Dijo Jess: -Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre.

Os aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto.

El que se ama a s mismo se pierde; y el que se aborrece a s mismo en este mundo se guardar para la vida eterna. El que quiera servirme que me siga. (Jn 12, 23-26)

La hierba verde hace presagiar espigas granadas. El molino y la harina. El horno y el pan. La mesa y el convite.

Si el grano de trigo se deposita desnudo en el seno de la tierra y vuelve a surgir revestido de nuevas vestiduras,

con ms razn se levantarn de nuevo los justos, que han sido sepultados con el vestido de su fe y sus buenas obras.

El Maestro proclama que ha llegado su hora y se atribuye a s mismo esta imagen del grano de trigo.

Jess entrega su vida para que abunde la vida en el mundo.

El que quiera servirme, que me siga,

Donde est yo, all estar tambin mi servidor.

A quien me sirva, el Padre le premiar.

Sigue al Seor quien lo imita en la generosidad y aun en la entrega de la propia vida. Si da pan al pobre, debe hacerlo por caridad, no por jactancia. (San Agustn)

Ammosle desinteresadamente para que el premio de ese servicio sea estar con l. Porque Dnde se estar bien sin l o dnde se estar mal con l?

Seor Jess, grano de trigo entregado por nosotros,

a quien vamos siguiendo por el camino, aydanos a servirte, sirviendo a nuestros hermanos, para que gocemos por siempre de tu compaa. Amn.

Jos Romn Flecha Andrs

PALABRA DEL SEOR Salamanca
Presentacin: Antonia Castro Panero Msica: Attende Domine