡Santo Dios!, ¡estoy en una habitación de Shoe! Y esos no lucen en
realidad como mis dedos...

"Veo cómo te gusta," sentí que mis labios decían, y luego lo oí un instante
después, era masculino y marcado.

¡Mierda! ¿Estoy aquí? Pensé, pero me tuve que sentar, él lo hizo, más bien, y
volví la cabeza sin querer con el fin de asegurarme de que la puerta estaba
cerrada. Echándome hacia atrás en la silla, miré hacia las cortinas cerradas. Una
ligera intrusión meditaba en mis pensamientos, que yo había visto a alguien por
ahí afuera, salir corriendo.

Barnabás y yo, pensé mientras miraba las manos que no eran mías, pero era
evidente que Shoe no me sentía como yo lo sentía a él. Esto era una locura, y no
me gustaba el tinte azul que tenía todo. Podía oír los latidos de su corazón y
sentir su aliento en él, sintiéndolo irse un instante antes de él exhalar. Su pie
picaba en su zapato, y estaba conduciéndome a la histeria si él no se rascaba.
Estaba caliente e irritable, y por primera vez en meses, me acordé de lo que era
tener hambre.

Estoy yendo muy rápido, pensé, el recuerdo de la adrenalina lavando a través


de mí para mezclarse con la ira de Shoe. Un instante antes de que suceda.

"Esto va a estar bueno", oí murmurar a Shoe mientras él se inclinaba hacia


delante y golpeaba sus dedos sobre el escritorio con un rápido ritmo. "Nadie
podrá ser capaz de probar que fui yo. Soy más listo de lo que todos los lame-
botas piensan"
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 96

Mis dedos estaban rígidos mientras el golpeteo se convertía en un golpe


sobre la mesa. "Dios, este equipo es lento," me oí murmurar, sintiendo una
emoción de irritación que no era mía.

Shoe, ¡no! ¡Vas a matar personas! Pensé, tratando de lograr que él me oyera,
pero sin ninguna indicación de que me había sentido, él se levantó y puso su
oreja en la puerta, escuchando a Ace.

Maldita sea, sabía que no sería tan fácil, pero yo podía sentir la creciente
desesperación de los dos, mientras yo veía todo lo que sucedía, incapaz de
detenerlo, incapaz de hacerme oír en su cabeza.

Agitadamente, Shoe se mordió una uña mientras el drive zumbaba. Limpio,


limpio, todo tiene que estar tan malditamente limpio, le oí pensar mientras él se
raspaba la tinta de debajo de la uña, luego golpeó esta hacia el centro de la
habitación.

Tengo que salir de aquí, salió resonando en nuestra mente compartida.


¡Shoe, alto! Pensé, gritando en su cerebro, pero se paró frente a la computadora y
empujó la silla hacia atrás bastante inquieto, esperando. ‚¡Dios! ¿Podría ser este
pedazo de mierda más lento?‛ Finalmente, el disco terminó y el cajón
deslizante se abrió. Fui por él, y aunque yo no podía verlo, sabía que él estaba
sonriendo ante la imagen del pájaro negro que goteaba. Él lo embutió dentro de
un bolsillo trasero, y un torrente de emociones se deslizó dentro de mí.

Él estaba tan fuera de si. Lo había conocido durante toda su vida, y ¿así era
como él era tratado? Ellos tenían que saberlo todo mañana en la escuela. Él se
aseguraría de que todo el mundo supiera quién era el responsable de todo. Y su
supuesto amigo podría acurrucarse y morir, para lo que a él le importaba.

‚¡Shoe!‛ - Exclamé yo, pero un oscuro baño de tinta azul oscureció mi


visión.

El mundo parecía haberse vuelto al revés, yo luche débilmente. Otra vez


estaba perdida en la negra fábrica del tiempo, encendida en la línea
resplandeciente de un millón de pensamientos conscientes. Un relámpago de
color azul se introdujo, y con un ping-pong de explosión, estaba de regreso.
Más o menos.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 97

Yo no me siento muy bien, pensé, y luego una oleada de satisfacción de la que


no conocía la fuente ingirió todo lo demás. No podía ver nada. Un azul tan
profundo que era casi negro nubló mi visión hasta que fue todo lo que había,
pero yo sabía que estaba en la mente de alguien. Ellos estaban a gusto, y yo
podía sentir el latido de un corazón...oler la comida. Mis dedos estaban
grasosos, y sentí una punzada de hambre cuando me di cuenta que estaba
comiendo algo salado. Como si viniera a través de una manta, pude oír una
serie de televisión, lo único claro era la risa de fondo. Detrás de ésta estaba la
voz de una mujer, el sonido de las pausas y vacilaciones me hacía pensar que
ella estaba hablando por teléfono.

‚No‛ dijo ella. "Ellos no me dejan a nadie, especialmente a los voluntarios.


Ellos son los principales sospechosos, pero todo el hospital está bajo
investigación‛.

Sentí mi pecho moverse mientras me reía entre dientes, un rubor de


satisfacción me hizo feliz y enojada. Shoe estaba complacido, pero yo estaba
molesta. No es que él pudiera decirlo.

Pero esto no ha sucedido aún, pensé yo, pensando que yo podría estar más
lejos en el futuro, porque lo único que estaba claro eran voces. Eso y mi hambre.
Hombre, extrañaba eso, y mi boca se hacia agua, mientras Shoe se embutía unas
papas fritas.

"¡No!", Dijo la mujer, sonando horrorizada. "Tres personas murieron. Les


tomó unas irreales cuatro horas conocer incluso que tenían un problema. Ellos
podrían haber perdido dos veces esa cantidad. Ellos piensan que tal vez es un
empleado descontento. El firewall no lo detecto, ya que alguien lo puso allí. No
fue a través de Internet."

Shoe, eres un tonto, pensé mientras él se reía entre dientes, empujando papas
fritas en su boca y bajándole al televisor para así poder oír mejor. No podía ver
el mando a distancia, pero yo podía sentirlo. ¿y por que estaba ese sonido de
viaje a través del tiempo en vez de la visión?

‚Sí, un trabajo interno" la mujer estaba diciendo. "Y ellos van a atrapar al
pequeño bastardo."
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 98

En lugar de miedo, yo sentía placer. Era todo gracias a Shoe, por supuesto,
traté de darle un dolor de cabeza. Pensaba que él era un buen tipo, pero estar en
su cabeza me había curado de eso.

"Ellos tienen el disco", dijo. "Rastréalo hasta la Terminal de la que vino.


Todo lo que necesitamos hacer ahora es hacerlo coincidir con el equipo que se
quemó. ¿No es eso algo?" Dijo en voz alta. "Sí, ellos pueden hacer eso. Al igual
que pongan en venta las balística de una bala. Ellos sólo van a entrevistar a la
gente ahora mismo, pero las órdenes de registro vendrán. Sabes que ellos lo
harán. El idiota puso una etiqueta encima. Podría ser un niño, ya que lo mismo
ocurrió en la escuela ayer‛.

Mis labios se movían, y oí un susurro, "Ooooh, voy a conseguir tu culo


roto".

¡Shoe!

Exclamé en mi mente, pero era sólo un sueño, una posibilidad que no había
sucedido aún todavía y sentí una oleada de frustración cuando cada sonido
único iba hasta un puntito de color negro azulado hasta que no hubo nada, ni
voces, ni sentido... nada.

Por un instante me quedé allí, sin saber lo que iba a ocurrir a continuación.
Y entonces me quedé sin aliento cuando el mundo brilló de color rojo.
Me sacudí. Mi brazo se estrelló contra algo, y oí gruñir a Barnabás. Asustada,
abrí los ojos. Tenía ojos, y se abrían cuando yo quería que lo hicieran. Gracias a
Dios. Todo había terminado. Barnabás estaba mirándome. Estaba cerca, muy
cerca. Por encima de él estaba el liso, e inconfundible techo de un coche. El
silencio sordo de estar encerrada se apretó contra mis oídos.

"Uh‛ tartamudeé, pensando que parecía aterrorizada. "¿Por qué me


abrazas?"

Abrió la boca y sus ojos brillaron plateados por un segundo.

"Estrellas al polvo, ¿qué pasó?", Dijo mientras su abrazo sobre mí se


aflojaba. "¿Estás bien?"

Él me dejó caer en el asiento junto a él, me senté, temblando mientras


quitaba las puntas moradas de mi pelo fuera de mis ojos. Estábamos en el
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 99

asiento trasero de una camioneta, y parecía que todavía estábamos en el barrio


de Shoe. Manteniendo una mano en mi estómago, mire a Barnabás y recordé
sus alas. No estaban allí ahora, pero tal vez estaban sólo un instante antes o
detrás de nosotros en el tiempo. Antes del ahora y el próximo quizás, pensé que
podría verlas si entrecerraba los ojos.

"Todo era azul", le dije. "¿Dónde estamos?"

Barnabás exhaló en voz baja y se pasó la mano por la frente.

"En la Van de alguien", dijo, moviendo sus hombros como tratando de


relajarse. "Estaba abierta. Estabas llorando sobre las estrellas. Una vez que no
pudiste verlas, te calmaste un poco. Madison, ¿qué pasó? acabas de venir toda
tensa‛.

Me toqué la cara, dándome cuenta de que estaba mojada. Incapaz de


mirarlo, yo me sequé.

"¿Nunca has visto a alguien hacer eso antes?‛ Le pregunté, viendo el


movimiento de mi mano. Las dos barras rojas en mis uñas lucían graciosas.
"¿Ron, tal vez?‛

Desde la esquina de mi vista, lo vi mover la cabeza.

"Tienes miedo al siempre adorable polvo de plumas fuera de mi. Nunca


he... nunca he oído hablar de... ¿Qué pasó? "

No sabía si tenía hambre o si iba a vomitar. Sentía que no había comido en


las últimas semanas. Y no lo había hecho.

"Creo que esto fue un flash forward‛ dije, pensando, ¿Este es mi trabajo?
¿Voy a hacer esto con frecuencia? Tengo que encontrar mi cuerpo, como, ayer.
"Todo era azul, y pude ver tus alas", terminé, sintiéndome enferma.

Barnabas se aclaró la garganta. "¿Por qué ver las estrellas hiere?"

Girándome hacia él, me encogí de hombros. Sinceramente, no podía


recordar. Era como si mi mente estuviese bloqueada. Tal vez la mente humana
no puede tomar mucha belleza.

"No sé", dije en voz baja. "Pero, Barnabás, vi a Shoe cargar el virus en un
disco de computadora. Yo era él, pero él no me escuchaba, ni siquiera cuando le
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 100

dije que parara. Entonces las cosas cambiaron, y sentí su satisfacción cuando se
enteró de las personas que morían en el hospital. ¡El tipo es extraño! Yo no lo
entiendo. Él parece tan normal‛.

"No es de extrañar que Ron nunca dijera nada sobre sus flash forwards",
dijo Barnabás, sus ojos castaños explotando de pesada preocupación. "Madison,
fue horrible. Era como si ellos no estuviesen allí. Pensaba que si te dejaba ir, tú
podrías... desvanecerte. Como tu muerte te quitó el ancla para volver. Tu
amuleto no estaba manteniéndote conectada en las líneas del tiempo. Yo
estaba… ‚

El miedo se deslizó a través de mí.

"¿Habían alas negras?" negó con su cabeza, pero la mirada en sus ojos me
asustó.

"No. Pero pensé que si te dejaba ir, tu te irías ", él dijo. "Se supone que debo
ser quien te mantiene a salvo. Nunca había estado tan aterrorizado‛. Sus labios
entreabiertos mientras buscaba las palabras, y te juro, si yo tuviera un corazón,
habría soltado un golpe por la preocupación en sus ojos. "Y tú vas a hacerlo de
nuevo. "

Asustada, yo tragué y miré a la comida rápida de juguetes para niños en el


suelo, sin saber si le creía sobre las alas negras. ¿Qué pasaba si esto ocurría
mientras yo estaba en la escuela? Ellos me pondrían medicamentos o algo así.

"Todo estará bien", le dije, temblando. "Yo sé lo que se siente un flash


forward justo ahora. Antes de que esto pasara, toda la luz fue azul. La próxima
vez buscaré un cuarto tranquilo o algo‛.

‚Azul. Como si te estuvieras moviendo más rápido en el tiempo‛, dijo


Barnabás, que parecía encontrar consuelo en que eso podría ser alguna
advertencia. Un pensamiento repentino me puso alerta, mi propio temor
desvaneciéndose mientras yo quitaba el cabello de mis ojos. "Y si yo tuve flash
forward, entonces tal vez Ron también." Mierda, si él vio lo que yo había visto, él
sabría quien era la marca. Me puse de pie, casi golpeando mi cabeza contra el
techo. "Tenemos que irnos‛ le dije sintiéndome ligeramente mareada y débil.
No había estado hambrienta o enferma durante meses, y estar así ahora era un
shock. Tal vez el flash forward había sacado un poco de mi amuleto.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 101

‚¿Dónde está Nakita? "Le pregunté cuando él no se movió, seguía sentado en el


asiento del banco de la furgoneta y me miraba como si yo fuera a romperme. "Si
he visto el futuro, entonces Shoe ha tomado su decisión, y su destino está
establecido a menos que pueda cambiar de opinión. Tengo que hablar con él
antes de que haga algo estúpido o Ron lo identifique. ‚

Barnabas me tomó del brazo, sorteándome hacia atrás. "Madison,


disminuye la velocidad. Tu no estas bien. ‚

"Voy a estar bien", dije, sintiéndome débil cuando tiré de la puerta y no se


movió. "Pero Ron puede saber quién es la marca ahora. Él ve lo que yo veo,
¿no? Si no encontramos a Shoe antes de que Ron envié a cualquier Caronte
Blanco, Nakita lo matara. Barnabás, ¡he estado corriendo fuera de tiempo!"

Era irónico decirlo de esa manera, pero no era tiempo de analizar eso,
necesita salir de aquí, así que forcé la puerta, pero esta parecía imposible de
abrir. Resoplando de impaciencia, me recosté en el asiento y dije: "Un poco de
ayuda aquí, ¿por favor?"

En Silencio y con su cara lúgubre, él llegó a través de mí y abrió la puerta.


Había estado haciéndolo bien, sólo estaba demasiado débil.

Tropecé cuando salté a la acera, y no pude dejar de mirar el charco de la


farola para tranquilizarme, ya que este era de un alegre color amarillo en vez de
un tinta azul-negro. "¿Dónde está la escuela aquí?" Le pregunté. Si ella lo mató,
voy a estar tan molesta. No he pasado por esto en vano.

"No vas a llegar a tiempo a pie", dijo Barnabás, y me quedé sin aliento
cuando me cogió, me acunó entre sus brazos mientras empujo sus alas hacia
abajo, para luego elevarnos en el aire.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 102

Capítulo 9
Traducido por Linetas

L
os brazos de Barnabás estaban apretados a mí alrededor, mientras él volaba
sobre lo que tenía que ser la escuela secundaria. Mientras Nakita y yo
habíamos estado tratando de pasar los spaghettis de padre hacia Josh,
Barnabás había estado recorriendo la ciudad de Fort Banks, una previsión de la
que ahora estábamos cosechando los beneficios. El plano techo de grava con sus
grandes unidades de aire acondicionado estaba sin rasgos en la oscuridad. Olía
como a alquitrán, y el aire se volvió más cálido, cuando él flotó suavemente
sobre este y encontró la parte de atrás de la escuela con su grande extensión del
estacionamiento.

"¿Ves a Nakita?" Le pregunté, escaneando por cualquier rastro de ella, Shoe,


o incluso Grace.

‚No‛ dijo en voz baja, y yo esperaba que no fuera demasiado tarde.

"¿Crees que debería tratar de llamarla?", Pregunté, y él cambió la


inclinación de sus alas para hacernos volar en paralelo a las hileras de ventanas
negras en el lado.

"Tendría que dejar de esconder tu resonancia y esperar que ella esté


haciendo lo mismo. Ron podría escuchar", dijo, terminando en voz baja: "Es
mejor solo mirar".

‚Supongo‛ dije, frustrada.

"No hay alas negras", dijo Barnabás, haciéndome pensar que allí habían
estado cuando fui hacia el futuro, y él no me lo había dicho.

"Sin embargo‛ dije con acritud. Un movimiento r{pido captó mi atención, y


señalé. "Allí‛ le dije, pero Barnabás lo había visto, también. Era Shoe, a medio
camino a través de una ventana baja con un pie en el interior, uno en el alféizar.
Nakita estaba hablándole a él desde el exterior, lo que probablemente lo
sorprendió. El débil resplandor, del tamaño de una pelota de softbol por encima
de ella era probablemente Grace.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 103

La Caronte Oscura no tenía su espada afuera, pero me di cuenta por la


bruma de Grace que las cosas no iban bien.

Barnabás se alejó, y, sorprendida, le grité: "¿A dónde vas?"

"No quiero que él me vea con mis alas", dijo, y Grace, quien claramente me
había oído, se lanzó hacia arriba directo hacia nosotros.

"Barnabás, estoy tratando de convencerlo de que necesita cambiar su vida o


arriesgarse a ser matado por un ángel. ¡Aterriza donde él pueda enloquecerse
viéndote! siempre puedes cambiar su memoria‛.

Haciendo un gruñido de entendimiento, cambió su curso, aleteando, tres


veces para amortiguar nuestro aterrizaje sobre la acera.

"¡Él está aquí! ¡Necesitas darte prisa!", Dijo Grace, su neblina pareciendo
atenuarse contra las estrellas mientras volaba en círculos alrededor de nosotros.
Mi cabello voló hacia arriba por el golpeteo de las alas de Barnabás. "¡Ella lo
persiguió dentro!"

Tropecé lejos de Barnabás cuando mis pies tocaron tierra, tirando de mi


falda hacia abajo, donde debería estar. Nakita había saltado en el interior, pero
estaba demorándose en la ventana para ver a Shoe y a nosotros dos. Su espada
estaba afuera, y yo no tenía necesidad de ver el futuro para saber que todo
estaba a punto de desplomarse.

"¡Grace, dile que espere!" Le dije. "¡Ron no está aquí! ¡Estamos bien!"

"¡Lo tengo!", ella dio un grito, y en un destello de plata se alejó velozmente.

Ron no está aquí, ¿verdad? Me pregunté. Grace lo estaba. Ella había estado
vigilando a Paul. ¿Lo estaba aún, o había venido para espiarme otra vez? Los
serafines estaban viendo. No hay nada como un poco de presión para destacar lo
mejor de ti, pensé, haciendo una mueca.

Barnabás se acercó a mi lado, y cuando echamos a andar hacia adelante,


Nakita y Shoe desaparecieron más profundo dentro del edificio.

"¡Maldita sea!" Grité, sin importarme si el mismo Dios me escuchaba. Yo


estaba enojada. Mi visita al futuro, no me había hecho nada bien. Y ahora
Nakita iba a segar a Shoe y a convertir todos nuestros esfuerzos en obsequios de
mierda.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 104

Corrí hacia las largas hileras de ventanas, jadeando cuando me tropecé.


Barnabás capturó mi codo hasta que encontré mi equilibrio. La ventana abierta
no estaba tan lejos por encima del suelo, pero Barnabás inesperadamente me
impulsó hacia arriba y, en un sonido deslizante de sillas estrelladas, aterricé en
el interior de la escuela, brazos y piernas enredados.

Esto es demasiado no genial, pensé, tratando de levantarme y finalmente tener


que aceptar la mano de Barnabás. Pero mi entrada sin gracia los había detenido
a todos, y ambos Nakita y Shoe me miraban a mí y no entre sí. Grace se rió
mientras yo ajustaba mi ropa y con un gesto le ordene a Barnabás a cubrir la
segunda puerta en el pasillo. De alguna manera Nakita se había puesto delante
de Shoe y estaba bloqueando la primera puerta. Grace, sin ser vista por Shoe, se
cernia sobre él.

Este era un laboratorio de química, oscuro, excepto por la luz que venia de
las luces de seguridad exteriores. Había seis largos bancos con lavaderos y
pequeños grifos para los mecheros de Bunsen. Un esqueleto me sonreía desde
la esquina, y reprimí un escalofrío. "Nakita‛ dije, todavía avergonzada por mi
entrada. ‚Déjame hablar con él. Puedo salvarlo".

"Yo también puedo", dijo Nakita mientras ella cambiaba sus pies para
encontrar el equilibrio. "Será mucho más rápido también."

"¡Yo le dije!" Grace intervino. "ella me llamó luciérnaga."

Shoe parecía enojado y desconcertado, y desde la segunda puerta, Barnabás


dijo en voz alta: "Los serafines le han otorgado una oportunidad, Nakita. Déjala
intentar".

Pies separados, Nakita se echó hacia atrás el cabello desafiante, pero cuando
Grace se aclaró la garganta para hacer un sonido como de campanillas de
viento, Nakita agregó de mala gana, "Habla con él, pero si las alas negras
aparecen, lo segaré."

"¿Segarme?" Shoe estaba empezando a parecer nervioso mientras miraba su


espada. "¿Qué demonios estás haciendo? ¿Quién eres tú? "

"Madison es cómo ella fue bautizada," Grace cantó alegremente. "Cuando


está enfadada sus ojos tienden a brillar. Vidas ella salva, sin gracias se le antoja.
Sería más fácil si a tu indeseable Caronte quisieses escuchar".

Por Dios, ¿ella se sienta despierta en la noche pensando en estas cosas?


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 105

"Uh," comencé, pero Shoe me estaba mirando, el dedo apuntando.

‚Estabas en el centro comercial", acusó. ‚Eres esa chica que estaba hablando
con Ace. ¿Te gusta él?" Shoe se relajó en una actitud arrogante. "No te lo
pienses. Él es un asno".

‚No, es a ti a quien quería hablarle‛ dije, pero él se había apartado.

"Eso es nuevo", dijo con amargura mientras echaba a andar hacia Nakita y
la puerta, sólo para detenerse brevemente cuando ella comenzó a balancear su
espada.

"Habla con Madison, o te segare en este momento", amenazó ella.

"Nakita..." Me quejé.

Pero Shoe estaba retrocediendo. "¿Qué te pasa?"

‚Nada,‛ dijo Grace alegremente. "Ella est{ aquí para ayudar. ¡De verdad! "

"Un paso más", le rogó Nakita, su bello rostro volviéndose salvaje. "Sólo
uno más, y esta farsa de tratar de cambiar el destino habrá terminado. Habla
con Madison. Está tratando de salvar tu vida sin valor. Yo simplemente estoy
tratando de salvar tu alma‛, concluyó amargamente.

Claramente nervioso, Shoe miró por primera vez a Barnabás cerca de la


puerta trasera, luego a mí cerca de la ventana abierta. "Shoe", dije, capturando
su atención. "Sé sobre el virus."

‚Sí‛ dijo con amargura. "Ace habla demasiado".

"Este va a salir y clausurar el hospital", le dije, tratando de mantenerlo


enfocado. "Gente va a morir".

Shoe negó con la cabeza, mirando a Nakita mientras ella practicaba unos
pocos balanceos. ‚¿Es eso lo que Ace te dijo? El virus es una broma. Una forma
de que gane algo de notoriedad en mi último año como el tipo que cierra la
escuela por un día. Eso es todo. Este no puede salir, y no se replica. Eres más
tonta de lo que tus zapatos parecen si crees cualquier cosa que Ace te dice."

"¡No hay nada malo en mis zapatos!" dije con vehemencia, el puño en la
cadera mientras Grace se echaba a reír.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 106

"Y el virus mata a la gente. ¡Yo lo vi! "

Shoe se cruzó de brazos sobre el pecho y puso su peso en un pie. "¿Tu lo


viste? ¿Qué eres? ¿Una especie de mega ejecutor de intervención adolescente?
¿Estoy en una cámara? ¿Es esto una broma o un extraño programa de televisión
de la realidad? "

Eso era insultante, y yo resoplé.

"Él no está escuchando, Madison," La Caronte oscura dijo, visiblemente


ansiosa por seguir adelante con ello mientras su agarre cambiaba. "Es por eso
que nadie trata de razonar con un marcado. Ellos no escuchan. Nunca creen‚.

Frustrada, me volví contra ella.‛¡Ellos no creen porque ustedes no les


muestran algo en que creer!"

Barnabás fue acercando poco a poco hasta Nakita, y sentí como las cosas
estaban saliéndose de control cuando él agarró su amuleto e hizo aparecer su
segadera. "Lo siento, Madison," dijo, su rostro tomando una expresión sombría.
"Quería que esto funcionase, pero él no va a escuchar, y yo no voy a permitir
que ella mate a Shoe‛.

La boca de Shoe se quedó boquiabierta, y abrió los ojos, pero Barnabás tenía
su espada apuntando hacia Nakita, y no hacia él. "Él no merece morir", le dijo
Barnabás a ella. "Te vencí antes, y lo volveré a hacer."

"¿Ustedes fanáticos van a tratar de matarme?" Shoe, dijo, su voz cada vez
más alta. "¿Qué diablos les pasa?"

Las alas de Grace parecían atenuarse. Yo no estaba muy contenta, tampoco.

Esto estaba tan fuera de control. Los serafines nunca creerían que era
posible si yo no podía hacerlo al menos una vez. "¡Barnabás, aparta tu
segadora!" Grité. "¡Nakita, retrocede! ¡Ustedes me están volviendo loca!
¡Ninguno de los dos está dándole a esto una oportunidad! "

Ambos bajaron sus espadas, y tomé un respiro. Shoe maldijo en voz baja, y
yo caminé hacia delante, al marcado. Él iba a escuchar, maldita sea. ¡Yo no
tengo tiempo para esto!

Sabiendo que todo lo que pasase iba a aterrizar en el oído de un serafín a


través de Grace, traté de calmarme, pero no funcionó. "¡Mira, tú!", Dije justo en
la cara de Shoe, para hacerlo retroceder, sobresaltado. "No me gusta Ace. Y
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 107

particularmente no me gustas tú. Digamos que tengo acceso a los titulares de


mañana, ¿de acuerdo? Los extraterrestres emiten hacia mí, ¿sí? Si Barnabás se
sale con la suya, los titulares se leerán: "Tres muertos en el hospital de un virus
inform{tico‛. Si Nakita se sale con la suya, va a estar tu nombre en los
obituarios para salvar tu alma a costa de tu vida. Yo…yo estoy tratando de
hacer lo imposible para que los titulares se lean, ‘Un día ordinario en la
ordinaria América—todos están felices’. ¡Pero si no lo intentas, no creo que
pueda detener a Nakita de poner tu cabeza en un plato! "

Grace pareció atenuarse un poco más. Barnabás hizo un ruido que sonó
doloroso, pero no podía reservarle una mirada. Me sentí enferma. Esto no era lo
que yo quería hacer. Yo había pensado que sería tan fácil. Encontrar al marcado,
hablar con el marcado, nos vamos todos a casa para estar muerta un día más.

Su rostro palideció en la penumbra, Shoe miró a los Carontes, y luego se


estremeció cuando miró a sus espadas. "¿Quién eres tú?"

Su voz carecía de la burla de antes, y, animada, le dije: "La única persona


aparte de ti que puede arreglar esto. No subas el virus. Por favor‛.

Tragó saliva, su mirada regresando a Nakita antes de retroceder hasta mí.


Es evidente que había visto algo en ella que no podía explicar, un brillo en sus
ojos, un gesto tan grácil que un ser humano no podría hacerlo. Un sentido de lo
divino, tal vez. Finalmente, él estaba escuchando.

"Madison. Ellos te llamaron Madison ", dijo, su atención de vuelta a mí.

Suspirando, extendí mi mano, y Grace emitió un sonido feliz. "Soy


Madison. Encantada de conocerte, Shoe‛. Su mano se sentía fría en la mía, y él
se soltó casi de inmediato. ‚Escúchame‛ le dije, notando que Nakita me miraba
como si hubiese hecho lo imposible por conseguir que él me prestase atención.
"De alguna manera el virus que hiciste sale. Este estropea el sistema
hospitalario. Tres personas mueren antes de saber lo que está pasando.
Simplemente no lo hagas‚.

Afuera, una oscura sombra pasó sobre la ventana. Mi instinto se tensó.


Nakita la había visto, y su expresión se volvió vacía mientras se deslizaba hacia
la ventana para mirar afuera. ¿Alas negras?

Shoe miró hacia la puerta abierta. "No es ese tipo de virus", repitió. "No va a
salir, y no se copia. Es por eso que tuve que entrar en la escuela para subirlo. No
soy un monstruo. Quiero la notoriedad para conseguirnos a todos un día de
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 108

descanso de la escuela, no para matar gente. ¿Qué clase de monstruo crees que
soy? ‚

"Del tipo que Nakita intenta matar", dijo Barnabás, pero algo en las palabras
de Shoe me había golpeado.

"¿Tienes que entrar ilegalmente para subirlo?‛ Susurré, escuchando el


tiempo pasado en el que él había puesto todo. Mis ojos se apretaron, lo miré.
"Ya lo cargaste," dije, y Nakita se retiró de la ventana mientras Grace suspiraba
lo suficientemente fuerte como para que la escuchara. "Tú estabas saliendo de la
escuela cuando Nakita te encontró, no entrando."

‚Bueno, sí, "dijo, encogiéndose de hombros. "Est{ hecho. Ya est{ adentro.


Cuando el reloj haga tictac sobre las seis de la mañana, el sistema se apagará. El
fuego, la seguridad, todo. Pero eso es lo que va a pasar. ¡No puede salir! ‚

Nakita se adelantó, su cara desagradable. Mis ojos se abrieron. Shoe se


lanzó hacia la puerta, y yo lo agarré del brazo, balanceándolo detrás de mí. Si
corría, esto habría terminado.

"¡Cuidado!" Grace chilló, y me agaché rápidamente.

La espada de Nakita golpeó la de Barnabás, a pulgadas delante de mí.


Maldita sea, tenía que trabajar más en averiguar cómo hacer una espada de mi
amuleto. Esto basándome en que Barnabás se estaba poniendo viejo.

"¡Ya basta!" Grité mientras me levantaba de prisa, agradecida de que


Barnabás pudiese moverse tan rápido.

"¡Estás loca!" Shoe gritaba detrás de mí. "¡Locos! ¡Todos ustedes! "

Desde el techo, Grace intervino alegremente, "Nakita, una Caronte Oscura,


al chico malo quería herir. Pero Barney había planeado, evitarlo, trazando las
líneas entre lo malo y lo correcto. "

La cara de Nakita estaba lívida.

"¡Ya basta! ¡Todos ustedes! ", Exclamé. "¡Este es mi segado, no el suyo!"

Los dos Carontes se miraron el uno al otro, el aire oliendo a ozono. Casi
podía ver sus alas. Como en cámara lenta, ellos bajaron sus espadas y se
alejaron el uno del otro. Temblando, me volví hacia Shoe. Eso salto hacia
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 109

adelante realmente lo había sacado de mí. ‚Lo siento‛ dije y me pregunté si él


aún tenía la capacidad de escuchar después de eso.

"Nakita es impetuosa."

"¡Ella esta malditamente loca!", Gritó, y luego se estremeció cuando Grace


se posó en su hombro, bañándolo con un resplandor que él no podía ver.

"Él dijo que es demasiado tarde", dijo Nakita, tratando de defender sus
acciones.

Elección—nunca era demasiado tarde para hacer una nueva. "No es


demasiado tarde", le dije, dando un vistazo a Barnabás agradecida.

"Podemos sacar el virus. Shoe, tienes un parche, ¿verdad?‛

‚Sí,‛ admitió, mirando oscuramente a Nakita. "Pero te digo, el virus no se


propaga. No puede." buscando en su bolsillo trasero del pantalón, sacó el disco.
"¡Esto no va a hacer otra cosa que cerrar la escuela!"

Respiré para estar en desacuerdo, pero cuando vi el disco decorado con las
ilustraciones de Ace, una sensación de frío me recorrió. El disco en la mano de
Shoe no era el disco que había visto en mi salto hacia adelante. Mierda sobre una
tostada, ¿cuán estúpida puedo ser?

Haciendo caso omiso de por qué estaba mirando el disco, Barnabás se


acercó. "Madison, lo siento", dijo, pero yo no lo escuchaba. "Tal vez si
hubiéramos sido más rápidos."

Con un golpe, mi pulso se tambaleó a rienda suelta. ¿Cómo voy a arreglar


esto? "Ese no es el mismo disco que vi en mi vista al futuro‛ dije, el p{nico
haciendo que mi voz sonara baja.

La cabeza de Nakita se alzó, y su control sobre su espada se apretó. Grace


hizo un sonido como de campanas, y su resplandor se fue por completo. "¿Ella
fue al futuro?" Nakita le preguntó a Barnabás, luego me miró. "¿Tu fuiste al
futuro? ¡Entonces es el marcado! "

Negué con la cabeza, maldiciéndome a mí misma por suponer que había


estado en la mente de Shoe, cuando yo me encontraba en su habitación.

‚No‛ dije en voz baja, una mano a mi estómago. Palpando, tomé el disco de
Shoe y lo agité bajo la nariz de Barnabás. "Este no es el disco que vi en el salto
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 110

hacia adelante. Tiene ilustraciones de Ace sobre él, pero no es el mismo disco.
Shoe no es el marcado. "

Nakita estaba lívida. "Yo casi lo segó. Yo... estaba por hacerlo‛.

"La culpa es mía", le dije. Todo era azul cuando vi el virus siendo cargado
en el disco. Era Ace. Había estado en Ace mientras él hacía un duplicado del
virus en el ordenador de Shoe. Tal vez el futuro no estaba aquí todavía. ¿Por
qué no había intentado de que él se mirase en un espejo?

Con si fuera a lo lejos, oí a Barnabás decir: "Estamos siguiendo a la persona


equivocada".

"Es Ace", ldije, como si no fuera ya muy claro, y Shoe se echó hacia atrás
cuando agarré su mano, mirando las yemas de sus dedos. "No hay tinta en sus
manos."

"¿Cuál es tu problema?" preguntó, soltándose de mi agarre.

"¡Mi problema es que soy estúpida!", Exclamé, dando un paso adelante y


sintiéndome desfallecer. "¡Soy una idiota! Shoe, Vi a Ace en tu habitación en tu
ordenador. Pensé que eras tú. Descargó el virus en un disco. Tenemos que
encontrar a Ace antes de que Ron lo haga‛.

‚¿Estabas espi{ndome? ", Dijo Shoe acaloradamente, y yo hice una mueca.


¿Él estaba preocupado por un poco de espionaje?

"Ace está tratando de vengarse de ti. Pensé que te estaba viendo a ti estando
enojado con él. Nunca consideré que podría ser él estando enojado contigo‛.
Tenía que encontrar a Ace. Él estaba en algún lugar con ese virus.

"Ha estado enojado conmigo por mucho tiempo", dijo Shoe en voz baja. "Él
sabía lo que yo estaba haciendo esta noche, y ahora apuesto a que va a hacer
que parezca que me tomé el hospital, también. Tendría que matarlo. ‚

Nakita disolvió su espada en un espectáculo llamativo de remolinos. "No es


necesario. Yo lo haré. "

La cara de Shoe palideció. "Yo estaba bromeando".

"Yo no lo estoy."
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 111

"La vida terminó, un alma que salvar", dijo Grace con tristeza. "Las viejas
decisiones están hechas. ¿Es elección? ¿Es el destino? ¿El perdón o el odio?
Cuando el amor es lo que todos nosotros anhelamos. ‚

Asombrada, miré al tenue resplandor. Eso fue... bueno.

Barnabás tocó mi brazo, y yo me sacudí con fuerza. "La madre de Ace


trabaja en el hospital", me recordó y me volví hacia las ventanas negras.

Nakita se inclinó para mirar al cielo, su cuello largo mostrándose a la luz.


"Él tiene una manera de entrar"

A mi lado, Shoe estaba apretando los dientes. "Y sabe cómo subirlo. Le
mostré cómo. Soy un idiota. Yo voy a ser culpado por esto, no él. ‚

Con un nudo en el estómago, miré a Barnabás. "Tenemos que llegar al


hospital."

En la ventana, Nakita hizo lanzo una maldición, entonces gritó, "¡Cae!"

Me quedé mirando hacia la ventana, viendo la forma negra llegar a ella.


Barnabás extendió la mano y tiró de mí hacia abajo detrás de una de las
estaciones de laboratorio. Golpeé a Shoe en el camino, y cayó debajo de mí.
"¡Hey!" Grité, luego, puse mis manos sobre mis oídos mientras algo se estrellaba
contra la ventana.

Vidrio voló, tintineando, y una campana débil empezó a sonar. Chic. Sólo
majestuoso.

"¡Es Ron!" Grace intervino, su sombra nebulosa lanzándose sobre nosotros.

Saque un trozo de vidrio de mi cabello y me senté derecha, segura detrás de


la alta mesa de laboratorio. ‚No me digas ".

Desde el interior de la sala llego el carraspeo decepcionado de Ron, y casi


pude verle parado con los pies muy abiertos y sus ojos volviéndose azules
como lo hacían cuando estaba enojado. Por lo menos él no estaba tratando de
detener el tiempo. "Madison", dijo en voz alta, y me encontré con los ojos de
Shoe, vocalizando hacia él para que permaneciera abajo. "Se acabó. Voy a
ponerle un ángel de la guarda. "

Me asomé por encima de la mesa de laboratorio para encontrar a Ron en la


parte delantera de la sala ante la pizarra. Un resplandor brumoso por encima de
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 112

él tenía que ser el ángel de la guarda, hasta ahora sin asignar. Ron estaba
vestido con su túnica habitual blancuzca y pantalones, y parecía satisfecho. Era
lo único que podía hacer para mantener mi boca cerrada y dejarlo creer que
Shoe era el marcado.

Tal vez pueda llevar a cabo esto después de todo.

"Vete", dijo Barnabás, inclinado a mi lado. "Grace y yo lo mantendremos


ocupado. Si quiere ponerle un ángel a Shoe, entonces, Ace no tiene uno
todavía".

"¿Madison?" Ron llamó. "Muéstrate."

‚¡Pero no puedes enfrentar a Ron! "Casi silbé. "Él sólo detendrá el tiempo o
algo así."

Grace flotó suavemente y se posó sobre el hombro de Barnabás, riéndose.


"Soy un ángel de la guarda en primer lugar, cariño," ella dijo, sus palabras
alegres. "Puedo impedir que Ron se entrometa con él tiempo."

"Vamos a estar bien", dijo Barnabás, haciendo un gesto con los ojos para que
me fuera. "Vete".

"¿Y el ángel de la guarda de otros?" Le pregunté.

"Ella no tiene libre albedrío", dijo Grace. "Ningún nombre, ves."

Me humedecí los labios, preguntándome si podría ser capaz de salvar algo.


La vida de Shoe, tal vez.

"¡Madison! ¡Sal y admite que has perdido! "Gritó Ron. "No hay vergüenza
aquí. No puedes esperar ganar cuando estás tratando de vencer a un millar de
años de experiencia. "

Este tipo tiene un ego más grande que mi antiguo profesor de química.

"¡Vete!", Dijo Barnabás urgentemente mientras Shoe nos miraba, asustado.


"Nakita, ve con ellos. En caso de que tengas que... "

Sus palabras se apagaron, y yo encontré sus ojos, sorprendida. ¿Estaba él de


acuerdo con la posición de Nakita, para matar a Ace si él no iba a cambiar?
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 113

Nakita, también se sorprendió. "¿Crees que tengo razón para poner fin a su
vida?" Preguntó, y Shoe se puso nervioso, pareciendo más preocupado por no
quedar atrapado en un laboratorio demolido que con nuestra conversación
sobre el asesinato de su amigo.

"No. Quiero decir, yo no sé qué creer nunca más", dijo Barnabás, sus ojos
marrones solemnes. "Sostuve a Madison mientras ella vivía en las sombras del
futuro, la oí llorar por el dolor de la belleza en las estrellas. Tal vez sería mejor
si su vida terminase antes de que él se hiera demasiado y le roba a su alma la
oportunidad de encontrar esa belleza. Yo no... sé ya más. Tengo...duda. "Sus
ojos se posaron sobre los míos. "Por favor, hazlo entrar en razón. No me
obligues a tener que hacer esa elección‛.

Tragué saliva, asustada. ¿Iban las cosas tan mal que un ángel dudaba de su
propia intención?

"¡Madison!", gritó Ron.

Nakita tocó el brazo de Barnabás. "Entiendo,‛ dijo ella en voz baja.

Desde arriba de nosotros, Grace dijo: "¿Eh, muchachos? El viene para acá. "

Barnabás nos miró a todos nosotros a la vez. "A la cuenta de tres", dijo, y
tomó aliento. "Uno. Dos—‛

"Tres", gritó Nakita, saltando hacia arriba para aterrizar encima de la mesa,
gritando mientras sacaba su espada. En su pecho, su amuleto brillaba una
amatista afilada, hiriendo mis ojos.

"Nakita‛ exclamó Ron, y Grace se iluminó, bañando a Nakita en una belleza


cristalina. Mi amuleto se calentó, y yo sabía que el ángel de la guarda estaba
bloqueando lo que sea que Ron estaba tratando de hacer mientras Nakita le
gritaba, su espada haciendo grandes círculos a medida que avanzaba.

Barnabás suspiró y se encorvó más de cerca. "Tres", dijo. "Saca a Shoe de


aquí. Habla con Ace. Por favor, hazle comprender. Te alcanzaremos. "

Fue todo el estímulo que necesitaba. Cogí la mano de Shoe, corrí, tratando
de mantenerme por debajo del nivel de los bancos. Vidrio brillaba en el suelo, y
el aire de la noche entraba por las ventanas rotas. Coches se habían detenido, y
luces intermitentes habían empezado a jugar sobre los techos.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 114

Coches de policía y campanas de alarma. Ohhh, yo conozco esta canción.


Teníamos que salir y salir ahora. La ruptura de la ventana de Ron había sido
más que vista.

"¿Qué pasa con ella?", Dijo Shoe mientras nos deslizábamos fuera de la
habitación y al pasillo. Estaba más fresco aquí, y más oscuro.

Eché un vistazo detrás de nosotros y suspiré. "Nakita no quiero matarte


ahora. Ella está detrás de Ace. Vas a estar bien. "

Entrando en una sacudida, nos dirigimos por el pasillo. "Entendí esa parte.
¿Ella viene? "

Nunca dejaba de sorprenderme cómo la gente podía pasar del miedo a la


aceptación. Reuniéndome con él paso por paso, le dije:

"Va a alcanzarnos. ¿Cómo has llegado hasta aquí? ¿Tu bicicleta nos
aguantará a los dos? "

Shoe me llevó a una habitación. Era otro laboratorio, y, en un movimiento


rápido, él me llevó a la parte trasera y al invernadero adjunto. "Tengo un coche.
Pero con la policía—‛

"¿Un coche?‛Lo interrumpí. "¿Cómo te escapaste por la ventana de tu


dormitorio, y luego condujiste un coche hasta la escuela?" Para todos mis
quejidos y gemidos por haber dejado mi coche en Florida, había encontrado una
nueva libertad con mi bicicleta.

Escaparse era más fácil cuando no estabas haciendo ruido.

"Lo aparqué en la calle", dijo, mostrándome una sonrisa. "No es como si mis
padres lo quieren en la entrada de la casa. No pueden sacar sus coches conmigo
en el camino."

Asentí mientras Shoe señalaba a una ventana abierta en el invernadero de la


escuela.

Otra explosión sacudió la escuela, seguida por el sonido de la frenética


charla por radio. El ulular de la alarma de incendio comenzó. Un instante más
tarde, los aspersores se dispararon.

"¡Maldita sea!", Dijo Shoe, mirando el agua derramarse del techo. No había
grifos en el invernadero, y, contenta por los pequeños favores, me incliné para
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 115

deslizarme por la estrecha ventana. Podía oír a los policías en los pasillos
quejándose por el agua. Yo estaría dispuesta a apostar que entre Ron y
Barnabás, todos en la escuela con un pulso recordaría esta noche como la de
cuando la alarma de incendios se disparó.

Mis pies se deslizaron sobre la hierba húmeda de rocío, cuando finalmente


salí. La noche era fresca, y esperé, inquieta y escaneando el estacionamiento
vacío, mientras Shoe se restregaba por la ventana. Hubo un resplandor en el
horizonte, donde la luna estaba a punto de alzarse. Los pies de Shoe golpearon
silenciosamente sobre la hierba, y después de un rápido vistazo a las lejanas
luces de la policía, corrimos a través del estacionamiento vacío.

"Así que ¿dónde está tu coche?" Le pregunté, con la esperanza de que


Barnabás y Nakita estuviesen siendo suficiente distracción, pero no tan grande
como para que fuese una noticia internacional.

"Yo no quería que fuese visto en la escuela, así que lo estacioné por la calle",
dijo, sin aliento mientras corríamos. Pero cuando dimos la vuelta, fue yo quien
se detuvo en seco.

Shoe conducía un convertible de color gris. Y el techo estaba abajo.

"De ninguna manera", dije yo, la memoria de mi corazón latiendo en un


miedo pasado. Se parecía al coche en el que yo había muerto.

Directamente hacia los asientos de cuero y la llave en el encendido.

Shoe saltó por encima de la puerta cerrada y giró la llave. "¡Entra!",


Exclamó, sorprendido de encontrarme a dos metros de espalda. Detrás de mí,
los camiones de bomberos comenzaban a llegar.

Puedo hacer esto, pensé, abriendo cuidadosamente la puerta y subiéndome.


No es el mismo coche. No es el mismo conductor. Pero el golpeteo de mi corazón
parecía lo suficientemente real para sacudir incluso la ilusión de mi cuerpo.

"Colócate el cinturón de seguridad", dije mientras me instalaba en el rico


asiento de cuero como si fuera de vidrio y pudiese romperse.

"Sólo vamos un par de kilómetros," se quejó, mirando por encima del


hombro mientras retrocedía, las luces de los coches de policía una amenaza
lejana.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 116

"¡Colócate el cinturón de seguridad!" Grité, y sus ojos se agrandaron, negros


en la penumbra.

‚¡Vale, vale!", Dijo, y lo fulminé con la mirada hasta que lo hizo. "Chica
rara."

"Morí en un coche como este", le dije para tratar de explicarme, luego, me


eché a reír nerviosamente. "Es una broma." él probablemente habría dejado de
creer en mí si él pensaba que yo creía que estaba muerta.

Él agarró el volante más apretado, sin decir nada mientras él nos metía en la
carretera y nos alejaba de la conmoción en la escuela. No fue hasta que
habíamos andado un cuarto de milla que encendió las luces, y yo respiré
aliviados. "Tenemos que parar en tu casa y conseguir el parche", le dije,
apartando mi pelo de mi cara. ‚Ace aún podría estar allí. No sé hasta qué punto
en el futuro, vi eso por primera vez. "

Oooooh, pensé, mordiéndome la lengua cuando me di cuenta de lo que


acababa de decir. Eso iba a ser difícil de tomar como broma.

Shoe me miró mientras conducía. "¿El futuro?", Dijo en voz baja, como si
esto fuese justo a hundirme, y yo hice una mueca.

"¿Puedes, eh, pasar por alto esa última parte?" Le pregunté, y él parecía
asustado.

Ansiosa y nerviosa, cerré mi boca antes de que le dijera algo que pudiera
hacer que quisiera echarme del coche. Todavía tenía una oportunidad. No era
demasiado tarde. Tenía que hacer este trabajo. No sólo estaba en peligro el
futuro de Ace. Lo estaba el mío propio.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 117

Capítulo 10
Traducido por Carlos

S
hoe se estacionó dos casas abajo de la suya al otro lado de la calle,
frunciendo el ceño al camión de Ace todavía en el bordillo. Salí sin
abrir las puertas del coche, subimos rápidamente a la vereda,
desacelerando mientras nos acercábamos. Shoe no estaba en muy buena forma,
incluso tan flacuchento como él era. La luna casi llena finalmente se había
elevado, ayudando a iluminar los negros patios. El camión de Ace seguía
funcionando mientras pasamos cerca de él, el gran motor todavía enfriándose.
Quizás estábamos a tiempo. Quizás nada de lo que había visto en mi destello
del futuro había ocurrido aún.

‚Aún no est{s respirando con dificultad,‛ dijo Shoe, jadeando.

‚Sí, bueno, corro bastante.‛ Moviéndome al paso m{s lento, tirité, pensando
lo extraño que sintiera frío del todo. ‚¿Cu{nto tiempo tomar{ obtener la
corrección10?‛ Pregunté.

Shoe me dio un vistazo. ‚Tomar{ m{s tiempo presentarte a mi mam{.‛

Los dedos de mis tenis se pusieron húmedos con el rocío, y eche un vistazo
a la habitación de Shoe. La luz estaba cambiando a medida que alguien adentro
se movía alrededor. ¿Ace? ‚Tu mam{ piensa que aún est{s en tu habitación,‛ le
recordé, pensando que él no debía ir ASP11 a menudo.

Shoe inmediatamente cambió de dirección. ‚La ventana es, después.‛

No pude evitar mi sonrisa a su leve ceño fruncido. Él no era muy bueno en


ésta cosa de moverse-sigilosamente-alrededor, incluso si él tuviera la tradición
del coche abajo. Pero su ceño fruncido se convirtió en cólera cuándo nos
acercamos más y vimos a Ace desordenando la primer gaveta del escritorio de
Shoe. ‚¿Qué est{ haciendo?‛ Shoe susurró coléricamente, pero yo estaba
eufórica. Estábamos a tiempo.

10
En el original patch, se refiere a una especie de corrección o cura para el virus que creó Shoe.
11
En el original AWOL=Absent Without Leave, traducido ASP=Ausentándose sin permiso
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 118

‚No lo sé. Tal vez no ha descargado aún el virus para el hospital,‛ dije.

La frente de Shoe se surcó, y con un movimiento torpe agarró el alféizar y


se meció a sí mismo arriba y adentro. ‚Sal del infierno de mi escritorio,‛ dijo
mientras tiraba de su capucha negra inmediatamente.

Ace se giro, su claro shock. Su alarmada mirada cambio más allá de Shoe
hacia mí mientras entraba, y sus ojos se estrecharon. ‚Hey, Shoe,‛ resopló con
furia, empujó la gaveta cerr{ndola y retrocedió. ‚Me debes un cinco.
Simplemente lo andaba buscando.‛

‚Claro,‛ Shoe se burló, empujándolo de su escritorio con una sola mano


abierta. Bajando la cabeza, Shoe jaló la gaveta abierta mientras Ace encontraba
su punto de equilibrio. Shoe examinó cuidadosamente el desorden. Sus ojos se
ampliaron, me miraba como si no lo creyera, luego lanzó una tarjeta laminada
al escritorio. ‚Esta es de tu mam{,‛ dijo, y mis labios se separaron en la
Identificación del hospital. No había visto eso en mi destello del futuro. ‚¿Qué
est{s haciendo, Ace?‛

En vez de estar enojado, Ace se meció hacia atrás con una expresión
satisfecha. ‚Sí, es de mi mam{, y ahora haz puesto tus huellas digitales por
todas partes. Pendejo.‛

Shoe empuño sus manos, dando un paso adelante. ‚¿Quieres meterlo en el


hospital? ¿Estás loco? Alguien podría lastimarse. Dame el disco.‛

Sonriendo burlonamente, Ace se sentó sobre su cama, casual e irritante en


su camiseta negra, la cuál era demasiado fina para esconder qué tan flaco era él.
‚Demasiado tarde. Est{ ya adentro.‛

¿Demasiado tarde? ¿Ya había estado Ace en el hospital?

‚¡Eres un jodido idiota!‛ Shoe estalló, y deseé que bajara su tono. ‚Todo lo
que quisimos fue un día de descanso. Algo notorio. ¡Es un hospital, Ace! ¡Vas a
matar a alguien! ¿Qué est{ mal contigo?‛

Ace se levantó, y di un paso alejándome de su fea expresión. ‚¿Qué est{


mal conmigo? ¿Qué está mal contigo? Esto es tú culpa. Estas desasiéndote de
mí, y vas a tomar tu golpe como un hombre. Es tu computadora. No sé nada
sobre eso.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 119

Shoe sacudió su cabeza, horrorizado. ‚¿Esto es porque voy a la universidad?


¿Qué quieres que haga? ¿Casarme contigo? ¡Las personas crecen! ¡Quítate! ¡Voy
a la universidad, no a la luna! ¡Podrías ir, también, si quisieras!‛

Oí un suave chasquido de talones fuera de la puerta, y me sentí asustada.


Pero la madre de Shoe se estaba marchando, dejándolos que se encarguen de
sus propios asuntos. Ella claramente no ignoraba que su amistad estaba dando
patinazos.

La expresión de Ace era desagradable. ‚Tú no vas a ninguna parte excepto


la c{rcel, Ricky Ricon.‛

Retrocedí hacia la ventana. Nunca había visto tanto odio y bilis en la


expresión de alguien, y no pude evitarlo pero pensar en la idea de Nakita
tomando la vida de este tío antes de que él manchara su alma hasta que incluso
no podría pedir por perdón no era una idea tan mala. Estaba pensando como
un Cosechador Oscuro, y no me gustaba.

Shoe estaba p{lido con cólera. ‚Estabas conmigo cuando lo escribí. Les
diré…‛

‚¿Les dir{s qué?‛ Ace interrumpió. ‚Tú destruiste los archivos de la


escuela. El disco que dejé en el hospital es el mismo programa. Este adquirió tu
nombre en él, tío.‛

Levant{ndose antes que Ace, Shoe comenzó a agitarse. ‚Eres un imbécil,‛


dijo, y jadeé cuando le dio un puñetazo a Ace. Directo en la cara.

‚¡Shoe!‛ Grité, pero Ace estaba derribado, habiendo golpeado la cama y


resbalando hacia el piso. De pie sobre él, Shoe sacudió su mano, maldiciendo.

‚¡Me golpeaste!‛ Ace exclamó, apoyando encima un codo mientras tocaba


su boca. ‚¡Estoy sangrando monstruosamente!‛

‚Sí, y te golpearé otra vez a menos que vengas conmigo a la policía y les
digas lo que hiciste. ¡Quise destrozar el sistema de cómputo de la escuela, no
lastimar a las personas!‛

Ya sabía que un viaje hacia la policía no iba a ocurrir, y jalé a Shoe hacia
atrás cuando Ace se colocaba sobre sus pies, escupiendo sangre en la alfombra
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 120

de Shoe. ‚Vas a pudrirte. ¿Quién en la policía te va a creer? Est{ todo en tu


computadora.‛

Temblando, dije en frustración, ‚no pienso que pueda detener a Nakita de


matarte, y ¿sabes qué, Ace? Ni siquiera estoy un poco apenada.‛ Lo estaba, sin
embargo. Sufrí porque él hiciera una mejor elección. Sabía que no la haría. Tal
vez Nakita tenía razón. Los serafines apuntan sólo a las personas que rehúsan
ver la luz, incluso si les mantenías los ojos abiertos y los colocabas en el sol.

El casi-sonido de derramar cristales rotos se deslizó a través de mi


conciencia, y una neblina de luz tamaño-bola-blanda se precipitó en la
habitación desde la ventana abierta.

‚¡Grace!‛ Exclamé, y Shoe me miró como si estuviera loca. O algo había


realmente salido bien con Barnabás y Nakita, o había realmente salido mal.

La bola rodeó a Ace como si llevara una esencia, luego fue a posarse sobre
el monitor de Shoe. ‚¿Grace?‛ Pregunté, repentinamente insegura.

‚Ángel de la guarda dos-tres-cuatro-cinco tomando un nuevo cargo, tú


tarado, Caronte Oscuro de alas-oscuras,‛ la luz dijo sarc{sticamente. ‚Perdiste.‛

Mi boca cayó abierta, y me volví hacia la ventana cuando me percaté de lo


que había sucedido. ‚¡No!‛ Chillé, y mi cólera se maximizo cuando vi a Paul,
presumido y satisfecho, de pie en los arbustos, su cabeza a la altura de la
ventana.

‚¡Tú idiota!‛ Exclamé, y ambos Shoe y Ace se volvieron hacia la ventana


para verlo. Maldita sea, ésta era mi propia culpa. Él ha debido haber estado en
la escuela, luego nos siguió, esperando hasta que revelé a quién la marca estaba
antes asignando un ángel para Ace.

‚Hecho y hecho,‛ dijo Paúl sarc{sticamente. ‚Tú pierdes, Madison. Salvé


éste.‛

‚¿Lo salvaste por qué?‛ Pregunté. M{s enojada de lo que nunca había
estado, me abalancé hacia la ventana, agarrando su túnica y metiéndolo a la
fuerza.

‚¡Ay! ¡Hey!‛ Paul exclamó, golpeando el piso en un ovillo sin gracia. Desde
el techo, el ángel de la guarda estaba gritando, pero nadie excepto yo
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 121

probablemente lo podría escuchar. Shoe y Ace habían retrocedido, y me


levante sobre Paul, queriendo darle una buena patada.

‚¡Tú estúpido idiota!‛ Dije, irritada. ‚¡Te dije que me estaba encargando de
esto! ¡Y tú entras y lo echas a perder! ¡Por qué no averiguas la historia completa
antes de que empieces a hacer elecciones de personas! ¡Un infierno de
muchísimas gracias, Paul!‛

Desde afuera en el pasillo, escuché a la mam{ de Shoe llamar, ‚¿Cariño?


¿Est{ todo bien?‛

¡Oh, mierda!

Nos congelamos. Paul se levanto del piso, sus ojos se ensancharon. Ace
estaba de pie con su cabeza estirada hacia atrás mientras su nariz sangraba.

‚Estamos bien, mam{,‛ él respondió con justo la cantidad correcta de


irritación, flexionando su mano, la cual estaba ahora hinchada de haber
golpeado a Ace.

‚Fenomenal, fenomenal, todos estamos bien aquí,‛ el {ngel repicó desde


afuera.

‚¿Chicos quieren un bocadillo o algo?‛ Su madre preguntó, claramente


preocupada.

Mi aprecio hacia la mamá de Shoe se volvió mayor. Ella no había


interrumpido incluso cuando las cosas claramente no estaban bien. Ella era una
señora cool12 para dejarnos resolver esto por nosotros mismos.

‚¡No, mam{! ¡Estamos bien!‛

Bien, Bien. Todos estamos solo riñendo fantásticamente.

Nadie habla mientras sus talones chasqueaban afuera. Finalmente el ángel


de la guarda suspiró, y Shoe colocó su espalda hacia su puerta, claramente
frustrado. ‚Okay,‛ dijo, mirando a Paul. ‚Ésta es mi habitación, y quiero saber
quién eres y qué est{s haciendo.‛

12
Ya saben, gauy, chévere, vacan, depende del país.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 122

No podría decirle todo, pero me levanté frente a la ventana y crucé mis


brazos sobre mi cintura. ‚¡Este idiota simplemente le dio a Ace un {ngel de la
guarda!‛ Dije, furiosa.

‚Salve su flaco trasero,‛ el {ngel de la guarda dijo, y le di una oscura


mirada. Sonaba diferente de Grace, pero dudaba que pudiera nombrarlo y
romper el agarre que Ron había puesto en él. No una segunda vez.

Ace bajó su cabeza y sorbió hacia atr{s su ensangrentada nariz. ‚¿Tengo un


{ngel de la guarda?‛

‚¿Él?‛ Shoe gritó. ‚Él simplemente me enmarcó para colapsar las


computadoras del hospital mañana.‛

‚Sí, lo sé. ¿Irónico, no?‛ Dije, descruzando mis brazos y girando hacia Ace.
‚No la puedes ver, pero simplemente obtuviste una bendición del cielo, idiota.
Nada te tocar{ ahora hasta tu muerte programada.‛ Volviendo hacia Paul, no
pude evitar a mi misma y grité, ‚¡Muchísimas gracias!‛

Éste simplemente no era mi día. Aquí estaba supuestamente para


impresionar a los serafines de que los Carontes Blancoss y Oscuros podrían
trabajar juntos para salvar lo perdido, y había fallado espectacularmente. Al
menos Barnabás podría hacer olvidar a todos las últimas veinticuatro horas. Si
él estaba bien, entonces lo haría. El ángel de la guarda me zumbaba, y no estaba
sorprendida mientras sus alas se detuvieron con el suave sonido de cristales
deslizándose.

‚No eres un Caronte Oscuro,‛ dijo. ‚¡Eres un Cronometrador Oscuro! ¿Eres


Madison? ¡He escuchado de ti! ¡Le diste a Grace un nombre!‛

Asentí, no queriendo decir algo en voz alta y hacer a Shoe o Ace más
conscientes de lo que estaba pasando que ya eran. Barnabás era un cosechador,
no un obrero de milagros.

‚Menos mal,‛ la parlanchina bola de luz dijo. ‚Ella no era muy buena en
eso.‛

Un suave sonido de insulto se deslizo de mí, y la miré.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 123

Paul se había colocado en sus pies, y se levantó al lado de Ace como si no


supiera realmente que hacer. ‚Lo querías muerto,‛ dijo, pero sonaba inseguro.
‚Ron tenía razón.‛

Comencé a pasear entre el escritorio y la ventana abierta. ‚Ron es un idiota


miope,‛ mascullé. Girando, apunté hacia Ace, ahora sonriente mientras
limpiaba su nariz con el dobladillo de su camisa. ‚¿Sabe qué obra tan buena
haces ahora que le has dado una tarjeta libre de salir-de-la-muerte? Él va a
seguir adelante y hacerlo nuevamente, engañando y pensando que es una
molestia. Él piensa que es su única manera de hacer una marca en el mundo.
Est{ muerto, Paul,‛ dije. ‚Es posible que hayas salvado su vida, pero su vida no
tiene valor. Tuve una oportunidad de conseguir que cambiara, pero ahora
nunca lo har{.‛

Retir{ndose lejos de Ace, Paul dijo, ‚Tú no sabes eso.‛

Arqueé mis cejas hacia él. ‚Lo sé. Lo vi. Felicitaciones. Hiciste realmente
bien previniendo su muerte. Le haz salvado todo.‛ ¿Cu{l era la diferencia entre
esta cosecha y mi última, donde había salvado a Susan en el bote, la primera
vez que pude conocer a Nakita? Había cambiado su futuro con nada más que
mostrarle una casi-muerte, e incluso no había sido la de ella. Ella había sido
marcada porque iba a vivir su vida distorsionando la verdad para arruinar las
vidas de las personas simplemente por el sensacionalismo. Viendo la realidad
de cuán preciosa era la vida y la tragedia de ser cortada le había mostrado que
realmente importaba, y ella había cambiado. Pero Ace… él supo que sus
acciones iban a acabar vidas—y a él no le importaba. Excepto por que él podría
ganar de ello.

Ace estaba riéndose, arrancando más klínex13 de la caja de la cama.


Haciendo un suspiro feliz, cayó de espaldas sobre las almohadas. ‚¿Tengo un
ángel de la guarda? ¡Cool! ‛ dijo hacia el techo.

Su ángel de la guarda no lucía muy feliz, si la mancha gris en el espejo era


alguna indicación. Estaba paseando otra vez; no lo podía ayudar. No iba a dejar
que las cosas terminaran así.

Paul estaba avanzando hacia la ventana, y Shoe estaba tratando de limpiar


sus huellas digitales fuera de la tarjeta de ingreso al hospital. ‚Iba a poner fin a
su vida,‛ Paul dijo lentamente, y di un vistazo a Ace.

13
Pañuelos de papel
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 124

‚Estaba tratando de salvarlo. Pero por qué, no tengo ni idea.‛

Shoe había vuelto su espalda hacia nosotros, y sus dedos teclearon sobre las
teclas. Rebuscando un disco en blanco, lo deslizó en el quemador y clickeó
sobre un botón. ‚No estoy tomando la culpa por el hospital,‛ dijo
enfáticamente.

Ace se rió desde la cama. ‚No puedes detenerme. Recientemente me


conseguí un {ngel de la guarda.‛

Desde el espejo, la bola de luz suspiró.

Mi temperamento se estaba enfriando. Shoe probablemente estaba


quemando una corrección. Claramente él estaba teniendo los mismos
pensamientos que yo, desde que la tarjeta de ingreso al hospital estaba ahora
metida en su bolsillo trasero. Podríamos irrumpir y subir14 la corrección. Había
simplemente el problema persistente de Ace. En el momento que saliéramos,
Ace llamaría a alguien.

Me volví hacia Paul, con los comienzos de un plan en mí. ‚Ustedes chicos
nunca se quedan para descubrir qué las personas que salvan hacen después que
a ustedes los bendigan, ¿verdad?‛ Dije amargamente. Lo que estaba hecho
estaba hecho. Destino, pensé, preguntándome si estaba equivocada sobre la
elección siendo más fuerte que la visión serafín. Paul aún me estaba mirando, y
chasqueé, ‚Simplemente déjalo, ¿ok? Hiciste lo tuyo. Tengo trabajo que hacer.‛

La expresión de Paul se volvió preocupada, y miró hacia Ace. ‚¿Qué vas a


hacer?‛ preguntó. ‚Él tiene un {ngel de la guarda.‛

‚La gente en el hospital no,‛ dije. ‚¿Y me llamaste asesina? ¡Abre tus ojos!‛
Me volví hacia Shoe, contenta de ver una inclinación determinada en su
expresión mientras sacaba el disco fuera de su computadora y mirando
furiosamente a Ace. ‚¿Esa es la corrección?‛ Pregunté, y él asintió. Desde la
cama, Ace se incorporó.

‚¿Qué est{s haciendo?‛

14
Aquí estamos hablando de manera informática, en donde subir se ha traducido de la palabra upload.
Al decir subir se refiere a meter la corrección al virus para poder eliminarlo.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 125

Shoe me lo dio, diciendo, ‚Ella va colocar la corrección por mí mientras tú y


yo nos sentamos aquí y jugamos algo de WoW15. Si quieres llamar a los policías,
entonces adelante, pero romperé tus dedos si tratas de hacerlo antes de que esa
corrección esté en su lugar. No voy a cargar con vidas en mi conciencia.‛

‚No lo harías,‛ dijo Ace, sonando su nariz. La sangre manchaba su cara y


sus dedos, pedacitos de klínex pegándose a ellos.

Sonriendo desagradablemente, me aparté de Paul mientras me movía hacia


la ventana. ‚Eres una buena persona, Shoe. Haré lo que pueda.‛ ¿Cómo iba a
hacer esto? No sabía nada de computadoras.

Ace tiró sus klínex. ‚¿Piensas que Shoe me puede mantener aquí?‛ dijo,
moviéndose para sentarse en la silla de Shoe como si fuera un trono y
moviéndose hacia atr{s y adelante. ‚Tengo un {ngel de la guarda. Una vez que
el fenómeno de una chica salga, tendré a su mamá aquí dentro. Entonces
llamaré a mi mamá. Le diré que me golpeaste y robaste su tarjeta de ingreso.‛

Mi mandíbula se apretó, y Shoe, esperando al lado de la puerta, frunció el


ceño. Eché un vistazo al ángel de la guarda sentada sobre el borde del espejo, e
hizo un pequeño sonido de suspiro. ‚Maldita sea,‛ mascullé. Tal vez si supiera
cómo funcionaba mi amuleto, podría quedarme y Shoe podría ir, pero no lo
sabía.

Moviéndose nerviosamente, Shoe dijo, ‚no sabía que los {ngeles pudieran
maldecir.‛

Paul hizo una mueca, mirando como si estuviera comiendo algo amargo.
‚Ella no es un {ngel.‛

‚Simplemente estoy muerta,‛ dije. Frustrada, miré a Paul. Él encontró mi


mirada, su expresión sosteniendo un indicio–el susurro más descubierto–de
culpabilidad. Barnabás y Nakita no estaban ninguna parte para ser vistos. Así
que necesitaba algo de ayuda. Simplemente necesitaba saber cómo usar mi
amuleto.

Usar mi amuleto…

15
Así se conoce comúnmente a World of Warcraft (Mundo de Guerras Marinas), que es un videojuego
de rol multijugador masivo en línea desarrollado por Blizzard Entertainment. Es el cuarto juego lanzado
establecido en el universo fantástico de Warcraft, el cual fue por primera vez introducido por Warcraft:
Orcs & Humans en 1994.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 126

‚Podrías, ah, ¿podrías hacerme un favor?‛ repentinamente pregunté a Paul,


y fue duro decidir quién estaba más sorprendido, el ángel de la guarda, ahora
de una brillante plata, o Paul, mirándome.

‚¿Disculpa?‛

Di un vistazo a Ace, luego regresé a él. ‚Simplemente… lo observarías por


un rato?‛ Pregunté. ‚¿Así Shoe y yo podemos arreglar lo qué podamos?‛

Una curiosa mirada apareció en los ojos de Paul. ‚No te entiendo,


Madison.‛

La esperanza silbó a través de mí. Ese no había sido un no. El ángel de la


guarda claramente pensó que era una gran idea, precipitándose sobre el techo
como si fuera una gran duende sobre un expreso doble. ‚Mi pap{ no me
entiende, tampoco,‛ dije, sonriendo. ‚¿Lo har{s? ¿Tratar de compensar esto que
has echado a perder?‛

‚No lo he echado a perder. ¡Salve su vida! ‛ él dijo airadamente, luego miró


a Ace mir{ndolo con una mirada asesina. ‚Sí. Lo haré,‛ agregó. ‚Pero me la
debes.‛

‚¿Piensas que eres m{s fuerte que yo?‛ Ace dijo mientras se colocaba de
pie, y me tensé.

Paul alcanzó a su amuleto, y tirité mientras algo me traspasaba cuando él


tocó lo sagrado. El ángel de la guarda dejó escapar un aullido cuando Ace
colapsó. Maldición, eso había sido rápido. ‚Wow,‛ susurré, totalmente
impresionada.

Shoe golpeó Ace en las costillas con su pie. ‚Me alegra estar de tu lado,‛
dijo, luego jaló las llaves del camión de Ace desde el cinturón de su antiguo
amigo. ‚Tienen una c{mara en la entrada del hospital,‛ dijo en explicación
mientras avanzaba m{s all{ de Paul y hacia la ventana. ‚No quiero que mi
coche sea visto allí.‛

Se deslizó fuera de la ventana, apoyándose adentro mientras dijo,


‚Cúbreme si mi mamá golpea la puerta, ok?‛

Paul asintió, viendo a ambos asustado y emocionado.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 127

‚¿Aún puedes cambiar los recuerdos?‛ Le pregunté, consciente de que Shoe


estaba fuera de la ventana, pero realmente quería saber.

‚No,‛ Paul admitió, luciendo casi avergonzado, como si lo hubiese


intentado y fallado.

‚Yo tampoco,‛ dije, sintiendo una oleada de parentesco. Sonriendo, me


senté en el alféizar y giré mis tenis afuera. Estaba más frío, y tirité. Tal vez había
fallado en salvar el alma de Ace, pero podría salvar las vidas de algunos
inocentes. ‚Gracias, Paul. No eres tan malo.‛

Caí en la tierra, y Shoe comenzó a cruzar el oscuro césped, con la cabeza


abajo mientras tocaba nerviosamente las llaves de Ace.

‚¡Madison!‛

Era Paul, y me di vuelta. Estaba en la ventana, el ángel de la guarda sobre


su hombro. ‚¿Tienes destellos del futuro?‛ preguntó, mirando indeciso. ‚¿Viste
lo que venía de esto?‛

Asentí, respingando cuando la música de Ace resonaba mientras Shoe


encendió su camión. ‚Vi qué podría ser,‛ admití, tiritando al recuerdo. ‚Él no
estaba un poco arrepentido sobre eso. Pienso que lo que estamos haciendo
cambia las cosas, sin embargo.‛ Paul no dijo nada, y, meneando mis pies,
barbullé, ‚Me tengo que ir.‛

‚¡Buena suerte!‛ susurró en voz alta.

Sonriendo, me gire para correr al camión de Ace. ‚No dejes que Ron
escuché que dijiste eso,‛ mascullé.

Estaba con un corazón mucho más claro que entré deprisa en el lado del
copiloto del camión de Ace y me abroché a mí misma adentro. Había unas mil
cosas que podrían salir mal, y alguien iba a meterse en problemas incluso si
todo salía bien, pero Paul creía en mí.

Y estaba sorprendida de percatarme que eso significaba mucho.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 128

Capítulo 11
Traducido por Ángel
Corregido por Laumoon

S
hoe estaciono el camión de Ace en el parque, pero no hizo ningún
movimiento para salir de él. Juntos miramos a través del parabrisas
sucio a la brillantemente entrada de emergencia. Se veía tranquilo,
pero las personas circulaban adentro.

‚¿Asustado?‛ Pregunté, sintiendo la memoria de mi corazón hacer eco en


mis pensamientos. Odiaba cuando hacia eso, y lo forcé a detenerse.

Su mano cayó del volante, y él miró a través a mí. ‚Nunca he irrumpido en


nada excepto la escuela, y tu viste que tan bien eso fue. Cielos, Madison, nunca
ni siquiera he robado de una tienda.‛

‚¿Pero te sientas en tu cuarto y creaste a un virus que puede matar a las


personas al apagar el sistema de computadoras del hospital?‛ Dije resoplando.

‚No creé un programa para matar a las personas,‛ Dijo calurosamente.


‚Hice un virus para cerrar la escuela por un día. Eso es todo. Ace es un trasero
de sapo.‛

No era como si pudiera discutir con él. Con mi cabeza girando, me enfoque
en las puertas gemelas de cristales que derramaban luz en el estacionamiento
débilmente iluminado. Repentinamente se me ocurrió que estaba corriendo de
un lado a otro con mi amuleto resonando desde que había dejado la protección
de Nakita y Barnabás. Era inexperta, y esto podría no tener un final feliz. Tan
pronto como Ron se desocupara, él se pondría curiosear con respecto a mi
paradero.

Shoe se frotó la barbilla, claramente nervioso. Conocía el sentimiento.


Estaba realmente preocupada por Barnabás, Nakita, y Grace. ¿Qué ocurre si
estaban lastimados? Eran más poderosos que yo, pero era responsable de ellos.
¿Cómo ocurrió eso?

‚No van solo dejarnos entrar y sentarnos en una terminal.‛ Dijo Shoe con
un suspiro.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 129

Si Barnabás o Nakita estaban heridos, ¿Ron podría rastrearme? Tenía el tiempo


prestado, y aquí estaba sentada en un camión que no nos pertenecía.

‚¿Cómo vamos siquiera nosotros entrar ahí?‛ Shoe dijo, m{s alto esta vez,
ya que no le había respondido.

Nerviosa, atraje una de mis rodillas hasta mi pecho para reatar mis zapatos
de tenis. ‚Es muy tarde para hacerles creer que estamos visitando a alguien.‛
Dije. ‚¿Qué tan buen actor eres?‛

Los ojos de Shoe se ampliaron en la sutil luz de seguridad. ‚¿Tu quieres


entrar a hurtadillas como un enfermero?‛

‚No, pero si tu entraras en el estacionamiento de emergencia r{pido


conmigo inconsciente…‛

La frente se elevó, él respingó. ‚¿Tú piensas que eso funcionara?‛

Recordando como habíamos entrando corriendo en la sala de emergencias


con Josh frío y muriendo después de ser segado por Nakita, asentí con la
cabeza. ‚Sé que lo har{. Con toda la distracción, tu f{cilmente podrías meterte
por la parte trasera, con nadie mirando.‛ Mientras que pueda mantener mis falsos
latidos continuando. ‚Eventualmente me estabilizar{n y se ir{n. Podría tomar
horas. A menos que…‛

Shoe me contempló, esperando. ‚¿A menos que qué?‛

‚Uh, a menos que me haga la muerta. Me meter{n en la morgue bastante


r{pido.‛

‚Si, como si eso funcionara.‛ Dijo alrededor de un bufido.

Agarré su mano y la sujeté contra mi muñeca. ‚Te lo dije, estoy muerta.


¿Ves? No tengo pulso. A menos que trate de crear uno, es decir.‛

Mi corazón dio un golpe a la sensación de sus dedos alrededor de mi


muñeca, y luego fue silencio.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 130

La expresión de Shoe cambió de molestia, a intriga, y después a miedo.


Alejando su mano de mí, él puso una mirada enferma en su cara. ‚Es un truco o
algo por el estilo,‛ Él dijo.

Aquí estoy otra vez, sentada en un camión, intentando convencer a otro chico que
estoy muerta, pensé. Sonó como a una canción ranchera yendo mal. Mi muerte
era todo un desorden. Suspirando, dije, ‚Bien. No lo creas. Simplemente sigue
con esto por algunas horas más. ¿Tienes el parche?‛

Él tocó su bolsillo y asintió.

‚Van a querer saber quién soy,‛ Dije, sacando mi cartera de mi bolsillo y


metiéndola en la guantera, teniendo que acuñarla a un lado de otro puñado de
discos de música. Mi teléfono también estaba ahí, y vacilé. Era mi único enlace
con mi papá. Poniéndole a un lado se sintió mal.

‚No quiero que mi papá reciba una llamada de que estoy en una morgue a
medio estado de distancia.‛ Dije. ‚¿Les puede decir que mi nombre es Wendy?‛
A Wendy no le importaría. Ella pensaría que era comiquísimo. ‚¿Les dir{s que
tú me encontraste en el centro comercial y que íbamos a ver una película o algo
por el estilo, y yo solo me caí?‛

Shoe no lucía bien. En verdad, él estaba casi verde bajo la sutil luz de
seguridad. ‚No se…‛ Él empezó.

‚¡Oh, por el amor de Dios!‛ Exclamé, sintiendo el pasar de tiempo. ‚Tú vas
a ser culpado de tres muertes, ¿y te preocupas por mentirle al recepcionista de
dónde nos encontramos? Llévame, y cuando te digan que he muerto, moléstate
y pregunta si puedes ir al baño para vomitar. Encuéntreme en los elevadores en
el piso inferior. Tu tienes una llave de acceso.‛

Él tocó su bolsillo donde la identificación de la madre de Ace estaba, y,


viéndose dolorido, él asintió con la cabeza. ‚¿Por qué no tomas el parche y lo
subes?‛ Él preguntó mientras salía del coche.

La visión de un ala negra me hizo tiritar ‚¿Yo?‛ Dije. ‚No sé nada acerca de
computadoras. Tu tienes que hacerlo.‛

A regañadientes él lo deslizó fuera. ‚¿Qué pasará después?‛ Él preguntó.


‚¿Tu muerta? ¿Yo ingres{ndote? ¿Los policías?‛ Entonces él hizo una pausa.
‚Tu dijiste que Barnabás podía cambiar memorias.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 131

Asentí con la cabeza, y, viéndose aun más incómodo, Shoe se lamió los
labios. ‚No cambies la mía, ¿de acuerdo?‛ Él preguntó. ‚Quiero recordar esto.‛

‚De acuerdo.‛ Dije r{pidamente, simplemente para seguir con eso. No supe
cuánto tiempo me dejarían ahí acostada antes de moverme escaleras abajo.
‚Cuando esto se termine, yo simplemente volveré de la morgue y me bajaré de
la mesa,‛ Dije. ‚Pensar{n que sus instrumentos estaban mal y que no estaba
realmente muerta. Es un maldito milagro.‛

‚Lo digo en serio.‛ Shoe dijo, su voz chillona, y lo miré. ‚No me haga
olvidar. ¿Si tu toma eso de mí… cual es el punto?‛

Mi corazón dio un golpe y se aquietó. ‚De acuerdo‛ Dije, queriéndolo decir


esta vez.

Él me miró por un largo momento, entonces puso el camión devuelta en


marcha. ‚Es mejor que esto funcione.‛ Él murmuró.

‚Funcionar{.‛ Dije, pero era algo espelúznate. Tendría que asegurarme de


que mi corazón no se iniciara, y usualmente lo hacía cuando estaba estresada. Y
tenía que asegurarme de no sonreír y arruinar todo. Si me metieran en una
gaveta, iba a quedarme atorada hasta que Shoe me encontrara. Pero no había
muchas opciones aquí. Si el parche no estaba en el lugar para las seis, las
personas iban a morir. Sería mi falla.

Nerviosa, caí en el asiento en contra de la puerta y me concentre en


escuchar el latido de mi corazón. Lentamente se fue deteniendo. Identidad
desconocida—hecho. El pulso detenido—hecho. Mi amuleto, pensé, preocupada
por si alguien me lo quitaba.

‚¡Espera!‛ Dije fuerte, y el camión se sacudió con fuerza, deteniéndose.


‚Tengo que esconder mi amuleto.‛ Dije tímidamente.

Las cejas de Shoe subieron en duda, y me ubiqué para concentrarme,


contenta de haber aprendido eso. Tomando mi amuleto en mi mano, pensé en
él, en como se sentía en mi agarre, suave, cálido, y en cómo era; un violeta tan
profundo que en realidad era negro. Lo miré con mi ojo de la mente, viendo
como lo divino le rodeaba, filtrándolo para que no me destruyera cuando el
tiempo tocará mis pensamientos. Resonó con el sonido de mi alma, del
universo. Se sintió vivo. Y el peso era simplemente tan… ligero .
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 132

Una sensación cálida me llenó. Sabiendo que había funcionado, abrí mis
ojos y solté mi amuleto. Mire hacia mi pecho, pero ya no estaba. Diablos, amaba
cuando podía hacer algo así.

‚Oh, Dios mío, se hizo invisible.‛ Dijo Shoe, sonando asustado. ‚Mierda. Tu
en realidad est{s muerta.‛ Él dijo, con la cara blanca.

Sonreí, intentando reconfortarle. ‚Ahora luces como si tuvieras a una chica


muerta en tu camión. Vamos.‛

Aspirando profundamente, él giró hacia la entrada del hospital. ‚Voy a


meterme en tantos problema para esto.‛ Él susurró, sus manos temblando
mientras ponía el camión en marcha y aceleraba al máximo el motor.

Cerré mis ojos otra vez, obligándome a relajarme. Había hecho mi amuleto
invisible antes, pero nunca cuando un momento era importante, como ahora.
Tenía tres cosas que sostener, y no sabía si podría hacerlo. Tenía que mantener
los latidos de mi corazón, abstenerme de erguirme cuando intentasen traerme a
la vida, y tenía que mantener mi amuleto escondido. No sabía si podría hacer
todo esto.

Pero tenía que hacerlo.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 133

Capítulo 12
Traducido por Josel23
Corregido por Glad

L
as puertas dobles se cerraron con un sonido de silencio cuando el
camillero que me trasladaba hacia la morgue fue a buscar una soda.
En una explosión de movimiento, me senté, empujando la sabana
como si fuera una serpiente. Molesta, mire mi camisa, tratando de hacer que los
bordes irregulares me cubrieran. Era mi camisa favorita, la que había comprado
para mi primer día de escuela, y ellos la arrancaron como si fuera de un
descuento especial. Mis medias también habían sufrido, pero mi camiseta era lo
peor donde ellos habían empujado, pinchado, y aplicado electricidad a través
de mí.

‚Hijo de perra,‛ murmure mientras balanceaba mis pies sobre el borde y los
dejaba colgando. Había nuevos agujeros en mis brazos, también, y me quite las
agujas que ellos me habían dejado y las arroje sobre la camilla. No menos de
cuatro técnicos de laboratorio trataron de sacarme sangre, fallando pues no
había nada que sacar. Nunca jugare a la muerta de nuevo. ¡Nunca!

Manteniendo mi desgarrada camiseta cerrada, me deslice de la mesa. Mi pie


descalzo golpeo la baldosa fría, mirando hacia abajo, dije una palabrota de
nuevo. Por el amor de Dios—tenía una etiqueta en el dedo. ¿Cuando la habían puesto?

‚¿Donde est{n mis zapatos?‛ murmure, mirando debajo de la camilla


donde no encontré nada. Afortunadamente, mi amuleto estaba todavía
alrededor de mi cuello. Si ellos hubiesen tratado de tomarlo, lo habría perdido.
Estaba visible ahora. Yo había dejado de ocultarlo en el momento en que la
sabana había sido puesta sobre mí. Cuando ellos se habían dado por vencidos
conmigo…No había sido una sensación agradable después de todo. Con un
estado de ánimo acido, atravesé la habitación con poca luz, arrebatando una
bata de laboratorio de un perchero detrás del escritorio.

Metí mis brazos y la abroche hasta cubrir mi camisa rota y mis medias
rasgadas. Mi corazón había dado un pitidito mientras estuve sobre la mesa, y
ellos habían hecho todo lo posible para ponerlo en marcha de nuevo. Nunca me
había sentido tan ultrajada, pero al menos no habían cortado mi sujetador.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 134

‚Hey, ¡esos son míos!‛ dije cuando encontré mis aretes sobre el escritorio
del camillero. Furiosa, me puse uno, luego el otro. Todavía descalza me dirigí
hacia las puertas dobles. Tenía que encontrar a Shoe. Enojada con el mundo,
empuje las puertas abiertas y me asome. El pasillo estaba vacío. Una de las luces
fluorescentes estaba apagada, y más abajo por el corredor del techo bajo, otra
parpadeaba. Olía a cloro. La otra dirección parecía ser lo mismo, pero al final de
esta había un conjunto de puertas plateadas de ascensores. Estaba fuera de allí.
La etiqueta del dedo provoco un sonido sobre la baldosa, y, sin frenar, me
incline hacia abajo, arrancándola, y luego la deje caer al suelo. Había estado
‘muerta’ mucho tiempo, y apostaba a que Shoe estaba todavía en el piso de
arriba. Detr{s de mí una voz masculina llamo ‚¿Señorita? ¿Se le cayó algo?‛

Apreté los dientes, y me di la vuelta, entornado los ojos cuando me di


cuenta que era el camillero que me había traído aquí con las melodías mutiladas
de ‘Satisfacción’ El mismo que había agarrado mis aretes, podría apostar.

‚¡Qué!‛ espete, muy consciente de mis pies descalzos y mi cabello purpura.


Sin mencionar mi camisa desgarrada y mis medias andrajosas, haciéndome
pasar por un medico que había salido, pero quizás podía parecer un técnico de
laboratorio teniendo un mal día.

La cara regordeta del chico parecía sorprendida ‚Uh, lo siento,‛ dijo él


mientras se adelanto, lentamente ahora. ‚Pensé que eras un doctor.‛
Deteniéndose, miro la etiqueta de la morgue, luego a mí, luego a las puertas a
su derecha. La botella de gaseosa en sus manos comenzó a deslizarse. ‚Ah…‛

Molesta, camine hacia atr{s, con mis pies descalzos. ‚Gracias,‛ dije,
arrebatándole la etiqueta del dedo, metiéndola dentro del bolsillo de la bata de
laboratorio. Dándole una última mirada, me gire y empecé a caminar hacia el
final del pasillo hacia el ascensor. Detrás de mí, hubo un desplazamiento de
zapatos nerviosos.

‚Hey, uh, no es cierto…‛dijo el chico, luego vacilo, pensando. Di tres pasos


m{s adelante en el pasillo, y el grito ‚¡Hey!‛

No me di la vuelta, pero cada musculo en mi se tenso mientras golpeaba el


botón hacia arriba. Casi al instante las puertas se deslizaron separándose, pero
me detuve bruscamente cuando Shoe me miro. Sus ojos iban detrás de mí, y no
me sorprendí cuando escuche el grito del camillero, ‚¡Hey, tu! ¡Espera!‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 135

Los ojos de Shoe estaban enormes y tenía una expresión enojada cuando
tomo mi bata de laboratorio y se balanceo hacia atrás, diciendo, ‚Uh, ¿estas
bien?‛

‚Nos vemos en el armario de las escobas, ¿quieres?‛ murmure, y salió como


una flecha fuera del ascensor. Me puse rígida cuando el camillero vino detrás
de mí, resoplando. Ya había tenido suficiente. Las cosas que ellos les hacían a
las personas muertas apestaban. La última cosa que quería hacer era responder
a las preguntas de ese chico de porque yo estaba de pie y caminando.

‚¿Tienes algún problema?‛ exclame mientras me giraba hacia él. Tuvo el


efecto deseado y se detuvo en seco. Tras él, Shoe había encontrado una pequeña
habitación con un cubo de ruedas y un trapeador.

Con un gesto fuerte de mi mano, obligue al chico a dar un paso hacia atrás,
‚Estas viva…‛ tartamudeo el camillero, sus ojos fueron hacia mis aretes, de
vuelta hacia donde ellos pertenecían—mis oídos.

‚En realidad no, pero tú eres un ladrón,‛ dije con firmeza. ‚Toma tu tiempo
de espera‛, agregue, empujándolo de vuelta al armario. Sus brazos giraron, el
chico cayó hacia atrás. Proyectado sobre la cubeta, se fue hacia abajo,
mirándome cuando metí la mano y agarre la llave de su cinturón. Me mecí
fuera del camino, y Shoe tiro la puerta cerrada, casi capturando las zapatillas
blancas del chico.

‚Supongo que es esta,‛ dijo Shoe mientras señalo una llave con
MANTENIMENTO en ella, la introduje en la cerradura y le di un giro.

‚¡Hey!‛ Llego débilmente desde el armario, y exhale, sintiéndome mucho


mejor. Shoe miro el armario, riendo. ‚¿Hiciste un nuevo amigo?‛ pregunto él, y
yo salte cuando el camillero sacudió el mango y golpeo la puerta. Avergonzada,
sentí mi ira consumirse.

‚El robo mis aretes,‛ dije, feliz de no haberlos encontrado en sus lóbulos.
Las calaveras eran más difíciles de encontrar de lo que uno se podría esperar.

‚¡Déjenme salir!‛ venia del armario.

‚Gracias,‛ le dije a Shoe mientras gir{bamos hacia el ascensor y golpeaba el


botón de subir.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 136

‚¿Por qué?‛ repentinamente tímida, mire a Shoe, sus manos en sus bolsillos
y su camisa casualmente por fuera.

‚Por venir a buscarme,‛ dije. El ascensor no había regresado todavía, y él


me miro de reojo. ‚Quería estar seguro de que estabas bien. Quiero decir, tú
estabas muerta.

‚Todavía lo estoy.‛ El se puso aun m{s nervioso, pasando de un pie al otro


mientras miraba la luz de arriba brillando.

‚Cierto,‛ el admitió, ‚pero… estas bien, también.‛

Sonreí, burlándome le golpee el hombro. ‚Solo es mi cuerpo lo que est{


muerto.‛

Shoe respiro hondo, exhalando con fuerza. ‚Ah, necesitamos una


computadora silenciosa.‛ Desde el armario llego un suave, ‚Maldita sea, no hay
rejas.‛

‚Hay una computadora en la morgue,‛ sugerí, y Shoe miro el pasillo vacio,


sus cejas altas en especulación. Sabía exactamente lo que él estaba pensando:
¿Porque ir hacia otro lugar cuando la única persona aquí estaba encerrada con
llave en el armario?

‚Suena bien para mi,‛ dijo Shoe, empezamos por las puertas dobles, sus
zapatos crujieron sobre las baldosas y mis pies descalzos en silencio. ‚Si el virus
está en la computadora, entonces puedo conectarla con el servidor aquí y cargar
los parches.‛ Mi sonrisa se fue ampliando. Esto iba a funcionar. Finalmente,
algo era a mi manera.

‚¿Chicos?‛ llamo el camillero, comenzando a sonar frenético. ‚¿Alguien?


¿Hola?‛

Shoe me miro cuando entramos en la morgue. ‚¿Porque ellos te quitaron


tus zapatos?‛ pregunto él, y yo repentinamente tome conciencia de mi camisa
rota, escondida debajo de la bata de laboratorio.

‚Ellos tenían que poner la etiqueta en algún dedo del pie,‛ dije,
desacelerando hasta detenerme preguntándome si mis zapatos podrían estar en
uno de los armarios contra la pared.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 137

Yo no era conocedora de morgues, pero esta era mejor que en la que había
despertado muerta la primera vez. Solo estaba la camilla en la que había
llegado, y supuse que este era un área de espera donde ellos mantenían los
cuerpos antes de dejarlos… permanentes en las estanterías. Esa era
probablemente la sala tras las puertas con BIOHAZARD estampado sobre
16

ellas.

Yo no iba a buscar. Estaba feliz de que ellos no me dejaran y se fueran antes


de ponerme en un cajón frió. No había estado esperando tener que tocar para
que me dejaran salir.

‚Este tipo es un vago,‛ dijo Shoe mientras se dirigía a la mesa de rayado.


Con un solo dedo, metió los restos de la cena de pollo del chico al otro lado del
descolorido escritorio de madera falsa y se sentó en la silla rodante. ‚Mira, tiene
grasa sobre todo el teclado,‛ dijo Shoe, disgustado.

Tome mi archivo. JANE DOE. Si, esa era yo. CAUSA DE LA MUERTE,
INDETERMINADA.

¡Qué asco!, había estado abajo por una autopsia. Empecé a alimentar una
trituradora de papel con el contenido, hoja por hoja, sintiéndome mejor
mientras mi expediente desaparecía. ‚¿Puedes imaginarte comiendo aquí?‛ dije
entre hojas.

‚Eso es asqueroso.‛ Es como despertar descalzo en la morgue. Con un gesto,


Shoe tomo el control de la computadora, tirando la silla cercana y escribiendo
una dirección en la ventana para que apareciera una pantalla negra de
apariencia seria.

Observando sus habilidades, mentalmente me patee a mi misma por no


saber que no había sido él en mi primera premonición. Shoe era realmente
bueno en esto. Excepcionalmente bueno, tenía la esperanza de que terminara
destruyendo mi archivo y fui a respaldarlo para poder verlo trabajar.

‚Déjame ver que tenemos…‛ dijo él en voz baja, ajeno al lugar donde estaba
cuando encontró lo conocido en un nuevo escenario. El toco unas cuantas teclas
m{s y comenzó la búsqueda. ‚Si,‛ dijo de inmediato cuando algo apareció: Un
icono pequeño de un pájaro negro al lado de una cadena de letras y números
que no significaban nada para mí. Pájaro negro. Al igual que una obra de arte

16
BIOHAZARD: Contracción de biological hazard en ingles que indica “potenciales peligros biológicos
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 138

que gotea, Ace había dejado su marca. Yo no había visto un ala real negra en
dos días, pero ellas parecían estar en todas partes.

‚Ahí est{,‛ dijo él, mir{ndome con la victoria en los ojos. ‚Podemos hacer
esto desde aquí. Solo necesito hacer algún bactracking 17 para estar seguro de
que se trata de una comunicación en ambos sentidos, y luego bajar el parche.‛

El estaba emocionado. Mi corazón dio un golpe, y sonreí. ‚¿Cuanto tiempo


tomara eso?‛ pregunte mientras empuje el pollo grasiento dentro de la basura y
me senté en el escritorio. El camillero estaba realmente cerca del ascensor. Si él
no dejaba de gritar, alguien finalmente lo escucharía.

Shoe se encogió de hombros, totalmente imperturbable y frío. ‚Pocos


minutos.‛

El alivio corrió dentro de mí y exhale un suspiro que probablemente había


tomado hace cinco minutos. ‚Eso es genial,‛ dije radiante. ‚Shoe eres fant{stico.
Yo no sabría que hacer primero.‛

‚Sí, bueno, es lo que hago,‛ dijo el torpemente, pero luego me miro


parpadeando. ‚¿Qué le paso a tu camiseta?‛ Mis manos volaron hacia la bata de
laboratorio para asegurarme que estaba cubierta. Lo estaba, pero me deslice
desde el escritorio, sosteniendo la bata de laboratorio más apretada en el medio.
‚Uh, estaba muerta,‛ dije, nerviosa. ‚Ellos la rompieron mientras intentaban
obtener el latido de mi corazón.‛

‚Lo siento,‛ dijo él, parecía serio. Volviendo al teclado comenzó a escribir.

‚Era mi camiseta favorita, también‛, dije, preguntándome como iba a


esconder esto y mis medias de papá. Oh, estupendo, mi papá. Mierda, prometí
llamar a mamá también. El sonido del ascensor en la distancia nos llevo a Shoe
y a mí a levantar la cabeza. Esto no era bueno. Quizás ellos habían encontrado a
alguien más para tratar de perforarme por sangre.

‚Solo has lo tuyo,‛ dije mientras me dirigía a la puerta. ‚Sin importar lo que
pase, no te detengas. Yo detendré a cualquiera que este afuera.‛ Pero a medida
que mi mano estaba llegando para empujar el lado izquierdo de la puerta
abierta, Nakita se colaba por la derecha. Sorprendida me tambalee hacia atrás.

17
Backtracking: (o búsqueda atrás) es una técnica de programación para hacer búsqueda
sistemática a través de todas las configuraciones posibles dentro de un espacio de búsqueda.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 139

Ella estaba de blanco otra vez, los vaqueros de diseñador y un top rojo que
le había dado los reemplazo por unos pantalones blancos y una camisa blanca
ceñida que le hizo una suave línea. Su amuleto resplandecía un profundo
violeta contra su piel, y su espada estaba en su mano. Botas muy pequeñas,
blancas con bordes de oro estaban ampliamente difusas sobre las descoloridas
baldosas. Era lo que tenía puesto la tarde durante la que ella había intentado
matarme. Obviamente algo estaba mal.

‚Nakita,‛ exclame, entonces algo se deslizo sobre mi aura para ocultarla. En


la computadora, Shoe exhalo y empezó a escribir de nuevo.

‚¡Confié en ti!‛ Nakita exclamo, sus ojos oscuros temblaban mientras


estuvo de pie delante de mí.

Desconcertada me quede hasta que recordé. Ace. El había conseguido un


{ngel guardi{n. Mierda. ‚Paul nos siguió desde la escuela,‛ espete, cayendo de
nuevo mientras ella venia paso por paso. ‚¡No sabía que él estaba allí! En el
momento que supe lo que él estaba haciendo, era muy tarde. Nakita, no le dije
que era Ace. ¡El me siguió!‛ Casi gritando, gruñendo cuando mi trasero golpeo
la camilla detrás de mí. Recordándola matando a mi predecesor ante mis
propios ojos, deje que mi mirada cayera sobre su amuleto. Era como si tratara
de lanzar fragmentos negros de luz en las sombras de la habitación. Nakita, se
había detenido, a escuchar, pero todavía apretaba con desconfianza la
empuñadura de su espada.

Pienso que ella quería creerme pero estaba asustada. ‚Los serafines estaban
en lo cierto,‛ exprese. ‚Hablar con Ace no habría hecho ninguna diferencia.
Pero Shoe todavía podía salvar a las personas que Ace iba a matar.‛ Nakita bajo
la espada una pulgada. Sus mejillas estaban manchadas con rojo, y agarre la
mesa rodante detrás de mí con ambas manos.

‚No me importa la gente que va a morir,‛ dijo ella, deteniendo a Shoe en


su escritura. ‚¡Salvarlos a ellos no es mi trabajo! Sus almas son hermosas y los
serafines se regocijaran. Sus almas no me preocupan, Madison, me importan los
heridos, no el bien.‛

Mi boca se abrió en un silencioso ‚oh‛ de entendimiento. Ella era una


segadora oscura. Ella mataba gente para salvar sus almas. Ella pensaba que lo
que yo trataba de hacer era imprudente. Y todavía estaba allí, protegiendo mi
alma de la de detección de Ron mientras ella trataba de entender. ‚Tomar el
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 140

alma de Ace antes de que el la mancillara mas allá de la redención era mi tarea,‛
dijo ella, y no podría decir que estaba sintiendo ella.

‚Su alma dependía de mi, y falle completamente porque confié en ti. Tú


hiciste un trato con el guardián cronometrador de luz. Tu le permitiste darle a
Ace un ángel guardián entonces yo no sería capaz de matar su cuerpo.
¡Admítelo!‛

Shoe estaba mirando. Sus dedos estaban quietos, y el silencio me


impregnaba. ‚Sigue trabajando, Shoe,‛ dije, sin mirar lejos de Nakita.‛ Yo no se
lo di a Ace,‛ le dije a ella, y se tornó m{s agitada, un {ngel confundido con una
espada. ‚Paul le dio a Ace su {ngel guardi{n incluso antes de que yo supiera
que él estaba allí. Tú no le fallaste a él. Yo lo hice. Lo siento, pero yo no te
traicione! No a propósito.‛

Nakita toco su amuleto, la confusión tomaba sus ojos. Por mi culpa, alas
negras había consumido sus recuerdos. No todos ellos, pero los suficientes
como para sentir el toque de la muerte. El sonido de sus gritos al darse cuenta
de que había una cosa como tal fin había sido horrible. Ella era la única entre los
ángeles que sabía lo que era el miedo a la muerte. Solo ella conocía la amargura
de la perdida. Y yo todavía no podía hacerle entender a ella él porque quería
poner fin a la temprana guadaña.

‚Fui a la habitación de Shoe. Hable con Ace,‛ dijo ella. ‚El me dijo que tú
hiciste un trato con el cronometrador de luz naciente. El se rio de mi. ¡Tú
mentiste! ¡Al igual que Kairos!‛

‚Yo no mentí,‛ dije r{pidamente, llegando a tocarla, solo dejando caer mi


mano. ‚Me olvide de Paul, y por eso, Ace obtuvo un {ngel. Lo siento mucho,
Nakita. Yo hice un trato con Paul, pero era para impedir que Ace interfiera
mientras Shoe parchea el virus‛.

Estaba tan molesta con Paul, que podría haberlo matado yo misma. Pero mi
meta nunca fue impedir que Ace obtuviera un ángel. Yo estaba tratando de
mostrarle a el que lo que sus decisiones iban a provocar, esperando obtener un
cambio de su parte así su vida tendría sentido. ‚Todavía puedo hacerlo. Yo sé
que eso va contra tu naturaleza, pero pensé que entendías. O al menos estabas
tratando de entender. Pensé que me estabas ayudando.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 141

Su ira vacilo, y, observando confundida, bajo la mirada. ‚Ace no va a


cambiar,‛ dijo ella. ‚Tu lo has dicho. Y ahora su alma est{ verdaderamente
perdida.‛

Dando un paso hacia atrás, toque su hombro, echando atrás la cabeza


cuando se acerco. Había lágrimas en sus ojos, y ella se las seco, sorprendida de
estar llorando. ‚Esto no ha terminado todavía.‛ ¿Como voy a cambiar un
milenio de creencias si ni siquiera puedo convencer a un Caronte que quiere
entender pero no puede?

‚Puedo arreglar esto,‛ dije, y ella me miro como si se preguntara porque me


estaba molestando.

‚Si nosotros no hacemos algo, Shoe tendr{ la culpa de las elecciones de Ace.
Pero si Ace tiene que hacer frente a las consecuencias, podría cambiar su propio
destino.‛ El destino, pensé, degust{ndolo en mi mente mientras se disolvía
sobre mi lengua. Odiaba esa palabra, pero había despertado el interés en
Nakita. Ella conocía el destino.

‚¿Tú crees?‛ pregunto ella, sus hombros se relajaron mientras se


suavizaban las líneas de ira en su rostro.

‚Espero,‛ dije, queriendo ser perfectamente clara.

Nakita le frunció el seño a Shoe, como si lo viera por primera vez, su


mecanografía comenzaba y se detenía cuando él le murmuraba a la
computadora. Cambiar fue duro para ella, pero ella trataría por mí, su
cronometradora, la que había estropeado sus perfectas creencias. Su espada
desapareció.

‚Entonces probablemente no debí de haber golpeado a Paul,‛ dijo ella,


mordiendo su labio inferior inocentemente. Sus ojos se posaron sobre mis pies
descalzos, y ella parpadeo. ‚¿Donde est{n tus zapatos?‛ Lo peor parecía haber
terminado, y me relaje fuera de la camilla.

‚No lo se. ¿Están bien Barnabás y Grace?‛ pregunte.

Nakita estaba explorando la morgue, claramente no afectada. ‚Ellos


vienen,‛ dijo mientras se dirigía hacia el banco de los armarios, recorriéndolos
con sus dedos como si buscara algo. ‚Después de que te fuiste, Ron hablo con
Paul a través de su amuleto. Tan pronto como se entero de que Ace obtuvo su
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 142

ángel guardián, Ron se río, dijo cosas poco amables y se fue. Grace y Barnabás
lo siguieron para asegurarse de que no fuera a encontrarte, viendo como tu aura
estaba tintineando por todo el cielo y la tierra. Fui a la casa de Shoe para ver por
mí misma. Luego vine aquí.‛

Nakita se giro y tiro de la manija del armario, y se abrió, las bisagras se


doblaron. ‚Lo siento,‛ dijo ella mientras metió la mano y saco mis zapatos y
calcetines. ‚Debí confiar en ti. Yo no entiendo que estas tratando de hacer. Tal
vez si entendiera porque.‛

Con pasos silenciosos, cruzo la habitación para darme mis zapatillas


amarillas. ‚Est{ bien,‛ dije mientras las aceptaba. ‚Yo no sé lo que hago la
mitad del tiempo, tampoco. Solo hago lo que siento correcto.‛

Nakita sonrió débilmente. ‚Probablemente debí eliminar a Paul – incluso si


eso se sentía bien, también. Su amuleto es poderoso, pero no es un
cronometrador.‛

¿Ella no solo lo golpeo, también lo noqueo? Apoyada en la camilla, levante la


vista de la puesta de mis calcetines, saltando en un pie cuando la camilla
comenzó a rodar.

‚Nakita…por favor dime que estas bromeando. El estaba allí para evitar
que Ace se fuera.‛

Haciendo una mueca, Nakita tomo aire para responder, pero se detuvo,
girando hacia el pasillo cuando las puertas dobles se estrellaron abiertas. Era
Ace, y él no estaba feliz.

Jeez, ¿puede esto ponerse peor?

‚¡Ace!‛ grite, casi en p{nico, con un calcetín puesto y el otro colgando en


mis dedos.

‚Aléjate de la computadora, Shoe,‛ el exigió, la camisa negra ocultaba la


sangre que le goteaba de la nariz, pero podía olerla como una advertencia, casi
viendo un resplandor rojo quemando en el.

‚¿Esta es su aura? ¿Finalmente estoy comenzando a ver auras?‛


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 143

‚Como dije, probablemente no debí golpear a Paul,‛ Nakita admitió. Shoe


no levanto la mirada, sus dedos escribían furiosamente.

‚Vete al infierno,‛ el murmuro, confiando en nosotras para mantener a Ace


alejado de el. ‚Yo no tengo la culpa de esto.‛ Ace fue por Shoe, y Nakita se
abalanzo hacia delante.

‚Atr{s… ella lo amenazo, pero su movimiento para sacar su espada fallo


cuando unas bolas incandescentes de luz zumbaron detrás de el. Era un ángel
guardián, y yo sabía por experiencia que ellos trabajaban para hacer las cosas
peor. Por más que Nakita tratara de herirlo, lo peor estaba por venir. El ángel
no podría entender el porqué debía proteger a Ace, pero lo haría.

‚¡Sigue trabajando, Shoe!,‛ grite, maniobrando para mantenerme entre


ellos y levantando mis manos en aplacamiento cuando su ángel guardián
tatareo una advertencia. Todos vieron hacia Ace mirándome como si estuviera
pidiéndole a el que fuera un buen chico. Si tan solo pudiera razonar con este
ángel como lo hice con Grace.

Molesta, mire a Nakita mientras me colocaba en una posición de artes


marciales, con un calcetín puesto.

‚¿No solo dejas que salga, dejas que te siga?‛ le dije a Nakita.

‚No exactamente,‛ dijo ella, a continuación pisoteo el pie de Ace para


hacerlo dar un paso atr{s. ‚Bueno, quiz{s,‛ ella agrego. ‚Ace se levanto cuando
golpee a Paul. Yo sabía que él me estaba siguiendo, pero no pensé que eso
importara. Madison, lo siento. ¡Pensé que habíamos fallado!‛

Ace comenzó a moverse, y los tres nos desplazamos quedándonos con él:
Nakita, el ángel guardián y yo.

‚Shoe, eres patético,‛ dijo Ace, y yo me preguntaba porque él estaba


cojeando. ‚¿Chicas protegiéndote? aléjate de la computadora o voy a golpearte.
Sí, eso es lo que va a pasar‛.

‚¡No te detengas, Shoe!‛ Yo lo alenté. Ace dio otro paso hacia adelante con
sus manos formando puños, y Nakita saco su espada. Me sentía mareada. Todo
estaba fuera de control.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 144

‚¡Tu chica loca!‛ grito Ace, sabiendo que el tenia un {ngel guardi{n, pero
que no estaba dispuesto a confiar. ‚¡No te tengo miedo!‛

‚Acércate‛, grito ella, su cabello caía sobre su rostro haciendo su apariencia


peligrosa.

Shoe fue haciendo clic y chasqueando. Luego se detuvo, y mientras


susurraba en voz baja, ‚¡Si!‛ escuche el silbido de la bandeja de CD
deslizándose abierta. ¡Vamos a lograrlo! ¡realmente vamos a lograrlo! pensé, la
euforia me llenaba.

Pero Ace escucho a Shoe, también, y apretó sus dientes, tenía una mirada
salvaje en sus ojos. Y de repente, mientras estaba entre Ace y Shoe, sentí la
fuerza drenando en mí. Se trazo una fina hilada azul de las luces del techo en la
piscina sobre el piso de la morgue.

‚¡Ahora no!‛ Asustada, me deje caer, sosteniendo mi estomago como si


pudiera contenerme. Nakita se giro hacia mí, y entre en pánico cuando las luces
llenaron la habitación entera con una neblina azul, vertiéndose al exterior desde
el mobiliario en una inundación. Iba a tener una premonición. Ace había
tomado la decisión, y su futuro estaba cambiando. ¡Esto no es lo que necesito
ahora!

‚¿Madison?‛ llamo Nakita, pero su voz sonaba met{lica, como desde muy
lejos. Mareada, la mire. Pude ver sus alas en su espalda, existentes un instante
en el futuro y por lo tanto invisibles para todos excepto quizás para el ángel
guardián que estaba sobre nosotros. Sus ojos eran plateados. Nakita era quizás
demasiado hermosa para mirarla, y me tomo varios intentos susurrar, ‚voy a
tener una premonición, Nakita. ¡No le dejes ir!‛

Su espada se inclino en una confusión, y al ver una abertura, Ace se movió.


‚¡No!‛ grite, pero colapse mientras el mundo se torno al revés. Nakita se
abalanzo sobre mí, sus manos me atraparon justo antes de que golpeara el
suelo. Shoe estaba gritando, pero mi cabeza se torció hacia el techo. Y mientras
el desplazamiento de diferentes líneas se intensifico, el techo, las paredes, todo
se desvaneció…y la belleza de las estrellas me golpeo.

Yo jadeaba, el dolor de tanta belleza pasando a través de mí era como el


fuego. El timbre de los sonidos nunca antes oídos exploto dentro de mi alma.
Lagrimas llenaban mis ojos, y yo temblaba en los brazos de Nakita.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 145

‚Duele…‛ gemí. Y ella giro mi cara hacia ella. La terrible belleza de los
cielos fue remplazada por la trágica belleza de un ángel que había dañado—
Nakita, a quien le había enseñado el significado del miedo. Le había hecho eso a
ella. Yo. Pero los serafines tenían razón: El miedo era un regalo, y la hizo más
de lo que había sido antes, incluso aun cuando eso la desgarro.

‚Cierra tus ojos,‛ susurro Nakita en un silencio aterrorizado, y hundí mi


cara contra ella, sollozando. Eso fue demasiado. Yo era mortal, y ver lo divino
me estaba matando. ¿Como podía Ron hacer esto? El sonido de la lucha tiro de
mí, y sentí mi conciencia a la deriva en la habitación mientras la ilusión de un
cuerpo comenzó a ser borrosa. Y luego… Yo era Ace, sintiendo su rabia, su
miedo. Su todo.

Te odio, pensé con él, incapaz de separarme de él, y con un grito fuerte, el
alzo su puño sobre Shoe, quien estaba levantándose de su silla. Yo gruñía
mientras su puño conectaba y el dolor se disparo sobre su brazo. Sacudiendo la
pulsación de nuestras manos, Mire la satisfacción de Ace cuando Shoe se
balanceo hacia atrás en la silla y se cayó, sus manos estaban en su mandíbula.

¡No! Grite dentro de la mente de Ace mientras el presionaba el botón de


borrar y tiro de la conexión con la pared. No tenía idea de si hubo tiempo
suficiente para cargar completamente, y mientras trataba de tomar el control de
un futuro que no había ocurrido todavía, Ace recogió el teclado y lo estrello
contra la cabeza de Shoe cuando el trato de ponerse de pie.

‚¡Lev{ntate!‛ escuche decir a Ace, tanto en nuestros oídos como en nuestras


mentes compartidas, furiosos. ‚¡Voy a matarte!‛ Quería vomitar, pero estaba
atrapada, tratando de cambiar cosas pero incluso incapaz de hacerme escuchar.
Esto era una maldita pesadilla. Y por encima de ella se cernía el ángel guardián
de Ace, llorando por mí—una resplandeciente nube de plata caía de ella a su
vez hasta tocar el aura de Ace y fue rechazada.

Shoe miro desde el suelo. ‚Contrólate, Ace,‛ el exhalo, tambaleante


mientras se levantaba para pararse frente a eso. ‚Estamos hablando de gente
real. ¿Qué demonios pasa contigo?‛

‚¿Qué me pasa?‛ grito Ace.

‚¡Ace, detente! ‚ Grite, inaudita, pero como en respuesta, una pesada estela
azul lleno mi conciencia. El vértigo me hizo agarrarme de todo, recuerdos y
visiones pasaban desapercibidos como un torbellino. Iba más profundo en el
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 146

futuro, y mi mente se reveló. Con una sensación nauseabunda, y sonando como


una moneda girando hasta detenerse, el azul a mi alrededor se movió y giro
hasta que se instalo un color azul constante. Todavía estaba en la morgue,
todavía en Ace. La policía estaba aquí, y el chico que había encerrado en el
armario estaba de pie junto a los casilleros, parecía desconcertado. Shoe estaba
sentado en el suelo con su cabeza abajo, y los puños en sus muñecas. Y yo me
sentía bastante bien, incluso cuando estuve adolorida en desesperación. Tenía
que salir. Estaba atrapada en la cabeza de Ace – sentir su satisfacción mezclada
con mi dolor me estaba volviendo loca.

‚Así que cuando me entere de lo que él estaba haciendo,‛ me oí decir,


pensando que yo era tan inteligente como para idear este plan, ‚Lo seguí de la
escuela al hospital. El entro, encerró al chico en el armario, y puso el virus en la
computadora de la morgue, ¿No es enfermo? ¿Tratando de matar gente desde
la computadora de una morgue?‛

Los policías estaban asintiendo, y el que sostenía el hombro de Shoe le dio


una mirada asqueada. ¡Eso es mentira! Pensé, sin sentir una punzada en la
conciencia de Ace.

‚Le dije que no,‛ Ace mintió, y Shoe apretaba la mandíbula mientras se
rehusaba a decir algo.

‚¡Solo fue suerte tener el parche, lo puse en su lugar, y entonces él me


golpeo! Rompió el teclado sobre mi cabeza. El está loco, te lo dije. ¡Loco! El
hizo lo mismo en la escuela. ¡Pudo haber matado a alguien!‛

Los policías se voltearon hacia el camillero. ‚¿Eso fue lo que paso?‛ le


preguntaron a el, y el hombre se sacudió y miro sin comprender.

‚No lo recuerdo,‛ dijo él, y reconocí su expresión confundida como una


que había visto en la cara de mi padre a menudo. El me recordó algo, pero la
lógica me decía que era imposible. Mis Carontes habían venido y se habían ido,
dejando vidas rotas a su paso.

¡El está mintiendo! Grite en la mente de Ace, y el ángel guardián en la


esquina levanto la vista de su llanto.

Luego susurre en los pensamientos de Ace, ‚Eres un mentiroso. Un


mentiroso repugnante. Debí dejar que Nakita te cortara.‛ Esto es muy injusto.
Parecía que el parche había entrado, pero de alguna manera, tratando de hacer
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 147

las cosas bien, había puesto a Ace dentro de un lugar perfecto para hacerle más
daño a la credibilidad de Shoe. Especialmente cuando nadie recordaba haberme
visto aquí. Excepto quizás el ángel guardián. Me concentre tratando de cambiar
un futuro que no había ocurrido todavía, pero el matiz azul se superponía a
todo pareciendo dudar. Por un instante, todo fue normal, colores, sonidos, todo.
En ese segundo de claridad, Shoe miro a Ace, pero pienso que él me miraba a
mí, su expresión era desconcertada y reveladora. Y luego…el mundo destellaba
rojo. Con una llave de fuerza suficiente como para hacerme gemir, sentí una
rotura de la estructura del tiempo. Jadeando tome un respiro que era totalmente
mío. No había un golpeteo en mi pecho. Sangre en mis venas – y el agarre de
Nakita en mi era tan fuerte que dolía.

‚Estoy de regreso,‛ susurre, y sus manos sobre mi se sacudieron.

‚¡Madison!‛ exclamo. Y la mire, viendo mi miedo reflejado en sus ojos


plateados. Pero era el recuerdo de la mirada encantada de Shoe lo que no
dejaba mi mente. Un choque saco mi atención de ella, y me di cuenta de que
todo había tomado un instante. Shoe se estaba levantando del suelo, aturdido
pero decidido, sosteniendo su mandíbula. Yo había visto esto antes. Había
vivido esto.

‚¡Lev{ntate!‛ le estaba gritando Ace. ‚¡Voy a matarte!‛

‚¿Madison?‛ dijo Nakita, ayud{ndome a sentarme. ‚¿Estas bien? Nunca


había visto a nadie teniendo una premonición‛.

‚Voy a estar bien.‛ Tambale{ndome sobre mis pies, me agarre de cualquier


cosa para estabilizarme, sujetándome sobre la camilla rodante. Mala elección, y
me tropecé hasta que Nakita me atrapo.

‚Realmente tiene mucho de mí.‛ Mierda, apenas podía mantenerme de pie.

‚Contrólate,‛ Shoe exhalo, tambale{ndose mientras permanecía de pie.


‚Estamos hablando sobre gente real. ‚¿Qué demonios pasa contigo?‛

‚¿Qué pasa conmigo?‛ Ace grito, y mis ojos se dirigieron hacia el ángel
sobre nosotros, justo donde recordaba haberla visto. Ella estaba llorando
mientras todo ocurría otra vez. Yo sabía que ella había visto todo lo que yo vi
durante la premonición. Ella se había bañado en lo divino y podía vivir el
pasado y el futuro todo a la vez. Ella estaba encantada pero no a su voluntad
sino a la de Ron.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 148

Tragando fuerte, me apoye en Nakita. ‚Tu sabes lo que paso,‛ le dije al


{ngel, y el {ngel se volteo hacia mí, sorprendido. ‚Nunca quise acabar con su
vida, y no voy a hacerlo ahora. Destino o elección. Podían ser lo mismo. Como
el cronometrador oscuro, te pido que hagas lo que puedas—sin romper las
limitaciones de tu cargo anterior.‛

Ace había tirado el cordón de la pared, y mientras Shoe trataba de detenerlo


de romper el CD a la mitad, Ace lo empujo contra la pared detrás del escritorio,
siguiendo con un puñetazo en el intestino de Shoe. Exhalando con un soplo de
aire adolorido, Shoe se deslizo fuera de la vista detrás del escritorio. Y aunque
no pude ver más allá de la luz brillante que rodeaba al ángel guardián, yo sabía
que él me estaba sonriendo, bañándome en el primer sentimiento de paz que
había tenido desde que estuve en una isla griega en el otro lado del mundo
acordando tratar de cambiar el mundo.

‚¿Esto es el presente?‛ pregunto ella, añadiendo desconcierto, ‚Algunas


veces no puedo decirte.‛

Yo asentí, y empezó a volar más cerca. El brillo de su exterior calentaba mi


cara. ‚Me gustas,‛ ella intervino. Las palabras hormiguearon a través de mí en
ondas.

‚Tu usas tu amor para ver el mundo. Eso hace todo mas difícil para ti, pero
si fuera fácil, todo el mundo podría hacerlo.‛

Yo no tenía idea de lo que ella estaba hablando, pero la vi volar hacia la


pelea, moviendo el cable del teléfono una pulgada. Como la coreografía de la
música, Ace dio un paso atrás, tropezando con él. Gritando de sorpresa, el cayó
al suelo. Era el descanso que Shoe necesitaba. Surgiendo detrás del escritorio, el
arrojo su cabello fuera de sus ojos, sangre de su mejilla embarro sus manos y
cara. Con un grito furioso, se puso en marcha hacia Ace, y ambos se deslizaron
por las baldosas del suelo, la cabeza de Ace se golpeo contra él.

Sentí el mundo quejarse mientras el destino cambiaba, y tome una


bocanada de aire, sintiendo que la necesitaba.

‚Esto no es un juego, ¡Ace!‛ grito Shoe, ajeno a Nakita y a mí. ‚¡Estas son
personas reales, con familias y niños!‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 149

‚¿Porque debería importarme?‛ Ace gruño, y Shoe se armo de valor y lo


golpeo dos veces, primero en el intestino para hacer que Ace perdiera el aliento
de una sola vez, luego tras la mandíbula con la izquierda.

Ace emitió un pequeño sonido de dolor, entonces se quedo inmóvil.


‚Porque estas hiriendo personas para sentirte mejor,‛ dijo Shoe, tambale{ndose
y caminando hacia la computadora. Detrás de ellos, el ángel vitoreo, sus
lagrimas bañaron a Ace y a Shoe. Algo había cambiado. Yo solo esperaba que
fuera para mejor.

Apoyado en gran medida sobre el escritorio, Shoe conecto el teclado de


nuevo, presionado algunos botones antes de girarse hacia mí con una sonrisa
cansada. ‚Es ahí,‛ dijo él, luego m{s fuerte, hacia Ace, ‚Es ahí, tu costal de
mierda de sapo. ¡Yo no estoy teniendo la culpa de esto! ¡No por mucho!‛

Aturdida mire a Shoe, preguntándome si era verdaderamente un futuro


diferente el que estábamos viviendo, o si Ace iba a torcer de alguna manera esto
otra vez. Dios ayúdame. ¿Así es como será mi vida? Los brazos de Ace se
movieron, aferrándose debajo de el como si fuera a levantarse. Nakita se acerco
a él y lo piso en la espalda para hacerlo retroceder con un gemido. Yo mire a su
ángel guardián, ahora incandescente con un brillo borroso.

‚Nadie est{ tratando de matarlo,‛ ella intervino alegremente, a


continuación se precipito hacia el techo cuando las puertas de la morgue fueron
empujadas para abrir y Barnabás entro. Grace estaba con él, y yo vi con la boca
abierta de asombro cuando los dos ángeles guardianes cruzaban y se
abalanzaban en un extraño saludo de presentación.

‚¿Es eso un parche? ¡Que ha pasado!‛ pregunto Barnabás, mirando a


Nakita, quien estaba ahora sentada sobre Ace, chequeando su esmalte de uñas.
Shoe estaba respirando fuerte, sentado en la camilla y secándose la mejilla con
un pañuelo de papel.

Nakita se encogió de hombros, mirando casi decepcionada porque no lo


habíamos simplemente matado. ‚Madison tiene que hacer las cosas de la
manera difícil.‛

Mi calcetín estaba del otro lado de la habitación, y, soplando mi aliento, me


fui a conseguirlo, sentándome justo allí sobre las baldosas del suelo frío para
ponérmelo. Ni el susurro de un latido de corazón hizo eco en mis
pensamientos, y después de sentir a Ace, me lo perdí. Lo que es peor, estaba
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 150

cansada. Me sentía irreal y delgada, como si parte de mi estuviera todavía


perdida el algún lugar entre el ahora y el después.

‚Tuviste una premonición de nuevo,‛ dijo Barnabás, acercándose, solo


para provocar una confusa parada ante mis pies.

Me había puesto mis calcetines, e hice un gesto para agarrar mis zapatillas,
todavía en la camilla. ‚Fue horrible,‛ admitió Nakita mientras Barnabás
buscaba mis zapatos. ‚Fue como si ella no estuviese allí.‛

‚No me siento bien,‛ dije, mis manos temblaban cuando me puse el


primero, luego el otro calcetín. Mirando las calaveras sobre los cordones, me
preguntaba si yo podría hacer eso. Mil años de estar dentro de la gente,
viéndolos arruinar sus vidas.

No era de extrañar que Kairos hubiera simplemente enviado a sus


segadores a matar a los acusados. Una lagrima se formo y cayo, y, triste, ate mis
cordones con cuidado, en un lazo perfecto. Pensé que habíamos cambiado el
destino, pero era difícil. Realmente difícil. ‚¿Fallaste?‛ Barnabás suspiro
mientras limpie mi ojo, y negué con la cabeza.

‚Creo que lo hemos logrado,‛ dije confundiéndolo m{s.

‚¿Estas bien, Madison?‛ pregunto Nakita. Barnabás llego a levantarme el


ánimo, y no pude hacer otra cosa que tratar de no llorar. No estaba haciendo
muy bien eso, tampoco.

‚Estoy bien,‛ finalmente lo logre, tambale{ndome sobre mis pies y tratando


de imaginar una vida de mierda como esta. ‚Solo voy a volverme loca. Eso es
todo lo que hay que hacer.‛

En un movimiento elegante, Nakita se levanto de Ace. El idiota se


concentro para levantarse, pero una caja de herramientas de la morgue de
alguna manera logro deslizarse de las cercanías del armario, golpeándolo en la
cabeza. Gimiendo, se desplomo de nuevo mientras Grace y el otro ángel
guardi{n se dieron el equivalente {ngel de chocar las manos. ‚Todavía est{
vivo.‛

El ángel guardián de Ace soltó una risita, y yo me pregunte si yo tenía que


hacer algo sobre esto antes de que Ace muriera accidentalmente, pero al
recordar que su odio había hecho eco en mí, decidí no preocuparme por él.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 151

‚¿Es así como se supone debería ser una premonición?‛ Nakita pregunto
mientras tomaba mi otro codo. En mi otro lado, sentí más de lo que vi, Barnabás
se encogió de hombros. ‚No lo sé. Ron nunca me dijo. ¿Qué hay sobre Kairos?
¿El alguna vez lucio tan cansado para ti?‛

Nakita negó con la cabeza, su expresión era preocupada. Suspirando, me


apoye sobre ellos. Se había terminado, pero allí todavía había mucho que hacer,
me había librado de mi archivo, pero allí probablemente arriba había algo. Y el
chico en el armario. Y Shoe…

‚Estoy realmente hambrienta,‛ dije, el recuerdo de estar dentro de Ace me


hizo sentir enferma. ‚¿Podemos ir por una hamburguesa?‛ Nakita se giro hacia
mí. La sorpresa se reflejaba en Barnabás. Suspirando envié una mirada a Shoe y
Ace.

‚¿Todos nosotros?‛ Agregue. ‚Estoy hambrienta,‛ dije, sorprendida de


darme cuenta que era yo. ‚Adem{s,‛ dije en voz baja por lo que Shoe no podría
escuchar, ‚nosotros nos encargaremos de sus recuerdos y dejarlos allí quizás
como amigos o algo.‛

En lugar de contestarme, Barnabás miro alrededor de la morgue. ‚¿Esta el


parche en su lugar?‛ él le pregunto a Shoe. Shoe rodo su silla hacia la
computadora. Su expresión fue aliviada, y se embolso el disco.

‚Si.‛

Barnabás se enderezo, haciéndole un gesto a Nakita para que vaya por Ace.
‚Hamburguesas suena bien para mi,‛ dijo él con una cantidad sorprendente de
entusiasmo. Probablemente no tendríamos ningún problema en salir del
hospital incluso dejando salir al chico del armario. No con dos Carontes y dos
ángeles guardianes. Pensamientos de papas saladas y gaseosa fría hacían agua
mi boca mientras seguía a Barnabás. Ace, y Shoe salieron al pasillo vacio. Yo
estaba cansada, deprimida… y hambrienta. Este no era el final que yo esperaba.

¿Había ganado? Realmente no lo sabía. El tiempo lo diría, supuse.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 152

Capítulo 13
Traducido por Glad

D
ulce y picante, la salsa de tomate goteo de mis papas fritas a la
francesa hasta que las empuje en mi boca y lamí la sal de mis
dedos. "Oh, ¡por los cachorros de Hades!, esto es bueno," hablé
entre dientes mientras probaba el bocado, tratando de alcanzar la gaseosa y
tomando un largo tirón desde la pajita. Las burbujas estallaron a lo largo de mi
garganta, e hice un mmmm de felicidad, mientras trataba de alcanzar otra
fritura. Habían sido cortados longitudinalmente y fritos a la perfección. Metí
otro en mi boca. No había comido por mucho tiempo, y era como si estuviera
muriéndome de hambre.

Repentinamente me di cuenta de que nadie decía nada, y levante mi


mirada. Shoe estaba sentado frente a mí en la cabina. Nakita estaba a su
derecha, junto a ella, estaba puesto cuidadosamente su bolso rojo. Barnabás
estaba a mi izquierda, y al lado de él, Ace estaba sentado en un hosco silencio
contra la pared, con algo de hielo envuelto en una servilleta, y en su cabeza.

‚¿Qué?‛ Pregunté, en vista de que todo el mundo clavaba los ojos en mí.

Nakita dirigió su mirada hacia Barnabás, y luego dijo suavemente, "nunca


te he visto comer cosas de esa manera".

Mi estiramiento en busca de otra fritura se detuvo, y me la comí en dos


mordiscos en lugar de uno. Era tarde, y el restaurant estaba vacío, excepto por
nosotros, la mesera contaba el dinero de la caja, y el cocinero nos miraba
furiosamente a través del hueco en la pared, claramente queriendo ir a casa.
"Tengo mucha hambre," dije, tomando un diminuto sorbo de gaseosa cuando lo
que quería hacer era tomar en grandes sorbos. "y cansada". Sin latidos de corazón.
Ninguno en absoluto.

A mi lado, Barnabás se reclinó en el asiento, tan casual como si estuviera


revolviendo el hielo de su ilesa bebida. "Estas siendo un poco vulgar, Madison".

Le miré, notando una suave envidia en su actitud cuidadosamente relajada.


‚¿Celoso?‛ Pregunté agriamente.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 153

"Algo," él murmuró, mirando hacia arriba donde Grace y su amigo nuevo


estaban charlando sobre la lámpara, sus alas ardiendo como dos globos de
softball-o al menos, eso era lo que yo y mis Carontes podíamos ver.

Comiendo otra fritura, hice una mueca cuando una mancha de salsa de
tomate golpeó mi bata de laboratorio. "Pienso que es por mi visión del futuro,"
dije mientras me limpiaba con una servilleta. "Volví a la vida, o al menos tuve la
impresión de haber regresado cuando estaba en Ace". Le miré, sintiendo como
mi cara se retorcía en un gesto de disgusto. "Eres alguien que me dio mucho
trabajo, ¿lo sabias?‛

El chico me sonrió sarcásticamente, y, escondiéndome detrás de mi


servilleta, reprimí un bostezo. "Mi mente debe de haber recordado lo que es
estar hambrienta. Y cansada. ¿Qué hora es?‛

Sin mirar, Barnabás dijo, "medianoche".

"Mmmm". Estrujé la servilleta y la dejé caer sobre las papas fritas. Aun tenía
hambre, pero no quería parecerme a un cerdo. ‚Tenemos que ir a casa‛. No era
muy tarde aún, como para llamar a mi mamá como lo había prometido, ella
estaba en la escuela nocturna o tal vez no. Ella tenía horario nocturno como un
vampiro.

Mi mirada fija volvió hacia Ace, quien estaba encogido y silencioso en una
esquina de la cabina. Él no había dicho nada desde que había despertado en su
camión. Ahora que habíamos arreglado las cosas, sabíamos que ya no habría
problemas en el hospital la mañana siguiente. Nadie lo sabría nunca. ¿Que iba a
pasar con Ace ahora?, era una incógnita.

Shoe, por otro lado, me sonrió mientras cuidadosamente toco su


mandíbula, la cual ahora mismo lucia de un feo púrpura.

‚¿Estar{s bien?‛ Le pregunté, y él hizo una mueca.

"Voy a recibir una buena reprimenda por destrozar las computadoras de la


escuela," dijo, mirando hacia Ace. "Pero yo sabia que eso iba a suceder. Estar
fuera de casa, cuando ya es medianoche es algo que no planificaba. Pero en este
punto, ya no me importa"
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 154

Todos nosotros miramos hacia Ace, quien nos ignoró completamente. La


mesera levanto la mirada y nos examino, aclarándose la voz mientras iba hacia
la cocina a hablar con el cocinero.

Miré el plato de papas fritas, y después me comí una, sintiéndome culpable


sin razón alguna. "Barnabás, tal vez podamos detenernos en la Casa de Shoe de
camino a casa y podamos hacer que su mamá y papá piensen que él a estado
acurrucado en su cama," sugerí.

Barnabás asintió, luciendo un poco demasiado casual para mi comodidad.


Engañoso, casi.

"Eso sería genial," Shoe dijo nerviosamente, alejándose poco a poco de


Nakita mientras ella comenzaba a mascullar sobre matarles. Pero la
incomodidad de Shoe parecía ser generado por la astuta conducta de Barnabás,
y no de Nakita, y me pregunté si él estaba preocupado por si yo no iba a
cumplir mi palabra y le borraría sus recuerdos, también.

Lanzando su fajo de servilletas húmedas, Ace se sentó más recto. "Todos


ustedes apestan," dijo fuertemente. ‚¿Arreglaras todo, incluso el hecho de que
el estuvo fuera hasta medianoche?‛

‚¡Silencio!‛ Nakita susurro, apoyándose en la mesa. "Tu deberías de estar


muerto‛.

‚¡Cállate!‛ Él exclamó, su ceño fruncido. ‚¡Loca Pollita!‛

‚¡No me llames asi!" Ella dijo, comenzando a levantarse, pero cuando el


ángel de la guarda hizó sus alas zumbar, Nakita se sentó con un resoplido.
"Eres afortunado, humano," ella murmuró. "Afortunado".

Afortunado no era la palabra que me gustaría aplicarle a Ace, pero lo era. Él


había intentado hacerse un nombre a costa de matar personas y culpar a Shoe
por eso, y la única manera en la que él se metería en líos ahora mismo sería si
también Shoe estaría en grandes problemas. Estaba totalmente a favor de ser
honesto y ser responsables de nuestras culpas, pero a veces, la mayor parte del
tiempo no era asi.

Suspirando, me deslicé hasta el borde el asiento y me levante. Era hora de ir


a casa, y dejé caer mi cabeza mientras miraba la bata de laboratorio. Me daba
muy bien, aun con la salsa de tomate. Tal vez podía iniciar una tendencia nueva
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 155

en la escuela. Aun no había hecho nada realmente llamativo que me ayuadara a


sobresalir. Aparte de estar muerta, es decir, y nadie más que Josh sabía eso.
Habría sido agradable si el me hubiera ayudado esta noche, y le echaba de
menos.

"Tenemos que irnos," dije suavemente, dándoles a mis papas fritas una
última mirada nostalgica.

Barnabás recobró la compostura, y se puso de pie cuando Nakita lo hizo.


Ambos intercambiaron una miraba de complicidad, mientras saliamos de la
cabina. El color plateado de sus ojos se había ido, y yo me puse al frente de
Shoe. "No a Shoe," dije, extendiendo mi mano para prevenirles de borrar su
memoria.

Barnabás puso sus ojos en blanco. "Madison y…‛ el empezo, pero una
picazón sutil en mi mente me conmociono. Barnabás también lo sintió, así
como también Nakita.

"Habia una vez un guardián llamado Ron," Grace dijo desde los faroles,
"cuyo karma era tan aburrido. Él llegó demasiado tarde; algunos dicen que fue
su destino. Pero solo creo que el es estupido, por sí mismo".

Era cierto que eso no rimaba, pero aun asi me gusto. ‚¿Ron viene?‛ Dije,
molesta. ¿Qué quiere? ¡Esto ya acabó!

‚¡Pero estamos escudados!‛ Nakita dijo, claramente desconcertada.

"Aparentemente no lo estamos lo suficiente," dijo Barnabás sarcásticamente,


y me sentí aun más cansada. Demasiado. Ellos empezaron a discutir de nuevo.

"No dejaré que se entrometa con ustedes", dijo Grace, y sonreí hacia ella,
una bola de luz salió desde la farola y se poso junto a mi. Yo sabia que mi cara
todavía mantuvo mi expresión agradecida cuándo Shoe silbó y seguí su fija
mirada hacia la puerta principal, donde Ron estaba de pie en el interior como si
él hubiera estado allí todo el tiempo. Paul estaba de pie junto a él, y las
campanas no habían repiqueado cuando ellos entraron.

Ron lucia furioso, con una mano entre los pliegues de su túnica afluente,
mientras el la ponía en su cadera y me hacia un gestó como si yo fuera un niño
travieso. Aleje mi mirada de él, posándola sobre Shoe, quien aun estaba
sentado. Barnabás se movió hacia mi derecha, Nakita hacia mi izquierda. La
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 156

mirada fija de Ron permaneció mucho tiempo sobre sus propias ropas blancas
tradicionales de un Caronte Negro, y Nakita alzó su barbilla.

"No lo habría creído si no lo hubiese visto," Ron dijo, sus ojos ingiriendo mi
bata de laboratorio y mis amarillas zapatillas con calaveras. "La guadaña ha
terminado. La marca esta segura. Bueno, él recibio una paliza, pero está vivo,"
agrego, mirando hacia arriba, hacia los dos ángeles de la guarda. "He ganado.
Todo ya acabó. Perdiste. Ve a casa, Madison".

Tomé una lenta respiración para encontrar mis palabras. Marca, pensé,
decidiendo que aquella etiqueta que se le daba a las personas era degradante.
"Ace tiene un nombre," dije suavemente, preguntándome lo horrible que me
veia cuando noté que Paul clavaba los ojos en mí. "Hola, Ron," finalmente dije
en voz fuerte. "Acercate un poco más, y voy a patearte en tu trasero. ¿Qué
quieres? Como ya has dicho, ganaste".

El hombre pequeño bufó, entornando los ojos con recelo por primera vez,
hacia los dos ángeles de la guarda, después hacia mis Carontes quienes me
flaqueaban, y finalmente hacia Ace quien estaba detrás de nosotros. "Los
serafines me enviaron a ajustar tu amuleto," él dijo, sorprendiendome. "Yo. ¡Ja!.
Imaginate. Aparentemente estas casi tocando la divinidad".

¿Yo estaba casi tocando lo divino? Eso fue exactamente lo que había sentido.
Tal vez el infierno por el que había pasado para poder ver el futuro, era lo
normal.

Al ver que yo lucia como alguien que se había tomado el valor de una
semana de píldoras estúpidas, Ron caminó a grandes pasos entre las mesas
vacías con su habitual rapidez, haciendo un alto con una brusquedad cómica
cuando Barnabás elevo una mano de alerta y Nakita repentinamente saco su
espada. La mesera solto un grito agudo amortiguado, mientras se zambullia en
la parte trasera y balbuceaba hacia el teléfono.

Esto estaba cada vez mejor.

Ron se detuvo, su expresión lucia frustada mientras evaluaba la situación.


Barnabás serenamente cruzó sus tobillos y se apoyó contra la mesa, luciendo
muy bien en su camiseta casual y sus jeans negros. "Tu no vas a tocarla—
Chronos," el Caronte dijo serena y suavemente, su voz cargada con amenaza.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 157

Las arrugas de Ron crecieron más profundas. "Desiste. Su predecesor está


muerto. ¿Quién más va ha ajustar su amuleto? ¿Tú? Estoy aquí como el
Cronometrador Superior, bajo las órdenes de los serafínes. ¿Crees que violare
las normas? ¿Cómo crees que he podido encontrarles si no?, Ustedes están
escud{ndose‛

En mi lado contrario, Nakita echaba humo de cólera, su agarre en la


empuñadura de su espada se cerró herméticamente. "Podrías hacerlo, y despues
evadir toda responsabilidad," ella dijo, y Paul, casi olvidado, avanzó un poco
más.

"No eres Superior, Ron. Solo eres más antiguo," dije, para luego mirar hacia
Paul, dudando. Él me había ayudado hasta que Nakita le había golpeado. Mi
suposición era que él iba a tener un ojo morado por la mañana. Y nunca me
creería otra vez. Sopesé las posibilidades de que Ron solo había encontrado la
oportunidad de hacer algo en contra mia, asi como también la posibilidad de
que realmente mi amuleto no estaba afinado correctamente. No queria pasar a
través de ese infierno otra vez, y no queria que un serafín bajará para arreglarlo.
Ron no lucia ni cansado o afligido, y él también había brillando
intermitentemente y había saltado hacia el futuro. Claramente algo estaba mal
conmigo—otra vez.

"Tienes razón; es m{s…" dije, quit{ndome el amuleto y lanzándolo hacia


Ron.

La piedra chocó violentamente contra la mano de Ron. Barnabás se rigidizó,


y Nakita casi tuvo un ataque, cayendo a mi lado y encontrando una posición
agresiva. Era una maniobra atrevida de mí en parte, pero estaba tratando de
probarle a Ron que no estaba asustada de él. Aunque si lo estaba. Nunca lo
habría hecho si no tuviera a dos carontes y dos ángeles de la guarda por ahí.
Sabia que no podría soportar otra mirada a las estrellas, en bruto y sin filtrar,
viendo directamente lo divino. "Simplemente arréglelo," dije con un suspiro,
sintiéndome desnuda sin mi amuleto. "No puedo soportar más de dos vistazos
al futuro".

‚¿Dos?‛ Ron dijo, el amuleto quedo olvidado entre sus manos. ‚¿Hubo m{s
de uno?‛

Le sonreí, labios cerrados. Desde atrás, podía oír una conversación


frenética, pero al menos el cocinero no había salido con una escopeta cargada.
Sin embargo. Barnabás y Nakita intercambiaron una mirada, y, suspirando
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 158

dramáticamente, la Caronte Oscura se escabulló hacia la puerta de la cocina.


Ella vaciló, para después disolver su espada. Lanzo su pelo hacia atras, y
empujo la puerta y entró. Los gritos rápidamente se dieron, y todos esperamos
por que los golpes llegaran antes de que nos miraramos el uno al otro.

Mirando a Barnabás, Ron avanzo poco a poco, entregandome mi amuleto.


"Tiene que llevarlo puesto para que pueda ajustarlo," él dijo.

Esperé a que Nakita saliera antes de que diera un paso hacia Barnabás. Le
di una rápida mirada a Shoe quien me fruncia el ceño. Él lucia asustado.
Conteniendo mi respiración, arrollé el cordón alrededor de mi cuello, después
me puse rigida cuando Ron puso la piedra entre sus dedos. Había confiado en
él una vez. Ya nunca más.

Mi mandíbula se mantuvo relajada mientras una luz rojiza se filtró de mi


amuleto. El leve dolor de cabeza del que aun no me había dado cuenta que
tenia desaparecio, y exhalé, teniendo la impresión de que ya no necesitaba
mantenerme completa.

La mano de Ron se alejó de mi amuleto. Barnabás se aclaró la voz,


claramente queriendo alejarme de él, pero no lo hice, y fue Ron que se movió
primero, con una nueva cautela en su postura. "Gracias," dije secamente.
"Aprecio esto".

Viéndose incómodo, Ron miró a Paul, y después a Shoe. "Ajusté tu ‘roce con
lo divino’," él dijo bruscamente. "Mi predecesor estaba vivo. El tuyo no. Tendras
ciertos problemas". Limpiándose las manos, él retrocedio. "No sé lo que
buscabas haciendo esto. Haz causado un desorden sangriento. ¿Cuántas
personas necesitan que sus memorias sean ajustadas?‛

Shoe arrastró sus pies, y yo cambié de posición para esconderle. "Algunos,"


dije. "Y unos cuantos más ahora que te has entrometido de nuevo. Podemos
encargarnos de ello. Y ¿Qué es eso de un desorden sangriento? Me parece que
lo arreglé. Nadie murió".

Paul avanzó pausadamente para estar parado al lado de Ron mientras el


hombre mayor me señalaba groseramente. "Tu trabajo te hace una asesina,
Madison," él dijo, y Barnabás se rigidizó. "Quizá no con tus propias manos, pero
sí por tus acciones. Solo trastas de calmar tu conciencia, intentando salvar a las
personas cuyas almas aun no están en peligro, asi sólo enredas las cosas y es un
ejercicio en futilidad".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 159

¿Un ejercicio en futilidad? Pensé, levantando mi barbilla mientras daba un


paso al frente. "He muerto una vez, y creeme, la gente que acabamos de salvar
no habría querido eso". Yo estaba muy cerca de su cara, y salté cuando
Barnabás tiro de mi, hacia atras. "Salvamos las vidas de tres personas," dije
desde la seguridad de su agarre. "Cuatro si no cuentas a Shoe, debido a las
acciones de Ace. Todos ellos van a sentir el sol en sus caras, mañana".

Mierda, estaba a punto de llorar de nuevo.

"¡Eso es bueno para mí!‛ Terminé acaloradamente, enjugándose las


lágrimas y no me importaba si Ron las vio.

Y yo me sentía bien. Claro, estaba el problema de la vista al futuro, pero no


me parecían una pesadilla insoportable, como la noche de mi muerte. Mi
amuleto solo necesitaba ajuste. Gracias, Dios mío, por enviar a Ron.

"Tal vez era tu hora y tu lo echaste a perder todo," Ron dijo mientras posaba
su mirada en las ventanas teñidas por la oscura noche, claramente pensando en
salir.

Le sonreí, pensando en todos sus años, que parecían no haberle servido


para nada. Tal vez por eso, yo estaba predestinada a convertirme en la
Cronometradora Oscura. "Eso es ‘destino’, Ron, y tu no crees en el destino. ¿O
si?‛. Su atención regresó desde el estacionamiento al darse cuenta de que
básicamente había dicho lo que un serafín le había dicho, no menos de dos
meses atrás. "Estupendo, Ganaste," dije. "Felicitaciones. Estoy segura que todo
esto, es algo inútil para ti, que se acumula en algún rincón. Tienes un ángel y
todo. Nada puede impedirte de que te vayas. Tenemos una buena cantidad de
limpieza que hacer". Mis pensamientos fueron hacia las dos personas en la
cocina. "Quitar recuerdos a algunas personas," agregué, y Shoe se aclaró la
garganta detrás de mí.

"El destino es una excusa," Ron barbulló. "Tu no sabes que personas serán
marcadas. Ace podría haber cambiado algún día sin todo esto".

‚¡Equivocado!‛ Ladré, y la expresión de Paul se quedo pensativo. "Pero no


voy a discutir contigo. Aceptalo o no, yo creo en elección tanto como tu. Pero
ese montón de estiércol," dije, señalando hacia Ace, quien oía todo, pero hacia
caso omiso de nosotros, porque solo cuidaba sus heridas, "no iba a cambiar sin
alguna fuerte intervención. Ahora podrá hacerlo, pero no de la manera de la tu
le dejaste, con un ángel de la guarda y con una tarjeta libre para matar".
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 160

Los oídos de Paul se pusieron rojos. Ron se giró hacia él con uno sonido
bajo deslizamiento de tela.

‚¿Te iras ya?‛ Dije, retrocediendo hacia Barnabás. "llevate contigo a tu


aprendiz espia" agregue.

La boca de Paul se abrió involuntariamente ante mis palabras cáusticas,


pero le guiñé el ojo cuando Ron apartó la mirada, y Grace soltó una risita.

"Deberias de demostrarle más respeto. Él sabe más que tu", Ron dijo
mientras se acercaba a Paul, y Barnabás bufó.

"Yo creo que él sabe más que tú, Ron," le dije. "Vete ya. Y no dejes que la
guadaña te pegue en tu camino".

Nakita se movía nerviosamente a mí lado, pero no me importo demasiado,


mientras Ron se daba la vuelta. "Vamos, Paul", dijo en una voz baja, peligrosa.

Repentinamente, Nakita barbulló, "Siento haberte golpeado Aprendiz


Cronómetrador," y ambos Barnabás y yo nos sacudimos. Ella estaba roja, y ante
nuestra apariencia tajante, ella sumó, ‚¿Qué? Lo siento. ¿No puedo
disculparme?‛

Ron estoico y silencioso, simplemente desaparecio. Paul, sin embargo,


estaba aun ahi. Sus sandalias rayando la baldosa, Paul miró el espacio vacío a
su lado donde Ron había estado. "Um," habló entre dientes mientras su atención
regresaba a nosotros. "Gracias, Nakita. Está bien".

"Sabes que solo lo dije para librarte de una reprimenda, ¿verdad?‛ Dije, y
Paul tocó su nariz, para después sonreir y desaparecer en una línea brillante de
luz.

Con exhalación de alivio, Shoe se sento de nuevo pesadamente,


murmurando.

Barnabás tomó su lugar también, pensativo. ‚¿Notaste que el amuleto del


Cronometrador Naciente es el mismo que el mío?‛ preguntó.

‚¿En serio?" Dije, pero entonces me golpeo la rara pregunta de Barnabás y


me giré hacia él. ‚¿es tan importante?‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 161

Alarmado por sus pensamientos, Barnabás me busco con la mirada. "No


debería de tener ese espectro rojo, como el mío". Los ojos del Caronte
aterrizaron en los míos. "Apuesto a que Ron no está muy contento con eso".

Mis labios permanecían entreabiertos mientras me preguntaba lo que eso


podía significar, pero Barnabás se aclaró la voz y miró hacia la cocina.
"Necesitamos irnos. Nakita, ¿terminaste con el cocinero y la mesera?‛

Nakita tomó una foto de la polvorienta lampara, sujetando la cámara en un


ángulo muy extraño. "Ellos están bien", dijo mientras ella miraba la pantalla.
‚¿Dónde est{ su cartera, Madison?‛ Ella preguntó. ‚¿aún en el camión?‛

‚¡Oh, sí!‛ Dije, volviendo mi atención a mi plato de comida. "Mi teléfono


está allí, también". Pero cuando miré hacia las doradas papas, crujientes, mi
alcance a por ellas vaciló. Lentamente mi sonrisa se evaporó, reemplazada por
un sentimiento de desesperación.

‚¡Ya no tengo hambre!‛ Gemí, y Nakita parpadeo ante mí. ‚¿No lo


entiendes?‛ grité, mirando hacia mi amuleto. "Comía porque mi amuleto no
estaba bien. ¡Ron lo arregló, y ahora ya no tengo hambre!‛

‚Gracias a Dios por los pequeños favores", Barnabás murmuró mientras se


levantaba. "Realmente te portaste muy vulgar, Madison".

Deprimida, me hundí en mi asiento. "Pero me gusta comer," dije


tristemente. ¡Mierda, no era justo! Infeliz, manoseé una fritura. Gracé se dejó
caer, calentando mi mano mientras me ofrecia condolencias de la única manera
que podía _ hasta que pensó en un poema.

"Habia una vez, una chica que le gustaban las frituras," Grace empezó, y
Barnabás hizo un sonido exasperado.

"Tu cartera, ¿Madison?‛ Nakita ofreció.

"Sí, correcto". Mascullé, y me puse de pie.

"Lo siento, Madison," Shoe dijo, claramente sin comprender por qué las
frituras eran tan importante para mí, pero comprendía lo molesta que estaba.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 162

‚Está bien‛. Avance cabisbaja, dirigiéndome hacia la puerta, detenidome


cuando mi amuleto pareció volverse pesado, casi caliente, una idea repetina, me
detuvo. ¿Cómo sabia Nakita de que mi cartera estaba en el camión?

Sospechosa, gire de regreso a la mesa, mi suposición estaba confirmada


cuando vi los ojos plateados de Barnabás.

"¿Qué?—¡espera!‛ Exclamé, tropezando con la mesa. "¡Shoe! ¡No le mires!‛

La cabeza de Barnabás se giró hacia mí. Una gota de miedo se deslizo a


través de mí mientras le miraba, plata resplandeciendo como una luz sagrada.
A través de la mesa, Shoe quedó boquiabierto, quebrantando el agarre que
Barnabás tenia en él y dejando caer su cabeza.

Ace ya estaba con la mirada perdida, sus labios se abrieron, claramente aun
debajo de la influencia de Barnabás.

‚¡Madison!‛ Barnabás ladró, sus ojos todavía resplandecian mientras Shoe


se frotaba su cara y pestañeaba. Jalé a Shoe y le saque fuera de la cabina. "No a
Shoe," dije. "le prometí que él podría recordar".

La mandíbula de Barnabás se presiono y frunció el ceño. "Madison—‚


murmuró, sus ojos regresando a su color marrón.

"Sí, ese es mi nombre," dije acalorasamente. "Madison. Y digo que Shoe


puede recordar, soy tu jefa".

Grace emitió un largo oooooh, mientras el segundo ángel de la guarda en la


lampará se mantuvo quieto y en silencio, sus alas aquietándose hasta hacerla
desaparecer. Los ojos de Barnabás se estrecharon mientras volvia a sentarse y
me miro de arriba a abajo. "No, no lo eres", él dijo, y Nakita arrastró sus pies
detrás de mí. "Soy sombrío. En cualquier momento que yo quiera, estare fuera
de aquí".

Él no lo haría, pensé, entrando en pánico. "Oh, ¿sí?‛ Dije, casi desafiándole.

"Sí," Barnabás dijo, claramente infeliz.

Al lado de mí, Shoe parecia asustado. Tomé una lenta respiración, tratando
de encontrar alguna forma de enajenar a Barnabás. Él había estado allí cuando
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 163

yo habia muerto, habia intentado salvarme, creía en mí. Yo confiaba en él, y él


era probablemente la única persona que realmente podía comprenderme.

"Sí," dije, suavemente. "Ok. Lo siento. Tienes razon. No soy tu jefa". Recurrí
a Nakita, viendo sus ojos anchos y asustados. "Nakita, tampoco lo soy de tí,
pero ésta es mi guadaña, y quiero que Shoe recuerde".

"Sí, lo eres," Nakita dijo inmediatamente, lo confianza de su voz hizo que


Shoe frunciera el ceño. "Estoy bajo juramento ante te voluntad y licitación".

Yo estaba taaaaaan contenta de que Ace estuviera fuera de sí. Era bastante
embarazoso que Shoe estuviera escuchando esto. "Yo siendo tu jefa, no es un
mundo en el que quiero vivir," dije, intentando hacerla entender. Implorando,
me volví a mirar hacia la mesa. "Barnabas, te pedí que dejarás que Shoe
recuerdará esta noche. Por favor".

"No te lo prometí," él dijo apretadamente, pero la cólera dirigida hacia mi,


se había ido.

"Por favor," hice otro intento.

Barnabás pareció volverse más pequeño mientras exhaló, sus manos


gesticulando vagamente. ‚¡No puedo dejarle ir sabiendo lo que sucedió! ¡Eso no
se hace!‛

‚¿Por qué no?‛ Pregunté a secas. ‚¿Cómo se supone que las personas hagan
un cambio en sus vidas si no lo recuerdan? ¿Sueños? Esas son tonterias".

‚¿Tonterias?‛ Nakita repitio, claramente confundida.

"Quiero que Ace y Shoe, que ambos, recuerden" me decidí repentinamente.


"No quiero recuerdos falsos para ninguno de ellos".

Barnabás miró a Ace, quien todavía todavía parpadeaba estúpidamente.


"¡No!" Él exclamó, señalándome con el dedo, lo cual hizo que los ángeles de la
guarda susurren entre ellos, apostando con cómo ésto iba a terminar. "No va a
pasar," él añadió en voz alta, mirando encolerizadamente hacia ellos, cuando
soltaron unas risitas. "Son las reglas, Madison".

Clavé los ojos en él, los dedos de una mano haciendo un lento sonido en
contra de la mesa.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 164

"Mirame todo lo que quieras," dijo Barnabás, sin mirarme. ‚Borrare sus
recuerdos".

Tomando del codo a Shoe, lo moví hacia mi espalda.

"Uh, ¿Barnabás?‛ Nakita finalmente dijo. "No creo que decirle ‘no’ al
Cronometrador Oscuro sea una buena idea, aun si ella está equivocada. Ella
eventualmente podrá detener el tiempo".

Detrás de mí, Shoe dijo suavemente, "Quiero recordar".

"La memoria es todo lo que tenemos," dije, intentando hacer entender a


Barnabás. "Por eso es que hacemos las elecciones que hacemos. ¿Cómo esperas
que alguien cambie si sofocas el pasado en una mentira?‛

Lentamente la mandíbula de Barnabás se aflojo, y sentí una agitación de


victoria. "Esto va a causar problemas," advirtió, y me enderecé, sonriente.

‚¿Así que…qué?‛ Dije impertinentemente. "Shoe no dirá nada". Me gire


hacia él. ‚¿lo harás?‛

Shoe sacudía su cabeza, todavía preocupado. "Nadie me creería. ¿Muerte?


¿Los ángeles de la guarda? ¿Cronometradores? Me encerrarían‛.

Desde mi otro lado, Nakita persuadió con ruegos, "Los Cronometradores


cambian por una razón, Barnabás. Eso es todo lo que Madison parece hacer.
Cambio, cambio, cambio".

Barnabás frunció el ceño otra vez. ‚S{calo de aquí," él masculló, y, euforica,


agarré el brazo de Shoe, preguntándose si Barnabás sólo estaba
tranquilizandome, y planificaba regresar más tarde, cuándo yo no lo supiera.

‚¿Qué pasará con Ace?‛ Pregunté, sintiendome diez pies más alta.

"¡Fuera!," Barnabás dijo apretadamente. "Tienes a Shoe. Ace no es una


opción".

Tomé aire para discutir, entonces vacilé cuando el ángel de la guarda de


Ace rodeó a Grace dos veces y voló hacia mí, susurrando, "Grace dice, que
habia una vez un niño en un restaurant quien pensó que nadie más podría ser
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 165

bueno. Él no era bueno tampoco, casi perdió su mente, hasta que un ángel en
sus recuerdos se metio'".

Oh, ¿En serio?

Barnabás levantó sus cejas suspicazmente, y, rehusándose a contestar su


pregunta tácita, comencé a retroceder, tropezando cuando nuestras miradas
rompieron contacto. "Vamos," le susurré a Shoe. "Tengo que ir por mi bolso".

Agarrando su mano, le jalé para la puerta.

‚¿Qué pasar{ con Ace?‛ Él preguntó, mirando hacia detrás de él hasta que
giro su cabeza.

"No mires. Pienso que Ace estará bien, " dije mientras la puerta tintineaba y
Nakita suspiró fuertemente. "Su ángel de la guarda va a bloquear a Barnabás".

Shoe se giro para mirar a través de las ventanas de vidrios. ‚¿Estás segura?‛

Estaba más frío aquí afuera, y me alegré por tener la bata de laboratorio y
esperé. No tenía frio—pero si hubira estado viva, seguro que lo hubiera tenido.

"Me han dicho que los querubines se sientan junto a Dios," dije,
contemplando las estrellas y sonriendo. "Creo que un ángel de la guarda puede
vencer las habilidades de Barnabás con una vara".

La tos de Shoe atrajo mi atención, y en el zumbido de la luz de seguridad,


sorprendida, mire a sus ojos. ‚¿En serio?‛ Él tartamudeó, mirando hacia el
comedor y luego mirándome de nuevo a mí. "Querubines, ¿eh?‛

Me encogí de hombros. "Grace lo es. Simplemente prométeme que no diras


nada alrededor esta noche".

Cabisbajo, él sonrió rayando con su pie la acera quebrada. ‚¿Quieres que yo


mienta?‛

No pude evitar sonreir. "Bueno, soy la Cronometradora Oscura".

Una punzada de dolor tiró a través de mi mente, y mi amuleto se torno


caliente, para después estar frio. Era Barnabás usando su amuleto, y miré hacia
dentro mientras el se inclinaba sobre Ace. No me soprendi cuando Ace
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 166

despertó, y su mirada hueca se convirtió en odiosa, y dijo, "¡Puedes irte al


Infierno, Caronte!‛

Barnabás miró por la ventana hacia mí, enojado. "¡Madison!" se quejó.

Nakita se rió, el sonido traspaso el vidrio. "¡Te lo dije! No te entrometas con


ella".

Sonriendo, me dio la espalda. Shoe estaba en frente a mí, sus manos en sus
bolsillos. "No quiero olvidar esto," Shoe dijo tristemente. "No quiero olvidar
nada de esto".

"No lo harás," le dije muy segura, y con una idea repentina, me apoyé
contra la pared de ladrillos del restaurante para desatar los cordones de mi
zapatilla. Shoe me observo muy confundido hasta que arranque uno de mi
zapatilla amarilla con un sonido áspero. "Aquí," dije, dándoselo a él. "Para que
lo recuerdes todo". Estaba jadeante, y eso que no necesitaba respirar. ¿Y si
pensaba que yo era extraña?

Pero Shoe sonrió, y exhalé en el alivio. "Gracias," dijo, tomándolo. "Yo, um,
no tengo—un momento," dijo, buscando en su bolsillo. "Aquí," él dijo, dándome
un cupón del Chicken Coop. "No espero que lo uses," él dijo, con su rostro muy
enrojecido. "Pero la única otra cosa que tengo ahora mismo, es mi licencia de
conducir".

Sonreí, mirándolo bajo la luz tenue. "Adiós, Shoe," dije mientras regresaba.
"Ten una gran vida. Se bueno. Haz buenas elecciones". Cogí el cupón. "Gracias".

Él cerró su boca, luciendo avergonzado y agradecido al mismo tiempo. "Lo


intentaré," finalmente dijo, entonces frunció el ceño mientras miraba a Ace a
través de las ventanas. "No va a ser fácil".

Me reí mientras comenzaba a caminar hacia el camión de Ace, con cada


paso me sentía mucho más grande de lo que realmente era. "Si ser bueno fuera
fácil, todo el mundo lo haría‛.

Shoe asintio. Haciendo gestos con las manos torpemente, él dio vuelta y
comenzó a caminar por la acera oscura, con un ritmo lento, pero ganando
confianza con cada paso que daba hasta levantar su cabeza. Lentamente la
oscuridad le tomó hasta que solo el sonido de sus zapatos hicieron eco se
desvaneció y no hubo nada.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 167

Lo vi de nuevo, bajo un faro de luz, y a continuación se había ido de nuevo.

Estaba muy satisfecha, mientras jalaba bruscamente la puerta del camión de


Ace y cogía mi teléfono y mi cartera. El suave cuero aun estaba caliente debido
al viaje hasta aquí, e hizo un golpe incómodo cuando le aparté de un empujón
en un bolsillo de atrás. La puerta chilló cuando la cerré de golpe. A lo lejos, oí
un debil, "¡Adiós, Madison!"

Feliz, me apoyé contra el camión y me quede mirando las estrellas normales


y blancas mientras esperaba a Nakita y Barnabás quienes terminaban de
amenazar a Ace. Si, Barnabás podría estar disgustado conmigo, pero él me
llevaría a casa, refunfuñando totalmente. Y si el no lo hacia, Nakita lo haría.
Mejor aún, él estaría en mi techo mañana para decirme lo que pude haber hecho
mejor. Nadie había muerto esta noche. Nadie moriría mañana—al menos, no
antes de que su tiempo terminara. Shoe iba a recibir una buena reprimenda en
su escuela, pero él ya sabia eso, incluso antes de que destrozara las
computadoras de la escuela.

Nakita estaba comenzando a entender—creo yo—aun cuando habia


fracasado en su intento por salvar el alma de Ace, tomándolo antes de tiempo.
Ace aun era un dolor en el culo, pero tal vez había aprendido algo. Paul
pensaba. Y yo— estaba agradablemente cansada.

Tal vez esta era una buena noche después de todo.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 168

Epílogo
Traducido por Carlos

‚¡Madison!‛

Fue un grito aterrorizado, y mis ojos se abrieron repentinamente a la


sacudida fuerte de mi hombro.

‚¡Qué!‛ Grité de regreso, viendo a mi pap{ de pie sobre mí, el miedo en su


cara. Estaba en mi cama; el sol estaba brillando adentro. ¿Había estado
durmiendo? No había dormido en casi tres meses.

El alivio cayó en cascada sobre la cara de mi papá hasta hacer que sus pocas
arrugas aparecieran m{s intensas. ‚Pensé que estabas…‛ comenzó, luego
visiblemente cambió de opinión mientras soltaba mi hombro y se enderezaba.
‚Es tarde,‛ dijo en lugar de eso, sonaba avergonzado. ‚Para la escuela,‛ agregó,
y yo sonreí. No había pensado que él quería decir es tarde para la muerte, pero
no obstante, probablemente me había visto muerta, tumbada allí. No
respirando. No es extraño que él me haya sacudido.

‚¿Qué tan tarde?‛ Pregunté mientras me incorporaba, parpadeando. No


podía creer que realmente había dormido. Tal vez el destello del futuro lo había
provocado. Había tomado bastante de mí.

Exhalando, mi papá inspeccionó mi habitación. ‚El desayuno est{ listo,‛


dijo en lugar de contestarme.

Muy mal no tenía hambre.

Comencé a levantarme, entonces me congelé cuando él recogió la bata de


laboratorio que había envuelto sobre mi silla de escritorio. La etiqueta del dedo
del pie de Jane Doe se estaba asomando desde el bolsillo, y me aterroricé.
¿Cómo iba a explicar que una bata de laboratorio claramente profesional con el
nombre Marty en ella estaba más allá de mí?

‚Dime que esto es kétchup,‛ dijo suavemente, toqueteando la tela


manchada, y yo sonreí.
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 169

‚Es kétchup. Tenía algunas pap{s fritas después de escuela,‛ expliqué, y él


suspiró. ‚¡Lo siento! ¡Me dio hambre!‛

Él puso mala cara, cubriendo eso sobre mi silla de escritorio, justo al lado de
mis mallas rotas.

‚Madison‛ dijo, agarr{ndolas r{pidamente. ‚¿Qué le hiciste a tus naylons?‛

‚Las corté. ¡Todas las est{n usando así!‛ Oh, hombre. No estaba libr{ndome
de esto.

‚Estas estaban completamente-nuevas‛ mi pap{ se quejó en voz alta,


sacudiéndolas.

‚Cielos, pap{…‛ me quejé, orgullosa de mí misma de no estar aterrorizada.


Mucho. ‚¿Jam{s vestiste jeans cortados?‛

Los hombros descendieron, él miró hacia las uñas de mis dedos, viendo las
uñas negras que había estado llevando para ayudar a Nakita a mezclarse, su
mirada se prolongó en las dos uñas rojas que tenía medio-pintadas. ‚¿Mallas
rotas y una bata de laboratorio? ¿Llevando zapatos sin cordones? Nunca
entenderé tu sentido de la moda.‛

Me incliné para mirar mis tenis amarillos. No es sentido de la moda; es la


lluvia, pensé secamente.

‚Pero por lo menos sé que est{s comiendo,‛ agregó, su atención volvió a la


bata de laboratorio salpicada-de-kétchup. ‚¿Qué te parece saltarse los
bocadillos después de la escuela por un rato y comes en casa?‛

‚Okay.‛ Me estiré, esperando que él no examinara mi cuarto de baño,


dónde mi rota camisa estaba tendida en el piso. Eso sería muy difícil de
explicar. Me sentía bastante bien, pero la comida era la última cosa en mi mente.
Especialmente cuando mi papá se sentó en el filo de la cama junto a mí e
intencionalmente situó mi teléfono en la mesita de noche.

Mierda. Había olvidado llamar a mamá.

‚¿Algo que quieras decirme?‛ Él preguntó, mir{ndolo.


MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 170

‚Lo siento. Olvidé llamar a mam{,‛ dije inmediatamente, pero su ceño


fruncido se hizo más hondo, diciéndome que no era eso. Despistada, jugueteé
con mi colcha, contenta de que me haya cambiado dentro de mi camisón anoche
después de que Barnabás me había dejado caer, incluso si había puesto mis
rotas mallas y la bata de laboratorio en el radar de mi pap{. ‚¿Est{ algo mal?‛
pregunté con vacilación.

¿Está algo mal? Realmente pregunté, ¿Está algo mal? ¿Puedo sonar más culpable?

Mi pap{ esperó hasta que lo mire. ‚Recibí una llamada extraña esta
mañana. Algún tipo nombró a Sneaker.‛

‚¡Shoe!‛ Solté antes de que recordara cerrar mi boca. Por Dios. ¿Y le había
dicho a Shoe ser bueno cuando no podía pasar cinco minutos sin mentirle a mi
papá?

‚¿Shoe?‛ Mi pap{ repitió, tocando el teléfono para hacerlo cuadrar


exactamente con la esquina de la mesita de noche. ‚¿Lo conoces?‛

‚Uh, sí.‛ Me encogí de hombros, tratando de parecer que no me importaba.


‚Pero nunca le di el número de la casa.‛ ¿Barnabas? Pensé. ¿Había ido él a
visitar a Shoe anoche e intentó cambiar sus recuerdos? Hijo de perro muerto.
‚¿Amigo por correspondencia?‛ traté, trabajando para conservar la pregunta de
mi voz, pero eso se escabulló allí en cierta forma.

Mi pap{ hizo un sonido poco convincente. ‚Él quería que te dijera que est{
suspendido y que está, abriendo comillas, 'siendo bueno'.‛ Sus cejas estaban
elevadas, esperaba por una explicación.

‚¿En serio?‛ ¿Qué m{s podía decir? No podía mirarlo, y me moví


nerviosamente en el silencio.

‚Madison…‛ él comenzó, y yo tiré los cobertores hacia atr{s para salir del
otro lado de la cama.

‚Pap{, me tengo que ir,‛ solté, alcanzando mi bata justo adentro de mi


cuarto de baño. La vista de mi camisa rota me encontró, y jalé la puerta,
cerr{ndola. ‚Estoy retrasada para la escuela y tengo que tomar una ducha. No
sé por qué Shoe dijo esas cosas extrañas. Él simplemente es un chico que conocí
hace poco.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 171

Como anoche, hace rato, pero era hace rato.

Exhalando lentamente y bastante, mi pap{ se levantó. ‚Te veré escaleras


abajo,‛ dijo, sonando decepcionado. ‚¿Qué quieres para cenar esta noche?‛

Vacilé, pensando lo más f{cil qué podría esconder en mis bolsillos. ‚Sopa y
papas fritas,‛ dije, imaginando que podría tragarme la sopa con bastante
facilidad. Y realmente había disfrutado las papas fritas anoche. Si podía salvar
la vida de Ace, entonces podría comer un par.

La expresión de mi pap{ se arrugó. ‚¿Sopa y papas fritas?‛ repitió, luego


suspiró. ‚Si eso es lo que quieres. El desayuno est{ listo. No tardes mucho.‛

‚No lo haré,‛ dije, pensando que si esperaba hasta el último momento para
bajar, podría salir por la puerta con una tostada para darle a Sandy. Sonriendo,
agite las manos hacia mi papá cuando se colocó en el pasillo, y cerró la puerta.
Mentalmente me reproché mientras escuchaba su montón de pasos bajando las
escaleras. ¿Había agitado las manos hacia él? ¡Era tan estúpida!

No había estado mintiendo sobre querer tomar una ducha, y,aún


preocupada, entré en mi cuarto de baño para hacer que el agua empezara a caer
mientras me meneaba fuera de mi PJ18. ¡Un suave golpe en la puerta de mi
cuarto de baño me hizo coger una toalla, y llamé a través de la puerta, ‚¡Estaré
abajo en seguida, Pap{!‛

¿Pero no fue mi pap{ quien dijo, ‚Uh, ¿Madison?‛

Me congelé. Preocupada, entreabrí la puerta.

‚¡Tú!‛ Chillé, tirando de la ancha puerta cuando vi a Paul de pie en la mitad


de mi habitación, mi ventana empujada todo el camino abierto y la pantalla
apoyada contra la pared. ‚¿Qué est{s haciendo aquí?‛ Casi siseé mientras salía
violentamente, reduciendo el paso cuando recordé que estaba en una toalla.
‚¡Simplemente no puedes aparecer de pronto adentro como esto! Mi papá está
escaleras abajo. ¡Si él te viese aquí arriba, le daría un ataque!‛

Paul se puso rojo, y jugueteó con su camisa abotonada metida en un par de


pantalones negros. Sus ropas aún eran de tipo santurrón, pero al menos ya no
estaba vestido como un actor de una ópera espacial. ‚Lo siento,‛ dijo él, no

18
Pijama
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 172

mir{ndome, aparentemente fascinado con mi alfombra. ‚Quería preguntarte


algo, y Ron no me deja fuera de la correa por mucho.‛

‚¿Qué?‛ Chasqueé, sintiéndome muy desnuda bajo mi gran toalla


esponjosa.

Paul miró hacia mí, luego arriba hacia el techo. ‚¿Crees en la elección?‛

Dudé, mi ira se pulverizó. ‚Sí,‛ dije suavemente. Él me había ayudado. Le


debía unas cuantas respuestas.

‚Pero eres una Cronometrador Oscuro,‛ Paul declaró, sonando confundido.

‚Aparentemente,‛ dije secamente, luego agregué, ‚No tiene sentido, pero


así es como es. Tan pronto como encuentre mi cuerpo, me voy de aquí. A menos
que… pueda cambiar las cosas.‛

Los zapatos brillantes de Paul cambiaron de posición en mi alfombra. ‚¿No


quiere ser un Cronometrador?‛

Mis pensamientos regresaron al horrible sentimiento de impotencia cuando


había tenido un destello del futuro, y luego mi euforia cuando Shoe había
alejado, su completa vida delante de él. ‚Ya no lo sé.‛

‚Tal vez simplemente consigas mi trabajo,‛ Paul dijo, sorprendiéndome.

Asombrada, me apoyé contra el marco de puerta, luego me volví a subir.


Por m{s que lo intentara, nunca luciría confiada vestida en una toalla. ‚¿Crees
en el destino?‛ Pregunté.

Paul hizo una mueca, retrocediendo para sentarse sobre el alféizar de la


ventana abierta. ‚No sé en lo que creo. Pero Ron desapareció cuando Ace
consiguió su ángel de la guarda, y tú te quedaste para tratar de salvar las vidas
de las personas.‛

Apreté mi agarre en mi toalla, no sabiendo qué decir.

‚Me tengo que ir,‛ Paul dijo mientras se levantaba. ‚Se supone que estoy
practicando mis saltos, pero si no estoy de regreso cuando él piensa que debería
estar, me sigue la pista.‛
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 173

‚Debe ser lindo tener un maestro,‛ dije, m{s que un poco de celosa y no
queriendo dejarlo aún. ‚No viniste todo el camino hasta aquí para preguntarme
si creí en la elección.‛

Paul levantó un hombro y lo dejó caer en un medio-encogimiento-de-


hombros. ‚No. Pensé que a te podría gustar saber que Ron hizo una búsqueda
prudente en los dos y encontró que ni Ace ni Shoe están predestinados para
dejar caer más virus. De hecho, Shoe eventualmente va a trabajar para la CIA y
seguir la pista a otros hackers. Él debe de ser el que impide un ataque
ciberterrorista a comienzos de la década. Ahora mismo Ace está en un cuarto
acolchado porque habla de Carontes y Cronometradores, pero eventualmente
aprende a mantener su boca cerrada, sale de rehabilitación, inicia una banda
llamada Melting Crows19, y muere de una sobredosis de droga en sus treinta.‛

‚Oh, hombre. Eso es horrible,‛ susurré, pregunt{ndome si había valido la


pena.

Paul estaba inmutable. ‚Todo el mundo muere eventualmente. Su música


tocar{ a las personas,‛ dijo. ‚Los hace reflexionar. Si me preguntas a mí, su
ángel de la guarda probablemente está gritando en su oreja ahora mismo,
tratando de conseguir que la escuche. Ace nunca se convierte en un santo, pero
su vida tendr{ significado. Al menos, eso creo.‛

‚Supongo,‛ dije, aún no conforme con ello. Tal vez debería haber dejado
que Nakita lo matara. Acabándolo limpiamente. ¿Recibirían las almas
incompletas una segunda oportunidad? ¿Otra vuelta? ¿Era ese el por qué los
Carontes Blancos los tomaban con anticipación? ‚¿Fuiste tú el que le dio a Shoe
el número de teléfono de mi casa?‛ Pregunté repentinamente.

Paul puso una mano en el marco de mi ventana como si fuera a irse. ‚Él
quería decirte que estaba bien. No pensé que te importaría, y ya que no tengo tu
número de teléfono celular, busqué el número de tu casa. No me metí con él, si
eso es lo que te preocupa. Ron est{ cabreado.‛ Paul sonrió burlonamente, su
mirada dejando la mía mientras él recordaba. ‚El {ngel de la guarda que le di a
Ace no dejará que alguien manipule sus recuerdos o los de Shoe. Es por eso que
él los alejo de la investigación.‛

Otra preocupación estaba resuelta, y cuándo Paul iba a dar un paso fuera,
barbullé, ‚Gracias por detener a Ace.‛

19
Cuervos Emotivos
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 174

Su cabeza se irguió, sonrió mostrando los dientes. ‚De nada.‛

Desde debajo de las escaleras, mi papá me gritó, y cambié de un pie a otro.


‚Me tengo que ir,‛ dije, moviendo la cabeza hacia la ducha humeando detr{s de
mí.

‚Yo también,‛ dijo, dando un paso sobre mi alfeizar y en el tejado.

‚¿Te gusta Ron?‛ Pregunté repentinamente, y él dudó, registrando las


esquinas de mi cuarto con su mirada.

‚No lo sé,‛ dijo suavemente. ‚Él me enseña cosas, pero es como si estuviera
fan{tico acerca de ti.‛

Sus ojos encontraron los míos, y asentí. ‚Él me mintió. Bastante. Lo hice
quedar mal delante de un serafín. ¿Vas a seguir creyendo en todo lo que él
dice?‛

Paul no contestó, agachando su cabeza y sonriendo. ‚Te veo luego,‛ dijo, y


luego las sombras de las ramas del árbol cambiaron en él pareciendo borrarlo
poco a poco hasta que se fue.

Estuve de pie por un momento para asegurarme de que él se había ido.


‚Tengo que aprender a hacer eso,‛ susurré, luego fui a tomar mi ducha.

Ace se convierte en un músico, ¿eh? Pensé, sonriendo mientras imaginaba


cómo debe irritar a Ron que yo –una Cronometrador Oscuro– le había mostrado
al perdido una nueva elección, y que esa elección había sido hecha por nuestros
esfuerzos, salvando no sólo su alma, sino su vida.

¿Había sido todo el destino? ¿O la dulce justicia del Caronte?

FIN
MADISON AVERY – KIM HARRISON DARK PATIENCE & ALISHEA’S DREAMS 175

Agradecimientos
 BLOG ‘DARK PATIENCE’
 http://darkpatience.blogspot.com/

 FORO ALISHEA’S DREAMS


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 TRADUCTORES
 Angel
 Carlos
 Glad
 Isabella
 Josel23
 Linetas
 Mekare
 Nuria

 CORRECTORES
 Glad
 Laumoon
 Ryan Archer
 Xxeduchisxx

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 RECOPILACIÓN GENERAL
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